Cómo mantener el agua limpia de un estanque

Es una de las principales preocupaciones de quienes tienen un pequeño ecosistema acuático. Cómo mantener el agua limpia de un estanque es fundamental, y no solo por una cuestión de estética. De su correcto equilibrio depende íntegramente la vida que alberga. No hablamos únicamente de la vida animal. También nos referimos a las plantas que demandan un agua acondicionada para poder vivir y desarrollarse.

Mantener el agua limpia de un estanque es sinónimo de salud. Una exigencia que atañe a los 12 meses del año, y no solo a las estaciones de buen tiempo. Está claro que el calor dispara su nivel biológica y sus cuidados. Pero tener el agua en perfecto estado es una tarea que también hay que vigilar también en los meses de frío. Solo así conseguiremos mantener el agua limpia de un estanque tanto cuando disfrutamos de su belleza como en los meses de menos uso del jardín.

Así que veamos cuáles son los cuidados que demanda el estanque para contar siempre con un agua en perfecto estado. Unas tareas que no implican ni mucho tiempo ni un gran trabajo, y que serán claves para la vida que alberga.

5 TAREAS PARA MANTENER EL AGUA LIMPIA DE UN ESTANQUE

Cuando nos planteamos cómo hacer un estanque para el jardín, siempre pensamos en los meses de sol. Algo que es un error, ya que desatenderlo el resto del año puede acarrear graves consecuencias. Si no somos rigurosos con el mantenimiento del estanque en invierno, es probable que con la llegada de la primavera tengamos que comenzarlo de cero. Algo poco agradable, sobre todo por las plantas o peces que habiten en él.

Pero no vayamos tan lejos. Pensemos en cómo evitar llegar a ese momento. Y eso, más allá de las tareas propias del invierno, pasa por conocer cómo mantener el agua limpia de un estanque. Una tarea que no entiende de épocas del año, y que es vital para su bienestar.

Y dado que vale más prevenir que curar, veamos qué tareas tenemos que poner en práctica de manera regular para mantener nuestra agua en perfecto equilibrio.

1. Revisar la bomba, fundamental para mantener limpia el agua de un estanque

Solemos creer que tener una bomba es garantía de agua limpia. Pero no nos equivoquemos. El filtro y las bombas de estanque no dejan de ser dispositivos que, por diferentes razones, puede dejar de funcionar correctamente. Y el abanico de razones es amplio. Desde no haber recogido las hojas que caen en el agua a una piedra advenediza que detenga su funcionamiento. Por más que estos sistemas nos den confianza, es imprescindible estar pendientes de ellos.

 

Es importante entender el papel que juega la bomba para mantener limpia el agua de un estanque. Es gracias, el agua de la superficie se mueve. Un movimiento que facilita la oxigenación y, simultáneamente, evita la proliferación de sustancias en la superficie.

Para garantizar su uso, lo ideal es realizar una limpieza semanal de sus componentes. En ocasiones, basta con retirar el filtro para lavarlo a conciencia y volver a colocarlo. Mucho cuidado: nada de utilizar jabones. Lo ideal es lavarlo con agua a presión, o con la potencia que pueda ofrecernos nuestra manguera. El uso de cualquier químico puede alterar el pH de nuestro estanque.

2. Controlar los valores del agua

Un aspecto que cualquier amante de la acuariofilia conoce a fondo, y que suele pasar desapercibido en el agua del estanque. Como bien indica su nombre, un estanque no deja de ser agua estancada. Hacer que contenga vida no pasa, únicamente, por evitar la podredumbre. También obliga, en caso de tener peces o plantas, a mantener unos niveles determinados en el agua.

 

Mantener el agua limpia de un estanque pasa, de manera inevitable, por mantener su pH. Algo que podemos medir de manera regular, y que es fácilmente alterable. El agua de lluvia, sin ir más lejos, puede cambiar sus parámetros por lo que es una tarea para realizar de manera regular. Y, en caso de detectar cualquier alteración, solucionarla con tratamientos para estanques.

3. Elegir plantas oxigenantes, clave para para mantener el agua limpia del estanque

Las plantas son auténticas aliadas para tener un agua en perfecto equilibrio. Una razón de peso para incluir en nuestro estanque plantas de estanque oxigenantes. El papel de estas plantas es fundamental. Cuentan con la capacidad de absorber los minerales en descomposición. Una ayuda única ¡y natural! para mantener el agua limpia del estanque.

Si te has planteado cómo plantar plantas de estanque, seguro que a tu mente ha venido irremediablemente el nenúfar. Déjate llevar por tu instinto: es una de las plantas oxigenantes más hermosas que existen. Y, si bien tu elección sea por motivos estéticos, su valor para el equilibrio del agua es único.

4. Mantener las algas a raya

Uno de los mayores indicadores de la salud de un estanque. Las algas son uno de los mayores enemigos para mantener el agua limpia de un estanque. Hacen su aparición fundamentalmente en los meses de calor, cuando hemos desatendido nuestro pequeño ecosistema durante demasiado tiempo o responden a una mala ubicación de nuestro estanque. De ahí que sea fundamental que siempre lo instalemos en sombra.

 

Lejos de posponer eliminarlas, es fundamental frenarlas desde el principio. Solo así evitaremos que puedan colonizar el agua, complicándole la existencia a los peces y plantas que habiten en él. Y frenarlas pasa, irremediablemente, por utilizar un anti algas para estanques.

5. Alimentar a los peces en su justa medida

Tan importante como saber cómo elegir correctamente peces de estanque es alimentarles sin excesos. Y no solo porque esto revierta en negativo en su salud, que lo hace. También porque esa comida que no ingieren puede ser perniciosa para el equilibrio de nuestra agua. No deja de ser basura en descomposición.

¿Cuáles de estas pautas sigues tú para mantener limpia el agua del estanque? ¡Cuéntanoslo!