Que con el alma en el cuerpo nos dejaste anochecer. Así te pido Dios mío nos dejes amanecer En gracia y servicio tuyo y sin llegarte a ofender. En el hombre sea de Dios se va a cantar este alabado, Todos juntos como estamos a Jesús Sacramentado. Jesucristo se ha perdido, la Virgen lo anda buscando. Por el rastro de la sangre que Jesucristo derrama. Camina la Virgen pura en una fresca mañana Y como era tan de mañana, en la hora que caminaba Con San Juan Bautista encuentra y de esta manera le habla. ¿No ha pasado por aquí el Hijo de mis entrañas? Sí Señora, aquí pasó tres horas antes del alba. Y por señas, llevaba una túnica morada. Cinco mil azotes lleva en sus sagradas espaldas, Una cruz lleva en sus hombros, de madera, muy pesada Una corona de espinas que sus sienes traspasaba Una soga al cuello lleva, que los Judíos le estiraban. Al oír la Virgen esto, cayó en tierra desmayada Y San Juan, como buen sobrino, luego acudió a levantarla ¡Levántese señora! Tía que no es tiempo de tardanza Caminemos, caminenos hasta llegar al calvario. Que por presto que lleguemos, ya lo habían cricificado, ¿Ya estará en la cruz pendiente con tres clavos remachados? ¿Ya le darían la lanza en su sagrado costado? La sangre que de ahí vierte cayó en un cáliz sagrado. El hombre que la bebiere será bien aventurado Será libre del infierno y de Dios será premiado Será rey de este mundo y en el cielo coronado. Tres señas hubo presentes cuando Jesús espiró El sol se vistió de luto y la luna se oscureció Las piedras lloraron sangre cuando Jesús expiró Vámonos Señor al cielo a traer flores y romeros Para hacerle una corona al Señor del Bautisterio. Santísimo Sacramento yo te ofrezco este alabado Por los frutos de los campos que han sido tan amentados Por las ánimas benditas y almas que estén en pecado. Que las saquen o Dios mío de tan miserable estado Que las saques y las lleves para donde fuimos criados Y así sigas con nosotros cuando de este mundo nos vamos Préstanos vida y salud para el año venidero En el cielo está una estrella que a los marineros guía No dejemos de rezar el rosario a María. Es el primer escalón que en el cielo hemos de hallar Tres veces tiemble el infierno al decir Ave María Ave María preferida, sin pecado concebida Ave María singular, sin pecado original Ave María de la Luz, sin pecado de Jesús