Está en la página 1de 9

Septenario al Espíritu Santo

para pedir sus dones

Del libro: “Abiertos al Espíritu”


de Concepción Cabrera de Armida
unidosenelamorajesus@gmail.com
ppt: Mónica
Oración para todos los días:
¡Oh Espíritu consolador, bondad inefable, que suavísimamente abrasas
las almas en fuego celestial!
Aquí venimos tus hijos a implorar tu protección poderosa y todos tus
dones, para emplearlos en saber amar a Jesús.

Ven a nuestra inteligencia para que reine en ellas la luz de Jesús.


Ven a nuestra voluntad para en ella reine la santidad de Jesús.
Ven por fin, a nuestro ser, para que lo absorba la vida divina de
Jesús.
Tú que eres la Fuente de gracia, derrámala abundantemente en
nuestros corazones.
¡Oh Divino Espíritu, Fuente de infinita Pureza!, límpianos del pecado,
renueva nuestras almas en Cristo y escucha propicio las peticiones que
ahora te hacemos.
Amén.
Meditación
Día primero
Don de Sabiduría:

El don de sabiduría es una luz sobrenatural con la cual el


alma conoce los secretos espirituales.
Este don despega de lo terreno, ilumina el campo de las
virtudes y hace perceptibles las astucias de Satanás.
La Cruz es la verdadera sabiduría de los santos.
La Sabiduría increada,
Dios mismo, fue el que escogió la Cruz para la Redención
del mundo. El alma verdaderamente sabia se crucifica.
María fue el trono de la Sabiduría, comprendió el valor
infinito del sacrificio y lo vivió en grado eminente.
¡Dichosos quienes poseen este riquísimo don!
Quienes pasando inadvertidos para el mundo,
agradan a Dios con su renunciamiento y abnegación;

van siempre adelante rumbo a la Cruz , sin


retroceder, renunciando al egoísmo y
entregándose sin cesar.
¡Oh Sabiduría, dichosa el alma que te posee!
“La Sabiduría que desciende de arriba – dice el apóstol
Santiago – además de estar llena de pureza, es pacífica,
modesta, dócil, indulgente y llena de misericordia.
Es imparcial, y está ajena a toda hipocresía” St 3,17.
Por eso el mismo Espíritu Santo llama feliz al que posee
este tesoro:
“Dichoso el hombre que ha adquirido la sabiduría,
es más apreciable que todas las riquezas,
y ni las cosas de mayor estima pueden comparársele”
Pr 3, 13 -14.
Danos el don de la sabiduría,
¡Oh Divino Espíritu!, que temple nuestras almas en las
dificultades de la vida.
Amén.
Oración final:

¡Oh Espíritu Santo, benigno y consolador que te complaces en aliviar


nuestros males! ¡Oh Fuego celestial que fecundizas cuanto tocas!, ¡ven
a extender por todo el mundo el amor a la Cruz! Derrama sobre
nosotros tu suave unción; suscita vocaciones de laicos, religiosos y
sacerdote. Presérvanos de todo mal y llénanos de celestiales riquezas.
Amén
Jaculatoria:
Crea en mí, ¡Dios mío!, un corazón puro
y renuévame por dentro con espíritu
firme.

Si deseas recibir mails, relacionados con la Iglesia: que contienen diapositivas,


.vida de Santos, Evangelio del Domingo, etc
Escribe a: meljuri@yahoo.com o a unidosenelamorajesus@gmail.com, con el
.título suscripciones
.Servicio Gratuito
.Que Dios te llene de bendiciones
..Y que permanezcamos unidos en el amor de Jesús

También podría gustarte