Alvaro Cano aka L.O.B.O. es un animal sonoro de los pies al tupé. La insultante y rabiosa juventud de este músico -DJ y productor marbellí, afincado en Madrid- no es óbice para que sea, hoy por hoy, una de las realidades electrónicas oriundas con más proyección en la neo escena nacional de la electronic dance music. Su talento musical natural, unido al buen gusto que caracteriza todo lo que pincha y produce, aderezado por una técnica impoluta y una energía descomunal en cabina, lo ubica por derecho propio entre esos nuevos y privilegiados artistas que cuentan con una potencialidad tan espectacular, y fulgurante, como llamativa. Texto: Fernando Fuentes
Aló Álvaro, ¿eso de ser un animal sonoro de los pies al tupé es algo natural para ti, verdad? Sí. He disfrutado de la música desde que era un niño y es lo que realmente me hace sentir vivo. Se trata de una pasión que he querido transformar en dedicación, primero como DJ, y después con mis propias producciones. Sin duda, la música es para lo que he nacido. Con ella me sale mi vena más salvaje y ahí, he de confesar, es donde más parezco un animal (Risas). Dicen, los que más saben de esto, que eres una de las realidades electrónicas oriundas con más proyección en la neo escena nacional edemista, ¿cómo se te queda al cuerpo? Para mí, independientemente del talento personal y la proyección que pueda tener, me gusta demostrar las cosas con hechos. Paso a paso. Cada viaje y cada show. Disfruto cuando el público lo hace con una actuación y con eso es con lo que me quedo. Pero todavía hay que continuar trabajando duro porque no me basta con la proyección. Quiero ser un artista reconocido por lo que soy y lo que hago, no por lo que pueda llegar a ser. ¿Y te gusta que se te etiquete como EDM? La verdad es que no. Para empezar porque el propio término está asociado a un tipo de música en concreto, un subgénero. Y la “electronic dance music” es mucho más que eso. Si la entendemos como algo general, por supuesto. Fuck genres…! ¿Hasta cuándo crees que el sonido mal llamado EDM va estar mal considerado en el mundillo de la electrónica más casta por clásica y talibana? Creo que va para largo. Los medios no ayudan y para colmo hace poco estrenaron una película dedicada al EDM. Hace un par de días también conocí que también viene una serie. Lo vamos a tener hasta en la sopa. De tu apuesta como DJ destaca tu buen gusto, una técnica impoluta y una energía descomunal en cabina, ¿eso te ubica por derecho propio
entre esos nuevos y privilegiados artistas españoles que cuentan con una potencialidad tan espectacular y fulgurante como llamativa? Lo que caracteriza a L.O.B.O. es eso mismo: minuciosidad, energía, descaro, garra… Creo que son los ingredientes necesarios para un artista de la electrónica. Hay que emocionar y acelerar al público. Nuestra escena es muy diversa y la música es perfecta para traer energía a una fiesta.
“Sin duda, la música es para lo que he nacido. Con ella me sale mi vena más salvaje...”. También la empatía es algo que marca tu show, como DJ, ¿es conectar con el público algo obligatorio para alguien que se sube a una cabina? Es una condición sine qua non. Una de las mejores cosas de ser DJ es poder compartir la música con personas de todo el mundo. Amo la pasión que la gente tiene por la música y es algo que me influencia cuando toco. Si ellos lo dan todo, yo también, y viceversa. Tu sonido se mueve entre la EDM de alto octanaje, el future house melódico, el house big room festivalero, el dubstep acanallado, el dirty electro house y hasta el abrasivo gorestep... ¿nos hemos dejado algo en el tintero? Entre los dos podríamos sacar 6 palabrejos más de esos… (Risas). Por seguir poniendo etiquetas aunque las detesto, podríamos decir el “jungle terror” o el “jungle house”. ¿Qué te dice la palabra drop? ¿No hay veneno si no altas dosis? El drop debe ser como el orgasmo de una relación sexual. Además te diré que es un símil perfecto porque en mis temas no me gusta repetir exactamente los mismos drops... hay que ir sorprendiendo continuamente (Risas).
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Está claro que cuidas mucho tu aspecto físico y tu imagen como artista, ¿qué importancia crees que puede llegar a tener en la carrera de un artista de tu calibre, juventud y aspiraciones? Cuidar la imagen personal es tan importante como hacer buena música. Igual que una empresa, un artista – ya sea musical como de cualquier otro tipo- debe dedicar tiempo y dinero para impresionar, y sobre todo, marcar tendencia. Michael Jackson no sería igual sin sus calcetines blancos, ni Lady Gaga sin su traje de filetes de ternera. Música y show-business (afortunada o desafortunadamente) van de la mano.
“Quiero ser un artista reconocido por lo que soy y lo que hago, no por lo que pueda llegar a ser”. ¿Qué importancia está teniendo Lets Music Records en tu carrera? Un pilar para L.O.B.O. y para Álvaro Cano… Somos familia. Lo vamos a conseguir.
LA MADRIGUERA MADRILEÑA Resides en Madrid desde hace años pero eres natural de Marbella... ¿sigue siendo un hándicap no ser capitalino para triunfar en los madriles? No lo ha sido nunca. Sin importar el origen, un artista trabaja por méritos propios, dedicación y pasión. Madrid es mi casa… !Me fui a vivir a Toledo unos meses y me tuve que volver! (Risas). Has pinchado mucho en Teatro Kapital, Sala Marco Aldany, La Riviera o JOY Madrid -junto a gente de la talla de Dimitri Vegas, Bingo Players o DJ Nano- y en este ultimo tercio de 2015 comienzas muy fuerte con residencias en Teatro Barceló (lo que antes era Pachá) y Boomroom (la nueva sala de moda bajo el EuroBulding)... ¿cómo afrontas estos dos nuevos e importantes retos? Estoy emocionado. Siempre estoy preparado para nuevas experiencias, otros públicos y ver lo que el lugar ofrece. Para mí estar en Madrid siempre es una gran oportunidad para conectar con los fans de la electrónica... lo espero con ansias. ¿Y cómo ves el clubbing madrileño en este 2015? ¿Problemas, virtudes, cosas a mejorar y celebrar? Voy a intentar contestarte con otra pregunta… ¿Tiene algo que ver la programación de ‘OpiumMadrid’ con ‘Opium-Barcelona’…? Siempre se encuentran sitios en Madrid para escuchar buena música, pero vamos a dejarlo en aprobado raspado. Madrid tiene potencial para ser punto de referencia europeo por nuestro carácter, incluso por nuestras leyes… Pero esto es como el tema de los artistas, hasta que alguien no empieza a hacer las cosas bien, no llegan otros detrás que siguen esa línea. Con los promotores pasa eso, falta gente seria de verdad en la noche madrileña.
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