GLADIADORES gladius, ii ‘espada’ El comienzo de los munera Los juegos de luchadores (munera) están vinculados, en su origen, a las celebraciones funerarias.

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2 GLADIADORES gladius, ii ‘espada’

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4 El comienzo de los munera Los juegos de luchadores (munera) están vinculados, en su origen, a las celebraciones funerarias de la aristocracia. El primer combate de gladiadores tuvo lugar en Roma, en el año 264 a.C., durante el funeral de Marco Junio Bruto (político romano). Al principio estas luchas eran privadas, hasta que la afición del pueblo hizo que se convirtieran en públicas.

5 En los siglos posteriores la frecuencia de los juegos aumentaron, en el año 65 a.C. Julio César organizó unos juegos funerarios dedicados a su padre (muerto 20 años antes) en los que combatieron 320 parejas de gladiadores.

6 El desarrollo de los munera Al final de la República y comienzo del Principado, los aspectos religiosos y conmemorativos de los juegos se fueron perdiendo a favor de los intereses puramente políticos. La elite empleaba los munera para ganar popularidad.

7 Los gladiadores Los gladiadores provenían de las clases más bajas. Podían ser: Condenados (también había prisioneros de guerra) Condenados (también había prisioneros de guerra) Esclavos Esclavos Hombres libres muy pobres o endeudados Hombres libres muy pobres o endeudados Los “auctorati” eran hombres arruinados condenados a la lucha de gladiadores por sus deudas. Los “auctorati” eran hombres arruinados condenados a la lucha de gladiadores por sus deudas. Otros combatían por fines nobles, como ayudar económicamente a familiares y amigos. Otros combatían por fines nobles, como ayudar económicamente a familiares y amigos.

8 Motivos para la lucha Los luchadores libres: Por sus dotes de lucha, el gladiador podía ser un personaje aclamado por la masa. Por ello podía recibir compensaciones económicas de gran valor, ofrecidas incluso por el emperador. Sus logros quedaban reconocidos en mosaicos, poemas y estatuas erigidas en su honor. Los luchadores presos o esclavos: Se les daba la oportunidad de conseguir su libertad, la fama y dinero.

9 Tipos de gladiadores Essedarius: luchadores montados en carros ligeros. Samnitas: los más armados de los que luchaban en el imperio. Llevaban casco de visera con cresta, una greba le cubría el muslo izquierdo, escudo rectangular y espada corta y recta.

10 Retiarius: estrictamente no debería llamarse “gladiador” (ya que no utilizaba espada), sus armas eran las de un pescador: red y tridente. Solo llevaban protección en un brazo que le cubría el hombro. Secutor: armado con el tradicional escudo rectangular de los legionarios, la espada, el brazal (manica) y el yelmo ovoide sin visera (para no quedar preso en la red).

11 Galos: llevaban para la lucha un escudo plano y una espada recta de unos 60 cm de largo. En los últimos años de la República usaron casco. Tracios: protegidos con yelmo de ancha visera, escudo pequeño y redondo y dos largas grebas.

12 Vocabulario específico “Editor”: organizador de los combates “Doctor”: árbitro que revisaba las armas, sorteaba las parejas y regulaba los movimientos de los gladiadores. “Praeco”: heraldo que anunciaba al público los nombres de las parejas de gladiadores. “Arenator”: encargado de remover y esparcir la arena antes de verse teñida esta de sangre. La arena medía 85x53 m. “Lanista”: instructor de los gladiadores, que los compraba en el mercado de esclavos. “Magister”: encargado de adiestrar a los gladiadores y arbitrar los espectáculos. “Lorarius”: se encargaba de golpear a aquellos gladiadores que no demostraran valor en la lucha, para evitar que la lucha se falseara, previo acuerdo de los combatientes. “Lusorii”: combates a modo de calentamiento en los que no se llegaba a la muerte. “Panoplia”: equipamiento de cada gladiador. “Rudis”: espada de madera, muy pesada, empleada para el entrenamiento. “Ludus”: en singular, la escuela de gladiadores; en plural –“Ludi”-, los juegos.

13 El entrenamiento Los gladiadores se preparaban en escuelas especializadas. Las más antiguas estaban en Capua. En el año 73 a.C. se produjo en una de ellas las rebelión de gladiadores más importante de toda la historia, encabezada por Espartaco, debido a la dura disciplina a la que eran sometidos.

14 Espartaco Consiguió acaudillar a un ejército de más de cien mil seguidores, con el que atemorizó a toda Italia, hasta que fue derrotado por Craso y las legiones romanas. Espartaco murió en la batalla, al igual que muchos otros rebeldes; los que no murieron combatiendo fueron crucificados en la via Appia.

15 Las escuelas en Roma En Roma había cuatro escuelas, la principal era el Ludus Magnus, situada a 60 metros del Coliseo. Coliseum Ludus Magnus

16 La instrucción Los preparadores instruían a los combatientes en el arte de la esgrima. Las exigencias y la disciplinas eran estrictas y los castigos, muy duros.

17 Los días previos al combate Días antes de los juegos, el evento era anunciado por toda la ciudad en la que se fueran a celebrar los juegos. El programa (que se anunciaba en las paredes de los edificios públicos) solía constar de cinco partes: ocasión de “munus”, nombre del “editor”, número de parejas de gladiadores que iban a competir, nombre de la ciudad donde se celebraba el torneo y fecha. La noche anterior al combate se les ofrecía una espléndida cena, amenizada con bailes y toda clase de diversiones, ya que podría ser esa la última noche de sus vidas. Muchos gladiadores dejaban testamentos para que, en caso de muerte, sus familiares o amigos pudieran beneficiarse de sus bienes. A esta cena solía asistir público. Algunas mujeres divorciadas o viudas de la alta sociedad pagaban para conocer a los gladiadores que podrían morir al día siguiente en la arena.

18 El día del combate El día del combate, el emperador era el último en entrar, entre grandes aclamaciones de los romanos, que se ponían en pie. Se daba comienzo a un fastuoso desfile triunfal de los combatientes ante las autoridades que presidían el evento.. Al entrar, daban una vuelta en la arena (acompañados de esclavos que portaban sus armas) y, al pasar por delate del palco imperial los gladiadores saludaban a las autoridades. Si era el César el que presidía la lucha, decían: “¡Ave César, los que van a morir te saludan!”.

19 Posteriormente se sorteaban las parejas que iban a combatir (se tenían en cuenta la destreza y la veteranía de los combatientes) y se examinaban las armas; la “probatio” consistía en comprobar si el filo de las armas era lo suficientemente cortante, para evitar falseamientos. Antes de dar comienzo al combate definitivo, se simulaba una lucha, como calentamiento para la lucha verdadera.

20 El sonido de las trompetas anunciaba el comienzo de la lucha. Desde el primer momento el gentío chillaba. Los espectadores decidían acerca del desenlace final de los gladiadores. “Iugula” (‘degüéllalo’) era el grito que proferían los espectadores cuando querían que el gladiador abatido muriera. Se indicaba mediante el signo de la mano cerrada con el pulgar hacia abajo. Se le daba muerte en la arena hundiéndole la espada en el cuello, delante de los espectadores. “Mitte” (‘suéltalo’) se escuchaba cuando el gladiador abatido había luchado dignamente y con valor, se colocaba el puño cerrado con el pulgar hacia arriba. La “missio” suponía la interrupción del combate y el perdón al vencido. La expresión “sine missio” indicaba que se le había de dar muerte (“damnatio”).

21 El final del combate Los gladiadores que morían en la arena eran arrastrados al “Espoliario”, dependencia del anfiteatro destinada a depositar los cadáveres de la arena para despojarlos de sus armas y vestiduras, de donde procede el término castellano “espoliar”. Los “libitinarii” se encargan de arrastrar el cadáver desde la arena. Los “confectores” acababan con los gladiadores malheridos y vencidos que no habían muerto.

22 Otros espectáculos de Roma Naumaquias Si el anfiteatro lo permitía, también se organizaban en él representaciones de batallas navales famosas (naumaquias), convirtiendo el anfiteatro en un lago; pero para ello se precisaba un complicado sistema de ingeniería. Lo habitual era que se celebrasen en estanques construidos “ex profeso”, como el que hizo excavar el Emperador Augusto, de casi dos kilómetros de perímetro y donde llegaron a luchar hasta 3000 hombres a la vez a bordo de barcos de tamaño real. El coste de las naumaquias resultaba tan elevado que se dejaron de celebrar en el siglo I.

23 Otros espectáculos de Roma Venationes Aparecen poco después de que se introdujeran los espectáculos de gladiadores y perviven hasta el siglo VI d.C. Se traían animales de todas las partes del mundo, pero la mayoría provenían de África (jirafas, hipopótamos, cocodrilos, rinocerontes, elefantes…). Los animales eran transportados por mar, por lo que eran vajes muy largos en los que perecían muchos de ellos. Con Nerón llegaron a sacrificarse en un solo día 300 leones y 400 osos. Durante los juegos que conmemoraron la inauguración de Coliseo (80 a.C.) se mataron 5000 bestias.

24 Había dos tipos de espectáculos: Por un lado estaban los “venatores” (cazadores), voluntarios o profesionales, que se ofrecían para combatir con las fieras armados de escudo, flechas, espada o una estaca reforzada con una puntilla de hierro con la que se podía esperar el ataque el jabalí o del león, o que se podía arrojar contra el oso como un arpón. Algunos tenían el pecho y la espalda protegidos por unas placas de hierro o se cubrían de una armadura semejante a la de un gladiador. Por un lado estaban los “venatores” (cazadores), voluntarios o profesionales, que se ofrecían para combatir con las fieras armados de escudo, flechas, espada o una estaca reforzada con una puntilla de hierro con la que se podía esperar el ataque el jabalí o del león, o que se podía arrojar contra el oso como un arpón. Algunos tenían el pecho y la espalda protegidos por unas placas de hierro o se cubrían de una armadura semejante a la de un gladiador. Por otro lado, los “bestiarios” esclavos, bandidos, prisioneros o gentes de baja condición, que luchaban desarmados contra los animales. Los esclavos podían ser alquilados o vendidos por sus dueños a los tratantes. Existían familias de bestiarios, adiestrados en escuelas especiales como las de los gladiadores. Por otro lado, los “bestiarios” esclavos, bandidos, prisioneros o gentes de baja condición, que luchaban desarmados contra los animales. Los esclavos podían ser alquilados o vendidos por sus dueños a los tratantes. Existían familias de bestiarios, adiestrados en escuelas especiales como las de los gladiadores.

25 FIN