Toca de camino.

Artesonado del Palacio Chiaramonte/ Steri de Palermo, 1377-80.

La TOCA DE CAMINO se estiló en la Edad Media. Es un tocado cuya función es protectora y se utiliza en desplazamientos y viajes. Consiste en una banda larga de tela (habitualmente de más de 4 metros) que envuelve un  tocado o rollo que se encaja en la cabeza.

Lo usan hombres y mujeres, incluso la realeza. La diferencia clave entre sexos: en el tocado femenino uno de los extremos pasa por debajo de la barbilla, el otro se prolonga para poder cubrirse el rostro, protegiéndose de la intemperie y los curiosos, como dice una copla de un cancionero de la época que un caballero dedica a una dama que parte de viaje: “con un gentil alhareme/ discretamente tocada / porque el viento no la queme/ e más por fin si se teme/ ser conoscida y mirada”.

A simple vista le llamaríamos turbante, pues se coloca como estos tocados de origen oriental adoptado por diversas culturas como la otomana, la árabe, la hindú,…, de hecho las Cruzadas trajeron a Europa el turbante y otras costumbres indumentarias. La Doctora Carmen Bernis nos cuenta que la influencia directa en la Toca de camino cristiana es el ALHAREME (Alfileme, Alfareme), toca morisca andalusí usada para viajar, que podía ser de lienzo, de holanda o lino,  de gasa o tela rizada. El paño era estrecho y su longitud variaba entre vara y media y 14 varas. Solían ser blancas o amarilleadas con azafrán, aunque también hay testimonios de uso de tintados con colores. El documento escrito más antiguo que atestigua su uso entre cristianos es de Alfonso V de Aragón de 1412-24, pero en realidad remonta al siglo XI o XII.

Toca de camino. Rogier van der Weyden, detalle de Augusto y la sibilla Tiburtina, 1460.
Toca de camino sobre rollo. Detalle pintura siglo XV, Colección Berlín Gemaldergalerie.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Una variedad del alhareme era la denominada TOCA TUNECÍ, que debe su nombre al tipo de lienzo con que estaba hecha. Otra variante era el ALMAIZAR, que se usaba para vestir de gala. Era generalmente de seda o, en su defecto, lienzo teñido (negros, granates, azules, encarnados, de dos o más colores mezclados), y estaba guarnecida con orillas en los bordes y en el centro, y con vivos y rapacejos en los extremos (esta guarnición también la podemos encontrar en el alhareme). Critica una comadre en una copla de la época a una mujer por querer aparentar más con su vestido: “Desde que pone un almaizar/ esa hija del sedero/ pues una de un caballero / no se va tanto a preciar».

Toca de camino. Virgen del Descendimiento de Cristo, Rogier Van del Weyden (ca. 1435). Detalle.
Toca de camino con rollo. Detalle de una obra del pintor gótico Fernando Gallego (ca. 1440-1507).

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

3 comentarios

      • Sí, todo lo que sirva para aprender es de utilidad, gracias de nuevo. Conozco el blog de Consuelo, a ella personalmente no pero la sigo desde hace tiempo y ya vi que en tu blog tienes un enlace al suyo. Lo dicho, muchísimas gracias.

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