Jueves 22 de Agosto de 2019
En nuestro segundo día en San Pedro de Atacama tomamos un tour para conocer una parte de la Reserva Nacional Los Flamencos. Nos recomendaron tomar esta ruta primero porque es una buena forma de aclimatarse a la altura, especialmente para los niños. Vas desde los 2.400 msnm a los 4.200 msnm subiendo de a poco, así que las posibilidades de sufrir «mal de altura» son muy bajas.
Como siempre decimos, no te olvides de cotizar en todas las agencias porque la oferta es muy variada y también los precios.
Nos recogieron a las 06:30 AM y partimos por la ruta 23 en dirección al suroeste. Llegamos hasta el Salar de Atacama y nos acercamos a la Laguna Chaxa para ver los flamencos.
Como nosotros fuimos casi al final del invierno encontramos muy poquitos ejemplares. Es que los que se quedan son los mayores, los que ya no pueden volar distancias tan largas. De todas formas nos dijeron que, aunque sea verano, hace años ya no se ven grandes colonias de flamencos en el Salar. Debido a la falta de alimento y la explotación del litio, los flamencos han emigrado a otras lagunas más al interior del altiplano.
Mis hijos estuvieron muy contentos porque el guía que nos tocó siempre tuvo muy buena voluntad de responder sus preguntas. Aprovechamos de entender cómo se formó el Salar y también sobre los distintos seres vivos que ahí habitan. Los más sorprendentes son los extremófilos, microorganismos capaces de «poner su desarrollo en pausa» en caso de que no haya suficiente agua en el salar. Es como que se quedaran dormidos esperando que las condiciones para su vida sean favorables otra vez.
Lo que más me llamó la atención es que la corteza del salar tiene solo 30 metros de espesor luego de eso se encuentra una enorme cantidad de agua salada llamada salmuera que tiene más de 1.400m de profundidad. El Salar tiene una superficie de más de 15.000Km cuadrados en total.
Desayunamos al costado de la Van, casi todos los operadores turísticos te ofrecen el desayuno dentro del paquete y seguimos nuestra ruta hasta Socaire, un pequeño poblado ubicado a 3.500 msnm.
Socaire está habitado por los Lickan-Antai o Atacameños como nos enseñan en el colegio. Llegamos justo un día antes de la fiesta de San Bartolomé por lo que solo pudimos ver la iglesia por fuera. Además vimos las terrazas donde se solían cultivar habas, quinoa, maíz y otro vegetales. Hoy en día, una mínima parte de esas terrazas están en uso.
Seguimos subiendo por una hora más. En el camino nos detuvimos porque pudimos ver un zorro culpeo salvaje y aprovechamos para tomarnos unas fotos en la carretera.
Continuamos hasta llegar a Lagunas Altiplánicas Miscanti y Miñiques a 4.200 msnm. Cada una se encuentra a los pies del volcán con el mismo nombre y en algún momento estuvieron unidas, pero luego de una erupción fueron separadas por una gran masa de roca basáltica.
Creo que no hay foto que le haga gracia al paisaje. Es tan tan lindo.
Es sorprendente como la altura se siente: cuesta respirar, te cansas con cada paso y empieza a doler la cabeza, por eso es muy importante tomarse la caminata con calma y tomar mucha agua.
De vuelta a San Pedro de Atacama paramos en el hito Trópico de Capricornio. El Desierto de Atacama es el más árido del mundo porque al año sólo recibe 30mm de precipitación en toda toda su superficie. ¿Sabías que todos los desiertos del mundo se encuentran cercanos a los trópicos?
Una de las cosas que más me gusto de los lugares que visitamos es que cada uno de ellos está administrado por una comunidad indígena, ellos son dueños de sus terrenos, sus tradiciones y sus costumbres y pueden sacar provecho económico de eso.
Un tip: Es muy importante llevar siempre dinero en efectivo para pagar las entradas a los sitios turísticos porque no están incluidas en los precios del tour.
Los valores de las entradas son:
- Laguna Chaxa: Adultos $2.500 / Niños $800
- Lagunas Miscanti y Miñiques: Adultos $2.500 / Niños $500
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