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AGUAITA

R E V I S TA D E L O B S E R VAT O R I O D E L C A R I B E C O L O M B I A N O
N Ú M E R O 1 5 - 1 6 D I C I E M B R E D E 2 0 0 6 - J U N I O 2 0 0 7 C A R TA G E N A D E I N D I A S

DIRECTOR Madalina Barboza


EDITOR Ariel Castillo Mier

CONSEJO EDITORIAL CONSEJO ASESOR ENTIDADES DE APOYO

Alberto Abello Vives Jaime Abello Banfi Universidad del Atlántico


Weildler Guerra Curvelo Carmen Arévalo Correa Universidad de Cartagena
Luis Alarcón Meneses Beatriz Bechara de Borge Universidad de Córdoba
Cristo Figueroa Sánchez Roberto Burgos Cantor Universidad de la Guajira
Cecilia López Montaño Mario Giraldo García Universidad del Magdalena
Adolfo Meisel Roca Patricia Iriarte Díaz Granados Universidad Popular del Cesar
Claudia Mosquera Soad Louis Lakah Universidad de Sucre
Jorge Nieves Oviedo Consuelo Posada Cámara de Comercio de Cartagena
María Trillos Amaya Gustavo Bell Lemus Cámara de Comercio de Sincelejo
Fabio Zambrano Pantoja Colciencias

DISEÑO GRÁFICO Eduardo Polanco


COLABORADORES DE ESTE NÚMERO Patricia Iriarte
Ernesto Bassi
Roger Pita Pico
María Salud Elvás Iniesta
Gerson Javier Pérez V.
Jorge Quintero Otero
Paola Quintero Puertas
Carlos Adán Valbuena
Nelly García Gavidia
Álvaro Medina
Hugo Chaparro Valderrama
Gabriel Alberto Ferrer Ruiz
Alberto Abello Vives
Francisco Avella
Manuel Guillermo Ortega
Ariel Castillo Mier
James J. Alstrum
Carlos Dávila de Ladrón de Guevara
Julio Marino Barragán
Elisabeth Cunin
Julio Oñate Martínez

FOTOGRAFÍAS Carlos Valbuena


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El Observatorio del Caribe Colombiano es el centro de estudios regionales del Sistema Universitario Estatal (SUE) del Caribe
y realiza programas concertados con el Ministerio de Cultura de Colombia.

El material de esta publicación puede ser reproducido parcial o totalmente citando la fuente y el autor. Las opiniones expresadas
en los artículos firmados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y no comprometen al Observatorio del Caribe Colombiano.
Impreso en Colombia, Printed in Colombia, Cartagena, diciembre de 2006 – junio de 2007.
ISSN 0124- 0722
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urante los días 1° y 2 de noviembre se llevó a cabo en el Teatro Amira de la Rosa
de la ciudad de Barraquilla la sesión final del Taller del Caribe Colombiano orga-
nizado por el Centro de Estudios Económicos Regionales del Banco de la Repú-
blica, Fundesarrollo y nuestra entidad. Después de más de un año de eventos regionales, de
talleres departamentales sobre los obstáculos al desarrollo departamental y de análisis sobre
los principales problemas que impiden avanzar por la senda del desarrollo humano, social y
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económico, en la sesión de clausura, tras escuchar durante dos días a representantes de toda
la región, se firmó, por parte de un destacado grupo de académicos, políticos, empresarios,
deportistas, estudiantes y dirigentes regionales, el Compromiso Caribe, el cual se constituye en
un nuevo gran reto del regionalismo caribeño. Lo ocurrido en Barranquilla ha sido observado
y reseñado positivamente por los medios de comunicación nacionales.

El Observatorio del Caribe Colombiano se identifica con los once propósitos del Compro-
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miso Caribe y considera que este documento, tan importante para las acciones posteriores
que han de desarrollarse por parte de los más variados organismos y agentes regionales, se
convierte en guía para la búsqueda del mejoramiento de las condiciones de vida de la región
y debe divulgarse al máximo con miras a su apropiación y enriquecimiento por parte de la
comunidad, pero sobre todo, para hacerle riguroso seguimiento a los logros en cada uno de
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los propósitos.

El Compromiso Caribe es un patrimonio regional, y como tal, pertenece a todos, y no exclu-


sivamente a los tres centros de investigación que contribuyeron a su gestación, cuyo papel
es y deberá seguir siendo el de centros de estudio y análisis.

El Compromiso Caribe resulta después de 10 años de labores de los tres centros de investigación
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y constituye una base científica y documental de la región para entenderse, para comprender
su relación con la Nación y su pertenencia al mundo del Caribe. Por su importancia, hemos
tomado la decisión de incorporar sus 11 puntos como editorial, en este número, al cumplirse
diez años de la creación del Observatorio del Caribe Colombiano:

1. Convertir en política de Estado la reducción de las enormes disparidades regionales


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en el ingreso y en los indicadores de bienestar material y lograr que en Colombia las


políticas para erradicar la pobreza se orienten por la dimensión territorial.

2. Crear un Fondo de Compensación Regional para que el efecto regresivo del gasto
público del gobierno central se compense con recursos que permitan darle un mínimo
de servicios del Estado a todos los habitantes de Colombia, en cualquier parte del
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territorio nacional.

3. Fortalecer el aparato productivo de la región Caribe en sectores competitivos de alto


valor agregado y generadores de empleo que produzcan ingresos para superar las
condiciones de pobreza de los costeños.
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4. Avanzar en el mediano plazo en la erradicación de la desnutrición de la población


infantil de 0 a 4 años y trabajar conjuntamente con la nación, los departamentos,
los distritos, los municipios, el empresariado y la sociedad por el cumplimiento de
las Metas del Milenio, propuestas por el Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo–PNUD.

5. Darle prioridad a la calidad del sistema educativo regional sobre todas las otras
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inversiones que realizan los gobiernos locales de la región imponiéndose como metas
las de eliminar el analfabetismo, universalizar la educación secundaria y fortalecer la
etno-educación bilingüe en aquellos lugares donde se habla, como primera lengua,
una distinta al español.

6. Institucionalizar la clara vocación del Caribe como Región, en las formas autorizadas
por la Constitución de 1991, que numerosos intentos en el Congreso no han logrado
y promover mecanismos específicos para que la Costa Caribe se exprese como región
en el ámbito nacional en los temas relacionados con el desarrollo social, económico,
ambiental y cultural. De igual manera, se debe estimular la conformación de redes de
cooperación, solidaridad e intercambio económico y social con el objeto de fomentar
una mayor integración y alcanzar un desarrollo económico que se traduzca en mejo-
ramiento de la calidad de vida de costeñas y costeños. En el proceso de integración
regional se utilizarán las vías que la creatividad permita, incluyendo el uso de las nuevas
tecnologías de las comunicaciones y la información. El Canal Regional de Televisión,
Telecaribe, debe jugar un papel fundamental en esta integración.

7. Estimular y fortalecer los centros de estudios regionales en el Caribe colombiano que


generen conocimiento e ideas para la región en su conjunto y actúen como canales
de expresión para la academia y la intelectualidad. Estos centros estarán en capacidad
de evaluar y hacer el seguimiento periódico al Compromiso Caribe.

8. Superar la fragilidad de las instituciones regionales y mejorar la calidad de las admi-


nistraciones locales, departamentos y municipios, mediante la erradicación de la
corrupción y favorecer cada día, en los asuntos públicos, la mayor participación de
ciudadanos sin intereses particulares en los resultados electorales, que propugnen por
los beneficios colectivos y trabajen por la solución de los problemas de la sociedad.
Promover la condena social de la corrupción por sus perversos efectos sobre la legi-
timidad del Estado y el demérito de lo público; por su destrucción del capital social,
en especial, debido a la anomia que produce la riqueza mal habida; por su sustracción
del gasto destinado a promover la equidad y la igualdad de oportunidades; por su des-
estímulo de la sana competencia empresarial; y, por su desaliento al logro de méritos,
la ética del trabajo, el emprendimiento y la innovación.

9. Promover programas y proyectos encaminados al cuidado del medio ambiente de la


región cuyo deterioro cada día abarca más amplias zonas del territorio Caribe.

10. Aumentar la participación de profesionales de la región en el gobierno central para


avanzar en la reducción de las disparidades económicas regionales. 11. Estimular, a
través de una estrategia nacional, el acercamiento y el fortalecimiento de nuestros
vínculos sociales, culturales y comerciales con el Gran Caribe.

Llamamos desde aquí, en nuestros diez años de existencia, a mantener viva la llama que se
ha encendido. El Compromiso Caribe es un asunto de todos. a
H I S T O R I A

Aventuras y desventuras de extranjeros en las


provincias de Cartagena y Santa Marta
durante el periodo colonial
Roger Pita Pico

Este trabajo intenta trazar una mirada retrospectiva Ingresos legales e ilegales
a la presencia de los extranjeros en el espacio corres-
pondiente a las provincias de Cartagena y Santa Marta Aún con todas las precauciones y reservas del Impe-
durante la época de la Colonia. rio español, varios fueron los factores que prendieron
Para empezar, es básico delimitar semánticamente el auge de la emigración extranjera en los albores del
el término extranjero que, para este caso en particular, siglo XVII: la atracción ejercida por El Dorado y otras
se aplicará a todos aquellos que no hacían parte del afamadas riquezas; la unión de los Reinos ibéricos
Imperio español, es decir, a quienes no pertenecían a en 1580, lo que llenó de pretexto a los lusitanos para
la propia España ni a sus dominios en América1. ingresar autoproclamándose como vasallos españoles;
Admiración, sospecha, prevención, inquietud, las ambiciones de otras naciones por expandir sus mer-
curiosidad, eran solo algunos de los sentimientos que cados y el fortalecimiento de las licencias para la trata
giraban en torno a estas personas venidas de fuera. esclavista bajo el monopolio de los portugueses.
Ahondar sobre ellas implica además examinar cómo se En concreto, debe resaltarse el caso de Cartagena,
dio su proceso de inserción y encuentro en una sociedad ciudad que por su misma ubicación costera y por ser
fuertemente segmentada y jerarquizada. puerto clave de entrada tanto legal como subrepticia, no
Asimismo, esta sucinta revisión cronológica permi- solo a la Nueva Granada sino a los dominios del Perú,
tirá discurrir sobre ciertas tesis que apuntan a pensar logró congregar en sus casas y calles a un buen número
que sobre este grupo poblacional primó, más que de extranjeros. De hecho, algunos que tenían como
todo, el concepto de la “otredad” y la exclusión. Para propósito internarse en las tierras del sur terminaban
ello, es vital no perder de vista el contexto histórico, por quedarse. En un comienzo, los que más abundaban
marcado en lo económico y político por los afanes
expansionistas de los centros imperiales de poder, y
en lo religioso, por el interés de combatir tendencias
1 Esta precisión conceptual resulta muy conveniente por
atentatorias del monopolio de la fe preconizada por la cuanto también se solía llamar así a los nacidos en España y resi-
iglesia católica. dentes en estas tierras del otro lado del océano.

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eran los portugueses hasta el punto de llegar a causar reporte de 1630 en Cartagena, sólo seis contaban con
recelo y preocupación entre las autoridades que, no carta de naturaleza y cinco con licencia. Tantas trabas
pocas veces, recriminaron la habilidad de estos europeos hacían que muchos optaran hábilmente por manejar el
para comerciar aún en contravía de las leyes, valiéndose idioma castellano y soterrar su origen mediante diversas
incluso de sobornos y de sus contactos en el gobierno estrategias. El hecho mismo de no tener propiedad
local para no ser expulsados2. y su alta movilidad espacial, hacían que se pudieran
Una prueba reveladora sobre la resonancia foránea escabullir fácilmente. Los más pudientes recurrieron
en esa ciudad la suministra la investigadora española a otros métodos no muy honestos como la adultera-
Enriqueta Vila quien se basó en un documento del ción de pruebas de limpieza de sangre, el soborno a
Archivo General de Indias que da cuenta de 184 funcionarios de la Casa de Contratación e incluso la
extranjeros existentes en 1630, aproximadamente la compra de permisos falsificados de embarque, fáciles
décima parte del conjunto total de vecinos. El 79.3 de adquirir en Sevilla6. Algunos se infiltraron a través
correspondía precisamente a portugueses seguidos en de las embestidas piratas o con el pretexto de traficar
menor escala por italianos y franceses3. con contrabando. Otra de las alternativas ilegales de
Desde un principio se instauraron mecanismos acceso fue embarcarse secretamente en navíos de la trata
formales para el ingreso legal. El primero de ellos fue la de esclavos o en las flotas que zarpaban con destino
licencia que era una merced mediante la cual la Corona al Nuevo Mundo. Se convertían así en polizones que
confería permiso para pasar a América, principalmente fueron conocidos también como “los llovidos”, debido
para ciertos oficios mecánicos. El segundo instrumento a que no se sabía cómo habían entrado. Precisamente
eran las cartas de naturaleza que permitían vivir y en 1596 se había solicitado encarecidamente a la Casa
comerciar legítimamente, para lo cual se debían cum- de la Contratación de Sevilla una exhaustiva revisión
plir ciertos requisitos como el haber vivido en España a los galeones para cerciorarse de que no subieran a
o en las Indias por diez años continuos, estar casado bordo extranjeros sin licencia. Esta misma directiva
allí y poseer casa o bienes raíces. Una vez instalado el fue reiterada veinte años más tarde7.
Reinado de Felipe III, estas exigencias se tornaron más Circunstancias adicionales pudieron incidir para
rígidas tras ampliarse al doble el tiempo de residencia, introducirse, muchas de ellas fortuitas y azarosas. Por
en tanto que los caudales debían alcanzar el tope de ejemplo, el genovés Jerónimo de Ojenes viajaba en una
los 4.000 ducados. La tercera y más común vía de embarcación de paso por la bahía de Cartagena, pero
legalización era a través de las cédulas de composición, de repente enfermó, lo que lo obligó a buscar abrigo en
consistentes en el pago de una determinada cantidad esta ciudad. Otro de los motivos más recurrentes fue
de dinero al fisco a cambio de normalizar a todo aquel el naufragio de naves, ya fuera por avatares climáticos,
que hubiere pasado fraudulentamente4. Entre 1593 y pero primordialmente por enfrentamientos bélicos, así
1599 se registró en Cartagena un total de 71 benefi- le sucedió en inmediaciones de dicha bahía al francés
ciados por esta fórmula: 54 portugueses, 12 italianos Juan de Cádiz, al genovés Bernardo de Mier y a su
y 2 flamencos5. No obstante, este requisito de pago compatriota Antonio Galindo8.
limitaba en cierto sentido el acceso a este mecanismo
de legalización ya que solo lo podían cumplir aquellas
personas con algún caudal económico. Al final, estas
concesiones sólo operaron en estos primeros años ya 2 Nicolás del Castillo Mathieu (1981: 214-215).
que la metrópoli decidió suspenderlas. 3 Enriqueta Vila Vilar (2001: 9-33).
En realidad, fueron muchos los que tuvieron éxito 4 Juan Morales Alvarez (1980: 45, 47 y 51).
en su propósito de traspasar el Atlántico utilizando 5 Enriqueta Vila Vilar (2001: 5).
diversas estrategias, ya fuera enrolándose como marinos 6 María Cristina Navarrete (2000: 20).
y soldados o en calidad de criados. Pero pese a todas las 7 Recopilación de Leyes de los Reynos de las Indias (1973: tomo
restricciones y esfuerzos oficiales, la mayoría de extran- IV, folio 11v).
jeros tuvo más que todo un carácter de clandestinidad. 8 Archivo General de la Nación -AGN, Empleados Públicos-
Así lo da a entender el hecho de que en el mencionado Miscelánea 29, folios 797v, 802r, 803v y 805r, 1736.

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Es bueno advertir que aún cuando prevalecieron las XVII, cuyo cabildo estaba conformado en su gran
políticas de corte restrictivo, también hubo un grupo de mayoría por portugueses12.
extranjeros que fueron bienvenidos por sus invaluables Dentro de los más destacados en el andamiaje
aportes a la ciencia, la economía y la cultura. El mismo burocrático de la ciudad de Santa Marta en la siguiente
campo de la construcción civil y militar requirió en oca- centuria, vale citar: al irlandés Esteban Bodquin, quien
siones específicas del concurso y la experticia externa. fue designado en el cargo de tesorero; a Juan Claros,
Por ejemplo, el ingeniero italiano Giovanni Battista nacido en Amberes, fue elegido regidor, alcalde de la
Antonelli renovó el castillo de San Felipe de Barajas en santa hermandad, alcalde de primer voto y cuatro años
Cartagena hacia la segunda mitad del siglo XVI para como contador oficial del Real Tesoro; al portugués
resistir el ataque de los corsarios9. En la pintura y en el Juan Baptista Machado, quien llegó como asentista
estamento religioso también descollaron hombres con de esclavos y pudo ser designado alcalde de la santa
valiosas contribuciones culturales. hermandad, provisor general y dos veces alcalde
ordinario. Todos ellos unieron sus vidas con vecinas
Vida social y económica blancas y, por lo general, consiguieron acumular res-
petables caudales13. Hacia 1789, el entonces gobernador
Por lo regular, los extranjeros eran fácilmente José de Astigarraga informó al virrey sobre la gestión
aceptados dentro de las élites locales, aún a sabiendas del portugués Juan José Melo como escribiente en la
de que no todos contaban con ostentosos patrimonios administración de correos y su posterior admisión
materiales. Gracias en parte a su piel blanca, algunos como soldado14.
cuantos pudieron emparentarse con influyentes familias Dentro del antedicho padrón llevado a cabo en
criollas, aunque también hubo cierta resistencia ya que, Cartagena, al promediar el siglo XVIII, se puede hacer
por lo general, no eran nobles, sino que simplemente alusión al genovés Jácome Savona quien ocupó el cargo
provenían de estratos bajos o se ganaban la vida en de administrador de la renta de aguardiente y del ramo
oficios manuales de muy poca estimación social. de alcabala, y al también genovés Antonio Bolcan,
Hubo otros que en franco desafío a los convencio- dos veces alcalde de la santa hermandad. En el campo
nalismos y prejuicios de aquel entonces, se atrevieron militar, cabe rememorar al genovés Pedro Blanco quien
a comprometerse sentimentalmente con miembros se consagró como teniente de una de las compañías de
de las castas inferiores, como el francés Juan Miguel milicias españolas de la ciudad, y al francés Pedro de
Marcial quien se casó en Santa Marta con la parda libre Amvila, en ejercicio del mismo rango en la cercana villa
Juana Francisca del Campo10. De los 55 extranjeros de San Benito Abad15.
registrados en 1751 en la provincia de Cartagena se
pueden citar tres genoveses: Domingo Fasete enlazado Invasión y poblamiento en el Darién
con la morena libre Lorenza Gutiérrez, Pedro de Grote
enmaridado con la negra liberta Polanía Melgarejo y Hacia el año de 1699 irrumpió en las costas del
Francisco Armani comprometido con la mulata María Darién una expedición de escoceses al mando de Gui-
Polo Machado al lado de sus dos hijos11. llermo Peterson, como parte de una urdida expansión
En cuanto al tema de las ocupaciones, en la Costa
Caribe la mayoría se desempeñaba como mercaderes,
marineros y artesanos. A esta conclusión se llega des-
pués de revisar las citadas fuentes documentales sobre 9 Roberto Violi Botta (1995: 24-26).
extranjeros en Cartagena en dos momentos históricos 10 Steinar Saether (2005: 71).
claves: 1630 y 1751. 11 AGN, Empleados Públicos-Miscelánea 29, folios 797r, 798v
y 820v, 1751.
También les fueron adjudicados cargos de impor-
12 Nicolás del Castillo (1981: 216).
tancia en los gobiernos locales y provinciales, algunos
13 Steinar Saether (2005: 70 y 71).
incluso desarrollaron una sobresaliente trayectoria de
14 AGN, Milicias y Marina 115, folio 738r, 1789.
servicio público. Llama poderosamente la atención el
15 AGN, Empleados Públicos-Miscelánea 29, folios 797r, 803r,
caso de Cartagena en las primeras décadas del siglo 808r y 815v, 1751.

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comercial y territorial de aquella nación europea. Allí esas gentes, pero principalmente se temía ahora que en
lograron persuadir a los nativos y fundaron una colonia su condición de hombres armados conocerían mejor
a la que bautizaron con el nombre de Nueva Caledonia. el Reino y sus entradas, lo que tácticamente podía ser
Mas tarde arribó una nueva excursión de refuerzo al aprovechado por eventuales ambiciones territoriales de
mando del capitán Alejo Campbell. Disminuidos por sus países de origen. Al final, se demostró gran ineptitud
el impacto de las enfermedades y el inclemente clima, en estas lides militares, máxime cuando muy pocos de
y ante el escaso apoyo de los ingleses, los intrusos se ellos comprendían el castellano, siendo indispensable
encontraron con una actitud ofensiva por parte de la confiar en un esclavo intérprete. No tardaron entonces
Corona española que ordenó a los gobiernos sufragá- en reportarse deserciones. Muchos habían terminado
neos de Panamá y Cartagena el despacho de un ejército en trabajos públicos y otros conminados a penas fuertes
de 1.500 hombres que al final triunfó en el campo de en el cuartel.
batalla16. El propio Papa Inocencio VII concedió a Lleno de argumentos, Silvestre consideró altamente
petición del Rey Carlos II un auxilio de un millón de inconveniente dejar aquí a estos individuos y creía en
ducados que se pagarían de los bienes eclesiásticos de definitiva que lo mejor era restituirlos a sus respectivos
Indias para hacer frente a estos invasores “herejes”17. países por cuenta de la Real Hacienda. Otra opción
Paradójicamente, después de los dispendiosos válida era asentarlos en inmediaciones de las minas
esfuerzos para sacar a estos extraños, en 1739 el virrey de plata de Mariquita, puesto que allí estarían más
Sebastián de Eslava, debido a los estragos causados por seguros al encontrarse distantes de la costa y porque
los alzamientos de los indios del lugar a los pueblos al mezclarse con familias criollas tendrían, en teoría,
españoles, dio vía libre para que extranjeros habitaran muchas más probabilidades de ser útiles al verse en la
esa costa, tal como lo hicieron sus predecesores en el imperiosa necesidad de laborar en estos yacimientos
siglo pasado18. Otros de los propósitos pensados era o de producir frutos de esta fértil región como añil,
facilitar la comunicación, abrir rutas entre los dos mares algodón, cacao, café y azúcar, entre otros.
y asegurar la soberanía de esta desguarnecida costa El balance sustentado por Silvestre fue, en últimas,
aquejada por tantos ataques externos. Por eso se buscó muy desalentador, ya que no se habían cristalizado los
poblar con colonos de Estados Unidos y de otras islas objetivos propuestos y sí le había costado a las arcas
y posesiones inglesas, francesas y holandesas. En suma, reales más de cinco o seis millones de pesos, con un
fueron más de 1.500 personas de varias nacionalidades, saldo de 6.000 vasallos, entre milicias y moradores,
edades y géneros. sacrificados, ya fuese heridos o muertos. Adicional-
Esta decisión fue reciamente criticada por funcio- mente se notició sobre la presencia de extranjeros
narios como Francisco Silvestre quien estaba conven- poblando a Caño de Loro en inmediaciones de Car-
cido de que esos foráneos eran potenciales enemigos tagena, hecho también percibido como lesivo para la
que podían dejar en peligro de dominio a esas tierras y tranquilidad del Nuevo Reino19.
traerían no pocos abusos y resabios que irían en contra
de las costumbres políticas y religiosas. De hecho, el La segregación religiosa
gran número de judíos, luteranos y protestantes se con-
sideraba una amenaza a la doctrina católica reinante. Árabes y judíos fueron expulsados de España en
Se decía que eran por lo general perezosos y viciosos, 1492, lo que forzó a muchos de ellos a desplazarse al
motivados por la codicia de fortuna y que habían Nuevo Mundo. Algunos de los que tuvieron éxito en
logrado mezclar sus defectos con los de los indios y pisar suelo americano fueron perseguidos implacable-
negros de la zona.
Para enmendar ese error, las autoridades españolas
decidieron enrolar por la fuerza a unos cuantos de
estos extranjeros colonos remitiéndolos a Santa Fe 16 Jerónimo Becker (1921: 44-49).
para engrosar las plazas del regimiento auxiliar, lo que 17 AGN, Cedulario de la Real Hacienda 3, folios 1r-3v, 1700.
generó inconformismo en ellos. Pese a esta medida, 18 AGN, Virreyes 15, folio 878v, 1739.
seguía recalcándose el carácter libertino y relajado de 19 Francisco Silvestre (1958: 104-106).

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mente por el Tribunal de la Santa Inquisición y optaron contra el comerciante extranjero Antonio Gueruchi,
por la conversión al cristianismo como un mecanismo residente en Santo Tomás, por su genio iracundo y sus
para ocultar sus devociones religiosas20. discordias con el cura del lugar debido a su leve apego
Tal como lo pregonaba una ley emanada en 1602, a las leyes de Dios23.
la consigna era “limpiar la tierra de extranjeros y gente
sospechosa en cosas de la fe”, porque se temía además La política de persecución en
que pudiesen ejercer una interferencia pecaminosa en el siglo XVII
los indios21. En ese ambiente represivo, la categoría de
extranjero prácticamente empezó a estigmatizarse al ser Quizás el común denominador en cuanto a
asociada con la prédica de otras religiones diferentes a extranjeros se refiere, era la percepción que se tenía
la católica. Las primeras miradas se concentraron en los de ellos como una amenaza latente. De allí adquiere
comerciantes portugueses que arribaban a Cartagena, explicación la férrea política de persecución y expulsión
algunos de los cuales eran judeoconversos, y a quienes, que padecieron prácticamente durante todo el período
por tal motivo, los juzgó la Inquisición. colonial.
Hacia 1784, don Antonio de Narváez y La Torre, Desde muy temprano la Corona empezó a adoptar
gobernador de Santa Marta, dio cuenta del encar- correctivos. Una cédula de 1560 reprochó cómo muchos
celamiento del tratante judío David Mota y de su penetraban en suelo americano sin la debida licencia y
pronta remisión a Cartagena. El comisario del Santo en forma subrepticia, ya fuera como marineros o como
Oficio descubrió que había sido hallado bajo el falso soldados y otros más fingiendo ser mercaderes. Una de
nombre de Pedro de la Mota y que provenía de la isla las habituales rutas para esquivar las operaciones de
de Santo Tomás. El aludido confesó estar enterado de inspección era a través de las islas Canarias.
las limitaciones vigentes para extranjeros y más para La inquietud esencial de la metrópoli era que dentro
los judíos, pero se justificó afirmando que únicamente de los que lograban pasar fraudulentamente había
había venido para cobrar unos cortos intereses. Según hombres facinerosos “y de mala vida y ejemplo”, que
las normas, los practicantes de ese culto no podían ni conseguían bienes para intentar mas adelante sanearlos
siquiera tocar estas posesiones a no ser con el acompa- en la Casa de la Contratación. Por consiguiente, se
ñamiento de un clérigo o de un cristiano viejo22. mandó que aquellos que fueran sorprendidos entrando
La discriminación abarcaba muchos ámbitos de sin responder a los trámites preestablecidos, le serían
la vida social y política, en especial, el acceso a cargos embargados los capitales que allí adquiriesen, dándole
oficiales, la entrada en colegios o congregaciones reli- la quinta parte de estos al delator. Iguales represalias
giosas, y hasta para casarse. Cualquiera actitud relajada recayeron sobre los bienes mortuorios, en cuya cir-
con respecto a la institucionalidad católica era motivo cunstancia los herederos no recibirían nada y todo se
de inquietud. Corría el año de 1772 cuando el alcalde transferiría al fisco24.
de Barranquilla Antonio Joseph Rodríguez elevó quejas Cinco años más tarde, le llegaron noticias a don
Andrés Días Venero de Leiva, presidente de la Real
Audiencia, sobre la estrategia basada en contraer nup-
cias por temor a no ser echados. En consecuencia, se
20 Natalia Rincón (2002: 99). recordó que ninguno podía casarse sin haber estado en
21 Recopilación de Leyes de los Reynos de las Indias, op. cit., este territorio por lo menos diez años25.
folio 12v.
Las restricciones para los que ingresaban sin permiso
22 AGN, Milicias y Marina 115, folios 744r-749v, 1784.
siguieron renovándose sucesivamente a lo largo del siglo
23 AGN, Empleados Públicos-Miscelánea 20, folios 131r-132r,
XVII mediante sendas leyes promulgadas en los años
1772.
24 Juan Friede (1976: Tomo IV: 107-110).
1602, 1604, 1605, 1608, 1616, 1667 y 167026. Hacia 1621
25 Juan Friede (1976: Tomo V: 338-339).
se fijó una excepción para aquellos que desempeñasen
26 Recopilación de Leyes de los Reynos de las Indias, op. cit.,
oficios mecánicos “útiles a la República”27.
folios 11v y 16rv. Ya se señalaron en líneas anteriores las precauciones
27 Ibid., folio 13r. relativas a todo aquello que vulnerara la hegemonía

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del catolicismo. Simultáneamente, pesaron también En una trama sucedida en 1699, el irlandés Esteban
razones de índole política. Hacia 1645 salió a la luz Bodquin fue destituido de su cargo como contador de
una nueva norma en la que se subrayaba la cruzada las Reales Cajas de la ciudad de Santa Marta debido a
por la expulsión bajo la premisa de que las naciones que las leyes prohibían a los extranjeros residir sin carta
enemigas podían adquirir a través de los aquí residen- de naturaleza o tener empleos oficiales sin haber pasado
tes noticias del estado del Reino, sus resoluciones y con licencia de la Corona. En particular, se creía que
dictámenes, todo en menoscabo de la seguridad del era un elemento sospechoso que podía servir de espía
Imperio español. Se creía entonces que estos emisa- a su nación.
rios disfrazados lograrían alborotar a los habitantes de Bodquin apeló la decisión por considerar que en
estas latitudes. Esta orientación iba dirigida más que su caso no aplicaban los motivos insertos en la ley. Por
todo a los gobernantes de puertos marítimos y costas el contrario, sostenía haber prestado un inestimable
que de por sí eran los sitios más propensos a albergar servicio al gobierno español ya que había sido apresado
población foránea28. y llevado hasta los navíos enemigos apostados en el
La otra gran previsión tenía que ver con los inte- puerto cuando invadió la plaza de aquella ciudad el
reses económicos puesto que el movimiento mercan- pirata francés Daniel Pedro hacia el año de 1692. Allí
til de los extranjeros representaba una competencia soportó estoicamente toda clase de torturas para que
indeseable para los tratantes españoles y locales. Era revelase las flaquezas de la plaza, pero de una manera
verdaderamente prioritaria la protección del mono- perspicaz confesó que había demasiada cantidad de
polio comercial. Fue así como desde muy temprano, armas y fortalezas, lo que de inmediato disuadió a los
en 1557, se estableció una ley que sólo les permitía a usurpadores de perpetrar el ataque y libró a la ciudad de
los advenedizos negociar en los puertos sin pasar a las una pérdida inevitable, pues, en realidad, se encontraba
provincias interiores. Hacia 1614 siguió legislándose en muy débil ante la actitud intimidante de los más de
esa misma dirección, esta vez contemplando la pena trescientos piratas levantiscos.
capital y pérdida de bienes para quien osare tener algún Esta fidelidad y valentía para ofrendar hasta la
tipo de transacciones con ellos29. vida con tal de salvaguardar la soberanía española,
Décadas más tarde, se exigieron mayores controles eran para este irlandés razones más que suficientes
en la revisión de mercaderías porque se presumía que para continuar habitando estas tierras y ocupar algún
algunos extranjeros podían valerse de terceros para cargo decoroso. Con el fin de consolidar su defensa,
enviar sus productos de manera engañosa. Mediante Bodquin exhibió una carta suscrita por el presidente
cédula dictada en 1769 se instó a todos los puertos de del Consejo de Indias en la cual lo recomendaba ante
América para que no admitieran partidas de registros de el gobernador de Yucatán en cualquier postulación de
caudales ni frutos consignados a extranjeros30. También oficio honorífico; resaltó el pago de una crecida fianza
hubo mucho celo en preservar las riquezas existentes, de $ 4.000 como prenda de garantía para acceder al
así lo demuestra el decreto que los privaba de sacar puesto de contador, en el que, al poco tiempo, procuró
piedras preciosas31. por todos los medios el aumento de la Real Hacienda
En 1621 el presidente don Juan de Borja adelantó logrando una excelente administración reflejada en la
un censo general de extranjeros y posteriormente les formación de 32 libros de cuentas y cobros; adjuntó
impuso un tributo que fue duramente rechazado por los certificaciones en las que se daba fe de haber obtenido
mismos afectados. La Corona no atendió estas críticas los empleos de alcalde de la santa hermandad, mayor-
y más bien reprendió a Borja porque este gravamen
era irrisorio y evadido por muchos. Borja justificó su
medida sobre el supuesto de que varios de ellos no
tenían bienes, especialmente los portugueses que venían 28 Ibid., folios 12v y 13r.
de Brasil, Cabo Verde y Guinea, razón por la cual los 29 Ibid., folios 12r y v.
libró temporalmente de dicha obligación con la idea 30 AGN, Milicias y Marina 112, folios 610r-611v, 1769.
de que así podrían aumentar sus caudales para después 31 Ibid., folio 729r.
rendir mayores sumas al Rey32. 32 Manuel Lucena Salmoral (1967: 380-381).

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domo de depósito y de la cofradía de Veracruz, por oficiales reales de la villa habían dispuesto el embargo
cuyos cometidos recibió siempre la ponderación de su de sus cortos bienes por el “delito de extranjería”. No
habilidad y manejo impecable; confesó ser morador por obstante, al final el alcalde ordinario don Blas Ponce
más de nueve años dando muestras de buen comporta- de León reversó esa decisión por haber ejercido Fontes
miento y contar con licencia debidamente refrendada un oficio mecánico útil, para lo cual se colocaron como
por el cabildo secular y eclesiástico del lugar; manifestó pruebas un certificado del Real Protomedicato de la
haber traído progreso a la ciudad gracias a sus rentables Corte de Madrid y un título de catedrático expedido
negocios y al suministro de embarcaciones para la trata por la Real Audiencia de Santa Fe. A esto se le agrega-
de esclavos; aseguró dominar a la perfección el idioma ron evidencias de tener herederos, estar debidamente
español, ser hombre noble e ilustre, pariente inmediato avecindado y la constancia de la licencia con que pasó
del almirante de la Armada de Barlovento, además al Nuevo Continente36.
de estar unido maritalmente con doña Dorotea Rosa Ni siquiera el estamento eclesiástico se libró de las
de Zúñiga, una prestante dama samaria proveniente restricciones implantadas. Fue así como hacia 1703 se
de una familia de crédito y esclarecida fama; admitió les vedó la entrada a los religiosos extranjeros que no
que como buen irlandés era un seguidor acérrimo de trajeran sus respectivas licencias o que no cumplieran
la iglesia católica, cuya devoción estuvo a prueba en con los requisitos de rigor. Esto en razón a que había
la isla de Jamaica en donde había estado prisionero y algunos que hacían propaganda hostil a la monarquía
sentenciado a muerte por no haber querido apostatar española o porque podían ser sospechosos37.
de su credo religioso; y clamó la atención a todos estos Seis décadas más tarde, el Rey Carlos II reiteró
requisitos para corroborar su fidelidad a la monarquía el mandato de expulsar a los extranjeros miembros
y pedir así cierta dispensa de la ley como premio a su de esas congregaciones que aún anduvieran en estas
trayectoria de servicio. Con estas justificaciones se le tierras debido al inconveniente de su desafecto a la
mantuvo y amparó en su empleo mientras se dictaba la nación española y para contener probables “pasiones
sentencia definitiva. Para verificar estos antecedentes, contrarias” al poder constituido, por lo cual se decidió
Bodquin se dio a la tarea de convocar a seis testigos no proporcionar más permisos de ingreso y enviar a
entre los que figuraban vecinos prestantes, religiosos y España a los infractores, advirtiéndoles que si no aca-
altos funcionarios locales33. taban la medida debían atenerse a las consecuencias38.
Dentro de los reportes entregados al año siguiente, los
Las expulsiones en el siglo XVIII máximos representantes de la comunidad de Santo
Domingo respondieron que no tenían en sus claustros
En esta centuria todo parece indicar que los con- a ningún extranjero, sólo criollos y españoles. Igual fue
troles prosiguieron con la misma tenacidad. Como la contestación de los agustinos recoletos descalzos39.
resultado de la guerra, el Rey ordenó a sus dominios En medio de estas regulaciones, el clérigo irlandés
en América mediante cédula del 12 de julio de 1702 don Miguel Oclavie decidió acudir al virrey Pedro
embargar los bienes de todos los ingleses, alemanes Mesía de la Zerda para que le concediera la anuencia
y holandeses, sin excepción alguna y actuando con de profesar su sacerdocio en Cartagena ante la negativa
prudencia para evitar ocultaciones34. Varias décadas
después, el virrey Manuel Antonio Flórez conminó a
pena de muerte a quienes compraran armas a extran-
33 AGN, Real Hacienda 42, folios 724r-776v, 1699.
jeros y las vendieran a los “levantados enemigos de la
34 AGN, Reales Cédulas y Órdenes 3, folios 353r-354r, 1702.
Corona”35.
35 AGN, Milicias y Marina 140, folios 530r y v, 1776.
En especial, surgió un debate sobre los caudales de
36 AGN, Empleados Públicos-Miscelánea 20, folios 136r-147v,
foráneos fallecidos en estas tierras, saliendo a flote las 1734.
obvias protestas de los deudos damnificados. Trans- 37 AGN, Curas y Obispos 20, folios 3r-6v, 1703.
curría el año de 1744 en Mompós cuando falleció el 38 AGN, Reales Cédulas y Órdenes 17, folios 416r-417r, 1767.
médico don Francisco de Fontes, oriundo de Palermo 39 AGN, Milicias y Marina 112, folios 537r-543v, 578r-581v,
en el entonces Reino de Sicilia, y de inmediato, los 1768.

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Cuadro No. 1
Descripción de extranjeros en la provincia de Cartagena en 1751

Nombre Origen Años vecindad 2¿FLR Condición Expulsados


Andrés Pisso Génova - sastre casado en Europa x
Domingo Piano Génova 13 FRQ¿WHUR casado en Europa x
Francisco Bacaro Génova 3 bodeguero casado en Europa x
Lorenzo Bey Borgoña - pulpero casado en Europa x
Juan Bernardo Orissio Génova 11 zapatero casado en Europa x
Manuel Fernández Portugal 5 marinero casado en Europa x
Bernardo Lacleda - - - soltero x
Bartolomé Sansón Génova - - soltero x
Joseph Rapalin Génova - - soltero x
Juan Baptista Franco Cerdeña 1 pulpero soltero x
Vicente Dime Malta 1 marinero soltero x
Juan Baptista Noguera Francia 1 marinero soltero x
Domingo Liaña Génova - marinero soltero x
Juan Baptista Furpia Génova 6 marinero soltero x
Juan Antonio Cortechati Córcega 2 marinero soltero x
Antonio Díaz Portugal - zapatero VROWHURFRQR¿FLR
Antonio Galindo Génova 9 cerrajero VROWHURFRQR¿FLR
Joseph Busse Francia 7 armero VROWHURFRQR¿FLR
Juan Baptista Muss Génova 38 cocinero VROWHURFRQR¿FLR
Diego de Lis Irlanda 9 panadero VROWHURFRQR¿FLR
Bernardo de Mier Génova 13 pulpero VROWHURFRQR¿FLR
Juan Caduc Francia 13 marinero VROWHURFRQR¿FLR
Juan de Casanova Francia 38 pulpero VROWHURFRQR¿FLR
Joseph Escanavina Génova - pulpero VROWHURFRQR¿FLR
Pablo de Longo Sicilia 18 marinero VROWHURFRQR¿FLR
Francisco Misset Francia - pulpero VROWHURFRQR¿FLR
Juan Baptista Mozo Génova - cocinero VROWHURFRQR¿FLR
Phelipe Felian Génova - marinero VROWHURFRQR¿FLR
Francisco Baldiny Génova 26 comerciante casado con hijos
Nicolás Guilli Génova 26 comerciante casado con hijos
Pedro Blanco Génova 13 comerciante casado con hijos
Pedro de Grote Génova 11 labrador casado con hijos
Francisco Armani Génova 13 cocinero casado con hijos
Juan Baptista Buenseñorío Francia 14 pulpero casado con hijos
Antonio Mangones Nápoles 26 pulpero casado con hijos
Pedro Pablo Bareta Génova 26 farolero casado con hijos
Jerónimo Ojenes Génova 10 acerrador casado con hijos
Juan Pon Francia 20 amolador casado con hijos
Pedro de Amvila Génova 23 ganadero casado con hijos
Juan de Cadiz Francia 13 ganadero casado con hijos
Jácome Busson Génova 28 bodeguero casado con hijos
Francisco Chichón Francia 4 pulpero casado con hijos
Jácome Bolaños Génova 13 panadero casado con hijos
Juan Baptista Sanguineto Génova 30 pulpero casado con hijos
Francisco Belice Francia 13 bastimentador casado con hijos
Jácome Savona Génova 12 comerciante casado con hijos
Joseph Alegre Génova 25 fabr. aguardiente casado con hijos
Jácome Molinares Génova 28 marinero casado con hijos
Juan Baptista Crisol Sicilia 27 marinero casado con hijos
Bernardo Ricardo Génova 14 marinero casado con hijos
Francisco Revelo Génova 29 panadero casado con hijos
Juan Vidal Jurc Francia 30 cirujano casado con hijos
Antonio Bolcan Génova 26 hacendado casado con hijos
Joseph Insula Génova 12 cocinero casado con hijos
Domingo Fasete Génova 14 pulpero casado con hijos

Fuente: AGN, Empleados Públicos-Miscelánea, tomo 29, ff. 781r-824v.

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inicial del gobernador de esta ciudad. Mesía objetó la se preparó un navío de guerra y otro llamado “Grande
petición y, por lo tanto, no se le dio chance ni siquiera Alejandro”, aunque con demoras en el traslado debido
de desembarcar40. al insuficiente cupo por la cantidad de presos y viajeros
La cédula del 20 de enero de 1750, en seguimiento en espera de traspasar el Atlántico.
de otra norma expedida catorce años atrás, recordó De igual manera, se elaboró una tercera lista con los
de nuevo las barreras para el paso de extranjeros sin que tenían oficios útiles, lo que de hecho los exceptuaba
licencia y que, aquellos que la tuvieren, no podían legalmente de ser deportados. Dentro de este grupo
adentrarse allende las costas. Desde luego, aún regía había trece solteros y veintisiete casados con hijos,
la excepción para los dedicados a oficios mecánicos entre los cuales tres conservaban carta de naturaleza:
útiles que se situaran en parajes no sospechosos. En Francisco Baldiny, Nicolás Guilli y Pedro Blanco. De
desarrollo de esta directiva, se publicaron bandos en esta descripción se concluyó que más de la mitad eran
todas las provincias del Reino para evacuar a los ilegales genoveses, seguidos por los franceses. Un buen número
en el término de dos meses sin derecho de réplica y llevaba ya largo tiempo de residencia llegando incluso
con la obligación de zarpar de Cartagena en la primera a superar los treinta años de vecindad.
ocasión. Las autoridades debían especificar el trato y Al francés don Luis Arnaldo Machendi, al irlandés
comercio de cada uno, decomisar todos sus bienes y don Thomás Doran y al portugués don Paulino Franco
pasarlos a depósito por cuenta de los oficiales reales para de Acosta, residentes allí temporalmente para el despa-
después remitirlos a España. Se aceptaba asimismo la cho de los géneros del navío San Pedro proveniente de
colaboración de denunciadores sobre eventuales bienes Lisboa, se les confirió permiso por unos cuantos días
ocultos41. mientras terminaban de recoger los caudales dispersos,
Don Ignacio Sala, gobernador de Cartagena, en pero vigilando eso sí que no adelantasen negocios
carta despachada al Marqués del Villar informó que, distintos al autorizado, abusando así de la benignidad
en atención a la ley en cuestión, había dado instruccio- del indulto. Los franceses don Pedro Carrera y don
nes a las justicias de su ciudad y de las jurisdicciones Juan de San Guillén que estaban en Nueva Calidonia
de Mompós, Tolú, San Benito, Ayapel y Simití, para fueron remitidos a Portobelo con custodia oficial y otro
empadronar a los extranjeros. Gracias a los reportes
locales se confeccionó la lista (ver cuadro No. 1) en la
cual fueron contados seis casados en Europa y nueve
solteros de quienes se dijo: “…urgía mucho su retorno a 40 AGN, Milicias y Marina 115, folios 950r y v, 1765.
España por la mala vida que llevaban acá”42, imponién- 41 AGN, Milicias y Marina 112, folios 867r-873, 1750.
doles pena si no se acogían ese llamado. Para el efecto, 42 AGN, Empleados Públicos-Miscelánea 20, folio 150v, 1751.

Cuadro No. 2
Lista de extranjeros en la provincia de Santa Marta hacia el año de 1784

Nombre Origen Años vecindad 2¿FLR


Manuel Fernández Portugal 60 arriero
Benito Pacheco Portugal 11 marinero
Thomas Molina Francia 32 carpintero
Juan Miguel Marcial Francia 16 cocinero y pulpero
Elías Box Francia 20 carpintero
Thomás María Esmerialdi Génova 40 pulpero y bodeguero
Francisco Dorado (mulato) Curazao 20 marinero
Juan Conrado Génova 20 leñatero
Agustín Pagani Roma - botonero

Fuente: AGN, Empleados Públicos-Miscelánea, tomo 31, ff. 599r y v.

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más recibió licencia para dirigirse a Santo Domingo en no buscar amparo en caso de prisión, expulsión abso-
donde también sería objeto de extremo control. luta o confiscación de bienes.
Si se traza una línea comparativa de este registro A los transeúntes sólo se les habilitaba permane-
con el de 1630, se puede deducir que la cantidad de cer bajo licencia dentro de unos márgenes de tiempo
extranjeros había decrecido hasta en un 70. Esta cifra definidos, según el motivo y calidad de la persona.
es muy diciente, toda vez que esta ciudad amurallada Quedaban además inhibidos para ejercer “artes liberales
era la que alojaba aún al mayor número de ellos. u oficios mecánicos” sin antes avecindarse, y por consi-
Hacia 1769 fue embarcado con destino a España guiente, no podían ser mercaderes, sastres, peluqueros,
el médico danés Alejandro Ambemberje, por haber zapateros, médicos, cirujanos, arquitectos, criados
ingresado maliciosamente43. Diez años después, Anto- o sirvientes, a menos que existiera un aval expreso
nio de Narváez y La Torre, gobernador de Santa Marta, del Rey. A los que fueran sorprendidos atareados en
enteró al virrey Manuel Antonio Flórez sobre la licencia estas ocupaciones tendrían dos meses para salir o, de
proveída al súbdito francés Juan Vielle para viajar a la lo contrario, deberían emprender las diligencias para
capital con sus dos esclavos, a fin de presentarse ante establecerse de manera oficial. Asimismo, se mandó
las autoridades para ajustar unas cuentas de negocios44. revisar con sumo cuidado la entrada de nuevos extran-
Cinco años más tarde, este mismo gobernador informó jeros manteniendo en vigencia los tratados suscritos
sobre las diligencias coordinadas en su provincia en lo con algunas potencias extranjeras sobre negocios y
atinente a la orden de expulsión. Tal como lo muestra circulación de personas45.
el cuadro que se incluye a continuación, se anotaron Uno que apareció ese año solemnizando juramento
nueve extranjeros sin licencia ni carta de naturaleza, en Cartagena fue el extranjero don Juan Baptista
sin embargo se autorizó su estada en razón a que se Motraya46. Adicionalmente, el gobernador de esa
dedicaban a ocupaciones útiles. Todos ellos llevaban ciudad, don Joaquín de Cañaveral, informó que hasta
largo tiempo de estar avecindados, casados y hasta ese instante la conducta del joven francés Antonio
con nietos. Gillebert había sido intachable y que estaría atento a
Adicionalmente, Narváez puso en conocimiento cualquier proceder sospechoso que advirtiera en él o
que había varios soldados extranjeros dispuestos en la en otro de sus coterráneos47.
defensa de las principales plazas costeras. Con miras a Pero después de toda esta descripción histórica, es
normalizarles su condición, se esgrimió la necesidad de relevante aclarar que no todas las voces se inclinaban
dar vía libre a quienes quisieran casarse y establecerse por la prohibición y el estricto control. En el extenso
en estos dominios, todo esto para beneficio del Imperio catálogo de críticas señaladas a finales del siglo XVIII
y de ellos mismos. Pero para llevar a cabo estas unio- por el intelectual sangileño Pedro Fermín de Vargas,
nes era prioritario resolver previamente el dilema del en relación con los factores que impedían el progreso
consentimiento paterno. Sobre el resto de milicianos se del Reino, estaba la permanencia de vastos territorios
pensaba que lo más adecuado era su destierro. sin gentes que los aprovechasen. Por eso, destacó los
En 1791 se emitió en Madrid una cédula en la que beneficios que tendría extender aquí la medida que
se mandaba a la justicia hacer registro “con claridad y franqueaba el paso de extranjeros a España, una opción
sin tergiversación” de los extranjeros residentes en esos para mitigar la crónica despoblación.
Reinos con distinción de transeúntes y domiciliados. Según su percepción, más que los gastos per se, la
Se hizo énfasis en que tiempo atrás la Junta de Extran- cuestión era ensayar oportunidades. Por eso, insistió en
jeros -incorporada a la de Comercio- había recibido la posibilidad de superar la “insociabilidad” y hacer así
esa misma orden pero sin ejecutarla con exactitud en
todos los pueblos, lo cual se prestaba para que algunos
se aprovecharan dolosamente de los privilegios otor- 43 AGN, Milicias y Marina 113, folios 595r-596v, 1769.
gados. Los avecindados debían ser católicos y hacer 44 AGN, Milicias y Marina 115, folios 706r y v, 1779.
juramento de fidelidad a la Religión y al Soberano, 45 AGN, Milicias y Marina 112, folios 513r-516v, 1784.
renunciando a todo fuero de extranjería y a cualquier 46 AGN, Milicias y Marina 113, folio 1.044r, 1784.
lazo de dependencia con el país de origen, prometiendo 47 AGN, Milicias y Marina 115, folios 947r y v, 1784.

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más diverso el poblamiento en el Nuevo Reino: “Abra- BIBLIOGRAFÍA
mos nuestras posesiones, deroguemos las leyes que lo
impiden, y se verá florecer la América, sin necesidad de Archivo General de la Nación -AGN. Cedulario de la
otra operación”48. El derrotero era entonces convidar Real Hacienda, Curas y Obispos, Empleados Públicos,
a otros países a que se fijaran en las potencialidades de Milicias y Marina, Real Hacienda, Reales Cédulas y
nuestras tierras. Órdenes, Virreyes.

Reflexiones finales LIBROS Y ARTÍCULOS DE REVISTAS

En términos generales, puede afirmarse que la emi- Becker, Jerónimo. El Nuevo Reino de Granada en el siglo
gración extranjera hacia las provincias de Cartagena y XVIII. Madrid, Biblioteca de Historia Hispano-
Santa Marta estuvo marcada más que todo con el signo americana, 1921.
de la clandestinidad, lo cual se convierte además en un Castillo Mathieu, Nicolás del. La llave de las Indias.
obstáculo metodológico toda vez que impide develar la Bogotá, El Tiempo, 1981.
verdadera magnitud de este fenómeno social. Friede, Juan. Fuentes Documentales para la Historia del
Como bien se ha podido comprobar en los relatos Nuevo Reino de Granada. Bogotá, Banco Popular,
aquí revisados, diversas fueron las valoraciones sobre 1976, tomos IV y V.
el papel que cumplió esa minoría y sobre su injerencia Lucena Salmoral, Manuel. “Presidentes de Capa
en la economía y en el devenir histórico del marco y Espada 1605-1628”. En: Historia Extensa de
territorial objeto de este estudio. Pero lo único cierto Colombia, volumen III, tomo 2, Bogotá, Ediciones
es que tanto celo y control ejercidos por la Corona Lerner, 1967.
española pudieron eventualmente desestimular el libre Morales Alvarez, Juan. Los extranjeros con carta de
desarrollo y aplicación de sus aportes y experiencias al naturaleza de las Indias durante la segunda mitad
servicio de dichas provincias. del siglo XVIII. Caracas, Academia Nacional de la
Después de todo, no hay que negar que esos prime- Historia, 1980.
ros grupos de extranjeros llegados en los tiempos de la Recopilación de Leyes de los Reynos de las Indias. Madrid,
Colonia, sumados a los arribados después, propiciaron Ediciones Cultura Hispánica, 1973, tomo IV.
de algún modo una mayor convivencia con lo foráneo Rincón, Natalia. “Árabes y judíos en Colombia: un
y abonaron el rumbo para un diálogo más abierto con modelo de integración social”. En: Memoria y
el mundo, realzándose la importancia de ser vistos Sociedad. Bogotá, Universidad Javeriana, volumen
por otros. Sin duda, contribuyeron a sentar las bases 7, No. 13, noviembre de 2002.
para moldear una región más pluralista, tolerante y Saether, Steinar. Identidades e Independencia en Santa
multifacética. Marta y Riohacha, 1750-1850. Bogotá, Icanh,
Ya en las venideras décadas republicanas emerge- 2005.
ría la ciudad de Barranquilla como el epicentro que Silvestre, Francisco. Descripción del Reyno de Santa
serviría de principal entrada y sitio de acogida para las Fe de Bogotá. Bogotá, Universidad Nacional de
posteriores olas de foráneos. a Colombia, 1958.
Vargas, Pedro Fermín de. Pensamientos Políticos. Siglos
XVII-XVIII. Bogotá, Procultura, 1986.
Vila Vilar, Enriqueta. “Extranjeros en Cartagena (1593-
1630)”. En: Aspectos sociales en América Colonial.
Bogotá, Instituto Caro y Cuervo, 2001.
Violi Botta, Roberto. Biografías y relatos de italianos en
Colombia. Bogotá, Grupo Generali, 1995.

48 Pedro Fermín de Vargas (1986: 140-141).

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h ist o ria

Abastecimiento y hambre en la conquista


de Cartagena de Indias
María Salud Elvás Iniesta

1.- Cartagena, tierra de rescates. Las pri-


meras expediciones al territorio.
Cartagena de Indias fue, antes de su conquista
definitiva y durante gran parte de la misma, tierra de
rescate, al igual que el resto de la zona caribeña. Como
bien dijo Hermes Tovar: “el rescate como modelo de
extracción de riquezas fue propio del Caribe”1. Una forma
de intercambio, el rescate, que alteraría el tradicional
sistema de trueque con que comerciaban los indígenas 1  Hermes Tovar Pinzón, La estación del miedo o la desolación
dispersa. El Caribe colombiano en el siglo XVI, Santa Fe de Bogotá,
de Cartagena y de todo el continente2. Ariel, 1997: 52. Otras obras reseñables son también: Mario Góngora,
Este carácter de tierra de rescate que Cartagena tuvo Los grupos de Conquistadores en Tierra Firme, 1509-1530: Fisonomía
durante tantos años impidió que se tuviera, hasta muy histórico social de un tipo de conquista,. Santiago de Chile, Editorial
Universitaria, 1963; Guillermo Céspedes, “Oro y hambre: estímulos
avanzado el siglo, un conocimiento real y fiable de las y frenos en el doblamiento español de América”, en Homenaje
posibilidades económicas que la región ofrecía, salvo la académico a D. Emilio García Gómez”, Madrid, Real Academia de
extracción de oro y la captura de indios. Las expedicio- la Historia, 1993; José Durand, La transformación social del Con-
nes a la zona, lejos de buscar un asentamiento estable y quistador, México, Porrúa y Obregón, 1953; Demetrio Ramos Pérez,
Audacia, negocios y política en los viajes españoles de descubrimiento y
de la explotación económica del territorio, tenían como rescate, Valladolid, Casa-Museo de Colón y Seminario Americanista
único objetivo la búsqueda de oro, alimentos, perlas e de la Universidad de Valladolid, 1981
indios para vender luego como esclavos, en virtud de 2  Carmen Gómez Pérez. Apuntes sobre la sociedad y la vida
una provisión dada por la reina Isabel el 30 de octubre cotidiana en Cartagena de Indias, 1533 – 1580 (en prensa). Agradezco
a la Dra. Gómez me haya permitido consultar el borrador de este
de 1503, por la cual se autorizaba a capturar y esclavizar nuevo libro para completar el presente trabajo.
a los indios de “las islas de San Bernardo e Isla Fuerte y 3  Barú
en los puertos de Cartagena y en las islas de Bara3, donde 4  Real Provisión para que los indios caribes se puedan tomar
estaba una gente que se dice caníbales”4. En ocasiones, la por esclavos. 30 de octubre de 1503. AGI, Indiferente General, 418,
negativa de los indios a aceptar los intercambios con los Libro 3, fol.211v. Recogido por Richard Konetzke, Colección de
españoles sirvió de excusa para proceder a su captura y Documentos para la Historia de la Formación Social de Hispanoamé-
rica, 1493 – 1810, vol. I, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones
esclavización. De este modo, de todas las expediciones Científicas, 1953: 31 – 33.

a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7 27


que se organizaron para recorrer la zona ninguna pre- Corona libertad para tomar indios esclavos del puerto
tendía establecer un asentamiento sólido y menos aún de Cartagena y de las islas de Barú, San Bernardo e isla
buscar un aprovechamiento económico que permitiera Fuerte para llevarlos a La Española9.
evolucionar desde esa economía de rescate hasta un Sin embargo, ambas expediciones resultaron un
modelo económico más estable. Todas ellas, además, auténtico fracaso debido a los enfrentamientos que
se encontraron con un gran inconveniente, que se mantuvieron no sólo contra los indios, sino también
convertiría en una constante: la falta de alimentos y, en contra el hambre y las enfermedades que acabaron con
consecuencia, la aparición del hambre que en algunas un buen número de hombres. Tras un duro enfrenta-
ocasiones puso a los españoles en más de un apuro. miento con los indios de Turbaco, que le costó la vida
De las expediciones anteriores a la definitiva de entre otros a Juan de la Cosa, Ojeda marchó hacia el
Pedro de Heredia5, se tienen pocos datos referidos a los oriente con el fin de afianzar los límites de su gober-
productos llevados en los barcos. En líneas generales, nación y llegado al Golfo de Urabá en 151010 fundó la
los barcos iban cargados de vino, bizcocho, aceite, carne primera ciudad de San Sebastián, donde estuvo varios
salada, pescados varios, quesos, legumbres, huevos, meses en los que pasó mucha necesidad. Los indios
así como algunos animales vivos para ser sacrificados además se mostraron muy reacios a la presencia de los
durante la travesía con el fin de contar con carne fresca españoles y tuvieron muchos enfrentamientos. Todos
para los tripulantes y alguna fruta, empleados tanto los días, Ojeda y sus hombres organizaban expediciones
para la alimentación del pasaje como para el sustento de para saquear los pueblos cercanos y tomar alimentos
los hombres una vez desembarcados y para el comercio con los que poder mantenerse. Sin embargo, algunas
con las incipientes ciudades americanas6. derrotas sufridas ante los indios los obligaban a retirarse
De entre los pocos datos que conocemos sobre el y esconderse por varios días, dando lugar así a la apa-
abastecimiento de estas primeras expediciones, se sabe, rición del hambre y las enfermedades, que fueron de
por ejemplo, que en la primera expedición de Alonso algún modo aliviadas con la llegada de un barco cargado
de Ojeda, los españoles hicieron una primera escala en de bastimentos desde La Española, pero que pronto
la isla de Lanzarote, con la intención de aprovisionarse fueron consumidos11. A esta belicosidad indígena se
de bastimentos en casa de Doña Inés Peraza, aunque la
hallaron cerrada. Aún así entraron en la casa y tomaron
aquellas cosas que consideraron necesarias: pipas, cal-
deras, pez y sebo, jarcias, madera y cebada, entre otras7. 5  Como expediciones confirmadas y tenidas por ciertas por
El viaje de Rodrigo de Bastidas a la región, que partió los especialistas, se encuentran las de Alonso de Ojeda entre 1499
de España el 15 de junio de 1500 y llegó a Cartagena al y 1500, la de Rodrigo de Bastidas en 1500 y la de Ojeda y Diego
año siguiente, se aprovisionó en La Gomera de deter- de Nicuesa en 1508.
minados bastimentos como leña, carne, agua, quesos y 6  Entre los principales estudios sobre el avituallamiento de
los barcos destacan: Pablo Emilio Pérez-Mallaína, Los hombres del
otros alimentos8. Durante el recorrido, Bastidas rescató Océano, Sevilla, Diputación de Sevilla, 1992 y Mª del Carmen Mena
todas las mercadurías posibles, para vender luego en las García, Sevilla y las Flotas de Indias. La Gran Armada de Castilla
islas y regresó a La Española. del Oro (1513 – 1514), Sevilla, Universidad de Sevilla y Fundación
El Monte, 1998.
Hasta el año 1508 no se tienen nuevas noticias
7  Ramos, op. cit: 42.
fiables sobre la llegada de españoles a la costa colom-
8  Francisco Morales Padrón, Historia del Descubrimiento y
biana. El 9 de junio de ese año, la Corona capitulaba Conquista de América, Madrid, Gredos, 1990: 149
con Alonso de Ojeda y con Diego de Nicuesa la 9  Gonzalo Fernández de Oviedo, Historia general y Natural
colonización de Tierra Firme. A Ojeda le concedía de Las indias, Madrid, Atlas, 1959, Libro XVIII, capítulo III (tomo
la zona desde el Golfo de Urabá hacia el Cabo de la 3: 137)
Vela, la cual incluía Cartagena, dándole el nombre de 10  Morales Padrón, op. cit: 186
Nueva Andalucía, mientras que para Nicuesa quedaba 11  Joaquín de Acosta, Compendio Histórico del Descubrimiento
la gobernación de Castilla del Oro, desde el Golfo de y Conquista de la Nueva Granada [en línea]. Publicación digital en
la página web de la Biblioteca Luís Ángel Arango del Banco de la
Urabá hacia el occidente, ambas divididas por el río República: http://lablaa.org/blaavirtual/historia/descol/indice.htm
Darién. Los capitulantes obtuvieron por parte de la [Fecha de consulta: 2 de febrero de 2006]

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Itinerario de la expedición de Rodrigo de Bastidas, 1500 (Ramos, pp.160-161)

unió, como ya se ha visto, el hambre, pues se esperaba ñoles a recoger hierbas y raíces que encontraban en
el arribo de un barco con mantenimientos capitaneado los parajes cercanos para no morir de inanición. Sin
por Fernández de Enciso, pero como éste no llegaba, embargo, algunos encontraban igualmente la muerte
Ojeda embarcó rumbo a La Española, dejando en por tomar algunos productos que resultaron vene-
Urabá a Francisco Pizarro y a otros pobladores con nosos13, de manera que decidieron fletar dos barcos y
órdenes expresas de que, si no regresaba, fletaran dos regresar a Santo Domingo. Por el camino, encontraron
naos y marcharan a La Española. Una vez en Santo los restos de la nao de Enciso encallada en unos bajos,
Domingo, Ojeda no pudo encontrar el barco de Enciso, lo recogieron a él y a sus hombres y fueron camino al
porque ya había partido y decidió permanecer allí,
donde murió a causa de una herida de la pierna12.
Mientras, los españoles que habían quedado en
12  Fernández de Oviedo, op. cit., Libro XXVII, capítulo IV
Urabá con Pizarro pasaron muy malos momentos (tomo 3: 142)
debido a los enfrentamientos con los indios y el 13  Pedro Cieza de León, La Crónica del Perú, Buenos Aires,
hambre, problemas ambos que obligaron a los espa- Espasa – Calpe, 1945: 58

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Darién para intentar obtener oro y alimentos, abando- Pero como ya se ha comentado, Cartagena no fue
nando así el primer asentamiento español de Urabá. En sólo tierra de rescates, sino también centro de captura
el Darién, se encontraron con los supervivientes de la de los indios, que posteriormente eran vendidos en
expedición de Nicuesa, que también habían sufrido los las Antillas para trabajar en los trapiches e ingenios de
fieros ataques del hambre durante su recorrido por las azúcar o en el servicio doméstico. Tal vez el episodio
costas de Veragua, Portobelo y Nombre de Dios14 y el más importante que confirma este hecho fue la entrada
auxilio que necesitaban pues los indios que habitaban que Rodrigo de Bastidas, convertido ya en gobernador
la zona eran agricultores, fundando la ciudad de Santa de Santa Marta, efectuó a las tierras cartageneras en
María de la Antigua en 1510, sobre un antiguo poblado 1525, saqueando la isla de Carex y tomando como pri-
indígena15. Como puede verse, el fenómeno de la crisis sioneros a más de 500 indios que fueron vendidos como
alimentaria no fue exclusivo de Cartagena y todas las esclavos en las islas18. No fue éste el único caso en que
primeras expediciones hacia las tierras americanas lo los españoles, ya avanzado el siglo XVI, se enriquecieron
sufrieron en mayor o menor medida. El nuevo gober- con la venta de esclavos indios. En 1538, el Licenciado
nador de la zona, Pedrarias Dávila16, organizó varias Juan de Santa Cruz investigó una acusación vertida
expediciones a la antigua gobernación de Ojeda, sin contra Juan de Vadillo, por haber vendido masivamente
conseguir éxito en ninguna de ellas, y obteniendo, indios como esclavos. Y en la década de 1520, Nuño
como único resultado, la muerte de muchos hombres Beltrán de Guzmán había llegado a cambiar indios del
y ningún rastro de riquezas17. Panuco (México) por caballos19.
Las sucesivas expediciones, que tuvieron lugar entre
1526 y 1527, con salida de La Española hacia Santa
Marta y Cartagena, siguieron teniendo como único
objetivo obtener riquezas y capturar esclavos y no la
14  Gómez, op. cit. colonización del territorio20.
15  Carmen Mena García, “La frontera del hambre: constru-
yendo el espacio histórico del Darién”, en Revista Mesoamérica, nº
45, enero – diciembre de 2003: 48 2.- El problema de la alimentación en la
16  Fernández de Oviedo, op. cit., Libro XXVII, capítulo IV Conquista de Cartagena
(tomo 3: 143)
17  Carmen Gómez Pérez, Pedro de Heredia y Cartagena de El 5 de agosto de 1532 se firmaba en Medina del
Indias, Sevilla, Escuela de Estudios Hispanoamericanos, 1984: 7 Campo la primera Capitulación con Pedro de Here-
18  Probanza hecha contra Rodrigo de Bastidas. Santa Marta, dia21. Entre las numerosas cláusulas que dicha capitu-
7 de junio de 1527. AGI, Justicia, 1123, L.1, fol.6. Recogido por
Juan Friede, Colección de Documentos Inéditos para la Historia de
lación contenía, las más relevantes para este trabajo
Colombia, tomo 1, Bogotá, Academia Colombiana de la Historia, son aquellas que buscaban promocionar el desarrollo
1955 – 1960, p.230. Fernández de Oviedo, op. cit., Libro XXVI, agrícola y ganadero de la nueva gobernación. Desta-
capítulo III (tomo 3, p. 67). El cronista explica en su obra que este camos la concesión de la facultad para efectuar un
episodio fue el causante de que perdiera su condición de Gober-
nador de Cartagena, a pesar, como él mismo dice, que nunca llegó repartimiento de tierras, y las prerrogativas concedidas
a estar en ella. para la construcción del primer ingenio de azúcar en la
19  Agradezco a la Dra. Justina Sarabia, Profesora Titular del gobernación. En este sentido, la Capitulación firmada
departamento de Historia de América de la Universidad de Sevilla, con Pedro de Heredia no difería mucho de otras dadas
la aportación de este dato sobre los actos de Nuño de Guzmán en
Panuco.
con anterioridad, como la establecida con Antonio de
20  Gómez, Pedro de Heredia…: 9
Sedeño para la isla Trinidad, la cual tuvo como referen-
21  Capitulación con Pedro de Heredia. Medina del Campo, 5
cia22, y parece que sirvió de base para otras posteriores,
de agosto de 1532. AGI, Indiferente General, 415, fols. 65 a 68. como las de Jerónimo de Aguayo para el Amazonas
22  Carta del Consejo de Indias al Rey. Medina del Campo, y el Orinoco en 1552, o la de Juan de Irala en 1556,
3 de diciembre de 1531. AGI, Indiferente General, 737. Recogido puesto que en ellas se recogían las mismas premisas
por Friede. op. cit., tomo 2: 243 y mandatos de la Corona sobre el establecimiento de
23  Justo L. del Río Moreno, Los inicios de la agricultura europea ingenios y granjerías23. En las capitulaciones de Sedeño
en el Nuevo Mundo, 1492-1542, Sevilla, ASAJA-Sevilla, Caja Rural
de Huelva y Caja Rural de Sevilla, 1991: 325 y Heredia el texto referente al reparto de tierras y a la

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construcción de ingenios es idéntico: el 26 de septiembre de 1539, respectivamente, al Licen-
ciado Juan de Santa Cruz, por entonces gobernador de
… Habido respeto a los gastos que en lo susodicho Cartagena, autorizándole a llevar cañas de azúcar a la
se ofrecieren e a la voluntad de nos servir con que a gobernación y plantarlas allí28, y ordenándole al Obispo
aquellos os movéis es nuestra merced e voluntad que de Cartagena que proveyera todo lo necesario, incluida
habiendo disposición en la dicha ysla24, tengáis en ella la concesión de tierras, para la creación de un ingenio
todas las granjerías así de ganados y labranzas y todas de azúcar en Turbaco29.
las otras cosas que tienen en la dicha ysla Española e La expedición de Pedro de Heredia, que zarpó de
San Juan… e ocupar todas las tierras que para esto fuera Sanlúcar de Barrameda el 29 de septiembre de 153230,
menester. E así mismo al primero ingenio de azúcar que llegó a la isla de La Gomera el 11 de octubre, donde
hiciésedes en la dicha ysla25 sea libre por vuestra vida y permaneció varios días tratando de conseguir víveres
la de un heredero de todos los pechos e derechos. E que en dicha isla y en la vecina La Palma. De allí fueron
así mismo para el dicho ingenio podáis llevar de estos rumbo a Puerto Rico, donde se produjo una primera
reinos e de las Yndias todas las herramientas de hierro incorporación de hombres a la hueste, hombres que
que sean necesarias sin pagar derechos de Almojarifazgo habían quedado en la isla tras la fracasada expedición
no otros derechos e de todo lo demás necesario al dicho de Sebastián Caboto al Río de la Plata. La siguiente
ingenio hasta estar acabado para moler de herramien- escala fue Azua, en Santo Domingo donde, como ya se
tas e otros materiales e que los otros ingenios que se ha comentado, Heredia poseía un ingenio de azúcar en
hiciesen en la dicha ysla tengan la libertad que tienen sociedad con Damián de Peralta, y donde se produjo un
los de la ysla Española26… nuevo aumento del contingente humano, procedente
al parecer de las huestes de Diego de Ordaz y Sedeño31.
Este punto de la Capitulación nos demuestra que Las escalas de este viaje fueron igualmente aprovecha-
las intenciones de la Corona iban más allá de la mera das para reponer alimentos y bastimentos, sobre todo
obtención de riquezas, como había ocurrido en otras caballos, cuyos gastos fueron sufragados con la venta
ocasiones, premiando al conquistador el intento de de esclavos indios32.
establecer una colonización más o menos permanente Desde el mismo momento en que los españoles
en el territorio. El modelo elegido para esta ocupación desembarcaron en Cartagena, se encontraron con un
estable de las nuevas tierras fue el de la Isla Española, enorme problema: la falta de agua. Un problema del
es decir, un asentamiento español sobre las bases eco- que el propio Heredia fue consciente al atracar en Cara-
nómicas de los ingenios de azúcar, además de la cría mari, por lo cual decidió reconocer las zonas próximas
de ganado y otras actividades. Pedro de Heredia poseía
un trapiche de azúcar en la villa de Azua, en la isla de
La Española, y otros muchos capitulantes eran señores
de ingenios en las islas. En este sentido, el deseo de la 24  En la Capitulación de Heredia dice “en la dicha tierra”
Corona fue trasplantar este sistema económico, que 25  En la Capitulación de Heredia dice “en la dicha provin-
cia”
generaba ingresos para ella, asegurando también un
26  Asiento y Capitulación con Antonio Sedeño. Madrid, 12
modo de subsistencia para los nuevos pobladores. Sin de julio de 1530. AGI, Patronato, 18, N.9, R.1
embargo, durante los primeros años del asentamiento 27  Del Río Moreno, Los inicios de la agricultura…, p. 327.
español en Cartagena, las intenciones de la Corona 28  Cédula al Licenciado Santa Cruz. Valladolid, 7 de diciembre
tuvieron poca repercusión, pues sin duda alguna resul- de 1537. AGI, Santa Fe, 987, Libro 2, fol.26v. Recogido por Friede,
taba mucho más rentable continuar con las inversiones op. cit., tomo 4: 272
en Santo Domingo como hizo, según Justo del Río, 29  Cédula al Obispo de Cartagena. 26 de septiembre de 1539.
Heredia con su trapiche en Azua, sin que haya cons- AGI, Santa fe, 987, Libro 2, fol.87. Ibíd., tomo 5: 246
tancia documental de que explotara ingenio alguno 30  Gómez, Pedro de Heredia: 31
en Cartagena y se dedicó sobre todo al rescate casi 31  Ibid.: 32
de manera compulsiva27. Por este motivo, la Corona 32  Justo del Río Moreno, Guerreros y ganaderos. Caballos y
équidos españoles en la conquista y colonización de América, Sevilla,
remitió dos reales cédulas el 7 de diciembre de 1537 y ASAJA- Sevilla, 1992: 129

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en busca del lugar más adecuado para el establecimiento Sin embargo, la falta de agua no fue sino de uno
de la ciudad principal “porque en toda esta bahía no más de los problemas que la hueste de Don Pedro
se ha podido hallar agua que corra”33, a pesar de que encontró a su llegada a la bahía de Cartagena. Tras
finalmente la ciudad se emplazaría en el primer lugar desembarcar, Heredia organizó una expedición de
establecido. La falta de agua sería un problema que per- reconocimiento del terreno en busca del lugar más
seguiría a la ciudad durante todo el siglo XVI. En 1536, apropiado para asentarse y fue entonces cuando comen-
Juan de Vadillo informaba de la necesidad de cambiar zaron los problemas derivados de la falta de alimentos.
la ubicación de la ciudad a un lugar “sin tanta falta de En busca de zonas ricas en oro, Heredia y sus hombres
agua”. De igual modo se expresaron algunos de los veci- anduvieron una buena parte de la gobernación en busca
nos principales de la ciudad en 1537, que presentaron de rescates con los indígenas, pero en muchas ocasiones,
dos alternativas: cambiar la ciudad de emplazamiento y a falta del ansiado metal, no tuvieron más remedio
o bien construir un canal que sirviese para llevar agua que aceptar el rescate de alimentos. En el pueblo de
a la ciudad que ya estaba establecida. El primer intento Canapote, Heredia no permitió que sus hombres
de trasladar agua a la ciudad desde el arroyo Matute tomaran de dicho pueblo nada que no fuera comida
fracasó porque el Consejo de Indias no respondió ni que, en palabras del cronista Fernández de Oviedo,
afirmativa ni negativamente a esta solicitud y la ciudad era cosa que no se podía excusar35. Sin duda, la sombra
tuvo que subsistir con el agua almacenada en pozos y del hambre ya había hecho aparición. Posteriormente
aljibes, llamados jagüeyes. Y más avanzado el siglo, en siguieron reconociendo el terreno, pero debido a las
1565, el tema del agua seguía creando polémica. Ese año malas condiciones de la tierra, plagada de ciénagas,
se dio aprobación para la construcción de un canal que estancos y atolladeros, se encaminaron hacia Turbaco,
trasladara agua a la ciudad y así parecía que se iba a donde tuvieron el primer encuentro armado con los
hacer, pues un año más tarde se estableció un impuesto naturales.
especial, o sisa, sobre determinadas mercancías que Una vez repuestos de este enfrentamiento, Pedro
llegaban a la ciudad, que ayudara a sufragar dicho de Heredia y sus hombres continuaron su camino,
traslado desde Turbaco. Sin embargo, surgieron muchas pasando por Tegoa donde encontraron maíz, pescados,
voces discordantes, pues según los comerciantes de gallinas y otros alimentos, así como mucha agua, y por
Santa Fe el impuesto no iba a parar directamente a las Chagoapo, donde los indios les obsequiaron con más
obras del canal, sino a los bolsillos de algunos vecinos, alimentos. El cronista Oviedo describe que en el camino
acusación que siempre fue rechazada desde Cartagena. hacia Zamba, llegaron a un lugar en el que encontra-
A pesar de todo el impuesto volvió a subir en 1583 a ron agua potable, algo “que no fue poco placer para su
razón de dos pesos por cada negro de servicio o esclavo gente, y socorro grande de su sed, y a la de sus caballos,
que llegara a la ciudad, medio peso por cada pipa de porque desde Calamar hasta allí no la había hallado ni
vino y un uno por ciento del valor de cada una de las habían bebido”36. Posteriormente, pasaron por Zamba,
demás mercancías, “a excepción de la carne, cuyo precio lugar que Heredia no consideró apto para asentarse de
en la ciudad ya era suficientemente alto”34. Las constantes manera estable, “porque el puerto es bajo a la entrada
subidas de los impuestos no agradaban a todos y un que no tiene más de braza y media, y aunque es la más
grupo de vecinos se quejaba en 1585 de que las obras
del canal de Turbaco no acabarían nunca y sólo servían
para enriquecer a unos cuantos vecinos influyentes.
Finalmente, el canal nunca se terminó. Durante la 33  Carmen Gómez Pérez, “La ciudad sin agua. Los poderes
colonia, el proyecto del mismo se quedó en una gran públicos y el canal de Turbaco a fines del siglo XVI”, en Revista
Historia y Cultura, nº 4. Cartagena de Indias, Facultad de Ciencias
cantidad de disputas, bien con la Audiencia de Santa Fe, Humanas, Universidad de Cartagena, , diciembre de 1996: 290
bien entre los propios pobladores, muchos de los cuales – 292
aumentaron sus riquezas con el dinero recaudado de 34  Ibid., p.306
los impuestos. Y la ciudad continuó abasteciéndose de 35  Fernández de Oviedo, op. cit., Libro XXVII, capítulo V
agua como la había estado haciendo desde que llegara (tomo 3, p.145)
a ella Pedro de Heredia en 1532. 36  Ibid., Libro XVII, capítulo VI (Tomo 3: 149 – 150)

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fértil tierra que hay en el mundo y más poblada, no hay sesenta cristianos”42. Esto, unido a la dificultad del
buena disposición para hacer un pueblo”37. Desde allí el terreno y a las abundantes lluvias, hizo al gobernador
gobernador envió a sus hombres por las zonas próximas desistir de su propósito y tomar la decisión de retornar
en busca de alimentos y de alianzas con los indios. En al Cenú43.
algunos pueblos fueron acogidos pacíficamente, reci- Sin embargo, la vuelta al Cenú no hizo sino
biendo de los indios oro y comidas con que sustentarse. aumentar el cada vez más creciente descontento de los
Éste fue el caso de Mangoa, primer pueblo en el que hombres hacia el gobernador. Una vez allí, Pedro de
según Fernández de Oviedo los españoles recibieron Heredia se negó al requerimiento de algunos españoles
oro y fueron agasajados con aves, pescados, pan, vino de fundar una población en el Cenú, argumentando
y yuca. Similares situaciones se dieron en otros asen- la escasez de alimentos de la tierra44. Con esta misma
tamientos indígenas: Calapa, donde les dieron oro y excusa, además, mandó desde el Cenú a algunos hom-
comida, Milto, Migagar, Carnapacoa, Timiriguaco…38. bres a buscar alimentos por las zonas cercanas, pues la
Un momento realmente importante fue el vivido por situación no era precisamente favorable, hasta el punto
los españoles cuando el cacique de Zipacua les envió, que, debido a la falta de comida, los españoles a veces
una vez firmada la paz, hasta 400 “viejas” cargadas con llegaban a cambiar por un puñado de maíz todo el oro
maíz, carne de monte y otras comidas39. extraído durante varios días. Se da la circunstancia de
Posiblemente fue durante las expediciones al que este hecho fue promovido por el propio goberna-
Cenú y la extracción del oro de sus sepulturas cuando dor, a quien se acusó de favorecer a los indios, a los
los españoles sufrieron con más fuerza el aguijón del que recomendó que no diesen mantenimiento ninguno
hambre. Bien abundantes son las referencias docu- a los españoles si éstos no se lo pagaban, de manera
mentales sobre las penalidades que los conquistadores que obligaba a los conquistadores a renunciar al botín
sufrieron pasaron en aquella tierra. En una probanza que legalmente les pertenecía si no querían morir de
presentada por Pedro de Heredia en 1534, el gober- hambre45. Algunos de los hombres que Heredia envió
nador se mostró particularmente comunicativo en lo a recorrer las zonas cercanas, capitaneados por Alonso
referente a la primera entrada al cementerio del Cenú de Heredia, tuvieron que regresar al Cenú desde las
“para yr en descubrimiento y busca de las provincias del sabanas de Ayapel, de donde llegaron “rotos, flacos y
Perú”. Heredia relata que pasaron muchas penalidades amarillos”, tras un duro viaje en el que para sobrevivir
y se les murieron algunos caballos y dos negros de los se alimentaban de guazumas, una fruta seca y de mal
diez que llevaba40, hecho corroborado por varios de sabor, que a veces los hacía vomitar, y en el que tuvie-
los testigos presentados por el gobernador, entre ellos,
Gómez Becerra, Juan de Villoria, Alonso López de
Ayala, Alonso de Montemayor y Alonso de Saavedra.
Sin duda alguna, el testimonio más esclarecedor fue 37  Carta de Pedro de Heredia al Rey. S/F. AGI, Santa Fe, 37,
presentado por Francisco de Logroño: R.1, N.3
38  Fernández de Oviedo, op. cit., Libro XVII, capítulo VII
(Tomo 3: 155 – 158)
… que fue este testigo a la dicha entrada e que sabe que
39  Juan de Castellanos, Historia de Cartagena, Bogotá, Biblio-
ningunos cristianos hasta hoy padecieron tantos e tan teca Popular de Cultura Colombiana, 1942: 51
grandes trabajos como ellos de hambre e de sed e frío e 40  Expediente de Pedro de Heredia para la solicitud de salario.
sierras e que este testigo vio quedar helados en una sierra Probanza de Pedro de Heredia. Cartagena, 10 de diciembre de 1534.
más de diez personas e muchos caballos despeñados… AGI, Santa Fe, 37, R.1, N.1
e que no eran caídos los caballos cuando eran comidos 41  Ibid. Declaración de Francisco de Logroño.
de los cristianos que cosa ninguna se dejaba de comer 42  Carta de Pedro de Heredia al rey. Cartagena, 25 de enero
de 1535. AGI, Santa Fe, 187, fols.8 a 10
hasta las tripas…41
43  Castellanos, op. cit., p.68
44  Ibid., p.72
Otros testimonios elocuentes proceden de las
45  Primer Juicio de residencia de Pedro de Heredia. Relación
jornadas a las sierras de Abreba, donde “se pasó mucho de los hechos probados contra Pedro de Heredia. 31 de marzo de
trabajo de hambre de manera que se perdieron más de 1536. AGI, Justicia, 523, fol.527

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fueron bien explícitas al respecto. Gonzalo Sánchez,
por ejemplo, declaró que los españoles habían recogido
más de 700 fanegas de maíz para llevarlas al Cenú, y
una vez en el cementerio, el gobernador y su hermano
se apropiaron de ellas y las guardaron en un bohío,
repartiéndolas entre sus negros: hasta 6 bollos de maíz
a cada uno para comer y para cenar, mientras que a los
conquistadores sólo les daba un bollo o bollo y medio,
y eso, si estaban enfermos; a los sanos, ni siquiera eso47.
En los mismos términos se expresaban otros vecinos
como Pedro Ordóñez de Peñalosa, Alonso de Cáceres,
Juan Velázquez, Juan Estrada y Antón Gallego, muchos
de los cuales llegaron a denunciar que los negros les
vendían a los españoles las sobras de las comidas que
el gobernador les daba. De hecho, gran parte de los
interrogatorios de los dos primeros juicios de residen-
cia de Pedro de Heredia estaban relacionados con la
hambruna generalizada de la hueste y con la directa
responsabilidad del gobernador.
A todo ello habría que sumar una nueva incorpo-
ración masiva de gente, el grupo de Rodrigo Durán, en
noviembre de 1534. La superpoblación a la que se vio
sometida la gobernación agravó, sin duda, el ya difícil
sostenimiento de los españoles. El gobernador, en un
Expediciones en Cartagena durante el Primer intento por solucionar esta situación, organizó varias
Gobierno de Pedro de Heredia, 1533-1536
(Gómez, Pedro de Heredia…, p.47) expediciones a recorrer la zona en busca de alimentos.
En una de ellas, la dirigida por Alonso de Heredia, se
llegó hasta Urabá, donde se fundó la ciudad de San
ron que matar algunos caballos que, en muchos casos, Sebastián de Buena Vista48, en una zona rica y fértil,
eran el único alimento de que disponían, sin desechar que sería, según los oficiales reales, de gran beneficio a la
ninguna parte de los mismos, de forma que, según Juan gobernación, por ser “tierra de buena disposición y haber
de Castellanos, la desesperación de los españoles llegó
a un punto en el que “al repartir las partes del caballo
en él no se hallaba cosa fea sin desecharse pie, tripa, ni
callo, ni cuero ni juntura de manera que cuecen en ollas
el genital tallo”46. 46  Castellanos, op. cit., pp.84 – 87
No obstante, parece que no sólo fueron los indios 47  Primer Juicio de Residencia de Pedro de Heredia. Declara-
ciones de los testigos de la acusación. AGI, Justicia, 521, fol.75
los más beneficiados por el gobernador ya que una
48  Pedro Simón, Noticias Historiales de las conquistas de Tierra
de las más graves acusaciones que se le imputaron a Firme en las Indias Occidentales, Bogotá, Biblioteca Banco Popular,
Heredia fue el reparto de los alimentos obtenidos por 1981, tomo 5: 149 – 150. El cronista Juan de Castellanos afirma
los miembros de su hueste, a raíz de los crecientes que en ese viaje, Alonso de Heredia y sus hombres llegaron a un
lugar llamado Las Balsillas, fundando un pueblo de españoles que
apuros económicos. Heredia, obviando el hambre y
desde entonces se llamó Santiago de Tolú. Sin embargo, se sabe
la necesidad de sus hombres, repartió descaradamente por la relación de méritos y servicios de Cebrián de Moreta, que
los alimentos entre sus negros de confianza, que se la fundación oficial de Tolú tuvo lugar a fines del año 1537, en
encontraban extrayendo oro de las sepulturas. En tiempos del gobernador Juan de Vadillo. Esta es una de las muchas
afirmaciones que demuestran que las declaraciones de los cronistas
los interrogatorios del primer juicio de residencia al son, cuando menos, dudosas. Relación de méritos y servicios de
gobernador, las declaraciones de muchos de los testigos Cebrián de Moreta. 1579. AGI, Patronato, 123, R.14

34 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


en ella manera para criar ganados vacunos y ovejunos y lucrativos negocios, elevando los precios hasta cotas que
puercos y hacer los cristianos españoles estancias para tener pocos en Cartagena podían permitirse. De hecho, los
sus labranzas”49. A pesar del éxito de esta expedición, oficiales reales, en una carta a la Corona en mayo de
algunos de los testigos dudaron de las “buenas” inten- 1535, hacían una extensa relación de las penurias que
ciones del gobernador. En el interrogatorio de cargo, la gente había pasado en el Cenú hasta el punto de
celebrado el día 9 de mayo de 1537, Gabriel Pajes, vecino que muchos estaban muriendo de hambre y de sed. Al
y conquistador afirmó que Heredia había mandado a mismo tiempo solicitaban un aumento de su salario,
la gente a Urabá con el fin de quedarse solo en el Cenú pues el que tenían no era suficiente para sobrevivir en
y de que los españoles no se comieran el maíz que allí tales circunstancias52.
había50. Sin duda, una muestra más de la inestabilidad Sin duda, la masiva llegada de gente, los problemas
de la región y de las graves carencias económicas, favo- para acceder a una alimentación adecuada, el progre-
recidas además por la improvisación de la conquista y sivo endeudamiento de los habitantes y los abusos del
por el interés desmesurado por los rescates del Cenú. gobernador, provocaron una rápida despoblación de
La obsesión de la ganancia fácil y rápida impedía una la gobernación. En 1535, el propio Heredia decía que
organización del territorio, que seguramente hubiera “todos están endeudados en caballos y bastimentos en
paliado estos episodios de hambre y, en consecuencia, muchos pesos de oro… muchos se han ido por no poder
el descontento masivo del grupo conquistador. pagar las dichas deudas”53. De nuevo, las acusaciones
Mientras, las cosas en la ciudad de Cartagena no vertidas contra el gobernador en su juicio de residen-
iban mucho mejor que en el Cenú. Era realmente difí- cia y los cargos a él imputados apuntan a este hecho.
cil que las ínfimas fortunas de los españoles pudieran Durante la pesquisa secreta, hombres de importancia
hacer frente al encarecimiento de los productos básicos como Gonzalo Sánchez, el alcalde Pedro Ordóñez de
para la subsistencia. Fueron muchas las informaciones Peñalosa, el capitán Alonso de Cáceres o el veedor Juan
que sobre el costo de la vida se enviaban a España. Por Velázquez culparon a Heredia de la despoblación que
medio de ellas se puede conocer aproximadamente la gobernación estaba sufriendo, porque los españoles
el precio de los alimentos en el mercado cartagenero no tenían con qué mantenerse (ni oro ni alimentos),
y el notable incremento de los mismos cuando eran llegando a tal estado de desesperación que algunos
vendidos en el resto de la gobernación. En la ciudad, de ellos se alzaron, tomaron dos navíos del puerto
concretamente, una pipa de harina costaba treinta de Cartagena y abandonaron la tierra54. Igualmente,
castellanos, alcanzando más de cuarenta si era de vino. algunos miembros de la hueste de Pedro de Heredia
Pues bien, ninguno de estos productos podía comprarse
en el Cenú por menos de cincuenta castellanos de oro.
Y lo mismo ocurría con otros alimentos, como la carne
salada de cerdo, de la que si una arroba costaba entre
49  Carta de los oficiales reales de Cartagena al rey. Cartagena,
cinco y seis pesos en Cartagena, en el Cenú su precio 5 de abril de 1536. AGI, Santa Fe, 187, fols. 23 – 24
aumentaba hasta diez, o la carne fresca que costaba un 50  Primer Juicio de Residencia de Pedro de Heredia. Declara-
peso en el Cenú y entre cuatro y cinco reales en Carta- ciones de los testigos de cargo. AGI, Justicia, 522, fol.64
gena. Por su parte, un quintal de bizcocho costaba entre 51  Los datos de los precios de los productos en la Gobernación
once y trece pesos en Cartagena y hasta veintiocho en de Cartagena han sido recogidos de varias informaciones dadas
por los oficiales reales, el gobernador y el Obispo: Información
el Cenú; los huevos se vendían por unidades a medio de Alonso de Saavedra. 1537. AGI, Santa Fe, 122, N.6. El Obispo
real la unidad, los pollos por un ducado la pieza y cada de Cartagena al Rey. 31 de mayo de 1535. AGI, Justicia, 1123. Carta
gallina que se compraba costaba dos pesos51. de Pedro de Heredia al Rey. 25 de noviembre de 1535. AGI, Santa
Pero además, todos los productos necesarios para Fe, 37, N.2.
la subsistencia de los habitantes de la nueva gober- 52  Carta de los oficiales reales al Rey. Cartagena, 27 de mayo
de 1535. AGI, Santa Fe, 187, fols. 4 – 6
nación, a excepción de los propios de la tierra, maíz,
53  Probanza de Pedro de Heredia ante Alonso de Bejines. Car-
yuca, algunos frutales, etc., tenían que ser importados tagena, 24 de noviembre de 1535. AGI, Patronato, 50, N.6, R.4
desde La Española y Puerto Rico. Lógicamente los 54  Primer Juicio de Residencia de Pedro de Heredia. Decla-
comerciantes de las islas convirtieron estas ventas en raciones de los testigos. AGI, Justicia, 521.

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solicitaron al rey una mejora de su situación econó- El gobierno de Vadillo estuvo marcado por las
mica, pues habían tenido que gastar mucho dinero mismas circunstancias que el de Pedro de Heredia:
en comprar caballos y otras vituallas para las entradas superpoblación, falta de alimentos y, en consecuencia,
que se hicieron en el territorio55. Para completar este masiva huida de las tierras. La expedición al Río San
nefasto panorama, a medida que el tiempo iba pasando, Jorge, cuyo punto de partida fue el Cenú, resultó un
las evidencias de que la tierra, en muchas zonas, no nuevo fracaso ya que el hambre y las hostilidades de los
era la adecuada para su población eran cada vez más indios obligaron a los españoles a retroceder, después de
evidentes, como lo denunció Martín de Guzmán en un mes “sin tener nada que comer por haberse acabado
153556. No sólo las expectativas se habían difuminado los bastimentos y comido los caballos e padecieron mucha
en el Cenú, sino que, además, la tierra no parecía hambre e tanto que estuvieron a punto de muerte”62.
tener mucho futuro. Por ello, no fue raro que muchos Además, Vadillo decidió enviar a Urabá un barco
de los hombres llegados con Durán o posteriormente con alimentos y otros mantenimientos, porque allí
con Juan del Junco, alentados por la fama de riqueza no tenían que comer, y muchos habían abandonado
de la zona, abandonaran la tierra al poco tiempo de la provincia atraídos por las noticias que llegaban del
llegar a ella, motivo por el cual su rastro se pierde en Perú. Argumentaba el juez que, al no haber una fun-
la documentación consultada57. dición de oro, los mercaderes no iban a aquella tierra
La situación era tan crítica y las quejas tan abun- y esa era la causa de aquella falta de mantenimientos.
dantes, “de Cartagena tenemos nueva de que ha perecido De Urabá, sin embargo, el visitador alababa su buena
mucha gente de la venida de Castilla, de hambres y enfer- disposición, una zona llana cerca del mar, un lugar tan
medades”58, que la Audiencia de Santo Domingo decidió sano “que ninguno adolecía e con no comer sino palmitos
enviar a Cartagena al Licenciado Dorantes para que tenían tan buena color como los que venían de Castilla”,
tomara residencia a Pedro de Heredia porque “los espa- y la comparaba con Cartagena donde no se podía criar
ñoles se habían empezado a amotinar contra Heredia por ganado tan bien como en Urabá. Además, hizo plantar
su mala gobernación”, pero el barco en que el Licenciado allí naranjos, limas, plátanos, granados y hortalizas que
viajaba a Cartagena naufragó a unas quinientas leguas si hubieran sido plantados desde el principio habrían
de la bahía, por lo cual la Audiencia decidió enviar al
oidor Juan de Vadillo, viejo conocido del gobernador
Heredia, para que tomara la residencia59. Lo primero
que el oidor hizo fue enviar a varios hombres a Urabá
con la orden de prender al gobernador y su hermano y 55  Testimonio de Juan de Elorriaga en Panamá. Panamá, 14
trasladarlos a Cartagena, donde los encarceló y confiscó de enero de 1537. AGI, Panamá, 61
todos sus bienes60. 56  Carta de Martín de Guzmán al Rey. Cartagena, 1535. AGI,
Santa Fe, 122, R.1
Desde el mismo momento en que Juan de Vadillo
57  Agradezco nuevamente a la Dra. Carmen Gómez que me
se hizo cargo del gobierno de Cartagena, su principal haya facilitado este dato.
obsesión fue encontrar nuevas tierras ricas en oro y 58  Carta de los oficiales de Santo Domingo al rey. Santo
alimentos que les permitieran sustentarse. Entre esas Domingo, 24 de julio de 1535. AGI, Santo Domingo, 49, R.6,
nuevas tierras se encontraban las minas de Buriticá, N.40
objeto de varias expediciones, capitaneadas por Juan 59  Carta de los oficiales de Santo Domingo al Rey. 31 de
Romero y por Francisco César. Ésta última estaba diciembre de 1538. Recogido en la Colección de Documentos Inéditos
relativos al Descubrimiento. Conquista y Organización de las antiguas
compuesta por ocho hombres de a caballo, cuarenta de posesiones españolas en América y Oceanía, sacados en su mayor parte
a pie y hasta cincuenta caballos, de los cuales murieron del Real Archivo de Indias. Bajo la dirección de los Sres. D. Joaquín
siete por comerse unos bejucos venenosos61. Parece que Pacheco, D. Luís Cárdenas y D. Luis Torres de Mendoza, Madrid,
Imprenta Manuel B. de Quirós, 1864-1884, tomo 1: 555 – 556.
los resultados no fueron excesivamente positivos en lo
60  Simón, op. cit., tomo 5, p.154
económico, pero sí en la ampliación de las fronteras del
61  Carta del licenciado Vadillo al rey. Cartagena, 11 de febrero
territorio explorado por los conquistadores que bien de 1537. AGI, Santo Domingo, 49, R.8, N.54
podían haber ofrecido alternativas a la superpoblación 62  Relación de méritos y servicios de Cebrián de Moreta. 1579.
que la gobernación estaba viviendo. AGI, Patronato, 123, R.14

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dado de comer a la gente y la situación no habría llegado habían decaído tanto que llegaron a solicitar a Vadi-
a se tan desesperada63. llo, por medio del comendador Sosa, que regresaran a
No obstante, la gobernación seguía sin tener Cartagena, pues el hambre, las fatigas del camino y las
capacidad de autoabastecerse de ciertos alimentos. En bajas sufridas lo hacían necesario. La experiencia vivida
una carta de Vadillo, se hacía referencia a una merced por estos hombres durante la expedición no había
concedida por la Corona, que había ordenado a los sido grata en modo alguno, pues durante gran parte
oficiales de Jamaica que enviaran quinientas vacas a del viaje se habían alimentado de los caballos que se
Cartagena, para el mantenimiento de los pobladores. iban despeñando por las sierras unas veces, de raíces de
Sin embargo, el oidor informaba que el flete de cada juncos otras, y, en muchas ocasiones, pasaron varios días
animal costaría no menos de veinte pesos, por lo que el sin un alimento que llevarse a la boca66. Sin embargo,
traslado de todos subiría hasta los 10.000 pesos. Vadillo Vadillo dijo a sus hombres que él no regresaría y que
solicitaba que esa cantidad fuera remitida en oro, pues si era necesario llegaría incluso a continuar su camino
además la dificultad de la tierra hacía muy difícil la cría sólo, ante lo cual sus hombres decidieron acompañarle,
de ganado, a no ser que éste se enviara a Cenú o Urabá llegando a la provincia de Anserma. Cieza de León
lo cual incrementaría enormemente los costos64. cuenta que por el camino habían pasado mucha hambre
Por otro lado, Vadillo recorrió parte de la gober- “carne hacía más de un año que no la comíamos” y que
nación con un importante plan de mejoras. En el al llegar al pueblo, que había sido abandonado por los
Cenú ordenó edificar una iglesia, repartir solares indios, hallaron una olla llena de carne cocida y los
para la construcción de casas y el trazado de calles, y españoles se lanzaron a comer de ella sin darse cuenta
llevar sesenta puercas con sus berracos para criarlos y que aquella carne era humana: “un cristiano sacó de una
abastecer de carne al propio Cenú y a Cartagena, que olla una mano con sus dedos y uñas… pedazos de pies, dos
en esos momentos padecía una gran necesidad de la o tres cuatros de hombre”67.
misma. Se temían, además, tiempos de más carestía por Si se creen las palabras del cronista, se trataría de un
la afluencia continua de españoles que, en su mayor caso de canibalismo por parte de los españoles, aunque
parte, utilizaban la ciudad como destino intermedio o en este caso habría que hablar de un canibalismo
de paso hacia otras regiones más ricas. Al parecer, sólo “involuntario”. Pero éste no fue el único caso conocido
se contaba con el maíz indígena. Así daba muestra de de las escasas y desesperadas prácticas antropofágicas
ello Vadillo a Carlos V: “si no hubiera sido por el maíz de los españoles. En la expedición de Ambrosio Dal-
de los indios, no se podía haber sostenido la tierra”65. finger a Maracaibo, tres hombres y un chico joven se
Urabá fue el punto de partida de una nueva expe- separaron de la hueste y se internaron en un camino
dición hacia las minas de Buriticá, capitaneada por por su cuenta. Al cabo de unos días el chico regresó
el propio Juan de Vadillo. El viaje comenzó el 24 de sólo y dijo que los tres hombres, uno de los cuales era
enero de 1538, recorriendo la provincia de Abibe, donde su padre, habían matado a una mujer india y se la
permanecieron quince o veinte días dada la abundan- habían comido y para demostrarlo les enseñó un trozo
cia de alimentos. A lo largo de todo el recorrido, los de carne que habían guardado para el camino. No se
hombres de la hueste de Vadillo fueron estableciendo
alianzas con algunos señores, como Tuatoque, cacique
del pueblo del río Guaca, que ofreció a los españoles
muchas joyas y hasta cien indios cargados con comida.
Una vez en la tierra de las minas, Vadillo y sus hombres 63  Carta del licenciado Vadillo al rey. Cartagena, 15 de octubre
de 1537. AGI, Santo Domingo, 49, R.8, N.57
se dedicaron a recorrer la zona, pasando por la provin-
64  Carta del licenciado Vadillo al rey. Cartagena, 11 de febrero
cia de Iraca, donde encontraron muchos alimentos y de 1537. AGI, Santo Domingo, 49, R.8, N.54
permanecieron dos meses, llegando a Naratupe, desde 65  Carta del licenciado Vadillo al rey. Cartagena, 15 de octubre
donde Vadillo envió a diez de los negros que llevaban de 1537. AGI, Santo Domingo, 49, R.8, N.57
a buscar comida, pero fueron atacados por los indios, 66  Fernández de Oviedo, op. cit., Libro XXVII, caps. X y XI
muriendo uno de ellos devorado por los indígenas. Al (Tomo 3: 166 – 169)
llegar a Caramanta los ánimos de muchos hombres 67  Cieza, op. cit: 70

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sabe hasta qué punto era verdadera la historia de este En similares términos se expresaban los oficiales
muchacho, pero lo cierto es que los tres hombres no reales que, por las mismas fechas, presentaban su queja
regresaron nunca. Otro caso más se dio en esta misma argumentando que “estamos más de quinientos y no
expedición cuando, habiendo quedado en el camino tenemos un pan que comer… ha ocho meses que no llueve,
cuatro hombres heridos y un sirviente, tuvieron que no han crecido maizales”72. Los miembros del cabildo
calmar su hambre con la carne de dos indios68. secular cartagenero tampoco eran ajenos a la penuria
En 1538, Juan de Santa Cruz llegó a la goberna- que estaban pasando de manera que, también en 1539,
ción de Cartagena, enviado por la Audiencia de Santo solicitaron al rey que pudieran establecerse encomien-
Domingo, ante las numerosas quejas que en ella se das en la gobernación, argumentando que, sin ellas, no
recibieron contra Vadillo, entre las que destacan las podrían crearse estancias para criar ganado ni labranzas
masivas ventas de indios como esclavos y los abusos de tierra, con lo que se agudizaría el problema. A esta
en las ventas de maíz y vino en el Cenú. Además, se le solicitud acompañaba otra que pretendía la concesión
encargó su intervención en el proceso contra Heredia de una prórroga en la exención del almojarifazgo pues
y su hermano. Junto a las instrucciones a Juan de Santa “lo que viene se vende tan a excesivos precios que los vecinos
Cruz, se le concedieron varias mercedes: por ejemplo, y pobladores de esta provincia padecen necesidad”73.
se le permitió que pudiera llevar a Cartagena cañas de La respuesta de la Corona a estas y otras súplicas
azúcar y allí las plantara y criara, en un intento más llegó a Cartagena en forma de reales cédulas dirigidas
de la Corona por establecer en la gobernación plan- a sus gobernantes. En la línea, ya comentada ante-
taciones de azúcar que ayudaran al sostenimiento de riormente, destinada a favorecer el establecimiento de
la misma69. ingenios azucareros en la gobernación, se ordenaba al
No se puede decir que en Cartagena, la situación Obispo que proveyera todo aquello que considerara
hubiera mejorado mucho a la llegada de Santa Cruz. necesario, incluso la concesión de tierras, para que
La carestía de alimentos era una constante en toda la pudiera crearse un ingenio en la zona de Turbaco74.
gobernación, pero mucho más acentuada en la ciudad y Igualmente, se avisaba al propio Santa Cruz, que se le
no sólo afectaba a la población española, sino también aprobaba su proyecto de construir un camino para el
a la aborigen. Esta afirmación se deduce de las palabras trasporte de ganado y un puente hasta la ciudad75.
que el propio visitador plasmó en dos cartas. En una
de ellas explicaba que en las entradas que se habían
hecho no se había llevado ganado, por no haber pastos
para alimentarlos, que había comenzado a construir un
camino hasta una sabana para poder trasladar animales 68  John Hemming, En busca de El Dorado, Barcelona, Reseña,
1995: 52 – 54
y que los indios tenían mucha necesidad, porque había
69  Cédula al licenciado Santa Cruz. Valladolid, 7 de diciembre
habido una gran sequía y se habían perdido sus maiza- de 1537. AGI, Santa Fe, 987, L.2, fol.26V. Recogido por Friede, op.
les70. En la otra, fechada un mes más tarde, decía: cit., tomo 4: 272
70  Carta del licenciado Santa Cruz al rey. Cartagena, 20 de
… he visto que los indios por no tener providencias marzo de 1539. AGI, Santa Fe, 80. Recogido por Friede, op. cit.,
para saber guardar sus mayzes de unos tiempos para tomo 5: 126
71  Carta del licenciado Santa Cruz al rey. Cartagena, 21 de
otros y por no tener buen gobierno para hacer sus
abril de 1539. AGI, Santa Fe, 80, N.14
labranzas andan aquí entre los cristianos muchos de
72  Carta de los oficiales reales al rey. Cartagena, 20 de abril
ellos perdidos muertos de hambre e por los pueblos que de 1539. AGI, Santa Fe, 72, N.3
están desviados de esta ciudad y de pueblos de cristianos 73  Carta del Cabildo Secular de Cartagena. Cartagena, 10 de
mueren de hambre que como son gente tan bestias no julio de 1539. AGI, Santa Fe, 62, N.2
saben buscallo ni hazer providencias ninguna, que si 74  Cédula al Obispo de Cartagena. 26 de septiembre de
estuviesen encomendados las personas que los tuviesen 1539. AGI, Santa Fe, 987, L.2, fol.87. Recogido por Friede, op.
cit., tomo 5: 246
tenían cuidado de poneles recaubdo de manera que se
75  Cédula al licenciado Santa Cruz. 3 de octubre de 1539.
muriesen por asi de esto como de sarampión se han AGI, Santa Fe, 987, L.2, fol.90. Recogido por Friede, op. cit.,
muerto más de tres mil yndios…71.  tomo 5: 251

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En este estado de cosas, a mediados de 1541 se no ha querido salir ninguna cosa…80
produjo el retorno de Pedro de Heredia a Cartagena,
restituido como gobernador. No se ha encontrado Del mismo modo, en 1552, Pedro de Heredia enco-
referencia alguna al tema de la alimentación en esta mendó una expedición a su hijo Antonio para que fuese
segunda etapa de gobierno de Heredia y son escasas a repoblar el pueblo de San Sebastián de Buena Vista
las que se tienen de aquí en adelante, pero al parecer que, al parecer, se había despoblado en gran medida
las cosas poco habían cambiado. Se sabe, por ejemplo, en tiempos de Miguel Díaz de Armendáriz por la gran
que cuando el gobernador regresó a la provincia, los escasez de abastecimientos81.
vecinos del Cenú se habían trasladado a Catarapa en En 1556, año de la muerte del Adelantado Pedro
busca de un lugar donde poder sustentarse76. En 1546 de Heredia, la Corona emitió una real cédula por la
los oficiales de Cartagena escribieron a Madrid solici- cual se hacía eco de las quejas, ante ella presentadas,
tando un nuevo reparto de encomiendas con base en referidas a los abusos de los encomenderos contra los
las ya antiguas quejas sobre la miseria que se padecía indios, incluidos aquellos encomendados a la propia
en la tierra, donde únicamente podían abastecerse de Corona, a quienes los hacían trabajar excesivamente
aves y maíz77. Algunos años más tarde, Fray José de en sus labranzas y criar puercos que luego ellos ven-
Robles expresaba la conveniencia de establecer en la dían como propios. Sin embargo, María del Carmen
gobernación rozas y granjerías para que la tierra se Borrego anota que esta cédula, expedida en Valladolid,
perpetuase y pudiese salir adelante, pero consideraba nunca fue cumplida y los gobernadores que la provin-
necesario que los indios ayudasen a los españoles a cia tuvo tras la muerte de Heredia cometieron gran
sembrar como condición importantísima para que la cantidad de abusos82.
ciudad se mantuviese78. Y el 13 de octubre de 1551, el rey Pocos años más tarde, la visita de Melchor Pérez de
recibió una carta de Pedro de Heredia, que ya estaba Arteaga a la gobernación de Cartagena, en la década
en su tercer período de gobierno, en la que suplicaba de 1560, tenía entre sus objetivos la fundación de
un aumento del salario que tenía establecido su cargo pueblos de indios en lugares sanos y con facilidades
de gobernador por no poder mantenerse y pedía que, para la labranza y cría de animales. En las casas debía
para poder sustentarse, se le concediese la merced de destinarse un espacio al corral para criar aves y otro a
recibir una cierta cantidad anual de maíz de los pueblos una huerta en la que sembrar árboles frutales, semillas
encomendados a la corona79. y hortalizas. Además, en los caminos que conducían a
De la misma fecha es otra carta del Deán Pérez estos pueblos, se establecerían unos bohíos en los que
Materano, en la que critica la actitud del gobernador los indios pudieran vender sus productos83. De esta
ante las necesidades de la tierra:

… aquí habían hecho los vecinos de este pueblo y los de


toda la gobernación estancias por donde se sustentaban
76  Segundo Juicio de Residencia de Pedro de Heredia. Infor-
todos los vecinos y los que van y vienen y se habían
mación en Santa Cruz de Mompox. AGI, Justicia, 536, fol. 206v
dado tanto a ellas y que habían puesto árboles ansi de 77  Carta de los oficiales reales al Secretario del Consejo de
Castilla como de la tierra y que ya daban fruta, mandó Indias. Cartagena, 9 de mayo de 1546. AGI, Santa Fe, 72, N.6
don Pedro de Heredia govenador de esta tierra que 78  Carta de Fray José de Robles. 1 de junio de 1550. AGI,
no se traxesen yndios de los pueblos a las beneficiar, y Santa Fe, 233
es muy gran lástima ver perder tantos árboles criados 79  Carta de Pedro de Heredia al rey. Cartagena, 13 de octubre
padeciendo nosotros gran necesidad y los que van y de 1551. AGI, Santa Fe, 187, fols. 45 – 47
80  Carta del Deán Pérez Materano al rey. Cartagena, 13 de
vienen. Solían valer las gallinas a peso y valen a dos
octubre de 1551. AGI, Santa Fe, 187, fols. 48 – 49
reales por causa de las estancias que estaban pobladas
81  Gómez, Pedro de Heredia: 91
donde se criaban muchas. Han salido los vecinos a
82  María del Carmen Borrego Plá, Cartagena de Indias en el
algunos partidos con el gobernador diciendo que lo que siglo XVI, Sevilla, Escuela de Estudios Hispanoamericanos, 1983:
siembran en los pueblos sembrasen en las estancias la 143
mitad y la otra mitad allá o como mejor le pareciese y 83  Ibid.: 164

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visita, Borrego saca como conclusión que la tierra era pobladores, tuvieron un ejemplo más en el reparto
en extremo pobre y afirma, incluso, que hasta el año de solares efectuado en 1590 en peonías y caballerías.
1560, en Cartagena sólo se recolectaba maíz, con el cual Las primeras se componían de un solar para casa de
alimentaban a puercos y aves. Igualmente, la visita esta- cincuenta pies de ancho y cien de largo, cien fanegas
bleció una nueva tasación para las encomiendas: maíz de tierra de labor de trigo o cebada86, diez de maíz,
en toda la gobernación, excepto en Cenú, que era tan dos huebras de tierra para huerta y ocho para plantas
pobre que tenía que hacerlo en gallinas y sal, y en María, de otros árboles, tierra de pasto para diez puercas de
más pobre aún, se haría solamente en gallinas84. vientre, veinte vacas y cinco yeguas, cien ovejas y veinte
La situación no mejoró mucho durante el resto de cabras. Las caballerías, por su parte, contaban con cien
la segunda mitad del siglo XVI, aunque es verdad que pies de ancho y doscientos de largo para la casa y todo
las quejas son cada vez menos numerosas. Sirva como lo demás como cinco peonías87.
ejemplo un expediente enviado desde la ciudad de
Cartagena en 1577 mediante el cual se solicitaba que Conclusión
no se ejecutase la prohibición, tanto a los indios como
a los españoles, de cultivar yuca, establecida por el La conquista de Cartagena no fue en absoluto fácil.
visitador Diego de Narváez. Justificaban esta petición A la belicosidad indígena, propia de los grupos deno-
argumentando que nunca ningún otro visitador o juez minados “caribes”, habría que unir las desesperadas
había prohibido el cultivo de la yuca y el cazabe: situaciones que se presentaron ante la falta de alimentos
y la aparición del hambre. La situación originada en
…por ser el principal sustento de todos… por no haber Cartagena en el momento en que llegaron los nuevos
en aquella provincia ni trigo ni cebada… y si estuvie- pobladores y que ellos mismo relatan -hambrunas,
sen dos o tres años que no se criase la dicha yuca se ve muertes por comer alimentos venenosos, prácticas caní-
claro que no tenían que comer y se despoblaría la tierra bales, endurecimiento de las condiciones de vida, falta
porque la harina que se lleva es muy poca y cara y para de agua, encarecimiento del costo de la vida-, ofrecen
gente regalada… un panorama realmente desolador. Sin embargo, resulta
muy extraño que estas situaciones se produjeran en
Argumentaban desde Cartagena que si no se culti- una tierra extremadamente rica en alimentos de origen
vara la yuca “ni los bezinos ni las armadas de V. Alteza ni vegetal y animal, que además contaba con una costa
los yndios ni negros no habría de que se poder sustentar”. plagada de peces y crustáceos comestibles, y durante
El origen de esta petición habría que buscarlo en una años había alimentado a la población aborigen. Como
provisión a Pedro Fernández del Busto, gobernador posibles explicaciones a este hecho estarían la falta de
de Cartagena, en la que Felipe II expresaba que tras conocimientos acerca de la naturaleza cartagenera y el
la visita de Narváez y las informaciones recibidas que miedo a morir por ingerir productos venenosos, lo que
hablaban de los excesos que había por hacer sembrar a efectivamente ocurrió en algunos casos, o la intención
los naturales en las labranzas de maíz mucha yuca, se le de los españoles de provocar con sus quejas un aumento
había solicitado diese una provisión prohibiendo que de sueldo, la concesión de alguna merced o, incluso, el
se consintiera el cultivo de yuca, aunque los españoles
dijeran que eran sembradas por los indios por propia
voluntad. Ordenaba, igualmente, que el gobernador
enviase una persona a visitar las labranzas, rozas y
sementeras y que si hallase cultivada yuca la arrancase 84  Ibid.: 169 – 170
y que no permitiera que en las labranzas en las que 85  Expediente de la ciudad de Cartagena sobre la prohibición
de cultivar yuca. Cartagena, 9 de julio de 1577. AGI, Santa Fe,
hubiese yuca, aunque fuese plantada por negros, ésta
62, N.16
fuera trabajada y recolectada por los indios. Se trataba
86  El cultivo de trigo no tuvo éxito alguno en las tierras car-
una provisión para la ciudad de Cartagena y para las tageneras, pues las condiciones climáticas y orográficas no eran las
villas de Tolú y de María85. más adecuadas para el mismo.
Las medidas para fomentar el sustento de los 87  Borrego. op. cit: 315

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permiso para abandonar la tierra en busca de otra que
fuera más provechosa, en un movimiento poblacional
que generó una casi completa despoblación del terri-
torio, como ya se ha visto.
Sea como fuere, Cartagena tuvo unos comienzos
difíciles, que llevaron a las autoridades y vecinos a
plantear, en varias ocasiones, la reubicación de la ciudad
en otro paraje más adecuado. Sin embargo, la ciudad
se mantuvo en el mismo lugar en el que fue fundada
y allí permanece hoy. Una bella ciudad, condicionada
por el medio en el cual se ubicó, que se convirtió en
una de las más importantes de América en el período
colonial. a

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E C O N O M í a y s o ciedad

El Caribe antioqueño:
entre los retos de la geografía y el espíritu paisa 1

Gerson Javier Pérez V. 2

I. Introducción

Una de las zonas de Colombia con las peores


condiciones socioeconómicas es la Costa Caribe. Esta
condición la comparte con los departamentos sobre la 1 Este documento puede ser consultado en la página web del
Costa Pacífica y algunos de los nuevos departamentos. Banco de la República http://www.banrep.gov.co/publicaciones/
pub_ec_reg4.htm.
Para el caso particular del Departamento de Antioquia,
2 El autor agradece los valiosos comentarios de Adolfo Meisel,
uno de los más prósperos de Colombia, se presentan dos María Aguilera, Julio Romero, Joaquín Viloria, Jaime Bonet y José
casos extremos y opuestos. El primero es el de Medellín, Gamarra durante la elaboración del presente documento. Muy
la ciudad más importante del departamento y una de las especialmente se agradece a Rubén Arroyo, secretario de Hacienda
del municipio de Turbo, por la información suministrada y por sus
más desarrolladas del país, alrededor de la cual, como
valiosos comentarios.

42 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


en otras ciudades prósperas, se encuentra un conjunto comparte no sólo su condición periférica, sino también
de municipios que sacan ventaja de su cercanía a este las condiciones climáticas extremas y el aislamiento del
polo de desarrollo, y presentan bajos niveles de pobreza resto del país.
y un crecimiento económico favorable. Este documento se compone de cuatro secciones.
Por otro lado, se encuentran las poblaciones loca- En la primera se consideran algunas de las caracterís-
lizadas en el Caribe antioqueño, los municipios del ticas históricas y geográficas de Arboletes, Necoclí,
Urabá, particularmente Arboletes, Necoclí, San Juan San Juan de Urabá y Turbo. En la segunda, se analizan
de Urabá y Turbo, los cuales no sólo tienen la des- los más importantes aspectos de la base económica
ventaja de ser los más alejados de Medellín, sino que, de estos cuatro municipios, así como su importancia
adicionalmente, forman parte de la periferia del país y en la economía departamental y nacional. La tercera
se localizan sobre la costa Caribe, donde se presentan está dedicada a los indicadores de salud, educación y
algunos de los más altos índices de pobreza. pobreza. En la cuarta se presentan los resultados del
Los paisas han sido considerados como un grupo desempeño fiscal para cada uno de los municipios. Al
de personas con gran espíritu empresarial. Aunque final, se formulan algunas conclusiones.
no es objetivo de este documento, vale la pena men-
cionar que varios autores nacionales y extranjeros II. Aspectos históricos y geográficos
han dedicado importantes esfuerzos al estudio de la
cultura antioqueña y de la relación con su desarrollo A. Antecedentes históricos8
socio-económico. Ann Twinam, en dos de sus trabajos
(Twinam, 1980 y 1985), llevó a cabo un estudio muy Los antecedentes históricos de los cuatro muni-
completo sobre el espíritu empresarial en Antioquia y cipios de la Costa Caribe antioqueña, Arboletes,
el éxito económico como propio de los paisas3. Turbo, Necoclí y San Juan de Urabá, se encuentran
Sobre las fuentes de esta cualidad se han planteado estrechamente ligados al descubrimiento de América.
una gran variedad hipótesis, de las cuales sobresalen el De acuerdo con Parsons (1978), San Sebastián (actual
origen étnico y la herencia colonial. Para Twinam, más Necoclí) fue la primera colonización en tierra firme en
que su origen étnico o cultural, fue el legado colonial el Nuevo Mundo.
el que hizo que los antioqueños interiorizaran ciertos Los primeros conquistadores que llegaron al Urabá
rasgos en su modo de vida4. fueron Rodrigo de Bastidas y a Juan de la Cosa, a
Por el otro lado, tanto a nivel nacional como comienzos del siglo XVI, cuando el territorio estaba
internacional, se ha estudiado la relación entre las poblado por grupos indígenas pertenecientes en su
características geográficas y el crecimiento econó-
mico5. En Colombia, por ejemplo, varios estudios han
mostrado que algunas de las causas del atraso de los
departamentos de la Costa Caribe son, precisamente, 3  Álvaro Tirado Mejía, al referirse al éxito empresarial alcan-
zado históricamente por los antioqueños, también se preguntó por
las extremas condiciones climáticas y geográficas que el momento en el cual estos llegaron a pensarse como tales,. Otros
deben enfrentar sus habitantes6. autores con importantes contribuciones al respecto son Álvaro
Los resultados de este documento sobre las con- López Toro y Keith Christie.
diciones socio-económicas en los cuatro municipios 4  Este aspecto también lo discute en detalle López (1970).
costeros de Antioquia -altos niveles de pobreza y muy 5  Algunos de los trabajos más representativos acerca de este
tema son: Sachs (1997), Sachs (2001). A nivel nacional se destacan
baja cobertura de servicios básicos-, permiten afirmar los trabajos de Galvis (2001, 2002) y Meisel y Pérez (2006).
que en esta zona las características geográficas predo- 6  Vale la pena mencionar que para Bonet y Meisel (2006) la
minan sobre el espíritu emprendedor de la población geografía resultó ser uno de los determinantes de las desigualdades
antioqueña, pues al analizar los niveles de desarrollo, económicas regionales, a través de los patrones de poblamiento en
estos nada tienen que ver con los del interior de Antio- el período colonial.
7  Pérez (2005) presenta una caracterización en este sentido para
quia: ni siquiera se acercan a la media departamental,
el departamento de Antioquia y los departamentos vecinos.
y más bien son muy similares a los de sus vecinos de la
8  Algunos datos de esta sección fueron tomados de la página
Costa Caribe y Chocó7, departamentos con los cuales web de la Gobernación de Antioquia.

a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7 43


mayoría a la familia Caribe, tales como los catíos, A pesar del abandono en el que estaba la región,
los urabaes y los cunas, localizados a todo lo largo de y de todas las dificultades de comunicación con el
la costa entre Cartagena y la desembocadura del río interior del país, el Urabá fue muy apetecido por su
Atrato. Si bien inicialmente los grupos indígenas se posición estratégica para el comercio exterior, de modo
mostraron amistosos, con el tiempo se tornaron vio- que no sólo Antioquia, sino también Cauca y Chocó,
lentos y dispuestos a luchar por su territorio. A partir reclamaron su derecho sobre ella. Al respecto Parsons
de ese momento se inició toda una campaña contra (1978) señala que: “Tres diferentes entidades guberna-
los grupos indígenas rebeldes que trajo consigo el mentales reclamaban la jurisdicción sobre el valle del
sometimiento de los caciques Urabá y Darién por parte Atrato y Urabá en los primeros años de la República,
de Juan de la Cosa en 1504. Posteriormente, en 1510, pero ninguna se esforzó por colonizar la región”.
llegó Alonso de Ojeda al Urabá, y en la parte oriental Luego de varias reclamaciones, en 1831 se reconoció
del Golfo estableció la fortaleza de San Sebastián de a Urabá como parte del departamento de Antioquia.
Urabá (Necoclí), mientras que en la parte occidental Ese mismo año se puso en marcha una oficina de con-
Vasco Nuñez de Balboa fundó a Santa María la Antigua. trol aduanero para el Golfo de Urabá. Sin embargo, la
Algunos de los hombres de Jorge Robledo llegaron a medida no tuvo resultado debido a que en ese momento
una localidad a la que dan el nombre de Antioquia, la no se había logrado concretar la salida al Golfo desde
cual fue relocalizada y posteriormente se llamó Santa el interior del departamento. Adicionalmente, para el
Fe de Antioquia. Hacia 1569 el territorio antioqueño se Chocó no era de mucho interés ya que tenía una salida
constituyó como entidad independiente, cuyo primer al mar a través de Buenaventura.
gobernador fue Andrés de Valdivia (Parsons (1978). La historia de los cuatro municipios costeros de
Debido a los enfrentamientos con los indígenas, a Antioquia se encuentra estrechamente ligada. Si bien
las características topográficas y a decisiones políticas, fue Necoclí la primera en fundarse en 1535, éste, al igual
el Urabá permaneció aislado del resto del territorio que Arboletes y San Juan de Urabá, dependería admi-
antioqueño durante varios siglos, situación que deter- nistrativamente de Turbo (conocida en la época como
minaría radicalmente el futuro de la región. Sólo hasta Pisisí). Turbo se fundó hacia 1839, época en la cual ya
hace algunos años se lograría cumplir el sueño de formaba parte de la provincia de Antioquia. Posterior-
muchos antioqueños de tener una vía desde el interior mente, pasó a ser parte de Chocó y Cauca, para luego
del departamento al Golfo de Urabá.9 regresar a Antioquia en 1905. En el caso de Arboletes,
El abandono y la poca presencia de las autoridades su fundación se remonta a 1920, como corregimiento de
llevaron, hacia el siglo XVIII, a que la región del Urabá Turbo, del que se separa y se constituye en municipio en
se convirtiera en guarida de piratas y contrabandistas. 1958. Necoclí, por su parte, fue corregimiento de Turbo
Esta zona se convirtió en sitio estratégico para empren- en 1905, luego inspección departamental y finalmente
der ataques contra los barcos cargados de oro y plata, municipio en 1977. San Juan de Urabá se creó primero
así como una de las zonas predilectas para el ingreso como parroquia en 1946, como inspección departamen-
ilegal de mercancías hacia el interior del país. tal en 1950 y como municipio en 1986.
La historia reciente del Urabá no puede abordarse
sin considerar el inicio de la producción bananera con la
entrada de la United Fruit Company, la cual fue deter-
9  Fue tal vez desde finales del siglo XVI cuando se empezó minante en la región. La multinacional llegó a Urabá
a buscar una salida al Golfo de Urabá. Se iniciaron expediciones en busca de nuevas tierras, como alternativa a las que ya
no sólo desde el interior del departamento sino también desde tenía establecidas en el Magdalena. Según estudios de
Cartagena, buscando establecer asentamientos poblacionales en
la región. Sin embargo, el aislamiento y las condiciones climáticas
la compañía, los suelos del Urabá presentaban mejores
hacían que estos asentamientos fueran en su mayoría temporales. condiciones productivas para el cultivo del banano,
Sólo a partir de 1926 se dio inicio formal a la llamada carretera al no sólo por la calidad del suelo, sino también por a la
mar, la cual se culminó casi 3 décadas después (Gobernación de disponibilidad de recursos hídricos10. En cuanto a las
Antioquia, 2002).
condiciones de poblamiento previas a la entrada de la
10  En Bonet (2000) se aborda esta situación en mayor deta-
lle. multinacional, Bucheli (2002) menciona: “En la zona

44 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


Mapa 1
Municipios del Caribe antioqueño

Fuente: Cálculos del autor con base en información del IGAC.

de Urabá no había ninguna población de importancia. rumbo de la región. La multinacional, contrario a lo


Estaba habitada por indígenas que vivían en forma ocurrido en el Magdalena, utilizó un esquema de pro-
aislada; es decir, las operaciones no se iban a iniciar ducción de subcontratación, con el fin de no entrar a
en una región con una fuerte tradición de conflictos solucionar posibles conflictos laborales directamente
laborales, como sí lo era el Magdalena”. con los trabajadores, sino a través de empresarios
Con la llegada de inmigrantes de Chocó y algunos generalmente establecidos en Medellín. De modo que
departamentos de la Costa Caribe, Turbo se convirtió, la poca identificación con la región por parte de los
prematuramente, en el mayor centro urbano de la empresarios, y la violencia que poco después llegaría,
región. Esto no le dio la posibilidad al municipio de han afectado al Urabá.
prepararse adecuadamente en términos de infraestruc-
tura física ni de capital humano11. Además hay una gran
carencia de infraestructura para las grandes operaciones
marítimas de comercio exterior que se llevan a cabo en
Turbo, sin contar con un puerto propiamente dicho.
La fruta se lleva desde las plantaciones, a través de
bongos, directamente a las zonas de carga de los barcos
localizados al interior del Golfo de Urabá.
Estas condiciones, claramente diferentes a las del 11  Como se mostrará más adelante, los municipios del Urabá
Magdalena, en donde ya existían importantes pobla- siguen enfrentados a grandes problemas socio-económicos que los
ciones a la llegada de la multinacional, marcaron el han convertido en los más pobres del departamento y del país.

a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7 45


Mapa 2 (Turbo). Estos cuatro municipios comprenden un total
Características físicas de 36 corregimientos y más de 400 veredas.
(Municipios del Caribe antioqueño) La zona costera comprendida por estos cuatro
municipios se encuentra localizada predominante-
mente en zonas planas entre 1 msnm (Turbo) y 614
msnm (Necoclí), con temperaturas que oscilan alrede-
dor de los 28oC.12 Comprenden en conjunto un área de
6.145 km2 que representan el 53% de Urabá antioqueño
y el 10% del total del departamento. Por su localiza-
ción, son los municipios cuyas cabeceras municipales
se encuentran más alejadas de Medellín.
Dentro de las características físicas se destaca la gran
parte del territorio que corresponde a las estribaciones
de la Serranía de Abibe (Mapa 2). Adicionalmente,
dentro del relieve de cada municipio se destaca la Bahía
Arboletes y Punta Arboletes (en Arboletes), los cerros
el Cedrito (en San Juan de Urabá), Punta Arenas (en
Necoclí) y la serranía del Águila y la cordillera Vale-
monia (en Turbo).
En el Mapa 2 también se puede observar que
esta zona del departamento antioqueño presenta una
riqueza hídrica conformada principalmente por cuatro
cuencas: la del Mar Caribe, la del río San Juan, la del
Golfo de Urabá y la del Río Atrato, cada una con un
importante número de afluentes. Las ciénagas son otra
fuente importante de recursos hídricos en la región,
por ejemplo la Marimonda y el Salado (en Necoclí)
y Tumaradó (en Turbo). Toda esta riqueza hídrica se
Fuente: Cálculos del autor con base en información del IGAC.
mantiene gracias a los altos niveles de precipitación en
toda la zona costera del Urabá: Arboletes (1.880 mm),
San Juan de Urabá (1.540 mm), Necoclí (1.800 mm) y
B. Entorno geográfico Turbo (2.474 mm). Debido a la importancia que tienen
las características geográficas en el desarrollo económico
1. Aspectos generales de una zona, en la siguiente sección se analizará más
en detalle lo que tiene que ver con las características
Arboletes, Necoclí, San Juan de Urabá y Turbo, de los suelos así como su uso actual y potencial para
están localizados en la Costa Caribe colombiana y, actividades productivas y de conservación.
administrativamente, hacen parte del la subregión
del Urabá antioqueño junto con otros 7 municipios
(San Pedro de Urabá, Apartadó, Carepa, Chogorodó,
Mutatá, Murindó y Vigía del Fuerte).
El Mapa 1 muestra la localización de cada uno de
los cuatro municipios del Caribe antioqueño dentro 12  Vale la pena mencionar que como zonas ecológicas Arbo-
del departamento. De acuerdo con la división regional letes, San Juan de Urabá y Necoclí se clasifican como bosque seco
tropical, mientras que Turbo, debido a su gran extensión, varía
dentro del Urabá antioqueño, tres de los municipios
entre bosque seco tropical, bosque húmedo tropical, bosque muy
pertenecen a la zona norte (Arboletes, San Juan de húmedo tropical y bosque muy húmedo premontano (Gobernación
Urabá y Necoclí) y el otro pertenece a la zona centro de Antioquia, 2002).

46 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


2. Los suelos y su productividad Tabla 1
Uso del suelo (Municipios costeros de Antioquia)
Los suelos de estos municipios costeros del departa-
mento de Antioquia, al igual que el resto de municipios
del Urabá, se localizan en un área de bosque tropical

Arboletes

Antioquia
Necoclí

S. J. de
Actividades

Urabá

Turbo
en donde se presentan aptitudes de uso variadas. Sin
embargo, y al igual que en la mayor parte del territorio
nacional se presentan diferencias entre la vocación de
Agrícola 0% 2% 0% 4% 7%
uso del suelo y su utilización efectiva. En esta sección
Agroforestal 0% 0% 0% 0% 3%
se realiza un análisis de la situación, resaltando cuáles
Pecuaria 92% 90% 97% 62% 53%
son los mayores tipos de conflicto en el uso del suelo,
Forestal 6% 5% 0% 9% 17%
lo cual se compara con el agregado departamental.
Conservación 2% 2% 3% 25% 19%
Los resultados de la Tabla 1 son contundentes en
cuanto a la predominancia del uso del suelo en estos Fuente: Cálculos del autor con base en información del
IGAC.
cuatro municipios. La mayor proporción de tierras, no
sólo en estas poblaciones, sino en todo el departamento,
está dedicada a la ganadería. Prácticamente la totali- Tabla 2
dad del territorio en Arboletes, San Juan de Urabá y Niveles de fertilidad del suelo
Necoclí están en las actividades pecuarias, dejando una (Municipios costeros de Antioquia)
disponibilidad casi nula para actividades agroforestales

S. J. de Urabá
o de conservación. En el caso de Turbo la situación

Arboletes

Antioquia
Necoclí

Turbo
es un poco distinta. A pesar de ser una muy pequeña Niveles de
fertilidad
proporción, en el municipio se realizan algunas acti-
vidades agrícolas (4.3%) y de conservación (25.4%).
Todos estos resultados están claramente relacionados Muy baja 37% 21% 25% 11% 35%
con las características particulares del suelo. La Tabla Baja 43% 41% 59% 26% 45%
2 muestra los distintos niveles de fertilidad de la tierra Moderada 18% 33% 14% 44% 9%
en cada uno de los municipios. Alta 0% 3% 0% 17% 9%
Es posible observar la baja fertilidad de la tierra que Muy alta 0% 0% 0% 0% 0%
caracteriza a Arboletes, Necoclí y San Juan de Urabá. Otras zonas 2% 3% 2% 3% 2%
Por ejemplo, el 80,3% de Arboletes, el 61,8% de Necoclí
Fuente: Cálculos del autor con base en información del IGAC.
y el 84% de San Juan de Urabá, presentan suelos que
van de baja a muy baja fertilidad, lo que impide que
se realicen actividades agrícolas a gran escala13.Turbo
es la excepción, gracias a que se encuentra localizada
Tabla 3
dentro de la zona que comprende la cuenca del río
Vocación de uso del suelo
Atrato, la cual recibe una gran cantidad de sedimentos
(Municipios costeros de Antioquia)
de las cordilleras dotando a gran parte del municipio,
y a las demás poblaciones ribereñas, de importantes
Arboletes

Antioquia
Necoclí

S. J. de
Urabá

Turbo

niveles de fertilidad. Actividades

Agrícola 33% 44% 38% 43% 12%


Agroforestal 26% 7% 40% 20% 16%
Pecuaria 6% 19% 0% 9% 12%
13  Sin embargo, y aunque no es el escenario óptimo, existe Forestal 17% 5% 20% 0% 15%
una parte del territorio de estos tres municipios clasificados con
fertilidad moderada en los que se pueden llevar a cabo actividades Conservación 18% 25% 2% 28% 45%
agrícolas. Fuente: Cálculos del autor con base en información del IGAC.

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En el caso de Turbo, por ejemplo, el 60,7% del dedicadas que deberían ser protegidas con las que efec-
territorio presenta niveles de fertilidad de moderada a tivamente lo están siendo. Nuevamente, es conveniente
muy alta, mientras que en los tres municipios restantes mencionar que la clasificación de las tierras para su
este porcentaje no supera el 36%. Adicionalmente, en la uso potencial se realiza estrictamente según criterios
Tabla 2 también es posible observar que los altos niveles técnicos, mientras que el uso se lo dan los pobladores
de fertilidad en Turbo son inclusive muy superiores a de acuerdo a su racionalidad económica, según la mejor
los del agregado departamental (18,2%). conveniencia en productividad.
Esta es la razón por la cual los pobladores de estos
cuatro municipios han diversificado sus actividades III. Base económica
productivas. Si bien en toda la región del Urabá las
actividades pecuarias son las más importantes, en En la región del Urabá antioqueño la producción
Arboletes, San Juan de Urabá y Necoclí, ésta es casi la de banano ha sido fundamental. La mayor parte de esta
única actividad productiva. En Turbo ha sido posible producción se concentra en la parte central del Urabá,
diversificar la producción gracias a la alta fertilidad de específicamente en los municipios de Apartadó, Turbo,
sus suelos. Carepa y Chigorodó. Para el caso de los demás muni-
No obstante, el hecho de que éstas sean las acti- cipios costeros del departamento (Arboletes, Necoclí
vidades en las cuales los pobladores han observado y San Juan de Urabá), aunque no existe una especiali-
mayor productividad de sus recursos económicos, esta zación como tal en algún cultivo específico, existe un
decisión no necesariamente está acorde con la vocación importante número de hectáreas dedicadas al cultivo
de uso que le otorga las propiedades físico-químicas del plátano, maíz, arroz, yuca, ñame, cacao y coco.
del suelo. La Tabla 3 presenta el mejor uso potencial
del suelo según sus características para cada uno de los A. Sector agrícola
municipios.
Al comparar estos resultados con los de la Tabla 1 En el caso de los cultivos permanentes se destacan
se puede observar claramente la discrepancia que existe la producción de banano de exportación y el plátano
entre cómo se está utilizando el suelo y cómo debería monocultivo. Como se observa en la Tabla 4, la totali-
utilizarse en cada uno de estos municipios. Las cifras dad del banano de exportación producido en Antioquia
son contundentes en mostrar que las tierras están siendo se cultiva en la región del Urabá. Los municipios de
sobreutilizadas en las actividades pecuarias. Como se mayor producción son Apartadó y Turbo, los cuales
puede observar, el porcentaje de tierras dedicadas a representan el 34% y el 32%, respectivamente. Si se tiene
esta actividad en los cuatro municipios va del 61% (en en cuenta la producción nacional, completada en su
Turbo) al 97% (en San Juan de Urabá), mientras que totalidad con la de Santa Marta, el Urabá participa con
la vocación para este tipo de actividades está previsto más del 75% de la producción nacional de la fruta.14
solamente para cerca del 10%. En el caso del plátano monocultivo, la Tabla 5
Para el caso de las actividades agrícolas y forestales muestra cómo Turbo no sólo es el mayor productor
existe un potencial nada despreciable. En promedio en el Urabá, participando con el 66%, sino en todo el
para los cuatro municipios, cerca del 37% de las tierras departamento de Antioquia con una participación del
tiene vocación agrícola, cifra muy superior al agregado 63%. Si se tienen en cuenta los cuatro municipios cos-
departamental que es apenas del 11,5%. Si a esto se le teros, estos participan con el 86% de la producción del
suman las actividades agroforestales se estaría hablando Urabá y con el 82% de la producción departamental.
de entre el 50% (en Necoclí) y el 80% (en San Juan de Tanto en el caso del banano de exportación como
Urabá). en el del plátano monocultivo, el área cultivada y el
Adicional a lo anterior, preocupa la gran propor-
ción de tierras que deberían destinarse a la conservación
y que en últimas están siendo deforestadas para llevar
14  El área sembrada en Santa Marta es de 11.300 hectáreas,
a cabo actividades pecuarias. Sólo en Turbo parece con una producción de 351.209 toneladas, lo que representa 23,4%
existir un equilibrio en cuanto a la cantidad de tierras del total nacional.

48 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


Tabla 4 volumen de producción se ha venido incrementando
Banano de exportación paulatinamente. Por ejemplo, el área cultivada de
(Área plantada, volumen y rendimiento, 2005) banano de exportación aumentó entre el 2001 y el
2005 en cerca de 1.586 has, mientras que en el caso del
plátano monocultivo el área sembrada se incrementó

(has)

Volúmen de
producción
Área
plantada

(tons)

Rendimiento
promedio
(kg/ha)
sustancialmente en Urabá al pasar de 25.049 has en
2001 a 37.809 has en 2005.
Municipio Teniendo en cuenta que estos dos son los cultivos
Apartadó 10,976 391,643 35,682 de mayor área sembrada y volumen de producción del
Carepa 7,102 253,416 35,682 Urabá, se convierten en la principal fuente agrícola
Chigorodó 3,874 138,227 35,683 de recursos para la región. El maíz ocupa el tercer
Turbo 10,330 368,605 35,682 lugar en área sembrada para los cuatro municipios del
Total Urabá 32,282 1,151,890 35,682 Caribe antioqueño y, aunque no es tan preponderante
Total Antioquia 32,282 1,151,890 35,682 como el banano, alcanza un área sembrada cercana a
las 27.000 has.
Para cada uno de los cuatro municipios costeros, la
Fuente: Oficinas de Campo de la Secretaría de Agricultura y Tabla 6 muestra los principales cultivos y su participa-
Desarrollo Rural y las Unidades de Asistencia Técnica Agropecuaria
– UMATA. ción en la producción regional y departamental.
En el municipio de Arboletes, es posible observar
que son dos los cultivos de mayor participación: el maíz
y el plátano monocultivo. El primero de ellos es, sin
duda, el de mayor área sembrada en el municipio, y
representa una parte importante para el Urabá (15,4%),
y para todo el departamento (9,0%). Las cifras son
Tabla 5
similares si se tiene en cuenta el volumen de produc-
Plátano monocultivo
ción. Aunque en menor escala, en Arboletes también se
(Área plantada, volumen y rendimiento, 2005)
produce arroz tradicional y yuca, representando a nivel
departamental el 6,5% y el 3,4%, respectivamente.
Rendimiento
Volúmen de
producción

promedio

En Necoclí existe una mayor diversificación de cul-


plantada

(kg/ha)
(tons)
(has)
Área

Municipio tivos, siendo los de mayor área sembrada el maíz (con


9.800 has. participa con el 21,3% a nivel departamental),
el arroz tradicional (con 3.817 has representa el 25,7% del
Apartadó 470 6,450 15,000
departamento) y plátano monocultivo (con 2.731 has.
Arboletes 1,180 10,030 8,500
representa el 6.8% en el departamento). Sin embargo,
Carepa 1,330 19,950 15,000
existen otros cultivos que aunque en menores áreas sem-
Chigorodó 2,070 22,770 11,000
bradas presentan importantes volúmenes de producción,
Murindó 30 60 4,000
tal es el caso de la yuca, el coco y el ñame.
Mutatá 434 5,366 14,290
Para San Juan de Urabá el plátano es el cultivo
Necoclí 2,731 28,392 10,500
de mayor preponderancia, no sólo en cuanto área
San Juan de Urabá 4,133 42,567 10,500
sembrada (4.133 has) sino en volumen de producción
San Pedro de Urabá 431 1,584 6,000
(42.567 tons), superando significativamente a Arboletes
Turbo 25,000 266,400 11,100
y Necoclí. Le sigue, aunque en menos proporción, el
Total Urabá 37,809 403,569 11,080
maíz, con algo más de 1.100 has y 1.731 tons. Existen
Total Antioquia 40,383 419,857 10,815
otros cultivos menores como el coco, el arroz tradicio-
Fuente: Oficinas de Campo de la Secretaría de Agricultura y nal, la yuca y el ñame.
Desarrollo Rural y las Unidades de Asistencia Técnica Agropecuaria De los cuatro municipios costeros, Turbo es sin
– UMATA.
lugar a dudas el de mayor participación agrícola, por

a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7 49


Tabla 6: Principales productos agrícolas en los municipios costeros del departamento de Antioquia
(Área plantada y volumen de producción, 2005)
Arboletes
Area Volúmen de
Participaciones con Participaciones con
Cultivo plantada de producción
respecto a: respecto a:
(has) (tons)
Urabá Antioquia Urabá Antioquia
Maíz 4,131 15% 9% 9,400 19% 12%
Plátano monocultivo 1,180 3% 3% 10,030 3% 2%
Arroz tradicional 968 12% 7% 1,452 12% 6%
Yuca 400 10% 3% 5,250 9% 3%

Necoclí
Area Volúmen de
Cultivo plantada Participaciones de producción Participaciones
(has) (tons)
Urabá Antioquia Urabá Antioquia
Plátano monocultivo 2,731 7% 7% 28,392 7% 7%
Cacao 100 3% 1% 19 3% 1%
Yuca 1,612 38% 14% 23,910 42% 14%
Arroz tradicional 3,817 46% 26% 5,930 49% 26%
Maíz 9,800 37% 21% 19,799 40% 25%
Ñame 1,143 72% 72% 16,980 79% 79%
Coco 463 92% 92% 1,482 86% 86%

San Juan de Urabá


Area Volúmen de
Participaciones con Participaciones con
Cultivo plantada de producción
respecto a: respecto a:
(has) (tons)
Urabá Antioquia Urabá Antioquia
Coco 41 8% 8% 243 14% 14%
Maíz 1,154 4% 3% 1,731 4% 2%
Arroz tradicional 162 2% 1% 194 2% 1%
Plátano 4,133 11% 10% 42,567 11% 10%
Yuca 220 5% 2% 2,640 5% 2%
Ñame 250 16% 16% 2,250 11% 11%

Turbo
Area Volúmen de
Participaciones con Participaciones con
Cultivo plantada de producción
respecto a: respecto a:
(has) (tons)
Urabá Antioquia Urabá Antioquia
Aguacate 110 58% 6% 940 62% 4%
Plátano 25,000 66% 62% 266,400 66% 64%
Maíz 5,625 21% 12% 8,375 17% 10%
Yuca 820 19% 7% 11,700 21% 7%
Banano de exportac. 10,000 32% 32% 368,605 32% 32%
Cacao 854 27% 12% 293 39% 15%
Papaya 75 31% 26% 1,620 44% 38%
Arroz mecanizado 380 70% 5% 1,880 73% 5%
Arroz tradicional 1,300 16% 9% 1,950 16% 8%
Ñame 90 6% 6% 700 3% 3%

Fuente: Oficinas de Campo de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural y las Unidades de Asistencia Técnica Agropecuaria – UMATA.

50 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


ser uno de los cuatro mayores productores de banano se generan 17.000 empleos directos y 54.000 empleos
de exportación del país y por la diversidad de otros indirectos, aparte de los cerca de 3.000 empleos que
cultivos tales como el plátano, la yuca, el maíz, el cacao, se generan a través de otras actividades vinculadas a la
la papaya, el arroz y el ñame. Es tan importante su pro- integración vertical (Augura, 2007).
ducción de plátano y banano, que contribuye con más Una mirada desprevenida a las características de la
del 63,5% de la producción departamental de plátano actividad bananera en el país, ha generado en muchas
con 25.000 hectáreas sembradas, y una producción que ocasiones la creencia de que esta actividad productiva
para el 2005 alcanzó las 266.000 toneladas. En el caso ha sido lo que Bucheli (2002) llamó dependentista16.
del banano, ocupando el segundo lugar después de El autor menciona que existen tres características
Apartadó, representa el 32% de la producción departa- claras según esta escuela de pensamiento: la primera
mental con más de 368.000 toneladas en el 2005. es que las multinacionales cuentan con alto poder
En cuanto a la importancia en el comercio exterior, político que les permite llevar a cabo la explotación de
la Asociación de Bananeros de Colombia - Augura los recursos sin mayores impedimentos por parte del
estima que anualmente se exportan cerca de 60 millones gobierno local o nacional; la segunda, se refiere a que
de cajas de banano, que representan unas 1.360 tonela- las utilidades de la multinacional no son reinvertidas
das, y le generan al país recursos del orden de los 300 en el mejoramiento del bienestar de los trabajadores;
millones de dólares, que equivalen al 35% del total de
exportaciones del departamento de Antioquia y cerca
del 4% de las exportaciones del país.15
En cuanto a la generación de empleo en el sector 15  Las compañías que actualmente se encargan de la comercia-
agrícola la información es bastante limitada. Sin lización del banano de exportación son: Uniban, Proban, Banacol,
embargo, para la producción de banano, que es la prin- Banadex, Bagatela, Conserva, Sunisa, Banafrut y Tropical.
cipal actividad agrícola del Urabá, Augura estima que 16  La historia de la producción bananera en Colombia está
ligada a la llegada de la multinacional United Fruit Company.

a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7 51


Tabla 7. Distribución del inventario bovino en las regiones del departamento de Antioquia
(Número de cabezas y área de pastos, 2005)
Tipo de explotación

Total Bovinos Total Pastos Cabezas/


Municipio
(cabezas) (has) hectárea
Leche Doble Carne
(%) Propósito (%) (%)
Apartadó 9,470 8,120 1 0 2 98
Arboletes 91,484 57,837 2 0 5 95
Carepa 23,462 17,538 1 0 100 0
Chigorodó 75,520 34,190 2 0 13 87
Mutatá 110,792 47,102 2 0 35 65
Necoclí 98,229 115,398 1 4 7 89
S. J. de Urabá 26,563 19,300 1 0 60 40
S. Pedro de Urabá 65,170 34,780 2 0 100 0
Turbo 161,104 164,202 1 2 18 80
Total Urabá 661,794 498,467 1 1 38 61
Bajo Cauca 340,972 346,068 1 4 76 20
Magdalena Medio 321,691 298,247 1 0 50 50
Norte 385,185 357,666 1 58 29 13
Nordeste 171,423 313,915 1 2 80 18
Oriente 256,619 229,558 1 32 53 16
Occidente 165,649 228,399 1 9 62 29
Suroeste 264,307 272,503 1 6 46 48
Valle de Aburrá 77,236 33,205 2 51 25 24
TOTAL ANTIOQUIA 2,644,876 2,578,028 1

Fuente: cálculos del autor, con base en las Evaluciones Agrícolas por Consenso, Umatas municipales, Secretaría de Agricultura y Desa-
rrollo Rural.

y tercero, que existe una posición de postramiento por B. Sector pecuario


parte de las clases influyentes locales, que bloquea la
posibilidad de cualquier tipo de competencia para el Como se mencionó antes, en los cuatro municipios
monopolio multinacional. la mayor parte de la superficie del suelo está dedicada al
Al respecto, Bucheli muestra que si bien en algunos sector pecuario, principalmente a la ganadería bovina.
países de Centroamérica esta pudo ser la situación, en Desagregando a Colombia en regiones ganaderas la
Colombia las condiciones fueron totalmente diferentes. parte norte de Antioquia corresponde a la Zona Norte o
Con el tiempo, no sólo la multinacional se vio obligada llanuras del Caribe, junto con Atlántico, Bolívar, Cesar,
a ajustarse a las regulaciones colombianas, sino que los Córdoba, La Guajira, Magdalena y Sucre, dedicadas
trabajadores fueron ganando un gran poder negociador especialmente a la producción de carne y doble pro-
con el que, en muchas ocasiones, eran ellos los autores pósito (Viloria, 2005a). De los cuatro municipios del
de nuevas iniciativas. De igual forma Bucheli plantea Caribe antioqueño, Turbo es el que menor proporción
que la clase influyente no se mostró pasiva ante las de tierras tiene dedicadas a esta actividad productiva y,
acciones de la multinacional sino que por el contrario, sin embargo, representa el 60%, mientras que los tres
cuando fue necesario, tomó partido en la producción restantes dedican en promedio cerca del 90% de sus
y comercialización de la fruta. tierras a esta actividad.

52 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


La Tabla 7 muestra la distribución del inventario A nivel del agregado regional, Urabá es la región en la
bovino en las diferentes regiones antioqueñas, así como que la mayor parte del hato se destina a la producción
el tipo de explotación ganadera que se lleva a cabo en de carne en el departamento, mientras que la mayoría
cada una de ellas. Adicionalmente, en las primeras filas de las demás regionales tienen una marcada preferencia
de la tabla, se encuentra detallada esa misma informa- por el doble propósito.
ción para los municipios que conforman la región del En cuanto a los empleos que genera esta importante
Urabá antioqueño. Lo que se puede observar es que actividad productiva, la Tabla 8 presenta una aproxi-
tomando los resultados por regiones, el Urabá tiene mación de la mano de obra utilizada según el tipo de
la mayor participación en el departamento, tanto en explotación18.
número de animales como en el área de pastos. Por
ejemplo, esta región participa con el 25% del hato y Tabla 8
con el 20% en el área de pastos. Cálculo aproximado del empleo generado por el
Una segunda característica muestra cómo dentro sector ganadero según tipo de explotación
de los cuatro municipios con mayor número de cabe- (Departamento de Antioquia, 2004)19
zas de ganado se encuentran tres municipios costeros: Municipio
Leche D. propósito Carne Total
Turbo, Arboletes y Necoclí, con participaciones en la subregión
región del 24,3%, 13,8% y 14,8%. Esto indica que en Apartadó 0 9 255 264
conjunto los cuatro municipios representan el 57% del Arboletes 0 219 2,384 2,603
hato regional y con el 14,2% del hato departamental, Carepa 0 1,125 0 1,125
demostrando la gran representatividad dentro de la Chigorodó 0 471 1,802 2,273
producción pecuaria del departamento. Si a esto se le Mutatá 0 1,859 1,975 3,834
agrega la significativa participación que estos muni- Necoclí 306 330 2,398 3,033
cipios han logrado en el sector agrícola, a través de la S. J. de Urabá 0 764 291 1,056
producción de banano y plátano principalmente, es S. Pedro de Urabá 0 3,125 0 3,125
posible destacar su importancia en un departamento Turbo 251 1,390 3,535 5,176
cuyo sector agropecuario representa el 12,8% del PIB Total Urabá 360 11,994 11,182 23,536
departamental, segundo en importancia después de la Bajo Cauca 1,114 12,441 1,842 15,397
industria la cual participa con el 18,3%.17 Magdalena Medio 25 7,681 4,429 12,135
La capacidad de carga, que relaciona el área dedi- Norte 17,256 5,356 1,416 24,028
cada a pastos y el inventario ganadero, muestra que Nordeste 267 6,542 865 7,674
excepto por el Valle de Aburrá, el Urabá presenta mayor Oriente 6,327 6,459 1,119 13,906
capacidad de carga, con un promedio de 1,3 cabezas por Occidente 1,121 4,916 1,336 7,373
hectárea. Sin embargo, si se observa en cada uno de Suroeste 1,295 5,804 3,473 10,572
los municipios del Urabá los resultados muestran que, Valle de Aburrá 3,076 930 502 4,507
excepto por tres de los nueve municipios, la capacidad Total Antioquia 30,841 62,123 26,164 119,127
de carga está por encima del promedio de la región y
del departamento (la cual es muy cercana a la nacional) Nota: Número de trabajadores necesarios según el tipo de explo-
tación ganadera.
con 1 cabeza por hectárea. Al comparar estos resultados Fuente: Cálculos del autor con base en información del Ministerio
con la ganadería de la Costa Caribe, se observa que la de Agricultura y Desarrollo Rural y Fedegán.
capacidad de carga es levemente superior a la del Urabá.
El promedio en los siete departamentos de la Costa
Caribe es de 1,4 cabezas por hectárea mientras que en 17  Este cálculo se realizó con base en la información del DANE
Córdoba es de 1,6 cabezas por hectárea. – Cuentas Departamentales 2004.
En cuanto al tipo de explotación, en la región de 18  Para este cálculo se utilizaron los ponderadores utilizados
para la construcción del Índice de Costos Ganaderos (Fedegan,
Urabá predomina la ganadería de carne, excepto en los 2003).
municipios de Carepa y San Pedro de Urabá, en los 19  Para los cálculos se utilizó la información recolectada en la
cuales la totalidad del hato se destina al doble propósito. Encuesta Nacional Agropecuaria – 2004.

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Los resultados muestran, para cada uno de los mostrara el proceso de producción de la fruta y de los
municipios del Urabá y para las demás regiones del procesos y encadenamientos necesarios para su envío
departamento, el número de empleos generados según a los mercados extranjeros.
si el tipo de explotación es la producción de leche, doble
propósito o carne, así como el total. Lo que se puede IV. Capital humano
observar para el Urabá es la importancia, en primer
lugar, de Turbo, en la generación de empleos, llegando a Pese a toda la riqueza de recursos naturales y al
representar cerca del 22% en la región. Adicionalmente, importante aporte agropecuario para el departamento,
si se agregan los cuatro municipios costeros del depar- los cuatro municipios adolecen del mismo mal que
tamento, estos representan el 50% de los empleos que sus vecinos del Chocó y la Costa Caribe: altos niveles
genera la producción de ganado vacuno del Urabá y el de pobreza, baja cobertura de servicios básicos y una
10% del departamento. alta dependencia de las actividades agropecuarias. En
esta sección se presentan los principales indicadores en
C. Otras actividades productivas cuanto a salud, educación y calidad de vida.

El turismo es otra de las actividades económicas A. Educación y salud


que se pueden desarrollar en el Urabá antioqueño. Esta
región cuenta con una importante dotación de recursos Uno de los principales indicadores cuando de
naturales con la cual podría convertirse en sitio atrac- educación se trata es el alfabetismo, no sólo por la
tivo, no sólo para los turistas nacionales, sino también importancia de sus implicaciones sino por la sencillez
para los extranjeros. Con cerca de 290 kms de costa de su interpretación. Esta medida se refiere al porcentaje
sobre el Mar Caribe y con playas y paisajes que ofrecen de la población que alcanza los niveles mínimos de
una belleza significativa, que sumado a la riqueza en lecto-escritura y, por lo tanto, el menor nivel de capital
flora y fauna logra reunir todas las condiciones para humano de una persona.
la explotación no sólo de turismo tradicional de sol y Lo que se puede observar del Gráfico 1 es que
playa, sino también para el ecoturismo. los municipios de la periferia costera de Antioquia se
Además, el Urabá cuenta con un legado histórico encuentran muy por debajo (en más de 10 puntos por-
que la hace aún más atractiva. Fue precisamente ésta, centuales) del promedio departamental y nacional. Así,
una de las primeras regiones a las que arribaron los mientras que en el promedio departamental el 88% de
primeros conquistadores, en su recorrido desde La las personas saben leer y escribir, en San Juan de Urabá,
Guajira a todo lo largo de la Costa Caribe, en donde por ejemplo, sólo el 75% saben hacerlo, y en Necoclí
establecieron y fundaron poblaciones en las costas del y Arboletes, el 77%. Si los cálculos se discriminan por
Golfo. Necoclí, por ejemplo, considerada como la zonas de residencia de los habitantes, los resultados
primera colonización en tierra firme del Nuevo Mundo dejan ver que en algunos casos las diferencias son aun
debería estar organizada, o al menos contar con un sitio mayores tal como lo muestra el Gráfico 2.
de interés turístico, en el que se recuerde a la huma- En el caso de Necoclí, por ejemplo, la brecha entre
nidad este gran acontecimiento. De igual manera con los niveles de alfabetismo de la población en la zona
las demás poblaciones establecidas como Santa María urbana y la rural es de más de 15 puntos porcentuales,
La Antigua en la parte occidental del Golfo de Urabá y en Turbo es de cerca de 10 puntos.
(hoy en día parte del municipio de Turbo), o Arboletes Otro indicador de gran utilidad para medir los
y San Juan de Urabá, que junto con otras poblaciones niveles de cobertura del servicio de educación es el de
y asentamientos sirvieron durante muchos años de la asistencia escolar. El Gráfico 3a y 3b muestra el grado
guarida para los piratas extranjeros que intentaban de asistencia escolar en cada uno de los municipios, su
atacar los barcos cargados de oro. desagregación para primaria y secundaria y la evolución
Adicional a todas estas características sería intere- con respecto al pasado reciente.
sante que la región pudiera contar con un recorrido Un resultado interesante se desprende de este
turístico, a través de las fincas bananeras, en donde se comportamiento. Al observar el aumento en los nive-

54 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


Gráfico 1 Gráfico 2
Tasa de Alfabetismo para el total del municipio, Tasa de Alfabetismo por zona de residencia, 2005
2005

88.3 88.1
100.0
90.0 90.0
80.0
85.0 70.0
81.0
60.0
80.0 77.1 76.8 50.0
75.2
40.0
75.0
Porcentaje 30.0
20.0
70.0 10.0
0.0
65.0 Nacional Antioquia Arboletes Necoclí S. J. de Turbo
Nacional Antioquia Arboletes Necoclí San Juan Turbo Urabá
de Urabá Cabecera Resto

Fuente: Dane – Censo General de Población 2005. Fuente: Dane – Censo General de Población 2005.

Gráfico 3
Asistencia escolar
(Total del municipio, 2005)
(a) Primaria (b) Secundari

100.0% 100.0%
90.0% 90.0%

80.0% 80.0%

70.0% 70.0%

60.0% 60.0%

50.0% 50.0%

40.0% 40.0%

30.0% 30.0%

20.0% 20.0%

10.0% 10.0%

0.0% 0.0%
Nacional Antioquia Arboletes Necoclí S.J.de Turbo
Nacional Antioquia Arboletes Necoclí S.J.de Turbo Urabá
Urabá
1993 2005 1993 2005

Nota: La Información para primaria en 1993 se refiere a la asistencia escolar de los niños entre los 7 y los 11 años de edad, y la información
para el 2005 se refiere a los niños entre los 6 y los 10 años de edad. En el caso de la secundaria, los datos para 1993 corresponden a los
niños entre los 12 a 17 años, mientras que los de 2005 corresponden a los niños entre los 11 y 17 años.
Fuente: Dane – Censo General de Población 2005 y DNP – SISD.

a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7 55


les de asistencia escolar de primaria entre 1993 y 2005, competencias de los estudiantes en diferentes áreas. Las
sobresale el hecho de que mientras el promedio nacio- pruebas SABER se aplican específicamente a estudian-
nal y el departamental aumentaron en cerca del 6,5%, tes del grado 3º, 5º, 7º, y 9º.
la asistencia aumentó en el 34% para Necoclí, 31% en Teniendo en cuenta los resultados disponibles para
San Juan de Urabá y el 20% en Arboletes y Turbo. Este el municipio de Turbo, de las áreas de lenguaje y mate-
es un resultado muy positivo en el que se han hecho máticas se pueden extraer algunas características de la
esfuerzos en mejorar los niveles de asistencia escolar en Tabla 9. La primera es que los resultados para el área
estos municipios20. de Lenguaje han sido superiores a los de Matemáticas,
Para el caso de la asistencia de los estudiantes de tanto en 5º como en 9º. Si los resultados del municipio
secundaria, los resultados muestran aumentos mucho se comparan con los del promedio departamental se ve
más homogéneos, pero no menos significativos, no una diferencia, los resultados de Turbo son claramente
solamente al comparar a los municipios con el prome-
dio departamental, sino con el nacional. De modo que
los aumentos en los niveles de asistencia en secundaria
estuvieron alrededor del 18%. 20  Los bajos niveles de alfabetismo (de cerca del 80% pro-
medio) para los cuatro municipios, junto con el incremento en la
En lo que tiene que ver con la calidad de la edu-
asistencia escolar, puede estar reflejando un cambio generacional,
cación básica, el sistema educativo contempla una en donde el mayor número de analfabetas se encuentra entre las
serie de pruebas con el fin de establecer los niveles de personas mayores.

56 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


Tabla 9 inferiores. La diferencia más marcada se observa para
Resultados de las pruebas SABER para Lenguaje y Matemáticas del grado 9º en el 2004, ya que mientras
Matemáticas, grados 5º y 9º en Turbo el resultado promedio fue de 48,6 el de
(Turbo, Antioquia y Colombia, 2002-2003 y 2004) Antioquia fue 64,69.
Turbo Por otro lado, están los resultados en el área de
Lenguaje Matemáticas Lenguaje. Esta es el área en la que los puntajes de
2002/03 2004 2002/03 2004 los estudiantes del municipio no se alejan demasiado
Grado 5 65 58 50 51 de la media departamental, incluso la han superado
Grado 9 64 57 56 49 levemente en algunos casos, como, por ejemplo, en el
año 2002-2003. Este resultado debería ser tenido en
Antioquia cuenta por las autoridades educativas del municipio
Lenguaje Matemáticas con el fin de adoptar medidas en el mejoramiento de
2002/03 2004 2002/03 2004 las competencias de los estudiantes en el área de las
Grado 5 63 61 55 55 matemáticas.
Grado 9 63 62 62 65 En cuanto a indicadores de salud, uno de los más
importantes es el número de afiliados al sistema de
Colombia seguridad social en salud. El Gráfico 4 resume para los
Lenguaje Matemáticas cuatro municipios costeros de Antioquia el porcentaje
2002/03 2004 2002/03 2004 de afiliados en cada uno de los dos regímenes.
Grado 5 63 60 57 54 Recordemos que de acuerdo con la legislación,
Grado 9 63 60 61 64 a través del régimen subsidiado se canalizan recursos
hacia la población más pobre y vulnerable. Por otro
Nota: Los resultados correspondientes al municipio de Turbo, se lado, los inscritos en el régimen contributivo aportan
calcularon como el promedio simple de los resultados de los cole-
gios: San José de Mulatos, Colombia Libre y El Dos. un monto repartido entre este y su empleador. Lo que
Fuente: ICFES. se puede observar es que en los cuatro casos, el mayor
número de afiliados recibe este servicio a través del
régimen subsidiado, lo que indica que la mayoría de la
población en cada uno de los municipios presenta un
alto grado de pobreza, vulnerabilidad y dependencia.
El caso más crítico es San Juan de Urabá en donde
Gráfico 4 el número de afiliados al régimen subsidiado supera
Cobertura en el servicio de salud el 80% de los afiliados, en contraste con el promedio
(Régimen subsidiado y contributivo, 2005) departamental que es del 52,1%.
100.0%
B. Indicadores de pobreza
80.0%
Varios estudios han demostrado cómo las pobla-
60.0% ciones localizadas en la periferia del país presentan
ciertas características comunes que las distinguen. En
40.0% su mayoría son poblaciones con predominancia de las
actividades agropecuarias, con altos niveles de pobreza
20.0%
y muy poca infraestructura. Los cuatro municipios
0.0%
costeros de Antioquia no son la excepción, a pesar de
Arboletes Necoclí S.J. de
Urabá
Turbo Arboletes Necoclí S.J. de
Urabá
Turbo formar parte de uno de los departamentos más ricos
Subsidiado Contributivo del país.
En el caso de Arboletes, Necoclí, San Juan de Urabá
Fuente: Gobernación de Antioquia, con base en la Dirección
Seccional de Salud del Departamento. y Turbo, la población se localiza en su mayoría en las

a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7 57


áreas rurales, las cuales presentan menores niveles de Gráfico 5
cobertura de servicios básicos y de infraestructura, lo Indicador de necesidades básicas insatisfechas
cual agrava la situación de pobreza. (NBI)
El Gráfico 5 muestra el porcentaje de hogares que (Total de la población, 1993 y 2005)
presentan al menos una necesidad básica insatisfecha NBI Cabecera
para cada uno de los cuatro municipios y una compa- 90.0
80.0
ración con el indicador para Antioquia y Colombia. 70.0
60.0
Adicionalmente, el gráfico permite determinar si el 50.0

nivel de necesidades insatisfechas mejoró o empeoró 40.0


30.0

en 2005 de acuerdo a lo registrado en 1993. 20.0


10.0
El resultado más claro que se desprende del Grá- 0.0
1993 2005 1993 2005 1993 2005 1993 2005 1993 2005 1993 2005
fico 5 es la magnitud de la brecha entre el indicador Arboletes Necoclí S.J. de Turbo Antioquia Nacional
de NBI para los municipios del Caribe antioqueño, y Urabá

la situación observada en el departamento y el país. Fuente: Dane – Censos Generales de Población, 1993 y 2005.
Mientras en promedio en Antioquia el 22% de los
hogares tienen insatisfecha al menos una necesidad
básica, en estos municipios el porcentaje de hogares
Gráfico 6
en estas condiciones oscila alrededor del 72%.
Indicador de necesidades básicas insatisfechas
Si se comparan los resultados de un año a otro, estos
(NBI)
no son muy alentadores. El único municipio que ha
(Población rural, 1993 y 2005)
logrado reducir en forma importante las necesidades
insatisfechas de sus habitantes es San Juan de Urabá, al 100.0
NBI Resto

90.0
pasar de 87% en 1993 al 75% en 2005. En Arboletes la 80.0
70.0
reducción ha sido de apenas tres puntos porcentuales, 60.0

al pasar del 75% al 72% los hogares con al menos una


50.0
40.0

necesidad insatisfecha. Por otro lado, está Necoclí, al 30.0


20.0

cual parece que no le ha pasado el tiempo, ya que el 10.0


0.0

indicador sigue siendo de 77,8% en 2005, a pesar de 1993 2005 1993 2005 1993 2005 1993 2005 1993 2005 1993 2005
Arboletes Necoclí S.J. de Turbo Antioquia Nacional
que han pasado 13 años desde el último censo de pobla- Urabá

ción. Turbo, que es el menos pobre, tuvo un retroceso Fuente: Dane – Censos Generales de Población 1993 y 2005.
al aumentar el porcentaje de hogares con necesidades
insatisfechas del 64% al 67%.
Si se tienen en cuenta los resultados correspon-
dientes a las áreas rurales para cada uno de los cuatro
municipios (Gráfico 6) los resultados son aún más
preocupantes. Para Arboletes y Necoclí la pobreza Gráfico 7
medida por NBI es de cerca del 90%, mientras que Cobertura de servicios básicos
en San Juan de Urabá, a pesar de una leve reducción (Población total, 2005)
entre 1993 y 2005, sigue siendo del 83%. En el caso de 100.0%

Turbo, pese a ser el municipio menos pobre del grupo 90.0%


80.0%

(73%), presenta un indicador muy alejado del promedio 70.0%


60.0%
50.0%
departamental y nacional. 40.0%
30.0%
Lo que se podría deducir de estos resultados es lo 20.0%
10.0%

que en la literatura se conoce como persistencia de la 0.0%

pobreza. Este concepto se aplica a las personas que, Necoclí


Arboletes
de
Turbo
S.J.Urabá
s
ArboleteNecoclí
Antioquia
de
Turbo
S.J.Urabá
s
ArboleteNecoclí
Antioquia
de
Turbo
S.J.Urabá
Antioquia

durante gran parte de sus vidas, permanecen en condi- E. Eléctrica Alcantarillado Acueducto

ciones que son consideradas como de pobreza21. Stevens Fuente: Dane – Censo General de Población 2005.

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Mapa 3 (1999) menciona que si esto ocurre, los diseñadores
Distribución del NBI de política tienen muy buenas razones para preocu-
(Municipios de Antioquia, Chocó y Córdoba, 2005) parse por entender las causas y consecuencias de largo
plazo de esta situación. Otros autores como Rodgers
y Rodgers (1993) comentan que cuando la pobreza es
severa y de largo plazo, se convierte en un problema
generacional, es decir, aquel en el que la pobreza pasa
de padres a hijos.22
Los resultados de cobertura en servicios básicos
(Gráfico 7) reflejan los niveles de pobreza de los habi-
tantes de estos cuatro municipios. Nuevamente lo que
sobresale es un claro y significativo rezago en cuanto a
infraestructura de servicios básicos en comparación con
el promedio departamental. Resulta sorprendente el
hecho que en servicios tan importantes como acueducto
o alcantarillado la cobertura no alcance ni siquiera para
la mitad de la población, mientras que en promedio
en Antioquia estos servicios están disponibles para más
del 80% de los habitantes. En el caso de Necoclí, por
ejemplo, se observa que en alcantarillado sólo el 20%
de la población cuenta con este servicio, y en acueducto
menos del 40%.
Si se observan con detenimiento estos resultados, y
se comparan con los niveles de necesidades insatisfechas
de los departamentos más pobres del país, es evidente
que estos cuatro municipios, y muchos otros de esta zona
del departamento, parecen hacer parte de Chocó o de
alguno de los departamentos de la Costa Caribe, más
Nota: Para la interpretación del mapa se debe tener en cuenta que de uno de los departamentos más prósperos del país
que los municipios con gris más oscuro son aquellos con mayores
necesidades básicas insatisfechas, es decir, son los más pobres; y lo (ver Mapa 3). El atraso y los altos niveles de pobreza de
contrario para los municipios con los colores más claros. estos municipios tienen raíces históricas y geográficas, tal
Fuente: Dane – Censo General de Población 2005, Igac y cálculos como se mencionó al principio del documento.
del autor.
Antioquia debería darle una mayor importancia a
esta zona del departamento, por tener las características
que tiene, y por el potencial de recursos naturales que
bien pueden ser aprovechados en el turismo y en las
actividades de comercio exterior.
A este último respecto debe recordarse que Turbo
no cuenta con una infraestructura portuaria adecuada.
Por esta razón, las actividades de cargue y descargue
de los barcos se realizan haciendo uso de la zonas de
21  Un concepto contrario es el de pobreza transitoria, en el que fondeo en sitios ubicados al interior del Golfo de
el estado de pobreza de los individuos es de corto plazo. Urabá. El banano de exportación que sale de Turbo
22  En este caso, la probabilidad de que una persona sea pobre, es transportado directamente desde las plantaciones
es mayor si sus padres también fueron pobres. Esta situación está a través de canales de agua, por medio de planchones
estrechamente relacionada con la movilidad social. En términos del
capital humano, existe movilidad social en términos educativos, si que son llevados a los barcos ubicados en las zonas de
los hijos alcanzaron mayores logros educativos que sus padres. fondeo en donde se carga la fruta.

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De acuerdo a las autoridades del municipio, desde decidió intervenir a través de una campaña de mejora-
hace algunos años se ha venido discutiendo la posibili- miento de los indicadores de desempeño fiscal.
dad de construir en el Golfo un puerto moderno, que En la Tabla 10 se observan los resultados de desem-
permita realizar no sólo las actividades de comercio peño fiscal en los municipios del Urabá, mostrando la
exterior que se realizan actualmente, sino ampliar evolución en el tiempo a partir de 2001. En la primera
las posibilidades de salida de mercancías no sólo del columna de cada año está el resultado del indicador,
departamento sino del resto del país. Esta zona cuenta en la segunda su posición a nivel nacional y en la ter-
con la ventaja de tener construida una vía terrestre cera (para los años 2003, 2004 y 2005) la posición al
desde el interior del departamento, lo cual facilitaría interior del departamento. Si se considera la situación
enormemente el movimiento de carga. inicial (2001) y la final (2005), es posible observar que
A nivel de infraestructura vial, el departamento los cuatro municipios del Caribe antioqueño empeo-
tiene proyectada una serie de acciones encaminadas a la raron su desempeño fiscal, ya que en todos los casos el
interconexión de todas las regiones, en donde el Urabá indicador disminuyó de un período a otro. Por ejemplo,
se verá enormemente favorecido con la construcción Arboletes en la clasificación nacional pasó de ocupar
de nuevas vías de comunicación. Un ejemplo de esto la posición 334 en 2001 a ocupar la 991 en 2005, y de
es la terminación de la conexión entre Medellín y la misma forma ocurrió con los demás municipios. La
Arboletes, que abre una nueva ruta con la Transversal Tabla 11 resume para los cuatro municipios algunas
del Caribe que une a Turbo con Cartagena. De igual características del indicador.
forma, se han llevado a cabo obras de pavimentación La tabla muestra en la primera columna el número
que han beneficiado especialmente a los habitantes de de unidades en las que se redujo el indicador de un
Arboletes, Necoclí, San Juan de Urabá y Turbo23. Este año a otro, y en las otras dos columnas se muestra el
proyecto busca no sólo la conexión inter-departamental número de posiciones ganadas o perdidas por cada
sino nacional y de todo el continente, a través de la vía municipio a nivel nacional y departamental, respec-
Panamericana. tivamente. Los resultados dejan ver cómo si bien la
Todo esto en el marco del Plan Estratégico de reducción en el indicador no fue de gran magnitud, la
Antioquia (Planea), a través de la cual la Gobernación pérdida de posiciones sí lo fue. Este comportamiento
del Departamento ha puesto a discusión una serie de obedece a que mientras estos municipios empeoraron
acciones encaminadas hacia el desarrollo local y regional sus indicadores de desempeño fiscal, los demás reali-
de todo el departamento. Adicionalmente, el estudio zaron esfuerzos para mejorarlos, en muchos casos en
prospectivo menciona que las actividades productivas forma significativa. Esto hizo que en términos relativos
en el Urabá no están generando la suficiente riqueza los cuatro municipios perdieran tantas posiciones con
para sus habitantes, para lo cual se propone la búsqueda respecto a los demás.
de nuevas alternativas que permitan la obtención de La razón de esto es básicamente la alta dependen-
productos de mayor valor. cia, en términos de ingresos, de las transferencias de
la nación a través del Sistema General de Participa-
V. Desempeño fiscal ciones (SGP), el endeudamiento y la baja capacidad
de ahorro.
Dentro de las principales responsabilidades de
una administración municipal o departamental está
el manejo de los recursos públicos. Esta tarea consiste
no solamente en el cumplimiento de la ejecución total
de los recursos, sino también en darles un adecuado
manejo que se traduzca en mayores niveles de creci-
miento y desarrollo. El Gobierno Central, a través del
Ministerio de Hacienda al observar, en muchas de las
administraciones, altos niveles de endeudamiento y de
gastos de funcionamiento y bajos niveles de inversión, 23  Gobernación de Antioquia (2006).

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Tabla 10
Indicadores de desempeño fiscal y posición
relativa de cada municipio a nivel nacional y departamental
(Subregión del Urabá, 2001-2005)

2001 2002 2003 2004 2005

Indicador

Indicador

Indicador

Indicador

Indicador
Posición

Posición

Posición

Posición

Posición

Posición

Posición

Posición
nacional

nacional

nacional

nacional

nacional
deptal.

deptal.

deptal.
Municipios

Apartadó 57 299 58 427 50 826 92 60 316 40 65 176 25


Arboletes 56 334 54 703 51 814 85 39 1025 119 51 991 113
Carepa 50 763 52 834 52 742 81 56 603 70 59 480 62
Chigorodó 56 332 51 873 54 621 66 57 501 63 50 995 114
Murindó 42 995 45 970 49 868 95 58 489 60 51 982 111
Mutatá 51 741 43 987 51 817 86 45 983 111 62 293 39
Necoclí 47 944 46 965 39 1023 116 58 449 58 46 1058 121
S. J. de Urabá 50 834 44 977 51 822 87 49 937 104 48 1043 116
S. P. de Urabá 52 647 47 945 50 838 91 52 845 88 58 586 72
Turbo 63 106 52 822 58 353 35 54 737 79 59 457 55
Vigía del Fuerte 51 742 41 996 57 455 47 N.D. N.D. N.D. 53 925 104

Nota: El indicador de desempeño fiscal tiene en cuenta para su cálculo los siguientes aspectos: autofinanciación del endeudamiento,
magnitud de la deuda, dependencia de las transferencias, dependencia de los recursos propios, magnitud de la inversión y capacidad de
ahorro.
Fuente: Gobernación de Antioquia – Anuario Estadístico de Antioquia 2005.

Tabla 11
Cambio en el indicador de desempeño fiscal y número de posiciones
ganadas o perdidas por cada municipio en la clasificación nacional y departamental
(Arboletes, Necoclí, San Juan de Urabá y Turbo, 2005 vs 2001)

Número de posiciones
Número de unidades de aumento Número de posiciones ganadas
ganadaso perdidas por
Municipios o dismunición en el indicador de o perdidas por cada municipio
cada municipio a nivel
2005con respecto al 2001 a nivel nacional
departamental*

Arboletes -6 -657 -28


Necoclí -2 -114 -5
S. J. de Urabá -2 -209 -29
Turbo -3 -351 -20
* La comparación de las psociones a nivel del departamento se hicieron para el 2005 con respecto al 2003.

Fuente: Cálculos del autor con base en Gobernación de Antioquia – Anuario Estadístico de Antioquia 2005.

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VI. Conclusiones Referencias bibliográficas

La región del Urabá antioqueño ha sido hasta


ahora no sólo el territorio más alejado del centro de
desarrollo que lidera Medellín en el departamento,
sino también la más pobre, la menos desarrollada y
la que tiene mayores necesidades insatisfechas. Todo
esto pese a la gran riqueza de recursos naturales y a su
significativo aporte al sector agropecuario, a través de
la producción de plátano y banano de exportación y a
la producción pecuaria. Agrocadenas. (2006). “La cadena de banano en Colom-
Por estar localizados sobre la costa del Mar Caribe, bia”, en Documentos de trabajo, núm. 101, Ministe-
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Juan de Urabá y Turbo, presentan características simi- Agrocadenas Colombia, Bogotá, enero.
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Estas regiones del país cumplen con la doble condición un modelo de paz y desarrollo, posible desde la con-
de estar localizados en la periferia del país y de estar certación laboral. Medellín. Editorial Universidad
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La realidad de estos cuatro municipios parece Augura. “Proceso de producción, transporte y comer-
contradictoria si se tiene en cuenta que no solamente cialización del banano”. En http://www.augura.
forman parte de uno de los departamentos más ricos com.co/banano_procesos.htm, consultado el 9 de
del país, sino que además cuentan con los atributos enero de 2007.
culturales paisas. Sin embargo, estas ventajas parecen Augura. “Proceso de producción, transporte y comer-
ser dominadas, por lo menos hasta ahora, por las carac- cialización del banano”. En http://www.augura.
terísticas geográficas, o aún por el legado colonial. com.co/banano_uraba_actividad.htm, consultado
En términos generales de las apuestas de mediano el 18 de enero de 2007.
y largo plazo, la Antioquia del 2020 es clara, especial- Betancourt, B. “Declaración de amor del modo de ser
mente en lo que tiene que ver con el mejoramiento de antioqueño”. En http://www.lablaa.org/blaavir-
la competitividad. A nivel subregional, la prioridad del tual/literatura/betancur/berrio.htm, consultado el
gobierno departamental es la interconexión interna y la 14 de marzo de 2007.
apertura de nuevas formas de comunicación con el resto Bonet, Jaime (2000). “Las exportaciones colombianas
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64 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


ciudad y regi ó n

El tema comercial en la integración fronteriza:


complementariedad entre el departamento de
La Guajira en Colombia y Venezuela1
Jorge Quintero Otero
Paola Quintero Puentes

Colombia y Venezuela comparten amplias zonas de


frontera2. Históricamente han mantenido una impor-
tante relación comercial y han sido protagonistas de la
integración en el contexto andino. En ese sentido el for-
talecimiento de la vecindad tanto a nivel nacional como
regional es una prioridad. Los problemas compartidos
y la influencia de los propios sobre el vecino, así como
los desafíos que tienen en términos de desarrollo social
y económico, en especial, de sus zonas fronterizas,
parecieran tener más sentido si se piensan en un marco
de cooperación e integración, más allá de las sucesivas
etapas de crisis e integración que desde el nivel nacional
caracterizan la relación entre los dos países.
En el caso La Guajira (Colombia) y Zulia (Vene-
zuela), la existencia de recursos compartidos y de
una población indígena representativa, de municipios
fronterizos deprimidos económica y socialmente, la 1 Este artículo hace parte de los resultados del “Estudio sobre el
presencia de redes económicas, la posibilidad de usar desarrollo de la zona de integración fronteriza (ZIF) entre el depar-
recursos de manera conjunta, así como la de explotar tamento de La Guajira en Colombia y el estado Zulia en Venezuela:
antecedentes, identificación de temas y proyectos prioritarios”,
economías de escala, y la existencia de vías de comuni- contratado por la Gobernación de La Guajira al Observatorio del
cación, entre las más importantes, nos permiten pensar Caribe Colombiano. Este estudio fue realizado por los investigado-
en la alta potencialidad para la conformación de una res Paola Quintero, Jorge Quintero y Ana Maldonado y las asistentes
de investigación Aura García y Laura Leviller, bajo la dirección de
Zona de Integración Fronteriza (ZIF), las cuales son
Weildler Guerra y la asesoría de Cesar Arismendy.
concebidas por la CAN en la Decisión 501 de 2001
2  Estas zonas involucran los departamentos de La Guajira,
como: “… ámbitos territoriales fronterizos adyacentes Cesar, Norte de Santander, Arauca, Vichada, Guainía, Guaviare y
de Países Miembros de la CAN para los que se adoptarán Amazonas, en Colombia, y en Venezuela a los Estados de Zulia,
políticas y ejecutarán planes, programas y proyectos para Táchira, Apure y Amazonas.

a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7 65


impulsar el desarrollo sostenible y la integración fronteriza Marco normativo del comercio La Gua-
de manera conjunta, compartida, coordinada y orientada jira-Venezuela
a obtener beneficios mutuos”.
Para el departamento de La Guajira, su condición Aunque Venezuela denunció oficialmente el
de región fronteriza le brinda importantes oportu- Acuerdo de Cartagena el 22 de abril de 2006, forma-
nidades para impulsar su desarrollo, las cuales no lizando con ello su retiro de la Comunidad Andina
han sido aprovechadas. Se identificaron dos aspectos de Naciones (CAN), según el artículo 153 de dicho
problemáticos principales: las condiciones jurídicas, acuerdo, el país que formaliza su retiro, debe mante-
administrativas y funcionales para jalonar el proceso, ner las ventajas recibidas y otorgadas de conformidad
más específicamente la articulación entre gobierno con el Programa de Liberación de la Subregión, por
central y regional y las capacidades institucionales y un plazo de 5 años. Por esta razón, las relaciones
continuidad de los procesos en lo local; en segundo comerciales entre Colombia y Venezuela, se rigen por
lugar, las relaciones desiguales entre ciudades como el marco normativo de la CAN. Dentro de este marco
Maracaibo y Riohacha y lo que ello plantea en términos normativo se tiene una zona de libre comercio4 y una
de la consecución de beneficios mutuos. unión aduanera5. Sin embargo, por su condición de
En ese sentido es prioritario establecer una agenda departamento fronterizo, en La Guajira rigen normas
de cooperación e integración entre La Guajira y Zulia, adicionales que regulan el comercio con Venezuela, las
con el fin de tener un instrumento para poder entender, cuales se presentan a continuación:
desde lo territorial, alternativas que tienen departamen-
tos y municipios de trabajar en acciones conjuntas, • La Zona de Régimen Aduanero Especial (ZRAE)
independientemente de los modelos de desarrollo que de Maicao, Uribia y Manuare:
se siguen en cada uno de los países.
Considerando el papel fundamental que juega el Las ZRAE fueron concebidas mediante el artí-
intercambio comercial en el desarrollo de las regiones, culo 3 de la Ley 9 de 1991 y el artículo 117 de la Ley
este artículo se propone mostrar los principales sectores 7 de 1992, que facultaron al Gobierno Nacional para
y productos de complementariedad comercial entre expedir normas especiales adecuadas a las necesidades
La Guajira y Venezuela, de tal forma que se puedan especificas de las regiones de la Costa Caribe y Pací-
identificar los productos que tienen mayor potencial fica con el fin de reducir sus desequilibrios y regazos
de comercialización y se desarrollen proyectos que socioeconómicos. La norma consistía en la posibilidad
conlleven a un mayor intercambio comercial entre estas de introducir mercancías de origen extranjero sin el
dos regiones. Lo anterior como una estrategia que le pago de tributos aduaneros, con destino al consumo
permita a La Guajira una mayor participación en el en esas zonas, y especialmente de bienes de capital e
mercado nacional e internacional de bienes y servicios, insumos para propiciar su desarrollo.
generar mayores ingresos para su población y mejorar Sin embargo, es con el decreto 2817 de 1991, modifi-
sus condiciones de vida. cado posteriormente por varias leyes, decretos y resolu-
Lo anterior no implica que lo comercial sea el
único aspecto sobre el que se debe basar el desarrollo
de las regiones fronterizas. Sin duda, para lograr el
desarrollo es necesaria una verdadera integración en
3  El Estudio inicial desarrolla los temas de Institucionalidad
otros aspectos, como el social, cultural y ambiental, y proyecto de construcción de una ZIF, Seguridad y desplazados,
especialmente en una zona de frontera como la que Comercio y oportunidades para el desarrollo de proyectos pro-
comparten el departamento de la Guajira con el estado ductivos, Minas y energía, Turismo, Salud, Educación y Cultura,
Zulia, donde existen muchas patologías en común: y Medio Ambiente.
salud, educación, pobreza, recursos desaprovechados, 4  La zona de libre comercio es el espacio por donde circulan
libremente las mercaderías, sin pagar arancel y sin restricciones.
narcotráfico, guerrilla, delincuencia, degradación
5  La unión aduanera es el espacio donde existe libre comercio
ambiental, y otros más, que no pueden ser resuelto entre un grupo de países y un arancel externo común para las
por un solo país3. importaciones provenientes de terceros países.

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La sal es uno de los productos de La Guajira con mayor potencial de exportación a Venezuela.
En la actualidad este país es el principal comprador de la sal de La Guajira.
Foto Paola Quintero

ciones6, que se reglamentan la ZRAE de Maicao, Uribia un monto de US$ 20.000 por cada envío. En los
y Manaure. Las principales características especiales que envíos se debe liquidar, en la factura de nacionaliza-
tiene actualmente la Zona son las siguientes: ción, el impuesto sobre las ventas y los derechos de
aduana generados por la importación, descontando
· Únicamente pueden beneficiarse del régimen el porcentaje del gravamen arancelario único que se
aduanero especial las mercancías que ingresen por haya cancelado en la importación de dicho bien a la
Bahía Portete. zona. El viajero puede adquirir mercancías hasta por
· Se exige la presentación anticipada de la declaración el valor de US$2.000. Dentro de este cupo el viajero
de importación simplificada bajo la modalidad de puede llevar en cada viaje hasta cuatro electrodomés-
franquicia, y se debe pagar un impuesto de ingreso ticos de la misma clase y hasta doce artículos de la
a la mercancía del 4% sobre el valor en aduana de misma clase diferente a electrodomésticos.
la mercancía.
· Las importaciones para uso exclusivo en la zona, de Históricamente la importancia de las actividades
bienes de capital, maquinaria, equipos y sus partes, relacionadas con el comercio de mercancías en La Gua-
destinados a la construcción de obras públicas de jira configuró un tipo de sociedad diferente. Aspectos
infraestructura, obras para el desarrollo económico como la informalidad y el contrabando hacen parte de
y social, así como los bienes de capital destinados al una cotidianidad. En esta región confluyen una serie
establecimiento de nuevas industrias o al ensanche de aspectos que así lo permiten, entre ellos, el carácter
de las existentes en la zona, gozan de franquicia de semidesértico y las grandes extensiones de tierras con
tributos aduaneros. baja densidad poblacional, la existencia de puertos
· Para la venta de la mercancía a otros países, debe naturales (la mayoría controlados por los indígenas), la
diligenciarse la factura de exportación y no hay falta de oportunidades económicas, la lejanía del centro
lugar a la devolución del gravamen arancelario del país y la tradición de comerciantes de la población.
único del 4% que se haya pagado al momento de Entre los bienes que han sido objeto de contrabando se
la introducción de la mercancía en la zona. destacan las perlas, el dividivi, el aguardiente, los texti-
· Las mercancías importadas a la zona de régimen les, el ganado, el café, la sal, licores y electrodomésticos,
aduanero especial pueden ingresar en el resto del los vehículos y la gasolina.
territorio nacional por el sistema de envíos y de
viajeros. Los comerciantes domiciliados en el resto
del territorio nacional pueden adquirir mercancías 6  Ellos son: los decretos 1706 de 1992, el 2685 de 1999, el 1197
de 2000, la Resolución 5644 de 2000, y las leyes 677 de 2001 y
en la zona de régimen aduanero especial hasta por 788 de 2002

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Maicao se desarrolló desde los años setenta como la seguridad de su propio país”7. En lo comercial, la per-
un gran puerto libre en el que se concentraba y dis- cepción de uno y otro nivel parecieran irreconciliables,
tribuía el capital y las mercancías de contrabando mientras que en temas como el de salud y educación,
provenientes de Panamá y de las islas del Caribe, en se olvida esta disyuntiva. Por ejemplo, en el tema de
especial, Aruba y Curazao. Sin embargo, la apertura salud el gobierno nacional a través de la COPIAF se
económica en los años noventa y los fuertes controles ha convertido en un actor importante para impulsar,
de la DIAN al contrabando llevaron a la crisis del en coordinación con instituciones y actores locales y
comercio en Maicao. venezolanos, un proyecto binacional del cual ya se
En la Guajira colombiana el sentimiento que prima perciben resultados.
es que desde el centro no se entiende su realidad y son Actualmente la dirigencia comercial y cívica de
incapaces de buscar soluciones a su medida, y aún Maicao (CODECCMA), cuyo director es Álvaro Igua-
cuando se asegura que su intención es llegar a niveles rán, lidera una propuesta para incentivar el comercio en
de ‘formalidad’, creen que La Guajira se encuentra la zona. Esta propuesta consiste en ampliar el cupo de
estigmatizada, y que sus buenas intenciones no logran los viajeros para adquirir mercancías a US$2.500 dólares,
ser entendidas. Al respecto Ramírez afirma: “En oca- que no haya restricción al número de artículos y que se
siones, las capitales suelen asimilar el traspaso diario de la puedan comercializar, a cambio de subir el porcentaje del
línea limítrofe por parte de los habitantes de ambos lados impuesto. Otra propuesta de Iguarán es que se brinden
al contrabando o la acción de organizaciones criminales.
En cambio, las poblaciones fronterizas suelen defender a
ultranza la informalidad de sus relaciones y desconocer los
7  Socorro Ramírez (2005: 104)
efectos que la economía ilegal genera en el desarrollo y en

Maicao puede convertirse en un centro de relocalización de la industria colombiana que exporta a Vene-
zuela. Sin embargo, para ello es necesario que se brinden las condiciones, mejorando la infraestructura
de servicios públicos, aumentando la calificación de la mano de obra local y brindando un tratamiento
tributario preferencial a las empresas que se trasladen al municipio.
Foto juselys pérez

68 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


las condiciones (infraestructura de servicios públicos, frontera se han conformado cuatro cooperativas: Wayuu-
calificación de la mano de obra local, tratamiento tribu- coop, Shiliwalacoop, Tawala coop y Estrewacoop.
tario preferencial, entre otros) para una zona en Maicao La normativa vigente (Resolución No. 01922 del 23
donde las empresas nacionales se puedan establecer. de febrero de 2007 de la DIAN), establece una lista de
Maicao puede convertirse en un centro de relocalización bienes y cupos máximos semestrales que pueden ingresar,
para la industria nacional que exporta a Venezuela. a través del paso de frontera de Paraguachón hacia los
depósitos privados habilitados por la DIAN pertenecien-
• Introducción de combustible y productos de tes a la comunidad indígena Wayuu, habitantes de la
La Guajira desde Venezuela:
la canasta familiar a zona de régimen aduanero especial de los municipios de
Maicao, Uribia y Manaure. Los alimentos de consumo
Dada la diferencia de precios entre el combustible humano y animal, elementos de aseo y los medicamentos
venezolano y el colombiano, la legislación colombiana para uso humano o veterinario, originarios de los países
permite, bajo ciertas restricciones, la importación en colindantes, están exentos de IVA según el artículo 27 de
departamentos y municipios fronterizos de combusti- la Ley de Fronteras, lo que ha favorecido a la región, al
bles de países vecinos. El artículo 1 de la ley 681 de 2001, permitir el ingreso de los alimentos a un menor precio, lo
que modificó el artículo 19 de la ley 191 de 1995 (Ley de cual se explica principalmente por el valor de la moneda
fronteras), permite la importación de combustibles en colombiana frente a la venezolana y por el subsidio que
los municipios fronterizos, pero dejando la distribución el gobierno realiza sobre los productos de la canasta
de dicho combustible a Ecopetrol. Sin embargo, Ecope- familiar en Venezuela.
trol puede ceder o contratar, total o parcialmente, con
los distribuidores mayoristas, reconocidos y registrados Flujo de intercambio comercial
como tales por el Ministerio de Minas y Energía o con
terceros, la importación, transporte, almacenamiento, Las exportaciones de La Guajira en el año 2005
distribución o venta de los combustibles. totalizaron 1.185 millones de dólares, siendo jalonadas
Esta introducción de combustible venezolano en por las exportaciones tradicionales, específicamente las
los municipios fronterizos colombianos es posible gra- relacionadas con la explotación del carbón, las cuales
cias a un acuerdo entre Ecopetrol y PDVSA, en el cual representaron el 99,6% de las exportaciones totales del
la segunda le vende combustibles líquidos derivados departamento. Los cinco principales mercados fueron
del petróleo a la primera, quien los distribuye en el en su orden Holanda, Estados Unidos, Turquía, Canadá
departamento de La Guajira, a través de la cooperativa y Portugal, los cuales concentraron el 66% del total de
AYATAWACOOP. las exportaciones. Estos países demandaron sólo hulla
La Unidad de Planeación Minero-Energética bituminosa, con excepción de Estados Unidos a donde
(UPME) es quien establece en cada municipio de también se exportaron crustáceos.
Zona de Frontera el volumen máximo de combustibles Las exportaciones a Venezuela sumaron 2,85 millones
líquidos derivados del petróleo que puede distribuir de dólares, es decir, sólo el 0,24% del total de exportacio-
Ecopetrol. En el 2006, según información del Ministe- nes del departamento. Sin embargo, esta cifra representa
rio de Comercio Exterior, Ayatawacoop importó 58.879 un fuerte incremento con respecto al monto de las
metros cúbicos de combustible venezolano, los cuales exportaciones de los dos años anteriores en los que no
tuvieron un valor FOB de US$12.585.681. se alcanzaron ni siquiera los 400 mil dólares, debido a
Por otra parte, la Ley de Fronteras, en su artículo la crisis económica del país vecino (gráfico 1).
17, permite la introducción de bienes originarios de los La leche es el producto con mayor importancia en
países colindantes exclusivamente para consumo dentro ese mercado (82,9%), seguido por la sal y las preparacio-
de las Unidades Especiales de Desarrollo Fronterizo. En nes alimenticias con un 8,2% y 5,5% respectivamente.
La Guajira, el ingreso de productos de la canasta familiar Es decir que tres subpartidas concentran más del 96%
desde Venezuela se da a través de cooperativas indígenas, de las exportaciones de La Guajira a Venezuela, situa-
que es el esquema de trabajo impuesto por el marco legal ción que pone de manifiesto la necesidad de ampliar
colombiano para controlarlo. Para el comercio en la las oportunidades en dicho mercado, especialmente

a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7 69


teniendo en cuenta la pertenencia física y cultural a región y las importaciones de otro, entendiendo que
una misma región. una mayor complementariedad estaría relacionada con
Por otra parte, en el año 2005, las importaciones un mayor comercio entre los dos países. Este índice se
de La Guajira superaron los 412 millones de dólares. construye a partir de la siguiente fórmula:
De ellas, el 75% correspondieron a combustibles,
maquinarias y material de transporte, que son emplea- ⎡ s ms ⎤ ⎡ xis .msj ⎤
⎢ xi j s⎥
dos en la explotación del carbón. Estados Unidos C =∑ s ⋅ ⋅ tw⎥ = ∑ ⎢ s ⎥
es el principal vendedor, con una participación del
ij s ⎢ tw t s s ⎢ tw ⎥
⎣⎢ w ⎥⎦ ⎣ ⎦
57.1% del total de importaciones del departamento.
Canadá ocupa el segundo lugar con el 10.6%, seguida Donde,
de Alemania, Japón y Francia con 7%, 6,7% y 5,8%, xis es la participación del bien “s” en las expor-
respectivamente. taciones de “i”
Las importaciones provenientes de Venezuela msj es la participación del bien “s” en las impor-
alcanzaron en el 2005 casi 14 millones y medio de dóla- tacioness de “j”
res (3,5% del total de importaciones del departamento), tw es la participación del bien s en las importa-
lo que representa una fuerte disminución respecto al ciones mundiales (neta de las importaciones de i).
monto registrado en 2004 cuando superaron los 37 Este índice, tomará valores mayores que uno, si
millones de dólares (Gráfico 2). Casi la mitad de las existe una fuerte complementariedad entre la demanda
importaciones de La Guajira provenientes de Venezuela importable de la región “j” y la oferta exportable de la
(46,5%) corresponden al sector de las manufacturas y región “i”. Por el contrario, tenderá a cero, cuando la
fundición del hierro, específicamente torres y castilletes región “i” no exporta los mismos bienes que importa
de fundición, hierro o acero, los cuales fueron impor- “j”8.
tados por Interconexión Eléctrica S.A (ISA S.A.) desde Aunque el ICC, tal como lo proponen Anderson
Caracas. Otros productos importados desde Venezuela y Norheim (1993), es muy útil, debido a que permite
en cantidades considerables son las preparaciones deri- conocer qué tan complementarias son las economías,
vadas de pescados (11,8%) y los cereales, específicamente tiene una limitante importante: no permite determi-
arroz (10,2%). nar los sectores en los que son complementarias las
Del total de importaciones provenientes de regiones. Para superar esta restricción, y determinar los
Venezuela, el 28% proviene del estado Zulia, siendo principales sectores de complementariedad comercial
la gasolina el principal producto importado desde entre La Guajira y Venezuela, se utilizó una variación
dicho Estado (28,6%), seguido de artículos de grifería, del ICC que se denominó Índice de Complementa-
específicamente válvulas llamadas árboles de navidad riedad Comercial por sector (ICCS) que se obtiene
(20,7%), arroz (14,4%), sacos y bolsas de polímeros de multiplicando la participación de las exportaciones de
etileno (6,9%) y sardinas (6,6%). un sector o producto en el total de las exportaciones de
una región, por la participación de las importaciones
Principales sectores de del mismo sector o producto en el total de las impor-
complementariedad comercial taciones de la otra región. Los sectores o productos
entre La Guajira y Venezuela que obtienen un mayor índice son los que presentan
un mayor potencial de comercialización entre las
A partir del análisis de las cifras de comercio regiones.
exterior y la construcción de un índice de comple- La complementariedad comercial entre La Guajira
mentariedad comercial se puede determinar qué tan y Venezuela se analizó, a partir del cálculo de dos ICCS
complementarias son, en términos comerciales, las para el año 2005, uno que compara las exportaciones de
economías de dos regiones.
El Índice de Complementariedad comercial (ICC) fue
propuesto por Anderson y Norheim (1993), y muestra
el grado de coincidencia entre las exportaciones de una 8  Marcel Vaillant (2003: 3-4).

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Gráfico 1. La Guajira. Monto de exportaciones a Gráfico 2. La Guajira. Monto de importaciones
Venezuela, 2002-2005 desde Venezuela, 2002-2005

Fuente: DIAN Fuente: DIAN

Tabla 1. Sectores de Venezuela con mayores posibilidades de exportación a La


Guajira según capítulos del arancel

CAPÍTULO DEL
POSICIÓN DESCRIPCIÓN ÍNDICE
ARANCEL
Combustibles minerales, aceites minerales y productos de su destilación;
1 27 0.13108971
materias bituminosas; ceras minerales.
Vehículos automóviles, tractores, velocípedos y demás vehículos
2 87 0.00612572
terrestres; sus partes y accesorios.
Reactores nucleares, calderas, máquinas, aparatos y artefactos mecánicos;
3 84 0.00219228
partes de estas máquinas o aparatos.

4 73 Manufacturas de fundición, hierro o acero 0.00063033

5 40 Caucho y sus manufacturas 0.00044469

6 31 Abonos 0.00028853
Máquinas, aparatos y material eléctrico, y sus partes; aparatos
de grabación o reproducción de sonido, aparatos de grabación o
7 85 0.00025662
reproducción de imagen y sonido en televisión, y las partes y accesorios
de estos aparatos.
8 72 Fundición, hierro y acero 0.00015622

9 29 Productos químicos orgánicos 0.00011368

10 39 Plástico y sus manufacturas 9.5633E-05


Instrumentos y aparatos de óptica, fotografía o cinematografía, de
11 90 medida, control o precisión; instrumentos y aparatos medicoquirúrgicos; 2.7994E-05
partes y accesorios de estos instrumentos o aparatos.
Productos químicos inorgánicos; compuestos inorgánicos u orgánicos de
12 28 los metales preciosos, de los elementos radioactivos, de metales de las 2.1504E-05
tierras raras o de isótopos.
13 38 Productos diversos de las industrias químicas. 1.3726E-05

14 44 Madera, carbón vegetal y manufacturas de madera 1.1154E-05

Herramientas y útiles, artículos de cuchillería y cubiertos de mesa, de


15 82 1.0486E-05
metal común; partes de estos artículos, de metal común.

Fuente: Cálculo del Observatorio del Caribe Colombiano con base en DIAN y ALADI

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Tabla 2. Productos de Venezuela con mayores posibilidades de exportación a La Guajira según
subpartidas arancelarias.
SUBPARTIDA
POSICIÓN DESCRIPCIÓN ÍNDICE
ARANCELARIA
Aceites de petróleo o de mineral bituminoso, excepto los aceites crudos;
1 271000 preparaciones no expresadas ni comprendidas en otra parte, con un contenido de 0.00055885
aceites de petróleo o de mineral bituminoso superior o igual al 70% en peso.
2 870899 Bastidores de chasis y sus partes 0.00024931

3 870410 Volquetas automotores concebidos para utilizarlos fuera de la red de carreteras 9.5713E-05

4 840999 Bloques y culatas para motores no clasificables partida 84.08 6.6392E-05

5 842952 Máquinas cuya superestructura pueda girar a 360 4.9698E-05

6 848180 Los demás artículos de grifería y órganos similares 4.0559E-05


Los demás tubos de entubación (casing) o de producción (´tubing´) y tubos de
7 730429 perforación, del tipo de los utilizados para la extracción de petróleo o gas, de hierro 2.5701E-05
o acero
Las demás partes identificables como destinadas exclusiva o principalmente a las
8 843149 máquinas o aparatos partidas 84.26, 84.29 u 84,30
1.99E-05

9 852520 Aparatos emisores con aparato receptor incorporado 1.7165E-05


Los demás vehículos automóviles para transporte de mercancías, con motor de
10 870423 embolo (pistón), de encendido por compresión (diesel o semidiesel), de peso total 1.3109E-05
con carga máxima superior a 20 t.
11 732690 Barras de sección variable, de hierro o acero 1.2735E-05

12 848590 Aros de obturación (retenes o retenedores) 1.2096E-05

Vagones de descarga automática, excepto los de las subpartidas 86.06.10.00 u


13 860630 86.06.20.00
1.2077E-05

14 841391 Las demás partes de bombas para líquidos 1.1659E-05


Engranajes y ruedas de fricción, excepto las ruedas dentadas y demás órganos
elementales de transmisión presentados aisladamente; husillos fileteados de bolas
15 848340 o rodillos; reductores, multiplicadores y variadores de velocidad, incluidos los
1.1586E-05
convertidores

Fuente: Cálculo del Observatorio del Caribe Colombiano con base en DIAN y ALADI

La Guajira con las importaciones de Venezuela, y otro 2. En dichas tablas se observa que el sector de Venezuela
que analiza la relación contraria. Para ello, se utilizaron con mayor potencial de exportación a La Guajira es el de
las cifras de comercio exterior para el departamento combustibles minerales, aceites minerales y productos
de La Guajira por capítulos (sectores) y subpartidas de su destilación; materias bituminosas; ceras minera-
(productos) del arancel que se encuentran en el Sistema les (capítulo 27 del arancel). Dentro de los diferentes
Estadístico de Comercio Exterior (SIEX) de la Direc- productos de este sector, los aceites de petróleo o de
ción de Impuestos y Aduanas Nacionales de Colombia mineral bituminoso son los que tienen mayor potencial
(DIAN). Por su parte, la información de comercio de exportación a La Guajira (subpartida 271000).
exterior de Venezuela se obtuvo de la Asociación Lati- Otros sectores que contienen productos que Vene-
noamericana de Integración (ALADI). zuela produce y que La Guajira demanda son el de
vehículos automóviles, tractores, velocípedos y demás
Sectores y productos de Venezuela con vehículos terrestres; sus partes y accesorios (capítulo 87)
mayores posibilidades de exportación y el de reactores nucleares, calderas, máquinas, aparatos
a La Guajira y artefactos mecánicos; partes de estas máquinas o apa-
ratos (capítulo 84), manufacturas de fundición, hierro
Los sectores y productos de Venezuela que tienen o acero (capítulo 73) y el de caucho y sus manufacturas
mayores posibilidades de inserción en el mercado guajiro, (capítulo 40).
luego de aplicar el ICCS, se presentan en las tablas 1 y

72 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


Tabla 3. Sectores de La Guajira con mayores posibilidades de exportación a Venezuela según capítulos
del arancel
CAPITULO DEL
POSICIÓN DESCRIPCIÓN ÍNDICE
ARANCEL
Combustibles minerales, aceites minerales y productos de su destilación; materias
1 27 bituminosas; ceras minerales. 0.00807271

Reactores nucleares, calderas, máquinas, aparatos y artefactos mecánicos; partes de


2 84 estas máquinas o aparatos. 0.000144458
Máquinas, aparatos y material eléctrico y sus partes; aparatos de grabación o
3 85 reproducción de sonido, aparatos de grabación o reproducción de imagen y sonido en 4.02713E-05
televisión, y las partes y accesorios de estos aparatos.
Vehículos automóviles, tractores, velocípedos y demás vehículos terrestres; sus partes
4 87 y accesorios. 2.11232E-05

Leche y productos lácteos; huevos de ave; miel natural; productos comestibles de


5 04 origen animal, no expresados ni comprendidos en otra parte. 1.74549E-05

6 21 Preparaciones alimenticias diversas 9.66193E-07

7 25 Sal; azufre; tierras y piedras; yesos, cales y cementos. 6.61774E-07

8 73 Manufacturas de fundición, hierro o acero 4.45002E-07

9 44 Madera, carbón vegetal y manufacturas de madera 2.84106E-07


Instrumentos y aparatos de óptica, fotografía o cinematografía, de medida, control o
10 90 precisión; instrumentos y aparatos medicoquirúrgicos; partes y accesorios de estos 2.57075E-07
instrumentos o aparatos.
11 89 Barcos y demás artefactos flotantes. 1.14519E-07

12 40 Caucho y sus manufacturas 4.26632E-08

Vehículos y material para vías férreas o similares, y sus partes; aparatos mecánicos
13 86 (incluso electromecánicos) de señalización para vías de comunicación. 3.61857E-08

14 03 Pescados y crustáceos, moluscos y demás invertebrados acuáticos 7.28219E-09


Muebles, mobiliario medicoquirúrgico; artículos de cama y similares; aparatos de
15 94 alumbrado no expresados ni comprendidos en otra parte; anuncios, letreros y placas 5.6814E-09
indicadoras luminosos y artículos similares; construcciones prefabricadas

Fuente: Cálculo del Observatorio del Caribe Colombiano con base en DIAN y ALADI

Sectores y productos de La Guajira con más exporta el departamento, no se está exportando


mayores posibilidades de exportación a a Venezuela. Cabe destacar que aunque en Venezuela
Venezuela también se produce la hulla bituminosa, en 2005
importó una pequeña cantidad de este producto, por
Los sectores y productos que en La Guajira pueden lo que La Guajira debería estar atenta para cuando
contribuir en mayor medida al crecimiento de las la producción en Venezuela no alcance a suplir la
exportaciones a Venezuela se presentan en las tablas 3 y demanda.
4, respectivamente, en las que se aprecia que el sector de Según los índices calculados, los siguientes sectores
combustibles minerales, aceites minerales y productos con alto potencial de exportación de La Guajira a Vene-
de su destilación; materias bituminosas; ceras minerales zuela serían: (i) reactores nucleares, calderas, máquinas,
(capítulo 27 del arancel) es también el sector que tiene aparatos y artefactos mecánicos; partes de estas máqui-
mayor opción exportadora a Venezuela. Sin embargo, nas o aparatos (capítulo 84); (ii) máquinas, aparatos y
mientras que de Venezuela a La Guajira, el producto material eléctrico, y sus partes; aparatos de grabación
con mayor potencial de comercio son los aceites de o reproducción de sonido, aparatos de grabación o
petróleo o de mineral bituminoso, de La Guajira a reproducción de imagen y sonido en televisión, y las
Venezuela, el producto con mayor potencial de expor- partes y accesorios de estos aparatos (capítulo 85); y (iii)
tación es la hulla bituminosa (subpartida 270112). vehículos automóviles, tractores, velocípedos y demás
En la actualidad este producto, aunque es el que vehículos terrestres; sus partes y accesorios (capítulo

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Tabla 4. Productos de La Guajira con mayores posibilidades de exportación a
Venezuela según subpartidas arancelarias.

SUBPARTIDA
POSICIÓN DESCRIPCIÓN ÍNDICE
ARANCELARIA
1 270112 Hulla bituminosa 2.049E-05

2 040221 Leche sin endulzantes u otros colorantes 1.1191E-05

Demás preparaciones alimenticias no expresadas ni comprendidas en otras


3 210690 subpartidas 7.1711E-07

Demás motores de embolo de encendido por compresión (motores diesel o


4 840890 semi-diesel) 3.4737E-07

Demás motores de embolo de encendido por compresión (motores diesel o


5 840890 semi-diesel) 3.4737E-07

6 840999 Bloques y culatas para motores no clasificables partida 84.08 2.6793E-07

Demás partes identificables como destinadas, exclusiva o principalmente a los


7 852990 aparatos de las partidas 85.25 a 85.28 2.5272E-07

Partes identificables como destinadas, exclusiva o principalmente, a las


8 850300 máquinas de las partidas 85.01 u 85.02 1.0912E-07

9 842920 Niveladoras 7.1835E-08

10 848180 Los demás artículos de grifería y órganos similares 5.8028E-08

Las demás partes identificables como destinadas exclusiva o principalmente a


11 843149 las máquinas o aparatos partidas 84.26, 84.29 u 84,30 5.6161E-08

Demás partes de máquinas o aparatos no explicados en otras parte del


12 848590 capitulo 4.8509E-08

Engranajes y ruedas de fricción, excepto las ruedas dentadas y demás órganos


elementales de transmisión presentados aisladamente; husillos fileteados
13 848340 de bolas o rodillos; reductores, multiplicadores y variadores de velocidad, 3.6957E-08
incluidos los convertidores.

14 841950 Intercambiadores de calor 3.6522E-08

Topadoras frontales ´bulldozers´ y topadoras angulares ´angledozers´, de


15 842911 orugas 1.874E-08

Fuente: Cálculo del Observatorio del Caribe Colombiano con base en DIAN y ALADI

87). Sin embargo, los productos de estos capítulos que su totalidad al mercado venezolano.
La Guajira usualmente exporta, no son producidos en Los sectores de preparaciones alimenticias diversas
el departamento, sino importados por las empresas que (capítulo 21) y de sal, azufre, tierras y piedras, yesos,
explotan los recursos minerales del departamento, y cales y cementos (capítulo 25) también se destacan
una vez que han cumplido su función son reenviados por ser bastante complementarios con Venezuela. En
o exportados nuevamente al país de origen. el primer sector el producto con mayor potencial fue
Otro sector del departamento de La Guajira con el chirrinchi (subpartida 210690), el cual tiene en la
alto potencial de exportación que se identificó calcu- actualidad a Venezuela como el único destino de sus
lando la complementariedad por capítulo del arancel es exportaciones. En el segundo sector el mayor potencial
el de la leche y productos lácteos; huevos de ave; miel lo tiene la sal, seguido del yeso natural, productos cuyo
natural; productos comestibles de origen animal, no principal país comprador es Venezuela.
expresados ni comprendidos en otra parte (capítulo 4). De lo anterior, se puede afirmar entonces que,
En este sector el producto con mayor como potencial de los productos que actualmente está exportando
es la leche, que en la actualidad se está exportando en La Guajira, los que tienen una mayor posibilidad de

74 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


Tabla 5. 15 nuevos productos de La Guajira con potencial de exportación a Venezuela

PROMEDIO DE
POTENCIAL DE IMPORTACIONES DE
PRODUCTO SUBPARTIDA
EXPORTACIÓN VENEZUELA 2003 – 2005 (MILES
DE DÓLARES FOB)
Tabaco total o parcialmente desvenado o
desnervado 240120 Muy Alto 2248
Bolsas de viaje con la superficie exterior de
hojas de plástico o materia textil 420292 Muy Alto 1834
Mantas de fibras sintéticas (excepto las
eléctricas) 630140 Muy Alto 1470

Artículos de Bolsillo con la superficie exterior


de hojas de plástico o materia textil 420232 Muy Alto 1401

Los demás mangos preparados o preservados 200899 Muy Alto 1145

Mantas de algodón (excepto las eléctricas) 630130 Muy Alto 266

Cigarros (puros) (incluso despuntados) y


cigarritos (puritos), que contengan tabaco 240210 Muy Alto 262

Tabaco sin desvenar o desnervar 240110 Muy Alto 180

Camarones, langostinos y demás Decápodos


natantia 160520 Muy Alto 73

Cangrejos (excepto macruros) 160510 Muy Alto 69


Aceite de almendra de palma o aceite de
babassu. 151329 Muy Alto 33

Las demás Salsas derivadas o preparadas del


pescado 210390 Alto 7809

Grasas y aceites de pescado y sus fracciones,


excepto los aceites de hígado 150420 Alto 334

Cestas de materia vegetal 460210 Alto 82

Fuente: Cálculo del Observatorio del Caribe Colombiano con base en Araujo Ibarra y ALADI.

comenzar a comercializarse en Venezuela o incrementar ductos que aunque actualmente no se están exportando,
el valor de sus exportaciones, son la hulla bituminosa, tienen altas posibilidades de comercializarse en el mer-
la leche, el chirrinchi, la sal y el yeso natural, los cuales, cado venezolano en un futuro cercano.
con excepción del primero, ya se están exportando al La identificación de estos productos se realizó
país vecino. Para aumentar las exportaciones de estos comparando la oferta potencial de productos del depar-
productos deben elaborarse planes tendientes a mejo- tamento de La Guajira y la demanda de Venezuela por
rar su proceso de producción, y así, lograr un mayor ellos. Para lo primero se utilizó la información sobre
excedente para la exportación y generar un producto productos con potencial de oferta alto o muy alto, obte-
a un menor costo que sea más competitivo. nida del estudio de Araujo Ibarra “500 Nuevos Productos
Sin embargo, tal como lo contempla el Plan y Servicios con Gran Potencial de Mercado en los Estados
Estratégico Exportador de la Guajira9, para facilitar
el desarrollo económico y la generación de empleo, es
necesario ampliar la oferta exportable del departamento. 9  Comité Asesor Regional de Comercio Exterior – CARCE
Pensando a ello, también se identificaron algunos pro- Guajira. Plan Estratégico Exportador de Guajira. Año 2002

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Unidos”, mientras que para lo segundo, se observó el de La Guajira con miras al TLC con Estados Unidos.
comportamiento de las importaciones venezolanas A su vez, la demanda de Venezuela por este tipo de
para los años 2003 a 2005. Los 15 productos del depar- productos, especialmente camarones, langostas, can-
tamento de La Guajira con un mayor potencial para grejos, y grasas, aceites y salsas derivadas del pescado
comenzar a exportarse a Venezuela, teniendo en cuenta es significativa, lo que lo convierte en un mercado
los anteriores criterios se presentan en la tabla 5. natural para este tipo de producto. Sin embargo, la
Estos 15 productos pueden clasificarse en 5 grupos, debilidad del departamento de La Guajira consiste
los cuales se relacionan a continuación junto con una en que el producto pesquero se maneja a nivel de
breve descripción del por qué tienen potencial de producto fresco sin procesarlo o transformarlo, lo
exportación a Venezuela: cual se hace en otras ciudades de la Región Caribe,
principalmente Cartagena, donde se le agrega valor
• Tabaco y sus sucedáneos (subpartidas y se exporta. Por ello, se hace necesario la industria-
240110, 240120 y 240210): La Guajira es el departa- lización de la pesca mediante la creación de empresas
mento del país donde el cultivo de tabaco registra los que acopien, conserven y procesen los productos
mayores rendimientos (2.4 toneladas métricas por Hec- pesqueros, aprovechando la riqueza ictiológica del
táreas). Además, los rendimientos presentados están Departamento. No obstante, la pesca industrial no
por encima del promedio mundial y de los bloques debe implicar la eliminación de la pesca artesanal, tal
comerciales del hemisferio como el MERCOSUR y la como lo considera el Plan de desarrollo 2004-2007:
CAN10. En la actualidad, pese a la vocación productora “Esta industrialización no debe significar la elimina-
del departamento, que ha venido aumentado en los ción de la pesca artesanal, porque ésta provee empleo e
últimos años, hasta alcanzar en el 2005 una produc- ingreso para una importante población indígena dedi-
ción superior a las mil toneladas, aún no se registran cada tradicionalmente a estas faenas, que constituyen
exportaciones de este producto. No obstante, las buenas parte significativa de su cultura. De lo que se trata es
condiciones de oferta del producto, y la considerable de modernizarla mediante la incorporación de técnicas,
demanda por parte de Venezuela, hacen del tabaco un equipos, gestión empresarial, capital de trabajo y organi-
producto con altísima posibilidad de inserción en el zación comunitaria, para hacerla más rentable y menos
país vecino. agobiante para los pescadores. Por otra parte, los actuales
pescadores artesanales podrían en el futuro –si fuera su
• Artesanías (subpartidas 420232, 420292, deseo– incorporarse ellos mismos favorablemente en el
460210, 630130 y 630140): En Venezuela existe una futuro al proceso de industrialización mediante una o
alta demanda de artículos artesanales, principalmente varias empresas cooperativas”11.
billeteras, monederos y bolsos de cuero, cestas de mate-
rial vegetal y mantas de algodón y de fibra sintética. • Aceite de palma (subpartida 151329): El aceite
En La Guajira hay una producción importante de de palma es uno de los productos con mayor potencial
este tipo de artículos, principalmente por la comuni- de exportación. La Guajira ha logrado incrementar
dad indígena que habita en el departamento. Por lo de manera notable en los últimos años su producción
anterior, debe promoverse la comercialización de estos alcanzando en el 2005 un total de 1.804 toneladas. Este
productos en el mercado venezolano, lo cual no sólo hecho, unido a la considerable importación de palma de
favorecería la competitividad del departamento, sino aceite por parte de Venezuela, hace que este producto
que también contribuiría al mejoramiento económico tenga también muchas posibilidades de inserción en el
de los artesanos indígenas. Dado que la comunidad país vecino.
indígena también es representativa del lado venezolano,
se sugiere realizar proyectos de carácter binacional.

• Pesca y acuicultura: (subpartidas 150420, 10  Héctor Martínez (2005: 14-15).


160510 y 160520, y 210390): La pesca y la acuicultura 11  Gobernación de La Guajira. Plan de Desarrollo Departa-
es una de las apuestas productivas del departamento mental, 2004-2007: 142 – 143.

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• Mango (subpartida 200899): El mango es Vaillant, Marcel (2003), “Impacto del ALCA en
una de las apuestas productivas del departamento de el comercio intrarregional y en el comercio de
La Guajira de cara al TLC con Estados Unidos. La los países miembros de la ALADI con Estados
razón es la importante producción de esta fruta en el Unidos y Canadá (Anexo metodológico)”. Trabajo
departamento (más de 2.000 toneladas, aunque toda presentado en el Seminario – Taller de Expertos
destinada a satisfacer la demanda interna). Además, Gubernamentales sobre Incidencias en el ALCA en
el mango cultivado en el trópico presenta ventajas el proceso de Integración en la ALADI, realizado
competitivas por su calidad, textura, aroma, color y el 12 y 13 de septiembre: 3-4.
contenido de azúcar. Lo anterior, sumado a que en
Venezuela hay una importante demanda por este pro-
ducto, hace que el mango tenga muchas posibilidades
de comercializarse en ese país. Sin embargo, es necesario
que se de un crecimiento notable en la producción, lo
cual es posible si se adelantan programas de fomento
del cultivo adoptando nuevas tecnologías.

Como se ve, La Guajira posee varios productos


con potencial de exportación al mercado venezolano,
su mercado natural en el exterior. Lo que se requiere es
fomentar la inversión rural de carácter empresarial que,
adoptando nuevas tecnologías, explote y comercialicen
con alto valor agregado estos productos promisorios
del departamento, lo cual, sin duda, contribuirá al
desarrollo económico y la generación de empleo en
La Guajira. a

Bibliografia

Comité Asesor Regional de Comercio Exterior


– CARCE Guajira. Plan Estratégico Exportador
de Guajira. Año 2002
Gobernación de La Guajira. Plan de Desarrollo Depar-
tamental, 2004-2007: 142 – 143.
Martínez, Héctor et. Al (2005). La cadena del Tabaco
en Colombia: Una mirada global de su estructura y
dinámica 1991 – 2005. Documento de trabajo No.
55, Observatorio Agrocadenas Colombia: 14-15.
Ramírez, Socorro (2005). Las Encrucijadas de la Inte-
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Universidad Nacional de Colombia. Serie La
Universidad y los procesos de integración social /
Siete Cátedras para la integración Convenio Andrés
Bello: 104.

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cult u ra

Caribe espléndido
Las artes plásticas del Caribe colombiano
al promediar el siglo XX
Álvaro Medina

Para valorar las artes gestadas en el Caribe


colombiano durante el período que cubre la presente
exposición, resulta oportuno recordar que Colombia
no experimentó la plenitud de su modernidad van-
guardista sino a mediados del siglo XX. Sus artífices
principales fueron Guillermo Wiedemann, Leo Matiz,
Enrique Grau, Alejandro Obregón, Eduardo Ramírez
Villamizar, Edgar Negret, Fernando Botero y Antonio
Roda, nombrados aquí en el orden en que se fueron
haciendo presentes. Al lado de ellos hay que considerar
un segundo grupo de artistas que contribuyó a este sin
par florecimiento, entre los que cabe destacar a Lucy
Tejada, Omar Rayo, Cecilia Porras, Nereo López,
Judith Márquez, Armando Villegas, Guillermo Angulo,
Beatriz Daza, Hernán Díaz, Alicia Tafur y Alberto
Arboleda. Con excepción de Roda, que llegó a resi-
denciarse en Colombia en 1955, los nombres del primer
grupo corresponden a quienes se hicieron presentes
antes de 1950, hallándose activos algunos de ellos al
finalizar la década precedente. Los del segundo grupo
se sumaron al esfuerzo modernizador a finales de los Nereo López:
Retrato de Alejandro Obregón (1960)
años cuarenta y varios de ellos no se hicieron visibles
sino en los años cincuenta.
Desde el punto de vista crítico, los primeros han
sido calificados de manera unánime como los grandes
del movimiento que empezó a cristalizar al prome-

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diar la centuria, apreciación en la que ha incidido de iniciales para perderse en experimentaciones que no
manera decisiva la autoridad de Marta Traba, autora desembocaron en nada y unos pocos se consolidaron
de un libro publicado en 1963, titulado Seis artistas con obras que aún no han sido revaluadas y rescatadas
colombianos, en el que destacó a todos ellos, menos a con el debido rigor histórico. Cualquier sea el caso, la
Roda y Matiz, ausencias que se explican porque Roda contribución de cada uno de ellos al proceso renovador
no había definido aún su propio lenguaje y Matiz no fue considerable y es con esta óptica que abordaré los
sólo no pintaba sino que se hallaba fuera del país. De nombres pertinentes a esta muestra, centrándome en
los artistas del segundo grupo se puede decir que en el hecho de que Matiz, Grau y Obregón figuran en el
su momento fueron altamente considerados, lo que primer grupo y que en el segundo tenemos a Porras
se refleja en los comentarios críticos favorables que y Nereo, condensándose en estos cinco artistas la
en general recibieron, en las numerosas exposiciones contribución del Caribe colombiano al capítulo más
colectivas en las que participaron y en los premios que brillante del arte nacional en todo lo que ha corrido
recibieron en salones nacionales y regionales. Algunos del período republicano.
de los pintores y escultores del segundo grupo no llena- Las particularidades de lo que hoy se reconoce
ron las expectativas que entonces generaron, otros aban- como un arte del Caribe colombiano, tuvieron sus
donaron con el tiempo sus interesantes planteamientos manifestaciones inaugurales al concluir los años treinta

Leo Matiz:
La red o Pavo real del mar (1939)

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con obras iniciáticas de Leo Matiz y Enrique Grau. de las artes. Con un antecedente tan paupérrimo, en
Fotógrafo el primero y pintor el segundo, los dos coin- una región carente de museos y escuelas de bellas artes,
cidieron —gozando la plena juventud— en aquello de llama la atención que Matiz y Grau hubiesen podido
saber mirar el entorno inmediato para luego proceder a alcanzar tan altos logros en los albores de la juventud,
extraer, del medio ambiente físico y del contexto social con obras en las que lenguaje y tema se interrelaciona-
propios del ámbito costeño, los elementos poéticos de ban con la coherencia que hallamos en las producciones
unas expresiones personales que la posteridad ha sabido que firmaron ambos ya en la plena madurez.
consagrar. Me refiero a dos obras concretas, La red o
Pavo real del mar de Leo Matiz y Autorretrato con marco 2
de Enrique Grau, realizados en el año clave de 1939.
Antes de esta fecha, exceptuando como es apenas Leo Matiz logró el registro de La red en el caserío
lógico la excelente y abundante producción de la etapa de Puebloviejo, en la isla de Salamanca, esa larga y
precolombina, fueron ralas y escasas las artes plásticas angosta franja costera que hoy en día está atravesada de
producidas en la región caribe colombiana, lo cual Este a Oeste por la carretera que comunica a Ciénaga y
implica la existencia de un amplio y empobrecido Barranquilla. Considerada como la imagen más divul-
período histórico que cubre toda la colonia, atraviesa gada de la fotografía colombiana de todos los tiempos,
el siglo XIX y penetra ampliamente en el XX. Seme- La red fue publicada en la revista bogotana Estampa en
jante pobreza contrasta con la relativa abundancia que abril de 1939, acompañando un texto entre periodístico
conocieron Bogotá, Tunja, Popayán, Villa de Leiva, y lírico del poeta piedracelista Carlos Martín, el mentor
Sopó, Monguí, Barichara, Medellín, Santa Fe de Antio- intelectual de Gabriel García Márquez cuando éste
quia y otras poblaciones de los hoy departamentos de estudiara en Zipaquirá. En su escrito, Martín hablaba
Cundinamarca, Boyacá, Cauca, los dos Santanderes del “bello tipo de cultura física” que él veía en los pes-
y Antioquia. Con la magnitud de la demanda que en cadores del lugar y se refería al gesto de lanzar la red o
los tiempos coloniales lograron generar estos centros atarraya, en estos términos:
urbanos, se estimuló la producción pictórica y la imagi-
nería religiosa a una escala que Santa Marta, Cartagena, A impulso de sus bíceps endurecidos, las atarrayas de
Mompox, Riohacha y Valledupar no alcanzaron nunca. cinco metros de largo con una arroba de plomo distri-
En otro estudio, al reflexionar sobre este hecho, me he buida en los tejidos de sus extremos, se abren en el aire
atrevido a sugerir que dicha escasez puede atribuirse en un despliegue de fuerza, de habilidad y de belleza,
a una política colonial trazada desde España, de apli- en tanto que los pies firmes guardan el equilibrio del
cación en los puertos y ciudades costeras de América, cuerpo sobre los bordes del bote.2
“para no atraer piratas tras el temprano saqueo de
Panamá” por Francis Drake, acaecido en 15721. La descripción de Martín puede referirse a las
Tras semejante vacío, vacío que no fue absoluto, rutinas pesqueras que él presenció en la ciénaga y
como bien lo atestiguan la presencia de Pablo Caballero Matiz captó con su lente, pero también pudo haber
y Hermenegildo José de Ayala al finalizar el siglo XVIII, sido inspirada al contemplar la hoy famosa imagen del
de José Gabriel Tatis en el siglo XIX, y de los hermanos fotógrafo oriundo de Aracataca, no lejos de Puebloviejo.
Jeneroso y Luis Felipe Jaspe junto a Pacho Valiente en En todos sus detalles, las palabras del poeta coinciden
los albores del siglo XX, vino un inesperado y súbito con lo que se puede apreciar en La red. En la foto, el
esplendor. Valiente era barranquillero y todos los demás encuadre es perfecto. Va desde el estrecho espacio vacío
eran cartageneros, lo que probaría que sólo en la Ciudad que a la izquierda le falta por cubrir a la atarraya que
Heroica hubo una relativa perseverancia en el cultivo abierta hiende el aire, hasta el botero inmóvil sentado
a la derecha. En la mitad, el pescador alza un brazo y
su oscurecida silueta parece prolongarse en las venas
de los tejidos aún plisados, que parten desde el centro
1  Álvaro Medina (2000: 18) hacia los bordes formando el grafismo de una estrella.
2  Carlos Martín (1939: 12). Lo determinante es que el “despliegue de fuerza, de

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habilidad y de belleza” que Carlos Martín supo definir, su temprano sentido decorativo y simbólico. En este
le permitió a Leo Matiz concretar visualmente una primer gran autorretrato que le conocemos, Grau
afirmación de vida y libertad en el simple ejercicio de aparece contra un fondo cubierto por una enredadera
una actividad cotidiana. En las confesiones que Miguel florecida de tallo verdoso y sombras intensas, fondo que
Ángel Flórez Góngora recibió de Leo Matiz poco antes trató pictóricamente con valores de primer plano. Si la
de la muerte de éste, puede leerse lo siguiente: solución resulta hoy convincente es porque, en su desa-
rrollo posterior, los elementos aparentemente super-
Luego de gastar varios rollos registrando las imágenes fluos (llámense floritura, adorno, decorado, tocado,
de hombres en la captura del pescado, su selección y parafernalia o filigrana, caros al pintor) se cargan de
preparación para la venta, decidí meterme al agua. múltiples significaciones y terminan por ser esenciales.
Con la última tira de una película fijé al medio día el Al recurrir a tales elementos, el artista identificaba y
movimiento armonioso de un pescador lanzando la red. definía particularidades ambientales y de personalidad,
Estampa no destacó esta fotografía cuando publicó el sin las cuales sus numerosas y heterogéneas criaturas
reportaje sobre la pesca. He tratado de lograr nueva- serían otra cosa.
mente esa imagen y ha sido imposible. Otros fotógrafos En Autorretrato con marco, Grau se muestra indi-
me han confesado que lo intentaron en varias ocasiones, ferente e incluso ajeno a la vegetación tropical que lo
pero que les resultó infructuoso. Haber logrado esa foto- circunda, en la cual se condensa el toque fantasioso
grafía con una cámara Roylander de baja velocidad y de que evita a la obra la caída en un adocenado, vulgar y
foco de escala es otra de las suertes de esta imagen.3 chato realismo. Esa indiferencia reaparece en Autorre-
trato con símbolos (1940), título que en sí y por sí pone
Matiz contó con la suerte, el azar y la decisión, de manifiesto la intención que lo guiaría a lo largo de
pero también con el conocimiento del tema por el su vida. En efecto, en este segundo y muy importante
estrecho contacto con la naturaleza y el trabajo rudo
durante su niñez en una finca bananera de Orihueca,
factores que se conjugaron para favorecer al artista de
apenas 22 años de edad. No obstante, en la misma
página de las citadas confesiones advirtió con sentido Enrique Grau:
autocrítico: “No la considero mi mejor fotografía, pero Autorretrato con marco (1939)

en su composición hay ritmo, precisión. En el hombre


que lanza la atarraya hay elegancia y dignidad”. Tal vez
Matiz tenía razón, pero la verdad es que ninguna otra
de sus fotos alcanzó el grado de reconocimiento de
La red, convertida con el paso del tiempo en un hito
iconográfico. El artista había plasmado, en la dinámica
imagen, un detalle que hace parte como pocos de la
esencia poética de Colombia en general y de su costa
caribe en particular.
      Casi simultáneamente, en Cartagena, Enrique
Grau lograba otro tanto en Autorretrato con marco
(1939), un cuadro en el que el autodidacto de 19 años
de edad se representó pintando un lienzo. Concebida
dentro de la ortodoxia realista que terminaría por
caracterizar a su pintura, la obra resulta notable por

3  Miguel Ángel Flórez Góngora (1998: 168).

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autorretrato vemos al pintor con el mar a sus espaldas, y tiene connotaciones parecidas. Resulta extraordinario,
puede distinguirse, a la izquierda, la cartagenera silueta en consecuencia, que el pintor cartagenero hubiera for-
del cerro de La Popa. En torno al pintor, en el plano jado desde el principio una definición así de sustancial,
medio, hay una orla compuesta de objetos relacionados clave a casi toda su obra.
con las artes, el tiempo y el estudio. Otro óleo de ese Con los aportes de Leo Matiz y de Enrique Grau,
mismo año, Mulata cartagenera, centra la atención en de alcances nacionales ambos —ya que a través de los
la figura de una joven dama que se antoja entregada a medios impresos el país entero pudo tener amplio y
la molicie en un lujurioso jardín tropical: con las flores oportuno conocimiento de ellos—, el arte de la costa
que reposan en el regazo de la blanca vestimenta de caribe colombiana empezó a forjar su personalidad,
la muchacha y con las frutas que flanquean el borde personalidad multifacética, no sometida a pautas fijas
inferior derecho del cuadro Grau plasma una imagen y unidireccionales, como bien lo prueban las contri-
de la sensualidad femenina. De estos tres óleos, el más buciones que más adelante harían Alejandro Obregón,
conocido es Mulata cartagenera (hoy en la colección Cecilia Porras y Nereo López, miembros a cual más de
del Museo Nacional), quizás por el éxito que cosechó esta generación de pioneros, tan distintos todos y tan
en el Salón Nacional de 1940, al obtener mención de fieles a la obsesión de querer expresar a la Colombia
honor y los comentarios más elogiosos que recibiera de la época.
obra alguna entre las que participaron en el evento.
En los cuadros hasta aquí considerados, el pintor 3
manejó eso que en 1955 Marta Traba calificó de “sentido
decorativo que aparece siempre”, particularidad que Con la caricatura me gané muchos disgustos. Tuve
la crítica juzgó positiva tras recordarle buenamente al que pedir varias veces disculpas a personas que se
lector las pinturas de Henri Matisse y Raoul Dufy. Pues molestaron por el toque juguetón que yo le daba a sus
bien, ese sentido decorativo adquiere densidad y carác- caras. La fotografía me absorbió. La he gozado y la he
ter cuando lo yuxtaponemos a la siguiente apreciación padecido. He estado al borde de la muerte con ella y
de Camilo Calderón: “Los autorretratos de Enrique la he realizado en condiciones muy duras, tratando de
Grau son todos de un realismo sin paliativos, pero enri- llegar a lugares inaccesibles.
quecidos con diversidad de connotaciones simbólicas”4. Leo Matiz
Al juntar y resumir los dos conceptos, tenemos que lo
decorativo no se queda en lo primorosa y superficial- Nacido en 1917, Leo Matiz quiso ser pintor y no
mente decorativo, porque pasa a la categoría superior de fotógrafo. A edad temprana se reveló como un dibujante
ornamental. ¿En qué sentido? Sucede que lo decorativo, intuitivo que orientó su talento, con sentido práctico,
en el caso de Grau, se construye con elementos que, a hacia la caricatura fisonómica. En 1933 publicó en la
través del símbolo, bordean lo emblemático, pero, por revista Civilización de Barranquilla su primer monacho,
supuesto, sin el texto y sin el lema o mote del emblema una cabeza inspirada en una fotografía de Eduardo
ortodoxo. Piénsese al respecto en las implicaciones de Santos, propietario de El Tiempo de Bogotá, a la sazón
la denominación “ornamento sagrado”, ligada al ritual, ministro de Relaciones Exteriores. Ese mismo año
que varía según la época del año. En los ritos religiosos, realizó su primera exposición en la cigarrería Excelsior
la expresión visual principal reside en el motivo y el de Santa Marta, adonde se había trasladado su familia
color del ornamento utilizado, tanto en el altar como desde Orihueca, a pocos kilómetros de Aracataca.
en la vestimenta del oficiante. La ‘decoración’ de Grau Matiz no tenía sino 16 años de edad, pero mereció un
comentario crítico según el cual en la exposición había
“trabajos que dejan traslucir la influencia poderosa que
sobre nuestro dibujante ha ejercido el popular artista
argentino Rafael Valdivia; en otros, recordamos el
impecable estilo del cubano Masseguer y, por último,
4  Cit. por Bélgica Rodríguez (1991: 21). vimos también las caricaturas cubistas que tanto agra-
5  “La exposición del dibujante Leo Matiz” (1933). dan a los amigos de lo ‘snob’”5.

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no pudo ingresar a la escuela y le tocó sobrevivir de
mensajero antes de vincularse a El Tiempo, donde
ofreció sus servicios como ilustrador y tuvo la suerte
de ser bien acogido por Jaime Barrera Parra, director de
Lecturas Dominicales. En El Tiempo cambió de rumbo
cuando el subdirector del periódico, Enrique Santos
Montejo “Calibán”, le entregó una cámara, le ordenó
tomar lecciones de laboratorio con el prestigioso J. N.
Gómez y le ofreció paga de reportero gráfico. Corría el
año de 1937 y Matiz se mostró reticente a la oferta, pero
“Calibán”, según Flórez Góngora, le aclaró: “Si te digo
que hagas fotografía es porque eres joven, simpático y,
sobre todo, metido”8.
Matiz no congenió con Gómez, pero tuvo la suerte
de trabar amistad con el gran Luis B. Ramos, su ver-
dadero maestro. Así lo reconoció en sus confesiones:
“Criticó con sinceridad mis fotografías y me dijo que
estaban pasadas de exposición, que eran oscuras y que
tenían problemas de enfoque”9. Y, sin duda, Ramos
tenía la razón. El ahora discípulo estaba lejos de domi-
nar las técnicas del nuevo medio que trabajaba, pero
ya sea por la casualidad derivada de la inexperiencia,
Leo Matiz:
ya por voluntad propia, las fotos oscurecidas pueden
Desierto. Guajira (1953). asociarse y parangonarse con los oscurecidos trazos del
Alejandra Matiz. Fundación Leo Matiz. caricaturista. De hecho, el alto contraste era un recurso
estético de época, presente en la obra de una pintora
como Tamara de Lempicka, en la de un diseñador
A propósito de las caricaturas cubistas desplegadas gráfico como Cassandre y en la de un fotógrafo como
en la Excelsior, es probable que el atrevido expositor el Imogen Cunningham de la década de los treinta.
conociera las más bien abstraccionistas que el bogotano En los años siguientes, Matiz hizo numerosas fotos en
George Franklyn publicaba desde 19296. Aclarado esto, las cuales predominan las sombras, aunque con acen-
la verdad es que la línea de Matiz distaba de ser ágil. Las tuadas zonas de luz que dan como resultado planos
figuras resultaban por lo mismo algo acartonadas, pero blancos o casi blancos. De hecho, en el reportaje que
cabe anotar que los rostros que plasmaba —en general para Estampa hizo en Puebloviejo, La red comparte
de perfil o de tres cuartos— eran solucionados con altos página con una foto a contraluz de una niña junto a
contrastes de luces y sombras. El procedimiento revela unas palmeras y una rústica cerca de madera, de siluetas
el interés del joven autodidacta por el art deco que, con absolutamente negras contra el cielo diáfano. Identi-
sus ilustraciones, desde suplementos dominicales y ficada como “Lujosa decoración del paisaje marino”,
revistas, popularizaban los pintores José Posada y Sergio la gráfica no es notable, pero acusa el gusto por las
Trujillo Magnenat7. Animado con el reconocimiento
que significaba la difusión de sus cartones, Leo Matiz
tomó la decisión de estudiar pintura contrariando el
parecer paterno.
En la Costa no había entonces escuelas de bellas 6  Cf. Álvaro Medina (1995: 8).
artes, de modo que, en 1936, le tocó viajar a Bogotá, 7  Álvaro Medina (1995: 207 y s)
ciudad que ya conocía. Dada la falta de recursos 8  Miguel Ángel Flórez Góngora (1998: 145).
económicos (el padre se negó a ayudarlo), Leo Matiz 9  Miguel Ángel Flórez Góngora (1998: 161).

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sombras que también está presente, aunque de manera nal, corroborando la intuición de “Calibán” al llamarlo
menos acusada, en La red. y decirle: “Mira, Leo, es la última vez que te compro
Un segundo aspecto, igualmente importante, es caricaturas. Quiero que me traigas fotografías. Tú serías
la tendencia, derivada de Ramos, al tema social. Así lo bueno para eso, tienes temperamento y eres capaz de
precisa Matiz: “No imaginaba las posibilidades de la meterte hasta en una aguja”13.
fotografía hasta mi encuentro con el pintor y fotógrafo Matiz se metió con sus cámaras en la aguja de la
Luis B. Ramos. Su iconografía de personajes populares vida, recorriendo medio mundo. Contratado por Selec-
de barrios y mercados del altiplano me impresiona- ciones del Reader’s Digest, viajó por todo el continente
ron”10. Fue un buen comienzo, ya que el maestro de americano. Vinculado a otras publicaciones, trotó por
Guasca, considerado de modo casi unánime el mejor y numerosos países de Europa. De tan rica experiencia
más recursivo fotógrafo del país, como reportero gráfico ha quedado una obra heterogénea y desigual, punteada
no tenía rival y sus gráficas, publicadas desde 1934 en de logros que tienen su primer jalón en el México de
El Tiempo y en Cromos, poseían un “profundo sentido los años cuarenta, cuando el fotógrafo colombiano
humano” y “un realismo sin afeites que llenaban de incursionó en el retrato teniendo por modelos a Luis
intensidad y vida sus fotografías”11. Buñuel, Agustín Lara, María Félix, el “Indio” Fer-
El acercamiento a Ramos le dio un fundamento nández, José Clemente Orozco, Diego Rivera, Frida
serio al trabajo de Matiz, algo que el nuevo fotógrafo Kahlo y David Alfaro Siqueiros, entre otros. A partir
expresó agradecido en estos términos: “Él despertó en de ese momento, seguir el itinerario artístico del Matiz
mí la curiosidad por los marginados de la sociedad. Si trotamundo puede requerir unos cuantos centenares
no me hubiera encontrado con él en la vida creo que de páginas. Por lo pronto, dentro del espíritu de la
hubiera hecho otro tipo de fotografía, sin ese énfasis en presente exposición, cabe señalar que el discípulo de
lo social que he mantenido en mi trabajo”12. No sobra Luis B. Ramos le dio más importancia que su maestro
recordar que el énfasis social fue otra de las característi- al medio en que se desenvolvían sus personajes y esto
cas del período y tuvo una expresión mayor en la obra es algo que ya estaba presente en La red. Porque ya sea
de Dorothea Lange, Walker Evans y demás fotógrafos en el campo o en la fábrica, en la calle o en la casa, en
de la Farm Security Administration, entidad fundada sus mejores fotos los retratados son seres anónimos
durante la presidencia de Franklyn Delano Roosevelt como los de Ramos, gente común y corriente, que nos
para documentar la crisis económica que golpeó a los revela en el acto de hacer algo, no importa lo lenta o
Estados Unidos tras la quiebra de Wall Street en 1929. reposada que resulte la acción realizada. El entorno,
La Farm Security estuvo activa, sobre todo, a mediados un asunto, en general, no tan importante en Ramos, es
de los años treinta, y la calidad de la obra fotográfica determinante en Matiz, pues Ramos no fue paisajista y
reunida ha sido reconocida internacionalmente. Matiz sí: por eso atrapaba el gesto humano y le gustaba
Ramos trabajó en la misma dirección sin conocer el situarlo en el tiempo, en medio del antes y el después
trabajo de sus colegas norteamericanos, de manera que que definen su razón de ser en el tejido social.
su influencia en Matiz resultó fecundante y a la altura
de los tiempos que corrían. En adelante, el fotógrafo de
Aracataca buscaría temas entre los labriegos del campo
y los obreros de los centros urbanos, prolongando su
universo artístico en la fervorosa contemplación de los
avatares del ser humano en las buenas y en las malas.
Por eso documentó revoluciones y guerras, recorriendo
el planeta por encargo de revistas de México, Estados
Unidos, Venezuela y Colombia, entre ellas la prestigiosa
Life, experiencia que le valió el cargo de fotógrafo oficial 10  Flórez Góngora (1998: 161).
de las Naciones Unidas en el conflicto palestino-israelí, 11  Álvaro Medina (1995: 270).
en 1948 y 1949. Leo Matiz se convirtió así en el primer 12  Flórez Góngora (1998: 161).
artista colombiano de talante y proyección internacio- 13  Flórez Góngora (1998: 145).

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decidirse aún por ningún camino definitivo”. 15. Esta
aseveración constituye una verdad a medias: si bien el
joven Grau estaba lejos de poder definir su orienta-
ción estética, no menos evidente es que la síntesis de
Mulata cartagenera, sumada a la intención simbólica
de Autorretrato con marco, daba por resultado casi
matemático el Grau definitivo. En adelante, en varios
ocasiones, Grau se apartó de su senda y volvió a ella.
El epígrafe que abre esta cuarta nota permite precisar
que Grau abandonaba sus propias pulsaciones cuando
salía del país, extraviándose parcial o totalmente según
la ocasión.    
En Nueva York, de 1940 a 1943, el cartagenero
ingresó al Art Students League, en el que se convirtió en
un pintor de temas sociales dramáticos —a la manera
de Ben Shan— y colores primarios de tonalidades
apagadas. Su segundo viaje de estudios, a Italia, entre
1955 y 1956, puso a Grau en contacto con los pintores
florentinos del quattrocento y lo hizo derivar paulati-
namente hacia la abstracción no objetiva que practicó
en 1958 y abandonó de inmediato, yendo y viniendo
en afanosa búsqueda que concluyó, al retornar a sus
orígenes, con el óleo La Cayetana, de 1962, “uno de
los más bellos cuadros de la muestra” de ese año según
Enrique Grau,
Mulata cartagenera (1940). Marta Traba16.
Museo Nacional de Colombia. Al reseñar la exposición individual de 1946 en la
Biblioteca Nacional de Bogotá, la primera que hizo
el pintor, el periodista y novelista Eduardo Zalamea
Borda se refirió al extravío que el cartagenero expe-
4 rimentó en Nueva York y escribió: “¿A dónde llegará
Grau Araujo? No es difícil responder a esta pregunta,
Cuando regreso al país, el primer choque en Cartagena sabiendo que por ahora es, con Alejandro Obregón,
llena mi obra de colores muy vivos, pero cuando llego uno de los dos pintores jóvenes más interesantes que
a Bogotá la ciudad me va induciendo a un cromatismo tiene el país”17. Zalamea Borda planteaba la pregunta
menos vibrante, más gris. y no la respondía porque tenía fe en el talento del
Una investigación sobre Piero de la Francesca, Uccello, pintor. Es de recordar que a mediados de la década de
los prerrenacentistas en Italia, me va llevando incons- los cuarenta estaba generalizada la idea de que Obregón
cientemente a la geometría, y de ahí al abstraccionismo y Grau eran las figuras máximas de la corriente reno-
no hay sino un paso (...), y de pronto me doy cuenta vadora del momento, o sea que hubo una temprana
de que ése no es el camino que deseo. No quería ser conciencia de lo que valían y significaban dentro de la
hermético y paré en seco. nueva generación.
Enrique Grau14

Adolescente y a punto de terminar el bachillerato, 14  Ángela María González (1991: 1-C)
Enrique Grau participó en el Salón Nacional de 1940 y 15  Baltasar Miró, s/f.
ganó la beca que le permitió ir a Nueva York. A juicio 16  Marta Traba (1963: 71)
del cronista Baltasar Miró, el pintor se encontraba “sin 17  Eduardo Zalamea Borda (1946)

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y despojado de regodeos anatómicos que Grau empleó
en el modelado de sus personajes más característicos.
A Grau lo influyeron siempre, y de manera intensa,
las ciudades donde eventualmente abrió taller por
largo tiempo. A partir de 1946, vivió casi siempre en
Bogotá, descontadas las estadías en la Florencia de los
años cincuenta y en la Nueva York de los años ochenta.
No obstante, fue Cartagena la que nutrió su arte, esa
Cartagena que solía visitar varias veces al año y en la
que a veces permanecía durante meses, como aconte-
ciera en la etapa que precedió a su muerte, acaecida en
Bogotá. Si la atmósfera andina lo llevó en determinados
momentos a oscurecer la paleta, en otras reaccionó con
mirada caribeña contra la capitalina atmósfera gris y
prefirió el cromatismo vibrante, con aciertos recono-
cidos y desaciertos duramente criticados.
Entre las definiciones que logró Grau en los años
cuarenta, está precisamente su particular actitud ante
el color. En su momento, Alejandro Obregón escribió
una crítica bastante lúcida sobre su colega y señaló:
“el color tiene menos importancia que el dibujo”19.
Añadió Obregón: “A Grau tenemos que exigirle más
densidad en el color y en las formas y menos virtuo-
sismo en el dibujo”. ¿Qué estaba sugiriendo Obregón?
Enrique Grau: Al plantear que su colega y amigo debía priorizar color
La Cayetana (1962) y formas, pedía que lo pictórico predominara sobre
lo lineal. El criticado aceptó la sugerencia y se aplicó
en esa dirección, pero tuvo períodos en los que hizo
altos. Si en Nueva York había preferido lo lineal a lo
pictórico, la tendencia reapareció en Italia, se mitigó
al finalizar los años cincuenta y dejó de ser evidente
Testimonio de la conciencia que existía es lo que desde La Cayetana, si bien los detalles de contornos
escribe en 1948 el poeta y crítico Jorge Gaitán Durán: nítidos, perfectamente recortados, ponen de presente
“El actual movimiento plástico es el más importante al dibujante hábil que siempre hubo en Grau. Dicho
que ha existido en la historia cultural de Colombia”18. de otro modo, en sus pinturas hay una clara distinción
En este contexto, Gaitán Durán se fijó en la obra del entre la uña y el dedo, o entre el ropaje y la piel, por
pintor de Cartagena y concluyó: “Enrique Grau, tan ejemplo, para mencionar aspectos nimios que por
contradictorio en su labor, vuelve a su antigua línea, nimios resumen el todo.
para mí, la más acertada”. En contraste tenemos que Ahora bien, la crítica de Obregón presenta un
Zalamea Borda manifestó su preferencia por “los cua- sesgo muy personal, en el que se pone de manifiesto su
dros de la última época”. Dos años y medio separan las preferencia por lo pictórico. En las pinturas de Obre-
dos declaraciones, que giran en torno al mismo dilema.
Históricamente, Gaitán Durán tenía la razón. Años
después, tras el extravío que en Florencia lo llevó a la
abstracción, Grau terminaría por abrazar la “antigua
línea”, aunque fue en la ciudad italiana donde captó 18  Jorge Gaitán Durán (1948)
el profundo sentido del volumen pleno, terso, masivo 19  Alejandro Obregón (1948)

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gón, rara vez aparece la línea y son escasos sus dibujos
acometidos como un fin y no como un bosquejo o
punto de apoyo en la posterior realización de pinturas.
Al respecto era bastante enfático y alguna vez, en La
Cueva, lo escuché decir que, entre Braque y Picasso, él
prefería a Braque, porque sus calidades no eran lineales.
Puede uno imaginar, entonces, las conversaciones que
en privado tuvieron los dos sobre este asunto, conver-
saciones que incidieron en Grau, pero no lo empujaron
nunca al color por el color, pues no lo entendió ni aplicó
nunca como un elemento decorativo. Lejos de eso,
Grau se inclinaba por “una notable valoración de sus
emociones dentro de una gama personal de símbolos
plásticos”, como bien lo definió Obregón, el primero
en referirse a la intención significativa que desde el
principio y a través del rasgo simbólico practicó el car-
tagenero. Este aspecto fue abordado recientemente por
la crítica venezolana Bélgica Rodríguez, al explicar que
los personajes de Grau “existen en la vida real, pero en
la pintura pueden apreciarse más bien como símbolos
de realidades”20.
En vida, Grau fue visto y entendido como un artista
eminentemente decorativo, apreciación superficial
que derivó de su desenfadado uso de símbolos que,
en ocasiones, multiplicó de tal modo que el complejo
y a veces fácil recurso terminó por resentir los resul-
tados. En tales casos parecía decorativo, pero no era
esa su verdadera intención. El pintor procedía con Enrique Grau:
la desenvoltura del artista popular, que el maestro de Autorretrato con símbolos (1940)
Cartagena admiraba enormemente, al punto de reunir
una colección de objetos que es única en Colombia. En
el arte popular, los motivos se multiplican y despliegan llar las formas para redundar en una idea, tal y como
libremente. El trazo riguroso de la letra, si hay texto, procede el artista popular, que de manera consciente
no basta, y se ornamenta para complementar lo que la filosofa en las imágenes que crea y en las que vierte, sin
lectura especifica. El color se inclina por el contraste sofisticaciones ni tapujos, sus puntos de vista. Así lo
fuerte y la imaginación se prodiga en guiños redundan- entendió el olvidado Juan Salgado cuando advirtió que
tes, pero necesarios, porque su lógica es otra, criterio Grau era un “pintor filósofo, más que plástico”21. Por
que el pintor culto supo asimilar. Por eso, aunque de filósofo, Salgado quería decir que era reflexivo, y que
formas ampulosas, Grau no era un formalista. No lo al reflexionar, si lo requería, ponía de lado lo plástico
era porque no sacrificaba las ideas para mostrarse como y, de cierta manera, hasta lo despreciaba, para darle
un virtuoso de las formas, pero sí era capaz de atrope- prioridad a los contenidos.
De allí que Grau procurara ser explícito en su
manera de construir la imagen, a la que sin mesura
alguna dotaba de los elementos visuales necesarios
20  Bélgica Rodríguez (2003: 39-40).
para comunicar lo que se proponía ‘filosóficamente’.
21  Juan D. Salgado (1950: 12), “Grau Araújo, pintor de
Dicho de otro modo, Grau no le daba mucho juego
la época, El Liberal, domingo 22 de octubre de 1950, p. 12. a la reflexión del que mira su obra ya que prefería,

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serlo. Lo he elaborado teniendo en cuenta lo más
reiterativo que he podido hallar en pinturas, dibujos,
grabados, ensamblajes y esculturas, repasando los tres
libros profusamente ilustrados dedicados al pintor y
su obra. A la larga, no fueron muchos los elementos
significantes que utilizó en su pasión por construir un
mundo, su mundo, entre teatral y carnavalesco, que
parecía sentir aversión por el presente y se llenó de
guiños que remiten a un pasado que huele a alcanfor.
Según crónica de Jorge Moreno Clavijo22, Grau accedió
a semejante nivel de fantasía porque una vez tuvo la
suerte de encontrar “un álbum familiar con esas foto-
grafías en las cuales los parientes aparecen tocados con
indumentarias elegantes en ese lejano entonces pero
que hoy hacen reír”, álbum cuyo contenido se vino
a sumar al repertorio “de estampas antiguas que por
afición el artista había venido comprando”. Aunque
el testimonio del periodista y caricaturista se refiere
de manera concreta a la serie Daguerrotipos de 1960,
la verdad es que Enrique Grau fue muy dado a pintar
con burlón humor, desde sus tempranos inicios, la
obsolescencia, el no estar a la moda del día. El abordaje
de entonces se cualificó y terminó convirtiéndose en el
fundamental aunque velado tema de fondo, distinto
del tema circunstancial de cada cuadro específico.
Enrique Grau: Gracias a ese tema de fondo logró desarrollar un estilo
El fonógrafo (1981) pictórico sincrético para que, en consonancia con su
condición démodée, la imagen se antojara, en su apa-
riencia, antimoderna.   
Durante años, el pintor se entretuvo representando
por razones que son suyas y sólo suyas, que fuese su los ritos colaterales de una ceremonia eterna y gozosa
propio imaginar el que se explayara sin fronteras, que, en su sensualidad gratificante, raya en lo orgiástico.
dándole rienda al deleite personal de agregar y agregar Por eso la casi totalidad de sus personajes parecen des-
detalles específicos que invitan, por sus significaciones filar, una vez acicalados, ante un espejo. Complacidos
latentes, a ser interpretados. Este hedonismo justifica posan y se observan en el instante que precede a la fiesta
y explica la multiplicidad de los elementos puestos como en El fonógrafo (1981). Me refiero a personajes que
en juego, en apariencia intrascendentes pero de gran no raras veces descubrimos en la fiesta misma como en
poder connotativo. Hablo de ropajes, encajes, brocados, Mujer con máscara (1953), y, otras, después de ella, como
velos, lazos, cintas, plumas, relojes, guantes, sombreros, en el bronce Rita, 10:30 a.m. (1990). La autosatisfacción
abanicos, espejos, joyas, maniquíes, cosméticos, flores, pauta sus conductas, en consonancia con el espíritu de
frutas, mariposas, gatos, aves, peces, botellas, copas, un artista que se autorretrataba en cada cuadro sin tener
cubiertos, naipes, juguetes, cornetines, serpentinas, que representar sus facciones, revelándonos de modo
máscaras, instrumentos musicales, fotos, cartas, pape- congruente su jubiloso y alegre sentido de la vida.
les de colgadura, cortinas, lámparas, globos de cristal,
fonógrafos, teléfonos, cometas, jaulas, cofres, alacenas
y otros accesorios salidos de polvorientos desvanes.    
El inventario no es completo, pero está cerca de 22  Jorge Moreno Clavijo (1960)

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La maja, el torero, el galán, el enmascarado, la vanguardista que dio origen a la siguiente apreciación
niña gata, la bañista, la novia, la madama, el mago, el del señor David Martínez Collazos: “Nadie que esté
adivino, los ociosos, los soñadores, los celebrantes, los cuerdo, concibe que la intención de hacer ‘feo’, de
risueños, los engreídos, los cortesanos, los amantes, los pintar ‘feo’, de esculpir ‘feo’, pueda ser la meta de la
amigos, los borrachos, etc., fueron los protagonistas creación artística”24. A partir de tan rancio postulado,
de un acontecer que parece pertenecer a un pasado el comentarista proclamó con aire doctrinario: “Entre
remoto e irredimible, no ya por el evidente arcaísmo de el alma colombiana y el alma del mundo, nuestra
las actitudes y las vestimentas de algunos de ellos, sino vinculación tradicional está en los Velásquez [sic], en
porque esa felicidad pertenece al pasado y nadie nunca los Garay, en los Cano, en los Rodríguez Naranjo. No
volverá a disfrutar de ella. En la era del goce a ultranza y está ni podría estarlo en la estatuaria contrahecha (...),
sin fronteras, extrañas, cuando menos, pueden resultar ni en las salsas geométricas”.
mis palabras. Porque, sin decirnos mentiras, ¿qué puede La brillante y pedagógica réplica de Obregón se
estar vedado en el enervante paraíso terrenal de ciertos podría resumir en cinco palabras clave del breve artículo
bares, discotecas y fiestas privadas de hoy? Nada está que publicó en Vanguardia Liberal al día siguiente: “El
vedado, es verdad, pero en esos paraísos no campea la arte no es realidad” 25. La noción era revolucionaria
inconsciencia y consiguiente inocencia que hay en los en el ambiente artístico anacoreta y provinciano que
regocijados personajes de Grau. Son tan inconscientes prevalecía en casi toda Colombia, provincianismo de
en su mayoría, es decir, tan alienados, que a veces tintes pacatos que en 1946 empañó el prestigio de la
caen en divertidas mistificaciones. Sus ajuares resultan
innecesariamente lujosos, sus entornos excesivos y sus
talantes casi perversos, ecos de una dolce vita y una dolce Alejandro Obregón:
far niente que algo le debe a las romanas fantasías de Aves cayendo al mar (1961)
un Federico Fellini. Pero no, eso ya despuntaba en la
discreta molicie de Mulata cartagenera o sea que nada
llegó a deberle Grau al gran director de cine italiano.

5
Una de las finalidades del arte, del arte nuestro tiempo,
ha de ser precisamente la de interpretar la sensibilidad
colectiva a base de la sensibilidad personal del artista. Y
debe ser, además, el arte, un recurso eminente de salva-
ción, un medio para entusiasmar, para llenar de energías
inagotables al hombre, para darle el ímpetu espiritual
que requiere como condición previa indispensable en
la realización de sus altos destinos.
Alejandro Obregón23

A los 24 años de edad, cuando dio por terminados


los estudios y se estableció definitivamente en Colom-
bia, Alejandro Obregón había pasado once años en
Barcelona, su ciudad natal, cinco y pico en Barran-
quilla, su ciudad de origen, cuatro en un internado de
Inglaterra, tres en Boston y un año corto en la selvática
zona petrolera del Catatumbo, en Norte de Santander. 23  Ricardo Ortiz McCormick (1948)
En diciembre de 1947 expuso en Bucaramanga una serie 24  David Martínez Collazos (1947).
de cuadros de lenguaje balbuciente y vaga motivación 25  Alejandro Obregón (1947)

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Alejandro Obregón:
La barracuda (1963)

liberal Barranquilla con “la mano perversa que hirió De tan contundente afirmación interesa resaltar,
casi de muerte el sugestivo cuadro de la Mujer desnuda”, si bien se refiere a un aspecto que nada tuvo que ver
que Obregón exhibía en su primera muestra individual con su obra, que entre los ejemplos cumbres traídos a
en la ciudad26. Pues bien, en semejante ambiente de cuento figuraran las “esculturas de nuestros antepasados
estrechez mental, reafirmando el principio de que el arte los indios”, calificadas de grandes. Interesa porque,
no puede confundirse con la realidad, el pintor precisó habiendo recibido su formación en España, Inglaterra
en Bucaramanga con sentido pedagógico: y los Estados Unidos, Obregón desarrolló desde joven
Si viéramos el San Pedro de “El Greco” caminando en un sentido de pertenencia al país cuya ciudadanía
la calle, echaríamos a correr. Fuera del lienzo este noble adoptó a los 21 años, al cumplir la mayoría de edad.
coloso se transformaría en un gigante absurdo. Si por Saber precisamente a qué sitio pertenecía y de dónde
arte de magia se pudiera hacer salir de su marco a la venía es el factor que le da sentido a la más famosa de
Divina Venus de Rubens y si por casualidad o desgracia sus series, la del Torocóndor, iniciada en 1959. Es de
nos diera un abrazo, moriríamos de contusión aguda.
El Bobo de Coria y el Niño de Vallecas, pintados con
tanto cariño por Velásquez nos llenarían de angustia
y de crueldad humana. ¿Y qué me dicen estos señores
de las gloriosas (y deformes) esculturas de nuestros 26  “La exposición de pintura de don Alejandro Obregón
antepasados los indios? Todos sabemos que esto es arte es un éxito”, (1946).
y del más grande27. 27  Ibid.

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recalcar que Obregón se distinguió por ser un vitalista logrado una sorprendente concreción de nuestro baile
y un devorador de mundos. Este vitalismo explica sus típico: lo ha eternizado en su lienzo porque ha salvado
caribeñas barracudas y sus flores amazónicas. Como todos los peligros de este difícil tema”31. En el monotipo
ningún otro antes o después de él, en el siglo XX, que a partir del cuadro original realizó el artista para
Obregón fue el artista que abarcó con profundo sentido que sirviera de carátula a la revista Estampa, las figuras
poético la totalidad del país, celebrando sus grandezas adquirieron un aire tribal de sugerente corte expresio-
y condenando sus miserias. nista, más acorde con el tema.
En el contexto de la presente exposición, el ‘fenó- Si las líneas antes citadas nos resultan poco técnicas
meno’ Obregón se aborda a partir de la compenetración tanto desde el punto de vista descriptivo como concep-
que tuvo siempre con su entorno inmediato, la cual se tual y desprovistas de una valoración estética fiable, al
manifestó en el curso de su heterogénea y cosmopolita menos sirven para medir la acogida que los intelectuales
etapa inicial, con un cuadro mediocre que tenía por barranquilleros le depararon a un pintor de alma ancha
tema la cumbia, pintado para su primera exposición que en la aludida muestra, según El Heraldo, reveló
en Barranquilla, realizada en febrero de 1946. Según “una marcada tendencia por los paisajes nacionales”,
noticia de El Heraldo, dicha obra, mencionada indis- destacando el diario la exhibición de Paisaje—Lago de
tintamente con los títulos de Composición nocturna y Tota, Puente del Guamo, Montañas—Bogotá y Paisaje
de Danza nocturna, por Bernardo Restrepo Maya y de Cartagena32, obras que documentan la presencia
por Germán Vargas, presidió “el salón con singular del artista en Boyacá, Tolima, Cundinamarca y la más
contraste”28. Medio año antes, Alfonso Fuenmayor legendaria de todas las ciudades del mar Caribe. En
había escrito en Sábado sobre el intenso y popular baile contacto con el paisaje natural, Obregón había empe-
de carnaval, señalando que se estaba “convirtiendo en zado a impregnarse de las sustancias que nutrieron sus
una referencia del folklore o en una alusión puramente
literaria”29. Fuenmayor describió la coreografía y el
escenario del baile, concluyendo: “Todo esto se hace de Alejandro Obregón:
noche, porque la cumbiamba es un baile nocturno”.   Ganado ahogándose en el río Magdalena (1955)
En el discurso inaugural, Restrepo Maya se refirió
al “trabajo vigoroso y pulcro de la Composición nocturna
(...), en la que las figuras emergen de la embriaguez
y de la sombra (...) enloquecidas y estremecidas por
el huracán de la honda música interior”30. Precisó el
orador en su presentación: “Para mí, el cuadro de la
Danza nocturna es uno de los más significativos como
pintura de síntesis y como expresión de personalidad”.
Más parco, Germán Vargas escribió: “Obregón ha

28  “En la exposición de pintura—Discurso de don Bernardo


Restrepo Maya, Director de la Biblioteca del Atlántico”, El Heraldo,
16 de febrero de 1946.
29  Alfonso Fuenmayor (1944).
30  “En la exposición de pintura—Discurso de don
Bernardo Restrepo Maya, Director de la Biblioteca del
Atlántico”, El Heraldo, 16 de febrero de 1946.
31  Germán Vargas (1946).
32  “Con gran éxito se inauguró ayer la exposición del
pintor Alejandro Obregón”, El Heraldo, 16 de febrero de
1946.

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ricos y muy diversos imaginarios, poniendo en práctica gón fue esencialmente un paisajista, cuando le tocó
lo manifestado en esta declaración de 1948: referirse al pintor de temas caribeños, Marta Traba no
habló de paisaje sino de un “solo gran espacio, asom-
El artista es, evidentemente, una especie de antena brosamente profundo, de color y no de perspectiva”36.
delante de la naturaleza, destinado a recoger y transmitir Unas líneas más abajo, al aseverar que el “protagonista
impresiones según las posibilidades de su personalidad. [de tales obras] es ese espacio y no las formas”, la crítica
En esto, desde luego, existe una cosa importante que conceptuó implícitamente que lo determinante no
es exactamente la claridad con que se reciban y se eran los detalles que podemos denominar cielo, mar o
transmitan esas impresiones33. playa, barracuda, mangle o camarón. La autora cons-
tataba así que el artista barranquillero había llegado al
El pintor puntualizó además que “la naturaleza no meollo de sus trasuntos poéticos, al entrar éste a pintar
puede ser la aspiración sino el recurso”, declaración que las particularidades de los ámbitos en que vivía. En el
Enrique Grau hubiera suscrito al pie de la letra, y defi- penúltimo párrafo del notable ensayo, Marta Traba
nió un sucinto programa de acción, “No es suficiente acertó al sentenciar: “Obregón ha definido la fisonomía
pintar una madre que llora. Es necesario ante todo de Colombia: su cordillera y su mar clavan al país en
investigar por qué llora”, que en su mejor obra, el pintor un mapa estético”37.
cumplió con absoluta fidelidad, aunque con el énfasis Ya Ricardo Ortiz McCormick había anotado,
en una visión individual ligada al sentir colectivo, como en 1948, que “el significado de los cuadros de Obregón
lo plantea el epígrafe de esta quinta nota. es muchas veces superior a la propia realización material
Concomitante con la idea de un arte “para de la obra”38, adelantándose en la tarea de señalar que
entusiasmar”, fue el planteamiento en el ya citado artí- el resultado final ponía de relieve lo que la forma en
culo sobre la pintura de Grau, según el cual “la razón sí misma no podría revelar jamás. ¿Cómo lo lograba
de ser” del artista “ante una sociedad” era la de “mostrar el pintor? Viene al caso citar un artículo de juventud,
fielmente lo que es él, con todas las repercusiones que en el que éste se refería con sorna al “éxito” de público
siente al ser parte de una comunidad”34. En Bogotá, en que podían cosechar los “pintamonas que se derriten
estrecha sintonía con la comunidad andina, el pintor al ver el rayo de sol que atraviesa una nube o el refle-
concibió cóndores y torocóndores, obras emblemáticas jito idiota que da un charco sabanero”39. Explicitaba
como pocas en la historia de Colombia. Con igual así su propensión a desdeñar lo superfluo para llegar
fervor comunitario, no sólo lo sedujeron Barranquilla, a lo esencial. Por superfluo hay que entender, en este
Pradomar y Cartagena (las tres localidades donde vivió caso, lo visible. Por eso, para trascender lo contingente
en la Costa), sino el estuario del río Magdalena, los y precario de una forma dada, Alejandro Obregón la
caños que llevan a las lagunas pobladas de manglares volvió símbolo, acercándose en esto a Enrique Grau.
de la isla de Salamanca (la de la inolvidable red de Leo Pero no hay que equivocarse y confundir dos maneras
Matiz), situada entre el mar y la vasta Ciénaga Grande tan distintas de apelar a lo simbólico. Si Obregón fue
de Santa Marta, parajes que Obregón recorrió como lírico en cuanto a preferir la evocación y se dedicó a ser
pescador y cazador del grupo de La Cueva, mucho
antes del desastre ecológico que sufrió la zona con la
construcción antitécnica de una carretera. De tan rica
experiencia extrajo temas que trabajó motivado por la
idea de no pintar simplemente algo que se ve sino las 33  Ricardo Ortiz McCormick (1948).
implicaciones de ese algo que se ve, de allí que no se 34  Alejandro Obregón, “Crítica—El pintor Enrique Grau”,
contentara con la simpleza de representar el litoral y El Tiempo, Segunda Sección, 26 de septiembre de 1948.
buscara expresar los secretos espíritus que lo habitan. 35  Marta Traba (1963: 87).
Fue Marta Traba quien mejor captó y describió 36  Marta Traba (1963: 88)
la pasión obregoniana de “ir más allá de las formas” 37  Marta Traba (1963: 89).
para poder “revolver en el meollo de los significados 38  Ricardo Ortiz McCormick (1948)
profundos”35. Si bien desde los cóndores de 1959 Obre- 39  Alejandro Obregón (1948).

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Alejandro Obregón:
Entierro de Joselito Carnaval (1957)

sutil en sus alusiones, Grau fue directo y se adentró en conectó a realidades de su infancia con la serie Ganado
lo emblemático. Sin proponérselo, los dos pintores se ahogándose en el río, también conocida como Ganado
complementaban. Juntos, redondeaban las particulari- ahogándose en el Magdalena (1955). Sobre esta primera
dades de un mismo mundo. Si Obregón respiraba aire y ambiciosa serie temática, escribí lo siguiente en largo
y captaba atmósferas, Grau observaba gentes y retrataba y documentado artículo:
idiosincrasias. Juntos, contribuyeron a caribeñizar la Ganado ahogándose en el río fue el primer ensayo serio
zona andina de Colombia.       dirigido a plasmar un paisaje que se convirtiera en el
Para poder forjar y manejar sus símbolos del denso escenario que complementa y hasta le da su
Caribe, Obregón cumplió un proceso de decantación razón de ser a los temas que desarrolla. Ese paisaje,
que empezó a tomar sentido con los conjuntos de según el color y la disposición de sus componentes,
objetos concebidos durante su estadía en Francia, iba a ser misterioso o dramático, vivaz o luctuoso,
de fines de 1949 a mediados de 1955, cuando fusionó sentimental a veces, según las propuestas del tema. Y
cubismo y constructivismo en naturalezas muertas siempre mágico. El paisaje, en otras palabras, ha sido
compuestas por torres armadas con copas, flores y otros el activante principal de sus mensajes. Tal interés por el
elementos, o yuxtaponiendo, casi al azar, jarras, frutas, espacio, asumido como un protagonista de las alhara-
cuchillos y peces, con un propósito lírico derivado de cas del trópico, fue el aporte de Obregón al programa
su admirado Paul Klee. Tras la experiencia francesa, de nunca escrito del Grupo de Barranquilla. Ese programa
vuelta a Colombia, se estableció en Barranquilla y se consistió en la búsqueda y encuentro de una identidad

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basada en la profunda comprensión de nuestra realidad que comienzan con Vista del amanecer en los Andes y
cotidiana, nuestra cultura popular y nuestra historia. continúan con referencias geográficas concretas como
La indagación de lo que somos iniciada por José Félix son Cotopaxi y Chimborazo, entre otros.
Fuenmayor en su narrativa, condujo a la profundidad El esfuerzo que el pintor hizo en esta dirección,
social de Álvaro Cepeda Samudio en La casa grande y a hallándose aún en la etapa geométrica, pasó por el
ese saber transformar las leyendas campesinas de la costa encargo que recibió del Banco Popular para pintar en
en narración universal que vemos en Gabriel García su sede del paseo Bolívar, en Barranquilla, el mural al
Márquez. El equivalente plástico de estos empeños lo fresco Símbolos de Barranquilla (1956). El tema esco-
hallamos precisamente en Alejandro Obregón. Todo gido fue el auge y futuro de la ciudad. A éste siguió el
un ámbito cultural fue absorbido y cualificado por los mural en cristanac Tierra, río y mar (1956), en un edi-
cuatro con vigor.40 ficio residencial al norte de la capital del Atlántico. En
ambos, el pintor aceptó desarrollar asuntos regionales
Me faltó complementar las referencias literarias con de tipo socioeconómico y cultural. Fue una limitación
las musicales y hacer ver que ese programa no escrito del que logró superar al acertar en la valoración de mani-
grupo encajaba en todos sus detalles con el de Lucho festaciones locales. Por ejemplo, en 2003, el carnaval
Bermúdez al remozar el porro, el de Pacho Galán al de Barranquilla fue declarado por la UNESCO patri-
fusionar el merengue dominicano y la cumbia, o el de monio intangible de la humanidad. Casi medio siglo
Rafael Escalona al estilizar el vallenato y darle a las letras antes, en el muro de Símbolos, Obregón supo captar y
de las canciones un giro lírico de buena ley sin abando- expresar la universalidad de la fiesta, de características
nar el carácter narrativo propio del juglar, algo que a su y contenidos muy propios. La expresó haciendo girar
turno retomó García Márquez. Constituye todo esto, los elementos que ilustran el desarrollo industrial y
sin duda, un circuito hecho de felices coincidencias, comercial de la urbe en torno a la danzante pareja de un
o, si se quiere, de vasos comunicantes que elevaron el torito y una mujer congo. Las fiestas carnestoléndicas
nivel de los aportes de la región a Colombia y el mundo, le inspiraron luego el óleo Entierro de Joselito Carnaval
aportes que figuraron entre los más variados, duraderos (1957), de colores luminosos y sombras sugerentes,
y sólidos de toda la producción cultural del país en el distinguiéndose apenas —en la zona de penumbra— la
recién pasado siglo XX. oscura silueta de un torito con una botella de ron en
Al promediar los años cincuenta, Colombia vivía la mano. La del Torito y la del Congo Grande, son
el régimen del general Gustavo Rojas Pinilla. En tan danzas barranquilleras fundadas en el siglo XIX que
particulares circunstancias, Obregón creó el cantaclaro, han conservado todo su esplendor hasta hoy.
el gallo de plumas y hojas vegetales, que monta guardia Como Grau, Obregón fue un artista que supo desa-
junto al catafalco de Velorio—Estudiante fusilado, óleo rrollar su talento en estrecho contacto con el ambiente
que en 1956 recibió el premio nacional Guggenheim. que respiraba. De allí la autenticidad y proyección de
Símbolo de la conciencia democrática frente a la dic- los temas marinos que ensayó con suerte. El interés en
tadura militar, el altivo gallo apareció en otros cuadros esos temas se inició con la serie de la Mojarra (1959),
del año 56 —como Cantaclaro de noche, por ejemplo—, hermoso pretexto para jugar con el color de manera
imbuido de una evidente y al mismo tiempo soterrada desenfadada y brillante. El Caribe lo inspiraba. Esa
intención de despertar político y lucha por la democra- inspiración se amplió en 1961 y se hizo más compleja,
cia. El obregoniano y comprometido gallo fue el ante- entusiasmando de tal modo a Marta Traba que ésta
cedente de los torocóndores de 1959, máxima expresión se refirió a obras clave como Aves cayendo al mar, El
de la Colombia que el pintor soñó, la Colombia hispana mago del Caribe, La garza y la barracuda, Anochecer en
y americana que simbolizó con la fusión del bovino y el Galerazamba, Naufragio, En lo hondo y La resaca. Sobre
ave andina, creando incluso el neologismo ‘torocóndor’ El mago del Caribe escribió Marta Traba:
para poder titularla. Obregón simbolizó a Colombia, es
verdad, pero, contrario a lo que extraños conocedores
y tratadistas ignoran, la serie hace alusión a todo el
mundo andino con títulos particulares y específicos 40  Álvaro Medina (1978: 415).

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Alejandro Obregón:
Velorio -estudiante
fusilado (1956)

Un pez rojo navega solitario (...). Después de la pirotec- res, no se limitan a expresar lo que está dentro de las
nia, esta podría ser la noche dramática (...). Al otro lado, fronteras de Colombia. Si observamos la posición del
una mancha blanca, delgada y aguda, corta la noche pez en el espacio, o sea la composición, la barracuda
sin desmenuzarla. Obregón ha pintado el silencio, y la remite a la velocidad, la libertad y la aventura posible;
vida secreta del silencio.41 si observamos ahora su estructura interna, resulta ser la
serenidad, la gravedad y la fuerza. Se trata de atributos
También pintó la fugacidad del relámpago, captó que se pueden interpretar positiva o negativamente, ya
el pausado nadar de los peces, le puso luz a la flora sea como virtudes admirables o como defectos repro-
submarina y sugirió el incesante ciclo de vida y muerte bables. La barracuda no es un símbolo unidimensional
que las tinieblas nocturnas ocultan. y estático, sino polisémico y dialéctico; la mojarra,
Las telas de 1963 culminaron en la serie de la en cambio, vista aisladamente, es estática o “inerte”,
Barracuda, iniciada en 1961. Son las barracudas las que como la calificó Marta Traba42, pero vista de manera
mejor simbolizan su visión del Caribe (no importa si concatenada en la serie es, en palabras del pintor, “una
continental o antillano) porque resulta que las obre- secuencia de formas” y un “estado de ánimo”, que cabe
gonianas barracudas, como los obregonianos cóndo- calificar de variable, dinámico y negado a la rutina43.
Como cazador y pescador que frecuentaba la isla
de Salamanca, Alejandro Obregón fue el primero en
sonar la alarma a propósito del desastre ecológico que
estaba causando la carretera recién construida, al cer-
cenar los caños y privar de entradas de agua dulce a las
41  Marta Traba (1963: 89). lagunas y humedales salobres donde crece el mangle.
42  Marta Traba (1963: 84) Señalemos que cuando pintó Masacre—10 de abril
43  Marta Traba (1963: 84) (1948), Velorio—Estudiante fusilado (1956) y muchos

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Alejandro Obregón:
Masacre -10 de abril
(1948)

más adelante Homenaje a Camilo (1968), lo que hacía Ricardo Ortiz McCormick en 1948 al escribir: “Por
era sentar su posición frente a un hecho irreversible sobre la composición, por sobre el color, por sobre el
que lo conmovía hasta las entrañas. Con no menos ira vigor plástico, se destaca en estos cuadros el contenido
procedió frente al grave desastre que se avecinaba en la vital, (...) de universo acabado de descubrir”.44 En
isla, por entonces apenas en sus inicios. Pintó así la serie efecto, Obregón fue un descubridor y fundador de
del Mangle (1960), de grises sombríos en la mayoría de la festiva y embrujadora realidad del Caribe junto al
sus cuadros. No vemos allí el verdor del árbol sino sus “”Tuerto López, Luis Palés Matos, Nicolás Guillén,
raíces secas, quemadas por la sal excesiva que aporta Aimé Césaire, Alejo Carpentier, Gabriel García Már-
el mar. Adentrándose en la libertad que le confería el quez, Germán Espinosa, Armando Reverón, Wifredo
expresionismo que practicaba desde el año anterior Lam y toda la pléyade de soneros, rumberos, cumbiam-
con los cóndores, el pincel del maestro convirtió el beros, merengueros, salseros y otros ‘eros’ de todas las
mangle en un veloz y ágil grafismo, del que a veces latitudes. El pintor de Barranquilla pudo vivir porque
brota la flor que intenta un renacer imposible, símbolo supo pintar y pudo pintar porque supo vivir, absor-
de la lucha vida-muerte que campea en algunas de sus biendo con placer las sales de su entorno. El arte, para
mejores pinturas.      él, fue proximidad, ensoñación, contradicción y goce,
Cualquier sea el tema, en Obregón hay una eficaz no distanciamiento y fría lucubración intelectual.
y lírica manera de discurrir sobre la vida para trascen-
derla, algo que algunos comentaristas supieron ver en
obras de los años cuarenta. Porque, volviendo una vez
más sobre los orígenes de la actitud que Obregón supo
mantener a lo largo de su notable trayectoria artística,
cerremos esta nota con las casi proféticas palabras de 44  Ricardo Ortiz McCormick (1948)

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6 numerosos estudios sobre el retraso económico de la
En el censo de 1973 los siete departamentos de dicha región y se ha fijado, entre otras cosas, en su desarrollo
región [la del Caribe] registraron una población de demográfico. Según este autor, al producirse el grito de
cerca de cinco millones de habitantes, el 20,1% de la Independencia en 1810, Cartagena tenía cerca de 18.000
población de Colombia. Esto implica que estos depar- habitantes y Barranquilla unos 3.00046. Casi un siglo
tamentos tienen una población superior a la de ocho después, en 1905, golpeada por la epidemia de cólera
de los países latinoamericanos: Nicaragua, Uruguay, que en 1849 arrasó con cerca de cuatro mil vecinos,
Honduras, El Salvador, Paraguay, Haití y Costa Rica. Cartagena había reducido su población a casi la mitad,
Adolfo Meisel Roca45 registrando en el censo de ese año 9.681 almas, mientras
que Barranquilla la había multiplicado por más de trece,
¿De qué contexto cultural, social y económico sur- llegando a 40.111. El cuadro insertado a continuación,
gieron Leo Matiz, Enrique Grau y Alejandro Obregón? que incluye datos relativos a Santa Marta, permite
En 2004, la población total del Caribe colombiano fue identificar las etapas de regresión, morosidad y súbito
proyectada en 9’756.690 habitantes. Ella representa, avance poblacional, que pueden leerse en paralelo con
en el conjunto de los 45’325.261 que tendría la nación, el censo total del país.
el 21,5%. Su contribución a la economía del país, en Se deduce de los casos de Santa Marta y Cartagena,
cambio, es proporcionalmente menor, o sea que cons- a pesar de la ‘turbulencia’ registrada en el siglo XIX, que
tituye un conglomerado humano pobre en el contexto la evolución experimentada durante ciento tres años se
de un país pobre. Esta pobreza material, agravada por mantuvo próxima a la de Colombia en su conjunto,
el alto grado de corrupción política que campea en tasa que Barranquilla superó con creces, convirtiéndose
sus entes administrativos, contrasta con su riqueza de villorrio miserable en la tercera ciudad del país. En
cultural. Riqueza paradójica, por decir lo menos, en el el sólo período 1905-1938, Barranquilla multiplicó la
caso de las artes plásticas, que siempre han dependido población por algo más de tres, Santa Marta por casi
de una demanda de élite por parte de sectores sociales cuatro y Cartagena por nueve, o sea que los tres puer-
e institucionales que, además de poseer excedentes tos conocieron una etapa de crecimiento demográfico
de capital, sean cultos. ¿Cómo explicar entonces la estimulado por un auge económico de tal envergadura
fuerza y la consistencia de los trabajos de Matiz, Grau que atrajo inmigrantes de dentro y fuera del país. Ese
y Obregón al promediar el siglo XX? Para comenzar a auge estuvo ligado, en Santa Marta, al esplendor de
responder la difícil y compleja pregunta, recordemos las fincas bananeras a partir de 1906; en Cartagena, a
que los tres eran originarios de los tres departamentos la exportación ganadera, la actividad manufacturera,
en los que por esa entonces se dividía la Costa (Bolívar, el movimiento generado por la única universidad que
Atlántico y Magdalena), y los tres estuvieron vinculados había en la región y la construcción de la terminal del
a sus capitales y puertos principales sobre el Caribe oleoducto que desde 1926 lleva el petróleo de Barranca-
(Cartagena, Barranquilla y Santa Marta).
Si al comenzar el siglo XXI la situación socioeco-
nómica de la región no es halagüeña, peor fue lo que se
padeció en el siglo XIX. Adolfo Meisel Roca ha escrito 45  Adolfo Meisel Roca (1993: 12)

EVOLUCIÓN DEMOGRÁFICA DE LOS TRES PUERTOS DEL CARIBE Y DE COLOMBIA, 1835-1938


AÑO 1835 1905 1938
Santa Marta 5.929 9.568 34.294
Cartagena 11.929 9.681 84.937
Barranquilla 5.359 40.111 152.348
COLOMBIA 1’686.038 4’143.632 8’701.816

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cult u ra

El cine de Greta Gabo *

Hugo Chaparro Valderrama

Un hombre que se afeita con jugo de durazno


durante una escasez de agua en Caracas; el domador
de un circo con las espaldas marcadas por los tigres y
los osos que le arañaron el cuerpo en cuarenta años
de oficio; el muerto de un accidente que le explica a
un familiar por qué no volvió a su casa, debido a “un
pequeño inconveniente”; los miembros deshilachados
de un perrito pequinés, molidos por el engranaje de
una escalera mecánica…
La realidad y sus invenciones en tono superlativo
–o, dicho de otra manera, la ficción considerada como
una realidad posible y desmesurada-, predestinaron a
García Márquez tanto a la literatura como a la recrea-
ción del mundo en una pantalla de cine.
La máquina que derrotó parcialmente a la muerte
con el esplendor de sus imágenes, haciendo que sus
fantasmas revivieran cada vez que una proyección
mostraba la plenitud de sus vidas, enriqueció lo leído
con las visiones fugaces de una película.
El único sueño que podemos ver despiertos sirvió
para prolongar la biblioteca en la filmoteca, tal vez con
el mismo asombro que pudo desconcertar, a finales del
siglo XIX, al público que escapó, huyendo despavorido,
de la primera función en la que un tren parecía abalan-
zarse al teatro brotando de la pantalla.
La devoción fue inmediata. Apenas con veinte años,
Presagio
García Márquez escribe, recién llegado a El Universal
de Cartagena, en junio de 1948, una nota que declara
su abierta complicidad con un espectador irascible, * Artículo cedido por el diplomado Travesía por la Geografía
llamado Bonifacio Nieves, que disparó en Uruguay su Garciamarqueana de la Escuela de Verano 2007 de la Universidad
Tecnológica de Bolívar de Cartagena

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pistola a la pantalla, donde aparecía un actor excesi- uruguayos?”.
vamente cursi. El oficio de la crítica, visto de esta manera, destro-
El temperamento, tanto de Bonifacio como de zaría los teatros y le impondría a los críticos multas y,
García Márquez, presentaba ya los síntomas de una posiblemente, cárcel.
visión hiperbólica. De hecho, en una columna anterior, Durante sus primeros años como periodista, García
había considerado que el hallazgo de un pergamino Márquez revisaba cables que le servían eventualmente
oriental demostraba que los chinos habían inventado para sus columnas: “Punto y aparte”, publicada en El
el cine, antes que los hermanos Lumière, ocho mil Universal, desde mayo hasta julio de 1948, y “La Jirafa”,
años atrás. en El Heraldo de Barranquilla, desde enero de 1950 hasta
La pregunta que se hace García Márquez al inicio diciembre de 1952.
de la nota, sugiere una larga distancia entre el primer El escritor se buscaba a sí mismo en las salas de
periodista y los hallazgos futuros: redacción de los diarios donde aprendía lentamente
“¿No es cierto que usted frecuentemente se ha sen- su capacidad para la fabulación, vigorosa y superlativa,
tido protagonista de una cinta cinematográfica, cuando inversamente proporcional al tono de sus críticas de
la carga excitativa de su argumento ocupa íntegramente cine, informativas y restringidas por el análisis de una
su capacidad de emocionarse?”. cartelera sobre la que empezaría a escribir de manera
Después describe el impulso que subleva al regular en El Espectador de Bogotá, desde febrero de
uruguayo y lo obliga a disparar contra la pantalla, y 1954 hasta julio de 1955.
concluye: Acaso como sucedió con los hermanos siameses
“Usted, probablemente, ignoraba este aconteci- Eng y Chang, que sufrieron en el siglo XIX la con-
miento. Pero, ¿no está usted pensando ahora que para dena de estar siempre el uno al lado del otro por un
satisfacción de los buenos cineastas sería conveniente cartílago que les salía a la altura del estómago –lo que
invitar a Cartagena a todos los Bonifacios Nieves no impidió que contrajeran matrimonio con otro par

El coronel

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de hermanas, que no eran siamesas, para convertirse Nereo López:
en padres de familias tan numerosas que alcanzaron a Cecilia Porras
contar 22 hijos entre ambos-, la escritura fue el tronco
que reunió y dividió las pasiones de García Márquez,
preguntándose: ¿cine o literatura?
Y así como Eng era abstemio y Chang alcohólico,
eventualmente el cine y la literatura se impusieron con
un temperamento distinto, según el momento y las
posibilidades de sobrevivir con la ficción hecha cuentos,
novelas o guiones.
Un dromedario enviado por correo a Texas para
hacerle la vida imposible a un granjero; una mucha-
cha lanzándole a un tren en movimiento una bicicleta
para regalársela a uno de los pasajeros; un borracho
que descubre en el suelo, al lado de su cama, el cuerpo
saltarín de un pez plateado, en una ciudad a kilómetros
del mar; la falta de tema como tema para una columna
y para que García Márquez afirme: “El periodismo es
la profesión que más se parece al boxeo, con la ventaja
que siempre gana la máquina y la desventaja de que
no se permite tirar la toalla”.
Hacia los años 50, Colombia era un país tímido, organiza otra Junta de Censura en su departamento,
por no decir provincial, ante el cine. A pesar de que hacia 1916, “compuesta por individuos ayunos en los
el primer largometraje registrado por la historia, El achaques de arte, de teatro, de literatura, algunos de
drama del 15 de octubre (Di Doménico, 1915), supuso los cuales ni siquiera habían concurrido a una función
una proeza insólita cuando se contrató a los asesinos de cinematógrafo antes”. La Junta prohíbe Josefina
del héroe de la Guerra de los Mil Días, Rafael Uribe vendida por sus hermanos porque, en concepto de uno
Uribe, para que protagonizaran en la ficción el mismo de los censores, había en ella una sátira a San José, y Los
crimen que habían cometido un año antes en la rea- caballeros de Rodas, porque en ella los moros derrotan
lidad, el oficio de la crítica reflejaba tanto la actitud a los cristianos y, según la Junta, “los cristianos en
del público como el estado de la industria, en nuestro ningún momento pueden ser vencidos por los moros”
caso, de la artesanía cinematográfica que se producía (Nieto, 1992: 129).
en el país del Sagrado Corazón de Jesús como si fuera Entre 1908 y 1913 surgen en el país distintas revistas
un milagro. de “arte y variedades”: El Cinematógrafo, Olympia, El
Cuando se establece la Junta de Censura Cinema- Kine, El Cine Universal, El Cine Gráfico. El diario Ecos
tográfica en Bogotá, hacia 1914, el periódico El Tiempo de la Montaña, publicado en Carmen de Bolívar, ruega
(25/V/1914) advierte: en 1914: “Que venga, que venga el cine para disipar el
tedio y su influjo preocupativo”.
La autoridad negará todo permiso cuando las nuevas A principios de siglo, Francisco Bruno, pionero de
películas sean inmorales, por resultar de ellas la halaga- la crítica de cine en Colombia, era un joven estudiante
dora exhibición o el triunfo escandaloso del crimen, o el de leyes que vivía en Bogotá, quien se sostenía como
vicio y la enseñanza del robo o por poner en ridículo a jardinero del Parque de la Independencia. Cuando
los Ministros o símbolos y prácticas religiosas, y cuando Vincenzo Di Doménico, el dueño del teatro Olympia,
representen escenas contrarias a la decencia y las buenas con capacidad, según asegura la leyenda, para 6.000
costumbres de la civilización cristiana. espectadores, conoce a Bruno, le propone que aban-
done la jardinería para trabajar como portero del teatro
Siguiendo el mal ejemplo, el gobernador del Huila y, posteriormente, como editor de la revista Películas.

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El entusiasmo de Bruno es similar al que evidencia “información gráfica de los acontecimientos de más
años después García Márquez como crítico de cine en actualidad en el país y en el extranjero”.
El Espectador. En 1919 se interesa por el cine europeo; García Márquez también se interesa por el cine
compara al cine italiano con el de “todas las otras italiano; se mantiene al vaivén entre las “cintas de arte”,
naciones”; se desconcierta ante el hecho de que “haya los cuentos, las novelas y la poesía; lee con voracidad las
espectadores a quienes guste la cinta de aventuras y no la “curiosidades literarias” –Ernest Hemingway, William
de arte”; ensalza fervorosamente el envío de un corres- Faulkner, Virginia Woolf-; publica regularmente, pri-
ponsal que describe a los norteamericanos como “exce- mero como lector de cables y, luego, como enviado
lentes muchachos, trabajadores, enérgicos, magníficos especial a Europa, en julio de 1955, crónicas sobre
negociantes, pero ayunos de toda idea de arte y poesía”; asuntos de “palpitante actualidad”.
alterna los “artículos referentes al arte cinematográfico A medio camino entre la herencia de Bruno y el
y teatral” con “cuentos y novelas cortas, de los mejores refinamiento de la crítica cinematográfica posterior
autores” y “poesías escogidas entre las más célebres del a sus columnas, tendió un puente entre el antes y
habla española”; destaca las “biografías y anécdotas de el después del oficio. Como los primeros críticos, se
los más renombrados artistas de la pantalla y la escena”; preocupó por los aspectos que luego serían reciclados
publica regularmente “una crónica extranjera sobre el en distintas épocas y publicaciones nacionales: “la rela-
asunto de más palpitante actualidad” y “una sección de ción cine-espectador, la censura, el gusto de la época y,
curiosidades científicas y literarias”, aparte de brindar finalmente, los comienzos de la producción de cine en
Colombia” (Martínez Pardo, 1978, p. 32).
No pertenece a la estirpe retórica, pero sí conceptual,
de críticos como Tulio Hermil, quien aseguraba en El
Kine de Sincelejo, publicado en febrero de 1914, que
Afiche de Tiempo de morir
“la misión del cinematógrafo, como la de la prensa, es
esencialmente civilizadora” (Martínez Pardo, 1978: 33).
La diferencia entre la crítica como oficio primordial
y el novelista que la ejerce como un trabajo alimenticio,
quizás igual de apasionante, pero escrita con un ojo
en la pantalla y el otro en la literatura, impidió que
García Márquez se igualara a críticos notables de su
generación como Hernando Salcedo Silva o Hernando
Valencia Goelkel. El primero fue invitado por el mismo
García Márquez a escribir en El Espectador en octubre
de 1954 –“Como la película El gran concierto –realizada
en la Unión Soviética- es esencialmente ballet fotogra-
fiado, el autor de esta sección tiene el honor de ceder
el espacio a un crítico de ballet muy bien calificado,
don Hernando Salcedo, quien además es un excelente
aunque vacante crítico de cine” (García Márquez, Entre
cachacos, 1997: 225)-; el segundo confirmaría con sus
notas, publicadas a partir de 1959, que la crítica es otra
forma de la literatura.
El periodismo de García Márquez escrito a finales
de los años 40 y principios de los 50 le permitió, según el
profesor Jacques Gilard, quizás el gabólatra más erudito
y esmerado que haya existido nunca, “el aprendizaje
de una retórica original”. Una idea en la que enfatiza
Gilard cuando se refiere a sus críticas de cine, conside-

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rando que “tienen una lentitud o una superficialidad,
una seriedad o una frivolidad, que nada tienen que ver
con la auténtica manera de García Márquez” (Gilard,
Entre cachacos, 1997: 26-27).
En otras palabras, sin la desmesura y los efectos
especiales de un delirio talentoso, García Márquez no es
García Márquez. El riesgo más frecuente que atraviesa
a lo largo de su aventura cinematográfica fue señalado,
de manera anticipada e inconsciente por él mismo, en
El Espectador, cuando publica su resumen crítico del
año en diciembre de 1954 y se refiere a la película de
Fred Zinnemann, From Here to Eternity (De aquí a la
El gallo de oro
eternidad, 1953), considerando que su “método narra-
tivo es más literario que cinematográfico”.
El lugar común del Crítico Artillero es rutinario
y está al otro lado de la luna donde se encuentra la
autenticidad del escritor que narra libremente historias Bombas verbales; generalizaciones limitadas por
basadas en el cine y en sus personajes más inverosímiles: el espectro cinematográfico local; explosiones modelo
una anciana en Estocolmo que quiere retoñar comprán- “esperpento cinematográfico (…) escandaloso mama-
dose un enorme sombrero de paja y un pantalón de rracho”, sin mayor elaboración cuando se refiere a una
flores rojas, acaso tan grandes como el sombrero, para película italiana, titulada en español Mentira, con la que
ir al Festival de Venecia a conocer a Gregory Peck; un el espectador corre el riesgo de sentirse “empalagado
hombre decrépito, parecido a Drácula, que va con su de melodrama”.
chofer a cine de tres, desde hace nueve años, por reco- El Chang literario se distancia del Eng cinemato-
mendación del médico; Porfirio Rubirosa, el gallo del gráfico, demostrando un mayor virtuosismo plástico
galanteo que nació en República Dominicana, capaz con el lenguaje y atreviéndose a descripciones más
de cultivar con las actrices de Hollywood su deporte cercanas a la ficción que al ensayo.
preferido: el matrimonio; la carne y el espíritu reunidos En “Dramas reales del cine mexicano” (El Espec-
durante la audiencia que concedió el Papa Pío XII a tador, noviembre de 1954), García Márquez atrapa al
Sofía Loren. lector con breves dosis de escándalo: “Un director de
El instinto literario y sus invenciones triunfan películas, en huelga de hambre… Estaba ya a punto
sobre el crítico que se sobresalta cuando la película no de fallecer cuando se aceptaron sus peticiones por
lo satisface. haberse creado un problema de orden público. Un
Para García Márquez, Heidi (1952), de Luigi actor que se dedica al oficio de mesero para no cansar
Comencini, es una película de “abrumadora corrección a sus admiradores”.
formal, pero demasiado suiza”; el cine italiano, según La expectativa es recompensada por las primeras
la cartelera bogotana de los años 50, “decididamente líneas del artículo:
es el peor del mundo” y cumple cada semana “con su El 10 de este mes, un hombre alto y magro llegó en bata
obligatoria cuota de cursilería”; La guerra de Dios (1953), de baño y con una silla de extensión frente al Palacio de Bellas
de Rafael Gil, es “una apreciable pero frustrada tenta- Artes en Ciudad de México, y se sentó a leer una revista
tiva por reivindicar el irremediable cine español”; en ilustrada. Los numerosos ciudadanos que por allí transitaban
Johnny Guitar (1954), de Nicholas Ray, Joan Crawford vieron al extravagante lector en la vía pública, y pensaron tal
es “la eterna mujer vestida de hombre de las películas vez que iba a rodarse una de esas películas mexicanas en las
de vaqueros, con revólver al cinto, malas palabras y una que ocurren tantas cosas, que los protagonistas se sientan a
tragedia sentimental bien disimulada”, mientras que leer en la calle con la mayor naturalidad. Sin embargo, las
Sterling Hayden “no sabe qué hacer con su corpachón horas pasaron y los equipos de filmación no aparecieron por
de gigante aburrido”. ninguna parte; y el hombre seguía leyendo indiferente a la

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Nereo López:
La langosta azul

curiosidad pública, metido en su bata de baño a cuadros, tomaría en serio a sí mismo?


como si no estuviera en uno de los lugares más concurridos La ansiedad por escribir guiones, los riesgos de
de la ciudad, sino en la terraza de su residencia. aventurarse por la narración visual, el tortuoso laberinto
que traza una producción, son pruebas de resistencia.
Las conjeturas de los transeúntes encontraron muy Es difícil conciliar las opiniones diversas sobre el cómo
pronto una respuesta. El lector callejero era Guillermo y el por qué filmar una historia. El éxito y el fracaso
Calle, un director de cine, de 60 años, que ese día había son valores relativos que se atraen y se rechazan en una
declarado la huelga de hambre, porque se prohibía su industria voluble. Después de hacer el intento, el resto
reingreso a la sección de directores del sindicato de es literatura y permite retirarse hacia el terreno seguro,
trabajadores de la producción cinematográfica” (García al menos en apariencia, de la invención solitaria.
Márquez, Entre cachacos: 258-259). Tendrían que transcurrir exactamente cuarenta
años, desde que se estrenara El drama del 15 de octubre,
Graham Greene se preguntaba, a mediados de los para que la vanguardia cinematográfica se manifestara
años 30, en una nota sobre El sueño de una noche de de nuevo en Colombia con una historia que reúne el
verano (Reinhardt / Dieterle, 1935), si los críticos de surrealismo y la ciencia ficción en formato tropical:
cine se tomaban suficientemente en serio a sí mismos. La langosta azul.
Le resultaba asombroso que un crítico se atreviera a Mientras que El drama… fue un intento renovador
decir que William Shakespeare, con toda seguridad, de manera fortuita para los Di Doménico, La langosta
aprobaría la versión que habían hecho de su obra. azul (1955), dirigida por el escritor Álvaro Cepeda
Semejante intuición era más que sospechosa. Incluso Samudio, el pintor Enrique Grau y el cineclubista Luis
Greene suponía que el crítico tal vez fuera un médium Vicens, surgió por la pasión que ayudó a sumarle cerca
al que poseía el espíritu del Bardo. de media hora a una eternidad incierta como es la del
No sobra imaginar entonces lo que podría pensar cine en Colombia.
un escritor convencido de su oficio indeclinable, Tan inocente como temeraria, la película narra la
extraviado eventualmente en los misterios del cine: ¿se historia de un misterioso viajero, que trae en su maleta

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unas langostas, de color azul y poderes radioactivos, más brillo a su diploma”, se contrapuso el desencanto
perdiéndose una de ellas entre las fauces de un gato. de Almendros:
Durante el rodaje de la película, los realizadores inter-
cambiaron eventualmente sus papeles tanto de actores Luciano Tovoli, el colombiano Guillermo Angulo, el
como de directores, cruzando al frente y detrás de la argentino Manuel Puig y yo, nos rebelamos. Gracias
cámara según como lo exigieran las circunstancias y el al espíritu de contradicción que nos animaba, descu-
aprendizaje improvisado. brimos que aprendíamos sólo técnicas anquilosadas.
El azul de la insólita langosta es supuesto: la película Los profesionales del Centro, en su mayoría, eran pro-
es en blanco y negro. Tanto como la presencia de García fesionales fracasados que no habían logrado nada en el
Márquez en una película que se filmó, prácticamente, cine (…) Entre los docentes (…) se contaban también
sin que él apareciera. viejos cineastas ya retirados y sin mucho entusiasmo.
“Mi problema”, dice en su autobiografía, “era que En resumen, la escuela fue una decepción. La política
me encontraba en medio de alguno de aquellos repor- del Centro cambió años más tarde con la llegada de
tajes prolijos que no me dejaban tiempo para respirar, Rosellini. Pero en aquel momento sus tendencias eran
y cuando logré liberarme ya la película estaba en pleno muy conservadoras. Y el neorrealismo se hallaba ya en
rodaje en Barranquilla” (García Márquez, Vivir para franca decadencia. Con todo, mi paso por el Centro
contarla, 2002: 548-549). Sperimentale fue útil: como dice Rohmer en una de
Un experimento y una celebración para sus amigos; sus características boutades, las malas escuelas pueden
para el cine, algo semejante al primer impulso que ser positivas, porque una mala escuela –injusta, into-
tuvieron Luis Buñuel y Salvador Dalí con El perro lerante y anticuada- provoca reacciones, alumnos que
andaluz (1928), pero sin continuidad. Con un valor se revelan con lo que, a la larga, una mala pedagogía
agregado: como la literatura de García Márquez y puede también resultar una buena pedagogía (Almen-
Álvaro Cepeda, la película fue un punto de fragmenta- dros, 1996: 38-39).
ción en la tradición del melodrama, el costumbrismo y
la recreación de episodios históricos que hacían carrera La rebelión y el azar contribuyeron a moldear el
en la pantalla local, convirtiéndose La langosta… en destino de García Márquez como escritor: después
la promesa de lo que nunca pudo ser más allá de su del Centro –en el que está apenas unos meses-, viaja
brevedad, rescatada por el tiempo gracias a la suerte que a París e indirectamente, como tantos dictadores que,
tendrían, en ámbitos distintos al cinematográfico, los a pesar de ellos mismos, han contribuido para que
personajes involucrados en su realización. los escritores se liberen de las pesadillas que enseña la
Cuando García Márquez viaja a Europa, en calidad realidad, conjurándolas en la ficción, cuando el general
de corresponsal de El Espectador, a mediados de los Gustavo Rojas Pinilla cierra El Espectador en 1955, se
años 50, los caminos del cine lo condujeron a Roma. dedica a trabajar todo el tiempo que puede en El coronel
Otro escritor, Manuel Puig, viajó a Italia por la misma no tiene quién le escriba, porque el periodista no tiene
época. Ambos se desencantaron de los cursos imparti- quién le pague –tanto así que se le daña la máquina y el
dos en el Centro Sperimentale di Cinematografía. El técnico que la repara le dice que está fatigada. (Vargas
“neorrealismo italiano”, que tanto había entusiasmado Llosa, 1971: 47)
a García Márquez por contraste con las películas que Perseguido por el periodismo, viaja a Caracas en
lo fastidiaron cuando escribía su columna “El cine en 1957 para trabajar en la revista Momento; a Bogotá, en
Bogotá”, declinaba lentamente y películas como las de 1959, para dirigir la agencia cubana de Prensa Latina,
Vittorio De Sica -Ladrón de bicicletas (1948), Milagro en que lo desplaza después a La Habana y a Nueva York,
Milán (1951) y Umberto D (1952)-, eran emblemas de un donde renuncia para llegar a México y tomarse de
tiempo lentamente rebasado. El director de fotografía nuevo en serio como guionista de cine –con un breve
Néstor Almendros resumió la protesta generacional. Al interludio: cuando trabaja como corresponsal de
entusiasmo de los directores cubanos Tomás Gutiérrez Prensa Latina en Bogotá, sueña con retirarse y fundar
Alea y Julio García Espinosa, que regresaron a Cuba una versión del Centro Sperimentale en Barranquilla:
hablando maravillas del Centro, “seguramente para dar “Recuerda que escribió un esquema de lo que podría ser

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esa escuela y que, contra su voluntad, una copia de su una novela que es, si tú quieres, las antípodas del cine:
proyecto llegó a circular en los ambientes intelectuales Cien años de soledad.
de Bogotá, donde el interés por el cine había crecido
notablemente” (Gilard, Entre cachacos: 48). El único proyecto en firme antes de Cien
Su peregrinación por la industria mexicana y por años… fue una adaptación de Rulfo: El gallo de oro
las agencias de publicidad en el D. F., es semejante a la (Gavaldón, 1964). Escrita por García Márquez en
de Puig en Europa y tiene consecuencias similares. Se colombiano, antes que en mexicano: su productor,
trata de dos guionistas a los que no consiente la suerte Manuel Barbachano Ponce, llamó a Carlos Fuentes para
y que luego de intentarlo repetidas veces, toman, como cambiarle el color a sus giros. La literatura se imponía
los toreros, la alternativa literaria para enfrentar, de la con facilidad. Olvidando la sabiduría de un director
mejor manera posible, los cuernos de sus demonios. como Hitchcock cuando aseguró que “un cineasta no
“Yo no escogí la literatura”, dijo Manuel Puig en debe decir cosas, debe mostrarlas”, los dos escritores,
una entrevista, a mediados de los años 80. “La literatura sumergidos en el guión, se interesaron por describir de
me escogió a mí. Nunca me hice ilusiones acerca de la mejor manera posible las cosas. “Es decir: nos impor-
escribir ficción. Mi única fantasía con la escritura fue taba lo que se leía, no lo que se veía”, dijo Fuentes.
que durante mi vejez, después de haber dirigido varias Los lectores que empezaron a multiplicarse después
obras maestras, escribiría mis memorias” (International de Cien años…, específicamente los directores de cine,
Herald Tribune, Agosto 14, 1985, en Levine, 2000, p. hijos del siglo XX y, por extensión, de la pantalla como
xi). referencia ineludible de su época, quedaron en trance
Si Puig soñaba con ser director de cine y García de seducción por el carácter demoledor de sus historias,
Márquez con ser guionista, la terquedad que demostra- sin darse cuenta que la literatura de García Márquez
ron ambos para vender sus proyectos y su desencanto pertenece a la estirpe de los inadaptables.
ante la dificultad de lograrlo, se tradujo en la obsesión ¿Cómo traducir a la pantalla el Tristram Shandy de
literaria que los redimió y les permitió escribir dos nove- Sterne, el Ulises de Joyce, Paradiso de Lezama Lima,
las difícilmente adaptables a la pantalla: La traición de Rayuela de Julio Cortázar o Yo el Supremo de Augusto
Rita Hayworth (1968) y Cien años de soledad (1967). Roa Bastos, sin presentir la nostalgia por la respiración
Para Puig fue una manera de confesarle su amor natural de novelas que fluyen con plenitud en las pági-
a las divas que conoció en su infancia; para García nas donde están escritas?
Márquez, una forma de exorcizar el sueño de una Acaso en el cine no se cumpla del todo el papel
historia que lo perseguía desde hacía varios años, así del traductor como traidor. Sin embargo, incluso de
como también de vengarse contra el espejismo de la buena fe, el traductor cinematográfico se aventura
pantalla. inevitablemente por el territorio de la parodia. A
En 1969, la revista Cine Cubano publica una entre- pesar de las comparaciones, odiosas pero inevitables
vista donde García Márquez confiesa, luego de haber en este campo espinoso, tanto el libro como la pelí-
cruzado la montaña de la novela y con la seguridad cula consiguen su autonomía narrativa. Es inútil el
de haber escapado a las garras del anonimato, de qué enfrentamiento entre el fundamentalista literario vs.
manera Cien años…, entre otras cosas, fue un romance el cinéfilo complaciente, cifrado en el chiste del chivo
a plenitud con la literatura que le permitió olvidar su que se come una cinta de celuloide, respondiéndole a
despecho cinematográfico: otro chivo cuando le pregunta qué tal está la película:
“Me gustó más el libro”.
Estaba completamente desilusionado de las posibilida- Cine y literatura: ¿De qué manera entender a estos
des de trabajo en el cine y fue así que en el año 1966 me dos hermanos siameses? ¿Como un cuerpo con dos
dije: ¡carajo, ahora voy a escribir contra el cine! Me puse almas o un alma dividida en dos cuerpos? ¿Si uno de
a trabajar de nuevo en esa novela que comencé cuando ellos comete un crimen, también el otro es culpable?
tenía diecinueve años y no pude con ella. Estuve traba- “Todo puede suceder en el universo mágico de
jando dieciocho meses y esta vez sí la terminé. Escribí Gabriel García Márquez”, anunciaba una publicidad
una novela con soluciones completamente literarias, de Presagio (Alcoriza, 1974). Siete años después del

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estallido que significó Cien años…, el culto a la perso- el que transcurrían las historias, el ritmo de los diálogos
nalidad, útil para el mercado del cine, destacaba en el y las acciones, los puntos de vista y el encuadre.
aviso al escritor antes que al director de la película. De
hecho, el rostro del novelista aparecía en un libro, de Trabajando para el cine, sin embargo, no sólo me di
manera agigantada, certificando la calidad de la histo- cuenta de lo que se podía hacer sino también de lo que
ria, aparte de sugerir quién era la verdadera estrella del no se podía; me pareció que el predominio de la imagen
film: la literatura. sobre otros elementos narrativos era ciertamente una
Ha sido el gran equívoco de una búsqueda desespe- ventaja pero también una limitación, y todo aquello fue
rada por historias que enriquezcan la pantalla, haciendo para mí un hallazgo deslumbrante, porque sólo enton-
de los gabometrajes un género cinematográfico que ces tomé conciencia de que las posibilidades de la novela
intenta reproducir con fidelidad la estética literaria en son ilimitadas (Armando Durán, “Conversaciones con
las imágenes que evidencian, por contraste, el material Gabriel García Márquez”, Revista Nacional de Cultura,
del que está hecho cualquier escritor en su dimensión Instituto Nacional de Cultura y Bellas Artes, Caracas-
más auténtica: la palabra. Venezuela, año XXIX, N. 185, julio-agosto-septiembre,
Si el periodismo le permitió a García Márquez, 1968: 25, en Vargas Llosa, 1971: 72-73).
según Gilard, “el aprendizaje de una retórica original”,
las adaptaciones de su literatura al cine han puesto a No en vano, podríamos pensar que uno de los
prueba la retórica visual de directores que parodian al mejores guiones que ha escrito García Márquez es el
tótem literario, evidenciando el artificio sin la fluidez de una película que se filmó antes de que él mismo
y la naturalidad de sus narraciones. soñara con poner una sola letra en el papel: La aven-
García Márquez es quien ha logrado adaptar mejor tura de Miguel Littín clandestino en Chile (1986). Un
en su literatura las imágenes de García Márquez. Antes reportaje que aprovecha las posibilidades infinitas de
de Cien años de soledad, creía que el cine era “el medio de la literatura, tanto así que en ciertos momentos no
expresión perfecto”. Entonces su punto de partida era tenemos la certeza de quién es la voz narrativa, si la de
lo visual. Tenía el ojo de una cámara fortaleciendo sus García Márquez o la de Littín, o si el escritor trans-
líneas y necesitaba conocer con precisión el espacio en formó al director en uno de sus personajes cuando las

Gabo, jurado en
Cannes

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ñen otra retórica visual en sus adaptaciones, que a su
vez le descubra otro rumbo al cine basado en García
Márquez.
Sus iniciales, GGM, para el cine de América Latina
y el Caribe, son de algún modo equivalentes a las
iniciales del estudio que significó la gloria y el esplen-
dor en el Hollywood de los años 20 y hasta los años
50: MGM. Al frente de la Fundación para el Nuevo
Cine Latinoamericano, establecida en La Habana en
diciembre de 1985, y artífice del sueño frustrado que
tuvo para Barranquilla hacia los años 50, haciéndolo
Edipo alcalde
realidad en 1986, cuando crea la respuesta latinoame-
ricana y académica de Cinecittà en la Cubacittà que
es la Escuela Internacional de Cine y Televisión, a 30
kms. de La Habana, el despecho cinematográfico que
tuviera García Márquez años atrás durante sus años de
aprendizaje en la industria mexicana, se resolvió de la
descripciones desmesuradas, el lirismo y el absurdo mejor manera posible para él y para las generaciones
de la realidad eran aciertos literarios prestados para el que luego de estudiar en la escuela han sabido demos-
testimonio del realizador. trar cómo hay excepciones para las estirpes condenadas
El encuentro durante el Festival de Cine de Carta- a cien años de soledad, que supuestamente no tenían
gena del 2007 con Myriam Garzón de García, directora una segunda oportunidad sobre la tierra.
de la Fundación Patrimonio Fílmico Colombiano, y Quizás, como ha dicho tantas veces García Már-
con uno de los investigadores más infatigables del cine quez, su relación con el cine ha sido como la de un
colombiano, Jorge Moreno Gómez, a cargo del Centro matrimonio mal llevado: no ha podido vivir ni con
de Documentación y la Biblioteca del Patrimonio, me él ni sin él. Felizmente ese matrimonio permitió que
reveló el último censo de películas sobre, con base y de el padre viera cumplida su devoción a través del hijo,
García Márquez que se han realizado hasta el momento Rodrigo, a quien el cine le ha correspondido su amor
–incluso una adaptación en Super 8 mm. de El coronel por completo en películas como Cosas que diría con
no tiene quién le escriba, hecha en Uruguay por Alvaro sólo mirarla (2002) o Nueve vidas (2006). La estirpe
Sanjurjo Toucon y Jorge Fornio, que nunca se ha García Barcha puede celebrar así que el hijo también les
podido exhibir porque el entusiasmo de los directores haya brindado una segunda oportunidad en el ámbito
fue mayor que la inevitable y necesaria compra de los cinematográfico.
derechos para su adaptación. En una de sus “Jirafas”, publicada en febrero de
Los rostros de Myriam y de Jorge parecían los de un 1950, García Márquez escribía asombrado sobre los
par de exploradores celebrando el hallazgo del tesoro. pies de Ingrid Bergman y Greta Garbo. Suponía que
Hasta entonces habían sumado 105 títulos, incluyendo sus zapatos no podrían ser de una talla inferior al
tres proyectos en desarrollo: un documental húngaro número cuarenta y uno. “Pero esa circunstancia, al fin
de Peter Gothar sobre Cien años de soledad; una adap- y al cabo”, agregaba, “no conduce sino a la conclusión
tación Del amor y otros demonios, dirigida por Hilda de que las actrices suecas están en capacidad de cono-
Hidalgo y coproducida entre Costa Rica, Colombia, cer, mejor que nadie, las condiciones del terreno que
Cuba y España, y una versión norteamericana, dirigida pisan”. Tanto como el mismo Gabo, conociendo con
por el británico Mike Newell, de El amor en los tiempos garbo las condiciones del cine y la libertad que le ha
del cólera. permitido la literatura. a
Quizás las novelas en las que se narran la vida
y pasión de Sierva María de Todos los Ángeles y el
romance de Fermina Daza y Florentino Ariza ense-

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Bibliografía

I. Gabriel García Márquez

Obra periodística 1. Textos costeños. Recopilación y


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Obra periodística 2. Entre cachacos. Recopilación y
prólogo de Jacques Gilard. Bogotá: Norma, 1997.
Obra periodística 3. De Europa y América. Recopilación y
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Notas de prensa 1980–1984. Bogotá: Norma, 1995.
La aventura de Miguel Littín clandestino en Chile.
Bogotá: Norma, 1998.
Vivir para contarla. Bogotá: Norma, 2002.

II. Miscelánea

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Seix Barral, 1996.
Katz, Ephraim, The Film Encyclopedia. Nueva York:
HarperCollins, 1994.
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Woman. Nueva York: Farrar, Straus, Giroux,
2000.
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biano. Bogotá: América Latina, 1978.
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Cine latinoamericano 1896-1930. Caracas: Funda-
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Londres: British Film Institute / Imcine, 1995.
Rentería Mantilla, Alfonso (Recopilación y prólogo),
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Rentería Editores, 1979.
Vargas Llosa, Mario, García Márquez: Historia de un
deicidio. Barcerlona: Monte Avila, 1971.

138 a g u a i t a   quince - dieciséis / diciembre 2 0 0 6 - Junio 2 0 0 7


P O E S I A

Gabriel Alberto Ferrer Ruiz

Venado

Eres tú el venado
vapor de luz
fulminación del aire
Saltas del paisaje
en una mítica carrera
y derribas el horizonte
Bello pájaro
que abre sus alas
para desafiar la muerte.
ILUSTRACIONES: RÓMULO BUSTOS

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El inocente La ruta del corozo

Si propones un acto de arrebato


Mira la inocencia de Purapa mira la ruta que has tomado
en la rama del totumo Si quieres el fruto del corozo
Allí pasa el día debes combatir con el puerco espín
como un mono Cuídate de sus agujas semejantes
anochecido de quejumbres indecibles a la caña-flecha
que mueren con las sombras Nunca olvides su esencia:
Mira la inocencia de Purapa guerra
repartidor de estrellas brillo
con sus labios callados redondez
La vida dulzura
para él Si te parece
apenas habla. bate el paladar
allí donde está el punto
entre la sombra y la claridad
Alcanzar entonces la luz
es asunto de espíritu.

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Reconstrucción de la casa

Para Gabriel el viejo

Voy a reconstruir la casa


Para tal fin
ignoraré el calor y la humedad
No basta el florecer de animales en el patio
Tampoco la perfecta redondez de la casa
con su libre albedrío de palmeras
abrazando la nostalgia
Suelto la mirada
y encuentro a Efraín
anclado en el color naranja
señalándole a su hija el mundo
suspirando una vida entrecortada
Luego
deambulo por soñadas hendijas
Atisbo el zaguán inútil
donde predicaba viajes y exilios
Junto a la cocina
varado en mi ansiedad
con una vertiginosa cátedra de humo
busco la ruta indefinida
Dejo que la terraza ebria
sacuda las carcajadas que autenticaban
algún apodo creado por el viejo Gabriel
En la sala
uno o dos retratos
trenzan historias
mientras luces de almendros invaden el patio
donde se miran las estrellas.
ILUSTRACIONES: RÓMULO BUSTOS

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L A A L E G R Í A D E B A I L A R

De Kinshasa a Cartagena, pasando por París:


itinerarios de una “música negra”, la champeta1
Elisabeth Cunin

Introducción

Deborah Pacini Hernández, etnomusicóloga, men-


cionó su sorpresa cuando visitó a Colombia en 1983 al
descubrir que los dos álbumes Sound of Africa (Island,
volúmenes 1 y 2), recién adquiridos en los Estados
Unidos, no encontraron ningún eco en Bogotá, la capi-
tal, mientras que en la costa Caribe, en Barranquilla o
Cartagena, a sus interlocutores de las clases populares,
les era familiar esta música africana que había prece-
dido, las compilaciones de Afropop, producidas en el
Norte, para iniciar en ese nuevo género a un público
de capital cultural elevado, en las grandes metrópolis
internacionales. “El público del world beat en los
Estados Unidos y Europa tiende a ser bien educado y
cosmopolita desde un punto de vista cultural; en con-
traste, los negros de Cartagena incluyen a los sectores
más pobres, los menos educados, los más marginales
socialmente de la ciudad, lo que vuelve mucho más
sorprendentes su conocimiento y su preferencia por la
música Afrobeat” (Pacini Hernández, 1993a: 70). ¿Se
debe hablar entonces de una “supervivencia africana” Dairo Barriosnuevo:
El coreano
descubierta por los etnomusicólogos venidos de afuera?
¿O de un fenómeno de world music una década antes
de que las multinacionales utilizaran los circuitos glo- 1 Este trabajo de investigación no hubiera sido posible sin la
bales para difundir, en particular, músicas africanas? colaboración de varios actores del mundo de la champeta; deseo
agradecer muy particularmente a Humberto, Manrebo y Lucas,
¿Es la existencia de toda “cultura local” lo que hay que grandes conocedores de música africana y afrocaribeña, incansables
cuestionar de nuevo, siendo la música de Cartagena heraldos de la champeta a través del mundo. Por supuesto, los
solo un producto de la globalización? análisis presentados en este texto solo son responsabilidad de su
autora. Una versión anterior se publicó en Civilisations, vol. LIII,
De hecho, en Cartagena, y en el conjunto del
n° 1-2, 2005.

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la modernidad y, al mismo tiempo, reconstrucción de
la autenticidad africana.
La champeta ha sido objeto de numerosos estudios
recientes que hacen hincapié en la aparición de una
cultura popular (Mosquera et Provensal, 2000), en la
revalorización de la identidad afrocolombiana (Contre-
ras Hernández, s.f.) y en la dimensión económica del
sistema alternativo que se establece (Abril y Soto, 2003).
Me interesaré aquí en los mecanismos de difusión, pro-
ducción, transformación del soukous –y, más amplia-
mente, de lo que los habitantes de la ciudad llaman
música africana– en Cartagena, en la aparición de una
música afrocaribeña original, la champeta, y en su
nueva salida hacia otros mercados y públicos. Después
de regresar, rápidamente, en la primera parte, al lugar
de la champeta en Cartagena, centraré mi análisis en
el papel de los intermediarios, pues su discurso tiende
a construir una continuidad histórica y cultural entre
Portada CD Afrikando África y América, al tiempo que sus prácticas ponen de
manifiesto que estas idas y vueltas transatlánticas no son
ni automáticas ni lineales, sino que se inscriben en un
Caribe colombiano, nació, en los años setenta, un espacio complejo que conecta el Norte al Sur. Música
nuevo género musical, la champeta, cuyo origen se local, música étnica, música planetaria: cada uno da a
encuentra en el soukous2 de Kinshasa y Brazzaville, la champeta, lo veremos, el estatuto y la extensión que
música clave del continente africano en los años conviene a sus proyectos.
setenta, antes de cruzar el Atlántico. Pero el camino
no se detiene allí, pues la rumba, ancestro africano 1 “Música negra”: anclaje local, contexto
del soukous, es fruto de otro viaje, el que llevó el son nacional e imaginario transnacional
cubano a África, en particular a las dos capitales congo-
lesas, en los años 1940-60. Finalmente, conviene recor- El éxito de la champeta, en Cartagena, se inscribe
dar lo que debe el son a la presencia de descendientes en una larga y compleja historia de idas y vueltas entre
de esclavos desplazados de África al suelo americano. América, África y Europa, que caracteriza este espacio
Estas idas y vueltas de un continente a otro son las que Caribe de contornos tan borrosos (Patterson y Kelley,
me interesarán aquí. Es preciso aclarar, en primer lugar, 2000). En el ámbito musical, a partir del final del siglo
que no se trata de estudiar el origen y la permanencia XIX, compañías internacionales como Edison (Estados
de características culturales en África y América, sino Unidos) y Pathé (Francia) graban a artistas locales en
de analizar las representaciones de África y América La Habana (Moore, 1997); antes de los años cuarenta,
que caracterizan tales flujos transatlánticos. ¿Se puede la mayoría de los discos escuchados en Léopoldville
hablar de una “música negra” que circularía por Kins- se fabricaba en Europa (White, 2002b: 670); los años
hasa, Cartagena y París? ¿Cómo la música pasa de un ochenta se caracterizan por la aparición de varias casas
universo geográfico, y sobre todo social, cultural y sim- disqueras en el Norte que se interesan exclusivamente
bólico, a otro? ¿Cuáles son los procesos de relocalización en las músicas de África y del Caribe (Stapleton y May,
múltiples que caracterizan el desarrollo de estos ritmos 1990). En Cartagena, en los años 1930-40, la presencia
globalizados? La música es atractiva para los músicos y
el público no solamente por sus ritmos, sino por lo que
representa. Más concretamente, su éxito está vinculado 2 Muy rápidamente la champeta se inspiró, además del
soukous, en otras músicas venidas de África y del Caribe.
a su ambigüedad: ruptura y continuidad, entrada en

A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7 177


de obreros e ingenieros cubanos en las fábricas azuca- sexuales inequívocas; el traje folclórico, por los Nikes
reras de la región favorecerá el nacimiento, en Palen- y el jean descaderado; y la sala de espectáculo, por el
que de San Basilio3, del Sexteto Tabalá, grupo de son solar. Es difícil, en efecto, exhibir “pruebas” de una con-
colombiano; en los años setenta, Joe Arroyo retoma la tinuidad cultural o de supervivencias africanas cuando
salsa y las músicas afrocaribeñas y las mezcla con los ritmos se importaron en los años setenta, los modos
la cumbia de la costa Caribe colombiana, para crear lo de producción se inventaron en los años ochenta y la
que llamará el joeson; unos años más tarde, el Festival de difusión se hace a partir del picó, heredado de la salsa5.
Música del Caribe4 permitirá al público de Cartagena Por lo tanto, los protagonistas de la champeta van a
descubrir a numerosos artistas africanos: Soukous Stars, procurar volver aceptable esta traición de los valores
Kanda Bongo Man, Bopol Mansiamina, M’Bilia Bell tradicionales de la “música negra” pretendiendo recons-
y Mahotella Queens. truir una doble continuidad, con África -garantía de
Pero estas impregnaciones múltiples, estos inter- autenticidad percibida como inmediata e innegable- y
cambios multiformes se interpretarán en otros térmi- la América negra -en particular el pueblo de Palenque
nos, que movilizan una triple referencia, a África, a las de San Basilio de donde son originarios algunos de los
Américas negras y a una “diáspora afroamericana”. Estas primeros cantantes de champeta-, mientras inventan
superposiciones permiten a la champeta conciliar los un imaginario transnacional afroamericano en el cual
contrarios: ruptura y continuidad, tradición y moderni- se inscribiría la champeta.
dad, local y global. No es inútil recordar que la música El mito del marinero -presente en numerosos dis-
se considera, en Colombia, como una de las expresiones cursos sobre música- permite establecer una relación
más directas de las diferencias que constituyen la nación directa entre África y América. Se encuentra aquí la
colombiana. Asociada a las costas del Caribe y del figura del barco tal como Gilroy lo desarrolla para
Pacífico, la “música negra” es objeto de un consenso no calificar el Black Atlantic, barco que hoy sería sustituido
problemático, mucho antes de la afirmación oficial del por la música. “Los barcos siguieron siendo quizá los
multiculturalismo, en 1991. La asociación, presentada medios de comunicación panafricanos más importan-
como evidente, entre el “negro” y la música, es una tes antes de la aparición del disco de larga duración”
mezcla de naturalización de la cultura y de referencia a (Linebaugh citado por Gilroy, 2003: 31). Pero estos
un África inventado, que reconoce al otro asignándole reencuentros se presentan a menudo como un contagio,
al mismo tiempo un lugar circunscrito y un estatuto como una epidemia, que coloca la champeta en una
inferior, relegándolo a la periferia geográfica y cultural lógica biologizante. En efecto, al lado de las expresiones
de la nación colombiana. Más aún: la aceptación de la culturales tradicionales, aparece una nueva “música
“música negra” es utilizada por los habitantes del inte- negra”6 que rompe el marco habitual de la representa-
rior andino, únicos portadores legítimos de la identidad
nacional, como una marca de diferenciación y, más
recientemente, en todo el país, como una “prueba” de la 3 Pueblo de cimarrones, Palenque de San Basilio se considera
nueva cara multicultural de la nación (Wade, 2002). Las hoy, después de un proceso de etnicización llevado por algunos líde-
res que viven en Cartagena y Barranquilla, como la tierra africana
músicas populares y tradicionales, o incluso folclóricas, de Colombia (Escalante, 1979; Cunin, 2000; Cassiani, 2003).
de las costas del Pacífico (bambuco, chirimía, currulao) 4 Creado en 1982 por Antonio Escobar y Francisco Onis,
y del Caribe (cumbia, mapalé, porro) no representan ampliamente influidos por el desarrollo de la world music y por la
problemas, satisfacen a las expectativas de normalidad, valoración del Caribe, el Festival, hoy desaparecido, desempeñó
seguramente un papel fundamental, junto con las radios locales,
en una lógica de valoración de una autenticidad africana
en la aparición de una generación de cantantes y la familiarización
supuesta o en una perspectiva de legitimación de una del público local a las músicas africanas modernas. Ver Pacini
relación jerárquica entre la costa y el interior. No es el Hernández, 1993b.
caso de la champeta. Venida de otra parte, no corres- 5 Al mismo tiempo, los analistas de la champeta, periodistas
ponde a la imagen tradicional de la “música negra”: el e investigadores en particular, presentan las prácticas asociadas a
la champeta como características culturales africanas: los picós
tambor es sustituido por la caja de ritmos; el recuerdo se comparan con tambores, los bailarines con tribus urbanas, el
de la esclavitud o el cimarronaje, por el relato de la vida carácter rebelde con la resistencia de los cimarrones, etc.
diaria; las danzas, bien orquestadas, por demostraciones 6 Ver también el fenómeno del rap en Cali.

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ción de la alteridad cultural, ya que, con la champeta, proyectos, descubriendo nuevos talentos. Con el sello
el modelo de aceptación de la diferencia no funciona. Castillo Records produce discos que oscilan entre la
La asignación racial evita entonces toda confrontación adaptación, en versión electrónica, de viejos estándares
con una cultura urbana popular, transformándola en de música africana y la difusión de la última invención
una práctica ontológicamente distinta, descrita en tér- de la música caribeña, el reggaeton. Humberto tiene
minos biológicos (movimientos corporales, sexualidad, como socio a un productor local, Yamiro Marín, de
contactos físicos). Si las músicas tradicionales aparecen quien se dice fue vendedor de bolsas de plástico en las
como una concesión hecha al alejado recuerdo de la calles antes de convertirse, bajo el nombre de El Rey7,
herencia africana, cuya reducción a la sola expresión en el principal productor de champeta de Cartagena.
cultural evita toda interpretación política, la champeta, En los años 1980-90, Humberto y Yamiro están entre
en cuanto a ella, está percibida como una amenaza. los primeros que viajan a París y Londres, para comprar
La “música negra” tiende así a comprenderse como la música africana que difundirán luego en Cartagena,
expresión de la esencia del grupo -extendido de África transformando los nombres de las canciones y ocul-
a América- que la produjo, en una superposición ambi- tando su origen. Luego, ante el costo y las dificulta-
gua de registros, culturales y biológicos, superposición des del viaje a Europa, tendrán la idea de copiar, en
movilizada por los detractores de la champeta, y tam- Cartagena, los ritmos venidos de África, añadiéndoles
bién por sus partidarios, cuando quieren acreditar una textos en español. La champeta nació, y va a ganar rápi-
continuidad y autenticidad difícilmente concebibles en damente todos los barrios de la ciudad, bajo la forma
términos culturales. de una música urbana y moderna única en su género.
Como lo sugiere Bob White, la música afrocubana se
2 Humberto, del África a Cartagena

Blanco, de origen paisa, que vive modestamente en 7 El Rey es hoy una empresa familiar con múltiples caras:
casa disquera (40 álbumes producidos hasta ahora), punto de venta
el barrio turístico y residencial El Laguito, Humberto
en el mercado Bazurto, picó que se desplaza por toda la ciudad y
sorprende en el pequeño mundo de la champeta en el los pueblos circundantes, y el DJ más famoso de Cartagena (El
cual desempeña un papel de pensador, de iniciador de Chawala).

Picó El Rey en Pasacaballos,


noviembre 2006.
FOTO DE ELISABETH CUNIN.

A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7 179


volvió popular en el Congo porque permitía una forma
de cosmopolitismo urbano que no autorizaban los
modelos europeos que circulaban en la antigua colonia
belga (White, 2002a: 663). Así mismo la champeta
vuelve accesible una cierta modernidad a una población
que no se reconoce en el modelo norteamericano y
andino que le ofrecen la ciudad y el país.
Este proceso de desterritorialización/reterritoria-
lización, que estudiaré aquí a través del personaje de
Humberto, va de la piratería de la música africana traída
de Europa a la aparición de una música original, con
sus estrellas locales, sus medios de difusión alternativos,
sus pequeños productores independientes. Con Hum-
berto, la música africana, esta nebulosa musical que
agrupa un conjunto heterogéneo de músicas venidas
de todo el continente africano, pasa a ser la champeta,
Elio Boom
nuevo género musical, fuertemente relacionado con la FOTO DE ELISABETH CUNIN.
ciudad de Cartagena8. En otros términos, se relocaliza,
reanudando algunas prácticas musicales, sociales o Volvamos primero unos años atrás, cuando Hum-
económicas de la ciudad, adaptando otras, inventando, berto viaja a París, a Londres e incluso a Sudáfrica
sobre todo, su propio universo. Entre tecnologías, para comprar música africana. Ignora completamente
mercados e imaginarios, la champeta personifica esta entonces la ola emergente del Afropop que va a inundar
“profunda paradoja que nos presenta frecuentemente el mercado occidental, para ir en busca de LPs de los
la música: la de situar el terreno de las identificaciones años 1950-80, que personifican una cierta moderni-
en el terreno comercial” (Ochoa, 1998: 175). dad africana (independencias, urbanización). Poco
importa que estos discos estén almacenados, desde
2. 1. De la música africana a la champeta: hace tiempo ya, en cartones, y que los vendedores del
proceso de reterritorialización barrio Château-Rouge en París observen con asom-
bro a este colombiano que llega a comprar cientos
A través de Humberto, la música africana, la música de discos que no interesan ya a nadie. Este asombro
venida de afuera, circulando de una manera que sigue dará lugar a una cierta irritación puesto que se copia
siendo a veces bien misteriosa entre África, Europa y y se difunde la música en Colombia sin que se pague
el Caribe, se ancla en Cartagena. Y esta relocalización ningún derecho de autor a los artistas y productores
pasa por la adopción y la transformación de prácticas y africanos, pues de regreso a Cartagena, el origen de los
representaciones propias de la ciudad, atravesadas por LPs se oculta, las carátulas desaparecen, las etiquetas de
la referencia, característica de las sociedades post-escla- los discos se arrancan sistemáticamente, las canciones
vistas, a un África, a menudo más imaginada que real. cambian de nombre -tantos métodos que prohíben
Como el proceso de relocalización de una música venida una investigación, que no sea la musicológica sobre
de afuera no se efectúa en un lugar neutro, virgen de las músicas que dieron nacimiento a la champeta9-.
todo discurso sobre África, el estatuto de la champeta
es ambiguo: innovación radical, tiende, sin embargo, a
inscribirse en una continuidad, definida biológica, más 8 Aunque la música africana sigue estando presente en Car-
que culturalmente. Humberto es uno de los principales tagena (gracias al entusiasmo de ciertos fieles entre los cuales está
actores de esta apropiación de lo global por lo local, de Humberto), es, en adelante, totalmente marginal en términos de
producción y difusión.
la transformación de la música africana en prácticas con-
9 Deborah Pacini Hernández (1993b: 63) destaca que, en
formes al mercado de Cartagena, de su adaptación para el Caribe hispanohablante, las frecuentes imitaciones musicales
que tenga un sentido para los habitantes de la ciudad. raramente se mencionan.

180 A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7


Las canciones africanas se convierten en exclusivas, La champeta cuando se inscribe en las relaciones
cuyo dueño va a monopolizar durante 15 días, un sociales de Cartagena, reproduce y exacerba la margi-
mes, seis meses, a veces, antes de difundirlas por la nalización y la exclusión de lo “negro”, características
radio y comercializarlas. El universo de la champeta de la ciudad. La champeta nos muestra el proceso de
nace de este acceso limitado al mercado de la música designación racial de una cultura popular. Seguramente
africana y de las estrategias que provoca: el sistema la champeta rompe con una serie de normas (sociales,
de los exclusivos transforma un obstáculo en ventaja, artísticas, sonoras, etc.) implícitas en Cartagena e ins-
que dará origen a la forma asumida por la producción piradas en el modelo de la élite de la ciudad. Al cele-
y la difusión locales, que conserva al mismo tiempo brar el cuerpo, la sexualidad, el desorden, la champeta
una estructura oligopolística y funciona sobre una invertiría así los valores, colocándose del lado del salvaje
escasez sostenida. El elemento clave del sistema que se contra el civilizado, de lo natural contra lo cultural,
establece progresivamente es el picó, enorme sound- del “negro” contra el “blanco”. La ruptura de la “con-
system que remite a los dance-halls jamaiquinos, vención de evitamiento” de la cuestión racial (Cunin,
pero ya presente en Cartagena (y en la costa Caribe 2003), dominante en Cartagena, de la cual serían res-
colombiana), desde los años cincuenta, como princi- ponsables los protagonistas del mundo champetúo10,
pal vector de difusión de otra música, la salsa. Lejos avanza así como una justificación de la exclusión de la
de vincular directamente la champeta a “las músicas música y sus actores. Pero en las provocaciones propias
negras” modernas como el reggae y el hip-hop o el de una contracultura popular, las evocaciones raciales
rap, el picó inscribe la champeta en prácticas musicales y/o étnicas están ausentes de las canciones, de los dis-
locales más antiguas, cuya relación con la cultura afro- cursos, de la lengua diaria. La dimensión es, más bien,
caribeña es difusa y borrosa. Finalmente, el éxito de el resultado de una calificación exterior, que moviliza
la champeta no se medirá tanto en las cifras de venta la categoría “negro” racial para justificar el rechazo de
como en el número de personas que siguen un picó,
en sus desplazamientos en la ciudad y en los pueblos 10 Nombre otorgado a los cantantes y aficionados de cham-
de los alrededores. peta.

Dairo Barriosnuevo:
picup 77

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esta música. La designación racial de los champetúos la Champeta” vuelve sobre el origen de la champeta,
parece responder sobre todo a una lógica de “etiquetaje” sus influencias musicales, sus principales protagonistas,
de la desviación, más que a una voluntad deliberada etc. y concede un gran lugar a la relación con África.
de romper el evitamiento. Si la champeta molesta, si Los primeros éxitos del final de los años ochenta se
preocupa también a los numerosos habitantes de los asocian así “al ritmo africano que no hace más que
sectores populares, es porque constituye una amenaza confirmar las raíces africanas de un pueblo codicioso
de calificación racial de sus protagonistas. Reconocer de encontrar, gracias a las percusiones africanas, esta
su proximidad con esta música se asemeja a una acepta- sangre que hierve en sus venas”. Ya que la región de
ción de la pertenencia a la categoría “negro”; de ahí los la costa “se identifica completamente con la música
comportamientos ambiguos de la mayoría de los can- africana, la encarnación de las raíces africanas predis-
tantes que reivindican una “música negra” intentando ponen a todo un pueblo a aprovecharse de esta nueva
al mismo tiempo escapar a la designación racial. era de la champeta”. Precisemos, por otra parte, que la
La exclusión de la champeta de los modos de champeta, durante un tiempo, se llamó “terapia”, remi-
producción y difusión habituales es lo que genera la tiendo a una forma de renacimiento cultural e iden-
aparición de un sistema basado en la innovación, la titario, que correspondía también a una estrategia de
informalidad y la movilidad, adaptado a las obliga- eufemización del estigma asociado a la champeta. Las
ciones del mercado local. Los cantantes sólo registran observaciones de Humberto muestran hasta qué punto
unas canciones, los arreglistas (guitarristas, ingenieros la confusión de lo cultural y de lo biológico permite
de sonido) componen la música, la duración de vida explicar la aparición de la champeta en una lógica de
de un CD no supera un mes, el picó se desplaza de renacimiento, inscrita en una continuidad racializada.
un barrio a otro. Las canciones de origen africano se De hecho, Humberto sitúa explícitamente su papel en
rebautizan en función de la recurrencia de un sonido: el momento en el que la música africana se introduce
“Tres golpes”, “El flauta”,” El policía” (por la presencia en Colombia y se transforma en champeta. Ahora bien
de un silbido). La danza se convierte en una mezcla este doble proceso de importación e invención, lejos
inspirada de folclor local, las presentaciones de los de ser percibido como una ruptura, aparece según un
bailarines africanos invitados en el Festival de Música principio de continuidad: la champeta sólo sería el des-
del Caribe y los vídeos llegados de los Estados Unidos pertador de una música y de una danza ocultas por la
y de Europa. La champeta sólo pudo desarrollarse por homogeneización ligada a la esclavitud, la colonización
el conocimiento fino de Humberto y de algunos otros y la República. Se encuentra en su discurso esta lógica
de la demanda local y del modo de producción posible. de retención, ampliamente estudiada por otra parte,
Ironía del destino, los piratas de ayer son víctimas hoy de características africanas ocultas por la cultura domi-
de la piratería generalizada de los CDs -a veces incluso nante. Por lo tanto, más allá de su expresión cultural, la
antes de su salida- y de la instauración de un nuevo champeta adquiere una dimensión política: personifica
sistema de difusión paralelo. una forma de liberación más fuerte y más efectiva que
la liberación de la esclavitud. Se ve bien la paradoja: la
2. 2. Definición de la champeta y relación champeta, que surge en los años 1970-80 de un formi-
con África dable movimiento de vaivén entre África, Europa y el
Caribe, se presenta como si siempre hubiera estado allí,
Tanto en sus escritos como en sus palabras, Hum- como si fuera “nativa” de la región, “autóctona”, para
berto da prueba de un conocimiento impresionante de retomar los términos de Humberto. En definitiva, la
la música africana y de una voluntad pedagógica afir- relocalización no lo sería verdaderamente, puesto que
mada, como si la historia de la champeta, tan reciente la champeta no habría hecho más que reaparecer de sus
y confusa, debiera escribirse –y legitimarse– al mismo cenizas. Por eso el énfasis en la filiación utiliza la vía de
tiempo que se inventa la música. En este sentido Hum- la racialización, contribuyendo así a la naturalización
berto concibe su relación conmigo: le doy la ocasión de una práctica cultural y facilitando al mismo tiempo
de transmitir su conocimiento. En una serie de textos el proceso de designación racial destinado a privar la
con el nombre significativo de “Biblioteca Histórica de champeta de todo valor. Esta comunidad, construida

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multicultural de Colombia. En este sentido es necesario
destacar el papel desempeñado por la ex Ministra de
Cultura, Araceli Morales, en este proceso de recono-
cimiento nacional. Originaria de Cartagena, cuando
era directora del Instituto Distrital de Cultura de la
ciudad, la “Chica” Morales organizó, el 26 de octubre
de 2000, la primera presentación oficial de champeta,
en las calles del centro histórico de Cartagena, hasta
ese entonces sordo a las llamadas de esta música venida
de los barrios populares. Semanas más tarde, el 12 de
diciembre de 2000, Araceli Morales, convertida en
Ministra de Cultura, presidió a la organización de un
acontecimiento similar en Bogotá, en el teatro Jorge
Eliécer Gaitán. “La champeta despelucó a Bogotá”,
podía oírse entonces. De hecho esta “toma” de Bogotá
se pensaba como una revancha de la periferia sobre el
centro, del dominado sobre el dominante, del “negro”
sobre el “blanco”. Sin embargo, la aceptación, e incluso,
la valorización de la champeta, permanecerán limitadas:
muy rápidamente, su éxito declina, las casas disqueras
la ignoran, los productores pasan a nuevos ritmos. El
carácter transitorio de esta aparición en la escena nacio-
nal muestra hasta qué punto la champeta responde a
Dairo Barriosnuevo: una demanda y se inscribe en prácticas localizadas.
picup 33 Los tres CDs producidos por Sony12, al jugar con el
imaginario nacional del “negro” exótico y sensual,
al presentar en las carátulas parejas negras, bailando
entrelazadas, casi desnudas, chocaron generalmente al
en referencia a una frontera insuperable –por ser defi- público de Cartagena, poco acostumbrado a tal puesta
nida biológicamente– entre “nosotros” y “los otros”, en escena racializante. Del mismo modo, los librillos
nos explica así el éxito de la champeta a pesar de su de acompañamiento, dentro de los CDs, explican los
relegación social y cultural. pasos de danza en una lógica pedagógica cercana a la
world music que nunca se encuentra en las producciones
2. 3. El imposible anclaje nacional de Cartagena, reducidas a su más simple expresión.
Además las canciones grabadas en estas compilaciones
En 2001, Sony lanzó un CD de champeta con reanudan títulos ya difundidos en Cartagena, adap-
un título significativo: “La champeta se tomó a
Colombia”11. Difundido a escala nacional, amplia-
mente comercializado, este disco señala un cambio
de dirección: el de la difusión de la champeta a nivel 11 La champeta se tomó a Colombia, Sony Music Entertain-
nacional. En Bogotá, numerosas discotecas dedican ment, 2001.
desde entonces una amplia parte de su programación 12 Es necesario destacar la dimensión internacional de estos
discos producidos por Sony, recordando al mismo tiempo que
a la champeta, aparecen cursos de baile, se forman el origen de la grabación y de la difusión de la champeta es una
unos grupos, la música se vuelve presente en las antena nacional (en Bogotá para toda Colombia). Los tres CDs
emisoras y en los almacenes y algunos estudiantes la conocieron una caída rápida de su venta: 60.000 para el primero,
30.000 para el segundo y una cifra poco importante para el tercero
eligen como tema de su tesis de grado. De hecho, la (entrevista con el responsable de las ventas de Sony Colombia, 10
champeta corresponde perfectamente a la nueva cara de septiembre de 2003).

A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7 183


tándolos al mismo tiempo a las expectativas supuestas un contacto potencial con organizadores de festivales
del mercado nacional. Jimmy, animador estrella de de música en Francia y en el Caribe francófono, sabe
Rumba Estéreo, una de las emisoras de la ciudad, mostrarse apasionado por la misión que se fijó, la
no se dejó engañar: “Sony transformó la música de difusión de la champeta y la promoción de un género
Cartagena introduciendo nuevos instrumentos, como musical reconocido a escala internacional y, para rea-
los tambores, para parecerse a algo folclórico, dismi- lizarlo, intuye que se debe transformar la imagen de la
nuyendo el break, el boom, boom, boom. Se volvió champeta en Cartagena. Único mulato de los tres per-
más estilizada, pero no es lo que gusta al aficionado sonajes, recordando su infancia en los barrios populares
de champeta”13. De hecho, el ciclo de producción (tres de la ciudad, Manrebo juega a cierta complicidad con
CDs en dos años mientras que un nuevo CD sale cada los músicos y aficionados de champeta, por el hecho
mes en Cartagena), la “estelarización” de los cantantes de compartir una misma experiencia de vida: el peso
(comercialización y marketing, un CD entero consa- común del racismo. Gracias a esta proximidad, llegó
grado a un solo artista, El Sayayín, cuando el turn-over a hacerse reconocer en su papel de intermediario, a la
es extremadamente fuerte en Cartagena y los álbumes, vez, confidente y portavoz.
generalmente, son compilaciones) dan cuenta de este Manrebo ha pasado algunos años en Nueva York
desfase entre gustos nacionales y locales. Justamente, donde entró en contacto con la world music naciente.
cuando, para intentar conquistar el mercado nacional, De regreso a Cartagena, se volvió responsable de varios
la champeta hace hincapié en su dimensión africana programas de radio: así ha tenido una función esencial
(introducción del tambor, librillos recordando el vín- en el proceso de difusión y legitimación de la champeta,
culo con África) y los estereotipos que se le asocian
(danza, sensualidad), se le descarta de las normas de
los habitantes de Cartagena.
Dairo Barriosnuevo:
picup 44
3 Manrebo: de Cartagena
al resto del mundo

Manrebo acoge a sus interlocutores en su oficina de


la Secretaría de Educación de la alcaldía de Cartagena;
si bien maneja el programa “Cartagena bilingüe”, es
frecuente encontrar a cantantes o a aficionados a la
champeta que lo buscan en la oficina junto con los
profesores de inglés. Este puesto le ofrece una estabi-
lidad financiera rara en el mundo de la champeta, le
aporta al mismo tiempo recursos materiales (oficina,
computador) y le garantiza contactos directos con los
responsables de la administración de la ciudad. Un
expediente voluminoso se impone en su escritorio,
lleno con recortes de prensa sobre la champeta, cará-
tulas de álbumes y carteles de conciertos. No es fácil
encontrar a Manrebo, aún menos hablarle: sistemática-
mente ausente en las citas, responde a las cuestiones con
un ojo clavado en su computador, entre dos llamadas
telefónicas y la intrusión de numerosos visitantes, cole-
gas o músicos. A Manrebo le interesa mucho pensar en

13 Entrevista, 11 de agosto de 2003.

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en una época en la que estaba marginalizada. Al presen- champeta. “El primer programa que hice en Colombia,
tarla como una nueva música afro-caribeña, su objetivo hace más de diez años, se llamaba Soweto African Beat.
consiste en darle el título de “música del mundo”, que Sólo se hablaba entonces de música africana. Era la
aparece por lo tanto, no como género musical, sino música que traía la gente que viajaba, los marineros,
como un proceso de comercialización que resulta del un amigo en Nueva York me enviaba discos. Fue un
encuentro entre el Norte y el Sur (Pacini Hernández, programa revolucionario en Cartagena. Tuvo mucho
1993a). Nos muestra así cómo la champeta va a pasar éxito, porque nadie tenía conocimiento de esta música.
de África al Caribe, antes de que vuelva a salir, bajo A continuación viajé a los Estados Unidos. Ya era
una forma exotizada y normalizada a la vez, a la con- atraído por la música africana. Volví de nuevo en medio
quista del resto del mundo. Ya que la diferenciación de los años ochenta. En Cartagena, ya se escuchaba la
se acompaña de un proceso simultáneo de homoge- música africana, pero la gente no conocía los nombres,
neización, en el momento en que se alega, o incluso ponía nombres en función de lo que oían. Presenté
se produce una especificidad local para el exterior, los una propuesta a otra radio para un programa que se
champetúos adoptan un comportamiento y prácticas llamaba “Farándula Caribe”, para hacer la diferencia
que responden a los supuestos criterios internacionales entre músicas africanas y caribeñas, para que la gente
de “buena música”. lo sepa. La champeta, es nuestra música. Es el único
movimiento musical nacional nacido en los barrios,
3. 1. De África al Caribe por la influencia de la raza, del Festival de Música del
Caribe, la influencia exterior de algunos productores
“¡Escúchalo! ¡Tómalo! ¡Puro Medellín14 de primera! y nuestro trabajo en las emisoras. Nuestro objetivo era
¡Rrrrrrrumba del Caribe, el programa que vuelve todo éste, cambiar esta mala imagen, mostrar que esta música
el mundo loco! Carrrrrrtagenaaaaaa. El shampoo no era tan mala, tan vulgar”18.
musical del Carrrrrrribe”. El presentador estrella de la Con el anclaje en el Caribe, se modifica incluso
radio local Rumba Estéreo15 abre su emisión semanal el estatuto de la música19. La champeta se convierte
consagrada a la música africana y caribeña16. A su lado, en la nueva música caribeña de Colombia, capaz de
Manrebo interviene entre dos canciones para informar competir con el reggae, el compás o el merengue, la
sobre los grupos, su origen, su historia, en un discurso expresión de un multiculturalismo de diferenciación
tan militante como pedagógico. “Amigos de los barrios aliviada. Porque el Caribe ofrece un espacio en el cual
de Cartagena, es necesario que defendamos esta cultura la variedad y la diversidad no sólo se reconocen, sino
que es nuestra, que llevamos adentro, que es nuestra que son también un factor de promoción y valorización
africanidad. Es la idiosincrasia de nuestro Caribe”17.
Dejemos la palabra a Manrebo cuando cuenta su trayec-
toria radiofónica, que es también la de la evolución de la
14 Famosa marca de ron.
Dairo Barriosnuevo: picup 11
15 Precisemos que, en Colombia, el término rumba no remite a
la música popular en Kinshasa y Brazzaville en los años 1940-60 (ni
a la música cubana), sino que designa más generalmente la fiesta.
16 Hecho revelador, la champeta no es ya objeto de programas
específicos en las emisoras, una vez a la semana, como era aún el
caso en 1998: se programa a lo largo del día, como las músicas más
populares de la costa (vallenato, salsa, merengue).
17 Rumba Estereo, 24 de enero de 1998.
18 Entrevista, 7 de septiembre de 1999.
19 Recordemos que, al mismo tiempo, la champeta cambia,
por poco tiempo de nombre y pasa a ser terapia: sin que se sepa bien
muy de dónde viene el término, no se puede ignorar la elección
de la palabra, que remite a una terapia tanto física como moral. Al
mismo tiempo, su carácter socialmente conveniente se acompaña
de la identificación a un “negro” cada vez más pálido.

A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7 185


a nivel nacional e internacional: la madre-Africa se nen (Louis Tower, Mister Boogaloo, Elio Boom) son
transformó en hermana-Caribe, la música africana en negros; se crea un espectáculo colectivo con músicos y
música afro-caribeña. La caribeñidad permite pasar del bailarinas en vestido de escena. El Champeta All Stars
antagonismo racial a la multiplicidad, de la polarización se produjo en el Festival Afrocaribeño de Veracruz,
a la armonía. Del blanco y negro al color. Sin que ésta después de haber hecho una gira por toda Europa en la
sea en adelante peligrosa o conflictiva. que participó, durante el verano 2002, en el “encuentro
de las Cartagenas del mundo”, en España, en el Marka
3. 2. Inscribirse en un mercado global Rock de Lovaina, en Bélgica, y en el Antilliaanse
Feesten, en Holanda. Para Manrebo, el éxito de estos
Pero Manrebo no se detiene allí. La voluntad de primeros conciertos internacionales fue completo (“fue
conquistar la escena internacional responde a una estra- una locura, la gente bailó toda la noche”) y al regresar a
tegia individual de la cual es plenamente consciente: Cartagena, recibió un reconocimiento nunca obtenido
“A nivel local, ya hay mucha gente, no quiero entrar antes: el Presidente colombiano, Álvaro Uribe, felicitó a
en competencia con ellos. El mercado colombiano es Manrebo y a su grupo con una carta en la que saludaba
muy pequeño, prefiero ir al mercado que queda por “la gira triunfal” en México y Europa. Pa’lante, la revista
conquistar” 20. ¿Qué elementos de la champeta movi- de información de la alcaldía de Cartagena, dedicó
liza? ¿Qué imagen de Cartagena presenta al exterior? gran parte de su edición del 8 de septiembre de 2002
¿Cómo se adapta y transforma lo local para satisfacer al éxito de la champeta en Europa y reafirmó el apoyo
los gustos supuestos de los consumidores del resto del de la administración municipal a este movimiento de
mundo? Para Manrebo, la respuesta es simple: el valor conquista de los mercados internacionales – lo que no
añadido de la champeta es la presencia de África en impedirá la participación de la misma administración
América, por lo que utiliza -y produce- una imagen en la estigmatización o, incluso, en la prohibición de
estereotipada de la champeta que correspondería a las la champeta a nivel local–. En un artículo de Man-
expectativas imaginadas de un público en búsqueda de rebo sobre “la explosión” de la champeta en Europa,
world music, una mezcla de “autenticidad” étnica y de da cuenta “del honor” de representar a Cartagena,
exotismo cultural. Manrebo asimismo presenta como y lo registra como una señal de “colombianidad”.
tradicional lo que se percibe localmente como una Cautivado, el público mexicano y europeo asistió al
música moderna, en ruptura con el folclor: “Es una “nacimiento de un reino que va a durar mucho tiempo
música con una herencia africana, elegí este sector, el y que elevará Cartagena en el contexto mundial, para
de la música afro-caribeña. Hay muchos blancos en el convertirla en una ciudad atractiva, gracias al ritmo
grupo, pero no son los cantantes. La champeta agrada musical que la hará reencontrar su importancia y su
gracias a su herencia africana. En Europa, la gente es imagen”22.
muy blanca, pero le gustan los de aquí, que no son
tan claros de piel. Adoran los rastas. Yo también hago
Dairo Barriosnuevo: picup 22
investigación, busco lo que tendrá más impacto allá,
lo que agrada en los festivales. En Europa, la presencia
africana en América atrae mucho”21.
Manrebo crea entonces un grupo, el Champeta
All Stars, cuyo nombre revela, obviamente, la inspira-
ción, la famosa Fania All Stars, de éxito internacional
ampliamente reconocido. Los cantantes que lo compo-

20 Entrevista, 1 de agosto de 2003.


21 Entrevista, 1 de agosto de 2003.
22 Pa’lante, n°8, septiembre 2002.

186 A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7


Se ve así cómo, para ajustarse a un imaginario
internacional supuesto, Manrebo alega una diferencia
comercializable con el Norte activando clichés que
corresponderían a las expectativas globales. Estos pro-
cesos de autoexotización de la champeta actúan como
una prueba de autenticidad en el exterior y producen
un “otro descontextualizado” (Ochoa, 1998: 176) en
el interior, basado en la invención de una identidad
local, la cual retoman de inmediato las autoridades de
la ciudad que ven en la lógica de descontextualización
la oportunidad de promover la música en la escena
internacional, así, al mismo tiempo, la ignoren a nivel
local o, como ocurrió más recientemente, contribuyan
a su normalización y a su vulgarización. El Runner, noviembre 2006.
FOTO DE ELISABETH CUNIN.

3. 3. Profesionalismo y ciudadanía:
la nueva cara de la champeta
en Cartagena poder competir con los artistas internacionales deben
“profesionalizarse, si no la champeta nunca se volverá
Esta estrategia comercial planetaria no tiende sólo un proceso nacional e internacional”. Con ese fin se
a producir una nueva música que correspondería a las han traído artistas internacionales “para que tomen
expectativas de un público transnacional: pasa tam- ejemplo en ellos”, al considerar que “fueron marginali-
bién por una transformación de las prácticas locales zados, porque no se formaban”24. En otros términos, las
y responde a los criterios supuestos de buena música especificidades del mercado local de la champeta (turn
(Guilbault, 1993). Informal, desordenada, inestable, over de los cantantes, duración de vida muy corta de los
la champeta debe, en adelante, volverse consensual y CDs) aparecen en adelante como obstáculos al desa-
monolítica, casi un modelo de organización. Manrebo rrollo futuro de la música y, peor incluso, los cantantes
crea una corporación, Champeta Criolla Internacional, serían los únicos responsables de la mala reputación de
asociada a un sitio Internet (http://champetacriolla.8M. la champeta y de su difícil aceptación.
com/historia.html) que inscribe esta iniciativa en la Reanudando por otra parte el modelo del difunto
lógica de la puesta en relación de lo local y de lo global Festival de Música del Caribe, única escena abierta a las
con su misión de “difundir el género musical de la músicas africanas y caribeñas durante cerca de quince
champeta [...] conectando la producción artística de años, Manrebo dibuja los contornos de un Festival
los barrios populares de Cartagena con el resto del Afrocaribeño de Música Champeta, que se basaría en
mundo”. Manrebo, con el fin de dar una base pedagó- un Día Mundial de la Champeta. Esta globalización
gica a su proyecto, se apoya entonces en la fundación se expresará sin embargo a través de una forma más
Dale la Mano a tu Hermano, la cual trabaja en efecto clásica: el festival, previsto los días 29 y 30 de agosto de
“en favor de la protección de la familia despertando al 2003, que se canceló para permitir el rodaje, en el centro
amo, al científico, al servidor durmiendo en cada ser histórico donde debían tener lugar los conciertos, de
humano, dando fuerza a los talentos ordinarios gene- un comercial elogiando una marca de cerveza checa y
ralmente subestimados por los que los poseen”23. En lo destinada al mercado norteamericano. Hecho revelador,
concerniente de manera más específica con la cham-
peta, se hace hincapié en la mejora de las contribuciones
artísticas, la enseñanza de la historia de la música y la
formación de los cantantes, quienes “se creen famosos 23 Folleto de presentación de la asociación.
y no se forman” y cuyos “discos sólo duran un mes, 24 Entrevista con el Presidente de la fundación, 19 de agosto
no se conocen fuera de Cartagena”, por lo que, para de 2003.

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el festival se transformó entonces en un foro, la música tosos de Cartagena, su último álbum nos hace entrar
cedió su lugar a la palabra y la danza a la explicación. en un nuevo género, una clase de invención musical
Organizado de manera muy oficial con el Instituto de planetaria que se nutre, en un estudio parisiense, de
Patrimonio y Cultura de Cartagena, precedido de los ritmos africanos y caribeños.
himnos de la ciudad y del país, el foro presentó objeti- En esta lógica de idas y vueltas, sería necesario
vos ciudadanos raramente asociados con la champeta: estudiar el impacto de los CDs de Lucas en Colombia,
se trató en efecto de reflexionar sobre “el papel de la donde, en efecto, contribuyeron a la legitimación local
champeta en la cultura ciudadana” y “de favorecer los de la música25. Me interesaré, sin embargo, de modo
procesos culturales locales, construir colectivamente un exclusivo en las actividades de Lucas en París y en su
proyecto de ciudad armonioso, democrático y viable”. casa disquera “Palenque Records”, que va a pasar pro-
Los músicos deberían así corregir el contenido de sus gresivamente de la difusión de la champeta en Francia
canciones, suprimir las frases juzgadas obscenas, evitar a la invención de una música, calificada mucho más
los dobles sentidos polémicos. En otros términos, como globalizada que como world music, para la cual
deberían pasar a ser verdaderos profesionales y, más convendría discernir hasta qué punto la localización
allá, ciudadanos modelos y la champeta, símbolo de en una capital occidental dista mucho de significar
profesionalismo y ciudadanía, portadora del renaci- inyección de capital y lógica de comercialización, pues
miento de la ciudad... No es seguro que tal visión esté la actividad de Lucas se despliega al margen de los
compartida por los habitantes de Cartagena ni por los grandes circuitos de producción y distribución.
músicos y aficionados de champeta.
¿4. 1. Qué relocalización de esta
4. Lucas: regreso a París e invención de un música en París?
“copiar–pegar” musical
Los discos de Lucas no invadieron el mercado
Auto-designándose “Super champeta man”, “Ifa francés. Por el contrario, han tenido muchas dificulta-
Man Original”, Lucas juega sobre un imaginario des para encontrar su lugar entre una “música latina”
afroamericano globalizado - que va de las dreadlocks asimilada a la salsa, al son o al merengue, y una “música
al afiche de Malcom X, de una campaña publicitaria africana” que difunde, desde hace tiempo los grandes
utilizando Jamaica al éxito del rap o del hip-hop, del nombres del soukous. Se trata, pues, de proponer una
discurso sobre las reparaciones a la asociación con los nueva música que remitiría a estos dos imaginarios ya
cultos afros – que contribuye también a producir, entre existentes, pero sin superponerse perfectamente a ellos.
París y Cartagena. Lucas compra música africana en De hecho, ¿cómo se recibe este híbrido musical, ni
París para enviarla a Cartagena, a Humberto y otros. totalmente África, ni totalmente América, en Francia?
Grandes conocedores de la producción musical africana, Para entender parte de este movimiento de relocali-
los colombianos que le hacen pedido sólo se interesan zación de la champeta en París, en primer lugar me
por discos antiguos, retirados de la venta hoy. Lucas interesé por los discursos sobre la música, por las reac-
va a encontrarlos en las tiendas del barrio africano, ciones de distintas revistas que dedicaron un artículo
alrededor de Château-Rouge, donde él mismo vive. a la champeta o un comentario sobre el lanzamiento
Un disco muy buscado llega a veces a 600 dólares en de uno de los CDs producidos por Lucas.
la reventa en Colombia pero, generalmente, Lucas casi En los periódicos nacionales se encuentran diver-
no gana nada de este comercio trasatlántico informal e gencias sociales y políticas que van más allá de la
ilegal, que toma frecuentemente la forma del trueque música, interpretada a la luz de las posiciones generales
entre unos LPs de música africana de los años ochenta
y un CD de las últimas creaciones de Cartagena. Pero
Lucas es también DJ, cineasta (hizo dos videos sobre
música en Cartagena y Palenque de San Basilio) y, sobre
25 El principal diario del país titulaba así, a la salida de uno
todo, productor de champeta en Francia: después de de los discos de Lucas: “El ritmo de la champeta sorprende París”
dos compilaciones que retomaron los títulos más exi- (El Tiempo, 9 de diciembre de 1998).

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del Palenque de San Basilio, antiguo rey de África,
sino como el “Bolívar negro” de América Latina. La
champeta “viene de un lugar legendario [marcado por]
el sufrimiento infinito en el abismo de los barcos de
esclavos y la rebelión de los insumisos que rompieron
las cadenas de la crueldad”, la costa Caribe de Colom-
bia es “una pequeña esquina de África”, “la champeta
estalla, reemplaza a la salsa y al merengue y, al alba
del tercer milenio, se convierte en la música N°1 en
Colombia”, “África entero desembarcó detrás de los
Negros Cimarrones para escribir el Nuevo testamento
de la música afroamericana” (Vibration, Hors Serie n°
4, marzo de 2002). La escalada de señales exóticas, la
reconstrucción precipitada de la historia, el discurso
del heroísmo y de la resistencia crean así un ambiente
social y cultural bien distante del que acompaña la
champeta en Cartagena. No es una música local que se
promueve, sino más bien un imaginario afroamericano
transnacional que está instrumentalizado y difundido,
creando una continuidad histórica con África y una
relación de parentesco en todo el continente ameri-
cano. Los artículos retoman los términos que perso-
Dairo Barriosnuevo, Rumba. nifican, a nivel global, esta “cultura negra” asociada a
un “mundo rasta”: gueto, libertad, brujería, ganja. De
hecho, ¿el cantante Louis Towers no es comparado
del diario. Liberation (31 de octubre – 1 de noviembre “a un muchacho con dreadlocks que se asemeja a un
de 1998) hace hincapié en la lógica de mestizaje consus- Wolof ” (Vibrations, n°11, febrero de 1999)?
tancial a esta música, ampliando esta hibridación que Pero esta América africana, cuya autenticidad se
sería el símbolo de la post modernidad: “los músicos expresa en la memoria de los cimarrones, coexiste, sin
locales se apropiaron el soukous, el highlife ganeano, contradicción aparente, con una América mestiza, lugar
el afro-beat de Nigeria, el mbaqanga de los townships de fusión y de encuentro de las culturas del mundo.
sudafricanos para dar nacimiento a la champeta [...] Para L’Affiche, autoproclamada “revista de las otras
transportada por los picós (sound-systems a la jamai- músicas”, “el futuro pertenece a estas nuevas síntesis
quina) y un embrión de industria del disco, la champeta grooves afroamericanas” (noviembre de 1998). Epok se
se basa en las guitarras como en Kinshasa”. Por su parte, interesa en este “cóctel afroamericano”, en esta “extraor-
Le Figaro (13 de diciembre de 2001) se asusta de este dinaria fusión”, en el “lirismo latino subvertido por la
nuevo modo musical en el cual “la mezcla de las culturas locura africana” (n° 25, abril de 2002). Autenticidad y
del mundo [tiene] algo un poco salvaje”. mestizaje, tradición y modernidad, coexisten en esta
Las revistas musicales, en particular, las que abas- world music que se alimenta de todos los registros de
tecen la ola actual de la world music, celebran esta legitimación. Si la champeta permite “remontar el
nueva fusión que justifica la existencia de periódicos árbol genealógico hasta África”, mostrando cómo “la
especializados, y compiten en lirismo para reinventar conexión existe aún”, conlleva, a su vez, a una síntesis
una Colombia africanizada dónde sólo vivían negros transplanetaria: “las animaciones vocales son iguales a
cimarrones rebeldes y orgullosos. Más allá de lo que las que se escuchan con los tenores del soukous cuando
Humberto, Manrebo o Lucas se habrían atrevido a suben a la escena de Kinshasa, las guitarras juegan
inventar, presentan a Benkos Biohó no solamente los acuerdos sincopados como en Douala, la capital
como el jefe de los cimarrones en fuga, fundador camerunesa del makossa, y la batería da el tempo de

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Johannesburgo, donde el mbaqanga es soberano. Se no existe por ninguna otra parte; más que en un
integra también ampliamente al high-life que viene de intermediario entre dos culturas, se transforma en un
Ghana y Nigeria” (Vibrations, n°11, febrero de 1999). creador: el pasador de fronteras se convierte en artista.
Finalmente, la champeta sería una fusión que integraría Precisemos en primer lugar que Lucas produce tres
los ritmos afroamericanos y no olvidaría ninguna de las tipos de CD: compilaciones de canciones venidas de
músicas africanas -o, más exactamente, de las músicas Cartagena que reflejan distintas épocas de la champeta;
africanas comercializadas al Norte-. álbumes de “música tradicional” (el Sexteto Tabalá,
Aunque se trate de una copia, inevitablemente con las Alegres Ambulancias y otros grupos originarios de
menos calidad, de un original africano, esta música Palenque de San Basilio, tocando son cubano, cha-
permite recordar la primacía del modelo africano. lupa, bullerengue, lumbalú) difundidos bajo el sello
De hecho, en las revistas africanas en Francia, si el OCORA26; y, últimamente, un CD inclasificable,
diagnóstico es idéntico –conservación de la cultura fusión parisiense de músicas africana y colombiana.
africana más allá de los tiempos y de las distancias–, Lucas no ve ninguna contradicción entre estas dis-
las conclusiones divergen. El mito del mestizaje y de la tintas actividades, que no son más que las múltiples
hibridación se abandona para dejar lugar únicamente facetas de una única expresión musical. La champeta
a la valorización de la autenticidad y de la supervi- sólo es el lumbalú (canción funeraria) moderno, que
vencia: “Palenque es hoy uno de los últimos pueblos se encontraría tanto en la música de Palenque de San
cimarrones de América Latina que ha resistido a todo Basilio como en los ritmos africanos. En palabras de
mestizaje y a toda influencia cultural exterior, conser- Lucas, la llegada del soukous, en los años 1970-80, no
vando su lengua Palenquera, criollo de origen bantú debe interpretarse como una revolución: no hizo más
(Congo)” (Le Disque Africain. Le mensuel de la musique que dar una nueva forma a una música que ya existía,
africaine, n°4, noviembre de 1998). La champeta no se el desvío por África es un regreso hacia una africanidad
comprende como un género musical autónomo, como ya presente. Lucas se cuida de hacer una nueva fusión:
una creación nacida de la fusión; no puede ser sino una tiene por objeto poner en relación dos universos cul-
imitación de lo que viene de África. “¿El soukous está turales artificialmente separados. Su música expresa el
reanudando una nueva respiración del otro lado de reencuentro entre los dos continentes, y luego, como
los mares, en Colombia? Se está despelucando como lo precisa en una fórmula explícita, actúa como un
en los nganda de Brazzaville” (Autre Afrique, n°68, 18 “copiar-pegar” entre África y América. La relación con
al 24 de noviembre de 1998). Por último, la champeta África se invierte así: no es sólo América que volvería
de los artículos de las revistas africanas es más bien un a encontrar África, sino África que vuelve a encontrar
pretexto que, en el tono del asombro, permite recordar, su africanidad perdida gracias al Caribe. Los músicos
además de la riqueza de la cultura africana, su carácter africanos en París redescubren, según Lucas, la música
primero, en una lógica que no está muy lejos de los popular que habían olvidado desde su llegada a Francia
discursos afrocentristas: “Uno se imagina difícilmente y que no se escucharía ya en las grandes metrópolis
a los jóvenes colombianos contoneándose al ritmo del africanas.
verdadero soukous zaireño con la misma facilidad que Es interesante detallar los CDs producidos por
los jóvenes de Kinshasa [...]. Los ritmos africanos son Lucas. Más precisamente, sus dos compilaciones de
maravillosamente asimilados y se consolida el senti- champeta27 y su último álbum, Radio Bakongo28. La
miento identitario de los jóvenes de origen africano”
(L’Autre Afrique, 7-13 de enero de 1998).
26 Colombie. El Sexteto Tabalá, Ocora, Radio France, 1998;
4. 2. Creación de una comunidad afro Colombie. Palenque de San Basilio, Ocora, Radio France, 2004.
imaginada Ocora es un sello que produce exclusivamente el género musical
calificado de “folclórico”, “tradicional” o “étnico”.
27 Champeta Criolla, volúmenes 1 y 2, Palenque Records,
Pero Lucas no se limita a difundir la champeta en 1998 et 2000.
Francia –difusión que implica también adaptación y 28 Batata y su Rumba Palenquera, Radio Bakongo, Network
selección–, sino que inventa una nueva música que Medien GMBH, 2003.

190 A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7


primera compilación se sitúa en el registro del descubri- imágenes y músicas que reúnen tiempos y continentes,
miento de un género musical colocado en la continuidad pero que solamente la inventividad de Lucas hizo existir,
de las músicas afroamericanas, cuyas especificidades movilizando a una comunidad transnacional virtual, que
históricas, culturales, sociales se destacan en un tono se supone comparte la misma cultura.
culto. Se recuerda así el papel de los cimarrones, de
Benkos Biohó, del Palenque de San Basilio; se presenta a Conclusión
los distintos personajes (cantantes, productores, DJ) del
mundo de la champeta; la propia ciudad tiene derecho a Una misma designación, “música negra”, remite así
una descripción histórica y socioeconómica. Redactado a significados múltiples, reveladores del orden socioracial
en español y en francés, el librillo interior da prueba así de la ciudad y del país, del lugar fluctuante concedido
de la vocación del CD: lanzar un puente entre Colombia al otro y de la aparición de la referencia a un imaginario
y Francia. Con el segundo álbum, la preocupación de la afroamericano transnacional. Pero cultura globalizada
presentación detallada de Cartagena cede el paso, en un no es sinónimo aquí de cultura dominante: la champeta
discurso voluntariamente delirante, a la invitación -en se desarrolla en la periferia de los Estados-nación (costa
francés, español e inglés- al viaje a un mundo musical Caribe colombiana) y en los márgenes de las metrópolis
“afro-galáctico”, en el cual el auditor desempeñaría el (barrios populares de Cartagena, barrio africano de París),
papel de Cristobal Colombus –en cohete espacial– lejos de las grandes redes de producción y difusión, en
cuando llegó a América: “Señoras y señores – ladys and mercados segmentados local e internacionalmente. En
raggas, champetúas y champetúos: Was’ up mi gente!!!! Cartagena, la relocalización de la música africana, se
Palenque Records vuelve con su ashé africano, orgulloso efectúa en un espacio muy cargado de referencias a África
y feliz de traerles la música afrocolombiana de la costa y a las identidades raciales y étnicas, superpone expresión
Caribe [...] Este disco es una puerta de entrada al espa- cultural e interpretación biológica y combina registros
cio solar champetúo, un universo infinito, llenado con de discurso y cuadros normativos. La champeta se pre-
planetas y con constelaciones, con dioses musicales, con senta al mismo tiempo como una música localizada que
puertas de entradas a la historia de dos continentes que se inscribe en las prácticas sociales y la estigmatización
se hablan desde siglos, enviándose mensajes musicales racial asociadas a Cartagena, una música étnica que juega
a través del mar”. En cuanto al último CD de Lucas, con el atractivo del exotismo e incluso del primitivismo
propone una música que no existe ni en Colombia ni del pensamiento occidental, una música planetaria que
en África, sino que surge del barrio 18 de París. Batata, moviliza a una diáspora global y obliga a sobrepasar, y a
famoso tamborero originario de Palenque de San Basilio, coexistir, las oposiciones binarias: local y global, bricolaje
grabó en Colombia (en Bogotá y no en Cartagena), en y naturalización, hibridación y tradición, mestizaje y
compañía de dos cantantes de champeta, Viviano Torres afrocentrismo, homogeneidad y diferenciación, cultura
y Luis Towers, también palenqueros. Se salta así un y comercio, Norte y Sur. Como lo sugiere Renato Ortiz,
primer paso que instaura una continuidad entre música los procesos de desterritorialización/reterritorialización
tradicional (Batata está asociado al lumbalú, canto de desafían las reflexiones y metodologías de las ciencias
los muertos que acompaña las ceremonias funerarias) y sociales y requieren la construcción de nuevas categorías:
champeta. Pero no es todo: dos músicos congoleses, Rigo “Lejos de pensar que estamos frente a una ‘crisis paradig-
Star y Dally Kimoko29, añaden los ritmos de guitarra mática’, una parálisis del pensamiento, veo un horizonte
en un estudio parisiense, mientras que un cantante y que puede ser explorado de otra manera, más creativa,
animador de la escena parisiense, 36.15 Code Niawu, capaz de impulsarnos más allá de nuestros conocimientos
compone las palabras. África reencuentra América, la petrificados” (Ortiz, 1998: xxvii). a
rumba congolesa pasa a ser palenquera, el soukous se
transforma en lumbalú. Y los reencuentros se hacen en
París. En la carátula, Batata, sombrero tradicional en la
cabeza, toca el tambor frente a un picó coloreado; las
29 Famosos guitarristas congoleses, instalados en Paris, que
canciones mezclan los sonidos del tambor a las guitarras
grabaron con los grandes nombres del soukous : M’Bilia Bel, Tabu
congolesas, entre dos arengadas de los DJ de Cartagena: Ley, Kofi Olomide, Papa Wemba, Soukous Stars.

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L A A L E G R Í A D E B A I L A R

Vida y milagros de José Benito Barros Palomino


(1915-2007)
Julio César Oñate Martínez

En el puerto fluvial del Banco, famoso por sus


arreboles de fuego y los mitos y leyendas ribereñas, el
21 de marzo de 1915, de la unión de la india pocabuyana
Eustasia Palomino y el brasilero José María Barros
Traveseido, nació en la calle Boyacá del barrio Central,
José Benito Barros Palomino, sin lugar a dudas el más
versátil y prolífico compositor de todo el territorio
colombiano. Con el maestro, en su ciudad natal, en
el año de 1990, sostuvimos la siguiente conversación
sobre su vida y creación artísticas, que queremos editar
como tributo a su memoria, a raíz de su fallecimiento
del maestro el 12 de mayo de 2007 en Santa Marta.

I Los primeros años

--El padre suyo era músico o usted aprendió la guitarra


por pura iniciativa o tuvo algún profesor de guitarra
aquí en el Banco
--Mi papá murió y yo no lo conocí, pero en el Banco había
muchos señores que tocaban guitarra, cantaban muy
bonito y yo me ponía a la par de ellos y les preguntaba y
ellos me enseñaron. Estaba, por ejemplo, Pacho Sosa, quien
cantaba muy bonito y tocaba la guitarra; estaba Robertico
Palomino, un tío mío. Y varios.
--¿Esas primeras canciones que hace usted, estando muy

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Izquierda: José Barros a los 17 años cuando prestó el servicio militar.
Derecha: José Barros a los 35 años

joven, qué influencias recibieron, qué aires fueron los que ayer nos arrulló
que caracterizaron o diferenciaron las primeras cancio- Piensa en nuestro amor
nes que usted compuso? testigo de dos almas,
--Las primeras canciones que yo hice casi están inéditas. almas que se dieron lo que Dios no quiso ´
Esas canciones fueron hechas para las novias que yo tenía
en esa época. II Las correrías
--¿Eran canciones románticas, boleros, valses, tangos,
qué ritmos eran? En 1935 llegó José Barros a Medellín, ciudad que
--Eran canciones románticas. Todo, menos canciones de se encontraba sumida en el furor del tango y para el
acá, nuestras, populares, porque en esa época, no se tocaba fue verdaderamente impactante escuchar la voz y las
eso en el mundo de la gente bien. canciones de Gardel que resonaban en las victrolas y
traganíqueles de todos los cafetines de la zona de Gua-
De esas canciones es el bolero “Tu regreso”, yaquil, donde tuvo la fortuna de ver la ultima actuación
vocalizada por el propio maestro José Barros, con el del zorzal criollo, en el Circo España de Medellín.
acompañamiento musical del argentino Joaquín Mora, Luego sobrevino la muerte de Gardel, el 24 de Junio
en una grabación que se dio en Cartagena a comienzo de 1935, cuando nació la ilusión de conocer Argentina,
de los años 50. la tierra que había parido a ese artista tan colosal. Se
dedicó entonces a presentarse en diferentes concursos
Vuelve en La Voz de Antioquia, cantando con su guitarra com-
para poderte acariciar pañera los tangos de moda y algunas de sus primeras
mi bien creaciones, entre ellas, otro tango, “Ingrato Amor”:
Vuelve
que yo sin ti no puedo estar En la sombra quedaré
mi amor por la ausencia de tu amor
Piensa porque a nadie encontraré
que nuestras almas no podrán que consuele mi dolor.
vivir Pero yo te pensaré,
con la felicidad en mi desesperación,
de aquel sagrado amor y a la Virgen pediré

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para mi alma resignación. pueblos diseminados en la pampa, y es donde surge la
producción tanguera de José Benito Barros.
Ingrato amor, En Buenos Aires, conoció dos ya consagrados artis-
te vas de mí, tas argentinos, que años más adelante popularizarían
dejándomé algunas de sus obras. El gran orquestador Eduardo
sin comprender Armani, y el bandoneonista Joaquín Mora, quien
por qué te vas radicado en Colombia durante varios años, enriqueció
sin un adiós. de forma notoria, el catálogo musical de la disquera
No seas así, Fuentes, con el grupo Joaquín Mora y sus 7 gauchos.
ingrato amor
--¿A qué edad empezó usted la correría que hizo por
Después de 2 años de rebusque y penetración en el distintos países?
medio musical de la capital paisa, José Barros orienta --Yo salí de Colombia por ahí a los 18 años. La primera vez
su brújula musical hacia el sur del continente y en una me fui de El Banco a Panamá, de Panamá crucé todo el
escala de varios meses, que comienza en el año 1938, per- territorio de Centro América y llegué a México; de México,
manece en Cali, donde un contrato con Radio Cristal a los 3 meses, me sacó la policía por indocumentado; y volví
le permite darse a conocer en esta ciudad. Se acercaba a cruzar Centroamérica y llegué nuevamente a Panamá
el día de las madres y el recuerdo de su progenitora, y de ahí pasé al Ecuador, Venezuela, Perú. Luego vine a
en el puerto del Banco, angustiada por el regreso del Colombia y entonces arranqué para el Sur, Argentina,
hijo ausente, le dio suficientes motivos para componer Chile, Brasil. Regresé de nuevo a Colombia y me radiqué
el pasillo “Dos claveles”, que en 1956, el tumaqueño en Bogotá, permanentemente. Dejé a Bogotá como la
Tito Cortés, con el marco musical de Los Trovadores base, para seguir viajando. En Lima fue donde grabé por
de Barú, convirtió en un éxito continental: primera vez, para la RCA Víctor, cuatro canciones, entre
ellas, el famoso tango “Cantinero Sirva tanda”:
Ay, clavelito rojo,
que llevo aquí en el pecho: Oiga, mozo, traiga pronto
vas pregonando amores, de lo mismo que ha servido,
amores maternales. para ver si así me olvido
Yo te llevaré siempre de lo que me sucedió.
en el fondo de mi vida No es que yo me esté muriendo
como un recuerdo santo por lo sucio que ha jugado,
de mi madre querida. pero estoy decepcionado,
porque ayer me traicionó.
Mi pecho lanza un grito, Sírvame, y no se preocupe,
y el cielo una mirada, copa grande, cantinero,
para pedirle a Cristo: que, si fue por el dinero
“Cristo, bendito Dios, que ella me quiso dejar,
no te lleves mi madre, ya le llegaron a bulto.
mi madrecita buena, que le suenen los chelines
mi madrecita santa, y le embriaguen copetines,
que mitiga mis penas”. aunque sea por no dejar.

Después de su estada en Cali, siguió al Ecuador, --Desde cuando salió de aquí, ya usted tenía inquietudes
Perú, Chile y Argentina; allí en el país austral, y deslum- musicales, ya tenía composiciones, ¿había estudiado
brado por las luces de Buenos Aires, recorría cantinas música? ¿Cómo iba usted preparado para enfrentársele
y burdeles en compañía de músicos anónimos, que al mundo?
como él, de origen muy humilde, llegaban de lejanos --Yo desde los 12 años ya tenía hechas canciones bastante

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buenas. A los 14 o 15 años, tenía muchas canciones, que las rancheras. Y la verdad es que él fue espléndido en la
podíamos decir, muy bien hechas, pero de música, de notas, producción de rancheras, como “El caballo de la vida”,
no sabía absolutamente nada: solamente me preocupaba que él interpreta con el mariachi Águilas del Norte:
que en las inspiraciones hubiese bonita melodía y buenas
letras. De ahí, comprendiendo que el Banco no era donde Cuando llegué yo a este mundo
yo podía desarrollar lo que quería, una profesión artís- no pude hallar un estribo
tica, musical, entonces, me volé del Banco a buscar otros para montar el caballo
mundos, para conocer artistas, compositores. Mientras el caballo de la vida.
viajaba, no estudiaba, sino que llegaba a las grandes Pero yo tuve el coraje
ciudades, a los barrios muy pobres, a los hoteluchos, y me y lo monté pelo a pelo;
iba a cantar a las cantinuchas de todos los países y oía a hoy, no me tumba el caballo
diferentes cantantes. Luego de esos barrios bajos me iba ni hay mujer que me desprecie,
a barrios donde estaban los buenos artistas cantando, porque ya tengo dinero.
los escuchaba, comparaba las canciones, veía los estilos y Ahora voy galopando
eso fue lo que hice. Siempre en cada ciudad que llegaba, en mi caballo veloz,
tenía que empeñar la guitarra y vérmelas para poder derribarme solo puede
comprar otra. el santo poder de Dios

III México

Después de esa fructífera gira por el sur del conti-


nente, en ese constante afán de superación, marcado
por las grandes figuras de la canción popular en Lati-
noamérica, Barros sabía que la tierra mexicana, era una
experiencia obligada para cualquier compositor que
anhelara sobresalir y hacerse notar. Y para allá apuntó
con su guitarra. Después de cruzar por Panamá y Cen-
troamérica, llegó a la tierra del águila y la serpiente en el
nopal. Corría el año 1944. En México, tuvo la suerte de
conocer a Agustín Lara, quien le hizo algunas sugeren-
cias, le dio algunos consejos para mejorar su proyección
musical; fue allí donde José Barros aprendió que la
esencia de la canción romántica de Latinoamérica, la
misma que fue encontrando en el tango, la ranchera,
los valses, los pasillos e, inclusive, en algunos blues
norteamericanos y en la literatura, en general, era el
conflicto amor–odio, en el que los celos, la traición, la
desconfianza, la tristeza, los sufrimientos, la maldad,
la verdad y la mentira siempre estaban presentes. Y
finalmente, se convenció de que era muy cierto lo que
Agustín Lara le afirmara en esa ocasión: “Soy ridícu-
lamente cursi, y me encanta serlo, pero lo mío es una
sinceridad que otros rehúyen ridículamente”.
Otra de las influencias, recibidas en México, fue
la derivada de los mariachis. El maestro observaba
cómo hacían sus líneas melódicas para los corridos y La piragua

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IV Colombia: el porro, la cumbia y el
vallenato.

En 1945, después de haber sido deportado de


México, llegó a Panamá, de aquí entró a Colombia,
nuevamente por Turbo y, sin la guitarra, sin la maleta,
atropellado por el hambre, de chance en chance, logró
subir al altiplano. Ya Bogotá imantaba la atención como
una pujante y promisoria capital. Después de negociar
la dormida en una pensión de mala muerte, en la
cercanía de la estación del ferrocarril, muy temprano
se dirigió a las oficinas de la firma J. Glottman y Cía.,
representantes de la disquera RCA Víctor, seguro de
que allí tenía las regalías de las obras grabadas en la
ciudad de Lima. Con Los Trovadores de Barú, de Discos Fuentes

--Llegué muy mal económicamente. Me fui al almacén


de RCA Víctor de don Jack Glottman, en Bogotá, en la
séptima con 22 y 23, a ver si tenía regalías. Cuando yo
hablé con las señoritas que estaban atendiendo el almacén de Pacho Galán, Lucho Bermúdez, Abel Antonio Villa y
y les dije que yo era José Barros, ellas se miraron, unas a Buitraguito. Y entonces efectivamente fui y vi que no se
otras, como queriendo decir “este señor está loco”. Una de tocaba otra cosa, sino esa vaina. Pero cómo le hago yo un
esas señoritas salió disimuladamente y subió al mezzanine porro a la RCA Víctor, si yo no sé hacer esa vaina, eso no
donde estaba don Jack Glottman, seguramente a decirle, se tocaba en el Banco, no ve que esa era música plebe: lo
allá está un señor que dice que es José Barros. Entonces que era el paseo, el son, el merengue, la puya, eso se oía era
que suba. Subí y me saludó un señor alemán muy atento, en el mercado, en las cantinuchas, con los acordeoneros; a
muy culto, cultísimo. Después de que charlamos me dice: uno no lo dejaban ni parar a la puerta a oír esa música,
“Ajá, señor Barros, ¿usted tiene documentación?”. Ya yo porque si lo sabía el papá o la mamá, a uno lo cogían
llevaba la cédula y la libreta militar, porque todo me lo a rejo. Bueno, total, erda, cómo hago yo para hacer un
adivinaba, lo que iba a pasar. porro. Entonces me acordé de un pasaje que pasó aquí en
--Usted iba preparado. El Banco, un loco con el gallo tuerto y le hice “El gallo
--Yo iba preparado. Cuando ya vio que sí era José Barros, tuerto” y por el respaldo le puse Las pilanderas.
se levantó y me dio un abrazo y me felicitó. Usted sabe, --Eso era del folclor: “Las pilanderas”. Por lo menos
señor Barros, qué regalías tiene usted aquí. ¡Tiene 1.800 la…
dólares! En esa época estaba a 3 pesos, figúrese usted. Una --Del folclor, pero no tenían ninguna
fortuna inmensa que casi me la gasté sacando los vestidos --Ninguna demarcación musical.
que tenían empeñados los estudiantes de Chimichagua y de --y la melodía diferentes, si, señor fue el gran éxito. Des-
El Banco y dándoles de comer. Todos estaban estudiando, pués le hice “La Llorona Loca”, “Navidad Negra”, “Alegre
pero muy pobres, muy matados. Y me dediqué a esa vaina, Pescador”, todo eso.
a sacarles los vestidos con la fortuna esa, qué carajo. Enton-
ces me dice don Jack Glottman, hombre, maestro. Y yo no En esos momentos, ya tenía Bogotá un ambiente
era maestro, apenas era señor Barros, el maestro me lo que estaba comenzando a cambiar el concepto de la
encasquetaron en Bogotá, que yo no sé por qué carajo me música bailable al permitir que poco a poco fueran
han dicho maestro. Bueno, total que me dice, señor Barros, entrando las tendencias musicales del Caribe. Hacia
quiero que me haga un porro, uno o dos, que está entrando finales de los años 30 había tenido la visita del legen-
con una fuerza aquí en Bogotá. Váyase a la plaza de San dario Trío Matamoros de Cuba, la Orquesta Sosa de
Victorino para que oiga los traganíqueles con la música Barranquilla, una de las más importantes en esa época,

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estuvo presente en la Plaza de Toros de Santa María A las cuatro e la mañana
y, poco antes de la llegada de José Barros a Bogotá, Le cantaba en la cocina
ya lo había hecho Lucho Bermúdez con su Orquesta
del Caribe que se había presentado en el Night Club Cocorolló
Metropolitano en los sótanos de la Jiménez. cantaba el gallo
Por otra parte, algunos músicos de los alrededores Cocorolló
de la capital estaban preocupados por encontrar una en la cocina
formula bailable, que combinara sus géneros musicales Cocorolló
con ritmos costeños o internacionales. Tal formula se cantaba el gallo
concretó en lo que se llamaría la Rumba Criolla, ritmo Cocorolló
que le imprimiría un mayor movimiento y calor, con a la gallina
tintes un poco urbanos, al andino colombiano, como la
rumba criolla de Emilio Sierra, “Que vivan los novios”, Verdaderamente histórica ha sido esa primera gra-
de gratísima recordación. bación de “El gallo tuerto”, vocalizada por José Barros,
con la orquesta de Milciades Garavito. Realmente
--Cuénteme una cosa: ¿qué conjunto o que músicos lo pocos de los compositores del Caribe colombiano, han
acompañaron a usted, a quién buscó usted para hacer manejado, con tanta solvencia, todos los ritmos de este
ese montaje y hacer esas primeras grabaciones. litoral Norte como lo ha hecho el maestro Barros. Allí
--Eso, fue la orquesta de Milciades Garavito, en Bogotá, se desborda el numen de su inspiración y comienza
pero lo más extraño de todo es que el primer porro que algo realmente asombroso, muy fecundo, de música
hago yo, el arreglo y la orquesta son de Milciades Garavito, popular de todos los géneros: empieza a mostrarse este
un cachaco tolimense que no conocía nada de la costa; orgullo banqueño, este trovador, como un compositor
y cuando salió ese porro, a pesar de que después Lucho de perfil continental, cuyas obras han traspasado nues-
Bermúdez lo sacó y lo mismo Rafael de Paz, en México, tras fronteras. A raíz del éxito de “El gallo tuerto”, el
con Carlos Meyer, eso no servía para nadie, sino el porro señor Glottman comenzó a pedirle canciones a Barros,
original del cachaco. no solamente para ser grabadas en Bogotá, sino para
enviar a la Argentina y a otros sitios. Pero se le presenta
Se murió una dificultad: él no tenía nociones de música, no tenía
mi gallo tuerto formación musical y hubo dos personas que le dieron
Que será una mano en esa época y le enseñaron las primeras
de mi gallina nociones de solfeo: por un lado, el maestro Lucho Ber-
múdez; y por el otro, el maestro Luis Uribe Bueno. Los
dos fueron realmente determinantes en su formación
musical. Una de las páginas que Barros manda para la
El pescador pintura de Magola Moreno Argentina es ese porrazo “Las pilanderas”:

Señora Juana María,


mire que se acerca el día,
pláncheme mi pantalón;
mire que quiero llegar,
para poder festejar,
el cumpleaños de la Virgen
de mi pueblo tropical.
Que vengan de Santa Marta,
que vengan para bailar,
el son de las pilanderas
de mi Banco tropical.

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Ay, pilá, pilá, pilandera,
que venga la Nochebuena. En mi tierra se le llama
Ay, pilá, pilá, pilandera, a un bicho camaleón,
que traigan maíz y panela. pero en Bogotá es lagarto,
la misma comparación.
--Bueno, maestro, y después de esas primeras graba-
ciones que hace, en esos aires, ¿no había tocado usted Aquí hay muchos lagartos
ningún aire de vallenato? que en todito están mezclados
--No, después fue cuando empecé a hacer “Angelita”; se meten en las reuniones
cuando ya empezó a caminar el vallenato, entonces lo para salir retratados
empezamos a hacer, pero en una forma como más…
--Como un poquito más académica ay lagarto lagarto
--Más académica, la letra… ay lagartija
--No tan criollo. ay lagarto lagarto
--No tan criollo, porque no gustaba eso, entonces yo hice ay camaleón
“Angelita Lucía”. ay lagarto lagarto
--Usted recuerda cuál fue la primera canción vallenata la misma comparación
-merengue, paseo- que usted compuso.
--Eso fue “El vaquero”, en forma vallenata: La versión original de la cumbia “El pescador” o
“Alegre pescador”, la vocalizó el maestro José Barros
El vaquero va cantando una tonada, con el acordeón de Alejandro Barros. No son parientes:
y la tarde va muriéndose en el río. uno, samario y el otro, del Banco:
Con el recuerdo triste de su amada,
lleva su corazón lleno de frío. Va subiendo la corriente
Lo acompaña siempre un lucero, con chinchorro y atarraya
cuando va cantando el vaquero. la canoa de barenca
para llegar a la playa.
Siempre con la melodía un poco más académica, La luna espera sonriente
más dulce, mas organizada, con mejor estructura con su mágico esplendor
melódica.
Ese encuentro con la música costeña fue deter-
minante para que el maestro Barros, se topara con los
recuerdos de su terruño y la verdad es que sentía que
por dentro su tierra lo llamaba. Se dirigió entonces a El gallo tuerto pintura de Magola Moreno
Barranquilla, y allí tuvo unas inquietudes discográficas,
muy curiosas, yo diría que es algo de arqueología fono-
gráfica, en los estudios de la Odeón que representaba un
ciudadano venezolano, Emigdio Velasco, quien realizó
una serie de grabaciones, caramba, verdaderamente
curiosas, hechas con acompañamiento de acordeón y
el maestro Barros con su guitarra. El acordeonero no
es muy conocido, sin embargo acompañó a Guillermo
Buitrago en sus primeras grabaciones del año 44, allá
en la etiqueta Odeón en Barranquilla, su nombre
es Alejandro Barros, conocido popularmente como
“Corazón”. Se producen piezas verdaderamente exóti-
cas, del maestro José Barros, como “El lagarto”:

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la llegada del valiente --Más o menos. Entonces me parecieron muy bonitas las
del alegre pescador. canciones de Luis Enrique Martínez, del Negro Durán.
El pescador Entonces empecé a hacer esas canciones, pero con otro
habla con la luna estilo; con el estilo mío.
El pescador --Un estilo característico, diferente a los demás
habla con la playa --Ajá. De ahí empecé a cantar esas canciones.
El pescador --Después que usted está en Fuentes, que cantó con
no tiene fortuna “Los trovadores de Barú”, usted se queda por allá en la
solo su atarraya Costa o de allí se traslada a otro sitio.
--No, mi base era Bogotá. Volví otra vez a Bogotá a pesar
Las canciones del maestro José Barros, impactaban que tenía contrato exclusivo con Fuentes. En el tiempo
en el gusto popular y ya en el año 46, don Antonio de descanso, cuando se estaban fabricando los discos que
Fuentes, de la disquera Fuentes de Cartagena, logró uno había grabado, me iba a pasar los 15, los 20 días a
convencerlo de que ingresara al elenco de este presti- Bogotá.
gioso sello, para lo cual creó un grupo de grabaciones
como alternativa a la Orquesta Emisora Fuentes, “Los Uno de los merengues más conocidos del maestro
Trovadores de Barú”, que fueron dirigidos por el mom- José Barros es “Angelita Lucía”
posino Juancho Esquivel. Ésta es que quizás la época
más esplendorosa, más fructífera, en lo que tiene que
ver con los ritmos del litoral norte colombiano, y es Cuando voy viajando
cuando realmente el maestro José Barros desarrolla todo en noches calladas
ese caudal impetuoso que tenía dentro de su espíritu. donde quiera que vaya
Canciones como “Navidad negra”: ombe, me sigue tu mirada.
Pero te quedas llorando
En la playa blanca y eso es lo que yo no quiero
de arena caliente si me voy para La Habana
hay rumor de cumbia yo regresaré ligero
y olor a aguardiente. porque voy a festejarte
La noche en su traje negro el cumpleaños el día primero
estrellas tiene a millares
y con rayitos de luna
van naciendo los cantares
del pescador de mi tierra
El oficio del compositor
Ese desplazamiento hasta Cartagena, le permitió
al maestro Barros, hacer contacto con los músicos que,
en ese momento, comenzaban a proyectarse en nuestro
panorama artístico.

--Allí fue donde conocí por primera vez al negro Durán


--Eso debió ser por ahí por el 47, quizás 48
--No, antes. Con Zabaleta, con Martínez…
--Luis Enrique Martínez, Buitrago que estaba sonando
ya
--Sí, pero estaba grabando para otra fábrica, no la de
Fuentes.
--Odeón, quizás

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V Piqueria con Abel Antonio Villa --Si yo le hago una canción a Escalona, me la con-
testa y, posiblemente, me jode más a mí, que yo a él.
-¿Que momento de tirantez, existió entre usted y Abel ¿Entiendes? Si le hago una canción al negro Durán, que
Antonio Villa para que usted le hubiera compuesto el estuviera vivo, también me la contesta, ¿entiende? Y me
Negro Maluco? contestó una canción mala, él me hizo la contestación,
--Eso sí es muy bueno, fue una anécdota muy bonita. y en la contestación me dijo “cara’ e chino”, figúrese
Pasó esto. Cuando empezaron a salir esas canciones, Abel usted, que yo tenía la cara como un chino. Entonces
Antonio Villa cantaba entonces una canción muy bonita en Barranquilla le cayeron todos esos barranquilleros
que era: tarará tarararira encima, no joda, pero tú si eres bruto, cipote contes-
--“Los Amores de Zoila” tación, y lo atormentaron.
--Esa, “Los amores de Zoila”. Me fascinó tanto esa canción
que yo no conocía ni tenía idea quien era Abel Antonio En una entrevista con el aludido maestro Abel
Villa. Entonces yo en Bogotá pensé, voy a hacerle una Antonio Villa, hacia 1990, conocimos cómo fue su
canción a Abel Antonio Villa, a ver con qué me sale, a respuesta, al mejor estilo juglaresco, ante esa ofensa
ver qué me contesta; y le hice “El negro maluco”, sin que le había hecho José Barros:
conocerlo. --Fue tal mi sorpresa que me llenó de rabia por la falta
--Sin que hubiera ocurrido algo entre ustedes de compañerismo, porque él me trataba de “negro
--Absolutamente nada. Yo únicamente dije “voy a lanzar maluco” y de “pirata”. Entiendo que pirata es ladrón
esta canción al mercado para que él la oiga, a ver con qué de mar. Cuando él decía “Abel Antonio, pon cuidado
me sale, a ver si me contesta”: “entonces fue cuando yo le di la respuesta que a con-
tinuación sigue:
Abelito Antonio, ten cuidado:
oye mi paseo pa que cojas escarmiento. Yo voy a dar, voy a dar contestación
Y esto te lo digo, pa que tú lo sepas, a esa mala figura que ha tratado de ofenderme
que un negro maluco no puede con mi talento. porque José Barros es ni ciertas mujeres
que ofenden a los hombres sin tener razón.
Que venga solo si es machito:
pa que se las vea con Benito. A José Barros le causa disgusto
Que venga solo y seamos francos: porque no puede con mi talento
pa que sepa que yo soy de El Banco. ay yo mejor soy negro maluco
y no tengo cara de chino hambriento

José Barros con su conjunto musical de planta con Cuidado, José Barros te vas a equivocar
el cual realizaba presentaciones en los años 40. que este negro maluco no sabe perdonar.

--Bueno, pero después voy yo a Cartagena, donde el


estaba cantando en el Hotel del Prado.
--Sería en Barranquilla.
--No, en Cartagena.
--En el Hotel Caribe
--Ese, pero en el patio. Y me dijeron, “allá está el conjunto
de Abel Antonio Villa” y me dije “miércoles, ¿cuál es?”;
aquel que está allá cantando. Y resulta que no era un
negro maluco, sino un negro bonito.
--Un negro simpático.
--Si es simpático ahora, póngase a pensar hace 40 años.

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Esta piquería no pasó a mayores. Los dos protago- De esta época es también “La llorona loca”, una
nistas posteriormente se encontraron en los estudios de canción que marca un hito, ya que le abre campo, en
la disquera Fuentes, se abrazaron y floreció entre ellos la industria moderna de la grabación, a la mitología
una amistad muy sincera: no quedó ningún tipo de rural, reforzando en esta forma las raíces folclóricas de
resentimiento, más bien admiración de parte y parte. la música costeña:
VI José Barros y la internacionalización
de la música del Caribe colombiano. En una calle de Tamalameque,
dicen que sale una llorona loca,
“El guere guere”, es una de las tantas grabaciones que baila para allá,
espléndidas que hizo José Barros con la orquesta del que baila para acá,
maestro Lucho Bermúdez, en uno de los viajes que con con un tabaco prendido en la boca.
frecuencia él realizaba a la ciudad de Bogotá. La acepta- A mí me salió una noche,
ción de la música de José Barros no solo en Bogotá, sino Una noche en carnaval.
en todo el país fue un puntal importante en la consolida- Me meneaba la cintura
ción de un repertorio rico, festivo, de la música bailable como iguana en matorral.
costeña, primero en Colombia, y, luego, poco a poco, Le dije: “Pare un momento,
más allá de las fronteras nacionales. Por otra parte, él No mueva tanto el motor”
se perfila en este momento como uno de los principales Y al ver que era un gran espanto,
juglares empíricos que alcanzaba notoriedad, a la misma ay, compadre, qué sofocón.
altura de músicos con formación académica y profesional Que me coge
como Lucho Bermúdez y, posteriormente, el gran Pacho que me agarra
Galán. De esta época hay que resaltar una pintoresca que me coge
página del maestro Barros: “El patuleco”, vocalizada por la llorona por detrás.
Alberto Fernández con el marco musical de la Sonora
Curro, con los arreglos de Pacho Galán. En la década del 50, la música del maestro José
Corría el año 1950 y el maestro Barros tenía una Barros, tiene una gran resonancia continental porque
tienda de discos en Barranquilla, en la esquina de la artistas de otras latitudes, se ocuparon de su obra,
Paz (carrera 40, hoy) con la Calle San Juan (hoy, la calle principalmente el puertorriqueño Charles Figueroa,
36) y la Paz. Cerca había unos cachacos que tenían una quien grabó aproximadamente unos 10 boleros del
tienda y a Barros le llamaba la atención que, cuando se maestro Barros y gozaba de gran popularidad en ese
emborrachaban, el guayabo lo pasaban comiendo pan. momento, porque era un imitador de Daniel Santos.
Ya él era un hombre conocido, ya tenía su nombre, tenía Impactaron mucho los boleros “Culpa al Destino” y
un almacén de discos, sus canciones se escuchaban y le “Busco tu Recuerdo”.
dijo a un empleado que fuera donde los cachacos y que Tantos y tantos éxitos que con la Sonora Matancera
le mandaran una Kola Postobón y el muchacho regresa interpretara el barranquillero Nelson Pinedo de la
y le dice: “Vea, le manda a decir el cachaco que no le música del maestro José Barros, fueron ambientando
manda un carajo, que si quiere tomar Kola, que le mande el gusto y estimulando artistas de otras latitudes como
el billete. Entonces el maestro Barros dice: ¿Hacerme eso mister Babalú, Miguelito Valdés, quien hizo una bellí-
a mí, un cachaco y patuleco, ahora verá: sima versión de “Navidad Negra”, en Bogotá, un poco
antes de morir, hacia finales de la década del 60, con
¿Pa dónde vas, Patuleco? arreglos del maestro Curro Fuentes.
¿Pa dónde vas, Patuleco?
VII Una polémica sin solución
En la esquina de La Paz,
con la calle de San Juan, El bolero “En la orilla del mar”, ha generado desde
se la pasa Patuleco, hace mucho tiempo una polémica que no se ha podido
tragando ron y comiendo pan resolver. Hay dos corrientes encontradas: dos autori-

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venía de Mompox, de nombre Edith Teresa Cabrales,
a quien le dedicó muchas serenatas. Su admiración
fructificó en la bella página, “Mompoxina”, que Nelson
Pinedo convirtió en un verdadero éxito de gran reso-
nancia en todo el continente con la Sonora Matancera.
A finales del 80 José Barros convirtió a Momposina en
un cuento que más tarde fue adquirido por la progra-
madora de tv RCN para ser adaptada como telenovela
con libretos del periodista y escritor Daniel Samper
Pizzano. En 1994 salió al aire.

IX La historia insólita de “La piragua” y


el Premio Nobel

En 1970, salió al mercado “La piragua” en versión de


Gabriel Romero con “Los Black Stars”, la orquesta que,
según el escritor antioqueño Alberto Burgos, identificaba
el sonido de Medellín. La verdad es que fue un éxito
descomunal, “La piragua” se tomó todas las emisoras,
salas de baile, paseos, tabernas, carnavales, ferias, festiva-
les, constituyéndose en uno de los mayores éxitos de la
carrera de José Barros y de la música popular del país.
En los antecedentes que generaron la canción, hemos
encontrado una serie de elementos que pueden conside-
Homenaje al Maestro rarse insólitos. En una semblanza del maestro José Barros
que para el Ministerio de Cultura escribió el investigador
barranquillero Mariano Candela, revela que el maestro
Barros le confesó que Guillermo Cubillos, natural de
Chía, Cundinamarca, era un hacendado que, fascinado
dades, estudiosos del bolero, Jaime Rico Salazar, quien por las historias que escuchaba sobre el río Magdalena,
da como autor al cubano José Berroa y el cartagenero vendió una hacienda, vendió sus pertenencias, llegó a
Alfonso de la Espriella, quien lo atribuye al maestro Girardot, se embarcó en uno de los vapores que iban río
José Barros. La verdad, es que hay una serie de argu- abajo y se estableció allá en El Banco. Posteriormente
mentos encontrados y lo cierto es que curiosamente se casó, se radicó en Chimichagua, mandó a construir
en cualquier pasta prensada fuera del país (yo tengo una embarcación grande para la época, “La Piragua”
varias en mi archivo discográfico), muy claramente y efectuaba travesías de Chimichagua a El Banco. El
dan como autor a José Berroa, un cubano; en tanto que llevaba bagre salado, quesos y otros comestibles hasta
todos los discos que se han prensado aquí en Colombia Girardot, inclusive hasta Chía y de allá traía mercaderías
están rubricados con la autoría del maestro José Barros. para abastecer los mercados porteños. Declaró además
Una página más o una página menos ni le resta ni le el maestro Barros que “el temible Pedro Albundia”, fue
pone ni puede empañar las dotes artísticas del trovador una invención que respondió a una necesidad poética:
banqueño José Barros Palomino. buscando una palabra que rimara con cumbia, se le
ocurrió crear ese personaje casi mítico, Pedro Albundia.
VIII El maestro José en la tv “La Piragua”, impactó de tal manera la cultura del país,
que fue la música que se escuchó en el momento de la
En una de sus temporadas de descanso en el Banco, entrega del premio Nobel de Literatura a Gabriel García
José Barros conoció a una joven, una preciosa joven que Márquez en Estocolmo, en 1982.

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X Episodios de la vida sentimental cisco Zumaqué, describía de esta manera la grandeza
artística del maestro Barros: “Siempre me pareció un
La vida sentimental del maestro José Barros, fue un compositor extraordinario, que supo encontrar el
poco azarosa, como es frecuente entre los personajes tono preciso de la sensibilidad del pueblo colombiano,
del mundo artístico, de la vida bohemia. Siempre tenía con un lenguaje sencillo, poético, pero a la vez noble
un nutrido número de admiradoras a su alrededor. y no rebuscado. José Barros sabía encontrar el tono
En 1958 se casó en Bogotá con Julia Manzano con preciso de la tonada, es decir, encontraba fácilmente
quien tuvo 2 hijos: José y Sonia. Relativamente corta el matrimonio entre la parte lírica y la parte melódica,
fue esta relación del maestro Barros. Más adelante, en una cosa que no es muy clara en muchos compositores
Barranquilla, conoció a Amelia Caraballo. Cuatro hijos colombianos”. a
resultaron de esa unión: Adolfo, Alberto, Alfredo y Abel
Guillermo. Adolfo y Alberto Barros se dedicaron a la
música, como interpretes de diversos instrumentos y
herederos del temperamento artístico de su padre. En
1956, se separa José Benito de Amelia Caraballo, quien
al parecer fue la mujer que realmente lo llenó en su
vida sentimental. A raíz de la separación, que le causó
una enorme tristeza, compuso uno de sus pasillos más
conocidos y nostálgicos, “Pesares”:

¿Qué me dejó tu amor,


que no fueran pesares?
¿Acaso tú me diste
tan sólo un momento
de felicidad?
¿Qué me dejó tu amor?,
mi vida se pregunta.
Y el corazón responde:
“Pesares, pesares”

En el año 71, llega un nuevo amor a la vida del


maestro José Barros, Dora Manzano, con quien tuvo
sus tres últimos hijos, Katiuska, Veruska y Boris.

XI Epílogo glorioso
En sus últimos años, José Benito Barros recibió
múltiples homenajes y reconocimientos, entre ellos un
homenaje del Gobierno Nacional en el año 84, La Gran
Orden del Ministerio de Cultura en el 99, un reconoci-
miento de la Universidad Nacional de Colombia en el
año 2002 y en ese mismo año el premio Nacional Vida
y Obra, además del reconocimiento, la admiración y
el cariño de todo el pueblo colombiano, que lo quiere
y lo venera como una de sus grandes glorias.
Uno de los principales, si no el más importante
orquestador y arreglista colombiano, el maestro Fran-

A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7 205


N O T I C I A S

Taller del Caribe Colombiano En el mes de marzo, en virtud de un convenio rea-


lizado entre el Observatorio del Caribe Colombiano y
En un ejercicio intelectual sin precedentes en los la Universidad de Puerto Rico en Arecibo, se efectuaron
últimos tiempos, durante dieciocho meses el Observa- dos Cátedras en Cartagena y Barranquilla, respectiva-
torio del Caribe Colombiano, el Centro de Estudios mente. En la ciudad de Cartagena, en el Salón Daniel
Económicos del Banco de la República (CEER) y Fun- Lemaitre de la Cámara de Comercio, el historiador
desarrollo acometieron la tarea de reflexionar sobre las Carlos Altagracia Espada analizó los dispositivos parti-
políticas públicas que Colombia necesita para reducir culares de poder en Puerto Rico a inicios del siglo XIX,
las desigualdades regionales. en la ponencia titulada “La utopía del territorio perfec-
El proyecto, que se irradió a lo largo y ancho de tamente gobernado: miedo y poder en la época de Miguel
la Región Caribe, se desarrolló en cuatro etapas. En de La Torre, Puerto Rico 1822 – 1837” y en Barranquilla,
primer término, en agosto de 2006, se efectuó en Car- el 6 de marzo, en el Salón Múltiple del Teatro Amira
tagena un coloquio de economistas. Y seguidamente, de la Rosa, disertó sobre “Las máscaras de la identidad:
dos encuentros con empresarios y líderes gremiales. La poder y exclusión en la construcción de la identidad en
tercera etapa consultó las expectativas de este segmento América Latina del siglo XIX al XX”. Esa misma noche
geográfico, mediante la organización de ocho talleres en Barranquilla, el historiador José Rodríguez Vázquez
regionales, verificados en las ciudades capitales. En discurrió acerca de «La identidad nacional en el contexto
efecto, en un lapso de seis meses, amplios sectores aca- de América Latina, del siglo XIX al XX».
démicos, sociales, económicos, empresariales y políticos En el mes de abril el abogado, periodista y escritor,
se dieron cita para debatir los obstáculos al desarrollo Ramiro de la Espriella, en diálogo con su hija Claudia
social y económico y exponer recomendaciones sobre de la Espriella, especialista en literatura latinoameri-
áreas vitales para el progreso regional del Caribe. Por cana, presentó la “Imagen sensible de García Márquez”,
último, el 1 y 2 de noviembre, como colofón del año y una amena y pintoresca recreación de la figura y
medio de análisis, debates y diagnósticos, en la ciudad obra de nuestro Nobel de Literatura, a partir de la
de Barranquilla se verificó el “Taller del Caribe Colom- evocación juvenil del amigo que empezaba a dar sus
biano”. En este evento se propuso la creación de un primeros pasos literarios y periodísticos en Cartagena
fondo de compensación regional, la recomposición de y Barranquilla. Esta cátedra, gratamente saludada por
los patrones de crecimiento regional, la aceleración en la el público, se verificó el 17 de abril en Cartagena, en
lucha contra la pobreza, la ejecución de un amplio plan la Casa de Bolívar, y el 18 en Barranquilla, en el Salón
de nutrición infantil, la mejora sustancial del sistema Múltiple del Teatro Amira de la Rosa.
educativo, el fortalecimiento del campo científico y la Con ocasión del décimo aniversario del falleci-
innovación, y darle a la cultura y al ambiente catego- miento del poeta Raúl Gómez Jattin, el Observatorio
rías de medio y fin dentro de una nueva dimensión de del Caribe Colombiano y el Centro Cultural “Raúl
desarrollo. Gómez Jattin”, organizaron la Cátedra del Caribe “La
obra de Raúl Gómez Jattin, aniversario de su muerte”,
Cátedra del Caribe Colombiano que se realizó el 24 de mayo en Cereté, Córdoba.
Gabriel Ferrer, doctor en Letras Latinoamericanas e
En el curso del 2007 se realizaron 16 Cátedras del investigador de la literatura del Caribe colombiano,
Caribe Colombiano, en cinco ciudades de la Región. examinó el elemento vernáculo y visceral que caracte-

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rizó el lenguaje del poeta, abordando tópicos como la desarrolló el 26 de julio en Cartagena de Indias, en la
oralidad, la prisión, la zoofilia, la muerte, el tiempo y casa del Marqués del Premio Real, y el 27 de julio en
la memoria, entre otros. el municipio de San Juan Nepomuceno, en la sede de
En el marco de la Cátedra del Caribe Colombiano Corporación «Los 14». En ambas ciudades, el grupo
se presentó el libro La Ceiba de la Memoria, la más de gaitas Los Bajeros de la Montaña, representante del
reciente novela del escritor Roberto Burgos Cantor. folclor de los Montes de María, exhibió el trabajo inti-
El evento, realizado el 14 de junio en el Salón Daniel tulado “La acabación del mundo”, que corresponde al
Lemaitre de la Cámara de Comercio de Cartagena, CD No. 2 de esta serie musical. Como continuación
contó con la participación del periodista e historiador de este proyecto, el 30 de julio se realizó en la ciudad
Gustavo Bell Lemus y el crítico literario Ariel Castillo de Riohacha la presentación de Shivaldaman: Música
Mier, quienes analizaron la obra desde las perspectivas de la Sierra Nevada de Santa Marta. (Cd No. 3). Hay
histórica y literaria, respectivamente. En el evento, que destacar que, en el marco de este mismo evento,
el escritor Oscar Collazos y el poeta Rómulo Bustos efectuado en el Centro Cultural Departamental, se
deleitaron a la concurrencia leyendo fragmentos de la entregaron discos compactos a los familiares de los
novela. compositores de La Vieja Guardia de Riohacha: 1940-
Como resultado de un proyecto conjunto adelan- 72, cuyo material integra el primer disco de la serie
tado entre el Observatorio del Caribe Colombiano y la Oyendo el Caribe. Estas tres Cátedras fueron realizadas
Fundación de Música, y auspiciado por el Ministerio por Egberto Bermúdez, doctor en musicología e inter-
de Cultura, se lanzó la Colección Oyendo el Caribe, que pretación de música antigua en el King’s College de la
compila documentos sonoros de nuestras tradiciones Universidad de Londres, y cofundador de la Fundación
musicales, desde la indígena y afro-colombiana, hasta de Música. Vale destacar que la Colección Oyendo el
las tendencias de música popular internacional, fuer- Caribe también tiene previsto realizar una serie de
temente arraigadas en nuestra región. Esta Cátedra se grabaciones in situ sobre las tradiciones musicales

Foto 1 Foto 2
Ariel Castillo realizó la presentación de Durante el lanzamiento del libro La Ceiba de la Memoria, el poeta cartagenero, Rómulo
la conferencia. En la mesa principal José Bustos leyó algunos textos del más reciente libro de Roberto Burgos Cantor. También parti-
Rodríguez Vázquez, Madalina Barboza, ciparon Oscar Collazos, con la lectura de fragmentos; Gustavo Bell, Lemus, quien presentó la
Rafaela Vos Obeso y Weildler Guerra novela desde su visión periodística; Madalina Barboza Senior, directora del Observatorio del
Curvelo. Caribe Colombiano; el escritor Roberto Burgos Cantor y Ariel Castillo Mier, quien realizó la
presentación de la novela desde el punto de vista literario.

1 2

A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7 207


caribeñas, incluyendo el archipiélago de San Andrés 3
y Providencia. La colección incluye discos compactos
sobre la música de las comunidades Wayuu y las Kogui,
Ijka, Sanka y Kankuamo de la Sierra Nevada de Santa
Marta. Asimismo, documentos de la música folclórica
y religiosa (bautista, adventista, católica e islámica)
del archipiélago de San Andrés y Providencia. Adicio-
nalmente, se prevé una reedición actualizada de los
documentos grabados hace más de cincuenta años en
el Palenque de San Basilio (Bolívar), que constituiría
el aporte de la música afrocolombiana a esta excelente 4
colección.
La Cátedra del Caribe Colombiano, evento con-
certado con el Ministerio de Cultura, y apoyado por el
Sistema Universitario Estatal del Caribe, realizó el lan-
zamiento del libro Un Caribe sin Plantación, compilado
por Alberto Abello Vives, ex director del Observatorio
del Caribe Colombiano, el 23 de julio en San Andrés
Isla, el 7 de septiembre en Cartagena de Indias y el 17
de septiembre en Santa Marta.
5
Becas Héctor Rojas Herazo
Los proyectos Hitos históricos y urbanos del Caribe
colombiano. El barrio El Prado de Barranquilla, pre-
sentado por los investigadores Ricardo Adrián Vergara
Durán y Antonino Vidal Ortega y Saint Andrew
Island. Everything you have to know (San Andrés Isla.
Todo lo que debes saber), presentado por Luz Viana
Christopher Britton y Magda Masquita McKeller,
ganaron la novena convocatoria de las Becas de
Investigación “Héctor Rojas Herazo”, realizada por el
Observatorio del Caribe con el apoyo del Ministerio
de Cultura.
El primer trabajo determina la importancia de Foto 3
El Prado en la Barranquilla actual y establece en qué Ramiro de la Espriella en diálogo con su hija Claudia,
medida los problemas que afectan a este barrio son evocando desde su perspectiva del amigo de juventud y
compañero de ideas de García Márquez, los prodigio-
sintomáticos de la ciudad misma. De esta manera sos años cartageneros y barranquilleros del Nobel, sus
propone generar un espacio para el reconocimiento y lecturas e inicios periodísticos y literarios, y las pintorescas
la apropiación del valor patrimonial histórico, cultural anécdotas de juventud y sus amigos, fundamentales en la
y arquitectónico del barrio, antes de que sucumba ante renovación cultural y vital del Caribe colombiano.

los patrones de consumo del espacio, propios de la Foto 4


economía neoliberal. Público asistente a la Cátedra del Caribe “La obra de Raúl
El segundo trabajo investiga y devela aspectos his- Gómez Jattin, aniversario de su muerte”, que se realizó el
24 de mayo en Cereté, Córdoba.
tórico-geográficos del territorio de San Andrés Isla, con
el objetivo de transformarlos en herramientas significa- Foto 5
tivas para que los niños y niñas de la isla conozcan su Salvaguardia palenque

208 A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7


historia, y desarrollen y fortalezcan su identidad étnica mentación; la segunda, de preservación y conservación;
y cultural. Las autoras buscan fortalecer el sentido de la tercera, de apoyo a los actores del carnaval; y la
pertenencia e identidad de los sanandresanos, a través última, de divulgación.
de un texto educativo, dirigido a menores en edad El Observatorio del Caribe Colombiano realiza
escolar, que describa los aspectos primordiales de la actualmente un inventario de las diez expresiones
población nativa raizal sanandresana, tales como sím- más amenazadas del Carnaval de Barranquilla que
bolos emblemáticos, relieve, clima, fauna, superficie, se encuentren en particular riesgo de desaparición.
población, vivienda, comunicación y acontecimientos Este proyecto es dirigido por la investigadora cultu-
históricos referentes al descubrimiento, poblamiento y ral y psicóloga social con estudios de Antropología
formación de la cultura raizal de la isla. y Comunidad, Mirtha Buelvas. El inventario se está
adelantando a partir del concepto básico de patri-
Feria del Libro de Santo Domingo monio inmaterial señalado por la UNESCO. En este
proceso se emplean metodologías de grupos focales y
Bajo el lema “Colombia País Caribe”, nuestra talleres con académicos, lideres y juntas comunales,
nación asistió como invitada de honor a la X Feria lo que permite, además de identificar cuáles son las
Internacional del Libro de Santo Domingo, que se manifestaciones amenazadas e importantes para la
realizó del 23 de abril al 6 de mayo. El Observatorio comunidad, estimular su reconocimiento y valora-
del Caribe Colombiano participó activamente en ción.
dicho certamen con conferencias, paneles, exposi-
ciones y presentación de libros. Ariel Castillo Mier, SALVAGUARDIA DEL PALABRERO WAYUU
coordinador de la Cátedra del Caribe, presentó la
ponencia “Antes y después de García Márquez en las En el mes de marzo el Observatorio del Caribe
letras del Caribe colombiano” y Madalina Barboza, Colombiano, con el apoyo del Ministerio de Cultura,
directora ejecutiva (e) del Observatorio participó con realizó una serie de talleres en la ciudad de Riohacha, y
una disertación: “Detener la mirada para observar en las poblaciones de Uribia y Nazareth, que hacen
el Caribe: la experiencia vital del Observatorio del parte del Proceso de Identificación y Recomendaciones
Caribe Colombiano”. Adicionalmente se organizaron de Salvaguardia (PIRS) de la Institución del Palabrero
los paneles: Un Caribe sin Plantación, con la parti- Wayuu, exaltada como Bien de Interés Cultural de
cipación de María Teresa Ripoll, Adelaida Sourdis Carácter Nacional en noviembre de 2004. Este pro-
Nájera, Adolfo Meisel Roca y Gustavo Bell Lemus yecto abarcará todo el departamento de la Guajira, en
y Frontera Caribe, con la participación de Gustavo Colombia, y los municipios de Maracaibo, Mara y Páez,
Bell Lemus, Adolfo Meisel Roca, Weildler Guerra y en el territorio guajiro de Venezuela, donde reside un
María Teresa Ripoll. número significativo de esta etnia.
El palabrero es un patrimonio Cultural Inmaterial
3 proyectos de Salvaguardia del Pueblo Wayuu, que ancestralmente ha basado su
existencia en el sistema de compensaciones. Los pala-
%*&;&913&4*0/&4".&/";"%"4%&- breros wayuu, asociados a los pájaros por su despliegue
CARNAVAL DE BARRANQUILLA retórico, actúan como intermediarios y conciliadores
en la solución de disputas interétnicas, con un poder
Con el objeto de proteger y revitalizar el Carnaval de ejercicio de influencia que a veces les permite ser
de Barranquilla como espacio cultural hasta el año 2013, algo muy semejante a unos “árbitros”.
se puso en marcha la primera etapa del Plan Decenal En el caso del Palabrero wayuu, este proyecto de
de Salvaguardia en el que intervienen el Observatorio “salvaguardia” busca garantizar la viabilidad de un
del Caribe Colombiano, el Parque cultural del Caribe, patrimonio cultural inmaterial, en términos de identi-
la Fundación Carnaval de Barranquilla y el Instituto ficación, documentación, investigación, preservación,
Distrital de Cultura de Barranquilla. Este Plan consta protección, promoción, valorización, transmisión y
de cuatro etapas: la primera, de investigación y docu- revitalización.

A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7 209


SALVAGUARDIA DE SAN BASILIO DE PALENQUE rio “Desarmar el lenguaje para hablarnos de paz”,
dirigido por el investigador y antropólogo Weildler
El Observatorio del Caribe y la Universidad de Guerra Curvelo. Posteriormente, en la conferencia
Antioquia, con el apoyo del Ministerio de Cultura, “La investigación en el Caribe colombiano”, Weildler
avanzan en el Proceso de Identificación y Recomenda- Guerra y Alberto Abello, ex directores del Observatorio,
ciones de Salvaguardia de las manifestaciones asociadas disertaron sobre el desarrollo de la investigación en el
a San Basilio de Palenque, como espacio cultural de Caribe colombiano, y el desempeño del Observatorio
excepcional valor para el patrimonio oral e intangible en este sentido.
de la humanidad, 2005-2010.
Este proceso, que tiene una duración de nueve Desarrollo fronterizo en La Guajira
meses, pretende generar un espacio de participación
comunitaria la población palenquera e identificar, prio- El Observatorio del Caribe Colombiano, en
rizar y documentar las manifestaciones que componen convenio con la Gobernación de La Guajira, efectuó
el patrimonio inmaterial de San Basilio de Palenque la identificación de temas, sectores y proyectos que
-tradición oral, prácticas asociadas al ritual del lumbalú, puedan ser desarrollados conjuntamente por Colombia
medicina tradicional, expresiones asociadas al tambor-, y Venezuela, en procura de una integración fluida en
y elaborar un plan de recomendaciones de salvaguardia aspectos sociales, culturales, económicos y ambienta-
de esas manifestaciones. les, aprovechando las potencialidades que presenta la
región fronteriza.
Leer el Caribe Las investigaciones presentadas el mes de mayo
en la ciudad de Riohacha fueron: “Estudio sobre el
En su primer lustro de actividades, el programa desarrollo de la Zona de Integración Fronteriza (ZIF)
Leer el Caribe, que divulga y fomenta la lectura entre entre el departamento de La Guajira en Colombia y el
niños y jóvenes a través de los escritores regionales, estado Zulia en la República Bolivariana de Venezuela:
tributó en el año 2007 un homenaje a Gabriel García antecedentes e identificación de temas y proyectos priori-
Márquez. tarios”, a cargo del Grupo Regional de Investigación en
El proyecto centró sus actividades en la obra cuen- Economía y Competitividad en el Caribe colombiano,
tística del Nobel, desde 1947 hasta los cuentos más del Observatorio del Caribe Colombiano y “Proyecto
recientes que aún no han sido reunidos en libros. En de Integración Fronteriza para el departamento de La
efecto, Ariel Castillo Mier, conferencista y profesor, Guajira”, realizado por la firma consultora Araujo
analizó la evolución temática y estilística de García Ibarra & Asociados, contratada por el Observatorio
Márquez, señalando sus aportes a la narrativa con- del Caribe Colombiano.
temporánea en Colombia. Del 22 al 24 de febrero, en
la Casa de Bolívar, Castillo Mier compartió sus cono- Lanzamiento del libro
cimientos sobre Gabo con los docentes de la red de Un Caribe Sin Plantación
educadores de castellano del Distrito de Cartagena. En
este programa participaron el Observatorio del Caribe Las memorias de la primera versión virtual de la
Colombiano, el Banco de la República, la Universidad Cátedra del Caribe Colombiano, fueron recogidas en
de Cartagena y la Secretaría de Educación Distrital. el libro Un Caribe sin Plantación. Esta idea fue desarro-
llada por la Universidad Nacional de Colombia, Sede
El Observatorio del Caribe en el Caribe, y el Observatorio del Caribe Colombiano,
IV Congreso de la Lengua Española entidades que han unido esfuerzos para estudiar las
relaciones e intercambios que hay entre esta región de
En el marco del IV Congreso de la Lengua Espa- Colombia y el Gran Caribe.
ñola y la III Feria del Libro, realizados en Cartagena El lanzamiento de la obra se realizó en tres ciudades
de Indias entre el 26 al 29 de marzo, el Observatorio del Caribe: en San Andrés Islas, el 23 de julio, en la sede
del Caribe Colombiano participó con el conversato- de la Universidad Nacional; en Cartagena de Indias, el 7

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de septiembre en la Casa del Marqués del Premio Real; José Polo Acuña y Marta Herrera Ángel, vinculados a
y, en Santa Marta, el 17 de septiembre, en la Quinta de la Universidad Nacional, la Universidad de los Andes,
San Pedro Alejandrino. En la ciudad de Cartagena, se el Banco de la República, la Universidad Jorge Tadeo
presentó conjuntamente el libro La región y sus orígenes, Lozano, la Universidad de Cartagena y la Universidad
publicado por el Parque Cultural del Caribe, en su Tecnológica de Bolívar. A los autores, entre los que
colección Manglaria. Ambos libros fueron presentados se encuentran historiadores, economistas, geógrafos
por el periodista, abogado, historiador y director del y biólogos, los une su objeto de estudio, el Caribe
periódico El Heraldo, Gustavo Bell Lemus. colombiano, y la pertenencia a la Red Ocaribe de
Un Caribe sin Plantación, compilado por el eco- investigadores, coordinada por el Observatorio del
nomista, investigador y ex director del Observatorio Caribe Colombiano.
del Caribe Colombiano, Alberto Abello Vives, reúne
las participaciones en el debate sobre la inexistencia GEO Cartagena
del sistema de plantaciones esclavistas y azucareras en
el Caribe neogranadino durante el periodo colonial, El Programa de las Naciones Unidas para el Medio
por parte de ocho investigadores y profesores, Ernesto Ambiente (PNUMA), la Alcaldía Distrital de Carta-
Bassi Arévalo, Adelaida Sourdis Nájera, María Teresa gena a través del Establecimiento Público Ambiental
Ripoll, Adolfo Meisel Roca, Germán Márquez Calle, (EPA) y el Observatorio del Caribe Colombiano,

6 7

8
Foto 6
Cátedra Leer el caribe

Foto 7
Geo Cartagena

Foto 8
Después de la presentación de la Serie Oyendo el Caribe,
por Egberto Bermúdez, el grupo de gaita “los Bajeros de
la Montaña”, ofrecieron un concierto al público asistente.
El evento se realizó en la Casa del Marqués del premio
Real, en la Plaza de la Aduana.

A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7 211


iniciaron el proceso para la preparación del informe 9
Perspectivas del Medio Ambiente Urbano, GEO
Cartagena, con el fin de entender mejor las dinámicas
ambientales de la ciudad y suministrar información
confiable y actualizada que permitan optimizar la
gestión ambiental urbana.
El 25 y 26 de julio, en el Palacio de la Inquisición,
se realizó el Taller de Revisión y Validación, en el que
los asistentes trabajaron el borrador del informe final,
debatiendo sobre los principales problemas ambien-
tales que afectan a la ciudad, en su orden: ocupación
de zonas de alto riesgo, deterioro de los cuerpos de
agua y escasez de áreas verdes en virtud de la creciente
expansión urbana y la población.

Simposio de Historia de Cartagena 10

Del 12 al 14 de septiembre se realizó en el Teatro


Heredia “Adolfo Mejía”, el VII Simposio sobre la
Historia de Cartagena, “La Ciudad en la época de la
Independencia 1808- 1821”, evento fue organizado por
el Área Cultural del Banco de la República y el Obser-
vatorio del Caribe Colombiano.
El encuentro reunió a un destacado grupo de espe-
cialistas que examinó la vida de Cartagena durante este
período, desde diversos ángulos: vida política, econó-
mica y social de la ciudad durante la Independencia,
aspectos militares, el sitio de Morillo, la iconografía
de la época, las fiestas de la Independencia, la arqui-
tectura, la literatura y prensa. Durante los tres días
del Simposio, intervinieron notables investigadores
nacionales como Eduardo Posada Carbó, Isidro Vane-
gas, Armando Martínez, Ernesto Bassi, Javier Ortiz,
Renán Silva, Joaquín Viloria, Raúl Román, Adelaida
Sourdís, Luis Alarcón, Rodolfo Segovia, Adolfo Meisel, Foto 9
Salomón Kalmanovitz, Haroldo Calvo, Marco Palacio, A la Cátedra del Caribe “Un Caribe sin Plan-
Alberto Samudio, Germán Bustamante, Ariel Castillo, tación” asistieron Madalina Barboza, Directora
del Observatorio del Caribe Colombiano,
Maria Teresa Ripoll, Beatriz González, Gina Ruz, Carmen Arévalo, directora del Parque Cultural
Alberto Abello, Margarita Garrido, Catalina Reyes, del Caribe, Gustavo Belll Lemus, quien realizó la
Gustavo Bell, Jaime Jaramillo Uribe y Jorge Orlando presentación del libro y los autores María Teresa
Melo. Entre los historiadores extranjeros, participaron Ripoll, Adolfo Meisel Roca y José Polo.
Manuel Lucena, Inés Quintero, Rebeca Earle, Marixa Foto 10
Lasso, Steinar Saether, José Manuel Serrano y Anthony Alberto Abello, compilador del libro “un Caribe
McFarlane. sin Plantación”

212 A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7


A U T O R E S

Julio Oñate Martínez Paola Quintero Puentes.


Nació en Villanueva, Guajira el 13 de febrero pquintero@ocaribe.org
de 1942. ingeniero agrónomo de la Universidad del Economista y Magíster en Estudios del Caribe de
Tolima; Compositor popular, ganador de varios festi- la Universidad Nacional de Colombia. Experiencia en
vales de Canción Inédita. Estudioso de los ancestros procesos investigativos, de planeación estratégica y de
musicales, no sólo del vallenato sino de los diferentes formulación y gestión de proyectos. Fue asistente de
aires del Caribe y sus intérpretes. Premio Nacional de investigación del grupo Economía y Sociedad de la
Periodismo Simón Bolívar 2007 por un trabajo radial Universidad Nacional de Colombia Sede San Andrés.
sobre la vida del compositor José Barros cuya versión En el área de gestión cuenta con la experiencia como
escrita presentamos en este número de Aguaita. Entre asesora de la Dirección de Gestión de la Sede Bogotá
sus composiciones se destaca “La Profecía”, un paseo y como asesora de la Dirección Nacional de Inves-
de tema ecológico que advierte sobre el avance del tigación de la Universidad Nacional. Durante su
desierto de la Guajira debido a los daños ocasionados vinculación al Observatorio del Caribe Colombiano
por los algodonales y otros cultivos comerciales. Ha (2004 – septiembre de 2007) participó en el Grupo
publicado dos libros como resultado de sus investiga- de investigación sobre economía y competitividad del
ciones folclóricas: El ABC del vallenato (2003) y Cuando Caribe en proyectos sobre turismo y desarrollo fronte-
Matilde camina (2006) rizo. En 2007 el Programa de Becas Alban de la Unión
Europea la seleccionó para realizar un Máster Oficial
Julio Marino Barragán en Planificación Territorial y Desarrollo Regional en
Santa Marta. Antropólogo de la Universidad de los la Universitat de Barcelona (España), el cual está ade-
Andes. Hace más de 20 años es asesor de la organización lantando actualmente.
Gonawindúa Tayrona de la que forman parte los grupos
indígenas de la sierra nevada de Santa Marta. Jorge Quintero Otero
jquintero@ocaribe.org
Dairo Barriosnuevo Montería, 1982. Economista de la Universidad
dbarriosnuevo@hotmail.com de Cartagena. Está vinculado al Observatorio del
Nacido en Guaranda (Sucre) el 5 de octubre de Caribe Colombiano como investigador económico y
1968. Estudia Artes Plásticas en la Escuela de Bellas es docente catedrático de la Universidad de Cartagena.
Artes de la Universidad del Atlántico. Ha participado En el año 2004 fue seleccionado por Colciencias como
en diversas exposiciones colectivas desde 1987 e indivi- beneficiario del programa jóvenes investigadores e
duales desde 1993. Ha publicado crónicas y ensayos en innovadores. Ha publicado diversos estudios, entre
la prensa de Barranquilla. Su obra recrea reiteradamente ellos: Competitividad en la industria manufacturera de
el ámbito de la cultura popular de las verbenas, los picós Cartagena de Indias: un análisis de eficiencia técnica en
y los bailadores. el período 2001-2004; Eficiencia técnica y cambio en la

A G U A I T A QUINCE - DIECISÉIS / DICIEMBRE 2 0 0 6 - JUNIO 2 0 0 7 217


productividad en las empresas turísticas de Cartagena, Gerson JavierPérez
2001-2004: ¿Qué tan competitivos son los hoteles y las gperezva@banrep.gov.co
agencias de viajes locales?; Eficiencia en costos en el Economista y Magíster en Economía de la Uni-
Sistema Bancario Colombiano, 1989-2003; Indicador versidad del Rosario, actualmente adelanta estudios
global de competitividad para Cartagena de Indias 2006; de posgrado en Economía en la Universidad de
y El rompecabezas de la investigación económica en el Essex, Inglaterra. Editor del libro Microeconomía de la
Caribe Colombiano: Balance de la última década. Ganadería en Colombia, y autor de varios artículos en
temas de Economía Regional, ha sido profesor en las
Roger Pita Pico Universidades del Rosario, Javeriana y Tecnológica de
rogpitc@hotmail.com Bolívar. Actualmente pertenece al Centro de Estudios
Politólogo de la Universidad de los Andes Magíster Económicos Regionales (CEER) del Banco de la Repú-
en Estudios Políticos de la Universidad Javeriana Espe- blica en Cartagena. Una versión del artículo incluido
cialista en Política Social de la Universidad Javeriana en esta revista fue publicada en la serie Documentos
Actualmente trabajo como consultor de la Escuela de Trabajo Sobre Economía Regional del Banco de la
Superior de Administración Pública. República – Sucursal Cartagena.
María Salud Elvás Iniesta
ms_elvas@us.es Hugo Chaparro Valderrama
(Sevilla, 1979). Licenciada en Historia (Itinerario Nació en Bogotá, en 1961. Es escritor, historiador
Curricular en Historia de América) por la Universidad y crítico cinematográfico y literario. Ha publicado las
de Sevilla en 2002. Obtuvo el Diploma de Estudios novelas El capítulo de Ferneli (1992) y Si los sueños me
Avanzados en julio de 2006. Actualmente, es alumna llevaran hacia ella (1999); los libros de ensayos Lo viejo
de Tercer Ciclo en la Universidad de Sevilla, realizando es nuevo y lo nuevo es viejo y todo el jazz de New Orleans
su Tesis Doctoral titulada Sociedad y Vida Cotidiana es bueno (1992); Alfred Hitchcock. El miedo hecho cine
en Cartagena de Indias, 1580-1640, bajo la dirección de (2005) y Del realismo mágico al realismo trágico (2005);
la Dra. Carmen Gómez Pérez, Profesora Titular del dos libros de poemas que han merecido el Premio
Departamento de Historia de América de la Universi- Nacional de Poesía otorgado por el Ministerio de
dad de Sevilla. Asistente Honorario del Departamento Cultura de Colombia: Imágenes de un viaje (1993) y
de Historia de América de la Universidad de Sevilla, Para un fantasma lejano (1998); un cuento infantil, El
desde el año 2003. Becaria del Smithsonian Tropical amor de una jirafa (2004), y una antología de testimo-
Research Institute, entre septiembre de 2003 y octubre nios cinematográficos, El evangelio según Hollywood
de 2005, bajo la dirección del Dr. Héctor Guzmán. (2005). Fue becario del International Writing Program
Además de su Tesis Doctoral, es documentalista histó- de la Universidad de Iowa (Estados Unidos) durante el
rico y experta en la búsqueda documental en los fondos otoño de 2002. En la actualidad prepara la publicación
del Archivo General de Indias de Sevilla. de una novela sobre el México rural de los años veinte
y es director de los Laboratorios Frankenstein.
Ernesto Bassi Arévalo.
ebassi@hotmail.com Gabriel Alberto Ferrer Ruiz
Economista de la Universidad de Los Andes con sinuario@yahoo.com
maestría en Historia de América Latina del Instituto de Poeta e investigador de la literatura del Caribe
Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Londres colombiano. Docente de la Universidad del Atlántico. Ha
y magíster en Historia del Mundo Hispánico del Con- publicado los libros de poemas Veredas y otros poemas y
sejo Superior de Investigaciones Científicas de Madrid, Sinuario y los ensayos Etnoliteratura wayuu. Magister en
España. Actualmente realiza estudios de doctorado en la Literatura Latinoamericana del Instituto Caro y Cuervo y
Universidad de California, Irvine. Ha sido profesor del Doctor en Letras de la Universidad Nacional Autónoma
departamento de historia de la Universidad de Los Andes de México, dirige el Centro de Estudios e Investigaciones
y pasante del Observatorio del Caribe colombiano. Literarias del Caribe (Ceilika) y la revista Cuadernos de
Literatura del Caribe e Hispanoamérica.

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Alberto Abello Vives Manuel Guillermo Ortega Hernández
aabello@unitecnologica.edu.co (Guillermo Tedio)
Santa Marta, Magdalena. Economista de la manuel.ortegah@telecom.com.co
Universidad Externado de Colombia. Magíster en Profesor titular de la Universidad del Atlántico.
Estudios del Caribe de la Universidad Nacional de Magister en Literatura Latinoamericana del Instituto
Colombia. Especialista en Formulación y Evaluación Caro y Cuervo. Cuentista, ha publicado dos libros de
de Proyectos de Inversión de la Universidad del Norte. cuentos, La noche con ojos y También la oscuridad tiene
Posgrado en Métodos y Técnicas de Investigación su sombra y numerosos ensayos de crítica literaria en
Aplicadas a las Ciencias Sociales y la Educación (Uni- diversas revistas de Colombia y el exterior. Director
versidad de Cartagena/PIIE Chile/Icfes). Ex director del Grupo de Investigación Literaria (Gilkarí), inscri-
del Observatorio del Caribe Colombiano. Miembro tos en COLCIENCIAS, en categoría A, y de la revista
de la red Ocaribe de investigadores. Actualmente es electrónica lacasade asterion.homestead.com.
el Decano de la Facultad de Ciencias Económicas y
Administrativas de la Universidad Tecnológica de Ariel Castillo Mier
Bolívar. Autor y compilador de varios libros entre los facasil@metrotel.net.co
que se encuentran: La región y la economía mundial. Licenciado en Filología e Idiomas de la Uni-
Cedetrabajo. Bogotá. 1997; El Caribe colombiano, la versidad del Atlántico con estudios de Maestría en
realidad regional al final del siglo XX. Coordinador Letras Iberoamericanas en la Universidad Nacional
con Cecilia López Montaño. DNP. Observatorio del Autónoma de México y de doctorado en Letras His-
Caribe colombiano. Tercer Mundo. 1998; La Costa pánicas de El Colegio de México. Miembro del Grupo
que queremos, reflexiones sobre el Caribe colombiano de Investigación Literaria (Gilkarí), profesor de la
en el umbral del 2000. Coeditor con Cecilia López Universidad del Atlántico, coordina la Cátedra del
Montaño. DNP. Universidad del Atlántico, Obser- Caribe Colombiano, programa del Observatorio del
vatorio del Caribe colombiano. 1998; Directorio de Caribe Colombiano y editor de la revista Aguaita del
profesionales para la investigación en el Caribe colom- Observatorio del Caribe Colombiano. Premio Nacio-
biano. Fonade. Observatorio del Caribe Colombiano. nal de Periodismo Simón Bolívar (2002). Compilador
1998; Estructura industrial del Caribe colombiano de Respirando el Caribe. Memorias de la Cátedra
(19741996). Coautor y director de la investigación. del Caribe Colombiano y Feedback Editor y prolo-
Observatorio del Caribe Colombiano. 2000. Pobla- guista del libro de crítica literaria de Carlos J. María,
miento y Ciudades del Caribe colombiano. Compila- Feedback. Notas de crítica literaria y literatura colom-
dor conjuntamente con Silvana Giaimo. Observatorio biana antes y después de García Márquez, (1997); del
del Caribe Colombiano. 2000; El Caribe en la Nación diccionario de Adolfo Sundheim, Vocabulario costeño
Colombiana; compilador. Memorias de la X Cátedra o lexicografía de la región septentrional de la República
Ernesto Restrepo Tirado del Museo Nacional y el de Colombia (1998); de Respirando el Caribe. Memorias
Observatorio del Caribe Colombiano. Bogotá (2006). de la Cátedra del Caribe Colombiano (2001) y coeditor
Director de la revista Economía & Regiones de la del libro Meira Delmar Poesía y Prosa, (2003).
facultad de Ciencias Económicas y Administrativas
de la Universidad Tecnológica de Bolívar, exdirector Francisco Avella Esquivel
de la revista Aguaita del Observatorio del Caribe favellae_@yahoo.com
Colombiano y cofundador de la revista RegionEs Geógrafo, Profesor Asociado. Secretario de Sede,
(Crece, Iner, Observatorio del Caribe Colombiano). Instituto de Estudios Caribeños Universidad Nacio-
Fue asesor cultural de Expo Caribe Espléndido del nal de Colombia, Sede Caribe. Sociólogo, Univer-
Museo Nacional y del proyecto de la Casa Museo de sidad Nacional De Colombia - Bogotá, Colombia
GGM en Aracataca. . Especialista en Cider - Universidad Los Andes,
Colombia, Maestría/Magíster en Uer 08 Epistemolo-
gie e Histoire de La Géographie -Universite de Paris
I (Pantheon-Sorbonne), U.P. I, Francia. Doctorado

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en Etudes de L’amerique Latine Et Des Caraïbes Álvaro Medina
- Universite de Paris III (Sorbonne-Nouvelle), U.P. almedinama@gmail.com
III, Francia. Nació en Barranquilla en 1942. Profesor de
Historia del Arte, vinculado al Instituto de Inves-
James J. Alstrum tigaciones Estéticas de Universidad Nacional de
New Haven, Connecticut, 1946. Licenciado en Bogotá. Arquitecto, narrador y crítico e historiador
Español de la Universidad de Fairfield. Magister y del arte. En los años sesenta militó en el movimiento
Doctorado en Español y Literatura Hispanoameri- nadaísta y escribió en las prensa barranquillera con
cana de la Universidad de Vanderbilt. Profesor de el seudónimo “José Gabriel Jorge”. Integrante de la
Illinois State University desde 1981. Ha publicado Comisión Coordinadora del Suplemento del Diario
La sátira y la antipoesía de Luis Carlos López (1986) del Caribe, 1973-1979. Autor de Procesos del arte en
y La generación desencantada de Golpe de Dados. Colombia, 1978; El arte colombiano de los años veinte y
Ha publicado ensayos sobre prosa y poesía hispa- treinta, 1994, premio nacional de cultura Colcultura;
noamericana y colombiana en Boletín Cultural y Desierto en sol mayor (novela, 1993), y Edgar Negret
Bibliográfico, Hispania, Chasqui, Letras Nacionales, (monografía). Ha residido gran parte de su vida en
Revista de Estudios Colombianos, Hojas Universitarias los Estados Unidos y Francia, Finalista en el Premio
y Thesaurus, entre otras. Biblioteca Seix Barral con una novela aún inédita,
Papa Rey. Desarrolla en la actualidad una investiga-
Elisabeth Cunin. ción sobre el arte prehispánico en América.
Elisabeth.Cunin@ird.fr
Socióloga. Diplomada por el Departamento Nelly García Gavidia
de Ciencias Sociales y Económicas de la Escuela Nacida en la ciudad de Cabimas. Licenciada en
Normal Superior de París. Doctora en Sociología Filosofía en la Universidad del Zulia. Doctora en
de la Universidad de Toulouse II (2000). Profesora Sociología de la Universidad de París VII, en la cual
asistente en el Instituto de Altos Estudios para Amé- obtuvo la especialidad en Etnología y la diplomatura
rica Latina –IHEAL- de la Universidad de París III en Sociología de las Religiones. Profesora titular en la
(1999 – 2001) e investigadora del Instituto Francés de Universidad del Zulia donde coordina la Maestría en
Estudios Andinos en Bogotá (2002). Actualmente se Antropología. es investigadora adscrita al Laborato-
desempeña como investigadora del Instituto de Inves- rio de Antropología Social y Cultural de la Facultad
tigaciones para el Desarrollo –Institut de Recherche Experimental de Ciencias.
pour le Developpement, IRD-. Es investigadora
asociada del Instituto Colombiano de Antropología Carlos Adán Valbuena Chirinos
e Historia –ICANH-. Ha publicado en diversas carlosvalbuenaster@gmail.com
revistas científicas, tales como Aguaíta, Virajes, Nace en la ciudad de Maracaibo. Licenciado
Revista Colombiana de Antropología, Beyon Law, en Comuicación Social, en la mención Desarrollo
Cahiers des Ameriques Latines, entre otras. Su libro, Comunitario. Magíster Scientiarum en Antropo-
publicado en un esfuerzo conjunto por el Instituto logía Social y Cultural de la Universidad del Zulia.
Colombiano de Antropología e Historia –ICANH–, Se desempeña como Director de Información y
la Universidad de Los Andes, el Instituto Francés Publicaciones de la Secretaría de Cultura del Estado
de Estudios Andinos y el Observatorio del Caribe Zulia. En su carrera académica ocupa la categoría de
Colombiano, titulado “Identidades a flor de piel. Lo profesor agregado en la Facultad de Humanidades
“negro” entre apariencias y pertenencias: categorías y Educación de la Universidad del Zulia, donde es
raciales y mestizaje en Cartagena”, es reseñado en además Jefe de la Cátedra de Antropología Cultural
esta nueva edición de Memorias. del Departamento de Sociología y Antropología. Es
investigador adscrito al Laboratorio de Antropología
Social y Cultural de la Facultad Experimental de
Ciencias

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Carlos Dávila Ladrón de Guevara
Profesor titular de la Facultad de Administración
de la Universidad de los Andes Ph.D. y M.A. de la
Universidad de Northwestern

Patricia Iriarte Diaz Granados


orianauta@yahoo.es
Sincé. Comunicadora Social de la Universidad
Jorge Tadeo Lozano de Bogotá. Tesista de la Maestría
en Estudios del Caribe de la Universidad Nacional.
Investigadora del Grupo Regional de Investigación
en Cultura y Sociedad, del Observatorio del Caribe
Colombiano. Ha publicado dos poemarios: Mal de
amores (1992) y Territorio de delirio (1998) y cuenta con
un tercer libro inédito. También es autora del Manual
para cubrir la guerra y la paz (1999) y del reportaje
biográfico a Totó La Momposina Totó, nuestra diva
descalza (2004), trabajo ganador de una Beca Nacional
de Creación del Ministerio de Cultura en el 2001, en
la categoría de Periodismo escrito. Ha sido periodista,
editora y realizadora audiovisual y ha estado vinculada
a diversos proyectos museográficos de la región. Actual-
mente se desempeña como coordinadora de contenidos
del Museo del Caribe, proyecto central del Parque
Cultural del Caribe, en Barranquilla.

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