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DIOS SOL - INTI

Estimados lectores en base a ciertos comentarios unos positivos


y otros negativos o de doble expresión me atrevo a analizar
ciertos informes encontrados en las enciclopedias ojalá que les
sea de su agrado y aprendizaje.

Primeramente, vamos a tratar este análisis sobre la deidad del


sol INTI como MITOLOGIA INCAICA

En esta foto de Martin de Murua observamos al INCA


PACHACUTEC adorando a INTI el dios sol.

Pero ahora nos preguntamos:

¿Quién era INTI y que representaba?


Pues estimados lectores, INTI no solo representaba al sol, sino
que era una entidad sideral que estaba en el espacio y el que
según la mitología INCA se le consideraba como un DIOS, más
su nombre INTI se le fue asignado por medio del idioma
PUQUINA ya que en puquina sol significa INTI.

Antes de continuar conozcamos que los Incas tenían en el primer


peldaño, o, como el más poderoso al Dios sol INTI.

Pero, anterior a todo esto, ya existía una deidad suprema llamada


VIRACOCHA, nombre este que es una abreviatura de su
verdadero nombre, el cual es y será APU-QUN-TIQSI- WIRA-
QUTRA, la que en la realidad es Apu kon titi wiracocha, lo
que etimológicamente significa como una numeración de los
poderes del Agua, la tierra (mama pacha) y el Fuego, esta
personalidad compleja y universal de WIRACOCHA, termino
absorbiendo toda la divinidad resultando ser, mucha más
poderosa que la del sol.

También conocemos que el sol no estaba solo, es tenía como


compañera a la LUNA, a la cual nosotros o los INCAS la
conocían como MAMA QUILLA,
En la parte superior de este análisis, tenemos la representación
del sol como un disco con rayos, podría ser de plata mas se
considera que era de oro.
Lo Incas y todo el imperio acudían a esta deidad para solicitar
favores en las cosechas y en las enfermedades.

Los incas adoraban a Inti porque sabían que el Sol daba


mediante su energía alimento fotosintético a sus tierras.
Legado
Culturalmente al sol se le adoraba en las actúeles naciones:
Perú, Argentina, Bolivia, Uruguay, Ecuador. y Colombia.
INTI, dios sol para los incas, está presente en
la cultura peruana y los actuales países que formaron parte del
antiguo territorio del Imperio Inca, desde el sur
de Colombia hasta las praderas de Argentina, también existen
varios grupos indígenas  que aún mantienen la sabiduría en los
poderes del sol y celebran festivales en su honor.


Inti en el Sol de Mayo en la bandera de la Argentina, 1818
 


Inti en la provisoria bandera del Perú, diseño de José Bernardo
de Tagle, 1822
 


Inti en el Sol de Mayo en la bandera de Uruguay, 1830

La Adoración Antigua del Sol


 Politeísmo

Reino Unido
Todas las religiones en el mundo apuntan a una sola deidad
omnipotente. Incluso las creencias tradicionales y la mitología
en sus orígenes.

También podemos observar tradiciones politeístas que han


evolucionado a partir del monoteísmo, la naturaleza del hombre
siempre a anhelado y anhela un creador poderoso en quien y
encontrar consuelo, pero como no analizamos bien las cosas,
mas no nos damos cuenta que esa deidad creadora está en
nuestra propia mente.
Así como nosotros observamos eclipses, cometas, meteoritos y
otros fenómenos, y nuestra mente deambula en el infinito el
poder de la naturaleza así también ellos nuestros antepasados,
que aun conocían el poder de la naturaleza, se imaginaban que
eran fuerzas divinas por lo tanto los consideraban deidades.

Por medio de la historia conocemos que antes de los tiempos de


Abraham, ya habían comenzado a adorar al Sol y a las estrellas,
considerándolas como deidades de mucho poder.

La arqueología ha desenterrado muchas estructuras antiguas


alineadas con los cuerpos celestes que sugieren firmemente la
idea de que esas personas adoraban las estrellas, el Sol y la
Luna.
Stonehenge en el Reino Unido, las pirámides de Egipto y
México, hace cinco o seis mil años, los se utilizaba como
conocimiento del ciclo solar y el calendario como fuente de
poder y riqueza, particularmente si podían dirigir a las masas
sobre cuándo sembrar y cuándo cosechar.
En el antiguo Egipto, tenemos el Sol adquirió una gran
importancia en la religión de los egipcios y en el rango del
faraón. Tenemos jeroglíficos que representan al faraón con el sol
en la cabeza, el gran Amon-Ra. Amon, o Amun fue considerado
como el creador supremo, mientras que Ra era el antiguo dios
del Sol, por lo que los dos se combinaron como Amon-Ra.
En el culto egipcio, Horus es el Sol naciente, Ra es el Sol del
mediodía y luego Osiris (dios de los muertos) es el Sol
moribundo o poniente, incluso se les vinculan a Horus, Ra y
Osiris con el concepto de la Trinidad cristiana.
Los romanos y los griegos también habían establecido su propio
panteón de deidades e intercambiaron dioses con otras culturas.
Así como Ammón-Zeus, un creador híbrido para satisfacer a las
culturas griega y egipcia y su obsesión con el Sol.
En América Central y del Sur, las culturas antiguas de los Incas,
los aztecas y los mayas también dependían en la adoración al sol
Sus templos, como el famoso complejo de Machu Picchu en
Perú, también se han asociado con un culto religioso inca
dedicado a la adoración del Sol, donde se encuentra el
Intihuatana, cerca de la ciudad de México, dos grandes
pirámides presentes llevan el nombre del Sol y la Luna.
En toda África, muchas tribus adoptaron como dioses a
elementos naturales como el río, la montaña, la Luna y el Sol,
muchas otras culturas en Europa y Asia describieron a su
creador como el Sol que da a luz a las estrellas, por esta razón
mucha
civilizaciones antiguas en muchas partes del mundo se
maravillaron con el Sol, la Luna y las estrellas debido a su
distancia, poder y ciclos regulares.

El calendario judío
Los judíos y los musulmanes remontan sus orígenes al linaje de
Abraham, el calendario judío se denomina calendario lunisolar
porque se basa en el calendario lunar, que es más corto que el
calendario solar de 365 días.
El cristianismo y el Sol
Un ejemplo clave de esto fue la interacción del cristianismo con
el Imperio Romano en las creencias romanas tradicionales. Los
romanos habían estado persiguiendo a los cristianos y
despreciaron a los judíos que habían derrotado en Jerusalén
alrededor del 70 E.C. Querían que todas las razas de su imperio
rindieran homenaje al Emperador y a los dioses y diosas
romanos. A lo largo de tres siglos, gradualmente los cristianos
comenzaron a asociar a Jesús con el dios romano Sol Invictus al
representar a Jesús como teniendo un halo solar alrededor de su
cabeza al igual que Sol Invictus, y al adoptar el día santo de su
dios, el 25 de diciembre, como la fecha clave para el
cristianismo, celebrada erróneamente como el nacimiento de
Jesús.
El impacto a largo plazo del uso cristiano de un calendario solar
es que sus festividades se asocian más con las estaciones en las
que tienen lugar que con los eventos en los que se basan.
Además, el legado de la asociación con el Sol Invictus si es que
el cumpleaños de Jesús se celebra el 25 de diciembre, que solía
ser el solsticio de invierno hace 2.000 años.

Estimados lectores hasta aquí hemos llegado y ahora mas o


menos comprendemos sobre la cosmología Andina, la mitología
Inca y el Dios Sol,
Por eso a que les dejo unos ejemplos que talvez sean para aclarar
más nuestros conocimientos.

SEGÚN LOS INCAS


La cultura inca, asentada en lo que hoy es
el Perú, Ecuador, Bolivia, parte de Chile y Argentina tenía como
deidad más importante al Dios Sol llamado Inti. El Inca o
emperador, era considerado hijo de Inti. Se dice en la leyenda
de Manco Cápac y Mama Ocllo que ellos fueron enviados por su
padre el Sol, nacido en la isla del sol, en el sagrado Lago
Titicaca. Considerado por las dinastías incaicas como el Sumo
Hacedor. Con la colonización española, y la religión católica
impuesta, los súbditos del imperio inca fueron obligados a que
dejaran de adorarlo. La esposa de Inti, Quilla, era la Luna, diosa
de la mujer y de los quehaceres femeninos. En honor al dios sol
se celebra cada 24 de junio el Inti Raymi y en diciembre
el Cápac Raymi.
Según los muiscas
Los muiscas (muyska: persona, gente) o chibchas son un pueblo
indígena que habitó el altiplano cundiboyacense y el sur del
departamento de Santander, en Colombia, desde el siglo VI
a.C., y cuyos descendientes directos viven actualmente en
localidades del distrito de Bogotá como Suba y Bosa, y en
municipios vecinos como ...
Para los Muiscas (cultura precolombina asentada en buena parte
del territorio que es hoy Colombia) el Dios Sol es Sué, que fue
creado junto con las estrellas, por el gran Chiminigagua, el dios
del que fue parido el todo. El dios Xué es también hermano
de Chía, la luna. Xué en algún momento llegó a la tierra para
promulgar la moral y a enseñar artes.

1. Egipto: gente, dioses, faraones, Rose-Marie y Rainer


Hagen, Taschen, Koln, 2002.

El carro solar de Trundholm representa una parte importante de


la mitología nórdica.
Un dios solar representa al Sol o aspectos de él, como pueden
ser los rayos solares. En la mitología de muchas culturas el Sol
era un dios; fue venerado a lo largo de la Historia en muchas
civilizaciones, como la egipcia, la mesopotámica, la mexica,
la incaica, la china, la japonesa, la griega o en religiones como la
hinduista. Se considera que el culto al Sol pudo ser el origen
del henoteísmo y, después, del monoteísmo.
Barca solar

Ra en su barca solar.


Una barca solar o bote solar es una representación mitológica
del sol conduciendo una barca.
 En el Neolítico los petroglifos muestran, en algunos casos,
posibles barcas solares.
 Los petroglifos nórdicos de la Edad del Bronce incluyen
barcas en diferentes constelaciones.
 El barco de Jufu (Keops) de 43,6 metros de longitud, fue
encontrado en el complejo de la Gran Pirámide de Guiza y
se calcula que fue construido hacia el 2500 a. C., ejemplo
de la importancia y simbolismo de la barca solar para el
paso al otro mundo.
 Muchos dioses egipcios son considerados dioses solares,
como Ra (mitología)
Carro solar[editar]
El carro solar es otra representación mitológica, como la barca
solar, pero algo más reciente, ya que se estima que su origen
corresponde a la expansión indoeuropea, después de la
invención del carro, en el II milenio a. C.
 El carruaje solar de Trundholm, de un dios nórdico.
 En Grecia, Helios conduce un carro1 y también Faetón.2
 El Sol Invictus fue representado en un cuadriga en el
reverso de una moneda romana.3
 Elías asciende al cielo en un carro de fuego.4
 Suria es un dios védico que representa al Sol en el panteón
hindú y es mostrado conduciendo un carro con siete
caballos.
Dioses solares por culturas[editar]
Según los egipcios[editar]
Estatua de Hathor, en el museo de Luxor, portando el disco
solar.
Para los egipcios el sol representaba germinación, calor y luz.
Esto hizo que las deidades solares fueran importantes.
En Egipto, el culto al Sol prevaleció durante siglos y se asoció
su poder a muchos dioses,
como Horus, Ra, Uadyet, Sejmet, Hathor, Nut, Isis, Bat y Menhi
t. A partir de la quinta dinastía, los dioses locales se funden con
Ra para crear divinidades sincréticas: Atum-Ra, Min-Ra o
Amón-Ra.
Durante la dinastía XVIII, el faraón Akenatón cambió,
temporalmente, el politeísmo que se practicaba en Egipto,
proclamando un monoteísmo en torno a Atón, representado por
el disco solar, posiblemente para contrarrestar la gran influencia
del clero de Amón.
Según los mesopotámicos[editar]

Tablilla de Utu/Shamash que es mostrado sentado en el trono,


frente a un rey babilonio entre dos deidades que interceden por
él.
El dios sumerio del sol Utu (en acadio Shamash), que era al
mismo tiempo dios de la justicia, jugó un importante papel en la
zona mesopotámica durante la Edad del Bronce. Formaba parte
de una tríada astral junto al dios lunar Nanna (en acadio, Sin) y
la diosa del amor y de la guerra Inanna, cuyo símbolo era
la estrella de la mañana.
Utu era el señor de la luz y por su posición estelar podía ver todo
lo que pasaba en la Tierra y por eso podía impartir justicia.
Según los griegos[editar]
En Grecia, el dios del sol era Helios quien era concebido como
un hermoso dios que usaba una corona aurífera de gran y
poderoso brillo. Él conducía un carro por el cielo cada día hasta
el océano, río perfecto que circundaba la tierra, Gea.
Homero señala al carro de Helios como tirado por toros de
fuego, aunque Píndaro lo escribió que por «corceles que
arrojaban fuego».
Hesíodo también indica a Eos como una diosa solar griega
asociada a la aurora, siendo hija del titán Hiperión y Tea.

Según los bálticos[editar]


En la cultura baltica tradicional celebraban a la diosa del sol y
patrona de los huérfanos y desafortunados (Saulė) encendiendo
una gran hoguera y danzando alrededor durante el Jāņi
(actualmente fiesta de San Juan).
Según los mexicas[editar]
En el panteón mexica, Tonahtiuh vivía de la sangre y corazones
de los sacrificios humanos. Asimismo, el mito del nacimiento
de Huitzilopochtli, dios patrono de los mexicas, es una alegoría
bélica del amanecer por la que se sustentaba la aspiración bélica
de ese pueblo y se justificaban las guerras floridas.
Otras culturas[editar]
 En la simbología cristiana, el sol suele referirse al
propio Dios o a Jesucristo. No obstante que desde el relato
de la Creación del Génesis, se describe al astro como "la
lumbrera mayor" (Génesis 1, 14-16).
 El Sol y la Luna simbolizan el oro y la plata, rey y reina,
alma y cuerpo.
 El Sol ('Ekhi') en la mitología vasca, es hija de la tierra
('Amalur') a la cual se le despide cuando desaparece por
'Itxasgorrieta' a las entrañas de la tierra para alumbrar a los
subterráneos.
 El Sol es el Padre Universal. La Tierra simboliza la Madre
Naturaleza y la fecundidad.
 Amaterasu es la diosa del Sol en el sintoísmo y antepasada
de la familia imperial de Japón, según dicha religión.
 En la cultura tamazight de Canarias tenían como deidad
solar a Magec, Alcorac o Abora, según las islas.
 En la mitología selknam, el howenh del sol era Kren, hijo
de Kranakhátaix, el viejo sol. Estaba casado con la
luna, Kre.
Referencias:
1. Patrones en la religión comparativa, Mircea Eliade, Sheed
& Ward 1993.
2. La Enciclopedia de Mitos y Leyendas, Stuart Gordon,
Headline Books 1993.
3. Secretos de lugares antiguos y sagrados, Paul Devereux,
Brockhampton Press, Londres 1993.
4. Ciudades antiguas, edición especial de Scientific American,
1994.
5. El Libro Egipcio de los Muertos, E. A. Wallis Budge,
Cassel & Co, Londres 2001.

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