Monos de Barrio by El mono ajumado

Barrio: DĂcese del lugar donde toda la banda encuentra un estado de plena libertad, dĂłnde su crew le respalda y tiene su propia identidad.

Catrina de Concreto FotografĂa Digital Kelevra Velarde

TENGO BARRRIO, NO TRIBU. Por lo general siempre eh sido un lobo solitario, está más chido así, sin camotones ni sombras. La neta intenté pertenecer a un club social o digamos a una tribu urbana, pero irremediablemente fracase en ese intento. Cuando quise ser cholo valeverguero, me fui a la puri y me compré mi red para el pelo, mi cadena, y hasta un filero… tenía ya unas playeras tumbadillas que un tío mando de los yunaites; entonces llego al cantón, pantalón flojo, playera con dibujos acá, cadena y filero en bolsa, eso fue en la secu… pero el verdadero cholo no es pose, es reventarse por el barrio, lanzar riscazos a los del otro bando, rafaguear cantones para marcar territorio, amanecer bailando cumbias y haciendo fogatas mamalonas en la calle y el que salte a hacerla de pedo se le cae el cantón ALV., y ps nel, era mucha carrilla y prefiero dormir… de ahí me quedó la cadena y el filero, no más. Cuando quise ser darketo en la prepa, me puse mis botas de obrero que me regalo mi jefe, mi gabardina y mis playeras negras de Pink Floyd (que aún tengo y uso a veces)… en fin, siempre de negro todo y escuchaba bandas acá duras de mis tiempos de adolescente, System of a Down, Metallica, Linkin Park (ya sé, no era lo más Dark, pero era lo que había al alcance…. En ese tiempo Youtube aún era un experimento, spotify no existía), pero desistí cuando una morra acá bien fresita que a mí me gustaba, me mando al carajo por Dark, un dark de coraza se hubiera hecho aún más oscuro, yo no, yo me baje de ese barco, de ahí me quedaron esos grupos que aún escucho, y claro, mis botas de obrero, que aunque pesadas, chidas. Luego entre a la uni y apenas empezaba a rifar lo emo… y creí que era mi mero mole, pero ya me sentía ridículo ser un universitario y pretender ser emo, lo más que hice fue cortarme las venas con galletas de animalito, viendo en las noticias como los emo se iban al carajo, cuando los rockerillos, los punks, los darks y los vampiros les ponían en su madre en la calle… los emo no prosperaron, son ahora solo un recuerdo medio perturbador. Y ps nel, nunca pertenecí a una tribu urbana, admiro a los punks chidos, esos que okupan y se meten meta, oyen al noi del sucre, eskorbuto, la polla records, siniestro y así… quizás soy punk de coraza, pero no lo represento ni nada, me da weba. Respecto a los compas, ps sí, tengo compas chidos, con los que cotorreo, y unas cheves si ameritan dos tres ondas y acá bien locos, de repente hasta eterneamos si nos da la gana, con amigas, amigos y así. Pero de mis compas, ps nel, no son nada… o sea no son de tribus, quizás sí gremiales: artistas, actrices (bueno solo una), un abogado y un filósofo, pero en general andamos solos, no jalamos pa’todos lados, ni todos los fines juntos… así más chido.

Lobo Solitario

Sin Título Fotografía Análoga 35mm Digitalizada. Nataly García 2015

EL LSD ME CONVIRTIÓ EN VEGETARIANO Este viaje comenzó cuando decidí consumir un papel de lsd mientras iba hacía una rave, durante el camino mis amigos y yo íbamos bebiendo y fumando mientras el lsd comenzaba a explotar dentro de mí. Llegando al rave recuerdo que me fui a echar una miada, para empezar la zapateada, regresé y después de más o menos unos cuarenta minutos se apagó todo, la gasolina del generador se acabó y la banda no tardo en empezar a mentar madres contra el dj, a lo que el organizador dijo “ahorita traemos más gasolina y la seguimos cotorreando, aguántenme media hora nomas”. Yo ya andaba en mi mero punto, pero sin música y sin luz mejor preferí buscar a mi carnala Alí. Cuando la vi, ella ya iba rumbo a un carro blanco, varia gente ya estaba dentro, incluyendo su pareja, por lo que me fui corriendo a preguntarle que qué pedo, me dijo “vámonos Aarón, nos darán rait de regreso, por qué Iván (su pareja) mañana entra temprano a trabajar”. El organizador del evento no traería tour de regreso, nada más de ida, y no estábamos tan cerquita como para irnos caminando, y eso si es que traían más gasolina para el generador, así que decidí irme con ella, a lo que la dueña del carro grito “¡Aquí ya no cabe nadie más! Solamente que se vaya en la cajuela”, y yo ya prendido no la pensé dos veces y me metí por un compartimiento del asiento trasero hacía la cajuela.

De repente varía gente, de ahí mismo, comenzaron a golpear el carro y a empujarlo, enojados por qué ellos también querían rait, y yo ya adentro de la cajuela, solo escuchaba los gritos y madrazos al carro, por lo que me empecé a malvibrar. Por fin salimos a carretera, pero yo ya tenía ese presentimiento de que algo saldría mal, la carretera era de doble sentido, sin camellón y bien angostita, puras curvas para acabarla de chingar. Yo sentía que en cualquier momento ahí iba a quedar prensado entre los fierros del carro o algo por el estilo, sentía en mi cuerpo una sensación de pánico indescriptible, estaba tan seguro de que algo malo estaba a punto de ocurrir y esa sensación era más fuerte que yo. Por fin el carro se detuvo y las puertas se abrieron, bajamos todos en el crucero de tercer anillo y salida Norias. Yo me sentía de la chingada, recuerdo que estaba frente al semáforo y vi de pronto que toda la visión que tenía de la avenida, se atascó de semáforos como el que estaba en frente de mí, en una hermosa y alucinante frecuencia, pero la maldita sensación de pánico no desaparecía.

Mis amigos decidieron entrar a unos tacos que están por ahí y esa no fue precisamente la mejor de las ideas… La promoción era “TORTAS 2x1” y fue eso lo que todos pedimos, recuerdo como al entrar, yo percibía en la cara de los taqueros una maldad que hasta miedo daba, yo sentía como esas personas eran asesinos que disfrutaban ver cómo la gente se comía lo que ellos mataban, yo simplemente no podía soportarlo. Cuando vi la torta frente a mí, tuve la visión que cambio totalmente mi vida alimenticia, esa carne estaba recién cortada del animal, aún escurría la sangre, las capas de pelo, de grasa, carne, estaban ahí en mi torta, podía verla y sentirte en carne propia el sufrimiento por el cuál ese animal inocente había pasado, lo sentí en carne propia. Las ganas de llorar me inundaron, me sentía la peor de las personas al “disfrutar” del dolor ajeno, y ver la cara de los vendedores tan felices de su fechoría, no pude darle ni un bocado y mis amigos se veían tan agusto, escurriendo de sangre de ese animal, masticando sus pedazos de carne cruda y recién cortados, era algo repugnante para mí. Terminamos esa noche en casa de mi amiga, pero debido a mi estado de impaciencia y pánico, no pude dormir esa noche, lo único que tenía en la cabeza era la imagen de esa carne tan asquerosa y el sufrimiento de tantos y tantos animales que han pasado por lo mismo. Esa noche sentí en carne viva todo el dolor de miles de animalitos y créanme que no hay cosa peor que eso, fue un cambio de consciencia en el cual estaba seguro que jamás volvería a comer bocado de carne en mi vida. Los animales sienten y piensan como nosotros, son nuestros hermanos, hijos de la madre tierra y somos parte del todo universal, no hay por qué matar para comer, mejor cosechar, sembrar y cultivar nuestro alimento en vez de satisfacernos de la carne con dolor. Un pedazo de carne es un pedazo de sufrimiento, de enojo y tristeza, todo lo que cualquiera de nosotros podría sentir si fuéramos a servir para rellenar unas tortitas que están al 2x1. Aarón Rodríguez.

El Nacimiento de Venus... Tiana IlustraciĂłn Digital HĂŠctor Soledad 2017

COMO MORIR EN QUINCE PASOS 1.- Levantarte y poner una cumbia villera bien rasposa. 2.- Prepararte un lonche para la perrita, la perrita hambre del rato, obvio. 3.- Cantar y aventarte los pasitos del chemo y la mona mientras te bañas, esto para ir advirtiéndole al cuerpo que es noche de jerga. 4.- Dirigirte a tu preparatoria o en su defecto a tu universidad escuchando a José José. 5.- Llegar con la pandilla y chingarte un delincuente. 6.- Fletarte por las kiwuas con el señor que las vende como codo de albañil, bien percudidas, pero de hielo, sabroxas. 7.- Ir por tu crush, Tony, porque obvio ser tonayero es bien nice. 8.- Jugarle al vergas. Este paso es el más fácil, solo tienes que poner música que te haga mover el tambo bien duro, pensar que hacer submarinos con un Tony y una caguama es lo mejor del mundo y retar a tus compitas. En dado caso que tus compitas no quieran, haz este paso solx. 9.- Bailar ya cuando andes bien asfuck y sentirte Selena o el Maikol Jakson, raspando el callo bien duro. Para este tiempo tu cabecita dará chingos de vueltas, pero no hay falla, eres un héroe y vas a tocar el cielo. 10.- Comerte tu súper lonche, la torta de huevo es mala en estos casos, opta por un sanguis de jamón o algo ligero. No olvides cerrar la boca, no queremos ser unos nacos, por favor. 11.- Darte cuenta que no te puedes mover, maldecirte una y mil veces, repetirte que eres idiota y que te vas a morir en cualquier momento. 12.- Agarrar un taxi y con todas tus fuerzas pronunciar tu domicilio, el taxista te dirá que no vomites, pero como somos punks lo haremos con ganas. 13.- Llegar a casa y dormir en las escaleras, si no tienes no te apures, el piso del baño esta al mero pedal. 14.- Despertar más crudo que un pescado, chingarte un litro de agua y prometer que JAMÁS vas a volver a tomar. 15.- Volver al paso uno.

P_nk

Sin Título Fotografía Digital Fer Bahena

Queremos agradecer un chingo a toda la raza que participó en este número, que nos dejaron ver como se vive allá en sus arrabales y de sus historias chipocludas. Un abrazo, una caguama y ¡un saludo a toda la bandita que la sigue cotorreando!

Atte: El Mono Ajumado - Ana Pank - Sergio Maldonado

Contacto: Fb: El Mono Ajumado E-mail: elmono.ajumado@gmail.com ¡Recibimos contenido de temática libre, mándanos tu colaboración!

El Mono Ajumado