Comienza la retirada del argayo de Somiedo, «va para días»

La mitad del concejo, incluido Pola, ha quedado aislado del resto de Asturias, y conectado con León a través del puerto de Somiedo, donde se concentran los esfuerzos de los quitanieves para mantener abierto y seguro el paso

Se está estudiando cómo reorganizar las Urgencias, aunque ante cualquier imprevisto grave hay un hospital en Villablino, a 30 kilómetros de la capital del concejo

Trabajos de retirada del argayo que aisla a Somiedo

Redacción/Grado

Fin de año con nevada y aislados del resto de Asturias. Así afrontan unos 800 vecinos de Somiedo los últimos días de 202o, tras el gran argayo que cayó ayer por la tarde sobre la AS-227, poco antes del pueblo de Castro, que dejó aislada a Pola de Somiedo y los pueblos del valle de Saliencia. Las obras de retirada del argayo han comenzado ya, pero «van para días, porque no es sólo retirar la gran masa de roca que ha caído, hay que estabilizar la ladera y garantizar que no haya más desprendimientos», señala el alcalde somedano, Belarmino Fernández Fervienza, que está siguiendo la crisis desde lejos, ya que continúa de baja médica recuperándose de una hospitalización por covid 19. Sobre el terreno está la teniente alcalde y alcaldesa en funciones, Azucena Lorences, que hoy visitó la zona a primera hora, con la directora general de Infraestructuras del Principado, Esther Díaz, ya que ha quedado en el lado asturiano del argayo. En principio, los esfuerzos se están concentrando en mantener abierta la comunicación por el puerto de Somiedo, con equipos de quitanieves, ya que es la única vía con el exterior, tanto para la llegada de suministros como para ir a otros lugares de Asturias, a través del Huerna, un viaje de una hora y media que hoy hicieron algunos empleados que trabajan en la villa, como los de las oficinas bancarias. Se está estudiando además cómo reorganizar los servicios sanitarios, ya que en Somiedo hay dos centros de salud, en La Riera y en Pola, que normalmente se cubren uno a otro las urgencias, pero han quedado cada uno a un lado y otro del argayo, por lo que se tendrá que definir cómo mantener el servicio para ambas poblaciones de pacientes. Una posibilidad es concentrar los esfuerzos en Pola, y que las personas de Somiedo que no han quedado aisladas acudan en caso de urgencia a Belmonte, aunque aún no se ha decidido. En cualquier caso, para emergencias de importancia hay un hospital en Villablino, a 30 kilómetros.