UNA RUTA PARA EL AFIANZAMIENTO DE LA LECTURA EN SEGUNDO GRADO

Manuel Valdivia Rodríguez 

Los niños de segundo grado pasan por un período de afianzamiento que avanza por cuatro rutas convergentes. Dos comenzaron a ser seguidas en el primer grado: (i)  Enriquecimiento del vocabulario visual y (ii) fortalecimiento de las capacidades básicas de lectura (en especial la capacidad de decodificar palabras que se ven por primera y el uso de claves para el “acceso inferencial”[1] ). A las dos rutas mencionadas, añadiremos estas otras: (iii) mejoramiento de la lectura oral, y (iv)  acercamiento al análisis de los contenidos del texto.

En este artículo nos limitaremos al enriquecimiento del vocabulario visual mediante procedimientos grupales, que permiten un progreso de todo el grupo, lo que disminuye la necesidad del trabajo con formas individuales, que se precisa para apoyar a los niños que, de no ser atendidos en grupo pequeño o en forma personal, podrían ir quedando rezagados (Los procedimientos individuales no son tocados aquí porque su tratamiento rebasa los límites de este artículo).

Los procedimientos grupales son básicamente los siguientes: (a) el canto y la recitación; (b)la lectura de cuentos; (c) la lectura de textos funcionales breves; (d) la construcción colectiva de textos, y (e) los juegos con palabras. Las actividades de esta naturaleza dan ocasión para que los niños movilicen mecanismos intelectuales propios del desarrollo de su lenguaje, unos más otros menos, unos antes otros después, fenómeno que es natural tratándose de niños con potencialidades y experiencias distintas.

  1. El canto y la recitación son procedimientos cuasi lúdicos, que, justamente por ello, pueden ser empleados reiteradamente. Esto les concede un valor especial para la formación del vocabulario visual.  Para este efecto, la letra de la canción o el texto del poema que se recita deben hallarse al frente de los niños, para que puedan leerlos a medida que cantan o recitan. Es imprescindible que estén escritos con letra “de imprenta”, de preferencia script o parecida[2]. La lectura reiterada -que se produce porque se puede cantar o recitar varias veces y con varias modalidades (grupal, colectiva, individual)- enriquece insensiblemente el vocabulario visual de los niños.
  2. La lectura de cuentos –y la realización de los ejercicios conexos- ayuda mucho, sobre todo cuando el cuento es ya conocido por los niños. Cuando los cuentos son conocidos, los niños se adelantan a lo que viene, reconocen la mayoría de las palabras o decodifican fácilmente las que ofrecen problemas. Además, los cuentos se prestan para muchos ejercicios que obligan a la relectura de fragmentos o la lectura rápida en silencio, lo cual termina con un saldo favorable en muchos sentidos.
  3. La lectura de textos funcionales –entre los cuales se hallan en lugar principal aquellos que son útiles para trabajar los contenidos de las áreas curriculares (como Ciencia y Ambiente, Personal Social y Matemática)  es altamente educadora de la lectura, sobre todo cuando es una lectura acompañada y guiada por el docente, que no puede renunciar a esta tarea. Como esta lectura se hace apuntando al análisis de los textos, obliga a lecturas y relecturas, lo cual termina por apoyar la adquisición del vocabulario visual.
  4. La construcción colectiva de textos, lamentablemente tan poco empleada en nuestras aulas, es también un vehículo para el enriquecimiento del vocabulario visual, no obstante que se realiza en el aula para muchos otros fines de aprendizaje. El proceso de construcción colectiva de listas, mapas semánticos, cuadros sintácticos, esquemas gráfico verbales y otros constituyen una oportunidad de enorme valor para trabajar con el léxico activo de los niños. Y lo decimos de nuevo: siempre y cuando sean escritos por el docente con letra no ligada.
  5. Los juegos con palabras –que felizmente son muchos- generalmente son colectivos y siempre son divertidos, por lo cual pueden ser realizados una y otra vez. Pueden llenar ratos vacíos, pueden servir para recuperar el clima de aprendizaje, o pueden ser simplemente un momento de diversión, pero en todos los casos servirán de vehículo para reforzar elementos básicos de la lectura.

 Hay, como se ve, muchos caminos. Siguiéndolos y empleando textos variados se da oportunidad para un enriquecimiento del vocabulario visual de un modo que va adjunto al mejoramiento de la lectura en general. Si a esto se añade el trabajo en las tres rutas adicionales que hemos mencionado en el primer párrafo de este artículo, no hay lugar para el fracaso. Así, cada docente puede lograr, al término del año escolar, que la totalidad de sus niños consigan el nivel esperado de lectura. Si esto sucede en cada una de las aulas del sistema educativo, puede haber un lugar para el optimismo.


[1] Conviene que revise nuestro artículo “Aprendizajes de base para la lectura en primer grado”, publicado en este blog.

[2] Muchos docentes cometen el error –perdóneseme la brusquedad del término- de escribir con letra ligada los materiales que los niños van a leer. Muy aparte del asunto polémico de qué tipo de escritura debe ser empleado para el aprendizaje de la escritura (ligada o no ligada), todo lo que sea para que los niños lean debe ser  escrito con letra no ligada, “de imprenta”, justamente para que sirva a la formación del vocabulario visual, que va a intervenir decisivamente en la lectura.

14 Responses to UNA RUTA PARA EL AFIANZAMIENTO DE LA LECTURA EN SEGUNDO GRADO

  1. Muy interesante y optimista la propuesta. Algo que mucha falta hace y tan sencillo. Insisto en que las bibliotecas de aula son importantísimas para facilitar la labor de nuestros docentes; aunque muchos se las ingenian para implementar una en su aula. Lo que me preocupa y me quedé con esa tarea por comprender es cómo hacer con nuestros niños que no tienen el castellano como primera lengua y se genera interferencia para iniciar su proceso de adquisición de la competencia lectora. Creo que eso da para otra larga discusión, pero me parece que hemos provilegiado de mal manera el castellano en nuestras escuelas. Saludos.

    • Manuel Valdivia Rodríguez dice:

      Sí, Jorge: «da para larga discusión». Para los niños que hablan lenguas ancestrales hay muy poco. Ni poemas, ni canciones, ni cuentos. Lo que hay en la tradición oral es más bien patrimonio de los adultos, poco utilizable con los niños. Hay docentes, músicos, poetas, intelectuales, que hablan lenguas indígenas pero escriben poco para la gente de su pueblo, en esas lenguas, tan propicias para expresar su mundo. Tampoco hay material académico, útil para las áreas curriculares, escrito en lenguas indígenas o en un castellano adecuado para los que lo hablan en forma incipiente. No solo una larga discusión; también una ardua tarea.

  2. LEANDRO CHOQUE LUIS ENRIIQUE dice:

    Estimado maestro Manuel: Saludos respetuosos.
    Como es de esperarse interesante sus aportes. Le trasmito alguna experiencias… me dio muchisimo resultado en el mejoramiento de lectura de mis alumnos en la escuela y luego con los maestros que monitoreaba en la UNMSM en el año 2 009
    2 010 y ahora con los maestros de la PUCP ejecutar y recomendar los «PASEITOS LECTORES» . A los niños les divertia mucho salir de la escuela a la calle en fila india a buscar avisos, letreros , afiches para leerlos cuando encontraban que leer lo hacian con entusiamo. ¿Esta estrategia se encuentra dentro de la 3era y 4ta ruta que usted explica?

    • Manuel Valdivia Rodríguez dice:

      Estimado Leandro: He usado el término «rutas» en un sentido metafórico.Ello no significa que son caminos distintos para llegar a un mismo punto. En el fondo, los aprendizajes se complementan; ninguno actúa solo. En artículos próximos intentaré mostrar esto. La actividad que describes parece ser simpática y efectiva. El problema es que nuestras calles a veces muestran escritos inconvenientes. Si sólo hubiera letreros, cartelones, pancartas, etc., útiles, bien. Pero a veces hay pintas groseras. Habría que tener cuidado con eso.De todos modos, vale tu inventiva. Gracias por compartir tu experiencia. Saludos.

  3. mao rodriguez dice:

    En el colegio Libertad Adventistista de Bucaramanga deberían de emplear esas tacticas.

    • Manuel Valdivia Rodríguez dice:

      ¿Su mensaje viene de Colombia? Qué bien. Me alegra mucho. Gracias por su recomendación. Ojalá que lo que escribo sea útil para los maestros y favorezca el aprendizaje de nuestros niños. Saludos de Perú.

  4. Martha Elena Piscoya Chirinos dice:

    Es iteresante salir del aula, para realizar los paseitos lectores, así como contar con el espacio de lectura en una aula ó el rìncon de la lectura, como estrategia resulta interesante y donde el niño toma una actitud comoda para desarrollar su trabajo, realizando con entusiasmo , se deberìa dar con frecuencia esta estrategia.
    Martha Piscoya Ch.
    Estimado Maestro Manuel, me gustaria tener la ruta para el afianzamiento de la lectura.

  5. prof. B. Andrés González Vargas dice:

    Estimado Manuel

    Un abrazo sincero desde Chile. He visitado tu interesante blog y leído con detención algunos artículos, ya seguiré disfrutando de tus conocimientos y experiencia, gracias por ponerlas al servicio de todos.
    Los caminos para el afianzamiento de la escritura y para alcanzar con ello la fluidez lectora, son múltiples y tú has dado debida cuenta de ellos en tu artículo. lo importante es que los docentes -nuestros colegas- entiendan que no debemos tomar un camino unívoco, sino que explorar y matizar distintas alternativas, pues distintos son los estilos de aprendizaje de nuestros estudiantes y distintos los momentos por los que están pasando.
    Verdaderamente interesante tu blog.

    Saludos afectuosos,

    Benedicto Andrés

    • Manuel Valdivia Rodríguez dice:

      Estimado Benedicto: Gracias por tu afectuoso saludo desde tierras australes. Como países hermanos, compartimos problemas, esperanzas y proyectos. Uno de ellos, ayudar a nuestros niños y adolescentes a ser buenos lectores, y para ello, como dices, no hay caminos unívocos. Tampoco es, como dice el refrán, que “todos los caminos conducen a Roma”, sino aquellos escogidos por los maestros, que saben bien –o deben saberlo- que la competencia lectora se consigue al cabo de años de paciente labor, acompañando y apuntalando a los estudiantes. Saludos cordiales.

      • jose respaldiza rojas dice:

        Una de las cosas que siempre me asombró es que hay determinadas lecturas que los escolares aprenden con gran facilidad, en cambio otras les cuesta hacer un gran esfuerzo. Por ejemplo ´´Mama Anchenche´´ cuyo contenido es únicamente sonoro, sin ningún significado literario, lo leyeron a la primera y lo memorizaron de inmediato.

  6. Manuel Valdivia Rodríguez dice:

    Hay un campo, Pepe, que no estamos aprovechando. Es aquel en que el lenguaje es tratado en forma lúdica, como en las jitajáforas y otras formas que tú conoces como el mejor. Los textos para «regir» el turno, las nanas y otros juegos verbales, empleados para uso pedagógico pueden ser un excelente materal. Sigue publicando en «Rinono y Papagil». Un abrazo.

  7. jose antonio dice:

    Muy interesante. Soy maestro de primer y segundo grado en multigrado en mi pais Nicaragua. Me gustaria tener acceso a tus obras.

    • Manuel Valdivia Rodríguez dice:

      Estimado José Antonio:
      Aprecio mucho su deseo de conocer publicaciones mías; pero pasa que lo que he escrito antes ha sido producido por encargo de distintas instituciones (por lo general organismos de desarrollo y universidades), y por eso su circulación ha sido siempre restringida. Sin embargo, he decidido dedicar este y los próximos años a publicar por mi cuenta materiales míos y podré con ello responder al generoso interés de personas como usted. Mientras tanto, lo invito a frecuentar mi blog. Quiero decir además que me alegra sobremanera tener ya lectores en Nicaragua y en otros países de centro y Sudamérica. A fin de cuentas, tenemos problemas similares pero también esperanzas y proyectos parecidos.

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