El alcanforero

El alcanforero de la Glorieta de Doña Sol.

El alcanforero de la Glorieta de Doña Sol.

El único ejemplar de alcanforero que conocemos en nuestra ciudad se encuentra en la Glorieta de Doña Sol, en el Parque de María Luisa, y, por sus características, entrará en la relación de árboles singulares de Sevilla que actualmente estamos elaborando. El nombre científico del alcanforero es Cinnamomum camphora (L.) J. Presl y pertenece a la familia de las Lauráceas. Es originario de Asia Oriental, concretamente de las islas situadas al sur de Japón (Shikoku, Kyushu, Honshu y demás islas que limitan el Mar de China Oriental). Este aromático árbol es de crecimiento rápido y suele superar los 18 metros de altura. También se caracteriza por su longevidad: en los santuarios del Japón hay ejemplares que superan los 1000 años de edad. Su copa, formada por una estructura de gruesas ramas casi verticales, suele ser amplia, extendida y bastante espesa; su tronco es más bien corto y robusto, y su corteza, de color marrón grisáceo, está profundamente agrietada en sentido longitudinal. Por otra parte, prefiere una exposición soleada; hay que tener en cuenta que no soporta los suelos encharcados y, sobre todo, que cuando es joven hay que protegerlo de los vientos del invierno. Sin embargo, cuando es adulto, puede soportar temperaturas inferiores a 0 ºC, aunque las partes verdes se marchiten. Existen testimonios de que este árbol es cultivado desde épocas remotas, ya que de él se extrae, por destilación de su madera, la sustancia aromática denominada alcanfor.

Sus hojas, que tienen una fragancia peculiar, son perennes, en disposición alterna, simples y de forma ovadoacuminada, con los márgenes lisos pero levemente ondulados, de textura coriácea y con unas dimensiones de 8 x 4 cm. El limbo foliar, atravesado por de 3 a 5 nervaduras amarillentas, es de color verde claro por el haz (que reluce cuando le da el Sol) y más pálido por el envés. Su pecíolo, de color amarillento, es delgado y mide de 2 a 3 cm de largo. También hay que destacar que los brotes de las hojas nuevas tienen un tono rojizo.

Sus pequeñas flores están agrupadas en panículas axilares, en inflorescencias del tipo corimbo de unos 7 cm de longitud. Cada flor, de tan solo 6 mm de diámetro, tiene 6 pétalos de color blanco amarillento y 9 estambres; el pistilo tiene una sola cavidad y un solo rudimento seminal, y el ovario es súpero. Otra característica de sus flores es que atraen a las mariposas. En Sevilla, el alcanforero florece a finales del mes de abril.

Sus frutos (no comestibles) son pequeñas drupas globosas que miden entre 7 y 8 mm de diámetro y que al madurar toman un color violeta oscuro. Hay que tener en cuenta que este ornamental árbol no fructifica hasta pasadas varias décadas después de su germinación. Cada fruto contiene en su interior una sola semilla de unos 5 mm de diámetro y de gran dureza; su poder germinativo es breve, por lo que hay que sembrarla inmediatamente después de extraerla del fruto.

Las hojas y los frutos del alcanforero

Las hojas y los frutos del alcanforero.

Las flores del alcanforero

Las flores del alcanforero.

Las semillas del alcanforero.

Las semillas del alcanforero.

Tronco y corteza del alcanforero

Tronco y corteza del alcanforero.