1. El proceso comunicativo
• Las etapas de todo proceso comunicativo pueden
sintetizarse en:
1. Elaboración de la idea
2. Codificación o traducción de la idea en palabras, imágenes,
gestos…
3. Transmisión del mensaje (a través de algún medio adecuado).
4. Recepción del mensaje transmitido (por parte de otra persona,
que debe estar atenta).
5. Decodificación (lectura o traducción que hace esa persona de
las señales que le llegan).
6. Utilización del mensaje (puede responder, guardar la
información o decidir que no le interesa).
2. El proceso comunicativo
• Sin embargo, la comunicación no sería posible
sin otro proceso más básico, al que llamamos
+percepción+, y que es el que permite
relacionarnos con nuestro entorno y con las
personas que en él se encuentran.
• Este proceso consta de dos etapas
fundamentales: la primera, la de captación de
estímulos procedentes del exterior (luces,
colores, sonidos, volúmenes, colores,…) a
través de los sentidos, de manera automática
y casi constante; y una segunda, de
interpretación, en la que las sensaciones
captadas por nuestros sentidos son
transmitidos al cerebro. Allí es donde se
reconstruye o interpretar lo que percibimos.
3. El proceso comunicativo
• Para lograr la excelencia en la oratoria habrá que
partir de una serie de condiciones
imprescindibles, entre las que podemos destacar:
• La autoconfianza.
• La orientación personal positiva.
• La claridad en la exposición de las ideas.
• La preparación previa.
• La empatía.
• El autocontrol.
• La práctica.
4. Empatizar con diez consejos
• Centrados la mayoría de ellos en la relación del
disertador con el auditorio:
1. Sienta verdadero amor por el auditorio.
2. Desee compartir el tema.
3. Sea consciente de que el auditorio está
queriendo saber y merece recibir su mensaje.
4. Antes de empezar, imagínese en medio y al
final de la comunicación con el éxito
conseguido.
5. Sea humilde
5. Empatizar con diez consejos
6. No escriba su discurso. Use un guión.
7. Sea breve.
8. Prepárese, practiquen. Busque y
aproveche cada ocasión de hablar en
público.
9. Considere la ocasión como una
oportunidad. Deséela.
10.Todo esto se consigue, como se señala
en el primer punto, viviendo un
auténtico amor por sus oyentes.
6. 1. Del aprendizaje:
• Conviene comenzar a prepararse en pequeñas
reuniones.
• Si se prepara mucho, lo hará mejor.
• Debe practicarse continuamente la dicción.
• Tener una voz agradable y una dicción correcta
es tener mucho ganado. Pero ello hay que evitar
latiguillos y vicios dialectales.
• Todo buen resultado es producto de una buena
preparación.
• Hay que aprender a <improvisar>.es decir, a
preparar unos inicios relajantes y decirlos como
si se le acabasen de ocurrir.
7. 1. Del aprendizaje:
• La improvisación completa conduce al fracaso.
• El aprendizaje consiste en observar a otros
oradores y realizar un análisis sobre qué es lo
que más nos ha gustado, teniendo en cuenta que
las recetas que dan resultado en un
conferenciante, en otro no logran. ¡Hay que ser
uno mismo!
• De una acumulación de análisis críticos podemos
ir extrayendo nuestra propia técnica.
• Para hablar bien, antes hay que pensar bien,
para ello hace falta conocer los conceptos y las
ideas con precisión, para lo cual hace falta
lectura y estudio.
8. 2.Frases de partida:
• Cuanto más sepa, mejor. Hace falta una
amplia cultura general. Acostúmbrese a leer
más a menudo.
• Los fines fundamentales de la oratoria son
deleitar, conmover y convencer.
• No se trata sólo de hablar, sino también de
adoptar una actitud y de hacer
determinados gestos y ademanes.
• Si usted admira el arte de la oratoria y siente
que le gustaría practicarlo es porque puede
hacerlo.
9. 2.Frases de partida:
• El público agradece más la originalidad que la profundidad.
• Las cualidades básicas del orador son la concentración, la
sencillez y la sobriedad.
• Hay que intentar por todos los medios infundir respeto al
auditorio .
• La parte central del tema tiene que ser clara, amena y no
muy larga.
• El orador tiene que conocer sus objetivos: adonde quiere
conducir al público.
• No conviene dar sensación de prisa o desasosiego o de
demasiada calma.
10. 2.Frases de partida:
• No debe hablarse más que de temas que se dominen
verdaderamente. Es decir, de temas que se hayan preparado
bien.
• No deben defraudarse las expectativas del público.
• Tenemos que pensar en qué es lo mejor de nosotros y cómo
lo vamos a ofrecer el auditorio para que lo valore (capacidad
para asesorar, memorizar, explicar, describir, bromear…).
• No hay que intentar decir todo lo que se sabe, sino más bien
que lo que digamos lo digamos bien y de forma oportuna.
• Nunca debe decirse lo que no se piense y se sienta.
11. 3. Algunos recursos:
• Cuando vaya a leer al pie de la letra, una cita a un pasaje
interesante, anuncia que va a leer, y aún así, no pierda del
todo la vista al auditorio.
• Presente el recurso a la lectura como una necesidad de
subrayar, esto es, como un producto de su
responsabilidad, no de su incapacidad.
• Si utiliza citas, que vayan acompañados de un comentario.
• No conviene hacer un ejercicio de modestia al comenzar,
sino más bien de seguridad de ser una autoridad en la
materia.
• Es positivo implicarse en el tema para implicar al
auditorio.
• Es bueno, sin abusar, emplear oportunamente algunas
formas de expresión propias de la auditorio.
• Es conveniente anunciar, de vez en cuando, en qué parte
del discurso nos encontramos.
12. 4. De expresión:
• No utilice expresiones o palabras de cuyo
verdadero significado no está seguro.
• Como entrenamiento es muy importante la
práctica de la conferencia en voz alta,
cuidando la pronunciación, entonación y la
respiración.
• En el arranque hay que apuntar más hacia la
atención que hace a la emoción, en el final,
al contrario
• El tono de voz no tiene que ser ni demasiado
estridente, ni apagado y debemos
asegurarnos de que todos oyen bien.
13. 5. Sobre la actitud:
• Nunca debe dar la impresión de que su exposición
será prolongada.
• Utilice frases no excesivamente largas.
• No debe menospreciar al auditorio, ni tampoco
menospreciarse a sí mismo.
• Su apariencia tiene que ser sobria, cuidada y
aseada.
• La actitud del disertante tiene que ser la de quien
está respaldado, para captar e influir.
• La autoridad con la que hay que enfrentarse al
público no debe estar reñida con la sencillez.
• Hablé con convicción, ya que si usted cree en lo
que dice, también lo creerán los demás.
14. • Organizar la información.
• Ordenar los contenidos: de lo concreto a lo abstracto.
• Buscar simplicidad y sencillez en la exposición.
• Adaptarlos al nivel de conocimientos de la audiencia.
• Introducir variedad.
• En crear ejemplos, imágenes, analogías.
• Buscar la participación activa de la audiencia.
• Repetir contenidos para afianzar la comprensión y
memorización.
• Resumir y sintetizar.
15. Para configurar la estructura de una
forma rigurosa hemos de revisar:
• Que información tenemos sobre el tema.
• Qué cantidad podemos presentar en el tiempo
de que disponemos.
• Qué argumentos vamos a esgrimir.
• Qué información complementaria vamos a
aportar: ejemplos, datos, gráficos, sus casos
reales, etc.
• De qué material de reserva se puede disponer.
• De qué contenido se puede prescindir.
• En qué orden se va a presentar la información.
• Qué criterio vamos a utilizar para estructurar la
presentación.
16. Ventajas y posibilidades que ofrecen
los ensayos:
• Tener una visión de conjunto de la totalidad de la
exposición.
• Vivenciar la presentación.
• Memorizar con más precisión los contenidos.
• Clarificar las ideas y dar mayor consistencia a
nuestra argumentación.
• Confirmar la adecuación de la estructura.
• Afianzar las transiciones entre los diversos
contenidos y etapas.
• Practicar el vocabulario y familiarizarnos con los
términos que vamos a emplear.
17. Ventajas y posibilidades que ofrecen
los ensayos:
• Detectar las palabras, frases o etapas que
requieren un especial énfasis.
• Practicar y revisar aspectos no verbales de
la comunicación.
• Probar, practicar y confirmar la adecuación
de los apoyos audiovisuales.
• Estimular y ajustar mejor la duración de la
presentación.
• Automatizar todo el proceso de
exposición.
• Ganar confianza y seguridad.
• Reducir los nervios posteriores.
18. Ensayar de un modo especial
• En general es aconsejable preparar la presentación con
varios días de antelación. Podemos realizar varios
ensayos y utilizar diferentes alternativas para
mejorarlos:
• Primera exposición como ensayo preliminar
• Grabación en una cinta magnetofónica para poder
escucharla.
• Presentación delante de un espejo para visualizar en
directo nuestra propia exposición.
• Grabación en video para poder revisarla y analizarla
posteriormente.
• Exposición delante de amigos y conocidos, que nos
puedan aportar opiniones y consejos.
• Realización de la presentación completa en el mismo
lugar y condiciones en los que está previsto hacerla.
19. Lista de comprobación
Ponente: Mesa. Pizarra –Rotafolios: Rotuladores de colores.
Silla. Borrador.
Micrófono. Hojas en blanco.
Vaso y agua. Audiovisuales: Medios.
Disponibilidad.
Asientos: Número. Ubicación.
Comodidad. Visibilidad.
Disposición. Funcionamiento.
Visibilidad. Conexiones.
Mesas para escribir. Enchufes, alargadores.
Pantalla de proyección.
Materiales: Folios, bolígrafos, Repuestos.
carpetas. Personal técnico de
Documentación apoyo.
disponible. Condiciones Ventanas, ventilación.
Calidad de impresión. ambientales: Iluminación.
Correcta Temperatura.
encuadernación. Ruidos.
Salas contiguas.
Aseos.
Cafetería.
20. EL MIEDO, ENEMIGO DEL ORADOR.
• Los síntomas:
• En la oratoria las manifestaciones fisiológicas
más comunes son:
– Aumento del ritmo cardíaco.
– Enrojecimiento facial.
– Respiración alterada.
– Temblor de manos.
– Sequedad en la boca.
– Sudoración en las palmas de las manos.
– Presión en el estómago.
21. El miedo, enemigo del orador.
• En el ámbito de la comunicación no verbal hay
una serie de movimientos o tics que también
delatan el nerviosismo:
– Moverse excesivamente.
– Temblarle la voz.
– Rascarse la nariz, el pelo, las orejas, el cuello.
– Taparse la boca.
– Evitar el contacto visual.
– Golpear con el bolígrafo sobre la mesa.
– Doblar o arrugar las anotaciones.
22. El miedo, enemigo del orador.
• El origen.
• Normalmente el bloqueo surge por algún factor o
causa específica, o por la confluencia de varios
factores. Entre ellos podemos destacar los
siguientes:
– Miedo a que nuestro interior, nuestra intimidad
quede al descubierto.
– Sensación de incapacidad para responder de forma
eficaz al requerimiento de la tarea.
– Comisión de algún error.
– Clima adverso.
– Pensamientos y actitudes negativas.
– Temor a que queden al descubierto nuestras
carencias, defectos, limitaciones.
– Miedo a perder el control.
23. Consejos para reducir los nervios y
limitar su posible influencia.
• Preparar adecuadamente la presentación.
• Dominar bien el tema del que se habla.
• Practicar, realizar varios ensayos.
• Preparar especialmente bien las primeras palabras del
discurso.
• Confirmar que llevamos todo el material necesario.
• Llegar con puntualidad.
• Adecuar el espacio de la presentación.
• Disponer de un guion o de anotaciones.
• Pensar en positivo.
• Incrementar la autoconfianza
24. Consejos para reducir los nervios y
limitar su posible influencia.
• Relativizar la importancia de la situación y de la
audiencia.
• Mirar a algún asistente que asienta con la cabeza o
sonría.
• Adoptar una postura que resulte cómoda, sentado o
de pie.
• Mantener el contacto visual con la audiencia.
• Utilizar técnicas sencillas de relajación.
• Rebajar tensión en hombros, cuello, espalda, frente.
• Respirar lenta y profundamente.
• Hablar despacio.
• Introducir breves pausas que nos permitan recuperar
la serenidad.
• Beber agua durante la ponencia.
• Utilizar ropa cómoda que no dificulte la respiración.
25. Tipos de participación
• Positivo: suele apoyar el discurso
asintiendo con la cabeza; podemos
solicitar su opinión con frecuencia.
Generalmente será constructiva, y
podemos apoyarnos en ella.
• Ofensivo: no debemos entrar en un
enfrentamiento personal; con
tranquilidad podemos dejar que pase
inadvertida su intervención descortés y
agresiva. En ocasiones es útil pedir
opinión a los demás asistentes, que
normalmente suelen dejar claro su
rechazo a este tipo de posturas poco
respetuosas.
• Distraído: integrarle, plantearle
cuestiones, solicitar su opinión.
26. Tipos de participación
• Tímido: plantearle cuestiones sencillas,
estimar y valorar su intervención,
implicarle.
• Locuaz: impedirle que monopolice el
discurso, aprovechar alguna de sus ideas,
pero emplazarle a un momento posterior o
al turno de preguntas. Poner de manifiesto
el necesario reparto equitativo de
intervenciones y de tiempos de
participación.
• Discutidor: evitar enfrascarse en una
discusión, aprovechar las diferencias de
opinión para reforzar nuestros
argumentos, y continuar con nuestro
discurso.
27. Las estrategias básicas que facilitan y permiten
un mayor control de la audiencia son:
• El silencio.
• Las preguntas.
• La mirada.
• La cercanía física.
28. Importancia del componente no verbal
• Diversas investigaciones
muestran que
aproximadamente 93% de la
comunicación de actitudes se
transmite a través de aspectos
no verbales de la
comunicación, como el tono
de voz, los gestos, el
movimiento, mientras el
contenido verbal repercute
tan sólo en el 7% restante.
29. Importancia del componente no verbal
• El componente no verbal de la
comunicación será clave a la hora de
transmitir a interpretar emociones y
sentimientos. El cuerpo tiene su
propio lenguaje. El orador se
expresa en realidad con todo su
cuerpo, y a través del mismo irradia
energía, vida, fuerza. La voz, los
gestos y los movimientos que
permiten dar énfasis a su discurso.
30. Importancia del componente no verbal
• Al analizar nuestra comunicación no verbal
podemos prestar especial atención a los
siguientes aspectos:
• Contacto ocular.
• Gestos.
• Movimientos.
• Posturas. Distancia.
• Presencia física.
31. Principales indicadores no verbales
• Una imagen vale más que mil palabras.
• Comunicación no verbal: sensaciones, emociones y sentimientos
Alegría Tensión Aburrimiento
Tristeza Tranquilidad Enfado
Sorpresa Inquietud Entusiasmo
Miedo Sinceridad Sueño
Rabia Defensa Convencimiento
Cólera Indiferencia Naturalidad
Dolor Duda Falsedad
Atención Seguridad Interés
Angustia Placer Rechazo
Vergüenza Ira Confusión
32. La indumentaria
• Es evidente que no nos vestimos
igual para asistir a una ceremonia
oficial, para ir a una junta de
vecinos, o para tener una reunión
informal con los amigos. El valor
de la imagen es notable en la
oratoria. Debe cuidarse
especialmente, dado que tiene
importantes repercusiones.
Puede llegar incluso a causar más
impacto que el propio contenido
del discurso, aportándole o
restándole credibilidad.
33. La indumentaria
• La imagen puede tener una importancia en
el resultado del discurso que no siempre
suficientemente valorada:
– Capta rápidamente la atención, antes incluso
que el orador haya comenzado a dirigir sus
palabras a la audiencia.
– Es percibida de modo global, resultado de la
suma de todo un conjunto de indicadores.
– Es interpretada en el contexto global de la
comunicación, según el momento, la
circunstancia, el lugar, etc.
34. El rostro
• La expresión del rostro debe transmitir
mensajes acordes al contenido expresado
verbalmente: el orador debe tener
conciencia de sus pensamientos y
emociones, saber controlarlos, dirigirlos
y expresarlos adecuadamente. Eso
resulta ser una tarea difícil si nos invade
el bloqueo mental y la rigidez y el
agarrotamiento físicos.
35. La mirada
• Una de las claves de la efectividad de una presentación
es el contacto ocular con la audiencia.
• Recibir la mirada del orador la sensación de confianza,
competencia, sinceridad, honestidad y franqueza. Un
ponente que evite el contacto visual transmite
inseguridad, escasa preparación, nervios, falta de
confianza y escaso compromiso con el contenido y con
la audiencia. La mirada debe ser afectuosa, serena, y
debemos aprender a dirigirla y mantenerla
adecuadamente.
36. Los movimientos
• Determinados movimientos o
gestos pueden atraer en exceso la
atención y despistar del
contenido, e incluso molestar a
algunos asistentes. Sin caer en una
excesiva rigidez y sin convertirnos
en una estatua parlante, podemos
reducir los movimientos en lo
posible, acompañando el discurso
con leves movimientos poco
expansivos que contribuyan a
subrayar las partes más
significativas.
37. Los movimientos
• Al llegar al sitio donde se va a iniciar la
ponencia tenemos que adecuar el espacio,
colocar el material y ubicar adecuadamente
los apoyos audiovisuales que vamos a utilizar.
38. Las manos
• Las manos pueden moverse con naturalidad,
apoyando y enfatizando determinadas partes del
contenido.
• No debemos elevar las manos por encima de la
altura de los hombros, rascarnos, llevarlas a la
boca, a la nariz, a las orejas, al cuello, al pelo, a
los bolsillos, mover monedas o llaves, pulseras,
dar golpecitos con el bolígrafo.
39. La postura
• En cuanto a la postura, hay que adoptar una
posición que resulte cómoda y relajada.
• Se pueden colocar los pies ligeramente
separados, repartiendo entre ellos por igual el
peso del cuerpo. También se puede adelantar
ligeramente uno de los pies, lo que puede
ayudar a proyectar mejor la voz hacia adelante.
• Y respecto a los brazos, es aconsejable evitar en
lo posible cursarlos, separarlos excesivamente
del cuerpo realizando movimientos expansivos,
meter las manos en los bolsillos.
40. La distancia
• La distancia es otro elemento a tener muy
en cuenta. Reducir la distancia física es de
algún modo reducir la distancia
psicológica.
• Entre el ponente y su audiencia es eliminar
también barreras de comunicación.
• Detrás de una mesa nos podemos sentir
más seguros o protegidos, pero delante o
entre el público llegaremos más y el
control sobre la audiencia será mayor.
41. Autocontrol y naturalidad
• Nuestra forma de comunicarnos y
de comportarnos debe estar acorde
con nuestra personalidad.
• La sinceridad del orador revela
confianza, autenticidad, cercanía y
credibilidad.
• Si el orador se conoce asimismo y
se está mostrando tal cual es, de
una forma auténtica y respetuosa,
animará al público a responder de
forma similar, manifestándose tal y
como son, siendo ellos mismos.
42. Ventajas del uso de apoyos
audiovisuales
• Las ventajas de la utilización del apoyo
audiovisual son múltiples:
– Refuerza el aprendizaje.
– Clarifica lo complejo.
– Concretar conceptos abstractos.
– Ejemplifica gráficamente.
– Introduce variedad y dinamismo.
– Ayuda a la selección, clarificación y organización del
contenido.
– Facilita la percepción.
43. Ventajas del uso de apoyos
audiovisuales
– Capta, dirige y focalizar la atención, con estímulos más
atractivos.
– Enfatiza lo esencial.
– Estimula el interés y aumenta la motivación.
– Facilita el análisis de las distintas partes del contenido.
– Permite presentar movimientos y desarrollos.
– Facilita la comprensión.
– Afianza el recuerdo, ofreciendo mayor resistencia al olvido.
– Acorta el tiempo de la exposición.
– Amplía el tiempo para la participación de la audiencia.
– La mayor credibilidad, cercanía y autenticidad al discurso.
44. Ventajas del uso de apoyos
audiovisuales
• En general, debemos tener previstas las cuestiones
siguientes:
– Disponibilidad.
– Prueba y revisión del funcionamiento.
– Elaboración y colocación de
diapositivas, transparencias, etc.
– Conexiones, alargadores, tomas de corriente.
– Accesorios, lámparas de repuesto.
– Ubicación.
– Orientación.
– Enfoque.
– Volumen.
45. Ventajas del uso de apoyos
audiovisuales
• Como consejos generales,
debemos evitar en lo posible:
– Tapar total o parcialmente la
pantalla con el cuerpo o alguna parte
de éste.
– Dar la espalda al público.
– Hablar de cara a la pantalla, lo que
reduce sensiblemente el volumen de
la voz.
– Realizar un uso excesivo que limita la
participación y puede llegar a cansar.
46. Ventajas del uso de apoyos
audiovisuales
• Al realizar la selección de los apoyos
audiovisuales debemos confirmar que resultan
adecuados en función de algunos criterios:
– Contenido de la exposición.
– Método de presentación.
– Posibilidades y disposición de la sala.
– Duración de la ponencia.
– Número de asistentes.
– Nivel de conocimiento de la audiencia.
47. Ventajas del uso de apoyos
audiovisuales
– Posibilidades de participación.
– Grado de control sobre el grupo.
– Orden de intervención, si hay
varios ponentes.
– Secuencia de utilización de cada
uno de los apoyos.
– Disponibilidad del equipo.
– Dominio y maestría en su uso.
– Conocimiento sobre sus
posibilidades y limitaciones.