Como vimos en el post anterior, existen distintas formas de contracción muscular, dependiendo de si la fuerza ejercida por el músculo es capaz de vencer la resistencia, de igualarla o de si es vencida por ella.
Hoy hablaremos sobre los roles que cumplen los distintos músculos al realizar una acción determinada.
Al contraerse, los músculos pueden actuar en uno de estos 6 roles (1):
- Agonista: el que puede realizar la acción
- Antagonista: el que puede oponerse a la acción realizada
- Fijador: el que puede parar una acción no deseada en el extremo fijo de inserción del músculo agonista
- Neutralizador: el que puede parar una acción no deseada en el extremo móvil de inserción del músculo agonista
- Estabilizador/soporte: el que puede mantener otra parte del cuerpo en una posición mientras ocurre la acción
- Sinergista: el que trabaja con el músculo que se está contrayendo
Antes de profundizar en cada uno de ellos, nos gustaría puntualizar que estos roles o papeles, se definen de acuerdo al movimiento que está ocurriendo, y no de acuerdo al músculo que se contrae, a pesar de que muchas veces coincidan.
De esta forma, no diremos que el tríceps braquial es antagonista del bíceps braquial, sino que diremos que, en el movimiento de flexión de codo, el bíceps es el agonista y el tríceps el antagonista.
Es más correcto referirnos a los roles de esta forma, ya que la primera afirmación no se cumple por ejemplo cuando hablamos de la supinación del antebrazo. El bíceps braquial, también supinador, podría ser el agonista pero en este caso, el tríceps no es su antagonista.
AGONISTA
Un agonista es el músculo o fuerza que puede realizar la acción en cuestión. Por tanto, se contrae de forma concéntrica y/o se acorta, cuando ocurre la acción.
Un detalle que debemos tener en cuenta es que puede haber dos formas de que un músculo se esté acortando (y sea agonista por definición) durante la acción:
- Que se contraiga de forma concéntrica
- Que se esté acortando durante la acción muscular mientras está relajado, porque el movimiento articular está siendo provocado por otro agonista u otra fuerza.
Es importante entender esto ya que, el hecho de que exista un grupo de agonistas, para un determinado movimiento, no significa que todos se estén contrayendo al mismo tiempo, sobre todo cuando la acción no requiera de una gran fuerza para ser realizada.
De esta forma, se pueden distinguir:
- Agonista principal: el músculo más potente a la hora realizar a la acción
- Grupo agonista principal: cuando coincide que hay más de un músculo igualmente potente para realizar la acción
- Agonista asistente o accesorio: cualquier otro agonista que no sea el principal
Por ejemplo durante esta flexión de codo que está ocurriendo en contra de la gravedad y con el peso adicional de la mancuerna, el grupo agonista principal podría estar formado por el bíceps braquial y el braquial anterior, dos potentes flexores de codo que se están contrayendo y acortando al mismo tiempo.
Si tuviéramos que buscar un agonista accesorio, sería probablemente el braquiorradial, que es un flexor menos potente que los otros dos, y que participa en la flexión del codo cuando el antebrazo está en pronación media (2).
Aunque no es el caso, si el movimiento estuviera ocurriendo a favor de la gravedad en vez de en contra, tendríamos que sumar al grupo de agonistas también la fuerza de la gravedad.
ANTAGONISTA
El antagonista es el músculo o fuerza que puede realizar la acción opuesta a la acción en cuestión. Por definición, el músculo antagonista se alarga a medida que ocurre la acción, ya sea a través de una contracción excéntrica frenando el movimiento, o simplemente estando relajado y permitiendo la acción.
Por tanto, como su propio nombre indica, cuando un agonista se acorta, el antagonista hace lo contrario, es decir, se alarga o sus inserciones se alejan entre sí.
En nuestro caso, la fuerza antagonista principal, es la gravedad, que es la que se está oponiendo a la flexión del antebrazo.
Desde el punto de vista muscular, el antagonista principal sería el tríceps braquial ya que sería el músculo con mayor capacidad para oponerse al movimiento.
Un antagonista secundario o accesorio, podría ser el ancóneo, que al ser también extensor de codo, se estaría alargando a medida que ocurre esta flexión (2).
Co-contracción
Ahora que conocemos los agonistas y antagonistas, nos gustaría introducir el concepto de co-contración, que se refiere precisamente a la contracción simultánea de estos dos músculos o grupos musculares con acciones opuestas.
La co-contracción no se considera deseable en la mayoría de los casos, ya que la contracción simultánea de dos músculos con acciones opuestas vuelve el movimiento menos eficiente, aumentando la fatiga y el riesgo de lesión.
De hecho, la co-contracción es un fenómeno muy frecuente cuando aprendemos a realizar una acción nueva. A medida que la repetimos, nos vamos volviendo más eficientes en su ejecución disminuyendo estas contracciones.
A pesar de ser ineficiente respecto a la producción de movimiento, la co-contracción es muy utilizada cuando necesitamos estabilizar una parte del cuerpo.
Nos gustaría puntualizar también, que este término se refiere a la contracción SIMULTÁNEA. Por tanto, cuando un agonista inicia el movimiento y posteriormente el antagonista actúa para frenarlo, no se considera co-contracción porque la acción muscular ha ocurrido en dos momentos distintos (1).
ESTABILIZADOR/FIJADOR
Siguiendo con los roles musculares, un estabilizador o fijador es un músculo o fuerza que puede evitar o parar una acción no deseada en el extremo fijo del músculo que está trabajando.
Por definición, cuando un músculo fijador se contrae, lo hace de forma isométrica.
Contar con músculos que cumplen estos papeles es importante porque cada músculo puede atravesar más de una articulación y cumplir más de una acción. Por tanto, si queremos que ocurra sólo una de ellas, necesitamos bloquear el resto.
En nuestro ejemplo, uno de los dos agonistas principales mencionados, el bíceps, atraviesa además del codo, el hombro. Por tanto, su contracción concéntrica, podría flexionar ambas articulaciones al mismo tiempo.
Una de las razones por las que esto no está ocurriendo es porque el músculo deltoides posterior, está actuando como estabilizador, impidiendo que el brazo venga hacia delante.
NEUTRALIZADOR
Un neutralizador es un músculo o fuerza que puede evitar o parar una acción no deseada en el extremo móvil del músculo que está trabajando.
Al igual que en caso de los estabilizadores, un músculo que actúa como neutralizador está evitando una acción no deseada del agonista, pero la diferencia es el lugar en el que la evita, que es en la zona en movimiento.
Al igual que estos, su contracción es por definición isométrica, al menos en el plano en el que evitan que el movimiento ocurra.
Aunque en la práctica, como tanto el cuerpo como el músculo son más complejos, podría suceder que, en alguno de los planos de movimiento que comparta el neutralizador con el agonista, esté ocurriendo un cambio de longitud de las fibras musculares del neutralizador.
En nuestro ejemplo, una de las posibles acciones del agonista que nos interesa neutralizar es la supinación provocada por la contracción concéntrica del bíceps, que provocaría la supinación del antebrazo.
En este caso, el músculo que está cumpliendo el papel neutralizador, evitando esta supinación, es el pronador redondo.
SOPORTE
Un músculo de soporte o apoyo es aquel que puede mantener una parte del cuerpo en posición mientras está ocurriendo la acción.
Se diferencian de los dos anteriores papeles en que éstos no actúan directamente sobre el lugar en el que está ocurriendo la acción.
Los músculos que cumplen el rol de soporte, se contraen siempre de forma isométrica, siendo su papel mantener una zona del cuerpo en una misma posición.
En este caso, si el brazo no estuviera apoyado en la mesa, los músculos de soporte podrían ser los erectores de la columna que estarían evitando que mi cuerpo se doblara hacia delante por el peso de la mancuerna.
SINERGISTA
El último rol que nos queda por analizar es el del músculo o fuerza que trabaja junto a los agonistas, el sinergista.
En este caso la definición no está tan clara, y puede interpretarse de dos formas:
- En su sentido más amplio, puede considerarse sinergista, cualquier músculo además del agonista o antagonista principal que se contrae para cumplir la acción en cuestión. Esta definición abarcaría cualquier otro agonista o antagonista, así como estabilizador, neutralizador o músculo de soporte.
- En la definición más concreta, se consideran sólo los agonistas y antagonistas no principales, que se contraen durante la acción muscular.
El detalle en esta definición es que a diferencia de en el resto de los roles, para ser considerado sinergista de la acción o movimiento, el músculo no debe sólo ser capaz de contraerse, sino que debe estar contrayéndose al mismo tiempo que ocurre la acción.
En nuestro caso, si nos acogiéramos a la definición más amplia, los sinergistas podrían ser: el braquiorradial, el ancóneo, el deltoides posterior e incluso los erectores de la columna.
Respecto a la definición más acotada, consideraríamos sinergistas de la flexión de codo únicamente al braquiorradial, y al ancóneo, y sólo en caso de que se estuvieran contrayendo al mismo tiempo que ocurre la acción.
Para finalizar, nos gustaría aclarar que en nuestro ejemplo sólo hemos mencionado uno o dos músculos por cada rol, pero que en la práctica, participan muchos más, especialmente en acciones que implican varios planos y articulaciones.
Lo interesante de esto es que, a medida que vamos profundizando y aprendiendo más de la anatomía y la biomecánica, somos capaces de ver e interpretar más capas de información y de realizar análisis mucho más detallados de cada movimiento.
Hasta pronto 😉
Pd: Como siempre la versión en video por aquí:
BIBLIOGRAFÍA:
1. Muscolino JE. Kinesiology: The Skeletal System and Muscle Function. Mosby/Elsevier; 2011. 690 p.
2. Drake RL, Gray H, Vogl W, Mitchell AWM. Gray’s Anatomy for Students. Elsevier/Churchill Livingstone; 2005. 1124 p.
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