¿CÓMO SURGIERON LOS AHORAS?

¡¡¡¡FELIZ AHORAVERSARIO!!!!

Con motivo de nuestro Tercer Ahoraversario, hemos creído que ya tocaba hacer un post contando cómo surgió todo esto de Los Ahoras. 

Chabela y yo solo nos conocimos en un Cabaret (aunque la historia de cómo nos conocimos da para otro post), y al instante hicimos muy buenas migas: los dos somos muy intensos, nos gustaba el arte y la buena comida.

En ese entonces Chabela ya estaba empezando a trabajar como diseñadora gráfica y videógrafa, y empezaba a moverse por el ámbito empresarial, mientras que yo acababa de terminar INEF y a la vuelta del verano iba a estudiar escritura creativa a Sevilla. 

 Durante ese verano escribí "La Leyenda de los Ahoras" como un relato más de mis escrituras diarias, y no le di demasiada importancia, pero al enseñárselo a Chabela para que me diera su opinión dijo que le flipó y que sería chulísimo un colgante del Ahora.

Diseñó uno de prueba (que si ahora lo enseñamos os da algo) y nos reímos, pero ahí se quedó. Mi idea era presentar el relato a un concurso literario, y ella me dijo que no lo hiciera, que podríamos "hacer algo" con ese relato.

Yo no tenía ni una pizca de intención emprendedora, pero a veces parece que las cosas están predestinadas.

Un mes después, en Septiembre, fuimos a Madrid a despedirnos pasando el finde y viendo el musical del Rey León (ella se quedaba en Granada con su máster y yo me iba a Sevilla). Y volviendo de Madrid, me notificaron que había ganado el concurso, y vi que en apenas unas horas tenía unos 200 compartidos.

 Y en ese momento se juntó la emoción del concurso con la nostalgia de tener que separarnos, el hambre con las ganas de comer, nos miramos y dijimos... "¿te acuerdas de lo que dijimos de hacer un colgante? Venga, es una locura, pero vamos a hacerlo".

 Era la excusa perfecta que necesitábamos para seguir juntos a pesar de la distancia, nuestras ajetreadas vidas y el poco tiempo que hacía que nos conocíamos.

Una muy buena excusa.

 Tuvimos la suerte de que mi tío David es joyero de toda la vida, y él nos ayudó con un par de contactos, explicándonos varias opciones y, lo más importante, haciendo la "madre" del Ahora.

 Con el tablero así dispuesto, empezamos a mover fichas. Yo iba cada finde de Sevilla a Granada, a veces quedándome a dormir en el coche, y trabajábamos en alguna cafetería para crear la página de facebook, la web, el logo, la identidad corporativa, y sobretodo... el packaging. Queríamos un packaging arriesgado que fuera fiel a la esencia de la leyenda. 

 Después de mucha lluvia de ideas, discusiones, folios arrugados y cafés y disgustos y alegrías, la cosa fue tomando forma, y aún así nuestro plan inicial era solo vender los que pudiéramos durante esa navidad, para ahorrar un poco, hacer currículum y luego ya dejarlo.

 Hicimos una primera tirada de 200 ahoras, tirando de nuestros ahorros con un vértigo que nos revolvía el estómago... En ese momento, muchos nos daban una palmadita en la espalda como diciendo: "Oh, míralos que lindos, jugando a las empresitas, qué ilusionados están". Pero poco a poco, las palmaditas infantiles se fueron convirtiendo en cejas levantadas de sorpresa.

Estábamos construyendo algo más sólido de lo que creíamos.

Nunca olvidaremos el primer pedido online, una fría noche de Diciembre, porque fue de una tal Victoria :)

 A partir de ahí… nuestras vidas cambiaron completamente, llevándonos por un camino de aventuras que jamás nos habíamos imaginado.