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LUIS GÜEMES

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PLUS ULTRA

TOMO 7
El retrato de Güemes que aparece 'en la tapa, fue reconocido
como el más fidedigno por el Poder Ejecutivo de Salta, el 6 de
junio de 19G5 previa consulta a "eminentes autoridades en la ma-
teria, como el doctor Luis Güemes (biznieto del héroe) y el doctor
Atilio Cornejo". Y "por ello cl Gobernador de la Provincia decreta:
-
Articulo 19 Disp6nese la certificación y declárese legalizado
el retrnto del general Martín Miguel de Güemes, realizado por el
afamado artista don Eduardo Schiaffino, en mérito n las conside-
raciones expuestas precedentemente". ;

Qucda hecho el depósito que previene la ley 11.723


Impreso en la Argentina - Printed in Arsentina

@ 1982 by Editorial PLUS ULTRA


VIABIONTG 1765, 1058 ~ u e n o sAires
INDICE

PAC.
1. Genealogía paterna . . . . . . . . . .~ . . . . . 13
2. Personalidad del padre . . . . . . . . .i .
1
I . . . . 77
3 . Genealogía materna . . . . . . . . . . . . . . . 217
4. Cntolicidnd de Ciiemes . . . . . . . . ., .
1
. . . . 349
a ) Güemes y el Arzobispo Mojó y Francolí . . . . . . . 353
b) Güemes promueve la construcción de una capilla en El Chnmical 399
G. Uniformes, chabrnc y sable de Güemes . . . . . . . . . 405

C. Premios "a los salteños que estHn sobre las armas" . . . . . 417
7. Fuero gaucho . . . . . . . , . . . . . . . . . 435
"La familia ilustrisima del apellido de Giiemes es d e
las más antiguas y nobles de los reinos de España, tanto
que memoria de hombre n o prnetra cuando tuvo principio
esa nobleza, sino que la tienen desde a l initio y la han
conservado y realzado con mucho valor. ..,siendo de sus
ramas la de mayor esplendor, continuada nobleza y pro-
gresos señalados la radicada e n el lugar de Abionzo valle
de Cam'edo de las montaCas de i?urgos!*

" E s principio sentado que todos los hombres son y fue-


ron unos como fornrados de una misma materia, y , siendo
por naturaleza iguales, la Virtud y Valor personal los hizo
ser conocidos, nobles y afaniados!. . ... que siendo los
hombres e n el origen iguales, los i comcnrd a distinguir
de los demás, que de otra suerte degeneraran de s u pri-
m e r esplendor y virtud; el noble pasara a plebello, e l ca-
ballero a villano, y el hidalgo a mecánico, porque la noblezu
es u n cuchillo que le ha hecho de finísimo temple el largo
uso y m no se ejercita pierdr lo8 filos se embota!'

Tomados del expediente de don Leonardo


de Cüemes CutiGrrez y de la Iluerta.
afio 1740, Legajo nP 11.805 existente en
la Biblioteca de Mndrid. Fotocopia en
N. A.
Escudo partido en pal; el primer cuartel de mani derecha. en campo
de oro, cruz ancha de veros azulcs y de plata; el segundo cuartel de la
izquierda, en azul castillo de oro. Eorclura general do gules con ocho so-
tueres de oro.
GENEALOGIA PATERNA
Acerca de la genealogia paterna del ~ e i e r a lGüemes, pre-
sentamos la siguiente documentación: !

1. Don Gabriel de Güemes Montero, padre del general y de


quien nos ocuparemos en el capítulo "Personalidad del padre",
trajo al venir de España un expediente (cuyo original obra en
N.A.) promovido por él mismo y por s u hermano Manuel p a r a
acreditar filiación. I
Consta de dos partes: I

a ) ''Faltan por haberse roto: 19, la solicitud de los herma-


nos BZanuel y Gabriel Güemes Montero, con que iniciaron ellos
este expediente; 29, las partidas de bautismo de los mismos Ma-
nuel y Gabriel, que debían ser las primeras en el cxpcdiente: y
39, la partida de casamiento de Manuel Güemes y de Francisca
Bárcena, padres de Manuel y Gabriel, de la cual parece ser parte
el final de partida con que comienza el expediente!' D.G.
Por gentileza del muy acreditado genealogista santanderino
presbítero Mateo Escagedo Salmón, quien en 1933 nos remitió
copias selladas de todas las partidas del cuerpo del expediente
a que acabamos de referirnos, e inclusive aquellas que D. G. echa
de menos, y también gracias a l testimonio autenticzdo que ob-
tuvimos en 1968 del Archivo de la Real Chancillería de Valla-
dolid de la "Real Provisión de Hidalguía ganada por don Alanucl
y don José de Güemes, vecinos de Madrid y naturales de Abionzo,
Santander, año 1785, legajo 1165, nV 8", pudimos completar la
documentación faltante. Los tres promotores de estos dos expe-
dientes aquí citados, eran, con Juan, hermanos entre sí. Así
consta en la nombrada Real Provisión. Aparte de ello, Gabricl,
padre del general Güemes, en su testamento nombra como her-
mano a Manuel. Sabemos que este último mantenfa correspon-
dencia, desde Madrid, con Gabriel quien al promoverse el se-
gundo expediente ya residía en Ambrica. I
E n la "Real Provisión" mencionada se acredita cómo don
Manuel de Güemes era "Tesorero del Monte Pío del Ministerio
de dentro y fuera de la Corte" y "don Jos6 de Güemes su her-
mano oficial de l a Secretaría del Consejo Extraordinario, vc-
cinos de la Villa de Madrid y naturales del lugar de Abionzo,
Valle de Carriedo, hijos legítimos d e don Manuel de Güemes y
doña Francisca de Eárcena, nietos también legítimos de otro
don Manuel dc Güemes y doña María de Eárcena y segundos
nietos con la misma legitimidad de don Juan de Güemes y de
doña Francisca Campero dc la Concha, difuntos vecinos que fue-
ron, todos del citiqdo lugar de Abionzo: digo que mis partes por
s í y los mencionados su padre, abuclo, bisabuelo y dem6s cau-
santes son y cada uno en su tiempo fueron hijosdalgo notorios
de sangre, en cuya posesión quieta y pacifica han estado y es-
tuvieron cada uno en su tiempo gozando de sus honores y pre-
eminencias sin pechar ni contribuir e n repartimientos y cargas
del estado llano, en el referido lugar y Valle, y demás pueblos
donde tuvieron vecindad y bienes"'. . . i
b) Certificaciones del "estado" de "hijosdalgo", el cual, en
los padrones del lugar de Abionzo de los años 1686 a 1770, co-
rrespondió a los padres, abuelos y segundos abuelos de los pe-
ticionantes. El legajo 1165, n9 8, ya mencionado en a, además
de confirmar estas certificaciones, extiende sin excepción tal
estado de hidalguía a todas las personas de nuestro cuadro si-
nóptico. El reputado genealogista don !Fernando Muñoz Altea,
"Rey de Armas de S. A. R. el Príncipe, don Raniero de Borbón
dos Sicilias", "Caballero de la Orden! Constantiniana de San
Jorge", "Caballero Mozárabe", etc., etc., que fue quien gestionó
y nos remitió el testimonio de este legajo, en la carta del año 1968
con que lo acompañó, juzga así el documento testimoniado: "Muy
voluminoso por cierto y de gran interés nobiliario. Es uno de
los más com~letosen cuanto a hidalruías. Dues éstos suelen -re-
ferirse únicamente a la línea parterna ly'h de referencia Ilem
nor los colaterales con Eran abundancia de información.. Es
interesantísimo el cxpe&ente en cuestión y las partidas sacra-
.
mentales, testamentos y padrones, son innumerables?'
E n nuestro Anexo Segundo, transcribimos el expediente
traído por don Gabriel de España, el que hemos completado,
agregando la documentación que anteriormente se dijo que le
faltaba, tomándola de dos fuentes: Primero, de las actas sacra-
mentales testimoniadas por el Reverendo Padre don Isidoro Ruiz
Gómez, cura piirroco de la Iglesia de San Cristobal de Abionzo,
que nos enviara el presbítero don Mateo Escagedo Salmón, en
1936, y, segundo, con la Real Provisión de Hidalguía ganada
por don Manuel y don José de Güemes que nos remitiera don
Fernando Muñoz Altea.
Al transcribir esta documentación, "brevitatis causa",
cuando no se pone indicación alguna, quiere decir que lo que se
copia sc h a tomado del expediente de don Gabriel; cuando de
las partidas sacramentalcs testimoniadas del presbítero Esca-
gcdo Salmón, simplemente "Escagedo Salmón", y, cuando de
la Real Provisión de Valladolid, "Real Provisión".
2. "Catastro del iilarqués de la Ensenada", del año 1752.
Fue publicado en Santander en 1953 por don Tom6s Maza
Solano, Cronista Oficial de esa ciudad, C. d e la Real Academia ,
de la Historia, Secretario del Centro de Estudios Montañeses.
E n él aparecen censados en el valle de Carriedo, lugar de
Abionzo, como nobles labradores, entre otros Güemes, José de
Güemes Montero (nQ 4.755), casado, y Manuel de Güemes
(nq 4.762), casado con cinco hijos, respccto a:los cuales el pres-
bítero don hlateo Escagedo Salmón, en carta del 19 de octubre
de 1933 (en N.A.), decía: "Son hermanos y no obstante el uno
consta con el apellido de Güemes Montero y el otro con el de
Güemes sólo. E l Manuel de Güemes casado con cinco hijos que
aquí figura no puede ser otro que el padre de don Gabriel, ya
que en 1752 no había otro Manuel de Güemes en Abionzo". Cinco
hijos da el Catastro. E n constancias posteriores (1771 y 1785)
sólo figuran cuatro. Probablemente porque uno de ellos había
fallecido. !

3. Catiilogo de los pleitos, expedientes% probanzas de los


hijosdalgo del Archivo de la Real Chancillería de Valladolid, pu-
blicado por don Alfonso Basanta de la Riva (Valladolid, 1920).
E n él se incluye una extensa lista de hidalgos apellidados
Güemes, comprensiva de los años 1544 a 1817, entre los que fi-
gura don Manuel Güemes, Madrid, 1781, quien, según se h a po-
dido comprobar, es el hermano de don Gabriel al que ya nos
hemos referido más de una vez.
4. Dos expedientes, 1657 y 1643, correspondientes a prue-
bas de nobleza de don Manuel de Güemes Eales Gutiérrez de
la Concha y Campero (año 1739), que copiamos en nuestro Anexo
Tercero, y de don Leonardo de Güemes Gutiérrez y de la Huerta
(año 1740), respectivamente. (Legajo nQ 11.805 existente en
la biblioteca de Madrid, fotocopia en N.A.).
E n ellos consta que "la familia ilustrísima del apellido de
Clüemes es de las miis antiguas y nobles de los reinos de España,
tanto que memoria de hombre no penetra cuándo tuvo princi-
pio esa nobleza, sino que la tienen desde a b initio y la han con-
servado y realzado con mucho valor.. ., siendo de sus ramas la
de mayor esplendor, continuada nobleza y progresos señalados
la radicada en el lugar de Abionzo, valle de Carriedo de las
montafias de Eurgos".
18 LUIS GUELIES

6. Otros expedientes relativos a pruebas de nobleza. (Ar-


chivo IIistórico Nacional de Madrid, certificaciones en N.A.).
Son los siguientes: de don Sancho Campero de Sorrevilla
Y Castillo; natural de Abionzo, 1669 (de la orden de Santiago) ;
de don Manuel Campero y Bliera, también de Abionzo, 1663 (de
la orden de Calatrava); de don Diego Güemes y Bnronas, de
Rioseras, 1666 (de la orden de Santiago) ; de don Santiago Bus-
tillo de la Concha Güemes y de la Concha, de Esles, 1692 (do
la orden de Alchntnra); de don Juan Campero de Barrerla, na-
tural de Abionzo, 1700 (de la orden de Calatrava); de don
José del Prado Güemes Arnuero de la Sota, 1737 (de la orden
de Alcántara): y de don José Gutiérrez de la Concha Irigoyen,
1831 (de la orden de Santiago) ; pruebas todas con noticias re-
ferentes a escudos de armas y relaciones de parentesco de fami-
lias (vinculadas a los Güemes hfontero) que por aquellos años
residían en Abionzo y otros lugares del valle de Carriedo.
E n el último de estos expedientes aparece expresamente men-
cionado un Güemes (don Francisco) como testigo en el casa-
miento de don Jacinto Gutierrez de la Concha y hIontero con
doña María Mazón Güemes y de la Sierra, celebrado en Esles el
16 de enero de 1744. Estos fueron los padres de don Juan Gu-
tierrez de la Concha, ejecutado en nuestra provincia de Cór-
doba en 1810, y abuelos paternos del citado don José, el marqués
(le la Habana, y de don Manuel, el marqués del Duero, cuyas
estatuas se levantan actualmente en Madrid.
Del expediente de don Diego Güemes y Baronas, formado
en 1666 para ingresar en la Orden de Santiago, copia que ccr-
tificada como las anteriores (ya lo hemos dicho) obra en nues-
t r o poder, con el nQ 6.645, Madrid, 4 de setiembre de 1949, trans-
cribimos lo siguiente:
1
"DON JOSE ANTONIO MARTINEZ EARA, SECRETA-
RIO ACCIDENTAL DEL ARCHIVO HISTORICO NACIONAL.
"CERTIFICO: Que entre los fondos de este Archivo, sección
(le Ordenes Militares Pruebas de Nobleza de los Caballeros de
la de Santiago y con el número tres mil jseiscientos cuarenta y
dos se custodia el expediente formado en el año mil ~eiscien-
tos sesenta y seis a D ON DIECO'G~EMES Y B A R O N A para su in-
(rreFo en la mencionada Orden de cuyo expediente se copian a
continuación los particulares siguientes: - - --
- - -
"4@. A la ,cuarta dijo: que los dichos 'pretendientes. sus pa-
dres y abuelos paternos ya nombrados, todos fueron legítimos
'y.de legítimo matrimonio habido y procreados.. . que los dichos
- don Diego Güemes y Barona, pretendienteiy don Francisco Güe-
mes su padre y Juan de Güemes, su abuelo'paterno, y doña María
GÜEXIES DOCUXIEKTADO 19

y
Gallo su madrc todos son y han sido habidos tenidos y común-
mente reputados por hijosdalgo de sangre, según costumbre y
fuero cle España y gozan y han gozado cada uno en su tiempo
en este dicho lugar de todas las cxenciones de hijosdalgo el di-
cho padre y abuelo del pretendiente y de los mismos han gozaclo
otros muchos ascendientes suyos por esta línea y vnronía por
s e r muy antigua familia en este lugar la suya el cual dicho lugar
es de behetría según ha oído decir estc testigo m,?s h a de
doscientos años y todos los vecinos de dicho lugar pechan y con-
tribuyen en todos los cargos dc los hombres llanos pecheros ex-
c e p t o ~aquellos cuya antigüedad y vecindad de sus ascendientes es
más antigua que la behetría y por serlo así la familia de los
Güemes no pechan ni contribuyen ni han contribuido en ningún
tiempo en los cargos y pechos que los hombres llanos pecheros.
... Y por ser más antigua en este lugar que la behetría la
vecindacl de los Güemes, ascendientes clel pretendiente por su
varonía, no pecha n i h a pechado nunca su hacienda ni la de los
dichos padre y abuelo del pretendiente. p a todos sc les guardan
y han guardado en su tiempo las exenciones de hijosdalgo de
sangre en sus personas y haciendas según es común opinión y
hay tradición de padres a hijos de lo susodicho en este lugar. en
el cual tiene el padre del pretendiente mucha hacienda, raíz y
heredades de pan llevar y casas propias muy antiguas, y una
torre fuerte incorporada en ellas, todo heredado de sus mayores."
Como Anexo Primero se transcribc la correspondencia cur-
1
fiada con don Fernando Muííoz Altea.
[ANEXO FRI3IEROl
i
Correspondencia cursada entre el arquitecto Prancisco hliguel
Gücmes Ayerza y el seíior Fernando hluñoz Altea, Rey de
Armas de S.A.R., el Principe Don Rnniero de Borbón Dos
Sicilins, Caballero de la Orden Constntiniana de San Jorge,
Caballero hlozárnbe. mienibro del Instituto Internacional de
Gencalob.ía y Herhldica, miembro del Instituto Bouchnrd de
Estudios Ilistóricos Navales, miembro de "The Augustan Socie-
ty" y "Tho American Society", de Caliiomia, correspondiente
de las Academias e Institutos IIistÓricos-Geneal6picosde Argen-
tina, Brasil, Costa Rica, Cuba, Guatemala, "Bfota Padilla", de
BIéxico, Onxaca, y Perú, Consejero IIerhldieo de la Asociación
Cubana de la Soberana Orden de San i Juan de JerusalEn.

Buenos Aires,' 12 de junio de 1967


i
Distinguido señor:
Ali amigo y colega del Instituto ~ r g e n t i n dde Ciencias Genealósicas,
el Dr. Felix Aiartln y IIerrera, así como también don Bernardo Pedro
Lozier Almazán, me han aconsejado que le escriba, e invoque sus nom-
bres, y recurriendo a s u gentileza. le solicite una información genea-
16gica. p a r a m í seguramente de excepcional importancia, como com-
prenderá usted al leer esta carta.
El 7 de noviembre del pasado. escribí otra con el mismo propósito
a don Dalmiro de la Vhlgoma y Díaz-Varela, pero lamentablemente no
obtuve respuesta n ella. por causas que ignoro. Quizá no haya Ilesado
la mía a manos del destinatario por e x t r a v í o u otro motivo.
......................................................
A continuación paso a explicarle el motivo de mi solicitud.
El padre del genere1 Gtiemes fue don Gabriel (o Gabriel Anselmo)
de GUemes BIontero Cárcena y Campero, nacido e n Abionzo, Valle de Ca-
miedo, Obispado de Snntander, el 21 de mayo de 1748, quien al trasladarse
a América, en 1777, con el cargo de Tesorero Oficial Real de las Cajas
de Jujuy y los reales despachos consiguientes. trajo consigo, en cum-
plimiento de normas imperantes en la época,la consabida certificación
de identidad obrante en un expediente que él y u n hermano suyo Ila-
mado Manuel, que quedó en España, hablan promovido, en forma con-
junta, para acreditar s u filiación personal en los libros parroquiales y
s u hidalguía e n los padrones del caso.
Conservamos en nuestro archivo de familia la referida certifica-
eibn y de ella extraigo los datos para confeccionar el cuadro que le
adjunto, juntamente con otro. este a título de mera curiosidad, corres-
p o n d i ~ n t ea la ascendencia de doña BIaría BIagdalena de Goyechea y
la Corte, esposa de don Gabriel y madre del general don IIartin Miguel
de Gtiemes. l

En Indice de los caballeros hijosdalgo de la nobleza de Madrid, pu-


blicado por don Félix de Riijula y AIartfn-Crespo y don José de Rújula
y de Ochotorena, "entre los caballeros hijosdalgo recibidos en el Es-
tado Noble de Madrid y que entraron en suertes ejerciendo los cargos
del Ayuntamiento, cuyos expedientes se conse an". aparecen (pág. 73)
"Gtiemes Bárcena y Campero de la Concha (D. José), N. en Abionzo
(Carriedo), oficial del Consejo Extraordinario. Ganó Real Provisión
de Nobleza en Valladolid, 1785"; y "Güemes Bárccna Campero de la
Concha (D. Manuel), N. en Abionzo (Carricdo), Tesorero del Alon-
teplo. Ganó Real Provisión de Nobleza en Valladolid, 1785 y 1798"; 4;
"entre los caballeros del Estado Noble que formaron e ingresaron en
el Real Cuerpo Colegiado do la Nobleza de Madrid (1782-1919)", se
halla (p6g. 198) "Gilemes Bárcena y Campero de la Concha (D. Manuel
de). Tesorero del AlontepEo del Ministerio. Diputado del Cuerpo, Al-
guacil Mayor (concordia). Ganó Real Provisión de nobleza en Valla-
dolid, 11 de agosto de 1788". N

A su vez, en el Archivo de la Real Chancillería de Valladolid, Salm


de hijosdalgo, Catálogo de todos sws pleitos, expedientes y probanzas
formado directamente de los documentos por don Alfredo Basanta de
la Riva, Valladolid, 1920, figura, entre otros Güemes, don Manuel,
Madrid, 1781. I
A mi juicio, en las fuentes citadas quizás se halla la información
que mi padre desea obtener sobre la genealogia en que se ocupa. Creo
que el IIanuel de Gtiemes del Catálogo de Basanta de la Riva, así como
los dos bIanueles del Indice, que coinciden ambos en sus nombres y
apellido y en ser tesoreros del nlontepfo, son una misma persona, y que
ae trata del hermano de Gabriel que. en forma conjunta con fste, pro-
movió el "expediente" de filiación e hidalguía a que antes me referí.
Esto 6ltimo lo comprueba el tesL2mento de don, Gabriel (original en
el archivo de Salta), en el cual declaró tener un hermano residente
en Madrid llamado Manuel. y el hecho de que don José Gonzfilez de
Prada, contador IIinistro Principal de Real Hacienda de Salta (com-
pañero de don Gabriel. que en ese entonces era Tesorero IIinistro Prin-
cipd de Real Hacienda), en 1787 dio poder (original tambifn en el
srchivo de Salta) a don Manuel de GUemes Alontero, Tesorero del
Montepío en Madrid, a los efectos de realizar gestiones nntc la Real
CAmara de Indias. Creo asimismo que el Jos6 del Indice es hermano
de Manuel y por ende de Gabriel.
Debo aclarar que si bien en el Indice y en el Catdlogo antedichos
no figura Alontero despufs de GUemes, ello sc debe a la costumbre dc
suprimir a veces algiin apellido. Y así, en el Catastro del AlarquEs de
la Ensenada dc 1752 (publicado por Tomás Maza Solano en Santan-
- der. 1953), aparecen censados en el Vnlle de Carriedo, lugar dc Abion-
zo, como nobles labradores, entre otros Gtiemes, José de GUemes
Jfontero (n9 4755), casado. y Manuel de Güemes (n9 4762), casado.
con cinco hijos, respecto de los cuales el presbítero Nateo Escagedo
Salmón, en carta del 19 de octubre de 1933, dirigida a mi padre le
decía, hablando de éstos: "Son hermanos y no obstante el uno consta
con el apellido de Güsmes hlontero y el otro con el de Güemes sólo.
El Manuel de Güemes casado con cinco hijos que aqui figura no puede
per otro que el padre de don Gabriel, ya que en 1752 no había otro
RIanuel de Güemes en Abionzo."
Vése aqui que el propio padre de los arriba nombrados es desig-
nado escuetamente Manuel Güemes. E n cambio en el padrón de los ve-
cinos de Abionzo de 28 de noviembre de 1761, del que tenemos debida
constancia, se lee respecto a la misma persona: "Don Manuel d e Güemes
Illontcro, su mujer y hijos don Juan, don Manuel. don Josef y don Ga-
briel, attsentes, Hijos Dalgo".
Los nombres de Josi., de JIanuel y de Gabriel incluidos aquí, co-
rroboran mi y a expresada creencia de que los tres así llamados también
arriba eran hermanos entre sí.
Nuchisimo le estimaría que, a los fines que persigue mi padre, s e
dignase usted confirmar esta creencia mía, s i le es posible hacerlo sin
gran molestia, y, al propio tiempo, proporcionarme cualquier otro dato
que tuviere o pudiere conseguir sobre esta pmealogía.
Me tomo la libertad de pedirle, distinguido señor, s e sirva ave-
riguarme la posibilidad de logrnr copias testimoniales, o fotogrhtlcas
o e n Última instancia comunes, de no s e r posible las anteriores, de las
actuaciones que los autores del Itidicc y del Catúlogo tomaron como
base documental, todo ello, s e entiende. por mi cuenta y a mi costo,
haciéndome usted conocer la forma de hacerle llegar el giro.
Q u i e n Ud. recibir mi cordial saludo, rogindole me disculpe por
la molestia que pueda ocasionarle.
Francisco ñligitel Gilenies Averza

l\Iatlrid, 21 de junio de 1967


Di$inguido señor:
Correspondo gustosamente a su grata del 12 de los corrientes, es-
perando serle de utilidad e n relación con s u s deseos.
Don Dalmiro de la Viilgoma, gran amigo mío y caballero sin tacha,
es persona sumamente atareada. E n la época en que me dice haberle
escrito, 61 s e hallaba recorriendo diversos países de ese continente y
a s u regreso posiblemente se haya extraviadosu misiva. De todos mo-
dos, n o se dedica profesionalmente al estudio de estas discip!inas.
E s sumamente interesante lo que me indica, respecto a las investi-
~ a c i o n e sque llevaron Uds. sobre sus linajes: P o r lo que puedo eom-
rrobar, han recorrido los caminos usuales y jcreo inprocedente t r a t a r
de ampliar lo ya conseguido.
Precisamente, estoy especializado en a&llidos montañeses, toda
vez que he recorrido la provincia de Santander e n g r a n número de
ocasiones, realizando búsquedas en archivos oficiales y privados. Sin
embargo, de este linaje no tengo nada en mis archivos.
GUEMES DOCUBIENTADO ! 23

Actualmente. no existen los padrones de hidalguía del Valle de


Carriedo. Después de terminada nuestra contienda civil. un secretario
provisional semi-analfabeto, vendió como papel viejo el riquísimo a r -
chivo que conservaba Villacarriedo.
Los expedientes que conserva el Archivo de la Real Clinncillería
d e Va!ladolid, especialmente los del siglo xvrrr, suelen ser bnstnnte ex-
tensos. Contienen las diferentes diligencias, autos y cédulas, así coino
las partidas sacramentales correspondientes y los respectivos padrones
(le IIidalgula de las diferentes épocas. terminando todo en la Real
Provisión y aceptación por el Consejo donde el interesado estaba ave-
cindado.
E n el archivo indicado, no expiden copias de e s t a s cuestiones, ya
que solamente hay un director, sin otro auxilio que una señorita y el
correspondiente ordenanza. P o r tal motivo. no hay otra solución que
desplazarse ex profeso y hacer las copias personalmente.
Desde hace muchos años, vengo utilizando este procedimiento que
realmente es el Único existente. Ciertamente, encarece u n poco las
diligencias, pero tiene la compensación de conseguirse las copi:? con
mayor pulcritud y concretamente realizadas bajo el aspecto nobiliario.
Tengo el convencimiento, de que son varios los Gücmes que e+
zan entre sí. de los relacionados e n el índice de Basanta. Le sugiem
sacar copia de los entroncados directamente c o n sus ascendientes y
del resto solamente las respectivas notas, que siempre pueden ilustrar
aún mas l a obra que prepara.
El procedimiento para tal asunto es el siguiente:
A la vista de los expedientes aludidos, se procede a sacar copia
literal de las partes interesantes, prescindiendo de aqucllas partes fa-
rragosas, tales como declaraciones testificdes, exposiciones, autos, etc.,
etc. Estas copias, las coteja posteriormente el Director del Archivo,
dándolas autenticidad con s u firma y generalmente las legaliza y iegi-
timan notarialmente. I
E s muy difícil concretar exactamente cantidades, puesto que ia-
noro el tiempo que invertiría a tenor del volumen del expediente o
expedientes que tenga que consultar. Como primera providencia, habrh
que examinar todos los de este apellido, para apartar aquellos que co-
nexionan próxima y lejanamerite con s u rama. l

Mis honorarios, podrían s e r en este caso en que no me atrevo a


d a r cifras concretas, los siguientes: j
.....:.......
Castos de desplazamiento. ida y vuelta
Dietas diarias
Hotel (diario)
............................ ......
........................
.l.

....l..
800
. . . . 500
..
1.000 ptas.

Copias certificadas, con las partes m i s sobresalientes


de cada expediente ................................ 3.000 ,,
E n esto de las copias. le doy presupuesto aproximado, ya que calculo
por otros semejantes.
Posiblemente, este trabajo no bajaría d e las 112.000pesetas, O sea,
unos 200 $ USA, aunque estoy sesuro que le compensaría por la gran
cantidad de noticias que conseguiría al respecto. Hay otra sección, iné-
dita, de protocolos y ejecutorias, donde también es posible halliramos
1
datos al respecto.
Seguramente, no exceder5 de la cantidad indicada. Al final de mi
gestión, le haría una detallada nota de gastos y obvencionales y si
hubiese saldo a mi favor, me lo remitiría posteriormente.
IIe de señalarle, si falta de España algunos años, que todo por
aquí se ha encarecido extraordinariamente. Es una carreta sin freno,
el alza constante de precios, alojamientos, tasas, impuestos, etc., etc.
Así pues, trataría de servirle lo mejor posible, siempre que Ud.
me conceda un margen de confianza prudencial. La cantidad indicada,
puede hacérmeln llegar por medio del Sr. Lozier o directamente.
Esperando sus noticias y ofreciendome a sus órdenes desde este
momento, queda suyo afmo. es.
~
Fernando Jluiloz Altea

Buenos ~ i r e g 10
, de julio de 1967
Distinguido seiíor: I

He recibido su amable carta del 21 del próximo pasado mes, la


que leí con todo interes. He creído conveniente escribirle esta nueva
para aclarar y completar algunos criterios ;de mi anterior, de modo
de trasmitirle más fielmente lo que buscamos con mi padre.
La investigación genealógica en l a cual estamos trabajando, trata
de descubrir ascendencia directa, así como también referencias al ori-
gen del linaje que pudieran aparecer en la bisqueda de aquhlla y con-
sidera secundario los enlaces con otras familias. Posee Ud. el tírbol
genealógico de D. Gabriel, padre del general Giiemes, que le permi-
tirá descartar o no los expedientes que revise. Entiendo y esto puede
Ud. verificarlo, que los que a continuación ,le cito, pueden interesar
para nuestra ~enealogíaya que pienso que loa actores son hermanos
~-~

de don Gabriel.
En su carta, habla Ud. solamente del Indice de Basanta y de Va-
lladolid. Por ello, dispenseme esta repetición, le transcribo subra-
yando los nombres de los titulares de aquellos expedientes que nos
interesan concretamente y si de su revisación surge que corresponden
a lo buscado, deseamos obtener testimonios de la manera y forma por
Ud. explicada, esto es sacando "copia literal de las partes interesan-
tes, prescindiendo de aquellas partes farragosas, tales como declara-
ciones testificales, exposiciones, autos, etc., etc.," cotejadas por el
Director del Archivo, ddndoles nutenticidad con su firma y certificadas
notarialmente. I
En el Indice de los caballeros hijosdalgoide la Nobleza de Aladrid
publicado por don F&ix dc Rújula y BIartín-Crespo y don José de RSi-
jula y de Ochotorena, entre los caballeros hijosdalgo recibidos en el
Estado h'oble de Madrid y que entraron en suertes ejerciendo los ear-
gos del Ayuntamiento, c t i ~ o sexpedientes se conservan (en Madrid o
en Valladolid?), en la pág. 73, aparecen, "Güemes Bárecna y Can~pcro
de la Concha (D.Josk de), N. de Abionzo (Carriedo), oficial del Con-
sejo Extraordinario. Ganó Real Provisión de Nobleza en Valladolid,
1785, y Güemes Báreena 21 Campero de la Concha (don Alanuel de). iC.
en Abionzo (Carriedo). tesorero del Montepío. Ganó Real Provisión
de Nobleza en Valladolid, 1785 y 1798" y "entre los caballeros del Es-
tado Noble que formaron e ingresaron en el Real Cuerpo Colegiado
de la Nobleza de Aladrid (178.2-1919)" en la p6g. 1%. aparece, "Giie-
mes Bárecna u Campero de la Concha (don iilanuel de), tesorero del
Blonteplo de Ministerio, diputado del Cuerpo, Alguacil Mayor (con-
cordia), ganó Real Provisión de Nobleza en Valladolid el 11 de agosto
de 1788".
Además de los arriba citados. en el Indice publicado por don Al-
fredo Basanta de la Riva, Valladolid 1920, del "Archivo de la Real
Chancillería de Valladolid, Sala de hijosdalgo, Catálogo de todos sus
pleitos, expedientes y probanzas, formado directamente de los docu-
mentos" figura "Güemes don iifanuel, Aladrid, 1781".
Sin perjuicio de los citados expedientes, si Ud. encontrara otros
que arrojaran más luz sobre nuestra genealogía. siempre en línea as-
cendente y directa. deberían estos recibir el mismo tratamiento que
los primeros.
a
Siguiendo sus indicaciones, he hecho entrega nuestro buen amigo
don Bernardo P. Lozier Almazán de los U$S 200.- por Ud. estima-
dos por este trabajo cuyo buen resultado ansiamos.
Quiera Ud. recibir un cordial saludo de S. S.
Francisco llfigitel Güeniea Ayerra

Madrid, 28 de julio de 1067


Distinguido señor:
Con sumo placer, correspondo a su estimada d b 1 0 dc los corrien-
tes. No le conteste antes, esperando recibir el giro que me anunciaba,
que por razones que desconozco estuvo traspapelado unos días y hube
de formular la oportuna reclamación a Buenos !Aires. Afortunada-
mente, todo se solucionó y ya esta en mi poder la referida suma.
Tomo nota de todas sus indicaciones y esté :seguro haré cuanto
este a mi alcance para interpretarlas. Por el momento. hasta pasadas
las vacaciones veraniegas, me resulta imposible trasladarme a Valla-
dolid, ya que está cerrada la Chancillería hasta mediados de setiem-
bre. Como bien sabrá, aqui estamos en plena canícula y casi todos los
organismos oficiales se encuentran paralizados. i
Antes de partir, pasaré por el Archivo del Ayuntamiento de 3Ia-
drid para examinar los expedientes que allí se custodian.
Mientras tanto, y agradeciéndole la confianza dispensada, le sa-
luda una vez más y queda a sus Úrdenes suyo afmo. s. s.
~ L n i n n d oiilioíoz Altea

Buenos Aires, 13 'de diciembre de 1967


De mi consideración:
Me permito escribirle para solicitar d i Ud. información acerca
de la investigación genealcigica que quedara' Ud. en practicar, y por
la cual mantengo tanto interés y curiosidad.
Nuestro amigo Lozier Almazán, me dijo hace como dos meses atrás,
que Ud. le había escrito que para esa fecha estaría en Valladolid y
por ello deducía él que ya podría recibir el resultado de su trabajo
para fines de noviembre p. p.
A la espera de sus noticias, me es grato enviarle un cordid saludo.

Aíadrid,; 3 de enero de 1368


Muy estimado amigo:
Ruego disculpe el abandono en que le tengo, causado por una serie
de circunstancias contrarias a mi voluntad. 1
El pasado mes de diciembre, me trasladé a Valladolid para cum-
plimentar su encargo, pero con la mala fortuna de que me puse en-
fermo de algún cuidado la tarde de mi llegada. hasta el extremo que
hube de contratar a un chofer que condujese mi auto y venirme rápi-
damente n Madrid. Después, ya restablecido se presentaron las fiestas
de Navidad J- ahora espero la oportunidad de volver de nuevo a aque-
lla ciudad.
No obstante, examiné el expediente principal que a Ud. le inte-
resaba, muy voluminoso por cierto y de gran interés nobiliario. Es
uno de los más completos en cuanto a hidalguías, pues éstos suelen re-
ferirse únicamente a la linea paterna y el de referencia llega por los
colaterales con gran abundancia de información. Le voy a adelantar
algunos datos que tomé. l
Juan de Gíiemes Ilontero, casó - c o m o Ud. sabe- con doiía Fran-
cisca Campero de la Concha en Abionzo, el l3-IX-1658. Se incluye el
bautismo de la contrayente, aunque no precisa el año, para lo cual
sería necesario ver los libros sacramentales (fue en Abionzo el 28 de
julio de 1 ) y era hijo de Pedro de Güemes y María García. La con-
trayente, era hija a su vez de Junn Campero y BIarín Blanco.
Juan de Báreena. esposo de Catalina Campero, casados en 1680,
e r a hijo de Cristóbal de Bárcena y llarfa Blanco.
Francisco Campero y Luisa Zorrilla, casaron en Abionzo el 2%
IX-1644. Luisa, falleció 4-X-1685, y fue bautizada en el mencionado
lugar 12-XII-1616. siendo hija de Toribio Gutiérrez y María Zorriiia
de la Concha, vecinos de Bárcena.
José Gómez, se bautizó en Abionzo, 22-SI-1635, hijo de Pedro
Gómez y María de Güemes. Ana BInrla Campero, recibió las aguas en
30 de mayo, de "dicho año", hija de Gabriel Campero y María Zorrilla.
Juan de BBrcena, segundo aburlo, era hijo de Cristóbal de Bár-
cena y itlaría Blanco. Bautizado en Abionzo, 28-VI-1656. Catalina Cam-
pero, hija de Francisco y Luisa Zorrilla, 6-11-1G4G.
Alonso de Bircena. Abionzo, 3 de mayo, de "dicho aiio". hijo de
Juan y de Felipa Ruiz. La segunda abuela materna, María Ruiz, hija
de Juan Ruiz y Juliana FernBndrz. I
Testamento de Juan de Güemes Nontero. Abionzo, 28-SII-1757,
.
ante Diego Gómez (hijo de.. Güemes y María Montero) (aquí tengo
mis dudas de haber cometido alguna contradicción).
Testamento de Manuel de Gücmes llontero, hijo de don Manuel
de Güemes y doña María de Bárcena. Cita, entre otros a Gabriel, Te-
sorero de las Rezles Cajas de Jujus. Casado con doña María llagda-
lena de Goyechea. En ~ b i o n z o ,1-IV-1780ante Pedro García ~ u i n t h a .
Testamento de BIanuel de Güemes Montero y doña María de Bár-
cena. Abionzo, 23-1-1744. I
Hay gran cantidad de documentos, que cuando vaya a Valladolid
copiaré para Ud. Como los datos que tomé son solamente notas en
estado ya febril, posiblemente haya incurrido en algún error, que pos-
teriormente subsanaré. E s interesantísimo el expediente en cuestión
3' las partidas sacramentales, testamentos y padrones, son innumerables.
Espero acepte mis sinceras disculpas, prometiéndole reanudar el
trabajo muy próximamente y hacérselo a su entera satisfacción.
Para enriquecer sus notas del archivo familiar, estos Giiemes
aparecen en los siguientes expedientes de Ordenes Blilitares, en luga-
res secundarios (no en primer apellido): Prado y GUemes. Caballero
de Alcántara. Año 1737. Exp. 1.226; Orcasitas Colón y Giiernes. Año
1786: Horcasitas y Güemes. Castro-Urdiales (Falta). Año 1748; Cam-
pero de Barreda y Güemes. Caballero de Calntrava. Año 1700. Exp.
411; GUemes Padilla. Calatrava. Año 1748. Exp. 1126.
Y nada m i s por el momento. excepto desearle toda clase de ven-
turas para el año que acaba de comenzar. I
Atentamente
~ e r n a n d oilfttíior Altea

Valladolid, 15 de febrero de 1968


Mi distinguido amigo:
1
Una vez mis, le suplico disculpe el retraso en cumplimentar su
encargo, pero como ya le dije, la otra vez que visite Valladolid, me
puse enfermo repentinamente y hube de abandonar la ciudad. Luego,
trastocados mis planes, hube de reajustar m i "calendario laboral".
hlañana o pasado, tendré lista la copia por Ud. interesada, que
quedará bastante completa. toda vez que este expediente es uno de
los más interesantes en su g h e r o . He extractado todos aquellos par-
ticulares concernientes a partidas sacramentales, cargos, Real Provi-
si6n, testamentos y por último el recibimiento por la Villa de Madrid.
El realizar este trabajo, tiene multitud de inconvenientes. En pri-
mer lugar las derivadas del tipo de escritura, que hace preciso reflejar
fielmente la redaccibn, con las mismas faltas de ortografía de l a epoca.
aunque desarrollando las abreviaturas. Ello hace la labor un tanto
lenta, amen de tener presente que en el Archivo donde se custodia
este expediente solamente se puede trabajar de 10 a 13.30 de la ma-
fiana. Luego hay que cotejarlo cuidadosamente.
Si alguna incorrección observa, piense que es tal como s e aprecia
en su original. I
Antes de remitírselo por correo, me /agradaría saber si existe
algfin otro medio para hacerselo llegar, bien por medio de la Emba-
jada, a trav6s de algún amigo, etc., puesto que temo que se pueda
deteriorar en el trayecto y no me agradaría doblarlo. Este procedi-
miento, aunque de momento demorase más; ofrecería las mayores ga-
rantía s. ¿No cree?
Por lo tanto, quedo a la espera de sus noticias para proceder e n
consecuencia. No obstante, si Ud. estima que se le envíe por correo.
lo haré seguidamente.
Al margen de esto, le preparo una s k i e de noticias de los ape-
llidos en cuestión, lo que completará este interesante trabajo.
Una vez mas, le saluda muy atentamente y queda a su disposi-
cibn, su afmo. s. s. y amigo. I
!
:Fernando BIuñoz Altea
!

P. D. Examiné TODOS los expedientes de GUemes y GUemez, que se


citan en el Catálogo de la Real Chancillería. Ninguno entronca con el
nuestro, aunque hay uno que procede de Abionzo.

Buenos ~ i r e ; , 12 de marzo de 1968


Muy estimado señor:
Ruegole, ante todo, me dispense por no haberle escrito antes, pero
recien acabo de llegar a Buenos Aires, después de una larga ausencia.
y acabo de encontrar las suyas, del 9 de enero y del 15 de febrero del
corriente año.
Veo por ellas todas las noticias de interés que ha de contener el
expediente que Ud. h a preparado. Aprecio toda su erudici6n y esfuerzo.
Respecto al envio he pensado en lo que Ud. me comenta. Tengo
un primo hermano residente en España, e1 setior Julio Petia, cónsul
G U E ~ I E SDOCUMENTADO i 29

general argentino en Barcelona, pero francamente me parece un tanto


engorroso haccrle llegar la documentación para que a su vez 61 me la
remita. Si por ventura tuviera Ud. que i r por cualquier asunto a Bar-
celona, todo se facilitaría. Habria que pedirle, en ese caso, que el
envío lo haga por valija diplomática. Puede Ud. mostrarle esta carta
y 61 no tendría ningún inconveniente, ya que nos une un gran afecto
recíproco.
Si Ud. viera todo esto como algo complicado! creo que también
por correo certificado, podría ser remitido, sin riesgo de extravío.
En fin, dejo a su buen criterio la elección del camino a seguir,
y aprovecho esta oportunidad para agradecer a Ud. por la investigación
realizada y manifestarle mi especial estima. 1
Fvnnciwo Al. (;iietnes Ayerra

Madrid. 23 de 'marzo de 1968


TiIi distinguido amigo: I

Correspondo a su estimada del 12 de los corrientes, recién regre-


sado hoy a Madrid.
Con esta misma fecha, escribo a don Julio Peña, rogándole me
indique si es posible remitirle a Ud. el certificado por su conducto.
Caso negativo, se lo haré llegar por correo debidamente acondicionado.
Le estoy adjuntando apuntes de dos Ejecutorias de la familia
GUemes, que por ser de Abionzo, es posible tengan interés para Ud.
E s curioso observar como se mezclan 10s linajes de esa zona, sin que
aparezca conexibn. I
En mi pasada visita a la Real Chancillería. examiné TODOS los
expedientes de GUemes y Giiemez, sin que ninguno - a excepción de
los señalados y el certificado- tengan vinculacibn con 811 rama.
También, investigué en las Ordenes Militares, donde hay nume-
rosos expedientes, principalmente por Campero, de los que prhima-
mente le dar6 algún extracto.
Espero que le agrade la transcripción efectuada, donde no omiti
ningún antecedente que pudiera resultar de valor. Ya le señalé que
esta probanza, es de las más completas en su ghero.
Mientras tanto, le saluda una vez mis, afectuosamente su buen
amigo y s. s.

Madrid, 6 d i abril de 1968


Distinguido señor: 1
Con esta fecha, me complazco en participarle la remisión al Sr.
don Julio Peña dcl dociimcnto de la R. Chancillería que espero lleparii
a sus manos en perfectas condiciones de seguridad.
Próximamente, tendré mucho placer en:enviarle algunos datos adi-
cionales de la investigación sobre los Giiemes.
AIientras tanto, le saiuda muy atentamente, supo afmo. s. s. q. e. s. m.
Fernando Al~tiioz Altea

Bucnos ire es, 17 de mayo de 19G8


Nuy estimado señor: !
Acabo de recibir de manos del capitan del barco "Alberto Dodero".
los testimonios de la Real Provisión de Hidalguía, que Ud. hiciera Ile-
par a mi primo Julio Peña. quien eligió este medio para hacerlos venir.
3Iucho le agradezco su excelente trabajo. Al regreso de un corto
viaje que comienza hoy, le volver6 a escribir al respecto para hacerle
algunos comentarios.
iiIe es grato reiterar a Ud. mi cordial ketima.
Expediente promovido por don Gabriel de Gi :mes Montero y RU
- hermano Manuel para acreditar filiación (M. o. t 1 K. A).
"Genealogía de la familia de Güemes. 1658 . 1773.
"Faltan por haberse roto:
"19 la solicitud de los hermanos XIanuel y G briel Güemes JIon-
ter0 con que iniciaron ellos este expediente;
"29 las partidas de bautismo de los mismos A:riinuel y Gabriel que
debían s e r las primeras e n el expediente;
"39 la partida de casamiento de l\lanuel Güenncs y de Francisca
de Blircena, padres de Manuel y Gnbriel, de la cual pnrcce s e r parte
el final de partida con que comienza el expediente! D. G'!
(La solicitud a que hace referencia D.G. no la hemos podido con-
seguir: pero s í las tres partidas que 13s copiamos de los documentos
enviados por Escagcdo Salmón y 3Iuñoz Altea). i
BacitZPnlo de don J l a w e l dc Ciio~res,tino de los ;prctetitlietttcs. AAn
de 1740. !
E n veinte de diciembre del año de mil setecientos y cuarenta nació
u n niño legítimo de legítimo matrimonio de Manuel dc Güemes Non-
tero Y Francisca de Bárcena, nieto por la parte paterna de Bfnnuel de
Cüemes Montero y l i a r l a de Bircena, y por la materna de Bernardo
de Bárcena y Francisca Gómez todos vecinos que son y han sido d e
este lugar de Abionzo, Valle de Carriedo. Arzobispado de Burgos, y
montañas de Santander; y e n el mismo día por peligro de muerte so-
corrió a dicho niño con el Sacramento del Bautismo don J u a n Fer-
nández Campero vecino del referido lugar, y e n veinte y uno de di-
cho mes y año yo Francisco de Esles cura beneficiado de esta Parro-
quia Única de dicho lugar, habiéndome informado y examinado el
expresado Bautizante de la materia y forma, dudé y bauticé bajo de
condición al dicho niño y suplí las sacras ceremonias de nuestra Ma-
d r e Idesia, y puse los Santos Oleos y por nombre ~ I A N U E L . fueron
sus padrinos el expresado abuelo, Manuel de Giiemcs, y María Cómez
de Giiemes vecina de este lugar a quienes a d v e r t i l a cognación espi-
ritual y demis obligaciones y testigos Francisco y J u a n de Blircena
vecinos asimismo de este dicho lugar, doy f e y lo firmé. Francisco de
Esles., I
[Real Provisi6n.I !
Partida de Baictis~iiode don Gabriel ~ n s e l l j t ode Giientes
ReintGgresc ~
E l infrascripto cura párroco de f s t a d e ' San Cristóbal de Abionzo,
arciprestazgo dc Carriedo. diócesis y provincia de Santander:
Certifico: Que al folio 170, vuelta, y 171 de m i libro d e bautiza-
dos que pertenece a este archivo parroquial, hay una partida que, co-
piada a la letra, dice así:
Al margen: Gabriel Anselmo de Güemcs.
Partida: E n veintidós dc mayo del año de mil setecientos y cua-
renta y ocho; yo, don Francisco de Esles, cura beneficiado de esta
parroquia del señor San Cristóbal, única e! este lugar de Abionzo,
valle de Carriedo, montaña de Santander, arzobispado de Bureos, bau-
ticé solemnemente y puse los santos óleos a un niño hijo legítimo de
legítimo matrimonio de Manuel de Güemes y de Francisca de Bárcena;
nieto por línea parterna de Manuel de Giiemes Montero y de María
de Bárcena, y por la materna de Bernardo de Bárcena y de Francisca
Gómez. todos vecinos y naturales de este dicho lugar. Púsele por nom-
bres Gabriel Anselmo. Nació ayer. Fueron sus padrinos don Gabriel
Fernández Campero y doña Ana de Esles: vecinos asimismo de este
dicho lugar. n quienes adverti la cognación espiritual y s u obligación,
y testigos Francisco y Gerónimo de GArcena, asimismo mis feligre-
oes. Doy f e y lo firmo. Firmado y rubricado: Francisco de Esles.
Concuerda con el original a que me refiero. Y para que conste
.expido el presente que firmo y sello con el de esta parroquia e n Abionzo
a cuatro de octubre de mil novecientos treinta y tres.
Isidoro Ruiz Góniez
Cura Párroco
!
[Escapdo Salmón.] - !

Partida de matrinionio de doir nfanttel de GNen~es nlontero y Fran-


ci.sca de Bárcena. !
1
Reintégrese i
El infrascrito cura pdrroco de ésta de San Cristóbal de Abionzo.
arciprestago de Carriedo, diócesis y provincia de Santander:
Certifico: Que al folio 57 de mi libro de .matrimonios archivado
.en el de esta parroquia, hay una partida que. copiada a la letra, dice así:
Al margen: Manuel de GUemes Montero y Francisca de Bárcena.
Recibieron las bendiciones nupciales y se mandó por el padre del eon-
. trayente e n a r r a s n la contrayente medio obrero de prados.
Partida. E n dieciocho de junio del año d e mil setecientos treinta
y seis; yo, don Francisco de Esles, cura beneficiado de esta parroquia
del Señor San Cristóbal de este lugar de ~ b i o n d o ,valle de Carriedo,
precediendo las tres proclamas que manda el Concilio cn tres días fes-
tivos al del ofertorio de la misa popular, y n o resultando impedimento
alguno más del cuarto grado de consanguinidad dispensado por S u
Santidad y habiendo recibido la bula y licencia de los señores Procu-
radores de esta diócesis, y, examinados de l a doctrina cristiana, asist[
al matrimonio que contrajeron fifanuel de Güemes Blontero. hijo legí-
timo de AIanuel de GUemes IIontero y de María de Bárcena. vecinos
<le este dicho lugar, y Francisca de Bárcena, hija legitima d e Bernardo
de Barcena y de Francisca Gómez, vecinos que fueron de este dicho
lugar. Fueron testigos Angel Gómez, J u a n Fernández Campero y J u a n
Gutiérrez de la Huerta, todos vecinos de este dicho lugar. Doy f e y
lo firmo. Firmado y rubricado: Francisco de Esles. Eorroso: tiempo.
Valga.
E s copia exacta del original a que me refiero y para que conste
expido el presente que firmo y sello con el de esta parroquia e n Abionzo
a cuatro de octubre de mil novecientos treinta y t r e s .
18iioro Rttiz Cdrnez
Cura Pirroco
[Escagedo Salmón.] i

(Desde aquí s e copian los documentos del cxpedikte de don Gabriel).


Y vuelto a reconocer el primer libro, ya citado de Bautizados, y
confirmados, al folio setenta y seis vuelta, se señaló l a partida de bau-
tismo del tenor siguiente: .. . . .. .. .. .. .. .. . .. .. .. .. ..
.
Bautismo del Padre de Yo el Licenciado don Francisco de Güemes,
los pretendientes: año beneficiado propio de la Parroquia1 del señor
d e 1716. Santo Tomé de l a ciudad de Toledo y cura
actual de la de San Cristóbal de este lugar
de Abionzo, bautice en ella solemnemente, y puse los Santos Oleos o
u n niño, que se le puso por nombre XIanuel, hijo legitimo de Manuel
d e Güemes y de s u legítima mujer Alaría de Riircena; tiene por abue-
los paternos a J u a n de GUemes LIontero y a Francisca Campero y por
maternos a J u a n de Bárcena y a Luisa Zorrilla 1; fueron sus padrinos
Cabriel Fernández Campero y María Fernández, mujer de J u a n G d

1 En unos apuntes manuscritos del Escapedo Salmón que


conservo, leeso lo siguiente: "En esta partida de nacimiento de nlnnuel
Güemes (padre de Cnbriel) eonstnn los pndres de María Bárcenn: Juan Bár-
cena y Luisa Zorrilla. Esta no es madre de Maria Bárcena, sino abueln;
los padres de nfarin Bárcena fueron Junn Bárcena y Catalina Cnmpero.
La Luisa Zorrilla es abuela, no madre de itlarfa Bárcena. Estii la partida
bien copiada. pero en el asiento el eurn equivocó la madre por la
abuela." F. nI. G. i
mez, todos oriundos de este dicho lugar: advertiles el parentesco es-
piritual y demás obligaciones; fueron testigos Francisco de Bárcena.
Juan de Güemes y Juan Ferndndez. mis feligreses, doy f e en veinti-
tres de febrero de mil setecientos y dieciséis: y nació dicho bautizado
en diecisiete de dicho mes, y lo firmo, junto con dicho padrino. Li-
cenciado Francisco Cilemes, Cabriel Fernández Campero. ........
Y en dicho Libro, al folio setenta y seis cara, se halla la partida
de bautismo del tenor siguiente: . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Bautismo de la madre En dieciseis de mayo de mil setecientos y nue-
de los pretendientes. ve nños, yo el dicho cura bautice y puse los
Año de 1709. santos óleos a Francisca. hija legítima de Bcr-
nardo de Bárcena y de Francisca Gómez; fue-
ron sus padrinos Juan de Bdrcena y Ana Gómez, a quienes adverti el
parentesco espiritual que habían contraldo y le encargue la enseñanza
de la doctrina cristiana y misterios de nuestra Santa Fe. Abuelos pa-
ternos, Alonso de Bárcena y María Ruiz; maternos, José Gómez y Ana
Campero; siendo testigos el Licenciado don Manuel Campero, Juan
Fernández y Pedro García, todos vecinos de e s t e lugar de Abionzo y
mis feligreses; doy fe y lo firmo dicho día, mes y año. El Licenciado
Angel Alazbn. El Licenciado Manuel Campero. ..............
Y habiendo reconocido el ya citado segundo Libro de Casados, Di-
funtos y Aniversarios, al folio dieciocho vuelta, sc halla la partida de
casamiento del tenor siguiente: ......................
1
Casamiento de los abue- En veintitrfs dc junio de dicho año de noven-
los paternos de los pre- t a y ocho, yo el bachiller don Diego Fernán-
tendientes. Año de dez Campero, cura único de este dicho lugar
1698. de Abionzo, desposé por palabra de presente.
que hacen verdadero matrimonio, habiendo
precedido las tres moniciones canónicas que manda el Santo Concilio
de Trento, y no resultando impedimento impediente, ni derimente, n
Nanuel de Güemes, hijo legítimo de Juan de Güemes y de su mujer
Francisca Campero de la Concha; y a JIaría de Bárcena, hija legítima
de Juan de Bárccna y dc Catalina Campero de Zorrevilla, ya difuntos,
vecinos todos de este dicho lugar; siendo testisos Alonso de B5rccna
y Gabriel Fernández y Bernardo dc Bárcenn: y lo firmo dicho día, mes
y niio arriba dichos; ut supra. Bachiller Diego Campero. Y al pie de
dicha partida hay una notación con una rúbrica, que dice así: ....
Bendiciones nupciales: Recibieron las bendiciones de la iglesia en
veintiseis de enero de noventa y nueve; man-
dóle en nrras su suegro dos carros de heredad en la Vía. Vega de AIer-
depeña, y linda con heredad de doña Jacinta de Esles. ..........
Idem otro Libro de a folio, forrado en pergamino pintado viejo,
que le falta la primera cubierta, bastante maltratado y por lo mismo
no se le reconocen los folios del principio y fin, comprende partidas de
bautismo y finados y según la primera partida, parece tuvo principio
en ocho de juino de mil y seiscientos, sin poderse leer lo demás con
la partida de bautismo.de María, hija legítima de Hernando Campero
de Sorrevilla y Catalina Fernández, s u mujer, y feneció con asiento
de confirmados, que no se comprende s u principio, ni aun el medio y
fin; y al folio ochenta y siete vuelta, s e halla la partida de bautismo
del tenor siguiente : ..............................
Bautismo del abuelo pa- E n cinco días del mes de octubre de seiscien-
terno d e los pretendien-tos y setenta y tres años, yo el Licenciado
tes. Año de 1673. hIiguel Gómez, cura beneficiado de In Parro-
quial del Señor San Cristóbal de dicho lugar
de Abionzo, bauticé solemnemente y puse los
Santos Oleos a Manuel, hijo legítimo de J u a n de GUemes y Francisca
Campero, su legítima mujer; fueron sus padrinos Cristóbal de Benero,
vecino del lugar de Llerena, y Inés María Fernsndez, vecina d e este
lugar, y les advertí la obligación y parentesco que habían contraído
con el bautizado y sus padres, y lo firmé, a los dichos día, mes y año.
Licenciado Niguel Gdniez. P o r testigo: Juan Fernández. ........
Habiendo vuelto a reconocer el primero ~ i b k o ,ya nominado, de
bautizados y confirmados, al folio diecisiete vuelta se halla la partida
bautismo del tenor siguiente: ........... ............
l.
l
Bautismo de la abuela E n treinta y un días del mes de agosto de mil
d e los pretendientes. seiscientos y ochenta y un aiios, yo el Licen-
Año de 1681. eiado don Diego Ferndndez de Arce. clerigo
presbítero, vecino del lugar de Villa Carriedo,
por enfermedad del Licenciado don BIiguel Gómez de Gliemes, cura
de este lugar de Abionzo y con s u permiso, bautice solemnemente a
3laría, hija legítima de Juan de Rfircena y Catalina Campero. vecinos
de este dicho lugar; fueron sus padrinos Miguel Pérez dc Camino e
Isabel de BBrcena, a quienes adverti el parentesco espiritual que ha-
Ihan contraído con el bautizado y sus padres; fueron testigos Juan
de Esles de Sola-Huerta y Junn Gómez de Güemes, sacristhn de dicha
parroquia; y lo firmo, con uno de dichos testigos. Licenciado don
niego Fernández de Arce. Juan de Esles de Sola-lluerta
l
........
Asimismo ue reconoció de nuevo el secundo Libro, citado en estos
Autos, digo, Diliaencias, de Casados, Velados, Difuntos y Aniversarios,
y al folio veintidós cara, s e halla, aunque carcomida por arriba, la
partida del tenor siguiente: ..........................
Casamiento de los abue- Yo el bachiller don Diego Fernández Cam-
los maternos. Año dc pero, cura beneficiado de esta Parroquia1 del
1702. Señor San Cristóbal de este lugar de Abionzo.
despxié por pnlabras de presente quc hacen
verdadero matrimonio. habiendo primero precedido dispensa de S u San-
tidad. de cuarto grado de consanguinidad, remitida al Señor Obispo
de falencia, por sede vacante de esta Diócesis, y habiendo precedido
ias tres moniciones canónicas que dispone el Santo Concilio de Trento:
ri Bernardo de Bárcena, hijo legítimo de Alonso de Bárcena y de s u
mujer legitima María iluiz; con Francisca Gómez, hija legítima de
José Gómez y de su legitima mujer Ana Campero de Zorrerilla, siendo
testisos Francisco Ruiz, sacristán y Gaspar Ferndndez y Juan Perez
de Esles, mayordomo: todos vecinos de este lugar; y lo firmo en di-
cho lugar, dín, mes y año dichos: ut supra. El bachiller niego Fer-
ndndez Campero. Y al margen de dicha partida y cerca del principio
de ella, en letra y números, hay esta nota: :'En enero dieciséis de mil
setecientos y dos", que parece seria la fecha:de la partida, por parecer
ser de una misma letra y puño, que la dicha partida. Y mas abajo, a
dicho margen, hay la notación siguiente: "Veláronse" y estú rubricado.
Y vuelto a reconocer el primero, ya citado, de bautizados, al folio
cuarto cara se halla la partida de bautismo del tenor siguiente: ....
Eautismo del abuelo En primero de setiembre de mil seiscientos
materno. Año de 1677. y setenta y siete años, yo el Licenciado Mi-
guel Gómez de GUemes, cura beneficiado en
la Parroquia1 del Señor San Cristóbal de este lugar de Abionzo, y
vicario de este Valle de Carricdo, por Su Señoría Ilustrisima don En-
rique de Peralta y Cárdenas, mi señor, bauticé y crismé a Francisco y
Bernardo, hijos legítimos de Alonso de Bdrcena y de María Ruiz Cam-
pero, mis feligreses, que fueron de un parto; fueron padrinos de Fran-
cisco, Diego de Güemes y Gutiérrez y Joscfa Campero; y de Bernardo,
Roque Campero y María Fern6ndez Campero, todos vecinos de este
lugar de Abionzo y Villa Carricdo. Advertíles el parentesco, siendo
testigos, Asensio Rúiz y Juan de Güemes, sacristdn. Licenciado nligíiel
Cdmez. ........................ ................
!
Siguiendo el reconocimiento de Libros, i n el que le falta el forro
del Per~nmino,n la cara, al folio noventa y uno cara, se halla la par-
tida de bautismo del tenor siguiente: .....................
Bautismo de la abuela En diecisiete días del mes de julio de mil se-
materna. Año de 1675. tecientos, digo, seiscientos y setenta y cinco
aííos, yo el Licenciado Miguel Gómez, cura
propio de la Parroquial del Señor San Cristóbal de Abionzo, bauticC
~olemnementea Francisca (y puse los Santos Oleos) hija legítima de
José Gómez y de Ana Campero de Sorrevilla, sus le&itimos padres; fue-
ron sus padrinos Juan de Esles de Sola-Huerta e Isabel Campero de Sorre-
villa, tíos de la bautizada, a quienes les advertí el parentesco y obliga-
ción de la bautizada y sus padres; siendo testigos Pedro Gómez, Domingo
Sigler y Pedro Gómez, menor en días; todos vecinos de este lugar de
Abionzo, y lo firmamos en fe de ello el padrino y yo. Licenciado nlinztel
Go'tncz. Jxan de Esles, Pedro G6tnez. I

Y en dicho Libro, al folio ciento y seis, cara, se halla la partida


cle cnsamiento del tenor siguiente:...... ................
.l.

Casamiento de los se- En nueve días del mes de setiembre del año
gundos nbuelos pater- mil seiscientos y cincuenta y ocho; yo el Li-
nos. Aíío de 1658. cenciado Alonso Campero, cura y beneficiado
en esta iglesia de San Cristóbal de Abionzo,
dcsposé por palabras de presente que hacen verdadero matrimonio,
1 !
GÜEhlES DOCUMENTADO 93

asl como la cuantía de los valores administrados; segundo, la con-


siguiente importancia del cargo de Tesorero; tercero, el amplio
crédito personal de Güemcs hIontero reflejado en el número y
calidad de sus fiadores.
El "Estado General de la Real Caja y Tesorería de Salta'."
por el mes de diciembre de 1807 puede verse en A. G. N., 1x4-7-6,
legajo 7, Intendencia de Salta, 1808/10. Fotocopia en N. A.
DESPACHOS Y SERVICIOS D E L TESORERO
DON GABRIEL DE GUEBIES

[Advertencia: E n estas copias hemos tenido el cuidado de poner los


documentos en orden de fechas, lo que no se ha hecho al compaginar el
libro original. D. C.]
Don Carlos por la pracia de Dios, Rey de Castilla. de León. de
Aragón, de las dos Sicilias, de Jerusalem. de Navarra, de Granada,
de Toledo, de Valencia. de Galicia, de 1\Iallorca, d e Sevilla, de Cer-
deña, de Córdoba, de Córcega, dc XIurcia, de Jaén, de los Algarves.
de Algecira, de Gibraltar, de las Islas de Canaria, de las Indias.
islas y tierra firme del m a r Océano, Archiduque de Austria. Duque
de Borgoña, de Brabante y de MiIBn, Conde de Abspurg, de Flandes,
Tirol p Earcelona. Señor de Vizcaya y de nIolina, etc. P o r cuanto
admitida a don Manuel Espejo la renuncia que ha hecho del empleo
de Tesorero Oficial Real de las Cajas de Jujuy que le conferi por m i
Real Decreto de once de abril del año próximo pasado, he venido por
otro d e veinte de enero Último en conced6rosle a vos don Gabriel de
Güemes iilontero. P o r tanto quiero y es m i voluntad le ejerzftis según.
y con la misma jurisdicción y facultades, que vuestros antecesores.
arredándoos, a lo que por Leyes, Cédulas, Provisiones, Instrucciones.
y Ordenanzas están mandado p en adelante se ordenare. Y mando a l
Gobernador, y a los de m i Consejo de la Indias, que, luego quc vean
este Titulo, tomen y reciban de vos el juramento con la solemnidad
que se requiere, y debéis hacer (le que bien. y fie!mente ejerceréis el
expresado empleo, y que habihndolo hecho, y puéstose Testimonio de 61.
en el mismo titulo, ellos, m i Virrey del Perú, el Presidente y Oidores
de m i Real Audiencia de la Ciudad de la Plata; el Gobernador Capitán
general de la Provincia del Tucum5n y todas las personas, estantes y
habitantes en la jurisdicción de las mencionadas cajas, os hayan, reciban
Y tcnnan por tal Tesorero Oficial Real de ellas, precediendo el que
deis fianzas, legas, llanas y abonadas en la cantidad que las hubicren
dado vuestros antccesorcs, para L buena administración de mi Real
Hacienda. Y es igualmente m i voluntad que hayáis y llevéis de salario
cn cada año de los que siroicreis este empleo, la misma cantidad flue hu-
Lieren gozado vuestros antecesores y que se os pague según y de la
manera que a ellos, desde el día en que por testimonio signar10 de
Escribano público constare habéis tomado posesión pues con vuestras
Cartas de pazo, el expresado testimonio y traslatlo asimismo signado
de ente Título, mando se reciba y pase en cuenta, lo que así se os diere,
y Faaarc sin otro recado alguno. Todo lo cual quiero se guarde, y cum-
CÜELIES DOCUAIENTADO 95

pla, con la precisa calidad de que antes de tomar posesión justifiquéis


no deber maravedís algunos a mi Real Hacienda, por lo que toca a
aquellos Reinos, como por lo que mira a éstos. ha constado no de-
berlos, y la de que satisfagáis en la forma prevenida por mi Real Cédula
de veintiséis de mayo de mil setecientos setenta y cuatro, la cantidad
correspondiente al derecho de la media anata por el salario que habéis
de gozar, y tercera parte más por los aprovechamientos (si los hubiere)
respecto de que según lo que últimamente he resuelto debe satisfacerse
en estos términos y su importe entrar efectivamente en mis Cajas
Reales, con m6s el dieciocho por ciento, que se os carga por la costa
de traerlo a España a poder de mi Tesorero general. Y de este Titulo
se tomará razón en las Contadurías generales de la Distribución de mi
Real Hacienda (adonde está agregado el registro general de mercedes)
y de mi Consejo de las Indias dentro de dos meses de su data, Y no
ejecutándolo así quedar.? nula esta gracia y tambien se tomar5 en las
enunciadas Cajas de la Ciudad de Jujuy. Dado en el Pardo a tres de
marzo de mil setecientos setenta y siete.
Yo EL R E Y [Hay una rúbrical
Yo don Miguel de San Martin Cueto, Secretario del Rey, nuestro
Señor lo hice escribir por su mandado.
[Una rúbrica] .
Refrendante y secretaria,
ochenta y ocho reales plata.
Título de Tesorero Oficial Real de las Cajas de la Ciudad de Jujuy
a don Gabriel de Giiemes Blontero. Felipe del Arco. BIanuel Sanz de
Casafonda. Don Felipe Santos Dominguez.
Torndse razón en la Contaduria Tomóse razón en la Contaduría
General de la Distribución de la gencral de las Indias; Y Re pre-
Real Hacienda. viene que sin embargo de gozar de
Madrid, seis de marzo de mil sete- salario a quinientos pesos los Ofi-
centos setenta y siete. cinles Reales de Jujuy. Interin s e
resuelve el Reglamento general de
Leandro Bovbón aumento de sueldos se hal!a de-
clarado por S. 31. y expedidas las
órdenes convenientes por la vía
reservada, deban disfrutar el de
un mil pesos. Nadrid, seis de mar-
zo de mil setecientos setenta y
siete.
Toniás Ortiz de Landarztri,
teniente de Gran Canciller.
Registrado.
Juan Angel de Cerain [Aqui un sello] Jxan Aitgel de Cerain
Derechos dieciocho reales plata [Hay una rúbrica].
Derechos de oficios, seis reales de plata [Hay una rúbrica].
Dieciocho reales de plata [rúbrical
Gratis [rúbrical
Don Manuel de la Vega. Escribano de Cúmara del Rey nuestro
Señor, e n s u Real y Supremo Consejo d e Indias.
Certifico que hoy dia de la fecha se presentó por don Gabriel d e
Güemes Montero, ante los Señores de él, este Real Título quc tiene
,de S. 11. (que Dios guarde) para servir el empleo de Tesorero Oficial
Real de las Cajas de la ciudad de Jujuy; el cual visto, oldo y obedecido
por Dichos Señores mandaron hiciese el Juramento que por él se pre-
viene y el expresado don Gabriel de GUemes 3Iontero le hizo y yo se lo
recibí en presencia del Consejo, con la solemnidad que en tales casos
Re acostumbra. Y para que conste y obre los efectos que haya lugar e n
derecho, doy la presente en Madrid a diez de marzo de mil setecientos
k
setenta y siete.
Alanuel de la Vega '

. Ruenos Aires, 13 de noviembre de 1777.


Cúmplase lo que S. 3I. manda en este Real Despacho y tómese
razón en la Contaduría Mayor d r Cuentas.
Don Pedro de Ceballos
Queda tomada la razón. Tribunal Nayor de Cuentas d e Guenos
Aires. Catorce de noviembre de mil setecientos setenta y siete.
Francisco de Cnbrera
Salta y enero 1 4 d e 1778.
Guárdese y cúmplase la Real Cédula de S. BI. según su contenido.
Lo mandó y firmó el señor don Andrés AIestre, coronel de los Reales
Ejércitos de S. Al.. Superintendsnte de Real Hacienda, Ramos de
Cruzada, Sisn y Guerra. Gobernador y C a ~ i t i i nGeneral de esta pro-
vincia del ~ u c u m i i n .
Andrés nlestrc
P o r mandato de S. S.
Jttan nlnnzrel de Rojm
Secretario de Gobierno y Guerra

Don Manuel de la Roca del Consejo de Su Ilajestad, su Secretario,


IIinistro primer Contador Fiscal por la Real Hacienda, e n la inter-
vención dcl cargo de la Tesorería nlayor de 13 Guerra.
Certifico que el señor don Gabriel de Güemes Montero, h a servido
al Rey en la referida s u Tesorería hIayor desde el año de mil setecientos
y setenta con todo desempeño a satisfacción de sus superiores; cuyo
mérito le ha premiado Su Majestad confiriéndole la Tesorería do las
Reales Cajas de Jujuy en el Reino del Perú. Y respecto de pasar a .
ejercer este empleo, para que conste s u primer servidumbre, por la
que el Rey le ha dispensado la nueva gracia. doy la presente en Madrid
a primero de abril de mil setecientos y setenta y siete.
iIIatiitc1 de la Roca
de abril de 1777.
~ I A D R I D , 19
Don Manuel de la Roca. Contador de la Tesorería General.
Certifica el mérito que don Gabriel de Güemes contrajo e n
aquella oficina en siete años que estuvo empleado e n ella.

D ON MANUELDE BASAVILBASO, administrador principal por S. 11.


de la Real Renta de Correos, Posta y Estafetas en esta provincia del
Rio de la Plata. la del Paraguay, Tucumán. Cuyo, etc.
P o r cuanto entre las facultades que me están concedidas como a tal
Administrador principal, e s una la de poder nombrar prorisionalmente,
Interin doy cuenta a la superioridad para su aprobación, las personas
a quienes tenga por conveniente encargar las administraciones subal-
ternas de la axregación a ésta, las plazas de oficiales de ellas, mozos
d e oficio, maestros de postas, correos conductorcs y demás empleos
inferiores de la misma Real Renta, que penden de esta Administración,
usando de esta autoridad y atendiendo a las circunstancias que con-
curren en don Gabriel de Güemes, he tenido por conveniente nl servicio
del Rey y del público nombrarle para Administrador de Correos de la
ciudad de Jujuy.
P o r tanto, d e parte de S. Al. ruego p encargo, y de la mia pido y
suplico a los sefíores jueces y Ninistros subdelegados y otros cuales-
quiera que ejerzan jurisdicción ante quienes este Título se exhibiere,
hayan y tengan a1 citado don Gabriel de Güemes por tal Administrador
de Correos, Estafetas y Postas de la ciudad y jurisdicción de Jujuy,
y le guarden y hagan guardar bien. y cumplidamente, mientras se
mantenga en el servicio de la expresada Real Renta y goce este empleo,
las preeminencias y exenciones, que por repetidas Reales Ordenes Y
Cédulas tiene S. 11. concediclas y confirmadns a los dependientes de
ella y particularmente la exención de la jurisdicción ordinaria e n lo
civil y criminal, por deber estar sujetos privativamente nl Señor Sub-
delegado de la Real Renta, las que le reservan de cargas coneejiles
y de las de cobrar p ~ d r o n e sde Ics oficios gravosos de la República; que no
se les aliste para soldados; que no puedan e m b a r ~ a rlos caballos de
postas y caballerías destinadas a conducciones de valijas y otro cuales-
quiera ministerio de la Real Renta para cosa alguna, de cualesquiera
calidad que sea; que no se les eche alojnmiento de gente de guerra,
(le infantería o caballería, así de asiento, como de tránsito; que no se les
pueda tomar, n i embargar sus carruajes; que no se les incluya en el
repartimiento de cuarteles; que se les dé la cebada y paja que necesiten
para la .manutención de los caballos de postas y caballerías que ae
cmpleen en la servidumbre de la Real Renta, aunquc sca de la que
estuviese embargada para el Real servicio al precio corriente; que
puedan tener dichas caballerfas en los prados y cotos rescrva<los,
que estuviesen m8s cerca de los lugares donde se hallasen las postas; y
últimamente, que puedan traer armas ofensivas y defensivas para el
ressuardo de sus personas siempre que se hallasen ejerciendo su empleo,
;)or convenir así al servicio de S. 11.; y de infrigir a estas exenciones
los contraventores incurrirln en las penas contenidas en las citadas
Reales Cedulas y demls que se impondrbn a proporción del exceso del
que la contraviniere en todo o parte, y de este nombramiento, sc!!ado
con el sello de las armas Reales, se ha de tomar la razón en los Libros
de la Intervencih principal de la mencionada Real Renta en esta
ciudad, sin cuyo requisito no ha de tener algún efecto. Dado en Buenos
Aires a veintiocho de setiembre de mil setecientos setenta y ocho años.
Man~telde Baaavilbaso
[Aqui un sello]
Tomóse razón del Título antecedente en los libros de la Interven-
ción principal de la Renta de Correos, Postas y Estafetas de esta
ciudad, que estS n mi cargo, ut supra.
Ba~tolontkRaimundo nluiíoz
T~TULO de Administrador de Correos de Jujug a favor de don GabrieI
de CUemes.
Cúmplanse, y gulrdense los fueros y exenciones, y preeminencias
que se expresan en este Título, por ser conforme a lo que S. 11. tiene
mandado en repetidas Reales Cedulas a favor de los dependientes de 1s '
Rentn de Correos y Postas, etc., exceptulndose los casos referidos en
Real Decreto de 20 de diciembre de mil setecientos setenta y seis.
Buenos Aires, 28 de setiembre de 1778.
VÉrt C
Antonio de Aldao
Los casos exceptuados en el Real Decreto de 20 de diciembre de
1776 que se cita son los siguientes:
En lo criminal las incidencias de tumulto o motín, toda conmo-
ción o desorden popular, el desacato a los magistrados, quebranta-
miento de bandos de policfa y de las ordenanzas municipales de los
pueblos que les comprehenden y las causas de contrabando y fraudes
cometidos contra otras rentao. Y en lo civil los pleitos -de cuentas.
particiones, concursos de acreedores y juicios posesorios de bienes
pertenecientes a vínculos, aniversarios patronatos de legos y otras
disposiciones de tracto perpetuo y sucesivo ut supra.
Aldao
CÜELIES DOCUMENTADO

Muy señor mío: Conviniendo el que se esclarezca mi conducta en


orden al manejo de estas Cajas se servirá Ud. mandar al Escribano
de ellas certifique a continuación cuanto sc le ofreciere y pareciere
y fecho me lo devolvertí usted original para los efectos que me con-
vengan. Nuestro Señor guarde a Ud. muchos años. Jujuy, dieciséis de
noviembre de mil setecientos ochenta y dos. Beso las manos de usted
su más atento seguro servidor. Gabviel dc Giienies nfontcro. Señor
Contador Oficial Real don Nicolás de Villacorta y Ocaña. Real Con-
taduría de Jujuy, dieciseis de noviembre de mil setecientos ochenta
y dos. El Escribano de Real IIacienda a continuación de este Decreto
certificará lo que se le ofreciere y pareciere sobre el asunto a que se
contrae el oficio que antecede. Villacorta. Ante mí: Franci.~co tle Go-
genda, Escribano de Hacienda Real. Digo yo don Francisco de Gogenda,
vecino de esta ciudad y escribano de Real IIacienda, Minas y Registros
Propietarios de estas Cajas Matrices y ciudad de Jujuy que Certifico
n los Tribunales Superiores donde esta fuere presentada que el señor
tesorero oficial r e d de ella empezó a servir su empleo en noeve de
febrero de mil setecientos setenta y ocho, continuando sin intermisión
con insuperable celo y aplicación hasta este día. Hace tres años que
yor las enfermedades de su compañero ha desempeíiado cabalmente y sin
experimentarse el menor atraso en el giro. gobierno y dirección de
todos los negociados que le son afectos a las obligaciones de ambos
3Iinistros. Su desinteres h a sido tan constante y fijo que no a610
no admitido obsequios y regalos de los comerciantes, transeúntes, ni
vecinos; pero ni aun los legítimos derechos que por arancel se señalan
y justamente le corresponden en virtud de reales. y superiores declara-
ciones, con cuyo objeto, desde que empezó a servir me dio orden expresa
para que los que le perteneciesen por cualquier motivo, no los cobrase
ni admitiese y si los dejase a beneficio de las partes. A sus desvelos,
eficacia y continuado trabajo se debe el considerable aummto que
en estas Cajas ha tenido la Real Hacienda, como se demuestra en todos
los ramos que abrazan los Libros Reales comunes generales, que en
cste día se me han puesto de manifiesto, sobre cuyo punto con esta fecha
y a presencia de ellos he dado Certificación separada por orden de este
Tribunal. En la habilitación y envío de las tropas así veteranas como
milicianas a las provincias del Perú, impendió un considerable trabajo
practicando personalmente con el mayor esmero todas las operaciones
precisas al más pronto y cabal desempeño de estos interesantes y
laboriosos encargos solicitando para su conclusión y verificación cau-
flales prestados con cargo de reintegro por no alcanzar los de estas
Cajas a totalizar los muchos gastos que se han ocasionado en los
que observó la miis estrecha economla y buena conducta como todo
más bien se patentiza por los respectivos expedientes comprobantes de
Datas. Que es público y notorio su desinterés, ingenuidad y brien:~
conducta, y a mí que todo lo anteriormente dicho me consta de ciencia
cierta, como que he presenciado y concurrido al pormenor de los pro-
cedimientos de este IIinistro. Que es cuanto tengo que Certificar en
virtud de orden de este Tribunal de Real Hacienda y a pedimento
de su merced en esta ciudad de San Salvador de Jujuy en dieciseis dias
del mes d e noviembre de mil setecientos ochenta y dos años. E n testi-
monio de verdad. Francisco de Gogcnda, Escribano de Hacienda Real,
Minas y Registros.
Muy señor mfo: Estando en la sazón entendiendo en las diligencias
concernientes al esclarecimiento de mi conducta en todo aquello que
dice relación al ejercicio y manejo de m i empleo; p considerando que el
oficial mayor de estas Cajas como que toca los asuntos con más
inmediacidn podrá mejor que otros expresar de ella, se ha de servir
usted hacer que impuesto del contenido de este, y objeto a que s e
dirige, exponga sobre el asunto pueda y deba y fecho que sea, devol-
vérmelo para los efectos que llevo indicados. Nuestro Señor guarde
n usted muchos años. Jujuy, veintitrés de noviembre de mil setecientos
ochenta y dos años. pesa la mano de usted s u mayor servidor. Gabriel
de Giietnes Montero. Scñor Contador Oficial Real don Nicolás de Villa-
corta y Ocaña. Real Contaduría de Jujuy, veintitrés de novirmbre de
mil setecientos ochenta y dos. El oficial mayor impuesto de lo que
contiene el presente oficio exponga conforme a 151 lo que sobre la materia
le consta. Villacorta. Ante mi, Francisco de Cogenda, Escribano d e
Hacienda Real. El oficial mayor de estas Reales Cajas hIatrices de
Jujuy, en inteligencia del objeto que solicita el señor tesorero de ellas,
digo que constante p notoria la continua asistencia d e dicho scñor al
despacho de ocurrencias que s e presentan en el tribunal de s u cargo
expidiendo las correspondientes providencins cori la mayor agi!idad
y prontitud sin d a r lugar a l a menor queja por parte de los interesados
en ellas aun e n las ocasiones y tiempos en que el señor contador s u
compañero por los sabidos habituales padecimientos que lo aquejan y lo
tienen reducido n un lamentable deplorado estado. no ha podido concurrir
n evacuar simultáneamente las operaciones de oficio: que en la exacción
de los Reales Derechos y contribuciones a s u Majestad e s tan puntual
cl mismo señor Tesorero, como negligente en la recaudación de aquellos
rocos. que por derecho y disposición de los superiores le competen.
no obstante de la cortedad del sueldo que disfruta insuficiente rr l a
verdad para ~ u f r a g a rn la decencia que debe llevar; que en el proce-
dimiento, con que ncogtumbra conducirse al cobro de aquellos reales
intereses camina con tanto pulso y tiento, que sin dejar sentir la inflexi-
Idlidad, sólo deja conocer en los efectos la eficacia de s u celo combi-
nando con modo exquisito todas las puntualidades de éste con las con-
descendencias del m i s oficioso agrado sin estragar en un ipice el rigor
de l a observancia d e l a ley y suptriores respectivos preceptos. Que e s
cuanto ciñéndose al contexto que dio mérito a estos asertos, puedo
exponer sobre su materia. Jujuy, veintitrés de noviembre de mil sete-
cientos ochenta y dos. Hernrenegildo de Echatiri.
Don Nicoliis de Villacorta y Ocaña, contador oficial real de csta
provinci.? del Tucumin y comisario de guerra e n ella. Certifico n los
Tribunales Superiores donde ésta fuere presentada y haya lugar en la
comitancia con la parte de mi compañero el Tesorero Oficial Real don
Gabriel de Giiemcs hIontero cómo desde mi ingreso en estas Cnjas
Reales, he visto y experimentado por m i mismo la notoria aplicación.
desinterés y celo conque ha manejado e n s u ministerio, procurando el
aumento de los reales haberes según s e h a patentizadú por extractos
y planes remitidos a la Intendencia General de Buenos Aires y h a
despachado por s í solo cuantos asuntos han ocurrido en el Tribunal
de nuestro cargo, todo el tiempo que he estado yo enfermo sin que por
esta causa se hayan postergado ninguno de ellos sin embargo de s e r
laboriosa la tarea que demanda esta Caja Matriz y las seis subalternas
que están n s u cargo, como es bien constante, mereciendo el general
f
aplauso de todo es vecindario así por la prudencia con que s e maneja
en la exacción de os Reales derechos como en las pruebas que ha dado
de su justificada conducta. Y para los efectos que le convengan doy la
presente certificación en esta Real Contaduría de San Salvador de
Jujuy a veintitrés de noviembre de mil setecientos ochenta y dos años.
Nicolás de I'illacorta 1, OcaRa.
Concuerda este traslado con los originales de s u contexto a que
me remito y de pedimento del señor tesorero don Gabriel de Güemes
Monten, di el presente corregido y concordado y es fecho en esta
ciudad a diecinueve de enero de mil setecientos ochenta y tres, siendo
testigos don J u a n José de Sandoval y don Joaquín Echeverría y en f e
de ello lo signé y firmé.
E n testimonio [aquí un signo de cruz1 de verdad. -
Derecho cuatro reales foja del signo.
Alanite1 de Borda
Escribano público y de Cabildo
Sala Capitular de Jujuy, enero 1 4 de 1783.
Las individuos de este Ilustre Cabildo informamos, cómo el testi-
monio de fojas esti autorizado por 3Ianuel de Borda, escribano público
y de Cabildo y la firma y signo que s e halla al pie es de s u puño y
letra y la propia que usa en todas sus actuaciones en las que se le dan
~ n t e r af e y creencia, en Juicio y fuera de él; lo que así certificamos
por ante nos mismos a falta de otro escribano.
Ventttra <le AlarqtiZegui Jitan Ignacio de Ilendizábal
Diego de la Corte

TiIuy Ilustre Cabildo Justicia y Regimiento de esta Ciudad.


Don Gabriel de Giiemes Montero, tesorero oficial real de esta
Provincia del Tucumán, etc. Ante V. S. en la mejor forma que haya
lugar e n derecho y al mío convenga parezco y digo, que conviniéndome
esclarecer según el espíritu de las leyes mis procedimientos y conducta
e n el manejo de los soberanos intereses que están a mi cargo y en el
desempeño de mis respectivos Ministerios, se ha de servir la justifica-
ción de V. S. recibir una sumaria información con citación del Pro-
curador General y Defensor de Real Hacienda, así de los vecinos de
esta ciudad como de los comerciantes existentes en ella, con concepto
al interrogatorio siguiente:
Primeramente. s i les consta de mi diaria asistencia al Tribunal
y s i e n el despacho s e les detiene, molesta o incomoda, o por lo contrario.
digan s i han hallado en mi toda suavidad, pr0ntitud.y buen modo en
cuanto ha dependido del servicio del Rey.
It. S i les consta que por las continuadas enfermedades de m i
compañero don Nicolis de Villacorta y Ocaña he desempeñado las
obligaciones de estas Cajas, con el debido arreglo, esmero y prontitud,
como s i aquél hubiese asistido al diario trabajo que demandan s u s
vastas y laboriosas obligaciones.
It. Digan s i para percibir y cobrar todos los derechos así Reales
como IIunicipales, uso de tiranla, violencia y mal modo, o en contrario,
s i me valgo de la debida suavidad, dulzura y buen modo, manclado
observar por la imponderable piedad del Rey y s i en esto, como objeto
primario de mi obligación me manejo desnudo de toda parcialidad
y con la debida eficacia, celo, igualdad y un total inseparable público
desinterés, cuidando s6lo de acrecentar los que a S. 11. competen.
It. Digan s i para la habilitación y envio de las tropas veteranas
y milicianas que por esta ciudad han pasado a las provincias del Perú,
he comprado todos los efectos necesarios de cuenta de la Real Hacienda,
a costa de mucho trabajo y con todo el ahorro posible para aminorar
estos gastos y s i por tener pocos caudales en estas Cajas los he solici-
tado prestados con cargo de reintegro para que por s u falta no s e
atrasase el servicio de S. 11. en aquella sazón.
It. Digan, s i en la pasada sublevación suscitada por la plebe de
esta ciudad e indios conversos de tobas, concurri personalmente a s u
defensa con todo el honroso espíritu de buen 3Iinistro. vasallo y com-
patriota, sufriendo en todo el tiempo del sitio. todas las fatigcs que
ocasionó, sin reparar e n los continuos riesgos que se presentaban y
fii n un mismo tiempo atendí n las obligaciones <le mi nlinisterio
satisfaciendo con el debido orden los prcst respectivos que en J u n t a
de Guerra s e señaló a todos los milicianos que s e alistaron e n la clase
(le fieles para esta defensa. manejándomc e n todo con la debida cir-
cunspección, celo, economía y desinterés. .
It. Digan, todo lo dernlís que s e les ofreciere y pareciere sobre m i
modo de vida y conducta desde que llegue a este destino. certificando
V. S. a continuación cuanto supicren conforme al antecedente interro-
natorio: P o r tanto,
A V. S. pido y suplico me hallan por presentado y se sirvan proveer
y mandar como llevo pedido por s e r de justicia, jurando no proceder
(le malicia y para ello, etc.
Gnbricl de Giienies dfontero
Sala Capitular de San Salvador de Jujuy y diciembre 18 de 782.
P o r presentada en cuanto ha lugar en derecho. Certifiquen los
que lo deban; y los demás juren y declaren al tenor (le1 interrogatorio
que se admite con citación del Procurador General y se comete. al señor
Alcalde de primer voto.
Francisco de Bnsterra Jos4 Antonio de Co~ecken Diego de la Corte
Proveyeron, mandaron y firmaron lo de suso los señores individuos
GUEXES DOCUMENTADO 103

de este Ilustre Cabildo Justicia y Regimiento, es a saber, el coronel de


milicias don Francisco de Basterra, alcalde ordinario de primer roto;
don José Antonio de Goyechea, de segundo y don Diego de la Corte,
alcalde mayor provincial, Únicos vocales actuando por ante mí, de que
doy fe.
AIanuel de Borda
Escribano Público y de Cabildo
En dicho día, mes y año, cité la persona del Procurador general
para esta información y quedó enterado en ella de que doy fe.
Borda
Escribano
Incontinenti hice otra citación al Defensor de Real Hacienda de
que doy fe.'
Borda
Escribano
En dicho día, mes y año, respecto de ser uno de los testigos
de excepción el general don José de la Cuadra, pase este expediente
para su certificación que doy fe.
Borda
Escribano
Don José de la Cuadra, administrador general de las Reales Rentas
de tabacos, naipes 3' correos, etc.
Certifico en cuanto puedo y ha lugar en derecho a los Tribunales
Superiores donde ésta fuese presentada, cómo en virtud del Pedimento
y demAs diligencias que se me han pasado por el señor Alcalde de primer
roto, a consecuencia de la comisión que se le h a conferido por los
señores que componen este Ilustre Cabildo, es constante, público y
notorio, pública voz y fama, cómo el señor Tesorero Oficial Real de
esta provincia del TucumAn, don Cabriel de Ciiemes IIontaro, con su
diaria asistencia al Tribunal en el despacho de los crecidos expedientes
que se controvierten y promueven, consigue el pronto y cabal desempeíio,
Ilcnando debidamente con su modo apacible, suavidad y dulzura el quo
las partes presentantes y traficantes que giran por esta vereda con-
tribuyan a S. 31. los respectivos derechos que le pertenecen, sin hacerles
gravoso la satisfacción que compete. Que con el motivo de las conti-
mmlas enfermedades de su compafiero el señor Contador don NicolAs
de Villacorta y Oaña. ha desempeñado dicho don Gnbriel las obliga-
ciones de su instituto con el debido arreglo y esmero y prontitud, como
si aquel hubiese asistido al diario y laborioso trabajo que demandan
las vastas y laboriosas obligaciones de las seis cajas subalternas que
Re hallan sujetas a esta Matriz. Que le consta de ciencia cierta que para
percibir y cobrar todos los derechos así Reales como Nunicipales
usa de la debida suavidad, dulzura y buen modo como objeto propio
de su obligación y que en el manejo de este BIinisterio se halla des-
nudo de toda parcialidad y un total desinteres, cuidando sólo como
debe de acrecentar los que a S. BI. le son debidos. Que es público y
notorio que para la habilitación y envío de las tropas veteranas y mili-
cianas que pasaron por esta ciudad el año pasado de mil setecientos
ochenta y uno a las Provincias del Perú por disposición del Excelen-
tísimo señor Virrey de estas provincias ha comprado todos los efectos
necesarios de cuenta de la Real Hacienda a costa de mucho y crecido
trabajo y con todo el ahorro posible por aminorar sin duda estos
gastos, respecto a los pocos o ningunos caudales que según noticias
que tuvo en aquel entonces se hallaban en arcas reales los ha solicitado
prestados de varios individuos con calidad de reintegro, a f i n d e que
por su falta n o se atrasase el servicio de S. XI. en aquella sazón. Que
en la sublevación suscitada por la plebe de esta jurisdicción en con-
sorcio de los indios tobas conversos de la Reducción de San Ignacio,
concurrió personalmente a s u defensa. con el honroso espíritu de buen
ministro y vasallo de S. BI. sufriendo e n todo el tiempo del sitio todas
las fatigas que ocasionó, sin reparar en los continuos y evidentes
peligros que se presentaban, sin que por esta causa dejase de atender
a las obligaciones de su ministerio, satisfaciendo puntualmente los
prest que eran correspondientes, los que en Junta de Guerra y Cabildo
pleno se señaló a todos los milicianos que se alistaron en clase de fieles
para esta defensa. manejándose en todo con la debida circunspección,
economía, desinteres y celo. Que igualmente e s general s u buena
conducta. religiosa cristiandad y juicioso modo de pensar. Que es cuanto
tiene que exponer y certificar obre el particular. Jujuy y noviembre
diecinueve de mil setecientos ochenta y dos aííos.
José de la Ctratlra
Antc mí.
11lan11elde Borda
Escribano Público y de Cabildo
Don Cregorio de Zegada. coronel de milicias y gobernador de
nrmas de esta ciudad de San Salvador de Jujuy, sus fronteras y juris-
dicción por S. 11. (que Dios guarde), etc.
Certifico en cuanto puedo, debo y ha lugar en derecho a todos
los tribunales que la presente vieren, como en virtud del anterior
proveído y con conocimiento del pedimento que estli por cabeza, es
constante, público y notorio que el señor Tesorero de esta provincia
don Gabriel de Güemes Montero, para cumplir con las vastas obliga-
ciones de su ministerio no sólo sufre el diario trabajo que demandan
durante las horas que s e hallan señaladas sino que cuasi diariamente
las duplica para facilitar el despacho de la Aduana y conclusión la más
puntual de los expedientes que en ella se versan lo que se hace m á s
yravoso porque el compañero don Nicolás de Villacorta y Ocaña.
acosado hace tres años de sus enfermedades no ha-podido dedicar s u
atención a lo que le competía, por cuya razón han recaído las obliga-
ciones de ambos en el primero. Asimismo me consta de ciencia cierta
que para la exacción de derechos así Reales como AIunicipales usa de los
medios suaves, dulces y equitativos, sujetándose a las piadosas bc-
nignidades de S. M. Igualmente estoy cierto de que desde s u ingreso
Re ha hallado el citado señor Tesorero desnudo de todo interés tanto
que a m i presencia h 3 repulsado obsequios amistosos y hasta los de-
rechos que le competian por actuaciones judiciales, propios de s u
ministerio. E n la habilitación y envío de las tropas veteranas y mili-
cianas que desde esta ciudad han pasado a las provincias del P e r ú
s e h a esmerado e n facilitarles con toda prontitud sus transportes econo-
mizando por cunntos medios le proporcionaba su celo todo el ahorro
posible de los soberanos intereses, los que por hallarse escasos e n las
arcas Reales que están r s u cargo practicó por s i y en consorcio de1
señor Gobernador de esta Provincia las m i s eficaces diligencias en s u
solicitud, consiguiendo mediante ella ver cumplidas las justificadas
providencias que para la pacificación del Reino, habian tomado el
Excelentisimo señor Virrey, el señor Intendente General y el citado
señor Gobernador de esta Provincia, impendiendo en estas comisiones
el vasto trabajo que se deja conocer. E n la sublevación que en el año
próximo pasado de mil setecientos ochenta y uno s e suscitó por la
plebe e indios tobas. concurrió personalmente a s u defensa sufriendo
infatigable todas las pensiones que ocasionó el sitio calificando desde
luego el verdadero amor a S. M. y espíritu compatriótico sin que por
esto se separase de las obligaciones de s u primer instituto que satisfizo
completamente abonando con todo el pulso que le es propio el respectivo
prest que se señaló a los milicianos que en clase de fieles alisté como
comandante de las armas de esta plaza y sus fronteras, sujetando e n
todos sus procedimientos con verdadero celo propio de buen ministro
con inseparable desinterés, religiosidad y honroso modo de pensar.
E n cuya virtud y para los efectos que convengan así lo certifico y firmo
cn esta ciudad de J u j u y a diecinueve de noviembre de mil setecientos
ochenta y dos. Ante el Escribano de Cabildo que de ello doy fe.
Crcgorio (le Zegada
Ante mí.
blanitel (le Eordn
Escribano Público y de Cabildo
E n esta ciudad de San Salvador de Jujuy en veinte días del pre-
fiente mes y año ante s u merced el señor Juez de esta causa. pareció
el maestre de campo don Blanuel Sánchez Bustamante. vecino de esta
referida ciudad a quien e n cumplimiento de lo mandado s e le recibió
juramento que lo hizo en toda forma de derecho bajo del cual prometió
decir verdad de lo que supiere y le fuere preguntado, y siéndolo al
tenor del interrogatorio antecedente. Dijo a la primera pregunta que
es constante no solamente a este vecindario, sino aun a los mbs remotos
transeúntes la diaria e incansable asistencia del señor Tesorero don
Gabriel GUemes Montcro, en el Tribunal de estas Cajas Reales, des-
pachando todos los asuntos, así particulares como los de Real Hacienda
y Provincial sin demorarlos n i causarles incomodidad y molestia r los
pretendientes, antes s í a costa de su propia fatiga y personal trabajo.
los despacha muy contentos panegirizando de s u apacible genio, suavidad
y buen trato sin salir notado el respeto de s u empleo, por esta razón,
pues sabe mezclar lo benigno con lo serio, sin echnrse (le ver !o uno
d e lo otro: responde,
A la segunda, dijo: que le consta. Sabe por evidencia y lo ha
visto, de que por motivo de los continuos accidentes de su compañero
el señor contador don Nicoltis de Villacorta y Ocaña. desempeña con
liberalidad y prontitud las obligaciones a que está constituido evacuando
los innumerables asuntos que ocurren cuasi sin conocerse la falta d e
dicho señor contador e n el diario y laborioso trabajo, sin arreglarse
a las horas que estdn establecidas por leyes la conciirrencia en el
tribunal, pues casi diariamente está trabajando hasta las doce del d í a
y muchas veces hasta la una, sin manifestar fatiga, el celo que le asiste
rtl real servicio y por la tarde. cuando le ocurren más quehnceres s e
priva de la comodidad de alguna diversión y se estir hasta muy de noche:
responde, I
A la tercera, dijo: que sabe y le consta que sin embargo de la be-
nignidad de su genio, no omite el cobro de los reales intereses y los
municipales de sisa, antes parece que sus propios comedimientos dc s u
buena índole y persuasión cariñosa, oblign a los inquilinos s u pronta
satisfacción como muchas veces se ha experimentado. y, a los totalmente
remisos a tan debida satisfacción, les compele coi? una indiferente
severidad, que el respeto propio los suaviza a la paga, y de este modo.
nndie queda, ni disgustado, antes a vista de su r a r o desinteres muy
agradecidos, sólo esmerzíndose al cuidado y aumento de los reales inte-
reses, como s e ha reconocido en ellos, desde la administración de estos
.señores mucho adelantamiento: responde.
A la cuarta. dijo: que es constnnte y s a l ~ eque el contenido señor
'Tesorero. parn el transporte de los ~okladosveteranos y miliciai?oo que
pasaban al auxilio del Perú. por ver destituidas las arcas reales de su
cargo para tan grandes pastos y que por este defecto. no tuviese Su
3laiestad cumplido servicio, cual se requería, solicitó de su parte (sin
omitir las mRs previas diligencias ti costa de muchas fatigas) dinero
prestado, como que lo consiguió por medio de sus nfables insiniiaciones
bajo de respunsal~ilidndy así consicuió el feliz paso de dichos soldados,
sin que éstos s e quejasen de falta de lo necesario. sin embargo d e los
chorros que hizo. sin perjuicio de nadie: responde.
A la quinta, diio: que es cierto. público y notorio y le consta de que
en la pasada rebelión de indios tobas. conspirados (le la rente plebe .
y asociados de la nación matacos que alevosamente intentaron arruinar
esta ciutlnd y decollar n sus 'ecinos, estuvo dicho señor Tesorero nlan-
tado en su caballo con prevención de armas corrientes reconociendo
13%trinchera?, y animanclo nl pnisanaje n la defensa de nuestra Santn
Ley, niicstro invicto monarca y la patria, sin que por esto deiase de
estar al vigilante cuidado de las Reales Cajas y lo oue es mRs. que por
sii voluntad, hacía cuerpo de guardia e n los portales del Cabildo con
los soldados correspondientes. a imitación de los individuos del Cabildo
y vecindario que de veinticuatro a veinticuatro horae, hnclan su guardia.
con centinela, por horas, dRndoles el refresco correspondiente a aurr
*oldados, pasando malas noches por espacio de dos meses. cuando le
C Ü E ~ I E SDOCUAIENTADO

tocaba el turno; y que para el diario auxilio de prest a los milicianos


leales, por consejo de guerra se les sufragaba, con dinero, sin quc de
,esto se le siguiese Útil alguno, antes sí, muchas fatigas que n o le fatiga-
t a n por su celo al servicio de Dios y del rey y que en cuanto a s u buena
.conducta, desinteres e ilustres procedimientos, e s público y notorio,
pública voz y fama y que es la verdad de lo que sabe, s o cargo de jura-
mento que fecho tiene en que se afirmó y ratificó y que n o le tocan
las generales de la ley y es de edad de cuarenta y seis años, y lo firmii
,con s u merccd por ante m í que doy fe.
,?lan~relSdnclier ri'itsta~nanfe
Francisco de Gasterrn
Ante mí.
JIanwel de Ilordn
Escribano Público y de Cabildo
Xotn. Para valorar la importancia de los servicios prestados por don
Cabriel de Güenies Blontero durante los acontecimientos a que se refieren
los puntos cuarto y quinto de esta "Suniaria información" es necesario re-
.cardar la iiiagnitud que dichos acontecimientos alcanzaron, yn que la su-
blevación se extendió en el Tucumán hasta el territorio de nuestra actual
provincia de La Rioja, comprometiendo no solamente al elemento nativo
sino también a mestizos y españoles. Un cabal conocimiento de los hechos.
entre tantas otras publicaciones al respecto, nos lo brinda la "Relación his-
tórica de los sucesos de la rebelión de José Cabriel Tupac Amaru en las
provincias del Perú el año 1780", que f o m ~ aparte del tomo V de la "Colec-
c i h de obras y documentos relativos a la historia del Río de la Plata"
d e Pedro de An~eiis,Guenos Aires, imprenta del Estado, 183i;. F . M . G .
E n dicho día. mes y 'año, para la prosecución de esta sumaria.
~ a r e c i ódon Tomis de Inda. vecino de esta ciudad a quien se Ic recibi6
juramento que lo hizo por Dios Nuestro Señor y una señal de cruz.
bajo del cual Y enterado del interrogante que preside, dijo, n la pri-
mera pregunta. que es cierto y le consta por evidencia, de que el señor
Tesorero h n Cabriel GUemes Blontero. no omite diariamente la asis-
tencia al Tribunal de estas Reales Cajas nl dcspacho de los nsuntos
que concurren, en los que no demora, ni molesta a ningún stijeto, antes
sí. con suavidad y amor, h a propcndido a s u pronta evacuación con
,esmero siempre al real servicio y buena distribución de justicia:
iesponde,
A la ~ e g u n d a . di.io: que es constante y mucha verdad quc él.
por los continuos accidentes del señor Contador don Nicolis <le Villa-
corta y.Ocaña, de por s i solo h a desempeñado a todas las obligaciones
que le constituyen su empleo. con una ejemplar vipilancia, aun tra-
hajando personalmente sin que le impida tan precisa falta de s u
compañero, el diario p laborioso trabajo que concurre: responde,
A la tercera, dijo: que sin demostración de despótico, n i mani-
festar aquella autoridad de su empleo. recauda todos los intereses así
d e Su nlajcstarl como el ramo de Sisa, con un modo tan político y suave.
que al m i s timido a la paga lo obliga a l a pronta satisfacción con su
buen modo, sin que en esto s e maneje por parcialidad pues para con

- todos es lo propio, en lo suave, como e n el respeto, procediendo con u n


emulable desinterés, aun en sus propios derechos, como que e s cons-
tante y responde,
A la cuarta. dijo: que sabe y le consta que p a r a el transporte d e
los veteranos y milicianos que marchaban a1 P e r ú al castigo de los
parciales del fingido y alevoso rey Tupac Amaru, viendo las arcas
reales destituidas del suficiente dinero para t a n crecidos gastos, como
tan nnsioso al servicio de Su Majestad y que sus reales disposiciones
tengan s u pronto cumplimiento a lo menos e n trance semejante que
clamaba s u pronto remedio, solicitó s u vigilancia todo el que fue ne-
ceaario, para auxilio de dicha marcha y los consiguió por medio d e s u
eficacia y continuó esta, para s u destino sin que les faltase cosa
alguna : responde,
A la quinta. dijo: que en la rebelión del año pasado de ochenta
y uno, que la sedición de los indios tobas que asociados de la plebe de
cristianos. no sólo pretendían invadir esta ciudad. sino arruinarla, s e
presentó dicho señor Tesorero en plaza pública a caballo y con armas,
todas o las más noches, a reconocer las trincheras y animar la gente
de s u guarnición esten prontos a la defensa de s u ley, de s u rey y la
patria, que serían premiados por s u lealtad y los rebeldes castigndos
por el soberano y para que estuviesen más propicios a la subordinación
les sufragaba algunos reales, además de que por Consejo de Guerra,
se dispuso el que a los fieles se les sufragase el correspondiente diario
prest como que se verificó sin repugnancia alguna, sino muy prontamen-
te, como es público y notorio, pública voz y fama y que nadie ignora de
todo, como de que por s u propio motuo, entró en turno al cuerpo de
guardia que diariamente se hacía en los portales de Cabildo por los
señores individuos de 61, como del vecindario, con guarnición de gente
de armas, por espacio de veinte y cuatro horas, en continua vigilancia,
sin que por esto, no estuviese con mayor esmero en la mejor custodia
de la real Tesorería, y que e n cuanto a s u conducta y buenas costum-
bres n o s e le han reconocido cosa irregular, sino antes muchos motivos
de laudatoria como en todo lo demás que aun parece es aborto el de s u
prudencia y rectitud. pues casi no corresponden a sus pocos años, pero
predominando su notoria justificación, lo publican por de senectud.
Y que es la verdad de cuanto sabe y le consta de vista y ciencia cierta.
so cargo del juramento que fecho tiene en que se afirmó y ratificó
y n o le tocan las generales de la ley. y es d e edad d e cuarenta y ocho
años, y lo firmó con su merced por ante mí de que doy fe.
Toniás de Inda
Frnncisco d e Basterra
, .
Ante mí.
Nnnuel de C o d a
Escribano Público y de Cabildo '

E n veintiún días del mes de noviembre de este presente año, com-


pareció don Francisco Javier del Portal, vecino de esta ciudad de Jujuy,
CUELIES DOCULIENTADO 109

a quien por ante s u Merced s e le recibió juramento que lo hizo con la


~olemnidadnecesaria e n derecho, bajo del cual prometió decir verdad
de lo que supiere y le fuere preguntado, y siéndolo al tenor del presente
interrogatorio, dijo:
A la primera pregunta, que sabe y le consta de que el señor Te-
sorero don Gabriel de CUemes Montera. diariamente asiste en el Tri-
bunal de s u cargo, distribuyendo el pronto despacho a los quehaceres
que ocurren del real servicio y el de los transeúntes sin causar demora
alguna, a costa aun de su personal trabajo, sin irritarse con lor pre-
tendientes, antes s i con buen modo los procura dejar a todos contentos,
s i n apartarse de lo Útil al prcciso de s u ministerio, responde;
A la segunda dijo: que sin embargo de los continuos accidentes
d e s u compañero el señor Contador don h'icolis de Villacorta y Ocaña,
que le impiden a s u asistencia, ha desempeñado de por s i solo las obli-
gaciones de s u ministerio, sin hacer conocer la falta de dicho señor
rl fuerza de s u exigencia duplicando el trabajo por ambos. sin que
por esto falte igual prontitud como que s i concurriera, a trueque de
que nadie se qucje y expcndc todo cuanto ocurre. responde;
A la tercera dijo: que sabe de ciencia cierta. el que el dicho se-
fior Tesorero, nunca se h a valido de la autoridad de s u empleo, a lo
nienos e n cuanto al de despotismo para recaudar los haberes de s u
3Iajestad ni los del ramo de Sisa, que Re halla a s u cargo; antes si.
con s u buena índole, suavidad y cariño, los h a obligado a l a pronta
satisfacción pues parece que lo propio de s u jovialidad, les ha comu-
nicado un cierto modo de vergüenza, que el m i s tacaño. ha solicitado
dinero, para adem;is de corresponder aquella urbanidad. satisfacer
lo tan justo, lo que tal vez no conseguiria por el camino de la violen-
cia, de que nunca se vale; responde,
A la cuarta, dijo: que es constante que hallándose exhausta la
Real Caja de fondos para los inmensos gastos que se contemplaban
causaría el transporte de los soldados veteranos y milicianos que mar-
chaban a las provincias del Perú, solicitó s u vigilancia y buen8 a r -
monía, dinero para los gastos y pagamentos de estos; como consiguió
cuanto quiso de entre los leales rasallos nobles de S u BIajcstad con
cargo de la responsabilidad, sin anteponer el desaire que pudiera ha-
ber experimentado de una negativa, sino que ciego n que se cum-
pliera lo mandado por el soberano para esta expedición t a n urgente,
n o omitió diligencia alguna n fin de que no hubiese demora en la pro-
necución de la marcha en tiempo t a n oportuno; responde,
A la quinta, dijo: que e n la conspiración de los indios tobas con
los cristianos plebes por el año pasado de ochenta y uno que preten-
dían invadir esta ciudad se presentó dicho señor Tesorero en Ia plaza
a caballo y con armas, rondando d e noche las trincheras y animando
a l a gente que las guarnecía con eficaces insinuaciones a que con
lealtad persistiesen a la defensa de la corona y patria, pues redundaba
e n servicio de Dios, siendo él ejemplo para que otros dormidas a este
servicio, se pusiesen e n vigilancia, no omitiendo de s u parte cuanta
fatiga se ofrecia el ejecutarla fervoroso al servicio de nuestro so-
berano, pues a imitación del Ilustre Cabildo y noble vecindario que
G ~ E B I E DOCUMENTADO
S 111

el transporte de la tropa veterana y miliciana que marchaba a las


lwovincias del Perú por orden del Excelentísimo Virrey faltos de todos
víveres y hallando las arcas reales exhaustas de suficiente dinero para
t:m crecidos gastos que se contemplaban para el curso de este marcha
y ansioso del pronto cumplimiento del servicio del Rey Nuestro Señor,
en persona salía a la solicitud de la falta, sin omitir fatiga nlguna,
expuesto tal vez a una negativa. pero con su buen modo y sumisas
expresiones y como tan bien quisto, consiguió ficilmente todo e1
que necesitaba y habilitó la marcha de todo lo que se conceptuaba ser
necesario y sólo así se le aquietó el ferviente celo de su natural incli-
nación al ver cumplidas las órdenes de Su Excelencia, responde.
A la quinta, dijo: que es público y notorio a todo el vecindario
el que dicho señor Tesorero en la pasada rebelión de los indios tobaa
asociados con los de la plebe. luego que tuvo noticias de la fntalidad que
maquinaron, ee presentó como cualquier particular en su caballo y con
armas en esta plaza pública así de día, como de noche, rondando las
trincheras y animando a la gente de guarnición a la perseverancia en
la defensa de la patria por ser servicio de ambas majestades y aun
manifestó m l s su celo, en haber hecho cuerpo de guardia sirviendo
de primer cabo en los portales de Cabildo con soldados de guardia y
centinela a imitación de los S. S. individuos de este Ilustre Ayunta-
miento y noble 'ecindario por espacio de dos meses, a todo riesgo.
pero sin dejar de cuidar las arcas reales en que estaba todo su conato
P que para mayor subordinación del paisanaje, se acordó en consejo de
guerra, se les auxiliase con un prest diario el que se les sufragó a*-
mas de la carne para que por este medio no sintiesen los milicianos
que en clase de leales servían el trabajo de las vigilins y todo esto con
tanto desinteres que ni por accidente se le conoció otro fin que la
ansia a la defensa de la real corona y patria, como siempre lo ha acre-
ditado su buena y notorin conducta, aun en asuntos de menor entidad,
liues su desinteres aun es casi irregular, pues ni aun los derechos que
por arancel le pertenecen, jamls los cobra a fin de no dar motivos
de queja y que esta es l a verdad de lo que sabe so cargo del juramento
que fecho tiene, en que se afirmó y ratificó y dijo que aunque por afi-
nidad por las mujeres, les toca las generales de la ley pero que no
por esto faltaría a la religión del juramento y es de edad de treinta y
cinco años S. lo firmh con Su Merced por ante ml de que doy fe.
Bentura de Jfarqltiegzii
Francisco de Bastcrra
Ante mí.
JIanuel de Borda
Escribano Público y de Cabildo
En la ciudad de Jujuy en veintidós días del mes de novienibre
de mil setecientos ochenta y dos. Pareció ante mí don Juan de San-
doval, vecino de esta ciudad a efecto de declarar por el tenor del
pedimento presentado por el señor Tesorero de estas cajas matrices
a quien le recibí juramento por Dios Nuestro Señor según forma de
derecho so cuyo cargo prometió decir verdad en cuanto supiere y
fuese preguntado y siéndolo por el orden de dicho pedimento a la pri-
mera pregunta dijo que es constante y notoria la asistencia de dicho
señor Tesorero al Tribunal y despacho de su cargo, como el que en
éste se maneja con todo pulso y prudencia que le consta así por estar
empleado en calidad de escribiente de dichas cajas y responde a la
segunda, que son sabidas y notorias a este pueblo las enfermedades
del señor Contador que le embarazan continuar la asistencia al tribunal
de su cargo, lo que no obstante era igualmente cierto que nada que-
daba por expedirse a esmeros de dicho señor Tesorero y responde a la
tercera que en el cobro de derechos y dcmás adyacencias no sólo no
impende dicho señor Tesorero el menor rigor, ni dureza, pero antes
bien derramando suavidad hace con mayor eficacia, exequible la re-
caudación sin la menor excepción de personas ni otro espíritu de par-
cialidad ni contemplación sujetando sus ideas a cuanto sea ventajoso
nl mejor servicio del Rey y responde a la cuarta que es constante que
en el apresto y envío de tropas veteranas y milicianas que pasaron al
I'erú y se encomendaron para el efecto a estas cajas por los inmedia-
tcs superiores no a610 impendió dicho señor toda vigilancia para au
más efectiva verificación expidiéndose activo en las providencias de
la obligación sino que tambien procuró por lo exhausto de caudales que
s e reconocía en las cajas buscar los necesarios para llenar las nece-
sidades que se presentaban con aquel motivo y responde a la quinta
que es notorio el que dicho señor personándose en la plaza g calles
entre los leales que salieron al opósito de los rebeldes (en ocasión que
éstos sublev&ndose contra el Rey y la patria intentaron la ruina de
los habitadores blancos de este pueblo) esforzó con su actividad, celo y
amor al Rey n la gente que podía contribuir a la defensa a que ésta
se hiciese con el mayor vigor en cuyo empeño persistió constante siem-
pre y en todas las ocasiones que a m a ~ óalgún insulto por parte de
aquellos sublevados continuando después en las fatigas de guardias
como cualesquiera otro que por su oficio no estuviese exento, repitih-
dolas hasta que del todo se alzó mano de ellas y estuvieron ya exentos
todos los particulares comprendidos en la tarea y que esto era tan no-
torio que aun a los más pequefios no se escondían; también le consta de
ciencia cierta y como testigo de vista al pormenor de sus operaciones
desde que se recibió en el empleo de Tesorero Oficial Real de esta
Provincia que dedicando todo su conato al mayor acrecentamiento de
los soberanos y municipales intereses de su cargo, ha mirado con el
mayor desprecio cuantos podían corresponderle por actuaciones de
oficio que hay establecidos, los que. es notorio ha repulsados y a este
fin ha dado orden expresa al escribano de Real Hacienda no los per-
cibiese ni exigiera nunca como así se ha ejecutado, manejándose en
esta parte con tanta escrupulosidad que a ni aun en clase de obsequio
c regalos ha admitido la menor expresión como algunas veces lo ha
presenciado el declarante y muchas lo ha oído decir a varios vecinos e
individuos del comercio y siendo cuanto tiene que exponer dijo tam-
bién que no le tocan las generales de la ley, que es mayor de veinte y
cinco años y que esta es la verdad de cuanto sabe y se le ha preguntado
so cargo del juramento que fecho tiene en que se afirmó y ratificó
y para que así conste lo firmó, con su Merced por ante mí de que doy fe.
Juan José de Sandocal
Francisco de L'asterra
Ante mí
dlanuel de Borda
Escribano Público y de Cabildo
En esta ciudad de Jujuy en veintidós de noviembre de este presente
año pareció presente don Pedro Graiño, comerciante en ésta cerca de
cinco años, a quien se le recibió juramento que lo hizo por Dios Nuestro
Señor y una Señal de Cruz según derecho bajo del cual, prometió decir
verdad de lo que supiere y le fuere preguntado y con inteligencia del
antecedente interrogatorio, dijo, que sin embargo de que todas SUS
preguntns aluden a una verdad pública y ser constante su certeza pero
como tal comerciante con mayor individualidad sabe y le consta de que
el señor Tesorero don Cabriel de Giiemes Nontero, procede con raros
desintereses aun despreciando sus propios derechos, tal que no dice, su
pronto despacho e inmensos trabajos al tal desinterés, estando de pie
fijo en una continua asistencia en el tribunal donde todo su esmero,
es el pronto dispendio n las cargas de sus laboriosos quehaceres con el
conato al real servicio de Su Majestad y aumento de sus haberes con
lo q u ~todos los del comercio quedan agradecidos y prontamente des-
pachados por su total desintcrés y que es la verdad de lo que sabe so
cargo del juramento que fecho tiene en que s e afirmó y ratificó y dice
no tocarle las generales de la ley y es de edad de cuarenta y dos años
y lo firmó con Su Merced por ante mí de que doy fe.
Pedro Graiiio
F~aneiscode Basterra
Ante mi
rllanitel dc-Borda
Escribano Público y de Cabildo
En dicho día mes y año pareció presente don Vicente Castellanos.
vecino y comerciante en esta ciudad, a quien se le recibió joramento y lo
hizo en toda forma de derecho bajo del cual y enterado de las preguntas
del interrogatorio antecedente dijo: que es constante, público y notorio
la diaria asistencia del señor Tesorero Juez Oficial Real don Gabriel
Giiemes Montero en el Tribunal de su cargo para despachar los nego-
rios y asuntos de la Real Hacienda y IIunicipal de Sisa aun con su
personal trabajo sin omitir fatiga alguna nun no debida a su empleo
y que en cuanto a los despachos que solicitan los comerciantes los evacua
con una indecible prontitud, suavidad, amor y celo a los pretendientes
con que los deja no solamente contentos sino agradecidos por el poco
interés que lleva aun sin hacer aprecio de sus propios derechos. Practi-
cando lo mismo con todos sin excepción de clases de sujetos sin co-
nocGrsele parcialidad aun con los de su propia familia con una indife-
rencia entre lo respetuoso y amoroso y que en cuanto a su buena conducta
y lo más que contienen sus preguntas es público y notorio, pública voz y
fama y es la verdad de cuanto sabe so cargo del juramento que fecho
tiene en que se afirmó y ratificó y dice no tocarle las generales de la ley
y es de edad de veintisiete años y lo firmó con Su Nerced por ante
mi de que doy fe.
Vicente Castellanos
Francisco de Basterra
Ante mí
Manuel de Borda
Escribano Público y de Cabildo

En veintidós de dicho mes y ario pareció presente don José Rodrí-


guez del comercio de esta ciudad a quien se le recibió juramento que
lo hizo en toda forma de derecho bajo del cual y enterado de las pre-
guntas que aparecen en el interrogatorio precedente dijo: que es
constante y sabe de ciencia cierta que el señor tesorero don Gabriel
Güemes Montero, es un perenne asistidor en el tribunal de su cargo,
donde con su propio trabajo personal evacua los asuntos al real ser-
vicio y particulares que se ofrecen, sin omitir fatiga alguna y que
a los pretendientes de pases o despachos, los despena con toda prontitud.
sin que por la petulancia de algunos se irrite ni use de autoridad, antes
s í con mucha suavidad, amor y política los trata sin excepción de
personas, sin causarles incomodidad ni bochorno, sino que los deja
a todos contentos con su buen modo, a lo menos a vista de su notable
desinterés con que procede con cualesquiera, pues no sólo no toma
cohechos, pero ni aun sus propios derechos muy debidos, manifestando
un total despego que causa admiración a los que le comunican, pues
cree, que todo su anhelo no es, sino el aumento de los reales intereses
Y guarda de las cajas, en cuyo cobro sin usar de estrépito alguno, sino
mucha urbanidad y cariño para con todos y que esto lo sabe porque
tiene experiencia y ha visto merecer a otros sin más privilegio que el
de su buena armonía y esta es la verdad de cuanto sabe so cargo del
juramento que fecho tiene en que se afirmó y ratificó y dice no tocarle
las generales de la ley y es de edad de cuarenta y un años y lo firmó
de que doy fe.
José Rodrlgrtcr
Frat~ciscode Easterra
JIanltel de Borda
Escribano Público y de Cabildo

IIanse por conclusas estas diligencias y en su consecuencia pá-


sense los autos al Muy Ilustre Cabildo para el efecto de la certificación
pedida. Lo proveyó, mandó y firmó, S u AIerced el sefior Juez de esta
causa actuado por ante mí de que doy fe.
Ante m1
Basterra
Boda
I.:scribano.
E n esta sala capitular dc l a ciudad de San Salvador de Jujuy
en veintitrés días del mes de noviembre de mil setecientos ochenta
y dos años, los señores de estc Ilustre Cabildo es r. saber el doctor
don Tadeo Fernández Divila. abogado de las reales audiencias del Perú,
teniente de gobernador y justicia mayor de esta referida ciudad, el
coronel de milicias don Francisco de Basterra alcalde ordinario d e
primer voto y el Maestre de Campo don Jos6 Antonio de Goyechea de sc-
pundo voto, don Diego de la Corte alcalde mayor provincial y Único
regidor certificamos al Rey Nuestro Señor y demás tribunales donde
convenga cómo el suplicante don Gabriel Güemes Montero, tesorero
oficial real de estas cajas matrices, desde que s e posesionó en su empleo,
h a sido indefectible en todos los negocios conducentes a s u ministerio
y tiene solventes los asuntos pertenecientes al cobro de los reales inte-
reses, en lo que no se ha embarazado, con las continuas enfermedades
de s u compañero, manejándose por s í solo, en el desempeño de s u s
nbligaciones, cobrando los reales derechos con exactitud y sin tiranizar
a las partes, lo que ha practicado con una conducta digna de admirarse.
por el celo y eficacia con quc lo h a verificado, siendo igualmente pú-
blico y notorio el desinterés con que s e maneja en todo lo concerniente
a SU empleo, en el qua no tiene m i s objeto que el mejor servicio del
Rey, lo que acreditó con mayor pureza ciiando se fio a s u cuidado l a
habilitación de las tropas veteranas y milicianas que transitaron por
csta ciudad a la pacificación de las provincias sublevadas: en cuyo
desempeño, no con poco trabajo y a costa dc mudios desvelos, logró
aprontarles todos los víveres que necesitaban para su puntual marcha.
Asimismo en la subl~vación que sc experimentó en esta ciudad s e
manejó como buen vecino, con aquel espíritu propio de un ministro que
8610 quiere y aspira a defender los justos derechos del Rey y la patria
sin que Ic embarazasen la satisfacción de los prest que se contri-
buían a los soldados y corrían a su cargo, para que dejase de asistir
a las guardias que continuamente se hacían en esta ciudad, e n todo lo
que dio a conocer un espíritu lleno de honor y probidad por lo que e s
acreedor quc Su Majestad le premie como es justo lo que así lo certi-
ficamos y lo firmamos por ante el nuestro Escribano que de ello da fe.
Doctor Tadeo Dásila. F ~ m c i s c o de Bnstorcc. José Antotlio de
Co~eckea.Diego de la Corte.
P o r mandado de S u Sefioría
Blanirel de Borda
Escribano Público y de Cabildo
Muy señor mío: Conveniéndome el que se esclarezca mi conducta
en orden al manejo de estas cajas se servirá Vm. mandar a l escribano
de ellas certifique a continuación cuanto s e le ofreciere y pareciere
y fecho me lo devolvertí Vm. original p a r a los efectos que me convengan.
Nuestro Señor Gunrde n Vm. muchos años, Jujuy, 16 de no-
viembre de 1782.
Besa las manos de Vm. s u miis atento seguro servidor.
Gabriel (le Güenzes Montero
Señor Contador Oficial Ileal don Nicollís de Villacorta y Ocafia.
Real contaduría de Jujuy, 16 de noviembre de 1782.
E1 Escribano de Real Hacienda a continuación de este decreto
certificar; lo que s e le ofreciere y pareciere sobre el asunto n que se
contrae el oficio que antecede.
I'illncortn
Ante m í
Frat~eiseode Gogenda
Escribano de Hacienda Ileal

Don Francisco de Gogenda vecino de esta ciudad y Escribano de


Real Hacienda, 1Jinas y Registros propietario de estas cajas matrices
y ciudad de J u j u y que certifico n los tribunales superiores donde ésta
fuere presentada que el señor tesorero oficial real de ella, empezó a
servir s u empleo en nueve de febrero de mil setecientos setenta y ocho,
continu6ndolo sin intermisión con inseparable celo y aplicación hasta
este día. IIace tres años que por las enfermedades de s u compañero
ha desempeñado cabalmen'tc y sin experimentarse el menor atraso en el
giro, gobierno y dirección de todos los negociados que le son afectos
a las obligaciones de ambos Ninistros. S u desinterés ha sido tan
constante Y fijo que no sólo no ha admitido obsequios y regalos de los
comerciantes, transeúntes, ni vecinos, pero ni aun los legítimos dc-
rechos que por arancel s e señalan y justamente Ic corresponden en
virtud de reales y superiores declaraciones, con cuyo objeto desde que
cmpezó a servir me dio orden expresa para que los que le perteneciesen
por cualquier motivo no los cobrase n i admitiese y s í los dejase a be-
neficio de las partes. A sus desvelos, eficacia y continuado trabajo,
He debe el considerable aumento que en estas cajas ha tenido ia Real
Ilacienda como s e demuestra en todos los ramos que abrazan los libros
reales comunes generales, que e n este día se me han puesto de mani-
fiesto sobre cuyo punto con esta fecha y a presencia de ellos, he dado
certificación separsda por orden de este tribunal. E n la IIabilitación
y envío de las tropas así veteranas como milicianas n las provincias
del Perú impcndi6 un considerable trabajo practicando personalmente
con el mayor esmero todas las operaciones precisas al más pronto y
cabal descmpcño de estos interesantes y laboriosos encargos, solicitando
para s u conclusión y verificnción caudales prestados con cargo de
reintegro por no alcanzar los de estas cajas a totalizar los niuchos
pastos que se han ocasionado en los que observó la mds estrecha eco-
nomía y buena conducta, como todo m i s bien se pntentiza por los res-
lrectivos expedientes comprobantes de datas. Que e s público y notorio
s u desinterés, ingenuidad y buena conducta y a mí que todo lo anterior-
mente dicho me consta de ciencia cierta como quc he presenciado y
concurrido al pormenor de los procedimientos de este ministro. 'Que
e s cuanto tengo que certificar e n virtud de orden de este tribunal de
Real Hacienda y a pedimento de s u merced en esta ciudad de San Sal-
vador de Jujuy en dieciséis días del mes de noviembre de mil setecientos
ochenta y dos años.
E n testimonio raqui un signo de cruz1 de verdad.
Iiranei.vco de Gogenda
Escribano de Hacienda Real, iilinas y Rentas
Jujuy, 12 de octubre de 1782
Tres certificaciones dc don ir;icolis Villacorta. don Francisco d e
Cogenda y don Hermencgildo de Echaurri que califican los servicios
y honrosos procedimientos de don Gabriel de Güemes.

Muy selior mío: Estando en la sazón entendiendo en las diligencias


concernientes al esclarecimiento de mi conducts en todo aquello que
dice relación al ejercicio y manejo de mi empleo y considerando que el
oficial mayor de estas cajas como que toca los asuntos con mbs inme-
diación podr6 mejor que otros expresar de ella, s e h a de servir Vm.
hacer que impuesto del contenido de éste y objeto a que s e dirige
cxponga sobre el asunto pueda y deba y fecho que sea devolvérmelo
para los efectos que llevo indicados.
Nuestro Sefior guarde a Vm. muchos allos. Jujuy, 23 de no-
viembre de 1782.
Besa la mano de T'm.
Su mejor servidor
Gnbvie2 de Giienies Montera
Señor contador don Nicolás de T'illacorta y Ocaiia.
Real Contaduría do Jujuy, 23 de noviembre de 1783.
E l oficial mayor impuesto de lo que contiene el presente oficio
cxponga conforme a él, lo que sobre la materia le consta.
T'illacorta
Ante m í
Francisco de Gagenda
Escribano de Hacienda Real
El oficial mayor de estas reales cajas matrices de Jujuy, e n inte-
ligencia del objeto que solicita el señor tesorero de ellas, digo, que es
constante y notorio In continua asistencia de dicho señor al dcspacho
de ocurrencias que se prcsentcn en el tribunal de s u cargo, expidiendo
las correspondientes providencias con la mayor agilidad y prontitud
sin d a r lugar. n la menor queja por parte de los interesados en ellas,
nun e n las ocasiones y tiempos, e n que el señor contador s u compañero
por los sabidos habituales padecimientos que lo aquejan y lo tienen
reducido a un lamentable, deplorado estado, no h a podido concurrir
u evacuar simultfineamente las operaciones de oficio: que e n la e x a c c i h
de los reales derechos y contribuciones n S. M. es t a n puntual el mismo
~ e ñ o rtesorero, como negligente e n la recaudación d e nquellos pocos.
que por derecho y disposición de los superiores le competen, no obstante
de la cortedad del sueldo que disfruta, insuficiente a la verdad para
sufragar a la decencia, que debe llevar; que en el procedimiento conque
acostumbra conducirse nl cobro de aquellos reales intereses, camina con
tanto pulso y tiento. que sin dejar sentir In inflexibilidad, sólo deja co-
nocer en los efectos la eficacia de s u celo combinando con modo exquisito
todas las puntudidndes de éste con las condescendencias del m i s ofi-
cioso agrado sin estragar en un iipice el rigor de la observancia de la
ley y superiores respectivos preceptos. Que es cuanto citiiéndome al
contexto que dio mérito a estos asertos, puedo exponer sobre su materia.
Jujuy, 23 de noviembre de 1782.

Don h'icolús de Villacorta y Ocaña, contador oficial Real de esta


Provincia del TucumBn y Cornissrio de Guerra en e1l:i.
Certifico a los Tribunales Superiores donde ésta fuere presentada
y haya lugar en la concomitnncia con la parte de mi compaiicro el
tesorero oficial real don Cabriel de Cüemes Ilontero, como desd* m i
ingreso en estas cajas reales he visto y experimentado por m i mismo
la notoria nplicación, desinterés y celo con que s e ha manejado en su
ministerio, procurando el aumento de los reales haberes, según se ha
patentizado por extractos y planes remitidos n la intendencia general
de Buenos Aires y ha despachado por s i solo todos cuantos asuntos
han ocurrido en el tribunal de nuestro cargo todo el tiempo que he
estado yo enfermo, sin que por esta causa s e hayan postergado ninguno
de ellos, sin embargo de s e r muy laboriosa la tarea que demandn esta
caja matriz y las seis subalternas que e s t h a su cargo, como es bien
constante, mereciendo el general aplauso de todo este vecindario, así
por In prudencia con que s e maneja en la exacción de los reales dere-
chos como en las pruebas que h a dado de su justificada conducta. Y
r a r a los efectos que le convengan doy la presente certificación e n esta
.
real contaduría de San Salvador de Jujuy a veintitrés (le noviembre
de mil setecientos ochenta y dos ?-nos.
Nicolás (le Irillacartn v Ocn,ín

Don Ignacio Flores, Coronel de Caballería de los Reales Ejércitos.


Presidente de esta Real Audiencia de Charcas, Comandante General
y Gobernador de Armas e n todo su distrito, etc.
Certifico e n cuanto puedo, que don Gabriel d e Güemes Montero .
y don Nicolis de Villacorta y Ocaña. oficiales reales de las cajas de la
ciudad de Jujuy han redoblado s u celo y esmero e n la prontitud con que
hicieron pasar por clla los destacamentos veteranos y milicirtncs que
vinieron destinados para la pacificación de las provincias sublevadas.
por orden del Excelentisimo Señor Virrey, facilitando activamente
suficiente número de arrieros, uniformes, bastimentos y cuanto con-
ceptuaron necesario para tan interesante fin, de manera que dichos
oportunos auxilios contribuyeron no poco a1 logro de l a general quietud
que gozan e ~ t o sdistritos. Y para que conste donde convenga doy l a
presente, firmada de mi mano, .mellada con el sello de mis armas y
refrendada del infrascripto escribano de guerra en esta ciudad de La
Plata, a quince de abril de mil setecientos ochenta y tres años.
[aquí un sello].
Igtiacio Flores
P o r mandado del muy Ilustre Señor Presidente
Esteban de Rosas
Escribano de S. 31. y Guerra

Don Andres Nestre, Brigadier de los Reales ejércitos. ~ o b e r n a d o r


y Capitin General de esta Provincia del Tucumin por S. 31. que Dios
xuarde etc.
Certifico en cuanto puedo, debo, y el derecho me permite como los
dos actuales oficiales reales de ella tesorero don Gabriel de Giiemes
BIontero y contador don NicolAs de Villacorta y Ocsña que han servido
s u s ministerios en todo el tiempo de mi gobierno, han descnpcñado
cabalmente sus obligaciones y con tal pureza. desinterés y celo que han
merecido la general aceptación de todo el comercio y estos provincianos
como es bien notorio, dando en el referido tiempo un considerable
aumento a los ramos de su manejo, como lo tienen acreditado por ins-
trumentos jurídicos y también se d e s i ~ n a nen los estado4 generales
de valores que se han formado anualmente en la caja matriz de s u cargo.
3 que se agrega el particular extraordinario mérito que contrajeron
estos ministros en la pasada rcbclión acaecida en aquella ciudad y e n las
provincias interiores con motivo de las providencias que tomaron para
la defensa del Real erario que estaba a su cuidado y en el pronto envío
s se encaminaron a la pacifi-
de las tropas veteranas y a i ~ ~ i l i a r eque
cación general del Reino y en la conducción de bastimentos, vívercs.
nrrnamcntos y demhs necesarios a este importante objeto, con sujeción
a las órdenes que les comunicó su inmediato jefe haciéndose meritorios
a los ascensos a quienes se hallan acreedores por sus buenos servicios y
honrosos procedimientos y para que conste y obre los efectos que
convengan doy la presente firmada de mi mano, sellada con el de mis
armas y refrendada con el infrascripto escribano mayor de Gober-
nación, mi secretario en esta ciudad de Salta a diez de julio de mil
setecientos ochenta y tres aiíos.
AndrPs Alestrc
Por mandado de su Señoría.
[Aquí un sello].
José de Elias
Escribano rilayor de Gobernación

Doy dirección a la solicitud que Vrns. hacen a S. M. para que se


disne concederles los honores de Comisarios Ordenadores del Ejército
o de Ministros del Tribunal de Cuentas dc esta Capital en atención a
los méritos que han contraído con deseos del mejor exito.
Dios guarde a Vrns. muchos años. Buenos Aires, 30 de enero
de 1784.
Juan José de Vértiz
A los Ministros dc Rcal Hacienda de Salta don Gabriel Cüemes y don
Nicolhs Villacorta.

Don Andrés IIestre, Brigadier dc los Ejércitos y Gobernatlor


intendente de la Provincia de Salta, etc.
Certifico en cuanto puedo, debo y el derecho me permite a todos
los que la presente vieren cómo en orden de diez de enero antecedcntc
comision6 a1 Ministro Tesorero de Real Hacienda de esta Provincia
don Gabriel de Güemes Montero para que pasase a la ciudad de San
JIiguel del Tucumtin para ncopiar en ella y su jurisdicción mil cuatro-
cientas vacas de cuenta del Rey y para raciones de la tropa partidaria
del Río Negro y Río del Valle y habiéndole cumplido exactamente con
ahorro de mas de tres mil pesos del ramo de Sisa, por los precios dc
las jurídicas contratas que celebró con concepto a los en que antes se
había comprado, dando en esto como en todas las demás operaciones
de su manejo, prueba de su celo, desinterés y amor al real servicio
como todo consta del expediente de la materia, lo certifico así en justo
compensativo de s u mérito, en Salta a veinte de mayo de mil setecientos
ochenta y seis.
Andrés JIestre
[Aquí u n scllo].
P o r mandado de S u Señoria
J u a n Antonio Moro Dlaz
Secretario

Don Andrés llestre, Brigadier de los Reales Ejércitos y CoEer-


nador Intendente de la Provincia do Salta. etc.
Certifico en cuanto puedo debo y el derecho me permite cómo
habiéndome representado m i subdelegado de San Aliguel del Tucumán
don Vicente Escobar en carta de veinte de diciembre de mil setecientos
ochenta y cinco con testimonio de autos haber fallecido repentinamente
el ministro de Real Iiacienda de aquella caja menor don Jos6 d e Thames
con considerables fallas de los caudales que del Rey se hallaban a s u
cuidado y debían existir e n aquella tesorería, tuve a bien por auto
de siete de enero del año siguiente de mil setecientos ochenta y seis
comisionar con autoridad bastante, cuanta por derecho fue necesxio
al BIinistro Principal de Real Hacienda dc esta Provincia don Gabriel
de GUemes Montero p a r a que procediese a si; recaudacibn y cobro.
quien en obedecimiento de este cargo, a s u costa y sin gravamiento
del real erario, pasó inmediatamente a 13 expresada ciudad de1 Tucumán
y en fuerza de s u vigilancia y de las juiciosas, oportunas y arregladas
providencias que tomó judicial y extrajudicialmcnte s e cobraron e n
favor de la Real Hacienda y ramo de Sisa. diez mil trescientos noventa
y u n pesos, siete reales a que ascendían los líquidos alcances que pu-
rificadas las cuentas resultadas contra el predicho finado don José dc
Thames, dando e n todo pruebas de s u actitud, celo, desinterés y amor
al real servicio, como justamente lo tiene acreditado sin intermisión
desde que a mis órdenes se halla sirviendo a S u JIajestad e n esta
provincia, n o 9610 en lo peculiar de s u Ministerio, sino también en otras
varias interesantes comisiones del Real servicio, que s e le han enco-
mendado tanto por l a Superintendencia de Buenos Aires, como m c
consta, cuanto por esta de mi mando. Y para los efectos que Ic con-
vengan, así lo certifico y firmo en esta ciudad d r Salta a veinticinco
de mayo de mil eetecientos ochenta y scis.
[Aquí un sello].
Andrés Mestre
P o r mandado de Su Señoría
J u a n Antonio iiloro Dlaz
Secretario
- -
N9 35 Selior Paso a las reales manos V. M.. los documentos que
justifican los meritos y buenos servicios del Ministro Principal Teso-
rero de esta provincia don Gabriel de Güemes Montero, con la certifi-
cación del médico que acredita s u quebrantada salud, en fuerza de s u
mucha aplicacih d trabajo. A mi me es constante cuanto expone
y puedo asegurar a V. M., que e s uno de los mejores Ministros d e Real
IIacienda que ha venido al rieino, por su inteligencia, celo, honor y
tlesinterés con que se ha manejado en los nueve años que h a estado
a mis órdenes: debiéndosele n su continua aplicación y desvelo, haber
puesto esta oficina en el perfecto estado en que s e halla, pues cuando
se posesionó en ella, lo e r a sólo en el nombre: habiendo conseguido a
esfuerzos de su prudencia y buen modo con las gentes de esta provincia
(lar crecidos aumentos a vuestra Real Hacienda, como se nota e n el
día: por lo que lo considero acreedor a que la piedad de V. M. atienda
r i s u solicitud y no dudo que mejorando su salud pueda s e r Útil a Vuestro
Real servicio en cualesquier destino de mejor temperamento.
Nuestro Señor Guarde la católica Real Persona de V.M. muy
felices años. como la cristiandad necesita. Salta, 25 de octubre de
- -
1786. Señor Andrés Alestre.
Está conforme al original de su contexto, lo que certifico en Salta,
fecha u t supra.
J m n Antonio Aforo Diaz
Secretario

Don Carlos, por la gracia de Dios. Rey de Castilla, de León. d e


Aragón, de Navarra, de Granada, de Toledo, de Valencia. de Galicia.
de iUallorca, de Sevilla, de Cerdeña, de Córdoba. de Córcega. d e Mur-
cia, de Jaén, de los Algarbes. de Alpxiras, de Gibraltar, de las Islas de
Canarias, de las Indias Orientales y Occidentales, Islas y Tierra firme
del Mar Océano, Archiduque de Austria, Duque de Borgoña. de Brii-
hante y Milán, Conde de Abspurg, de Flandes, Tirol y Rarcelona,
Señor de Vizcaya y de Molina, etc. P o r cuanto, a mi servicio y e j e c u c i h
de la justicia conviene, s e tome residencia a don Andrés Nestre, del
tiempo que hubiere servido, el empleo de gobernador e intendente d e
Salta del Tucumán y a los que por s u muerte, ausencia, u otro legitimo
impedimento, sirvieren o hubieren servido dicho empleo y a los Tenien-
tes Ministros y Oficiales de todos y al Cabildo, Justicia y Regimiento
de dicho Salta del Tucumán y s u Jurisdicción, confiando de vos don
Gabriel de Güemes, Tesorero Oficial Real de las Cajas de la ciudad
de Salta, que procuraréis mi servicio y guardaréis el derecho a las
partes he tenido por bien de os lo encomendar y cometer, como por la
presente, os lo encomiendo, cometo y mando. que luego que recibAis,
esta mi comisión y haya cesado en el referido empleo el citado don
Andrés IIestre puMiqu6is la dicha residencia, contra todos los suso-
dichos y se la toméis por vuestra misma persona y por vuestra muerte
U otro impedimcnto que os embarace practicarlo asf, cometo s u ejecuciGn a
vos don Felipe de Haedo AIaestre de Campo General reformado de
Xilicias de la ciudad de Córdoba del Tucumán, con 1n propia condiciún
de practicarlo por vos mismo e interviniendo en vos semejante justo
motivo, que también os lo impida, confiero igual comisión a r o s don
Juan José de Segovia relator de la audiencia de Charcas, para que
e n defecto de los anteriormente nominados, toméis dicha residencia, en
los mismos tbrminos y en el preciso de sesenta días, que han de correr
y contarse, desde la publicación en adelante y cumpliréis de justicia a
los que de ellos hubiere querellosos, sentencinndo las causas, conforme
a derecho y en prosecución de la dicha residencia por todas las vias y
maneras, que mejor y más cumplidamente podáis, os informéis y sepRis,
rómo y de qué manera han uaxlo y ejercido sus oficios y administrado
justicia, derecho. preeminencia y ~ t r i m o n i oreal y en especial. en lo
tocante n los pecados públicos y como han guardado las leyes, cédulas
y ordenanzas reales y lo milimo los alcaldes, regidores, mayordomos.
escribanos de gobernación y públicos de dicho Salta del TucumBn y s u
jurisdicción y ni han ido y pasado. contra las leyes hechas en Toledo:
haciendo constar por testimonio haberse fijado y mantenido en las
puertas de la casa de Cabildo del Pueblo donde ha asistido. por todo
el tiempo de su gobierno una copia autorizada del arancel que se le
entreg6 e n 1% Capital con sus titulos y s i h a introducido más géneros
y efectos o los ha rendido a mayores precios de los contenidos en el
expresado arancel y s i éste s e fijó e n dicha Capital y subsistió a ~ i
durante su gobierno, averiguando s i han cumplido con su obligación
en poner cobro y d a r cuenta del procedido de la limosna de la Bula de
la Santa Cruzada. Y s i han disimulado o tolerado la fibrica de algún
colegio o convento sin expresa licencia mía y s i en algo les halláredes
ciilpados por In información secreta, les haréis cargo de las culpas que
contra cada uno de ellos resultaren y de cualquier contravenciím que
hayan hecho a lo dispuesto y mandado cumplir por las dichas leyes.
cfdulas y ordenanzas v de cualquier omisión que hayan tenido en su
ejecución y cumplimiento; y recibiréis sus descargos y averiguaréis In
verdad, apercibiéndoles que no han de s e r m i s recibidos a prueba sobre
ello y guartlando las leyes del reino, no haréis cargos ene era les en la
dicha residencia con apercibimiento que se proccderA contra vos y lla-
madas y oídas las partes e quien tocare, haréis sobre todo entero y breve
cumplimiento de justicia conforme a las dichas leyes y habéis de estar
advertido, que en las sentencias, que <libredes en la dicha residencia
y capitulas que en elle se pusieron. no habéis de remitir l a determi-
nación de ninguno de ellos, a mi Consejo Real de las Indias, sino que
los habeis de determinar como halláredes por derecho. excepto los que
íueren de calidad que no podáis determinarlos, sino remitirles n fl
y esto habéis de hacer con la mayor información que pucliéredcs haber,
<le manera que s e pueda determinar por ella y por el proceqo de la
dicha residencia que enviiiretles, sin que sea necesario hacer otras
nuevas diligencias ni averiguaciones sobre ello, n i volréroslo a remitir
haciendo citar para esto en forma, a los tales residenciados para tcdaa
instancias, apercibiéndoles que envien sus procuradores suficientes
con poderes bastantes, bien instruidos e informados, en seguimiento
de los tales cargos y capitulas, que así remitiéredes para ante los de dicho
mi consejo y s i no la hicieren, se notificaran los autos y sentencias, que
en ella se dieren y pronunciaren e n los estrados de 61 y les parará
tanto perjuicio, como s i en sus personas se hiciesen y notificasen y
se os apercibe que s i asi n o lo hiciéredes y cumpli6redes o algún carno
o capitulo remiti4redes contra los susodichos, s e proveer6 contra vos lo
que convenga. Y s i algunos fueren muertos, haréis d a r traslado de sus
cargos a sus herederos y fiadores de residencia y sustanciaréis con
e1Ios la causa como lo debiérades hacer siendo vivos. Y asimismo nse-
riguaréis y sabréis, s i los susodichos, han entendido y tratado como
debían y eran obligados, las cosas del servicio de Dios y mías, especial-
mente, en la conversión y buen tratamiento de los naturales y bien
común de aquella tierra, para que yo sea avisado de !ns cosas do ella
y las penas e n que han sido condenados cualquiera consejos y pwscnas
particulares pertenecientes a mi camnrn y fisco !as cuales haréis
ejecutar y que s e den y entreguen a los oficiales de mi Real Hacienda
dc este distrito y jurisdicción o a quien SU poder hubiere y se les haga
cargo de ello. Y pasado el término de los dichos sesenta días que se os
dan para tomar la dicha residencia, la enviaréis original quedando a115
un traslado de todo como se acostumbra a dicho mi Consejo cerrada
y sellada con relación particular firmada de vuestro nombre y sipnada
del escribano antc quien pasare, en que se diga y declare, qué cargos
ron los que hay y vienen en ella y contra qué personas y los testigos que
depusieren y a cuantas hojas y número está cada cosa, para que cuando
se haya de ver en el dicho mi Consejo, haya toda claridad y se pueda
cntender bien y brevemente para administrar y guardar mejor justicia
a las partes a quien tocarc con apercibimiento, que no lo cumpliendo
seréis castigado con todo rigor, sin embargo de cualquier leyes, c é d u l ~ s
y ordenanzas, que e n contrario de esto haya, que en cuanto a ello, las
revoco y doy por ningunas y de ninghn v d o r n i efecto quedando en s u
fuerza y vigor para con lo demiis adelante. Y os mando que los pleitos
p demandas públicas que ante vos s e pusieren, durante el termino de l a
dicha residencia por cualesquier personas contra los susodichos, las
fenezcáis, sentenciéis y determinéis dentro de sesenta días, de cómo
ante vos s e pirsicren, sin d a r lugar, a que en la conclusión y determina-
ción, haga mas dilación, porque asi conviene a m i servicio. Y mando
a los susodichos que den y hagan antc vos la dicha residencia y estén
presentes durante el termino de ella so las penas contenidas en las
dichas leyes. Y que ellos y otras cualesquiera personas de quien cnten-
diéredes s e r informado y saber la verdad, cerca de lo susodicho, que
reriran y parezcan a n t e vos a vuestros llamamientos y emplazamientos:
juren y digan s u s dichos y deposiciones a los plazos y s o las penas que
les pusiéredos, en que los doy por condenados l o contrario haciendo.
Y acabada de tomar la dicha residencia cobraréis y haréis se cobren
de los residenciados y personas que en ella pusieren capítulos, querellas
S demandas. los maravedies quo viéredes pueden montar los derechos de
todo para el escribano de cámara y relator de dicho tribunal, a ocho
maravcdís por hoja, para cada uno de ellos dé cada parte a quien tocare,
que esten escritas conforme al arancel, repartiéndolo a proporción
GÜEhlES DOCU hIEKTADO 125

d e la culpa de cada uno, como también el porte (le los autos, según
tarifa, el que pondréis o haréis s e ponga e n la estafeta d e esa capital
cuidando de que los administradores de ella noten en la cubierta s u
importe, para la franquicia y veintisbis pesos de los derechos de esta
comisión y s u duplicado' y cobrado, con m i s lo que fuere necesario
para el flete y derechos a que estfin sujetos este género de caudales
para mi Real Hacienda, como los tlemfis que vienen de las Indias,
haréis se entreguen con los autos de dicha residencia a los oficiales
d e mi Real Hacienda de esa jurisdicción, tomando recibo de e!lo, el
cual os mando remitfiis a dichc m i Consejo y ordeno también a dichos
r d s oficiales reales, que en la primera ocasión, lo hngan de los dichos
derechos y a u t c s registrados por cuenta aparte y relación d e ' q u e
proceden a la audiencia de 1s casa de la contratación de las Indias
que reside cn la ciudad de Cádiz, dirigido a mi presidente y oidores
de ella, para que d5ndose por ellos cuenta en dicho mi Consejo, s e
disponga s u entrega a los expresados escribanos de cámara y rela-
t o r de él. Que para todo ello os doy el poder y comisión que de derecho
e n tal caso se requiere y es necesario siendo mi voluntad (para atajar
todo abuso en este género de envíos) que del cajón de autos de la
residencia y del dinero que quiero venga separadnmentc f u e r a del
mismo cajón de los derechos pertenecientes al escribano de cámara
g relator y de lo correspondiente a lo que dc su importe debe tocar a
mi Real IIacicnda se forme y pong:i la partida de registro con tal
especificación, distinción y claridad que por ella, y en su virtud s e
pueda exigir del todo del cauclal, que así viniere el importe de los
cspresa~losderechos que debe percibir mi Real Haciendn. Y os pre-
vengo que este despacho le habéis de presentar e n la respectiva audien-
cia del distrito de dicho Salta del Tucumdn parn que se halle noticiosa
d e ello p tase los (lerechos que debéis llevar como también los del
alsuacil y escribano, con arreglo a lo dispuesto por mi Real Cédula
de veintinueve de a g x t o del año pasado de mil setecientos sesenta
y ocho, sin cuya precisa circunstancia, es mi voluntad, que no pongHis
e n prictica la evacuación de esta comisión. De cuyo puntual cumpli-
miento os hago y a los referidos oficiales reales especial encargo.
Y en el caso de estar todos impedidos para la evacuación de esta
comisión, os mando y a In audiencia o juez del distrito donde corres-
ponde déis cuenta al mi Consejo para que se destinen otros en vuestro
lugar. sin pasar a practicar diligencia alguna, más que devolverla
original, por haber quedado sin efecto. Dada en San Lorenzo el Real,
a cinco de noviembre de mil setecientos ochenta y nueve. I'o el Rey.
Yo don BIanuel de Nestares secretario del Rey nuestro señor, lo hice
escribir por su niandado. Comisión a don Gabriel de Güemes. por s u
f d t a n don Felipe de IIaedo y por la de ambos a don José de Segovia
para tomar residencia a don Andrés AIestre, del tiempo que hubiere
~ e r v i d oel empleo de gobernador e intendente, de Salta del Tuciimán
3: a sus tenientes ministros y oficiales de pedimento del fiscal de S. Al.
Francisco Jloñino. Gaspar Soler. AIiguel Calixto de Azedo. Registrado.
Teniente de Gran Chanciller. J u a n Angel de Cerain. Certifico que el
apoderado de don Gabriel de Güenics, deja satisfechos en la escribanía
d e cámara de mi cargo los veintis6is pesos, de los derechos de esta
comisiGn y s u duplicado. Madrid once de novicmbre de mil setecientos
ochenta y nueve. Francisco Javier de Eiipe.
Concuerda con el real despacho original de s u tenor que me puso
de manifiesto el señor tesorero ministro principal de Real Hacienda de
esta provincia don Gabriel de Güemrs AIontero y de s u mandato verbal
doy la presente en Salta n cinco días del mes de octubre de mil sete-
cientos y noventa aíios.
[Aquí un signo]
Jose' Antonio JloIi~ia
Escribano Público y de Real IIacienda

Don Andrés IIestre, Brigadier de Infantería de los Reales Ejércitos.


Intendente Gobernador y Capitln General de esta Provincia por S. 31.
que Dios guarde, etc.
Certifico en cuanto debo y puedo, al Rey nuestro Seíior y tribu-
nales superiores, donde ésta o s u s copias fuere presentada: cónio e n
los trece años. que se van a cumplir, que t e m o el mando en esta
~ r o v i n c i an o he tenido la menor queja contra la conducta Y buenos
procedimientos de don Gabriel de Güemes Afontero, Tesorero Oficial
Real propietario en ella y s í una general aceptación de todos los pro-
vincianos en particular de los del comercio, porque su afable trato y
persuasiva para exigir los Rcales y hIunieipales derechos los dejaba
en l a firme creencia de que la contribución era benigna y aun (le que
quedaban agraciados, de cuyo modo en el primer trienio de s u posesión.
tuvo aumento el Real Erario a otro igual anterior setenta y tres mil
ochenta y nueve pesos cuatro y cuartillo reales y sucesivamente hasta
el presente ha ido adelantlndose, según se ha hecho presentc por
estados fidedignos u S. 11. y respectivos jefes de exte ministro, quien
de esta suerte infatigablemente ha dado pruebas de buen criado del
Rey a esfuerzos de sus tareas y desvelos que lo han postrado en cortas
temporadas de poder continuar en el servicio y creído que en la Última
quedara imposibilitado, representó u S. Af. por mi mano y conducto del
uuperintendente general subdelegado pretendiendo la jubilación, pero
recuperado a su salud volvió con m l s instancia a pedir para la con-
tinuación de su carrera. Como tan amante al Soberano, dio también
pruebas de buen vasallo cuando la sublevnción de la plebe en Jujuy,
pues aunque incesante de día en el trabajo (le su oficina, velaba de
noche sobre las nrmas todo cl tiempo que estuvo sitiada de los rcbeldes.
turnando con los demfis principales vecinos, haciendo rondas con sus
tlepcndientes, defendiéndose con ellos en la parte de la trinchera que
le tocaba, animando a la fideiidad a los desconfiados,'conrenciitndolos
con sus razones. disuadi6ndolos de las malas intenciones que encubrían
muchos que se les conocía deseo (le r e u n i r ~ ea los i n s u r ~ e n t e sy asis-
tiendo a los Cabildos y Conscjos de Guerra a que e r a llamado para
acordar con s u prudencia el mejor éxito que al f i n se consiguió:
tocándole mucha parte a este buen AIinistro de la pacificación del Perú,
con el pronto envío de las tropas veteranas y auxiliares, (le los basti-
m e n t o ~ ,viveres, armamento y demas necesario que s e dirigía a este
importante objeto según lo ha certificado el comandante general d e
aquellas expediciones, Presiclente de la Real Audiencia de Charcas, don
Ignacio Flores e informado a S. 31. Después que los primeros sein años
tuvo R s u cuidado el laborioso manejo de Real lIacienda y Sisa, en esta
vastísimx provincia con unión de la que ahora es de Córdoba por sí
sólo lo m i s a causa d e las continuas enfermedades del que fue su com-
paiiero, trabajó después con el mismo tesón de AIinistro Principal,
poniendo en practica cuanto desde la creación de esta intendencic s e
mandaba observar en los nuevos métodos de cuenta y razón sin que
jamis haya sido notado por el tribunal y audiencia real de n o haber,
dado la perfecta inteli~enciani pronto cumplimiento a todo: de suerte
que el dilatado mérito que ha contraído desde s u infancia, su justificada
nobleza, su instrucción, s u sumo desinterés. s u vida ejemplar. su honor
Y demiis bellas calidades que le adornan, le hacen acreedor a los ascensos
del piadoso real agrado, para lo cual en obsequio de l a justicia y es-
timulado de mi obligación, doy la presente firmada de mi mano, sellatla
con d uello de mis armas y refrendada del infrascrito Escribano hIayor
de esta Gobernación e Intendencia mi Sccretario. en Salta a cinco d e
diciembre de mil setecientos y noventa.
IAqui un sello].
A i i d i b .Ilestir
P o r mandado de Su Señoria
Jimn Antottio Aforo Dínz

Señor Gobernador Intendente, don Gabriel de Ciiemcs JIontero,


Tesorero AIinistrn Principal d e Real Hacienda: ante V. S. comn mejor
proceda de derecho parezco y digo, que habiéndose dignado la piedad
dcl Rey comisionarme por real cfdula de cinco de noviembre de mil
setecientos ochenta y nueve para tomar la residcncin al seiíor Crigadier
don Andrés IIestre como Gobernador Intendente que fue de esta Pro-
vincia cuyo Real encarno he totalizado como resulta de los respectivos
jurídicos expedientes actuados en este juicio, por tanto y deseando
hacer constar mis procedimientos en esta parte ante S. 31. y su Real
y Supremo Consejo de las Indias y demás superioridades donde deba y
pueda a este fin, se ha de servir la notoria integridad dc V. S. mandarme
d a r l a certificación correspondiente de cuanto con s u penetración haya
observado en pro o contra, oyendo informativamente s i fuere del
'
agrado de V. S. a este Ilustre Cabildo y su procurador en que reciliiré-
merced con justicia y juro lo e n derecho necesario etc.
Gabriel de Giienics Ílloiitero
Salta, 31 de mayo de 1791.
Informe el Cabildo de esta capital con asistencia del Síndico Pro-
.curador General para mejor proveer sobre esta solicitud.
Garcia Pitnrro
Doctor Dásila
.Ante m i
Jltan Antonio Aforo Diaz
Escribano Mayor de Gobierno e Intendencia
E n dicho día hice saber el ~ c c r e t oantecedente al Señor Juez
de Residencia, doy fe.
nloro
Y luego paso este expediente al Ilustre Cabildo de esta Capital
d o y fe.
nforo

Señor Gobernador Intendente. El juez comisionado de Residencia


y 3Iinistro Principal de Real IIacienda don Gabriel de Güemes AIontero,
tiene demasiadamente acreditada su conducta en esta provincia desde
clue sirve al Rey en ella, por s u genial desinterés. celo para el Real
servicio y ajnstada vida, y así es que siempre ha merecido la más
distinguida atención de este Cabildo y por lo mismo no podía menos
que desempeñar con acierto, integridad, pureza y justificación la comi-
sión de residencia, como V. S. mismo lo habrá observado, habiendo
\isto este Cabildc, reinar durante se ha actuado, la justicia, sin aquellos
.estrepitosos enconos que se han promovido, en las antecedentes residen-
cias, por todo siendo V. S. servido podrh expedir n s u favor. In certifi-
cación que solicita pues es acreedor este IIinistro a que el Rey tenga
noticia circunstanciada de sus honrosos procedimientos como lo com-.
prende de justicia así este Cabildo. con asistencia de s u procurador,'
sindico general. Sala capitular de Salta, 31 de mayo de 1791.
Alnbrosio Femíndez de Sovacia. Antonio Pardo. Francisco roceda.
.J1tan Antonio Fernánclez. Jitait A'atlal y Gitardn. Pedro Pablo Arias.
Pedro José de Sarnria.

Don Ramón Garcín cle LeOn y Pizarro, caballero del orden de


.Calatrava, Coronel (le los Reales Ejércitos. Intendente, Gobernador y
Capit5n General de esta Provincia por S. 31. (que Dios guarde), ctc.
Certifico al Rey nuestro Señor y tribunales donde ésta o sus
.copias se presentaren, cómo don Gabriel de Güemes Alontero, Tesorero
Ministro Principal de Real IIacienda ha tomado la Residencia, por
comisión de S. M. a m i antecesor el ilrigndier don Andrés Alestre y
.n los Ministros de Justicia que h a habido es esta Provincia en los trece
GUELIES DOCU~IENTADO 120

años que la gobernó desde el tiempo que estaba unida con la que ahora
es de Córdoba, con tanto acierto que no sólo he tenido la menor queja
contra los procedimientos en la jurisdicción que ha ejercido sino que
oigo preconizar así a los residenciados, como a todos los provincianos.
el celo, prudencia y desinterés con que ha distribuido la juqticia asi
este comisionado en las sentencias, como sus delegados en el eegui-
miento de las causas, para cuyo nombramiento procurb la mejor elecciGn
según la gran experiencia que le asiste en los mismos trece años que
tiene (le Oficial Real en que también tiene justificado el cabal desem-
peño de su obligación y dejando en la mayor tranquilidad y satisfacción
a dichos residenciados y demandantes, como lo informa este Cabildo.
ha llenado debidamente la confianza que en esta parte ha hecho S. 31. de
dicho Ministro y por lo mismo e s acreedor a que l a Real Piedad lo dis-
tinga, por este y sus anteriores buenos y relevantes servicios dindole
I w a los efectos que le convengan la presente firmada de mi mano.
ellad da con el sello de mis armas y autorizada del infrascrito E ~ c r i b a n o
3Iayor de esta Gobernación e Intendcncia, mi secretario, e n Salta a dos
de junio de mil setecientos noventa y uno.
[Aqui un aello]
Rnnldn Gareía Pizarrn
P o r mandado de Su Señoría
Jltnn Antonio iiforo Dfnz

Itallándose practicada la primera almoneda para el remate del


arriendo de los diezmos de la jurisdicción de Jujuy y restando dos
a que no puedo concurrir por mi salud quebrantada como por otra
parte, insta cl que se verifique dicho remate, para evitar e1 perjuicio
que con la demora se ocasionaría a los que de aquella ciudad han venido
sólo con este fin, parece es llegado el caso prevenido en la declaración
(in contenida en la Real Instrucción de Intendentes para que Vm. e n
ausencias y enfermedades del señor Gobernador Intendente y mías,
haga las funciones (le tal en esta virtud, podrá Vm. concurrir como
IIinistro m;is antiguo, en calidad de Intendente y el Contador s u com-
pañero, en la del Ministro encargado para dicha junta decimn?.
Dios guarde a Vm. muchos años. Salta y julio 5 de 1791.
Doctor Tndeo Dáciln
Señor BIiniatro Tesorero don Cabriel de Güemes Nontcro.

Como he determinado pnsar a la frontera dc Jujuy por unos quince


dias, que juzgo bastantes, para d a r alnún alivio a mis males habituales.
IIallindose también ausente el señor Gobernador Intendente debe tener
cumplimiento la declaración GV contenida en la Real Instrucción de
Intendentes, por ella ordena S.M. tenga el mando en este .caso el
Ministro más antiguo de Real Hacienda y siéndolo Vm. he pasado a1
Ilustre Cabildo el oficio de que acompaño copia, para que quede inteli-
genciado y de estarlo Vm., me dará el correspondiente aviso, acusiin-
dome recibo de éste.
Dios guarde a Vm. muchos años. Salta y agosto 10 de 1791.
Doctor Tndeo Dóviia
Señor Tesorero Ministro Principal don Gabriel de GUemes Montero.

Necesitando mi salud valetudinaria respirar en la presente estación


aires m6s puros, según los facultativos, he determinado salir por quince
días al campo y debiendo ser el temperamento más cálido, he elesido
el de la frontera de Jujuy. Con estn precisa ausencia, es llegado el caso
prevenido en la declaración G'! contenida en la Real Instrucción y con
arreglo a ella, queda mandando la Intendencia, el Ministro más antiguo
y siéndolo el Señor Tesorero don Gabriel de GUemes Montero, lo tendrk
V. S. así entendido para los casos y circunstancias ocurrentes.
Dios guarde a V. S. muchos años. Salta y agosto 10 de 1791.
E s copia
[Una rúbrica]
Muy Ilustre Cabildo, Justicia y Regimiento.

E n oficio de este día he participado a Vm. mi precisa ausencia,


como que queda a su cargo la Intendencia, según lo ordena S.M. y
debiendo nombrar algún letrado a cuyo cargo corra la asesoría y con
quien pueda Vm. descargar los asuntos de derecho concernientes al
empleo, he determinado ocupe este lugar el licenciado don Juan Esteban
Tamayo, abogado de las Reales Audiencias de Lima y Charcas, e! que
siendo de mi aprobación, espero lo sea de la de Vm. o que determine
lo que sea de su agrado.
Dios guarde a Vm. muchos años. Salta y agosto 10 de 1791.
Doctor Tadeo D&.vila
Señor Tesorero Ministro Principal don Gabriel de Güemes Montero.
Salta, agosto 11 de 1791.
Nombro para Teniente Asesor por todo el tiempo que se halle
a mi cargo el Gobierno de esta Intendencia en virtud de las facultzdes
que para estos casos me tiene conferidos S. M., al doctor don Juan
Esteban Tamayo a quien se le hará entender para su aceptación y
demás que haya lugar en derecho y de que tambien se pasara noticia
al Ilustre Cabildo para su inteligencia en la parte. que le toca.
Giitntes
GUEMES DOCUMENTADO 131
I'

Proveyó, mandó y firmó lo de suso decretado el Señor Tesorero


Ministro Principal de Real Hacienda de esta Provincia más antiguo
por ausencia del Señor Gobernador Intendente y su Teniente en el
día, mes y año de su fecha por ante mi de que doy fe.
Josti Antonio illolina
Escribano PCiblico y de Real IIacicnda
En dicho día, mes y año: Yo el Escribano actuario hice saber
el anterior nombramiento al licenciado don Juan Esteban Tamayo,
quien impuesto de su contenido, lo aceptó bajo de juramento que celebró
en forma de derecho y lo firmó de que doy fe.
Licenciado Juan Esteban de T a n m ~ o
José Antonio hfolina
Escribano Público y de Real Hacienda

Por el oficio que s e sirvió Vm. pasar a este Cabildo con fecha del
día de ayer, quedamos inteligenciados del nombramiento que ha hecho
de asesor interino de esta Intendencia queshoy corre al cargo de Vm.,
en el licenciado don Juan Esteban Tamayo, abogado de las Reales
Audiencias de Lima y Charcas, conforme a la Real Orden de 6 de abril
de 1785, que asimismo nos puso Vm. a la vista y Ia devolvemos, despuks
de quedar copiada en el Libro Capitular.
Nuestro Señor Guarde a Vm. muchos años.
Salta y agosto 12 de 1791.
Anzbrosio Fernández de Saravia. dligtcel Francisco Gdnzez. Roquc
de la Zerda. Francisco Poveda. Juan Antonio Fernández. Juan Nadnl
Grtarda. Pedro Pablo Arias.
Señor Intendente Interino, don Gnbriel de Güemes Montero.

Excelentísimo señor: Don José Francisco de Tineo en voz y nom-


bre de su poderdante don Gabriel de Güemes Montero, Ministro Tc-
sorero Principal de la Provincia de Salta. ante la justificación de V. E.
con el debido respeto, parezco y digo: Que el aiío pasado de 1777.
fue promovida esta mi parte por la real piedad para el empleo de oficial
. real que ejerce. Desde este mismo instante se contrajo con infati~able
esmero a realizar los conocimientos de su resorte, arreglando la oficina
de su cargo, asegurando de nuevo la conservación dc los reales intereses
puestos a su cuidado y aumenttíndolos por cuantos medios Ins leyes
y la política le sugieren, sin que la serie dilatada de 18 años continuados
de tan incesante trabajo, le hnya obligado a decaer del prlmer empeño
con que el honor lo situó en la brillantez de sus deberes. E n obsequio
n la justicia, sus jefes inmediatos tienen en diversas ocasiones repre-
~ e n t n d oe informado a esta superioridad t a n relevante merito y V. E.
mismo e s testigo.
P o r comisión del Rey. tomó la residencia d e trece años de Gobierno
del señor don Andrés Mestre, Mariscal de Campo y Gobernador In-
tendente que fue de aquella provincia. Aquí es donde la justificación
e imparcialidad de cste Ministro, acordaron el más cabal desempeño y
no habiendo sido menos en otros varios anteriores encargos y en la
observancia de sus superiores órdenes se ha de dignar la bondad
(le V.E. certificarlo del modo que sea de su agrado y eonceptúc de
justicia y s i lo considera digno de las soberanas piedades como espera
de s u justificada integridad por tanto.
A. V. E. suplico y pido s e digne asentir a e ~ t ami reverente solici-
tud en que recibiré llerced.
Excelentísimo Señor
Señor
José hatici.sco d e Tineo
Buenos Aires, 8 <le febrero de 1795.
E s constante cuanto refiere el suplicante en s u precedente instan-
cia, como asimismo lo tiene acreditado a esta superioridad con docu-
mentos e informes de aquel Gobierno Intendencia. considerándolo por
lo tanto digno de las Soberanas piedades y pera que pueda hacerlo
constar dónde y cómo le convenga le doy el presente decreto.
Arredondo
José Ortiz
Señor Intendcnte Gobernador y Capitin Gcneral. paso a manos
(le V. S. las tres adjuntas representaciones de un tenor y e n que so-
licito de la Piedad del Rey el empleo de Administrador General de la
Real Aduana de Buenos Aires y Alcabalas del Virreinato. que se halla
vacante por fallecimiento del que lo servía don J u a n José Núñez. Espero
(le la rectitud de V. S. le dé el curso correspondiente con el informe
que estime de justicia sobre mis servicios y procedimientos según
ministran los adjuntos documentos originales, que paso a V. S. para
que vistos tenga la bondad de mandar se me devuelvan para fines de mi
interés.
Nuestro Señor guarde a V. S. muchos aíios. Salta, 23 de mayo
1795.
Gnbriel de G i i e ~ ~ i eMontero
s
Señor brigadier de los Reales Ejércitos don Ramón Gareia Pizarro.
Salta y mayo 23 d e 1798.
Siendo constantes los buenos servicios que con amor. celo, talento
y desinterés, ha hecho a S. 31. en el espacio de veinticinco años don
Cabriel de Giiemes Montero, ministro principal tesorero de las Reales
Cajas y Aduana de esta Provincia como lo acredita con los documentos
originales que presenta y que se le devolverán sacándose tres testimo-
nios represéntese con ellos su distinguido mérito a la Real Piedad,
por mano del Excelentísimo Señor Virrey agregándose a cada uno
G Ü E Y E S DOCUMEKTADO

copia del antecedente memorial y este decreto para que s i fuere del
real agrado se le confiera la administración general de la Real aduana de
Buenos Aires, a que lo considero acreedor.
Gnrcia Pizarro

Excelentisimo Señor. Dirijo a manos de .


V.E., por triplicado, el recurso que por
El intendente gobernador m i mano y superior conducto (le V. E. hace
y Capitftn General de la n S.M. el ministro tesorero principal de
Provincia de S d t a . Re- esta provincia, don Gabriel de Güemes
presenta a V. E. los bue- Nontero, solicitando de s u real clemencia
nos servicios del minis- el empleo de administrador general de esa
t r o principal don Gabriel r e d aduana y Alcabalas del Virreinato que
de Güemes Montero, te- resulta vacante por fallecimiento del que
sorero de las reales cajas lo obtenía don J u a n José XÚñez. Cuando
y aduana de dicha pro- las solicitudes de los súbditos están ador-
vincia acompañando el me- nadas con proporcibn y justicia, exigen toda
morial que hace a S.M. protección de los superiores para que ins-
este interesado, con testi- truido el Real Bnimo, dispense a los que
monio y copia de los do- bien le sirven, las gracias que sean de s u
cumentos con que califica soberana rolunta(1. I:n obsequio a la verdad
su mérito, para que V. E. y al desempeño dc las leyes, tanto m i an-
s e digne dirigirlos a las tecesor, como yo, tenemos informado a esa
reales manos por la vía superioridad en repetidas ocnsiones, lo que
que corresponde. a efec- creímos bastante a hacer ver el genial ca-
t o de que l a Real Pie- rhcter de este ministro, cuya pureza. de-
dad le coloque de admi- sinterés, celo, constantes tareas y sana po-
nistrador general de l a lítica, se ha hecho siempre admirar de
Real Aduana y Adminis- cuantos lo tratan y se ha hecho querer sin
trador d e Alcabalas d e cs- violencia. P o r certificaciones de don Do-
t e Virreinato que está mingo Marcoleta y don Manuel de la Roca,
vacante, s i fuere de su contadores de cargo y data de la tesorería
soberano agrado, para en general de Madrid. hace constar su primer
cuyo caso igualmente rc- servicio hecho a1 Rey con aprovechamiento
presenta los de don Jos6 y utilidad en aquella oficina desde prin-
Tomas Sánchez, Adminis- cipios de enero de 1770, hasta quc por Real
trador General Factor de Título del 20 del mismo mes y año 77 fue
la Real Renta de Tabacos promovido para tesorero oficial real de Ju-
dc dicha Provincia y los juy, de cuyo empleo tomó poscsión .en 16
ahorros a la Real Ha- de dicho mes y año de 78. Desde este ins-
cienda de 1.350 pesos tante se dedicó con infatigable esmero al
anuales unido este em- conocimiento de hs leyes, cédulas y rírde-
pleo con el de Tesorero nes de s u resorte, al arreglo de la oficina
Ninistro Principal. de . s u cargo y al aumento y conservación
de los reales intereses, que le confió el
Rey en esta provincia, lo que consiguió hasta aquel punto que con
prudencia y sagacidad permitían las circunstancias de los tiempos y
s e conformara con la intención soberana. En los años de 1780. 81, 82
y 83 fueron imponderables sus desvelos y fatigas, porque además de
sus comunes ocupaciones, corrió a su cargo por comisión de mi ante-
cesor y del señor superintendente general don Manuel Ignacio FernPn-
dez, a quienes debió la m i s justa confianza todo el apresto para el
envío de tropas auxiliares, veteranas y milicianas a las provincias In-
teriores para contener los progresos de la insurrección. Compró por-
ciones de mulas que despachó para las expediciones. En la sublevación
de Jujuy fue uno de los que m6s cooperú a su disipación con sus con-
sejos en juntas y Cabildos y turnando con sus dependientes en las
xuardas de noche sin separarse de su oficina de día, de tal modo que
el Señor Presidente de Charcas don Ignacio Flores, en 15 de abril de
83 asegura a este gobierno e informa al Rey, que en la pacificación
del Reino contribuyó no poco el celo y puntualidad con que este mi-
nistro le auxilió en cuanto estuvo a su cargo y lo mismo expuso a S. M.
en 30 de enero de 1784 el Excelentisirno Señor Virrey don Juan José
Vhrtiz. Del mismo modo y con iguales esmeros ha desempeñado otras
varias importantes comisiones del interés del Rey y del público ya co-
lectando víveres para las fronteras y ya recaudando sumas considerables
que se hallaron de menos en las tesorerins menores por muerte de los
tenientes. Tomó la residencia a mi antecesor por comisión del Rey y
por los trece años de s u gobierno y fue admirable su desinterés, su
justificación, su prudencia y su imparcialidad. Por mi ausencia visi-
tando la provincia y la de mi teniente Asesor a medicinarse, ha que-
dado mandando este gobierno e intendencia en dos distintas ocasiones
y en ambas ha acreditado su juicio y pulso en el buen despacho de los
nesocios públicos, con complacencia universal de los vecinos que lo
respetan y aman por su rectitud y sanas intenciones. Y por último ase-
guro a V. E. que su vida ejemplar y su conducta irreprensible le hacen
digno de la superior protección de V. E. y del amparo de S. 31. para que
recaiga en él el enipleo que solicita al que lo considero en justicia
muy acreedor porque mbrS hacer compatibles los intereses del Rey
p los del comercio que merecen su soberana protección, como resulta
de los documentos que en testimonio y copia acompaño con el NQ 1.
Si la Piedad del Rey accede a la ~olicituddel Ministro Tesorero con-
vendrS a su real servicio reunir todas las rentas de la provincia cnmo
csthn en las Intendencias del Paraguay, Cochabamba, Córdoba y otras
del Imperio del Perú. De este modo se consigue el ahorro a n u d a
favor de la Rcal Hacienda de un mil trescientos cincuenta pesos. los
un mil, de la mitad del sueldo del tesorero por ser la otra mitad la
que se le aumenta al administrador general factor de la renta de tabacos
para el completo de los dos mil que debe gozar y son los de su do-
tación y los trescientos cincuenta pesos restantes que en los alquileres
de case para los oficios principales de cuenta y razón se contribuyen
en cada un año, pudiendo éstos situarse donde se halla la adrninistra-
ción de tabacos. Los dependientes del resguardo manejados por una sola
oficina. producirán sus fatigas para las reales rentas mejores efectos,
porque distribuitlas las órdenes por unos mismos jefes, no se hallarán
CUEBIES DOCUMENTADO

embarazados como ha sucedido no pocas veces en su cumplimiento. E s


justamente Excelentisimo Señor el administrador general factor de
la reales rentas de tabacos de esta ciudad don José Tomás Sánchez,
uno de los empleados más completos que S. M. tiene en sus Américas.
por su instrucción y conocimientos, por su conducta y moderación y
por su aptitud para desempeñar cuantas comisiones y empleos pongan
a su cuidado. Desde 8 de enero de 1774, hasta 24 de diciembre de 77.
airvió la secretaria de este gobierno y capitanía general mereciendo
una singular aceptación y toda confianza de mis antecesores don Gc-
r6nimo IIatorras, don Francisco Gabino Arias, y don Antonio A r r i n ~ a ,
con quienes como inseparable de su lado y con el carácter de capitán
visito en distintas ocnsiones la provincia según su antiguo pie, e hizo
entradas a todas las fronteras, dando siempre pruebas nada equívocas
de su gran talento y amor al Rey. Desde 18 de agosto de 1779, se halla
sirviendo a las Reales Rentas de Tabacos y Naipes, primero como Ad-
ministrador Principal de esta ciudad y su partido y después como Re-
neral y factor de toda la provincia debiendo estas rentas a su celo.
contracción y desinter&, todo el arreglo de que son susceptibles según
las- circunstancias locales de cada jurisdicción. Así consta de los do-
cumentos Nq 2 y 8 que tambien incluyo. Por sus servicios y honrosos
procedimientos lo contemplo digno de la Real Clemencia y de que re-
caiga en su persona el empleo de Tesorero Ministro Principal con
retención del de las rentas que actualmente administra. Todo lo cual
me h a parecido conveniente informar n V. E. para que pueda' tomar
In resolución que sea de su mayor agrado. Dios guarde la importante
vida de V. E. muchos aiíos. Salta y junio 2 de 1795. Excelentfsimo
Señor. Ram6n Gareia Pizarro. Excelentísimo Señor Don Pedro BIelo
de Portugal.
Es copia de su oripinal y la certifico y firmo.
Juan Antonio nloro
NQ Excelentisimo Señor. Dirijo a V. E. el adjunto informe docu-
mentado que me ha pasado el Gobernador Intendente de Salta en que,
con motivo de haber vacado la administración de la Real Aduana de
esta Capital recomienda la solicitud que hace a estn plaza el Tesorero
de las Reales Cajas de aquella Provincia don Gabriel GUemes Montero.
Este Ministro, según los documentos de sus servicios y los in-
formes con que me hallo, concordantes con el del referido intendente
tiene contraido un merito no vulgar y es digno por ello, por su hon-
radez, buen desempeño, inteligencia y aptitud, de ser mejorado de
suerte, bien sea concediéndole ascenso a esta Tesoreria General de
Ejercito y Real Hacienda en la primera vacante que resulte o en otra
de mayor dotación con los honores de Contador blayor de este Tri-
bunal de Cuentas, como de uno y otro gozan los actuales Ministros
de las Redes Cajas de Potosí. Pero contrayéndome a la solicitud de
Güemes, deberé hncer presente a V.E., que aunque es cierto tiene
sobrado merito y aptitud para desempeñar la administración de esta
Real Aduana, también lo es que los sujetos propuestas por mi antece-
sor y por mí para esta plaza y sus resultas, son igualmente acrecdo-
res a s e r atendidos por s u respectivo merito, servicios y bellas cualidades,
según informe a V. E. en carta de 3 de julio de este año número 24.
Sin dejar d e manifestar a V. E. que el pensamiento propuesto por
dicho intendente de reunir en los BIinistros de Hacienda. de Salta
la Factoría Administración de Tabacos de aquella Capital puede
ofrecer, sobre la supresión de esta plaza y s u respectivo sueldo,
un manejo más expedito, autorizado y seguro, n o porque el del actual
administrador don Jos6 Tomüs Sánchez, induzca la menor sospecha,
pues por el contrario, e s notoria su actividad, honradez y buen de-
sempefio, sino porque estando en manos de Ninistros más autorizados
y distinguidos por su clase, serán consiguientes sus desvelos y dedi-
cación para proporcionar a la renta con el contento del público, las uti-
lidades y ventajas de que son susceptibles los ramos de su respectiva
pertenencia, pero s61o podría tener efecto el pensamiento cuando par
promoción o falta de alguno de los Ministros de Real Hacienda o del
Administrador resultase vacante alguna de estas plazas. E s t o es lo
que alcanzo y cuanto puedo informar a V. E. en la materia, ?ara que
s i lo estimase arreglado a las intenciones y servicio del Soberano s e
sirva hac6rsclo V.E. presente. Dios guarde la vida de V. E. muchos
años. Guenos Aires, 20 de octubre de 1795. Excelentísimo Seííor. Don
Pedro Nelo de Portugal. Excelentísimo Señor Don Diego de Gnrdnqrti.
Excelentfsimo Señor. Faltaría a los sentimientos de justicia s i en
ocasión que dejo el mando de esta provincia para i r a encargarme de
la de Charcas, dejara de informar a la rectitud de vuestra excelencia.
las distinguidas calidades de celo. prudencia, buen juicio y contracción
que adornan a don Gabriel de Güemes Montero, ministro tesorero prin-
cipal de esta intendencia, quien por lo mismo ha ocupado en mi cora-
zón un lugar de distinción entre todos los demás que me han obede-
cido. Ya e n representación de dos de julio de mil setecientos noventa
p cinco, explique con los sentimientos mis tersos de ingenuidad, s u s
buenos servicios, su fidelidad y s u natural amor al Rey y ahora ~ ó l o
lo hago con referencia, a f i n de instruir el justificado ánimo de vues-
t r a Excelencia, para que s i fuere de su superior agrado asegure a S. M.,
que e n este 3Iinistro tiene un criado digno de s u Real confianza, que
sabrá desempeñar con acierto cuanto ponga a su cuidado. Dios guarde
la importante vida de V. E. muchos afios. Salta, dieciocho de octubre
de mil setecientos noventa y siete. Excelentísimo Señor. Ram6n García
Fizarro. Excelentísimo Señor don Antonio Olaguer Felilí. Enmendado
- - -
con octubre vale.
E s copia de s u original y la certifico y firmo.
J u a n Antonio .lloro
[M. o. y fotocopia en N. A.]
[ANEXO SEGUNDO]

P A P E L E S DE BASAVILBASO
Número 28 y
Don Gabriel de GUemes y don Nicolds de Villacorta
Obligaciones y cuentas.
Pagados menos los intereses.

Digo yo don José Antonio Lópcz, vecino de la ciudad de Santiago


del Estero y próximo a caminar a la de Jujuy con mi tropa de ca-
rretas, que he recibido del señor don Manuel de Basavilbaso dieciseis
cornucopias y seis espejos con marcos dorados y acomodados todos e n
seis cajones número 1 a G y bajo de correspondiente licencia para en-
tregar e n dicha ciudad de Jujuy al general don José de la Cuadra.
ausente, a s u poder de cuya conducción confieso hallarme satisfecho
liasta la fiel entrega que me obligo a verificar con m i persona y bie-
nes, habidos y por haber en toda forma de derecho. Y para que a s í
conste firmé tres de un tenor para un solo efecto. Buenos Aires. 1 G
de noviembre de 1777.
José Antonio Ldper de Velnzco
Son G espejos y
1 G cornucopias

El señor don Gabriel de Gücmes a don Nanuel de


Basavilbaso ........................................... Debe
1777
Setiembre 22 150 pesos corrientes mitad de 300 que se entre-
garon por s u papel y los otros 150 s c cargan a
s u compañero don Nicolds de Villacorta ...... 150.
Noviembre 8 300 pesos corrientes entregados por s u papel .. 300.
300 pesos corrientes que s e cargan de los 600 en-
tregados al carretero don José Antonio Ldpez
por la carreta y carretón que ocupa dicho señor
Cüemes y los otros 290 fueron por cuenta de
dicho Villacorta a quien se cargan ... .... ... 300.
21 50 pesos entregados a dicho señor Güemes paro
gastos del camino ........................... 50.

Pesos 800.
--

Buenos Aires, 21 de noviembre de 1777.


E l señor don Nicolás de Villacorta, oficial real de Jujuy a don
Nanuel de Basavilbaso ................................... Debe
1777
Setiembre 22 150 pesos corrientes que por papel de dicho
señor y de don Gabriel de Güemes s u compañero
entregué para cargar a cada uno 150 pesos .. 150.
Octubre 19 250 pesos corrientes que por otro papel de dicho
señor Villacorta le entregué por sus gastos .. 250.
,, 20 550 pesos corrientes que por otro entregué igual-
mente para comprar un negro y otros gastos . . 550.
Xoriembre 21 290 pesos corrientes que de los 500 que entre-
gu6 al carretero que había de conducir a dicho
señor y a su compañero don Gabriel de Güemes
se deben cargar n dicho señor según s u papel
de este día ............................... 200.
1778
Jlarzo 17 150 pesos corrientes que por otro papel de dicho
señor entregué ............................
-
150.
-
Pesos 1.300.

Los papeles que se refieren en esta cuenta los entregué a dicho


señor Villacorta en julio '5/78 que me otorgó obli~aciónde los refe-
ridos 1.300 pesos a pagar cn plata con el cobro de su conducción a
dicho don Gabriel de Güemes en Jujuy y s i quedme en Córdoba a don
Andrés Paz de Codisi:lo.

Don Antonio, entregue Ud. a don José Antonio López setecientos


pesos. Im quinientos por cuenta de los 'oficiales reales de J u j u y y
loa doscientos por el flete (le cincuenta postes.
Octubre 28/77.
[Una rúbrica]
A cuenta del libramiento de arriba recibí trescientos. Ruenos Ai-
r e s y octubre 28/77.
Jost! Antonio L6pe.z de I'elazco
G ~ E ~ I EDOCUMENTADO
S

i
' en 5 de dicho bienio los 400 de don Isidro Balbastro quien me
hizo el favor de suplirmelos, a pagar en todo noviembre.

Copia
Digo yo don Gabriel de Gücmes, provisto Oficial Real de las Ca-
jas de Jujuy, que es verdad y confieso haber recibido del señor don
3Ianuel de Easavilbaso ochocientos pesos que por hacerme favor me
ha suplido en dinero efectivb para los avios y gastos de mi viaje hasta
dicha ciudad de Jujuy, que estoy próximo a emprender, cuya canti-
dad me obligo en toda forma de derecho a satisfacer al expresado se-
fior Easavilbaso en moneda doble en esta ciudad de Buenos Aires en
cl término de 6 meses; y para que nsl conste firmé dos de un tenor,
para que cumplido el uno, el otro no valga, en Cuenos Aires a 21 de
noviembre de 1777, siendo testigos don Bfelchor de Albin; don Ni-
colas Ferrari y don Antonio Llngo - Gabriel de Giiemes iilontero.
Testigo: Melclior de Albin. Testigo: hTicolRs Ferrari. Testigo: An-
tonio Llano.

Digo yo don Nicolás de Villacorta electo oficial Real de las Cajas


de Jujuy que es verdad y confieso haber recibido del seiíor don Ma-
nuel de Easavilbaso la cantidad de mil trescientos pesos que por ha-
cerme favor y buena obra me ha suplido en dinero efectivo para la
compra de unos esclavos y gastos de mi subsistencia en esta ciudad
desde 22 de setiembre del año próximo pasado en que dio principio a
dichos suplementos. Y me obligo en toda forma de derecho con mi
persona y bienes habidos y por haber. e hipotecando especialmente a
los dichos esclavos, que compré con el dinero que el expresado Rasa-
vilbaso me supli6 a la satisfacción de los referidos mil trescientos pe-
sos a mi arribo a la ciudad de Jujuy y para ello los he de entregar
a mi compañero don Cabricl de CUemes, y en caso de que se verifique
la división de aquella Caja y quede yo en la ciudad de Córdoba, me
obligo igualmente a ejecutar el expresado pago a don Andrés Paz de
Codisido, administrador de correos en dicha ciudad, ejecutfindola en
una u otra parte en moneda doble y con la correspondiente al costo de
su conducción respecto a que dicho señor Basavilbaso, no me ha Ile:
vado interés alguno por todo este tiempo y desde que me hizo los re-
feridos suplementos. Pero en caso de que por algún accidente no veri-
fique el pago a mi arribo según va declarado, deberé satisfacer los
intereses de la demora a razón de ocho pesos por ciento nl año sin per-
juicio de la vía ejecutiva. Y para que conste y me puedan compeler
firm¿. esta obligación por duplicado, para que cumplida la una. la
otra no valga. en Euenos Aires a O de julio de 1778. siendo testigos
don Antonio Llago, don Nicolds Ferrari y don Antonio Ram6n de Zu-
laica. h'icolás de Vilfacorta OcaRn. Antonio I J a ~ o .Nicolás Fcrrari.
Antonio de Z~tlaica.

Diciembre 22/79. Recibí a cuenta setecientos cincuenta pesos mo-


neda doble que con don J u a n Ignacio Vidaurre, me remitió don José
de Allende y di rceibo en el conocimiento.
De los quinientos pesos dobles que remite dicho señor Don Ga-
briel de Güemes con don Tomás Antonio Romero me satisfaré de los
cincuenta pesos que se restan de principal de la obligación de la vuelta
y los 45 restantes los entregaré a don Francisco Antonio Escalada se-
gún la orden. . .i 1

Don Nicolis de Villacorta, oficial real de Jujuy.


Obligación de 1.300 pesos y le suplí.
Una de dichas obligaciones la remití a s u compañero don Gabriel
de Güemes con carta de octubre 16/78.
Diciembre 16/79. Di orden a dicho Güemes que entregase la obli-
gación a don José de la Cuadra y escribí a éste para que la recibiese
y procurase la recaudación, etc.
E n carta de 25 de enero/80 me dice don Cayetano Viniegra le
había entregado Villacortn 1.300 pesos dobles que me remitiría y para
que le tratase de cobrar los intereses le mandé copia de dicha obli-
gación en febrero 1G/80 y en la misma fecha escribi participando
la entrega de los 1.300 a don José de la Cuadra a quien mandé la otra
obligación original para que pagando Villacorta los intereses le entre-
gase los dos y se concluyese el asunto y queclando copia de la obligación
para gobierno, etc.

Amigo estimado y dueño mío: P o r resultas de una larga estación


en esta recoleta franciscana, he bajado apasionado de los libros y
obra titulada Año Cristiano, con sus Dominicas. Cómpremelas Ud.
completa e n pasta y envíemelas s i puede por el Correo. Envíeme Ud.
también una docena de medias de seda llanas para estas señoras que
visten a esa moda; de las que hoy s e gastan, cargando uno p otro a
mi cuenta.
Después de puesta mi carta en el correo han sobrevenido estos par-
ticulares y nuevo motivo de repetirse de Ud. su afectísimo amigo.
Ci;clllcs
Plata. mayo 15/81
Señor don Al.?nuel de Ensnvilbaso.
GUEDIES DOCUDIENTADO

Se remitió por el correo de junio 16/81 a Güemes.


Los 12 pares de medias que costaron a G '/? pesos par,
importan ............................. ..:. ........ GG pesos
Se compró l a obra del Año Cristiano con sus Dominicas
e n 45 pesos y queda para remitirsele ............ 45 pesos

Pesos ...... 111 pesos


Que se le avisó s e cargarán n SU cuenta.
[Papeles de Basavilbaso originales en nuestro archivo por ntcnciln que nos
hizo el ingeniero Federico Alvarez de Toledo.] -
[ANEXO TERCERO]

. a ) Documentos del Archivo General de la Nación.


b) Documentos del Archivo y Biblioteca Históricos
de Salta.
C) Testamento de don Gabriel de Güemes Montero.
d) Inventario de la Tesoreria de Salta, hecho con
motivo de la muerte de don Gabriel de Güemes
Mont ero.
a ) DOCUMENTOS DEL ARCIIII'O GENERAL DE L A NACION

[Copia testimoniada en N. A.]


Señor Intendente General.
Muy señor nuestro. Habiendo fallecido el día 14 del corriente mes
don Francisco Solano de la Corte, arrendatario del Real derecho de
Alcabala de efectos de la tierra de esta ciudad y s u jurisdicción; s e
t a n presentado en este Tribunal sus fiadores don Blartln Miguel de
Goyechea y don Diego de la Corte, hermanos de aquel y el primero
suegro de mí, el Tesorero, con un escrito que en testimonio pasamos
a sus superiores manos. E n 61 solicitan que respecto de estar al seguro
de este derecho corra de cuenta de ambos s u percepción en 103 mismos
términos que recayó en el rematante; en cuya inteligencia se h a d e
servir la notoria justificación de V. S. con concepto a todo resolver lo
que sea de s u superior agrado; en inteligencia de que hasta tanto que
V. S. nos comunique su determinación ha quedado del cargo suyo este
derecho con tal de que satisfagan a S u Majestad lo estipulado. h'ues-
t r o Señor guarde a V. S. muchos años. Jujuy y Real Cantadurja, 22 de
abril de 1779.
Besan las manos do V. S. sus más atentos súbditos.
-
Gabriel de Giiemes Blontem A'icolis d e Villacorta 11 Ocaíia
Señor don JIanuel Ignacio Fernández.
[A. C. N., VI-7-6-3, Intendencia do 'Salta, Cataniarca, Jujuy-1784-1800.
Copia testimoniada en N. A.]

Jujup. 23 de julio de 1783.


De los Oficiales Reales.
Con testimonio de una certificación del Presidente representan la
eficacia con que han redoblado su celo en el apresto de mulas, viveres
p demás útiles en que estaban comisionados para el socorro de las
tropas que se internaban con motivo de la rebelión suplicando a
V. E. instruya de ello al Real ánimo para que logren sus ascensos.
Dentro la respuesta del 11 de setiembre.
Enterado, y enviarla n informe del Gobernador del Tucumán.
P o r carta de Vms. de 23 de julio Último y testimonio que acompa-
ñan quedo enterado del celo y eficacia con que procedieron al apronte
de mulas y víveres, vestuario y demás que s e necesitó para el t d n s i t o
y despacho de las tropas y milicias que siguieron y salieron de esa
Provincia para el socorro de las sublevadas.
Setiembre 11/83.
A los Oficiales Reales de Jujuy.
Habiendo recibido la constancia de Vms. de 23 de julio dirigida a
que instruya a Su Majestad de la buena conducta y de la actividad
con que facilitaron las provisiones y demás necesario para el transporte
de las tropas enviadas al Perú en las pasadas ocurrencias y demás que
expresan. se hace preciso que me dirijan Vms. el memorial por prin-
cipal y duplicado para Su Majestad, a fin de que con las noticias que
tengo de su buena conducta pueda formalizar el informe que desean.
Dios, etc.
Buenos Aires, Noviembre 16/83
["La buena conducta y" está tachada en el original.]
[A. G. N,, VI-7-6-3, Intendencia de Salta, Catamaren, Jujuy-1784-1809.
Copia testimoninda en N. A.]

Excelentísimo señor.
Señor.
I h oficio de 1 de setiembre me incluye V.E. la carta original
en que los Oficiales Reales de Jujuy representan los méritos que con-
trajeron en aquel su destino de resultas de las pasadas alteraciones,
acompañando igualmente la certificación que les pasó el Muy Iluu-
tre señor Presidente don Ignacio Flores, cuyo documento los acredita
y pidiéndome V.E. le informe sobre el particular, debo decir que a
más de su superior precepto consideraba muy propio de mi obligación
,
el ponerlos en la Real noticia para que esta insinuación proporcionase
n estos Ministros el premio condigno a sus celosos afanes. Yo, Exce-
lentlsimo sefior, he visto muy de cerca las operaciones que les hacen
v
acreedores a las gracias que soliciten en su carrera, y tendría escrú-
pulos aún de retardar los respectivos oficios para que la Real benin-/
aidad lo tenga en memoria. Cierto es cuanto deducen en su carta y
justamente consiguieron se les librase la enunciada certificación por-
que la eficacia y celo con que trabajaron para poner en marcha las
tropas veteranas y milicianas que V. E. se sirvió despachar a la pa-
'cificación de las .provincias sublevadas, no sufrieron aquellas tardan-
%as que la escasez de providencias prometfan empeñindose en el acopio
y colección de éstas con tal acti idad y viveza que no me dieron ocasión
'n la menor reconvención: han sido y son en el manejo de su ministerio
puntuales, observantes de sus reglas, vigilantes en la recaudacidn de
los Reales intereses y dedicados a sus argumentos; han sabido ~ o -
bemarse con un juicio tal que no he llegado a sentir alguna queja de
.aqut%llasque acarrean resultas odiosas haciéndose por su pundonoroso
,modo de portarse capaces de la común estimación .que goznn en fin,
~Kxcelentísimoseñor, poseen la apreciable joya del desinterés que es la
,que más hace brillar el honor de los empleados, por cuyns circunstan-
cias y la de no haber notado en todo el tiempo de mi Gobernación acción
CUEJIES DOCUMENTADO 147

dcsdiciente que les perturbe su reputación y honrados procedimientos,


juzgo son beneméritos ministros para que el poderoso brazo y alta
protección de V. E. los recomiende al soberano.
H e cumplido, señor, con el Superior mandato de V. E. en la parte
/
que contiene la carta de los interesados y agrego; que e n la critica
estación que fue amenazada la Ciudad de Jujuy toleraron estos indi-
viduos las mismas molestias que sus vecinos, pues sin valerse de s u s
fueros, n i atender al natural y preciso descanso que requeria la pe-
sada carga del oficio, velaban dc noche sobre la seguridad y defensa
del pueblo, tomando las armas para refrenar el orgullo de los insur-
gentes que traían en incesante movimiento a sus afligidos fieles mo-
radores euyo ejemplo f u e muy del caso para empeñar el Animo de loa
pocos que aterrorizados del poder de los infidentes, tal vez desmaya-
rian. Que es cuanto debo informar a la superioridad de V. E. con devo-
lución de los expedientes que se sirvi6 incluirme.
Nuestro Señor guarde a V. E. muchos años. Salta y octubre 24
de 1783.
.--.
Excelcntlsimo señor.
Besa las manos de V. E . s u más atento respetuoso servidor.
AmirPs IIestre
Excelentisimo Señor Virrey don Juan José' de Vértiz.
G. N. Fotocopia ccrtiticada en N. A.]

Salta, abril 25/84.


De don Gabriel de Güemes Montero.
Felicita la exaltación de V. E.
Respondida en 19 de mayo.
Excelentisimo señor:
Señor, habiéndoseme comunicado por el Gobernador Intendentc de
esta Provincia el feliz arribo de V. E. a esa corte. asi por esto, como
por haber tomado ya posesión del virreinato que la piedad del Rey s e !
dignó conceder a V. E., paso e n cumplimiento de mi obligaci6n como
Tesorero que soy de la misma Provincia, R tributar a V.E. con m i
mas humilde respeto repetidas y sumisas enhorabuenas; con euyo mo-
tivo tengo l a honra de asegurar a V. E.. deseo continuadas ocasiones
de sacrificar mi obediencia en s u servicio.
Nuestro Señor guarde a V. E. por muchos años para bien d e este
Reino. Salta y abril 25 de 1784.
Excelentísimo sefior: a los pies <le V. E. e s t i éste su .más humilde
súbdito.
Gabriel de Güetttes Montero
Excelentisimo señor Virrey Xlarqu6s de Loreto.
[A. C. N,,67-5-4, Intenrlencin de Salta, 1718/84. Copia
- . testinioniadn en
N. A.]
Salta, marzo 17 de 1773.
De don Gerónimo Matorras.
Queda en proceder a la prisión que se le encargó en 15 de enero del
contrabandista González y socios aunque conceptúa estén protegidos de
los oficiales Reales de Jujuy, que tienen anteriormente acreditada esta
propensión.
M u y sefior mío: Con la de V. S. de 15 de enero recibí la nota
que instruye los sucesos y designios de los contrabandistas que intro-
dujeron en esta Provincia a principios del afio antecedente, la porci61-1
de negros que se refieren, cuyos nombres y seiias tendré prescntes
para asegurar sus personas y dirigirlas a ese Gobierno con avisos de
cuantas noticias tuviere sobre el asunto.
Reconociendo el particular y plausible celo de V. S. a cortar toda
ilicita introducción debo hacerle presente, que a pocos meses o días de
mi salida de ésta a la capital de Lima, se introdujeron desde la ju-
risdicción de Santa Fe costas del Río Salado hasta esta Ciudad, cre-
cido número de mgros, con varias carretillas de hacienda; uno y otros
de la Colonia del Sacramento de los dominios de Portugal; y habiendo
pasado a ésta el contador interino de las cajas de Jujuy don Gaapnr
t o z a t ~ ocon el pretexto de los embargos de mis bienes, se compuso con
los introductores e n más de quinientos pesos; y los tales negros pa-
saron al Perú, por aquellas vías y sendas que el dicho Contador y su
compañero el Tesorero don Jlanuel Carcfa saben que pueden libertarlos;
y así como lograron aquella introducción, no es mucho que emprendie-
ven la segunda y repetirún aquéllos y otros, siempre que subsistan en
Jujuy los expresados oficiales reales y esto no obstante de la vigilancia
con que camino en desempeiio de mi obligación; pero como esta Pro-
vincia es u n campo abierto, y los dichos oficiales reales que pudieran
remediarlo en la garganta de Jujuy, por donde precisamente internan
al Reino del Perú, son los propios que protegen a los contrabandistas.
mediante al interés con que los contribuyen, por esto mis d i l i ~ e n c i a s
producen poco efecto y como la introducción de que V. S. me d a aviso
' J' el antecedente que dejo expresado no fueron estando a mi cargo
este Gobierno, s i quisiese proceder a su nveriguación, fuera en lo ju-
dicial difícil conseguirla por el orgullo de los dichos oficiales reales,
sus relaciones de parentesco con los sujetos de más autoridad, amena-
i a s y perjuicios que ocasionarin a los que los descubriesen.
Como actual Gobernador de esta Provincia y en desempeño de
mi obligación, he querido hacer a V. S. este informe. En la cierta inte-
ligencia de que mientras el Rey no remueva a los dichos oficiales Reales
de los empleos que ejercen, poniendo e n s u lugar sujetos que desem-
peñen sus obligaciones, serán continuos los perjuicios (por distintos
niodos) de la Real Hacienda, y esta Provincia carecer5 de la tranqui-
lidad que años hace la tienen desposeída.
Nuestro Señor guarde a V. S. muchos años. Salta y m a n o a 17
de 1778.
Besa las manos (le V. S. s u más seguro servidor.
Cerótlinio Matorras
GÜEMES DOCUMENTADO 149

Señor Gobernador y Capitin General de la Provincia del Rio de


la Plata don J u a n José de Vbrtiz.
[A. C. N., L-7-5-4, lntendcncin de Snlta, 1718184. Copia testimoniada en
N. A.1
Noto: Para sanear esta adn~inistracióncorrupta se removió a los ci-
tados malos funcionnrios y se nombrb a don Cabriel de Cüemes ñlontero que
por sus servicios anteriores era larantia dc honestidad y así lo fuc toda su
vida, como ya lo hemos visto. F. M.C.

X'Q 33
El Gobernador Intendente Interino de Excelentísimo señor.
la Provincia de Salta remite a V. E. Dirijo a V. E. el adjunto
el Estado general de esta Tesoreria per- Estado general correspon-
teneciente al año anterior de 97. diente a esta Tesorería Prin-
IIe recibido el Estado General co- cipal y al año anterior de 97
rrespondiente a la Tesorería Principal para los fines que convengan.
de esa Capital y u1 año próximo pasado Dios guarde la importante
que V. S. me acompaña a s u oficio de vida de V.E. muchos años.
4 de enero anterior NQ 53 a que doy Salta, 4 de enero de 1798.
contestación. Excelentiairno señor
Dios guarde. etc. AIontevideo, 5 de ~~~t~~ ~ ~ ~ 6 <~ i l i ~ . ~ ~
febrero de 1798.
Señor Gobernador Intendente de Salta.
Excclcntísimo señor Virrey don Antonio Olaguer Feliú.
Estado General de la Tesorería Principal dc Salta. que
comprende desde lQde enero hasta 31 de diciembre de 1797
Datas Libro Común General Cargos
Residuo ''' 827,~
Alcabalas ' 13.492,7
Pulperías " 1.427,G 1/2
Tributos "15.285,4
Oficios vendibles """ 308,2 1/2
Medias anatas seculares ' " ' 41.7 3/4
Nuevo impuesto ' ' ' 827,s 1/2
Venta y composición
de tierras ,,,, 36,
Producto de papel sellado ' ' ' 63G.4 1/2
" 827,2" Debido y no cobrado ' ' ' 827,2
"329,3 3/4 Penas de Cámara ' " 333,4 1/4
" 774,G 3/4 Reales novenos ' ' 1.317.2 3/4
1.059,5 Cruzada ' ' 1.416,3 3/4
1.054,7 1/2 IIeaadas eclesif~sticas ' ' 1.380,5
3(R,1 1/2 P.!cances de cuentas ' ' ' 398,l 1/2
Libro Conlioa General Cargos
Subsidio eclesilstico ' ' 1.767,4
Monte Pío de Ministros ' ' 1.909,4 1/2
Idem Bfilitar " ' 322,4
Inválidos " ' 784.4 3/4
Depósitos ' ' 1.628,7
Encomiendas S , , ,
29,s
Naipes " 4.734,7 1/2
Cuatro pesos de sobre
sueldos " ' 720,5 1/2
Donativo ' ' 6.200.6 3/4
Producto de bulas de
dispensa " ' 492,3
Real Hacienda en común ' ' ' ' ' ' ,'
Papel sellado en especie
de bienes pasados ' ' 2.686,6

Deducir

Existencia según el Libro de Caja


E n dinerro contado en Caja
Existencia en la Tesorería de Jujuy
Idem e n l a de Santiago del Estero
Utensilios de la Compañia Veterana
E n rezagos de Buenas Cuentas de la
tropa Partidaria por libranzas de
la Intendencia
Papel sellado en especie de bienios
pasados

Tesorerin Principal de Salta, 31 de diciembre de 1797


"Visto biieno Doctor Tadeo Dácila (;abrid de Giioties illontero
Antonio Atienza

[A. C. N., Intendencia de Salta, 1798/805. Copia testimoniada en h'. A.]


Solicitud del Intendente de Salta.
Sobre que se señalen sueldos a los tenientes de oficiales
Reales de aquella Provincia.
Señor Gobernador Intendente :
Muy señor mío: El conocimiento práctico que me ha prestado mi
ida al Tucumán, sobre lo que es cada caja sufraganea de las subor-
dinadas a esta principal, que nunca pude penetrar según ello ha sido
en si, llama toda mi atención, dirigida únicamente a afianzar el ser-
vicio del Rey con aumentos inseparables del erario y así cumpliendo
con las obligaciones que me compete, he juzgado propio de ella, repre-
sentar a V. S. cuanto en la razón halle por conveniente, para que era-
minados por partes mis pensamientos, el bien acreditado celo de V. S.
siendo servido represente por dirección de la Superior Junta a S. M.
los medios adecuados a que en esta Provincia la Real IIacienrl3. t e n w
RUS verdaderos ingresos.
Del m5s o menos celo de los que la manejan pende 1a decadencia,
o el aumento de los Ramos del Real Erario y particulares h'unca eq-
tos pueden estar bien administrados por tenientes nuestros que han
de ser con precisión vecinos de las mismas ciudades. Nada hace más
indulgente al hombre que las inmediatas conexiones, compradrazgos y
parentescos. P así se ve que cuantos tenientes se ponen en todas las
ciudades ninguno totaliza con esmero las cobranzas que son debidas
n la Soberanía.
Con asombro observé en el Tucumán, que las alcabalas terrestres
hayan dado unos anuales ingresos tan limitados, cuando sólo con las
ventas de vacas, caballos, mulas y yeguas debían recabarse más de
cuatro mil pesos en cada uno. Pasé órdenes positivas al nuevo teniente
para que con estudiosa vigilancia inquiriese esta clase de tratos y sin
- contemplación exigiese indistintamente de todos la correspondiente al-
cabala y no hubo hacendado que no se admirase de semejante deter-
minación que alli para todos carecía de ejemplar.
En iguales términos se asustaron los tenderos, que en pulperías
y tiendas rcvenden el vino, aguardiente. ropa, azúcar, chocolate. tucu-
yos, coca y otros efectos mercantiles, porque nunca creyeron deber
pagar aquel derecho s a ~ r a d opersuadidos que la primera satisfacción
que hizo el introductor con la primera venta, era cuanto a S.M. se
le debía, mirándose por esto libres de toda responsabilidad por las
demá5 ventas hechos de aquellos mismos efectos que han transferido
dominio y se ha hecho con ellos nuevo comercio. Es inccsante así en
la ciudad, como en toda la hasta jurisdicción del Tucumán, el cam-
halache que hay dando efectos de Castilla por los terrestres; pero tam-
poco de esto se ha cobrado jamás alcabala, entusiasmados en que sería
del Real desagrado semejantes exacciones.
1
Dos tercias partes de los habitantes tucumanos, afinanzan su sub-
sistencia con las vcntas continuas de pellones, ponchos, frezadas,
tablazón, suelas y carretas. A ~ E U ~con
O S crías de vacas y yeguas, otros
con mansaje de bueyes y por último todos o cuasi todos viven en va-
rios trajines propios de aquel clima y terreno, pero de nada de esto
al paso que es tan justa la exacción del derecho de alcabalas, ninguno
absolutamente la paga, ni nunca la ha satisfecho.
Hay muchos que se dedican a leer las leyes recopiladas para re-
clamar cuanto juzgan pueden serles útil, pero cuando llegan a las
del título 8, libro 8, las pasan sin verlas y el más curioso aunque las
lea no las entiende, o no quieren entenderlas y así se ve que aun recon-
venidos para que paguen lo que a S.M. deben, se resisten con expre-
siones dignas, sino de castigo a lo menos reprehensibles. Durante mi
estada en el Tucumán el actual nuevo ministro en virtud de mis par-
ticulares instrucciones, quiso entablar esta clase de cobranzas tomin-
dolas por partes y con medios suaves para introducirlas, pero por las
particulares circunstancias que se presentaron a la vista tuve por con-
veniente desentenderme de todo, hasta que en vista de mis represen-
t:tciones V.S. resolviese cuanto estimase mejor.
El contrabando del aguardiente es continuo y de muchos prote-
gido, y lo convence el ver en la ciudad cerca de cuarenta pulperías
abarrotadas de este licor, en la jurisdicción esparcidas otras tantas
y 8610 cobrados de sisa lo correspondiente a veinte o veinticinco cargas
cuando más al año, que se consumen en la de m6s cortos ingreso3 (le
esta clase de tiendas.
Por último, señor, no hay ramo del Erario, que no este en la ma-
yor decadencia en aquellas partes que se maneje por segundas manos.
Todo lo miré informe y nada se ha llevado con el arreglo que S.M.
encarga y es tan útil, no sólo al Erario, sino a los mismos hacendados
y comerciantes.
Aunque en esta parte tuve la satisfacción de mejorar la Tesorería
del Tucumán, donde estableci libros de tomas de razón, fianzas, apun-
tes de deudores y todo el nuevo metodo de cuenta y razón de partida
doble, hallo muy difícil su constancia por más que se esfuerce mi te-
niente. Con dificultad hall6 quien quisiera encargarse de servir aquella
tesorería menor vaca por muerte de don José de Thames. Todos los
acomodados se excusaron y aun el que hoy está que sin duda es en mi
concepto Integro, habil y celoso entró en el servicio con bastante re-
sistencia.
Palpé desde cerca su trabajo diario y éste sin duda se ha de cum-
plir con Ia menor parte de su obligación y lo inhabilita para entender
a todo otro trajín bien de campaña o bien de comercio únicos de que
viven en el Reino. No pocas veces se me lamentó, que su actuA des-
tino le había de conducir a su total ruina. Que él sufriría cuando mas
uno o dos años, pero que si no se le mudaba elevaría sus quejas hasta
los pies del trono; todos mis antecesores, dice. han salido en ingentes
cantidades alcanzados y de medianas comodidades que tenían cuando se
recibieron, en su separación o en su muerte se miraron en In mayor
indigencia. Y es así, señor, V. S. mismo lo h a presenciado y aun en
Catamarca por no haber querido ninguno de sus vecinos ser teniente
por mirar a todos alcanzados en partidas que no podían cubrir; se
vio V. S. en la necesidad de hacer este empleo cargo concejil y man-
dar en consecuencia a xquel Ilustre Cabildo que todos los años eligiesen
CÜEMES DOCUMENTADO

alternativamente un vecino que se encargase de la recaudación de todos


los derechos del Erario y así continúa hasta el día, sin esperanzas de
variar este método, que ya yo veo sertí uniforme en la Provincia sino
se toman las debidas providencias.
No e s posible que un solo individuo atienda al diario despacho,
que ya en todas las ciudades por s u vasto vecindario y grueso comer-
cio pide existencia continuada e incesantes tareas; a la meniida y
prolija recaudación de los Reales y municipales derechos; cele las mu-
chas clandestinas ventas e introducciones de los efectos sujetos a con-
tribución y lleve todos los libros, correspondencias y fianzas t a n for-
malmente sujetas a la intención del Rey que no s u f r a e n lo sucesivo
los disgustos que ocasionan alcances líquidos y suspendidos. Que n o
se cautive a una perpetua responsabilidad, que es trascendental a todos
siis hijos y nietos; y, lo que es más, a sus fiadores, que por los ante-
cedentes funestos acaecimientos de los que hasta aqui lo han sido, n o
se halla ya quien quiera s e r responsable de los actuales tenientes. Como
ha de servir bien al Rey ninguno de ellos empleados sin sueldo que
compense sus desvelos. o gratificación proporcionada para mantenerse
eon el debido decoro, a s u destino, ya que éste lo inhabilita de buscar
s u sustento y el de sus familias por otros diferentes medios que pro-
porciona la industria y el mismo trabajo. El tanto por ciento asignado
hasta hoy no es posible que pueda s e r bastante n i aun a compensar
las fallas de lo mismo que reciben; de suerte que su servicio es de
balde y a u n con menoscabo y perjuicios considerables, que los he visto
t a n patentes como son ellos en sí..
Qué progresos puede hacer un teniente sin quien le alivie en lo
material de la pluma cuando es incesante este trabajo e n cada subal-
terno, sin un guarda que vigile el campo, las entradas y salidas y a u n
en las mismas ciudades que e s donde mtís se discurre para no pagar
al Rey s u s verdaderos derechos. S i es activo y vigilante se ecarrea
el odio general y la misma emulación le promueve infinidad de que-
jas por los malcontentos inventadas para dcsahogo de sus pasiones;
y s i es contemplativo se trastorna todo el orden de los negocios de que
está encargado; el Erario lo padece y como el beneficio es general alter-
nativamente todos lo disimulan aunque el perjuicio al Rey sea consi-
derable. Cuida más de complacer a sus parientes, amigos y vccinos que
de acrecentar el producto de los Ramos que administra y por último
llega el triste caso que s e hace inaveriguable lo que debió hacer y no
hizo. Tal he palpado en el Tucumlin y con el dolor de no poder ya
remediar en nada lo pasado. Tanto al finado Thames, cuanto a los
demás tenientes nuestros hemos desde Jujuy y desde esta Capital dado
órdenes, e instrucciones repetidas para incrementar la Real Hacienda
y manejarla uniformemente en todas partes, pero ha sido tan limitado
el efecto que h a producido que jamás creí ver desgreño semejante.
Cuando llegué al Tucumán y tomé conocimiento de aquella Tesorería
no hallé papel con papel, cosa con cosa, cuenta bien concluida. ningún
antecedente, ni en borrador, n i en limpio, n i otra cosa que uiete hijos
pequeños, cuyos lamentos contristaban el ánimo m5s agigantado. P a r a
cubrir sus alcances que llegaron a muy cerca de ocho mil pesos entre
Real Hacienda y Sisa le vendí cuantos bienes tuvo sin contemplación
y aunque a esfuerzos de mi vigilancia pude en el todo conseguir el
f i n llenando la comisión que V. S. me confirió, según se lo tengo cn-
lificado con representación y documentos separados confieso que sólo
el servicio del Rey y mi honor pudieron conducirme hasta el fin de
estos encargos rodeado por todas partes de Iíigrimas y suspiros de una
triste viuda, que despufs de haber perdido a su marido que sirvió al
Rey de balde diecisiete años quedó en la calle con sólo hijos pidiendo
limosna de puerta en pucrta, que yo mismo se la di para alimentarlos
algunos dias, pues por ser ministro comisionado no me podía despren-
der de los sentimientos naturales que ofrecen en tan tristes coyunturas
semejantes espectáculos.
En estas circunstancias pues, no es posible que los ministros prin-
cipales de Real Hacienda de la Provincia, sean en nada responsables
de la conducta de sus tenientes por serles imposibles poder remediar
los indecibles daños que amenazan sus procedimientos. tanto por parte
de los verdaderamente cclosos, porque carecen de todo auxilio y no
pueden por sí atender a todas partes, cuanto por los morosos y contem-
])lativos porque la distancia quita de que sepamos nada de su interior
manejo, qui por los beneficiados se procura. no sólo ocultar, sino ex-
tender por todas partes su nombre caracterizándole de buen ministro.
porque para el público es mejor aquel que por adherir a sus intentos
ae olvida en la mejor y mayor parte de sus obligaciones y a la verdad
- estos sistemas no se acomoda con los míos.
Aunque parece que con los recuentos de caudales y estados men-
suales que autorizan los subdelegados en todas las subalternas se presta
la mayor seguridad en que no puede haber falla del residuo que de-
be haber en Cajas y que n este fin así se dignó mandarlo S. M. por
los mismos principios ya insinuados desconfiaré siempre de la lega-
lidad de estos documentos no obstante de que estén autorizados con
el V. B.
El teniente p subdelegado son siempre vecinos de una misma ciu-
dad y por lo común parientes. compndres y amigos. Nunca o pocas
veces llega el caso de que declaren sus debilidades. Unos a otros en-
cubren sus descuidos y sin reflejar que estas recíprocas e inconside-
radas contemplaciones recaen en daño de los que son sus fiadores. en
perjuicio de los que los nombran y lo que es más en deservicio de la rifa-
jcstad omiten dar cuenta a los superiores del verdadero estado de laq
tesorerías para remediar lo conveniente en sus principios que siempre
es más fdcil y menos corto que en las extremidades y asi por ningún
resorte nos presta fijeza el actual manejo quc se lleva en las Cajas
sufragáneas, siempre que los que las sirvan sean vecinos de los mismos
pueblos y hasta en la facultad de que los nombren los 3Iinistros Prin-
cipales hallo perjuicios al Real servicio que en descargo de mi con-
ciencia y con la intención más sincera no puedo menos que patentizarlo.
Siendo los Ministros Principsles responsables de la conducta de
sus tenientes aun cuando aquella sea disconforme con la Real Intención
y menos ajastada a las leyes de su instituto ¿dónde se hallariin suje-
C U E ~ I E SDOCUMENTADO 155

tos que quieran delatar unos hechos que inmediatamente recaen sobre
ellos y tienen que s u f r i r todas las resultas de los juicios que s e
formen así, e n la parte que tienen líquidos como en la de suspendidos
no obstante de que quede s u derecho a salvo que ya por el reglamento
del establecimiento de Intendencias s e hallan sin autoridad para ex-
pedir prontas p eficaces providencias que s i n ' retardo les faciliten
RUS reintegros pues todas deben ejecutarse por los subdelegados y
fstos siempre han de mirar con más diilzura y contemplaci6n a! te-
niente y sus fiadores, con quien tiene estrechas conexiones por dis-
tintos modos, que a los ministros principnles de quienes necesitan poco
y no dependen en nada? Son infinitos los inconvenientes que se pre-
sentan a primer vista y los conoce tanto m5s el que tiene las cosas
presentes y las ha manejado prácticamente, cuanto es incontrastr.ble
que variándose el presente método en estos nombramientos producir;in
por todos resortes grandes beneficios. Las Cajas Sufragineas, de Jujuy,
Tucum5n. Santiago y Catamarca pueden muy bien sufrir ministros con
sueldos fijos proporcionados a sus respectivos destinos. Yo aseguro
liajo de experiencia cierta, que en la primera se atesorarían al año
de ocho a diez mil pesos y en este caso un oficial Real con ochocientos
pesos estaría gustoso. E n la segunda no se cogerían menos d e cinco
n seis mil y en ella con seiscientos pesos se mantendría otro muy bien.
E n l a tercera no bajarían de tres a cuatro mil y el de ella s e podria
dotar con cuatrocientos y en la cuarta se duplicarían los ingrcsos y
su asignación podía hacerse de trescientos.
Aunque todas estas asignaciones son cortas, declariindose escala
pnrn los ascensos según fueran vacando se harían apetecibles. E n
todas las carreras ha de haber sus principios y yo para que la impon-
derable piedad del Rey se dignase conferirme la tesorería d e esta
Provincia. tuve la honra de servirle sin sueldo alguno, en la General
de Madrid y sólo así se aprenden bien las obligaciones de cnda Mi-
nisterio y cuando se consiguen los principales puestos propios a s u
carrera, s e desempeñan sin ofuscaciones. que son inseparables de los
que sin principios quieren llegar a los fines.
Cuando la elección y nombramiento de estos destinos no la h a ~ a
S. &l.estariin m6s bien autorizados con titulos de los señores superin-
tendentes, o de los señores intendentes de la Provincia pero siempre
con reserva de la soberana nprobnción; porque debiendo hncerse vitn-
lirios, según lo son todos los del manejo de Real Hacienda, nnda sería
más nocivo que la facultad de removerlos según fuese la voluntad de
los jefes y así en esto como en los honores, privilegios y exenciones
(bien que sin poder cargar el uniforme de comisarios) se les debe nu-
torizar con igualdad a los ministros principales dejándoles lo admi-
nistrativo, económico y exactivo según aquellos lo tienen en sus res-
pectivos distritos; pero que los BIinistros Principales los pongan a s u
arbitrio con responsabilidad, jamás lo tendré por conveniente siendo
aiin incomparablemente m i s el que recainan estos destinos en los mis-
mos vecinos de los pueblos.
h'adie como yo que estoy autorizado para estas elecciones, desca-
ría continuasen en el propio pie o i que se hallan, pero como mis des-
velos son dirigidos con preferencia a cuanto sea conducente al mejor
~erviciodel Rey que a mis particulares intereses, habiendo penetrado
aquellas ventajas seré incansable en mis representaciones hasta con-
seguir el fin, si por V. S. no se me manda sobreseer porque su sabia
penctración alcance en contrario, lo que yo por mi rusticidad no he
podido conocer.
Hoy todos los ramos del Erario y particulares se manejan por
dirección de los señores intendentes. QuB arreglo tan brillante y qué
manejo tan fijo. se podrá guardar entre aquel jefe y la Tesorería
Principal y entre ésta y las foráneas (hoy menores). Las órdenes que
se comuniquen a la primera deben ser trascendentales por ella a las
demás. Las consultas, dudas y demás que se les presente digno de la
superior noticia pueden hacerlo o en derechura al jefe o por el con-
ducto de la Tesorería Principal quedando esta obligada y aun respon-
sable de avisarles las resultas para su observancia. De este modo se
alivia el trabajo a las Intendencias pues con sólo un oficio que pase
a los Ministros Principales ya bien sabe que s u contexto se ha de tras-
lndar 8 los foráneos y que aquéllos le han de calificar su ejecución,
~i no quieren sufrir reprensiones. que siempre son amargas a los que
tienen honor.
Si se considera conveniente incorporar Ins cuentas de los Minis-
tros foráneos anualmente en las de la Tesoreria Principal no hallo
embarazo; as1 porque abracen sus respectivos ramos un propio tiempo
como porque queden embebidos sus valores en todo lo que puedan dar
en la comprehensión de la Provincia formando de las unas y las otras
una cuenta y estados generales en cada mes. L3 liquidación debe ser
particular; cada uno debe reoponder por sí los reparos y adiciones que
deduzca e1 Tribunal mayor de Cuentas de Buenos Aircs y enterar los
cargos líquidos que por tal sean declarados.
Como todos los caudales que re recauden en las Tesoreria Fo-
ráneas se han de remitir a la principal donde con cada uno hay que
llevar cuenta particular bajo de las reglas dictadas por el señor Con-
tador General don Francisco 3Inchao de estas partidas se deberán da-
t a r calificándolas con certificaciones o cartas de pago de los 3Iinistros
de la Provincia; siendo cargo para éstos, lo que es abono para los otros,
observando también en estos casos las prevenciones hechas en los ar-
ticulos respectivos de la instrucción práctica de la Contaduría General
de Comercio sobre la cual no me parcce que hay más que decir, ni nin-
auno otro podrá-discurrir, ni con más solidez, ni con más acierto.
Puesto asi el manejo de las Cajas Sufragáneas, en los primeros
años de su ejecución se conocerá los diferentes buenos efectos, que
han de producir, se desterrarhn los monopolios en todas las ciudades.
El Ramo de Alcabalas que en nuestra Provincia hace la principal masa
de Real IIacienda, aunque consta de muchas cortas partidas, tendrir
en todas partes el más prolijo manejo, pues sólo de esto penden SUS
acrecentamientos. No se dará caso en que se experimenten las quie-
brns que en todo este siglo han tenido los tenientes, porque separados
GUE~IESDOCUMENTADO 167

los ministros foriineos de las envejecidas estrechas amistades. entre


aqu6llos y los subdelegados, por los particulares fines de cada uno,
se harán los descuentos fieles y constantes como el Rey manda y es
t a n necesario para que sus soberanos intereses no salgan de la Real
Caja para otros objetos que a aquellos a que están adictos y cada mi-
nivtro forineo, ocupará toda su atención en cumplir con sus respec-
tivas obligaciones, esto es en llevar una prolija cuenta y razón sin
retardo, en hacer las recaudaciones en sus debidos tiempos, negando
toda espera. por s e r diametralmente opuestas a las leyes; en afianzar
los Reales derechos que deben pagarse en diferentes tesorerías; en exa-
minar cotej:indo con cuidado los documentos d e cancelación para que
hallándolos conformes invalidar una fianza viva, que de permanecer
así resultan perjiiicios al comercio, que merece tan justamente la So-
berana protección; en vigilar el contrabando para desterrarlo por no-
civo al Real Erario; en llevar con los Tribunales Superiores y demás
oficinas de cuenta y razón arreglada la correspondencia, pues por falta
d e este esencial requisito, son muchas las confusiones, e implicancias
que se notan entre los que hoy son tenientes, y, por Último. en llenar
u n conjunto de menudas oblipaciones propias de semejantes ministe-
rios, que para expresarlas por partes necesito ocupar mucho papel.
Tal he experimentado en mRs de ocho años que hace sirvo a S. M. e n
estos destinos.
S i un teniente vecino se ha de sustentar con su trabajo, bien
sea de campaña que pide para no venturarlo todo, personal asistencia.
o bien de comercio que no puede fijarse en parte alguna, s i n o quiere
perder no sólo utilidad sino el principal que tal vez puede s e r fiado
icómo es posible que tenga tiempo ni se halle desembarazado para
tan prolijas y menudas atenciones, como exigen estos encargos? S i no
es comerciante. n i hacendado ;con qué ha de subsistir en parte al-
guna no teniendo sueldo correspondiente? E n este caso ¿cómo no ha
d e haber fallas? ;Cómo no se han de resistir para. admitir unos des-
tinos con que por cualquier resorte que s e miren los ha de empobrecer?
Y a vista de los anteriores ejemplares ¿dónde han de hallar fiadores
que sean responsables de su conducta?
Con este conocimiento pues así para llenar las 'obligaciones de mi
empleo en lo que tienen de coactivas, como para satisfacer en el todo
mis intenciones de hacer y solicitar lo mejor para el Real Servicio,
permítame la invariable justificación de V. S. haga ya en este caso,
las más humildes y reverentes protestas a toda responsabilidad, según
dcsde luego las hago e n cuanto por derecho deba y pueda sobre el
manejo en que .hoy se llevan todas las Tesorerías subordinadas a ia
de mi cargo, pues me hallo sin autoridad para mejorarlas, n i como
llevo representado, n i por ningún otro modo: por todo lo cual, suplico
P. V. S. se irv va t r a t a r este asunto como uno de los que puedan ocupar
sus desvelos (si lo estimase conveniente) dando cuenta a S.M. por
la vía que sea regular, puen por mi parte creo que cumplo con cuanto
e s de mi incumbencia, haciendo desnudamente patentes a V. S. los
defectos que he notado y los motivos que los ocasionan.
Nuestro Señor guarde a V. S. muchos años.
Tesoreria Principal de Salta, 15 de abril de 1786.
Besa las manos de V. S. su m6s atento seguro servidor.
Gabriel de Giiemes nlontero
Señor Brigadier don Andrés Nestre.
[A. C. N., legajo NQ 44 de Hacienda de la División Colonia, expediente,
1168. Copia testimonia y fotocopia en ru'. A.]

Salta, 25 de abril de 1798.


NQ 63.
E1 Gobernador Intendente.
Instruye el gasto de GG pesos 7 y2 reales para vestir a tres indios
principales de la Redurrión de Zenta por el Ramo de Sisa y suplica
por la aprobación en Junta de Real Hacienda.
Junta de En esta Real Tesorería principal de Salta a diez de
Hacienda marzo de mil setecientos noventa y ocho, hallándose
en Junta Provincial los señores Gobernador Intendente.
Administrador general del Ramo de Sisa. Regidor Diputado Interven-
tor, abogado Defensor Fiscal y por ante mi. impuestos Su Señoría y
Mercedes de lo pedido por el Protector de Indios, para los tres que re-
fiere de la Reducción de Zenta, dijeron que se les socorra a éstos con
la casaca, chupín, calzones, camisa, calzoncillos, poncho y sombrero a
cada uno de la calidad que se expresa y con los seis pesos, para la
manutención de tados, atendiendo a la necesidad representada: Y que
sin embargo de ser cierta esta costumbre, pero que no estando resu-
lado, por pasto ordinario, se diese cuenta por la Intendencia al Exce-
lentísimo señor Virrey, para la aprobación en Junta Superior, con
testimonio de este expediente; agregando d que ha de servir de com-
probante de data, la cuenta de su importancia, de que se pondrá nota
a continuación. Y lo firmaron de que doy fe. Dácila. Giienics. GalIegar.
Bachiller Palacios. Don Jzian Antonio Uoro.

I~xcelentísimoseñor.
Cumpliendo con la superior Orden de V. E. de 23 de agosto último.
dirijo la relación adjunta. en que se especifica los subalternos ' y de-
~wndientescon expresión de los sueldos que gozan y en virtud de las
órdenes con que se hallan admitidos en estos oficios de Real Harienda,
donde no hay entretenidos.
.De ninguno de ellos he tenido hasta el presente el menor motivo
para reprender, y. a los tres primeros en particular, les acompaña la
idoneidad y tino que corresponde al desempeño de sus obligaciones.
GÜEhIES DOCUMENTADO 150

Dios guarde la importante vida de V. E. muy felices años. Salta.


24 de setiembre de 1788.
Excelentísimo señor.
A ttdrEs lllestre
Señor Virrey JIarqués de Loreto. .
Relación que se d a al Excelentísimo señor Virrey Superintendente
General de Real Hacienda en las provincias de Buenos Aires, por este
Gobierno e Intendencia de la de Salta, de los subalternos dependientes
y demas que contiene la superior orden de agosto Último.
E l doctor don Tndeo Fernández Divila, teniente asesor propieta-
rio sirve su empleo desde 19 de enero de 178.4 por Real Título de 21
de setiembre de 1783, con el sueldo de 1.600 pesos anuales en la con-
formidad que le señalan los artículos 12 y 13 del Real Reglamento de
lntendentes.
Don Gabriel de Güemes nlontero, Tesorero JIinistro Principal de
la provincia sirve este empleo desde 17 de enero de 1778, e n virtud
de Real Titulo de 20 de enero de 1777; disfruta de sueldo de 2.000
pesos por el articulo 9.1 de Real Reglamento de Intendencia.
El BIinistro Contador Principal don Diego Ravaza sirve en esta
provincia desde 19 del presente mes en que tomó posesión por haberse
trasladado desde la de Cochabamba donde sirvió igual empleo desde
3 de marzo de 1773, por disposición del Superior Gobierno de Lima y
aprobación soberana de 16 de noviembre de 1774. Tiene igual sueldo
y s u traslación la verificó en cumplimiento de Real orden de 31 de
marzo de 1786.
Don Antonio de Atienza oficial mayor de esta Tesorería princi-
pal fue nombrado para este empleo por titulo de interino que le pas6
el señor Superintendente General Subdelegado don Francisco de Paula
Sanz. con fecha 28 de noviembre de 1785 y el que se halla aprobado
por Real orden de 7 de agosto d e 1786. Goza de sueldo 600 pcsos
anuales situados en los fondos de Real Hacienda por señalamiento de
la J u n t a Superior del Virreinnto de 28 de julio de 1784 que aprobó
el Rey por orden de 4 de junio de 1785.
Don Lorenzo F e r n h d e z Valdiviezo oficial segundo fue nombrado
por este Gobierno Intendencia e n 19 de enero de 1784, aprohndo p o r
la citada superior J u n t a en auto de 11 de diciembre del mismo a ñ o
y por S u AIajestad e n Real orden de 4 de junio de 1785. Goza 200
pesos anuales situados en los fondos de Sisa.
Don Benito Ortiz de la Torre, sirve la plaza de Guarda de Sisa
por nomhramiento de esta Intendenciir con trescientos pesos anuales
desde 12 de mayo de 1785.
E n cada una de las ciudades de Jujuy, ~ u c w n b n ,Santiago y
Catamarca hay un teniente tesorero que sirve aquellas tesorerías me-
hores. Estos los nombran a s u arbitrio los Ministros Reales de l a
provincia como que son responsables de s u conducta según las Leyes.
E n el partido de Jujuy hay dos guardns por cuenta del Ramo de
Sisa. E s el mayor don Pedro de la V e ~ cona 300 pesos de sueldo anual
y el segundo don Franco Alvarado. E l primero sirve su empleo desde
22 de mayo de 1784, en virtud de título que con aquella fecha se libró
por esta Intendencia a propuesta de los Administradores Generales y
el segundo desde 17 de febrero de 1779.
Salta, 24 de setiembre de 1788. Andrés Alestre.
[A. G. E;., Intendencia de Salta, 1798/805.]

COIHERNO
F: I NTENDENCIA DE SALTA.
Expediente sobre licencia que solicita el Ministro
Tesorero de Salta don Cabriel Güemes Alontero
para variar de aires y aguas consultando el a1'IVLO
de su quebrantada salud.
Año de 1796
El Eachiller don illiguel Gircis y Garcíi, Teniente Proto Médico Ge-
neral en esta Capital, etc. ,.
Certifico a1 señor Intendente Gobernador y Capitán General de
estas Provincias; al Excelentísimo señor Virrey de Buenos Aires y
demás Tribunales de S. 11. que la presente vieren, que don Gabriel
Cüemes AIontero, Ministro Tesorero de Real IIacienda por la propen-
sión de su naturaleza 3 frecuentes catarros; por la continua atención
y trabajo en la oficina de s u cargo y por otras causas que han hecho
sentir en este pueblo la gradación a endémica, la annal enfermedad
reumatismo, se halla en el día con otra indisposición vaga y con los
agregados de erupción cut6nea de bastante renuencia con una Úlcera
rebelde en el labio inferior, con vértigos, flatos, indigestiones, vigilias
g adinamias. Que con el mismo concepto que he advertido la existen-
cia de este conjunto de alteraciones y s u origen. concibo que le e s
pcrjudieial para sus alivios y restablecimiento la presente constitución
de este temperamento con la atención a su empleo; y que, por.consi-
guiente, le ser& útil desviarse de estas causas, por tiempo y circuns-
tancias en que pueda y deba medicinarse con beneficio. E s cuanto
puedo certificar a solicitud de dicho Ministro Tesorero; y para que
conste doy ésta que firmo en Saltn a cinco de marzo de mil setecien-
.tos noventa y seis. . '

I
Eachiller Aligirel Garcia 2, Gnrcia.
Señor Intendente Gobernador y Capitán General
Paso a manos de V. S. el adjunto recurso, por el que suplico al
Excelentísimo señor Virrey s e digne concederme un año de licencia
para reponer mi salud extenuada hasta lo sumo. Ruego a V. S. tenga
'la bondad de darle curso en el presente correo. con el informe, que
con conocimiento de causa, V. S. estime de justicia.
Nuestro Señor guarde a V.S. muchos años. Salta y m a n o 5
.de 1796. I !

Cabriel de Ciietttes Alontero


Señor IIariscal (le Campo don Ramón Garcia Pizarro.
Excelentísimo señor.
Don José Francisco Tineo en voz y nombre de mi po<lerdante don
Cabriel de Giiemes BIontero, Ministro Tesorero de Real Hacienda. en
l a ciudad de Salta, con el m i s profundo respeto ante la justificacibn
de V.E. parezco y digo: Que hallándose esta mi parte en el más
deplorable estado por s u salud t a n quebrantada, suscitada de la in-
soportable tarea con que para desempeñar su vasto encargo, lo animan
sentimientos de honor, originarios dc su ser; y haber los médicos
~ i a n d i d o l etome aires y varíe de aguas, ha de V. 15. dignarse para este
efecto concederle licencia por el término de seis meses o por el que
sea de su superior agrado con el respectivo sueldo por entero según
e s t i resuelto. P o r tanto:
A V.E. pido y suplico se sirva asentir a mi rererente súplica,
que con justicia espero recibir esta gracia y para ello, etc.
, Excelentísimo señor.
Josct' F r n n c k o clc Tineo
Euenos Aires, 2G de marzo de 1796.
P a s e esta instancia al señor Gobernador Intendente de Salta, para
que justificando en debida forma el AIinistro Tesorero de aquellas
Reales Cajas don Gabriel de Güemes AIontero, hallarse verdaderamen-
t e enfermo y con necesidad de suspender por algún tiempo las tareas
de su empleo para t r a t a r formalmente d e la curación de s u salud, le
permita usar d e la liccncia que solicita por el término de seis meses
con goce entero de s u respectivo sueldo, conforme a lo mandado por
S. 31. en Real orden de 23 de octubre de 1788; dando cuenta a esta
Superioridad de lo que determine dicho señor Gobernador Intendente
. a consecuencia de este decreto, con remisión del expediente original.

Don Miguel Garcia y Carcía. Teniente Protom6dico General en esta


ciudad, etc.
Certifico que don Gabriel Giiemes BIontero, BIinistro Tesorero d e
Real Hacienda, a cuya solicitud doy ésta padece en el dia de la fecha.
y en mayor grado, el conjunto de sintomas y accidentes, (le que hice
relación (certificando) en cinco de marzo de este año, con el designio
(le hacer constar al señor Intendente Gobernador y Capitán General
(le esta Provincia y demds tribunales de Su Majestad, la necesidad e n
que contemplaba a dicho Ministro Tesorero de mudar temperamento
y cesar por algún tiempo de su tarea de oficina, s i debía s e r dirigido
por mí, para su sanación. Que persistiendo así afecto, con el conoci-
miento que tenso de 12 resistencia que hace su indisposición a los
remedios que se le administran, y el buen efecto que sucedió a la
mutación de temperamento en el corto tiempo de un mes que estuvo
fuera de esta ciudad, coy del mismo sentir, esto es,'que debe variar
de temple y abstenerse por algún tiempo de la ocupación a que le
obliga s u empleo, s i quiere, o se ha de esperar que sane, y para que
conste doy ésta. que firmo en Salta a 23 de agosto de 1736.
Bachiller. dligtcel Gnrcfa u Garcin
P o r oficio de Vm. de ayer, quedo impuesto del orden del exce-
lentísimo señor Virrey de 27 de julio próximo anterior. para que el
desempeño de esta Tesorería Principal sea sólo de mi cargo, mediante
el fallecimiento del señor Contador don Diego Rabaza. y hasta tanto
que se restituya a esta ciudad, de la del Tucumán el Oficial Nayor
don Antonio Atienza, que conforme a soberanas disposiciones, debe
rervir por sustitución la Contaduría Principal.
E s notorio q u e desde que tengo la honra de servir al Rey en esta
Provincia he desempeñado todas mis obligaciones y las de los compr-
fieros, porque éstos siempre enfermos han descargado sobre mí todas
las suyas. El constante ímprobo trabajo que sin intermisión he tenido.
pudo debilitar mi naturaleza que en los meses pasados de abril y mayo
hasta los físicos que me asistieron, desconfiaron de mi vida y me
dieron por principal antídoto de mis males la separación absoluta de
los negociados de mi manejo y el retiro al campo a tomar aires puros,
que entonasen la máquina, adelgazasen la sangre, y templasen los hu-
mores; y con este concepto en 5 de marzo Último solicité, por mano
del señor Intendente Gobernador y Capitán General de esta Provin-
cia, de la benignidad del Excelentísimo señor Virrey licencia de u n
año, con certificación del Teniente del Protomédico. que me medicinrí
en todo el tiempo de mi grave enfermedad; y S u Señoría prefiriendo
el servicio del Rey, y el despacho público a los alivios, que e n justicia
nolicitaba, porque vela exánime al finado compañero dcn Diego Ra-
baza, ausente al Oficial Mayor, y no poder el segundo por s í solo aten-
d e r al cúmulo de importantes atenciones, que demanda esta oficina,
más vasta de lo que parece, y más laboriosa de lo que muchos pueden
penetrar, omitió darle curso dejandome en el desconsuelo, que ofrecía
mi constitución, contentándose con permitirme salir por u n mes a
Sumalao y Pucará donde conocí que el consejo de los facultativos e r a
acertado, porque en aquel poco tiempo sentí efectos bien favorables.
A los primeros dias que me encargué del despacho de esta oficina
empecé de nuevo a sentir intensos dolores de cabeza y con ellos he
continuado hasta el presente, sin poder hacer uso de la licencia, que,
por uno d e los efectos de s u justificada bondad, se dignó concederme
e! Excelentísimo señor Virrey para variar de temperamento por seis
meses. 13 cual presento hoy para que esta Intendcncia me permita
ponerla en uso, cuando me convenga; y me halle con alientos de poder
montar a caballo, para pasar a Jujuy, cuyo temperamento me es com-
plexivo.
Cumpliendo con las Leyes de la Religión y con las de la sociedad,
me transferí con trabajo a la posada del Contador don Diego Rabaza
el día 28 del pasado junio, noticioso que le había acometido un grave
insulto; casi al mismo tiempo llegó a la casa del enfermo el señor
Intendente Gobernador y Capitán General y tuvimos el desconsuelo
de verle expirar dentro de u n breve rato. Incontinenti recogí las 11a-
yes de la Tesoreria que estaban al cuidado del f i n d o y las entregué
al señor Intendente suplicándole instantemente, que, atendiendo a la
triste constitución de m i salud y a la indispensable ausencia del ofi-
cial primero, s e sirviese darme u n compañero de instrucción . y de
pureza que me ayudase a llennr los deberes de la oficina con servicio
del Rey y del público y aun, que supliese mi asistencia e n los actos, que
n o l a permitiesen mis dolencias. Concediómelo efectivamente, cual podía
convenir a los intereses del Real Erario y sin gravamen de 61, pero este
auxilio duró Únicamente hasta el día de ayer, en que Vm., de orden su-
perior, me hizo saber que me encargase solo de la Tesoreria.
Según el afirmativo dictamen de todos los m6dicos d e esta ciudad
y según lo que yo mismo comprendo. me hallo en la estrceha necesi-
dad, usando del derecho natural y del piadoso Real, de ponerme en
f o r m d cura a los principios del próximo setiembre, sin lo cual todos
anuncian, como consta de la segunda eertificnción del bachiller don
BIiguel Garcla, que mi vida h a de s e r penosa; sin embargo de esto, yo
trabajar6 hasta que no pueda más, para cumplir la voluntad de S. E.;
pero creo, con sólidos fundamentos, llegue día muy breve, en que s e
cierre l a Contaduria con abandono del servicio; y en este caso no podré
s e r responsable n las resultas.
Dios guarde a Vm. muchos nños. Salta y agosto 1 4 de 1706.
Gabriel de Güen~csUontero
Señor Intendente y Gobernador Interino Licenciado dan J u a n Es-
teban Tamayo.
Salta y agostb 18 de 1706.
Respecto a s e r constante la enfermedad que padece el Ministro
Tesorero de estas Reales Cajas don Gabriel de Güemes Montera, remi-
tase esta instancia al señor Intendente Gobernador propietario, para
que se sirva darle el giro que tenga por conveniente, en cuanto a la
licencia que s e solicita. Y por lo que hace a las atenciones y desempeño
que exigen los asuntos de la Real Caja, prevéngase al Oficial primero
don Antonio Atienza que debiendo servir por sustitución la contaduría
principal hasta las resultas de Su AIajestad se disponga a restituirse
a esta capital con la brevedad que permitan los intereses de Ir Caja
Nenor del Tucumán que por comisión está a s u cargo. Y como en el
tiempo de más de u n año que s e halla en aquella ciudad, es regular que
haya adquirido conocimiento de sus vecinos. informar& quienes tengan
1% inetrucción, idoneidad. celo y seguridad bastante, para que recaiga
en uno de ellos, el nombramiento de teniente que deberán hacer los
Ministros de Real Hacienda e n ejercicio de sus facultades. Lo proveyó
mandó y firmó, el señor Iicenciado don Juan Esteban Tamayo, Teniente
Asesor y Gobernador Intendente, interino por ausencia del propietario,
cn el mismo día, mes y año, por ante m i d e que doy fe.
Licenciado J u a n Esteban T a n i a ~ o
Santiago Alontela
Escribano Teniente
dcl Mayor de Gobernación
-
164 LUIS GUEMES

Señor Intendente, Gobernador y Capitán General.


El día 13 del corriente en que llegó el correo de Buenos Aires,
advertí al AIinistro Principal de Real Ilacienda, Tesorero don Gabrkl
de Güemes JIontero, que conforme n superior orden del Excelentísimo .
señor Virrey, su fecha 27 de julio último debía encargarse solo del
desempeño de las Reales Cajas, ínterin que nombrándose Teniente
para la Tesorería menor de San BIiguel del Tucum6n se restituya aquí
e1 oficial primero don Antonio Atienza. que conforme a reales dispo-
siciones debe servir por sustitución la Contaduría hasta las resultas
de Su BIajestad; y por consiguiente se separó de toda intervención en
las expresadas Reales Cajas el Administrador General Factor de las
1:eales Rentas, de Tabaco y naipes don José Tomis Siínchez n quien
V. S. había conferido interinamente el emplco de Contador.
E n seguida me pasó el referido Ministro Tesorero don Gabriei
de Güemes un oficio instruido haciendo ver el notoriamente triste
~ s t a d ode su salud, la necesidad de repararla. la imposibilidad de aten-
der oportuna y expeditamente al despacho (le los diversos nsgociados
de las Cajas Reales, la precisión de variar de aires y de aguas y la
licencia que tenía del Excelentísimo señor Virrey para consultar sus
alivios por el término de seis meses, en caso de hallarse verdaderamente
rnfermo y con necesidad de suspender por algfin tiempo las tareas del
empleo; y como luego que se dio cumplimiento a la citada superior
orden de S. E. la pasé a V. S. original para su inteligencia. remito
también l a instancia del mencionado 31inistr0, para que V. S. le dé
el giro que tenga por conveniente.
Dios guarde la importante vida de V. S. muchos años. Salta y
agosto 18 de 179G.
Licenciado Jiinn 6 d t e b a l l Tanlajro
Señor don llamón García Pizarro, l\Iariscal de Campo de los Reales
ICjércitos.
[A. C. N., IX-6-5-7. 1~'otocopia en N. A., que debemos a In gentileza del
doctor Josd Blarin rico.]

b) DOCUAIEIVTOS DEI, ARCIIII'O S CIBLIOTECA


IIISTORICOS DE SALTA.

[i'ROTOCOI,O D E LA ESCRIBAKIA D E JOSE AXTOSIO BIOLINA


ASO 1787.1
[PODER ESPECIAL A FAVOR DI: DON BIAXUEL GUEhlES
3IONTEILO.l
Di un testimonio al E n la ciudad de Salta n dieciséis dias del
otorgante. mes de octubre de mil setecientos ochenta
y siete años. Ante mí el escribano de Real
Ilacienda y de Bienes de Difuntos y de los testigos de yuso compa-
GUELIES DOCUMENTADO

reció don Jose González de l'rada Contador JIinistro Princip:il de


Real Hacienda y Comisario de Guerra de esta Provincia a quien doy
f e conozco y dijo: Que por cuanto la imponderable piedad de nuestro
amable Soberano se ha dignado por s u Real orden de ocho de diciem-
bre del año pasado de mil setecientos ochenta y cinco trasladarlo a que
sirva igual empleo en las cajas principales de la provincia de Cocha-
bamba y siendo necesario para servirlo el respectivo titulo, por la
presente otorga que d a s u poder bastante, cual por derecho Re requiere
y es necesario a don BIanuel de Gíicmes BIontero, Tesorero del N??-
tepfo del Alinisterio, para que representando la propia persona accioii
y derecho del compareciente lo pueda solicitar en la Real Cámar:~ de
Indias o donde más corresponda, compareciendo para el efecto s i fuese
necesario ante Su IIajcstad y señores de sus Reales Concejos, y prac-
ticando judicial o extrajudicialmente cuantas d i l i ~ e n c i a sse requieran,
eegún el estado y circunstancias del asunto hasta hacer efectiw l a
rxpedición de dicho titulo con arreglo a las instrucciones y cartas mi-
siras que le comunicaré, sin que por falta <le cláusula u otro requi-
sito necesario deje de obrar, porque cuantas se requieran las da aquí
por insertas e incorporadas de verbo ad verbum con el m i s bastante
p d e r sus incidencias y dependencias libre. franca y general adminis-
tración, con facultad de lo jurar, enjuiciar y sustituir en quien y las
veces que Ic pareciere revocando unos rrustitutos y nombrando otros,
que a todos releva de costas aegún derecho. Y a la firmeza y cumpli-
miento obligó sus bienes habidos y por haber renunciado s u propio
fuero, domicilio y vecindad con las d e m i s lcyes de s u favor y defensa
y la general que lo prohibe y dando poder a la justicias y jueces de S u
ñlajestad, que sean competentes para que a ello lo compelan y apre-
mien ejecutivamente. E n cuyo testimonio asi lo otorgo y firmó siendo
testigos don Antonio de Atienza, don Lorenzo Fernindez Ealdivieso
y don Ramón Lasrú.
José G o i ~ c í l e zd e P,nda
Ante m í
José Atitonio dlolina
Escribana Público y
dc Real Hacienda.
[Concuerda con el original de s u referencia, que corre de fclios
53 vuelta a folios 61 vuelta en el Protocolo del escribano José Antonio
ñlolina en el año 1787, el cual se encuentra en esta oficina del Archivo
Histórico de la Provincia a mi cargo, doy fe. Se cxpide este testi-
monio en papel simple a solicitud del Dr. Luis Cticmcs, en Salta, a los
veinte dias del mes de agosto de mil novecientos cuarenta y cinco.
J. A.! de los Ríos, Jefe del Archivo IIistórico de Snlta.1

[PODER O T O R G A D O POR Ah'DRES BIESTRE A FAVOR D E D O S


GABRIEL DE GUEJIES JIOXT~:RO QUE conm ex E L PROTO-
LUIS G U E ~ I E S

COLO E L ESCRIBANO J O S E ANTOSIO AIOLIKA D E L ARO DE:


1791 D E FOLIOS 15 VUELTA A 16.7
E n la ciudad de Salta a nueve días del mes dc abril de mil scte-
cientos noventa y un aiíos. Ante m i el Escribano Público de R e d Ha-
cienda, Bienes de Difuntos y otros Juzgados y de los testigos de yuso,
compareció el señor Brigadier de Infantería de los Reales Ejercitas
don Andrés Illestre, a quien doy f e conozco y dijo: Que por la pre-
sente otorga que da todo s u poder general cumplido y bastante cual
por derecho se requiere y es necesario para s u validación a Don Gabriel
de Giientes Alontero, Tesorero, AIinistro Principal de Real Hacienda
de esta Provincia, para que en s u nombre y representando s u propia
persona y acciones, con arreglo a sus instrucciones y cartas misivas
pueda iniciar, seguir y fenecer, judicial o extrajudicialmente los asun-
tos, causas y negocios que le comunicase en ellas aunque aqui no se .
expresen sus contenidos n i los sujetos que en ellos intervienen, porque
bajo de esta generalidad ha de comprenderse tcda especialidad y en s u
consecuencia. en todo y cada uno d e por sí, practique cuanto sea ne-
cesario, según su estado y naturaleza, sin omitir trámite alguno, otor-
gando los recibos y cartas de pago que se le pidan de lo que cobrare
y cediendo y traspasando sus acciones a los que pagaren por otros,
pues todo lo que en virtud de este hiciese dicho apoderado lo aprueba,
confirma y ratifica, como s i aqui se expresara su tenor y forma. Y fi-
nalmente haga, actúe, procure y procese en los citados asuntos, causas
y negocios por todos ~ r a d o se instancias, con libre, franca y general
administración como dicho señor le ejecutaría, obrando personalmente,
sin que por f a l t a de clfiusula, requisito o circunstancia omita dili-
gencia alguna porque cuantas se necesiten las da aqui por insertas
de verbo ad verbum con más bastante poder y facultad de lo jurar.
enjuiciar y sustituir en quién y las veces que le pareciere revocando
substitutos y nombrando otros que a todos releva de costas según de-
recho. Y a la firmeza de cuanto en virtud de este obrare obliga sus
biencs habidos y por haber, en toda forma de derecho. E n cuyo testi-
monio así lo otorgó y firmó siendo testigos don Antonio Atienza, don
Lorenzo Fern6ndez Baldivieso y don José Calixto de Sanzetenea. Andrés
Illestre. Ante mi José Antonio illolitln, Escribano l'úblieo y de Real
IIacienda.
[Concuerda con el original de su referencia que corre de folios
15 vuelta a 1G en el Protocolo del Escribano José Antonio Molina del
rlio 1791, el cual se encuentra en esta oficina del Archivo Histórico
de la Provincia a mi cargo. doy fe. Se expide este testimonio en papel
simple, a solicitud del doctor Luis Giiemes, en Salta, a los veinte días
del mes de agosto de mil novecientos cuarenta y cinco. J. M. d e los Ríos.
Jefe del Archivo lIist6rico de Sdta.]
h'oto: La bnstardilla es dcl original, del cual además tenemos fotoco-
pia en N.A. F.M.G.
[TESTAñIENTO OTORGADO POR DON GABRIEL,DE CUERIES
3IONTERO POR PODER QUE TIENE DE DON RAFAEL DE LA
JdUZ, QUE CORRE DE FOLIOS 24 a 28 E N E L PROTOCOLO DEI,
ESCRIBANO DON ISIDORO DE BIATORRAS, DEL ARO 1809.1

Sépase por esta pública Escritura de Testamento, como yo don


Cabriel de Cüemes AIontero, Tesorero, Ministro Principal de Real Ha-
cienda y Comisario de Guerra de esta Provincia. apoderado del finado
sefior don Rafael de la Luz, Coronel de los Reales Ejércitos, Inten-
dente Gobernador y CapitBn General que fue de esta dicha Provincia,
con poder bastante parn otorgar su testamento, bajo !as condiciones
y comunicatos de palabra, de que adelante se har5 mención, otorgo
dicho su testamento, bajo la protestación dc la fe hecha por dicho finado,
cuando principió su testamento, la que revalidó y habiendose agra-
n d o la enfermedad, en aquel estado se extendió en seguida el expre-
sado poder, que uno y otro es del tenor siguiente: En e1 nombre de
Dios Nuestro Señor y de la Virgen Santísima, su bendita Madre y de
to<Ioslos pecadores abogada, concebida sin mancha ni sombra de culpa
original desde el primer instante de su ser purísimo y natural. Sé-
pase por esta pública Escritura de Testamento, última y postrimera
voluntad como yo don Rafael de la Luz, Coronel de los Reales Ejér-
citos, Intendente Gobernador y Capitiin general de esta Provincia de
Salta, estando enfermo en cama de enfermedad corporal, temerosa
de la muerte que es natural, pero por la divina clemencia con mi libre
juicio, entendimiento conforme, constante la voluntad. recordante la
memoria y con disposición tal de mis potencias y sentidos que se-
gún parece a los infrascritos testigos y escribano indubitadamente,
puedo disponer de mis bienes y viendo que la enfermedad me apura y
no pudiendo por esto concluir mi testamento digo, que por cuanto
tengo comunicado con don Gabriel de GUemes RIontero. mi voluntad
y del que he tenido y tengo mucha satisfacción confiado de eu celo
y cuidado, como mejor haya lugar en derecho, otorgo mi poder cum-
plido lleno y bastante, como se requiere y es necesario al dicho don
Gabriel Güemes BIontero, presente. especialmente para que en mi nom-
bre ordene mi testamento y Última voluntad. con las mandas y le-
gados que le tengo comunicados. sin que se entiendn disponer el en- .
tierro, nombrar albaceas, e instituir herederos, que esta disposición
me la reservo y ordeno así. Mando que mi cadáver sea sepultado en la
Iglesia Matriz de esta capital y amortajado con mi uniforme. Nombro
por mis albaceas, en esta ciudad, en primer lugar al referido don Ga-
h i e l de Güemes Montero. en segundo a don Tomás Sánchez. en ter-
cero a don Nicolás de Villacorta y Ocaña, en cuarto a don Francisco
Poveda y en quinto a don Fernando Arias-y en la ciudad de Ln Ha-
bana, de donde soy natural en primer lugar, n mis hermanos el te-
niente coronel don Antonio de la Luz, en segundo al Coronel don Ig-
nacio y en tercero al Presbítero don José Anselmo de la Luz, n todos
juntos y a cada uno de por s í "in solidum", dándoles todo el poder
necesario para que cumplan y ejecuten el testamento que en virtud
de este poder se hiciere. Y cumplido y pagado mi testamento, en el
remanente de mis bienes, derechos y acciones. que hoy me pertenecen
y pertenecerme podrán en lo venidero, instituyo y nombro por mis
universales herederos a todos mis hermanos y hermanas y por s u
falta de fallecimiento, a sus hijos "in stirpem", mejorando a m i her-
mano don Antonio en cuatro mil pesos para que los hayan y posean con
< la bendición de Dios y la mía, a su libre voluntad, como nbsolutos due-
ños. E n todo lo demás proceda el dicho mi podatario a ordenar m i
testamento a su elección y voluntad, porque así lo es mía. Que desde
ahora para cuando tenga efecto, lo apruebo y ratifico, queriendo se
guarde y cumpla en todo tiempo, como s i yo lo ordenare o aquí fuere
expresado s u tenor. Y desde luego revoco y anulo otros cualesquier
testamentos, mandas o codicilos, que antes de ahora haya hecho por
escrito de palabra o en otra forma, para que no valgan ni hagan
fe. Y es mi voluntad. que sólo el que en virtud de este poder se otor-
gare, valga por mi testamento o por mi codicilo, en la forma que me-
jor hubiere lugar en derecho. Así lo otorgh en la ciudad de Salta e n
once días del mes de mayo de mil ochocientos siete años, siendo tes-
tigos el Sargento Blayor, Veterano don José Francisco Tineo, don BIa-
teo Gimeno y don ñIanuel Antonio Gallegos, todos vecinos de esta
misma ciudad. S el otorgante. a quien yo dicho escribano doy f e co-
nozco suplicíi al sefior Cura Vicario Foráneo doctor don José Gabriel
de Figueroa, firmase por él y lo hizo a presencia de los demás tes-
tigos, por ante mi de que doy fe. A ruego y por comisión del señor
don Rafael de la Luz, doctor José Gabriel de Figueroa, José Francisco
Tineo, 3Iateo Gimcno. 3Ianuel Antonio Gallegos, ante mí Isidoro de
BIatorras, Escribano Real de Gobierno, Guerra y Real IIacienda. Pri-
meramente encomiendo su alma a Dios Nuestro Señor que la creó y
redimió con el precio inestimable de su preciosísima sangre (y el cuerpo
a la tierra de que fue formado) suplicando a su Divina ñIajesta11 la
lleve c o n s i ~ oa s u Gloria, para donde fue creada.
Item declaro que s u cadáver fue enterrado con toda la pompa S
aparato correspondiente a sus empleos, en el Presbiterio de la Iglesia
Matriz o Catedral, al pie del Trono del Señur San José, donde jamás
se ha enterrado ninguna otra persona, por haber otra iglesia destinada
para este efecto y amortajado con s u uniforme, según él lo declaró en
el poder inserto; declárolo así para que conste.
Item declaro por comunicato expreso que me hizo que era su \'o-
luntad el que además de las misas que por su alma se digan el dia del
entierro, honras y cabo de años se le manden por separado decir tres-
cientas JIisas mis, por los eclesiAsticos que yo determine, sin perjuicio
de la cuarta Episcopal, que ésta será según el derecho Canónico, ad-
virtiendo que s u monto que asciende n setenta y cinco Misas, debe salir
de las trescientas; declárolo así para que conste.
Item declaro que fue la voluntad del finado dejar de limosna a las
BIandas forzosas, cinco pesos a cada una por una vez, con lo que Ics
separo de sus bienes.
Item declaro por comunicato que también me hizo el mismo es-
presado señor que de sus bienes se entreguen.por r i a de limosna tres-
cientos pesos en dinero o especies equivalente al Hospital Real de esta
capital, que s e halla al cargo de los religiosos Eethlemitas, fundado du-
rante su gobierno en esta provincia; decllrolo así para que conste.
Item declaro por comunicato que igualmente me hizo de su libre
y espontinca voluntad, que de sus bienes dé en dinero por vía de li-
mosna, cincuenta pesos para la fibrica de la Iglesia de S u e s t r a Señora
de las Mercedes.
Item declaro por comunicación espresa y detenida que me hizo el
citado finado señor Gobernador Intendente que teniendo como tiene,
cuentas pendientes, bastante años hace con su hermano el señor don
Antonio de la Luz, sobre manejo de intereses hereditarios de sus fina-
dos padres p otros procedentes de ellos era su voluntad se esté a la
. cuenta simple sin juramento ni comprobación alguna que dé el citado
scfior Teniente Coronel don Antonio de la Luz, sin que quctle arbitrio
a los demás hermanos p coherederos de mi instituyente a pedirla de
otro modo judicial, n i extrajudicialmente, lo que declaro para que conste.
Item declaro por comunicato expreso y detenido del mismo señor
Coronel don Rafael de la Luz, que teniendo como tiene éste, cuentas
pendientes con su hermano político el seííor don Tomás GimbaI, fue
la voluntad expresa y determinada de mi poderdante el que también
fie est6 a las cuentas que este rinda, sin obligaci6n de juradas ni com-
probadas; decllrolo así para que conste.
Item declaro por comunicado que me hizo, que siendo la voluntad
del señor Intendente Gobernador y Capitán General de esta Provincia
mi instituyente, que el cuadro que tiene de h'uestrn Señora del Carmen,
como de vara y media con su marco de madera pintado al óleo y filetes
dorados. se le d é culto en el Oratorio que haya de hacerse en la hacien-
da del Paraíso, s e me entregue a este fin, por la especial devoción que
fiiempre tuvo a esta divina ndvocación; declárolo así para que conste.
Item declaro por expreso comunicato que me hizo que los inven-
t a r i o ~de cuantos bienes s e hallen en la posada donde viviendo moraba,
s e inventaríen por diligencia extrajudicial y tasen por los sujetos que
yo nombrare, sin intervención directa, ni indirecta de juez alguno mi-
litar ni politico, n i escribano, pues me releva por el beneficio que la ley
concede de toda sospecha, y ritualitlad judicial; declárolo asi para que
conste.
Item declaro también por especial comunicato que me hizo que el
finado señor Gobernador don Rafael de la Luz, no se considera deudor
de cantidad alguna n persona viviente. ni que habiendo vivido haya fa-
llecido; pero, s i no obstante esto. alguno o algunos reclamaren acciones
contra s u Testamentaría, me facultó en bastante forma cuanto de tlere-
cho se requiere para que l a pague de sus bienes p me recomendó la sa-
tisfacción de alquiler de casa pendiente y salarios de sirvientes, que se
Ics deba; declarolo así para que conste.
Item declaro tambi6n por expreso comunicato que me hizo el mismo
expresado señor que lo que a él Ie deban. constará por apuntes y reci-
bos, que se hallaran entre sus papeles, lo qiie así declaro para que conste.
ltem declaro que fue s u voluntad por comunicato esprcso que me
hizo que los tres indios de su servicio Manuel, Antonio y Clemente, s e
distribuyan a mi voluntad con recomendación de s e r atendidos según
el verdadero espíritu de las leyes y también me recomendó a s u mayor-
domo Ignacio, por la caridad, fidelidad, prontitud y constancia con que
l? asistió en su última grave enfermedad, dejando todo esto a mi arbi- -
trio, como testigo ocular de todos; declárolo así para que conste.
Item declaro, que e n cuanto al nombramiento de albaceas, e insti-
tución de herederos, que se reservó para s í el finado señor y mejora
hecha de s u hermano el Teniente Coronel don Antonio de la Luz, se
estf a lo que consta en el poder que antecede. que me dejó para testar.
jwardándose en todo su literal sentido; declárolo así para que conste.
Este es su testamento. última y postrimera voluntad. que con
arreglo al poder inserto y a los comunicatos que me hizo el finado señor
Coronel don Rafael de la Luz, he otorgado y otorgo, que por tal quiero
valga y tenga su ejecución y cumplimiento. Y para más abundamiento.
usando de las expresiones que constan del mismo poder revoco ( a nom-
bre de mi instituyente) y anulo y he por revocados y abolidos otros
cualesquiera testamentos, o codicilos hasta esta hora de palabra, por
escrito o de otra manera por dicho finado y por mí hechos en virtud de
este poder, para que no hagan fe, salvo éste que ahora otorgo, el cual
quiero valga en juicio y fuera de él. Así lo otorgo en la ciudad de Salta,
capital de la Provincia de su nombre, a catorce días del mes de mayo
ilc mil ochocientos y siete años, siendo testigos ¿ion Manuel Antonio
Gallegos, don Mateo Jimeno y Eraristo Carroso Arias, todos vecinos
d e esta ciudad. Y el otorgantc (que yo el presente escribano doy f e co-
- -
nozco) así lo otorgó y firmó entre renglones por haber otra Iglesia
-
destinada para este efecto vale -.
-
Antonio Gallegos Eraristo Earroso ?J Arias
-
- -
Firmado: Gabriel de Giientes hlo?zlero Alateo Jialeno jilanuel
Ante mí: Isicloro de
Jfatorras, Escribano Real .de Gobierno, Guerra y Real Hacienda.
[Concuerda con el original de s u referencia que corre de folios 24 a 28
-
e n el pro toco!^ del Escribano don Isidoro Matorras año 1809, el cual
s e encuentra en esta Oficinzi del Archivo Histórico de la Provincia a
mi cargo, doy fe. Se expide este testimonio en papel simple a solicitud
del doctor Luis Güemes, en Salta a los veinte días del mes d e agosto d e
mil novecientos cuarenta y cinco. J. M. de los Ríos, Jefe del Archivo
Histórico de Salta.]
Nota: En N.A. tenemos fotocopin del original de este documento.
F. M.C.

[ESCRITURAS DE LOS ALBACEAS D E DORA


LOREKZA DE LA CANARA]
COPIA: E n esta ciudad de Salta en dieciocho dias del mes de octubre
d e mil ochocientos tres años ante mí el Escribano público del número
Z; testigos d e yuso, fueron presentes los sebores don Gabriel de Güemes
BIontero y don J u a n h'adal y Guarda, ambos vecinos de esta ciudad a
quienes yo dicho escribano doy f e conozco y dijeron que por cuanto
como albaceas, instituidos por la finada doña Lorenza de la Cámara
en el testamento que ésta otorgó el diecisiete de noviembre del año de
mil setecientos noventa y cuatro ante el Escribano del Número Antonio
Gil Infante, ordenó la dicha finada en la cláusula trece del referido s u
testamento, que se fundase una casa de niñas recogidas en esta ciudad,
bajo la protección del Patrono y Prelado, consignando para esta obra
pía, seis mil pesos para que se comprase una casa proporcionada (en
caso de que su sobrina doña Jerónima hlartínez de Yriarte, no quisiese
w a j e n a r para este fin la de su morada por su justo precio), imponién-
dose el resto de lo que sobrase de dichos seis mil pesos a senso para
m u d a del sustento de ellas y que la dicha fundación se habr5 de hacer
e n el preciso termino de dos años, contados desde el día de s u falleci-
miento; y que. en el caso de no realizarse completamente la obra pía
e n los precitados dos años e r a su voluntad que sus albaceas con justifi-
cación y prudencia, distribuyesen los dichos seis mil pesos entre sus
parientes. prefiriendo r los más necesitados y más próximos en sangre,
quedando nula y de ningún valor la presentada fundación; y, n o ha-
bibndose verificado la dicha fundación en el término consignado, se
presentó ante el señor Intendente Gobernador y Capitán General el
albacea don Gabriel de GUemes Montero, solicitando se le diese el debi-
d o lleno a la voluntad de la testadora, cuyas diligencias, con las obradas
por el Ilustre Cabildo se remitieron al Ilustrísimo señor Obispo de esta
Diócesis, quien proveyó auto. de qiie s e procediese a la venta de dicha
casa para la distribución mandada con la calidad de d a r la cuarta parte
del importe del remanente para el hospital de esta misma ciudad. cuyo
remate s e verificó en don Santiago de Figucroa el cual, con el dicho
auto del Ilustrisimo señor Obispo y demds diligencias, que para el efec-
t o s e practicaron son del tenor siguiente. Hacienda de Altagracia. fe-
brero primero de mil ochocientos dos. Visto el informe de nuestro Cura
y Vicario de Salta el que con parecer del Síndico Procurador hizo el
Ilustre Cabildo de aquella capital al señor Gobernador Intendente. el
a u t o proveído a su consecuencia por Su Seiíoria, la cláusula trece del
codicilo de doña Lorenza de la Cámara, lo representado por su nlbacen
don Gabriel de Güemes BIontero y demós que contiene este expediente.
Atendiendo a que la expre,sada doña Lorenza ordena en la enunciada
cláusula, que si e n el preciso término de dos años no se realiza comple-
tamente la casa de recogidas, se distribuyan entre: sus parientes los
seis mil pesos que dejaba para ella, n o habiéndose podido verificar esta
disposición en Ia primera parte, porque en los principios, las diligen-
cias, no corrieron con el aspecto y conformidad qiie convenía. Desde
luego declaramos haber llegado el caso de que se ejecute en su segunda
parte, admitiendo la oferta que nos asegura el albacea hacen los Fa-
rientes interesados de ceder al hospital la cuarta parte del valor de la
casa, pues por este medio, se cumplen en algún modo los piadosos de-
seos del i n ~ t i t u y e n t ede beneficiar al vecindario de Salta. Y para inte-
'
ligencia del albacea, remitasele testimonio de esta providencia y otra
a l Vicario, para que a su tiempo promueva la entrega de la parte ofre-
cida al hospital. El Obispo. Proveyó y firmó el auto antecedente el
ilustrísimo señor doctor don Angel IIariano hIoscoso, dignísimo Obispo
de esta Diócesis del Consejo de S u Majestad, mi Señor de que certifico.
Doctor José Tristán Secretario. Concuerda con el auto original de s u
contexto que se halla e n el expediente de la materia en la secretaría
de mi cargo a que me refiero, lo que certifico en Altagracia a tres d e
febrero de mil ochocientos dos. Doctor José Tristin. Señor Intendente
Gobernador y Capitán General, don Gabriel de Gücmes AIontero como
albacea de la señora doña Lorenza de la Cámara finada, a n t e V.S.
como mejor proceda de derecho digo que no habiendo podido tener efec-
to los celosos y cristianos deseos de dicha señora explicados en la clüu-
sula tercera del codicilo, según ella y como único punto que tenía pen-
diente de m i albaceazgo, solicité y conseguí de la autoridad judicial de
V.S. y de la del Ilustrísimo señor Obispo facultad de vender In c:iss
donde viviendo moraba la finada para distribuir s u importancia con
sujeción a sus piadosas intenciones, como todo consta de los documen-
tos quc con la solemnidad en derecho necesario presento y juro. r a r a
realizar mi idea y desde que recibí la providencia de s u señoría Ilustrí$-
m a he practicad@aunque infructífcras las más eficaces diligencias, con
cuyo concepto y para llenar yo toüos los deberes de mi cargo, sin resultas
exteriores, ocurro a la justiticaci6n d e V.S. para que se sirva mandar
tasar las expresadas casas por sujetos inteligentes juramenta(l@s para
que según s u a c t u d estado , y sobre un cierto justo valor se proceda a
s u enajenación por edictos y almonedas con dispensación de los nueve
pregones para aminorar en lo posible gastos procesales, por no ser es-
tas diligencias, incitadas por acreedores que demanden ejecucih, sino
liara accionistas precedentes de memorias piadosas, para todo y Ea-
ciendo el pedimento que más convenga. A. V.S. suplico que habiéndome
por presentado, se sirva proveer y mandar como llevo pedida juro lo
en derecho necesario y para ello etcétera. Gabriel de Güemes AIontero.
Salta, treinta de marzo de mil ochocientos tres. IIace por presentado al
albacea de la finada doña Lorenza de la Cámara. con el expediente de
la materia y auto en testimonio (le primero de febrero del año pasado
de mil ochocientos dos librado en la hacienda de Altagracia por el Ilus-
trísimo señor Obispo Diocesano, higase cn todo como dicho albacea lo
solicita y nl efecto notifiquesele a éste nombre un tasador por s u parte,
para que juntos con el que nombrase el Regidor Diputado del IIospital,
precediendo el juramento de fidelidad que se comete, procedan al reco-
nocimiento y avalúo de la casa mortuoria (le dicha finada. Y fecho.
dense los tres pregones prevenidos por derecho y tráiganse los autos
para proveer lo demfis que haya lugar. Rafael de la Luz. llachiller Pa-
lacios. Xlariano Cabrera, Escribano Público, en dicho día mes y año
hice ~ a b e el
r a u t o a n t e r i o r al albacea de la finada dofa Lorenza de la
Cámara quien enterado dijo que nombraba por su parte para tasador
a1 AInestro Arquitecto don Felipe González y de ello doy fe. Cabrera.
escribano. E n el mismo día, mes y año hice saber el auto anterior a
don Francisco Arias, Regidor diputado del IIospital quien impuesto
dijo, que nombrada por su parte para tasador a don .Felipe González,
- -
Xaestro Arquitecto y de ello doy f e Cabrera, escribano Incontinenti
hice saber a don Felipe Gonzilez el nombramiento que cn s u persona
IlaLlan hecho el albacea de la finada doiia Lorenza de la Cámara y el
1:cnidor Diputado del IIospital y entcrado dijo que lo aceptaba y nccptó
conforme a derccho jurando a Dios Nuestro Señor y una Señal de Cruz J

conforme a derecho de desempeñarlo fielmcntc según su saber y entcn-


dcr y lo firmó doy fe. Felipe Gonzzílez. Cabrera, escrib;ino. En esta ciu-
d:id de Salta a treinta y uno del corriente mcs y año estando a Iax
puertas de este mi oficio pUblico hice (lar el primer.pregón a la casa
i!c la finacla doña Lorenza dc la Cámara, por voz de Biarcos S a r w i a
diciendo en alta e inteligibles roces, tres blancas dan por la referida
rasa y no apareci6 postor alguno, doy fe. Cabrera, escribano. En trece
tlias del mes de abril del corriente año hice dar otro pregón a la refe-
rida casa en los mismos términos del nntcccdente y no apareció postor
alguno, doy fe. Cabrera, escribano. En veintitrés días del mes de abril
hice dar otro pregón en los tErminos de los antecedentes y no aparcci6
~icstor,doy fe. Cabrera, escribano. En el mismo día veintitres de abril
tlc mil ochocientos tres níios fue presente el JIaestro Arquitecto don
Fclipe Gonzálcz, vecino de esta ciudad y dijo que en fuerza del nom-
Lrnmiento hecho en su persona, por los señores albaceas don Gabriel
dc Cüemes Montero y Regidor diputado del Hospital el cual tiene acep-
tado en debida forma, habiendo reconocido con la debida prolijidad y
citi<lado segítn las reglas del arte, la eaw donde viviendo moraba doña
I.orenza de la Cllmara para efecto de tasarla, como est6 encargado. la
ha encontrado muy deteriorada, principalmente en la parte interior que
se llama traspatio y vulgarmente cancha y en el zaguin de la entrada
~irineipalde la calle, cuya pared de la entrada a mano izquierda se halla
rajada y amenazando ruina, pero reparable si se atiende a calzarla con'
tiempo, pues de lo contrario está a pique de desplomarse toda la vi-
vienda del alto que mira a la calle y se perderían los muchos materiales
dc madera, adobes y teja que puede aprovecharse. Por lo cual aten-
diendo a que sólo tiene de frente como de once a doce varas a la calle.
norte sur. aunque andando de siete a ocho varas de entrada al patio
al poniente tiene ya dieciocho varas y formando despu6s un género de
martillo va ganando terreno hasta tener más de cien varas de fondo al
rumbo d d Sur, entre vivienda, traspatio y puerta con varias planta3
y árboles frutales todo cercado de pared de adobes hasta el Tagarete.
halla que su legitimo valor y precio en el actual estado, es según su
Iral saber y profesión, la cantidad de tres mil y quinientos peso* v lo
firmó por ante mi de que doy fe. Felipe Gonzilez. BInriano Cabrera.
escribano público. Salta, veintiocho de abril de mil ochocientos tres.
Vista la tasación antecedente, házase saber al albacea de la finada
doña Lorenza de la Cámara y nl Regidor Diputado del IIospital y res-
pecto de estar dados los tres pregones, fijcnse ciirteles nnitnciando al
pueblo el remate que va n hacerse de la dicha casa en pública almone(1a
a las puertas de este gobierno para la cual se señala el día martes
diez de mayo prciximo venidero. Rafael (le la Luz. Ante mí BIariano
Cabrera, escribano público. En dicho día y año hice saber el auto
anterior al albacea de la finada doña Lorenza de la Cámara, doy fe.
Cabrera, escribano. Incontinenti, solicité al Regidor diputado del 110s-
pita1 y se me informó hallarse ausente. doy fe. Cabrera, escribano. Se
fijaron los cuatro carteles mandados en los parajes de estilo. Cabrera,
escribano. En esta ciudad de Salta, a los diez días del mes dc mnyo de
mil ochocientos tres años estando a las puertas de gobierno con toda
disposición de escribir el señor Gobernador Intendente General don
Itafael de la Luz por ante mí a son de caja de guerra se dio al pregón
1;i casa mortuoria de doña Lorenza de la CBmara, en los mismos ter-
niinos en que al presente la posee el arrendatario don Tomás de Arri-
punaga y Archondo, por el precio de s u tasación dicibndose por voz (le
Jos6 Anastasio Cisneros que hizo oficio de Pregonero por falta de pro-
pietario, tres blancas dan por la casa de doña Lorenza de la Ciímara y
hobiéndose repetido en distintas ocasiones, compareció don Santiago
de Figueroa vecino de esta ciudad y ofreció el precio de su tasación
que es de tres mil quinientos pesos y habi6ndosele admitido esta pos-
tura JC dio al pregón, mis, por no haber comparecido otro postor.
siendo ya las doce del día, se mandó suspender por Su Señoria estc
remate hasta el día siguiente firmando dicho postor con S. S. por
unte mi de que doy fe. Rafael de la Luz. Santiago de Figueroa. Ante
nii ñlariano Cabrera, escribano público. E n esta ciudad de Salta en
once días del corriente mes y año estando a las puertas de este Go-
bierno Intendencia con recado de escribir a efecto de praticar el remate
suspendido en el día de ayer, presente Su Señoría el señor don Rafael
de la Luz, Coronel de los Reales Ejercitas, Intendente Gobernador y
Capitiín General mandó darse nl pregón la casa mortuoria de la fi-
nada doña Lorenza de la Cámara, como verificó por ante mi a voz del
pregonero Jos6 Anastacio Cisneros expresando la postura hecha por
don Santiago de Figueroa el día de ayer que le fue admitida por Su
Señoría en estos terminos, tres mil quinientos pesos dan por la casa
de doña Lorenza de la Czímara en los terminos en que se halla tasada
y la posee el arrendatario don Tomds de Arrigunaga y Archondo J'
repetida que fue por varias ocasiones no habiendo comparecido postor
alguno que mejorase la postura se apercibió al remate, diciendo pues
no hay quien puje. ni quien d6 más, R la una. a las dos, a las tres,
que buena prole haga al rematador y lo firmó con Su Señoría por ante
mi de que doy fe. Rafael de la Luz, Santiago de Figueroa. Ante mi
hIariano Cabrera, escribano público. En cuya conformidad el mencio-
nado don Gabriel de GUernes ñlontero y don Manuel Nadal y Guarda, co-
mo albacea de la finada doña Lorenza de la C6-
Sinue la escri- mara otorgan por la presente que dan y venden
criturn. en venta real por juro de heredad, desde ahora
para siempre jam6s o don Santiago de Figueroa
y a quien su causa y representación hubiere o saber la casa mortuorin
de dicha finada, la cual linda por el naciente con la calle real que va
de la plaza a la capilla de nuestra Señora de la Viña, por el sur con
las casas de capellanía de don José Antonio Peralta, casas de don Tomás
Cabrera y capellanfa de don Victorio Fernández López, saliendo 1s
puerta nl Tagarete quc llaman de Legarribay. Por el poniente con
casa de doña Margarita Cdmara y de doña Agustina C6mnrn. por el
norte con capellanfa de Nuestra Señora del BIilasro la cual con todas
sus, entradas y salidas, fiíbrica, centro y pueblo, usos, costumbres, re-
gallas y servidumbres y con todas lo plantado, libre de censo, tributo, -
hipoteca n i otra obligación especial, ni general, tácita, n i expresa se
-la aseguran y venden en cantidad de tres mil quinientos pesos que e n
plata sellada, moneda corriente confiesan tener recibida de mano de
dicho comprador y por no s e r de presente s u entrega, renuncian la
acepción de Ia non numerata pecunia, su prueba, termins y demás
del caso, otorgándole carta de pago y recibo en forma de dicha escri-
t u r a cantidad y declaran que el justo valor y precio de la mencionada
casa son los referidos tres mil quinientos pesos y s i más valiere del
exceso e n mucho o poca suma hacen gracia y donación n favor del
comprador, de las que el derecho llama inter vivos y partes presentes,
con insinuación y demás firmezas legales, renunciando la ley del or-
denamiento real que t r a t a sobre lo que se compra, vendc o permuta
por mAs o menos de la mitad de su justo precio y verdadero valor, s u
i6rmino y remedio para repetir el engaño s i tal padeciera, con las de-
más leyes que con ella concuerdan y desde hoy en adelante se desapo-
deran, desisten, quitan y apartan dc cualesquier derecho de propiedad,
posesión, título, voz y recurso que a dicha casa podían rretendcr y
-do lo ceden renuncian y traspasan en el mencionado comprador y
R U S causahabientes, para que como propia la posea, goce cambie o ena-
jene a su voluntad absoluta con toda independencia dándole el poder
que se requiere para que de s u autoridad o judicialmente, tome la
posesión y tenencia de ella, constituyéndose en el ínterin por sus in-
quilinos, tenedores y precarios poseedores para ponerlo en ella siempre
que la pida. Y a la evicción, seguridad y saneamiento dc esta venta
sc obligan en tal manera que de cualesquier pleito, debate o diferencia
que sobre ella fuere [palabra ilegible] requeridos saldrán a la voz y
defensa, sigui6ndolo y defendihdolo a costa de los bienes de dicha fi-
nada hnsta fenecer10 y dejar al comprador en su libre uso quict? y
pacífica posesión. Y no pudiendo conseguirlo por no querer, o no po-
der le devolverán la cantidad que h a desembolsado con el importe de
las mejoras que hubiere fecho y el más valor adquirido con el tiempo,
que por todo como si aquí fuera liquidado y esta escritura ejecutiva
de plazo cumplido y asignado al día que Ilegnre el caso se les ejecute
por ella y el simple juramento de la parte. sin otra prueba de que lo
relevan aunque por derecho se requiera y a la primera de todo obli-
gan los bienes de dicha finada en forma y conforme a derecho some-
tihdolos a cualesquiera Jueces y Justicias de Su Majestad para que
n ello los compelan y apremien por todo rigor legal. E n cuyo tcsti-
monio así lo otorgaron y firmaron siendo testigos don Simeón Blar-
-
tlnez, don J u a n AIanuel Ojeda y don Julián Sandoval Testado Es- -
- -
critura n o v. e.
Cabriel (le Giienies Nontero Juan Xadal Guarda
Ante mí Alariano Cabrera
Escribano Público
[Concuerda con el original de su referencia quc corre d i folios 203 vuelta
n 211 vuelta en el protacolo del Escribano Bfariano Cabrera del año 1803,
que se encuentra en el Archivo y Biblioteca Mistdricos de Salta. Copia
testimoniada en N. A,]
[OFICIO D E LOS nIIh'ISTROS D E REAL IIACIESDA A L GOIIER-
IiADOR D E SALTA]
Señor Intendente Gobernador y Capitán General.
Nada perturba tanto las Oficinas de Cuenta y Razón, como el que
en ellas no s e hallen bastantemente bien declarados, por autoridad com-
petente, los negocios de su resorte, porque cualquiera trivial dificultad,
e s por necesidad bastante para entorpecer la más justificada operación.
Esto mismo experimentamos en el presente expediente promo-
vido por los cuatro ordenanzas de V. S. que tan debidamente reclaman
el prest que tienen devengado, por fruto de su trabajo, que e s bien
pesado por s u constitutivo, de constante urgente necesidad por los
importantes fines de s u establecimiento y de visible pública utilidad
por los buenos efectos que deben producir.
E n decreto de 10 de este mes se sirvió V. S. mandarnos dos co-
sas. Hacer ajustamiento del total liquido haber a cada uno como lo
piden, e informar a V. S. sobre todo lo que en razón l a administración
alcance y s i lo segundo cumplimos según en justicia penetramos, lo
primero es por ahora impracticable por lo que expondremos contraido
únicamente a que se nos diga cuál es el prest mensual que cada orde-
nanza goza, porque estos Reales Oficios no lo hallan determinado en
el Reglamento de 2 de mayo de 1766, único que gobierna la Adminis-
tración General de Sisa con suspensión de todas las Reales y Supe-
riores Ordenes comunicadas a ella 'en fuerza de lo resuelto por el
Excelentísimo señor Virrey en auto de 25 de abril anterior que s e nos
intimó por este Ilustre Cabildo de orden de S. E. y al que tenemos
dado el justo obedecimiento.
P o r el citado reglamento de 2 de mayo del año GG, puede V. S.
sin disputa tener a su lado una ordenanza de cada Fuerte establecido
ron Partidarios en las Fronteras de la Provincia que manda, de cuyo
beneficio han disfrutado todos sus antecesores, a saber, los seiíores
don J u a n Manuel Fernández Campero, don Jerónimo IIatorras, don
Joaquín de Espinosa Dávalos, don Francisco Gabino de Arias, don
. Antonio de Arriaga y don Andrés Nestre, pero con la diferencia que
los cinco primeros mantuvieron siempre de dieciocho a veinte indi-
viduos, el último en algunos tiempos diez, en otros siete y en los Últi-
mos años de SU mando sólo cuatro. como V. S., no obstante de s e r a lo
menos seis las fortalezas guarnecidas ,con tropas de las Fronteras
todas en largas distancias unas (le otras, situadas en precisos pasos
de los enemigos y cuyos comandantes dirigen por lo común en dere-
chura sus partes al Gobierno. para obrar en consecuencia por s e r ron-
forme a las órdenes que se les despachan con estas Ordenanzas. como
constitutivo de s u establecimiento. Todo e s constante del testimonio
N9 1 sacado del Reglamento del año de 66.
El prest que siempre se le ha pagado hasta que le entregb a V. S.
el mando el señor Brigadier AIestre ha sido el de treinta pesos men-
ruales al Ayudante AIayor y el de dieciocho pesos a cada Ordenanza
y este gasto como legitimo y preciso lo tiene aprobado el recto Tri-
bunal Mayor y Audiencia Real de Cuentas en las que ha glosado, li-
quidado y fenecido ¿le1 Ramo de Sisa de esta Provincia.
CUEBIES DOCUBIENTADO

Estos señalamientos los hizo por comisión del Superior Gobierno


de t i m a el Ilustre Cabildo de esta ciudad en el que al propGsito celebró
cn 19 d e octubre de 1772, como aparece del nQ 2. P a r a esto tuvieron
los capitulares asistentes presente todo el pormenor de circunstancias
que exigía el caso, a saber: Que sin acción a reclamar la raciones de
carne, tabaco. bizcocho y yerba que se suministra semanalmente a todo
Partidario debían mantenerse con sólo las indicadas asignaciones. Que
continuamente debían sostener caballo a pesebre para las fatigas y
esto s610 en Salta se consigue comprando alfalfa y cebada de cuya
pensión están exonerados los Partidarios de las Fronteras, que sin
estos desembolsos conservan los suyos en aptitud por la abundancia
de pastos que facilita la amenidad de aquellos campos, tanto cuanto
tienen de esteriles los de estas proximidades. Que debiendo estar siem-
pre a1 lado de los jefes para llevar órdenes a las Fronteras y cumplir
otras del interés del Rey y del pbblico, demandan superior decenc;n
y por esto mas costosa n la que comúnmente acostumbran los parti-
darios que existiendo en dilatadas distancias de las principales pobla-
ciones sólo dedican sus fatigas en montañas y desiertos dc gentes so-
ciables porque sería, no sólo indecoroso, sino irrisible tener los Jefes
de Provincia que valerse para casos siempre interesantes de unos
hombres que con s u mala exterioridad más que respeto, infundirían
tlcnprecio y distantes de conservar ilesa la confianza que por necesidad
debe hacerse de ellos al mirarse indecentes, se conducirían precipita-
dos de su escasa fortuna a hechos criminosos y en lugar de s e r Útiles
podrían ocasionar daños irreparables. Que para estos encargos no eran
buenos ningunos de gente plebe sino españoles de acreditada buena
conducta y por último que sus fatigas eran de trabajo y responsabilidad.
P o r estas razones todas de congruencia el Cabildo hizo juiciosa-
mente unos señalamientos equitativos, que l a administración general
a todas luces mirados, los h a estimado y estimará por muy justos. A
pesar de todo, inhábil de resolver por s i y apercibida por la sabia rec-
titud del Excelentísimo señor Virrey e n s u citado auto de 25 de abril
último para no hacer pago alguno que no este determinado e n el no-
minado Reglamento no constando de él los abonos que s e les debe hacer
y comprendihiose en la suspensión de órdenes y acuerdos el del Ca-
11ild0 y las declaraciones que sobre esto tiene hechas el señor Rrigadier
l\lestre. que corren en los comprobantes de su data y a la genial pureza
ale V. S. comprender5 la imposibilidad que tienen estos Reales Oficios
de hncer el ajustamiento que por V. S. se nos manda y que en dudas ta-
les conforme a los verdaderos sentimientos del art. 101 de la Real Orde-
nanza de Intendentes proponemoa a V. S. la dificultad que ocurre para
que según él, siendo servido facilite conforme a dercchos s u decisi6n
sin resultas de la Administración que a V. S. merece con constante
celo sus desvelos. Tesorería Principal de Salta, 13 de noviembre de 1701.
Gnbriel de Ciiemes Jlontero Diego Raúata ~IanicclAntonio Tejada
[Archivo IIistórieo de la Provincia de Salta. Legajo 1792193, Carp. 20,
Exp. 69. En carp. 20, Exp. 66, esth c1 borrador de este informe. Fotoco-
pia en N.A.]
[BORRADOR D E UN INFORXIE DE LA TESORERIA D E SALTA]

Señor Gobernador Intendente.


1) Lo más apreciable, lo más noble, lo más exquisito del hombre es
el honor. P a r a conservarlo ileso e n la corta o larga carrera de
la vida es inevitable vigilancia, entereza y constante estudio y
aún así son pocos los que lo consiguen cabalmente y con genera-
lidad, porque consistiendo en el modo rle aprender de los extraños
es en extremo difícil se combinen los conceptos.
2) P o r la reputación todo debc aventurarse y en s u defensa ni a u n
la vida se reserva y s i el común de los hombres debe por derecho
natural e s t a r revestido de estos nobles sentimientos tan recomen-
dados por las leyes con cuanta más razón los que por la impon-
dernble piedad del Rey tienen entre la eociedad los distintivos
con que los caracterizan las dignidades y los empleos públicos
creados por la sabiduría, por la prudencia y por la autoridad so-
berana para el gobierno de las Repúblicas y de las IIonarqufas.
8 ) P o r lo común son los empleados el objeto preciso de las conver-
s a ["conversaciones"?, al d a r la vuelta la hoja, se ha omitido con-
tinuar la palabra y el texto sigue], el blanco de los pueblos y In
emulacibn de muchos, porque como en imposible complacer a to-
dos por incompatible con sus obligaciones, la imprudencia de los
que s e creen agraviados aun sin estarlo, esparcen por desahogo
de s u s pasiones las quejas con que s e consideran autorizados, que
bien examinadas no se halla en s u fondo otra cosa, que la sinrazón,
la impiedad y la venganza.
4) Todos los destinos son de difícil desempeño porque uno solo par
lo común, no puede combinar todo el conjunto de partes que exige
s u perfección y por esto es que la inconsideración de los observa-
dores estima maliciosa la inadvertencia, gradúa por crimen Ia in-
voluntariedad y trastorna en sus entes lo m8s puro de un corazón
sincero y de un deseo de lo mejor.
5) No h a y carrera m i s expuesta n conciliarse el odio común quc la
de Real Hacienda porque consistiendo 6stn en la exacción de in-
tereses [testado: "que tanto defiende"] que tanto preocupan al
entendimiento humano,; [testado: "pof'B muchos por evadirse
vigilan y discurren con insensibilidad, [testado: "apreciando co-
. ...
mo .. ..elw] el modo de alucinar n sus empleados y de hacer
ilusorias todas o las mas sagradas precauciones que ha dictndo
sobre estas verdades bien calificadas el celo de los Tribunales y
tiene el Rey aprobadas con la obligación e n ambos fueros dc s e r
obedecidas por todos.
P o r estas consideraciones, que son incontrastables, tenemos
poco que extrañar, aunque s i mucho que sentir, haya en esta
provincia despues de muchos años que [testado: "servimos"], admi-
nistramos en ella intereses Reales desagradados de nuestra rigi-
lancia en metodizarlos conforme a las leyes, e n recabarlos a s u s
debidos tiempos y en d a r a cada ramo todos sus valores. por u n
orden de moderación y de prudencia y en unos tiempos interrum-
pidos con la infidencia e [testado: ilegible] insubordinaci6n.
6) Nuestros procedimientos siempre públicos, han sido por provideii-
cia de Dios tales cuales las leyes dictan. E n nuestras intenciones
n o han cabido, n i los sobornos, ni los cohechos. n i loa disimulos
que hemos mirado [testado: "siempreWl constantemente con todo
el horror del descrédito y asl es que sólo hemos atendido al modo
de hacer compatible todo lo del Real servicio con el bien público.
sin que hayan quien lo contrario diga aunque sean citados [testado:
"y en prueba de esta verdad pónense cnrteles"] por carteles y
pregones, [testado: "en las esquinas citando y emplazando a que
depongan contra nuestra conducta, que no habrá uno que nos
adicionen"].
7) Sobre estos fundamentos que alientan nuestra confianza S a pesar
de la que desde el principio del año próximo p3satlo cluizo hacer
de nuestros mismos don Pedro Pablo Arias para todo el manejo
de la .idministrnción de Sisa, que no admitimos, sin recelarnos de
RUS intenciones n i por entonces, ni en todo el discurso del sfio
como podíamos esperar que se negase a firmar unas partidas que
por cuantas partes las miremos s e hallan tan cabalmente autori-
zadas por la causa y en el modo. que no admiten ni pueden nti-
mitir repulsa en ninguno de los Tribunales mhs escrupulosos y
ajustados. Todas constan de derecho legal de parte determinada,
de solicitud en forma, de orden Real o superior precisa, de IiSra-
miento de V. S. y de recibo en su entrega. No tienen, no, los sa-
grados caudales del ernrio más instrumentos públicos n i docu-
mentos justificativos que los de Sisa así en la parte de entradas,
como en la de las salidas, lo haremos demostrable para la inteli-
gencia de los que voluntariosamente alucinados, por la resolución
del diputado mal meditada, se han graduado Arbitros en el ma-
nejo de estos públicos caudales que S. Al. nos tiene encomendado.
que ojal5 los separara de nuestro conocimiento porque sólo nos
producen fatigas duplicadas, responsiones infinitas y tal cez u n
descrédito que mRa que todo hiere nuestro corazón y nos o l ~ l i r a
a declamar contra los causantes y no tIejaremos de pedir a la
notoria rectitud de V. S. e integridad de los tribunales superio-
res toda la justicia que sea bastante n nuestro desapravio, repu-
tación y buen nombre, [testado: "hasta ponernos en los pies del
trono s i fuere precisoWJ.
8) No hay cargo que no se compruebe con el pedimento del enterante
donde manifiesta e1 número de cargas de jabón, el de yerba, el
de mulas y el de vacas y s i es el de ajwardiente con la guía ori-
ginal dc s u introducción.
9) AdemSs se acompañan testimonios de las esc'rituras de adeutlos
otorgadas por ante el escribano público de la Tesorería donde consta
el por menor de cada especie.
,
10) P a r a mayor abundamiento se agregan los cuadernos originalen de
los guardas de la Quebrada del Toro y Piscuno con los despachos
originales librados por V. S. a los extractores, que sólo tienen
valor hasta la guardia más avanzada que los recoge, porque para
l a sucesiva seguridad del comercio se quedan con las guías libra-
das con las [testado: "debidas"] formalidndes mds solemnes por
estos oficiales y todo forma entre s i , t a l combinación con las par-
tidas del libro administrario, que no s e hallará l a más leve dis-
crepancia, corno no sea algún yerro del entendimiento sin pzrtc
en la voluntad. No cabe comprobación m i s cabal.
11) Intervienen en este manejo: V. S. el primero como es n quien se
presentan los interesados en solicitud de sus despachos. h'osotros
como administradores generales para que se cobren, o nsegurcn
los establecidos derechos de cnda especie. El diputado que como
interventor debe tomar razón de todas las entradas y salidas s i n o
abusa y olvida de s u comisión pues a este f i n conserva e n 8 U po-
d e r una llave. El escribano de Gobierno y el de esta Tesorería
[testado "que"] por ante quien pasan los documentos del resorte
de cada uso. E l oficial que llcva los libros; y por último los de-
pendientes del Iksguardo que toman razón de todo. Dura cosa
es querer dudar de los procedimientos de tanto ministro fiel, li-
gereza por cierto, s i no digna de castigo a lo menos reprensible.
12) Las salidas de estos fondos todas, todas sin diferencia, están (le-
terminadas, o e n el reglamento del año de 176G aprobado por
S. iiI. en el de 1772, o por posteriores o reales o superiores órdenes
de la Superintendcncia General Subdelegada del Virreinato. E n
virtud de ellas g de los calificados motivos dc los interesados ex-
pide V. S. con dictamen de su Asesor General libranza a cusa
continuación se pone recibo y carta de pago y queda legitimada
la data, sin resultas que no se han experimentado en esta ad-
ministración general en los catorce ,años que la manejamos y s í
tenemos aprobaciones y finiquitos de todas las antecedentes pre-
sentadas, glosadas y fenecidas en el recto Tribunal Mayor y Au-
diencia Real de Cuentas de la Capital de iluenos Aires, por donde
se convence sin trepidación que nuestra conducta en la atlrninis-
tración del Kamo de Sisa es y h a sido irreprensihle y las sos-
pechas de los mal intencionados arbitrarias, injustas, cavi!oaas,
indignas [testado: "o reprensibles"] y muy distantes de nuestros
procedimientos calificados en la serie de tantos años. [Testado:
"todo lo que esperamos de la justicación de V. S. y así lo pedimos
en tan Imitante forma cuanta por derecho se requiera que sin
mAs figura de juicio así lo declare J u n t a de IIacienda en conser-
vación de nuestro honor. que aunque ocultamente y por los rumo-
res macrilndo, no obstante de que se ha sabido conscrvar tan terso
conio el cristal más fino".]
CUEIIES DOCUMENTADO 181

13) Pocos ejemplares se habrin presentado en ninguna de las Pro-


vincias de este Virreinato y el de Lima que con tanta autentici-
dad tan públicamente y completamente hayan m i n i s t r o s d c nues-
t r a clase satisfecho a todos e n unos manejos de intereses, .que e n
fuerza de muchas voluntariosas hebladurias esparcidas t a l vez
con un espíritu de emulación, envidia o venganza [testado "con"]
en términos misteriosos, retumbantes y fanfarrones sin conoci-
miento real [testado: "de las cosas"] de la verdad, hasta los m i s
avisados los miraban embebidos en fines no sólo njenos de s u
verdadero instituto, sino arbitrariamente dispersados, sin deter-
minaciones superiores. Asombrosa cosa a la verdad. Constantes
motivos de [testado: "satisfacción"] nuestros desvelos, de nues-
t r a pureza y de nuestro desinterés tienen en toda la provincia no
dejarse alucinar de charlatanerias. pero ya vemos que todo e s
efecto [testado: "son frutos"] de la miseria humana.
14) Ln veracidad de las contestes declaraciones son otros tantos tes-
timonios de la sinceridad y buena f e en la conducta que hemos
invariablemente observado así en todo el ' pormenor del manejo
de Sisa, como e n reclamar por los términos de la mo(leraci6n y
prudencia, la asistencia del Diputado en medio de que no hallar6
reglamento n i orden que nos estreche a esta pensión: nuestro ge-
nial cardcter propenso siempre a totalizar el servicio sin atraso
y avistar perjuicios con demoras [testado: "tanto"] asi n los en-
terantes como [testado: "y"] n los percipientes, que son tanto
mayores cuanto percibe el que tiene experiencia de lo arriesgado
que es el giro de mulas y vacas. expuestas por una sola detención
a disparadas y pérdidas con que se arruinan sus dueños y conduc-
tores, nos estrechaba muchas veces a girar la cuenta sin su asis-
tencia que a1 parecer l a detallaba. aunque indebidamente voluntariosa
prefiriendo sus particulares intereses a los de s u Comisión. En
estas circunstancias ¿qué nos quedaba que hacer y qué reso-
lución hubieran tomado otros de igual autoridad a la nuestra?
P a r a reprenderlo o castigarlo n o estamos autorizados. P a r a re-
presentarlo a V. S. y al Cabildo tampoco, porque ningunas de estas
advertencias no hacen ni el reglamento n i las órdenes posteriores
en su razón expedidas y es bien sabido que los regidores sólo son
juzgados en el juicio de residencia conque nosotros no debimos
en la clase de administradores generales hacer. otra cosa que l a
que aparece practicada. Pedir la llave y su nsistencia o l a de s u
confidente para introducir y sacar de la caja de caudales y esto
así se h a puntualizado, como resulta de las declaraciones p clemhs
del cuerpo de este expediente.
15) P o r las leyes est6 determinado que cuentlo con justo motivo no
asiste a la oficina uno de los dos BIinistros d e . R e a l IIacicnda el
que queda 8010 llena las funciones de ambos. El asistente queda
responsable dc la conducta del presidente y firma e n consecuen-
cia todo lo que se trabajó e n aquel o aquellos intcrmedios para
la igualdad de los negocios. Sobrc estos fundamentos ¿quién sino
13 ignorancia, para estos asuntos, del exdiputado embebido e n
las injustas desconfianzas de otros y de las que ya e s t i bien arre-
pentido, ec hubiera dctcnido ni un solo momento en firmar el
Libro Administrario?
16) Si s u asistencia hubiera sido diaria como debi6, hubiera tomado
las razones que el reglamento prescribe para confrontarlas con
las partidas del libro en fin de año, se hubiera acercado paulati-
namente a investigar todas las verdaderas causas que hacen legi-
timos los cargos; hubiera examinado por partes !as Reales y Supe-
riores determinaciones que consolidan precisas e indisputables las
Datas, se hubiera [testado: "ay"1 orientarlo de tanta particula-
ridad prolija, justa y bien reflexionada. que por instante o dia-
riamente se presenta en la administración para s u total desempeño.
supiera d a r al Ilustre Cabildo noticias interiores y exteriores de
este encargo cuando se las pidieran y a que es obligado por eons-
titutivo de la Ley. No hubiera dado Iupar a que así los subalternos
como las ordenanzas de esta Tesorería se hubieran continuamente
ocupado en llamarlo, a él o a su sustituto y por último no hubiera
motivado tantas charlatanerias entre el público que para despren-
derle do sus preocupaciones ha sido forzoso, bien asegurados de
nuestros procedimientos, aun tal vez con minoridad de nuestros
respetos, formar una junta de vecinos los m i s autorizados. los m i s
inteligentes, los de mayor reputación, los [testado: "mBs"] me-
nos adictos nuestros y m i s allegados a1 exdiputado y sus familias
para que examinen la cuenta. para que reconozcan los expedientes
competentes y para que éstos se confronten con las órdenes y re-
glamentos, de cuya operación prolijamente ejecutada a su presencia,
quedó desengañado el causante, desalucinados los que lo estaban
de los concurrentes, desprendido el pueblo de sus primeras ímpre-
siones y ciertos todos, todos que nuestra conducta ha sido irre-
prensible.
17) Véase despacio la diligencia de constancia de fojas . ..
que no
define bastantemente bien el sistema de empeño con que los re-
visores de las cuentas de Sisa tenian y lo manifestaron en deducir
reparos y en formar cargos a la administraci6n. Desde la primera
. letra hasta la última de [testado: "ley"1 todas sus partidas, com-
probantes y órdenes que se leyeron y confrontaron no hubo gua-
rismo que no se formase de nuevo por la escrupulosidad de don
Sinforoso José de Rioja. por don Agustin de Zuviría y don Manuel
Antonio Tejada; pero a vista de todo, aquellos y los (lemis sin
excepción de don Pedro Pablo Arias, exclamaron contra los seduc-
tores y contra el Cabildo que nn habia pedido testimonio de todas
las órdenes comunicadas a e s h Administración General. aplaudir
los desvelos de Qsta y se arrepintieron de sus debilidades.
18) [Testado en el original: "Por m i s que no queramos difundirnos.
el deseo de satisfacer por todos los modos posibles a los alucinados
con las vulgares voces esparcidas por la irreflexión del diputado,
nos pone en la necesidad de patentizar a V. S., tribunales supe-
riores y al mundo entero cuáles fueron las entradas del Ramo de
Sisa hasta fines del año 1780 y en qué estaban vinculadas; cutíles
las que tuvo en los tres sucesivos años y en qué consistió la de-
cadencia que se manifiesta; sobre qué pie ruedzn desde entonces
hasta el día los ingresos de este Ramo; cuáles sus precisas ero-
gaciones que s i antes sobraban fondos para totalizarlas, en el día
y e n todos los anteriores años no han podido cubrirse sin los au-
xilios de préstamos y otros ramos inconexos.
"Nada de esto e s trascendental al público y por eso e s que
sus atrevimientos y ligeras producciones son hijas de su ciega
ignorancia. Sigue al nQ 20".1
18) K o hay atrevido como el ignorante. Ninguna razón le conviene,
todo s u interior se convierte en sospechas y comúnmente cuenta
como positivo lo que en s u caletre se le figuró. Embebido entre
sus dudas nada discurre con acierto, todo lo trastorna y no s e
acuerda del celo de los superiores para con los inferiores. del sis-
tema de cada uno y de ninguna de las partes de que s e compone
toda combinación.
Se ignora en Salta de que está V. S. al frente de los negocios;
que de notar en nosotros la mis leve disipación sabría tomar opor-
tunas providencias para evitarlo; que nada se paga sin precisa
libranza de V.S. quien no la expedir5 siempre que no sea con
muy justos y calificados motivos; que todo después se h a de exa-
minar en un serio y recto tribunal donde nada se disimula. Rara
torpeza por cierto y cuánto dan que hacer con sus estupideces.
s i no son maliciosas resoluciones de sus venganzas. Dejémoslo al
Todopoderoso que penetra nuestras interioridades y con quien
no tienen lugar las sofisterias.
18) P o r todo pues se ha de servir la justificación de V. S. declarar
por expreso pronunciamiento y sin más figura de juicio por justo
y bien arreglado todo el manejo de Sisa que s e halla en lo econó-
mico y coactivo bajo de nuestra dirección y por consecuencia a
nosotros por fieles ministros y buenos servidores del Rey dando
cuenta con autos nl Excelentísimo ~ e i í o rVirrey para que instruido
a fondo de estos acaecimientos el imponderable recto obrar de
S. E. n un mismo tiempo que quede rtestatlo: "impuesto queda"1
cerciorado de nuestra irreprensiblc conducta, bien dirigida, bajo
de las órdenes inmediatas de V. S. siendo (le su superior agrado
tome las providencias que su savia penetración estime necesarias
n contener en lo sucesivo otras iguales voluntarietlades, que traen
y embeben en sí, como inherentes, dniios irreparables.
19) E n estas circunstancias y aunque sea n costa de difundirnos c o y
t r a nuestra común costumbre, apeteciendo siempre con preferencia
la sntisfacciln de los jefes e n puntos de tanta importancia, con-
sideramos propio de nuestra ollig;ición manifestar por medio de
estados demostrativos, cuales fueron los valores que tuvo el ramo
184 ' LUIS CUELIES '

de ,Sisa, en los tres primeros años que lo administramos, cuáIes


los que tuvo en los tres segundos, a cuánto ascendió la decadencia
'de estos con concepto aquellos y por qué aunque sucintamente, por
ser notorio, en que pie corre desde el establecimiento de las Inten-
dencias y lo que se ha recaudado al año. Cuáles han sido sus ero-
gaciones y el porque éstas no pueden totalizarse, con otras parti-
cularidades que excitan a buscar medios de mejorarlo; tomérroslo
por partes y demos principio, pues no es ajeno del asunto cues-
tionado.
20) El estado n9 1Qmanifiesta que el ramo embebió en s í los valores
que nunca había tenido. El del n? 29 presta la considerable rebaja
de [En blanco en el original] y esta a todo el mundo
es notorio provino de las turbulencias del Reino no apaciguadas
desde fines de 1780 hasta 1782.
El del nQ 3 da idea de lo que se recauda con corta diferencia
anualmente desde el 1784 que siendo mucho menos de lo que pro-
ducía antes de la rebelión por consecuencia para llenar sus cargas
establecidas desde su origen y no derogadas de sufrir las resultas
de un crecido empeño.
21) E l efecto que más ha incrementado estos fondos ha sido el de
mulas. Con In supresión de repartos ha tenido una baja formidable
y proporcionalmente la han tenido tambien las vacas, la yerba y
el jabón, de forma que no es comparable.
22) Como se ha conservado siempre con corta diferencia el mismo pie
de tropa partidaria en todos los fuertes de esta frontera y la de
Jujuy con sus respectivos prest y en su sustento se han embebido
ingentes caudales, porque si lo primero ha dado treguas lo se-
. . gundo no admite espera de ahí es, que no han podido completar
las entradas todas las forzosas salidas y por lo mismo el Ramo
estd empeñado.
23) Los pagos ordinarios establecidos después de los redamentos son
los siguientes, tres mil pesos anuales que consign6 el Exeelentí-
simo señor Virrey don Juan José de Vértiz en favor de la nueva
Reducción de Zenta con 400 pesos para el Sínodo de sus doctri-
neros y mandó pagar el señor Intendente General don Manuel Ig-
nacio Fernández por su orden de 16 de setiembre de 1779 lo que
aprobó S. 31. en R e d orden de 15 de mayo de 1780.
Un mil pesos que se pagan al Teniente Asesor por no tener
fondos los Propios de todas las ciudades de la Provincia con CUYO
concepto así lo solicitó este Ilustre Cabildo por su Procurador Ge-
neral en el aiio de 1784 por ser el Ramo de Sisa arbitrio tomado
por ella y se mandó pagar por auto del señor Brigadier don Andrés
Mestre su fecha 7 de mayo de 1786, cuyo expediente se pasó para
su aprobación a la Junta Superior; 250 pesos a cada Administrador;
100 al diputado y 200 al oficial por real orden de 2G de octubre de
1776. Lo necesario al vestuario dc los presidiarios del Río del
G U E ~ I E SDOCUMENTADO 185

Valle, por declaración de la supcrintendencia de 5 de agosto de 1780.


Lo preciso a socorrer e n sus necesidades a los neófitos de las Re-
ducciones de lntr Fronteras según Real Orden de Ci de mayo de
1779. El valor por arancel d e lo que trabaje de oficio y testimonios
que saque el escribano d c esta Tesorería por orden de la Superin-
tendencia de 81 de octubre de 1778. P a r a vino, cera y ostias de la
Capilla del Río del Valle 3 0 pesos anuales por consignación de
la Superintendencia General Subdelegado de 19 de diciembre de 1780.
Al y a r d a del Ramo 300 pesos consignados desde s u estableci-
miento y aprobado por los reglamentos y Tribunales Superiores
con vista de sus títulos. Los gastos temporales, e indeterminados
de las guardias avanzadas de la Quebrada, Caldera y Piscuno parir
evitar las clandestinas extracciones, todos con arreglo al Regla-
mento del año de 1740 y práctica establecida desde aquel año.
E n todo s e embeben muchos caudales y el ramo nn puede
sufrirlos y será muy conveniente el que se tomen providencias
para aminorarlos y acrecentar las entrndas. Tesorería Principal
d e Salta, 13 de febrero de 1792.
[Archivo Histórico de In Provincia de Snlta. Legajo 1792193, Carpeta 20,
Exp. 45. "Eorrador de un amplio informe de la Tesorería de Salta, referente
en especial nl Rnmo de Sisa, dirigida nl Gobernador Intendente". Copia
simple textual en N.A. No hemos encontrndo el expediente en que se efec-
t u ó el informe. F. Al. C.]

[BORRADORES D E INFORalES D E DOh: GABRIEL D E CtJEhIES


PIONTERO SOBRE LA ADlIINISTRACIOS D E LAS TEMPOCALT-
DADES D E LAS REDUCCIONES E N LA PROI'IKCIA D E SALTA.]

Don Gabriel de Güemes Montero, Tesorero Ministro Principal de


Real Hacienda. Comisario de Guerra y Administrador General de los
Ramos de Alcabalas, Cruzada y Sisa, por S. Al. (que Dios guarde), etc.
Cumpliendo con lo mandado por este Gobierno e Intendencia. Auto
y Decretos de siete y 17 de octubre y 14 de este mes formo l a instruc-
ci6n siguiente p a r a el gobierno de la administración de las tempordi-
dades de todas las Reducciones de esta provincia en los años sucesivos.
Cap. 19. N o hay manejo bueno sin cuenta y razón clara e inteli-
gible, constante de cargo. data y existencia y para estnbleccrla deberán
formarse en todos prolijos judiciales inventarios para hacer constar
todo el pormenor de especies propias de cada una, tanto de paramentos
y alhajas sagradas cuanto de Útiles, efectos, granos y ganados de todas
cspecies y la misma diligencia deberh practicarsc por muerte o sepa-
ración de los curas doctrinarios.
Cap. 20. E n cada Reducción h a <le haber u n libro foliado y ru-
bricado que el principnl y su compañero s i lo hubiese y en su defecto
-por la persona que dipute el Gobierno el cual se hará cargo de cuanto
sea propio de la Reducción y perciba de ella y se datará en cuenta
separada de cuanto gaste dividiendo por partes y e n fojas distintas
las especies para no confundir las unas con las otras.
Cap. 89. Siendo como son todos los pueblos de neófitos, terrenos
aparentes para toda especie de labranza, será de l a precisa obligación del
cura administrador sembrar porciones considerables de arroz. maíz, zapa-
Ilos, porotos y otras legumbres con que pueda s u s t e n h r a sus recomenda-
dos en el discurso del año haciéndose cargo en dicho libro de cuanto pro-
duzca cada semilla anualmente y datándose de cuanto insuma en las
semanales raciones que les entregue cuya c u e n h podrá llevar en cua-
derno separado que estimará como auxiliar del principal libro donde
sólo por meses anotará estas entregas para aminorar en él sus partidas.
Cap. 40. El algodón e s un fruto recomendable y del interés de los
neófitos, ya para tener ocupadas en sociedad y trabajo proporcionado
a s u sexo n las indias expeditas para ser empleadas y ya para que
t.cngan con qué vestirse, de.camisas y otras ropas intcriores y por
tanto será tambien de la precisa obligación de los curas administrado-
res establecer e n todos los pueblos algodonales y telares aparentes.
Cap. 50. E n los pueblos que conserven ganado vacuno. lanar. ca-
ballar y yeguar s e establecerán semanales rodeos bajo la conducta de
expertos y conocidos capataces o por partes, según la situación locul
de los puestos o junta no sólo para conservarlo con constancia sujeto.
sino tambien p a r a facilitar la precaución de gusanera a que son pro-
pensos aquellos temperamentos y para .icrestigar s i tiene decadencia
cufil es la causa y cuál será el remedio de evitarla.
Cap. 69. El esquileo de las ovejas en las primaveras facilita s u
conservación y multiplico y la lana e s muy necesaria para los tejidos
de picotes, ponchos, frazadas y otros útiles necesarios para vestir ti
los indios. P o r tanto los curas doctrineros cuidarán todos los años de
hacer cortar la lana a sus respectivas majadas y emplearla en aque-
I!os fines.
Cap. 79. Asimismo mandarin se ha& las yerrns del ganado va-
cuno, yeguar y caballar, todos los años, anotando en el libro mayor
n cuánto asciende este multiplico no 9610 para hacerse responsable
en la anual cuenta que rinda, sino para satisfacer el diezmo a la
Iglesia Santa, como lo determina la Ley 13, Título 16. Libro 19 rle
las de Indias.
Cap. So. Servido el principal sustento de estos naturales, la ración
de carne, se la darán semanal con proporción al número de almas que
haya en cada pueblo, considerando a cada r e s con dieciséis racionea
r a r a varones de 16 años para arriba y para jóvenes viudas e indias
solteras con 32.
Cap. 99. Los individuos que de cada pueblo no vivan sujetos al
trabajo y en sociedad, no tendrán acción a ración d e ninguna especie,
pero el cura administrador teniendo presentes las leyes 13 y 20, lihro
C9 tltulo 19 de Indias, procurarán con sagacidad y dulzura introdu-
cirlos al trabajo de las labranzas y crías de ganados para s u propio
sustento y felicidad temporal.
Cap. 10'. Siendo como son todas las Reducciones de esta provin-
cia muy adecuadas para facilitar con ventajas el multiplico de ganado
cabrio el cual a un mismo tiempo que puede servir en los tiempos
calamitosos de sustentos para los neófitos, son sus pieles susceptibles
de muchos beneficios, por tanto los administradores establecerún del
modo que les sea posible p permita el actual estado de cada pueblo
niajatlas o rebarios de cabras destinando indiecitos aparentes para que
las pastoreen y sujeten a corral diario y en sus pueblos f i j a r i n i b -
Lricas de cordobanes.
Cap. 11P. Todos los cueros de vacas quc no sean necesarios para
coyundas. petacas y otros útiles d e s u especie precisos al manejo eco-
nhmico, los harún reducir a suelas que vendidas pueden producir con-
siderables beneficios e n favor del común y para esto establecer6n cur-
tiembres en los mismos pueblos y en parajes de aguadas y cebilares.
COP.120. h'inguno de los frutos que procedan del común podrrin
iiarse por el administrador, pero s i estará autorizado para venderlos
a dinero contante o en cambio de otras especies precisas para vestir
a los indios, para el trabajo y cultivo d e los campos, o para el aseo y
servicio del templo.
Cap. 1.90. Una prudente economia en todo manejo produce mara-
villosos efectos y considerables ventajas. P o r tanto sobre estos senti-
mientos cuidari el administrador no se maten sino en casos de extrema
necesidad, vacas Iicmbras, para semanales raciones. porque éstas deben
#alir de los novillos y torunos p e n las ocasiones oportunas d e los ga-
i ~ a d o scimarrones que abundan en los montes próximos a los piicblos
que seria bien extinguir por el daño irreparable que de día en dia
ocasionan a las estancias de rodeo.
Cap. 140. Siendo como es el principal objeto de los curas doctri-
m r o s instruir a los indios en los rudimentos d e nuestra sagrada reli-
r i á n sin perder de vista este importante punto, el cura administrndor
como principal, para que el compañero, donde lo haya. sufran las fatinas
de sus npostólicos ministerios, que tal vez el principal no podri tota-
lizar por la diversidad de atenciones temporales que le circunvalan,
(Icstinará horas proporcionadas para el rezo, a fin de que queden ex-
peditos aquellos naturales para ocurrir a las faenas y ministerios a
que el cura administrador los destine, como que éstos y no conchabados
(le pueblos extraños. han de hacer todas !as del interés común, como
que s u trabajo ha de insumirse precisamente en su propio beneficio.
Cap. 150. P a r a establecer entre todos una racional emulación que
los incite a1 trabajo corporal, cuidar6 el cura administrador de grati-
ficar con ventajas p con frutos de1 mismo pueblo a aquellos indios e
indias que advierta más aplicntlos y contraídos al fomento de las la-
branzas del común y aun a las de cada uno en particular que pueden
tener dúndoles tiempo para que beneficien sus heredades y grnnje-
rias, como lo recomiendan las leyes 21, 22 y 23 del expresado Libro
y Título.
-Cap. l G o . Teniendo presente la ley 9, titulo 39, libro' GQ de las de
cstos dominios celarán los curas administradores que por ningún cir-
cunvecino n i extraño se les disipe a los pueblos reducidos ni aun en
sii menor parte ninguna de las tierras que ocupan y les fueron conce-
didas en sus primitivos establecimientos, por lo cual y demás acccso-
rios que de cualesquier modo correspondan o corresponder puednn a
R U S encargados, deberán hacer las diligencias coactivas que le son
peculiares ante este gobierno, que por el estimulo de la ley primera.
dicho libro GQ y titulo lQ, está siempre dispuesto a dispensarles toda
la protección de SU autoridad e n justicia.
Cap. /P. Debiéndose al notorio conocido celo de F r a y Joaquín
Coito, cura actual de la Reducción de Balbuena. y a los esmeros de
F r a y Juan Pascua1 J i m h e z , que lo fue de la de Miraflores, haga en
ambas distintos indios pequeios instruidos en la música tanto de voces,
cuanto de instrumentos y conviniendo a la celebridad del Safito Ciilto
su conservación y adelantamiento posible, trabajarán los actuales a
este intento, y, en los pueblos donde no haya tan importante establc-
cimiento, lo fijarán sus respectivos curas despachando a Ealbuena y
?viiraflores jóvenes expertos para que lo aprendan, hasta aquel punto,
que sean capaces de usarlo er. sus domicilios y de enseñarlos e n ellos
sucesivamente a otros jóvenes.
Caji. 18P. L a escuela .diaria en todas las Reducciones facilita In
civilización de los indios. el conocimiento de la Religión, el amor Y
r r a t i t u d a la soberanía .y los pone expeditos para aprender con faci-
lidad todos los oficios mecfnicos a que están expeditos por l a ley 11
del mismo libro 69, titulo 19; pero los curas administradores se esmc-
rarán ir,trotlucir s u enseñanza toda en lengua castellana, como lo reco-
mienda tan estrechamente y con sabios fines la ley 18 del citado libro
y titulo.
Cap. 19P. A fin de no introducir en estos pueblos el detestable
vicio de la embriaguez y otras perniciosas costumbres conque en lugar
de hacerse útiles a la sociedad, sean perjudiciales a l a sociedad misma
Y no se consigan las imponderables piadosas intenciones del Rey, h y á n
todos los curas administradores tengan s u justo puntual cumplimien-
to las leyes 20, 21, 2'2, 23, 24 y 2G de dicho libro GQ, titulo 3 9 sobre
cuya observancia estarán muy n Ir? mira.
Cap. 209. Todos los años deberin rendir sus cuentas los curas
administradores formándolas juradas como requisito esencial para s u
administración, las cuales intervenidas por el compañero, las presen-
tarán en este gobierno e intendencia para que pasadas e n vista al
Defensor Protector de Indios, con lo que éste diga, proceda la conta-
duria principal de esta provincia a s u glosa, liquidación y fenecimiento
antes de sntisfacer el sínodo a l cura administrador quien para recla-
marlo en debida forma desde el año próximo en adelante será obligado
a exhibir como documentos precisos ndemds de la certificación de exis-
tencia e n su doctrina que determina la ley 26, libro lQ, titulo 13 de
las municipales, una razón circunstanciada y jurada del n6mero de
ulmm de cada pueblo separando o distinguiendo los p5rvulos de los
GUEMES DOCUIIESTADO 183

ndultos, los solteros de los casados y los hombres de las mujeres


y el finiquito de la cuenta del año anterior para que de este modo
no padezcan atraso tan importantes operaciones de interés de los mis-
nios pueblos.
Cap. 219. Sin embargo (le que se espera de todos los religiosos
doctrineros un ejempler celo en favor de los neófitos y que no es pre-
sumible en ninguno, intenciones disconformes a 1:i razón y a la ley. se
encarga no obstante al cura compañero otiserve con prudencia y mode-
ración los procedimientos del cura principal, a quien podrá representar
verbalmente y al Gobierno y Capitanía General por escrito, todo lo que
crea del interés de los indios, principalmente s i advierte disipaciones
injustas y voluntariosas, sustracciones ajenas del principal instituto
sobre que se les encarga la conciencia,y se les hace responsables para
a n t e el Rey y sus mismos Prelados Superiores.
Cap. 2Z0. IIabiéndose introducido por necesidad el qiie los indios
d e la Reducción (le Tobas se conchabcn anualmente en los ingenios de
rañaverales, establecidos con progresos y utilidad pública en las Iia-
tiendas de San Lorenzo, Ledesma, Río Negro y San Lucas y los (Ic
las Reducciones de AIacapillo y nalbuena en los de la hacienda de la
Viña. los curas administradores de unos y otros puehlos no só!o se
lo permitirán, sino que por míixima política y consultando al beneficio
de los mismos indios les aconsejarin y persuadirán del modo más
constante y eficaz, concurran gustosos a estas tareas las cuales a u n
mismo tiempo que ellas les proporcionan por todo el tiempo de su con-
chabo el sustento y medios para vestirse sin pensión (le sus pueblos.
destierran el ocio tan perjudicial a estos naturales, se acostumbran a1
trabajo corporal tan importante 3 la conservación de su nat~iralezay
facilitan n estos hacendados dignos de toda la proteccióii de las leyes
y magistrados, la conclusión con buen éxito y en 'tiempos oportunos
de sus labores para el beneficio de los azúcares y demás preciosos
cfectns qiie la planta de la caña produce y observarán dichos curas
administradores para estos casos las rcplas siguientes.
Cap. 239. Cada uno dc los prccitnclos pueblos de Tobas, JIacapi-
110 y Ralbuena tentlrln padr6n del total número de almas de ambos
sexos desde la edad de ocho años hasta la de 1 4 y desde ésta hasta los
de CO y serii de su privativo conocimiento dcstinar a un número fijo
y proporcionado a las obligaciones y faenas dc la Reducción r o r mcscs,
para que éstos alternativamente cump1:in con ellas, de modo qoc entre
los doce meses del año, se subdividan por mitas las tareas de toda
especie de los mismos pueblos, qucdando los dcm:is expeditos para
conchabarse.
Cap. 249. E n cada hacienda destinarl un número fijo con propor-
ción a la más o menos necesidad y a los tiempos de faenas de los
hacendados, bajo la dirección precisa e inevitable de un cacique. alcal-
de o mandarín n quien el cura entregará'una lista con designación de
nombres de cuantos destina para el trabajo, dividiéndolos por dos en-
tidades, que son conchabo entero que quiere decir tanto, como hombres
de 1 4 años para arriba y medio conchabo que son los jóvenes desde 7
u 8 años hasta los 1 4 y todas las mujeres quienes taml~iénson impor-
tantes para las labores de la caña en las ocasiones de su beneficio.
Cap. 250. Cada mita sólo permanecerá dos meses en cada caña-
veral, conchabada; pero, s i de conformidad entre el cura administrador
y hacendado quisieren continuar los indios en el trabajo podrá con-
sentirlo sin perjuicio del turno que debe observar entre los de la Re-
ducción a fin de que consigan todos con igualdad de lo benéfico y d e
lo gravoso.
Cap. 260. P o r cada indio de los del primer conchabo, esto es, de
los de 1 4 años para arriba ha de pedir cuatro pesos mensuales e n
dinero y por la persona de los del segundo como son muchachos y
mujeres, dos pesos en la propia moneda: pero s i considérase puede s e r
Útil a los indios y aun al común de la Reducción que parte o el todo
de las pagas se haga en géneros, los podrá admitir, pero al preciso
e indisputable precio de esta plaza y la de Jujuy, sin que a los hacen-
(lados les quedc el menor arbitrio de utilizar nada en la entrega de
estos géneros que deben darlos al preciso precio en que los compraron,
siendo por tanto obligados a manifestar al cura administrador cuando
éste tuviera a bien pedirlas las facturas originales firmadas por los
mercaderes y tratantes a quienes hayan comprados dichos ghneros.
Cap. 279. Ningún hacendado entregará a cada indio, india o mu-
chacho durante el conchabo mlis que la mitad de lo que gane porque
la otra mitad deberá dársela en s u propia Reducción al cura admi-
nistrador para fondos del común, a fin de facilitar s u fomento y feli-
cidad temporal.
Cap. 2SQ. Será de la obligación precisa de todos los hacendados
pasar a cada pueblo por si, u otra persona de su confianza que con el
cura administrador liquide y purifique las cuentas de los conchabos
hasta aquel grado que sin perjuicio de los unos ni los otros queden can-
celadas siendo de la obligación del doctrinero hacerse cargo en el libro
general de cuanto por esta raz6n reciba, cuyas partidas h a de com-
probar con las cuentas originales que le presenten los hacendados o
sus comisionados quienes las deben firmar para que en todos tiempos
obre los efectos que haya lugar.
Cap. 290. Celarán con el mayor connato el que por los hacendados
y sus mayordomos sean todos los indios e indias tratados con mode-
ración y prudencia, mantenidos en las acostumbradas raciones de maiz
y carne con p u n t u ~ l i d a dy sin falencia p el que en todas las haciendas
haya capilla o luxar destinado para que en los dias de fiestas recen y
oigan misa, como lo determina la ley 11, titulo 19, libro Go, de las d e
Indias p se prohibe el que en los cañaverales vendan aguardiente a los
indios, ni otro licor capaz de embriagarlos, sobre que también entren
a la misa sus doctrineros.
Cap. SOo. Ninguno de los jóvenes destinados a la escuela, a l a
música y a aprender oficios mecánicos deberá salir del pueblo. n i tam-
poco las indias jóvenes que no tengan padres que las atiendan. cuiden
y miren por ellas, a todas las cuales deberá el cura administrador sus-
CUEMES DOCUMENTADO 191

tentar y vestir de l a masa común del mismo modo que a las viudas,
ancianos e imposibilitados del trabajo.
Cap. 319. Cada cura administrador hard entender a toda la in-
diada de su pueblo por medio de los caciques, alcaldes e intérpretes
que los principales fines de esta instrucción se dirigen a su felicidad
espiritual y temporal r a r a que de este modo todos e n general y cada
uno en particular adoptiindola sin violencia cumplan ellos con lo que
les toca y vivan subordinados a su cura doctrinero y demes nutorida-
des constituidas, sin necesidad de usar de la fuerza, la cual ha (le
reclamarse en muy remotos casos precedida consulta al jefe de la pro-
vincia, quien sólo podrR determinarla con conocimiento y examen de
antecedentes; pero, si alguna vez urgiera tanto que no dé trepuas a
esperar las resultas de este gobierno, ocurrirán a los comandantes de
los Fuertes de Ledesma. Río del Valle y Pitos y éstos auxiliariin a los
curas con prudencia en los casos que interesen a Dios, a1 Rey p al PÚ-
blico de modo que todos contribuyan a civilizar y mantener en vida so-
ciable y cristiana los pueblos de Reducciones situados en una y otra
Frontera.
Cap. $Po. Todos los curas administradores tendrdn muy presentes
las leyes del libro GQ, titulo 70, de las de India para cuidar y estar
a la mira de que en todos los ingenios de cañaverales y demls partes
donde sus indios fueren conchahi~dossean tratados con todo el espíritu
que estas leyes recomicndan; y s i recibieren agravios, daños y per-
juicios por los dueños, mayordomos o capataces lo reprcscntardn a
este Gobierno y Capitiin General para que se proceda contra los de-
lincuentes conforme a derecho.
Cap. $S0. Siendo constante, pública y notoria la oposición que
tienen entre s i los indios tobas con los matacos y mataguayos, el doc-
trinero de los primeros estará muy a la mira para investigar s i en
algunos de los cañaverales establecidos en la frontera de Jujuy se ha-
llan conchabados parcialidades de los segundos, para no permitir sc
mezclen con éstos ningunos de los primeros a fin de impedir de este
modo toda pendencia que les ocasione estragos y aun la muerte.
Cap. 3 5 O . P o r las leyes 78 y 79. libro GQ, titulo 3, se manda e n
la primera que ningún indio de un pueblo se vaya 11 otro y en la se-
gunda que no se dé licencia a los indios para vivir fuera de sus Ik-
ducciones.
Los curas doctrineros cuidarún de s u observancia para no con-
sentir que los que se conchaben en los cañaverales se radiquen y esta.
blezcan en ellos por m i s tiempo que dure el conchabo, pues aun cuando
se casen durante éste con indias u otras mujeres de distintas castas
han de ser siempre obligados a restituirse a s u Reducción y los hacen-
dados no consentirún ni permitirán lo contrario, lo que este así deter-
minado por las ordenanzas del señor Oidor visitador don Francisco de
Al faro.
Salta, 20 de diciembre de 1797. Gabriel de Giieuies JIontetv.
ATota: Lo que va escrito en el original desde el capítulo 31 hasta el final
.de este informe, cs de puño y letra de BIartin Xliguel, el despu6s general
Güemcs, que a la sazón contnba casi 13 níios, pues ya sabemos que naci6 el
8 de febrero de 1785. Esto confirma lo dicho en el tomo 1, cap. 4, púginas
33 a 36 de estn obra uobrc que XIartin Miguel, siendo cnsi un niño, ayudaba a
6 U pntlre don Gabriel cn I n s tareas de la Tesorería de Saltn. F.11. C.

Ittfurnte.
Señor Teniente Asesor Gobernador intendente.
Hnce muchos años s é que las cuentas de rendición por falta de
método y por una condescendencia de costumbre envejecida han pa-
decido de una informalidad'tan crasa que las ha hecho confusas y ar-
bitrarias con perjuicios de los bienes del común y aun de la real ha-
cienda y ramo de Sisa. Con fecha de 19 de diciembre del año próximq
pasado expuse a esta intendencia lo que me pareció justo acerca de
este desgreño y con deseo de precaucionar los males que son bien vi-
sibles en este expediente como se ve desde f. 43 hasta 46 y de cuyos
sentimiento sobre previos informes y prfictico conocimiento no me
.separaré nunca no obstante del que la Contliduría P rincipal expone con
informe de 31 de arosto anterior y corre a f. 128 y siguientes.
Sin embargo siempre sumiso a los cclosos conceptos superiores
y teniendo por lo mandado por el Excelentísimo señor Virrey en s u
orden de 27 de febrero rnterior que corre r f. 75 y lo resuelto por esta
intendencia en 30 de setiembre, 17 de octubre y 14 de este mes, he
formado la instrucción que se me manda combinable con las leyes que
en ellas se citan. el carácter de los clue han de administrar los bienes
de Reducciones, la miserabilidad de los reducidos, el temperamento de
sus terrenos y demhs circunstancias locales de la Provincia y sus Fron-
tcrns para que puedan empezar a arreglarse unos manejos que han
estado siempre desarreglados y que por lo mismo no es fácil de un
golpe entonarlos hasta squel punto que se conforma con la 'oluntad del
Rey y nuestra Ie~islnción.
Yo sólo he dictado lo quc he alcanzndo justo en descargo de mi
conciencia y con el deseo más sincero de lo mejor. pero Vm. podrá mo-
dificar o ampliar en el todo o parte de s u tenor sobre el cual estaré
pronto siempre a d a r la razón del porqué de cada uno de sus capítulos
y ampliar más cxtcnsamente las dudas que sobre s u vcrdadera intcli-
gencia puedan ocurrir.
Sería en un concepto muy del servicio (le Dios, del Rey y de to-
das los neófitos dc la provincia el que por este gobierno Be solicitase
del 1:evcrendo Padre Provincial (le San Francisco, o del Superior Go-
bierno que ron retención de su doctrina de nalbuena ae nombrara p a r a
superior de las de esta provincia a Fray Joaquín Costo con facultad
(le castigar y aun de suspender de sus beneficios a los que de cualquier
modo cumplan mal con sus respectivos encargos, precedido el consenti-
miento del Patrono Real. El cclo tlc este buen religioso y s u experien-
.cia en el manejo de los indios y sus temporalidades puede facilitar
ideas importantes a la civilización y fomento de los pueblos. todo lo
cual me ha parecido informar a Vm., para s u inteligencia. Dios Guarde
a Vm. muchos años. Salta, 10 de diciembre de 1737. Gabriel de GNentcs
Nontero. Señor doctor don Tadco Fernindez Divila.

Señor Intendente Gobernador y Capitln General.


Con gusto hemos visto la cuenta presentada por el cura doctri-
nero de la Reducción de Tobas F r a y Juan José Ortiz y corre a f. 2 de
s u libro, porque ella después de mQs de sesenta años que existe aque-
lla colonia presenta a1 celo de V. S. un principio del friito de! trabajo
de sus indios, que continuado e n los años sucesivos. llegar.7 a s e r con
utilidad y provecho de ellos mismos un vivo ejemplo y aun la envidia
de las demás Reducciones. P o r s e r los tobas un terreno t a n fértil por
s u propia esencia, que es susceptible de cuantas producciones Útiles y
comerciables, quieran exigir de él s i s u cura doctrinero s e empoña
con constancia en sujetar los indios al trabajo y éstos mudando de
s u antigua condición lo abrazan con gusto y resignación para hacer
feliz s u vida y la de sus descendientes. Bien sabemos que s u continuo
sistema es el d e la holgazanería y para desprenderse de ella s e r l de
necesidad el que por la autoridad de V. S. se pasen al Comandante de
Ledesma órdenes de rigurosa observancia para que proteja con todas
sus fuerzas a este cura doctrinero con el designio de que sea respetado
y obedecido de sus indios, pues sin esta condición poco podrií adelantar
r con ella tienen sobradas proporciones para cosechar con abundancia
toda especie de legumbres, maíz, trigo y aun caña dulce por ser el tem-
peramento de aquel pueblo el m l s aparente para esto y así es que he-
mos visto no con poca zdrnirnción que este cura doctrinero n o dé por
cargo en su cuenta ninguno de aquellos frutos y así en l a sucesiva
no lo hallamos quedar.7 responsable a contestar las resultas.
E s de interés no pcqueño el que aquellos naturales .vean cuanto
antes sea posible en s u propia utilidad el descuento que sufrieron para
no serles sensible otros iguales en los años sucesivos; y V. S. siendo
servido podrrí mandar a este cure doctrinero contrate inmediatamente
el número de vacas de dos años para arriba que sea +astante a llenar
el líquido residuo de los quinientos veinticuatro pesos siete reales que
d a de s í s u cuenta, con algunas yeguas que son precisas para s u con-
servación pues este renglón es el que contemplamos m6s preciso y aun
m6s visible n la indigencia y rudeza de los indios, pero con tal con-
dición que las entregas se hagan con intervención y personal conoci-
miento del comandante de Ledesma, quien deber5 pedir rodeo dos o
tres veces al nao, para calificar R U existencia con las del multiplico
que produzca informando a la rectitud de V. S. lo que considere digno
de remedio.
Como el reverendo cura no manifiesta en su cuenta y comproban-
tes el número de indios que ha destinado a los ingenios de azúcares,
sus vecinos, n i el tiempo que han permanecido en sus conchabos, n o
podemos deducir si los descuentos que han hecho e n favor de aquella
comunidad están o no arreglados a la instrucción que se le dio n i s i to-
dos los conchabados han dejado aquella parte que en proporción debieron
porque s i algunos rcsisten t a n importante establecimiento además d e
deber s c r castigados n o tendrán jamás acción a usufructuar de las
ventajas que deber5 producirles y que el cura doctrinero pondrá s u ma-
yor cuidado y asi se lo h a r á entender con el comandante de Ledesma,
como que los dos deben trabajar a un mismo fin.
Como hasta el dia no ha rendido s u c u e n t a particular don Pedro
Arias, dueño de la hacienda de Ledesma; queda suspenso el cargo d c
cuarenta y siete pcsos que este doctrinero se ha formado, así porque
no presenta documento de legitimidad que esclarezca, no sólo lo que
dejaron los indios, sino lo que dcbicron dejar para graduar en justicia
y en los años sucesivos, dc lo que es capaz el pueblo y de la respon-
sabilidad que debc s u f r i r o s u cura doctrinero o los mismos hacen-
dados. P o r tanto. siendo V. S. servido, podrh intimar al primero el
miis puntual cumplimiento del artículo 23 de la instrucción y al se-
gundo el 28 de ellas, pues s i en RUS principios se obra con contempla-
ción y disimulo en materias de tanta importancia y gravedad, todos
los notorios desvelos de V. S. serán infructuosos para que aquellos neó-
fitos dejen de s e r infelices.
P o r ahora sin ejemplar y con esperanzas de que en los años vc-
nideros veremos en las cuentas de los tobas, además del rodeo de ga-
nados, sementeras, de toda espccie de granos y aumentos de sus tem-
poralidades, teniendo consideración que el desarreglo de muchos años
no es fácil metodizarlo de pronto. Somos de sentir que V. S. siendo scr-
vido apruebe con la cuenta presentada, la conducta dcl Reverendo Padre
Presidente F r a y J u a n Josf Ortiz, a quien se le reserva satisfacer s u
sínodo devengado, o como V.S. estimc de justicia. Salta, 23 de dicicm-
bre de 1800.
[Gabriel de Giiemea Jlontero]

Señor Intendente Gobernador y Capitán General.


Hemos reconocido las cuentas de la reducción de Balbuena que
formó el cura doctrinero como administrador de s u s temporalidades com-
prensivas desde el 19 de julio del año próximo pasado hasta fin de
junio del corriente, pero de ellas no podemos deducir n i un líquido e n
pro o en contra de cada especie, n i se puede esclarecer s i los desvclos
del administrador h a n producido aumento, o han sufrido decadencia.
Esto procede de falta de conocimientos en el modo de formarlas y como
&Staes la primera que se presenta en estos Reales Oficiales de las de s u
clase cs de necesidad pasar por ellas. haciendo para e n lo sucesivo y sin
desviarnos de los sentimientos dc la instrucción las advertencias
siguientes:
P o r el artículo 29 s e les previene que en el libro ioliado y ru-
bricado que cada cura administrador debc tener se forme cargo de
cuanto de cualquier modo pertenezca y sea propio de los pueMos y e n
esta voz general son comprendidos los efectos y animales dcl mismo mcdo
que el dinero. P o r lo mismo el libro debc tener cuenta separada de cada
especie y s u d a t a verbigracia clel dinero que entra y sale, una; con s u
resto al fin del año de los efectos que se compran o beneficián en las re-
ducciones por los mismos indios como frazadas, picotes, hilados, jabón..
C U E ~ I E SDOCULIENTADO

cera, suelas y d e m h curtiembres otra y de los ganados cuadrúpedos


otra; porque todo s e dirige a1 justo f i n de investigar s i su distribución
s e hace con justicia y equidad y en los ciertos objetos da sus verdade-
r a s aplicaciones y s i en las faenas s e pone todo el cuidado que piden
para que con conocimiento de causa pueda proveer el gobierno lo con-
ducente en tiempo oportuno según lo exijan las circiinstancias, deste-
rrando para siempre toda arbitrariedad en estos manejos que en dis-
tintas reducciones han sido capaces de conducirlas a s u ruina con
perjuicio irreparable de los neófitos y a u n de la Real IIacienda y
Ramo de Sisa.
P o r el capitulo 4 de dicha instrucción se les proviene hagan plantíos
o sementeras de algodonares por s e r esta producción utilísima al fo-
mento de los reducidos y deberá el cura administrador expresar por nota
s i se ha puesto en práctica esta advertencia, cuanto ha producido y quó
destino le ha dado y, cuando no se haya verificado, explicará la razón
del porqué, para proveer lo que convenga.
P o r el articulo 6 se prescribe el esquileo de las ovejas para propor-
cionar a los indios e indias ocúpaciones de su interés y el alivio de jer-
gas, ponchos y otros útiles que indispensablemente han de necesitar y
les proporcionan las majadas que del común hay en los pueblos: sobre
cuyas operaciones darán razón por nota anualmente los curas adminis-
tradores porque sus discursos y tareas deben extenderse a cuanto sea
del interes de sus encargados.
E n la cuenta de datas se dice haber consumido e n el sustento d e
su gente 260 cabezas de ganado vacuno y sesenta ovejas y por los ar-
tículos 10 y 11 se les recomienda a los curas administradores establez-
cun curtiembres de todos los cueros que se recojan de las reses que se
maten, para n o ocasionar un desperdicio con el que inmediatamente
perjudican a los fondos de su manejo; y también sobre este ramo de
trabajo e industria deben todos los años d a r razón en sus respectivas
cuentas, y, cuando absolutamentc no puedan facilitarse las curtiembres.
debcrán vender los cueros para engrosar el dinero con que sin engañar
al pueblo se faciliten otros útiles do necesidad.
Sin trabajar con constancia no puede haber adelantamientos. To-
dos los indios reducidos viven bajo la protección de V. S. y ya que tie-
nen la feliz suerte de obedeccr a quien con constancia se desvela por sus
felicidades espirituales y temporales, es usar dc razón que todos con-
tribuyamos a tan piadosos objetos porque asi cs de la voluntad y del
interés del Rey. Bajo estos aspectos puede V. S. siendo servido aprobar
por ahora, y sin que sirva de ejemplar esta cuenta y mandar que se
le pague el sínodo devengado pashndole copia de este wpedientc :)ar:i
su inteligencia sucesiva, pero previniéndole ademiis sujete los gastos
:tnuales de dinero a menos de lo que entre y produzcan las rentas y
conchabos, y remita razón del total número de almas de que conste
Ir. reducción como se le manda en el artlculo 20 de la instrucción o
como V. S. tenga por conveniente. Tesorería Principal de Salta, 14 de
noviembre de 1800.
[Gabricl dc Giiemes Monterol
Señor Intendente Gobernador y CapitAn General.
E l cura doctrinero de Ortega F r a y Antonio Flor h a comprendido
Iiien los verdaderos sentimientos de la instrucción metódica, pues sub-
divide su cuenta según ella y da de s i toda la claridad que basta a
saberse en todo tiempo las entradas, las salidas y la líqui<la existencia
(le cada especie; pero es reparable que no ha tenido desde que el celo
de V. S. la visitó ningún adelantamiento, cuando ella es capaz de fa-
cilitarlos por s u temperamento benigno, por s u fértil terreno y por
sus abundantes aguas de regadío s i s e dedica n la sementera de toda
espceie de granos y legunibres oliligando a los neófitos de ella traba-
jen con constancia para hacerse dignos d e los usufructos. Treinta y
tren hombres de los originarios fundadores de aquel pueblo y trece de
los de Petacas existen en el pueblo que son bastante para totalizar
todas las atenciones del año sin necesidad de asumir nada de sus fon-
dos en l?eones conchabndos, tanto menos cuanto los verdaderos dueños
deben saber trabajar en todas las faenas rurales, por s e r de los m i s
antiguos reducidos. Por lo mismo somos de sentir el que V. S. siendo
servido le permita sólo al cura de Ortega un capataz de buen juicio,
activo y fiel para que en todas las ocurrencias del interCs del común
dirija a Ion mismos indios para que las evacuen consultando en los
nastos la m i s escrupulosa economia de forma que siempre se conozcan
los asuntos de sus temporalidades.
Deber5 estn5leeer curtiembres de suelas. porque se hace bien ex-
traño el destino que ha dado a 32G cueros, que reducidos a aquella es-
reeie hubieran producido aún m i s de quinientos pesos y también te-
lares para que se beneficie la lana que h a de producirles las 400 orejas
y conque podrii tener ocupadas a las indias y conseguir los picotes
nrcesarios n vestir a todos sin necesidad de gastar en esto nada, que-
cI:intlo en beneficio del fondo todo lo que aquello vale.
Harina, a j í y a l g d b n debe producirlo el pueblo s i se siembra.
beneficia y cuida; y, en las cuentas sucesivas, no s e admitir5 este
pasto y s e espera que todos estos frutos se cosechen con ventajas tan-
t a s que puedan venderse mucho p2ra con sus valores atender n otros
precisos gastos sin necesidad de vender ganado alguno el cuzl debe
c<mservarlo a todo trance y para esto en la distribución de raciones rólo
insurnirá toros, torunos y novillos sin echar mano de vacas y así lo
rspondrh en su cuenta para la sucesiva constancia.
P a r a saberse el estado de la estancia, s i V. S. fuere servido, podrú
mandar al comandante de Pitos pase a Ortega por el mes de mayo o
jvnio para que cuente toda especie de ~ a n a d o se informe el verdsdero
estado e n que s e halla pues entonces facilita esta operación la indis-
pensable necesiclad que hay de herrar las parieiones, cosa que ser5
Iiiieno la presencie y certifique, para l a sucesiva constancia, porque
todo debe comprobarse.
Con la esperanza de que la cuenta sucesiva prestara las ventajas
que no da ésta, siendo V. S. servido podri aprobarla y mandar que n
F r a y Antonio Flor se le hagan buenos sus sínodos, o como V. S. es-
time d r Justicia. Tesorcría Principal de Salta, 21 de diciembre de 1800.
[Cabriel de Giieiiies ñlontero]
CUEIIES DOCUMENTADO 197

SeLor Intendente Gobernador y Capitin General.


lIemos visto de nuevo la instrucción formada para el manejo d e
los bienes temporales de los pueblos reducidos e n esta provincia cuyo
pormenor de artículos confrontados con lo que en 22 de f e b r e r o an-
tccedente pide ante V. S. el Protector Partidario de indios, no hallamos
en éste cosa que no esté determinsdo en aquGllas n excepción de lo
de s u último capítulo el cual es opuesto al artículo 12 de la instruc-
ción. E n éste se le faculta al administratlor para que venda, compre o
cambie los frutos que produzcan los pueblos administrados, como ope-
raciones propiamente económicas y en aqufl se solicita lo contrario
porque desea ligar estos procedimientos menudos y, continuados al co-
sentimiento del Gobierno e Intendencia.
Esto ndemhs que podrh embarazar mucho las vastas atenciones del
jefe de la provincia, puede s e r perjudicial a los intereses de las Reduc-
ciones. Id distancia impide d a r pronta cuenta de todos los acaecimien-
tos que ofrcce tales laboreos o manejo y se presentan tales y tan ven-
tajosos en casos inesperados, que de sujetarlos al consentimiento del
~ o b i e r n ose aventuran y aun se pierden. El mamjo económico debe s e r
libre porque en su seguridad se otorgan franquicias y el administrador
de los pueblos de esta frontera ha otorgado las suyas en indeterminada
cantidad, con las que ha de responder a todas las resultas de su en-
cargo. E n este sul>uesto es de necesidad y del interEs de los ne5Cito.s
el que en esta parte se revoque el decreto de V. S. de 27 de febrero
último por contrario imperio y se mande llevar a puro y debido efecto
cl artículo 12 citado, porquc él, como todos los tlemás de l a instruc-
ción, están sancionados por la superior autoridad del Excelentlsimo se-
fior Virrey, sin cuyo consentimiento no deben ninguno de los capítulos
de ella alterarse. modificarse, n i ampliarse.
Como la instrucción se formó con concepto a que el manejo es-
taba en manos de religiosos serhficos, pasando hoy al de u n sccular,
para que éste y sus sucesores no obren con arbitrariedad serh conve-
niente a la seguridad de los fondos de aquellos pueblos prescribirles
reglas que aunque no sean de formal intervención embeban en s í
la de verdadera comprobación en las cuentas, porque el fin es asegu-
r a r aquel interés del modo posible, sin que jamhs queden expuestos
a la suerte.
Con estos sentimientos deber6 el nuevo administrador hacer las
reparticiones de raciones de carnes, maíz y legumbres a presencia del
cura doctrinero o s u compañero, quiencs pondrdn el visto bueno en las
relaciones mensuales del cuaderno auxiliar para que queda calificada
la fiel entrega. Del mismo modo sucederi en la distribución de ropas
territoriales para vestir a los indios, cuya cuenta deberá el administra-
dor girarla con separación de la de raciones p a r a datarse de cada una
en el libro administratorio en una sola partida, por el valor intrínseco
que merezca lo que se entregue a los indios, bien sea en frutos de sus
terrenos o en efectos, calificándose estas partidas mensuzles con las
relaciones visadas.
Los gastos que se hagan e n la compostura de la Iglesia de Mira-
flores y los que oe ocasionen en la conclusión de la de Galbuena tam-
108 LUIS CUEMES

t i é n deber& llevarlos en cuadernos separados recogiendo para comprolxnr


sus pormenores recibos de los maestros artefactos, que firnizrirn los
curas doctrineros a s u ruego cuando no sepan aquéllos y poner el
visto bueno en las relaciones de gastos menudos, que no admitan re-
cibos particulares para l a verdadera constancia.
De cada Reducción debe llevar cuenta separada, para no confun-
d i r los valores, gastos y existencias de la una con los de las otras por
s e r inconexos y estar aplicados a particulares determinados fines. P o r
estos motivos, no podrir el administrador suplir interés (de cualquier
clase que sean) de un pueblo a otro sin expresa orden del gobierno. y,
en estos casos, se pondrd constancia en los libros respectivos para cons-
tituir en responsabilidad de reintegro dcl pueblo suplido al supliente.
Contemplando que el sínodo que por vía de limosna tiene el Rey
consignado es corto para que los religiosos doctrineros puedan vivir
con toda aquella decencia quc pide s u verdadero cardcter. parece con-
forme n equidad que tanto al principal como al comyañero se les nu-
xilie con raciones de carne, granos y legumbres de sus mismns reduc-
ciones en aquellas cantidades que dirigiéndose con prudencia y racional
economía. gradúe el administrador precisas; pero n o podr&n los curas,
ni compafieros retenerlas para venderlas aprovechindose de sus valores,
lo cual debe prohibírscles absolutamente :por s e r s u ministerio di-
rigido a enriquecer sus almas con conquistas de los neófitos para ado-
radores de Dios y no de bienes temporales y de este modo llenarán los
verdaderos sentimientos de su scráfica regla. También se les deber&
suministrar las velas de cebo para sus celdas, la Krasa precisa para
sus viandas sin perjuicio de lo que se consuma anualmente en las Igle-
sias y jabón para conservar en aseo sus hibitos y ropas interiores,
llevando de estos consumos cuenta separada en cada pueblo para Kra-
tluar a su tiempo s u importancia y par% otros posteriorcs fines del
biencstar de los neófitos.
.
Debiendo hacerse inexcusablemente las yerras todos los ?-nos con-
currir& precisamente a ellas el cura doctrinero o s u compaíiero liara
presenciar el cierto número de terneras que se yerran en cada pueblo
de que dar6 certificación al administrador y también n su presencia
s e contarán todos los animales cuadrúpedos para afianzar s u existen-
cia. por lo que deberhn hacerse las recogidas con toda prolijidad y
cuidado. para no admitir como presentes las que por cómputos ima-
ginarios gradúan en semejantes operaciones rurales por quedadas en
cl campo; y de esto también se pondrii constancia comprobada en el
libro administratorio.
E l premio Jel 10 por ciento que se ha servido señalar el Exce-
lentísimo señor Virrey al Administrador de estas temporalidades por
s u supremo auto (le 24 de diciembre del aíio próximo pasado pide Dre-
cisa (Ieclaración para seguridad del mismo administrador de esta ofi-
cina que debe glosarle, liquidarle y fenecerle sus cuentas y para que
V.S. con s u g e n i d rectitud pronuncie la que estime m i s conforme
u las celosas intenciones de S. E. o para que solicite resolución de s u
superioridad. Somos (le sentir: que el 10 por ciento del procreo de va- '
cas, caballos, yeguas, mulas, ovejas y cabras s e le debe abonar e n di-
nero. dando a cada uno de estos animales los valores corrientes al tiempo
d e la yerra, que son 12 reales cada ternera. un peso cada potro, 9 rea-
.les cada yegua, 4 pesos cada mula y 2 reales cada oveja y cabra, porque
interesa mucho a la conservación y aumento de aquellas estancias re-
tener en ellas los multiplicos d e todas especies por su querencia y com-
plexivo temperamento y pastaje, lo cual no puede equipararse aunque
se compre, e introduzca en las mismas tierras de los indios un duplo
del número a que el 10 por ciento ascienda.
. También debe abonarse en dinero lo correspondiente a frutos ali-
mentarios, porque éstos debe el administrador conservar en cada pue-
blo los que en 61 coseche para el anual sustento de sus naturales y con
tal cuidado y precaución que haya siempre sobrantes para el año su-
cesivo precaviendo escasez por daño o epidemia a fin de que nunca ca-
rezca de ellos, porque los indios vivirán sujetos al trabajo y en socie-
dad siempre que no les falte la comida en s u s Reducciones y de 10,
contrario se profugarán a los montes en solicitud de frutas y raíces sil-
vestres que les son bien complexivas.
Toda especie de curtiembres y cosas de ellos, cuadras de todo y
parque y lo que de ellas se trabaja, sebos, cera, miel, algodón y sus
tejidos son frutos de aumento a las Reducciones que vendido importan
ingentes sumas. Del verdadero producto de esto debe también repor-
t a r s u premio el administrador en dinero porque por constitutivo de
8ii ministerio es obligado con responsabilidad e n forma a trabajar cuanto
permitan sus fuerzas y talento sin distracción a otros objetos e n be-
neficio de los pueblos de su encargo solicitando s u expendio a los me-
jores precios, bien dentro de las mismas reducciones o fuera de ellas,
según las proporciones que se le presenten, guardando siempre una
prudente economía, sobre calculaciones bien combinadas.
No deberá estimarse por aumentos ninguna obra de edificios, cer-
cos, rastrojos, acequias y otros labores de esta esfera, que sen pre-
ciso hacer en las reducciones, por s e r todo incidencias inherentes del
cargo administratorio, cuyas mejoras debe por obligación promoverlas
y realizarlas, hasta su total conclusión.
Los indios destinados al servicio de la Iglesia y de los padres doc-
trineros deben estar libres del trabajo de los campos, sino en cmos
de extrema necesidad; y la distribución de todos a los distintos objetos
del fomento de 10s pueblos debe observar el administrador una igual-
dad de proporción que evite quejas y desabrimientos entre los indios,
n los cuales los curas deberán persuadir constantemente obedezcan pron-
tamente cuanto les mande el nuevo administrador. constituyendo a los
curas responsables de toda ulterior resulta s i lo contrario practican,
que no se espera.
Algunos años y con los terrenos de algunas de las tres reduccio-
nes convendrá a su fomento admitir invernadas de mulas, pero para
consolidar estos contratos deberá el administrador solicitar el consen-
timiento del Gobierno sin el cual no quedarán los bienes de los indios
responsables a las resultas.
Arrenderos españoles no deben consentirse sino en distancia de
los pueblos y parajes que interese a la seguridad de las haciendas de
aquellas comunidades para perseguir tigres, leones y otros animales
dañinos que comiinmente s e abrigan en bosques desamparados y so-
litarios y a estos mismos fines duplicnrh puesteros donde le parezca
interesentes, colocando en ellos indios de los pueblos de buena con-
ducta y aparentes.
Estas reglas nos parecen importantes observar en adelante; no
obstante todo, V. S. podri aprobar las que con s u s mejores conoci-
mientos considere por mejores. Tesorería Principal de Salta. 10 de
abril de 1802. Gnbriel de Giieiites Alontcro. Francisco Jauier Carbnjnl.
[Documentos que senrchivnn en la carpeta dieicmbre de 1707 de este Ar-
chivo y Biblioteca Históricos de Snlta. Prof. bfarín T. Cadena de IIesslin~,
Directora, Archivo y Biblioteca IIistOrieos.]

c) TESTAMENTO D E DON G A G R I E L D E GL'EAfES IIIONTERO

I h el nombre de Dios todo Poderoso, Amén: Sea notorio como yo,


don Cabriel de Güemes iilontero, Ministro Tesorero de Real Ifacienda
de las Cajas Principales de esta Capital, natural del lugar de Abionzo,
Valle de Carriedo, Obispado'de Santander,,Rcinos de España, hijo le-
gítimo de legítimo matrimonio de don Manuel Cüemes AIontero J. de
doáa Francisca Bárcena Gómez Campero de Zorrevilla: hallándome e n
rama gravemente enfermo, pero en mi entero juicio, memoria y entendi-
miento natural, creyendo como firmemente creo y confieso. el alti-
~ i m omisterio de la Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo,
tres personas distintas y u n solo Dios verdadero y en todos los demás
que cree y confiesa Nuestra Santa Aladre I d e s i a Católica Apostólica
Romana, en cuya f e y creencia he vivido, vivo y protesto vivir y mo-
rir, como católico cristiano, tomando por m i intercesora y protectora
a la siempre Virgen Reina de los Angeles, María Santísima Madre de
Dios y Señora Nuestra, al Santo Angel de mi guarda y demis de la
corte Celestial para que rueKuen al Señor por mi alma, temeroso de l a
muerte. que es t a n natural a toda humana criaturn, deseando estiir
prevenido con disposición testamentaria, para cuando llegue el caso
otorgo, hago y ordeno este mi testamento en la forma y manera si-
.miente. Primeramente encomiendo mi alma a Dios Kucstro Señor que Ir
creó y redimió con el infinito precio de su sangre y el cuerpo mando
a la tierra de que fue formado, el cual es mi voluntad que l u e ~ oque
fallezca sea vestido con el uniforme de mi empleo, con cordón y esca-
pulario de la Venerable Orden Tercera de San Francisco e inmedinta-
mente sea depositado en dicha Iglesia o bien Ilerándolo en coche, o en
el féretro de dicha tercera orden por la caridad de mis hermanos ter-
ceros. AIi entierro menor rezado con c r u z ' b a j a y los oficios todos re-
zados a la voluntad de mis albaceas, dejando asimismo a la voluntnd d e
4stos el novenario de misas que se m e apliquen por mi alma. encar-
gándoles que no haya, n i un responso cantado sino los sufragios que
tiene obligación de hacerme la Tercera Orden. Item mando a las man-
das forzosas y acostumbradas, incluso el Real Hospital d e esta CapitaI
cuatro reales a cada una, con que los aparto de mis bienes. Item de-
claro ser casado y velado según orden de la Iglesia con doña AIagda-
lena Coyechea, natural de la ciudad de San Salvador de Jujuy, hijn
legitima del sargento mayor don AIartin BIiguei de Coyechea y de doña
Innacia de la Corte, de cuyo matrimonio hemos procreüdo y tenemos
por nuestros hijos nueve: siete varones y dos mujeres, nombrados el
doctor Juan de Dios Tomis Manuel, Martin Niguel, Gabriel José,
Magdalena Damasia, Francisca Josefa, José Francisco, J u a n Climaco
Renjamín, 3Ianuel Antonio Isac y Napoleón Quintin José Giiemes
Afontero y Coyechea, declarindoloq por tales mis hijos legitimas para
que conste. Item declaro que cuando me casé sólo metí al matrimonio
Iü precisa decencia de mi persona y mi cspos:i aportó de dote la can-
tidad de dinero que consta de s u respectiva carta e hijuela a que me
remito, declftrolo para que conste. Item declaro que m i hermano poli-
tico don Lorenzo Ignacio de Coyechea, me e s deudor de diez mil p
mbs pesos a cuya cuenta se le abonarán cuatro mil cuatrocientos run-
renta p tantos pesos que me tiene entregados. <leclirolo así para que
conste. Item declaro serme deutlorcs varios sujetos de algunas canti-
dades que constaran de sus escrituras, obligaciones y apuntes n que
me refiero, declirolo así para que conste. Item declaro que he sido
albacea de doña Lorenza de la Cimara cupo albaceazgo tenpo concluido
a excepción de ciertas incidencias que están pendientes en In Real Au-
diencia Pretorial de Buenos Aires y en resguardo de s u s resiil:as,
conservo en mi poder unos trastones viejos de que he instruido al
tercer albacea don Juan Nadal por s i fallczco: cuyo expediente s e halla
enteramente cerrado, arreglado y concluido. de que deberft hacerse
cargo el dicho albacea don Juan Nadal: tlecl.irolo así parn que conste.
Item declaro que he sido albacea del seíior don Rafael de la Luz. cuyo
albaceazgo se halla al concluir y sus bienes en l a mayor parte e s t i n
existentes en mi poder, loa que se entrenaran a1 correspondiente albacea
del citado señor don Rafael: previniéndose se me ha de pagar de dicha
testamentaría el cinco por ciento de albaceazgo, pero s i salao alcanzado
mando que de lo mejor de mis bienes se repongn cualquier cantidad
que adeude a la citada testamenteria. declftrolo así para que conste.
Item declaro que s i alguna persona cobrase de mis bienes cantidad.
que n o pase de cincuenta pesos se le pague, como a don Juan Alnnuel
Cluiroz el importe de unos caballos overos que le tomé. A don Calixto
Ruiz Cauna se le satisfarin quince pesos por unas terneras de diez-
mo que le compré. A don BIartin Saravia, s e le pagar611 igualmente
otros quince pesos por ganado que le compré, declirolo así parn que
conste. Item declaro que don José Cutiérrez de Arce, administrador
d e Rentas Provinciales de Rurgos, me dio trescientos pesos para ve-
nirme de España, mando que mi primer albacea luego que haya pases.
de cuenta y riesgo de mi testamentaría de lo mejor parado de mis bie-
nes, remita los enunciados trescientos pesos, por mano de mi sobrino
don Cristóbal Gómez, agente d e negocios del Supremo Consejo de In-
dias, o por el conducto de m i hermano don llanuel di, Cüernes: de-.
rlárolo asi para que conste. Item declaro que cuando se f u e para Es-
paña el señor don Andrés Nestre, otorgó en confianza a mi favor una
escritura de dos mil pesos, que le debía don AIiguel Vicente de Solá
de este vecindario, de cuya cantidad novecientos cincuenta y cuatro
pesos me pertenecían y lo restante a Su Señoria. habiendo cobrad?
mil doscientos y tantcs pesos, mando que concluida esta cobranza lo
que lo corresponda a dicho señor don Andrés AIestre se remita a
España a sus herederos, declárolo así para que conste. Item declaro
que a mi hija doña Alngdalena cuando se casó con don Román Tejada,
Ic di para aguda de las cargas del matrimonio dos mil pesos a cuenta
d e su legítima paterna y materna: mando que dicha cantidad se co-
lacione al cúmulo del caudal, declárolo para que conste. Item nombro
por tutora y curadorn de mis hijos menores con relevación de fianza
:I mi referida esposa doña Magdalena de Coyechea en atención a s u
honradez, cristiandad y amor que profesa n nuestros hijos y por s u
falta nombro de tutor y curador de ellos'a mi hijo el doctor don J u a n
de Dios Tomás Manuel de Cüemes. Item mando se hagan extrajudi-
cialmente los inventarias, tasaciones y partición de mis bienes, sin in-
tervención de Juez R e d , sino para su aprobación. Item nombro por
mis albaceas testamentarios fide comisarios ejecutores de esta ini Úl-
tima voluntad, en primer lugar a mi esposa doña Magdalena de Co-
yechea; en scgundo a mi hijo el doctor don Juan de Dios Tomás JIanuel
d e Cüemes; en tercero a mi hijo político don Román Tejada y en cuarto
mi compañero el señor contador Ministro Principal don Kicolás de
Villacorta y Ocaña para que lo que el uno no concluya el otro fenezca
a fin que después de mi fallecimiento cumplan y guarden este m i
testamento y cuanto en él llevo ordenado, pues para ello les comunico
y confiero todo aquel poder que por derecho es necesario sin que ex-
pire con el año fatal, pues les prorrogo todo el tiempo que sea preciso
para desempeñar el cargo. Y del remanente de todos mis bienes, de-
rechos, acciones y futuras sucesiones. después de cumplido y pagado
.este mi testamento, instituyo y nombro por mis universales herederos
a los citados mis hijos, parn que los hayan y gocen por iguales partes
con la bendición de Dios y la mía. Con l o cual revoco y anulo otros
.cualesquiera testamentos, codicilos y disposiciones que antes de yéste
hubiere hecho por escrito o de palabra, para que n o valgan, n i h a r a n
fe en juicio ni fuera de él, sino el presente, que quiero se guarde.
cumpla y ejecute inviolablemente como tal mi testamento y final vo-
luntad en aquella vía y forma que hayii lugar e n derecho. E n cuyo
testimonio asi lo otorgo ante el presente Escribano de S u Majestad
en esta ciudad de Salta en doce días del mes de noviembre de mil ocho-
.cientos siete. Y el señor otorgante a quien yo dicho escribano do f e
cono7.co y que se halla en su entero juicio y uso de sus sentidos según
sus concertadas razones, así lo otorgó y no firmó por no permitérselo
la enfermedad y lo hizo a su ruego uno de los testigos que lo fueron
el doctor don Inocencio Astigueta, el capitán don Pedro de Ugarteche.
,<ion hlarcos Beeche y el teniente don Antonio Aguda, vecinos de esta
,ciudad, rogados y llamados. A ruego del otorgante y como testigo doc-
- -
.ter JosC Iaocenn'o Astigiteta Testigo Pedro de Ugartecke Testigo
CÜEBIES DOCUMENTADO 203

-
Jlawo(r de BeecJie Testigo Antonio Agnrln - Ante mí JoaE Rodrig~rez,
Escribano de S u Majestad. I

[M.o. y iotocopia en N.A.]


N o t a : El testamento e s t i fechado el 1 2 de noviembre de 1807 y don
Gnbriel falleció cl 16 de ese niismo nies y afio, es decir, tres dins después.
F. nf. G.

d) INI'ENTARIO DE L A TII'SORERIA DE SALTA 1778 a 1807

1807
CAERIEL DE CllEBIES AIOSTERO
Inventario de la Tesorería de Salta. hecho con motivo
de la muerte de don Cabriel de Cüemes Montero
1778 a 1807
E n la ciudad de Salta, en diecisiete dias del mes de enero de mil
setecientos setenta y ocho años; ante mi el Escribano Público y tes-
tipos fueron presentes don Antonio de Figueroa. don J u a n Adrián
Cornejo. don Francisco Toledo Pimentel, don Antonio Cornejo, don
Lucas Allende. don Apolinar Arias, don F e r n a n d o . d e Torres y don
Francisco Gorizález San 3Iillán todos vccinos de ella, a quienes doy
f e conozco y dijeron que por cuanto, por Real Despacho dado a tres
de marzo del año próximo pasado, en el Real sitio del Pardo s e ha
dignado Su Majestad conferirle a don Cabriel de Cüemes Montero el
empleo de Tesorero. oficial Real de las Cajas de Jujuy, y respecto a
s e r preciso que antes de su recepción, preceda el d a r las fianzas l e ~ a s
k m a s y abonadas, en la f o r m ~ .dispuesta por Derecho, para la buena
Administración de la Real Hacienda, siendo ciertos y sabedores los
comparecientes, de lo que en tal caso arriesgan y aventuran haciendo
como hacen de causa y negocio ajeno suyo propio, de su libre y es-
pontánea voluntad, otorgaban y otorgaron, por la presente que se obli-
xan a d a r y pagar llanamente y sin pleito alguno a Su 3Iajestad (que
Dios guarde) In cantidad de quinientos pesos en que afianzan cada
uno, y no en mas nl referido don Gabriel de Giienlcs Jlontero, para
e n caso que por su mala administración en la Real Hacienda salpa
alcanzado, o sea. condenado a pagarlos el expresado señor Tesorero,
sin que contra 61 ni sus bienes, preceda citación, mandamiento. senten-
cia ni otra diligencia por fuero o Derecho necesaria, que sOlo, la de
resultar alcanzado, en las cuentas que debe dar, pues desde ahora
, para entonces renuncian expresamente este beneficio y remedio y quie-
ren que en sus personas y bienes se trabe la ejecución, uin necesitarse
(le excursión con el dicho principal, para que exhiban y paguen di-
chos quinientos pesos cada uno de los otorgantes que es lo único h
que se obligan y no a más cargo ni alcance, que contra el dicho don
Gabriel resulte, sea por la causa o razón que fuere pues bajo de esla
expresa condición le afianzan e n dichos quinientos pesos cada uno. Y
a la firmeza y eumplimiento de todo lo referido, costos y gastos d e
la cobranza se obligaron y obligó cada uno con s u persona y bienes,
habidos y por haber, sometiéndose a las justicias y jueces de S u RIa-
jestad, de cualesquier partes que sean, y especialmente a los seiíorcs
Gobernador y Oficiales Reales de esta provincia para que a ello los
compelan, y npremien ejecutivamente. renunciando su fuero, domicilio
y vecindad con la ley s i convenerit de jurisdictione omnium judicium,
las demds de s u favor y defensa y la general. que lo prohibe. E n cuyo
testimonio 2si lo otorgaron, y firmaron siendo testigos, don Domingo
Chdvez, don Ramón del Castillo y don Cipriano Salazar. F.rancisco To-
lcdo Pintentel. Antoaio Fernánder Cornejo. Fernando de Torres. Pedro
I~tca.9de Allende. Juan Adrián Ferrtándcz Cornejo. Félix Apoliitar Arias.
Francisco Antonio González y San Jlillán. Antonio de Figtteroa. Ante mí:
Antonio Gil Infante, Escribano Público.
Pasó ante mi y en mi Registro de Escrituras públicas, de dontlc
In hice sacar de mandato del señor Gobernador y Capithn General de
esta Provincia, en este papel común a falta del de el sello cuarto. en
Salta y febrero catorce de mil setecientos setenta y ocho años.
E n testimonio [aquí un signo1 de verdad.
Antonio Gil Infante
1)erechos gratis. Escribano Público
E n l e ciudad de Salta a primero (le agosto de mil setecientos ochen-
t a y siete años. Ante mí el escribano público de Real 1Ia:ienda y
11ienes de difuntos y de los testigos de yuso, comparecieron don J u a n
José Arias Vidaurre y don IIanuel Salvador Ferndndez vecinos de ella.
a quienes doy f e conozco y dijeron: que por cuanto han sido ha1)larlos
por don Gabriel de GUemes Nontero Tesorero Ministro Principal
de Real Hacienda de esta Provincia para que sean sus fiadores en
lugar de don Félix Apolinar Arias por s e r Regidor Alcalde IInpor Pro-
vincial y don Francisco Toledo Pimentel por haber muerto, quienes lo
fueron entre otros el año pasado de mil setecientos setenta y ocho para
que se le pudiese recibir al dicho empleo de Tesorero, que la piedad de
nuestro amable soberano, se dignó concederle por su Real despacho li-
brado en el Pardo a tres de marzo de mil setecientos setenta y seis.
I h cuya consecuencia y para que la administración de todas las ren-
t a s reales y municipales que están a su cargo, sea tan buena como lo es la
intención de Su Majestad siendo ciertos y sabedores de lo que en este
caso aventuran, haciendo como hacen de causa y negocio ajeno. suyo pro-
pio de s u libre y espontdnea voluntad otorgaban y otorgaron por la
presente que se obligaban a d a r y pagar llanamente y sin pleito alguno.
n Su RIajestad que Dios guarde, l a cantidad de quinientos yesos en
que afianzan cada uno y no en más al referido don GaSriel dc Gtiemcs
iilontero para en caso que por su mala administración en !a Real Ha-
cienda u otros ramos salga alcanzado o sea condenado a pagarlos el
expresado señor tesorero, sin que contra 61 ni sus bienes, preceda ci-
t:ición, mandamiento, sentencia, ni otra diligencia por fuero o derecho
COCIIESDOCUMENTADO

necesaria que sólo la de resultar alcanzado en las cuentas que debe


dar, pues desde ahora para entonces renuncian expresamente este
leneficio y remedio y quieren que en s u s personas y bienes s e trabe
la ejecución sin necesitarse de excursión con el dicho principal para
que cxhiban y paguen los citados quinientos pesos cada uno de los otor-
gantes que es lo Único a que se obligan y no a más cargo n i alcance
qiie contra el dicho don Gabricl resulte, sea por la causa o razón que
fuere pues bajo de esta expresa condici6n, le afianzan en los referidos
quinientos pesos cada uno. Y a la firmeza y cumplimiento de todo lo
referido, costos y pastos de l a cobranza s e obligaron y obligó cada uno,
Zon su persona y bienes, habidos y por haber, sometiéndose a las jus-
ticias y jueces de S u Majestad de cualquier partes que scan y espe-
cialmente a los señores gobernadores intendentes y ministros princi-
piles de Real Hacienda de esta Provincia para que a ello los compelan
y apremien ejecutivamente, rcnunciendo su fuero, doniiciliu y wcin-
tlnd, con las d e m i s leyes de su favor y defensa y la general del de-
recho e n forma; en cuyo testimonio así lo otorgaron y firmaron siendo
testigos don Santiago Diaz González. don Lorenzo 1\Iartíncz IIollinedo
I. don Francisco Pérez de Bulnes. Juan Josc Arios Vidaicrre. nlatittel
S d r a d o r Fci~ihiidez.Ante mí: José Antonio Molimi, Escribano Público
y de Real Hacienda.
Pasó ante mi y en mi Registro de Escrituras públicas a que me
remito y en f e de ello lo signo y firmo ante los mismos testigos ins-
trurnentales. e n Salta primero (le arosto de mil setecientos ochenta y
sicte años.
[Aquí un signo]
JosE A~itotiioiilolitiu
Escribano Público y (le Real IIacienda
E n esta Ciudad de Salta a cinco de marzo de mil setecientos no-
venta p ocho; ante mí el escribano de gobierno, guerra y r e d hacienda
de esta Provincia, en propiedad y escribano y notario real de estos
reinos, y de 10s testigos de yuso, fueron presentes don Antonio de
Fipueroa, don J u a n José Arias Vidaurre, don Manuel Salvador Fer-
xíndcz, don Severo de Isasmendi, don Francisco Poveda, don J u a n
S a d a l y Guarda, don Apolinar Figueroa y don Antonio Aguela. todos
vecinos de esta ciudad. a quienes doy f e conozco y dijeron: Que ha-
Ilindose inteligenciados de estar mandado por el excelcntísimo señor
virrey de estas Provincias en orden de diecinueve de enero Último, re-
ferente a l a Real de treinta de marzo del año anterior. de que los se-
ñores BIinistros de Real Hacienda renueven sus fianzas; lo que así se
ha dispuesto por esta Intendencia e n auto de hoy. P o r tanto, siendo
los comparecientes nombrados de fiadores, por don Gabriel de Giiemes
Nontero, Tesorero BIinistm Principal, y aprobados por de conocido abo-
no, y arraigo, por el señor Intendente en el dicho s u auto. Ratificándose
el expresado don Antonio de Figueroa, en la fianza que otorgó e n
siete de enero de mil setecientos sctcnta y ocho, e igualmente don J u a n
Josb Arias y don 3Ianuel Salvador Fernández, e n primero de a ~ o s t o
d e ochenta y siete, por esta misma razón. Estos tres ahora de nuevo
y los otros cinco nominados, se obligan, como más haya lugar en derecho,
a que en crialesquiera tiempo quc el contenido don Gabriel de Güe-
mes saliese alcanzado en los Ramos que maneja como tal Tesorero, d e
los de Real Hacienda y como administrador general de los de Sisa.
ratisfarin los cargos líquidos que le resulten, cada uno de los otor-
gantes, en la cantidad de quinientos pesos y no mds, en esta manera:
los tres primeros. desde las fechas de aquellas escrituras; y los cinco
individuos restantes, a los expresados cargos que desde hoy se decla-
rasen por las cuentas sucesivas y todos hasta que no se les cancelen
cstos instrumentos; en cuya conformidad. haciendo dichos otorgantes.
de causa y negocio ajeno, suyo propio y sin que sea necesario que en
ningún tiempo se haga excursión contra los bienes del referido don
Cabriel de Güemes, hipoteca cada uno lo que tiene y pueda haber y
Rcan equivalentes y de mejor expendio, p a r a cubrir los dichos cargos
que resultaren, hasta en la cantidad de cuatro mil pesos que les cabe
a dichos quinientos pcsos, con más las costas y costos de la cobranza.
Dando poder a las justicias de Su IIajestad y en particular al señor
Intendente de esta Provincia, p a r a que s e proceda ejecutivamente con-
t r a sus expresados bienes y personas, como s i esta escritura fuera
nentencia pronunciada por juez competente, consentida por las partes.
pasada en autoridad de cosa juzgada y no apelada; para lo cual, re-
nuncian s u fuero, domicilio y vecindad; la ley que dice que el que
recibe la utilidad y provecho de la cosa, debe s e r primero reconvenido
cn juicio la s i convenerit de Jurisdictionc omnium Judicum, la Última
pragmática de las sumisiones y todas las demfis leyes, fueros y privi-
legios de s u favor, con la general del derecho en forma que lo prohibe.
E n cuyo testimonio así lo otorgaron y firmaron, siendo testigos don
J u a n de Zenarruza Veitia. don Ignacio de Longaray y don Pedro 11s-
tamoros; y de ello doy fe. Antonio de Figueroa. J u a n Josd Arias Vi-
daurre. Manuel Salvador Fernández. Nicolás Severo de Isasmendi.
Francisco Poceda. Juan Nadal U Guarda. Apolinario de Figueroo.
Antonio de Agilela. Don J u a n Antonio Moro.
Pasó ante mi y en mi registro; en f e de lo cual, autorizo y firmo
cl presente, e n el dia dc s u otorgamiento.
[Aquí un signo]
Don J u a n Antonio Noro
Escribano de Gobierno, Guerra y Real Hacienda

E n la ciudad de Salta e n cinco dins del mes de noviembre de mil


ochocientos y dos años; ante m í el escribano público de cabildo y co-
mercio y de los testigos de yuso, fueron presentes don Sinforoso José
de Rioja; don José Domingo Garcia Torres; don José Ignacio de Go-
rostiaga; don Marcos de Beeche; don José María de Larramendi; don
Mate0 Gómcz Zorrilla; don Nicolis Severo de Isasmendi y por último
el señor Alcalde Ordinario de primer voto de ella Francisco Poveda.
todos vecinos a quienes doy f e conozco y dijeron: Que por cuanto se
halla próximo n recibirse del empleo de Ninistrc contador principal
d r Real Hacienda el señor don Nicolás de Villacorta y Ocaña, a cuya
recepción deben preceder las correspondientes fianzas, que ha de otor-
s a r d e abono, a los alcances que le puedan resultar del manejo y ad-
ministración de los caudales de Su Blajestad. P o r tanto, en aquella
r í a y forma que más haya lugar en derecho siendo ciertos y sabedores
cada uno respectivamente d e lo que e n este caso les compete; de s u
libre y espontánea voluntad y sin que s e haya interpuesto el menor
respeto, n i otro motivo; otorgan por la presente que se obligan y cons-
tituyen todos juntos y cada uno de por s í i n solidim a d a r y p g a r
siempre y cuando que le resulte algún alcance a dicho señor Alinistro
Contador, hasta la cantidad de cuatro mil pesos, que corresponden a
quinientos a cada uno de los comparecientes, queriendo y consintiendo
e n que, cuando llegue el caso, se les apremie y ejecute a s u oblación y
pago, sin que sea necesaria la excursión, ni o t r a diligencia por fuera
y derecho precisa, pues a s u efectivo cumplimiento se obligan en la
más bastante forma, someti6ndose a las justicias y jueces de Su IIa-
jestad, que de este asunto deban conocer para que a ello los compelan
y apremien por todo rigor ejecutivo, renunciando s u fuero, domicilio
y vecindad, con las leyes de s u favor y defensa y la que prohíbe s u ge-
neral renunciación. E n cuyo testimonio así lo otorgaron y firmaron
siendo testigos, don Santiago Díaz González, don J u a n Jacinto Brun
y Blas de Ceballos. Francisco Porcda. Jos4 Ignacio de Co~ostiaga.l i a r -
cos de Beeche. Nicolás Secero de Ises~nendi. nfateo C6nle.z Zorrilla.
JosE Alarla de Larramendi. Sinforoso JosE de Rioja. JosE Domiwgo
C a r d a y Torres. Ante mí: nlarcelino JIigttel de Silrn, Escribano pú-
blico de Cabildo y Comercio. Entre renglones: y cuando, vale=
Concuerda con la escritura original de s u tenor n que en lo ne-
cesario me refiero; y a pedimiento del señor interesado. doy el pre-
vente en Salta a primero de marzo de mil ochocientos seis años.
Alarcelino dligttel de Silca
Escribano Público de Cabildo y Comercio
Ilerechos con el
papel diez y medio reales.

En la Ciudad de Salta en quince días del mes de marzo de mil


ochocientos seis años. Ante mí el escribano Real de Gobierno, Guerra
y Real Hacienda y de los testigos de yuso, fue presente don Francisco
de Aráoz de este vecindario, a quien doy f e conozco y dijo: Que por
cuanto se halla mandado por los señores contadores del Tribunal y
Audiencia Real de Cuentas de la Capital de Buenos Aires en veinte de
diciembre del año próximo pasado para que los señores ñlinistros de
Real Hacienda renueven sus fianzas y respecto de haber fallecido don
Sinforoso JosE de Rioja uno de los fiadores que afianzaron al AIinistro
Contador de Real Hacienda don Nicolás de Villacorta y Ocaña, al
tiempo de recibirse del empleo de AIinistro Contador de estas Reales
Cajas en el año pasado de mil ochocientos dos. P o r tanto e n aque-
lla vía y forma que más haya lugar en derecho, estando cierto de lo
que en este caso le compete de s u libre y espontánea voluntad y sin
que se hayn interpuesto el menor respeto n i otro motivo, otorga por
la presente que s e obliga y constituye junto con los demás fiadores
a d a r y pagar siempre y cuando que le resulte algún alcance a dicho
208 LUIS C ~ ~ E ~ I E S

señor Ministro Contador hasta la cantidad de quinientos pesos en que


l e afianzó el finado don Sinforoso José de Rioja, s u b r o g h i o s e el otor-
gante en lugar de dicho finado. queriendo y consintiendo e n que cuando
llegue el caso se le apremie y ejecute a s u oblación y pago sin que
sea necesario la excursión, n i otra cosa o diligencia por fuero o derecho
precisa, pues a s u efectivo cumplimiento se obliga en la m i s bastante
forma sometiéndose a las justicias de S u Majestad que de este asunto
deban conocer para que a ello lo compelan por todo rigor ejecutivo,
renunciando s u fuero. domicilio y vecindad con las leyes de s u favor
J' defensa y la que prohibe s u general renunciación en cuyo testimonio
así lo otorg6 y firmó siendo testigos don J u a n Manuel de Ojeda y don
Alanuel Antonio Gallegos. Francisco Ardor. Isidoro de Alatorrax. Es-
cribano R e d de Gobierno Guerra y Real Hacienda.
Concuerda con la escritura original de s u tenor que corre en el
rrotocolo de mi cargo de este presente año, a fojas veintitrés, a la que
en caso necesario me refiero, va cierto y verdadero y corregido y no
enmendado; y en virtud de lo mandado e n el decreto de diecisiete de
febrero del corriente año, hice sacar el presente que autorizo, rubrico,
signo y firmo, en Salta n veinte de marzo de mil ochocientos seis años.
[Aquí un signo]
Isidoro de Jlatorras
Escribano Real de Gobierno,
Guerra y Real Hacienda
E n la ciudad de Salta, en veinte dias del mes de febrero de mil
ochocientos seis años. Ante m í el Escribano Real de Gobierno. Guerra
y Real Hacienda y de los testigos de yuso fueron presentes don .José
Innacio Gorostiaga. como apoderado de don Nicolf~s Severo de Isas-
mendi, don Francisco Poveda, don Juan Piadal y Guarda, don Apolinar
Fixueroa. don Antonio Aguela. don Pedro José Saravia. don Lorenzo
de Goyechea 'y don h'arciso de Figucroa, todos vecinos de esta ciudad
n quienes doy f e conozco y dijeron: Que halliindose inteligenciados de
lo proveído por los señores'contadores mayores del tribunal y Audien-
cia Real de Cuentas de la Capital de Cuenos Aires en veinte de di-
ciembre del año próximo pasado, para que los señores Ifinistros de
Rcal Hacienda, renueven sus fianzas. P o r tanto, siendo los compare-
cientes nombrados de fiadores por don Gabriel de Güemes Alontero.
Tesorero Ministro Principal de Real Hacienda de esta ciudad; ratifi-
cándose los dichos don Jos6 Ignacio de Gorostiaga. don Francisco Po-
veda. don J u a n h'adal y Guarda, don Apolinar Figueroa y don An-
tonio de Aguela en la fianza que otorgaron en cinco de marzo de mil
setecientos noventa y ocho por esta misma razón. Estos cinco ahora
de nuevo y los t r e s restantes nominados, se obiixan como m á s haya
lugar en derecho, a que en cualesquiera tiempo que el contenido don
(hbriel de Güemes IIontero saliese alcanzado en los ramos que maneja,
como tal Tesorero de los de Real Hacienda y como Administrador Ge-
neral de los de Sisa, satisfaran los cargos líquidos que le resulten.
cada uno de los otorgantes en la cantidad de quinientos pesos y no
m5s en esta manera, los cinco primeros desde la fecha de aquella es-
CÜEBIES DOCUAIENTADO 209

critura y los tres individuos restantes, a los expre~adoscargos, que


desde hoy se declarasen por las cuentas sucesivas y todos hasta que no
se lea cancelen estos instrumentos. E n cuya conformidad, haciendo
dichos otorgantes, de causa y negocio ajeno, suyo propio y sin que sea
necesario que en ningún tiempo se haga excursibn, contra los bienes del
referido don Gabriel de Giiemes; hipoteca cada uno los que tiene y pueda
haber y sean equivalentes y de mejor expendio para cubrir los dichos
cargos que resultaren, hasta e n la cantidad de cuatro mil pesos que les
cabe n dichos quinientos pesos, con mfis las costas ; y costcs de la co-
branza, dando poder a las justicias de S u Majestad y en particular
sl señor Intendente Gobernador y Capitin General de esta Provincia.
para que s e proceda ejecutivamente contra sus expresados bienes Y
personas, como s i esta escritura fuera sentencia pronunciada por juez
competente, consentida por las partes, pasada e n autoridad de cosa
juzgada y no apelada; para lo cual renuncian su fuero, domicilio y
vecindad, la ley que dice que el que recibe la utilidad y provecho de la
cosa, debe s e r primero reconvenido en juicio, l a siconvenerit d e juris-
dictionem, omnium judicum, la última pra~mfiticn de las sumisiones
y todas las demis leyes, fueros y privilegios de s u favor, con la general
del derecho en forma que lo prohíbe. E n cuyo testimonio así lo otorgaron
g firmaron. siendo testigos, don J u a n 3Ianuel de Ojeda. don Manuel
..\ntonio Gallegos y don Mate0 Jimeno, como apoderado de don Nicolfis
Severo de Isasmendi por hallarse éste ausente en España. José Ignacio
(le Gorostiaga, Lore~zzoIgnacio de Go~ecliea. Apolinario de Figlteroa.
Jttan Nadal Guarda. Antonio de Aguela. Francisco Poveda. h'arcim
de Figzteroa. Pedro JosE de Saraeia. Isidoro de Natorrm. Escribano
Real de Gobierno, Guerra y Real Hacienda. Entre renglones: para
cubrir los dichos cargos que resultaren hasta, vale.
Concuerda con l a Escritura original de s u tenor que se halla
otorgada en el Protocolo de m i cargo, a la que en caso necesario me
refiero; va cierto y verdadero corregido y enmendado, y, e n virtud d e lo
mandado e n decreto de diecisiete del mes próximo pasado proveído a
continuación del auto acordado por los seííores Contadores DIayores
del Tribunal y Audiencia Real de Cuentas de la Capital de Buenos Aires,
hice sacar el presente, que autorizo, 'signo, rubrico y firmo, en Salta
y marzo veinte de mil ochocientos seis años.
raqui mi signo]
Isidoro de Natowaa
Escfibano Real de Gobierno, Guerra y Real Hacienda

Señor Gobernador Intendente Interino. Como Contador Ministro


Principal de Real Hacienda de esta Provincia, doy parte a Usía que
ncaba de fallecer don Gabriel d e GUemes Dlontero, Tesorero Ninistro
Principal de ella bajo de disposición testamentaria, con cuyo motivo
linso a manos d e Usia con el debido respeto las llaves de l a teaore?ía
que estaba a s u cargo para que en s u consecuencia se sirva l a justifi- ,
cación de Usia tomar las providencias convenientes con arreglo a real
ordenanza. Dios guarde a V.S. muchos años. Contaduría Principal
de Salta quince de noviembre de mil ochocientos siete l. Nicolás de
Villacorta u Ocaíía. Señor Oidor Honorario doctor Don José de ñledeiros.
Salta quince de noviembre de mil ochocientos siete.
Decreto. Hágase saber al oficial primero de la Real Tesorería
Principal de esta Capital don Antonio de Atienza, que
para entrar a sustituir las ["testado fianzas"] veces y funciones del
empleo de Ministro Tesorero Principal vacante por muerte del propie-
tario don Gabriel de Giiemes Montcro, proceda a otorgar la fianza que
corresponde de cuatro mil pesos en la forma legal acostumbrada. Fecho
y prestado el juramento prevenido por la ley nueve. título cuatro.
libro octavo de las recopiladas de estos reinos se recibirá de los cau-
dales de Su BIajestad bajo de las formalidades de ordenanza. entre-
gándosele previamente las cuatro llaves con que ha acompaiíado el
Contador Ministro Principal el presente oficio y con arreglo o la ley
doce dc los citados título y libro, se trasladará a vivir en la casa
donde existe la Tesorería, manteniéndose entretanto custodiadas las
dichas llaves en esta Intendencia. a la que avisarir el Ministro Contador
- Principal, s i ocurriese urgencia quc las demande. JosE fIc filcdeiros.
Isidoro de n l a t o r r a ~ ,Escribano Real de Gobierno, Guerra y Real Ha-
cienda. Incontinenti hice notorio al señor Contador
Diligencia. BIinistro Principal don NicolBs dc Villacorta y Ocaiía
el auto que antecede, doy fe. dlatorrns. Y luego hice
saber el propio auto al oficial primero don Antonio de Atienza, quien
inteligenciado de él me entregó un boleto para extender la correspon-
diente escritura en que d a por sus fiadores para las resultas del nia-
nejo que se va a poner a s u cargo a don Francisco Javier dc Figucroa,
don Pedro José de Ibaceta; don AIateo Gómez Zorrilla y don J u a n
Nada1 y Guarda y lo firmó de que doy fe. Antonio Aticnzn. Matotras.
Salta, dieciséis dc noviembre de mil ochocicntos sicte.
Decreto. Respccto a quc los cuatro fiadores propuestos son, por
notoriamente abonados y arraigados del contento del
Ninistro Contador de Real IIacienda, que lo h a expresado así al Es-
cribano Actuario y también de la satisfacción de esta Intendencia,
procédase dasdc luego a extender la prevenida escritura de fianza; y
sentada la bastante nota de ccnstancia, trdigase para la diligencia del
juramento y lo demás mandado. Medeiros. Isidoro de Il1ator1v.s.
Con la misma fecha queda otorgada la escritura mandnd:i
Nota. en el Protocolo de Real Hacienda que corre a m i cargo,
doy fe. iilatoi~as,escribano. E n la ciudad dc Salta en dieci-
siete días del mes de noviembre de mil ochocicntos siete aiíos, estando
S u Señoría e n su posada y audiencia pública, fue presente don Antonio
Atienza. oficial primero de esta Real Caja a quien por su Señoría,
por ante mí, le recibió juramento que lo hizo y celebró por Dios Nuestro
Señor y una señal de cruz según derecho y con arreglo a la Ley d e
Indias, bajo del cual ofreció usar fiel y legalmente el empleo de Ni-
nistro Tesorero Principal de ésta dicha Real Caja a que ha sido

1 Por este docuniento se ve que don Gabriel de Güemes 'hlontero. padre


de Martin BIiguel Güemes, murib el 16 de noviembre de 1807. D.G.
CUEIIES DOCU&IENTADO 211

nombrado por fallecimiento del propietario don Gabriel de Güemes


IIontcro; firmándolo con Su Señoría por ante m i de que doy fe. José
de dledeiios. Anto?tio Atienza. Isidoro d e ]Matoiras, Escribano Real
de Gobierno, Guerra y Real Hacienda. E n el mismo <lis y en mi presen-
cia hizo entrega de las cuatro llares el señor Gobernador Intendente
a1 señor Tesorero Ministro Principal interino don Antonio Atienzn
y se le pasó testimonio íntegro de esto con el correspondiente oficio
para las demás funciones prevenidas en el auto, doy fe. iilntorias.
Concuerda con el original de s u tenor a que me refiero y de man-
dato verbal de Su Señoría hice sacar el presente que autorizo, rubrico,
~ i g n oy firmo, en Salta a diecisiete de noviembre de mil ochocientos
nietc años.
[Aquí un signo]
IsNloro dc dlatoiias
Escribano Real de Gobierno, Guerra y Real Hacienda

Teniendo el oficial primero don Antonio Aticnza otorgadas las


correspondientes fianzas para entrar al manejo de estas Reales Cajas
que le corresponde por sustitución de mando, mediante el fallecimiento
del Tesorero Ministro Principal dc ellas don Gabriel de Cüemes IIontero
y prestado el juramento ordenado por la Ley Real de Indias, procederá
\'m. en consorcio del referido Atienza y del abogado Defensor Fiscal
de Real IIacienda a practicar los debidos inventarios a que yo con-
currire con el escribano de este Gobierno Intendencia desde el día de ma-
ñana, y, cuando s e t r a t e de asuntos y administración de Sisa asistir&
a(1ern.l~de todos los ya expresatlos el Diputado Interventor de ella; p
para que en esa oficina principal haya la debida constancia de lo
actuado hasta el día en este acaecimiento, adjunto paso a Vm. el bas-
tante testimonio, estando advertido de que para que a continuación
(le 61 y el presente oficio se formcn dichos inventarios, ya he cntrerado
al mencionado Atienza las cuatro llaves de esas Reales Cajas que \'m.
me pasó con oficio de quince de este mes.
Dios guarde a Vm. muchos años. Salta y noviembrc 17 de 1807.
Jo.qF dc Aledciros

Señor Ministro Contador don h'icolás de Villacorta y Ocaña.


E n esta Tesoreria Principal de Salta a dieciorho de noviemlme
de mil ochociendos siete; habiéndose personado en ella el señor Go-
bernador Intendente interino de esta provincia con e l diputado Inter-
ventor del Ramo de Sisa, el Promotor Fiscal de Real Hacienda y Rentas
y yo el actuario, estando ya en 12 misma Tesoreria los señores Mi-
nistros Principales de Real Hacienda don Nicoliis de Villacorta y Ocaiia
Contador y don Antonio de Atienza Tesorero interino, mandó S u
Señoría a virtud del oficio que antecede y del testimonio que 61 rela-
ciona, s e precedie~e al inventario providenciado para la recepción y
responsabilidad del manejo de estas Reales Cajas, en que va a entrar
el citado Tesorero interino. en cuya consecuencia sacó éste las llaves
que ya le estaban entregadas y el mencionado Contador las suyas y
abierta la Real Caja y sacados los tres libros manuales, los tres mayores
comunes generales, los dos administratorios de Sisa y los dos auxiliares
(le Alcabala. P o r los primeros sumado el respectivo margen de las
ciento treinta y cuatro partidas sentadas desde fojas una hasta 35,
resultó el cargo de doscientos sesenta y cinco mil quinientos treinta
y cuatro pesos t r e s y cuartillo reales, y, agregados a ellos doscientos
ochenta y cuatro pesos dos y medio reales que según los auxiliares
de Alcabalas se han cobrado en este mes y cuatrocientos treinta y dos
pesos que se han recaudado en ídem, conforme a los Administratorios
d e Sisa, cuyas dos últimas partidas aún no se hallan incorporadas e n
los dichos manuales, resultó el cargo total de doscientos sesenta y seis
mil, doscientos cincuenta pesos cuatro tres cuartillo reales, dc los que
rebatidos ciento sesenta mil novecientos noventa y seis pesos ~ e i s
y medio reales que según la suma hecha hasta el día de ayer en los
precitados libros manuales en el margen de la (lata, resulta la exis-
tencia de cicnto cinco mil doscientos cincuenta y tres pesos seis y cuartillo
reales, los que aparecen liquidos reconocidos los mencionados libros
mayores y existentes en In forma siguiente .......... 105.25S.C>%
1.h caudal existente en las Tesorerías Meno-
res treinta y seis mil doscientos veinte y
dos pesos seis y tres cuartillos reales ....
E n entregado por Buenas Cuentas provisio-
nales, treinta y cinco mil quicientos ochenta
y dos pesos seis y t r e s cuartillos reales

Suma del frente ........................


R n dieciséis barras de plata que se contaron,
veintidós mil ochocientos dos pesos ...'...
E n plata efectiva en caja que se contó y recontó, diez
mil seiscientos cuarenta y seis pesos uno y tres cuar-
tillos reales ........................................ 10.64G.l ?í
Y resultando dz las operaciones hasta aquí practicadas, cubierta la
existencia líquida de que v a hecha referencia, el Alinistro Tesorero
interino don Antonio Atienza s e hizo cargo y responsable de sólo lo
existente en barras de plata y dinero efectivo contado e n esta Re;tl
Caja. importante uno y otro, treinta y tres mil cuatrocientos cuarenta
y ocho pesos uno y tres cuartillos reales y de los libros que hasta aquí
van relacionados, con protesta de no responder de nada de lo demBs
que ellos contienen en cuanto a deudawhasta que se cobren, aunque
s i se reata a agitar la cobranza de todas, como es de peculiar obliga-
ción; y del mismo modo protesta no s e r responsable de la existencia
que se señala haber en la Tesorería Menor de J u j u y del cargo de don
J u a n José de Sandoval, n i del manejo que ha tenido hasta el día y
tenga en adelante hasta que no s e dé cuenta con pago e n esta oficina
principal, como lo pide al presente en la más bastante forma r s u
señoría el señor Gobernador Intendente Interino lo que puntualizado
en estando dicho Tesorero interino satisfecho de los procedimientos
y seguridades de dicho Sandoval. correrá el riesgo sucesivo de su
manejo; y siendo y a la una del día mandó Su Seiioría suspender esta
cperaeión para proseguirla oportunamente cuando las ocrirreneias
del Gobierno Intendencia lo permitan y lo firmó Su Señoria y meree-
des de que doy fe.
José de Medeiros. Sicolás de Villacorta U Ocuiin. Alttosio A l ienzn.
José Marfa de Larraniewcli. Bachiller JosE A l e j a ~ ~ d de
r o Palacios. Isicloro
de J l n t o ~ r a s ,Escribano Real de Gobierno, Guerra y Real IIacienda.
S a l h . 2'23 de noviembre de 1807.
Visto este expediente, que acaba de traerme al despacho el escri-
bano nctuario, devu6lvase a los Ninistros principales de Real Hacienda,
para que continúen el inventario pendiente, conciliando s u trabajo con
cl urgente diario de las Reales Cajas de s u cargo; y, en estado, den
cuenta a esta Intendencia.
JosE de Jledeiros. Isidoro de iilatoi~as,Escribano de Gobierno y
Real Hacienda.
E n .el mismo dia devolví este expediente a los señorcs Bfinistros
de Real Hacienda, doy fe. Matorras.
E n la Ciudad de Salta a dos días del mes d e diciembre de mil
ochocientos siete, habiéndose personado el señor Gobernador Intendente
interino en esta Tesorería Principal con el abogado fiscal de Real
IIncienda, estando en ella los señores Ministros Principales de Real Ha-
cienda, que l a manejan en la actualidad, por ante mi el presente escri-
Iiano s e dio principio a In continuación del Inventario pendiente en In
forma siguiente:
Primeramente se reconoció el libro particular de Tesoreriz de la
Administración de los Propios Arbitrios de esta Ciudad Capital y s u
Provincia y por 61 resultó el total cargo de ocho mil .~ehocientospesos,
un real, señaladamente. I

P o r sobrantes de dichos ramos de esta Ciudad ............


6.743.5 ?.í
P o r ídem de la de Jujuy ............................. 624.7
P o r productos del 4 p y& de toda la Provincia ............ 1.431.4 l,.i

E n seguida se pasó a sumar todas las partidas de d a t a y s e en-


contri> aseendian.a la totalidad de ocho mil tresciento? setenta y seis
yesos cuatro y cuartillo reales a saber:
P o r gastados de los productos de S d t a .............. 6.847.-3í
Idem de los de Jujuy .....................
........... 08.7
Idem de l a entrada del 4 p 5;. de la provincia............ 3.430.4 '/?

Y rebatida dicha data del mencionado cargo, resultó deber existir


en dinero efecttivo cuatrocientos veintitrés pesos, cuatro y tres cuar-
tillos reales con lo que dando Su Señoría la llave que le corrcsr>onde
y tiene d e las respectiva caja y los dos señores Ministros Principales
las suyas abierta, se encontraron p contaron en plata sellada los referidos
cuatrocientos veintitrfs pesos cuatro y tres cuartillos redes.
214 LUIS C U E ~ S

l t e m se reconocieron todos los pliegos de papel sellado de bienios


pasados que existen en estos Reales Almacenes y los que s e dan por
del bienio corriente a fojas 38 y 30 del libro común gcneral de esta
oficina del presente año, importantes cinco mil trescientos trece pesos
u n real, y e n luuar de s e r todos de los sellos que se expresan a dichos
folios, se encontró ser de los siguientes:
Sellos Pliegos Valores
19 ............... ...............
112 672
2'3 ............... ...............
2204
...............
3306
3'3 ............... 2480 1240
4'3 ...............
- -...............
1522 95-1
Totales
...... 5.313.1.
Item se encontraron en seis cajones., ocho quintales, ochenta y dos
libras, seis onzas, de Azogue de Europa. que a setenta y tres pesos
quintal. importan, seiscientos cuarenta y cuatro pesos tres redes.
Item se reconocieron y contaron las bulas de la Santa Cruzada
a saber.
A'Q btrla.~ Vulor
De a 3 pesos .......... 117 .......... 351
Vivos ........ De a 12 reales ........
.... 547 ..........
.......... 820.4.
De a 2 v2reales L. 98 30.5.

.....( D e a 6 reales .......... 208 .......... 156 -


Difuntos )De a 2 45 reales ....... 277 .......... 117.6 'h
... De o 3 reales .......... 60 .......... 22.4.
Lacticinios De a 12. reales
-- - ......... 40 .......... 60.
De composición De a 18 resles ........ 300
- .......... - lh
675
2233.3

Cuyo importe de dos mil doscientos treinta y tres pesos tres y medio
rcales, s e encontró en las bulas de las clases y tasas que quedan refe-
ridas y no en las que expresa el Libro Mayor corriente a fojas 41.
Item de conformidad con lo demostrado en el referido Libro Blayor,
se encontró en la especie de Indultos cuadragesimales l a cantidad de
cuatro mil setecientos cincuenta y un pesos. e n esta forma: Catorce
mil indultos de la tasa de a dos reales; doscientos setenta y tres de l a
de a dos pesos y setecientos cinco de la d e ocho reales.
Item en el modo y forma que menciona el libro mayor común Re-
neral de esta Tesorería Principal de este año, s e vio l a demostración
de deudas en la cantidad total dc que se h a r i mención.
Deudores a cruzada .............
.................... fojas 45 ........
...
7467-3
Idem a Sisa fojas GG y 67 63367-4
Idem a buenas cuentas proi*isionales fojas 45 y 60 ... 35582-6
Idem a tributos ................ fojas 49 ........
Idem a azogue de Europa ........ fojas 51 ........
ldem a Real Hacienda e n común fojas 52 ........
Deuda del Teniente de Jujuy don
J u a n José Sandoval............. fojas E3 .....
Idem del de Tucumán don IIanuel
Antonio I'ereyra ................ fojas 54 .....
Idem del de Santiago don José An-
tonio Mpez de Velazco ........... fojas 55 ........
Itlem del de Catamarca don Fran-
cisco Acuña .................... fojas 5G ........
ldem deudores a papel sellado .... f o ~ a s58 ........
ldem a indultos ................ fojas 59 ........

Y ascendiendo el total de deudas de que va hecha referencia n 1%


cantidad de ciento sesenta y cuatro mil novecientos cincuenta p tres
pesos siete y medio reales, no habiendo más caudal, efectos, n i deudas
que anotar, se procedió a inventariar los muebles p útiles del servicio
de esta oficina, como propios de S u Majestad, e n l a manera siguiente:
Primeramente un lienzo con el retrato de h'uestro Católico Monarca
el señor don Carlos 39 (que de Dios haya).
Item un dosel de damasco carmesi, con s u respaldo de lo mismo
y fleco de seda de bastante uso.
Item un tintero de platn viejo, con peso de seis onzas.
Item una caja grande antigua con tres llaves, donde se custodian
los intereses de Su AIajestad.
Item un estante viejo con cerrojo y llave corrientes..
Item tres dichos que forman un cuerpo y en ellos se hallan colo-
cados los libros reales y todos los demás papeles y documentos de esta
oficina.
Item tres mesas. la una vieja y las dos restantes de buen uso y
con dos cajones a los lados.
Item dos .papeleras de cedro con sus cerraduras, la una con llave
-

corriente.
Item seis sillas, (los de nogal y las otras cuatro de baqueta de
Cochabamba.
Item tres tomos truncos y muy maltratados de las leyes de Indias,
forradas en pergamino.
Item un marcharno de plata con las armas reales.
Y n o habiendo otra cosa más que inventariar propias de Su BIa:
jestad se concluyó esta diligencia que firmó S u Señoría y nlercedes
r o r ante m i de que doy fe.
JoaP de aledeiros. Nicolás de Villacorta y Ocaiia. Antonio Atienzn.
Rachiller José Alejandro de Palacios. Ante mi, Isidoro de illatorrns.
Escribano Real de Cohierno, Guerra y Real Hacienila.
[M.O. y fotocopia en N.A.]
GENEALOGIA MATERNA
Narín Magdalena d e Goyechea y la Corte, madre del gene-
ral Gücmes nació en Jujuy en 1764 y cra hija del maestrc de
campo don Martin d e Goyechea y de doña Ignacia de la Corte
j7Rosas, nacidos ambos en Jujuy.
Casó en primeras nupcias con don Gabriel de Güemes hIon-
tero en Jujuy el 31 de mayo de 1778. De este matrimonio tuvo
por hijos: 19, el Dr. Manuel de Güemes, n. en Jujuy el 8 de mar-
zo de 1783, c. el 18 cle febrero de 1818 con Ecrnardina BIartínez
de Iriarte; 29, general Martín Miguel de Güemes, n. en Salta el
8 de febrero de 1785, c. el 10 de julio de 1815 con Carmen Puch;
59, Magdalena Güemes, n. en Salta el 13 de diciembre de 1787,
c. el 24 de octubre de 1803 con don Rom6n Tejada; 49, Fran-
cisca Güemes, c. el 30 de abril de 1809 con don Fructuoso de
Figueroa; 59, Gabriel Güemes; 69, coronel JosC Güemes, b. el 8
de octubre cle 1803, c. con María Angela Carrillo y I36rcena; 79.
Benjamín Güemes; 89, Isaac Güemes, c. el 16 de febrero de 1834
con Isabel d e Figueroa y Cornejo; 99, Napoleón Güemes, b. el
19 de noviembre de 1805. c. con Eenedictn Nadal.
Doña María Magdalena enviudó de don Gabriel de Güemes
3lontero en 1807 y casó en segundas nupcias con el coronel don
12rancisco de Tineo, de cuyo matrimonio tuvo por hijo a Cuper-
tino Tineo, fallecido en la infancia.
Doña bIaría RIagdalcna falleció en Salta a los noventa años
en 1853.
Poseemos en original los "Autos seguidos en la muy leal y
constante ciudad de San Salvador de Jujuy ante el juzgado ordi-
nario de segundo voto de la genealogía de doña María hlagdalena
de Goyechea", y, "por cucrda separada, varios documentos que no
hubo tiempo de presentar para sil agregación, año 1791". de los
cuales damos a continuación un extracto y copiamos por extenso
cn nuestro Anexo Primero.
1. "Autos seguidos en la muy leal y constante ciudad dc San
Salvaclor de Jujuy ante el juzgado ordinario cle segundo voto (le 1s
~enealogíade doña María Magdalena de Goyechen", y, "por cuerda
separada, varios documentos que no hubo tiempo de presentar
para su agregación". Año 1791. M. o. y fotocopia en N. A.
Tanto los autos como los documentos agregados posterior-
- mente están precedidos por índices enunciativos de sus respectivos
temas, debidos a don Gabriel de Güemes Montero, que fue quien,
como cónyuge, tramitó las actuaciones. Nosotros presentamos aquí
el resumen de unos y otros documentos, valiéndonos, en cuanto
a los primeros, de expresiones textuales tomadas, ya de su índice,
ya de su contexto, y, en cuanto a los segundos, de síntesis hechas
por nosotros. E n ambos casos y entre paréntesis, posponemos al
nombre de cada ascendiente de doña María Magdalena el mismo
número que por nuestra cuenta hemos asignado a cada cual en el
cuadro genealógico que publicamos.
He aquí nuestro resumen:
1QLos autos:
a ) "Sumaria información de Limpieza de sangre a favor de
la contenida doña María Magdalena de Goyechea (nQ l ) , en que
se califica su nacimiento y nobleza, y los méritos de sus acen-
dientes legítimos".
b) "Testamento de don Martín Miguel de Goyechea (nQ 21,
hijo legítimo de don Miguel Esteban (nQ4), en que declara por
su hija legítima a doña Naría Magdalena en el matrimonio que
contrajo con doña Ignacia de la Corte y Rosas (nQ3). como haber
casado la dicha doña María Magdalena con don Gabriel de Güe-
mes XIontero. hijo legítimo de don hlnnuel de Güemes Montero
Campero de Sorrevilla y de doña Francisca de Bárcena Gómez
Campero, naturales del lugar de Abionzo, valle de Carriedo, del
obispado de Santmder en Espafia". Según el testamento, el cau-
sante era "ErIaestre de Campo".
c) "Bautismo de don Alartin Miguel de Goyechea (nQ 2).
hijo legítimo de don Miguel Esteban de Goyechea (nQ 4 ) y de
doña BIariana de Argañaraz (nQ6), y padre de la expresada doña
María Magdalena".
d ) "Los servicios olít tic os Y militares del Comisario General
de caballería don 31igÜel ~ s t e b i nde Goyechea (con entradas a l
Chaco a sus propias expensas) (nQ 4), y los de su padre el general
don Martin de Goyechea (nQ8). abuelo y segundo abuelo paternos
de doña María Magdalena, así como los del hIaestre de Campo
don Antonio de la Corte y Rosas (nQ 6), abuelo materno de la
misma".
e ) "Confirmacih de don JosC Antonio de Goyechea, tfo
abuelo paterno de la contenida doña RIagdalena, hijo legitimo de
don Martín Goyechea (nQ 8)
c1c la hlota" (nQ 9). '
. Y- de doña María Rodrínuez
- Vieira
f ) "Casamiento Y velatorio del reneral don BIartín de Goue-
chea, katural de la &Ha de Bera eñ cl reino de Navarra, cijo
GUEJIES DOCUMENTADO 221

legítimo de don Esteban de Goyechea (nQ 16) y de doña Sebas-


t i m a de Zabala (nQ 17), con doña Ana hIaría Rodríguez Vieira
(nQ 9), hija legítima de don Juan Rodriguez Vieira (nQ18) y de
doña María Rodríguez de la Mota (nQ N ) , todos bisabuelos y
terceros abuelos de la referida doña María 1\Iagclalena de Go-
yechea".
g) "Eautismo (le doña Nariana de Argañaraz y Murguía
(n* 5). hija legítima del Sargento Mayor don Eartolomé de Ar-
gañaraz y Murguía (nQ10) y de doña Simona de Pineda (nQ 11).
abuela y bisabuelos paternos de la dicha doña Magdalena".
h) "Certificación, sacada del libro primero del Cabildo de
Jujuy, de los méritos y fiervicios de don Francisco (le Argañarnz
y Nurauía (no 30), fundador de la ciudad y cuarto abuelo cle
dicha doña María Magdalena de Goyechca".
i) Copia autorizada de "una escritura de capellanía otor-
fada en Vizcaya por don Juan Ortiz de Zrírnte Argañaraz y Mur-
guía, casaclo al15 con doña María Teresa Idiagues Eeharis (de
"nobilísima alcuña"), natural dc In ciudad de Jujuy, hijo legí-
timo de don Pedro Ortiz de ZArate y de doña Petronila de Ibarra
Argañaraz y Murguía, por la que se prueba ser este noble ape- .
lliclo descendiente de casas solariegas de España, y lo mismo el de
ZGratc".
j ) "Eautismo de (ion Juan de Palacios (nQ 14), hijo legítimo
de don Francisco Palacios (nQ 24) y (le doña Francisca Martínez
tle Triarte (nQ 25). abuelos maternos de la dicha doña RIagdalena".
k) "Varias diligencias sacadas por los libros capitulares de
los empleos políticos que obtuvieron los ascendientes legítimos
<le la citada señora".
29 Los documentos agregados "por cuerda separada", de los
cuales resulta :
a ) Que doña Eernardinn hIirabal (nQ 31), cuarta abuela de
doña María Magdalena, casó con don Francisco de A r ~ a ñ a r a zy
Murguía el fundador (n* 30), en cuyo matrimonio tuvo un hijo,
llamado Felipe (nQ 20)'.
b) Que don Pedro Ortiz de ZArate, hijo dcl hIaestre de

1 Don Filiberto de llena, que intervino en la prepnracidn del índice


d e la <'cuerda separada", fiado en su menioria, dio por padres de doña
Bernardinn a don Juan de Ln Zerda y a doña Inés BIirabal, pero la verdad
e s que doña Bernardina en el documento respectivo no nombra a sus padres.
El propio don Francisco de Argriñaraz, en la probanza de sus méritos. dice
haber casado con doña Bernardinn Bfexía, hija legitima del Maese de Campo
IIernán Mexía. (Roberto Levillier: Gobernadores del Tucttmún, t. 11,. pPg.
514). Este FIernón era en realidad IIernán Nexía Mirabal. sepún figura
e n la citada obra de Levillier, t. 11, p6g. 20 y sigs.
Campo don Juan Ochoa de Zhrate y de doña Bartolina de Garnica,
casó con dona Petronila de Ibarra Argañaraz y BIurguia, hija
legítima de clon Juan de Ibarra y de doña 3Iaria Argaíiaraz y
Nurguía, nieta ésta del fundador (nQ30). de donde vino el enlace,
alianza y entroncamiento (le la familia Ortiz de Zárate con la de
los Argañaraz, de doncle por línea recta desciende doña María
Magdalena de Goyechea, nieta legitima de cloiia IIariana de Ar-
gafiaraz y Nurguia (n9 6 ) .
C) Que doña Juana Crisóstoma Ruiz de Llanos (nQ 15). fue
casada con el Sargento Mayor don Juan de Palacios (nQ 14) y
tuvieron por hijos legítimos a doña María (nQ7) y a don Fran-
cisco Palacios, toclos ascendientes maternos de la cxpresacla doña
María Magdalena de Goyechea.
d ) Que don Juan de Palacios (nv 14) fue hijo legitimo de clon
Francisco Palacios (n9 24) y de doña Franciscn Martínez de
Jriarte (n9 25) y esta, hija legítima de don Juan Martíncz de
Iriarte (nQ34) y de doña Ana (le Yanci (nQ 35). hija legitima
de don Juan de Yanci (nQ42) y (le doña Isabel clc Argañaraz y
hlurguía (n9 43).
e) Que cloña Ana Vieira de la Mota (nQ 9). hija legitima (le
don Juan Rodríguez Vieira (nQ 18), oficial Real de las Cajas de
Jujuy. y bisabuela paterna de cloña María BIagclalcna, casó con
don Blartin de Goyechea (nQ 8), natural del Reino de Navarra.
f ) Que don Francisco de Argañaraz y Murguía (nv 30) fue
quien, por comisión del gobernador don Juan Ramirez de Velazco,
fundó la ciudad de San Salvaclor (le Jujuy el 10 de nbril de 1593.
s ) Finalmente, que don Pedro Ortiz de Zlírate, luego de haber
perdido a su mujer doña Petronila (le Ibarra Arflíiaraz y Mur-
guía, en la forma trfigica que allí se relata, mirando con desprecio
las prosperidades mundanas, después de haber obtenido muchos
empleos políticos y militares, se ordenó de sacerdote, y que, siendo
cura y Vicario Juez de cliezmos y Comisario del Santo Oficio de
Jujuy, y Visitador del Obispaclo, en ocasión de t r a t a r el Consejo
de hacerlo obispo, "postergb" todos sus empleos, para dedicarse
a misionero, y que en la entrada, muy detalladamente descrita.
que como tal hizo por el Valle de Zenta en solicitud de la convcr-
sión de los gentiles, mientras decía misa, con el padre Juan
Manqueano, de la Compañía de Jcsiis, lo mataron a lanzazos los
indios infieles.
2. Juicio testamentario de don Martin Miguel de Goyechea,
1785-1786.31s. que también poseemos originales en N.A., lo resu-
mimos a continuación y lo copiamos por extenso en nuestro Anexo
Segundo.
Contiene el inventario y la tasación de los bienes integrantes
de la herencia, así como las hijuelas de adjudicación a sus hijos,
que son: don Esteban, don Lorenzo Ignacio, doña María I1Iag-
dalena, y, entre otras cosas, dice que el causante, fallecido el 9
(le agosto de 1785, había dado poder para que después de su
muerte y en su nombre testaran y actuaran como albacea su propio
hijo, don Lorenzo Ignacio, alcalde mayor provincial de Jujuy,
y su yerno don Gabriel de Güemes llontero. A la hija, doña IiIaria
Magdalena, le tocaron propiedades urbanas y rurales, entre éstas
"El Paraíso", gran número de vacunos y caballarcs. muebles, pla-
tería, esclavos, créditos, etc., en resumen una hijuela asaz valiosa
para aquel tiempo.
8. Información de los méritos y servicios (le don Francisco
de Argañaraz y Murguía, L a Plata, 1bI)G. (Roberto Levillier,
op. cit., t. 11, pBg. 512 y siguientes).
'En ella, junto con una relación de servicios, los propios de
don Francisco y los de sus esclarecidos antepasados, especial-
mente los de su padre el c a p i t h IiIartín Ochoa de Argañaraz,
casado con doña Leonor de Murguía, y su abuelo don Martín
Ochoa, uno y otro de actuación apreciada por los propios reyes
.
-"sirvieron al emperador Carlos quinto.. en la guerra de Ale-
mania y en la prisión del duque (le Sajonia con mucho valor.
.
correspondiendo a sus mayores". .-, sc contiene una testimonial
bumaria, de la que resulta la interesante circunstancia de que
don Francisco de Argañaraz, el fundador de Jujuy, e ilustre pro-
genitor de Güemes, "como caballero de mucho ser y valor usaba
con sus soldados tanta afabilidad, nobleza y equidad, que se dolía
de sus trabajos y los recogía y albergaba en su casa y se esmeraba
en los regalar y dar todo lo necesario para su sustento, por lo
que le amaban y querían tanto que no discrepaban un punto de
lo que les ordenaba y mandaba y los tenía a todos tan nprenclados
que no hubiera cosa en el mundo que dejasen de hacer por el
dicho capitln aunque arriesgasen las vidas en ello".
Don Iilartín de Ochoa Argañaraz y Verlstegui. era hijo del
capitln don Martín Ochoa Argañaraz y Garicano y de María
López de Ver.?stegui, hija de Juan Nartínez de Verlstcgui, señor
de la Casa-Torre Armera y solar de Verlstegui. Tuvo don Mar-
tín de Ochoa Argañaraz y Verlstegui una principalísima actria-
ción en la reconquista que hizo el adelantado Pedro ñlcnénclez
de Avilés y hllrquez, de la península dc la Florida de manos de los
protestantes calvinistas franceses que la habían ocupaclo en 1562.
Poseemos en fotocopia dcbida a la gentileza del Dr. HEctor
Lucero, el memorial del doctor don Gonzalo Solís de hIir5s. con-
trnido en La conquista y colonizacidn, 2 tomos, de Ruiz Diaz y
Caravia. Esta publicación figura en The Entcrprisc of Florida,
C ZAvil¿s aait t l ~ eSpanisl~Compiest ofl5GU-
Pedro A I C U ¿ ~ ~de
1568. Gainsville/l976. University of Florida.
De su lectura surge que dicho capitán don RIartín de Ochoa
,yArgañaraz, "e como los indios, junto del fuerte de San Mateo,
habían muerto a traición al capitrín Rtartín Ochoa, e a otros
.
soldados". . "pesóle mucho al adelantado de la muerte destos
dos capitanes, porque los quería mucho, y el Martín Ochoa habiase
.señalado mucho en la ganada del fuerte, y en todo lo dem6s de su
cargo sirvió con mucha fidelidad" ...
Don lllartín Ochoa de Argañaraz había casado con doña
Leonor de RIurguía y Salinas, de la muy ilustre casa de Rlurguia.
Los señores de lllurguia tenían el patronato de la iglesia de Santa
>Iaría de RIurguía, con derecho a nombrar vicario y párroco,
patronato otorgado por el papa Urbano 11 entre los años 1088
a 1039. De este matrimonio nació el fundador de San Salvador
(le Jujuy, don Francisco de Argañaraz y Rlurguh.
Una referencia a tener en cuenta para conocer la multifac6-
.tica personalidad del célebre capitán y conquistador del Tucumán.
don lIern5n Mexía de Mirabal, la encontramos en el mismo tomo
11 de la obra de Levillier, donde se transcribc la "Información
hecha a pcdimenlo de Hernán Mexia de Miraba1 de los servicios
hechos por él en el descubrimiento, conquista y población de las
provincias dcl T u c u m h , clcsde su entrada con Juan Núñez del
Prado, por el año 1650, hasta entonces, 1683-1591".
A PROPOSITO
A la luz de la documentación reunida por nosotros en esta
obra, el lector podrá juzgar por sí mismo, si Güemes hizo honor
.o no a la altura moral de sus mayores.
r
Autos seguidos en la Muy Leal y Constante Ciudad (le San Sal-
vador de Jujuy, ante el Juzgatlo Ordinario de Segundo Voto tle 13
genealogía de doña Alaria 3Iagtlalena de Goycchea.
Año de 1791.
[Hay una rúbrica]
Indice de lo que contienen estos autos (le la genealogia paterna y algo
de la materna de doña María l\lagdalena de Goyechea consorte del
señor don Gabriel de Güemes Montero. tesorero de las Cajas IIa-
trices de la Capital de Salta y juez privativo nctual de Residencia
por el Rey Nuestro Señor del tiempo que gobernó estas Provincias
el señor Brigadier de los Reales Ejércitos don Andrés AIestre.
Desde foja 1 hasta 17 sigue un testimonio de autos autorizado e n
~ ~ í b l i cforma,
a el cual contiene la oposición que hizo a la Encomienda
de los indios Socochas el Comisario General de Caballería don BIiguel
1:steban de Goyechea abuelo ratcrno de la dicha doña María Magda-
lena en el año de 1735 ante el señor Gobernador don J u a n de Armasa
Y Arregui quien le concedió el citndo feudo, en virtud de s u s servicios
políticos y militares, de que en dicho testimonio se hace relación y de
los de su padre el general don IIartin de Goyechea y de lo mucho que
sirvieron a sus propias expensas en la guerra con los indios infieles
del Chaco. También s e hace mención e n este expediente de los distin-
guidos méritos y servicios políticos y militares del Mnestre de Campo
don Antonio de la Corte y Rosas opositor que fue asimismo de dicha
Encomienda siendo éste abuelo materno de la referid3 doña María
Nagdalena.
Desde fojas 18 hasta 19 corre un título de gobernador de las
Armas, dado por la 1:eal Audiencia rrotol? y dicho señor Gobernador
Armasa al expresado don hliguel Este1)an de Goyechea s u fecha n 9
de mayo de 1735.
Asimismo en fojas 20 y 21 consta en rroto13 impreso e n Alndrid
cn 10 de enero de 1738. Autorizado por el Secretnrio de Cúmara don
Miguel Gutiérrez, de los uerricios del Comisario General don Miguel
Esteban de Coyechea en el que ncreditó por los papeles que presentó
en el Consejo de Indias ser hijo legitimo (según dicho impreso) del
General don Nartín de Coyechea cuya expresión suple en defecto de no

2 ¿Del distrito?
3 ¿Un infornie?
haberse ha1lado este presente año de 17'31,en este Archivo Eclesizístico
su fe de bautismo.
Desde fojas 22 hasta, 29, aparece una Real Provisión de la Audien-
cia de los Charchas del año de 1750 en que Su Alteza declara a don
3Iartin Miguel de Goyechea por legítimo sucesor de la Encomienda
y feudo de Sococha que obtuvo su padre don &ligue1 Esteban.
Desde fojas 30, hasta 35, resulta una copia fehaciente del testa-
mento del dicho don Martin Niguel de Goyechea en que declara por
su hija legitima a la mencionada doña María BIagdalena en el matri-
monio que contrajo con doña Ignaeia de la Corte y Rosas, y asimismo
se declara en este documento haber casado la dicha doña María Mas-
dalena con el señor don Gabriel de Güemes IIontero hijo legitimo de
don BIanuel de Giiemes Blontero Campero de Sorrevilla y de doiía
Francisca de Bárcena Gómcz Campero naturales del lugar de Abionzo,
Valle de Carriedo del Obispado de Santander en España.
Desde fojas 36, hasta 39, corre un pedimento con cinco partidas
sacadas del Archivo Eclesiástico. A saber una de 29 de mayo de 1685,
del casamiento y velorio del General don Martin de Goyechea, natural
de la Villa de Bera en el Reino de Xavnrra, hijo legitimo de don Es-
teban de Goyechea y doña Sebastiana de Zabala, con doña Ana María
Rodríguez Vieira, hija legitima de don Juan Rodriguez Vieira y de
doña María de la Mota, todos bisabuelos y terceros abuelos de la refe-
rida doña María BIagdalena de Goyechea. Otra. de 10 de setiembre
de 1699, de confirmación de don José Antonio de Goyechea, tío abuelo
paterno de la contenida doña Magdalena, hijo legítimo de don llartín
de Goyechea y de doña Ana ñlaria Rodríguez Vieira de l a Mota, cura
partida suple el defecto de no haberse hallado en el Archivo EclesiBstico
~u fe de bautismo. Otra de 24 de diciembre de 1707, del bautismo de
doña Mariana de Argañaraz y BIurguía, hija legitima del Sargento
ñlayor don Bartolomé de Argañaraz y Murgula y de doña Simona
de Pineda, nbuela y bisabuelos paternos de la dicha doña Blagdalenn.
Otra de 13 de mayo de 1680, de bautismo de don Juan de Palacios,
hijo legítimo de don Francisco Palacios y de doña Francisca Nartinez
do Iriarte. abuelos maternos dc la dicha doña IIagdalena y finalmente
la última partida [roto] de bautismo de don Martin Miguel de Goye-
chea [roto] 13 de enero de 1732, hijo legítimo de don Aliguel Esteban
de Goyechea y de doña DIariana de Argañaraz y padre de la expresada
doña María hIagdalena.
Desde fojas 40, hasta 41, se [roto] presentación de unos docu-
mentos para inteligencia de los testigos de una sumaria de limpieza de
sangre que se recibió.
Desde fojas 42, hasta 62, resulta una copia autorizada en pública
forma de una escritura antigua de Cnpellani3 otorgada en Vizcaya por
don Juan Ortiz de Záratc Argañaraz y llurguía. casado hallá (con
doña Naria Teresa de Idiagues Echaris, de nobilisima alcuña) natural
de esta ciudad de Jujuy, hijo legitimo de don Pedro Ortiz de Zárate,
y de doña Petronila de Ibarra Argañaraz y BIurguia, por cuyo docu-
mento se prueba este noble apellido descendientes de casas solariegas
cn España y lo mismo el de Ztirate.
CÜEAIES DOCUMENTADO 227

Desde fojas 53 hasta 62, corre una sumaria información de lim-


pieza de sangre, a favor de la contenida doña AIaría Magdalena de
Goyechea, en que se califica su nacimiento, y nobleza y los méritos
de sus ascendientes legitimas y se halla dicha sumaria autorizada de
seis testigos vecinos antiguos sin comprenderse en las generales de la
ley y de toda excepción.
Desde fojas 63, hasta 68, corre un escrito, una certificación y un
testinionio autorizado en pública forma sacado del Libro primero del
Cabildo de esta Ciudad, de los méritos y servicios de don Francisco
de Argaíiaraz y IIurguia, fundador de ella y cuarto abuelo de dicha
doña María Magdalena de Goyechea.
Y finalmente desde fojas 69 hasta 71, con que concluyen los autos,
siguen unas diligencias certificadas y sacadas por los Libros Capi-
tulares de los Empleos Politicos que obtuvieron los ascendientes legí-
timos de la citada señora.

Testimonio de Autos sobre la oposición n l a vacante del feudo


e indios del Pueblo de San Rafael de Sococha y Merced fecha de ellos
en el real nombre de Su AIajestnd (Dios le guarde) al Comisario
General de la Caballeria don Miguel Esteban de Goyechea.
El General don Pedro Calzado lugarteniente de Go-
Certificación bernador Justicia BInyur y Capitfin a Guerra de la
de servicios. Ciudad de San Salvador de Jujuy y su Jurisdicción
por Su Majestad (que Dios Guarde), etc. Certifico
en cuanto puedo, debo y ha lugar de derecho al Rey nuestro Señor en
su Real y Supremo Consejo de las Indias, a los Tribunales Inferiores,
demás justicias y jueces, donde y ante quien esta fuere presentada
cómo el Capitán don Iliguel Esteban de Goyechea, vecino de la Ciudad
de San Salvador de Jujuy ha scrvido a Su Najestad en varias cam-
pañas que se han ofrecido a las tierras del enemigo infiel y obtenido
en ellas los puestos de Alférez y Capitán de Caballos Corazas con pe-
neral aceptación así mía como de sus soldados y de toda la demRs gente
Y jefes superiores y militares; y de que ha estado siempre pronto a
cuantas funcioncs de guerra se han ofrecido con su persona, armas
r caballos y otros gratuitos donativos. demostrando en todas ocasiones
el gran celo, amor, y desvelo que a1 real servicio le influye su natural y
esclarecida estirpe; no omitiendo las reces que se ha hallado presente
salida alguna en opósito de dicho enemigo haciendo generosa ostenta-
ción de su valor y para que conste donde le convenga doy la presente
en este Fuerte del Valle de Palpala en primero de enero del año de mil
setecientos y reintitrks, por ante mí y testigos a falta de escribano
público ni real en este papel común a falta del sellado, etc. Pedro Calzado.
Testigo Jligirel Paclreco <le Jlelo. Testigo Jitan Jlarcelino de In I I ~ ~ e r t a .
CÜEBIES DOCUMENTADO

personas de cualquier estado, calidad y condición que sean os hayan y


tengan por tal Comisario General de la Caballería, y os obedezcan,
respcten y acaten y atento a que habéis de servir este puesto a vuestra
costa y habéis de hacer muchos gastos de t u persona así en las correrías
que se ofrecieren de alcances al enemigo como en las demás ocasiones
de guerra que se ofrezcan en servicio del Rey nuestro Señor, os relevo
del derecho de media annata por s e r en guerra viva y estar de continuo
con las armas en la mano acudiendo con prontitud a los llamamientos
que dicha capitanía a guerra ortlenare del servicio de Su AIajestad
y resguardo de esa ciudad y sus fronteras. E n cuyo testimonio os
mandé d a r y di el presente firmado de mi nombre sellado con el sello
de mis armas y refrendado del infrascripto secretario de Guerra de
csta Gobernación que es fecho en esta Ciudad de San Felipe de Lerma
Valle de Salta a veintidós dias del mes de enero de mil setecientos
veintinueve años; y se os entregari la insignia militar correspondiente.
Don Baltasar A1)arca y I'elasco. P o r mandado de Su Señoria el señor
Gobernador y Capitiin General. illigztel de Sola Legtti, Secretario de
,I 1
Guerra.
E n la Ciudad de San Salvador de Jujuy en tres días del mes de
enero del año de mil setecientos treinta. Yo el General don A ~ u s t í n
de Leyza. I.u~:artcniente del Cobernador Justicia Mayor y Capitin a
Guerra de esta dicha Ciudad y s u Jurisdicción por Su Majestad (que
Dios guarde) certifico en cuanto puedo y ha lugar cn derecho d e
como hoy día de la fecha presentó antc mi el capitán don Niguel de
Coyerhea el titulo y nombramiento de arriba fecho por el señor Go-
Lernador y Capitiin General de Comisario Genernl de Cabdleria al
dicho Capitán don AIiguel (le Goyechea. Y mando a todos los oficiales
de Guerra lo hagan y tengan y obcdeacan como a tal Comisario Ge-
neral de la Caballería como Su Señoria lo manda y para que conste
firmé por ante mi y testigos a falta dc escribanos. Agitstin de Leyza.
Testigo Narciso de Snero. Testigo Agitstin de Labranda 1/ Snrrerri.
Señor Cobernador y Capitiin ~ c n & a l . El Comisario
3Iemorial. General de la Caballería don Miguel Esteban de Co-
yechea. Alcalde JIayor Provincial Propietario de esta ,
Ciudad de San Salvador de Jujuy por In persona que tiene mi Poder
General que lo e3 mi hermano el Maestre de Campo don José Antonio de
Coyechea conforme a derecho y al mío convenga ante Vuestra Señoría
parezco y digo: Cómo en esta dicha ciudad se publicó un edicto librado
):or el Superior Juzgado de Vuestra Señoría en razón de que todos los
vecinos beneméritos de ella ocurriesen a hacer oposición a las encomien-
das que se hallan vacas y en administración en nquella jurisdicción para
conferir la propieilad a las personas que con relación y probabilidad de
sus servicios mereciesen por ellos l a preferencia en l a posesión y ad-
judicación de las que pretendiesen; mediante la facultad que para di-
cho efecto ha comunicado a V. S. la Real Uenignidad de nuestro Ca-
tólico Nonarca (que Dios guarde). Y siendo yo uno de los sujetos de
este vecindario que con justo y legitimo derecho debo hacer opósito
así por mis méritos y servicios personales como por los adquiridos y
heredados de mis bisabuelos, abuelos y legitimo padre General don
Martin de Goyechea, que en gloria sea, quien obtuvo y sirvió todos los
cargos políticos y militares que pueden ocuparse en una República
siendo el último con que coronó los que ejerció el de Teniente de Go-
Itcrnador Justicia Mayor y Capitán 3 Guerra de la referida ciudad
en tiempo que gobernó la Provincia el sefior don BIartin de Jiiuregui
cn el cual dicho tiempo en que no prevalecía el impuesto de que al
presente se goza en lo que contribure el real ramo de sisa por no ha-
I w s e practicado dicha imposición era preciso que para el costeo de las
proviclencias que se daban al antiguo presidio del Pongo construido en
la frontera de pertreclios, armas, municiones y mantenimientos fuesen
a costa y mención de los tenientes de ella; como también lo que se gas-
taba en corridas, entradas y demás defensas efectuadas contra el ene-
migo infiel en las cuales providencias el dicho mi padre no tan sola-
mente gastó su importe sino que totalmente con tan crecidísimos su-
plemento se atrasó y menoscabó au caudal por no haber de donde se
le reintegrasen sirviendo con él a Su BIajestad y al bien común de la
República, dejando por esta causa a sus herederos sin más comodidad.
que la de la memoria de sus méritos los que pongo en la atcnción y
fiublime consideración de V. S.; y por lo que toca a los míos fue nii
tirii~zerejern'eio el de alférez de una de las compañías arrcglaclas hasta
el de Comisario General de la Caballería concurriendo personalmente
!I mi costa y mención a todas las corridas y entradas que se han ofre-
cido al territorio, continencia y seguimiento de nuestro contrario des-
de el afio de mil setecientos y veintiuno hasta la corrida que ncabamos
rlc hacer el mes próximo pasado de diciembre con mi hermano el maes-
tre de campo don José Antonio de Coyechea en solicitud del c a s t i ~ o
S osadía que dicho bárbaro infiel tuvo de venir a querer asaltar el
Real Presidio de esta frontera el día once de dicho mes de diciembre
y aunque no logró su intento ni consiguió hacer función alguna me-
diante Dios Nuestro Señor y lo bien guarnecido de armas y municio-
nes que estaba el dicho Real Presidio al segundo dia que cometió dicho
atrevimiento nuestro adverso no obstante mis continuos achaques y
males habituales me puse en campafia con el referido mi hermano quien
se hallaba a la snzón de gobernador de las armas de esta frontera y
con doscientos p setenta y dos hombres pertrcchados y aviados con
todas las providencias de boca y guerra a nuestra propia costa sin
gravar a Su Majestad (Dios le guarde) ni a la vecindad en cosa al-
guna scguimos cl dicho enemigo hasta sus territorios y se le dio el
castixo de degollar dos yrandulcs avanzar y despojar sus rancherias
quitándoles las cal>algaduras y armas que se les hallaron en ellas; y pro-
siguiendo en la solicitud de su castigo y defensa de nuestra Santa Ley
se llegó al paraje donde le acaeció al General don Juan del Portal la
fatalidad y degüello (le cuarenta y dos soldados que !e destrozó el año
anteccdente dicho enemigo y en premio de la honra con que murie-
ron y obligación nuestra se sacaron de sus sepulcros los huesos y ca-
dAvercs de dichos ~oldadospara darles como se les dio sepulcro sagrado
volviendo de la dicha funcibn con el triunfo que ofreció el campo y
nin que lograse dicho nuestro contrario el que se tuviese en la dicha
nuestra campaña la más leve avería mediante la misericordia Divina
y el desvelo y cuidado e n el buen gobierno de nuestras armas católicas;
y habiendo llegado el tiempo de que la clemencia de ndestro ínclito mo-
narca convida con la remuneración por medio del caritativo y justi-
ficado celo de V. S. para en parte de satisfacción de méritos devtinar
las dichas encomiendas para sus rasallos teniendo manifestados los míos
y los de mi padre y señor hago oposición a la encomienda del Pueblo
de San Rafael de Sococha que estlí en la jurisdicción de esta dicha ciu-
dad y respecto de como fiel y leal vasallo h e cumplido con las obliga-
ciones concernientes a los cargos políticos y militares que he obtenido
sirviéndolos a mi propia costa sin remuneración alguna s610 a fin de
que nuestro Católico ñlonnrca y s u real nombre sea ensalzado. aumen-
tados y defendidos sus dominios se ha de servir V. S. de hacerme merced
de la dicha encomienda por dos vidas para m i y mis sucesores o persona
que por sanguinidad fuere mi voluntad o por las que de derecho s e
deba hacer la dicha merced y hallare ser de justicia según y en la forma
que la han poseldo y debido gozar los antecesores encomenderos cuando
las obtuvieron en la dicha propiedad librlndome para ello el título
y despacho competente bajo de las condiciones que fueren de derecho y
que s i alguno otro s e opusiere a ella se me dé vista de su representación
y méritos para alegar y deducir lo que m l s me convenga mediante lo
cual y haciendo el pedimento que en derecho puedo y debo que doy
aquí por expresado. A V. S. pido y suplico s c sirva haberme por pre-
sentado en tiempo y forma a la dicha encomienda y en vista de mi rela-
ción proveer s e me confiera la propiedad de ella por Ins dos vidas
o por las que V.S. fuere servido determinar librándoseme para ello
el título y despacho competente Que en mandarlo así proveer V.S.
recibiré merced con justicia y en lo necesario, etc. bfiguel E d e b a n de
Gouccliea.
Salta y febrero cuatro de mil setecientos treinta y cinco
Decreto. años. P o r presentada con los instrumentos de méritos
y servicios que refiere y por opuesto al feudo de San
Rafael de Sococha que se admite en cuanto h a lugar de derecho y vista
póngase con los dichos instrumentos parn a su tiempo proveer. Armaza.
Proveyó y mandó lo de suso el señor General don J u a n de Armaza Y
Arregui Gobernador y Capitln General de esta Provincia del Tucumán
por s u BIajestad (Dios le guarde). Ante mí, G o a r d o Rttiz de Ino.strosa,
Escribano de Gobernación.
Don Esteban de Urízar y Arespacochaga. Ca-
Título de capit6n ballero del Orden de Santiago, Maestro de
n don Antonio Campo de Infantería Española, Gobernador y
de la Corte. Capitln General de esta Provincia de Tucu-
m6n por Su Najestad (Dios le guarde), etc.
P o r cuanto conviene al servicio de Su Majestad y al mejor reparo y
defensa del Real Presidio de nuestra Seiíora del Rosario de Esteco
y s u s Fronteras nombrar persona que ejerza el cargo de Capitán de
Infantería Española de la compañia pagada de su guarnición que está
vaca por reforma del Capitfm don Antonio Solórzano. Atento n que
LUIS CÜEIIES

en el Alférez Antonio (le la Corte y Rosas concurren las calidades d e


celo, vigilancia, valor, y aplicación al Real' Servicio y las demás que
para el efecto son necesarias, esperando en las honradas obliraciones
que le asisten dar.? cabal desempeño a la obligación del cargo. E n nom-
bre de Su Majestad, Dios le guarde, y en virtud de sus Reales poderes
que para ello tengo como s u Gobernador y Capitin General de esta
Provincia, elijo, proveo y nombro a vos el Alférez Antonio de la Corte
y Rosas por Capitiin de Infantería Espafiola de la con~pañíapagada que
guarnece el Real Presidio de Esteco, y os doy poder y facultad para
que us6is y ejerzáis el puesto según y con las mismas honras, gracias,
mercedes, franquezas, prerrogativas, libertades. preeminencias, inmu-
nidades, fueros, exenciones y privilegios que gozan y deben gozar los
demás capitanes de los Reales Ejércitos, que mando se os guarden bien
y cumplidamente sin que os falte cosa alguna; y los capitanes refor-
mados y soldados de dicho Real Presidio y sus mi1ici:is os tengan por
tal capitin. Y los de vuestra compañia, guarden y cumplan vuestras
órdenes de palabra o por escrito so las penas que les impusiéredes que
siendo del Real servicio llevaréis n debida ejecución castigando a los
inobedientes según leyes d e milicia y gozaréis el sueldo que han rozado
vuestros antecesores para lo cual tomari la razón de esta pritente el
oficial real de dicho presidio relev6ndoos como os relevo de la media
ñnata por servir en guerra viva. Y luego que os presentéis ante el cabo
Cnstellano de 61 os pondrií en posesión entregbndoos la insignia militar
que os correoponde. E n cuyo testimonio 0.4 mandé d a r y di la presente
firmada de m i mano. sella(1a con el sello de mis armas y refren(1ad.i del
infrascripto Escribano Mayor de Gobernación. Fecha en Salta en ocho
días del mes de abril de mil setecientos nueve nños en este papel a falta
del sellado. Don Esteúnit dc Urlzar Are.SpflrochI~a.P o r mandado <IrSu
Señoria J i u n Fraiiciwo Jlartinez Sdewz, Escribano Mayor de Gobernación.
Meti en posesión (Ir! este título al Capitán Antonio
Certificación. de la Corte y Rosas yo el AIaestre tlc Cnmpo An-
tonio de Alurralde vecino feudatario de San IIiguel
del Tucumán. Cnbo Superior y Gobernador tlc las Armas de este Real
Presidio de h'uestra Señora del Rosario de Esteco y su Jurisdicción y
Fronteras por Su Majestad (Dios le ruarde) y para que conste lo i i r m é
en diecisiete días del mes de abril de mil setecientos nueve años. An-
tonio de Alrirraldc.
El Alférez Francisco Bhez de Alencastro, Tesorero Juez
Razón. Oficial Real dcl Real Presidio de Nuestra Seiiora de Esteco
por Su Majestad (Dios le guarde) tomé la razón de esta
patente y queda anotada en los Libros Reales de mi cargo y para que
conste le firmé en dicho Real Castillo en diecisiete días del mes de a l d l
de mil setecientos nueve años. Frnnciwo Gácz de AIericoatro.
Don Esteban de Urizar y Arespacochaga, Caballero del
Título de Orden de Santiago, AIaestre de Campo de Infantería Es-
Sargento paiíola, Gobernador y CapitBn General de estas Prorin-
Mayor. cias del Tucumbn, etc. P o r cuanto el Naestre de Campo
don Agustin Escobar Castellanos mi lugarteniente de
l a Ciudad de Salta me ha dado noticia de que el Capitán don Antonio
de la Corte Rosas se ofreció voluntario a acompañar al AIaestre de Campo
don Francisco Blontoya, Cabo y Castellano del Real Presidio de Bal-
buena e ~ :la corrida que le tengo ordenado que ejecute; llevando consigo
treinta soldados; por cuyo servicio le había nombrado de Sargento AIayor
del tercio que había de i r a campafia; por tanto concurriendo como con-
curren en el dicho don Antonio de la Corte Rosas !as calidades de valor.
vigilancia militar, experiencia, celo y aplicación al Real Servicio por
haber servido en dicho Real Presidio de Empleo de Capitán, esperando
de las honradas obligaciones que le asisten continuar5 el real servicio
con igual fervor, confirmo el nombramiento hecho por mi lugarteniente
y en nombre de S u Majestad (que Dios guarde) y en virtud de sus
Reales Poderes que para ello tengo como su Gobernador y Capit5n Ce-
neral. Elijo, proveo y nombro a vos el capitin don Antonio de Corte
Rosas por Sargento Mayor del Tercio que está prevenido para la corrida
que ha de ejecutar de mi orden el Maestre de Campo don, Francisco
Xlontoya y os doy poder y facultad para que uséis y ejerzáis el cargo
según y con las mismas honras, gracias, mercedes, franquezas, liber-
tades, prerrogativas, inmunidades, fueros, exenciones y privi1eg;os
que gozan y deben gozar los demis Sargentos AIayores de los Reales
Ejércitos que mando s e os ~ u a r t l e nbien y cumplidamente nin que os
falte cosa alguna; y los oficiales reformados y soldados os hayan y tecgan
por tal Siirgento AIayor, guatden y ejecuten vuestras 6rdene.i s o las
T~enasque les impusiéredeis que siendo del real servicio llevaréis a deliida
ejecución c a ~ t i u a n d olos inobedientes según leyes de milicia; y respecto
a que servís en guerra viva os relevo (le la media anata que debíais
pax?r por esta merced y título. E n cuyo testimonio os le mandé d a r
y di firmado de mi mano, sellado con el sello de mis armas y refrendado
de mi infrascripto secretario mayor de Gobernación, fecho en Córdoba
e n catorce de octubre de mil setecientos quince años en este papel a
falta del sellado. Don Estebnn de UrOar Arespneoehaga. P o r mandado
de Su Señoría; Juan F r n ~ ~ e i s cJlartinez
o Sáenz.
Don Esteban de Urízar y Areapacochaga, Caballero del
Título de Orden de Santiago, Xaestre de Campo de Infantería
llaestre Española. Gobernador y Capitin General de estas Pro-
de Campo. vincías del Tucumin. etc. Por cuanto don Antonio de
la Corte Rosas se ofreció voluntario a asistir en la
corrida que ha ejecutado (le ortlen de esta capitanía general que dejó
a1 AIaestre de Campo don Francisco XIontoya por cuya enfermedad fue
(le Sargento Mayor y Cabo de la Gente dicho don Antonio de la Corte
Rosas quien ejecutó dicha corrida s e ~ ú nel ortlen que se le dio, en parte
de remuneración de estc servicio y en nombre de Su AIajestad (que
Dios guarde). Elijo, proveo y nombro a vos el Sargento RIayor don
Antonio de la Corte Rosas por Xlacstre de Campo y mando se os guar-
den todas las honras, gracias, mercedes, franquezas, libertades, prcrro-
pativas, inmunidades, fueros, exenciones y privilegios que gozan y
deben gozar los demás Maestres de Campo de los Reales Ejércitos que
mando se os guarden bien y cumplidamente sin que falte cosa alguna;
e n l a misma forma que s i hubiéredeis servido el cargo de tal Naestre de
Campo respecto a que este grado os doy por el referido servicio y res-
pecto a que hab6is servido e n guerra viva os relevo de la media m a t a
que debíais pagar por esta merced y título firmado de mi mano sellado
con el sello de mis armas y refrendado del infrascripto secretario mayor
d e Gobernación, fecho en el Río S e ~ u n d o ,jurisdicción de la Ciudad de
Salta en dieciocho de diciembre de mil setecientos quince afios en este
papel a falta del sellado. Don Esteban de Urizar Arespacoclia~a.P o r
mandado de Su Señoría, Jicnn Francisco nfartfnez Súenz.
Señor Gobernador y Capitiin General. E l Maestre de
Petición. Campo don Antonio de la Corte Rosas vecino de esta
ciudad, parezco ante V. S. y digo que hago oposición e n
tiempo y en forma a la vacante del Pueblo de Sococha en jurisdicción
d e la Ciudad de San Salvador de Jujuy para cuya provisión se hallan
publicado edictoq y e n parte de remuneración a mis méritos y servicios
.se h a de servir V. S. de hacerme merced y encomienda real por dos
vidas, la mía y In de mi legítimo sucesor por ser benemérito y haber
servido a Su Majestad en el Real Presidio que f u e de Esteco en el empleo
de Capitiin de Gente pagada por patente del antecesor de V. S. el señor
don Esteban de Urizar y Arespacochaga, su fecha en S d t a e n ocho de
abril de mil setecientos nueve, por el tiempo de dos meses como parece
d e certificación del Maestre de Campo don Antonio da Alurralde, Cnbo
y Castellano que fue de dicho Real Presidio el año de quince con noticia
que tuve de que el AIaestre de Campo don Francisco BIontoya hacía una
corrida a la tierra del enemigo por orden del dicho su antecesor de V. S..
me ofrecí voluntnrio s servir con treinta hombres en dicha corrida
y presenté ante el lugarteniente del dicho antecesor de V. S. de esta
ciudad escrito ofreciendo hacer el dicho servicio que me f u e admitido
como consta de mi escrito y lo a él proveído y al tiempo de ejecutar la
marcha cayó enfermo el dicho castellano y por s u enfermedad ejecuté
yo la corrida como Sargento BIayor, y a la retirada se sirvió el dicho
su antecesor de V. S. nombrarme por hIacstre de Campo que todo consta
vn los títulos y papeles que presenté en debida forma. Y en lo politico h e
~ e r v i d oen esta República de Alcalde de la Santa Hermandad y Ordinario.
como también de teniente tesorero Juez Oficial Real muchos años;
atento a lo cual, a V. S. pido y suplico me haya por opuesto en tiempo
y forma a la dichn encomienda y por presentados los papeles de mis
servicios y en virtud <?e ellos hacerme merced y encomienda real de
dicho feudo de indios en que recibiré merced con justicia, etc. Antonio
de la Corte Rosas.
Saltn y febrero nueve de mil eetccicntos treinta y cinco
Decreto. años. P o r presentada con los instrumentos y prpeles de
sus méritos y servicios de esta parte y por opuesto e n
tiempo y forma nl y Encomienda de Sococha que se admite en lo que
hubiere lugar en derecho, póngase con los autos de esta vacante a la

4 ¿Se habrJ omitido por el escribano que expidió el tcstimonio que


.copiamos la palabra Feitdo? D. C.
que se halla opuesto el Comisario de la Caballería don Miguel Esteban
.de Goyechea n quien se le dé vista y traslado de esta oposición con todos
los instrumentos presentados bajo de recibo y conocimiento en forma.
Arniaza. Proveyó y mandó. Lo de suso decretado el señor Ceneral don
J u a n de Armaza y Arregui. Gobernador y Capitán General de esta
Provincia del Tucumán por S u Majestad, Dios le guarde. Ante mí.
Cerardo R~tizde Inostrosa, E x r i b a n o de Gobernación.
E n Salta, en diez de febrero, año corriente, yo el pre-
Diligencia. sente escribano di la vista y traslado que se manda
a la parte del Comisario de la Caballería don Miguel
Esteban de Goyechea. Gerardo Ruiz, Escribano de Gobernación.
Señor Gobernador y Capitán General. El Naestre d e
Petición. Campo don José Antonio de Goyechea. vecino de la Ciudad
de S a n Salvador de Jujuy, en vos y en nombre y como
npoderado de mi hermano el Comisario de la Caballería don Miguel
Esteban de Goyechea, Alcalde nIayor Provincial de la Santa Hermandad
d e la dicha ciudad, respondiendo al escrito de oposición al feudo y pue-
blo de Sococha en aquella jurisdiccidn que tiene presentado el XIaestre
de Campo don Antonio de la Corte Rosas, vecino de ésta como m i s haya
lugar en derecho y al de dicho mi hermano convenga ante V. S. parezco
y digo; que atento a que el referido mi parte se halla opuesto e n tiempo y
forma n dicho feudo, se ha de servir V. S. hacerle merced y encomienda
real de él. no obstante la oposición predicha n i los méritos y servicios
que en contrnrio se relatan, pues como ver6 V. S. por los instrumentos
presentados por mi parte n o tan sólo le igualan sino es que le aventajan
pues el dicho mi hermano los tiene propios y heredados y unos y otros
sin remuneración aiendo tnmbien de advertir se halln más apto para
poderlos continuar y practicar mayores servicios a ' Su nlajestad por
cuya razón es y merece s e r preferido al dicho opuesto, gradulndole sus
miritos por demás entidad que los propuestos por el referido don An-
tonio, pues sienclo así que los heredados tienen el privilegio de la ante-
rioridad y estos se miran sin remuneración, no sólo es acreedor n ella
el dicho mi parte por los referidos sino también por los suyos mediante
lo cual: A V. S. pido y suplico me haya por respondido a la dicha vista
y oposición en contrario fecha y se sirva en fuerza de 13 Real Voluntad
que es (le que se premien a los que pueden continuar servicios seme-
jantes a los practicados por mi parte, por su nctitud hacerle merced y
encomienda Real del dicho Feudo y Pueblo de Sococha en virtud de lo
que lleva deducido p alegado en su memorial el que en el todo reproduzco
para que en el Juicio contradictorio merezca la preferencia y graduación
condigna n 10s dichos sus méritos propios y hereditarios danfin por
ronclusa la causa y artículo de oposición en que recibiré en nombre d e m i
parte. merced con justicia la que pido. etc. José Antonio de Go~eclrea.
Salta y febrero quince de mil setecientos treinta g cinco
Decreto. años. P o r respondido al traslado póngase con los autos
de la materia y tráigase para proveer. Armaza. Proveyó
y mandó lo de suso decretado el señor General don J u a n de Armaza y
Arregui, Gobernador y Capitdn General de esta Provincia del Tucumán
por Su Majestad, Dios le Guarde. Ante mí Gerai'do J21ti.z de Inostrosa,
Escribano de Gobernación.
E n la Ciudad de Salta en primero día del mes d e
Auto de Merced marzo de mil setecientos treinta y cinco años,
y Encomienda el señor general don J u a n de Armaza y Arregui.
Real. Gobernador y Capitfin General de esta Provincia
del Tucumdn por S u Majestad, Dios le guarde,
habiendo visto estos autos obrados sobre la vacante del pueblo e indios
de Sococha y sus anexos en jurisdicción de la Provincia de Chichas, y
sujeto a los actos feudales a la jurisdicción de la Ciudad de Jujuy que
He halla vaco por f i n y muerte del Maestre de Campo don Pedro Acustín
de la Tijera quien lo poseyó en segunda vida en los cuales autos consta
haber estado por s u vacante enterfindose los tributos de dichos indios
en la Real Caja como legítimamente-vacos y sin facultad de poderlos
encomendar en virtud de la Real Cédula de s u prohibición hasta que
la Real magnificiencia de S u Majestad deliberó (en vista de los in-
formes de esta Provincia e n que le manifiestan a S u AIajestad no haber
otra cosa con que gratificar a los beneméritos sino las cortas encomien-
das de ella) librar nueva Real Cédula dada en San Loremo a dos d e
noviembre del año pasado de setecientos treinta y tres en !1 que concede
facultad para que el Gobernador de esta Provincia pueda confcrir las
dichas encomiendas en la misma conformidad que antes, a los beneméritos
conforme a cedulas y leyes reales; en cuya vista se mandaron despachar
edictos con t6rminos de sesenta días, llamando, citando y emplazand~
a todos los beneméritos de esta dicha Provincia que quisiesen s e r recom-
pensados con los tributos de dicha vacante, y especial y señalada-
mente a los vecinos de dicha ciudad a cuya jurisdicción toca el feudo
mandando se remitie.sen originales las diligencias y autos en esta razón
obrados, ordenando asimismo que dentro del término asignado en dichos
edictos, pareciesen los que quisieren s e r remunerados de sus servicios
y de sus antepasados a hacer sus oposiciones con presentación de sus
papeles e instrumentos por donde legítimamente se justificasen con
apercibimiento que pasado el término no habían de ser oídos n i admi-
tidos a dicha vacante y para ello se mandó publicar como de los autos
consta y por ellos parece haberse opuesto en tiempo y forma el Comisario
General de la Caballería don AIiguel Esteban de Goyechen, vecino de la
Ciudad de Jujuy y en s u nombre en virtud de poder bastante el Naestre
de Campo don José Antonio dc Goyechea; y cl Maestre de Cempo don
-4ntonio de l a Corte Rosas, vecino de esta Ciudad de Salta, pretendiendo
este feudo en recompensa de los méritos y servicios que alrgan p constan
de sus oposiciones y que se le dé por dos vidas la suya p la de s u legitimo
sucesor conformc a la ley de la sucesión las cuales se admitieron y
mandaron agregar a los autos de la materia en esta oposición no habiendo
sido admitido a ella el coronel don Cartolom6 José Domínguez'quien s e
opuso a este feudo con otros dos pueblos mds los cuales se le confirieron
reservando ente dicho Pueblo de Sococha para gratificar a otro bene-
merito con los tributos de él, en cuya virtud se han formado estos autos
que vistos y reconocidos con el cuitlado que pide semejante proveimiento
y haberse pasado el término del edicto referido y algunos dias m i s en
que no parece haber m i s opositores a dicho feudo, consideradas las
oposiciones de cada uno y que el dicho Naestre de Campo don Antonio
de la Corte Rosas ha presentado los títulos e instrumentos de sus mé-
ritos y servicios pcrsonalcs tli,nnos de toda atención por el amor y celo
que ha demostrado en el Real Servicio y defensa de estas Fronteras que
se debe tener presente para gratificarlo como merecedor de mayor prc-
mio; y por lo que toca a la parte del 3Incstre [le Campo don José Antonio
de Goyechea, comprob6 y justificú asimismo sus mbritos y servicios
con papeles originales (le los ejecutados por su propia persona, como
los de su @re el General don 3fartín de Goyechea, quien consta sirvió
el empleo de teniente de Gobernador Justicia Mayor y Capithn a Guorra
(le la dicha Ciudad de Jujuy en ticmpo que gobernó esta Provincia su
antecesor don Martin de J á u r e ~ u i ,ocupando antes todos los puestos
militares y políticos de la dicha ciudad gastando en el dicho empleo
tle teniente lo miis de su caudal en mantenimiento de la guerra y de-
fensa de su jurisdicción con ilustres esplendores; y el dicho don lIiguel
Esteban de Goyechea a s u imitación y (le sus nobilísimos ascendientes
ha servido 3 Su Rlajestad. ocupando todos los pu2stos militares desde
rtlférez hasta el de Comisario General de la Caballería de esta Provincia
a entera satisfacción de sus superiores, gastando de s u propio caudal
cuanto le ha sido preciso para socorrer a los necesitados en las oc,."sienes
'
que ha salido en s e ~ u i m i e n t odel enemigo como lo ejccut6 por el mes
de dicicmbre próximo pasado con el mayor esfuerzo de R U 1ealtr.d ha-
Ilhndone su hermano don José Antonio de Coyechea de Gobernador
de las arm:l.s en dicha ciudad de s u vecin(la(1. le dieron noticia que el
enemigo tenia cercado el real presidio de Ledesma, y con ella acompa-
iiando a dicho Gobernador de armas poniendo de su parte mucha ca-
hallada y pertrechos cle boca y guerra a su costa, convocaron y sacaron
(le la vecindad m i s de doscientos setenta homl)res, m i s debido R su
amor y celo que a1 poder pues en otras ocasiones de igiial peliaro.
no se ha podido conseguir ni la mitad (le dicha gente p aún con mas
tiempo que el que les pedía tamafia urgencia con lo que pudieron libertar
a dicho presidio de la grave ruina que le amenazaba del poder p fuerza
de dicho enemigo siguiéndolo por su huella hnsta el centro de sus tierr:is,
donde consiaiiió en alguna manera castirarlo y que conociera la pron-
titud de nuestras armas que a no s e r sentido de sus exploradores sin
duda hubiera que(1ado dicho enemigo bien castigado; n que se nfiatle
estar ejerciendo el ,dicho don Micuel Esteban de Goyechea la Vara de
Alcalde JIayor Provincial de aquclla ciudad con tal esmero y celo del
servicio de ambas FiIajcstades que no cesa de correr su jurisdicci6n
evitando y castipando en ella los delincuentes que lo merercn. y aún
muchos pecaclos se evitan por su celo a que se añade ser descendiente
por parte materna de los primeros conquistadores y pacificadores de estas
J'rovincias notoriamente. P o r lo cual y en cumplimiento de lar I.eyes y
Cédulas Reales y prineipalmcnte por la citada de dos de noviembre
pidió en 811 escrito de oposición se le hicicse merced de dicho Feudo
de Sococha y que se le diese vista y traslado de los demás opositores
y de los instrumentos y papeles que se presentasen para lo cual hizo
el pedimento que en derecho baste como por 61 m i s largamente consta.
Todo visto y examinado con la atención que pide la materia y la opo-
sición hecha por el iiraestre de Campo don Antonio de la Corte Rosas
y las alegaciones en ella expresadas pretendiendo uno y otro se le dé
en remuneración de sus mkritos y servicios el dicho feudo, y reconocido
juntamente haberse pasado el término del edicto, de los sesenta días.
asignados por termino perentorio. Cumplida la forma y circunstancias
expresadas en las Reales Cédulas para la justificación de sem~jniites
provisiones atendiendo al descargo de la Real conciencia y a la precisa
obligación de Su Señoría en la preferencia de beneméritos según los
opuestos a esta vacante, dijo que graduaba y graduó por m6s dignos
los méritos y servicios del Comisario General de la Caballería doti
RIiguel Esteban de Goyechea en cuya conformidad por el prcsente en
nombre de Su ñhjestad (Dios le guarde) y en virtud de sus Reales
Poderes que para ello tiene como su Gobcrnador y Capitan General de
esta Provincia y atendiendo a los notorios y relevantes meritos del suso-
dicho en parte dc remuncracith de ellos por no ocurrir otra cosa con
que gratificarlos hacía e hizo Merced y encomienda Real del Pueblo e
indios de Sococha y su3 anexos que estaban vacos por fin y muerte del
Maestre de campo don Pedro Agustín de la Tijera su iíltimo poseedor
en la jurisdicción de la Provincia de Chichas, al Comisario de la Ca-
I~alleriadon AIiguel Esteban de Goyechea según y en la forma que los
poseyó su Último encomendero todos los de dicho pueblo en un cuerpo
sin desmembración alguna. La cual merced y encomienda se le hace por
dos vidas la suya y la <le s u legítimo sucesor conforme n ln ley de la
sucesión para que haya y goce de los tributos de dichos indios en la
forma que por Cédulas Reales y ordenanzas est5 prevenido sin obligarles
al Servicio Personal ni pensionarlos a otras cargas ni tener con ellos
sus mujeres e hijos tratos ni contratos ilícitos antes sí les amparará
en sus causas y dcmandas como tal encomendero para que no sean
molestados de las Justicias Jueces de Comisión ni otras personas de-
fendiendo y pidiendo la libertad de que deben gozar, contradiciendo
cualesquier tributos y contribuciones que se les pretendieren echar sin
expresa licencia de Su Najestad o de quien en su Real nombre lo pueda
hacer y atendiendo n su miserable naturaleza los curar&en sus enferme-
dades y procurara recogerlos de donde quiera que estuvieren para que
residan en SU pueblo juntos con politica y vida sociable y allí sean edu-
cados c instruidos en los misterios de nuestra Santa F c Católica por
el Cura Doctrinero a cuyo cargo está tan precisa obligación, acudihdole
a dicho cura puntualmente con el estipendio que por sinodales y orde-
nanzas de esta Provincia cstuvicre determinado, haciendo acudan al
rezo cotidiano especialmente las mujeres y muchachos. Y en caso que
algunos indios y piezas de dicho feudo antes o despues de esta vacante
Y muerte de su Último encomendcro se hubieren ausentado respecto de
w e la Real Voluntnd. es que todos los indios vivan juntos en su reduccibn.
se ordena a dicho don Miguel Esteban de Goyechea ponga todo cuidado
en recogerlos y para ello se le da comisión, poder y facultad bastante
para que libremente los pueda sacar y saque de quien los tuviere Y los
reduzca a SU pueblo sin embargo de cualesquier mandamiento, amparos
y conciertos que tuvieren que a mayor abundamiento los declara Su
Señoría por nulos por ser contra cfdulas y ordenanzas, y las justicias
de las ciudades de este bastón con ningún pretexto lo embaracen pena de
quinientos pesos aplicados cámara de Su Majestad y gastos de la presente
guerra por mitad. Antes s í le darán todo el fomento y ayuda que nece-
sitare el dicho encomendero conforme a las cedulas de Su Majestad.
Y esta merced y encomienda se le hace al dicho don Miguel Esteban
de Coyechea con cargo y calidad que ha de enterar en las Reales Cajas
de la Ciudad de Jujuy el tributo de un año de vacante de dichos indios
conforme al padrón y según él enterara asimismo en dichas Reales
Cajas el derecho de la media anata afianzando por los ausentes Y mu,-
chachos para cuando llegue el caso de pagar tributo; y lo mismo hara
su legitimo sucesor antes de entrar al goce de la segunda vida de enterar
un año de vacante de dichos tributos y el derecho de la media anata.
Y con más particular advertencia se le hace esta merced a dicho don
hIiguel Esteban de Goyechea que no ha de poder obligar a los dichos
indios, sus mujeres e hijos a1 servicio personal tan prohibido por cédulas
reales y si ellos por su voluntad quisieren ha de ser pagándoles el jornal
asignado y sin imponerles tareas ni otro trabajo indebido, y si otra
persona o personas lo intentaren en opresión de los dichos indios pedir5
ante las justicias el agravio haciendo las defensas necesarias cumpliendo
en todo con las ordenanzas y con lo que iiltimamente dejó ordenado el
seiíor oidor visitador don Antonio BIartínez. Sobre todo !o cual y el
cumplimiento de la obligación que como encomendero tiene se le encarga
la conciencia y con ella se descarga la de Su Blajestad y de Su Señoría.
Y asimismo ha de estar obligado dicho encomendero a hacer vecindad
en la dicha Ciudad de Jujuy, tener armas y caballos para acudir a los
llamamientos de guerra que se ofrecieren del Real Servicio. Y con obli-
gación de pagar en cada un año seis pesos corrientes de pensión en la
Real Caja para el Colegio Seminario para ayuda al derrempeiío de los
reales novenos; y asimismo entrará en dichas Reales Cajas quince pesos
corrientes por una vez para aceite y vino de los conventos; y los oficiales
Reales se harán cargo de ellos en el Ramo de este efecto sacando cer-
tificación de dichos enteros antes de dirrsclc posesión de esta mcrccd
y encomienda; Ia cual se le hace con carco y calidad de que dentro de
seis años que han de correr y contarse desde el dia de 13 posesión ha
de ser obligado a traer aprobación y confirmación de ella de Su Majestad
y de su Real Supremo Consejo de las Indias, para cuyo efecto ha de rc-
mitir testimonio integro de todos los autos de esta vacante con su poder
bastante a procurador agente para estar a derecho con el scáor Fiscal de
él, responder, satisfacer, decir y alegar en cualquier artículo que se in-
tentare hasta la final conclusión y sentencia con apcrcibimiento que
de lo contrario le parara entero perjuicio, para lo cual se le seiíala
dicho término por perentorio y los estrados de dicho Real Consejo donde
ae harfin las notificaciones y citaciones de los autos que notificación
y citación requieran y en su rebeldía se determinar6 definitivamente.
Con lo cual constando haber hecho los enteros de los tributos de un
año de vacante y cl derecho de la media m a t a precediendo el juramento
de fidelidad acostumbrado, se ordena y manda a las justicias Mayor
y Ordinarias de la dicha ciudad ante quien se presentare el dicho don
Niguel Esteban de Goyechea o s u procurador en s u nombre le hagan d a r
y den la posesión de dicho feudo e indios en uno o dos que valga por
todos y dada no sera desposeído sin primero s e r oído y por fuero y
derecho vencido pena de mil pesos corrientes aplicados cimara de S u
Majestad y rastos de la guerra pendiente por mitad y despáchesele titulo
cn forma con inserción de este auto y asi lo proveyó mandó y firmó
S u Señoría. Don Jitnn de Armaza y Arregtti. Ante mí Gerardo Ruiz de
It~ostrosa,escribano de Gobernación. Entre renglones: demás, f u e mi
primer ejercicio, vale. Enmendado: guardar, concernientes, rale. Tes-
tado: bajo de las condiciones, no vale.
Concuerda, con los autos originales de la oposición a la encomienda
y feudo que e n ellos s e expresa de los que hice sacar y saqu8 de este
traslado que va cierto y verdadero, corregido y concertado y en caso
necesario me refiero n dichos originales y de pedimento de la parte doy
el presente. Y asimismo certifico doy f e y verdadero testimonio en cuanto
puedo debo y h a lugar en derecho al Rey Xuestro Señor que Dios guarde
y a s u Real y Supremo Consejo de las Indias como no se insertan e n
este testimonio los instrumentos y títulos pertenecientes a los cargos
que obtuvo el General don BIartín de Goyechea, padre legitimo del Co-
misario general de la Caballería don Miguel Esteban de Goyechea d e
cuyos servicios hace el susodicho relación en s u escrito de oposición que
en estos autos parece por razón de que dichos papeles se hallan presen-
tados en los autos de la oposición a la encomienda de los indios de Yala
y León que hizo y practicó su hermano el BIaestre de Campo General
don José Antonio de Goyechea y en la copia de ellos van trasuntados
e n donde se podr6n reconocer. Y por lo que mira al poder que en el auto
da merced y encomienda Real de dicho feudo, se cita tuvo bastante el
referido don José Antonio de Goyechea r a r a hacer personería por
el expresado su hermano es tan copioso y abundante que incluye la
generalidad de todos sus negocios, materias y causas, tratos y contratos,
ventas. compras, trueques, cambios, enajenaciones, pretensiones p otrn
diversidad de cliusulas y facultades hasta la de testar que el uno al
otro y el otro al otro se dan por s e r dicho poder otorgado por ambos
s u fecha en once de enero de este corriente año por ante el Capitin
don Francisco de Echeverría nlcalde ordinario de segundo voto de l a
Ciudad de San Salvador de Jujuy a falta de escribano público y Real
Y para que de ello conste. doy la presente, siendo testigos a s u data y
corrección don Juan Francisco Gorostiaga, don Antonio Martínez y don
Sebastiin hIachado. en esta Ciudad de San 1Iiguel del Tucumin, a seis
dias del mes de julio de mil setecientos treinta y cinco años.
Gerardo Riti: de Inostrosa
Real Escribano Mayor de Gobernacibn

Don Juan d e Armnza y Arrepui, Gobernador y Capitin General de


esta Provincia del Tucumin por Su hlajestad, Dios le guarde, etc.
CÜEBIES DOCUMENTADO

P o r cuanto por los justos motivos que tiene representados m i lugar-


teniente de la Ciudad de Jujuy, así en la Real Audiencia como en este
Gobierno haciendo dejación de sus empleos la que le tengo admitida e n
virtud de Real Provisión que me presentó, hacifndome patente los in-
convenientes de la prosecución de s u oficio, e n cuya inteligencia y en la
de s e r preciso y muy conreniente al Real Servicio nombrar persona que
nobierne las armas p mande las milicias de dicha ciudad y principalmente
en la ocasión presente que se halla la gente de dicha jurisdicción aper-
cibida y próxima a la entrada general a la tierra del enemigo infiel
que la hostiliza donde e s muy preciso, la haga persona de m i mayor
confianza y en quien recaigan las partes de valor conducta y experiencia
militar, celo y aplicación al Real Servicio que s e Iiallzn éstas y las
demás que para el efecto se requieren en el Comisario de la Caballería
don 31iguel Esteban de Goyechea, una de las primeras personas de l a
dicha ciudad en calidad y prendas naturales, y Alcalde mayor Provincial
en ella en quien por el conocimiento de s u Ilustre Sangre y experiencia
de las prendas que le adornan, le tiene nombrado la Real Audiencia.
por Gobernador de las Armas de la dicha ciudad, por ausencia de m i
lugarteniente la que hoy se ha verificado por tenerle admitida la dejación
d e s u empleo por lo que debe subsistir el referido nombramiento de la
Real Audiencia quien ha fiado el desempeiío de su confianza en la vigi-
lancia de dicho don AIiguel de Goyechea, siendo de tal manera la cntera
sntisfacción que tiene aquel Real y Superior Tribunal que por m i ausen-
cia le nombró en el mismo Real Despacho igualmente Gobernador de
Armas de la Ciudad de Saltn cuya Real Provisión tengo obedecida con
el acatamiento debido, y en su cumplimiento, en el ínter que s e recibe el
lugarteniente Justicia mayor, y Capitán a Guerra que tzngo nombrado
para dicha Ciudad de Jujuy, ordeno y mando a dicho don Miguel de
Goyechea que luego y sin la menor dilación se presente con l a dicha
Real provisión de su nombramiento de Gobernador de Armas o con
este despacho sólo, como le pareciere, ante el Cabildo Justicia y Regi-
miento de la dicha ciudad para que le conste y con 81 lo ponga e n
posesión de dicho cargo en el que desde luego se aprontará para caminar
con la Gente de su Jurisdicción a la mencionada entrada que está próxima
a ejecutarse para la que distribuirá las órclenes convenientes como quien
tiene la cosa presente, quedando cierto desempeñará en todo la confianza
de la Real Audiencia y mía: para lo cual y en caso necesario y para
mayor abundamiento (le nuevo. en nombre de S u AIajestad, Dios le
~ u a r d e ,y en virtud de sus Reales poderes que para ello tenno como s u
Gobernador y Capitán General de esta Provincia, elijo, proveo y nombro
a vos, el comisario de la Caballería don ñíiguel Esteban de Goyechea
por Gobernador de Armas de la Ciudad de Jujuy, bajo de las facultades
que os concede la Real Audiencia en tal nombramiento, para que además
de ellas uséis y ejerzáis el dicho cargo según y como lo han usado. podido
y debido usar vuestros antecesores y demás Gobernadores de Armas
de los Reales Ejercitas de Su Majestad y con las mismas honras, gracias.
mercedes, franquezas. prerrogativas, preeminencias, fueros, exenciones
e inmunidades y demás privilegios que por tal debkia haber y rozar que
haréis y mando s e os guarden bien y cumplidamente sin que os falte
cosa alguna. Y ordeno y mando al Cabildo Justicia y Regimiento Oficiales
Militares Veteranos y reformados vecinos encomenderos, y soldados,
estantes, habitantes y pasajeros de la dicha ciudad y s u s términos y
jurisdicción os hayan y tengan por tal Gobernador de Armas, guarden
y cumplan !as órdenes que les diéredes de palabra o por escrito como s i
fueran míos propios. Y castigaréis n los inobedientes según leyes de
milicia que siendo del Real Servicio llevaréis a debida ejecución. Y
ordeno y mando al expresado Cabildo Justicia y Regimiento que l u e ~ o
que os presentéis con este despacho y titulo, solo o junto con l a Real
Provisión citada os ponga en posesión de vuestro cargo e n la forma
acostumbrada entrexdndoos la insignia militar que debéis usar y os
corresponde que yo desde luego por el presente os recibo y doy por reci-
bido al uso y ejercicio de dicho cargo y en él os doy poder. comisión
y facultad bastante l a ' e n derecho y en tal caso necesario sin limitación
alguna. Y porque habéis de servir y servis en Bucrrn viva a vuestra
propia costa y mención sin sueldo alguno os relevo del derecho de la
media anatn que por razón de esta merced debíais pagar en la Real
Caja. P a r a lo cual os mandé d a r y di el presente firmado de mi mano
sellado con el sello de mis armas y refrendado del infrascripto escribano
mayor de Gobernación fecho e n este paraje de la Punta de Diamante
de la Quebreda, jurisdicción de la Ciudad de Salta en nueve días del
mes de mayo de mil setecientos treinta y cinco nños e n este papel común
s falta del sellado.
Don J u a n de Arninrn y Arregiti
[Aquí un sello]
P o r mandado de Su Sefioria
Cerardo Rrtir de Inostroza
Real Escribano Mayor de Gobernación

Rclneida de Sercirios del Contisario Cctieral doll. J I i g w l Estcbnn


de Goueelrea
P o r diferentes instrumentos y otros papeles. que se han presentado,
consta, que el referido don Miguel E ~ t e b a nde Goyechca ha servido
a SU Majestad en la Provincia del Tucumiin, por tiempo de muchos años,
habiéndolo empezado a ejecutar con plaza de soldado. y desp116.s de
Alférez y Capitiin de Caballos Corazas, con cuyos empleos lo hizo con
g r a n aprobación de s u s superiores en todas las ocasiones que s e ofre-
cieron, por lo cual le nombró el Coronel don Baltazar de Abarca (siendo
gobernador, y capitán general de la expresada Provincia del TucumRn)
por titulo, que le despachó en veintidós de enero del año de mil setecientos
veintinueve, por Comisario General de la Caballería d e la Ciudad de San
Salvador de Jujuy, y su jurisdicción, en la mencionada Provincia; cuyo
empleo consta asimismo ejerció en varias campañas, que se ofrecieron,
a las tierras del enemigo infiel, a costa de s u propio caudal. Lo que
también ejecutó el año de mil setecientos treinta y tres. con ocasión
CÜEBIES DOCUMENTADO 243

de tener el enemigo cercado el Presidio de Ledesma, consiguiendo SU


libertad por medio del socorro de Caballería, y pertrechos de boca, y
guerra. que a s u costa condujo para s u defensa.
E l Cabildo secular de la expresada Ciudad de Jujuy, en carta p a r a
S u Majestad de dos de mayo del año de mil setecientos treinta y seis,
, informa, que el mencionado don Miguel Esteban de Goyechea h a servido
a Su Alajestid, demás de los empleos, que van mencionados, los de Pro-
curador General y Alcalde Ordinario de dicha ciudad, y el de la Santa
Hermandad de la Villa Imperial de Potosí y que en todos -ellos lo h a
ejecutado con igual desvelo, manteniendo la República e n paz: por cuyos
motivos, y el de s u notoria calidad, le c o n s i d e r ~ npor muy digno y me-
recedor de las honras y mercedes que Su i\Iajestacl (Dios le g ~ ~ a r d e )
fuere servido hacerle.
Asimismo ha justificado ser hijo legítimo de don IIartin de Goye-
rhea que despues de haber servido en la referida Provincia del Tucumán
diferentes empleos políticos y militares ejerció por mucho tiempo el
d e Teniente d e Gobernador, Justicia JIayor y Capitán a Guerra de l a
referida Ciudad de San Salvador de Jujuy, en el cual consumió la mayor
parte de su caudal en las asistencias del Presidio del Pongo, Y en-los
socorros, que dio para las corridas, entradas, y demás defensas efectuadas
contra el enemigo infiel.
Sacóse de los papeles originales, que se presentaron en In Secretaria
del Consejo y Cámara de Indias. de la Kegociación del Perú. Madrid.
diez de enero de mil setecientos treinta y ocho.
Illigitel Gtrtiirrer
Don Domingo de Jáitr~glti Don José Giraldes 9 Pillo
Jonqitb de Uriondo 9 Illitrgitía
[Una rtíbrical
Escribano de CAmara Don J m n J o s i TOletlfJ
Derechos 9 reales foja sello y registro 1 peso.
Provisión RcaI para que Vuestro Corregidor de la Provincia de Chlchas
guarde, cumpla y ejecute lo que se ordena y manda e n los autos proveídos
por esta Real Audiencia aquí insertos dependimiento <le la parte de don
JosE Antonio de Goyechea. Corregida.

Don Fernando por la gracia de Dios Rey de Castilla, de León, de


Aragón, de las dos Sicilias, de Jerusalén, de Navarra. d e Granada.
de Toledo, de Valencia, de Galicia, de IIallorcn, de Sevilla, de Cerdeñn, de
Córdoba, de Córcega. de Murcia, de Jaen, de los Algarbes, de Algecira.
de Gibraltar, de las Islas y Tierra Firme del Arar Oc6ano. Archiduque d e
Austria, Duque de Borgoña, de Bravante y nIilán, Conde d e Auspurg
de Flandes, de Tirol y Barcelona, señor de Viscaya y de Molina, etc.
A vos el nuestro corregidor y Justicia mayor de la Provincia de los
Chichas a quien toca la ejecución y cumplimiento de lo que de yuso se
harii mención en esta nuestra carta y Provisiíin Real salud y gracia
sabed, que ante el nuestro Presidente y Oidores de la nuestra Audiencia
y Chancilleria Real que reside en la Ciudad de la Plata, Provincia de los
Charcas del Perú. se ha seguido pleito y causa por el común de indios del
Pueblo de Sococha en esa dicha Provincia, sobre que el encomendero
de ellos don José Antonio de Goyechea, no !es extraiga. ni obligue n
que pasen a la Jurisdición de la Ciudad de Jujuy, y s e les admitan los
fiadores que tienen ofrecidos para el séguro de los tributos a que estbn
obligados y demás deducido en dicha causa en la cual los dichos nuestrq
Presidente y oidores proveyeron el auto del tenor siguiente:
E n la Ciudad de In Plata e n veintisiete días del mes de
alwil dc mil setecientos cuarenta y siete años, los se- Auto de
Aores Presidente y Oidores dc esta Real Audiencia, 27 de abril
h b i e n d o visto los autos seguidos por el común del de 747
I'ueblo de Sococha, Provincia de Chichas sobre la
cxtrasción que pretendía hacer de los indios de dicho pueblo el Enco-
mendero don Jos6 dc Goyechea y llevarlos a la jurisdicción de la Ciudad
de Jujuy, sin quererles admitir los fiadores que tienen presentados para
el seguro de los tributos que estiin obligados a satisfacer y demás que
ver, convino, y tuvieron presente. Dijeron que el corregidor de Chichas.
cn virtud de las fianzas que tiene dadas para la recaudación dc los t r i -
1-utos de los indios de s u jurisdicción proceda a hacer ~ a d r ó nde los
indios del predicho Pueblo de Sococha, y s e haga cargo de recaudar los
tributos de los referidos indios los que remitrii n los Oficiales Reales de
Jujuy para que por mano de estos se entreguen a1 encomendero, tomando
sumaria información de la candidad que Iian pagado hasta aquí quien
asimismo pasar6 a actuar deslinde y amo~onamientode las tierras que
según sus títulos hiciesen constar tener dichos indios y pondrá edictos
$11 cncicaz~op z r a que los que por derecho de sangre lo pretendiesen
tigen de 61 en esta Real Audiencia 3: para s u cumplimiento s e libre l a
Real Provisión correspondiente dirigida al referido corregidor y así lo
preveseron y rubricaron. Proveyeron y rubricaron el auto de suso los
señores Presidente y Oidores de esta Renl Audiencia estando presente
Su Sefiorín el señor don Dominpo d e Jiiuregui y fueron jueces los señores
licenciado don BIanuel Isidoro de ñlirones y Elenavente. doctcr don Fran-
risco Javier de Palacios y licenciado don Joaquín de Uriondo y Ilurguía.
Oidores en la Plata en el din. mes y año de fiu fecha. Don Jtcnn JosP
Toledo. Y habiéndose librado la Real Provisión que se manda en el auto
suso inserto, e n este estado s e presentó la petición que
Relación. sacada a la letra con lo que dijo-y respondió el nuestro
Fiscal Protector General a la vista que s c le dio uno
en pos de otro, son del tenor siguiente+
X u y Poderoso Seiior. Nanuel de ñIontalvo y T,una en
Petición. nombre del General don José Antonio de Goyechea, t u t o r
y curador de la persona y bienes de don ñlartin 3Iiguel
de Gosechea Encomendero de la Encomienda de los Indios de Sococha
como mbs haya lugar en derecho parezco ante Vuestra Alteza y digo
que en esta Renl Audiencia se han seguido autos sobre que los indios de

"rijo do don Nigucl Esteban y Sobrino de don Josa Antonio. D.G.


dicha encomienda satisfagan a m i parte con s u trabajo personal los
tributos anuales, por no tener otra forma, como lo hablan hecho e n
tiempo de los antecedentes encomenderos sobre cuyo asunto se dio pro-
videncia por esta Real Audiencia, para que afianzasen los referidos tri-
butos, y por no haberse efectuado esto, se mandó Últimamente que el
corregidor de Chichas en virtud de las fianzas que tiene dadas para l a
recaudación de los tributos de los indios de s u jurisdicción, procediese
n hacer padrón de los de dicha encomienda y se hiciese cargo de recaudar
los tributos de ellos, y los remitiese a los oficiales Reales de Jujuy, para
que por mano de éstos se entregasen a mi parte; con cuya providencia
se libró Real Provisión, y respecto n no haberse dado cumplimiento
a ella, hallándose los indios en s u entera libertad sin obediencia, n i reco-
nocimiento a s u encomendero y sin que éste disfrute cosa alguna de la
encomienda para que esto no s e continúe por más tiempo, ocurro a la
justificación de Vuestra Alteza para que se sirva de mandar que los
expresados indios, bajen a l a Ciudad de Jujuy y paguen a m i parte
lo que se halla caído de tributos. y para lo de en adelante otorguen
a satisfación de mi parte la fianza correspondiente y que de no darla, s e
mantenga mi parte en la posesión en que s e hallaba y consta de estos
autos de poder conducir los indios a la expresada Ciudad de Jujuy n que
paguen con su trabajo según lo tenían de costumbre sobre l o que haciendo
el mejor pedimento. A Vuestra Alteza pido y suplico que e n virtud de lo
que llevo expresado y dándose primero a Vuestro Fiscal Protector Ge-
neral s e sirva d e proveer y mandar como aquí se contiene por s e r de
justicia que pido jurando a Dios h'uestro Señor y a esta Señal de Cruz
en dnima de mi partc lo necesario en tlcrechn y para ello, etr. Doctor
Paredes. Jlan~reldc Jlontnlvo Luna.
Muy Poderoso Señor. El Protector fiscal e n vista
Respuesta del del antecedente pedimento dice que hallándose re-
señor Protector. suelto este negocio cnn la Última p r o r i d e ~ c i : ~
tomada por la Superior Justificación de Vuestra
Alteza en cuya virtud s e libró la Real Provisión para s u cumplimiento.
y s e entrep6 a In parte no hay fundamento para alterar lo resuelto pues
n i consta haberse entregado la Real Provisión al corregidor de la Pro-
vincia de Chichas n i las diligencias actuadas por éste en s u obedecimiento
con lo que queda reducida a una mera relación la afirmativa de no haber
percibido el encomendero los frutos de la encomienda; y s i bien e s ver-
dad, no debe s e r defraudado de ellos verificándose efectivamente la Real
Xerced sin que esté en arbitrio de los indios la paga de los tributos a
que deben ser compelidos en la forma más cómoda y de menos perjuicio
a s í a ellos como al encomendero, hahiéndose arbitrado el medio más
yroporcionado el que se contiene en el citado auto mientras n o se hace
constar lo infructuoso de éste, n o pueden tomarse otros, que aseguren
13 acción del encomendero que no hay duda In tiene par:, la efectiva
paga de los tributos que deben hacerlo los indios. o bien en la forma
prevenida, o en la quc por Vuestra Alteza sc arbitrare constando n o
haber tenido efecto la cobranza por mano del correnidor de Chichas
sobre que pide justicia. Plata y junio dos de mil setecientos cincuenta.
Doctor L6pez. Y por decreto que proveyeron los dichns nuestro Presidente
y oidores mandaron d a r traslado a l a parte de don José .
Relación. Antonio Goyechea y habiéndosele notificado a s u pro-
curador, presentó éste el escrito que sacado a la letra
con lo que dijo y respondió el nuestro fiscal protector general a la vista
que s e le dio uno e n pos de otro son del tenor siguiente.
Petición. Muy Poderoso Señor, Manuel de 1Iontalvo y Luna e n
nombre del General don José Antonio Goyechea, tutor
y curador de don Alartín de Coyechea, encomendero de la encomienda
de los indios de Socoeha; respondiendo al traslado que se me dio del escrito
de Vuestro Protector fiscal en que expresa que por no constar haberse
notificado el corregidor de la Provincia de Chichas la providencia última-
mente dada por esta Real Audiencia para que se aseguren los tributos
de los indios y se enteren al encomendero, n o s e puede ignorar en lo
mandado, digo que esta Providencia se libró a pedimento d e los indios
quienes con maldad habiendo sacado la Real Provisión, no la han inti-
mado, consiguiendo por este camino una total libertad sin pagar real
alguno al encomendero, ni n otra persona y recelando mi parte justa-
mente que el corregidor no ha de querer hacerse cargo de su recaudacibn
por no traerle esto ninguna utilidad y que en las cuentas que dime en
las Reales Cajas de la Villa de Potosí tampoco se le h a de hacer cargo
de estos tributos por no s e r intereses del Real haber, y así ha de quedar
el menor encomendero perdido en lo que legítimamente debe percibir.
por su titulo y real Voluntad, sin que por este defecto se exonere de las
pensiones que como tal encomendero estf obligado. lo que pongo pre-
sente a l a justificación de Vuestra Alteza para que atendiendo al alivio
d e este menor, s e sirva de d a r las providencias mas eficaces que tuviere
por de justicia y que no se le defraude al menor. lo que legítimamente
debe percibir. como lo tiene reconocido Vuestro Protector Fiscal. en su
respuesta. en cuya atención y haciendo el mejor pedimento: a Vuestra
Alteza pido y suplico se sirva de proveer y mandar como llevo expresado
por s e r de justicia que pido jurando lo necesario en derecho costas y
para ello, etc. Doctor Paredes. Manuel de nlontalco.
Bluy Poderoso Señor. El Protector Fiscal. e n vista
Respuesta del del antecedente pedimento, en que se esfuerza la
ieñor Protector. instancia que repetidamente se tiene hecha para
que los indios de esta encomienda. paguen al en-
comendero en servicio los tributos que deben tributarle. Dice que solicitar
la efectiva paga de los tributos es acción que de derecho compete al
encomcndero como lo tiene reconocido en s u antecedente representación,
pero intentar que esta paga, se haya de hacer e n servicio e s u n asunto
enteramente opuesto n las repetidas prohibiciones de estos Reinos sobre
que son expresas para puntos de encomiendas, la cuarenta y nueve. titulo
doce, libro sexto con las dos concordantes que en ella se citan, y más par-
ticularmente la cuarenta y siete del citado libro y título prohíbe la
Conmutación y paga del tributo de los indios en servicio personal re-
firiéndose a la veinticuatro titulo quinto del expresado libro y en la
veinticinco siguiente se repite l a misma prohibición mandandose alzar
Y quitar el servicio personal como quiera que se hallare introducido,
dándose la forma cómo se deben tasar y estimar cómodamente los tri-
butos que deben contribuir; en cuyo supuesto, s i la providencia to-
mada por esta Real Audiencia para indemnizar al encomendero d e los
perjuicios que asienta no la considera efectiva para la paga de los
tributos, deber6 arreglarse, la que se diere a la forma de la citada ley
veinticinco por s e r ésta la que debe observarse según justicia. Plata
y julio diez de mil setecientos cincuenta. Doctor López. Y por Decreto
que proveyeron los dichos nuestro Presidente y Oidores
Relación. mandaron traer los autos n l a nuestra Real Sala y ha-
biéndose hecho relación de ellos proveyeron uno en die-
ciocho del mes de agosto de este presente'año de setecientos cincuenta,
mandando d a r vista al nuestro fiscal quien respondió lo que parece
por la petición que sacada a la letra con el auto en s u razón proveído
e s como sigue: Muy poderoso Señor. E l Fiscal en
Respuesta del vista de la representación que se hace por parte
señor Fiscal. de don José Goyechea, como tutor y curador de
don AIartin Miguel de Goyechea sobre la satisfac-
ción de la encomienda de que éste goza por Real Merced. Y de lo que
expresa e n este punto Vuestro Fiscal Protector General. Dice que
hallándose arreglado a lo dispuesto por Vuestras Reales Leyes, lo re-
produce en el todo para que se sirva Vuestra Alteza mandar se guar-
den. cumplan y ejecuten, según su literal contenido que es t a n de jus-
ticia. Plata y setiembre primero de mil setecientes cincuenta. Licen-
ciado Gdniez. Vistos guRrdese y cúmplase el auto de esta
Auto. Real Audiencia de veintisiete de abril del año pasado d e
cuarenta y siete, y con inserción de él, se librará Real Pro-
visión para que el corregidor de la Provincia de Chichas, ejecute e n
todo s u contenido, y en caso de habérsele presentado la Real Provisión
antecedentemente librada a s u antecesor o Teniente General. en vir-
tud de dicho auto, darán razón a esta Real Audiencia de los tributos
que han recaudado de los indios del Pueblo de Sococha y enteros que
hayan hecho de ellos en las Cajas Reales, y de no haberlos recaudado,
darán igualmente razón. por qué no lo han ejecutado. Proveyeron y
rubricaron el auto de suso los señores Presidente y oidores de esta Real
Audiencia estando presente Su Señoría el señor don Domingo d e Jáu-
r e m i y fueron jueces los señores doctores don Francisco Javier de Pala-
cios, don José Giraldes y Pino licenciado y don Joaquín de Uriondo y
nlurguia oidores en la Plata en trece d e octubre d e mil setecientos y cin-
cuenta años. Don J u a n José Toledo. E n cuya confor-
Decisión. midad fue acordado que debíamos mandar d a r esta
nuestra Carta y Provisión Real en Ir dicha razón y
tuvimoslo por bien por la cual os mandamos a vos el nuestro corregidor
y justicia mayor de la Provincia de los Chichas que siendo con ésta
requerido por parte de don José Antonio Goyechea, tutor y curador de la
persona y bienes de don RIartín AIiguel de Goyechea. encomendero de
la Encomienda de Sococha en esa dicha Provincia. o que de ella os cnnste
en cualquier manera que sea veáis los autos proreídos por la dichn nueritri
Real Audiencia que de suso van insertos y los guard6is. cumpláis y eje-
cutéis en todo y por todo según s u tecor y forma. Y en cumplimiento del
de veintisiete de abril del aiio pasado de setecientos cuarenta y siete, e n
virtud de las fianzas que tenbis dadas para la recaudación de los tributos
de los indios de vuestra jurisdicción procederéis a hacer padrón de los
indios del dicho Pueblo de Sococha, y os haréis cargo de recaudar
los tributos de los referidos indios, los que remitiréis a poder de
nuestros oficiales Reales de la Ciudad de Jujuy, para que por mano
da éstos se enteren al encomendero, tomando sumaria información dc
la cantidad que han pagado hasta aqui, y asimismo pasaréis a actuar
deslinde y amojonamiento de las tierras que según sus titulos hicie-
aen constar tener dichos indios en el referido Pueblo de Sococha prac-
ticóndolo con citación de los circunvecinos en la forma accstumbrada
señalando día para ello, y si al tiempo de actuarlo se hiciere contra-
c!icci6n por alguna de Ins partes interesadas, suspenderéis dicho des-
linde y daréis traslado a las demis, y de la respuesta de éstas n la
que contradijo sustanciando la causr! por los términos del Derecho, y
en caso necesario recibihiola a prueba determinaréis lo que hallares
ser de justicia, y s i de vuestra determinación se interpusiere el re-
curso de apelación lo otorgaréis libremente, pero no habiendo contra-
dicci6n alguna proseguiréis con dicho deslinde poniendo los mojones
según lo ministraren los tftulos, sin desposeer a ninguna de las par-
tes hasta que por la dicha nuestra Real Audiencia se apruebe el re-
ferido deslinde. Y asimismo pondréis edictos al eacicazpo del espre-
6ado Pueblo de Sococha para que los que lo pretendiesen por derecho
de sangre usen de él y lo deduzcan en la dicha nuestra Real Audien-
cia. Y en caso de que a vuestro antecesor o su Teniente General de
dicha Provincia se le hubiere entregado la Real Provisidn anteceden-
temente librada en virtud del citado auto, les notificaréis den razóii
a l a nuestra Real Audiencia de los tributos quo han recaudado de
los indios del mencionado Pueblo de Sococha y enteros que hayan
hecho de ellos en nuestras Reales Cajas y de no haberlos recaudado
que den igualmente razón por quE no lo han ejecutado. Todo lo cual
cumpliréis y ejecutaréis así precisa y puntualmente pena de la nues-
tra merced y de quinientos pesos ensayados para l a nuestra Real Có-
mara bajo de la cual mandamos a cualquier nuestro escribano público
o r e a l ' y a su falta a persona que sepa leer y escribir que ante dos
testigos os la lea, intime y notifique y siente la que hiciere para que
conste y sepamos cómo se cumple nuestro mandado. Dada en la Plata
en seis da noviembre de mil setecientos cincuenta años.
Yo don Juan José Toledo, Escribano de Cómarn del Catfilico Rey
Nuestro Señor la hice escribir por su mandado con acuerdo del señor
Presidente y Oidores.
Registrada Por el Gran Chanciller
Juan de Mallaria Juan de IIalIavia

Señor Alcalde Ordinario


Don Lorenzo Ignacio de Goyechea vecino de esta Ciudad, como
más haya lugar en derecho: Ante Vm. parezco y digo, que conviene
a1 mio el que con citación del Procurador ~ e n e r a l ,se me dé copia
autorizada en pública forma y manera que haga fe a continuación
de éste mi escrito de la cabeza y pie del testamento que por su fa-
llecimiento otorgó mi padre don Martin Miguel de Goyechea, con la
cláusula donde declara sus hijos legítimos, cuyo instrumento pasó su
otorgamiento ante Nanuel de Borda escribano público y de cabildo.
Por tanto a Vm. suplico provea y mande como pido en que recibiré
Justicia, etc.
Lorenzo Ignacio de Couecliea
Jujuy y marzo 16 de 1701.
Por presentada, désele el testimonio que esta parte pide con ci-
tación del Síndico Procurador.
Nartierena
Proveyó, mandó y firmó el señor don Tomás de Alartierena, Al-
calde Ordinwio de Segundo voto por nnte mí que doy fe.
Arizniedi
Escribano
Incontinenti yo el escribano notifiqué el decreto que antecede a
don Lorenzo Ignacio de Goyechea en su persona, doy fe.
Arizniendi
Escribano
En el mencionado día cité con el decreto antecedente y para lo
en 61 contenido, al síndico procurador de Ciudad don Francisco Javier
del Portal en su persona. doy fe.
Derechos 14 reales
A~iznmuli
Escribano
En el nombre de Dios Todo Poderoso, con cuya gracia tienen to-
das las cosas buen principio, y loable medio, y dichoso fin. Amén.
Sea notorio a todos los que la presente vieren como Nos, el Ministro
Principal Tesorero don Gabriel GUemes Montero y don Lorenzd Ig-
nacio de Goyechea, Alcalde llayor Provincial actual propietario, usando
de las facultades del poder que de suso (se hará mención) para otor-
gar el testamento de nuestro instituyente, y padre el AIaestre de Campo
don ñlartín Miguel de Goyechea, ya difunto, el cual sacado al pie
de la letra es como se sigue: En esta Ciudad de San Salvador de.Ju-
juy en nueve dias del mes de agosto de mil setecientos ochenta y cinco
años. Yo, BIanuel de Borda, escribano público y de Cabildo, certifico
en cuanto puedo y el derecho me permite n todos los que el presente
poder vieren, cómo a cosa de las ocho de la noche fui llamado a casa
del Maestre de Campo, don BIartín Miguel de Goyechea, a quien lo
hallé enfermo en la cama, con accidente que no le privaba los ent ti-
dos, antes si, en su entero juicio, memoria. y entendimiento, según
su conversación indiscrepante dc lo que doy fe, como asimismo de s u
conocimiento. y por éste otorga, todo s u poder cumplido bastante y
lleno cual de derecho s e requiere, y es necesario para más valer a s u
yerno el señor Tesorero don Gabriel GUemes Montero, y s u hijo don
Lorenzo Ignacio de Goyechea, Alcalde Mayor Provincial, actual pro-
-pietario a falta del uno al otro, y en el todo Insolidicni, para que lo
que el uno empezare, el otro siga, fenezca, y acabe y entre ambos pue-
dan otorgar y otorguen s u testamento última y postrimera voluntad
~ c g ú nsus comunicatos, reservando en s í el señalamiento de sepultura,
mortaja y entierro el cual ha de s e r en el convento de Nuestro P a d r e
San Francisco en la Capilla de Nuestra Señora del Rosario de donde
por privilegio de sus autores. y sucesivo a dicha sepultura a donde
manda se le entierre con el hbbito de dicho Nuestro Padre San Fran-
cisco con la pompa y funeral que arbitraren sus albaceas, y asimismo
en las misas por el bien de sus almas pagiindolas según el presente
establecimiento sin que en el número tenga intervención el Ordinario,
pues no se&dó las que se puedan mandar decir. Y por tener total
confianza e n los dichos apoderados, para otorgar s u testamento les
confiere con libre y general administración y sin limitación alguna
y que puedan declarar s u patria, padres y bienes (si conviniere) como
asimismo de que fue casado según la, orden d e nuestra Santa Madre
Iglesia con doña Ignacia de la Corte con quien dice procrearon varios
hijos de los que hoy viven el dicho señor Alcalde Provincial don Lo-
renzo Ignacio de Goyechea, doña Maria Magdalena de Goyechea, mujer
legítima del señor enunciado Alinistro Tesorero y don Esteban, de Go-
rechea fatuo anatibitate, e incapaz de poder manejar caudal alguno;
por lo que dijo ser s u voluntad dejarlo a éste, a entre ambos dos apo-
derados, para que como a hijo del otorgante, y hermano de ellos, l o
asistan, cuiden y mantengan, con el amor que el otorgante espera de
sus fidelidades. pues desde luego, los nombró por tutores, y curado-
res nd bonus quedando dichos tres hijos por herederos, en igual grado
para que con la bendición de Dios, y la del paciente, gocen y posean
todos s u bienes acciones, y derechos que al presente tenga y e n ade-
Inntc tuviere, instituyéndolos como los instituye por sus universales
. herederos; y para cumplir y pagar el testamento que en virtud de
este poder se otorgare, mandas y legados que parecieren, nombra por
- PUS albaceas cabezaleros a los enunciados hijo y yerno para que for-
men s u testamento, pagando a las mandas forzosas a peso a cada
una, y que se saque de lo m i s bien parado d e sus bienes, con l o cual
revocó. anuló y dio por de ningún valor, n i efecto. todos cualesquiera
poderes, testamentos codicilos. que antes de éste hubiese fecho, y otor-
nado, por palabra, o escrito y es s u voluntad que solamente valga éste
en juicio y fuera de él por estar fecho, y otorgado ante el escribano
público y de cabildo suso mencionado, y yo el dicho doy f e como ex-
preso, y fueron testigos a este otorgamiento .don J u a n BIiguel de
Salazar, don Tomirs d e Inda. don Juan Bautista de Arizmendi, y don
niego de la Corte, y por no poder firmar el paciente por la gravosi-
dad del accidente, lo hizo a s u ruego el seiior Cura y Vicario de esta
enunciada ciudad, doctor don Pascua1 Eailón Pereira, siendo todos tes-
tigos vecinos, llamados y rogados para este otorgamiento; el cual es
GUEBIES DOCUMENTADO 25 1

fecho en esta norninada Ciudad de Jujuy en el día de s u fecha. y en


f e de ello lo signo y firmo. A ruego de él, doctor José Pascua1 Bailón
Pereira. Testigo Jitan illig~iclde Salazar. Testigo Tomás de, lnda. Tes-
tigo Diego de la Corte. Testigo Jiian Bauti.~tade Ariznzendi. E n tes-
timonio de verdad. Alanuel de Borda, Escribano Público y de Cabildo.
E n cuya conformidad, y para que tenga el debido efecto,
Sigue. materia de tonta importancia, y s e desempeñe l a confianza
que pide puntual cumplimiento el poder que de suso va
inserto, habernos los comparecientes de otorgar este testamento que
nos tiene comunicado y poniendo10 en efecto en aquella vía y forma
riegún la Última voluntad de dicho nuestro padre finado don Alartín
Miguel de Goyechea y en s u nombre lo ordenamos en la manera si-
guiente. E n el nombre de Dios Todo Poderoso con cuya gracia y ben-
dición todas las cosas tienen buen principio, loable medio y dichoso
fin, amén. Jesús, María y José. Sea notorio a todos los que la pre-
sente carta de testamento última y postrimera voluntad del Ilaestre de
Campo don ñlartín Miguel de Goyechea vieren, que nos el Ministro
Principal de Real Hacienda don Gabriel Gtiemes Montero, y don Lo-
renzo Ignacio dc Goyechea, Alcalde FiIayor Provincial propietario. otor-
ramos en nombre de dicho finado don XIartín Miguel de Goyechea Y
en virtud (le. su -poder que arriba va inserto. Invocando como desde
luego invocamos, el amparo y protección de l l a r l a Santísima Madre
de Nuestro Señor Jesucristo, concebida sin mancha de pecac?o origi-
nal, desde el primer instante de su s e r natural y la de los Santos
Apóstoles San Pedro y San Pablo y demls cortesanos del cielo para
que intercedan con s u Divina Majestad, nos ayude con su Santísima
Gracia a la facción de este testamento y s e r servido de poner en ca-
r r e r a de salvación el alma de dicho finado, y le perdone sus culpas
por la preciosa sangre, pasión y muerte con que nos redimió. que así
lo esperamos por su infinita misericordia y uea todo loable por los si-
glos de los siglos y con su santa inspiración lo ordenamos e n la
30 manera ~ i g u i e n t e :Item declaramos como notorio que el expre-
sado finado don I\lartín IIiguel de Goyechea f u e natural de esta
ciudad, hijo legítimo y de legítimo matrimonio del general don I\Iipuel
Esteban de Goyechea, Regidor Alcalde mayor provincial de este Ilustre
Cabildo y de doña Alaría Ana de Argnñaraz y Alurgía, ambos naturales
de esta propia ciudad ya finados lo que así deciaramos para que
4O conste. Item declaramos por notorio f u e casado según orden d e
nucstra Santa Madre Iglesia, con doña Ignacia de la Corte y
Rosas, natural de la Ciudad de Salta, hija legitima y de legitimo matri-
monio de don Antonio de la Corte y Rosas y de doña María Palacios
Ruiz y llano^, el primero natural de los Reinos de España x l a segunda
de la misma ciudad de Salta. y de cuyo matrimonio tuvo el citado don
Martin Miguel diferentes hijos de los que e610 existen vivos en esta
fecha y en la del otorgamiento del poder suso inserto tres, según así
lo tiene declarado que lo son todos legítimos a saber, don Esteban. de
edad de veintiséis años, poco m i s , o menos. fatuo nnatibitate, e incapaz
de poder manejar por s i caudal, hacienda, n i ninguna cosa en que deba
intervenir el entendimiento. Yo don Lorenzo Ignacio de Goyechea
de edad de veinticuatro años cumplidos, Regidor Alcalde niayor Pro-
vincial de esta Ciudad y doña X a r i a 3Iagdalena de Goyechea de edad
de veintiún aiios. estando casados estos dos el primero con doña l i a r í a
Jgnacia Fernández Cornejo, hija legitima y de legitimo matrimonio
del señor Coronel don Juan AdriSn Cornejo y de doña Clara de la Corte.
vecinos de la Ciudad de Salta y la segunda conmigo el Comisario de
Guerra de los Reales Ejércitos Tesorero BIinistro Principd de Real
IIacienda de esta Provincia don Gabriel Güemes BIontero y Bárcena,
hijo legitimo y de legitimo matrimonio de don Manuel de Güemes
Montero Campero de Sorrevilla y de doña Francisca de Gárcena Gómez
Campero, todos naturales del lugar de Abionzo, Valle de Carriedo.
Obispado Santander de los Reinos de España, con la bendición g Lene-
pliícito de dicho finado, lo que así declaramos para que conste.
100 Item para cumplir y pagar este testamento. mandas y le-
gados nos nombramos para albaceas cabezaleros, fidcicomi-
sarios, según la voluntad de nuestro instituyente, y nos damos todo
el poder lleno bastante, cual de derecho se requiere, y es necesario para
más valer, entre ambos dos. con igual facultad para que lo que el uno
empezare, el otro siga, fenezca y acabe, y en caso necesario de man-
común, e insolidum, y que podamos parecer en juicio y fuera de 61,
así demandando como defendiendo, la casa, y sus bienes, hasta que
se verifique la división y partición de bienes, entre ambos dos herede-
ros y nos constituimos, y nombramos por tales tutores y curadores
ad bonn de nuestro hermano don Esteban de Gogechea, fatuo, y mudo
(le nacimiento y nos obligamos como buenos hermanos y fieles tutores
a mantenerlo con la estimación, amor y caridad con que lo miraban
nuestros difuntos padres, lo que así declaramos para que
1lQ conste. Cumplido y pagado que sea este testamento. mandas
y legados en el remanente de tmlos los bienes, acciones y
derechos de nuestros pedres ya difuntos, así presente como futuros
nos instituimos por sus universales herederos yo el citado Ministro
don Gabriel de Giiemes Montero, como mnrido y conjunta persona de
doña BIaria Blagdalena de Goyechea, a su nombre y por ella; y yo el
dicho Alcalde Provincial don Lorenzo Ignacio de Goyechea como hijo
lcgitimo de los nominados nuestros padres don hIartin XIiguel d e
Goyechea y dolia Ignacia de la Corte en iguales partes, sin preferencia
alguna, para que con la bendición de Dios y la de los contenidos nuestros
padres gocemus y poseamos en haz y paz lo que así declaramos para
que conste. Con lo cual revocamos, anulamos y damos por de ningún
valor n i efecto todos y cualesquier poderes, testamentos y codicilos,
que antes de éste s e hubiese fecho y otorgado por palabra, o por es-
crito y s i acaso pareciere, es nuestra voluntad, no haga f e en juicio,
ni fuera de él, antes s i sean despreciados, y rotos por el juez o jueces,
donde sean presentados y sólo queremos. que este testamento valga
tomo s i estuviera otorgado por el nuestro instituyente con 13s solem-
nidades prefinidas por derecho, parecer de asesor letrado pues, lo
tenemos fecho y otorgedo en virtud del poder suso inserto, arreglados
a SUS comunicatos que anteriormente nos había hecho, con el presente
escribano público y de Cabildo de esta ciudad, y yo el dicho escribano
q u e presente estoy a este otorgamiento doy f e conozco a los otorgantes
quienes estando en su sano juicio, memoria, entendimiento y voluntad,
así lo otorgaron bajo del pie del poder que se les confirió por ante m í
yor el precitado Maestre de Campo don JIartín Miguel de Coyechea
g lo firmaron siendo testigos vecinos, llamados y rogados para este
ctorgamiento, don Tomás de Inda, don Angel Antonio de la Bárcena
y don Juan Bautista de Arizmendi y es fecho en esta precitnda Ciudad
tle San Salvador de Jujuy e n trece dias del mes de agosto de mil
setecientos ochenta y cinco años; y en f e de ello lo signo y firmo.
Gnbriel de Giicn~es Jlontero. Lorenzo Ignacio de Go~ecliea. Testigo
Angel Antonio de la nái*cena. Testigo T o n ~ i sde Inda. Testigo Jitan
Eniitista de Arizniendi. E n testimonio de verdad. Jlanitel (le Corda,
escribano público y de Cabildo. Enmendado: forma -según, vale.
Va cierto y verdadero este traslado y concuerda con las cláusulas
,(le1 testamcnto original de su contexto que queda en esta oficina de mi
cargo al que en lo necesario me refiero y de pedimento del Regidor
Alcalde mayor Provincial don Lorenzo Ignacio de Coyechea y Decreto
Judicial autorizo y firmo en Jujuy a veintitrés de marzo de mil sete-
ciento3 noventa y un años.
E n testimonio [un signo de Cruz] de verdad
J u a n Bautisfa de Arizn~endi
Escril~ano Público y de Cabildo
Derechos 4 reales foja.

Señor Vicario y Juez Elcsiistico.


Don Lorenzo Ignacio de Gopeehen, vecino de esta ciudad como
m i s haya lugar en derecho ante Vm. p:irezco y digo. que en el Juzgado
f:eal de ella como encargado de mi cuñado don Cabriel Güemes BIontero,
Jlinistro Tesorero de la Real Caja de la Capital de Salta, estoy si-
guiendo varias diligencias concernientes a d a r pruebas de la filiación
y genealogía de su consorte doña María Magdalena de Coyechea; e n
cuya virtud se ha de servir la justificación de Vm. con vista de los
Libros Parroquiales y demis documentos del archivo eclesiAstico con
citaciGn del Procurador Cenernl, darme copia fehaciente certificada
tle la partid2 de casamiento de don Martín de Coyechea, natural del
reino de h'avarra con doíia Ana María Rodríguez Vieyra <le la IIota. bis-
abuelos paternos de dicha mi hermana. La de las nupcias que contrajo
don Miguel Esteban d s Coyechea con doña Nariana de Argañaraz y
lIurgu1a con la f e d e bautismo d e estos abuelos paternos de la con-
tenida doña BIaria Afagdalena y asimismo la (le bautismo de mi tío
iibuelo paterno don José Antonio dc Goyechea, con la de mi padre don
3Iartin nliguel de Goyechea y la de don Juan de Palacios mi hisabuelo
materno y fecho se me devuelva para el efecto que se reqtiiere por tanto.
A Vm. suplico provea como pido en que recibiré justicia, etc. Entre
renglones: su, e.
Lorenzo Ignacio (le Co~eclrea
Jujuy y marzo 21 de 1791.
Désele a esta parte las certificaciones que pide, cor. citación del
Procurador General, así lo proveyó, mandó y firm6 s u merced el señor
Vicario de que doy fe.
Maestro T o n ~ dde
. ~ Bttrgos
Ante mí
Lorenzo Fertuindez de ñfedina
Notario Público Eclesiástico
Incontinenti yo el h'otario Eclesiástico notifiqu6 el decreto que
antecede a don Lorenzo Ignacio de Goyechea en s u persona, doy fe.
iiledina
h'otario Público
E n el mencionado día cité con el decreto antecedente y para lo
e n 61 contenido, a1 síndico procurador de Ciudad don Francisco Javier
del Portal en s u persona doy fe.
Aledina
Notario Público Eclesi6stico
El maestro don Tomás de Burgos cura y vicario forineo y Juez
de diezmos de esta Ciudad de San Salvador de Jujug; certifico que
en uno de los Libros Parroquiales de Casamientos que empieza el año
de mil seiscientos setenta y nueve a fojas 68 vuelta. se halla una partida
del tenor siguiente:
Partida de Casamiento de E n veintinueve de mayo de mil seiscien-
don hlartín de Goyechea. hijo tos ochenta y cinco años, corridas dos
legítimo de Esteban de Go- amonestaciones en las Misas Solemnes
yechea y de Sebastiana de de los dias veintiséis y veintisiete de
Zabala. con doña Ana María dicho mes, dispensando en la tercera $1
Rodriguez Vieira, hija legí- pedimento de personas de respeto en mi
tima de Juan Itodríguez l'iei- presencia habido s u mutuo consenti-
ra y de doña EIIaría de la miento por palabras de presente, con fa-
Mota. todos bisabuelos y ter- cultad mía juntó solemnemente en ma-
ceros abuelos de dofin María trimonio cl Eachiller Domingo Rodríguez
3Iagdalena de Goyechea. de la Mota, clérigo Presbítero. al Capi-
tán Martín de Goyechea, natural de la
Villa de Bera e n los Reinos de Navarra.
hijo legítimo de Esteban de Goyechea y de Sebastiana de Zabala, con
doña Ana Alaría Rodrísuez Vieira. hija legítima del capitán J u a n Ro-
tlríguez Vieyra y de doña María de la Mota y los veló el día treinta
de dicho mes, siendo testigos el Capitdn don Vicente Calvimonte y s u
esposa doña Magdalena Vieyra de la Mota. Urbano Frclnco de Oliva.
Asimismo certifico n o haherse encontrado la partida de bautismo
de don José Antonio de Gopechea, pero para suplir este detecto s e
halló en un libro de confirmaciones que hizo el llustrisimo y Reveren-
dísimo señor doctor don F r a y Nicolás de Ulloa. Obispo de esta Diócesis
una del tenor siguiente que aparece a fojns 25.
GÜEMEs DOCUAIENTADO 255

Partida de confirmación de En diez de setiembre de mil seiscientos


don José Antonio de Coye- noventa y nueve, se confirmó José An-
chea, tío abuelo paterno de tonio de Goyechea, hijo legítimo del
doña AIagdalena d e Goye- Maestre de Campo AIartin de Coyechea
chen, hijo legitimo de don y doña Ana IIaria de la Mota y al fin
Martín de Goyechea y de de dicho libro se hallan firmadas todas
doña Nariana de la Mota. las partidas de confirmaciones por el
Cura Rector Url~nneFranco de Oliva.
Certifico también, que en otro libro que empieza el año de mil
seiscientos noventa y cinco se halla a fojas 77 una partida que dice así:
Partida de bautismo de doña E n veinticuatro de diciembre de mil ae-
Mariana de A r g a ñ a r a z y tecientos siete, habiendola bautizado yo
Afurguia, hija legitima de el Cura Rector puse Óleo y crisma a 'Ia-
don Bartolomé de Argañaraz r i m a , hija legftima del Sargento Mayor
y alurguía y de doña Simona don uartolomé de Argañaraz y &furguia
de Pineda, abuelos paternos y de doña Simona dc Pineda; fueron pa-
de la dicha doña Mnría >lag- drinos Pedro Apustin de la Tijera y doña
dalena de Coyecher. Rosa Ortiz de Zárate. Maestro JosE
Vz'eura.
Certifico asimismo que e n otro libro de bautismo que comienza
el año de mil seiscientos setenta y nueve a fojas 2. vuelta esta una
partida en esta forma.
Partida de bautismo de don E n trece de mayo de mil seiscientos
Juan de Palacios, hijo Icgi- ochenta puse óleo, y crisma a Juan, hijo
timo de don Francisco Pala- legitimo de don Francisco Pnlacios p
cios y de dofía Francisca Mar- de doña Francisca Nartines dc Irinrte.
tínez de Iriarle, abuelos ma- fueron padrinos Juan Blartinez de Iriarte
ternos de la expresada dcñ; y doña Felipa d e Frins y Sandoval.
hfaria Magdalena. Urbnno Franco de Oliva.
Certifico finalmente que en otro libro que empieza e n mil sete-
cientos diecisfis años, n fojas 21 vuelta se halla una partida del tenor
siguiente:
Partida de bautismo de don E n la Iglesia BIntriz de esta ciudad
BIartín AIiguel de Goyechea. de San Salvador de Jujuy en trece de
hijo legitimo de don AIiguel enero de setecientos treinta y dos años.
Esteban de Cogechcn, y de con licencia que le di yo el 1,icinciado
doña BIarinnn de Argañaraz don J u a n de Herrern, Cura Rector. Vi-
y BIurguia, padres de la con- cario Forineo y juez de Diezmos p hn-
tenida doña Maria %lagda- Il.índome prcsente bautizt, puso Ó!eo y
lena de Goyechca. crisma el Padre Juan Francisco de Agui-
l a r de la Compañia de Jesús. a IIartin
Miguel hijo de don AIiguel de Goyechen
y d e doña AIarizna de Argañaraz, padrinos, José de Znbala y doña
Cregoria de Argañaraz, testigos don Pedro Salcedo y don José Antonio
d e Goyechea y lo firme. Licenciado Jitnn de Herrero..
Así constan y parecen las citadas partidas en los libros que s e
256 LUIS CUE~IES

expresan a que me refiero y de pedimento de don Lorenzo Ignacio


de Coyechea, Regidor Alcalde Mayor Provincial, doy la presente e n
e s t a Muy leal y constante Ciudad de San Salvador de J u j u y en veintitrés
dias del mes de m a n o de mil setecientos noventa y uno años, por ante
.e! prasente Notario Público Eclesiiistico de que d a fe.
alaestro Tonlús de Ricrgos
Ante m í
Lorenzo Fernández de Jledina
Notario Púl>lico Rclesiistico

Derechos que -correspontlcii a este expediente Pesos Reales


Al seíior Vicario por una firma .................. 4
P o r cinco certificaciones inclusive la busca de libros
y su registro importan veinte pesos y de estos
le corresponden a dicho señor Vicario ........ 8 -4
9 -
Idem a mi el presente Notario por el decreto, notifica-
ciones, buscn y registro de libros y la parte
que me toca en las certificaciones ............ 12 G

Importa veintiún pesos y seis reales .............. 21 G

-Jujuy y marzo 23 de 1731.


Lorenzo Fcrnciadez de ,lIedina
Notario Público Eclesiistico
Eecibimos de don Fililerto de BIena. apoderado del señor Teso-
rero don Gabriel (Ic Güemes Nontero, la cantidad que a cada uno per-
tenece de las diligencinn antecedentes que monta toda veintiún pesos
.seis reales y lo firmamos fecha u t supra.
Maestro Tontús de Bttrgos
Lorenzo Fenr<írzrlez de Jledina
Notario Fúblico Eclesiiistico
Seiior Alcalde Ordinario.
Don Lorenzo Ignacio de Coyechea, en las diligencias que por en-
í.argo de mi hermano don Cabriel de Güemes ñIontero estoy siguiendo
relativa a esclarecer y d a r prueba de la progenie pzterna de su con-
~ o r t edoña Nnria Magdalena de Coyechea; parezco ante Vm. en debida
forma y digo que respecto haberme presentado pidiendo s e recibiese
sobre este asunto, información de limpieza de sangre y siendo nece-
.snrio el que los testigos que presentare se instruyan de alguna manera
para la mejor aserción de sus deposiciones, hago presentación con el
juramento necesario de unos documentos en 23 fojas iitiles para que
a dichos testigos s e les manifiesten, los cuales contienen, la oposición
que hizo m i abuelo don iiIiguel Esteban de Goyechea en el ano pasado
de mil setecientos treinta y cinco a la encomienda de indios Socochas
que se le concedió en virtud de sus méritos y servicios y dc los que
contrajo mi bisabuelo don AIartin de Goyechea, por el señor Goberna-
dor don J u a n de Armasn y Arregui, constando asimismo el titulo que
éste libró con referencia al que la Real Audiencia de L a Plata tenía
Llado nl dicho m i abuelo de Gobernador de las armas de esta ciudad y
subsecuentemente sigue una relacidn de sus méritos y servicios im-
riresa en AIadrid a diez de enero de mil setecientos treinta y ocho.
concluyendo dichos documentos con una Provisión Real del año de mil
setecientos cuarenta y siete en que s e califica haber aucedido en el
dicho feudo de encomienda m i finado pndre don BIartín B I i ~ u e l de
Goyechea, que es lo que en sustancia contienen los recaudos que se citan
])ara instruir en sus declaraciones a los mencionados testigos. P o r tanto.
A Vm. suplico me haya por presentado con los documentos que se
expresan y en s u inteligencia se sirva proveer y mantlar como pido
en que recibir6 justicia y para ello, etc.
Lorenzo Ignnrio de Go~echea
Jujuy y marzo 22 de 1791.
P o r presentada con los documentos que le acompañan, con m i s
unas cliusulas testamentarias del que otorgó don iilartin filiguel d e
Goyechea y otras dilip.encias del juzgado eclesiástico de varias partidas
de bautismos y casamientos, que h a exhibido en este juzgado sin escrito,
que se agregarán a dichos documentos. para que todo se manifieste
s los testigos de la informaci6n que pide se le tome; así lo proveyci,
mandó y firmó el señor don Tomás (le iiIartierena. Alcalde Ordinario
de segundo voto de que doy fe.
filartiercna
Ante mi
Jnan I:niiti.stn de Arizntcndi
Escribano Público y de Cabildo
E n el mencionado día notifiqué e hice saber el decreto antecedente
a don Lorenzo Ignacio de Goyechea en s u persona doy fe.
Arizniendi
Escribano

Señor Alcalde Ordinario.


Don Lorenzo Innacio de Goyechea. en las cliligencias que estoy
siguiendo en el juzgado de Vm. como parte legitima de mi cuñado don
Gabriel de Güemes AIontero. Tesorero de Real Hacienda de las cajas
matrices de la Ciudad de Salta para probar la filiación y abolenpos de
s u mujer doña Alaria AIapdalena de Goyechea, parezco ante Vm. e n
debida forma y digo que hago presentación con el juramento necesario
de un instrumento antiguo en testimonio autorizado en pública forma
en 9 fojas útiles remitido de España por don Juan Ortiz de ZSrate
Argañaraz y BIurguía, hijo legitimo de don Pedro Ortiz de Zdrate y
de doña Petronilla de Ibarra Argañaraz y AIurguia, vecinos que
fueron de esta ciudad por cuyo documento se prueba el origen y noble
apellido de Argañaraz y Murguía del que se ha de servir la justifica-
ción de Vm. mandarme dar copia fehacientemente a continuación de
este pedimento con citacidn del Procurador General y fecha se me
devuelva el documento que se expresa por tanto.
A Vm. suplico provea y mande como pido en que recibiré justicia,
etcétera.
Loremo Ignacio de Collechea
Jujuy y marzo 23 de 1791.
Por presentada con el documento que le acompaña y con citación
del Sindico Procurador désele el testimonio que pide, devolviéndole
dicho documento; así lo mandó y firmó el señor don Tomes de Mar-
tierena, Alcalde Ordinario de segundo voto de que doy fe.
Tomás de ñlartierena
Ante mi
Juan Bautista de Arizntendi
Escribano Público y de Cabildo
Incontinenti, yo el escribano cité con el decreto antecedente y para
lo en 61 contenido a1 Sindico Procurador Interino, don Francisco Javier
del Portal en su persona, doy fe.
Anzntendi
Escribano
En el nombre de Dios Todo Poderoso y de la Virgen María su
bendita Madre y demds santos y santas de la Corte Celestial, Amén.
sEpase por esta carta como nos el eapitan don Juan Ortiz de Zdrate
Arsañaraz hIurguin y doña AIaria Teresa de Idihguez Echdriz, su
legítima mujer, aquí no se entiende por haberse borrado las letras 6.
Y leales Villas de Astigarraga, Ascoitia, Zumayas y Amezqueta y otras
en esta muy noble y muy leal Provincia de Guizpúzcoa, Reino de Castilla,
y yo el dicho don Juan, hijo legitimo y mayor en edad dc los señores
don Pedro Ortiz de ZSrate y doña Petronila de Ibarra Argañaraz Mur-
guía, ya difunta. que santa gloria haya, vecinos de la Ciudad de San
Salvador de Jujuy en la Provincia del Tucumhn, Reino del Perú y como
tal hijo de los referidos, vecino que soy del lugar de Aranguiz, her-
mandad de Badajoz en la muy noble y muy leal Provincia de Alava
J. de la Ante Iglesia de Gorliz en el señorío de Vizcaya y dueño y señor
natural de las casas solares de mi apellido en esta dicha Provincia
y patrón único y deniseio de 13 Iglesia Parroquia1 nombrada Santn
hlaria de Murguia y de la ermita de Santa María AIagdalena en la dicha

6 Estn nota pertenece al testimonio que copiamos. D.G.


CÜEZIES DOCUXIENTADO

Villa de Astigarraga y así bien patrón de la Iglesia rural de Nuestra


Señora de Ugarte en la dicha Villa de Amezqueta e inmediato sucesor
de la encomienda de los Pueblos de Indios de Ilumahuaca, Sococha ?
~ u anexos
s sitos en Jurisdicción de dicha Ciudad de San Salvador y
de la Provincia de los Chichas en dicho Reino del Perú por merced que
Su Majestad (que Dios guarde) hizo a mis mayores patercos como
a conquistadores que fueron de aquella partida y fundadores de la dicha
Ciudad de San Salvador y yo la dicha doña María Teresa de Idi5puez
Echáriz, hija legitima y heredera de los señores Capitán de Caballos
Corazas don Cristóbal de Idiáguez, caballero que fue del Orden de
Santiago y Gobernador de las Armas de la Villa de Placenciz en e s b
dicha Provincia de Guipúzcoa y de doña BIariana de Echáriz su mujer
legítima ya difuntos, vecinos que fueron de las dichas Villas de Azcoitia
y Zumaya; con licencia y expreso consentimiento que yo, dicha doña
María Teresa primero y ante todas cosas y pido y demando al dicho
mi marido, para otorgar y jurar esta escritura y obligarme a su obser-
vancia, paga cumplimiento y yo el dicho don Juan doy y concedo dicha
licencia a la dicha doña María Teresa mi mujer en bastante forma (de
que YO Francisco de Aguirre escribano de Su Majestad .y del número
de la noble y leal Villa de IIernaní en dicha Provincia de Guipúzcoa.
doy fe por haberse pedido y concedido dicha licencia ante mí y de los
testigos de esta escritura que de yuso irán escritos y nombrados). I'
usando de la dicha licencia. decimos ambos marido y mujer que por
cuanto por el mes de junio del año pasado de mil seiscientos y sesenta
g cuatro, el dicho señor don Pedro Ortiz de ZArate, nuestro Padre
Cura Rector que es de la Iglesia Parroquia1 de la dicha Ciudad de San
Salvador y Comisario del Santo Oficio de la Inquisición y de la Santa
Cruzada de ella y su jurisclicción, y yo el dicho don Juan en su compañla
como tal su hijo mayor y sucesor en dichas casas solares, pasamos desde
!a dicha Ciudad de San Salvador a la de la Trinidad Puerto de Buenos
Aires Provincia del Río de la Plata que dista trescientas leguas por
tierra con ánimo y disposición de embarcarnos para estos Reinos de
España con licencia de Su Majestad y de su prelado Eclesiástico
de aquella Diócesis en los navíos de permiso que se hallaban ~ u r t o sen
dicho puerto, de cuenta del Capitán don Ignacio de BIaleo, Caballero
del orden de Santiago y vecino del Valle de Oyarzun en esta dicha
Provincia de Guipúzcoa y entre otras disposiciones el dicho señor
nuestro padre la tenía y traía roluntririamente de cuatro mil pesos
corrientes de a ocho reales de plata cada peso aplicndos para la impo-
sición de una capellania de misas en sufragio de su alma y de la de
dicha señora doña Petronila su esposa y madre mía difunta y en socorro
también de las almas de los seííores padres y abuelos y dernhs personas
de la obligación de dichos señores mis padres y mía si Dios Nuestro
Señor nos trajese con bien a salvamento a este dicho Reino de España
donde hecha la dicha fundación se había de constituir por Único y
principal capellfin para servirla durante sus días. Y en esta confor-
midad dispuso en el camino su testamento en que ordenaba se fundase
la dicha capellanía en la Iglesia parroquia1 del dicho lugar de Aranguiz
ngregándola a la que habla fundado Lucas Ochoa de Zárate, vecino
que fue de dicho lugar de Xranguiz y de la Ciudad de Sevilla p porque
el dicho viaje s e frustró entonces por causa de que cuando llegamos al
dicho Puerto de Guenns Aires hallamos estar ya en viaje dichos navíos,
nos fue preciso volvernos a la dicha Ciudad de San Salvador donde
llegados que fuimos. el dicho señor mío padre por testimonio d e Fran-
cisco Guerrero escribano de Su Majestad y vecino de la dicha Ciudad
de San Salvador, el año siguiente de mil seiscientos sesenta y cinco.
impuso dicha c a p d a n í a de cuatro mil pesos de principal y doscientos
pesos de reiita sobre su hacienda, niolino y chacras de San Lorenzo, sita
en jurisdicción de la dicha ciudad, constituyéndose por patrón de ella
durante sus días y nombrando capellin a quien se le dio la colación de
dicha Cnpellnnía después de lo cual yo el dicho don Junn con beneplicito
y licencia del dicho seíior mi padre por el mes de febrero del aiio pasado
de mil seiscientos y sesenta y nueve sali de la dicha Ciudad de San
Salvador para la de Lima en demanda de alcanzar los galeones de aquel
año para pasar n este Reino y por causa de habcr llegado yo el dicho
don J u a n a tiempo que eran ya vueltos para este dicho reino y haber
sabido en la dicha Ciudad de Lima que se esperaban dos navíos de per-
miso e n el dicha Puerto de Guenos Aires d e cuenta del Capitán don
IIiguel de Vergara, me embarqué en el Puerto del Callao para el reino
de Chile de donde llegado que fui pasé para el dicho Puerto de Guenos
Aires en alcance de dichos navíos y a los fines del año siguiente de mil
seiscientos y setenta me embarqué en uno de dichos navíos para este
dicho Reino y con ocasión de haber muerto el tal capellfin h a servido
la dicha capellania el dicho seiior mi padre y habiendo sabido que yo
había tomado estado en esta dicha Provincia con la dicha doña 3Iaría
Josefa de Idi$?uez y reconociendo que e n estas partes sería m i s firme
y permanente, trató de redimir los dichos cuatro mil pesos del principal
de dicha capellanía remitiéndolos a este dicho reino de España para
que yo como tal s u hijo mayor que sucedo en el p a t r o w t o de ella la
impusiese en las fincas más seguras y permanentes que se pudiesen
hallar y por entonces con licencia del ordinario Eclesifistico de aquella
diócesis resolvió remitir como con efecto remitió a m i poder e n los
últimos navíos que el año pasado de mil seiscientos y setenta y nueve
llegaron del dicho Puerto de Buenos Aires de cuenta del dicho don
Ifiguel de Vergara hasta en cantidad de dos mil pesos de a ocho reales
de plata cada uno, que los recibí en la Ciudad de San Sebastián de
mano del sangues que condujo las demfis plata de particulares por el
mes de mago del año pasado de mil seiscientos y ochenta, e n ocasión
que en virtud de nueva premfitica de Su 3Iajestad habia bajado a la
mitad el premio de la Plata de suerte que valiendo como había valido
hasta poco antes de la entrega n razón de veinticuatro reales de vellón
cada peso bajó a doce reales de ve!lÓn el peso que es lo que al presente
corre como es público y notorio y quedaron en dicha Ciudad de San
Salvador los otros dos mil pesos por no remitir todo de una vez por el
ieparo de las contingencias y riesgos (le la mar para enviarlos t a m b i h
en otra ocasión constando primero por instrumento legitimo haberse
fundado a senso los dichos dos mil pesos recibidos por mí para que
con los cuatro mil enteramente quedase instituida la dicha capellanía
CUEMES DOCUNENTADO 26 1

con s u principal de plata y la renta correspondiente a la dicha cantidad


senún reales premáticas d e éste reino, ordenándome por s u s cartas
misivas la impusiese en la parte y lugar que más conviniese a la conser-
vación de ella y utilidad mía con que alguna parte de las misas se rezasen
en h Iglesia Parroquia1 del dicho lugar de Aranguiz con las cláusulas,
calidades y condiciones que me pareciesen y que quedando yo por pri-
mer patrono de ella nombrase los que después lo han de s e r perpetua-
mente quedando también por primer capellán de dicha cnpellanín el
dicho señor don Pedro Ortiz de Zárate, mi padre, con calidad que después
(Ic sus dias hayan de suceder en ella personas que sean dependientes de
la casa solar de Zlirate, sita en el valle real de Zuya y del dicho lugar
dc Aranguiz según y en la forma y con las cláusulas, llamamientos y
condiciones que me pareciesen, de manera que e n la forma dicha hayan
ale tener los patronos libre facultad de poder nombrar por capellán
al que les pareciere sin atención a nrados de parentezco más próximo, (

o más remoto y mera voluntad de los patronos. y que señalase yo la


renta y estipendio aíial y el número de misas que se hubiesen de decir
en cada a ñ ó en socorro de las almas d e los susodichos y que durante s u s
dias s e rezasen las dichas misas por pitancería y estipendio donde me
pareciese y lo demás de la renta quedase para los estudios d e m i hijo
mayor corriendo la disposición de todo ello a mi arbitrio y voluntad.
Y usando de esta facultad y poniendo en efecto lo que así me tiene
ordenado el dicho mi señor y padre, nos los otorgantes de un acuerdo
y conformidad fundamos la dicha capellanía perpetua en l a forma y
con las declaraciones y condiciones siguientcs. Prirneramentc decla-
ramos que la dicha capcllanía ha de s e r d e t r e s mil
Imposición. ducados de plata principal y ciento cincuenta ducados
de vellón de renta al año. conforme a las leyes de
estos reinos, que viene a s e r a razón de cinco ducados de vellón d e
réditos por cien ducados de once reales de plata e1 ducado del principal.
y los dichos tres mil tlucados de plata s e componen e n esta forma:
de los dichos dos mil pesos que como dicho es tenemos recibidos por el
dicho mes de mayo próximo pasado remitidos para este efecto por
el dicho señor don Pedro Ortiz de Zárate, nuestro padre de que a s u
favor otorgamos carta d e pago, y también al de dicha capllanía en
debida forma, y porque s u entrega n o parece de presente aunque
es cierta y verdadera renunciamos la excepción d e la non numerata
pecunia su prueba y paga, y las demás del caso como en ellas so
contiene y de otros dos mil pesos de a ocho reales de p!ata cada uno
que el dicho señor don Pedro nuestro padre nos había de remitir,
a cuya cuenta y e n nuestro nombre el susodicho o quien su causa y
poder tuviere ha de pagar mil setecientos veintisiete pesos y seis rcales
dc plata de ellos en virtud de la sesión que remitimos a la herencia
y herederos del maestrc de campo don Pablo Berniírdez de Ovando,
ya difunto vecino que fue dc la dicha ciudad de San Salvador por
deberlos como los debo yo el dicho don J u a n a dicha herencia de resulta
de una cuenta dada por mí a los quince de junio del año posado de mil
seiscientos y setenta y nueve por testimonio del presente escribano n
que nos remitimos reservando como reservo m i derecho a salvo para
pedir y demandar por medio de mis poder habientes o por mi mivmo
ciertas cantidades de las rentas y tributos que debían y deben pagarme
los seis indios de mita del dicho pueblo de Sococha desde el año de mil
eeiscientos sesenta y nueve inclusive a esta parte y por ellos el dicho
maestre de campo o s u herencia por haberse servido de ellos tomnndo
:I s u cargo el satisfacerme por ellos las dichas rentas y el dicho señor
don Pedro nuestro padre nos h a de remitir carta de pago de los dichos
mil setecientos veintisiete pesos y seis reales de plata de cuyos riesgos
y gastos excusamos a la dicha capellanía y a la dicha herencia por este
medio, y también nos ha de remitir el resto al cumplimiento de los
dichos dos mil pesos que trataba remitir que es doscientos veintisiete
pesos y dos reales de plata, con mis. ciento y veinticinco pesos clue
faltan para entero cumplimiento de los dichos tres mil ducados de a
once reales de plata cada uno que ambas partidas hacen trescientos
noventa y siete pesos y dos reales de plata. Item declaramos que desde
que recibimos los dichos dos mil pesos hacemos rezar las misas corres-
pondientes a s u renta por pitancería en el número correspectivo que
ha de s e r de obligación de dicha capellanía y haremos lo mismo de en
adelante con declaración a que no ha de empezar a correr lo resto, n i
tener efecto alguno esta fundación e n los demás hasta que el dicho señor
don Pedro nuestro padre o quien s u causa y poder tuviere nos haya
remitido la carta de pago de los herederos del dicho maestre de campo
don Pablo de los dichos mil setecientos veintisiete pesos y seis reales de
plata y los dichos trescientos y noventa y siete pesos y dos reales
de plata o en defecto de la dicha carta de pago el montamiento de am-
tina partidas que hacen dos mil ciento veinticinco pesos de a ocho reales
de plata y juntamcnte s u aprobación de esta escritura con la del Ordi-
nario Eclesiistico de la dicha provincia de Tucumán de manera que
r n el ínterin sólo ha de correr esta escritura en cuanto toca a los dichos
dos mil pesos que tenemos recibidos en la forma referida y e n lo demás
ha de empezar a correr luego que lleguen a nuestro poder los dichos
instrumentos con la cantidad referida costeada hasta aquí sin riesno
nuestro. Item d~claramosque cumplido lo susodicho queda esta ca-
pellanía subrogada en lugar de la que fundó el dicho nuestro padre
en l a dicha ciudad de San Salvador el dicho año de mil seiscientos y
eesenta y cinco por testimonio del dicho Francisco Guerrero y extin-
yuida aquélla. Y con las dichas declaraciones y condicicnes p debajo
de elias. nos los dichos otorgantes fundamos esta dicha capellanía per-
y t u a de los dichos tres mil ducados de plata de principal. y ciento
c~ncuentaducados de vellón de a once reales de vellón el ducado de renta
en cada un año con obligación de ciento cincuenta misas rezadas en cada
año y nombramos por primer capellhn de ella al dicho señor don Pedro
Ortiz de Zdrate, nuestro padre por s u vida. y durante aqu6l!a, decla-
rRmos que haremos decir las dichas misas en pitanceria en la Iglesia
que yuso irh señalada reservando el superivit conforme s u voluntad
para estudios del dicho nuestro hijo mayor. Item en conformidad de la
misma voluntnd de dicho nuestro padre nos nombramos por patronos
de la dicha capellanía los dos juntos y el uno en falta del otro y e n
falta de ambos a dos incorporamos y agregamos este patronato a per-
CUEAIES DOCUMENTADO 263

retuo al mayorazgo de esta casa solar y palacio de iilurguia cuyo dueño


y poseedor legítimo soy yo el dicho don Juan para que este dicho patro-
nato ande siempre junto con el dicho mayorazgo en los sucesores Y
poseedores de 61 con los mismos vínculos, gravámenes y llamamientos.
Item en conformidad de la voluntad del dicho nuestro padre fundamos
esta dicha capellanía en la dicha Iglesia Parroquia1 del dicho lunar
de Aranguiz con obligación de ciento y cincuenta misas cada año y
renta de los dichos ciento cincuenta ducados de vellón, con calidad de
haberse de decir y celebrar dichas misas perpetuamente en la dicha
Iglesia de Aranguiz con un responso al fin de cada una en la sepultura
que tenemos en ella en s u f r a ~ i ode los difuntos de nuestra obligación
y declaramos que mientras viviere el dicho señor nuestro padre podamos
nosotros hacer decir las dichas misas por pitancería y estipendio en la
Idesia o Iglesias que quisiérnmos porque el haberse de decir precisa-
mente er. la sobredicha de Arnnguiz ha de ser después que por muerte
del dicho nuestro padre capellán presente nombráremos otros y asimismo
es declaración para todos tiempos que si nosotros, o nuestros sucesores
en el dicho patronato nsistiéremos o asistieren en dicho lugar de Aran-
guiz y quisiéremos que se digan algimas de dichas misas en oratorio
ciue tuviéremos, o tuvieren en dicho lugar en tal caso el capellán, o
capellanes que fueren estén obligados a decir en el tal oratorio las
irisas que se les pidiere en lugar de otras tantas de la dicha Capellanla
w e habían de celebrar en la dicha Iglesia parroquia1 de Arannuiz.
Item que esta Capellanía se pueda dar a cualquiera que esté ordenado
de prima y se pueda servir por sustituto en cualquier tiempo cuni-
pliéndose con las obligaciones de ella. Item en conformidad de la voluntad
del dicho señor nuestro padre, declaramos que nosotros como tales
patronos de la dicha capellanía en nuestro tiempo y los que nos succ-
tlieren en este patronato hayamos de nombrar cn falta del dicho nuestro
1;adre por capellanes de ella a personas que sean dependientes por va-
ronía de la casa Solar de Zárate sita en el Valle real de Zuya y del
dicho l u w r de Aranguiz y en falta de dicha varonia a los que vinieren
en hembra y en falta de todos los zaratinos de Aranguiz en cualquiera
(le los ZBrates dc varonia que residieren en la dicha provincia de Alava,
o fuera de ella de manera que en la forma dicha hayan de tener los
patronos libre facultad de poder nombrar entre ellos por capcllán nl
que les parecierc, sin atención a arados de parentesco más próximo.
o más remotos y a mera voluntad de los dichos patronos. Item que los
cuatro meses que ha de tener el patrono para presentar la dicha ca-
rellanía no han de empezar a correr hasta que el patrón tenga noticia
de la vacante de ella y el dicho patrón en el tiempo intermedio de la
vacante y la posesión del nuevo nombrado cumpla de la renta de
In dicha capellanía con las obli~acionesde ella rateando para el efecto,
cn el nuevo nombrado la dicha renta por cantidad y tiempo. Item que la
cobranza de la dicha renta haya de correr por cuenta y costa del dicho
capellán y las redenciones que se hicieren de sensos de la dicha capella-
nia han de ser siempre por depósito ante la Justicia Ordinaria de la
Ciudad de Vitoria y su nueva fundación se ha de hacer perpetuamente
con intervención del párroco y capell&n y ha de suplir los gastos de
todo ello dicho capelltín sin que se disminuyan por ellos ni los dichos
principales ni las dichas misas, no siendo los dichos gastos tan excesivos
que consuman la renta de manera que no quede suficiente estipendio
para las dichas ciento cincuenta misas al respecto de la regular y ordi-
naria limosna que a la sazón s e acostumbrare dar por cada una de ellas
en esta dicha Villa de Astigarraga, o en dicho lugar de Aranguiz. Item
es condición como queda dicho, quc la dicha capellanía aún después que
esté corriente en toda su renta se ha de servir y cumplir a pitancería
por el sacerdote o sacerdotes que nos pareciere durante la vida del
dicho nuestro padre primer enpcllfin sin que hasta su muerte se haga
nombramiento de otro propietario ni interinario. Y con lo susodicho
debajo de las condiciones y declaraciones referidas y cada una de ellas
nos los dichos don Juan Ortiz de Zárate Argañaraz Murgufa y dolía
Araría Teresa de Idiáguez, marido y mujer otorgantes constituyendo
la renta [le la dicha Capellanía los dos juntos n mancomún a voz de uno
y cada uno de por sí e insolidum renunciando como expresamente re-
nunciamos las leyes de duobus resdebendi y la auténtica presente hoc
y la de fide juro ribus y la epístola del divo Adrinno y el beneficio
de la división y excursión con los demás remedios y leyes como en ellas
y en cada una de ellas se contiene para que no valgan. hacemos situa-
ci6n r fundación a favor de la dicha capellania sobre nuestras personas
y bienes. muebles y raíces, derechos y ncciones habidos y p r haber
de los dichos tres mil ducados de plata de principal y por ellos ciento
y cincuenta ducados de vellón de su renta al año que es a razón de cinco
ducados de vellón por ciento de plata conforme a las leyes y premtíticas
de estos reinos n cuya paga nos olilipamos y obligamos los dichos nues-
tros bienes en .la forma dicha por vía de senso redimible y nl quitar.
con declaración que desde luego han de ser corrientes los un mil cuatro-
cientos y cincuenta 7 cuatro ducados y seis reales de plata de ellos que
tenemos recibidos en los dichos dos mil pesos de a ocho reales de plata
cada uno n que al respecto dicho corresponden de rédito setenta y dos
ducados y medio de vellón al alío y la rata tocante a cuatro ducados
y seis reales de plata do principal y que lo demls al cumplimiento de los
dichos tres mil ducados de plata de principal no haya de empezar a
correr hasta que hayan estado en nuestro poder los dichos trescientos
noventa y siete pesos y dos reales de plata y la carta de pnno de los
herederos del dicho don Pablo Bernárdez de Ovando de los dichos un
mil setecientos y veintisiete pesos y seis reales de plata y la aprobación
de esta escritura y fundación que ha de hacer el dicho selíor don Pedro
Ortiz de Zfirate y la del Ordinario Eclesiástico de la dicha provincia
de Tucumfin que todo ello nos ha de remitir en forma imtentica el dicho
señor don Pedro, nuestro padre. o quien su causa y poder turiere y
desde que lo hayamos recibido ha de correr toda la dicha renta por
entero que es ciento cincuenta ducados de vellón al año y desde ahora ,
para cuando haya llegado el caso del efecto recibo y entrega referidos
otorgamos su carta de pago con renuncinci6n de la non numerata pe-
cunia su prueba y paga y las demás del caso como en ellas se contiene
y para mayor seguridad de esta obligación sin que la general derogue n
la especial ni esta a la otra obligamos a la paga de la dicha renta mien-
CUEBIES DOCUMENTADO

i r a s no redimiéremos el dicho principal a favor de la dicha capellanía


Y BUS capellanes con facultad de que se pueda usar de ambas obligaciones
por especial y expresa hipoteca la casa solar nombrada Argañaraz sus
herrerías, molino, tierras sembradías y baldías, manzanales, castañales
y demás pertenecidos en que s e incluyen con los suyos las dos cascrias
de Usapel y Echerri con todas las mejoras y aumentos que hemos hecho
en ellos que son sitos e n la dicha Villa de Amezqueta notorios p cono-
cidos por sus límites y linderos y dan de renta al año a saber las dichas
casas solar d e Argaiíaraz sus tierras sembradias, manzanales, castañales,
herrerías y molino. doscientos ducados como parece por cscritura d e
aimrendamientode dichas casa, herrería y molino otorgada por mi el
dicho don Juan a favor de Andrés de Arrisllaga y Domingo de Gomen-
dia moradores en esta dicha Villa de Amezqueta por testimonio de
Ignacio de Igarzribal, escribano de S u Majestad y del número de la
Villa de Zumaya a los treinta de junio del año pasado de mil setecientos
setenta y siete. Y la dicha casería de Usepel y su pertenecido sesenta
y cuatro ducados de vellón y veinticinco libras de queso al año y la
dicha casería de Echerri con sus pertenecidos sesenta y un ducados d e
vellón y veinticinco libras de queso al año pagados y entregados a f i n
de cada un año, como c o ~ s t apor otras dos escrituras otorgadas por m i
el dicho don Juan por testimonio del dicho Ignacio de Igarzbbcl, escri-
bano por dicho año de mil seiscientos y setenta y siete y d e otras
diferentes escrituras antiguas por las cuales consta también que los
.dichos bienes de suso señalados e hipotecados ron libres de rinculo y
mayorazgo, y propios de mí, el dicho don Juan que los poseo como tales
y en ellos tiene que haber su legítima por el Rlaestre de Campo don
Uie~:o Ortiz de Zárate nuestro hermano legítimo vecino de la dicha
Ciudad de San,Salvador. Y asimismo hipotecamos la casa solar Olnrreaga
sus tierras semhradias, manzanales y montes de ella pertenecientes
a m i la dicha doña María Teresa en jurisdicción de la Villa de Aoteasu
en esta dicha Provincia de Guipúzcoa, la cual da de renta doce fanegas
de trigo y doce ducados de vellón según por escritura de arrendamiento
otorgada por mí el dicho don Juan a los nueve de febrero dcl año
pasado de mil seiscientos setenta y nueve por testimonio de Miguel
de Alzaga, escribano de S u Alajestad y del número de la dicha Villa de
Zumaya a favor de Alaria Rliguel de Echeverría. e Ignacio de Soarraín
s u hijo la cual dichn cesa solar y sus pertenecidos asimismo non libres
de vinculo, mayorazgo y otras cargas y obli~acionesa tener todos los
dichos bienes de suso señalados e hipotecados, en pie bicn re;m~odos
regidos y gobernados de los edificios y labores necesarios de mnnern
que vayan en aumento y n o vengan en disminución a lo menos en el
ínterin que Re haya pagado S redimido y quitado toda la principalidad
d e dichos tres mil ducados de plata y de que no los venderemos n i en
a t m manera anexaremos pena de que la tal venta y enajenación haya
de s e r y sea visto s e r nula y de ningún valor y efecto o por lo menos
con la carga y obligacidn de dichos tres mil ducatlos de plata y sus
réditos correspondientes e n la manera dicha y consentimos que el ca-
pellhn o capellanes que fueren de dicha capellanía después de los días
dcl dicho nuestro padre puedan recibir haber y cobrar en juicio y fuera
de 61. los dichos ciento y cincuenta ducados de vellón de renta e n cad3
u n año de los arrendamientos de dicha casa, herrerfas, molino, caserías
y sus pertenecidos y del mejor parado de cualquier de ellos a s u libre
voluntad y para efecto de hacer la cobranza de dichos ciento cincuenta
diicados de renta de esta capellanía de los bienes de suso hipotecados
y de sus inquilinos y arrendadores y otorgar cartas de pago con los
requisitos necesarios y hacer en razón de las cobranzas los autos y dili-
gencias judiciales y extrajudiciales que convengan y sean necesarios
les damos y otorgamos poder cumplido y bastante cuanto de derecho
r c requiere y e s necesario al dicho capellán de dicha capellanía con
ene eral administración y por nos y en nombre del dicho señor don Pedro
Ortiz de ZBrate nuestro padre declaramos s e r s u voluntad y nuestra
que esta dicha capellania permanezca para siempre jamás en la dicha
lplcsia I'arroquial de Aranguiz e n la forma y según estir declarado
y que por virtud n i fuerza de Su Santidad n i de S u Majestad del Rey
nuestro Señor, ni por órdenes que se den n i por propios motus n i por
otras cualesquiera letras apostólicas, cédulas ni provisiones reales, esta
dicha capellmía no pueda s e r quitada, derogada y anulada n i restrin-
gida en ninguna manera Dorque la voluntad del dicho señor nuestro
padre y la mia es se guarde y cumpla en todo tiempo y en la manera
que dicha es, la instituimos y fundamos y desde luego para siempre
j:im:is otorgamos dar, apoderamos, dejamos, desistimos, npnrtamo3 y
nhrimos manos de los dichos tres mil ducados de plata de principal
$ por ellos los dichos ciento y cincuenta ducados de vellón de tributo
perpetuo en cada un riño de que tenemos hecha la dicha adjudicación
n dicha capellanla y de todo el poder y derecho, acción. recurso y señorío
que a ellos tenemos p nos pertenece y en ellos apoderamos y agregamos
a la dicha Capellanía para que los haya p tenga sobre las dichas casa.
herrerias, molino, caserías y sus pertenecidos en el fnterin que nos
S ciialquier de los patronos que después de nos fueren de dicha capella-
n í a quisiéremos hacer entrega. paga. redención o depósito de los dichos
tres mil ducados de plata y sus corridos que se debieren con tal condi-
ción hacer la dicha redención de los dichos tres mil d~icadosde principal
de plata, a doscientos ducados de plata de cada vez, con lo cual para
la firmeza, paga, cumplimiento y ejecución de esta escritura oblipamos
nuestras personas y bienes dotales, muebles y raíces, derechos y acciones,
Ilnbidos y por haber y damos poder cumplido a todos y cualesquier
jueces y justicias de Su Majestad de cualquier partes que sean, a cuyo
fuero y de cada uno insolidum nos sometemos y renunciamos nuestro
propio fuero, jiirisdicción, y domicilio y la ley s i t combenerit de juris-
diccione omnium judicum y demas favorables y la que prohibe la general
enunciación de ellas. Y asf bien. yo la dicha dofía Afnrín Teresa d e
Idiérruez renuncio las leyes y remedio del emperador Justininno Senntus
consulto belevano nueva y vieja, constituciones, con las leyes de Toro
Y partida S demas que son y hablan en favor de las mujeres de cuyo
efecto fui avisada por el presente escribano sabedora de ellas las re-
nuncio y por ser casada. y por todo lo demhs qve es necesario juramento.
juro a Dios Nuestro Señor y a la señal (le la Santa Cruz tal como
t e n forma de derecho que cumpliré esta escritura y no iré n i vendré
GUEMES DOCUMENTADO 267

contra ella en tiempo nlguno, n i pediré nbsolución n i relajación de este


juramento n Su Santidad, n i n otro prelado, ni súbdito suyo que me la
pueda conceder y aunque de propio motivo se me canceda no usaré
de la tal concesidn y tantas cuantas veces s e me concediere tantos jura-
.mentas hago y uno mbs para que siempre esté jurada. Y ambos marido
y mujer lo otorgamos según dicho es ante Francisco de Aguirre escri-
bano del Rey nuestro Señor y del número de la noble y leal Villa de
IIernaní testigos yuso escritos en dicho nuestro solar de llurguía en la
dicha Villa de Astigarraga a siete días del mes de enero de mil seis-
cientos ochenta y un años, siendo testigos don Diego de Arrieta, Pres-
bítero vecino de esta dicha Villa, el licenciado don Antonio de Echena-
xusia, abogado de los Reales Consejos vecinos de la Villa de Talosa, con
cuyo acuerdo y parecer se ha dispuesto esta escritura, Lorenzo de Aguirre
y Josf de Lazarte estantes en esta dicha Villa y los otorgantes a quienes
yo el escribano doy fe, conozco lo firmaron de sus nombres. Don J u a n
Ortiz de Zárate Argnriaraz AIitrgitía. Dona dlarfa Teresa de Idiágttez.
Ante mí Francisco de Agnirre. Concuerda este traslado con s u original
que queda en mi poder y fieldad a que me refiero y en f e de ello y d e
que en esta Muy Noble y BIuy Leal Provincia de Cuipúzcoa, Reino de
Castilla, no se usa papel sellatlo sino es éste común ordinario por par-
ticular merced de Su IIajestad que Dios guarde, lo signé. y firmé yo
l h n c i s c o de Aguirre escribano de S u Majestad y del número de la
noble y leal Villa de IIermaní que es en dicha Provincia de Cuipúzcoa.
E n testimonio de verdad. Francisco de Agitirre. Los escribanos del Rey
Nuestro Seíior que aquí signamos y firmamos;
Certificación de certificamos y damos f e que Francisco de Aguirre
los escribanos. (le quien va signado, y firmado este traslado de
suso y de las ocho fojas antecedentes, es escri-
bano de Su iilajestad. y uno de los del número de esta noble y leal Villa
tle IIernaní en la BIuy Noble y Muy Leal Provincia de Cuipúzcoa,
Reino de Castilla, fiel, legal y de confianza y como tal a las escrituras
.v autos que nnte él han pasado y pasan se ha dado y da entera f e y
crfdito en juicio y fuera de él y para que de ello conste donde convenga
y de como en esta dicha provincia de Cuipúzcoa no corre papel sellado
nino éstc común ordinario por particular merced de Su Majestad dimos
este presente en la dicha Villa de IIernani a ocho días del mes de enero
de mil seiscientos ochenta y un año. E n testimonio de verdad Aligitel de
lpisica. E n tcstimonio de verdad Antonio de Ayerdi. Testado en el nuevo,
no vale; entre renglones: dicha. y parn que de ello, vale.
Vn cierto y verdadero este traslado y concuerda con las diligencias
que en testimonio s e presentaron para el efecto de sacar esta copia y a la
conclusión le devolví dichos documentos y en cumplimiento de lo pre-
ceptuado en el decreto que precede autorizo y firmo en J u j u y n veinti-
nueve de marzo de mil setecientos noventa y un año.
E n testimonio t de verdad:
J u a n Batttista de Arizinendi
Escribano Público y d e Cabildo
Derechos 4 reales foja
Señor Alcalde Ordinario.
Don Lorenzo Ignacio de Goyechea, Regidor Alcalde Mayor Pro-
vincial vecino de esta ciudad. prestando voz y caución de rato y grato
a manera de fianza por mi cuñado don Gabriel de GUemes Nontero,
Ministro Tesorero de la Real Caja AIatriz de l a Capital de Salta Y por
especial encargo que por carta me tiene hecho como más haya lunar
en derecho a n t e Vm. parezco y digo: Que el dicho mi hermano nece-
sita para los efectos que le convengan d a r plena probanza de su con-
sorte doña Idaria Magdalena de Goyechea, en lo respectivo a sus leni-
timos ascendientes paternos en cuya virtud se h a de servir la justifi-
cación de Vm. con citación del Sindico Procurador General. recibirle
sumaria información de Limpieza de Sangre ad perpetuam Rei memo-
riam, con los testigos que presentare, los cuales serán examinados al
tenor del interrogatorio siguiente:
l a . Primeramente: s i conocieron n don JIartín Miguel de Goyechea.
y a doña Ignacia de la Corte y Rosas, y a difuntos, padres de la con-
tenida dofin BIaria Ilagdalena, expresando s u edad y generales de la ley.
2a. Item, juren y declaren s i saben les consta o han oído decir
que la dicha doña alaria Magdalena de Goyechea es hija legitima ha-
bida en el matrimonio que contrajeron dichos finados y s i la rccono-
cieron y tuvieron por tal su hija y ella los reconocil por sus padres,
digan.
3a. Item, s i saben les consta, o han oído decir que la mencionada
doña María Magdalena por línea paterna es nieta legítima de don Mi-
guel Esteban de Goyechea y de doña IIariana Argañaraz y 3Iurguía.
y bisnieta legitima del general don BIartín de Goyechea, natural del
Reino de h'avarra en España y de doña Ana María Vieyra de la Mota,
digan.
4a. Item, declaren s i saben, les consta o han oído decir que la re-
ferida doña Marla nIagdalena d e Goyechea es descendiente legítima
de los pobladores y conquistadores d e esta Provincia y especialmente
d e don Francisco de Argañaraz y IIurguía, oriundo de Vizcaya d e
casa solariega que entroncó en ésta con la noble estirpe de los Ortizes
y Zirates y fundó esta Ciudad de San Salvador de Jujuy de orden
del Sefior Gobernador y Capitán General, don J u a n Ramirez de Ve-
Iazco. digan.
63. Item, juren y declaren s i saben, les consta, o han oído decir:
quc los ascendientes de la contenida doña María Jlagdalena obtuvieron
empleos políticos y militares y s i sirvieron a sus propias expensas al
Rey Nuestro Seiíor en la guerra y pacificaci6n de estas fronteras y
provincia. digan.
Ga. Itern. declaren s i s h n , o por algún modo les consta que la
mencionada doíia Alaria 3Iagddena de Goyechea es de antigua y clara
progenie, tlcrivadn de sus ilustres ascendientes y s i éstos como cris-
tianos viejos fueron y han sido libres de toda mala raza de judíos.
moros, mulatos y de los r e c i h convertidos a nuestra Santa F e y que
GUEMES DOCUMENTADO 263

n o han sido penitenciados por el Santo Tribunal de la Inquisicibn,


n i punidos por otras justicias, digan.
S fecho s e me devuelva original, precediendo el auto aprobatorio
de Vm., interponiendo para ello su autoridad real y clecreto judicial
conforme a derecho. P o r tanto.
A Vm. suplico se me reciba dicha informacibn de limpieza (le Ran-
g r e en que recibiré justicia y juro lo necesario en Anima de mi parte
no proceder de malicia, etc.

Jujuy y m y z o 2, de 1701.
Como lo pide, con citación del Síndico Procurador de Ciudad, ma-
nifestando a los testigos para su inteligencia los <locumentos que esta
parte tiene presentados. Así lo mandó y firmó el señor don Torn5.s de
Jlartierena, Alcalde Ordinario de segundo voto de que doy fe.
Uartierenn
Ante m í
Jttan Batctista de Ariztnemli
Esribano Público y de Cabildo
Incontinenti yo el escribano cité con el decreto antecedente y para
lo en 61 contenido al Sindico Procurador de Ciudad interino don Frün-
cisco Javier del Portal en s u persona doy fe.
Arizntendi
Escribano

E n el propio día notifique el decreto que antecede n don Lorenzo


Ignacio de Coyechca en s u persona, doy fe.
A rizwe1trli
Escribano

E n esta Ciudad <le Jujuy a yeintitrés de marzo <le mil setecien-


tos noventn y un años, el señor don T o m h de AIartierena, Alcalde Or-
dinario d e Segundo r o t o mandó comparecer ante sí, al Coronel de hli-
licias, comandante de las Armas por S u AInjestad y Juez Subdelegado
de Intendencia y Correos, don Gregorio d e Zcgnda. de quien por ante
mí el escribano recibió juramento por Dios Nuestro Señor y una se-
fin1 de Cruz e n forma d e derecho bajo del cual ofreció decir verdad
de lo que supiere y le fuere preguntado y siéndole al tenor del inte-
rrogatorio que antecede declaró lo siguiente.
A la primera pregunta dijo: haber conocido (le trato y comuni-
cación a don Nartin Miguel de Goycchea y a dofin lgnacia de la Corte
y Rosas, padres legítimos de doña Araría nlagdalena de Goyechea: que
es de edad de cincuenta y siete años y que no le tocan las generales
tle la ley y responde.
A la segunda dijo: constarle por público y notorio que la dicha
doña María Magdalena, es hija legítima habida de matrimonio, como
que siempre l a vio hasta que se casó con don Gabriel de Giiemes hlon-
tero, en compañía de los referidos sus padres, quienes la han criado
y alimentado Ilamándola de hija y ella a ellos de padre y madre Y
responde.
A la tercera dijo: que así por noticias que tenía, como por vecino
antiguo de esta ciudad y los documentos que ha visto, que la dicha
doña María BIagdalena, es nieta legítima de don Miguel Esteban d e
Goyechea y de doña hlariana de Argañaraz y hIurguía y bisnieta del
general don Martín de Goyechea natural de Navarra e n los Reinos de
1Sspaña y de doña Ana María Vieyra de la Nota y responde.
A la cuarta dijo: que así por s e r constante en esta ciudad como
por los recaudos que s e le han presentado, f u e r a de los que h a visto
por razón de haber sido Alcalde Ordinario varias veces e n esta ciu-
dad, sabe de cierto que la expresada doña María BIagdalena de Goye-
chea es descendiente legítima de los pobladores y conquistadores d e
esta provincia, y con especialidad de don Francisco de Argañaraz y
Murguía, natural de Vizcaya, quien fundó esta ciudad como instruye
el libro primero capitular de orden del señor gobernador don J u a n Ra-
mírez de Velazco, habiendo sido Justicia Mayor de ella. repartido so-
lares y tierras para crías de ganados, pacificando la tierra y ndelan-
tando su población, sujetando los naturales a vida sociable, política p
cristiana en servicio de ambas 3Iajestades y responde.
A la quinta dijo: que nsí por los docunkntos que h a visto, como
por varios libros capitulares es constante que los ascendientes de la
contenida doña María Magdalena, obtuvieron empleos políticos y mili-
tnres y sirvieron a sus propias expensas a1 Rey Kuestro Señor y e n
las Guerras del Chaco y pacificación de estas fronteras y que tambikn
113 visto e n el tiempo que es vecino de esta ciudad ejercer varios em-
pleos de república y milicias a los parientes de la referida doña Bferia
Nagdalena, a imitación de sus antepasados y responde.
A la sexta y última pregunta dijo: que por dichos instrumento*
que se le han mostrado y por lo que se instruyó las veces que f u e
alcalde ordinario, por los documentos que vio y la voz común del pueblo
forma pleno concepto, sin trepidar en cosa alguna de que la dicha
doña BIaria Magdalena, es de antigua y clara progenie, heredada d e
sus ilustres ascendientes y que estos como que fueron cristianos viejos
han sido libres, como Católicos y Apostólicos Romanos y limpios d e
toda mala raza de judío, moro, o converso. sin que haya habido nota
la menor n i sospecha de herejía. n i penitenciado, alguno por el Santo
Oficio de la Inquisición, n i que tampoco, h a n i j e r c i d o oficio ninguno
rnecfinico Y vil; y que se han mantenido siempre con todo el decoro y
distinción que corresponde y responde.
Que esta es la verdad de lo que sabe y se le tiene preguntado de
GUEMES D O C U M E N T A D O 271

público y notorio pública voz y fama, so cargo del juramento que fecho
tiene en que se afirma y ratifica y lo firmó con su merced por ante
mí que doy fe.
Toniás de Jlartierena
Gregorio de Zcgada
Ante mi
- Juan Bautista de Arizmendi
Escribano Público y de Cabildo

En esta Ciudad de Jujuy en dicho día mes y año, su merced e1


señor juez de esta causa, hizo comparecer a don Andres Ignacio Na-
rriondo, vecino de ella de quien por ante mi el escribano le recibió ju-
ramento por Dios Nuestro Señor y una señal de Criiz en forma de
derecho bajo del cual prometió decir verdad de lo que supiere y le fuere
preguntado, y siendole al tenor del interrogatorio que antecede declaró
lo siguiente.
A la primera pregunta dijo: que conoció de vista, trato y comuni-
cación a don Martín Miguel de Goyechea y a doña Ignacia de la Corte
y Rosas, padres legitimos de doña María Magdalena de Goyechea; que
es de edad de sesenta años y que no le tocan las generales de la ley
y responde.
1
A la segunda pregunta dijo: que sabe y le consta que la dicha
doña María Magdalena es hija legítima, habida de matrimonio del
dicho don BIartín BIiguel y doña Ignacia de la Corte, quienes la han
, criado y alimentado, llamdndola de hija y ella a ellos de padre y madre
y responde.
A la tercera dijo: que asimismo era cierto que la dicha doña Ma-
ría Magdalena era nieta legitima de don Miguel Esteban de Goyechea
y de doña hIariana de Argañaraz y Murguía, naturales de esta Ciudad
y bisnieta de don IIartín de Goyechea, natural de Navarra y de doña
Ana BIaría Vieyra de 13 Mota; que aunque no los conoció, sólo puede
afirmar de pública voz y fama, y porque así lo oy6 decir a sus ma-
yores y mis ancianos que ellos vieron y oyeron ser y pasar así y res-
ponde.
A la cuarta dijo: que por los documentos que se le han presente,
como por haber visto, cuando fue Alcalde Ordinario en esta Ciudad
g contador Oficial Real, el Libro Primero de la fundación de esta dicha
ciudad sabe de cierto que la expresada doña Naría Magdalena de Go-
yechea es descendiente legítima del adelantado del Río de la Plata y
poblador de esta ciudad don Francisco de Argañaraz y Murguía, na-
tural que fue del señorío de Vizcaya, quien por comisión del señor
Gobernador, don Juan Ramirez de Velazco, siendo Justicia Mayor de
ella, sujetó a los naturales a vida cristiana, política y sociable en ser-
vicio de ambas Majestades y responde.
A la quinta dijo: que era cierto que los ascendientes de la con-
tenida doña María AIagdalena, obtuvieron empleos po:iticos y milita-
res, sirviendo al Rey Nuestro Señor en las Guerras del Chaco y paci-
ficación de sus fronteras; que esto lo sabe por los documentos que
h a visto y por s e r público y notorio en esta ciudad y responde.
A la sexta pregunta dijo: que asimismo era verdad que la dicha
doña 3Iaria BIagdalena es de antigua y clara progenie. por consi-
guiente sus ascendicntcs han sido por general opinión muy cató-
licos y buenos cristianos, sin que haya habido nota 1;i menor, ni sos-
yecha de herejía. n i penitenciado alguno de ellos por el Santo Oficio
d o la Inquisición; y que de inmemorial tiempo a esta parte, han sido
y son tenidos y reputados por cristianos viejos y limpios de toda mala
raza de judío, moro, mulato y de los recién convertidos, n i que tampoco
han ejercido ningún oficio meciinico y vil, manteniéndose siempre con
todo el decoro y distinción que corresponde a s u ilustre nacimiento.
Que esta es l a verdad de lo que sabe y se le tiene preguntado bajo
del juramento que ha prestado y lo firmó con s u merced por ante mí
que doy fe.
Jlarticwna
Anclrh Ignncio de A'arriondo
Ante m i
J x a n Batctista de A r i m e n d i
Escribano Público y de Cabildo

E n esta Ciudad de Jujuy a veintiséis de marzo de mil setecientos


noventa y un años el señor don Tomds de Blartierena. Alcalde Ordi-
nario de segundo voto, hizo comparecer ante s í al Coronel de IIilicias
don Francisco Basterra, vecino de esta ciudad del cual por ante m í
el escribano recibió juramento por Dios Nuestro Señor y una señal d e
Cruz e n forma de derecho quien l o hizo como s e requiere y bajo de
kl ofreció decir verdad de lo que supiere y le fuere preguntado y sién-
dole al tenor del interrogatorio que antecede declaró lo siguiente.
A la primera pregunta dijo: que conoció a don Martín n f i ~ u e lde
Goyechea. y a doña Ignacia de la Corte y Rosas. con quienes había
tenido amistad que era de edad de cincuenta y ocho años y que n o le
'
tocan las generales de la ley y responde. ,

A la segunda dijo: que sabe y le consta que doiía María Magdalena


de Goyechea es hija legitima del dicho don Alartín BIiguel de Goyechea
y doiía Ignacia de la Corte y Rosas; y que la han criado y alimentado.
hasta clue casó con don Gabriel de Güemes Alontero, Ilamdndola de
hijn y ella a ellos de padre y madre y responde.
A la tercera dijo: que sabe y le consta de público y notorio y
por los documentos que ha visto de que la dicha doña Ataría Jlagda-
lcna de Goyechea es nieta legítima de don nriguel Esteban de Goye-
chea y de doña l l a r i a n a de Argañaraz y Rlurguía, naturales de esta
Ciudad y bisnieta del general don AIartín de Goyechea, natural de Na-
varra y de doña Ana María Vieyra de la Mota y responde.
A la cuarta dijo: que así por s e r público y notorio en esta ciudad,
como por los documentos que s e le han hecho presente. fuera de lo
w e ha visto en los libros capitulares, en las diferentes ocasiones (lue
ha sido Alcalde Ordinario, sabe de cierto que la mencionada doña hIa-
ría Magdalena, es descendiente legitima de los pobladores y conquista-
dores de esta provinci' y e n especial de don Francisco de Argañaraz
y AIurguía, natural del señorío de Vizcaya, adelantado del Río de la
Plata, quien fundó esta ciudad de orden del señor Gobernador don Juan
Ramirez de Velazco, habiendo sido Justicia Mayor de ella, repartido
solares y estancias para ganados. pacificando la tierra y adelantando
s u población, sujetando los naturales n vida sociable, palitica y cris-
tiana y responde.
A la quinta dijo: que sabe y le consta, que los ascendientes dc di-
cha doña María AIagdalena y sus parientes, han ejercido los empleos
politicos y militares y sirvieron al Rey Nuestro Señor en las guerras
contra el bárbaro, a expensas de s u propio caudal y responde.
4 la sexta dijo: que es cierto, público y notorio que doña María
aIagdalena de Coyechea, sus padres, abuelos y bisabuelos y demás as-
cendientes de tiempo inmemorial a esta parte, han sido y son habidos,
tenidos y reputados por cristianos viejos y limpios de toda mala raza
<le moro, judío, mulato, o converso, n i penitenciado alguno por el San-
to Oficio de la Inquisición, n i que tampoco han ejercido oficio ninguno
meciinico y vil. manteniendose siempre con aquel decoro y distinción
que corresponde a s u ilustre nacimiento; que esta es la verdad de lo
que sabe y se le tiene preguntado so cargo del juramento que hecho
tiene en que s e afirma y ratifica y lo firmó con su merced por ante mí
que doy fe.
illartierena
Francisco dc Ra.~terra
Ante mí
Juan 6airti.sta de Arizniendi
Escribano Público y de Cabildo

En esta Ciudad de Jujuy a veintiocho (le marzo de mil setecientos


noventa y un años. El señor don Tomas de AIartierena, Alcalde Ordi-
nario de segundo roto, mandó comparecer a n t e sí al general don J u a n
Ignacio de la Cuadra, vecino de ella de quien por ante mí el escribano
Ir? recibió juramento por Dios h'uestro Señor y una Señal de Cruz e n
forma de derecho el cual lo hizo como se requiere bajo del cual ofreció
decir verdad de lo que supiere y le fuere preguntado p siéndole al
tenor del pedimento e interrogatorio que antecede declaró lo siguiente.
A la primera pregunta dijo: que conoció de vista, trato y comu-
nicación, a don filartin Miguel de Coyechea y a su mujer doña Igna-
cia (le la Corte y Rosas; que es de edad de sesenta y cuatro años; que
no le tocan las generales de la ley y responde.
A la segunda dijo: que sabe y le consta que doña Naría Jlagda-
lena de Goyechea es hija legitima y de le$rítimo matrimonio de los di-
chos don Martín nlifiuel de Goyechea y de doña I ~ n a c i ade la Corte
y Rosas, que la hen criado y alimentado llamindola de hija y ella a
ellos de padre y madre, hasta que casó con don Gabriel Cüemes Blon-
tero, Ministro Principal Tesorero de las Reales Cajas de la Ciudad
de Salta, y responde.
A la tercera dijo: que sabe de que la dicha doña María ñlagdalena
de Goyechea es nieta legitima de don JIiguel Esteban de Goyechea y
de doña Mariana de Argañaraz y Murguía y bisnieta del General don
Xartín de Goyechea natural de Navarra y de doña Ana María Vieryra
de la Mota, que aunque no los conoció sabe, por los papeles que ha visto
y ser en esta ciudad público y notorio y responde.
A la cuarta dijo: Que sabe por ser público y notorio en esta ciu-
dad, como por los documentos que se le han manifestado, que la ex-
presada doña María Nagdalena de Goyechea. es descendiente legitima
de don Francisco de Argañaraz y Murguia, adelantado del Río de la
Plata p poblador de esta ciudad, como instruye el libro primero cal~i-
tular de orden del señor Gobernador don Juan Ramírez de Velazco,
habiendo sido justicia mayor de ella. repartido solares y estancias, pa-
cificando la tierra y adelantando su población, sujetando los naturales,
r vida sociable, política y cristiana en servicio de ambas majestades y
responde.
A la quinta dijo: que así por dichos documentos, como por varios
libros capitulares que ha visto, es constante, que los ascendientes (le
la contenida doña María Magdalena, obtuvieron empleos políticos y mi-
litares y sirvieron a sus propias expensas al Rey Nuestro Señor en las
guerras con el bárbaro enemigo y que también ha visto en el tiempo
que ha que reside en esta ciudad, ejercer varios empleos de repú?lic?
g milicias a los parientes de la referida doña María Magdalena a imi-
tación de sus antepasados y responde.
A la szxta y última pregunta dijo: que es cierto, público y notorio
que doña BIaría iiIagdalena de Goyechea, sus padres, abuelos y bisa-
buelos y demás ascendientes han sido y son habidos, tenidos y repu-
tados por cristianos viejos y limpios de toda mala raza de judío, moro,
mulato o converso, ni penitenciado alguno por el Santo Oficio de la
Inquisición, ni que tampoco han ejercido oficio ninguno mecdnico y
vil manteniéndose siempre con aquel decoro y distinción que corres-
ponde n su ilustre nacimiento. Que esta es la verdad de lo que sabe y
se le tiene preguntado, so cargo del juramento que hecho tiene en que
re afirma y ratifica y lo firma con su merced de que doy fe.
Jlartiereiia
J u a t ~Ignacio de la Ciradra
GÜEJIES DOCUBIENTADO 275

Ante m í
Juan i?aiiti.rta de Arizmendi
Escribano Público y de Cabildo

E n esta Ciudad de Jujuy a veintiocho de marzo de mil setecientos


noventa y u n año. S u merced el señor juez de esta causa mandó com-
parecer ante sí a don Jost5 Joaquín del Portal, vecino de ella del cual
por ante mí recibió juramento por Dios Nuestro Señor y una señal
de Cruz e n forma de derecho bajo del cual prometió decir verdad de lo
que supiere y le fuere preguntado y siéndole al tenor del interrogatorio
que antecede declaró lo siguiente.
A la primera pregunta dijo: que conoció de vista, trato y comuni-
cación a don Alartin Miguel de Copechea y su mujer doña Ipnacia de
la Corte y Rosas; que es de edad de cuarenta y nueve años y que n o
le tocan las generales de l a ley y responde.
A 13 segunda dijo: 'que sabe y le consta de público y notorio que
Ja dicha doña Mzría Magdalena de Coyechea es hija legitima y de le-
pítimn matrimonio de los dichos don Martin Miguel de Goyechea y
doña Ignacia de la Corte y Rosas, como que siempre la vio hasta que
casó con don Cabriel Cüemes Nontero, en compañía de los referidos
sus padres, reconociéndolos ésta' por talcs y ellos por s u hija y res-
ponde.
A la tercera dijo: que asimismo sabe de cierto y de público y
notorio y por haberlo oído decir tambien a sus mayores y mds an-
cianos que la dicha doña Alaria Mandalena de Coyechea es nieta le-
ritima de don AIiguel Esteban de Coyechea y de doña Alariana de
A r ~ a ñ a r a Zy AIurguín, y bisnieta del general don AIartín de Goyechea.
natural de Navarra y de doña Ana Alaría Vieyra de la Nota y res-
ponde.
A la cuarta dijo: que así por ser constante en esta ciudad como
por los documentos que se le han hecho presente, fuera d e los que
ha visto por razón de haber sido Regidor Depositario y Alcalde Ordi-
nario en esta dicha ciudad, sabe de cierto que l a expresada doña María
ñlagdalena es descendiente legítima del poblsdor de esta ciudad don
Francisco de Argañaraz y Murguía natural de Vizcaya, quien la fundó
de orden del señor Gobernador don J u a n Ramirez de Velazco y responde.
A la q u i n k dijo: que así por dichos documentos como por varios
libros capitulares que ha visto, es constante que los asccndientcs d e
l a contenida doña María Blagdalena obtuvieron empleos políticos y
militares y sirvieron con sus propios caudales en las guerras del Chaco
y pacificación de sus fronteras y que también ha visto ejercer varios
empleos de república y milicias a los parientes de la mencionada doña
idaría Magdalena a imitación de sus antepasndos y responde.
A la sexta y Última pregunta dijo: que es asimismo cierto de
ptíblico y notorio; que doña RIaria Rlagddena, sus padres, abuelos y
bisabuelos y demás ascendientes de tiempo inmemorial han sido y
son tenidos y reputados por cristianos viejos y limpios de toda mala
raza de judío, moro, mulato o converso, n i penitenciado por el Santo
Oficio de la Inquisición, n i punidos por justicia alguna, ni que tampoco
han ejercido oficio ninguno mccinico y vil, manteniendose siempre
con aquel decoro y distinción que corresponde a s u ilustre naci-
miento; que esta es la verdad de lo que sabe y s e le tiene preguntado.
P O cargo del juramento que lleva prestado en que se afirma y ratifica
y lo firma con su merced de que doy fe.
Illartiereaa
JosE Joaquin del Portal
Ante mí '
Jitan Bautista de Arirnteitdi
Escribano Público y de Cabildo

E n esta dicha ciudad, dicho mes, día g año S u Merced, el señor


juez de esta causa, mandó comparecer ante s í a1 Ayudante Mayor d e
la Plaza don Pedro de la Vega, vecino de ella de quien por ante mi
el escribano recibió juramento por Dios nuestro Señor y una señal
de Cruz en forma de derecho quien lo hizo como se requiere y bajo
de 61 ofrcció decir verdad de lo que supiere y le fuere preguntado
y siéndole al tenor del interrogatorio que antecede declaró lo siguiente.
A la primera pregunta dijo: que conoció de vista, t r a t o y comu-
nicación a don Jlartin Filiguel de Goyechea y a su mujer doña Ignaciü
de la Corte y Rosas; que es de edad de cincuenta y cinco años; que
no le tocan las generales de la ley y responde.
A la segundn dijo: que sabe y le consta que doña María 3Iapd:i-
lena de Goyechea, es hija legítima y de legítimo matrimonio del dicho
don AIartín Nisuel de Goyechea y doña Ipnacia de la Corte y Rosns.
como que siempre la vio e n compañía (le los referidos SUS padres, quie-
nes la han criado y alimentado llamAndola de hija y ella a ellos de
padre y madre, hasta que casó con el señor Ministro Principal Teso-
rero don Cabriel de Güemes AIontero y responde.
A la tercerü dijo: que as$ por noticias que tenía como vzcino an-
tiguo y los documentos que h a visto, sabe de cierto que la dicha doña
JIaria Magdalena de Goyechea es nieta legitima de don FiIijwel Este-
ban de Goyechea y de doña hlariana de Argañaraz y Murguía y bis-
nieta del general don Nartin de Goyechea, natural del Reino de Na-
varra y de doña Ana Rlaría Vieyra de la Mota y responde.
A la cuarta dijo: que asi por s e r constante en esta ciudad como
por los instrumentos que se le han presentado, sabe de cierto que Ia
expresada doña Maria Magdalena es descendiente legítima del pobla-
dor de esta ciudad don Francisco de Argañaraz y Alurguía, natural
<!el seiíorío de Vizcaya, quien la fundó de orden dcl ,señor Gobernador
don Juan Ramírez de Velazco, habiendo sido Justicia Mayor de ella y
responde.
A la quinta dijo: que sabe por los instrumentos que ha visto y
por lo que ha oído decir a sus mayores y miis ancianos que ellos vie-
ron y oyeron que los ascendientes de la expresada doña Araría Mag-
dalena obtuvieron empleos politicos y militares y sirvieron a expensas
de su propio caudal en las guerras contra los indios infieles d d Chaco
y pacificacibn de sus fronteras y que tambien ha visto en el tiempo
que ha que es vecino ejercer varios empleos de república y milicias n
los parientes de la referida doña María Magdalena y responde.
A la sexta dijo: que es cierto, público y notorio que doña María
Magdalena de Goyechea, sus padres, abuelos y bisabuelos y demas as-
cendientes han sido y son habidos, tenidos y reputados por cristianos
viejos, libres y limpios de toda mala raza de judio, moro. mulato, o
converso, ni penitenciado por el Santo Oficio de la Inquisición, ni pu-
nido por justicia alguna; ni que tampoco han ejercido oficio, ninguno
mechico y vil, y que se han mantenido con la distinción que corres-
ponde a su ilustre nacimiento y que esta es la verdad de lo que sabe
y se le tiene preguntado; so cargo del juramento que hecho tiene en
que se afirma p ratifica y lo firmí, con Su Merced de que doy fe.
.Vartierena
Pedro de la Vega
Ante mí
Juan Bnictista de A r i z ~ ~ r e ~ i d i
Escribano Público y dc Cnbi!do

En esta Ciudad de Jujuy, a veintinueve de marzo de mil setecien-


tos noventa y un años, el señor don Tomás de RIartierena, Alcaldc Or-
dinario de segundo voto, habiendo visto la información producida por
parte del Regidor Alcalde AInyor Provincial don Lorenzo Ignacio de
Goyechea a favor de su hermana doña Naría AIa~dalen~. de Coyechea.
mujer legitima del 3Iinistro Principal Tesorero don Gabriel Güemes
Ilontero, dijo que la aprobaba y aprob6 en todas sus partes para lo
cual interpuso su autoridad y decreto judicial y lo firmó doy fe.
Toniás de dfartierena
Ante mí
Juan Bazitista de Ariz~~iendi
Escribano Público y de Cabildo
Incontinenti, yo el escribano, hice notorio el precedente auto al
Síndico Procurador de Ciudad don Francisco Javier del Portal en su
rersona doy fe.
Arizinendi
Escribano
E n el mencionado día hice otra notificación como la antecedente
al Regidor Alcalde hIayor Provincial don Lorenzo Ignacio de Coyechea
en su persona doy fe.
Ariznteiidi
Escribano

Señor Alcalde Ordinario


Don Lorenzo Ignacio de Coyechca en los autos d e la gcneálica
descendencia que estoy siguiendo para probar y esclarecer la prosapia
de mi hermana legítima doña María Magdalena de Coyechea por es-
pecial encargo de su marido don Cabriel de Cüemes IIontero, actual
Juez Privativo de Residencia por el Rey Nuestro Señor y 3Iinistro Te-
sorero de las Cajas illatrices de la Capital de Salta como mas haya
lugar en derecho ante Vm. parezco y digo que conviene al de m i cons-
tituyente el que con citación del síndico procurador general trayendo
n la vista el libro capitular primero de la fundación de esta ciudad
s e me certifique en bastante forma s i consta en él que f u e el funda-
dor de ella don Francisco de Argañaraz y Murgía, cuarto ahuelo pa-
terno de la referida doña María nIagdalcna de Coyechea de orden del
señor Gobernador y Capitán General don J u z n Bamírez de Velazco y
hecha dicha certificación se me libre copia a continuación de este m i
escrito autorizada en pública forma de u n título que aparece en dicho
libro de teniente de Gobernador y Justicia Mayor, don Pedro d e AIer-
cado Peñalom. sucesor del antecedente jefe en que conforme a s u mé-
rito le vuelve a encargar la población y conquista como a hijodalgo y
buen servidor de S u Majestad Católica. P o r tanto a Vm. suplico provea
y mande como pido en que recibiré justicia, etc.
Lorenzo Zgnneio de Go~ecliea
Jujuy y marzo 23 de 1791.
Como lo pide, trayendo a la vista el libro primero de fundación,
con citación del Sindico Procurador de Ciudad, y se comete. Así lo
proveyó. mandó y firmó el señor don Tom6s de Mnrtierena, Alcalde
Ordinario de segundo voto de que doy fe.
Jfaitieiena
Ante m i
Juan Bautista de Arizn~endi
Escribano Público y de Cabildo
E n veintitrés de marzo de setecientos noventa y u n año. Yo el
escribano cite con el decreto antecedente y para lo en él contenido
al Síndico Procurador interino don Francisco Javier del Portal en s u
persona doy fe.
Aiizniendi
Escribano
En virtud de lo que ordena el anterior decreto, yo Juan Bautista
de Arizmendi, Escribano Público y de Cabildo de esta ciudad certifico
doy fe, como habiendo traído a la vista el Libro Capitular de funda-
ción de esta ciudad forrado en badana negra, de letra antigua. algo
descuadernado y medias consumidas tales cuales fojas Iiasta la mitad
por su antigüedad consta en él que don Francisco Argañaraz y 3lurguía.
de orden del señor don Juan Rnmírez de Velazco Gobernador y Capi-
tán General que fue de esta Provincia. fundó esta Ciudad de Jujuy
siendo teniente y justicia mayor del dicho señor Velazco continuando
cn la ~oblación,haciendo mercedes de solares y estancias para gana-
(los y administrando justicia en todos !os asuntos concernientes n este
encargo. Que cumplió exactamente en servicio de Dios, del Rey y causa
pública, como se verifica de varios acuerdos hasta el ingreso a este
Gobierno del señor don Pedro de Atercado Peñsloza sucesor del ante-
cedente jefe en el año de mil quinientos noventa y cuatro, seeún apa-
rece del título de teniente de Gobernador y justicia mayor, que el
dicho señor Mercado mandó librar al expresado don Francisco Arga-
ñaraz que corre desde fojas 107 hasta 250 en que le da facultad para
que prosiga con la población 1- conquista pacificando los indios natu-
rales. Que administre justicia en cuanto ocurra en servicio de ambas
niajestades. como caballero hijodalgo según que todo resulta del con-
tenido titulo que se halla copiado en dicho libro que sacado a la letra
con una providencia que le subsigue de la Real Audiencia de la Plata
n pedimento del capitán Juan de Ochoa y Zárate, cuyo tenor es el
siguiente:
Don Pedro Mercado Peiíaloza Gobernador Capitán General de es-
tas Provincias de Tucumán, juríes, diaguitas y comechingones y todo
lo demás que se incluye de esta parte de la Cordillera de Chile y gran
Río de la Plata por el Católico Rey don Felipe Nuestro Señor, etc.
Por cuanto vos el capit6n don Francisco de Argañaraz sois persona
de suerte y calidad caballero hijodalgo y que concurren en él las cali-
dades y partes cecesarias y n lo que ha servido a Su Majestad y que
continuar;\ en el dicho servicio y habéis fundado y poblado esta Ciudad
de San Salvador del Valle de Jujuy en el Real Nombre a vuestra costa
y mención en lo cual habéis hecho servicio a Dios Nuestro Señor y a Su
Majestad en el cual estaba ejerciendo el cargo y oficio de capitán y
teniente de gobernador y justicia mayor de la dicha ciudad por orden
y comisión de los gobernadores mis antecesores como constará de los
dichos títulos a que me refiero del cual dicho cargo y oficio ante mí
se exhibió por tanto atento a lo cual y por virtud de los Reales Pode-
res que tengo que son notorios le elijo, y nombro por Capitsn y mi lu-
rarteniente de Gobernador y justicia mayor de la dicha Ciudad de San
Salvador del Valle de Jujuy y sus términos y jurisdicción y le doy m-
der, comisión y facultad para que dé y reparta tierras solares, cuadras,
chIcaras, estancias, caballerias como sea a personas que estén presen-
tes y sin perjuicio y asimismo pueda tomarlas para s í y sus hijos como
de antes y los naturales comnrcanos que estuvieren metidos en la ju-
risdicción de la dicha ciudad acudan a dar la paz y obediencia a nues-
tro Rey y Señor natural como deben y son obligados procurando y dando
orden que sean bien tratndos reducidos y congrcgados y vengan a
conocimiento de Dios Nuestro Señor y tengan doctrina y bautismo y
sean corregidos y castigados de sus desvergüenzas y atrevimientos.
itlolatrias, ritos, y ceremonias antiguas e hicieren algunos daños, robos
u sucedieren otros inconvenientes los podáis castigar conforme a sus
delitos nombrando capitanes y caudillos que lo hagan conforme a la
orden y mandado, o por otra cualquier via nombréis capitán lugarte-
niente de gobernador por el tiempo y ausencia que hiciereis hasta que
volváis a la dicha ciudad al dicho vuestro cargo y oficio, y a que éste
tal que nombrareis sea persona suficiente para ello, el cual con el
dicho nombramiento, se presente ante los capitulares, justicia y regi-
miento de la dicha ciudad y haga el juramento de solemnidad que en
tales casos se requiere, y dé las fianzas conformc n derecho el cual
le he yo por nombrado, y le reciban por tal capithn y mi lugarteniente
de gobernador y puesto caso que no le reciban le he yo por recibido al
dicho oficio, y cargo, y use y ejerza en 61, y podáis nombrar vuestro
alguacil mayor de la dicha ciudad hasta que yo mande. y provea otra
casa, y asimismo vos doy poder para que hallando y descubriendo al-
gunos indios, y pueblos de indios que no estén dados ni repartidos y
de servidumbre podáis señalar, y dar en el real nombre a los vecinos
pobladores y personas benemeritas indios yanaconas con tal que los
indios que se dieren por encomienda y feudo hayan de tener y tengan
confirmación mía dentro del termino que les diéredes y señaliiredes y le
nombro según dicho es al dicho capitán don Francisco de Argañaraz
por capitán y mi lugarteniente de gobernador de la dicha ciudad de
San Salvador del Valle de Jujuy y justicia mayor de las justicias que
en 61 son y fueren como tal pcir el tiempo que fuere Ia voluntad de Su
Majestad, y mía en su real nombre con vara de la Real Justicia haga
el dicho oficio, y cargo, y tome en sí y prosiga en todos los pleitos
y causas que estuvieren comenzadas y oiga y libre todas las que ocu-
rrieren y se pidieren así civiles como criminales y ejecutivas, así los
comenzados como los que adelante comenzaren, así de oficio como de
pedimento de partes, o en otra cualquier manera, y lo siga y prosiga
conforme 3 derecho, y pronuncie sentencias y ejecute cnnformc halle
fuere regular ejecutare de las demás otorgue las apelaciones y siendo
recusado se acompañe conforme a derecho y guardando en tcdo las
ordenanzas reales y leyes del reino y mando que con este mi titulo y pro-
visión se presente en el cabildo ante los capitulares, justicia y regimiento
de la dicha Ciudad de San Salvador antes que comience a usar el dicho
oficio al cual mando que luego que sea presentado reciba juramento del
dicho capitán don Francisco de Argañaraz como debe y es obligado y
hecho dando fianzas de usar bien y fielmente el dicho oficio y cargo y que
dará cuenta y residencia de lo que fuere a su cargo y de lo demás
que tuviere obligación sin aguardar otra mi carta segunda ni tercera
ejecución y sin lo consultar ni comunicar conmigo, sin embargo de
cualquier cosa que diga o alegue y le reciban al dicho oficio y uso Y
ejercicio del que yo desde luego le recibo al dicho don Francisco de
Argañaraz por tal capitán mi lugarteniente de Gobernador, y Justicia
Mayor de la dicha Ciudad de San Salvador con las facultades aquí
declaradas, no embargante que por el dicho Cabildo o algunos capi-
tulares de kl no sea recibido y le doy entero poder y facultad pera lo
usar, y ejercer y t r a e r vara de la real justicia y tenga libro donde s e
asiente las condenaciones que hjciere pertenecientes a Su AIajestad
y gastos de ,justicia y otras y le encargo particularmente tenga mucho
cuidado de amparar y favorecer a los naturales indios que están de
servidumbre y que sean industriados en las cosas de la f e apostólica
cristiana y las personas, vecinos y soldados y otros de cualquier estado,
y condición que sean le tengan por tal c a p i t á ~y mi lugarteniente de
gobernador como dicho es y le obedezcan y respeten y acaten y cumplan
sus mandos y mandamientos s o las pcnas que les pusieren en que les doy
por condenados en ellas lo contrario haciendo las cuales ejecute en las
~lersonasy bienes de los inobedientes y s e les guarden y hagan guardar
todas las honras, gracias. mercedes, franquezas y libertades e inmuni-
dades que por raz6n del dicho oficio debe haber y gozar y le doy el poder
que es necesario para usar y ejercer el dicho oficio en todo lo a kl
anexo con incidencias y dependencias, anexidades y conexidades como
puedo de derecho y en tal caso se requiere. Dada en la Ciudad de San
Salvador del Valle de Jujuy a dos dias del mes de noviembre de mil
quinientos noventa y cuatro años. D m Pedro de ~llercadoPeiialoza. P o r
mandado de su señoria del aeiior Gobernador; J u a n de Herrera, Escri-
bano Público y del Cabildo.
Muy Poderoso Señor: El Capitán Juan Ochoa de Zíirate en el pleito
con don Francisco de Argaíiaraz sobre la gobernación, población y
jurisdicción de la Provincia de Jujuy y Ciudad de San Francisco que
por otro nombre han puesto San Salvador, digo que para usar del titulo
que vuestro Gobernador don Pedro de Aíercado de Peñaloza. dio al Ca-
pitán don Francisco de Argañaraz de s u lugarteniente de la dicha
Ciudad de J u j u y con comisión para nombrar teniente por s u ausencia
el cual aprobó el dicho Gobernador como s i por él fuera nombrado para
usar de 61 como me es mandado por la ejecutoria de esta Real Audiencia
y poder nombrar el dicho teniente por mi ausencia por haber de correr y
venir a esta ciudad y corte donde tengo pleitos pendientes. A Vuestra
Alteza suplico mande que el secretario de esta causa me dé dicho tes-
timonio en pública forma y en manera que hagz f e para usar conforme
a 61 como por Vuestra Alteza está mandado sin que se me pueda poner
impedimento por el señor Gobernador n i por otra persona alguna y pido
justicia y p a r a ello, etc. E l licenciedo Rojas. Jstan Ochoa de Zárate.
Désele con citación de la otra parte. E n la Ciudad de la Plata en nueve
dias del mes de marzo de mil quinientos y noventa y ocho años. estando
en acuerdo de justicia los señores Presidente y oidores proveyeron lo
decretado de suso. J u a n de Losa. E n L? Plata en once días del mes de
marzo de mil y quinientos y noventa y ocho años, cité a Francisco Pérez
de Larriñaga en nombre de s u parte para lo contenido en esta petición
el cual dijo que se le d6 con lo actuado testimonio. ~ V a r t í nPPrrr de
Regel, y de ello doy fe, Francisco Ldpez de Rivera, escribano receptor.
Y yo J u a n de Losa Earaona, Escribam de Cámara del Cat6lico Rey
Nuestro Señor de la Audiencia y Chancillería Real que reside en la
Ciudad de la Plata del Perú lo hice sacar del proceso del pleito que
pende en esta Real Audiencia entro dicho Capitún Juan Ochca de
86rate y el Gobernador don Pedro de Mercado Peñaloza sobre el oficio
de Capitan y Justicia Mayor que pretende el dicho Juan Ochoa de
Zárate en la Ciudad de Jujuy y va cierto y verdadero como consta
del dicho proceso y en fe de ello firmé en la Plata a veintiséis dlas
del mes de marzo de mil y quinientos y noventa y ocho años. Juan
de Loaa.
Lo relacionado resulta m i s difusamente de dicho libro de que queda
hecho mención y lo inserto concuerda con lo que existe en él a las
fojas citadas n que me remito y todo queda en mi poder y oficio en
cumplimiento de lo preceptuado en el decreto que precede y lo firmo
en Jujuy a treinta de marzo de mil setecientos noventa y un años.
En testimonio : t : de verdad
Juan tla?tti.sta de Arizniendi
Escribano Público y de Cabildo

Señor Alcalde Ordinario de 29 voto.


Don Lorenzo Ignacio de Goyechea, en los Autos de Genealogía que
estoy siguiendo como parte legitima de mi cuñado don Gabriel de Cüe-
mes Montero a favor de su mujer doña María Magdalena de Coyechea,
como más haya lugar en derecho ante Vm. parezco y digo que para
calificación de los servicios de sus ascendientes paternos ae ha de
servir la justificación de Vm. con citación del Síndico Procurador, con
vista de los Libros Capitulares, darme certificación en bastante forma
de los empleos políticos que obtuvieron, a saber, el General don hlar-
tin de Goyechea, natural de Navarra que casó en esta ciudad con doña
Ana María Rodríguez Vieyra de Ir Mota. bisabuelos de la dicha doña
Naría Magdalena, don IIiguel Esteban de Goyechea, marido de doña
Nariana de Argañaraz y hIurguia, sus abuelos y don Martín Miguel
de Goyechea, consorte de doíia Ignacia de Corte y Rosas, sus padres,
como también los oficios que ejerció don Francisco Palacios, esposo
de doña Francisca AIartínez de Iriarte, terceros abuelos maternos de la
mencionada doña María Magdalena y finalmente los empleos que tuvo
mi tío abuelo paterno don José Antonio de Goyechea y fecho se agregue
a los autos de la filiación. Por tanto.
A Vm. suplico provea como pido en que recibiré justicia, etc. Entre
renglones: maternos.
Lorenzo Ignacio de Coyeckea
Jujuy y marzo 28 de 1791.
Por presentada hágase en todo como' lo pide el suplicante y se
comete; así lo mandó y firmó el señor don TomAs de Martierena, Al-
calde Ordinario de segundo voto de que doy fe.
nfartierena :
e Ante mi
Juan Baiitista de Arizi~iendi
Escribano Público y de Cabildo
Incontinenti yo el escribano cité con el decreto antecedente y para
lo e n 61 contenido al Sindico Procurtidor don Francisco Javier del Portal
en s u persona doy fe.
Arizitceiidi
Escribano
E n virtud de la comisión que me estA conferida por el decreto que
antecede, yo J u a n Bautista de Arizmendi, escribano público y de cabildo
(le esta Ciudad de Jujuy, certifico doy fe, cómo. habiendo traído a la
vista los Libros Capitulares de este Ilustre Cabildo, consta en ellos,
que en el año de mil seiscientos noventa y cuatro, don Biartín de Goye-
chea f u e teniente de gobernador, justicia mayor y capitán a guerra;
que en el año de mil seiscientos noventa y ocho, don Francisco Palacios
f u e Alcalde Ordinario de Primer voto; y en el de mil setecientos dos.
tcniente de Gobernador. Que en los años de mil setecientos veinticinco,
~eintiocho.treinta y treinta y tres. don JIiguel Esteban de Goyechea
fue dos veces Alcalde Ordinario, Alférez Real, Alcalde Provincial y
Procurador general. Q?ie don José Antonio de Goyechea en el año de mil
setecientos veintiocho fue contador Oficial Real de estas Reales Cajas
g Gobernador de las Armas y en el de setecientos cuarenta y ocho,
Reridor. AlfCrez Real y en el de cincuenta y tres. Alcalde Ordinario.
Que en el mismo año de setecientos cincuenta y tres don Mnrtín AIiguel
d e Goyechea, siendo sargento BIayor d e BIilicias, f u e Alcalde de In
Santa Hermandad y en el de 'ictecientos sesenta y uno Alcalde Ordinario
ilc sepundo voto. Todo lo cual consta en dichos libros capitulares a que
me remito y quedan en mi poder y oficio y para que conste lo firmé
e n dicha Ciudad de Jujuy a treinta de marzo de mil setecientos noventa
y u n años.
E n testimonio : t : de verdad
J ~ t a nBarctista de Arizntendi
Escribano Público y de Cabildo
Jujuy y marzo 31 de 1791.
Respecto a estar concluidos estos autos de la genealogía de doiia
N a r i a Alagdalena de Goyechea. pásense al tasador de costas para que
practique 13 que corresponde conforme a arancel y fecho y aprobado
r e le devuelva a la parte suplicante. Así lo mandó y firmó s u merced
el señor juez de esta causa de que doy fe.
AIart iereiin
Ante m i
Juait Bautista de Arizttrendi
Escribano Público y de Cabildo
Incontinenti notifiqué el decreto que antecede a don Lorenzo
Ignacio de Goyechea e n s u persona doy fe.
Arizmentli
Escribano
284 LUIS CUEAIES

El tasador de costas en vista de las causadas en estos autos desde


fojas 30 hasta la inclusive, forma la tasación siguiente.
Al señor Alcalde don Tomlis de Martierena
Por catorce firmas a cuatro reales
Al escribano actuorio don J u a n Bautista Arizmcndi
P o r siete decretos a dos reales
P o r un auto cuatro reales
P o r once notificaciones a cuatro reales
P o r seis juramentos el primero 3 reales y los otros a dos
P o r siete fojas de declaraciones a cuatro reales
P o r dieciocho fojas de testimonios a cuatro reales
P o r dos certificaciones con vista y registro de libros
a cuatro pesos
P o r un peso al tasador de costas por s u trabajo
Importa la tasación antecedente con arreglo al Real
Arancel treinta y siete pesos siete reales :
S. S. de Jujuy y marzo 31 de 1971. , ,

Iligitel Antonio de Snracibnr


Jujuy y marzo 31 de 1791.
.Apruébase la tasación antecedente y respecto a que este juzgado.
no exige cosa alguna por lo que le corresponde, satisfhganse los que
pertenecen al escribano y tasador de costas, . a s í lo mandó su merced
el señor juez de esta causa de que doy fe.
dla rticrenn
Ante mí
J u a n Rnictista de Arirniendi
Escribano Público y de Cabildo
Derechos del escribano gratis.
Don Filiberto Mena como apoderado del señor 3Iinistro Tesorero
entregó un peso que como a tasador de costas le correspondía a don
XIinuel Antonio de Saracíbar quien lo firm6 conmigo doy fe.
A l iguel Antonio de Saracibnr
Ariznimdi
Escribano

Docunientos sueltos que se recogieron solicitaron, relativos a la


progenie de la Sra. dolía Afarla Magdalena de Co21eclrea, en lo respectivn
a sus abxelos paternos y d g o de los maternos que contienen veintiocho
fojas útiles, inclzcsice el eztracto de s u substnncial contexto que está
por cabezo.
AAo de 1791.
Razón o extracto individual de lo que contiene esta cuerda de
documentos relativos a la genealogía de doña Naria Magdalena de Co-
~'echea,los cuales no tuve tiempo de presentarlos al juzgado ordinario de
~ e g u n d ovoto para que mandase agregarlos a los autos originales que
e n dicho juzgado se han seguido referentes a la prosapia paterna de la
cxpreaada doña BIaría Magdalena y se extractan en la forma siguiente:
Desde fojas 1 h a d a la 2 sigue un pedimento con s u decreto del
a ñ o de 1608, de doña Rernardina Miraba1 e n que hace relación a este
Ilustre Cabildo de la Ciudad d e Jujuy, ser mujer legitima del fundador
de ella don Francisco Argañaraz y que como tutora que es de un hijo
que tuvieron llamado don Francisco, se le concedan a éste las mercedes,
y privilegios que como a poblador s e le concedieron al dicho .su padre,
de cuyo ilustre tronco de Argañaraz Murguía y IIirabal descienden
todos los Argañaraces de esta ciudad, y según el tiempo que ha corrido
formo concepto fijo que los de este matrimonio fueron cuartos abuelos
.de la dicha doña María Magdalena de Goyechea, y hago memoria que
en un registro de instrumentos que vi cuando solicité estos docu-
mentos se declara que dicha doña Dernardina es hija legitima de doña
Inés Miraba1 y de don J u a n de la Zerda, que vino de España de po-
blador con el señor Licenciado don Hernando Lerma que fundó la
Ciudad de Salta en 16 de abril d e 1582 y dicho Zerda sirvió e n las
Guerras de Esteco, f u e vecino encomendero de Jujuy y hay varias
legitimas ramas de s u apellido en Tucumin y Salta.
Desde fojas 3 hasta 4, corre una presentación con su decreto sobre
la cobranza d e un dote hecha por don Pedro Ortiz de Zarate, cura y
vicario que fue de esta Ciudad de Jujuy. en que dice s e r hijo legítimo
del Naestre de Campo don Juan Ochoa de ZRrate y de doña Bartolina de
Garnica. El dicho don Pedro Ortiz fue casado con doiía Petrenila de
Ibarra Argañaraz y Murguía. hija legitima de don Juan (le Ibarra
y de doña Naria de Argañaraz y Blurguía y en dicha doña Petronila
tuvo dicho don Pedro varios hijos según me he instruido del archivo
,de esta ciudad, y la dicha doña María de Argañaraz f u e nieta legi-
tima del fundador don Francisco de Argañaraz. de donde viene el
enlace, alianza y entroncamiento de la familia de Ortiz de Zirate.
ron la de los Argañaraces, de donde por línea recta desciende doña
3Iaría BIagdalena de Goyechea, nieta legitima de doña RIariana de
Arnañaraz y Murguía.
Desde fojss 5, hasta G, aparece el poder que dio par:\ testar e n
6stn de Jujuy en 2 de agosto de 1704, doña Juana Crisóstoma Ruiz
.de Llanos, natural de Salta en que declara haber ido casada con el
sargento mayor don J u a n de Palacios y que tuvieron por hijos legi-
timos n doña AIriria y a don Francisco Palacios que todos son legítimos
ascendientes maternos de la expresada doña Araría hIagdaiena de
Goyechea y se advierte que el citado don Juan de Palacios senún lo he
-:isto por otros documentos, f u e oriundo de esta de Jujuy, hijo legítimo
.de don Francisco Palacios y de doña Francisca Martinez de Iriarte
y ésta fue hija legitima de don Juan BInrtínez de Iriarte y dr: doña
Ana de Yanci, hija legítima de don Juan de Yanci y de dona Isabel
.de Argañaraz y nIurguía. como se patentiza de la carta de dote que le
otorgaron al dicho don Juan de Iriarte a 12 de julio de 16.12 años que
vi en el archivo y no tuve tiempo de que se me diese copia, otorgada,
a n t e Alonso de Tovar, Alcalde Ordinario de donde sólo saqué esta nota.
Desde fojas 7, hasta 14 vuelta, sigue el testamcnto quc e n 4 d e
betiembre de 1683, otorgó don Juan Eodríguez Viepra, Oficial Real
que f u e de estas Csjes AIatrices de Jujuy, que pasó ante Francisco
Guerrero, escribano de Su Majestad, donde a fojas 8, entre otros
hijos legítimos que menciona declara también por su hija legítima
n doña Ana Vieyra de la Mota, bisabuela paterna de doña Araría
Alagdalena de Goyechea por haber casado dicha doña Ana con el General
don Mnrtín de Goyechea, natural del Reino de h'avarril.
A fojas 15, resulta u n despacho del señor Gobernador don Esteban
de Urízar, en que expresa haber sido la fundación de esta Ciudad d e
Jujuy por don Francisco de Argañaraz e n 19 de abril de 1593, por
comisión que en 25 de enero le dio cl señor Gobernador don J u a n
Ramirez dc Velazco, extrañando dicho señor Urizar el motivo porque
en la de Jujuy n o sacaban el real estandarte el día en que se fundó
dicha ciudad. cuyo documento acredita su fundación y mérito de don
Francisco Argañnraz.
Y finalmente desde fojas 1G hasta 2G. donde concluyen estos ~ O C U -
mentos sigue u n expediente e n testimonio fehaciente formado por el
señor Gobernador don Fernando de Jlendoza Mate de Luna, según
s u auto de fojas 21 hasta 22 vuelta de 14 de agosto d e 1682, C U ~ W
documento acredita el relevante mérito que en servicio de Dios y del
Rey contrajo el señor Licenciado don Pedro Ortiz de ZArate, e n una
entrada que hizo de Misionero Apostólico por el Valle de Zenta, e n
solicitud de la conversión de los indios infieles, de donde le resultó s u
muerte según he leido en el archivo de Gobierno de la Ciudad dc Salta.
donde s e halla una carta escrita por el Excelentísimo señor Iluque
de l a Palata, Virrey del Perú al dicho señor Gobernador Mate de Luna,
en que muestra Su Excelencia grande sentimiento por el fallecimiento d e
tan esclarecido varón y pidc se le hagan muy buenas exequias y debemos
alabar los altos juicios de Dios del modo con que llama a mejor fortuna
propiamente a sus escogidos según lo trae el doctor Jarque (hablando
de don Pedro Ortiz) que leí en Buenos Aires el año pasado de 1757, e n
que dice que hallAndose dicho don Pedro dos leguas de esta ciudad e n s u
hacienda de El Molino, que hoy es del señor Alcalde Provincial don
Ifirenzo Ignacio de Goycchea, cayó un pedazo de una torrecilla que
había en dicho Molino y le quitó l a vida a doña Petronila de Ibarra
Argañaraz y BIurguia, amada consorte del referido don Pedro, con lo
cual mirando con tal desprecio las prosperidades m u n d ~ n a sae ordenó
dc sacerdote, despues de haber obtenido muchos empleos políticos y
militares, y siendo cura y vicario Juez de Diezmos y Comisario del
Santo Oficio de esta Ciudad y Visitador 'de este Obispado postergando
todos estos empleos y ofreciendo todo s u patrimonio, s e dedicó a s e r
misionero de los pobres gentiles. en cupo tiempo estindose tratando
e n el consejo de darle un Obispado según dicho doctor Jarque, acontecib
que en dicho Vnllc de Zentn hallindosc diciendo misa con el Padre J u a n
Nanqueano, natural de Cerdeña de la Compañía de Jesús, los mataron
GUEMES DOCUMENTADO

n lanzasos los indios infieles, que debemos creer piadosamente que


conseguirían la aureola del martirio, cuya relación he querido hacer
p a r a que sirva d e alguna memoria e n l a posteridad d e este ilustre y
justificado varón, que puede loarse la Ciudad de Jujuy de tenerlo por
s u compatriota en s u Santa Iglesia AIatriz donde descansan sus huesos,
que s e condujeron a ella. Y es fecho en doce dias del mcs de abril d e
mil setecientos noventa y un año, firmándolo yo don Filiberto de llena.
como apoderado del señor don Gabriel de Güemes Montero, marido de la
dicha señora doña María AIapdalena de Goyechea de quienes vine
encargado para estas diligencias de sus abolengos paternos.
Filiberto de illoln

En la Ciudad de San Salvador del Valle de Jujuy en veintiséis


días del mes de junio de mil seiscientos ocho años ante los capitulares
Justicia y Regimiento por Su Majestad de ella, la presento la con-
tenida e n ella.
Doña Bernardina Miraba1 mujer que fui de don Francisco Arga-
fiara2 como tutora y curadora de don Francisco mi hijo y como más a l
derecho del dicho don Francisco mi hijo convenga, digo que e1 dicho
don Francisco de Argeñaraz mi marido en el Real nombre pobló y
fundó esta dicha ciudad y por lo mucho que sirvió a Su Nsjestad y por
eer tal poblador y fundador entre las capitulaciones y mercedes que
Su Majestad le hizo f u e una darle la jurisdicción ordinaria civil y
criminalmente de esta dicha ciudad y sus términos por los días de s u
vida y los de sus sucesores legítimos como a vuestra seiíoría le consta
y es notorio y por s e r menor de edad el dicho mi hijo n o administra
la dicha jurisdicción y ahora h a venido a mi noticia que el señor
gobernador Alonso de Rivera h a proveido el capitán Fuentes por corre-
yidor y justicia mayor del distrito y valle de IIumahuaca y Cochinoca
y sus comarcas que son términos y jurisdicción de esta ciudad com-
prendidos y anexos a la jurisdicción y oficio de justicia mayor que el
dicho don Francisco mi hijo h a de administrar y e s suya por razón de la
dicha merced y capitulación y para que ahora n i en ningún tiempo
le damnifique a s u derecho el administrar del dicho capitán Fuente.. .
n i otra persona ninguna el dicho oficio de justicia mayor y corregidor
desde luego y en su nombre por todo lo referido contradigo el dicho
oficio de corregidor y justicia mayor y por s e r en gran daño y per-
juicio de los indios de encomienda de mi hijo que están poblados en el
dicho Valle y por s e r tan pocos tienen grandisima carga y trabajo e n
tener sobre s i un corregidor que para defenderlos y ampararlos de jus-
ticia les basta y les está a comodidad suya que no haya m68 justicia
que el teniente de esta ciudad como distrito y jurisdicción que es d e
ella desde el tiempo que el dicho mi marido l a fundó por lo c u d .
A Vm. soberana pido y suplico haya por contradicho el recibir aI
.
dicho Capitiin Fuente.. al uso y ejercicio de corregidor y justicia mayor
del dicho Valle de IIumahuaca, Cochinoca y como así lo requiero R e
me dé por testimonio para guarda de Ia,justicia dcl dicho don Fran-
cisco mi hijo la cual pido, etc.
Doña Bernnrdina Alirnbal
T vista la dicha petición los dichos capitulares justicia y regimiento
dijeron todos unhnimes y conformes, que s e cumpla lo que el señor
gobernador Alonso de Rivera manda por su título dejando al dicho
don Francisco de Argañaraz s u derecho a salvo y se le dé el testimonio
que pide y esto proveyeron y mandaron.
Ante mí
Jiwn Conzáler
Escribano Público de Cabildo
Cabildo.
E n la Ciudad de San Salvador del Valle de Jujuy en nueve dias
del mes de agosto de mil y seiscientos y,ocho aiíos el Cabildo Justicia
y regimiento s e ayuntaron en su cabildo y ayuntamiento como lo han
de costumbre conviene a saber el capitán Francisco Ruiz teniente d e
Gobernador y Justicia mayor por Su Majestad. Gregorio Gómez de Tapia
alcalde ordinario. Juan Ochoa de Zárate. Francisco de Guzmán. J u a n
.
Gaithn. Pedro Sánchez regidores y . . alguacil mayor con voz y voto
en acuerdo los cuzles trataron las cosas tocantes al servicio dc Dios
Sucstro Seiior y <le Su iilajcstad y el bien y pro de esta república
y trataron lo siguiente. Entre renglones: J u a n Ochoa de ZBrate, vale.
Ko pasó (un signo o rúbrica) adelante.

Pcdro Ortiz de Zárate. cura y vicario de esta ciudad e hijo legitimo


dcl AIaestre de Campo General Juan Ochoa de Zárate y de doña Car-
tolina de Carnica mis padres ya difuntos como más haya ! w a r de
derecho parezco ante Vm. y digo que habiendo hecho diversas diligencias
en buscar la carta de dote que otorgó elgeneral Juan de Amussategui
al tiempo y cuando contrajo matrimonio con mi hermana doña Car-
tolina de Garnica no la he podido hallar porque el susodicho dice se quedó
e n poder del licenciado Pedro de Ovando y Zárate mi tío como tutor
y curador que fue nuestro. S habiéndose buscado entre los papeles
que dejó por su fin y muerte tampoco sc ha hal!ado lo cual es en w a v e
perjuicio mío por la parte de legítima que se le dio y también dc la
dicha mi hermana por lo que toca a la seguridad de su dote para cuyo
remedio s e ha de scrvir Vm. de mandar que el dicho general Juan de
Amussategui debajo de juramento declare s i recibió los ocho mil pesos
que el dicho Licenciado Pedro de Ovando le ofreció al tiempo y cuando
contrajo el dicho matrimonio por cuenta de la herencia y bienes que
administraba y también s i recibió otros ocho mil pesos pocos mXs o
menos que s e le dieron al tiempo y cuando se avaluaron los bienes raíces
que quedaron por f i n y muerte del dicho mi padre con los cuales s e nos
enteraron lo que perteneció a la dote y a r r a s de la dicha mi madre.
Los cuales se le dieron en la mitad de l a Estancia de Ilojo. T la mitad
de la chacra de San Lorenzo de El Molino que después me vcndieron
ambos marido y mujer. Y en esclavos y otros géneros en que se le
enteraron. Y que asimismo debajo del dicho juramento declare. s i dotó
a la dicha m i hermana al tiempo de contraer el dicho matrimonio e n dos
mil pesos conmutando la cantidad de bienes que poseín al tiempo y
cuando se celebró el dicho matrimonio que de no declararlo así estoy
presto a d a r información de todo lo referido par11 lo cual.
A Vm. pido y suplico s e sirva de mandar que el dicho general J u a n
de Amussategui debajo de juramento declare s i recibió e n dote de la
dicha m i hermana al tiempo y cuando se casó con ella las partidas que
tengo referidas y s i dotó a la dicha mi hermana conforme al caudal
con que se hallaba y e n caso que faltase alguna cosa para el entero
en los bienes que en adelante hubiese y adquiriese en los dichos dos
mil pesos que de no hacerlo así estoy presto a d a r información de
cómo recibió todo lo referido e hizo la dicha manda que en ello recibir6
merced con justicia que pido costas p lo nccesario, etc.
Pedro Ortiz de Zárnfe
P o r presentada y vista por s u merced del Juez y Alcalde Ordinario
mandó se le notifique al IIaestre de Campo general J u a n de Amussa-
tegui marido legítimo de doña Bartolina de Zirate y Garnicn. Parezca
ante 611 merced y debajo de juramento declare al tenor de lo pedido
en la petición de esta foja sobre el recibo de las dos partidas de dote
que s e le dieron y nrras que mandó a la dicha doña Rartolina (le Garnica
s u mujer al tiempo que contrajo matrimonio con ella y s i fue por tnsa-
ción de dicha dote. Y de n e ~ a r l o ,se i e cite para la información que
esta parte ofrece a quien se d n r i noticia de todo. Proveyó y firmó
lo desuso decretado don Pablo de Argañaraz y nfurpuía, Alcalde Ordi-
nario de esta Ciudad de Jujuy por Su Ilajestad que Dios ~ u a r d ey
en ella en vcintiocho (le mayo de mil seiscientos y ochenta y dos años e n
este papel común a falta de sellado.
Don Pablo de ArgnGarnz 1) .Vitrgaia.
Ante mí
Franci.wo Giterrcro
Escribano de Su Najestad
E n la chacra y hacienda de San Pedro que
Declaración del es del nlaestre de Campo General J u a n d e
BIaestre de Campo Amussategui jurisdicción de la Cimiad d e San
General J u a n de Salvador tlc J u j u y en dos días del mes
Amussategui. de junio de mil seiscientos y ochenta y dos
años ante don Pablo de Argañaraz y Murguía
Alcalde Ordinario en ella por Su IInjestnd que Dios guarde en con-
formidad del decreto de arriba que notifiqué a dicho,lIaestre de Campo
General J u a n dc Amussatcgui. Pareció presente y s e le recibió jura-
mento que celebró a Dios y a una Cruz según forma de derecho y 80
cargo de él prometió de dccir verdad de lo que supiere y le fuere pre-
guntado y siéndolo al tenor de la petición de la foja antes de esta
quc se le ley6, dijo que lo que pasa es que al tiempo y cuando contrajo
matrimonio este dedarante con doña Bartolina de Garnica el licenciado
Pedro de Ovando ZBrate, clerigo presbítero y abogado de la Real
Audiencia de La Plata, difunto tío carnal que fue de dicha su mujer,
tutor y curador de su persona y bienes y de los demás sus hermanos
menores, hijos y herederos del general Juan Ochoa de Zlirate p de doña
Rartolina de Garnica sus padres difuntos, dotó a la dicha su mujer en
dieciséis mil pesos corrientes en esta forma. Los ocho mil que le daba
de su parte y bienes dicho licenciado Pedro de Ovando por manda
onerosa de tío y tutor suyo y administrador rlue fue de las haciendas
y encomiendas de dicho ñIaestre de Campo, general Juan Ochoa de
Zírate su tfo por su fin y muerte con declaracibn de que los cuatro
mil de ellos eran de mejora que hacía a la dicha doña Bartolina de
Garnica mujer de este declarante. Y que en esta forma y de haber
quedado juntamente testamentario cabezalero de dicho General Juan
Ochoa de Záratc su tío y que le dejó comunicado al tiempo de dicho
su fallecimiento hacia la dicha dotación y mejora de los eunlts ocho
mil pesos de manda y mejora declara este declarante le entres6 y
recibió de mano de dicho licenciado Pedro de Ovando los siete mil
1)esos de ellos en reales. ajuar, plata labrada y ditas que pagó por
este declarante y le restó siempre los mil pesos de ellos que hasta hoy
ha podido cobrar habiendoselos pedido en diversas ocasiones a dicho
licenciado Pedro de Ovando antes que falleciese. Y que después de lo
dicho nrriba se le dieron y recibió por dicha dote de su mujer este
declarante los otros ocho mil pesos de la semnda partida en bienes
ralces.

Sepan cuantos esta carta de poder para testar vieren, cómo yo


doña Juana Crisóstoma Ruiz de Llanos, mujer legitima de don Juan
de Palacios estando enferma, pero en mi juicio, memoria y entendi-
miento, creyendo como creo fielmente, en el Misterio de la Santísima
Trinidad y todo aquello que cree y confiesa la Santa Iglesia Romana
y protestando vivir y morir debajo de esta fe, y creencia. Digo que
la aceleración y gravedad de mi enfermedad no da lugar a que yo pueda
ordenar mi testamento y porque yo lo tengo comunicado con dicho mi
marido don Juan de Palacios. Por tanto en aquella mejor vía y forma
que de derecho haya lugar otorgo y conozco que doy y otorgo poder
cumplido libre, lleno y bastante, según yo lo tengo y de derecho más
puede y debe valer al dicho don Juan de Palacios mi marido para que
en mi nombre y representando mi persona pueda en cualquier tiempo
aunqrie sean pasados los términos que dispone la ley de Toro. hacer
y ordenar y otorgar mi testamento y iiltima voluntad en el cuzl puede
hacer las mandas y legados y causas pías que le pareciere y las otras
declaraciones y todo lo demas que yo pudiera porque de ahora otorgo
lo que 41 ordenare y otorgare y quiero que valga por mi testamento
y codicilo o por mi final voluntad o como mejor haya lugar de derecho y
CÜEhIEs DOCUMENTADO

revoco otros cualesquiera testamentos, mandas y codicilos y poderes


que para ello haya dado y quiero que no valgan excepto lo que el dicho
mi marido en mi nombre otorgare; y señalo mi sepultura en el con-
vento del Seráfico Padre San Francisco de esta ciudad en la parte que
sustaren mis albaceas y sea con entierro mayor y nombro por mis
albaceas al dicho mi marido y al Sargento BIayor don Francisco de
Palacios mi suegro y por mis herederos a doña Ilaria [María?] y s
don Francisco de Palacios mis hijos legítimos y de dicho mi marido
y lo otorgue así en esta Ciudad de San Salvador de Jujuy en dos días
del mes de agosto de mil setecientos y cuatro años. Ante el Bfaestre de
Campo Juan Antonio de Zárate, Alcalde Ordinario de primer voto
de esta dicha Ciudad y su jurisdicción por Su Majestad que Dios
warde. Y yo el dicho Alcalde Ordinario que presente soy con los
testigos de yuso a falta de Escribano público ni real certifico en cuanto
puedo y ha lugar de derecho conozco a la otorgante quien lo otorgd
así y según parece está en su entero juicio porque habla concertada-
mente p por no sabcr firmó a su ruego uno de los testigos presentes
llamados y rogados, que lo fueron el Reverendo Padre predicador
Fray Ealtasar de los Reyes de la orden de Nuestro Padre San Fran-
cisco y el capitan de csballos coraza don Juan Antonio del Bfazo y
Ceballos tesorero de esta provincia y el c a p i t h Francisco Vicente10
de la Rosa y Mateo Fretes y Jose de Zárate.
Juan Antonio de Zárate. A ruego de la otorgante' y por testigo
Fray Baltazar de los Relles. Testigo Juan Antonio del Afazo y Ceballos.
Testigo Franciwo Viemtelo de kr Rosa. Testigo nlateo Fretes. Testigo
Josd de Zdrate.
En el nombre de Dios, Amén, sepan cuantos esta carta vieren
cómo yo el capitán Juan Rodríguez Viera, vecino y oficial Real de esta
Ciudad de San Sal ador de Jujuy, Provincin del TucumAn, estando
enfermo del cuerpo y en mi sano juicio y entendimiento natural y cre-
yendo en todo lo que nos enseña nuestra madre la, Iglesia Católica
llomana debajo de cuya fe protesto vivir y morir y deseando poner mi
alma en carrera de salvación temihiome de la muerte que es natural
n toda criatura que es y como católico y fiel cristiano'que soy y porque
con este conocimiento y la disposición que pueden necesitar mis cosas,
caso que por la gravedad de la enfermedad no pueda hacer y otorgar
mi testamento última y postrimera voluntad. Y aunque en acto tan
necesario tengo todas mis depcndencias ajustadas por instrumentos
y de cuenta de libro y la demas razón necesaria como de ellos consta
mediante lo que otorgo que doy todo mi poder cumplido bastante de
derecho necesario para mds valer, al maestre de campo don Diego
Ortiz de Zdrate, Alférez Real propietario de esta ciudad mi yerno.
a los maestros Domingo Vyera de la Mota, Antonio Vyera de la Mota,
clerigos presbítero y José Vyera de la Mota, clerigo de mayores órdenes
ausentes y presentes n tcdos cuatro juntos de mnncomún e insolidum
para que en el dicho mi nombre y como mis albaceas cabezaleros testa-
nlentarios hagan y otorguen mi testamento última y postrimera vo-
luntad. Para lo cual desde luego nombro sepultura en la Iglesia y
Convento de Nuestro Padre San Francisco con mortaja de s u santo
hábito y en la sepultura que tengo en él y nombro por mis a1bace:is
a los arriba nombrados y los que los susodichos nombraren y por tene-
dores de bienes y tutores de los que quedan menores. S nombro por
mis hijos legítimos y herederos y de (1oñ:i Ilnría Ruiz de la Ilota m i
niuJer difunta a dichos mis tres hijos ya nombrados. A doña Isabel
Vyera de la Nota, mujer de dicho RIaestre de Campo don Diego Ortiz
(le Zárate; a doña Nagd:ilena Vyera (le la Nota. mujer del JIaestre d e
Campo don José De Araujo y Gayoso y a doiía Ana y doíia Teodora
Vyera de la Mota menores doncellas. Y Francisco y J u a n Codrí-
vuez Vyera menores. Todos nueve mis hijos y herederos legítimos en el
remanente de mis bienes derechos y accioncs para que los partan con
la liendicibn de Dios y la mía en esta forma que yo casé a la dicha doña
Isabel Vyern (le la RIota con dicho Blacstre de Campo don Diepo Ortiz
de Zlrate y le di en dote y casamiento lo que consta (le una foja d c
libro de caja que tengo que sirve de carta de dote por no habérmela
fecho. Y asimismo casé a la dicha doiía AIagdalena Vycra de la Ilota
con dicho RIaestre de Campo don José de Araujo y le di cn dote treinta
y dos mil pesos como consta de carta de dote que -p a r a en poder (le
dicho 3laestre de Campo don Diego Ortiz. Y declaro que aparte me tiene
hecha escritura ante el presente escribano de cantidad de dieciséis mil
pesos. P a r a bajar a empleo a la Ciudad de Santa F e fuera del envio
que después ac5 le he hecho para la conducción de dicho empleo cl cual
mando se beneficie todo de mi cuenta. Y sacado en limpio y reducido a
plata o ropa se le den a dicho Maestre de Campo don José de Araujo
de ellos, dieciséis mil pesos eorricntes para sus vestuarios y alimentos
de casta que estos declaro añadir a la carta de dote que le tengo fecha
R dicha m i hija sin otros suplimientos que le h e hecho de los cuales n o
hago mención sino es que el susodicho quiera venir a cuentas o pedir las
que en este caso se le ha (le hacer cargo de todo por entero y asimismo
(leclaro que en el solar que compré al capitán Tomás Lasuerra Regidor
d e esta ciudad se están haciendo unas casas nuevas de morada de m i
cuenta y costa y las tengo dedicadas y donadas a la dicha doña Mag-
dalena de Vyera mi hija y s u mujer mando que acabadas que scan ente-
ramente y que se pueda vivir en ellas se le entreguen por suyas propias
que se las doy y dono desde luego para siempre jamls para la susodicha
y sus hijos herederos s i los tuviere y de no que vuelvan a1 tronco de mis
bienes después de los días de la susodicha. Idem mando que de dichos
mis bienes y de lo mejor y m l s bien parado de ellos se saquen sesenta
y cuatro mil pesos, los cuarenta mil de ellos en reales de plata y los
veinticuatro mil en esclavos, ajuares y plata labrada y que éstos s e
partan y estén separados para el dote de las dichas mis dos hijas doña
Ana y doña Teodora Vyera de la Blota. doncellas que están por casar
en lo que desde luego les doto a las susodichas y para que fecho y hasta
tanto que Dios sea servido darles estado hn de p a r a r l a dicha cantidad
enteramente en poder de dicho 3Iaestre de Campo don Dieso Ortiz de
%Arate, como mi principal tenedor de bienes que dejo y tutor de dichos
mis hijos menores y que quedan n s u amparo y disposición como fío
de su amor y celo cristiano. Y en cuanto a lo tocante a dicho Blaestrc de
CUEBIES DOCUBIENTADO 203

Campo don José de Araujo, e n el débito que me tiene otorgado y envios


que le he hecho para la conducción del empleo que ha de t r a e r y consta
de menos de dichos cnvios que le he hecho, el dirsele dichos dieciséis mil
pesos que así mando después de reducido dicho empleo a plata y ropa y
~ i e m p r ede mi orden y cuenta o la de mis albaceas ha de s e r con tal
y cargo que dicho Maestre de Campo don José d e A r a r ~ j oha de d a r
cuenta y razón ajustada de todo lo que llevó a dicho empleo y no de
otra manera por la quiebra o falta que en esto puede haber y conforme
a ello se ajustar6 con el susodicho lo que llevo mandado y no d e otra
manera. ltem mando que de todo el remanente de mis bienes pagado
mi funeral dejo señalados a dichos mis cinco hijos varones a veinte
mil pesos cr~rrientesa cada uno entrando lo que le hubiere dado a esta
cuenta a los mayores que ccnsta por escrituras, recibos y cuentas
que tengo de todo y de los demiis bienes que quedaren, muebles g
raíces y deudas que me deben que constan por escrituras, cédulas
y cuentas de libros tasrdo lo que fuere y no por almoneda n i en otra
forma se parta. La demasía de dicho remanente separado lo que dejo
señalado a dichas mis dos hijas y cinco hijos como va referido dicho
remanente entre todos nueve herederos igualmente con la bendición
(le Dios y mía. Y por cuanto en virtud de p d e r que tengo y me dejó
la susodicha y comunicado entes de su fallecimiento tengo hechas laa
niejoras que constan a mis hijas mayores que esthn casadas y así ellas
romo las que esthn por casar en lo que les dejo señalado mando n o
tengan pleito ni diferencia alguna sobre dichas mejoras e i g u a l a c i h
d i bienes porque en tal caso desde luego para entonces la demasia
.
que hubiere de.. aparte s e la vuelvo a donar una, dos y las demás
veces que el derecho me permite. a la que estii en posesión de ellos y
ouiero y e3 mi voluntad, que nsi se guarde, cumpla y ejecute por vo-
luntad que fue d e la dicha mi mujer difunta y mía y que en la propin
forma la tengan y observen dichos mi3 cinco hijos varones, así entre
ellos como por lo tocante a dichas s u s hermanas e n c a r g h l o l e s como
les encargo s u amparo de las que quedan por casar y varones menores.
Y que se conserven en la paz y unión de huenos hijos y hermanos. para
consuelo del bien y .almas de sus padres y que con esto les merezca
y alcance entera bendición d e ambos. Item mando que en conocimiento
dc la disipación que padecen las casas e hijos menores que quedan
apartando y desmembrando los bienes de ellas antes que el tiempo lo
pida y necesite y deseando en esta parte la conservación conque deben
pasar dichos mis hijos en la posesión de los bienes que dejo muebles
y rafces mayormente cuando en ellos n o carga dependencia n i deuda
que necesite, su venta n i disipacihn en manera alpiina. Arando y es
m i voluntad que todo lo tocante a bienes que quedan en las casas de mi
morada y chacras de p d a , estancias, ganados mayores y menores, ser-
vicio de casa, alhajas, plata labrada del uso, trastes de elIa y tienda de
mercancía se esté y quede después de mi fallecimiento como hasta hoy
y en dichas mis casas dichos hijos, mujeres e hijos que e s t j n por
casar y menores en buena unión y conformidad, sin que sea necesario
venderse cosa alguna de ello en almoneda ni fuera de ella sino que te-
niendo dichos bienes en conserva de ellos y sus frutos, se alimenten,
vistan y reparen dichos bienes hasta que con el tiemro y que siendo
Dios servido, se dé estado a dichas mis dos hijas y que sus hermanos
menores entren en conocimiento y aplicación del estado de sus personas
y que en este caso los dichos mis albaceas vean y conozcan s e r im-
portante la separación y darlcs a cada uno su parte lo hagan procurando
por todos caminos y medios excusar la desunión y separación de dichos
bienes y herederos s i no es con muy bastante causa y necesidad para
ello y para cuyo efecto en manera alguna antes n i despues se pueda
vender n i venda el scrvicio casero de esclavos que queda en ella. Así
por lo que necesita de este servicio la conservación de dicha casa y
chacra, como por el amor y crianza con que los he tenido h m t a hoy
n?irhndolos y cuidi<ndolos como a hijos por el amor y fidelidad conque
me han asistido y consta a dichos mis hijos y albaceas y en que por
la dicha razón y causa y de ejecutardn mi deseo y voluntad en esta
liarte no dejo e n la libertad que quisiera a algunos de ellos por quedarlo
en servicio de dichos mis hijos por el amor de haberse criado los más
ccn ellos y nacido en mi casa con toda doctrina. Item cleclnro que
I'rancisco Juan 3lercader difunto me quedó debiendo por clAusula de
su testamento so cuya disposición falleció, un mil doscientos y catorce
pesos corrientes. P o r los cuales y su funeral que pague se sacaron al
almoneda R U S bienes que fueron una esclava llamada Catalina, negra
soltera, con sus dos hijos: Blnnuel negro, y Frnncisco pardo, los cuales
nor dicha almoneda se me adjudicaron y .traspasaron por la cantidad
de dicho mi débito y de ellos murió en mi servicio la dicha negra Cata-
lina y quedaron los dichos sus hijos que e s t i n vivos y presentes y
porque al dicho Francisco pardo con la aplicaci6n y ensefianza que le di
a leer y escribir y mucho amor que le he tenido le puse apellido de .Juan.
como hoy se halla Francisco J u a n y por la lealtad y fidelidad con que
n?e ha asistido en todo y por todo, especial en el manejo de la tienda d e
niercnderias corriendo por su mano todo el despacho de ella y haber
sido con puntualidad y fineza y en que por esta causa y otras justas
que a ello me mueven: he querido dejarlo horro de esclavitud y servi-
dumbre y porque habiendo de ejecutarse la cláusula antes de ésta en
cuanto a la unión y conservación de m i casa; bienes e hijos que han
(le quedar en ella y el dicho Francisco Juan ser por cuya mano y cuenta
Iia corrido cl manejo de mis tlepcndencias, papeles y cosas tocantes a
ella, a t e n d i m l o juntamente n que saliendo de ella no Re distrai,ra o que
los jueces y superiores no lo violenten llevhndolo n otras partos s en
ellas se sirvan de él o lo maltraten y vendan teniéndolo por esclavo,
es mi voluntad y mando que sin este nombre quede en la dicha mi casa
como hasta hoy h a estado corriendo con la manufactura de dicha tienda
y clemds cuidado de ella y enseiianza (le mis hijos menores sin que
ninguno de dichos mis herederos, albaceas n i otras personas lo traten
n i tenaan como a esclavo sino como 3 persona libre y que como tal n o lo
med dan vender. trocar. cambiar, partir n i en otra manera rna.ienar.
apremiar, ni molestar dándole el sustento y vestuario necesario. porque
de lo contrario en cualquiera cosa de ellas que sea apremiad:, desde
luego par:\ entonces lo dejo y declaro por horro de servidumbre y
sujeción como lo es y usar de ella en la forma que m i s y mejor a s u
derecho le convenga. Item declaro que yo he tenido cuentas de compañía
con Pedro Alvarez Laureano, morador de esta ciudad que constan por
escritura que pasó ante el presente escribano de que tengo tanto entre
mis papeles y asimismo corre por mi libro de caja y memorias tocantes
a ella. Y fuera de lo dicho me es deudor de mil y ochocientos pesos a
que estan hipotecados a censo sus casas de moradas y esclavos de m m -
común con doña Juliana Cardoso por escritura pública; mando que uno
y otro se ajuste con el susodicho y se cobre su alcance. Item declaro
me deben diferentes personas de esta ciudad y provincia y fuera de ella
cantidades de plata considerable, por escrituras públicas, chdulas, obli-
gaciones, cuentas <?e libro y ajuste de ellas, que pasa todo por mano
(le dicho Francisco Juan y cuya razón mando se ponga por zpunta-
miento aparte cosido con esta mi disposición para que en virtud de
ello y de dichos instrumentos dichos mis albaceas lo cobren en lo liqui-
dado de ellos y en lo que no por el ajuste que hicieren harzín dichas
cobranzas. Item declaro que yo he tenido y tengo hasta hoy la real
caja de esta ciudad y según las cartas cuentas que he dado y despachado
todos los años a los señores Jueces Oficiales Reales de esta provincia,
<!c la plata que ha salido de ellas y de la que hay caída y en ser que todo
se halla ajustado por las partidas del Libro Real me parece habr&
caído y que debo a Su Najestad hasta seiscientos pesos poco m6s o
menos y del Ramo de Sisa no deberse hasta hoy cosa alguna, por haberse
pacado todo lo que había caldo por el señor Gobernador de esta pro-
vincia, mando que mis albaceas si no lo hiciere yo antes, luego que yo
fallezca entreguen dichn Real Caja al Cabildo de esta ciudad con cuenta
Y pago de alcance y que se declaren por libres mis bicnes. Item declaro
que yo quedé albacea y tutor de los hijos menores de Diego Fcrn6ndez.
dueiío del ingenio de la vena de agua. Y aunque yo no acepté dicho
albaceazgo ni tutela he tenido cuenta con dichos sus herederos por la
compañía que tuve con dicho difunto de lleva de ejes a Potosí p e s c r t
iuras que hubo en la razón, remitome en todo a la declaración que haré
y constari aparte ante el prcsente escribano, escritura, autos. papeles p
cuenta de libro por donde consta de todo. mando que mis albaceas por
dichos instrumentos cobren o paguen el alcance que se hiciere de dichos
bienes. Item declaro que yo fui casado In facie eclesie con la dicha doña
Naria Rodri~uezde la Mota mi mujer difunta y constante matrimonio
hubimos y procreamos por nuestros hijos e hijas legítimos a los nueve
que tengo ya nombrados, ~acerdotes,clérigos de menores órdenes, en-
sadas, doncellas y menores. Y otros que se nos murieron durante dichn
matrimonio decldrolos como dicho es por mis hijos y herederos legi-
timos y forzosos y de la dicha mi mujer. Y al tiempo y cuando nos
casamos me dieron de dote g por caudal conocido suyo sus padres que
lo fueron el Cnpltiin Antonio Ruiz de Armas, alcalde Provincial que
fue de esta Ciudad e Isabel de la Mota su mujer leqitimn ambos di-
funtos, diez mil pesos corrientes y yo traje de caudal g capital mío
trcintn mil pesos corrientes. Y conforme a esto le correspondicron las
pananciales que pudo haber hasta la muerte de dicha 'mi mujer. Me-
diante lo cual y por lo que tengo declarado y mandado en las mejoras
que hc hecho a mis primeras hijas, en conformidad como dicho es
de lo que me dejó comunicado la dicha mi mujer difunta a mayor abun-
damiento sean y se entiedan haberles hecho dichas mejoras y dona-
cioneq de ellas en todo lo que alcanzare el tercio y quinto de mis bienes
sacado mi funeral y en esto las revalido y vuelvo a hacer de nuevo
en caso necesario, por expresa y última voluntad de ambos. Y e n esta
forma y de lo demás que les tengo comunicado y comunicare a dichos
mis albaceas cabezaleros testamentarios del bien de mi alma y descargo
de mi conciencia y que me fuere posible dejar por más razón e instrucción
para ello nsi de obras pías, capellanias y otros legados, especialmente
dicho maestre de campo don Diego Ortiz dc Zárate como el principal
nombrado en dicha testación, tenencia de bienes y tutela de dichos mis
hijos menores. hagan y otorguen dicho mi testamento e n forma pos-
trimera y última voluntad, con todas la cláusulas expresadas en esta
mi disposición de poder y 'en particular las tocantes a mi entierro,
albaceas y herederos, que desde luego apruebo como s i presente fuese
a s u otorgamiento con lo cual revoco, anulo y doy por ningunos otros
testamentos y codicilos, poderes para testar y otras últimas voluntades
que antes de ésta haya hecho y otorgado de palabras o por escrito
para que no valgan salvo este y el que en su virtud y con s u inserción
fuere hecho y otorgado por dichos mis albaceas el cual quiero se cum-
pla y gu,?rde por tal mi testamento última y postrimera voluntad. e n
testimonio de lo cual lo otorgo asi en esta dicha ciudad de Jujuy en cuatro
dias del mes de setiembre de mil y seiscientos ochenta y tres años y
el otorgante a quien yo el escribano de Su Majestad doy f e conozco l o
firmó y a lo que parece está en su sano juicio y entendimiento natural
porque habla concertadamente siendo llamados y rogados el Padre defi-
nidor F r a y Diego de Acevedo, Religioso de la orden de nuestro padre
San Francisco; el Ayudante Domingo , J u a n de la Ilota, Antonio
hlontero y el Reverendo Padre Custodio F r a y AIiguel de Ortega de dicha
sagrada religión y don Jacinto de Araañaraz y Nurguir. en este papel
común a falta del sellado.
J I ~ Rodrigiter
Z I'ieircl
1)eudas G quintales Ante mi
sacóse tanto a los Fruiicisco Citcrrero
herederos. Escribano de Su Majestad

Don Esteban de Urízar y Arespacochaga, Caballero del Orden d e


Santiano, Brigadier de los Reales Ejércitos de Su Majestad, s u Go-
bernador y Capitln General de estas Provincias del Tucumán, etc.
P o r cuanto el Capitin don Francisco de Argnñaraz por comisión
de veinticinco de enero del nño pasado de quinientos y noventa y t r e s
.que le confirió don Juan Ramirez de Velasco siendo Gobernador y
Capitán General de estas Provincias, pobló y fundó en diecinueve de
abril de dicho año. segundo dia de Pascua de Resurrección la Ciudad
'de San Salvador de Jujuy y en el Real nombre tomó posesión de ella
poniendo dicho día el rollo y picota o úrbol de justicia en la plaza de la
dicha ciudad y celebrando la primera misa en el sitio que señal6 para
que se edificase la Iglesia Matriz y por la ordenanza quinta que esta-
bleció ordenó que el domingo de Pascua de Resurrección y el lunes p o r
la mafiana s e sacase el estandarte Real poniéndole por nombre a l a
dicha ciudad el de San Salvador en memoria de que dicho segundo día
de Pascua fundó la dicha ciudad para que en lo de adelante y pcrpetua-
mente se celebrase fiesta este dia en memoria de haberse fundado e n
61 la dicha ciudad, como se continuó siempre y sin intermisión sacando
dichos dias a vísperas y misa el Real estandarte hasta que en la dicha
ciudad de pocos años n esta parte sin saberse en este gobierno la causa,
razón o motivo que hubo para invertir este estilo dejaron el dicho día
y se pasaron a celebrarle el dia (Ic la Transfiguración del Señor n o
debiéndolo ejecutar sin autoridad y licencia de quien con conocimiento
de causa la pudiese y debiese dar. Por tanto ordeno y mando a dicho
Cabildo Justicia y Regimiento de la dicha ciudad, pena de quinientos
pesos aplicados en la forma ordinaria en que contraviniendo declaro a
los que le componen incursos mnncomunados cesen en celebrar el dicho
día de la Transfiguración la fiesta titular de la dicha ciudad y n o
saquen el Real estandarte en 61 sino en el dicho segundo dia de Pascua
de Resurrección en que se fundb y poL1ó la dicha ciudad y reconozca
dicho Cabildo los libros capitulares y remita al pie de este orden (que
mando ee copie en ellos) testinionio del Cabildo o Cabildos que se
hicieron para ejecutar la dicha mudanza para qiie conste quienes fue-
ron los autores de novedad t a n irregular y se proceda a Ias diligencias
que más convengan para que en lo de adelante no sirvan de ejemplares
~ e m e j a n t e sdeliberaciones contra los establecimientos que en las funda-
ciones con gran acuerdo se hicieron y del recibo de éste dará dicho Ca-
t d d o razón luego a este gobierno, fecho en Salta en diecisiete cle j d i @
de mil setecientos y veintitrés años.
Don Este1)nn (le Uriznr Arcs~meoclrngn
Testigo: Lnre~czodel Rfo Amézngn
Testigo: Diego de Ibieta

Ejemplo y dcmlis dili- El Sargento Mayor don Francisco Palacios


p.encias para la entra- Alcalde Ordinario de esta Ciudad de San
d a a Senta de don Pe- Salvador de Jujuy por ' S u Majestad que
dro Ortiz. Dios guarde y a cuyo cargo es el gobierno
de ella por ausencia del Justicia Mayor y
Capitdn a Ruerra de esta dicha ciudad, hago saber al Capitán Gerónimo
de Cañizares, Teniente de Gobernador. Justicia mayor y Capitán a gue-
i r r a del partido de Cochinoca, Cnsabindo. Vallerico y dem8s de aquel
distrito cómo hallándome con órtlcnes del seiior Gobernador y CapitOn m-
neral de esta Provincia del servicio de ambas inajestades sobre la guerra
pendiente de los indios fronterizos de la provincia del Chaco, e n que
quedo entendiendo según la importancia del caso y'brevedad que pide
IIL ejecución de ello y que para lo tocante dichos pueblos y parajes en-
que dicho justicia mayor ha de ejecutar lo que por dicho orden de Ca-
pitanía General se le cometiere y viene ordenado en elln y que esto
h a de s e r juntando y convocando todos los vecinos y moradores que
asisten en dichos parajes y personas sueltas de todas suertes para cuyo
efecto y de que el dia once de octubre próximo venidero de este pre-
sente año s e celebra la festividad de nuestra Seiíora del Rosario e n
811 Santa casa e iglesia de dicho pueblo de Cochinoca por tanto, exhorto
y requiero a Vm. de parte de Su Majestad que Dios guarde y por el
oficio que administro y d e la mía encargo que luego que reciba este
despacho exhortatorio se sirva convecar todas las personas moradores
y sueltas que asisten en dichos parajes de su jurisdicción bajen y con-
c u r r a n con Vm. dicho dia y festividad de dicho pueblo de Cwhinoca
donde hallarii Vm. la orden < I d señor gobernador de esta provincia para
ejecutarla en lo que por ella s e manda de este Real Servicio que e n
hacerlo así Vm. cumpliri con la obligaciOn de lo que le toca y yo con
lo prevenido en el exhortatorio para cuya noticia doy comisiGn cum-
plida a cualquier persona que sepa leer y escribir y que lo ponga por
,diligencia y se me vuelva para juntarlo con los demás autos de la ma-
teria que se van obrando. Fecho en esLz Ciudad de Jujuy en veintiún
dias del mes setiembre de mil y wiscientos y ochenta y dos años
en este papel común a falta de sellado Don Francisco Palacios. P o r
mandado de su IIerccd, Francisco Ct~eirero. escribano
Decreto. (le Su 3lnjestatl. E n el mojón de Calahoyo de esta pro-
vincia de TuciimBn en primero d h del mes de octubre
(le mil y seiscientos y ochenta y dos años, yo el capitán Gerónimo de Ca-
fiizares, Teniente de Gobernador y Capitán a guerra, Justicfa mayor
(!e este partido del T'allerrico y todo su distrito por Su BIa.i$stad.
n i n o que habikndoserne presentado el exhortatorio <le arriba a mi fecho
1)or el Sargento mayor don Francisco de Palacios, Alcal<le Ordinario
de la Ciudad de San Salvador de Jujuy y a cuyo cargo s e halla el Go-
bierno de elln por auorncia del jiisticin mayor y capitiin n puerra. Y
visto por él. yo dicho teniente de Gobernador y lo que me representa
e n orden a las 6rdenes superiores con que se halla del señor Gober-
nador de esta dicha provincia y cuanto conviene al servicio [le Su ñla-
.iestad que todos los vecinos moradores estantes y habitantes en este
dicho partido se hnllen en el pueblo de Cochinoca el día once (le este
p e s c n t e mes para que con vista de la orden del Señor Gobernador que
d l i me h a de s e r presentada. dé cumplimiento a su contenido para
ciwn ejecución por lo que pudiere convenir al servicio de Su Majestad
respecto del corto tiempo que Re señala para dicha junta. Mando que
en este dicho partido se le dé el debido cumplimiento a dicho exhor-
tatorio y se haga saber con toda breveilad a todas las personas. ve-
cinos y estantes y habitantes en él para que sin excusa ni omisión
.alguna se hallen conmigo el domingo venidero que se contará once
del corriente en el dicho pueblo dc Cochinoca (le este distrito en el
cual se celebra la festividad de Nuestra Señora tlcl Rosario por espe-
r a r Órdenes del servicio de Su IIajestad que comunicarles e n él y
Para que venga a noticia de todos, mando se haga saber y notificar
e t e auto a todos los vecinos y moradores y personas sueltas de este
CÜEMES DOCUMENTADO 299

dicho distrito; y lo cumplirln así pena de doscientos pesm nplicados


ia mitad cámara de Su Majestad y gastos de guerra de esta dicha
provincia y veinte díns de chrcel. Así lo prevei. mandé y firmé actuando
por mí y ante m í con los testigos que se hallaron presentes. Pedro de
Arregui y Sebastián de Huerta. a falta de escribano público ni Real
J va e n este papel común por no haber sellado. Gerbninio de Caríizares.
Testigo: Francisco de Ca>?izares. Pedro do Arreglii. Scbastián de
Huerta. En el asiento (le In Cruz. en cuatro dias
Sotificación. del mes de octubre de mil y seiscientos y ochenta
y dos años, yo el capitán Gerónimo de Cnííizares,
Teniente de Gobernador y Capitán a guerra de este partido del Va-
llerrico, gobernación del Tucumfm; para la ejecución y cum~limiento
del auto de arriba por mí proveido les leí y notifiqué a las personas
que se hallaron en dicho asiento de la Cruz, como son J u a n Rodripuez
Salgado y Andrbs Salgado, s u hijo. que dijo que lo oían, de que doy
fe, siendo testigo Pedro de Arregui y v a en este papel comíin a falta
*<lesellado que no le hay y de escribano público n i real. Gerími~node
Cafiizarcs. Pedro de Arregai. E n la estancia de los Cerrillos juris-
dicción de la provincia del Tucumln. en cinco días
Xotificacibn. del mes de octubre de mil y seiscientos y ochenta
y dos años, yo el Capitln Cerónimo de Cañizares,
Teniente de Gobernador y Capitán a guerra, justicia mayor del pnr-
titlo del Vallerrico, Cochinocn y Cnsabindo y su distrito por Su nla-
.¡estad y para el cumplimiento del auto de arriba por mí proveído,
lei y notifiqué n las personas de Antonio Teisca y Bernardo de Tapia
<]iie firmaron conmigo y porque la persona de J u a n de Tapia s e halla
.en la cama impedido de un accidente, así lo prcvei. mandé y firmé, ac-
tuando por mi y ante mí a falta de escribano público y real: va e n
este papel común por no haber sellado. Gerbnin~ode CaNiznres. Tes-
tigo: Pedro Arregtii. Antonio Teisca. Bernardo de Tapia. E n la es-
tancia de Sayate. jurisdicción de In Provincia del
Sotificacitn. Tucumán, en cinco díns del mes de octubre de mil
y seiscientos y ochenta y dos aííos yo el capitán
GerOnirno de Caííizares, teniente de gobernador y capitln a guerra
justicia mayor del partido del Vnllerrico y s u distrito leí y notiFiqu6
e l auto de arriba por mí ~woreídoy el exhortatorio e n las personas d e
J u a n de Blaidana Altamirano y Esteban de Naidana Altamirano que
firmaron conmipo dicho teniente a faltn de escribano real y va en
este papel. común a falta de sellado. Ccrónitno de Caí,i:nwn. J n a n de
Jloklann Altnniiruno. Esteban de Alnidnnn Alfninirnno. En la estancia
de Savate jurisdicci0n del Tucumán en seis días del
Sotificación. mes de octubre de mil y seiscientos y nchenta y
dos años yo el capitíin G e r h i m o de Cañizares, te-
niente de gobernador y capitln a r u e r r a justicia mayor del partido del
T'allerrico y su distrito Icí y notifiqué a Francisco de Tapia Nontalvo
S a Diego de Tapia illontalro en sus personas el auto de a t r l a por m i
proveído y firmaron conmigo dicho teniente a falta de escribano pú-
Idico n i real en este papel común por no haber sellado. Geróniino de
Cafiizares. Francisco de Tapia. Diego de la C r w idoniduo. E n la es-
tancia de Sayate jurisdiccirin del Tucumán e n seis
Notificación. días del mes de octubre de mil seiscientos y ochenta
y dos años. Yo el Capithn Gerónimo de Cañizares,
teniente de Gobernador y Justicia Mayor capithn a guerra del par-
tido del Vallerrico por Su IIajestad leí y notifiqub a Tomds de Naidana
e n s u persona con testigos que se hallaron presentes. Pedro de Arresui
a falta de escribano público ni real en este papel común por no haber
sellado. Gerónitno de Caícirares. Testigo: Pedro de Arregici. En l a Es-
tancia de Sayate término y jurisdicción de la pro-
Xotificacibn. vincia del Tucumdn en siete días del mes de octubre
de mil y seiscientos y ochenta y dos años yo el capi-
tán Gerónimo de Cañizares, teniente de gobernador Y capitún a guerra
justicia mayor del partido del Vnllerrico. Cochinoca y Casabindo y rlc todo
su distrito por Su IIajestad leí y notifiqué el auto de atrús por mí pro-
w í d o a Pedro de Tapia 3Iontalvo en s u personn de que doy fe y firmó cun-
migo presente Pedro de Arregui a falta de escribano público ni real en
cste papel común por no haber sellado. Gerónimo de Cañizares. Pedro de
Tapia nIontal\o. Testigo Pedro de Arregui. E n el aviento de l a Rinco-
conada de la jurisdiccih de la provincia del Tucu-
Notificación. mán en siete días del mes de octubre de mil y seis-
cientos y ochenta y dos años yo el capitán Ger6nimo
de Cañizares, teniente de gobernador capitdn a guerra justicia m:iyor de
este partido del T'allerrico. Cochinoca y Casabindo y todo s u distrito
leí y notifiqué el auto por mí proveído n las personas que s e hallaron
e n dicho asiento como son Luis de IIerrera, Antonio Jimes y
Ambrosio IIuñoz Cansinos que firmaron conmigo dicho teniente
a falta de escribano público n i real en este papel común a falta
de sellado. Cer6niino de Caíiizorcs. Atttonio Jinies. Lztis tic Ile-
rrcra. An~drosionlicfioz Cansiizos. E n el pueblo de Cochinoca en once
días del mes de octubre de mil y seiscientos
Auto y diligencias. y ochenta y dos años. Yo el capithn Gerónimo
de Cañizares, teniente de gobernador y ca-
11ithn a guerra de este partidc del Vallerrico, Casabindo y s u distrito
por S u Majestad digo que habiendo concurrido en este dicho pueblo
e n virtud de las diligencias antecedentes junto con todos los españoles
vecinos y residentcs (le estn dicho paraje según las notificacicnes que
por m í les fueron fechas en presencia de todos me f u e entregado por
el Licenciado Antonio de Godoy cura y vicario propietario de los
pueblos de IIumahuaca, Casabindo y este dicho de Cochinoca y sus
anexos un orden del señor Gobernador de w t a provincia en que se
sirve d e mandar que todos los españoles de este particlo se alisten y
prorrateen para la asistencip. y compañía del 1,icenciado don Pedro
Ortiz de Zhrate cura propietario de españoles de la Ciudad.de J u j u y
y este distrito en la población que con tan cristiano celo intenta ha-
cer en tierras del enemigo nIocovi por la parte d e Zenta procurando
s u reducción por medios suaves a nuestra ~ a n t í s i m af e católica y asi-
mismo que se reconozca en estos dichos pueblos de Casabindo y Co-
chinoca por los p;i(lrones o mntrícula que tuvierc dicho cura los in-
dios forasteros que hubiese en ellos aunque sean casados con indias de
dichos pueblos y que se haga padrón de dichos indios forasteros y
s e prorratecn para que la mitad acudan a dicha entrada ~ u e d a n d olos
(lemis para resguardo y su remuda y asimismo que los que tuvieren
títulos o tierras en el dicho Valle del Zenta vagan o envíen a poblarlas
porque pasado un año desde el día que entraren en el presidio que s e
intenta hacer se ha de d a r por vacas y realengas para hacer merced
de ellas después de tres años en que han de s e r preferidos los que
asistieren cn dicho presidio y que la entrada referida se ha de hacer
por el mes de octubre de este año a dicho Valle de Zcnta con bueyes
y aperos para sembrar y para ayuda del sustento de la gente do dicho
presidio todo lo cual visto por mí mando que el testimonio del dicho
orden del señor Gobernador se ronga original con estos autos y se
publique y haga saber a dichos españoles para que en s u conformidad
se alisten y prorrateen para dicha entrada quedando los demls para
la remuda de ellos o lo que se ofreciere del servicio: de Su i\Iajestad
que Dios guarde; y en cuanto a los indios forasteros de estos dichos
pueblos respecto (le hallarse aquí el hlaestrc de Campo don J u a n José
Campero de IIerrera vecino de la Ciudad de Jujuy y E U encomendero y
constarme tiene padrones de dichos indios de encomienda y en parti-
cular el último que hizo en la visita de dichos pueblos el señor don
José de Garro. Goberna(1or y Capitán General que fue de este dicho
p:irtido y provincia del Tucumln, mando que se le haga saber a dicho
Naestre de Campo exhiba luego dicho padrón para que conforme a 61
con s u asistencia como t a n interesado y la del dicho cura e n presen-
cia de los gobernadores y alcaldes de dichos pueblos: se reconozca los
indios forasteros que hubierc en ellos y dichos curacas <le no constar
haber alguno por dicho padrón declaren debajo de juramento s i hay
actualmente algunos en dichos pueblos. Y asimismo se harü publicar
dicho auto del señor Gobernac!or por lo que mira a los dueños (le las
tierras (le Zentn y por constarme tiene de ellas títulos en forma el
dicho ItIaestre de Campo don J u a n Campero por haber aido de au
suegro el Maestre de Campo don Pablo de Ovando difunto. BInndo que
con especialidad se le haga saber al dicho hlaestre de;Campo don J u a n
Campero por lo que tuviere que alegar para lo cual en s u presencia
y de todos los españoles que aquí se hallan, mando s e publique y hapa
saber este dicho auto junto con el dicho orden del señor gobernador
y asimismo a los gobernadores y alcaldes indios de estos dichos pue-
blos y que los dichos españoles que se prorratearen 'estén e n el pue-
1110 de IIumahuaca para el efecto dc dicha entrada el día veinticinco
del corriente pena de que s e r l n castigados los inobedientes con todo
rigor de justicia y de cincuenta pesos que desde l u e ~ oaplico a los
pastos de dicho presidio y lo mismo mando a los indios que parccieren
a se hallaren haber forasteros, en estos dichos pueblos y así lo proveí.
mandé y firmé ante mí a falta de ehcribano, siendo testigos que también
10 firmaron Cartolomé Cardoso y Pedro de A r r e ~ u i Gerúnisio
. de Caíiitn-
?Cs. BartolomE Cardoso. Pedro de Arregiti.

h'otificación. Y luego incontinente en dicho pueblo, en dicho d h ,


mes y año, yo dicho teniente de Gobernador y Ca-
pitáh a guerra leí y notifiqué el auto de arriba por mí proveído junto
con el orden del Señor Gobernador y capitán General de esta dicha
provincia a todas las personas que en él se expresan españoles y cu-
racas de dichos pueblos, al Maestre de Campo don Juan Campero en-
eomendem de ellos en sus personas, los cuales dijeron que lo oían, de
que certifico en cuanto puedo y ha lugar en derecho así lo firmé ante
nii a falta de escribano siendo testigos que también lo firmaron Juan
Rodríguez Salgado, Pedro de Arregui. Cen5ninio de Caíiizares. Juan Ro-.
dríguer Salgado. Pedro de Arregzti. En dicho pueblo de Cochinoca,
en dicho día, mes y año, dicho yo el dicho Teniente de
Lista. Gobernador y Capitán a guerra hice parecer ante mí en
virtud del auto de arriba a . todbs los españoles que hubo
de este partido para el efecto de que se alisten y manifiesten las ar-
mas que tuvieren y en su cumplimiento parecieron las personas si-
guientes que abajo irfin mencionadas, primeramente Juan de Maidan:,
hacendado en este partido de edad de cincuenta y tres años con su
espada y daga. ---------- - - -- ---
- -- --- - - -- -
Item pasó muestra Tomás de BIaidana con su espada y daga de edad
de veintidós años. - - - - -
ltem pasó muestra Francisco de Tapia:lIontalvo con espada y daga
- - --- -
de edad de cincuenta y dos años. - -- - -
-
ltem pasó muestra Diego de Tapia de edad de dieciocho años. -
Item pasó muestra Pedro de Tapia Montalvo de edad de setenta y dos
años con su espada y daga. - -- - - - - --- - - -
Item pasó muestra Luis de Herrera de edad de cuarenta años poco
--
m i s o menos con su espada y daga. - -- -- -- --
Item pasó muestra Ambrosio Muñoz Cansinos de edad de veintiseis
años con espada y daga. - - - - -- - - - -
- - - -
Item pasó muestra Antonio Jimenez de edad de treinta y seis años
-- ---- --
poco m i s o menos con espada y daga. - -
su espada y daga. - -- - - - - - -
Item pasó muestra Juan Rodriguez Parra de edad de treinta años conx
- - - - -- --
Item pasó muestra Juan de Zubelsa de edad de treinta años sin armas.
Item pasó muestra Antonio I ~ s c ay Lnndaverde comerciante de edad
de cuarenta y cuatro años. -- - --- - - ---
- -
Item pasó muestra Bernardo de Tapia de edad de veinte años sin armas.
RartolomE Cardozo de edad de ochenta y siete años sin armns. --
Item pasó muestra Juan Rodríguez Salgado vecino de los Chichas y
residente al presente en este partido y su hijo Andrés Salgado de
edad de trece años.- - - - - - --
- - -
- -- --
Estos son los que se alistaron y han parecido al presente en este
partido y aunque hay otros que tienen en 61, como Pablo de Alfaro y
sus hermanos, casas y estancias en la jurisdicci6n. sólo vienen a ellas
rn tiempo de matanzas y se hallan avecindados y habiendo de asiento
en la provincia de los Chichas por cuy? causa y la brevedad de este
despacho no se han podido citar, procúrase .hacer para la rcmuda co-
mo a Victorio Díaz y a Luis Ocho:, de Legorburu que se hallan ausen-
tes y Pedro del Castillo y respecto de ser todos los m h de la edad
que arriba expresa, mando que de los que se hallan presentes y hirbiles
para el manejo de las armas prorratados, se prevengan luego cuatro
CUEAIES DOCUMENTADO 303

soldados de los dichos arriba y nombro de ellos a ~ i m á de s i\faidana,


Antonio Jimes, Juan de la Parra y a Bernardo de :Tapia los cuales
mando se les notifique y haga saber que el dia veinticinco del co-
rriente parezcan en el pueblo de Humahuaca viéndose conmigo pri-
mero en este Pueblo de Cochinoca para que guarden el orden que se
les diere y lo cumplirfin así pena de veinte pesos y destierro por dos
años sin salario en el dicho presidio que se va a fundar en esta en-
trada de Zenta. Y para la remuda que se ha de hacer de dichos sol-
dados nombro a Victorio Díaz de Castro. Ambrosio BIuñoz Cansinos.
a Diego de Tapia, Esteban de 'Iaidana y a Pedro del Castillo a los
que les mando se les notifique debajo de las penas expresadas se ha-
llen prevenidos para que luego que llegue la ocasión de remuda y por
mi fueren avisados sin dilación alguna salgan a la asistencia y res-
suardo del dicho presidio. Así lo proveí y mandé ante mí a falta de
escribano siendo testigos que conmigo lo firmaron don Antonio de
Insca y Pedro de Arregui. Gerdnimo de CaNirares. Antonio de Lescn
Lnndaverde y Pedro de Arregui. Y luego incontinenti dicho día, mes
y año dichos, en el dicho pueblo, yo dicho teniente de gobernador y
capitán a guerra leí y notifiqué el auto de arriba como en 61 se ex-
presa a las personas que en El se contienen en sus personas que di-
jeron que lo ofan y en especial Bernardo de Tapia. Tomás de 8Iaidana.
Antonio Jimes y Juan Rodríguez Parra que son los que van de pre-
sente n dicha entrada y por lo que toca a los que han (le ir dc remu-
da después notifique a los presentes que se hallaron y fueron a Fran-
cisco de Tapia, Ambrosio IIuñoz Cansinos, Andrés Salgado también
cn sus personas que dijeron que lo ofan y por lo que toca a los demas
que faltan para dicha remuda se les harfi después la 'notificación por
no haberse hallado en el partido al presente; asi lo certifico en cuanto
puedo Y ha lugar en derecho ante mí a falta de escribano siendo tes-
tigos que también lo firmaron José de Renterla y Pedro de Arregui.
Gerbninzo de Cañizares. Josd de Renterfa. Pedro de Arregui. El sar-
gento mayor don Francisco Palacios, Alcalde ordinario
Exhorto. de primer voto de esta Ciudad de San Salvador de Jujuy
por Su Majestad que Dios guarde y a cuyo cargo es el
Gobierno de ella por ausencia de Justicia Mayor, hago saber al Cn-
pitan Gerónimo de Cañizares, teniente de Gobernador, Justicia Mayor
y Capitán a Guerra del partido de Cochinoca. Casabindo, Vallerrico y
demás de aquel distrito, cómo n los veintiuno del corriente recibí la
orden y despacho del señor Gobernador de esta Provincia para la eje-
cución de lo contenido en ella que es del tenor siguiente: Don Fernando
de ñlendoza 3Iateluna. Gobernador y C a p i t h Ge-
Orden del Go- neral de esta Provincia del Tucrimfin por Su hla-
1)ierno jestad que Dios guarde, etc., hago saber a1 Alcalde
'
de primer roto de la Ciudad de Jujuy, distrito de
este Gobierno, que en ella hace y ejerce el oficio de mi lugarteniente que!
por cuanto el licenciado don Pedro Ortiz de Zárate presbitero natural
(le la dicha ciudad con su cristiano y piadoso celo se ha ofrecido, en-
t r a r por el Valle de Zenta donde tuvo su población el ,General Martín
de Ledesma en la provincia del Chaco, proponiendo a este gobierno
que fortifieándosc en aquel paraje con treinta soldados y otros tantos
indios, solicitará l a comunicación del chiriguana de la Villa de Ta-
r i j a para que viéndolo el indio enemigo de la dicha provincia del Chaco y
que se le ha cogido aquella puerta para darle guerra. procurará el
dicho licenciado don Pedro Ortiz buscarlo y ofreciéndole la paz des-
velándole de que no será como la pasada n i se sacarán de sus tierras
con todo lo demás conveniente y muy necesario del mayor servicio de
nmbas majestades y bien de tantos infieles según que asi se ha reco-
nocido de los puntos de su carta que consulté con el obispo de esta
provincia y el provincial (le la Compafiía de Jesús y otros sujetos y
considcríindosc todo ello y que para usar del medio de la guerra n o lo
permite el miserable estado de esta Provincia por la suma pobreza qur
ratlece y que para ella es inexcusable supla la Real IIacienda los medios
necesarios y que primero y tinte todas cosas debe preceder el medio de l a
predicwión, pues nsi asegura la conciencia para cuando sus efectos n o
&cantan favorables como se descan y esperan y llegue el caso de darle la
guerra nl dicho enemigo obrando con mayor justificación satisfaciendo a
Dios Nuestro Señor y a Su AIajestad y que el buen logro mediante el di-
vino auxilio consiste en la subsistencia del presidio que se previene
s e ha de situar en el Paraje de AIartín de Ledesma, siendo aun muy
necesario para el caso de usar del medio de la guerra, pues desde .él
Fe le puede continuamente en todos tiempos por el resguardo que tie-
nen los que asistieren y por el contrario se dificulta en todas ocasio-
nes que se intente y que para ayuda n sus gastos ofrece el dicho
licenciado don Pedro Ortiz su patrimonio. para que todo ello tenga
buen efecto, ordeno y mando al dicho Alcalde de primer voto que al
presente hace oficio dc mi lugarteniente en la dicha Ciudad d e Jujuy,
cumpla y ejecute, guarde y haga cumplir. guardar y ejecutar precisa
e irremisiblemente sin pretexto, excusa, n i dilación los puntos siguien-
tes: que los vecinos encomenderos de los pueblos de Humnhuaea y
Casabindo hagan su vecindad en el dicho presidio que se sitúa e n el
dicho paraje de Martin de Ledesma sustentando cada uno s u sol-
dado; que el pueblo e indios Humahuaca según matricula de s u cura
de hasta diez indios de mita por la sexta parte de ellos, de éstos s e
podrin adjudicar al dicho presidio cinco dando los otros cinco de mita
3 la Ciudad de Jujuy con que no les obliguen a facción de guerra n i
otro ministerio alguno, sino mandarles esten prontos guardando aque-
lla frontera para d a r los socorros que se les pidiere. que aliste el dicho
alcalde todos los españoles que asisten en el curato de IIumahuaca.
Casabindo y s u distrito y los prorratee y mande que cada cuatro o seis
meses se remuden y asistan en dicho presidio. que en el archivo de la
ciudad o en p d e r del tesorero juez oficial Real de dicha ciudad s e
busque s i hay padrón o razón de los indios casados de diferentes provin-
cias que hay en dicho distrito del curato de Humahuaca y Casabindo
aunque lo estén con indias de aquella encomienda y éstos por el pa-
<!rán o lista que nuevamente se hubiere con asistencia del cura del
dicho partido se prorrateen para asistir en dicho presidio y remudarse
cada cuatro o seis meses quedando los clembs prontos al socorro d e
nquella frontera para lo que se ofreciere; que de las armas de fuego
que hay e n la dicha ciudad se le entreguen al dicho Liccncind~don
Pedro Ortiz veinte arcabuces y las carabinas y pistolas con alguna
pólvora y cuerda que pidiere dejando los competentes para el resguardo
de la ciudad constando recibo e n el Libro Real. que aliente m i s per-
sonas de dicha ciudad que quisieren a esta función voluntariamente
ofreciendo las conveniencias que permitiere el servicio, que los que
turieren titulos de tierras en dicho Valle de Zenta 'vayan o envíen a
poblarlas porque pasado un año desde el dia que entraren a 61 la gente
del dicho presidio se han de d a r por vacas y realengas y no se h a de
hacer merced de ellas n i de otras ningunas de dicha provincia del
Chaco hasta que Rean pasados t r e s aiíos de asistencia en ella y des-
1:ufs de ellos en las mercedes que s e hicieren han ' d e s e r preferidos
los que asistieren en dicho presidio y así lo hará publicar y que la en-
trada referida se h a de hacer por el mes de octubre de este año al
Valle de Zenta con bueyes y aperos para sembrar maiz y lo que per-
mitiere la tierra para ayuda del sustento de la gente de dicho presidio,
3' porque ser& muy factible que sólo con los indios de diferentes pro-
vincias y los cinco de IIumahuaca no haya para el entcro de los veinte
del distrito de esa ciudad. para el presidio y servicio de los soldados
dando uno a cada dos y así es conveniente que por entero se dé la
sexta parte de los indios que da de mita el pueblo de Humahuacn 3'
que los otros diez se enteren de dichos indios de diferentes provincias
~ ~ i i eess en pro y útil de la República por lo consiguiente s e ajusten
los soldados que pide el dicho licenciado don Pedro Ortiz de Zárate
si fnltaren e n los del distrito con los que asisten en esa ciudad pnr los
medios m i s suaves que se pudieren. Y asimismo mando al dicho d-
calde y demis justicias y otros cualesquier personas le den y hagan
d a r al dicho Licenciado don Pedro Ortiz de Zdrate todo el fomento
que pidiere para el buen logro de esta funcián que pretende empren-
der con la puntualidad que pide su importancia y así lo cumplan pena
de quinientos pesos ensayados para ciimara de Su Majestad y gastos
(le esta función por mitad que s e ejecutar5 inriolablemente con los
inobedientes luego que n este gobierno s e le dé noticia sin admitirles
excusa que a ella pretendan d a r y de haber recibido este despacho
(Iarin cuenta a este ~ o b i e r n ocomo de t d o lo que en s u virtud se fuere
obrando y obrare s o la [testado "pena"1 dicha pena en atención a
convenir así al mayor servicio de ambas majestades que e s fecho e n
esta ciudad de Córdoba en catorce días del mes de agosto de mil seis-
rientos ochenta y dos años. Don Fernnndo de Ilendoza Nnte de Lwnn.
P o r mandado del señor Gobernador y Capitin General. Toittbs de Salo*.
wcribano de Su Majestad. Y para que [testado "yo"1 lo contenido
en dicho orden y despacho de gobierno tenga cum-
Disertación. plido efecto por el presente de parte de Su Majestad
que Dios guarde y por el oficio que administro, ex-
horto y requiero a Vm., de dicho teniente y justicia mayor y de la mía
encargo s e sirva de que en conformidad del exhortatorio que t e n m
adelantado para l a convocación de los vecinos moradores de s u juri?-
dicción y distrito que ha de hacer e n el pueblo d e Cochinoca el dia
once de octubre próximo de este presente año en que s e celebra l a
festividad de Nuestra Señora del Rosario en el concurso que hubiere.
hago publicar y publique dicho orden de Gobierno suso inserto y en
su conformidad aliste todas las personas españoles que hay en dichos
parajes para efecto de entrar a la provincia del Chaco por el Valle
de Zenta, asistiendo y escoltando~alseñor Cura y vicario de esta ciu-
dad don Pedro Ortiz de Zárate que estS próximo n la ccnversión de
aquellos indios infieles enemigos, al plazo asignado, y por lo que toca
n los indios forfineos de otras provincias aunque sean casados con
indias de dichos pueblos y parajes, respecto de no haber padrón ni
razón judicial de ellos en este archivo ni el'de la real Caja como se
ha buscado y prevenir lo dicho orden exhortará como yo desde luego
lo hago al señor Cura y Vicario de dichos pueblos de Cochinoca y
Casabindo y sus añejos, licenciado Antonio de Codoy se sirva de ex-
hibir la matricula de ellos si la hubiere y de no, el que con su asis-
tencia se haga padrón de todos ellos y se alisten para asistir y acudir
n este real servicio y en esta forma hecha la lista así de los españoles
moradores que hay en dichos parajes como de dichos indios forasteros,
dicho Justicia mayor y Capitftn a guerra les mandarii, apremiar; y
ordenará que la mitad de los dichos soldados que se nlistaren y la
otra mitad de dichos indios extrnños estén en el pueblo de Iiumahuacii
para los veinticinco de dicho mes de octubre próximo con sus armas
loa que las tuvieren a incorporarse con los demis soldados y gente que
ha de asistir al dicho señor Vicario sin falta nlguna y so las penas
de dicho orden y de servicio de Su Najestad y la otra mitad que que-
tlare de dichos esparioles e indios que estén y queden prontos y pre-
venidos para los socorros que se pidieren de'tlicho fuerte y frontera de
Zenta y dicha lista y diligencias con este despacho me los enviará
para juntar con los demás de la materia por convenir asi al servicio
de Su IIajestad que en hacerlo así Vm. habrá cumplido con lo que le
toca y ordena dicho señor Gobernador en dicho su orden genernlmente
a todas las justicias y personas de su ~ o b i e r n osobre el fcmento y
buen efecto de esta función del servicio de ambas majestades y so las
penas de dicho despacho como de haberlo hecho doy cuenta a dicho
señor Gobernador para lo que en adelante resultare de cualquiera omi-
sión o descuido como me lo previene Su Señoría y de quedar enten-
diendo en esta ciudad en las demis 'disposiciones y nsistencias que
requiere el caso presente fecho en esta Ciudad de Jujuy en veintitrés
de setiembre de mil y seiscientos y ochenta y dos años y en este papel
común a falta de sellado. Don Flanci.wo de Palarios. Por mandado de
S u Merced, Francisco Glterrcro, escribano de Su Xnjestacl. En el
pueblo de Cochinoca de esta Provincia del Tucu-
Presentación. m i n en trece días del mes de octubre de mil aeis-
cientos y ochenta y dos años ante mí el capitfin
Gerónimo de Cañizares, ,Teniente de Gobernador y Capitiin a
Guerra de este partido por Su Majestad se presentó esta petición
por el contenido en ella. El Maestrc de Campo don Juan
Petición. José Campero de Herrern vecino de la Ciudad de J u j u r
y encomendero de los Pueblos de Cochinoca y Casabindo
parezco ante Vm. en aquella via y forma que más haya lugar en dere-
cho y al niio convenga. Digo que por Vm. se me h a hecho saber u n
orden del Gobernador d e esta provincia don Fernando de Mendoza
Mate de Luna e n orden a que exhiba ante Vm. el padrón y visita que
en dichos pueblos hizo don José de Carro, Caballero del hiíbito de
Santiago y gobernador que f u e de ella, para que en él se reconozcan
los indios forasteros de otras provincias que asistiercn en ellos aiinque
eean casados con indias de dichos pueblos, el cual presento ante Vm.
con la solemnidad necesaria que visto y reconocido s e scrvirii devol-
vérmele original y asimismo se me ha hecho saber el auto dc Vm. junto
con orden de s u señoría del señor Gobernador en orden de las tierras
de Zcnta y por tener yo títulos de aquel Valle tan ejecutaríados como
r Vm. le consta y que la tuvo pobladas mi señor suegro, que Dios
haya, el l\laestre de Campo don Pablo Rernárdez de Ovando haciendo
e n ellas un fuerte de que fue Castellano como constn por sus papeles
y d e que las hizo cultivar, sembrar como yo tambifn las he tenido
amparadas de tres años a esta parte con catorce indios y algunos es-
~iañolescon armas para s u defensa, los cuales casi todo el dicho tiempo
han estado asistentes sembrando de mi orden y don -4ndrés Choque; y
hecho m5s de tres o cuatro mil pesos de madera y en los galpones que
tengo e n dichas tierras hay actualmente mucha cantidad de ma(!era
en ellos, todo lo cual le consta a Vm. por s e r púl~licoy notorio y los
instrumentos auténticos que sobre esto ante Vm. han pasado atento a
lo cual, a Vm. pido y suplico se sirva d e declarar n o deberse entender
ni hablar conmigo el orden de dicho seíior gobernador por tener las
dichas tierras pobladas y que sólo habla con otros que tuvieren algu-
nas miis cercanas o fronterizas a1 enemigo y para mayor ahundamiento
por lo que puede suceder en respunrdo (le mi derecho pido n Vm. s e
sirva de certificar al pie de ésta lo que le constn de lo que llevo re-
ferido. que es justicia que pido. juro en forma y en lo necesario, etc.
Otro si, pido y suplico a Vm. se sirva de mandarme d a r un tanto au-
torizado de esta petición y autos para lo que me puede convenir, etc.
Don Jttatz JosE Cnmpero de Ilwrern. Y por mi vista la hube por pre-
sentada junto con el padrón que se refiere que mando
Decreto. que visto y reconocido se vuelva n la parte original co-
mo s e pide y e n cuanto a lo que s e refiere de los títulos
del Valle de Zenta y fuerte que hizo en él el maestre de Campo don
Pablo BernBrdez de Orando y amparo que tuvo (le aquellas tierras
cultivBndoias y ampariindolas por sí y don Andrés Choque de s u arden,
es público y notorio sin contradicción alguna romo también el siipli-
cante que sucedió e n dicha herencia por estar casado con hija legitima
y heredera del dicho ñfaestre de Campo don Pablo, acerca de tres niíos
las tiene amparadas y hecho en ellas galponcs adonde tiene la mn-
tlera que refiere con catorce indios asistentes y dicho don Andrés
Choque que de s u orden han sembrado y sobre esto. para en m i poder
escritura que entre el dicho y el suplicante celebraron el año dn ochenta
1:asado y así lo certifico en cunnto puedo y ha !iiaar en derecho por
lo cual me parece n o s e debe entender el orden del señor Gobernador
con el suplicante y así lo proveí. mandC y firmé ante m i a falta (le es-
cribano siendo testigos que también lo firmaron JosE de Rcntcría y
I'edro de A r r e ~ u i .Gerónittto de Cafiixares. Josf de 1:enterfu y Pedro
de Arrcgtci.
, Auto. E n el pueblo de Cochinoca en trece dias del mes de oc-
tubre de mil y seiscientos y ochenta y dos años yo el Ca-
pitán Gerónimo de Cañizares, Teniente de Gobernador y Capitdn a
m e r r a de este dicho partido del Vallerrico por S u Majestad, digo que
Iiabiendo exhortado al señor licenciado Antonio de Codoy, cura y vi-
cario propietario de los pueblos de este dicho de Cochinoca, Casabindo
y Humahuaca y habiendo concurrido s u merced y en s u presencia y
en la del Naestre de Campo don J u a n Campero encomendero de estos
dichos pueblos por lo que toca a la asistencia de la diligencia que manda
bacer el señor Gobernador, vimos p reconocimos el padrón fecho por
el señor ~ o b e r n a d o rdon José Garro, caballero del hsbito de Santiago,
r a r a el efecto que antecedentemente se refiere y con asistencia de los
caciques y gobernadores de estos dichos pueblos de Casabindo y Cochi-
noca. quienes hicieron juramento ante mi dicho teniente en la forma
ciue se acostumbra de declarar los indios que hay forasteros en dichos
pueblos casados o solteros, así de los que estuvieren empadronados en
dlcho padrón para cuyo efecto les f u e leído y dado a entender como los
que hubiere fuera de f l sobresalientes y ~e hallaron por forasteros y de
otras provincias casados con indias d e estos dichos pueblos, los sizuieii-
tes: Pedro Coro casado en el pueblo de Casabindo con Maria Temes.
Juan de Zubelsa mestizo casado aoimismo con india d e Casabindo,
Juan Quispc casado también con india del mismo pueblo, Pascua1 To-
Iaba casado con india de dicho pueblo. J u a n Tolaba casado con india
de Cochinoca, que son los que han nparecido y se ban hallado según
tlicho padrón y minuto que dio dicho señor cura y vicario aegíin la
c!eclaración de dichos gobernadores p curacas con que se concluyó esta
materia tocante n loa dichos dos pueblos y por lo que mira 3 lo res-
tante de este dicho curato respecto de s e r dilatatlo y la brevedad de
este despacho no se ha podide por ahora reconocer los indios ioras-
ieros que hubiere, que se reserva hacer esta diligencia para cuando
dé e1 tiempo lugar y lo firm6 dicho señor Cura y Vicario, dicho Maes-
t r e de campo junto con don Juan Quipildor, Gobernador de dichos pue-
1110s y pasó ante dicho teniente a falta de escribano siendo testigo3
oue también lo firmaron conmigo nartolmé Cardoso y Pedro Arregui.
C;erhimo de CaAirares. Antonio de G o d o ~ . Don J t t m JosP Campero
dc Herrera. Don J u a n Qicipildor. Bartolon~éCardoao. Pedro de Arregui.
Kotificación. Y luego incontinenti en tlicho pueblo, en dicho día.
mes:año dichos. yo dicho teniente de gobernador y
capitin a Ruerra habiendo visto los cinco indios que hay forasteros
en estos dichos pueblos casados con indias de ellos les mandé y noti:
liqué a los dos de ellos que son Juan de Zubelsa mestizo y n Juan To-
Iaba se prevengan y se hallen sin excusa alguna en el pueblo de IIu-
inahuaca el día veinticinco del corriente para efecto de dicha entrada
a1 Valle de Zenta y a los otros notifiqué estuviesen prontos p aperci-
bidos para la remuda de los dichos p lo demis que se puede ofrecer,
nsí lo proveí y mandG y firme ante mi a falta de escribano siendo tes-
tigos que también lo firmaron José de Rentería y Pedro de Arregui.
GÜEMES DOCUAIENTADO 309

Gerúni~wde CaEizares. Pedro de Arregui. José de Rentería. En el


pueblo de Cochinoca en catorce días del mes
Auto de presentación. de octubre de mil y seiscientos y ochenta y
dos años yo el Capitln Gerónimo de Cañi-
zares, teniente de Gobernador Capittín a Guerra, justicia mayor y
alcalde mayor de minas y registros por Su Majestad que Dios Guarde
de este dicho pueblo Casabindo. Vallerrico y Rinconada. Digo que en
virtud del exhortatorio y orden del señor Gobernador de esta provincia
del Tucumtín don Fernando de Mendoza Mate de Luna que esth por
cabeza de estos autos habiendo hecho las diligencias que en él se expresan
mando se saque un tanto autorizado de todo lo actuado inserto dicho
exhortatorio que se me hizo por el Sargento Mayor don Francisco dc
Palacios, Alcalde de primer voto de la Ciudad de San Salvador de Jujuy
y su teniente justicia Mayor, Capitln a Guerra en ella por Su IIa-
jeatad que Dios guarde, y se le remita con propio a dicha ciudad para
que reconozca las diligencias por mí se han hecho mediante dicho
exhortatorio y pueda dar parte a dicho señor Gobernador en el entre-
tanto que yo también lo hago por mí y así lo proveí y mandé ante mí
u falta de escribano, siendo testigos que conmigo lo firmaron José
de Renterín y Pedro de Arregui. Gerdnitno de Caílizares. JosB de Ren-
te&. Pedro de Arregui. Entre renglones: Item pas6 muestra Ambrosio
BIuiioz Cansino de edad de veintiséis años con espada y daga, vale.
Enmendado: exis, te, vale. Testado: meses, en orden, no vale.
Concuerda este traslado y testimonio con los autos originales que
quedan en mi poder para los efectos que convenga de donde los hice
eacar yo el Capitan Gerónimo de Cañirarea. Tcniente de Gobernador
y Capitln a Guerra, Justicia Mayor del partido del Vallerrico, Chchi-
noca y Casabindo. por Su Majestad, para remitirlos al Sargento Mayor
dnn Francisco Palacios, alcalde ordinario de primer voto, lugarteniente - -
de Gobernador Capittín a Guerra de la Ciudad de Jujuy y su distrito
por Su Majestad y va cierto y verdadero y para que de ello conste
van en once fojas numeradss escritas y rubricadas, doy el presente
en este pueblo de Cochinow. provincia del Tucumán en veinte dias del
mes de octubre de mil y seiscientos y ochenta y dos afios, que para
m8s validación de este traslado y testimonio interpongo mi autoridad
y decreto judicial en cuanto puedo y ha lugar en derecho siendo testigos
I'edro de Arregui y Antonio de Leisca que se hallaron presentes a lo
ver, corregir y concertar y firmaron conmigo dicho teniente de gober-
cador n falta de escribano Real y va en este papel común a falta de
sellado.
Cer6nitno de CaEizares
Testigo: Pedro de Arregui
Testigo: Antonio de Leisca
1,nndarerde
[M.O. y fotocopin en N.A.]
JUICIO TESTABIENTARIO DE BIARTIX NIGUEL
I)E COTECIIEA, 1783 a 178G

Juicio testamentario de don Akrtin Miguel de Coyechea seguido


por sus albaccas don Cabriel de Gücmes AIontero y don Lorenzo Ignacio
de Coyechea.
Señor Alcalde de primer roto: don Gabriel de Cücmes JIontero.
BIinistro Principal de Real lIacienda de esta Provincia. como marido
y conjunta persona de doña i\Inría AIagdalena de Coyechea y don Lo-
renzo Ignacio de Coyechea. Regidor Alcalde l l a y o r Provincial de esta
ciudad, hijos y herederos de don Martin AIiguel de Goyechea, ante Vm.
según derecho parecemos y decimos que habiendo fallecido el citado
nuestro padre el día nueve d e este mes 7, nos confirió poder en forma
para otorgar s u testamento, instituyéndonos por sus universales here-
deros y encarghdonos de mancomún la tutoría d e nuestro hermano
fatuo don Esteban de Coyechea y habiendo llenado en esta parte
sin retardo cuanto e r a de nuestra obligación según todo s e patentiza
del testimonio. que con l a solemnidad en derecho necesaria adjunto
presentamos, la justificación de Vm. se ha de servir declararlo por
d l i d o y bueno e n todas sus partes, mandando n un mismo tiempo s e
proceda a la facción de inventarios prolijos para los fines que noa
convengan y que la tasación de los bienes se haga a un mismo tiempo,
liara lo cual desde ahora juramos según derecho no hacer la menor
ocultación de ningunos de los bienes y nombramos de nuestra parte
para tasadores a los señores don Manuel SBncliez de Eustamante y
- don Juan Bautista de Arismendi y para tercero en el caso de díscordia
s e servirá T'm. elegir el que sea de su satisfacción, por tanto y haciendo
(11 pedimento que m i s convenga. A \'m. pedimos y suplicamos se sirva
proveer y mandar según pedimos por .ser así de justicia qtie implo-
ramos jurando no proceder de malicia y parn ello, etc. Gabiiel <le G ~ P -
~ n c sAIontero, Lorenzo Ignacio de Gopxhea. Jujuy y agosto veintitrEs
de mil setecientos ochenta y cinco. P a r a mejor proveer traslado al
Dcfensor de Menores y con lo que respondiere autos citadas las partes.
lo proveyó, mandó y firmó Su Merced el señor Alcalde de primer voto
don José Lorenzo de Lnbranda y Sarrerri por ante mi de que doy fe.
Sarverri. Ante mi, Borda. escribano. Incontinenti, hice saber el decreto
antecedente al Defensor de Menores y n los interesados, s e ~ ú ns e manda.
e n sus personas y lo oyeron y entendieron de que doy fe. Borda, escri-

7 El 9 de agosto de 1785 fallecih pues don hfartin Miguel de Goyechea,


abuelo materno de Blartin Miguel de Güernes. D.G.
bano. Seííor Alcalde de Primer Voto: El Defensor General de Nenores
respondiendo al traslado que s u justificación se sirvió correrme del
testamento y escrito presentados por los señores Ninistro Principal
de Provincia don Gabriel Güemes AIontero y Regidor Alcalde AIagor
Provincial don Lorenzo Ignacio de Goyechea, en la forma que m i s haya
lugar en derecho ante Vm. parece y dice: que habiendo estas partes
legítimamente la de albaceas herederos universales de su finado padre
maestre de campo don AIartín Miguel de Goyechea y tutores y cura-
dores, nombrados por éste para la persona y bienes de su hcrmano fa-
tuo de nacimiento don Esteban de Goyechea, se recon e haber
cumplido en calidad de tales la intención y encargos de dicho finado
padre común, en cuya virtud el defensor general cumplirndo con las
o1)ligaciones de su piiblico ministerio ratifica por la parte que le
corresponde lo hasta aquí obrado y pide que difiriendo Vm., a la justa
eolicitud de dichos señores se sirva proveer y mandar como tienen pedido
en justicia que espera. Jujuy y ag.osto veinticinco de mil setecientos
ochenta y cinco. Ignacio Oriol. Y vistos con el testimonio del testamento
que en virtud del poder a estas partes concedido. han otorgado por el
finado s u padre y suegro don illartín Bliguel de Goyechea el que s e
aprueba y declara por bueno en todas sus partes, interponiendo para
el efecto, mi autoridad y judicial lecr reto y p a n practicar los inven-
tarios judiciales que solicitan de todos los bienes mortuorios y que
éstos sean tasados y apreciados por sus verdaderos valores en el mismo
acto de inventariarse como lo piden se nombra por este juznado para
tercero en caso de discordia a don Tomis de Inda. declardndose como
se declaran por buenos los nombrados por estos interesados para lo
cual por mí y por ante el escribano actuario se les recibiri el juramento
prevenido en derecho anotindolo a continuación por diligencia en forma.
Que por este auto así lo proveyó, mandó y firmó el señor Alcalde
de Primer voto don José Lorenzo de Labranda y Sarverri por ante mí
de que doy fe en esta ciudad de Jujuy en veintiséis de agosto de mil
setecientos ochenta y cinco años. José Lorenzo de Labramia 21 Snrrenei.
Ante mí, dlnnvel de Borda, escribano público y de Cabildo. E n dicho día,
mes y año comparecieron los tasadores y terceros nombrados, así de
parte de los suplicantes, como de la del juzgado quienes habiéndoseles
hecho saber el anterior decreto aceptaron el cargo y ante su merced
el señor juez de 13 causa juraron por Dios Nuestro Señor y una señal
de Cruz según forma de derecho, de usar fiel y legalmente y en su con-
formidad lo firmaron con dicho señor por ante m í de que doy fe.
S n r w w i . Alan~telS á n c l m de 61tstamante. J u a n B a u t k t n de Arissirndi.
Tonids de I)ida. Ante mí, Alanid de Borda. escribmo público y de Ca-
hildo. Incontinenti hice saber el auto antecedente a los albaceas del
finado el AIaestre de campo don AIartín AIiguel de Goyechea para
que pongan de manifiesto, todos los bienes de su instituyente para
verificar la facción de inrentarios y su tasación quienes prometieron
así cumplirlo bajo del juramento que fecho tienen de que doy fe. Borda.
escribano. E n esta ciudad de Jujuy en veintisiete días del mes de agosto
de mil setecientos ochenta y cinco años en cumplimiento de lo mandado
en el auto antecedente y en virtud de la aceptación hecha por los
tasadores nombrados, su merced el señor juez de la causa sc condujo
n las casas, donde viviendo moraba el XIaestre de Campo don Martin
Miguel de Goyechea por ante mi y dichos tasadores donde se princi-
piaron los inventarios y tasaciones de los bienes en la forma siguiente:
Primeramente una puerta de calle grande de dos manos
con postigo chapa, llave corriente, alcayatas y demás he-
rramientas a su seguridad, todo de buen uso y sus respec-
tivas umbraladas tasaron en setenta pesos todo ...... 070
Item el zaguán de la regulacibn de tres huecos con su alto
tasaron a noventa pesos hueco que importa doscientos se-
tenta pesos ........................................ 270
Item una escalera de firme parte de ladrillo y parte de
madera con su guarda manos para la comunicación de
dicho alto, tasaron en veinticinco pesos .............. 025
Item el piso de dicho alto de quince tablas de cedro y
............
cuatro tirantes tasaron en cincuenta pesos - 050
Suma del frente .................................... 416
ltem dos umbraladas de puertas ventanas que hay en dicho
alto tasaron en diez pesos............................ O10
ltcm una puerta de dos manos que cae al balcón sin cerra-
dura en diez pesos .................................. 010
Item un balcón de madera labrada y torneado de buen uso
tasaron en cincuenta pesos ........................... 050
ltem un cuarto pequeño que hay a la derecha en el zaguan
y consta de un tirante y dos huecos a cuarenta pesos ta-
saron que importa ochenta pesos ..................... oso
ltem una puerta con su cerradura corriente quicio de
madera de una mano y su umbralada tasaron en quince
pesos ............................................... 015
Item una ventana de madera balaustres torneados y su
iimbralada tasaron en ocho pesos..................... 008
Item un cuarto a la izquierda de dicho zaguán y su en-
trada al patio principal de dos tirantes y tres huecos ta-
saron a cuarenta pesos que importa ciento y veinte pesos 120
ltem una puerta de una mano con quicio de madera y su
- chapa corriente, con su umbralada tasaron en diez pesos O10
Jtem una ventana de madera balaustres torneados y su
umbralada tasaron en diez pesos ...................... O10
Item una sala nueva edificada al poniente con piso de
ladrillo de cuatro tirantes y cinco huecos tasaron a no-
venta pesos hueco que importa cuatrocientos cincuenta
pesos ............................................... 450
Item una puerta nueva pintada de verde con alcayatas y
chapa corriente tasaron con su umbralada en cuarenta y
cinco, pesos ......................................... 045
Item dos puertas una enfrente de otra nuevas pintadas
con alcayatas y cerraduras con sus umbraladas tasaron
. en cuarenta pesos .................................... 040
ítem a los pies de dicha Sala, un cuarto nuevo con tres
huecos y dos tirantes tasaron a noventa pesos hueco que
importa doscientos setenta pesos ....................
Suma de la vuelta .................................
Item una ventana de hierro que mira a la calle con su
puerta de dos manos pintada alcayatas y picaporte tasaron
en ciento cincuenta pesos ...........................
Item n la cabecera de dicha sala otro cuarto nuevo que
sirve de dormitorio de dos tirantes y tres huecos tasaron
n noventa pesos que importa doscientos setenta pesos ....
Item en dicho cuarto, una ventana de madera balaustres
torneados con sus puertas alcayatas y picaporte y su um-
bralada tasaron en veinte y cinco pesos ...............
Item en dicho cuarto una alacena con sus puertas y ce-
rrojo con llave y sus umbraladas tasaron en docs pesos
Item una puerta en dicho cuarto que sigue a la sala prin-
cipal con alcayatas chapa y llave corriente y sus umbra-
ladas tnsaron en veinte pesos ........................
Item la sala principal que mira al norte con cinco tirantes
y seis huecos a noventa pcsos cada uno que importn
ciuinientos cuarenta pesos ...........................
ltem la puerta principal de dos manos con alcayatas y
chapa corriente y sus umbraladas tasaron en veinte y
cinco pesos ....................... ..............
l...
ltem una ventana volada de balaustres con sus puertas
y umbraladas en veinte y cinco pesos ................
ltem una alacena con sus puertas cerrojo y llave co-
rriente, tres tablas dentro y su umbralada en veinte pesos
ltcm una puerta de una mano con quicio de madera quc
sirve de comunicaci6n al aposento con chapa y llave co-
rriente y su umbralada tasaron en quince pcsos ......
Item el aposento con cinco tirantes y seis huecos a noventa
pesos cada uno que importa quinientos cuarcnta pesos ..
ltem en dicho aposento una alacena como la de la sala
................
tasaron con umbraladas en veinte pesos
Item una puerta ventana en dicho aposento que cae al
....
patio, inapreciable y su umbralada en cuatro pesos
Suma del frente .....................................
Item una puerta de una mano que cae al segundo patio con
quicio de madera chapa y llave corriente y su umbralada
tasaron en quince pesos ..............................
ltem un cuarto que mira al naciente con dos tirantes y tres
huecos a novenh pesos hueco que importa doscientos
setenta pesos .......................................
Item una puerta de buen uso de dos manos con chapa y
llave corriente tasaron con la umbralada en'quince pesos
Item una ventana de balaustres con su umbralada tasaron
en diez pesos .......................................
Item en dicho cuarto dos umbraladas tasaron en ocho
pesos ...............................................
Item otro cuarto que sigue con tres tirantes y cuatro huecos
tasaron a noventa pesos que importa t r e s c i d o s sesenta
pesos ...............................................
Item una ventana de balaustres y puertas corrientes con
su umbralada tasaron en doce pesos ..................
............
Item una umbralada tasaron en cuatro pesos
ltem una puerta que cae a la calle con chapa y llave
........
corriente y su umbralatla tasaron en diez pesos
Item en el segundo patio un corredor de arcos con ba-
lazón y cañas cubierto de teja ramada de horno igudmente
cubierto de teja y un cuartito de media agua tasaron todo
en doscientos cincuenta pesos ........................
Jtem el sitio en que esthn edificadas las casas que se eom-
ponen de patio principal interior y corral tasaron en mil
y doscientos pesos .................................
Item cuatro tiendas con sus respectivos patios de dos
tirantes y tres huecos cada una que en todo componen doce
liuecos tasaron a ochenta pesos que importa novecientos
sesenta pesos .......................................
Item diez puertas con sus umbraladas que hay en dichas
tiendas tasaron a ocho pesos cada una que importa ochenta
pesos ...............................................
Jtem la esquina con su trastienda con tres tirantes y
cinco huecos tasaron a ochenta pesos que importa cua-
trocientos pesos .....................................
ítem tres puertas en la trastienda de dicha esquina con
sus umbraladas tasaron a ocho pesos que importa veinte
p cuatro pesos ......................................
Item las puertas de la esquina con chapa y llave corriente
palo y umbraladas tasaron en cincuenta pesos ..........
Suma de la vuelta ..................................
Item el sitio de dichas tiendas con respecto a la mejor
estimación de la esquina tasaron en seiscientos pesos..
Item una ventana volada torneada de balaustres pintada de
verde que estzí en la sala nueva tasaron con su umbrala(1a
en treinta p dos pesos ..............................
Item treinta sillas de varias especies
Tasación de que tasaron ia docena a veinte pesos
3Iuebles ........
que importa cincuenta pesos
ltem dos mesas medianas tasaron en
seis pesos...........................................
Item dos dichas mayores con cajones que tasaron en doce
pesos...............................................
....
Item un clave nuevo pintado tasaron en cien pesos
Item una cuja pintada de buen uso tasaron en veinte
y cuatro pesos......................................
ltem otra vieja idem en ocho pesos..................
Item tres escritorios el uno pintado en ocho pesos se
tasó y los dos restantes a tres pesos que importan catorce
CUEAIES DOCUMENTADO 315

pesos ...............................................
ltem una caja mediana con s u chapa y llave corriente s e
...................................
tasó e n seis pesos
ltem dos dichas mayores tasaron n diez pesos cada una
que importa veinte pesos ............................
.Item una frasquera mediana de cristal con once frascos
y su repostería tasaron en veinte pesos ...............
Item un baúl forrado en cuero, con chapa y llave co-
rriente tasaron en ocho pcsos .........................
Item tres cuadros de a r a r a y cuarta sin marco tasaron
a tres pesos cada uno con pinturas de cloctores que im-
porta nueve pesos ...................................
Jtem cuatro armazones con sus mostradores que hay en las
tiendas tasaron a diez pesos cada una que importa cua-
renta pesos .........................................
ltem un solar de una cuarta parte de tierras de una cuadra
í!ue s e halla situada n espaldas de l a casa y huertn de don
.losé de la Cuadra y contiguo a otro de don Angel de la
Barrena tasaron en do~cientospesos ..................
Suma del frente ......................................
Item una cuadra de tierras estrnmuro.u de esta ciudad
continua a otra de don Bernardo Espinoza calle Real de por
medio a la parte del norte y por la de s u r con las de don
Pedro López (le Velasco, por el este con la vivienda en un
solar de Juan Jlontero tasaron en ciento y veinte y cinco
IicSOS...............................................
l t e m los enladrillados de los dos cuartos del zaguán, los de
bs dos salas principales y los de los dos cuartos que se hn-
lian edificatios en las extremidades de la sala nueva que
mira nl poniente y tasaron todo en ciento veintc pesos con
concepto a cuatro mil ladrillos ........................
Con lo cual y no habiendo más bienes que inventariar
y t a s a r pertenecientes a esta testamentaria ~ e g d nexpre-
aaron los albaceas y herederos a escepción de los que exis-
tente en la hacienda de Los IIolinos con más los ganados de
varias especies, mandó su merced s e suspendan hasta que
s e proporcione día en que pasar a continuar estos inven-
t a r i o ~y tasaciones para lo que señalaran dichos albnceas
para la facción referida, quedando los apreciados en forma
d e depósito, los cuales estando presentes los recibieron a
s u satisfacción y contento y lo firmaron con s u merced
y tasadores, por ante mí de que doy fe. JosG Loretiro de
Labranda v Sarrewi. Gabriel de Giientes Montera. Lorenzo
Ignacio de Go~eclrea.Manitel Sáneher de finstantante. Jxaii
h'a)~tista de Arismeitdi. Tonaás de Inda. Ante mí, Alawel
de Borda, Escribano público y de Cabildo. E n esta ha-
cienda de San Lorenzo de Los Ilolinos en cinco días del
mes de setiembre de mil setecientos ochenta y cinco años,
316 LUIS CUEIIES

los señores alcalde ordinario de primer voto don José


Lorenzo de Sarverri, tasadores y tercero en caso de dis-
cordia que lo son don Manuel Sánchez de Bustamante. don
Juan Bautista de Arismendi y don TomBs de lnda, habien-
dose conducido a ella para efecto de continuar los inven-
t a r i o ~y tasaciones de los bienes que quedaron por fin y
muerte del sargento mayor don Bfartin Miguel de Goye-
chea, sus herederos que lo son los señores Ministro teso-
rero de esta provincia don Gabriel Güemes IIontero y el
Regidor Alcalde nIayor provincial don Lorenzo Ignacio de
Goyechea, pusieron de manifiesto cuanto en dicha hacienda
había a excepción de los ganados mayores que por no s e r
el tiempo aparente reservaron inventariarlo en el que se
considere m6s a propósito y es e n la forma siguiente.
Suma de la vuelta ..................................
Primeramente una casa de campaña e n el todo nueva bien
r.condicionatla que es la habitación del expresado sargento
mayor don 3IartIn Miguel de Goyechea cubierta toda de
teja y en ella se hallaron las piezas siguientes: Un corredor
de veinticuatro varas de largo con siete pilares de quina
quina que tasaron en ciento cincuenta pesos ............
ltem 13 sala principal de dos tirantes y tres huecos con s u
rlto tasaron a cien resos cada hueco que importa tres-
cientos pesos ........................................
Item el piso de dicho alto de tablas de ceiba y cinco ti-
rantes tasaron en veinte pesos........................
Item en dicho alto una puerta de dos manos y dos um-
liraladas tasaron todo en diez pesos ..................
Item una escalera de madera labrada de comunicación a
dicho alto con s u guarda mano tasaron en diez pesos ....
Item una puerta de dos manos con su chapa y llave co-
rriente de buen uso y seguridad, con s u umbralada tasa-
ron en quince pesos ..................................
Item dos umbraladas tasaron en seis pesos ............
ltem un aposento nuevo de dos tirantes y tres huecos
tasaron a cincuenta pesos hueco que importa ciento y cin-
cuenta pesos ........................................
ltem una puerta de dos manos con cerrojo, picaporte, ce-
rradura, llave corriente y umbralada tasaron en diez pesos
Suma del frente ....................................
Item una alacena de dos puertas nuevas tasaron en cuatro
pesos ...............................................
Jtem otro cuarto pequeño de un tirante y dos huecos
tasaron n veinte y cinco pesos que importa cincuenta pesos
ltem una alacena con sus puertas nuevas chapa y llave co-
........
rriente con s u umbralada tasaron e n ocho pesos
ltem una puerta de buen uso con s u umbralada tasaron en
ocho pesos .........................................
Item otra sala de dos tirantes y tres huecos tasaron a
CUEMES DOCUMENTADO 317

cuarenta pesos hueco que importa ciento veinte pesos ..


ltem una puerta principal con s u chapa y llave corriente
con su umbralada tasaron en quince pesos ..............
Item otra puerta de comunicación al patio interior con cha-
pa y llave corriente con su umbralnda tasaron en seis pesos
Item otra puerta de una mano de comunicación al aposento
con su umbralada tasaron en ocho pesos ................
Item el aposento de dos tirantes y tres huecos tasaron a cua-
......
renta pesos hueco que importa ciento veinte pesos
Item una ventana de hierro con puertas viejas y su umbra-
lada tasaron en ocho pesos .........................
ltem una alacena con puertas nuevas y s u umbralada tasa-
ron en seis pesos ....................................
Item una despensa toda nueva de cuatro tirantes y cinco
. huecos cubierto de teja y argamasa tasaron a cincuenta pe-
90s hueco que importa doscientos cincuenta pesos ........
Itcm una puerta de dos manos nuera con nlcayatas chapa
y llave corriente con s u umbrnlada tasaron en veinte pesos
Item un cuartito pequeño.de media agua nuevo cubierto
asimismo de teja tasaron en treinta y cinco pesos ......
Itcm una puerta con su armella y umbralada tasaron en
seis pesos ...........................................
Item un corredor nuevo con tres pilares de quina quina
..............
cubierto de teja tasaron en ochenta pesos
Item otro corredor cubierto de teja en donde estri la cocina
y Suma de la vuelta ...............................
hornos tasaron en cincuenta pesos ..................
Item en dicho patio interior se hallaron seis pirguas de
maíz que se r e ~ u l a r o ntener como de treinta a cuarenta
frinegris las que no s e apreciaron por considerarse ser-
vían para la manutención de esclavos y peones.
Item una sala vieja de cinco tirantes y seis huecos, una
puerta viejn, dos umbraladas y un corredor viejo largo
todo cubierto de teja tasaron en doscientos y cincuenta pesos
Item un perchel nuevo de cinco tirantes y ocho huecos,
pared doble tasaron a cincuenta pesos hueco que importa
cuatrocientos pesos ...................................
ltem una puerta de buen uso con s u candado y umbra-
lada tasaron en seis pesos ...........................
Item en dicho perchel s e encontraron cosa de cincuenta a
sesenta fanegas de trigo las que no se apreciaron con-
sideriíndose servían para la manutención de la casa.
Item un cuarto de dos tirantes y tres huecos nuevo cu-
bierto de teja tasaron a cuarenta pesos hueco que im-
porta ciento veinte pesos ............................
ltem una puerta de dos manos con su candado y umbra-
lada ta-ron en diez pesos ...........................
Item en dicho cuarto se encontraron treinta y tres chipaa
de charque las que no s e apreciaron en atención a que
servia para la manutención de esclavos y peones.
l t e m en el aposento de la sala principal se inrentarinron
trece mil doscientos noventa pesos dos reales en plata
acuñada ............................................ 13.290
Item s e inventarió la plata labrada en las piezas y mar-
cos -
-.. simiente.
- a saber ............................... 23.802, 2
Dos salvillas iguales con catorce vasos y dieciséis
marcos de peso .............................
ltem cuatro fuentes con veinte marcos cuatro
onzas ......................................
Suma del frente pesos ......................
Suma del frente de marcos .................
Item treinta platos con cincuenta y un marcos
cinco adarmes ..............................
Item dos salveras con dos mareos cuatro on-
zas doce adarmes ...........................
l t e m cinco tazas con cuatro marcos siete on-
zas ocho adarmes ..........................
ltem dos bacinillas con siete marcos una onza
doce adarmes ..............................
Item un bernegal y un jarro pequeño con tres
marcos ....................................
Item una olla con dos marcos dos onzas ......
ltem un sahumador con un marco de tres on-
zas cuatro adarmes .........................
ltem una tetera con tres marcos doce adarmes
Item una cafetera con tres marcos ..........
Item una chocolatera con tres marcos siete onzas
cuatro adarmes .............................
Item siete candeleros con dieciocho marcos seis
onzas cuatro adarmes .......................
Item nueve mancerinas, un mate, t r e s apartado-
res y cuatro bombillas con peso de quince mar-
cos siete onzas .............................
Item una salvilla con siete vasitos para mis-
teia con cuatro marcos seis onzas ocho adarmes
......
Item un jarro con seis marcos tres onzas
Item . u n calentador con catorce marcos ocho
nílarmes ...................................
ltem dos fruteros con siete marcos u n adarme
Item una concha con cinco marcos cinco onzas
ltem un salero con tres marcos dos onzas cua-
t r o adarmes ...............................
ltem una palangana con quince marcos una onza
cuatro adarmes ............................
Item treinta cubiertos, diez cucharas sueltas y
dos despabiladeras con dieciocho marcos, una onza
l t e m u n tintero con s u salvadera y obleario
CÜEAIES DOCUMENTADO

con cinco marcos .......................... 5


Item tres bandejas con veintc marcos seis on-
zas cuatro adarmes .......\. ............... 20,6, 4
Item una paila con catorce marcos una onza
cuatro adarmcs ............................. 14,1, 4

265,4,14
Suma de la vuelta ...................................
ltem pesa toda la plata labrada doscientos sesenta y ocho
marcos cuatro onzas y catorce adarmes clue tasaron a siete
pesos cuatro reales marco e importa dos mil catorce pcsos
cuatro reales ........................................
Item se inventariaron trescientos treinta y dos varas de
bayeta de la tierra azul que tzsaron a cuatro reales vara
importa ciento sesenta y seis pesos ....................
ltem cincuenta y ocho varas de bayeta blanca de la tie-
rra tasaron n tres reales r a r a . importn veinte y un pesos
seis reales ..........................................
ltem nueve varas de cordellate negro tasaron a tres rea-
................
les vara importo, tres pesos tres reales
Item se inventariaron diez petacas (le jabón con sesenta y
ocho arrobas dos libras netas, que hacen diecisiete quinta-
les y dos libras las que tasaron a once pesos quintal que
importa ciento ochenta y siete pesos ................
Item se inventariaron veinticuatro suelas y tasaron a dos
pesos cado una que importa cuarenta y ocho pesos ....
ltem treinta y tres sacos de suela nuevos tasaron a ocho
rcales cada uno que importn treinta y tres pesos ......
Item ocho aparejos nuevos de suela con sus reatas tasaron
a cinco pesos cada uno que importa cuarenta pesos ....
Item se inventariaron veinte aparejos usados que no se
apreciaron ...........................................
Item seis lomillos nuevos tasaron a tres pcsos que importa
dieciocho pesos ......................................
Item se inventariaron, once lomillos del uso de los cria-
dos con sus frenos y no se apreciaron.................
Item dos pailas de cobre grandes nuevas y dos medianas
con peso de doscientos cuarentn y cuatro libras tasaron a
cinco reales libra que importa tloscientos cincuenta y dos
pesos cuatro reales ..................................
Item un alambique tasaron en diez pesos ..............
Item una alquitara tasaron en veinte pesos .......... .:
Item en la sala principal dos cajas nuevas con sus chapas v
llaves corrientes tasaron a quince pcsos cada una que im-
porta treinta pesos .................................
Item una frasquera de las del Blarqi16s con catorce frascos
tasaron en catorce pesos ............................
Suma del frente .....................................
Item un p a r de chifles grandes guarnecidos en plata ta-
saron en dieciocho pesos .............................
llem cuatro mesas y una de ellas con un cajón tasaron n
cuatro pesos cada una que importa dieciséis pesos ......
Item un escritorio con varias gavetas chapa y llave co-
rriente tasaron en diez pesos .........................
Item seis sillas de regular uso tasaron e n doce pesos ....
l t e m en el alto de dicha sala se inventariaron cinco
barriles de vino de la tierra que por s e r para el gasto de
la casa no se apreció ................................
l t e m un toldo de buen uso con palos y estacas tasaron en
cuarenta pesos ......................................
Item en la segunda sala cuatro cajas medianas usadas ta-
paron en ocho pe5os ..................................
Item dos cujas de buen uso tasaron la una en doce pesos
y la otra en cuatro pesos que importa diecisbis pesos ....
Item en la despensa una caja grande de buen uso con
chapa y llave corriente tasaron en ocho pesos ..........
ltem en dicha despensa se inventariaron como sesenta
pesos en velas y cuarenta pesos en grasa, cuyo importe
no se saca al marj7en por considerarse ser para el gasto
,de la casa ..........................................
!ten1 una silla de montar bien tratada tnsaron en diez
pcsos ...............................................
Item doce hachas usadas tasaron a dos
llerramientas. .
pesos importa veinticuatro pesos .
Item cuatro nzuelas tnsaron a dos
Tmos importa ocho pesos .............................
Jtem cuatro palas usadas tasaron en tres pesos ........
ltem seis rizadones usndos tasaron en siete pesos......
Item cuatro barretas con peso de cincuenta y siete libras
a cuatro reales libra importa veintiocho pesos cuatro reales
Item diecinueve hoces de buen uso tasaron n ocho reales
rada unn importa diecinueve pesos ..................
Item una romana con su pilón tasaron en diez pesos ....
ltem una balanza grande, con cruz y peso de ocho marcos
tnsnron en doce pesos ................................
Suma de la vuelta ...................................
ltem dos sierras grandes tasaron a t r e s pesos cada una
imparta seis pesos ..................................
Item tres dichas m i s pequeñas tasaron a ocho reales im-
porta tres pesos .....................................
Item siete cepillos de diferentes tamaños y dos hierros
.de. ídem sueltos tasaron a cuatro reales cada uno im-
porta cuatro pesos cuatro reales ......................
Item un acanalador en cuatro reales ..................
Item uno de moldura en cuatro reales ................ 4
CÜELIES DOCUMENTADO

Item cinco barrenas de diferentes tamaños en dos pesos


Item nueve gubias en tres pcsos ......................
ltem ocho escoplos en dos pesos cuatro rcales .:........
Item un compás en ocho reales ......................
Item un hierro para tornear en ocho reales ..........
ltem un taladro en dos reales ......................
Item una gradilla de tejones en ocho redes ...........
ltem otra de tejas en cuatro reales ..................
Item ocho marcas de hierro para herrar ganado tasaron
a tres pesos importa veinticuatro pesos ...............
Esclavos. Un mulato llamado Ambrosio como de edad
de cuarenta y ocho años que tasaron en
trescientos pesos.....................................
Item un negro Ilamado Pedro maestro músico como de
edad de cuarenta años tasaron en trescientos cincuenta pc-
809 .................................................
Item un negro sastre llamado Francisco como de edad
de treinta y ocho años que tasaron en trescientos pesos
Ttem un negro llnmado Juan de Dios como de treinta y
seis años tasaron en trescientos y cincuenta pesos ......
Item un negro llamado José Ignacio como de veintiocho
años tasaron en cuatrocientos pesos ..................
Item un mulato llamado Borja músico como de veintis6is
años tasaron en cuatrocientos pesos ...................
Item un mulato llamado Francisco músico como de vein-
ticuatro años tasaron en trescientos ochenta pesos ....
ltem un negro h n a d o Domingo como veinte años tasa-
ron en trescientos y cincuenta pesos ...................
Suma del frente ........................ .........
.;.
Item un mulato llamado Joaquin como de veinticuatro
............
años tasaron en trescientos cincuenta pesos
Item un mulato llamado Bf~nuelcomo de dieciséis años
tasaron en cuatrocientos pesos .......................
Item un mulato Ilamado Benito Anselmo como de die-
...............
ciséis años tasaron en trescientos pesos
Itcm un negro músico llamado Lucas como de quince años
tasaron en cuatrocientos pesos........................
Ttem un negro llamado Bernardo como de once años tn-
saron en doscientos cincuenta pesos ..................
ltem un mulatillo llamado Juan Inocencio como de tres
................
años tasaron en ciento veinticinco pesos
Item un negrito mudo como de ocho años llamado Juan
Silvestre tasaron en cien pesos ......................
Item un negro mudo como de cincuenta años inapreciable
ltem un negro viejo como de ochenta años llamado Mateo
inapreciable .........................................
Esclavas. ltem una negra vieja como de sesenta años
llamada Araría tasaron en cincuenta pesos
ltem una mulata llamada Rosa como de cuarenta y cinco
años tasaron en doscientos pesos ......................
Item una mulata llamada Tomasa como de cuarenta años
tasaron en doscientos veinticinco pesos ................
ltem una mulata llamada Afaria como de treinta años ta-
saron en cuatrocientos pesos ........................
Ttem una mulata llamada Ursula como de veintiún años
tasaron en cuatrocientos pesos ........................
Item una negra llamada Juana como de veintiséis años ta-
~ a r o nen cuatrocientos pesos .........................
Ttem una mulata llamada Rosa como de diecishis años
Llsaron en trescientos y cincuenta pesos ................
Bfolino. Itcm un molino bien aperado con piedras
y rodezno nuevo, herramientas corrientes que
esta en actual servicio el cual tasaron con todos sus ad-
herente~en mil quinientos pesos ......................
Suma de la vuelta ..................................
Almona. Item una almona con dos hornos de ladri-
llo y argamasa para cocer jabón, corredor
de teja y cercado de pared doble con puerta nueva y
umbralada tasaron todo en doscientos y cincuenta pesos
Item cinco fondos de bronce dos de ellos sentados en la
citada almona y todos con peso de novecientos veinte y
nueve libras tasaron a cuatro reales libra e importa cua-
trocientos sesenta pesos y cuatro reales..............
Item un horno de quemar teja bien tratado tasaron en se-
senta pesos .........................................
..
ltem mil y quinientas tejas tasaroli en cuarenta pesos
Item se inventariaron ochocientas noventa y tres ovejas
que tasaron a tres reales cada una que importa trescien-
tos treinta y cuatro pesos siete reales ................
Obligaciones. Item una oblgiación otorgada a favor
de don Martín Miguel de Goyechea por
Francisco Angel Coronel de cantidad de cincuenta pesos
Item otra obligación por don Domingo Bfartfnez de Iriarte
..
de cantidad de cuatrocientos ochenta pesos ............
Item un obligación otorgada por Pedro BIaidana de can-
tidad de doscientos pesos ............................
Item otra otorgada por Felisiano Burgos de cantidad de
treinta y ocho pesos .................................
Item otra otorgada por don José Benito Orgaz de veinti-
cinco pesos .........................................
Item otra de doña Ana Simona de Goyechea de cantidad
de ciento diez pesos .................................
ltem otra por Blas Sosa de veinte pesos...............
Itcm otra por don Tomds Sarmiento Balladares de canti-
dad de veinte pesos .................................
ltem otra de Rayrnundo-Baldivieso de diez pesos ......
..
ltem otra de don Francisco Candes de trescientos pesos

Suma del frente ....................................


Jtem otra de cien pesos por don Juan Manuel Campero..
Item otra de treinta pesos por don Sebastidn de Sarverri
Item otrn de doscientos setenta y cinco pesos por don
José Francisco Duran ...............................
ltem otrn de don Jose Diivalos satisfecho y cancelado.
Item otra de cien pesos contra don Salvador Goyechea ..
Titulos y documcntos Item un testimonio de la hi-
del manejo de la casa. juela que cupo a la señora do-
fia Ignacia de la Corte. Item un
expediente original de los títulos de propiedad de un solar
de tierras que consta tasado y se halle situado en los ex-
tramuros de la ciudad de Jujuy junto a la casa de Non-
teros. Item un testimonio de compra de un pedazo de sitio
en la casa de s u hermana doña Ana Simona de Goyechea.
ltem otro testimonio de escritura de la compra de un pe-
dazo de tierras en la huerta de doña Josefa de Goyechea.
ltem un legajo de escrituras con trece fojas M e s de las
compras hechas de diferentes piezas de esclavos. Item un
testimonio de escritura de la compra de In estancia nom-
brada Los BIolinos. Item un expediente de escritura y tí-
tulos de propiedad de la estancia nombrada El Paraíso por
compra que hizo don Martín Bfipuel de Goyechea a los
herederos de don Martín de JBuregui. Item un testimonio
de los títulos de propiedad de la estancia nombrada Los
ilIolinos. Item dos expedientes jurídicos que esclarecen
el derecho de propiedad del puesto nombrado Juan Gal4n
rituado en la propia estancia de Los Molinos. Item tres le-
gajos de papeles, uno de cartas inútiles, otro de papeles
pertenecientes a la encomienda de Socochn por el tiempo
que la poseyó don Miguel Esteban de Goyechea y el
finado don BIartín Miguel su hijo y el otro de títulos y
comisiones conferidas al expresado don Miguel Esteban
dc Goyechea que por no necesarios en lo sucesivo no
se. inventarian en sn pormenor. Con lo cual y no ha-
biendo mas bienes pertenecientes a la casa de 1s h~cien-
da de Los Molinos a excepción del casco de ella, por
no haberse hasta este día deslindado para darle su le-
gitimo valor y los ganados así mulares, caballares. co-
mo vacunos, que por la esterilidad del tiempo se inhabilita
su recojo, hasta tanto que esté capaz de resistir los
pastoreos y corrales sin exponerse a una general mor-
tandad en detrimento de esta testamentaría y los aprecia-
dos e inventariados quedaron en la propia conformidad
que los antecedentes practicados en la ciudad, en depó-
uito en los contenidos albaceas y Únicos hercderos quie-
nes por su beneficio común se obligaron a tenerlos seguros
y en buena administración hasta que se verifique la di-
visión y partición de todos los bienes y en cuanto n l a s
tasaciones practicadas por los nombrados dijeron éstos
haberlas hecho según su leal saber y entender y en su
conformidad lo firmaron con su merced y dichos albaceas
por ante mi de que doy fe. JosE Lorenzo de Labranda y
Sarverri. Gabriel de Giiemes Alontero. Lorenzo Ignacio de
Goyechea. Alanuel Sdnclrez de Gustamante. Juan Bautista
de Arismendi. Tomds de Inda. Ante mí, Afanuel de Borda,
escribano público y de Cabildo. Señor alcalde de primer
voto. Los hijos, albaceas y iinicos herede-
Escrito. ros de los finados don hlartíii nliguel de
Coyechea y doña Ignacia de la Corte, ante
vuestra merced parecemos y decimos, que hallhdose in-
ventariados parte de los bienes mortuorios que dejaron
iiuestros finados ante la autoridad de su juzgado, que-
dando sin inventariar, cuanto era ganado y estancias,
por no haberlo permitido la esterilidad del tiempo es
llegado el caso en que nos conviene la total conclusi6n
de aquella diligencia para dar s u legitimo valor a cada
cosa, formar hijuelas y hacer las particiones que com-
peten. Para esto se ha de servir Vm. asistir con los ta-
sadores nombrados que lo son don Manuel Sánchez Bus-
tnmante, don Juan Bautista Arismendi y tercero en
discordia don Tomás de Inda a ver contar toda clase de
ganado existente en nuestra hacienda de San Lorenzo del
Molino que pondremos de manifiesto en día que seíialare-
mos con recado de atenci6n luego que se hayan totalizado
las recogidas, en cuyas particulares faenas nos hallamos
entendiendo. Por tanto haciendo a este fin el pedimento
que m i s convenga a Vm. pedimos y suplicamos se sima
proveer y mandar según llevamos expuestos por ser con-
forme a derecho jurando no proceder de malicia y para
ello, etc. Gabriel de Güemes AIontero. Lorenzo Ignacio de
Goyeehea. Jujuy y junio treinta de setecientos ochenta
y seis años. Por presentada agréguese a
Proveído. los autos de inrenbrios de los bienes que
por fin y muerte del maestre de campo
don Mnrtín Miguel de Goyechea quedaron y se practica-
ron en tiempo y forma quedando solamente las espe-
cies que se acusan sin este beneficio y se practicarán
siempre que las partes lo pidan y señalen día para ello,
CÜEBIES DOCUMENTADO

lo proveyó y firmó Su Merced por ante mí de que doy


fe. Quintana. Ante mí, Borda, escribano. En esta hacien-
da de San Lorenzo del hlolino en diez días del mes de
julio de mil setecientos ochenta y seis, Su Merced el señor
juez de la causa en virtud de la noticia que dieron las
partes de haber estado recogido el ganado vacuno, se
condujo a esta dicha hacienda, con los tasadores nom-
brados y el tercero en discordia, por ante mi donde en
un corral grande, donde estaba dicho ganado y habién-
dose contado, con toda prolijidad, por los propios tasa-
dores a satisfncción de los interesados, se contaron dos
mil trescientos veinticinco cabezas de dicha especie de yerra
para arriba y tasaron unhimes y conformes todas ellas a
razón de cuatro pesos seis reales cada una, con advertencia
de que estas solamente son de los rodeos o potreros del
Agua Caliente, Duraznal y Guerreros y se reserva incluir
a estos inventarios los ganados de los rodeos de Las La-
Eunas y La Banda que se verificarin después que se recojan
que serán en estos días y n dichos cuatro pesos seis reales
.
importan dichas vacas once mil cuarenta y tres pesos seis
reales .............................................. 11.0.13, 6
ltem se inventariaron seiscientos tres pesos cinco y medio
reales que ai finado don iilartin Miguel de Goycchea le es
deudor don Antonino Chauque gobernador y cacique princi-
pal del pueblo de Sococha por último resto de los tributos
hasta el día de su fallecimiento según cuenta njustadn con
dicho cacique con los coherederos ..................... 00.603, Ei/-

49.791, 3%
Suma del frente .................................... 49.794, 3%
Item se inventariaron seiscientos pesos que al propio señor
finado don IIartfn Miguel le es deudor don Fermín de la
Corte, vecino de la ciudad de Salta por igual cantidad que en
plata efectiva le suplió y consta de s u carta respucsta .. GOO
Item se inventnriaron diecisfis petacas de jabón con no-
venta y siete arrobas y veinte y cuatro libras netas hechas
por los coherederos después del fallecimiento de dicho se-.
ñor que tasadas a once pesos quintal importan doscientos
sesenta y nueve pesos tres reales .................... 2G9, 3
Item se inventariaron tres mil quinientos veintisiete
pesos cuatro reales que en dinero físico se ha recaudado a
favor de esta testamentaria por los coherederos dcsgués de
cerradas las últimns diligencias de inventarios, así do de-
pendencias no incluidas en ellas, como por trescientos se-
tenta y siete vacas que de matanza han vendido a los precios
a saber las cincuenta y siete dc ellas a ocho y medio pesos
y las trescientas y veinte restantes a ocho pesos dos reales
cada una ...........................................
Con lo cual y no siendo ya hora de proseguir estos inventa-
iios, mandd Su Alerced el señor alcalde juez de la causa
sobreseer estas diligencias para proseguir siempre que
convenga, quedando los bienes apreciados entregados a
los herederos quienes los recibieron a toda su satisfaccción
y lo firmaron con dicho señor juez y los tasadores por ante
mí de que doy fe. Uunicel de la Quintana. Gabricl de Güe-
?,res Jlontero. Lorenzo IfmLCi0 de Goyecbea. Alanuel Sán-
chez Bilstaniattte. Jrtan Gaictista de Arisntendi. TonL(í.v
de Inda. Ante mi, Jlanztel de Rorda, escribano público y de
Cabildo.
Suma de la vuelta ................................. 54.191, 2f5
ICn esta hacienda de San Lorenzo del BIolino a once días
del mes (le julio de setecientos ochenta y seis años su mer-
ced el señor alcalde de primer roto don BIanuel de la Quin-
tana, en virtud de recado politico que se le pasó por las
partes se condujo a ella con los tasadores y tercero en dis-
cordia por ante mi para efecto de continuar los inventario8
de los bienes mortuorios del finado don Alartln AIiguel de
Goyechea y en consecuencia sc pusieron de manifiesto, un
rodeo de vacas en la plazuela de la población de dicho finado
las cuales prolijamente contadas por los expresados tasa-
dores a presencia del mismo juez y por ante mi se hallaron
ser en todas propias de esta testamentería. trescientos se-
tenta y cinco pues aunque había quinientos setenta y cinco,
13s doscientas que se notan de diferencia pertenecían pura-
mente al señor alcalde provincial don Lorenzo Ignacio de
Goyechea por compra especial que de ellas tenía hecha dis-
tinguiendose con cl hierro fijado al revés previniendo
que unas y otras vacas de las ya citadas se inventariaron
en la forma siguiente. Primeramente trescientas setenta
y cinco vacas 'de hierro para arriba, que a cuatro pesos
seis reales cada una conforme a la primera tasación del gn-
nado de esta especie por ser de igual calidad importan mil
setecientos ochenta y un pesos dos reales ............ 1.781, 2
ltem se inventariaron cien vacas más que se hallaron de
todas edades en el rebusque general del cuerpo de la es-
tancia propias de esta testamentería que al mismo respecto
............
importan cuatrocientos setenta y cinco pesos 475
Suma del frente .................................... 56.447, 4%
En cuyo estado no habiendo más ganado vacuno en esta
estancia que inventariar mandó Su Merced dicho señor
alcalde cerrar esta diligencia para proseguir las res-
tantea cuando convenga quedando todos los bienes inven-
tariados por vía de dep6sito en poder de los mencionados
herederos albaceas quienes otorgan el más bastante recibo
cn forma y conforme a derecho y para que conste lo fir-
maron con Su Alerced y tasadores por ante mi de que doy
ie. Manuel de la Qrtintana. Cnbricl Giie~~ies llontero. Lo-
renzo Ignacio tle Co21eclrea. Alanire1 Sánchez Bustamnte.
GÜEMES DOCUMENTADO

Jitan Bautista de A~ismendi. Tomás de Inda. Ante mi,


?Ilanuel de Borda, escribano público y de Cabildo.
En esta hacienda de San Lorenzo del Molino a diecisiete
dias del mes de julio de mil setecientos ochenta y seis años.
Su Merced el señor alcalde de primer voto don Manuel de
la Quintana, subsecuente al recado de atención que se le
pasó por los coherederos de esta testamentería se condujo
n ella con los tasadores nombrados y por ante mí para
efecto de continuar la facción y tasación de los bienes mor-
t u o r i o ~de don Blartín Miguel de Coyechea y doña Ignacia
de la Corte, para lo cual por las partes legítimamente
herederas Re pusieron de manifiesto, todas las yeguas, po-
tros, caballos y mulas que con el hierro del citado finado se
pudieron recoger en esta dicha estancia y habiendose
hecho las debidas separaciones de aquellas esgecies, fueron
contadas prolijamente y tasadas en la forma siguiente.
Primeramente setecientos treinta y cinco yeguas de todas
edades graduadas de hierro para arriba que tasaron a doce
reales que importa mil ciento dos pesos cuatro reales
Suma de la vuelta ...................................
Item se inventariaron ciento cuarenta y seis caballos man-
sos rocines, tasaron a tres pesos cada uno con ciiyo respecto,
importan cuatrocientos treinta y ocho pesos ...........
ltem se inventariaron setenta y cinco potros chúcaros,
tasaron a veinte reales cada uno, que importa ciento
ochenta y siete pesos cuatro reales ...................
Item doce mulas viejas del trajín de esta estancia tasaron
n cuatro pesos cada una que importa cuarenta y ocho pesos
ltem el casco puramente de esta estancia nombrada San
Lorenzo del IIolino, según sus títulos tasaron toda, con
conocimiento de su extensión, latitud y longitud y con
segregación de todos los edificios, en cuatro mil pesos y me-
diante a que por estar indivisa con doña Ana Simona
de Coyechea, hermana del finado don Aiartín Miguel co-
rresponde la mitad íntegra de RU valor a dicha señora, sólo
fie sacan al margen, con legitimidad por pertenecientes
n esta testamentería dos mil pesos como mitad de la tasa-
ción de esta estancia .................................
Con lo cual y no habiendo en esta dicha estancia m i s
bienes que poder inventariar en favor de esta testamentaria
según así !o patentizaron los expresrdos albaceas herede-
ros, mandó Su Merced el señor alcalde, que teniéndose
como se tienen por conclusos dichos inventarios quedcn
todos los bienes que comprenden en la ley de depósito hasta
la totalización de las ulteriores diligencias en poder de
los herederos. quienes otorgan en consecuencia recibo en
iorma firmAndolo ambos con Su Merced dicho seaor
alcalde y tasadores por ante mí que doy fe en el erpre-
328 LUIS G ~ E ~ I E S

nado día, mes y año. Alanuel de la Quintana. Gabriel Giie-


mes 1CJontero. Lorenzo Ignacio de Gouecliea. AJanuol Sáncirez
Rustamantc. Juan Bautista de Arismendi. Tonlds de Znda.
Ante mí, Manuel de Borda, escribano público y de Cabildo.
Señor gobernador intendente. Los hijos
pedimento. y únicos legítimos herederos de don Mar-
tín Miguel de Goyechea y su esposa doña
Ignacia de la Corte, ye finados, ante V. S. según sea
de derecho parecemos y decimos que por muerte de dichos
nuestros padres procedimos a los inventarios jurídicos de
los bienes que dejaron y como en la jurisdicción de esta
ciudad se halla situado el potrero del Paraíso, un solar en
esta ciudad y cantidad de animales de toda especie, así
en dicho potrero, como en el de la Dispensa que está arren-
dado para agregar todos aquellos bienes en los inventarios
y formar un cuerpo que facilite la formación de hijuelas
y particiones se ha de servir V. S. comisionar al sujeto que
sea de su confianza para que con la autoridad suficiente
actúe jurídicamente los inventarios de aquellas especies,
por tanto haciendo el pedimento que más convenga a
V. S. pedimos y suplicamos se sirva proveer y mandar se-
gún pedimos por ser de justicia, juramos no proceder de
malicia y para ello etc. Gabriel de Gilemes lfontero. Lo-.
renzo Ignacio de Gouecliea. Salta y junio diecisiete de mil
setecientos ochenta y seis. Dase la comisión
Decreto. en derecho necesaria a don Francisco Alba-
rado y por su defecto o legítimo impedimen-
to n don José Antonio de Goyechea para que practique los
inventarios de las estancias, ganados y demás bienes que se
hallan en la jurisdicción de esta ciudad pertenecientes
al finado don Martín Miguel de Goyechea y concluidos con
la respectiva tasación en caso de pedirla los herederos de-
volverá todas las diligencias a los interesados, para que
agregadas al cuerpo principal de autos, se proceda a las
particiones que se solicitan. Lo proveyó el señor gobernador
intendente de esta provincia de Salta. con su teniente asesor,
por ante mí de que doy fe. Illestre. Doctor Ddcila. Ante mí,
JosE Antonio Alolina, escribano público y de real hacienda.
E n esta hacienda de La Dispensa perteneciente a los
expatriados de la compañía y en arrendamiento por el finado
don BIartín Miguel de Goyechea a veintiuno de agosto de
mil setecientos ochenta y seis años, yo don Francisco Alba-
rado en virtud de la comisión que antecede por el señor go-
bernador intendente de esta provincia, para que practique
los inventarios de las estancias, ganados y demás bienes que
por fin y muerte del expresado don BIartín Miguel de Goye-
chea, han quedado en esta estancia jurisdicción de la ciudad
de Salta y en atención al recado politico que me pasó el regi-
dor alcalde mayor provincial de la ciudad de Jujug don Lo-
GUEXIES DOCUXIENTMO

renzo Ignacio de Coyechea de estar todos los sanados reco-


gidos, me conduje a esta expresada hacienda de La Dispensa
con los tasadores nombrados que lo son don hlanuel Sánchez
de Bustamante, don Juan Bautista Arismendi y tercero en
caso de discordia don Tomas de Inda, donde se pusieron
de manifiesto un rodeo de vacas en el corral de la dicha
estancia, las cuales prolijamente contadas por los expresados
tasadores y en mi presencia, se hallaron ser en todas propias
de esta testamenteria quinientas setenta y siete, las cuales
rie inventariaron y tasaron en la forma siguiente.
Suma de la vuelta ...................................
Primeramente quinientas setenta y siete vacas de hierro
para arriba, tasaron a cuatro pesos seis reales cada una im-
portan dos mil setecientos cuarenta pesos seis reales . .
Item se inventariaron sesenta y seis bueyes mansos y
tasaron a seis pesos cuatro reales cada uno que importan
cuatrocientos veinte y nueve pesos ....................
ltem se inventariaron setenta y nueve caballos mansos
rocines la mitad de ellos viejos que con este respecto tasa-
ron a tres pesos cada uno que importa doscientos treinta
y siete pesos .......................................
Item se inventariaron treinta y seis potros chúcaros y ta-
flaron a veinte reales cada uno que importa noventa pesos
Suma de la vuelta ..................................
ltem se inventariaron veintiún yeguas que tasaron a doce
reales cada una que importa treinta y un pesos cuatro reales
Item s e inventariaron ciento sesenta y ocho mulas entre
mansas y chúcaras, todas de buena calidad y tasaron a ocho
wsos cuatro reales cada una que importan mil cuatrocientos
veintiocho pesos .....................................
Item se inventarió una estancia nombrada Santa Getrudis
alias El Paraíso, en cuya escritura de compra y títulos
consta difusamente los linderos y mojones, la que tasaron
en dos mil doscientos pesos ............................
Item se inventarió un retazo de solar que le asignaron en
hijuela a la finada doña Ignacia de la Corte en la ciudad
de Salta que cae a espaldas de las casas principales de sus
finados padres don Antonio de la Corte y doña hlaria Pala-
cios, mirando al norte que termina en el Tagarete y por
el s u r con las paredes que cercan la referida casa, cuya
extensión consta de dicha hijuela y tasaron en trescientos
pesos ...............................................
Con lo cual y no habiendo más bienes que poder inventariar
según así lo patentizó el dicho regidor alcalde mayor pro-
vincial don Lorenzo Ignacio de Goyechea, mandé que te-
niendose como se tienen por conclusos estos inventarios,
queden todos los bienes que comprenden en ley de dep6sito
c n poder del expresado heredero don Lorenzo Ignacio de
Goyechea, habiendo entregado estos inventarias originales
según el decreto de S u Señoría el señor Gobernador Inten-
dente de esta Provincia, quien otorgó por uno y otro recibo
e n forma firmándolo conmigo y tasadores en el día de
au fecha. FrancLwo Alvarado. Lorenzo Ionaeio de G o ~ e c i ~ e a .
illanziel Sdncltez de Bttatan~ante. Jitnn naiitiata de Aria-
mendi. Tont<ia de Inda.
IIijuela que los hijos testamentarios y he-
IIijuelas. rederos de los finados don iilartin AIiguel de
Goyechea y doña Ignacia de la Corte. for-
man de común acuerdo y unánime consentimiento del total
monto del cuerpo de bienes líquidos, que dejaron dichos
eus padres y resultan judicialmente inventariados y tasados
e n el expediente seguido al intento que esta por cabeza
y corresponde a saber, gastos ocasionados, desde el falleci-
miento de dicho don Martin BIiguel, hasta este día, bienes
que corresponden a don Esteban de Goyechea que por fatuo
e incapaz de manejo s e han de subdividir, los que me per-
tenecen a mí Don Lorenzo Ignacio de Goyechea y los que
quedan a favor de doña X a r í a ñlagdalena de Coyechea, todos
tres hijos legítimos de los finados
TIijuela de don a saber. Primeramente s e le adju-
Esteban Goyechea. dica la mitad de la estancia del
&lolinosegún la poseyó el difunto
su padre y consta tasada en dos mil pesos ............
Item se le adjudica la estancia del Paraíso, tasada e n
dos mil doacicntos pcsos ............................
Item s e le adjudican doscientos sesenta y ocho marcos.
cuatro onzas catorce adarmcs de plata labrada, a siete
S medio pcsos que importa dos mil catorce pesos cuatro
reales ..............................................
ltem se le adjudican, en reintisbis petacas de jabón
con peso d e cuarenta y un quintales dos arrobas una libra
a once pesos quintal que importa cuatrocicntos cincuentn
y seis pesos tres reales .............................
Suma de la vuelta ...................................
l t e m en trescientos treinta y tres varas de ropa azul de la
.tierra a cuatro reales ................................
Item cincuenta y ocho varas de ídem blanca a tres reales
y nueve varas de cordellate ..........................
Item en herramienta inventariada en el nfolino que según
su tasación ciento sesenta y un pesos dos reales........
Jtem en la esquina y cuatro tiendas, con el sitio y corrales
que según s u tasación importa dos mil ciento cincuenta y
cuatro pesos ........................................
ltem s e le adjudica igual cantidad en las casas de l a ciudad
Item s e le adjudican en dependencias las siguientes contra
$donFermín de la Corte de seiscientos pesos .............
GÜEBIES DOCUBIENTADO

contra el Cacique de Sococha Antonio Chnuqui de seis-


..............
cientos tres pesos cinco y medios reales
......
contra Francisco Angel Coronel de cincuenta pesos
contra don Domingo Iriarte de cuatrocientos ochenta pesos
.............
contra Pedro ZIaidana de doscientos pesos
........
contra Feliciano Burgos de treinta y ocho pesos
..........
contra don Benito Orgas de veinticinco pesos
contra doña Ana Simona de Goyechea de ciento diez pesos
......................
contra Blas Sosa de veinte pesos
contra don Tomás Sarmiento Balladares de veinte resos
contra Baimundo Ealdivieso de diez pesos............
......
contra don Francisco Canales de trescientos pesos
contra don Juan Manuel Campero de cien pesos........
........
contra don Sebastián Sarverri de treinta pesos
contra don Francisco Durán de doscientos setenta y cinco
pesos ...............................................
........
contra don Salvador de Goyechea de cien pesos
Item se le adjudican mil vacas de las del Molino a cuatro
pesos seis reales que importa cuatro mil setecientos cin-
cuenta pesos ........................................
Item en setecientos treinta y cinco yeguas que importaron
.....................
mil ciento dos pesos cuatro redes
ltem en ochocientas noventa y tres ovejas que importan
trescientos treinta y cuatro pesos siete reales...........
, Item en dinero físico setecientos cuarenta y cinco pesos
un real .............................................
. .

Según aparece quedan adjudicados a don Esteban de Goye-


chea los veintiún mil doscientos veinticinco pesos tres y
medio reales que son los mismos que le han correspondida
del total monto de los bienes mortuorios de los finados
P U S padres en cuya virtud se pasa n formar la de don Lo-
renzo Ignacio de Goyechea
Hijuela de don Lorenzo y es como se sigue. Hijuela
Ignacio de Goyechea. ierteneciente n don Lorenzo
Ignacio de Goyechea. Nú-
mero dos. Primeramente se le adjudican en las casas de
la ciudad, dos mil setenta y nueve pesos, que quedan liqui-
dos. Dos mil ciento cincuenta y cuatro pesos que se hallan
adjudicados a don Esteban de Goyechea en ellas y mil
ciento setenta y dos pesos a doiia araría 3Iagdalena con
consignación determinada, en el cuartito del zaguán, los
dos cuartos que miran al naciente y el sitio que desde ellos
hasta las tiendas, hay en el traspatio, siendo su fondo desde
la calle, hasta el mojinete de la salita y pared de los co-
rrales de las tiendas quedando todo lo demis, con el corral
rc beneficio de la casa ............................... 2.179
Item se le adjudica ciento veinticinco pesos en una
cuadra de tierras inventariada, extramuros de la ciudad
.................
junto a otro de don Bernardo Espinosa
Muebles tasados en la ciudad, treinta sillas en cincuenta
pesos ...............................................
Dos mesas, una grande y otra chiw tasadas en nueve pesos
las dos .............................................
Una cuja pintada tasada en veinticuatro pesos ........
Dos escritorios el uno pintado y el otro ordinario en once
pesos ambos ........................................
110s cajas, una mediana y otra mayor tasadas ambas en
dieciseis pesos......................................
Una frasquera mediana de cristal con s u repostería tasada
en veinte pesos ....................................
Un baúl forrado en cuero tasado en ocho pesos ........
Un cuadro de Santo Tomós tasado en tres pcsos ........
ICdificios de la estancia. Un corredor a la plazuela tasado
en ciento y cincuenta pesos .........................
Una sala principal en trescientos pesos .................
Suma de la vuelta ..................................
El piso del d t o en veinte pesos .....................
La puerta de dos manos, umbraladas, escalera, puerta de
la sala, con sus umbraladas, tasado todo en cuarenta y un
pesos .............................................a.

TJn aposento nuevo con sus puertas umbraladas y alacena


en ciento sesenta y custro pesos .....................
Otro cuarto pequefio, cuya entrada tiene en el citado co-
rredor con puertas, umbraladas y alacena en sesenta y seis
pesos ...............................................
Otra sala con tres puertas de comunicación tasado todo en
..........................
ciento cuarenta y nueve pesos
Su aposento, con alacena ventana de hierro y umbraladas
en ciento treinta y cuatro pesos .....................
Una despensa nueva, con sus puertas y umbraladas en
doscientos setenta pesos ............................
Un cuartito pequeiío en el patio de la cocina tasado en cua-
renta y un pesos ...................................
Dos corredores de teja uno viejo y otro nuevo tasado en
ciento treinta pesos.................................
Una sala vieja con su corredor tasado en doscientos cin-
cuenta pesos ........................................
Un perchel con su puerta y umbralada tasado en cuatro-
cientos seis pesos ..................................
Un cuarto tienda con puertas y umbraladas en ciento
treinta pesos........................................
Una almona con sus cinco fondos y estos con novecientos
veintinueve libras de bronce tasado todo en setecientos ca-
torce pesos cuatro reales .............................
Un molino edificado en dicha estancia con todos sus aperos
tasado en mil quinientos pesos .......................
Trastes del molino. Doce suelas tasadas a dos pesos im-
GUEMES DOCUMENTADO
I
porta veinticuatro pesos .............................
Diecisiete sacos tasados a ocho reales cada uno importa
Cuatro aparejos de suela tasados a cinco pesos importa
veinte pesos .........................................
....
Tres lomillos nuevos a tres pesos importa nueve pesos
Dos pailas de cobre una chica y otra ~ r a n d e ,con peso de
ciento veintidós libras a cinco reales libra importa ciento
veintiséis pesos dos reales ..........................
Suma del frente .....................................
Una alquitara en veinte pesos..........................
Una caja grande en quince pesos .....................
Una frasquera de las del Marqués en catorce pesos......
Dos mesas a cuatro pesos importa ocho pesos ..........
..........
Un escritorio con varias gavetas en diez pesos
Seis sillas en doce pesos .............................
Un toldo en cuarenta pesos ..........................
Dos cajas viejas en la sala a dos pesos importa cuatro pesos
Una cuja vieja en cuatro pesos .......................
Una caja grande en la despensa en ocho pesos ..........
Esclavos. Un mulato llamado Ambrosio en trescientos pesos
Un negro llamado Juan de Dios en trescientos cincuenta
pesos ...............................................
..
Idem otro llamado Jos6 Ignacio en cuatrocientos pesos
Idem otro llamado Domingo en trescientos cincuenta pesos
Un mulato llamado IIanuel en cuatrocientos pesos......
Idem otro llamado Anselmo en trescientos pcsos ......
Idem otro llamado Joaquín en trescientos y cincuenta pesos
Una negra vieja llamada María en cincuenta pesos......
Una mulata llamada Tomasa en doscientos veinticinco
pesos ...............................................
Una negra llamada María en cuatrocientos pesos ......
Una negra llamada Juana en cuatrocientos pesos........
Un horno de quemar teja en sesenta pesos en el molino
Se le adjudican setecientas noventa y seis
Ganados. vacas de las de Ia estancia de El Molino
tasadas a cuatro pesos seis reales que im-
portan tres mil setecientos ochenta y un pesos ........
Setenta y tres caballos en la misma estancia tasados a tres
pesos cada uno que importan doscientos diecinueve pesos
Treinta y siete potros en dicha estancia tasados a veinte
reales que importan noventa y dos pesos cuatro reales ..
Doce mulas mansas a cuatro pesos que importan cuarenta
y ocho pesos .......................................
Se le adjudican en dinero efectivo seis mil doscientos cin-
cuenta y ocho pesos tres y medio reales ............
Según aparece le quedan adjudicados a don Lorenzo Ignacio
de Goyechea en 12s especies que se designan veintiún mil
doscientos veinticinco pesos
IIijuela de do& Marla . cinco y medio reales. IIi-
3Iagdalena de Goyechea. juela perteneciente a doña
IIaria XIagdalena de Goye-
chea. Número tres. Primeramente se le .adjudican en las
casas de la ciudad, el cuarto que al salir está a la izquierda
del zaguán, donde tiene su entrada, los dos cuartos que con
puerta de calle están edificados al naciente con toda la
frente de calle que hay en el traspatio desde los citados
cuartos hasta las tiendas y de fondo lo que hay dcsde
la calle, hasta el mojinete de la cabecera de dicha sala, de
suerte que sea otro tanto como el que ocupan las tiendas,
con sus corrales e importa todo mil ciento setcnta y dos
pesos ................................................
Item se le adjudica una cuarta parte de tierras en un solar
contiguo al de don Angel de la Bárcena a espaldas de la
casa y huerta de don José de 13 Cuadra, tasado en doscientos
pcsos ...............................................
Muebles de 13 ciudad. Dos mesas una mediana y otra mayor
tasadas en nueve pesos ambas .......................
Un clave tasado en cien pe.sos .......................
Una cuja vieja tomeada en ocho pesos..................
............
Un escritorio ordinario tasado en tres pesos
Vna caja de las dos, tasadas en diez pesos............
Dos curdros de Doctores tasados en seis pesos.........
Muebles del IIolino. Primeramente doce melas tasadas n
dos pesos importnn veinte y cuatro pesos .............
..
Dieciséis sacos de suela tasados a ocho reales, importan
Cuatro aparejos de suela n cinco pesos, importan veinte
11esos ...............................................
..........
Tres lomillos a tres pesos, valen nueve pesos
Dos pailas nuevas de cobre, una chica y otra grande con
ciento veintidds libras a cinco reales, valen ciento veintiséis
pesos dos reales ....................................
Suma del frente ......................................
ltem un alambique tasado en diez pesos ...............
Itcm una caja nueva grande en quince pesos............
........
Item un par de chifles tasados en dieciocho pesos
Item dos mesas la una con cajón n cuatro pesos cada una
que valen ocho pesos ................................
Item dos cajas viejas tasadas en cuatro pesos..........
Item una cuja tomeada en doce pesos .................
. ... .:. ...........
Item una silla de montar en diez pesos
Primeramente un negro llamado Pedro en
Esclavos. ...........
trescientos y cincuenta pesos
Item otro llamado Francisco en trescientos
pesos ................................................
Item un mulato Borja en cuatrocientos pesos .........
Item otro llnmado Francisqiiito en trescicntos y ochenta
pesos ...............................................
Item un negro llamado Lucas en cuatrocientos pesos ....
ltem otro llamado Bernardo en doscientos y cincuenta pesos
ltem un mulatillo llamado Inocencio en ciento veinticinco
pesos ................................................
Item un negro llamado Inocencia en cien pesos ......
Item una mulata llamada Rosa en doscientos pesos ......
ltem otra llamada Ursula en cuatrocientos pesos ......
ltem otra llamada Rosita en trescientos y cincuenta pesos
Item se le adjudican mil y quinientas tejas que se in-
ventariaron como existentes en el horno de El i\Iolino tasa-
das en cuarenta pesos ...............................
Se le adjudican quinientos setenta y siete vacas de La
Dispensa tasadas n cuatro pesos seis reales, importan
dos mil setecientos cuarenta pesos seis redes ..........
ltem sesenta y seis bueyes a seis y medio pesos, importan
cuatrocientos veintinueve pesos ......................
ltem setenta y nueve caballos a tres pesos, doscientos treinta
y siete pesos ........................................
Item treinta y seis potros n veinte reales, noventa pesos
ltem veintiuna yeguas n doce reales treinta y un pesos,
cuatro reales .......................................
ltem ciento sesenta y ocho mulas en el potrero del Paraíso
tasadas n ocho y medio pesos.
Pasa a la vuelta ....................................
Suma de la vuelta ...................................
Su importe mil cuatrocientos veintiocho pesos ........
Item un retazo de solar en está ciudad de Salta y se-halla
contiguo a las casas de nuestro abuelo don Antonio de la
Corte tasado en trescientos pesos .....................
Se le adjudican mil cuatro cabezas de ganado vacuno de las
de El Molino tasadas a cuatro pesos seis reales, su im-
......
porte cuatro mil setecientos sesenta y nueve pesos
ltem petenta y tres caballos a tres pesos, importa dos-
cientos diecinueve pesos .............................
Item treinta y seis potros a veinte reales, importan no-
venta y cinco pesos ................................
Item en dinero físico se le adjudican cinco mil ochocientos
once pesos uno y medio redes ........................
Según aparece de la anterior hijuela le quedan adjudicadas
a doña María Magdalena de Goyechea en las especies que
se designan veintiún mil doscientos veinticinco wsos cinco
y medió reales. En cuya virtud procedase a la comprobación
del todo con inclusión de lo nue monta la cuenta de castos
e
. -
Dara la calculación de lo aue Bor los citados inventnrios as-
dende el total cuerpo de bienes, subdividiendosert continua-
ción con igualdad la hijuela formada p a n don Esteban
de Goyechea según el testamento otorgado y uninime
consentimiento. Salta, ocho de noviembre de mil setecientos
ochenta y seis. GabRel de Güemes Alontero. Lorcnm Ignacio
de Goyechea. Planilla de comprobación. Importa el total de
los bienes inventariados sesenta y siete mil seiscientos se-
.tenta y nueve pesos tres y medio reales. Pasa al frente 67.679, 3%
Gastos causados desde el fallecimiento de nuestro padre
don Martín Miguel de Goyechea hasta este día según la
cuenta particular prescntada NQ 3 importa cuatro mil
cuatro pesos seis reales.................. 4.004, 6
nienes adjudicados n don Esteban de Goye-
cheachea según su hijuela ............... 21.225, 3%
Idem a don Lorenzo de Goyechea según su
hijuela ................................. 21.225, 3% 67.679, 3%
Idem a doña María Magdalena de Goyechen.
conforme a su particular 'hijuela ........ 21.225, 3%
Igualada subdivisión que de la hijuela de don Esteban de
Goyechca se hace entre sus herederos don Lorenzo 1s-
nacio y doña Marla Magdalena de Goyechea según lo dis-
puesto en el testamento otorgado en virtud de poder por
los albaceas del finado nuestro padre don BInrtln Miguel
de Goyechea y es en la
Adjudicación a don Lorenzo forma siguiente.
Ignacio de Goyechea. Adjudicación hecha n fa-
vor de don Lorenzo Ig-
nacio de Goyechea, NQcuatro. Primeramente se le adjudica
al citado don Lorenzo los dos mil pesos que en la estancia de
El Molino se le consignaron al citado don Esteban y son
los mismos en que el casco de dicha estancia se tasó ....
Item s e le adjudican nl mismo ciento treinta y cuatro mar-
cos dos onzas siete adarmes de plata labrada, mitad de la
consignada al propio don Esteban que a siete y medio
pesos marco importa mil siete pesos dos reales ........
Item se le adjudican los mismos dos mil ciento cincuenta
Y cuatro pesos que en las c u a s de la ciudad de Jujuy se se-
fialaron al expresado don Esteban, con que queda toda la
citada casa a favor de don Lorenzo Ignacio excepción de l a
parte que par su hijuela y esta subdivisidn se adjudica
Suma de la vuelta ................. ...............
;.
a doña Mnría BIagdalena de Goyechea su hermana ....
Item veinte quintales tres arrobas media libra de jabón,
mitad intrínseca de lo consignado al mismo don Esteban lo
cual importa a once pesos quintal doscientos veintiocho
pesos uno Y medio reales .............................
Item ciento sesenta y seis varas de ropa azul de la tierra
..........
que a cuatro reales vale ochenta y tres pesos
Item treinta y tres y media dichas blanca y cordellate a
.tres reales que importa doce pesos cuatro y medio reales
Xerrnmienta. Item seis hachas a dos pesos ............
ltem dos nzuelas a dos pesos .......................
GUEMES DOCUAIENTADO

Item dos palas en doce reales ........................


Item tres azadones en tres y medio pesos ..............
ltem dos barretas con veintiocho libras a cuatro reales..
Item diez hoces a ocho reales .......................
Item una romana con su pil6n en diez pesos
Item dos sierras braceras en seis pesos
............
...............
Item cinco cepillos a cuatro reales ....................
Item un acanalador y una moldura en ocho reales ......
ltem nueve gubins en tres pesos ...................
Item un compfis en ocho reales .......................
ltem una gradilla de tejones en ocho reales .............
Item cuatro marcas para herrar ganado a tres pesos ....
De las dependencias consignadas a don Esteban s e le adju-
dican a don Lorenzo Ignacio las siguientes, a saber: contra
don Fermin de la Corte seiscientos pesos ..............
Item cincuenta pesos contra Francisco Angel Coronel ....
Item cien pesos contra Pedro Blaidana ................
Item treinta y ocho contra Feliciano Burgo8 ............
ltem ciento diez contra doña Ana Simona de Coyechea
Item veinte pesos contra don TornPs Sarmiento Balladares
Item diez pesos contra Raimundo Baldivieso ..........
Item contra don Sebastifin Sarverri treinta pesos ......
Y doscientos eetenta y cinco pesos contra Francisco Durán
Del ganado y plata física consignados a don Esteban se le
adjudican a don Lorenzo lo siguiente,
Suma del frente ....................................
ltem quinientas vacas a cuatro pesos seis reales que im-
.........
portan dos mil trescientos setenta y cinco pesos
Item cuatrocientas ochenta y ocho yeguas a doce reales
que importan setecientos treinta y dos pesos............
Item ochocientos noventa y tres ovejas a tres reales que im-
portan trescientos treinta y cuatro pesos siete reales..
Item trescientos setenta y un pesos tres cuartillos redes
en plata efectiva
, .
...................................
Según aparece asciende el por menor de bienes de la
hijuela de don Esteban de Coyechea subdividida en dos
mitades iguales entre sus dos hermanos don Lorenzo Ignacio
y doña María IIagdaIena por la fatuidad de aquel a diez
mil seiscientos doce aesos cinco Y tres cuartillos reales
que s e consignan adjÜdican y señdan a favor del emre-
sado don Lorenzo Ignacio en Ins propias especies que que-
dan mencionadas, en
Adjudicación a doña IIsría cuya virtud s e proceder&
7tIagdnlena de Goyechea de a formar la hijuela que
los bienes de don Esteban. . de esta subdivisión co-
rresponde a dicha doña
María &Iagdalena de Coyechca y es en la forma siguiente
NQ cinco. Primeramente dos mil doscientos pesos que en
la estancia nombrada 121 Paraíso se sefial6 al expresado don
Esteban y son los mismos en que fue apreciada dicha
cstancia que se le adjudica e n el todo a doña ñlaria
ñlagdalena ..........................................
Item Re le adjudica a la misma sefiora dos mil ciento
cincuenta y cuatro pesos valor de la esquina cuatro tiendas,
hus corrales. sitio y armazones que en la ciudad de J u j u g
y en -frente del convento de San Francisco poseyó nuestro
finado padre las cuales se señalaron a dicho don Esteban
en su particular hijuela p por esta subdivisión quedan a
....
favor de la expresada señora doña Blaria n I a ~ d a l e n a
Item en plata labrada se le adjudican a la propia señora
ciento treinta y cuatro marcos
Puma de la vuelta ...................................
dos onzas siete adarmcs que a siete y medio pesos im-
porta mil siete pesos dos reales .....................
ltem en veinte quintales tres arrobas media libra de jabón
mitad de lo consignado a dicho don Esteban lo cual importa
n once pesos quintal doscientos veintiocho pesos uno y
medio reales ........................................
Item se le adjudica a la propia señora ciento setenta y
seis varas de ropa de la tierra azul a cuatro reales ....
, Item e n dicha blanca y cordellate treinta y tres y medias
varas a tres reales que importan doce pesos cuatro reales
De la herramienta consignada a don Esteban se le adjudica
n dicha señora doña ñlaria Magdalena, lo siguiente.
Item seis hachas a dos pesos .......................
Item dos azuelas a dos pesos ........................
ltem dos palas en doce reales ..........................
Item tres azadones en tres y medio pesos ............
Item dos barretas con veintiocho y media libras a cuatro
reales catorce pesos dos reales ......................
Item nueve hoces a ocho reales .......................
......
ltem una balanza con s u cruz y peso en doce pesos
Item tres sierras chicas en tres pesos.................
....................
ltem cuatro cepillos a cuatro reales
Item cinco barrenas en dos pesos ..................
...........
ltem ocho escoplos en dos pesos cuatro reales
ltem un hierro para tornear e n ocho reales y un taladro
en dos reales ........................................
Jtem una gradilla de tejas en cuatro reales............
l t e m cuatro marcas para herrar ganado a tres pesos ....
De las dependencias consignadas a don Esteban se adju-
dican las siguientes: seiscientos tres pesos cinco y medio
reales contra el Cacique de Sococha don Antonio Chauqui
Cuatrocientos ochenta pesos contra don Domingo Iriarte
Cien pesos contra Pedro Maidana ....................
............
Veinticinco pesos contra don Benito O r g i s 25
Veinte pesos contra Elas Sosa ....................... 20
Suma del frente ..................................... 6.993, 1%
Trescientos pesos contra don Francisco Canales ...... 300
Cien pesos contra don J u a n Manuel Campero .......... 100
Ciento contra don Salvador Coyccliea .................. 100
Del ganado y plata física consignado a dicho don Esteban
S<!adjudica lo siguiente a la expresada señora doña AIaria
hlagdalena de Goyechea.
Quinientas vacas mitad de lo consignado a dicho don Es-
teban n cuatro pesos seis reales que importa dos mil tres-
cientos setenta y cinco pesos ....................... 2.376
Doscientos cuarenta y siete yeguas a doce reales que im-
...........
porta trescientos setenta pesos cuatro reales 370, 4
Trescientos setenta y cuatro pesos un cuarti110 reales plata
física .............................................. 374, !á
10.612, 6.i
Según se demuestra corresponden a la expresada seíiora
doña 1Iaria Magdalena de Coycchca de la parte dc la hi-
juela de don Esteban que le h a cabido e n las cgpecies que
con distincidn quedan mencionadas, diez mil seiscientos doce
pesos cinco y tres cuartillos reales en cuya virtud se pro-
cede n hacer el cotejo y resumen general del cuerpo de
bienes según inventarios y ' e s en la forma simiente.
Resumen General. Importan todos los bienes inventariados
Los adjudicados a don Lorenzo Ignacio según
s u hijuela N9 2 ......................... 21.225, 2%

1
Al mismo por In de la subdivisión número 4 10.612. 5%
A doña María Mamialena por su hijuela NQ 3 21.225, 2%
A la misma por In de la subdivisión N9 4 10.612, 6 % 67.679,
Castos ocasionados según la cuenta formada y
presentada con el NQ 3 .................. 4.00.1, 6
Cuyas hijuelas hemos formado de común
Igualada. acuerdo y unánime consentimiento los dos
herederos, albaceas teshmentarios de los
finados nuestros padres don Blartin hIiguel de Goyechea
y doña Ignacia de la Corte, a saber. Yo don Gabriel de
Gíiemes Montero como marido y conjunta persona de In men-
cionada doña Marla Magdalena de Goyechea y ya don
Lorenzo Ignacio de Coyechea, Regidor Alcalde hlayor Pro-
vincial de la ciudad de Jujuy, como hijos de los citados fi-
nados y ambos juntos protestamos aegún derecho haberlas
formado fiel y legalmente salvo yerro de pluma o equi-
vocación involuntaria y mediante a estar formadas dichas
divisiones y adjudicaciones a la satisfacción y contento de
ambos igualmente protestamos, n o alegar n i pedir contra
ellas ahora, n i en tiempo alguno en juicio ni fuera de 61,
las que con los inventarios y demás documentos .se pre-
sentaran a1 señor Gobernador Intendente para s u apro-
bación y para que conste lo firmamos con testigos en esta
ciudad de Salta a trece de noviembre de mil setecientos
ochenta y seis. Entre renglones: de plata labrada, vale.
Gabriel Gilentes dfontero. Lorenzo Ignacio de Gogeehea.
Testigo Juan Batctista. de Arismendi. Testigo Lorenzo Fer-
wández BalJivieso.
Número dos. Cuenta de gastos
Cuenta de Gastos. causados desde el fallecimiento
de don llartín Miguel de Goye-
chea hasta este día, de los bienes mortuorios que dejó
a los que se agregaron. En veintidós de iietiembre de
ochenta y cinco damos por gastados quinientos ochenta
y tres pesos dos reales que en el funeral y entierro de
nuestro finado padre a saber.
Mandas forzosas .....................................
Ataúd catorce pesos .................................
Ciento cuarenta y dos pesos dos reales lutos, hechuras
y otros gastos .......................................
Treinta y dos pesos médico y cirujano..................
Escribano diez pesos ................................
Por misas al convento de In Merced....................
............................
Al colector por el entierro
Al guardihn por entierro y misas noventa y cinco pesos
Ciento treinta y tres pesos en misas el dia de su muerte
honras y cabo de aiio ................................
Por cinco pesos pagados al colector por el entierra de los
hijos mellizos de la negra Juana .....................
Por quince pesos pagados por el casamiento de la negra
Juana con el negro Domingo ........................
Por treinta y siete pesos pagados a don Isidro Fernhndez
....
por la cura y botica del negro Domingo e indio Lorenzo
Por treinta y siete pesos pagados por la busca y traída del
mulato Blanuel e India Melchora ......................
Por 100 pesos pagados a don IIermenegildo Chauri por la
defensa de los linderos de El Blolino .................
Por treinta pesos tres reales pagados a don Felipe Cabrera
11or la cera que se le compró..........................
Por ciento cincuenta y cuatro pesos siete reales pagados
en la real caja de Alcabala por la venta de vacas dcl año
1785 y 8G ..........................................
Por sesenta y tres pesos pagados al arrendatario de diez-
mos don Gregorio Zegada por cuarenta y dos terneras que
le correspondieron en el año 85 a doce reales............
Por ciento diez pesos gastados en la ciudad para mi manu-
tención con la de mis hermanos don Gabríel de Güemes
y doña María Magdalena de Goyechea y las familias de
ambos hasta su regreso a 12 ciudad de Salta ...........
Por trescientos siete pesos seis reales satisfechos a don
Ramón de 3Iolina importe de ciento ocho yeguas ........
Suma de 12 vuelta ...................................
a diez reales sesenta y siete potros a veinte reales y tres
m8s a catorce reales ................................
P o r veintiocho pesos importe de siete caballos que se
compraron n cuatro pesos ..........................
Por cuatrocientos cincuenta y ocho pesos cuatro reales
importe de ciento treinta y una vaquillas que se compraron
a veintiocho reales ..................................
Por cuatrocientos veintinueve pesos de sesenta y seis
bueyes que se compraron n Patricio Acuña a seis y medio
pesos ...............................................
Por ciento treinta pesos que importaron treinta caballos que
se compraron a cuatro pesos..........................
Por veintidós pesos cuatro reales satisfechos al peón Juan
Chala que sirvió en la estancia de La Dispcnsa el nño de 85
Por veintidós pcsos cuatro reales satisfechos al peón Ger6-
.... ...
nimo que sirvió en dicha estancia el año de 85 L.
Por quince varas de ropa de bayeta de la tierra que se le
dio nl indio Pedro n cuatro reales vara................
Por veinte varas ídem al indio XInteo a cuatro reales varas
..
Por diez varas ídem al indio Josb Grande n cuatro reales
P o r cuatro varas ldem al indio Antonio Tonocote R ,cuatro
reales ...............................................
......
Por cuatro y cuarta varas ldem a la india Melchora
Por cincuenta y tres varas ldem repartidos a los esclavos
Por seis pesos cuatro reales gastados en bulas para los
criados ..............................................
Por ochenta pesos pagados en plata n Blrtolo Salguero por
un año de servicio en las estancias....................
Gastos de Estandartes. Por ciento treinta y cinco pesos
cuatro reales valor de quince arrobas de azdcar que se com-
praron para el estandarte ............................
....
Por ocho barajas pagadas en el estanquillo a 8 reales
Por veintisbis pesos pagados por dos arrobas de chocolate
Por seis pesos de la condución del tambor ..............
Por veintinueve pesos de una carga de vino ..........
Pasa al frente .......................................
Suma del frente .....................................
Por treinta pesos de dos libras cuatro onzas de canela ..
Por quinientos pesos que se consideran gastados en todo
el resto de la función cuyo pormenor de partidas no se
asentaron ...........................................
Son gastos contra el cuerpo de bienes dos-
Limosnas. cientos pesos que resultaba deber Pedro
Maidana por un vale que sc halla inven-
tariado y posteriormente hizo constar tenerlos pagados
por cuya causa se segregan del cuerpo de bienes ......
Por doscientos pesos que por vía de limosna en obsequio
a Dios y por el alma de nuestros finados padres se perdonan
por los dichos coherederos don Lorenzo y doña AIagda-
iena al tIo don Fermfn de la Corte de los seiscientos que
debe ................................................. 600
P o r doscientos pesos que los mismos coherederos perdonan
al cacique de Sococha Antonio Chauqui de los seiscientos
t r e s pesos cinco y medio reales que resulta deber cuya
limosna la hacen e n obsequio del alma de nuestros finados
padres .................................. . . . . .
' 200
4.002, G
Según aparece resultan gastados del cuekpo de bienes
de la testamentaria de nuestros finados padres cuatro mil
dos pesos seis reales mmo se patentiza de las cuentas par-
ticulares, llevadas en el libro de caja de donde se ha sacado
(sta que está fiel y legalmente y lo juramos 'por Dios nues-
t r o Señor y una señal de Cruz t en Salta a seis do no-
viembre de mil setecientos ochenta y seis. Gabriel de Giie-
mes Jlontero. Lorenzo Ignacio de Go~cchea.
Señor Gobernador Intendente. Don Cabriel Cüemes DIon-
Escrito. tero, conjunta persona de doña AIaria blagdalena de Go-
yechea y don Lorenzo Ignacio de Goycchea ante V. S. según
derecho parecemos y decimos. Que por fallecimiento de nuestros padres
don l l a r t i n Miguel de Goyechea y s u esposa doña Ignacia de la Corte.
vecinos moradores de la ciudad de Jujug, se practicaron los correspon-
dientes judiciales inventarios de los bienes que dejaron ante el juzgado
d c rrimer voto de aquella ciudad por lo que habia e n ella y s u juris-
dicción y por los que dejaron e n ésta y sus términos fueron actuados,
con comisi6n de V. S. por don Francisco Alvarado según se patentiza
del expediente original con fojas veinte y ,dos Útiles e n debida forma
presentamos con el número uno, sin que ,hayan quedado m8s bienes
que inventariar, n i nosotros tenemos más que deducir como lo juramos
según derecho, conforme se iban haciendo los citados inventarios, me
fueron dichos bienes tasando por tres diferentes expertos que s e nom-
braron conforme a la ley y consta de las diligencias de las fojas dos
vuelta y siguiente de ellos sin que en esta parte tengamos que recla-
mar, deducir, ni alegar por hallarse todas las tasaciones hechas a nues-
t r a satisfacción y contento. Desde el fallecimiento de los dichos nues-
tros padres, cuyos bienes hemos administrado unidos, se han gastado
de ellos cuatro mil dos resos, seis reales, e n los fines que constan de
la adjunta cuenta jurada que con la solemnidad en derecho necesaria
exhibimos con el número dos, de suerte que rebatidos aquellos de los
sesenta y siete mil seiscientos setenta y i nueve pesos, t r e s y medio
reales a que ascienden los bienes mortuorios, quedan de líquida exis-
tcncia, sesenta y tres mil'seiscientos setenta y seis pesos cinco y me-
dio reales sin que por los citados gastos tengamos tampoco que deducir
cn contrario por estar hechos con beneplácito de ambos. E n este es-
tado, pues, el referido remanente cuerpo de bienes proindiviso deseosos
GUEMES DOCUMENTADO ; 343

d e que se partan para disponer cada uno respectivamente dc lo que


con legitimidad le competa de unánime consentimiento, hemos for-
mado las hijuelas extrajudiciales, que constan con l a debida separación
e n el documento firmado por nosotros con el número tres, que con igual
solemnidad y bajo las protestas de derecho asimismo presentamos para
que la justificación de V. S. y en uso de la autoridad que le concede
la ley treinta y dos, titulo dos, partida tercera, de las de partidas, s e
sirva aprobarlas en términos que tengan las adjudicaciones hechas e n
d.ichas hijuelas, perpetuamente, según así lo queremos toda la valida-
cion y firmeza en derecho necesaria. e n la inteligencia que por nues-
t r a parte protestamos no alegar de nulidad n i pedir ahora, n i en tiem-
po alguno contra ellas, en juicio n i fuera de él. Tres son las partes
legítimas que tienen con igualdad derecho al total monto de estos
bienes y así han sido otrns tantas las hijuelas que hemos formado.
La primera que pertenece a nuestro hermano mayor don Esteban dc
Goyechea de común acuerdo, unfinime consentimiento como sus tuto-
res y curadores mancomunados por institución expresa de nuestro fi-
nado padre el citado don BIartin Aliguel y conforme a la cl6usula quinta
del testamento. que en virtud de peder otorgamos y se halla con au-
toridad judicial aprobado como se ve por el testamento número cuatro,
la subdividimos nuevamente y nos la adjudicamos según se patentiza
por el citado documento número tres, por ser conforme a la última
voluntad de nuestro finado padre a las cláusulas citadas del testamento
por estar nosotros convenidos en esto de unánime consentimiento y
porque siendo el citado nuestro hermano fatuo anatibitate e imposible
de mejorar de suerte, mudo y sin el menor conocimiento, como consta
d e notorio, lo declara nuestro padre, lo afirma consensamente el de-
fensor de menores, en s u respuesta de fojas dos y lo aprueba el juez
real de la causa, pero con la invariable advertencia que ambos man-
comunados nos obligamos, con toda la fuerza y validación del derechó
Y con nuestros bienes a mantenerlo, con amor hermana1 con el decoro
proporcionado a nuestras facultades y en los propios términos que con
individualidad expresamos e n la cl5usula cuarta y quinta citada del
citado testamento, que todas queremos subsistan sin innovación per-
petuamente, bajo de cuyo firme convenio y expresas disposiciones pro-
testamos con toda la fuerza del derecho a no hacernos recíprocamente
cargo de lo que s e gaste en la manutención, vestuario y entierro, s i
lo sobrevivimos téngalo en su poder cualquiera de los dos conservando
a un mismo tiempo, durante la vida de nuestro hermano, e n nuestro
poder sus bienes que por subdivisión nos hemos adjudicado u otros
equivalentes para nunca aventurarlos. P o r tanto y;haciendo el pedi-
mento que m6s convenga, a V. S. suplicamos se sirva proveer y man-
'
d a r según pedimos por ser de justicia, jurando conforme a derecho n o
i proceder de malicia y para ello, etc. Cobriel de Ciiimes nfontero. Lo-
renzo Ignacio de C o ~ e c h e a Salta
. y noviembre quince de mil setecien-
, tos ochenta y seis. P o r presentada con los documentos que expresa.
vista al defensor general de menores y con lo que responda autos. E l
señor Gobernador Intendente de esta Provincia de ;Salta, así lo pro-
veyó con dictamen del doctor don José de AIedeiros por enfermedad de
su teniente asesor propietario de que doy fe. iilestre, Doctor iifedeiros.
Ante mí, Josd Antonio Molina, Escribano Público y de Real Hacienda.
En dicho din hice saber el anterior decreto a don Gabriel GUemes
AIontem y a doña AIagdalena Goyechea de que doy fe. iilolina, escri-
bano. Y luego pasé estos autos al defensor general de menores don
Filiberto Mena, doy fe. Alolina, escribano. Señor Gobernador Inten-
dente. El defensor general de menores en voz y nombre de don Es-
teban de Goyechea oriundo de la ciudad de Jujuy, hijo legitimo de don
Martín Miguel de Goyechea y de doña Ignacia de la Corte, difuntos,
a la vista que se le ha dado de los autos de inventarios, tasaciones
e hijuelas de los bienes que quedaron por el fallecimiento de los ci-
iados consortes, con la cuenta presentada dc gastos causados por los
scñores Ministro Tesorero don Gabriel de GUemes Aíontero y don Lo-
renzo Ignacio de Goyechea, regidor alcalde mayor provincial, albaceas
y herederos del expresado don Martin Miguel, con el testamento de
éste dice, que habiendo impuéstose radicalmente de dichos documen-
tos, halla que los referidos albaceas han cumplido legalmente con la
obligación en que estaban constituidos y asimismo cn la faccidn de
hijuelas extrajudiciales que han formado por evitar demoras de que
se comprende la que pertenece a su encomendado don Esteban de Go-
yechea, reputado en grado de menor por ser fatuo anatibitate y el se-
guro de esta herencia por recaer en dichos albaceas, como tutores del
mencionado don Esteban obligados a contribuirle vitaliciamente sus
alimentos y vestuarios, según es acreedor por su buen nacimiento, para
que de esta suerte logren dichos herederos y tutores la accidn futura
recayente en ellos. en cuyos términos conformándose el defensor por
su parte con dichas hijuelas se ha de servir la justificaci6n de V. S.
aprobarlas interponiendo para ello su autoridad real y decreto judicial,
conforme a derecho para que otorgando los interesados recibo en for-
ma de los bienes que se contienen en las adjudicaciones, se tenga por
conclusa esta causa que es cuanto expone el defensor en justicia. Salta
y noviembre dieciséis de mil setecientos ochenta y seis. Filibcrto de
iifena. I

Y vistos, con el testamento otorgado a nombre del finado


Autos. don JIartfn Miguel de Goyechea, vecino de la ciudad de Ju-
juy, inventarios, tasaciones, cuenta de gastos, hijuelns, lo
pedido y alegado, de conformidad y mutuo consentimiento por lcs here-
deros del dicho finado, como lo que sobre todo expone el defensor generd
de menores, apruebase en la más bastante forma que haya lugar en dere-
cho todo lo obrado por los referidos herederos interponiendo para el efecto
la autoridad y judicial decreto de este gobierno en cuya escribanía que-
dará archivado el proceso para su perpetua constancia. Y a fin de que
tengan la que corresponde de sus respectivas hijuelas !os interesados,
el presente escribano les dará de ellas los testimonios que pidan, con
inserción de su filtimo pedimento, vista del defensor y este auto, por
el cual asi lo proveyú, mandó y f i m 6 el señor don Andrés Mestre.
Iirigadier de infantería de los redes ejércitos y Gobernador Intendente
de esta Provincia de Salta, con dictamen del doctor don JosE de Ale-
deiros por enfermedad de su teniente asesor propietario de esta ciu-
dad de Salta a diecisiete de noviembre de mil setecientos ochenta y
eeis años, por ante mi de que doy fe. Andrés Afestre. Doctor aledeiros.
Ante mí, JosS Antonio Alolina, Escribano Público y de Real Hacienda.
En dicho día hice saber el auto de arriba al defensor de menores don
Filiberto Mena, doy fe. Molina, escribano. Incontinenti hice saber di-
cho auto a don Gebriel GUemes Montero Y a su consorte doña BIagda-
lena de Goyechea de que doy fe. Jfolina, escribano. ;
Concuerda con las diligencias originales de s u contexto a que me
remito, va cierto y verdadero este traslado y en f e de ello lo s i m o
y firmo en S a l h y noviembre veinticuatro de mil setecientos ochenta y
~ e i arios.
s
Aquí un signo.
Ante mí
Jost? Antonio Jfolina
Escribano Público y de Real IIacienda
CATOLJCIDAD DE GifEMES
NOTA: Los documentos que conforman este Tema, fueron enviados por
nuestro padre, el Dr. Luis Güemes, a S.S. Ilustrisima el Sr. Arzobispo de
Salta, Dr. Carlos Marinno Phrez, en ocnsión de celebrarse en esa ciudad
el VI1 Congreso Euearístico Nacional. Adjuntamos la carta de remisión
'que dirigid nuestro padre al referido Arzobispo y la respuesta de éste.
P. nr. G.

Buenos Aires, 28 de setiembre de 1974


Al Arzobispo de Salta, monseñor
Carlos Mariano Perez I
I'alacio arzobispal
Saltn
Preclaro monseñor:
E n ocasión de celebrarse eii esa ciudad el séptimo Conpreso Euca-
rístico Nacional, como homenaje a tan magna Asamblea, y, a la vez,
a la memoria de nuestro prócer salteño, ofrezco a la consideración de
S u Señoria Ilustrisima algunos elementos de juicio atinentes a la ca-
tolicidad de Güemes, y r los relevantes meritos de dos arzobispos de
Charcas: Benito María de Mojó y Francolí, que falleció en Salta am-
parado por el Gobernador (Güemes) y Pedro de Puch, primo hermano
de Carmen Puch (la esposa de Güemes), que fue quien años m5s tarde
IIev6 a cabo el traslado de los restos de Mojó. de Salta a Sucre, donde
fueron depositados y reposan en la cripta de la Iglesia del Oratorio d e
San Felipe Neri.
Mis muchos años y mis inveteradas fallas en la salud corporal.
muy a pesar mío, me privan de trasladarme a esa para asistir a los ac-
tos programados para tan memorable acontecimiento. Mi hija Marla
Teresa Güemes de Lanussc. en consecuencia. sera la que ponga e n ma-
nos de S u Señorfa, los aludidos elementos de juicio, los que consisten
en uno de los cnpitulejos, de mi obra inedita, el que se intitula "Cüemes
*y el Arzobispo de Charcas Mojó y Francoli". y además la "Informaci6n"

, sobre los mencionados arzobispos que, a los efectos de l a presente re-


mesa. he podido compilar.
Rogando a Dios por el mejor 6xito del Congreso, y por l a ventura
.personal de S u Señoría Ilustrísima, me complazco en declararme, comw
lo hago, s u humilde y sincero servidor en Jesba.
Luis Güemcs
Salta, 7 de enero de 1975
Señor :
Dr. LUIS CUEAlES
Rodriguez Peña 1474
BUENOS AIRES
De mi más alta consideración y respeto:
A su tiempo recibí de manos de su hija, la sra. María Teresa Cüe-
mes de Lanuuse, su apreciada carta del 28-1s. p.p. junto con el mate-
rial de documentación histórica que valoro romo fruto de sus serias in-
vestigaciones y de su amor al gran prócer salteño, General D. Martin
Miguel de Cüemes.
Le agradezco sincera y cordialmente su singular adhesión al VI1
Congreso Eucaristico h'acional, que culminó en Salta a Dios gracias
del 6 al 13 de octubre, con la satisfacción de todos los que participaron
en 61, comenzando por el Legado Papal, y las autoridades nacionales,
provinciales y todo el pueblo de Salta. Su contribución de homenaje
para este histórico evento, enriquece el archivo de la Arquidibcesis con
material de sumo valor por relacionarse con nuestro prócer máximo,
y porque el mismo demuestra, su excelente disposición con los Obispos
y Saccrdotes de la Iglesia Católica y muy espeeialmcnte con cl Arzo-
bispo Dr. Cenito Iraría de BIoj6 g Francoli que fallece aquí en Snltn,
amparado por el Gobernador Cüemes.
Lo felicito ex toto corde, muy apreciado Doctor, por la obra his-
tórica que ha realizado; sus aportes son de inestimable importancia
por cuanto tienden a revelar el quehacer de Giiemes en su integridad,
niostrando una faceta desconocida hasta lpara los mismos salteños, y
que hoy mBs que nunca, es preciso hacer conocer: la espiritual.
En su carta me dice que lo que me ha remitido es uno de los capí-
tulos de una obra inédita suya. ¿Por que ha de ser inedita? Los argen-
tinos necesitamos que se publiquen trabajos que demuestren la verda-
dera fibra espiritual de los forjadores de nuestra nacionalidad; y esto
es necesario que se realice cuanto antes.
No puedo terminar estas líneas sin rogarle quiera disculpar mi
tardanza en contestarle, debida al cúmulo de trabajos que se precipi-
taron por la realización del VI1 C.E.N. y los acontecimientos que mul-
tiplicaron sobremanera mis obligaciones inmediatas y mi correspon-
dencia.
Al reiterarle mi mejor agradecimiento por su gesto y t a m b i h -muy
especialmente- por esta otra faceta de su distinguida personalidad
riue ciertamente no conocía, lo saludo con las expresiones de mi m65
alta estima, rogando al Señor y a In Virnen del AIilag.ro, que se dignen
pagarle con la abundancia de sus divinas gracias, la distinción oue ne
h a dimado tener con este Arzobispado y con su afectIsimo servidor y
Capellh.
.- Carlos Mariano Pérez
Arzobispo de Salta
PRIMERA PARTE 1

"GUERIES Y EI, ARZOBISPO DE CXIARCAS n I o J o P


FRANCOLI" Y "ERECCION DE LA CAPILLA

GVEMES Y EL ARZOBISPO DE CHARCHAS


MOJO Y FRANCOLI

1 ,
[EL ARZOBISPO MOJO Y FRANCOLI FELICITA A LINIERS
POR SU TRIUNFO DEFINITIVO E N LA DEFENSA D E
BUENOS AIRES.]
"(OFICIO D E ENHORABUENA QUE HA PASADO E L ILUS-
TRISIiVO SEROR ARZOBISPO DE LA PLATA AL EXCELEN-
TISIMO SEROR GOBERNADOR Y CAPITAN GENERAL D E
LAS PROVINCIAS DEL RIO D E LA PLATA, CON hIOTIVO
D E LA GLORIOSA DEFENSA EJECUTADA E L DIA 5 D E L
PASADO JULIO.)
"Lleno de júbilo y alborozo tomo en este momento la pluma
para dar a V.E. la más expresiva y sincera enhorabuena por
Ia brillantísima victoria que acaba de conseguir y en la que
mandando V.E. unas tropas dignas ciertamente de tal jefe lo-
gró con su celo, con su valor y talento, que se estrellase en la ex-
tremidad de esta América del Sur el poder de nuestro fiero ene-
migo; se hiciesen pcdazos las cadenas que cn cl exccso de su
orgullo trala prevenidas para esclavizarnos; y se oscureciese Ia
fama de sus mejores caudilIos.
"Le doy pues a V.E. esta tan envidiable enhorabuena, no
8610 en mi nombre sino también de la patria, a la que V.E. ha
tenido la dicha de sacar por dos veces del borde del precipicio.
Se la doy a nombre de este vastísimo Arzobispado. cuyas ricas
e indefensas provincias ha salvado V.E. de la ruina casi inevi-
table. Se la doy n nombre de todos mis buenos y leales feligreses,
de estas mis queridas ovejas, que impelidas ahora por los mRs
vivos sentimientos de reconocimiento y alegria, repiten a cada
paso y con el mayor entusiasmo el fausto nombre de V.E. y cada
uno de ellos desearía ponerle sobre s u cabeza una corona cívica,
en señal de que V.E. h a librado a millares de excelentes ame-
ricanos de caer víctimas a los pies de un pueblo detestable, y
perder a lo menos por algunos años, a l mejor y mRs amable de
los Soberanos. Pero sobre todo se la doy a nombre de nuestra
sagrada religión, la cual sin el brazo robusto y victorioso de
V.E., y sin el extraordinario ardimiento de los nobilísimos mo-
radores de Buenos Aires, se hubiera visto ahora hollada, pro-
fanada y escarnecida por unos hombres que han sacudido muchos
años h a su suavísimo y saludable yugo, y que en todos los lu-
gares en donde han puesto el pie durante la presente y pasada
guerra, han dejado impresas las señales de su impiedad y de su
desenfrenado libertinaje.
, "No extrañe, Señor Excelentísimo que me explique en este
estilo. Nadie tiene miis motivos que yo para alegrarse del no
esperado triunfo, que h a conseguido bajo el mando de V.E. este
ya dichoso Reino. Mi corazón, repito, se inunda del miis puro
consuelo al ver que V.E. ha serenado, y aún disipado entera-
mente la horrible tempestad que iba a descargar sobre nuestras
cabezas; y que por lo mismo h a adquirido V.E. derechos incon-
testables a la perenne gratitud, no menos de la religión que de
la patria.
"Yo no cesaré nunca de elevar al Cielo mis humildes gracias
por un beneficio t a n inestimable; y no puedo menos de participar
a V.E. para su satisfacción, que a este fin hc avisado a todos
los cuerpos de esta ciudad, que pasado mañana celebraría de
pontifical en mi iglesia Metropolitana; y que por la tarde saca-
ríamos juntos en solemnísima y alegrísima procesión a Nuestra
Señora de Guadalupe, a quien habíamos invocado antes con t a n
tiernas liigrimas, para que se dignase cubrir con su maternal
manto a la insigne capital de Buenos Aires, y a todo el Virreinato,
y poner fin a tantas angustias. Al mismo tiempo les he hecho
saber que en el viernes inmediato volvería a celebrar igualmente
de pontifical, para implorar las divinas misericordias a favor
ric las almas de los intrépidos ciudadanos, de los esforzados de-
fensores de la libertad nacional. que en los días S, 4 y 5 del último
julio murieron tan gloriosamente en esa corte; nos alcanzaron
con su muerte la victoria; y cuyos nombres merecen grabarse con
letras de oro en los umbrales de todos nuestros templos.
"Por mi parte no los olvidaré nunca, antes bien me acordaré
(le ellos mientras viva con un tierno y respetuoso agradecimiento.
Y deseando desde ahora manifestarlo a sus familias. aue considero
en cierta manera como huérfanas. le remito a V:E. la adjunta
libranza (le mil pesos, supliedndole que tenga V.E. la bondad
de distribuir en mi nombre esta corta limosna entre las viudas de
los soldados que le parezcan mas pobres y beneméritas. Con esta
fecha envío también una igual libranza a ese Muy Ilustre Cabildo,
pidiéndole que se sirva hacer otro tanto con las viudas de los
ciudadanos que padezcan mayor estrechez, y sean más acreedoras
ir nuestra compasibn.
"En fin, concluyo esta carta, asegurando a V.E. que miro con
inexplicable contento coronadas ya sus sienes de esos hermosos
laureles, salpicados con sangre enemiga; que m e ofrezco con
sumo gusto a su disposición, y que deseo vivísimamente que me
ponga V.E. en el número de sus mas apasionados y agradecidos
capellanes. Plata, 3 de agosto de 1807. Benito Narln Arzobiqo.
Excelentísimo Seíior don Santiago Liniers".
[Impreso por la Real Imprenta de Niños Expósitos. Citado en la Historia
bibliografh de la imprenta en el antiguo Virroinato del Rlo de la Platn,
JosB Toribio JIedina, 1802, bajo el N9 387, pdgina 2211.

[LA VICTORIA DEL 5 D E JULIO D E 1807 F U E LA QUE D E


HECIIO AGLUTINO AL VIRREINATO.] '

"A ejemplo de la corte, todas las capitdes de provincias, 13


villa de Oruro y muchas cabeceras de partido, celebraron el triunfo
(le Euenos Aires con demostraciones piiblicas y regocijos priva-
dos. &16s bien que el presidente y los gobernadores, el arzobispo
Y los obispos tomaron de su cuenta el asunto, haciendo desde luego
como suyos los mfis preciados frutos de l a victoria. U n inmenso
y unísono Tc Dezim se entonó de un extremo a otro del Alto Perfi,
para ensalzar al Dios de los EjErcitos que en ,las armas cle la
j~atria, esgrimidas por In capital heroica del virreinato, había
puesto palmas y lauros inmarcwiblcs para l a religión y sus santos
ministros.
"Hubiérase dicho que Buenos Aires cubría Con su manto dc .
glorias las provincias del Alto Perii. Una simple real céduln
había creado el virreinato, ligando con el mero vínculo adminis-
trativo dos pueblos en extremo clifcrentcs y apartados. He aquí
que nace shora entre ellos 1s verdadera iinión.'Un gran suceso
del uno borra los celos de! otro, y con admiración sale entonces
¿ste al encuentro del primero tcndihlole una mano fraternal
y afectuosa. Los anales de la colonia no recordaban todavía un
cmo nnñlogo, en quc hubiese brillado en los hogares &o-peruanos
el entusiasmo de una causa cminentcmcntc nacional. E r a este
el primero, siendo Buenos Aires el portaestandarte de esta causa.
"iLógico encadenamiento de las cosas! La capital no había
jamns llamado sobre s i las miradas en m5s de 25 años de comu-
nidad política. P a r a el peruano de las sierras Buenos Aires e r a
como si no existiese. El no conocía otro centro del gobierno y de
los poderes que la capital de su provincia o la corte de alzada
de Charcas en Chuquisaca. Pero ahora la ciudad cabecera del
Virreinato se prescntaba en expectación ante las encerradas pro-
vincias, y se prescntaba la víspera de ; u n acontecimiento que no
hnbfa de consumarse sino merced a los esfuerzos del proselitismo.
Quedaban fijas hacia ellas las miradas en el momento justo y cabal
en que, a la luz del claro día y al p a s o redoblado, comenzaba ella
instintivamente a subir las eminencias de su gran revolución".
[Luis Paz: Historia general del Alto Pcrzi, Sucrc. 1919, tonlo 1, pág. 630.1

iGiiERIES DA ASILO E N S U PR O V I N C I A Y RINDE HONO-


ES AL ARZOBISPO MOJO Y FRANCOLI, LO QUE L E
VAL10 UNA REPRESION POR PARTE DEL GOBIERNO
CENTRAL.]

a ) [Güemes dispone que el arzobispo h o j ó de viaje a T m m d n ,


sea derivado a Salta.]
"Con fecha 27 del corriente previne al Sargento Mayor de
Ejercito don Manuel Rojas encargado,de la persona del Ilustrí-
simo Señor Arzobispo de los Charcas, que con 61 entrare a esta
ciudad. por los motivos que tengo y le expuse: A su tránsito por
ésa, ruego a V. S., le dispense al dicho Señor Ilustrísimo, a mi
nombre, todas las consideraciones que merece su alta dignidad,
disponiendo luego, siga su marcha a ésta, donde se le harán los
debidos obsequios, sin perjuicio de lo que haya dispuesto el señor
General en Jefe del Ejercito del Perú. i
"Dios guarde a V. S.-muchos años. Salta, 19 de diciembre de
1815. :
Mnrtht Güemes
"Señor Teniente Gobernador de la ~ i b d a dde Jujuy doctor don
Mariano Gordaliza". l

[Archivo Capitular de Jujuy, tomo IV, ptígina 452, publicado por Ricardo
Rojas, Buenos Aires, 1944.1
GÜEMES DOCUMENTADO I 357

b) [Oficio de G.üemes a l prorisor Zabala sobre honores al arzo-


bispo de Charcas y nota de monseñor Jzilidn Toscano.]
"Aunque el señor General en Jefe del Ejército del Períil,
h a dispuesto que el Ilustrisimo señor Arzobispo de las Charcas
pase hasta la Ciudad de T u c u m h , he tenido a bien por j u s h s
consideraciones, y sin perjuicio de las órdenes de dicho señor
general, que entre en esta, ya sea a tomar algún descanso de sus
fatigas, ya sea porque la estaci6n rigurosa de las lluvias y calores
le seria demasiado grave, cuando por otra parte mira este RO-
bierno, con todo respeto, la alta dignidad quc representa.
"Lo comunico a V.S. para que en unión con el ilustre clero,
le dispense el día de su entrada los honores que le competen, y sq
le proporcione y disponga la casa que ha de ocupar y servir de
Palacio. Dios guarde a V.S. muchos años. Salta y diciembre
5 de 1815. Alarfin Güemes. Scñor Provisor Gobernador del Obis-
pado doctor don José Alonso Zavala".
Lo precedente consta en una copia manuscrita (obrante en
N.A.) hecha por el vicario de Salta monseñor J u M n Toscano2,
quien al pie de ella declara reproducir el oficio original "de puño
y letra del general Gfiemes" existente en el archivo del obispado.
y a continuación agrega:
"E1 Excelentísimo señor Arzobispo es el doctor Benito María
MojG y Francoli, muerto al año siguiente de su estadía en Salta,
y cuyos restos fueron sepulbdos en la Catedral. Años después,
el general Giiemes que tan generosa hospitalidad le brindara.
bajaba tambibn a la tumba, vino a descansar a1 lado del ilustre
expatriado, por mucho tiempo, en la misma vieja Catedral".
Como se ve, Güemes, movido por sus profundos sentimientos
religiosos y humanorr, recibió al desventurado arzobispo con todos
los honores que le eran debidos, a pcsar de scr sindicado este
como opuesto a la inclepcndencia americana, y "sin perjuicio
de las órdenes" del general Rondeau.
Sobre el nombrado arzobispo, culpado incluso de haber dis-
pensado de su compromiso a los juramentados de Salta, pueden
consultarse: Alemorias dcl 1)rigadier don José Rondeau, Biblio-
teca de Mayo, tomo 11, pág. 1770 y siguientcs; Don Benito Alaria
de llloj6 Francolí, de Rubén Vargas Ugarte, S. J., Euenos Aires,
1951, en especial el capítulo TV; Ultinios días coloniales en el Alto

1 Se trata del general José Rondeau.


2 Una semblanza de Monseñor Toscano se encilentra en el Coletín
del Instituto de San Felipe y Santiago de Estudios IIistóricos de Salta. tomo
V, nQ 19, pdgina E, donde también figura la lista de los libros de su biblio-
teca, tomo VI, nQ 16, página 84.
Peric, de Gabriel René Moreno, Eiblioteca Boliviana, La Paz (Bo-
livia), 1940. I

C) [El Gobieirto Centrnl reprende a Giicnws.]


"Ale hallo instruido de haber V.S. detenido en esa Ciudad de
Salta al Muy Reverendo Arzobispo de la Plata que con sujeción
a mis órdenes enviaba el General del Ejército Auxiliar a Tucumán
donde debería esperar mis nuevas resoluciones, encargando su
custodia y dirección de las marchas nl Sargento Mayor don &la-
nuel Rojas. Yo no puedo manifestar a V.S. las razones de gravi-
simo interés que hacen necesaria la internación del Muy Reverendo
Arzobispo a estas Provincias pero V. S. debe creer que mis órdenes
relativas n ese objeto no son de puro capricho y que a m i y no a
otro alguno corresponde librarlas. E n esta virtud espero que V.S.
apenas reciba ésta trate de poner al referido Ilustre Prelado a
tlisposición del nominado Sargento Mayor don Manuel Rojas
cualesquiera que sean las prevenciones del general a este respecto.
"Buenos Aires, febrero 18 de 1816.
"Al Gobernador Intendente de la Provincia (le Salta".
[A. C. N., X-6-7-4, Salta, 1814-1818. FotoeopiL en N.A.]

A pesar de la represión Güemes se mantuvo firme en su pro-


ceder, tanto que el arzobispo sigui6 en Salta, rodeado de rcspeto,
hasta su muerte, acaecida "el 11 de abril de 1816. consumido no
tanto por los años, pues s61o contaba 53, cuanto por los trabajos,
intigas y sinsabores, que habían sembrado de espinas y de cruces
su gobierno dc la Iglesia Metropolitans de la Plata.. . Años mas
tarde el Ilustrísimo señor Puch 3, Arzobispo de la Plata, hizo
trasladar sus restos, que hoy se guardan con veneración en la
cripta de la Iglesia del Oratorio de San Felipe Neri de Sucre".
1Rubi.n Vnrgns Ugarte, op. cit., p i ~ 48.1
.

"ste arzobispo que tanibibn fue de la Plata se llamó Pedro de i'uch.


E r a pariente de la familia politica del general Güenies. En el año 1868
s e trasladd a Roma para asistir a l Concilio Vaticano. Cartas privadas
existentes en nuestro Archivo personal nos enteran que habla salido de
su sede el 1 4 de julio de 1868, y quc a su paso por Salta, en su viaje de
ida, era esperado con verdadero alborozo, sabifndose adembs, que había
de ser acompañado en 61, por el obispo diocesano llevando éste al joven
Matíns Linares como su familiar. Nada m i s nos dicen las referidas cartas.
Tan s610 contamos entre nuestros papeles con un ejemplar de l a "Carta
Pastoral" que el Arzobispo Puch hizo imprimir, en Roma en 1870 la que
lleva su firma y la de nIiguel Toborpa como pro-secretario, "datada en
Puerto Ostiende" e1 3 de mayo de ese año de 1870.
ed) [Oficio de Rondeau al Director.]
"Excelentísimo señor.
"Después de mi salida dc Salta, falleció dc un accidente vio-
lento el Muy Reverendo Arzobispo de Charcas don Benito María
Mojó y Francolí. Por su inventario sólo resultaban en existencia
dos mil y tantos pesos que tenía en su poder, pero se hallan por
cien dc documentos que comprueban deudas a su favor de más
de cien mil pesos en los Pueblos dcl Interior. Lo aviso n Vuestra
Excelencia para su conocimiento.
"Dios guarde a Vuestra Excelencia muchos años. Cuartel
General en Jujuy, mayo lQ de 1816.
"Excelentísimo señor
"Jos6 Rondeau
"Excelentísimo Señor Director Interino del Estado".
< {A.C.N., X-4-1-4, Ejército Auxiliar del Perú, 1816. Fotocopia en N.A.]
Otros elementos de juicio atinen& a la catolicidad de Giie-
mes, y a los relevantes méritos de dos arzobispos de Charcas:
Benito María de Mojó y Francoli, que falleció en Salta amparado
por el Gobernador (Güemes), y Pedro de Puch, primo hermano
de Carmen Puch (la esposa de Güemes), que fue quien. aíios
miis tarde, llevó n cabo el traslado de los restos de Mojó, de Salta
a Sucre, donde fueron depositados y reposan en la cripta de la
Iglesia del Oratorio de San Felipe Neri.

HOMILIA QUE PRONUNCIO .EL ILMO. SR. ARZOBISPO DE


LAS CHARCAS DON BENITO MARIA DE AfOJO Y
FRAh7COLI E L DIA 12 DE OCTUBRE DE 1810
NOTA: c o n este documento, dc data post&ior a la Revolución dc Mayo
queda iniciada la "Informaci6n" relativa al arzobispo AIoj6. Con respecto
a su actuación anterior, en particular, y a SU semblanza en general, puede
consuliarse con provecho a Gabriel Rcné Moreno, Ultin~oa días coloniales
eti el Alto Perti, y, con mayor íidedimidad aún, a Rubén Vargns Ugarte.
S.J., Don Benito María dc nl0j6 y Francolí.
HOllllLIA
QUE PRONUNCIO E L Ilmo. S. ARZOEISPO D E LAS.CHAR-
CAS D. BENITO MARIA MOJO Y D E FRANCOLI E L DIA
12 D E OCTUBRE D E 1810, AL TIEMPO D E CERRAR E L
CONCURSO CON QUE FUERON PROMOVIDOS OCHENTA
Y DOS ECLESIASTICOS A LAS PARROQUIAS Y DOCTRI-
XAS D E AQUELLA DIOCESIS. ;
He interrumpido por un momento las sagradas y augustas
ceremonias del más tremendo y amable sacrificio, carisimos her-
manos y cooperadores míos, para hablaros algunas palabras de
paz y de consuelo, antes que os dividáis unos de otros ~aliendo
dc esta Capital, para i r cada uno a aquel lugar de mi vasta
C ~ B I E SDOCUAIEKTADO 361

diócesis, adonde les llama como en otro tiempo a 'Abrahan la voz


del Señor y su divina vocación. Se h a acabado felizmente, gracias
a l cielo, el Concurso a los muchos curatos quc se hallaban vacantes.
Todas las cuales parroquias, todas las doctrinas quedan provishs
de dignos y celosos ministros. Esta dicha tan suspirada, llena
mi corazón de inexplicable júbilo y alborozo; !no sólo porque
veo premiado vuestro mérito y recompensados vuestros servicios,
sino también porque considero que ya no continuardn a herir
mis oídos los tiernos y justos clamores, que millares de feligreses
me dirigían de las provincias lejanas y vecinas, representdndome
que tenían gran necesidad de pan espiritual y que no había quien
s e lo rompiese. Ahora ya se h a sosegado no poco mi agitado
espíritu. Ahora por lo que mira a e s h gravisima solicitud, ya
podré dormir con un sueño tranquilo, porque estoy cierto que
vosotros sabréis descargar en el particular m i conciencia.
Pero no por eso penséis, que sea del todo colmada mi alegría,
pues sabida cosa es que no puede haber, mientras permanecemos
cn el lugar de nuestro destierro; mientras moramos cn un valle
de Ifigrimas, no puede haber, digo, deleite, no puede haber gusto,
a quien no amargue y acibare la espina de alguna aflicción pre-
sente o prevista. iAh! carísimos hermanos míos, demasiado lo
experimento yo ahora en mí mismo. El grande:gozo, de que os
hablaba y que me rcuulta de vuestra presencia y de vuestra jus-
tísima recompensa, pronto, bien pronto se enturbiar&, se deshará
y disipar5 en gran parte por nuestra necesaria separación. E n
breve me ver6 privado de vuestra compníiía, y me quedaré solo,
en un tiempo, en que amenazan tantos peligros; e n un tiempo en
que oigo el rumor sordo no de una sino de muchas y muy terribles
tormentas, en un tiempo en que tantos leones rugen alrededor del
aprisco 5 y que tantos lobos espirituales le ponen asechanzas
para arrebatar, si pudieran, alguiia de mis ovejas. E n un tiempo
tan crítico y de tanto temor habre de gobernar yo solo el timón;
habré de hacer día y noche centinela en las puertas de mi redil.
después de habbrseme arrancado de mi lado tantos ministros de
paz, que con sus auxilios, con su larga experiencia, con sus
consejos y con sus desvelos hubieran podido ayudarme.
Pero no importa, también se separaron los setenta y dos
discípulos, también se dividieron los doce Apóstoles, porque de
otro modo hubieran sido infieles e ingratos al divino llamamiento.
Hagamos pues nosotros a su ejemplo este mismo doloroso sncri-
ficio, por el bien de los fieles que el P a s t o r que apacienta a
Israel a ha puesto bajo nuestra paternal sombra. Id, id, hijos míos,

5 1. Petr., o. 6.
6 Osne., 4, v. 16.
id enhorabuena a desempeñar en beneficio de nuestros prójimos,
las sublimes Y arduas funciones de vuestro ministerio. E S D ~ ~ C ~ O
por las provhcias de mi diócesis, llevando en una mano 61 libro
del Evangelio en que están comprendidos todos los títulos de
nuestra verdadera grandeza y abibrtos todos los caminos de nues-
t r a verdadera felicidad y levantando con la otra el estandarte
de la cruz, que es el Iris que aplaca la cólera del Omnipotente
Y presenta a su vista suavísimos recuerdos; la cruz que es la señal
(le reconciliación de concordia y de amor y que doma los genios
mús feroces, calma las enemist:ides más enconadas, derrama en las
almas el dulce almíbar (le la caridad y reúne los corazones de los
hijos con los de sus padres, y los de unos hermanos con otros ?.-
Id, corrccl, no os detengBis; atravesad las ardientes quebra-
das, trepad por las nevadas cordilleras, entrad en los pueblos y
hablad a los distraídos y afanados ciudadanos, buscad en los lu-
gares solihrios y silenciosos las chozas de los inocentes labra-
dores y la cabaña del sencillo pastor. !No dejéis rincón ni seno
alguno en los campos, en los páramos, en los montes y en las
orillas de los ríos y de las lagunas, que no visitéis. Enseñad a
todos esa celestial bandera que nuestros abuelos vinieron a plan-
t a r en este hermoso continente a costa de la sangre (le sus venas
para que todos sus moradorcs fuésemos animosos soldados de
Cristo; para que abandonando el partido de la impiedad 8 , de la
ira, de la venganza, de la lujuria y dem5s funestas pasiones vo-
mitadas por el infierno, mereciésemos ser alistados en los inven-
cibles batallones de los Angeles y como ellos nos amásemos mutua
y sinceramente miriíndonos todos como miembros de aquella gran
familia a la que presicle el eterno y cariñoso Padre que esta en el
Empíreo. Id, hijos míos, id cuanto antes a perfeccionar esta obra
digna de vosotros. Seréis semejantes a aquellos afortunados co-
lonos de quienes habla el Salmo 125, que andando iban 2, lloraban
arrojando la semilla preciosa. nlas cliando colvla~¿venían con
wgocijo trayendo sus gavillas. ;.Y qué mayor dicha, prerunto,
~ u e c l edisfrutarse? ¿Y qué premio más eminente que éste podía
coronar nuestras apostólicas fatigas y trabajos?
Pero quizá deseáis vosotros que antes de partiros, os diga
yo como Prelado siquiera dos palabras de edificación para lle-
varlas bien grabadas en vuestra memoria. Lo mismo significaron
los Apóstoles a Jesucristo en la tristísima noche de la iiltima cena.
El Salvador del mundo que era la sabiduría (le1 Padre Eeterno, les
predicó entonces aquel admirable sermón que se halla en los pos-
ireros capitulo3 del Evangelio (le San Juan. Mas yo pobre pecador,
1

7 XIalach. c. 4, v. 6.
8 Ad Tit., c. 2, v. 12.
yo indigno sacerdote y pontífice ¿qué podrJ deciros? qué podr;
deciros, carisimos hermanos, sino acordaros con el sagrado Con-
d i o de Trento, que habéis tomado una carga formidable aun para
los hoinbros de los ingeles O, o bien advertiros con San Gregorio
Nacianceno, que gobernar a los hombres es el arte tlc las artes
y la ciencia de las ciencias? Quiere decir: te1 a r t e más difícil y
la ciencia más alta y recóndita lo, o con San Crisóstomo repetiros,
que para resucitar las almas de los prljimos a la vida espiritual.
necesitaréis de gracia abundante, de caridad fervorosa y de no
vulgar sabiduría? ]l.
Y si estos recuerdos os parecieren no tan propios para con-
solaros como para haceros temblar y desalentaros, escuchad otra
sentencia del mismo Santo algo m68 suave. Los sacerdotes, es-
cribe ]', han recibido la comisión de regir y gobernar los hombres,
para grande gloria suya y alabanza, s i atendieren y cuidaren con
la debida diligencia y vigilancia el pueblo de Dios. Y al contrario
para granda riesgo y peligro si fueren omisos ly descuidados.
Escuchad también al melifluo Cernardo. Sabed, dicc l3 joh, Pas-
tores! que según el espíritu de las sagradas escrituras, cada feli-
eresía se llama eitidad, csposa, ovejas. Ciudad por la reunión
de muchos, ovejas por la mansedumbre, esposa por el amor. Mirad
pues por vosotros los que habéis recibido este elevado ministerio:
mirad vuelvo a decir por vosotros y por el precioso clepósito que se
os h a confiado. E s ciudad, desrelaos en su guarda y custodia. E s
csposa; ved como adornarle y engalanarla. Son ovejas, atended
a su pasto. La guarda de vuestra ciudad para que sea suficiente
debe consistir en tres cosas: esto es en defenderla de la violencia
de los espíritus tiranos, (le los ennaííos de los herejes, y de las
tentaciones dc los demonios. El adorno o a h v í o de la esposa,
consiste no en los clijes de oro y plata sino en las joyas riquísimas
de buenas obras y costumbres. Finalmente el pasto que se h a
de distribuir al místico rebaño, es la doctrina de los Apóstoles
y de los Profetas aunque con mucha consideración y prudencia:
pues es conveniente que a los pequeííuelos en Jesucristo, como a
&ros tantos corderillos, se les dé la leche de la exhortación y (le
los blandos consejos; reservanclo para otros m5s robustos el duro
y Aspero alimento del precepto y de la perfección; bien que a
unos y a otros debe el pastor engordarlos incesantemente con
íitiles y oportunos ejemplos; y más pronto con los suyos que con
, los ajenos. Hasta aquí San Cernardo.
Q Sess., 5, c. 1. De Refor.
10 Ornt., 1, n. 31.
11 De Compunct., p. 1, n. 5.
' 2 Ibidem.
13. Serm. 76, in Cnntl.
No puedo yo dcciros otra cosa. E n estas breves cl6usulas os
doy hijos míos, epilogada la doctrina de todos los Santos Padres
antiguos y modernos. Os ruego pues que no olvidéis nunca. Tened
presente, que cura significa cuidado, desvelo, fatiga: que este
' nombre venerable de que todos vosotros estáis adornados. indica
menos el casto ministro del templo, que el padre laborioso del
rebaño, que cuantas veces os oyereis apellidar con este tan dis-
tinguido nombre, otras tantas os debéis humillar en espíritu ante
el divino acatamiento, reconociendo y confesando vuestros deli-
cadisimos deberes y pidiéndole que para desempeñarlos digna-
mente. s c sirva quitaros las entrañas de piedra y sustituir otras
de carne, entrañas de piedad, entrañas de compasión; de modo
que los quc fueren testigos de vuestro cariñoso e infatigable celo,
Ee imaginen que sois unos espíritus bienhechores bajados a. la
tierra desde las regiones de la luz para consolar a los miserables 14.
jDificil empresa, exclamaréis, y muy superior a la flaqueza
humana! Difícil por cierto: ¿quién podría negarlo? Pero todo es
posible para el que cree. Y si para éste, cuánto m6s para el que
ama. Qué no emprender6 en efecto; por cu6les espadas y hogueras
no sc meterá intrépidamente aquel plirroco que retirado en el
santuario oyere salir de lo interior del tabernáculo una voz, la
cual llamándole por su propio nombre como a San Pedro le pre-
gunta; una, dos y tres veces. iAIe anzas? ~ U i l i g i me?
s Si m e amas,
apacienta mis cor,.delos, apacienta n i k ovejas.
14 "No descubro (dice Mr. Tourneur en la traducción francesa de las
noches de Young y de las meditaciones de Hervey), no descubro dignidad
más tierna y respetable que la de un cura que va a sepultar una razón
santa, y un corazón sensible cntrc el corto ndmero de unas tristes cabañas.
Allí fija el domicilio de su vida y adopta esa apreciable cuanto rústica
familia de labradores y pastores. Se complace con ellos como u n padre
con sus hijos. Los une en los días destinados, para hablarles del Dios
que fecunda el campo y multiplica los animales necesarios para nuestro
uso y recreo. E l piadoso cura les hace contemplar los dones de toda especie
de que están rodeados. Se proporciona a su corta inteligencia explichioles
en sencillo l c n y n j e los principios sublimes y nb~tractosdc l a religión y la
moral; les enseña a estimar su tranquilo estado y a no envidiar las agitadas
fortunas de las ciudades y villas. De su escasa renta y de las obligaciones
del rico forma un pequeño y perenne tesoro para socorrer al pobre. Asiste
a sus inocentes fiestas y toma parte en s u júbilo campestre. Los alivia y
consuela en la aflicción que causan los males y desgracias. Regocija por
muchos días a l a tierna madre tomando e n los brazos y acariciando por
un momento al dulce infante que pende de su scno. Alienta al joven
robusto para que trabaje mostriindole al padre decrépito y encorvado para
quien ha llegado ya el tiempo de reposar. Se pasea con el anciano en la
estación de los días serenos y tcniplndos, se sienta con él junto a un arroyo
y le habla plácidamente de la muerte y de la resurrección debajo del viejo
árbol que reverdc-te. Quita al n~oribundoel horror del sepulcro y lo acerca
dulcemente al deseado tbrmino de sus enfermedades, dolores Y fatigas.
iDifícil empresa! Pero por eso os encargo que no la ficis
d e vuestras propias fuerzas, sino de la gracia del Señor implo-
rada en la oración. La oración es el más firme apoyo de un sacer-
dote. Por hábil piloto que seas, dice el ya tantas veces citado San
Juan Crisóstomo Is. Si en medio de las olas de este pérfido piélago
no invocareis a menudo a Dios, cuando menos lo pensares y cuando
el horizonte te pareciere más sereno y de mejor cariz, ser& so-
brecogido de algún furioso huracán que envolverá a la navecilla
y a los navegantes y los sumergerií en lo hondo. La oración del
sacerdote todo lo alcanza. No se Aagn otra cosa sino orar. excla-
maba Judith delante de Achior y demds príncipes de la desolada
Betulia l a y venceremos al soberbio Holofernes.
La oración es igualmente provechosa al sacerdote en el
ocio y en el negocio. E n aquél su alma concibe llamas de caridad
hacia el prójimo y hacia Dios. E n éste después de una oración
de fuego, quedan todavía en su corazón las cenizas ardientes de
la piedad, con las que todas las acciones y ocupaciones se pro-
mueven, encaminan y fenecen sin que la virtud sufra el menor
tropiezo 17. La oración no permite al párroco que se ensoberbezca
o engría por lo mucho que ha trabajado en la custodia, instruc-
ción y defensa de su grey; antes bien hace que en todas cosas
busque no la voluntad propia sino la utilidad de su Señor; que
a él sólo sea fiel y que para él sólo trabaje lS. Un párroco vir-
tuoso y acostumbrado a la oración al levantarse del confesionario
donde tal vez habrd permanecido sentado cinco o más horas con-
tinuas; a1 bajar del púlpito desde donde habrá hecho que sus
desengañados oyentes se resolviesen todos en lágrimas de verda-
dera compunción; al volver de asistir a un moribundo que exhala
los últimos alientos en el desierto sobre un poco de paja, para
lo cual le ha sido preciso dejar la cama a media noche en el
rigor del invierno y caminar muchas leguas por campos helados.
este digno ministro de la nueva alianza, repito, olvidado absolu-
tamente del tesoro de merecimientos que acaba de juntar con una
acción tan heroica y alegre solamente de haber allanado n un PO-
t r e salvaje la entrada del sepulcro y haber derramado en los
corazones de algunos envejecidos y vacilantes penitentes el suave
brílsamo de la esperanza cristiana, va a postrarse a los pies del
Crucificado, baja hasta el suelo su respetable frente bañada del
sudor apostólico, le dice con toda la efusión de su alma: No a mi,
Seiíor, no a m i sin0.a Tzi nombre dad gloria 19. A mí, miserable
15 IIomil. 1, in epist. nd Tit.
18 Judith, c. 8, v. 83.
17 Stimulus Pastomm, e. 4.
18 Bernard. serm. ad Pastores, n. 2.
ID Psalm.. 118, v. 1.
dadmc9perdón, dadme gracia, la gloria reservada para vos sólo,
pues de vos dimana el perdón de los pecados y la gracia de los
méritos. . : ..L. ,
m2 G4
Pero ya es tiempo hijos míos, q u e os despida a todos con
.- mi paternal bendición y vuelva a proseguir, la mística liturgia
que había interrumpido para dirigiros este breve discurso. E l
Lngel del Señor os acompañe en vuestro camino 20; y esa inma-
culada Virgen de Guadalupe, a quien hemos invocado tantas
veces y que se ha dignado tomar una parte activa en el feliz
Gxito de este numerosisimo concurso, os cubra con su maternal
manto. Cuando llegareis a vuestras parroquias o doctrinas, sa-
ludad y dad el ósculo santo en mi nombre a mis queridos feli-
greses. Aseguradles que día y noche los llevo en el corazón. De-
cidles, como dijo el Salvador de sus discípulos 21, que ellos son
mi madre, mi padre, mis hermanos, mis hermanas y mis ami-
gos. Repetid muchas veces al rico y al pobre, al noble y al plebeyo,
a l anciano y al joven, al español y a l indio, que les encargo y
pido muy de veras, que cada día se estrechen mbs y miis con los
lazos de una sinccra caridad; que se sufran los unos a los otros
y perdonan mutuamente, si alguno tiene queja del otro: así como
el Señor nos condona a todos?-; desterrad de vuestras feligre-
sías la insubordinación y libertinaje,: igualmente proscripto por
la verdadera política que por la Santa Religión. No consintáis
que se haga en ellas ningún caso de la maligna distinción de
criollos Y europeos: distinción contraria a las leyes Y a 13 hu-
manidad; distinción blrbara, injustísima, funesthma, y que el
diabólico espíritu de discordia se esfuerza a acreditar en el día
para ruina Üniversal de este bellísimo continente, que puede con
el tiempo ser el mbs dichoso país del orbe. Por Último, hijos míos,
sed vosotros como verdes y fecundas olivas en la casa del Señor 23;
el aceite que alumbra, apacienta y vigoriza los miembros can-
~ a d o s .Así también vosotros alumbrad a vuestras ovejas con la
doctrina; apacentadlas con el ejemplo y fomentadlas siempre
que lo necesitaren, con la limosna21 Y cualquier cosa que ha-
,zGs sea de palabra o de obra, hacedlo todo en cl nombre de
Xuestro Señor Jesucristo, dando gracias por El a Dios y Pa-
dre z5. Amén.
Tipografía de Chuquisaca.
Año de 1835.
20 Tobíns, 8, v. 37.
21 n ~ ~ t h12,. , V. 60. I
22 Eqfst. nd Celoss., cnp. 3, v. 13.
23 Psnlm., 61, v. 8. I

24 A u y s t . serm., 40 nd frntres oropt.


25 Ad. Coloss., c. 3, v. 17.
APARTADO 11

ALGUNOS PARRAFOS DE LA Y A CITADA OBRA DE RU-


REN VARGAS UGAR!i% S. J., DON EENITO RIARIA D E
MOJO Y D E FRANCOLI, ARZOBISPO D E CHARCAS, BUE-
NOS AIRES, 1931.
NOTA: En los pocos renglones aquí trnnseriptos s e comprende una serie
de sucesos que constituyen el encundrnmiento de los temas que so abordan
en esta ocasibn.

l'ágs. 44 y 45: !
"Desde Chuquisaca, dio orden Rondeau de que se le condu-
jese desterrado a Salta y Arenales, a quien el mismo Mojó lla-
maba su capital enemigo, no fue lerdo en ejecutarla. No hemos
visto que se diera razón de este atentado y a s í no cabe expli-
carlo de otra manera que por la voluntad del jefe argentino y
la natural prevención contra un prelado de la influencia y acri-
solada lealtad de Mojó. Dos circunstancias sin embargo, pusie-
ron una nota de crueldad en el hecho, una fue la de no guardarle
durante el viaje las consideraciones debidas a su alta dignidad
y a sus años, amargando aún mds las penalidades del mismo
con la presencia de un eclesiástico indigno, que no tuvo a men-
gua el servir de guardia de vista a su propio pastor. La otra
fue negarle la entrada en Chuquisaca, habicndó pasado casi a
R U vista y hecho instancias su Cabildo para que se le concediese
csta gracia. Sin duda influyó en esta medida el temor, cierta-
niente fundado, de que su presencia causase alguna aitcración
cn el pueblo, todavía muy afecto a su Pastor y algo distanciado
de los argentinos por la inconsiderada conducta del coronel don
hIartin Rodriguez. !
"Hubo pues de continuar su larga peregrinación hasta Salta,
aprovechando un descanso en Caiza para escribir aquella her-
mosa carta a los americanos, que es juntamente serena vindica-
ción de su conducta y sentido adiós de despedida. E n su lugar
; de destierro vino a consolar sus últimos días la presencia de su
: teólogo de ciimara, el virtuoso Prepósito del Oratorio de Chu-
quisaca, don Agustin Francisco de Otondo, hijo primogénito del
' RIarqués de Otavi, que desde fines de 1813, por lo menos, le
había acompañado en la visita pastoral. E n sus brazos expiraba
el 11 de abril de 1816, consumido no tanto por los años, pues
6610 contaba 53, cuanto por los trabajos, fatigas y sinsabores,
que habían sembrado de espinas y de cruces su gobierno de la
Iglesia Metropolitana d e la Plata. !
368 LUIS G U E ~ I E S

" El 25 de noviembre de 1816, sulvieja Catedral celebró so-


lemnes exequias, honrando su memoria y el Canónigo magistral,
don José Mariano Roncal, pronunció la oración fúnebre del ilus-
tre prelado. Años más tarde el Illmo. señor Puch, Arzobispo de
In Plata, hizo ,trasladar sus restos, que hoy se guardan.con ve-
neración en la c r i p h de la Iglesia del Oratorio de San Felipe
Neri de Sucre".

APARTADO 111

" C A R T A A LOS AIIIERICAhrOS, E S C R I T A CAIIIINO DEL


DESTIERRO". POR EL ARZOBISPO MOJO. EN C A I Z A , EL
18 DE. SETIÉIIIBRE DE 1815, tombda igitaimente de la obra
de Vargas Ugarte v a citado y que pxblicd el Instituto de Znves-
tigaeiones Histdricas de Ea F'acxltad de Filosofia y Letras de la
Universidad de Buenos Aires, bajo el ntímero LVI.
!
NOTA: Lns aseveraciones que se consignan en esta cartn se ajustan a la
m i s estricta verdad. Son la expresi6n espontzínen y fehaciente del sentir
lntimo del arzobispo Moj6. íIase difundido' una aviesa especie de que ella
habría sido redactada de acuerdo a un temario impuesto por el general
Rondeau. En dos de los apartados siguientes se demuestra 18 falsedad
de tal infundio.
N'? 7.-Cnrtn a los Americanos, escrita camino del destierro.
(18 de setiembre de 1815)
Americanos: Doce años hace que impelido yo de mi sincero
y tierno amor hacia vosotros como de una brisa fresca y suave,
m e separé de Ias costas de Cataluña y perdí de vista las delicio-
sas riberas del río Scgre, donde mis ojos se habían abierto e n
la cuna a los primeras rayos de luz y dirigiendo hacia este vasto
y lejano continente la proa del débil ,bergantin que m e conducía.
m e engolfé por los terribles senos del Océano Atlántico y dejé
m u y atrás, no sólo o. todos mis paisanos. a todos mis parientes
y a todos mis amigos, sino también a las más dulces esperanzas
con que hasta entonces m e había lisonjeado m i brillante carre-
ra. Pocos días después la costa de Cantabria, famosa en todos
tiempos por tantos naufragios m e recibió con u n furioso hura-
c h : y nuevo yo e inexperto e n los riesgos del mar. miraba con
impbnderable susto mi'vida fluctuante-y como suspendida en-
t r e enormes masas negras y amotinadas nubes y embravecidas
olas; miraba crecer por momentos; la rabia del sonoroso Sur,
sentía rozarse a cada paso la quilla I del frágil leño con los ocul-
tos bajíos cubiertos de blanca espuma y lo veía arrastrado por
las fuerzas irresistibles de las corrientes hacia los levantados
peñascos de la costa, que parecían con sus agudísimas puntas
de diamante para estrellarlo y hacerlo pedazos. Sin embargo
- - el biilsamo de un santo consuelo
de tantos horrores Y nelinros.
bañaba interiormen<e mi corazón prometiéndome 'que en breve lo-
araría
- la a~etecidadicha de estrecharos en mi: naternal necho.
sosegóal cabo de quince días la tormenta, y-desemba<cando
yo en el puerto de Veracruz, apenas puse el pie en la orilla, besé
una y mil veces el suelo americano y saludé cariñosamente a
la América, llamada mi segunda y dulce Patria. No tardó con
Iodo en acibarárseme este júbilo, pues la experiencia que iba nd-
quiriendo, me hizo luego conocer, que esta hermosa porción del
globo sufría grandes y acerbos males. Entonces tomé la pluma
en su defensa, y pasé muchos días y noches escribiendo los
dos gruesos volúmenes de las Cartas iilejicanas. El amor y
celo por los intereses de la América me sobrepusieron a todas
las consideraciones de la carne y de la sangre, en una epoca en
que a causa de las intrigas y colosal poder del privado Godoy,
temblaba de continuo toda la monarquía con las desoladoras
ondulaciones de la arbitmriedad. Si; en tal alevosa época, sin
arredrarme ni detenerme un punto, levanté yo el velo que por
muchos años habia abrigado debajo de impenetrables tinieblas,
la larga y pesada cadena de tantos desórdenes, de tan impolíti-
cos desaciertos y de no pocos insultos y crímenes. E n aquella
temerosa época, me resolví a hablar de los sagrados y verdade-
ros derechos del hombre, pintando con vivos colores el no me-
recido abatimiento en que yacían estos palses y formado el me-
lancólico cuadro de las excesivas trabas de su Comercio, de sus
talleres rotos, de su agricultura desmayada. Me atreví a er-
clamar que ya era tiempo de que el gobierno español quitase
todos esos diques y amarras y que una vez que las luces de nues-
tro siglo nos hacían reconocer en el rígido tribunal de nuestra
conciencia que la América no era una colonia, sino una parto
integrante de la monarquía y que los americanos eran iguales en
todo a los demás espaiioles y por lo mismo, la probidad y buena
fe, inseparables de un carzícter noble, nos debían ob1igar.a que
publiciiscmos a la faz del mundo entero tan consolante verdad.
Por último habiendo pasado a Lima y logrado allí algunas
semanas de ocio, añadí a las referidas Cartas JIejicanas, un
eopioso Sztplemento, con el nombre de Cartas Perzianas y fir-
mándolas de mi propia mano, remití unas y otras a la Corte de
Madrid con una pingüe letra de cambio y con una orden estre-
cha a mi apoderado para que no omitiese diligencia alguna, a
fin de que cuanto antes se imprimiesen.
Cuando, pues, yo daba a la América tan relevantes pruebas
de mi amor; cuando esto pensaba; cuando esto escribía y cuando
. .
esto ordenaba.. ;Ay!, jamados americanos!. .. cleciclme, os rue-
~ o ¿podía
, presentir o tenía el m k leve motivo de imaginar que
llegaría un día en que se me tuviese por desafecto y aun por
enemigo vuestro? ¿ y que amanecería :un .día, en que la maligna
trompeta de la calumnia comunicando cuerpo poco a poco a este
vago rumor, aunque contradecido por unos hechos t a n notorios e
intergiversables, le extendería, no sé clmo, por ambas mlírgenes
del majestuoso Río de la Plata? y, sobre todo, ;podía o debía
recelar, que. dado caso que se propagase un día tan infundado
rumor, había de encontrar acogida entre los pueblos que mo-
r a n en las expresadas riberas? N o , americanos, no podía yo
recelarlo, no podía imaginarlo, no debía de ningún modo creerlo.
Pero no s610 en esto se funda mi isombro: tened un rato de
paciencia: dejad que os recuerde otras pruebas del mhs entra-
fiable cariño y permitidme, que cual Padre tierno desahogue con
vosotros mi corazón y me queje de no verme correspondido co-
mo esperaba y merecía. Podía, pregunto, ;podía sospechar que
se me tendría por enemigo vuestro, cuando desde Chuquisaca
erigía con mi pluma un trofeo a vuestros ciudadanos, que glo-
riosamente triunfaron de Whiteloke? ¿Podía sospecharlo cuando
en mis escritos públicos celebraba con tanto entusiasmo el que
con la completa derrota de vuestros enemigos, se hubiese al fin
decidido el orgulloso problema de: si: para vencer a cinco gue-
rreros americanos, bastaba un solo guerrero europeo? ¿Podía
sospecharlo cuando enviaba 8.000 pesos a Buenos Aires para
socorrer la orfandad de algunos niños pobrcs, cuyos padres ha-
'bían expirado como héroes, cubiertos (le heridas en aquella fa-
mosa lucha?
¿Podía sospecharlo, cuando a1 principio (le la revolución me
ofrecía a pagar y en efecto pagaba todas las deudas de m6s de
cien bizarros militares, ciudadanos vuestros, a quienes un ge-
-neral había condenado, con inhumano pretexto, al socavón de
Potosí? ;Podía sospecharlo, cuando delante de uno de los re-
presentantes de vuestro Supremo Gobierno pronunciaba la
Ifomilía, que fue para mí un manantial de disgustos y perse-
cuciones y cuando por razón clc dicha Homilía me veía tan
atrozmente calumniado en algunos periódicos (le Lima, que ha-
hlaban (le mi paternal amor hacia vosotros y (le mi sincero
deseo de reconciliación y de paz, como de una infidencia, como
dc una grave deslealtacl, como de una verdadera traición? ¿Po-
-<líasospechar quc algún día se me había de tener por enemigo
vuestro, cuando despuCs de la derrota de Huaqui, repartí a vues-
tros desgraciados militares ingcntcs caudales para que pudiesen
,retirarse con alguna comodiclacl a sus homrcs? ¿Podía sospe-
GUEAIES DOCUXIENTADO 871

char que se me tendría en algún tiempo por enemigo de la


América, cuando a deiciséis de vuestros hermanos, hechos pri-
sioneros por el general Goyeneche y condenados a entrar en
capilla a1 día siguiente, a costa cle porfiados ruegos, (le muchas
IGgrimas y de no pocas humillaciones, los liberté del último
suplicio y yo mismo, trasladdndome en hibito de ceremonia a
sus hediondos calabozos les quitaba con mis propias manos las
cadenas y grillos con que estaban aherrojados? 10 podia tam-
poco sospecharlo; cuando a los oficiales que quedaron prisio-
neros en Vilcapugio lea socorría con dinero y caballerías; o
cuando a los prisioneros heridos y enfermos que se condujeron
al hospital de Oruro, después de la batalla de Ayohúma, los vi-
sitaba personalmente dos veces al día, los consolaba, los halagaba,
asistía a su curación, cubría su desnudez y les proporcionaba
todo género de auxilios?
iAh, americanos! i Quién me dijera entonces que estas y otras
muchas cariñosas demostraciones de que t m t o se murmuró en
el cuartel general del señor Pezuela, las borraríais muy presto
os otros de vuestra memoria y daríais asenso a los que os dije-
ren quc yo cra vuestro enemigo? ¿Quién mc pronosticara.. .
1)ero para qué es cansarme y cansaros? Preguntad, si gustSis,
a tantas familias de patriotas cochabambinos, a quienes en
estos Últimos tres años he servido de tutor, de consolador y de
liadre, a estas familias anegadas en el llanto y en la miseria; a
o s h s familias, finalmente, que sin mis prontos socorros por
ventura hubieran ya perecido. Me sería fficil formar aquí una
prolija lista de sus apellidos. Mas esto empañaría en mi con-
cepto el lustre de una acción inspirada por la caridad evangélica.
Porque si el hombre compasivo y humano no debe pretender
miis premio de sus buenas acciones que la satisfacción interior
de haberlas ejecutndo, mucho menos, cicrtarnente, debe aspirar
a otra recompensa un Prelado de la Iglesia Católica. Pero ro-
sotros. joh! americanos, examinad, si os parece, una por una a
aquellas honradas e infelices familias y sólo dcspués de haber-
las oído. sentenciad sobre las calumnias que la fama h a cspar-
rido recientemente contra mi conducta en el particular.
Os hablo con grande confianza, como un padre a sus hijos.
¿Y de que otro estilo debo usar. sosteniéndome como una firme
Ancora en medio dc la desecha tempestad que me rodea, el tcs-
timonio de mi recta e inocente conciencia? L D qué ~ otro estilo
debo usar cuando este incorruptible testimonio-me da ardi-
miento para deciros, como San Pablo decía a sus amados Corin-
tios: A nadie hemos hecho injuria, n. nadie hemos pervertido, n
nadie hemos engañado (Ep. 2, Cap. 7). De quE otro estilo debo.
usar, cuando este mismo testimonio me autoriza a decir, sin la
menor exageración, que est5is en nuestros corazoncs para mo-
r i r o para vivir juntamente (Cap. V). Así es, así es, ioh! ameri-
canos, lo h e dicho muchas veces y lo repito aquí con la m5s viva
complacencia. Desde que la sagrada voz de la obediencia y la
mano invisible del Omnipotente me condujo a este vuestro país,
os h e mirado y tratado siempre como a mis hermanos, como a
mis amigos, como a mis hijos, como gozo y corona de mi Mi-
nisterio y como a compañeros de mi suerte próspera o adversa.
N i patria Cataluña no puede seguramente ofenderse de que
dé a este suelo y a vosotros una prefercncia que In razón dicta,
que la Religión manda y que exigen la gratitud y el honor. Dulce
y justísima preferencia que el ejemplo de tantos y tan santos
Obispos, pone a cubierto de todos los sofismas de una mal en-
tendida política: dulce y justisima prefercncia, sin la que me
sería imposible agradar a Dios, pues él fue sin duda, quien
me obligó a dejar mi amada patria. El fue, sin duda, quien
despufs de mis dilitados viajes por la Italia y la Francia. me
intimó por el órgano de mis superiores que saliese de mi tierra
y de mi parentela y de la casa de mi p a d r e y viniese a la tie-
rra que me mostraría (Génesis, Cap. 1). Ved, pues, joh! ameri-
canos, lo que me mueve a hablaros con tmLz seguridad y friin-
queza. Ved lo que me tiene todavla en pie contra los repetidos
golpes de tan contraria fortuna. Ved también por qué estoy
lleno de consuelo y abundo sobre manera de gozo en la presente
tribulación (Ep. a los Corintios, Cap. 7). Y ved, por último que
si alguno de vosotros desconfía aún de mi afecto, tengo derecho de
nplicarlcs aquella sentencia del Apóstol: Pueblos, nuestra boca
abierta está para vosotros, nuestro corazbn se h a dilatado. No
írst6is estrechos en nosotros (Ibicl, Cap. 6 ) , mas estáis estrechos
en nuestras entrañas.
Pero ya conozco que muchos quizlí t e n d r h reparo a rendirse
:i tan grandes protestaciones: porque insistirán en que la fama
11%publicado por todos esos pueblos que yo había arrojado el
rayo terrible de la excomunibn contra vuestro ejército; que yo
había mandado a mis curas, que tomasen un grado y uniforme
militar y empuñasen las armas contra vosotros y, finalmente,
que a los militares prisioneros en la memorable jornada de Salta,
les había relajado yo el juramento que prestaron de no pelear
contra vosotros. Esto acaso d i r h muchos, como sé que lo han
dicho antes de ahora. Pero a la manera que los oscuros y api-
ñados celajes del Oriente se disipan fácilmente con los primeros
rayos del sol, así podría yo vibrando el invencible dardo que me
ofrece la verdad y la inocencia, desvanecer en un instante todas
estas negras acusaciones con solas estas palabras: E s falso no
lo h e hecho. E n efecto, con ellas solas quedarían arredrados to-
dos mis enemigos; y unos se compadecerían de lo mucho que he
sufrido, otros, aunque sin compadecerme, no dejarían de admi-
r a r mi fortaleza y constancia; y otros, que serían los m6s, se
llenarían de confusión y de rubor. Estos últimos en vano apela-
rían a sus artificiosos sofismas: porque los sofismas de nada
sirven para apoyar la mentira contra unos hechos que de su
naturaleza han de ser públicos y notorios. Podría, pues, aquí d a r
fin a este manifiesto.
Sin embargo, considerando, j oh ! americanos, lo que os debo,
lo que os respeto y lo que os amo, quiero añadir otras dos líneas
para vuestra completa satisfacción. Decís vosotros, o más bien,
dicen algunos de vosotros, que aquellas especies las ha publi-
cado la fama en varias partes, que las han oído referir por las
calles y plazas y que no pueden darse a entender que todo sea
detracción y czzlumnia. Esto dirán ellos y lo quo yo respondo
es lo siguiente: ¿no veis en primer lugar, que a las tales espe-
cies las contradice mi nacimiento, las contradice mi educación,
las contradice mi carrera, las contradice mi carácter, las con-
tradicen mis principios que han servido constantemente de re-
gla a mi conducta pública y que por consiguiente son estas acu-
saciones del todo infundadas e improbables? ¿Pensáis que un
hombre a quien ha cabido una regular cuna, un hombre que h a
recibido de la naturaleza un corazón sensible y generoso, sea
cruel y desagradecido? iPretend6is que un viajero, que h a vi-
sitado y observado a muchas y muy diversas naciones, se forme
unas ideas Lzn extravagantes y tan ajenas de la útil y verdadera
política? ¿Os imagináis que quien ha encanecido sobre los in-
mortales escritos de los antiguos filósofos, oradores, historia-
dores y poetas griegos y romanos, se haya formado con esta
lectura un cardcter inhumano y feroz? Por último, jquereis
que este tal ignore que las guerras civiles son semejantes a las
oscuras tormentas del otoño cuando revientan de dos resonan-
tes y opuestos cerros, y que en tal confusión y estruendo mil
y mil razones obligan al que representa en la sociedad la per-
sona de Padre y Pastor, por mucho que admire y aprecie las
hazañas militares, a no aconsejar ni predicar otra cosa que paz,
concordia y unión? ¿Creeréis que sea posible que quien sostiene
en la sociedad tan a u g u s h representación mire con ánimo frío
y enjutos ojos a sus propios hijos y ovejas envueltos en un ter-
; bellino de fuego y de sangre y que El mismo eche leña para que
cobre m5s fuerzas la hoguera, él mismo suministre, puñales a los
combatientes, para que se abran nuevas y m6s mortales heridas?
E n segundo lugar, jno hacéis reflexión al tiempo en que na-
cieron y formaron cuerpo aquellas acusaciones e imposturas,
esto es, en un tiempo que nos separaba una densa e impenetra-
374 LUIS GUEBIES
%

Lle niebla, de modo que ni vosotros podíais saber a punto fijo


qué parte o qué lugar circunscribía mi existencia y mucho me-
nos cuSles eran mis pensamientos y opcracionis; ni yo podía
alcanzar a ver ni nun a rastrear lo que realmente pasaba entre
vosotros? ¿Y dejaríais de confesar, que por lo mismo exige la
honrada y buena fe, que ni vosotros ni yo demos crEdito n las
hablillas que corrieron entonces entre tan grandes tinieblas?
No reparbis, en tercer lugar, que la fama, la fama sola, va-
liéndose de aquella oscuridad y niebla, fue la que tramó tan atro-
ces acusaciones; la fama, digo, que se complace en contar así lo
que sabe como lo que no sabe, así lo vcr<ladcro como lo falso, así
lo probable como lo improbable; Ia fama, repito, esto es lo cosa
nihs incierta, más ligera y mhs vacilante; la fama, finalmente,
de quien tan poco caso hacen los hombres prudentes y los gra-
ves filósofos y a quien los más sensatos e ilustres poetas p i n h n
como una furia vomitada del infierno, como una compafiera in-
separable de la alLmera discordia, como un monstruo, en fin,
enorme y horroroso, todo cubierto (le ojos, de boca, (le lengua
y <leorejas (Eneida, Lib. 1).
Pero si estas reflexiones les pareciesen a algunos que no tic-
nen bastante fuerza, repetiré resueltamente lo mismo que decía
poco ha: que nada he hecho de lo que se me imputa p que a la
faz de toda la América y del mundo entero le requiero y le con-
vido a que me desmienta en juicio y fuera de él, en el modo que
ivejor le convinierc. Mas dejémosle estar; que si él fuerc mode-
rado y humano quedar5 suficientemente convencido con lo ex-
puesto y si al contrario, fuere malicioso p ma16vol0, ningunas
razones serían suficientes para disuadirlo. Cierro, pues, yn el
presente manifiesto.
Pueblos de la América, este escrito os presenta el fiel retrato
rlc mi alma y de mi conducta. Luego que saltó en mi cliócesis
la primera centella de la guerra civil que cinco años h a abrasado
estas hermosas provincias, busqué entre los Prelados más res-
petables de la Iglesia Católica, uno que me sirviese de g u h en
t a n estrechos apuros y lo hall6 en el incomparable Fenelón. Me
lisonjeo que mis operaciones no desdicen de tan excelente Y
amable modelo. Pueblos de la América: m i corazón os habla
y no el vil y rastrero temor indigmo de un sacerdote. Un sacer-
dote penetrado del espíritu de su Redentor no teme, no huye
de los trabajos, no se abatc: con el Evangelio abierto en ln mano
y con la confianza arraigada en el pecho se sienta sereno a l pie
o cn In cima del volcAn. sin asustarse de sua bramidos, de sus
tcmblorcs y del hiimo que llenan de azufre y m c h l clerretido,
m e lo cercan por toclas partes. Un verdaclero y humilde sacer-
<lote puede desafiar la aclrersn fortuna con mucha mayor paz
y serenidad que Aristides, cuando salia desterrado de Atenas,
cuando miraba desangrarse todas las venas de su cucrpo o Só-
crates, cuando rodeado de sus discipulos bebía la fatal cicuta.
Pueblos del Sur, entregad a las llamas este escrito o ,arrojadlo
a las ondas del profundo río quc baña vuestros hogares, si Ile-
gáis a conocer que el pavoroso temor y no el ingenuo y entra-
fiable cariño es quicn ha prestado a mi pluma sus expresiones
débiles o enkrgicas, elocuentes o triviales, que esto poco o nada
importa. Caiza, 18 de setiembre dc 1815. Benito filaría, Arzo-
bispo.

APARTADO I\' I

SOBRE LA AUTOEIOGRAFIA ATRIBUIDA A RONDEAU.


(Publicada en la Biblioteca dc Mayo, tonto II, páginas 1719 a
1842 y con anterionXad, cn Joa6 Artiiro Scotto, Notas biogr8ficas.
tomo 11, páginas 147 a 298).
NOTA: De la publicación de Scotto se copia la parte pertinente de dicha
"autobio~rafia" en lo respectivo a nIoj6, con más la nota puesta in jine
obre cómo esas 1I.Iemorins fueron publicadas por primera vez encabezadas
por Andrés Lamas en el Comercio del Plata, fundado por Florencio Varela
(número del 13 de noviembre a 27 de diciembre de .1849) y también una
carta que dirigieron a Valentín Alsina dos hijas de Rondeau (19 de no-
viembre de 1849) n raíz de csa publicación, manifestando extrañeza de que
los manuscritos del padre que ellas habían prestado a XIitre aparecieran
como pertenecientes en propiedad, a esc historiador por: do?tación directa
del propio Rondeau, al decir de Lamas. Las remitentes de la cartn a
Alsina se mostraban perplejas: ellas no podían decirse a sí mismas, si lo
que veniase publicando bajo el patrocinio de Lomas coincidía o diferia
del documento original do que se habían desprendido generosamente pero
con caricter precario, con cargo de devolución. E n el nfuseo Mitre tan
sólo se conserva una copia manuscrita de la autobiografía de Rondeau, y,
para colmo, incompleta. Los originales, cupo tcxto y extensión se deseo-
nacen, brillan por su ausencia.
Una de mis primeras atenciones, luego que e i t r é en aquella
ciudad, fue proveer de jueces civiles a aquellos pueblos (y aún
en nlgiinos constituir autoridades militares), habiendo fugado
loa que tenían esos cargos a nombre del Rey, como que eran ene-
migos, a la aproximación del ejercito patrio; fueron muchos los
avisos que recibí, de los nuevos mandatarios patriotas decididos
y también de algunos curas, sobre lo perjudicial que era a la causa
de la Independencia, la permanencia en la ciudad ¿ie Charcas de
SU arzobispo don Benito María Mojó y Francolí, porque predi-
caba abiertamente contra ella, y amenazaba con rigurosa pena n .
los que la siguieran. Recuerdo en este momento, que uno de los
más graves hechos de que era acusado, para probar lo enemigo
que era de nuestro sistema, fue el haber relajado o levantado
a los oficiales y tropa del ejército de línea el juramento que pres-
taron en Salta cuando fueron batidos por el general Belgrano.
declar6ndoles expeditos para volver a tomar las armas contra las
Provincias Unidas.
En fuerza pues do tantas acriminacioncs contra. el dicho
prelado, resolví hacerlo salir de su diócesis y remitirlo a Buenos
Aires, porque de esta medida resultaba que ganaría la justicia
de la causa americana y para que se efectuase, nombré a un jefe
del ejército, el cual con una escolta, marchó a Chuquisaca a traer
u mi presencia al señor arzobispo. ¿Cuántas no serían y fueron
rus alegaciones para no ponerse en camino? Y la más especial
fue, la de que se hallaba enfermo, de modo que obligó al jefe co-
misionado a suspender todo procedimiento y darme cuenta por
un expreso, del mal estado de salud, de S.R. para ponerse en
marcha, a más de otros motivos que también pretextaba; le con-
testé manifestlindole mi extrañeza por haberse dejado sorpren-
der y reiterhdole el cumplimiento de lo mandado, sin admitirle
más excusación, dejando en el arbitrio del señor Mojó, el modo
como quisiera viajar; y para el caso de dificultarlo, que le acer-
case una silla de posta de dos manos y que a hombros de los na-
turales, relevándose en los pueblos o haciendas del tránsito, le
insinuase la salida de grado o por la fuerza; así debió de ser,
porque ya no hizo réplica, pues el magistrado eclesiástico lleg6
a los pocos días a un pueblo inmediato a Potosí, a donde previne
sr detuviese, porque 61 mismo solicitó descansar en aquel lugar;
fue enseguida el mayor general Cruz a saludarle en mi nombre
y advertirle que estaba decretada la continuación de su viaje
hasta la capital de Buenos Aires, porque así lo exigía el interks
público y la quietud de los americanos de aquellas provincias:
que en esta inteligencia se preparase para la marcha, manifes-
tando los días que necesitaba detenerse en el punto en que ac-
tualmente se hallaba, para su apresto.
Esta intimación fue un golpe mortal para su S.S.I.; ex-
clamó, suplicó, haciendo mérito de cuanto había hecho (como dijo
nl señor Cruz) en favor de la América antes de la Epoca de la
revoluci6n; y últimamente que era liberal por principios, ofre-
ciendo enseguida dar un manifiesto en el que lo acreditaría: es
preciso creer que nos reputaba hombres estúpidos, pretendiendo
el señor arzobispo que le creyésemos que abrigaba sentimientos
rrpublicanos, tal vez quedaba persuadido que por sólo su palabra,
quedaría sin efecto la resolución intimada; pero se equivocó, no
terminó así este negocio; tuvo que volver el mayor general a
ponerle en m6s tortura, como este jefe lo presenció.
Ale propuso desde luego aprovecharme de su oferta y le .
mandé decir que quedaba persuadido de sus loables sentimien-
tos e intenciones; por tanto que esperaba en el manifiesto que
s e proponía d a r insertara las proposiciones siguientes, redactán-
dolas como le conviniere arregladas: 19 Que debía exhortar en
los púlpitos, lo mismo que los curas de sus dependencias, a todos
los habitantes de las provincias, aunque fuesen realistas, a obe-
decer y respetar a l gobierno y demás autoridades de la patria,
EaciCndoles conocer también la justicia de la =usa que sostenía
IR América. 29 Que debia S.S. vindicarse de la nota de enemigo
de la misma causa y refutar la especie de que generalmente se
le acusaba sobre haber habilitado a los prisioneros de Salta para
volver a tomar las armas, según dejo ya explicado, con otras ad-
vertencia más de que ya no me acuerdo; pero, que si la delicada
conciencia de S. S . 1. encontraba algunos reparos para incluir
en su manifiesto estas indicaciones, podía exponerlas franca-
mente y con la libertad digna de la misma gravedad del asunto;
porque ni al arzobispo le sería honroso hacerlas de otro modo y
a mi mucho menos el exigirlas.
Me expuso el señor coronel Cruz, que temblaba S.S. oyén-
dole este relato y al fin trató de eludir el compromiso en que se
le ponla y para el que él mismo habla dado margen, con sofis-
mas fundados principalmente en las circunstancias críticas, para.
que pudiera avanzarse a tanto; lo que importaba una verdadera
retractación, pero muy favorable a justificar mis providencias,
que no quedaron en suspenso, como el señor Francolí pudo ha-
berlo creído.
Desde que volvió el mayor general con el resultado de esta
segunda entrevista, que era conforme a lo que queda dicho, de-
termine que mi edecán, don BIanuel Rojas, se encargase de la
persona de S.I. y lo llevase a Salta, poniéndole bajo la respon-
sabilidad dc su gobernador, el coronel don Nartfn Gtiemes, a
quien le previne por escrito, le hiciese bajar a Tucumán, siendo
el cargo de estos gobernadores, como de los dem5s del tránsito
hasta Buenos Aires, su conducción, pero con la dignidad y decoro
con que debla tratarse a tan ilustre persona; pero no se crea
que aquí h a concluido por mi parte su historia, volveré sobre ella
m8s adelante, y en el lugar que corresponda.

NOTA I N F I N E A L A "AUTOBIOGRAFIA" Y CARTA DE


LAS S E ~ O R A SJOSEFA ROhTDEAU DE AlAlNEZ Y FRAAr-
CISCA RONDEAU DE AlAlNEZ A I'ALEhrTIh' ALSlh'A.
FE C H A D A EL 16 DE NOVIEMBRE DE 1849,
La precedente atcto-biogmfia fue publicada primeramente
378 LUIS CUEBIES

en el Comercio del Plata z", notable A r i o fundado por el doctor


don Florencio Tarela y estR también incluida en la Colección de
memorias u doctimentos para la historia y la geografía de los
pzteblos del Río de la Plata, por don Andrés Lamas. iilontevideo,
1849; habiendose reproducido últimarnentc en la revista Cientifico-
~llililar.
La inserción de esta memoria histórica motivó la siguiente
carta que se publicó en el Comercio del Plata, del lunes 19 de
novienibre de 1849:
Seiior Dr. D. Valentín Alsinu.
Señor de nuestro respeto y aprecio: h'o hemos visto sino con
mucha sorpresa, la publicación que está usted haciendo, en la
Biblioteca del Comercio del Plata, de la Azitobiografía de nuestro
finado padre, brigadier general don José Rondeau. Esta sorpresa
nos fue causada por el origen quc seiiala usted a la publicación
y por el medio como ha llegado a sus manos.
E n la carta del seiior Lamas, que encabeza la memoria, se
hace figurar que la misma fue donada al señor don Ilartolom6
3Iitre por nuestro finado padre, en los últimos días de su vida
'
y nosotras creemos de nuestro deber y de nuestro interes, relevar
un error, que sin duda no es de Ud. ni del señor Lamas, a quien
agradecemos pór otra parte, las palabras honoríficas que ha ver-
tido sobre Ia memoria de ese anciano que tanto trabajó por la
causa de la libertad de la patria.
La verdad de los hechos nos autoriza a clasificar de error
la supuesta donación, de la %utobiografía" del general Rondeau.
E1 no habría despojado a sus hijos de esa herencia preciosa. Sus
hechos públicos nos eran Lzn queridos y respetados, como nos lo
eran las personas y los sentimientos del viejo veterano; 61 lo
sabía y no entraba en el caracter de nuestro padre, la injusticia
d e despojarnos del documento que contenía el monumento de su
doria.
El señor don Bartolomé BIitre, a más de ser ahijado del
~reneralRondeau, le merecía un cariño particular. Con 61 pasaba
Inrgas horas hablando de las antiguas batallas cle la Indepen-
dencia de la patria, con él revolvía y registraba sus viejos manus-
critos y con él se entretenía de las presentes calamidades del país.
La Intima amistad del viejo general con el joven oficial, nos hizo
creer que éste era el m5s a propósito para poner en orden los
muchos apuntes y papeles de nuestro pndrc y no trepidamos en

20 Empezó la publicacibn en el nGmero 1.162 (Año V), correspondiente


al martes 13 de novicmhre de 1849 y terminb en el 1.188 del jueves 27 do
diciembre del mismo año. !
entregarle todos los originales, a fin de que ordenados y clasifi-
cados debidamente, pudiesen algún día ser dados a la luz por
medio de la prensa. El sefior JIitre, se encargó con gusto de este
trabajo y nosotras creíamos que la "autobiografía" clel general
Itondeau, como sus otros papeles. estaban aiin cn poder del señor
W t r c y que todo ello, nos seria devuelto, luego que mejores tiem-
pos nos pusieran en contacto con 61, ya que la precipihción de
su viaje nos impidió recibirlos a pesar de haberlos reclamado.
Este hecho que es sabido clc todos los miembros de la familia
del general Eondeau, manifiestn que no hubo semejante donación
de la "autobiografía" que se estS publicando: que nuestro finado
padre no nos despojí, clc ese manuscrito, que es el testamcnto de
sus hechos públicos, que sus hijos no han perdido por consiguiente
el derecho de reclamar su propiedad, como no han pcrclido el de
impedir, la publicación actual, si tuviesen la voluntacl de intentarlo.
Pero, no cstc nuestro objeto, señor, hemos querido relevar un
error y no suscitar cucstioncs que nos disgustaría en extremo
tener que sostener. La publicnción de ese documento, no puede
ser sino honorífico para su autor y nosotras, no levantaremos
ningún obstlículo, para impcdir que la vida pura y t a n gloriosa
de nuestro padre sea conocida y apreciada por todos.
Deseamos que esta carta tenga la publicidad correspondiente,
n fin de que todas las personas que lean la "autobiografía" del
general Rondeau, conozcan el origen de la presente publicación;
y si no es posible, señor, que ella sea colocacla, en forma de nota al
pie de la memoria, suplicamos, a Ud. se sirva insertarla en las
columnas del Comercio del Plata, por algunos días consecutivos.
Sin otro motivo, tenemos el gusto cle repetirnos sus atentas
servidoras. -Josefa Rondealt de hiafncz- Francisca Rondeau ,
de hiainez.
Casa (le P., noviembre 16 de 1849. ,

APARTADO i'

EN CUANTO A L DESTIERRO Y PRESENCIA EN SALTA


DEL ARZOBISPO AIOJO, LA lrERSIOh' DE LA SUPUESTA
"AUTOBIOCRAFIA" DE RONDEAU. Y LA QUE SURGE DE
LOS DOCUhIENTOS IIIERITUADOSEN EL- TEMA D E LA
PRIMERA PARTE SON INCOMPATIBLES ENTRE SI. DE
1.AS DOS ESTA ULTIMA ES LA V A L E D E R A
NOTA: E n npoyo de ello s e incorporan aquí dos docun~entos,a saber:
a ) Copin documentd suscriptn por Julián Toscnno, ;Vicnrio de S d t n ,
de 13 que se desprende que Güemes dio asilo a Mojó en s u provincia, por .
espontdnea y *l@nerosa hospitalidad" y en modo alguno acatando órdenes
de Rondeau, como reza la "autobiografía", sino precisamente contradici6n-
dolas, ya vista en la primera parte de este Tema, 3-b).
b) Un fragmento de la Memoria Militar del General Pezuela (Lima,
Perú, 1955, pigs. 01 y 02) que acredita que el Arzobispo de Charcas no
quiso eludir responsabilidades cuando podía hacerlo huyendo y prefirió
mantenerse firme en el dcscnipefio de su misión pastoral.

IIfEAIORXA AIXLXTAR DEL GENERAL PEZUELA (1813-1815)


LIBIA, P E R U
1955
[Págs. 91 y 92:]
"Para tomar Goiburu [gobernador rtxlista de Cochabambal
el partido de rendirse contra la voluntad de la tropa fundó sus
razones en que hacía un mes que tenla cortada la comunicación
con Oruro y el ejército por los caudillos Lira, Zdrate, Fajardo
y otros; en que Arenales que salió de Chuquisaw el 27 de abril
se le aproximó el 16 de mayo a y [así en la publicación] leguas de
la ciudad con 400 hombres de fusil, tres cañones y como YO0 ar-
mados con lanza y sable; y les intimó su rendición diciéndoles
que el Ejército del Rey había sido deshecho. Esto lo creyó Goiburu
y entró en la capitulación que en 13 artículos y pactada el 18
se ve en el expresado cuaderno a fojas (en blanco).
"La tropa que tuvo más honor que el Gobernador y a pesar
de la seducción referida en algunos oficiales se propuso movida
por algunos de ellos morir antes que cometer tal infamia y en
consecuencia el 19 por la noche se puso en retirada con su jefe
Velasco sacando toda la artillería que consistía en siete cañones
y dejando la porción de pertrechos que consta de la relación de
fojas (en blanco). Ella fue atacada a l amanecer del día siguiente
por el caudillo Arenales pero f u e rechazado éste y siguió aquélla
su retirada sin novedad hasta encontrarse con Aguilera.
"El Gobernador Goiburu cumplió su capitulación quedSndose
en la ciudad [de Cochabamba] con el Arzobispo de Charcas [Mojó
y Francolí] que tampoco quiso salir aunque le instaron algunos
para que lo ejecutase y fueron después ambos remitidos para
Potosf: y al poco tiempo para el Tucumbn".

APARTADO, VI
CARTA PASTORAL DEL ARZOBISPO DE LA PLATA
DOCTOR DOh' PEDRO DE PUCH - ROMA 1870
(Dirigida al V . Deán v Cabildo. Clero secular 21 regzilar
fieles de su arqttidióccsis)
G U E ~ I E DOCUMENTADO
S I 381

NOTA: En el siguiente apartado se traen datos sobre!el paso por Salta


del Arzobispo en su viaje a Roma.
A nuestro Venerable Deán Cabildo, a nuestros Párrocos U de-
más Clero, tanto seclihr como regular u a todos los fielcs de nues-
.tra Arqwididcesis de la Plata: Salud en Jesu-Cristo, Sel'ior
Rendentor nttcstro. 1
Venerables hermanos y amados hijos:
Separados de vosotros por toda la anchura dcl Ochno, os
llevamos siempre presentes en el espíritu y en el corazón; y
.desde nuestra llegada s esta Santa Ciudad de noma, hemos
.aguardado el momento en que pudiésemos tener el gran consuelo
.de anunciaros las primeras resoluciones del santo y ecuménico
Concilio Vaticano.
Hoy que h a llegado este caso, venerables hermanos y ama-
d o s hijos, con incomparable gozo nos apresuramos a dirigiros la
presente, comunic.?ncloos que el día de la Dominica in Albis, 24
d e abril ha dado su primera constitución dogm5tica el santo
Concilio.
E n esta Constitución encontrar& corroboradas y claramente
expuestas las grandes verdades de nuestra santa fe, las que,
mediante Dios, se conservan entre vosotros con todo el esplendor
,de R U pureza.
Que hay un solo Dios, Creador y Sefior de todas las cosas
visibles e invisibles ;
Que la materia no es la única s;stancia existknte;
Que la esencia o sustancia de Dios no es una' sola y la misma
que la de los demás seres;
Que los seres finitos, ya corporales y a esphitualcs, no han
,emanado de la sustancia divina; 8

Que la universalidad de los seres no es producida por la


manifestación o desenvolvimiento de la esencia divina;
Que Dios no es el ente universal o indefinido que dcter-
minándosc constituye la universalidad de las cosas como distinta
.en géneros, especies e individuos;
Que el mundo y todas las cosas que en 61 se contienen, sean
materiales o espirituales, en la totalidad de su sustancia han
.sido creadas de la nada por Dios;
Que la creación ha sido un acto enteramente libre de la YO-
' luntad de Dios; ,
Que Dios h a creado el mundo para su gloria;
- tales son, V. hermanos y amados hijos, las verdades pro-
clamadas por el santo Concilio en el primer capitulo de su Cons-
titución dogmfitica. E n los tres restantes h a definido muchas
otras rcrdadcs importantes relativas a la fe, ,i la revelación y
a 13 relación de la f e con la razón, estableciendo ciínones dog-
máticos en que se condenan gravisimos errores que cunden en
.nuestros días, y que son una amenaza a la familia, a la sociedad,
a la moral, a la Justicia, al derecho, a la razón misma, no menos
que a la Religión. I
i.A auién no esvanta. V. H. y A. H.. oue el santo ecuménico
concilio -haya tenido necesidad -de Principiar sus definiciones
dogmdticas por la proclamación de .la Verdad primaria, dc la
Verdad Su&, de l i Verdad soberana y simpli&ma? Que Dios
existe, que es creador dc las cosas visibles e invisibles, que es
sustancialmcnte distinto dc todas las cosas creadas: es la pri-
mera palabra del Génesis y el primer articulo de nuestro sím-
bolo de fe. Esta verdad que comprende la inteligencia del niño
cuando aún apenas decora las primeras p:iginas del catecismo,
esta verdad que la razón puede alcanzar por sí misma, elc-
v h d o s e de las cosas creadas al Creador, esta verdad fundamental
que es la base de la fe y aun puede decirse que de todas las cien-
cias, ha sido sin embargo envuelta en tinieblas y sistemáticamente
negada en las absurdas doctrinas dc la que van3men!e se ha
titulado Filosofía.
¡Gran Dios! Hace diecinueve siglos que el cristianismo deja
sentir su benéfico influjo en la tierra y con todo nos vemos en
la precisión de corroborar y confirmar la primera de todas las
verdades; y en el siglo que se titula de las luces, tenemos pre-
cisión de señalar con el dedo el faro que alumbra el mundo. Este
rolo hecho basta para demostrar, V. H. y A. H.,cuán densas son
las tinieblas que se extienden en derredor nuestro y hasta qué
punto la llama de la inteligencia se ha ofuscado en los hombres
extraviados de la fe. "Los ojos enfermos tienen horror a las irra-
iliaciones del vercladero Sol de Justicia y aman, mRs bien, el
andar en las tinieblas?7".
Aquellos hombres os hablaran de Dios, pero no les crcdis;
rl Dios que nombran no es el verdadero Dios, Creador del cielo
y de la tierra, es un Dios creado por su delirante fantasía. Ese
Dios que ellos ensefian, que ellos predican, es la materia, es el
mundo, es el universo con todos sus seres o finalmente es el
hombre. ;No es este el ateísmo encubierto bajo un nombre men-
tiroso? ~ P u e i l c haber paganismo más insensato? Si, en este
&tema absurdo, impío y ateo, son justificables todos los cxtra-
víos del paganismo y de la idolatría; y la noción del bien y del
nial, de la verdad y del error, se confunden y se identifican.
Negada la primera verdad &quéextraño scr.? que la verdad
y el error se pongan en igual línea, que se proclame la identidad

27 S. Bonav., Stim. divin. amor, pág. 2, cap. V.


CÜEAIES DOCUAIENTADO , 383

de lo limitado y de lo infinito, de lo relativo y de lo absoluto?


Después de identificar a Dios con el universo ¿por qué no se h a
de identifiar tambien la materia con el espíritu, el bruto, con
él hombrc y el hombrc con Dios? Si, V. H. y A. H., lo sabéis,
esas son las tendencias y las conclusiones supremas dc una filo-
sofía bastarda, cuyo mérito científico consiste todo en emplear
una fraseología oscura y un razonamiento sofístico.
Ya se deja entender, V. H. y A. H., culintos otros errores
s e han seguido forzosamente de los primeros, en la moral, en la
ciencia del derecho y en una palabra, en todas las grandes cues-
tiones que atañen a la humanidad entera. Al ver un cuadro t a n
desolador, la mente se anubla y el corazón se comprime.
Necesitariamos hacer esfuerzos para persuadirnos que hom-
bres dotados de razón puedan llegar a tales extremos, si por una
varte. no tropezáramos cada dia con libros que enseñan tan per-
niciosas doctrinas, y si por otra, no supiéramos que no hay
abismos en que la pobre inteligencia humana no se precipite
cuando no se deja guiar por la divina luz de la fe.
Vosotros, V. H. y A. 11.. que sois hijos de la luz, caminad
pues según la luz. Atended siempre aquella dulcísima palabra
que el divino Redentor dirigía a su Eterno Padre: "Esta es la
vida eterna, que t e conozcan a t i solo vcrcladero Dios, y a Je-
sucristo a quien enviaste". Haec est cita aetelrm zit C O ~ O S C ~ ~ ~
te solum v c m m Detini, et quenz misisti Jcsunz C'l~ristirm Dios
es el principio y origen de todas las cosas, mas es sustancial-
mente distinto de todas ellas; Dios es la luz increada y ctcrna
y por lo mismo no es la luz que hiere nuestros ojos; Dios está
en lo más alto de los cielos y en lo m8s profundo (le la tierra,
en las riberas del mar y en los remates del mundo, pero el uni-
verso no es Dios; Dios puedc venir al hombrc y el hombrc puede
elevarse hasta Dios, pero en este comercio sober?no que con la
~ r a c i adivina se opera por la f e y la caridad, no hay confusión
de naturalezas ni identidad de sustancias: el hombre es siempre
criatura d6bil y finita y Dios permanece siendo lo que es, Creador
soberano e infinito. V. H. y A. 11.. busquemos pues la vida
.eterna en el conocimiento del verdadero y Único Dios y de
Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, que vino)al mundo su-
mido culpablemente en la idolatría, a fin de alumbrarle con su
celestial doctrina, enseñar a los hombres el camino de la salva-
ción y darles la salud eterna: Q u i pí.optel. 910s horni?zr8 et propter
nostinm. saltitem descendit de coclis.
Venerables hermanos y amados hijos, aplicaos pues cada día
niás y más a conocer, servir y amar al que es Eterno, Inmortal,

28 S. Joann, XVII 3.
Inmenso, Sapientísimo. ~Iiscricordiosísimo, Justísimo, Omnipo-
tente, Infinito en todo género de perfecciones, n Aquel a cuyos
ojos todas las cosas estfin descubiertas, que todo lo encierra y no
es encerrado de nada, que gobierna el universo sin fatiga, que
dispone de todas las cosas según los planes de su providencia, y
que ha criado de la nada el mundo para su propia gloria.
Vosotros todos, V. H. y A. H., habEis sido creados para dar
gloria o. Dios; no olvidéis pues vuestro altísimo fin. "Todas las
cosas son vuestras, dice e1 grande Apóstol escribiendo n los de
Corinto, todas las cosas son vuestras, mas vosotros sois de Cristo,
y Cristo es de Dios" Omnia vestra sunt, vos aictem Chrbti, Chis-
tus azttenz Dei ZD . Sois pues vosotros, son todos los hombres que
estan destinados a dar gloria a Dios; porque si bien es cierto que
todas las criaturas tienen un lenguaje propio con que cada una
glorifica a Dios a su manera, si bien es cierto que el nombre del
Señor es digno de alabanza desde la salida del sol hasta su ocaso;
que el Señor es excelso sobre todas las gentes y su gloria miís
elevada que los cielossD; y que los cielos refieren la gloria de
Dios y el firmamento anuncia la obra de sus manos s 1 ; no es
menos cierto tampoco que especial gloria y tributo de alabanza
debe recibir Dios del hombre, que es la criatura m6s noble rles-
pués de los Iíngeles. Todns las cosas son nuestras y nosotros so-
I
mos de Cristo.
Para nosotros h a sido hecho el mundo con todo ese magnífico
ornato con que se ostenta a nuestros ojos, mas nosotros no hemos
sido creados para nosotros mismos, digamos así, sino para el
Cristo, alfa y omega, principio y fin de todas las cosas. Esto reasu-
me toda la economía d e la Providencia, la historia de los siglos,
la Teología católica, y aun la Filosofia y todas las ciencias.
El mundo sin el hombre sería un magnffico palacio sin seiíor,
una habitación esplEndida y vacía; por todas partes no se en-
contraría mbs que la soledad y el desierto. El luminoso astro del
día no sería objeto de otras miradas que de las del bruto que
pace la yerba en los campos; no habría un oído que se recrease
con la melodía de las aves, ni un ojo que contemplase el matiz
de las flores; en vano las nubes regarían la tierra con abundante
lluvia, porque no habria una mano,que derramase la simiente;
'los preciosos metales quedarían para siempre ocultos en las entra-
fias de la tierra; la ciencia de la naturaleza sería un secreto im-
penetrable; los principios de las ciencias exactas que levantan la
mente humana h a s h la verdad absoluta, quedarían ignorados

Ad Corinth., 111. 32.


Psalm., 112.
81 Psalm., 18.
en la redondez del globo; no habrja una inteligencia que escu-
driñase la armonía de los astros y superflua sería la brillantez
de los cielos. E n fin, el Supremo Artífice sería desconocido de la
obra de sus manos, y de las cosas visibles que h a hecho no habría
quien s e remontase a las que le son propias e invisibles. Pero el
Señor cuya sabiduría es infinita, colocó a l hombre en medio del
mundo para que presidiese a toda la creación m , y glorificase al
Autor de la naturaleza. Así es que aunque todas las cosas están
sujetas a nuestro dominio, y podemos hacer d e ellas un uso
legítimo y santo no son ellas nuestro último fin, sino más bien un
medio dispuesto por Dios mismo para que nos remontemos n un
fin más alto y miis noble. 1'0s azctem CArisfi, nos dice el Apóstol;
somos pues de Cristo.
tQuC sería el mundo sin el cristo? ~ o d e m o scomprenderlo
por la degradación de la sociedad pagana, y por los pavorosos
sistemas y extravagantes delirios de los hombres que en nuestros
días se esfuerzan en apartar al mundo de la f e de Cristo; y aun
sería esto poco, porque aún estos mismos hombres que reniegan
del Cristo o que le consideran sólo como un mito, sin advertirlo,
sin quererlo, se hallan todavía en gran parte bajo el influjo de las
bienhechoras doctrinas del Evangelio. E n Jesucristo y por Je-
sucristo no sólo es rehabilitada la humanidad caída, no sólo se
encadena la tierra con el cielo, sino que también la sociedad civil
descansa sobre una base sólida, los gobiernos tienen una misión
santa que cumplir, el derecho reemplaza n l a fuerza, el deber
tiene nuevos y más eficaces resortes para mover la conciencia
y la humanidad entera debe formar una sola familia ligada por
el estrecho vínculo de la =ridad. Ese es el progreso verdadero y
sólido a que nos encamina la religión católica que tenemos la dicha
de profesar.
Así se encadena todo en el plan de la Providencia: así Re
explica todo en los principios de nuestra religión sacrosanta.
Al dirigiros la presente, V. H. y A. H., no tenemos por objeto
hacer una exposición extensa de la doctrina católica en parangón
con los erróneos sistemas del racionalismo que exalta la razón
humana para luego deprimirla, que da al hombre por única mo-
rada la tierra y que después de haberle confundido con el bruto,
se imagina que por la evolución y progreso de los siglos se iden-
tificar.? con Dios, o mSs bien vendrii n ser Dios. P o r l a miseri-
cordia del Señor. vuestra f e se conserva ilesa y podEis por
vosotros mismos apreciar el fiublime destino que la religión se-
Eala al hombre en este mundo y en el otro. Nuestro Gnico designio
es, pues, comunicaros la a l e ~ r i aen que rebosa nuestro espíritu
l
$2 Gen. 1. 27 e t 28.
y regocijarnos con vosotros por el primer fruto que acaba de dar
el santo y ecuménico Concilio; y con tal motivo os hemos pre-
sentado las breves reflexiones que la nueva Constitución dog-
mática sugiere.
Pero antes de concluir debemos iexhortaros a permanecer
firmes en la fe. Este sagrado depósito se conserva integro entre
vosotros: esta es vuestra mayor gloria y lo es también para Nos.
Mas por esto mismo debéis vigilar y estar siempre atentos para
iio permitir jamás que doctrinas nuevas y perniciosas se intro-
duzcan entre vosotros.
Tanto más debemos recomendaros esto, V. 11. y A. H., cuanto
que el común enemigo no se descuida y puesto en asecho espera
la ocasión oportuna para perderos; por eso la santa Iglesia nuestra
Nadrc, en el oficio divino que cada día recitan los que estíín
constituidos en el sagrado ministerio, recuerda el peligro y exhorta
n la viligancia con las palabras del Príncipe de los Apóstoles:
"Hermanos, sed sobrios y estad vigilantes, porque vuestro adver-
sario el enemigo, como león rugiente da vueltw buscando a quien
devorar: resistidle fuertes en la fe".
Sí, venerables hermanos y amados hijos, resistid fuertes cn
la fe al común enemigo, que os rodea.
El sabe revestirse de todas las formas. encubrirse bajo todos
los colores, engalanarse con doctrinas especiosas y se&ctoras,
a fin de ocultar el veneno que pretendeinfiltrar en los corazones:
61 es el Padre de la seducción y de la mentira.
No crefris pues, V. H. y A. H., que la seducción y la mentira
se os presenten a cara descubierta. El antiguo enemigo tomó
e n el paraíso terrestre la figura de la serpiente, la cual ha seguido
siendo su símbolo, así como lo es también de la astucia. La ser-
piente se enrosca, se estira, se repliega, se arrastra en la tierra,
se levanta recta como una vara plantada en el suelo; ya se
mueve en línea espiral. ya anda pausadamente, ya pasa a nuestra
vista como una ráfaga, ya salta por el aire con la boca abierta
y el aguijón preparado. Estad pues vigilantes.
La pureza con que habEis conservado la f e y la calma que
hoy reina entre vosotros, no os ponen a cubierto de los asaltos del
común enemigo. Las malas doctrinas que socavan h:ista los ci-
mientos de la sociedad europea, que desecan la fuente del bien-
&tar común, que aflojan los vínculos m6s estrechos y sagrados
de la 'familia, .que siembran la discordia entre los hombres, que
autorizan la rebelión contra las autoridades legítimas, que arran-
can la fe de miles de corazones, no se detienen por cierto en el viejo
suelo del Antiguo Mundo, sino que atraviesan los mares, invaden
las v í r ~ e n c sregiones de la América, y p r o d u c i r h sus frutos Ilc-
cada la ocasión. V. H. y A. H., estad pues fuertes en la f e contra
CUELIES DOCUMENTADO i 387

esa propaganda del error que cual furioso huracán se extiende


por el mundo entero, sin que ni los elevados Andes por un lado, ni
los arenales y desiertos por el otro puedan contener su ímpetu.
No nos engañemos: existe un plan bien combinado para
descatolizar los pueblos; y ese plan se sigue con tenaz constancia,
empleando todos los medios que sugiere el odiosistemático de la
terdad. Sociedades secretas, asambleas públicas, la calumnia y la
mentira, el disimulo y el fraude, doctrinas perniciosas que se
propalan todos los dias, abominables errores que se ocultan bajo
especiosos sistemas, pasiones las más perversas que se excitan
en una literatura insana, la gaceta, el folleto, el libro, la obra
neria y la novela, tales son los resortes que se ponen en juego para
apagar, si posible fuese, la luz de l a fe.
Y lo peor de todo es que en America m d que en ninguna
otra parte se vierte el error sin contrapeso: porque de todas las
publicaciones de la prensa europea, por lo general no se llevan
a1 Nuevo Mundo m5s que las d e peor género. Gas obras de ver-
dadera ciencia, las brillantes apologias, las refutaciones victo-
riosas. los diarios de sana doctrina, quedan casi siempre al otro
lado de los mares, y poco menos que completamente desconocidos
de nosotros.
Por esto, V. H. y A. H., sed sobrios y estad' vigilantes: velad
sobre las falsas doctrinas que s e os venden como verdades in-
eoncusas: tened aquella sobriedad que comunica la fe, para no
aceptar el error que se os brinda en copas doradas.
Velad os decimos y orad t a m b i h según el precepto dt? vuces-
Iro divino Maestro: orad en todo tiempo y muy particularmente
ahora, para que el Concilio termine la obra que ha comenzado.
La Iglesia entera debe hoy más que nunca levantar a Dios una
plemria acorde y constante. Venerables Hermanos, dignos coo-
peradores nuestros y amados hijos, unid vuestra plrgaria a la
de toda la Iglesia; orad a fin de que el Padre d e l a s luces dE a los
Pastores congregados en su nombre la abundante efusión de su
divino Espiritu.
Orad para que nuestra s a n h fe sea exaltada y confirmada.
para que su divina luz se extienda, cada dia más y más, hasta
en las regiones más apartadas del globo, y para que h paz, con-
cordia y caridad que forman la misión del Concilio. no sean
resistidas ni turbadas por las malas pasiones de los hombres.
Orad para que Dios se digne conservar los días del venerable
anciano sucesor de San Pedro, cabeza visible d e l a Iglesia. maes-
tro y doctor de todos los cristianos. Orad, V. H. y A. H., orad por
nuestro amado y venerado Pontífice Pío IX. No dudamos que su
sagrada cabeza encanecida en el servicio de la Iglesia y que ha so-
portado con tanta fortaleza el peso de tantas aflicciones y amar-
LUIS CÜEMES

guras, sca coronada también con la gloriosa f inalizacih de la más


grande obra que h a emprcnclido en su tan ilustre y meritorio pon-
tificado; pero adcmás, V. E L y A. H., debemos pedir que esa vida
t a n preciosa para la Iglesia se dilate mucho más lejos.
V. 11. y A. H., habéis orado por Nos, como tenemos lugar
n creerlo, porque el Señor se ha dignado apartar de nosotros todo
contratiempo en una pcrcgrinación de dicz mil millas. Dios h a
atendido a vuestras oraciones para coronar las fatigas y sacri-
ficios d e tan largo viaje ton la mayor felicidarl que hubiéramos
podido prometernos en nuestra vida: cstamos en la capital del
cristianismo, en la ciudad de los santos; hemos visitado los mo-
iiumentos de piedad y religión de nucstros padres en la fe, nos
hemos arrodillado en la tierra consagrada con la sangre de innu-
merables mártires, nos hemos postrado ante el sepulcro de los
santos Apóstoles Pedro y Pablo, hemos recibido la bendición
del Vicario de Cristo. Esta dicha, V. H. y A. H.. que en la larga
cadena de nuestros predecesores no h a losrado mlís que uno
sólo, el Señor ee ha dignado concederla al más indigno de todos;
y todwía más, nos h a colmado con la gloria quc no tuvo ningún
predecesor nuestro, permitiendo que el que s c reconoce con me-
nos méritos haya asistido al santo y ecuménico Concilio. Pero
entre tanto, V. H. y A. H., no hemos olvidado, ni podíamos olvidar,
el rebaño que el Señor, no sólo sin voluntad nucstra, sino rr pesar
de nuestra abierta resistencia, ha confiado n nuestras débiles
fuerzas; y y a que por la distancia no podíamos proveer por nos-
otros mismos a las necesidades de nuestra grey, la hemos tenido
presente a l recibir las bendiciones del Santo Padre y al postrarnos
ante el sepulcro dc los santos Apóstoles Pedro y Pablo y hemos
pedido al Señor, que su espíritu, su gracia, su bendición s e
derramen copiosamente sobre nuestra amada Arquidiócesis. P o r
vuestra parte, V. 11. y A. H., terminad pues también vuestra
obra, y no ceséis de orar por el que mbs que ninguno se reconoce
necesitar de vuestra4 plegarias.
Venerables hermanos y amados hijos, pondrcmos termino
a esta carta con iguales sentimientos a los que el Santo Padre
manifestó en la conclusión de la Congregación pública que os
hemos anunciado. Aquella paz que Jesucristo N. S. dio a los após-
toles, aquella paz que es el supremo bien en la tierra, aquella paz
que se comunica a los hombres de buena voluntad, esa paz os damos
en nombre del mismo Jesucristo. -
Venerables hermanos que os halllíis constituidos en el Se-
nado eclesiástico que por tantos títulos h a sido uno de los más
ilustres de la América y que en todo tiempo h a sido la honra
ilcl clero, el apoyo y ~ o s t é nde la f e en nuestra Arquidiócesis: os
damos la paz. l
Venerables pbrrocos, respetables cooperadores nuestros, a
-vosotros a quienes está confiado lo mbs espinoso y dificil d e
nuestro sagrado ministerio, os damos la paz.
A nuestro clero secular y regular que con la abnegación
propia de los verdaderos sacerdotes, sirve la casa del Señor y
cdifica el pueblo con sus virtudes; a nuestros amados hijos los
fieles de nuestra Arquidiócesis, de quienes tenemos pruebas de
la sinceridad de su fe, a todos sea dada la paz del Señor.
"iAh! que esta paz os acompañe todos los días (le vuestra
vida; que esta paz sea vuestra fortaleza en la muerte; que esta
paz sea para vosotros gozo sempiterno en los cielos".
Dada fuera de la Puerta Ostiense en Roma n los tres dias
del mes de mayo del año del Señor 1870. ,
t PEDRO ARZOEISPO DE L A PLATA
P o r mandato de S. Sría. llma y Rma.
-
illigucl Taborga Pro-Secretario

APARTADO VI1

PASO POR SALTA DEL ARZOBISPO PEDRO DE PUCH


NOTA: E n este apartado, sobre el tema del rubro, bríndanse aquí los si-
guientes ftems:
a ) Anotación de Domingo Güemes en la que consta Xue Gerónimo Pueh
y María Iruzela fueron los padres de Domingo Pueh (el suegro de Güemes)
y de Manuel (padre de Pedro, el arzobispo de Charcas).
b) Datos genealógicos sobre l a familia de Sanzctenea de los que resulta
que Rosaura Cqstro de Güemes (esposa de Luis, segundo hijo del prócer)
e r a prima hermana del obispo de Salta don 3Iatías Linares, quien, en los
primeros afios de su carrera eclesiástica integr6 el séquito que acompnñb
a l arzobispo Puch en su traslado a Roma.
C ) Extractos de cartas de familia, relacionados con el paso del arzo-
blspo Puch por l a Capital salteña.
1

a ) ARZOBISPO PUCH
(Anotaciones de Domingo Güemes)
E l 29 de setiembre dc 1810 Nieto iba a formar una com-
pañia de seguridad e n Potosí. Su cnpitbn, don Manuel Puch,
1
teniente Manuel Reyes y alférez Iturrichi.
Manuel Puch era hermano de Domingo Puch y padre del
arzobispo de Bolivia D. Pedro Puch. Los padres de Domingo y
Manuel fueron Gerónimo Puch y María Iruzela, naturales del
pueblo de Olaviaga en la provincia de Vizcaya, España.
6). D A M S CbNEALOCICOSDE LA FAMILIA SANZETENEA

I
PRnlOS HERXAVOS
1
\
Bmedldi Nidal T
n,t%X~in-a Mitnd. %data T )lord r m.
~ o m ei. m- Uomt c. m Nlpolc6" cunmt
~itiinounim I P d m Aitorilo Cmtm Wwhn
ded de pmentd
c) EXTRACTOS DE CARTAS DE FAMILIA
Rosazwa Castro de Giiemes a su esposo Luis Güemes. Salta,
15 de julio de 1869: "Dicen generalmente ac.? que ya se sabe de
cierto que el Arzobispo Puch salió de Chuquisaca el 4 de este
mes, así creen que muy luego estar6 en S a l h . Todos, como yo,
cbxtrañamos que la familia de mi tío Manuel no Ic preparen la
casa de Puch como era tan natural, pues Calixto Linares ya le
h a asegurado a Constanza que viene muy pronto, y a ésta sola
le he dicho que ya le han escrito a mi tío quc avisándole para
!
que se venga.
"Nuestro obispo también s e va muy pront'o y lleva entre
sus familiares a Matías Linares, así ya éste se esL5 preparando
para su viaje a Roma". 1

Rosaura Castro de Giiemes a su esposo Luis Giiemes, Salta,


18 de jzdio de 1869: "Se asegura que muy lueio estará acá el
Arzobispo de Chuquisaca. Hay muchas cartas a distintas per-
sonas de a c i que anuncian su venida. &fe dicen que a Constanza
le ha facilitado doña RIicaela Cornejo su casa amoblada y yo creo
ttsí porque ella está muy alborotada con la venida del Arzobispo
y se fue a la chacra diciendo que este lunes, por mañana, se viene
ella ya a estarse aquí para esperarlo. Dicen que también h a dicho
que ya le ha escrito a mi tío Manuel que se venga pronto a
esperarlo.
"He oído que nuestro Obispo se va a fines 'de.éste, lleva a
Matfas. Dicen que hIarquiegui está arreglando con mucho lujo
sus altos para esperar en su casa al Arzobispo :no se 61 donde
elegirá o aceptará bajarse". !

Rosaura Castro de Ciientes a szi esposo L& Güenles. Salta,


25 de jztlio de 1869: "Ac5 est6 Constanza h a c e cuatro días en
muchos preparativos arreglando la casa <le doña Micaela Cor-
nejo para esperar al Arzobispo Puch que dicen debe llegar dentro
de muy pocos días con cinco familiares, que Melgarejo le h a
dado 19 mil pesos para que vaya con todo rango a su misión.
Y nuestro pobre Obispo va sin que se le dé ni meclio, salen con
3Intías y no s é qué otros familinres, e1 lunes es decir mañana
con..sola la esperanza que, puesto en Eusnos Aires, Sarmiento
les dé algo, y si no, costearse con lo poco que él tiene y como
Dios le ayude.
"Ojal5 vos vinieras pronto. como me dicen que mi tío Mn-
iiuel se viene porque el Arzobispo dice que ha dicho que él al
costearse por acá es sólo con el objeto de conocer a sus parientes
y como éstos se limitan a la familia de mi tío Manuel y a vos y
tus hijos, tendré yo que visitarlo con mis hijas y hacerle algunos
obsequios". I

i%fartbzAl. Giiemes a su madre Rosaura Castro de Oiiemes.


Ovando, 31 de julio de 1869: "Mi tío Manuel Puch, se va en l a
semana que entra a encontrarse con el Arzobispo don Pedro Puch,
mi tatita t e hablar5 en su carta sobre lo que har6s a la llegada
.
del señor Arzobispo Puch.. que sabe por una carta de don
Benjamín Dávalos dirigida a mi tío don 3Ianuel que el señor
Arzobispo debe llegar a ésa a mediados del entrante agosto y
que por consiguiente te recomienda lo visites con todos mis her-
manos, como le dices en tu carta, haciéndole presente la estima-
ción y aprecio con que siempre lo has oído recordar de él y que
lo atiendas y regales lo mejor que sea posible y con la decencia
que corresponde".
Rosawa Castro de Giiemes a s u l ~ i j oiifartlrt M. Salta, 7 de
agosto de 1869I "A mi tío Manuel lo esperamos hasta mañana,
por lo que me dicen ustedes y Costanza que hoy h a estndo ach
casi todo el día, t a n cariñosa, recien me h a hablado de la venida
del Arzobispo y de sus preparativos y que ella me h a de venir
a llevar con todos mis hijos para que lo esperemos en la a s a
que le prepara. a lo que le he dado las gracias acept6ndole sus
ofrecimientos. Dile a mi viejo que ya estoy preparando de ropita
buena a todos mis hijos para recibir a su buen tío y lo obsequiaré
lo mejor que pueda cumpliendo con gusto sus recomendaciones,
hasta que ustedes vengan".
Luis Giicmes a su esposa Rosazcra. Ovando, 22 de ngosto de
1869: "Ayer tuvimos el gusto de recibir tu apreciable del 15 y
concluida el 1 9 . . . Celebro que mi tío haya llegado bueno y que
lo hayan visto mis hijos, trátenlo con toda la consideración po-
sible, d5ndole mis recuerdos, como a su familia, como lo harás
con todos mis hermanos, compadres y familia toda, toda que
pronto los abrazaré con el verdadero mriíio con que miro a todos
los míos". l

Alanuel Puek a Luis Giiemes. (Salta a Ovando) U de marzo


de 1870: E n postdah dice: "Pedro escribe de Roma y los re-
cuerda tiernamente n ti, Rosaura y tus hijos".
Rosaura Castro de Giiemss a su esposo Lzlis. Salta, 16 de
julio de 1870: "nIatias llegó hace ocho días. H a sentido no verlos
de paso. Me encarga muchas cosas para ustedes. Este siempre el
mismo virtuoso y alhajita". I

Rosaura Castro de Giiemes a su hijo ilfartin JI. Salta, 21


DOCUXIENTADO
C ~ ~ I E S 1 393

dc jzilio de 1870: "Ahora nos ocupamos de la venida de nuestro


buen Matías que pasó por allí sin que ustedes lo sientan y que
a pesar del deseo que él traía de verlos no pudo ser de otro modo,
por venir con otros frailes y en silla de posta. E s el mismo I\Iatías
de antes pero lo advierto mlís afectuoso como que sabe ya lo que
.
es ausentarse y carecer de los suyos.. ha traído la vista del
concilio donde se ve a Pío Nono y todos los Obispo?, Arzobispos
y Cardenales del mundo. Su conversación es muy divertida, con
la naturalidad que le es propia nos cuenta todo. E n fin, hijito.
luego t ú también lo oirás y v e r h lo que te cuento. E l me h a traído
una cruz de madera incrustada de concha como de una tercia.
unos rosaritos para todos ustedes con sus crucesitas de concha
y unas medallas con San Antonio y el Eusto del [Papa. Todo esto
es con indulgencia plenaria para la hora de la muerte llenas de
~ r a c i a s .Son del mismo Jerusalén, benditas por Su Santidad,
tocadas en el Santo Sepulcro de nuestro Señor. nIe h a dado u n
prendedor de mosaico y un pañuelito de hilo de Roma. El nos
clice que su escasez le ha privado traernos lo que él deseaba que
temía mucho que le falten los recursos para llegar acB. Constanza
h a recibido una encomienda del Arzobispo en que le manda un
crucifijo de metal amarillo que él le dice que es de mucho valor,
es con reliquias de los doce apóstoles y del sepulcro de nuestro
Señor y de la Virgen. También unos santos pintados, muchos
rosaritos como los que h a traído BIatias y cuatro rosarios de
~emillade olivo, del mismo JerusalEn y le clice en la carta que
de éstos me dé uno; así lo h a hecho, también me h a dado ocho
de los otros para ustedes y un San Felipe Neri. Advierte que
esta encomienda la h a partido ella entre las Arandas, doña Mi-
caela y después me han traído a mi lo que t e cuento. Que dice
que eso me manda el Arzobispo, le di las gracias diciéndole que
de todo eso ya me había traído BIatias, pero me instó y lo recibí,
agradeciéndole .. .".
APARTADO VI11

TRASLADO A SUCRE DE LOS RESTOS MORTALES


DEL ARZOBISPO AIOJO ;
SBbese que estuvo a cargo del arzobispo Pedro de Puch el
traslado, de Salta a Sucre, de los restos mortales de Mojó, pero
se ignora el momento, las circunstancias determinantes y el cómo
de ese traslado.
Habida cuenta de que los sagrados despojos'de Mojó y los de
Güemes permanecieron por un tiempo en'el presbiterio delante
del Altar Mayor de la vieja Catedral, es de presumir que el tras-
lado de los restos del prelado fue coetáneo con el traslado de los
de éste, que se efectuó el 14 de abril de 1877 al panteón famiiiar
(conf. nuestro Tema, "Traslados de los restos de Güemes").
Cuatro cartas de nuestro "Epistolario" (tomo 6) patentizan
la forma reverencia1 con que Giiemcs trataba a los religiosos.
Ellas son, la 7, al obispo Nicolás Videla del Pino, de 14 de agosto
d e 1816; la 20, a l provisor Dr. Felipe Antonio de Iriarte, tío del
remitente por línea materna; las 235 y 246, de 18 de noviembre
de 1817 y de 4 de diciembre clc 1817, respectivamente al mismo
destinatario.
Agregamos un anexo que hace ref'erencia al pago de lo im-
- pendiado por Monseñor Videla del Pino en su estadía en Buenos
Aires y lo gastado en sus funerales.
[ANEXO]

Archivo General de la Provincia


Salta I

Expediente :
"Cuenta d e las cantidades su-
ministradas por la Tesorería al
Obispo de la Diócesis Nicolds
~
i
Videla".
i
Razón de las cantidades que con cargo de reintegro de las rentas
d e su Mitra se han suministrado por esta Tesorería 'general hasta el
d i a de la muerte al Ilustrísimo Obispo de esa Diócesis don NicolIs de
Videla. como ipualmente s e incluye lo gastado e n los funerales que
se le hicieron 1.

E n 2 de octubre d e 1817 se le entregl u n billete s u


, --
Pesos Redes

importe .......................................... 5.400


E n G del mismo recibió en dinero .........
........l. 1.080
.................................:.
'

E n 31 del mismo 120


E n 29 de noviembre ............................ .1 .G
328
E n 12 de enero de 1818 ........................... 339 .
5 ?í
E n 7 de febrero .................................. . 6 ?i
339
E n 13 de marzo ................................. .:. . G ?í
306
E n 13 de abril ................................. .! . 5 ?Ir
339
E n 9 de mayo .................................. . 6 ,,
328
E n 27 de junio ........................;.......... . 5 ?i
339
E n 20 de julio ...................................: . G .,
328
E n 14 de agosto ................................... 339 .
5 ?i
E n 11 de septiembre ............................ .'. . 5 ?i
. 6 ..
3311
E n 26 de octubre ............................... .; 328
E n 10 de ncriembre ............................ .. 339 . 5 ?í
E n 22 de diciembre .............................. . 6 ,.
328
E n 18 de enero dc 1819
Cn 15 de marzo
...........................
................................
.'. 339
.;
.. 66 ?Ir%
339

; 1l.GOS . % 9,

2.113 pesos 3 . 1/2 reales, gastados en los funerales


de dicho Ilustrísimo señor Obispo .................. 2.113 . 3 54
13.721 .3
1 Blonscñor Videla del Pino fallcció en Euenos Airesel 17 de niarzo de
1819. (Piccirilli y otros: Diccionnrio Ilintórico Argentino).
Son trece mil setecientos veinte y un pesos tres y tres cuartos reales
que deben reintegrarse a los fondos del Estado de las rentas al finado
Ilustrísimo señor doctor h'icolás Videla. Buenos Aires, abril 24 de 1819.
González Araujo

Salta, 2 de junio Por la razón que acompañamos se im-


de 1819. pondrii V. S. que al Ilustrisimo señor Obispo
Llévese a In Junta de esa Diócesis don Nicoltis de Videla se le
citándose para el han suministrado por esta Tesorería Gene-
día de mañana a las ral hasta el día de su muerte. con cargo de
once de ell+ reintegro de las rentas de su Nitra, once mil
Gtiemes seiscientos ocho pcsos medio real que con
dos mil ciento trece pesos tres cuartillos
Toribio Tedín reales gastados en los funerales que se le
Secretario hicieron componen el total de trece mil se-
tecientos veinte y un pesos tres y tres
cuartillos reales, que deben ser reintegra-
dos a los fondos del Estado en la causa de
Expolios que pende ante ese Gobierno, según así se nos previene en Su-
premo Decreto de 16 del corriente, y en cuyo cumplimiento lo avisamos
a V. S., esperando que nos acusarfi V. S. el recibo de éste, para nuestra
inteli~enciay resguardo.
Dios guarde n V.S. muchos años. Tesorcria General de Buenos
Aires y abril 24 de 1819.
Roque González Jos6 Joaquín de Araujo
Señor don BIartín Güemes, Gobernador Intendente de la Provincia
de Salta. ! ,

,
En esta Ciudad de Salta a tres diasdel mes de junio de mil ocho-
cientos diez y nueve años. Los señores de esta Junta abajo firmados
con vista del oficio dirigido por los señores ministros principales de
IIacienda de Buenos Aires a1 señor Gobernador Intendente de esta
Provincia sobre que se reintegren a los fondos del Estado en aquella
Tesorería general los trece mil setecientos veinte y un pcsos tres y tres
cuartos reales. que se suministraron al IIustrísimo señor Obispo ya
finado de esta diócesis para sus alimentos J- costos de sus funerales,
dijeron que no podia ser más justa la solicitud de los señores Ministros
y que era este un punto sobre el que debla recaer eficazmente todo el
celo de los vocalea de esta Junta, y resolvieron en consecuencia que
respecto a que se halla informe hastx el día el expediente iniciado sobre
e1 cobro y recaudación de los bienes y rentas correspondientes a la
Mitra se pase al Fiscal de Hacienda la representacih antecedentes
para que active eficazmente cl curso de aquel a f i n de que n la mayor
brevedad posible se efectúe el pago con la preferencia que demanda l a
causa alirnantaria y funerales del señor Obispo contestlndose a los se-
iíores por ante mi con copia de esta acta con lo cual lo firmaron dichos
señores por ante mi el presente Escribano de que doy fe.
Entre renglones = contestlndose a los señores ministros con copia
-
&'esta acta. Vale.
iilartin Giientes Doctor José Alonso clc Zacnla
ñIaestro Ignacio L6pe.: u Ceballos
Pedro Aiito?iio de Cebnllos Doctor Jlanitel Antonio nfniina
Ante mi
Josd Ignacio Molina
Escribano Público de Gobierno, Hacienda y Giierra
Incontinenti pasé la vista mandada doy fe.
nlolina
[Archivo y Biblioteca IIistGricos de Salta, legajo 18191.
GUEMES PROMUEVE LA CONSTRUCCION
DE UNA CAPILLA EN E L CIIAI\IICAL

a ) [Oficio de Güemes a l Provisor'Figueroa.] ~


!

"Agitado de las reclamaciones con que variis personas pia-


dosas y cristianas, me han convencido dc la necesidad espiritual
que concurre para la colocación de una Capilla Rural, en el Punto
del Chamical. ya Dor los muchos individuos m e se han establecido
cn sus inmediacfones, cuya asistencia de sacramentos exige el
más exacto cum~limiento íirnnracticablc a los' curas del Rcc-
iorado en sus ateñciones y cikünstancias) y ya también por otras
causas de que contemplo rr V.S. penetrado antes de ahora; no he
podido desentenderme de tan justas insinuaciones.
"Antes de ahora, y en tiempo menos ejecutivo, se consultó
esta solicitud al Ilustrísimo señor doctor Nicolás de Videla; y '
reiteró al señor Provisor antecesor de V.S. el doctor don José
Alonso de Znbala, quienes por conocimientos prActicos, y satis-
fechos de una verdad notoria, convinieron en la precisa coloca-
ción de dicha Capilla, el primero dándole comisión suficiente al
cura doctor don N. Centurión; y el segundo promoviendo, por sf,
Y por medio de algunas personas pudientes la m i s m a fábrica,
que por desgracia no se realizó; mas en el día, hall6ndonos con
el consuelo de verla levantada a expensas y sudores de los indios
gauchos moradores del mismo lugar del Chamical, y sus inmedia-
ciones. con exprcsa licencia que concedió al efecto, y en tiempo
apto, el referido señor Provisor Zabala, sólo resta que se sirva
V.S. librar la comisión bastante para su bendición y colocación
al Obrero 1! Capellán del Tercer Escuadrón de mi mando e¿ Prcs-
bftero don Francisco Fcrndnder, de cziya conducta, idoneidad 21
?.irtztd, V. S. es un buen conocedor, librándole las facultades sufi-
cientes para este caso, y los dcm5s que a V . S. le parezcan conve-
nientes. Sus cristianas oficiosidades, y actos religiosos con las
almas necesitadas, y la piadosa sepultura que h a dado a los cuer-
pos muertos que se hallaban enterrados bajo los iirboles, dan a
conocer el grande interés que s c toma este buen sacerdote en

"E1 quc cuida de las obras en las iglesias o comunidades" (Academia).


ejercicio dc su ministerio; a cuyo fin impetro, pues, de l a justifi-
cación de V.S. dicha providencia cometida a su favor.
"Dios guarde a V.S. muchos anos. Salta y noviembre 23
d e 1818.
"Afartin Giienies
"Señor Provisor y Vicario General doctor
don José Javier dc Figueroa".

b ) [El provisor Figiieroa faciilta al presbítero Fraizcisco Fer-


nándcz para que bendiga la nucva capilla.]
Tucumán, g noviembre 27 de 1818.
"Facúltase a l maestro don Francisco Fernández presbítero
para que pueda bendecir la Iglesia, y Anejo del Rectoral de la
Ciudad de Salta sito en el Territorio del Chamical erigida bajo
los auspicios del señor Gobernador Intendente de aquella Pro-
vincia, y con las licencias del Ordinario; previo el reconocimiento
de estar decentemente adornada, y con los paramentos, vasos
sagrados, y clemlis utensilios destinados nl Culto Divino; a cuyo
efecto, igualmente lo facultamos para que pueda bendecirlos, como
también las imiigenes y la insignia de nuestra Redención, qiie
deberá colocarse en el Cementerio, que se h a de deputar, y es
conforme al espíritu dc nuestra Legislación.
"Doctor José Gabr-iel de Figzwroa
"Ante mí
"Maestro Francisco Javier Tkames
"Prosecretario"

MERITOS QUE TUVO E N CUENTA GUEMES PARA PEDIR


QUE QUIEN BENDIJESE L A CAPILLA D E E L CHAMICAL
F U E S E EL PRESBITERO FERNANDEZ Y CONDIGNO COM-
PORTABIIENTO D E ESTE DESDE QUE GÜEMES F U E HE-
RIDO HASTA LA INHUMACION D E LOS RESTOS E N LA
CATEDRAL D E SALTA.

a ) [Un a% antes de la erección de 1; capilla Giiemes habla exten-


dido el siguiente certificado:] ;
"Don Martin Miguel de Güemes, coronel Mayor de los Ejér-
citos de la Patria, Comandante General de, Vanguardia, y GO-
bcrnador Intendente de esta Capital,' etcétera.
"Certifico a la Bhjestad de la Patria, supremacía del Estado
y dem:is autoridades, a quienes Csta fuere presentada. que el
Presbítero &laestro don Francisco Fernhndez, i cura actual del
Beneficio de Pascaya decidido desde el principio 'de nuestra santa
insurrección, manifestó su adhesión al sistema que defendemos,
y así ejecutado de un ardiente deseo, y celo ha acreditado sus
buenos sentimientos; que instado de tan sagradodeber, se ofreció
cspontáncamente entrd a servir de Capellán al Regimiento de
Infernales de la Patria desde su creación eerifieada por j m i o de
mil ocl~ocientosquince ltasta el corriente mes, d&empeííando este
ministerio con exactitud, así en la ciudad, como en la, campaña, y
muy partieillarmente cuando ocuparon esta plaza, la de Jrgzw
los tiranos, a cuyo frente se presentó con oarias,partMas de giie-
trillas exhortando, ?/ animando a las divisiones que acompaííaba
a fin de que firmes en Ia defensa de nuestra causa de la libertad
no desmayasen. c iaualmente administrando los Santos Sacra-
mentos dé primera ñecesidad a los heridos, y contribuyhdoles
con todos los auxilios esnirituales concernientes a su ministerio:
cuyos servicios, y omitieklo otros h a practicado sin más interés
que el que tiene todo buen ciudadano; pues no se le ha dado cosa
nlguna más que la gloria de tributar sacrificios, desvelos a la
Patria. E n cuya virtud; y a su pedimento le doy la presente en
Salta a veinte dias del mes de julio de mil ochocientos diecisiete
años".
Ma'rtkz Giiemes

b ) [Co2ocacibn formal de la Capilla y donaei6it del terreno.1


"En este punto nominado del Chamical, curato perteneciente
a1 Rectora1 de Salta, en ocho días de diciembre de mil ochocientos
dieciocho. Cumpliendo con la comisión anterior que me comete
el señor Provisor y Vicario general doctor don Jos6 Gabriel de
Figueroa, hice la colocación formal de la capilla que se h a edifi-
cado n expensas de los indios feligreses de su inmediación, ben-
diciéndola con arreglo a la fórmula del ritual, y asistencia del
Cura Rector, Vicario Foriineo doctor don Inocencio de Astigueta
y concurso suficiente de pucblo, que en seguida oyó misa can-
tada, y fue exhortado por este piirroco al cumplimiento de sus
obligaciones espirituales y temporales y adelantamiento del culto,
dc Dios en su nuevo templo, así como por mí, el cnpell8n del
Tercer Escuadrón del Ejército Provincial de Gauchos y Comisio-
nado Maestro don Francisco Fernfindez, dáncloles a entender que
desde este día quedaba la Iglesia bendita y colocada, bajo la
advocnción del glorioso San BIartín, para poder celcbrar en ella
todos los actos y funciones, oficios sagrados, y cuanto conduce
n la piadosa intención y devoción de los fieles así en el cumpli-
miento de la Misa, como en el (le l o s Sacramentos de Niiestrn
Santa Madre Iglesia, de que quedaron cnterados y satisfechos.
Y para que conste firmé esta diligencia con el expresado Cura
y Vicario y testigos infra escritos, que sc hallaron presentes.
"hIaestro F&~cisco Ferndnckz
"Doctor Jos¿ Inocencio Astigzieta
"Comandnntc del Partido fiancisco ~ e b r d e
"Testigo: Josc' l'icente Lbpez I
N "Testigo:
"JosC: Calixto Sanzete~zca" ,
"Considerando con prudencia la más solemne fundación de
csLa capilla y las diferencias que suelen suscitarse, cuando no se
expresan oportunamente y con la debida claridad, las circuns-
tancias de su establecimiento, con respecto a l terreno que se le
adjudica, fue presente el dueño y propietario de toda la hacienda
en que se halla edificada, don José Vicente López; y habiendo
conferenciado conmigo el CapcllQn Comisionado y con el señor
Cura y Vicario Forfineo, en este punto, dijo dicho López, que
cedía, y asignaba una cuadra de tierra en cuadro ( t i los cuatro
rumbos cardinales) en beneficio de l a nueva capilla, dentro de
cuya área y en el centro de ella quedase precisamente considerada
y conociendo nosotros esta su generosidad y la quc h a acreditado
durante la obra racionando a los operarios con treinta reses de
las suyas, de que soy testigo ocular yo el referido capclldn, como
de las buenas cualidades de este benefactor, que asimismo ha
donado gratuitamente de la madera que tenía acopiada para tra-
bajar una casa, la que se ha necesitado, con otros varios objetos,
,. en calidad de limosna, u ofrenda para:Dios; de acuerdo y un$-
nime voluntad, le nombramos de patrono para esLa Capilla de
San Martín, con todos los privilegios y concesiones que como tal
le corresponde, y estdn designados sobre el caso, &índole las
debidas gracias ademss, por la especial cesión de la cuadra de
tierra a favor de la Iglesia. Y para que conste lo firmamos con
el donante y testigos que se hallaron presentes en nuevc de di-
ciembre de mil ochocientos dieciocho. ; ,
"José Vicente Ldpez "&Zaestro Francisco Fe~rzhrdez
"Doctor José Inocencio Astigiieta Frnncisco Velarde"
"Testigo: Jzcan Bazctisfa Torres
"Testigo:
"José Calixto de
"Sanzetenea.
[Los documentos presentados en los n ú n ~ e r k 4 y 6 se encuentran en:
A. C. N., 111-61-2-3, exp. F. 19 y tenemos fotocopias en N.A.]
GUEMES D O C U B I E N T ~ O

C) [Nota mlestra sobre el nombrado presbitero.]


E l presbítero Fernández, a quien Güemes elogia como cape-
llán de Infernales, y también por su cristiana oficiosidad d e
.
trasladar a lugar sagrado "los cuerpos muertos.. enterrados
bajo los Arboles", fue el mismo que asistió al héroe "desde el
momento en que lo balearon los realistas hasta que cxpiró en sus
brazos, prest5ndole los auxilios corporales y espirituales que
pudo"; el mismo que, producido el fallecimiento, "en el campo",
"lo hizo conducir a la capilla del Chamicnl, donde lo enterraron.
haciéndole las exequias que permitían las circunstancias"; el
mismo que un año después, exhumó los restos y los acompañó
"hastzz el templo de Nuestra Señora de AZercedes, patrona y ge-
nerala de los Ejércitos de la Patria, donde fueron depositdos
S hasta el día siguiente que los trasladaron a la Catedral" y, final-
mente, el mismo que el 14 de noviembre de 1822 firmó el acta
de inhumación. Tal inhumación (según testimonio del presbitero
Julián Toscano, vicario de Salta), fue al lado de la tumba del ya
mencionado arzobispo Benito María de Mojó y Francolí según
ya hemos visto. Bernardo Frías (Historia del Gral Giiemes, t. V.
phg. 271) precisa más en qué sitio, o sea, "en el presbiterio de la
Catedral, delante del altar mayor".
De este modo, el hombre cumbre del Alto Perú (el arzobispo
Mojó y Francoli) y el hombre cumbre de Salta que f u e Güemes
para quienes en vida había sido tan cara. tan entrañable. la in-
disolubilidad del conjunto de las provincias, que habían 'venido
-
constituyendo el Virreinato del Río de la Plata.. renosaron Dor
muchos-años, ya fallecidos. uno al lado del otro, como sfmbolo
de la unión de dos pueblos hermanos. I
Volviendo a la capilla de E l Chamical, nos parece muy rr
propósito poner de relieve aquí que, como si hubiera sido obra del
destino, su creación por Güemes vino a significar para él que,
a pesar de haber muerto "en el campo" y estar ocupada Salta
por los realistas, reposase su cadhver en "piadosa sepultura" desde
el,principio, y no "bajo los árboles".
UNIFORMES, CHABRAC
Y SABLE DE GWMES
A - SOBRE UNIFORMES D E GUE~IUIES

1. No se sabe cómo vestía Cüemcs hasta 1817. E n este año


sus ropas reflejaban pobreza extremada. "andaba medio des-
nudo". A partir de entonces fue previsto de las prendas de vestir
apropiadas a s u rango de gobernador de la provincia y a su grado
en el ejército. Así se desprende de las siguientes piezas.
8) Fragmento de una carta de José Rcdheatl a Rlr. Eowles,
fechada en Saltn. el 1 G de mayo de 1817, ya vista.
"En una palabra: el mejor ejército que había salido de
Lima [el comandado por La Serna] se halla rcducido al más de-
plorable estado por el solo esfuerzo de esta provincia, sin mas
socorro que el de los cartuchos, y con ser que estos fueron distri-
buidos con mucha parsimonia. Y sin embargo, iustcd no podrá
creerlo! los enemigos de Güemes en Tucumhn crecen en propor-
ción de los sacrificios que él hace para defenderlos. E n verdad se
sienten movidos por la envidia que, como usted lo sabe, es la
pasión que gobierna a estos naturales. El poco se cuida de todo
esto: atiende a lo que debe hacer: come asado cuando puede pro-
curárselo, anda medio desnudo, sin un peso para comprar vino,
van o aguardiente, rara vez duerme bajo techo y deja a l a ca-
.
lumnia inventar cuantas historias se le antoje". . [Cita de
Ricardo Piccirilli en San Martín 2, l a política de los pueblos,
Ediciones Cure, S. R. L., Buenos Aires, 1057, pggina 4601.
b) Algunos pGrrafos de distintas cartas de Belgrano a
Güemes.
"BIe dicen que está Ud. desnudo: envíeme sus medidas, que
no falta crédito para enviarle a Ud. ropa, y algo m6s que quiera:
trampa adelante, que pagaremos cuando se pueda", S de mayo de
1817, (carta 180) ; "Orr lleva el poncho y pclloncito dc lo mejor
que aquí se h a encontrado: quisiera q w agradase a Ud. todo,
y de no, que dispense mi mal gusto; pues aquí tampoco hay en qué
escoger", 21 de mayo de 1817, (carta 191) ; "Remito un p a r de
botas de caballería que he encontrado aquí por ~i le pudiesen n
Ud. servir: no son finas; pero me parecen fuertes: las medidas
408 LUIS C U E ~ I E S
\

las envío en este correo a Buenos Aires y encargo que se busque


de lo mejor, o no habiéndolas, que se hagan", 3 de julio de 1817,
(carta 203) ;"Tengo aquf dos pares de botas para Ud. que me han
llegado de Buenos Aires; unas a la ecuyer, y otras medias: las
remitiré en primera oportunidad segura", 10 de diciembre de
1817, (carta 248) ; "Incluyo el dibujo para el cuello y vuelta que
..
Ud. me pide: .ya podía haber venido de Europa; pero Ud. no
quizo valerse de.. . (roto) si apostaré que se lo han de hacer
a Ud. bien, respecto a que en ésa se borda muy bien; aquí no hay
materiales a propósito, según me ha dicho el dibujante", 10 de
abril de 1818 (carta 267) ; "No me parece bien bordado en cha-
queta: mejor estará en una casaca, o fraque que sirva de petiuni-
forme: a mfis de que a los dos días estará el bordado deslucido en
la chaqueta; y ademls de no ser decoroso es de poca economía:
bueno es darse brillo de cuando en cuando, y lo demfis andar con
sólo charreteras, o su chaqueta azul con cordones negros a lo
húsar, que es bien bonito, y no insulta uno n la pobreza de los
que le rodean", 26 de abril de 1818 (carta 269) ; "Mañana sal-
drán tres piezas de paños verdosos para Ud., que es lo único que
hay, porque azul no se encuentra, y para vestir a los oficiales del
ej6rcito se han tomado los negros que había y no alcanzan", 3 de
mayo de 1818 (carta 270).
C ) "Cuenta del señor coronel mayor don ñiartín Güemes con
don Juan Florencio Terrada.
Por una libranza de dicho señor a mi
favor contra don Jos6 María Somalo
Gastos
I. l. .....
Pesos Reales
I 400. -
N9 1 - Cuenta del cordonero 248. 2.
N? 2 - Id. del sastre 144. 4.
N9 3 - id. del bordador 160. - 659. 6.
Compras particulares 1
8 varas de casimir blanco a 4 pesos ,32.
1 vara terciopelo N 10.

2 í/- varas paño verde a 10 pesos 25.


v2
1 cordón y borla de oro para gorra 40.
Debe 259. ' 6.
Buenos Aires, 19 de agosto de 1818. I
Jllan Florencio Terrada"
[M. o. y fotocopia en N. A.]
Sobre el envío correspondiente a la precehent& cuenta de
Terrada y sobre otros de análogo contenido, en los que t a m b i h
participó el prestigioso sacerdote salteño y eminente diputado
en el Congreso de Tucumán, doctor Manuel Antonio Acevedo, ,
ver las cartas de este números 266, 317 y 339, en el "Epistolario",
tomo 6 de esta obra.

2. Transcripción parcial de una carta dirigida, con fecha 4


de octubre de 1910, por Martin Miguel Güemes, hijo mayor de
Luis Güemes y Puch, a Adolfo P. Carranza, director del Museo
Histórico Nacional:
"Le adjunto una carta para el señor Eberlein autoriz6ndolo
a entregarle el frac militar dc mi abuelo 1. Aunque éste, como el
traje blanco de húsar y las tapas de las pistoleras de la montura
que le mandaré en seguida I, son las únicas prendas de aquél que
han llegado s nuestro poder y que guardábamos con mis her-
manos, como reliquia de familia nos hacemos / u n deber en.. .
cederlas para el Nuseo Histórico".
l
[Vease Museo IIistórico Nacional, "Documentos de donación", 1810/11, folio
23, y "Autenticidad, 1927", nP XXIV, folio 22.1
l

P o r otra parte, el doctor Eemardo Frías, en su obra "Historia


del General Bíartin Güemes". . .', relatando la forma como éste
fue herido, dice: "Con todo esto, llevaba ya Güemes destrozados
a balazos sus vestidos, atravesada su gorra y hasta los tiros de su
espada". .. I

E n los "Ajustes póstumos de los sueldos de Güemes", que


presentamos en otra parte de esta obra, entre los descuentos que
se hacen a los haberes líquidos a cobrar por los herederos
,
figura,
'
entre otros ftems, el siguiente:
"Entregado a don Facundo Zuviría por el traje que vestía
cl general Güemes a su fallccimiento, que lo adeudaba $ 58,88".

1 Este frac habia sido facilitado al pintor Eberlein, que a la saz611


preparaba un cuadro de Giiemcs.
2 E n realidad el traje de húsar y las pistoleras ofrecidos, fueron en-
tregados el 21 de dicienibre de 1927, o sea, un cuarto de siglo después, por
el doctor Adolfo Güemes y nosotros, con la sola retención de algunos trozos
de tela roja de dichas tapas. E r a duro para la familia desprenderse de
cosas tan queridas.
3 Con posterioridad a 1910 aparecieron en Salta otras piezas, algunas
de las cuales han sido donadas al Museo IIistÓrico y de Bellas Artes de
aquella ciudad. De la suerte corrida por las restantes prendas de vestir
enumeradas en "Accmo hereditario", nada snbcmos. ,
4 Tomo V, p5g. 100 de la edición Depalma, Bs. As., 1973.
E - UN CHAERAC D E GUEMES
E n el "inventario y tasación de los bienes" dejados por Giie-
mes, fechado en Salta el 22 de enero de 1826, aparece entre otros
enseres "un mandil y tapafundas en paño grana bordado de
realce, usado". Tal pieza de la montura llegada, no sabemos como,
a poder de un sacerdote de la iglesia de la Merced (Salta), cuyo
nombre también ignoramos, fue cortado por él en varios trozos,
con el fin de aprovecharlos como adminículos para el culto. Re-
cuperados posteriormente por los descendientes del prócer, fueron
donados, en 1927 (con retención de algunos como recuerdo de
familia), al Museo Histórico Nacional, cuyo Catálogo, tomo 1,
p5g. 384, número 3532, los registra con estas palabras: "Gual-
drapa que perteneció al general BIartín Güemes. Cinco trozos. Do-
nación de Martín, Domingo y Luis Güemes, 21/XII/1927. Objeto
NQ1391". Por error han puesto "gualdrapa", que según la Aca-
demia, "cubre y adorna las ancas de la mula o caballo", en vez
de poner mandil con tapafundas, como figura en el inventario,
o chabrac como tambicn suele ser llamado. E s de notar asimismo
que los verdaderos donantes fuimos nuestro tío el doctor Adolfo
Güemes y nosotros, y no los que aquí se consignan (entre ellos
nuestro padre), quienes para esa fecha ya habían fallecido.
Paz. en sus Aicmorias (2Q edición, tomo 1, pág. 180). hn-
.
blando de Güemes, dice: .. "hasta cuando paseaba en la ciudad,
solía poner guardamontes, por ostentación, y llegó a tenerlos de
mucho lujo y de tela fina y costoso bordado". Aseveración que
nuestro extinto tío, el doctor Domingo Güemes, refuta así: "Eso
de los guardamontes bordados es una ridiculez de Paz; lo que
tomó Paz por tales, era una funda o chabrac de terciopelo punzó
hordado de hilo dorado, que en retazos conservamos aún, y que
ponía sobre su silla de montar cuanclo paseaba en la ciudad".
Los "retazos" aquí mencionados s o n los mismos que tenía la
familia antes de hacer donación de la mayoría de ellos a l Museo.
Señalamos que deben distinguirse dos tipos de mandil: uno
para ser puesto debajo de la montura y el otro para ser puesto
rncima. A este último tipo, que suele ser prenda de gala, y que
por otro nombre se llama chabrac (Diccionario etimológico, de
Earcia), pertenece el que figuraba en el "Inventario". Camilo
-4nschütz dice que el "recado adornado con chabrac y demás
zccesorios en los días de ,parada se usó hasta después de 1890
en la caballería argentina". .. y que "los granaderos llevaban
diariamente cubierta su montura con chabrac o caparazón de
paño azul sujeto con un cinchón y adornado con fajas blancas
y dos granadas con borlas punzó e n las puntas" [Historia del
regimiento de Granaderos a Caballo, Biblioteca del Oficial, Bs.
GUEJICS DOCUMENTADO 411

As., 1945, t. 1, pág. 981. Con respecto al mandil que iba sobre la
montura, véanse las expresiones y los grabados de Enrique
Udaondo en su libro U n i f o m e s militares, especialmente en la .
"Lámina 1". figura 8. y su correspondiente comentario en la pá-
fina 77, sobre los Blandengues de la Frontera, cuerpo creado
en 1750, lo que indica la antigüedad del uso de tal prenda.
Queda patente, pues, que el lujo atribuido por Paz a Güemes
no era en los guardamontes, sino en el chabrac, y que, por otra
parte, así lo autorizaba, incluso para diario en cicrtos momentos.
y hasta en la simple tropa montada, la tradición castrense que
existía entonces y que siguió existiendo. E n consecuencia, mal
podría negársele el derecho de hacerlo, y no "por ostentnción",\
a quien a la sazón era simult:íneamente "Coronel de Caballería
de los Ejhrcitos del Estado, Comandante General de Campaña y
Gobernador Intendente de la Provincia de Salh" [Cf.: Proclama
(le Güemes del G de agosto de 1816, reproducida en El Censor
del 12 de septiembre dc igual año y por nosotros en esta obra
en el tomo 8, págs. 472 a 4741.

C - E L SABLE QUE S E CONSERVA E N E L BlUSEO


HISTORICO NACIONAL Y QUE SIRVE D E EMBLEMA
A LA G E N D A R ~ I E R I A NACIONAL F U E CERIDO
EXCLUSIVAMENTE POR GOEBlES
Doña Antonina Alvarado, hija del general Rudecindo Alva-
rado y viuda de Moyano, donó un sable, el 10 de octubre de 1881,
al Congreso de la Nación, y éste. el 11 de setiembre de 1890, lo
transfirió en custodia al hluseo Histórico Nacional, donde actual-
mente se encuentra. E n la correspondiente nota a l Congreso la
donante afirmó que dicho sable habia sido ceñido por el general
Belgrano en las jornaclas de Vilcapujio, Ayohúma, Tucumán y
Salta (sic en cuanto al orden de jornadas), lueko 'ceñido a su vez
por el general Güemes, quicn lo había recibido (le aquél, y que,
finalmente, había sido "transmitido" al brigadier general Alva-
rado. El 7 de octubre de 1890, en respuesta a u n a n o t a del doctor
Adolfo P. Carranza, director del Museo, hecha el mismo día de la
recepción, en la que pedía a la donante una aclaración sobre si
el arma donada había pertenecido al general Giiemes o al general
Alvarado. innovando ahora, contesto: ..."
fue un obsequio del
Gobernador Güemes a mi señor padre, y fue la que le acompañó
en las campañas de Chile y del Perú, por cuya causa era su
.
predilecta".. (AIusco Histórico Nacional).
Sobre los asertos de la seiiora de nlopano hacemos las si-
guicntes observaciones : I
l e La transmisibn del mencionado sable por parte de Bel-
grano a Güemes nunca tuvo lugar. E n nuestra investigación his-
tóri no hemos hallado documento alguno que haga referencia,
n i siquiera alusión, a tal cosa; inclusive en la correspondencia
particular mantenida entre ellos que se conserva. Amén de esto,
apuntamos que el supuesto obsequio de Eelgrano a Güemes ten-
dría que haber ocurrido después de intimar entre sí, y antes de
que Alvarado, segundo donatario, a l decir de la hija, se hubiese
ido de Salta; pero se dio el caso de que tal intimidad comenzó
en agosto de 1816, cuando ya Alvarado se hallaba lejos de su
provincia natal, como veremos en el párrafo siguiente.
2* ~ u k n d Alvarado
o no ciñó el sable del Museo IIistórico
en caninguna de sus campañas. Dicho general en sus "Memorias"
(que el lector puede consultar en Archivo San Blartin, tomo X,
pág. 173 y siguientes; en illemorias u aiitiob2ografias1 publicación
del Museo Histórico Nacional, tomo 111, pág. 230 y siguientes;
o en Biblioteca de Mayo, tomo 11, pág. 1035 y siguientes) nada
dice de obsequio de sable por parte de Güemes. Menciona a éste,
pero tan sólo una vez y de pasada, y además. no como a gober-
nador, cargo que no había alcanzado aún en el momento histórico
que Alvarado evoca, sino como a mero comandante de trescientos
milicianos auxiliares en el avance que dio por resultado el triunfo
del "Puesto del Marqués" (14 de abril de 1815). Por otra parte,
afirma de sí mismo que, habiendo sido nombrado en Jujuy e d e ~ 5 n
del Director Pueyrredón, lo acompañó hasta Tucumán, y, después
del 9 de julio de 1816, hasta Córdoba, donde el 22'iiel mismo mes
tuvo lugar la histórica entrevista de San Martfn con el Director
Supremo, y, luego hasta Buenos Aires, ciudad desde la que, con
despacho expedido el 19 de agosto de 1816, tuvo que partir sin
dilación n prestar servicio en el Ejército de los Andes; todo ello
a pesar de que él, "desen ntadow de las armas, ya desde Jujuy
venfa manifestando reiteradamente su deseo de conseguir su
"separación absoluta del servicio" militar, según sus propias pa-
labras. E n el "Bosquejo histórico biográfico" sobre el general
Rudecindo Alvarado incluido en la Biblioteca de illayo, t. XVII,
l* arte., D ~--F .
15.240. se dice. con referencia a hechos ocurridos
.:
cn junio de 1816: . "las es&epitosas disensiones que estallaron
entre el acneral en iefe iRondeau1 v cl robernador de Salta don
RIartín Güemes, d&virtkron tocia-med?da ulterior y contribu-
yeron eficazmente a agravar la ruina y desmoralización del ejér-
cito. Fue inevitable que en esta crisis se complicaran algunos
oficinles salteños, entre ellos el mayor Alvarado; pero no les fue
menos honroso hacerlo en el sentido de los intereses y dignidad
. del ejército n que pertenecían. Por resultado de ella Alvarado se
C U E ~ I E S D OC U ME N T A DO 413

vio imposibilitado de permanecer en su país, y pasó a Tucumán,


que otra vez iba a servir de apoyo a la creación de un cuarto
ejército auxiliar". ¿ E s concebible .que Güemes tuviera la ocurren-
cia de obsequiar con un arma, y nada menos que de lujo. como
se verá, a quien partía de Salta con el firme y no disimulado
propósito de alejarse definitivamente del ejército, y que abierta-
mente hacía musa común con los que en ese entonces eran achrri-
mos adversarios del presunto donantc? Más aún: tampoco pudo
obsequiarla en fecha posterior, y a que Alvarado no regresó a
Salta hasta 1831, o sea, diez años después de haber fallecido
Güemes. E s (le justicia, empero, reconocer que el desencanto de
Alvarado por las armas en 1816, que él mismo confiesa al escribir
SUS "Memorias" en 1868, fecha que colegimos de una carta suya
a Jerónimo Espejo datada en Salta el 26 dc diciembre de este
iiltimo año (Archivo de la Nación, VII-7-2-1, Archivo Carranza),
no fue óbice para que en su prolongada actuación militar allende
los Andes (1816-1825). coscchara abundantes laureles.
38 En puridad de verdad el único que realmente ciñó el con-
sabido sable fue el general Güemcs, y ello con exclusividad abso-
luta. Pruebas al canto:
a) Entre los escasos bienes dejados a su muerte figura "un
sable vaina de latón de parada". Diremos, a propósito de tal
.
escasez, que Güemes "murib pobre.. y dejando a sus hijos.. .
en mendicidad". tanto que Luis, el segundo de éstos, nuestro
abuelo, "niño aún, vagaba por los bosques en brazos de los gauchos
guerrilleros que lloraban la muerte de su jefe. E l hijo del gue-
rrero ilustre vivía de la caridad Y del amor de soldados he-
roicos". .. (Cf. informe oficial d i Valentín Delgadillo, 1874,
y El Diario Popdar de Salta, del 25/11/889).
b) Doña Rosaura Castro de Güemcs, nuera del prócer, en
tina carta del 16 de abril de 1877, alusiva al traslado de los restos
de su suegro (desde la Catedral vieja (le Salta, que estaba por
derrumbarse, hasta el recién construido panteón de familia ¿le la
misma ciudad), pormenoriza que en el carro q u e conducía el
.
a h ú d "pusieron.. su espada que tuvimos un tiempo de Cl y que
la conserva la familia del general Alvarado". Tanto la señora
Rasaura en esta carta, como la señora Antonina en sus ya men-
cionadas notas de 1881 y cle 1890, llaman "espada", sin duda por
inadvertencia, a lo que era sable. I

4* Queda comprobado, pues, que el "gobe'rnador Güemes"


a quien la señora de Moyano atribuyó, en 1890, el obsequio del
sable a su progenitor, no pudo ser el prócer salteño. En tal a s o ,
habría sido el hijo primogénito del general, a saber, don IiIartín
Güemes y Puch, cuya admiración por Alvarado surge de un
mensaje suyo del año 1859 a la Rcprescntación de la Provincia,
el que impreso tenemos a la v i s h , y donde se dice: "En mi honor
debo también hacer aquí especial mención del benemérito Briga-
dier General don Rudecindo Alvarado. Deudora es la provincia
al alto influjo del primero de sus hijos, (le servicios importantes
que acaso no son bien conocidos todavía; como le es deudor i y a l -
mente mi Gobierno. Dorauc s i e m ~ r eencontró a1 ilustre Veterano
de la ~ndependcncinpro&o a sec;ndarlo y a prestarle e1 apoyo de
su vasta inteligencia y de su experimentado consejo".
€9' E n 1813 Gücmes es obsequiado con un sable por Miguel
de Riglos. Lo acreditan los p5rrafos siguientes:
a ) "Cluerido primo y amigo:
"Le remito el sable de que le hablé para que me haga el favor
de cnridrselo a nuestro amigo Güemes de mi parte como ínfimo
recuerdo de nuestra amistacl antigua. Tenga usted la bondacl
asimismo de decirle que siempre ha tenido en mi un comprrñero,
un sincero amigo y un justo panegerista de sus distinguidisimos
y muy altos méritos: yo espero que usted h a presenciado en mí
estos sentimientos más de una vez, como otros infinitos lo han
presenciado igualmente". [hIiguel de Riglos s José María Nadal,
19 de octubre de 1819, original en nuestro archivo].
b) "Amado primo:
"Aún no h a llegado el paisano Zuviría, de cuyo poder recogeré
el sable, con que me h a querido honrar mi antiguo amigo el señor
don Miguel de Riglos, a quien se servir; usted hacerle una visita
a mi nombre, asegurarle de mi constante afecto, repetirle mis
respetos, y, entrc tanto tengo el honor de escribirle en el siguiente
correo, decirle que le doy las más expresivas gracias por la de-
mostración con que h a recordado nuestra amistad que las cir-
cunstancias del tiempo la tenían sin ejercicio". .. [Martin Güe-
mes a José María Nadal, Salta, 18 de octubre de 1819, original
en nuestro rrchivo. T. 6, carta N9 331, (le esta obra].
Con respecto a don 3Iiguel de Riglos, cabe decir que este pro-
minente vecino de Buenos Aires era no sólo muy amigo de Güc-
mes, sino también de San AInrtín. Así, en carta a1 último le dice
. entre otras cosas: "Remeditas y Blerceditas están la primera muy
buena y la segunda muy graciosa. Mi madre me ordena diga a
usted c u h t o desearía darle un abrazo". .. Buenos Aires, 27 de
scticmbrc de 1819. [Archivo San Afartín, t. IX, pág. 4701.
6% Doña Antonina Alvarado cle lloyano fue una dama de
sobresalientes condiciones morales. Prodigó buena parte de sus
bienes en obras dc caridacl e invirtió no poca en levantar, en el
cementerio de Salta, para guardar los restos d e su padre. un
mausoleo de importancia proporcionada a la magnitud de sus
-
filiales sentimientos. (Cf.: Güemes Revista quincenal, literaria,
v social, Salta, 1 9 de noviembre de 1907). E n su ancianidad, pre-
sentó las ya vistas notas de los años 1881 y 1890. E n la primera
aflora la inopia que la aqueja: "alentada por la seguridad" de
que la "sagrada deuda" contraída con los héroes de la Patria ser5
pronto saldada, lo que "en algo aliviará la miseria de sus deshe-
redados descendientes o deudos"- y por lo tanto la suya propia-,
ofrece al Congreso dc la Nación los objetos que hoy se encuentran
en el Museo y entre ellos el sable; sobre el cual afirma gratuita-
mente (observación 1Q) que Güemes lo recibió dc Belgrano. E n
la segunda, evidentemente eufórica'al enterarse de que lo donado
por ella iba a quedar expuesto para siempre a la admiración del
público en el AIuseo, y en el afán de enaltecer más y m6s la
memoria paterna, aventuró otras ascveracionea cuya inexactitud
también hemos demostrado (observación 28). Todo lo cual excu-
samos porque no se nos oculta que en la emergencia doña Antonina
se vio impulsada por su fervorosa veneración dc hija, y, p o r
añadidura, de hija única.
CONCLUSI~N. LO expuesto hasta ahora despeja toda duda.
E1 "sable con vaina de metal" que se conserva en el Museo His-
tórico, no puede ser sino aquél con que Güemes fue obsequiado
por don Miguel de Riglos en 1810. P o r consiguiente no es del
todo exacto lo que se consigna en el "Catálogo" de dicho Museo
(t. 1, pág. 327, Buenos Aires, 1951), a saber: "Sable que perte-
neció a los generales Manuel Belgrano, Martín Güemes y Rude-
cindo Alwrado. Donación de la Cámara de Diputados de la Nación,
26/IX/1890. Objeto N9 1065". Corresponde, pues que tal anota-
ción sea reemplazada por esta otra: "Sable del general Martín
Bliguel de Güemes. Donación", etc., y que en los Registros de
ese Repositorio se hagan también las correcciones del caso.
[Publicado en "Revista de la Gen<larmería Nacional", n'? 40, de novienibrc-
diciembre dc 1070, pdgs. SG/Gl].
PREMIOS "A LOS SALTEÑOS
QUE ESTAN SOBRE LAS ARMAS"
Belgrano, exultado con los triunfos de Güemes sobre La Serna
en 1817 en wrtas dirigidas a aqu6l le dice:
"Compañero y amigo querido ... l
Tucumán 3 de junio de 1817. 1
P. S. iioy he dado a reconocer a Ud. por coronel mayor,
reciba Ud. las cordiales enhorabuenas conque le felicito. Deseo
decorar a los valientes que tanto han trabajado y trabajan en
esa provincia. tKo le parece a Ud. que sería buena una estrella
de seis brazos, de oro para los jefes y de plata para los ofi-
ciales coronada de laurel y encima con esta inscripcibn: "Al
valor y constancia en la provincia de Salta"? Dígame Ud. lo que
le pareciere, para proponerlo; porque si vamos a grados mili-
tares, habrh tantos que no serán apreciables. Advierto que deber8
la decoración, según mi idea, ponerse en los ojales de la casaca, al
pecho, pendiente de una cinta celeste y blanca; en fin, discurra
1
1
Ud. y dígame con franqueza su idea.
l [Rúbrica de Belgmno]
Jujuy"
Señor Don BIartín Güemes.

"Compañero y amigo muy querido:. ..


1

Mi deseo de acertar y de correspondcr al mérito de los hoq-


bres que se han distinguido y distinguen por nuestra santa causa,
como igualmente que el premio lleve el m6s y el menos para
que no lo lleve de igual modo el que trabajó menos que el que se
distinguió m5s; pues como Ud. conoce, es ya tiempo de desviar
toda confusión; aseguro a Ud. que me tiene desconfiado de mi
parecer con respecto a los bravos oficiales que han servido a las
órdenes de Ud.; en fin, dígame Ud. algo acerca de la figura
de la decoración que remifo. en la inteligencia que de oro ha de
ser sólo para Ud., de plata los brazos y el centro :de oro para los
comandantes hasta sargentos mayores y de plata los oficiales
desde capitdn inclusive; para los demds un escudo en el brazo
izquierdo de paño con letras de oro a los sargentos, de plata
para los cabos y de seda celeste para los soldados, todos con la
misma inscripción sobre paño blanco.. . \

Celebro mucho quo madama Carmencita siga bien con su


niñito. Procure Ud. también cuidarse, y ponerse enteramente
bueno como lo desea su invariable. ;
ilfantlel Belgrano
Tucumán, 10 de octubre de 1817.
Señor D Ó ~Martín Güemes.
Salta".

"Compañero y amigo querido:. . .


Me alegro de que el diseño de la decoración haya agradado
a Ud.: es muy militar y muy d e mi gusto; sale del orden de las
medallas que antes nos traían los frailes de Roma.. .
Expresiones mil a la Carmencita y besos al 3Iartincillo con
el afecto que profesa a Ud. su
i Manuel Belgrano
Tucumán, 3 de noviembre de 1817.
Señor Don BIartin Güemes. l
, Salta".
[Cartas de nuestro "Epistolario" (tomo 6) Nos. 197, 221 y 2271.

NOTA:
La invasión de La Serna dio origen a que las fuerzas de
Güemes, que la enfrentaron, se hiciesen acreedoras a premios
recordativos por parte del Gobierno Central. E l 25 de abril de
1817 fueron premiados los intervinientes en la acción de Huma-
huaca (ver cartas 165, 169, 172, 180 y 182 y anexo primero):
los oficiales, con sendas medallas de cinco brazos, cuya figura
puede verse en el tomo primero de "Historia de los Premios
Militares"; y los soldados, con cintas cclcstes (ibídem).
El 17 de mayo del mismo año, ya desbaratada la invasión,
el Director Suprcmo, teniendo en cuenta informaciones de Bel-
grano (carta 186), asciende a Güemes a coronel mayor y mani-
fiesta su deseo de otorgar premios a todos los defensores de Salta
(carta 189), los que de hecho decreta con posterioridad, ajus-
t6ndose también a indicaciones de Belgrano, conforme lo demues-
t r a n los documentos siguientes: I

Excelentísimo Señor:
Prcscnto a V. E. el adjunto diseño de premio para el jefe,
comandante. oficiales y gente que ha trabajado y distinguídose
G ~ M E DOCUMENTADO
S 421

en la defensa de la provincia de Salta advirtiendo que para el


primero deberá ser de oro, para los segundos los brazos de oro
y el centro de plata; y para los últimos un escudo de palto blanco
con la misma inscripción de letras celestes, exceptuando los
eargentos y cabos que los deberán tener de hilo de oro los pri-
meros y de plata los segundos; si mereciese la aprobación de
V. E. se dignará comunicármelo, o lo que más fuere de su agrado.
Dios guarde a V. E. muchos años.
Tucumfin a 10 de noviembre de 1817.
Excelentísimo señor.
iifanuel Belgrano
Excelentísimo señor don Juan Martín de Pueyrredón, Director
Supremo de las Provincias Unidas de Sud América.
Noviembre 27/817.
"ExtiBndase el decreto correspondiente de concepción de
esta medalla teniéndose presente en oportunidad lo demfis acor-
dado en el particular.
Irigoyen
"Excelentísimo señor:
"El Director Supremo de las ~ r o v i n c i a sde Sud América
con fecha 28 de noviembre último h a tenido n bien expedir el
decreto del tenor siguiente:
"Buenos Aires, noviembre 28 de 1817.
"Sin embargo de las demás gracias y condecoraciones con
que esta superioridad piensa perpetuar la memoria de los va-
lientes defensores de la Libertad en la Provincia de Salta, cuyos
distinguidos sacrificios merecen la gratitud ) d e sus conciuda-
danos, he tenido a bien en prueba del aprecio, y consideraciones
debidas a tan heroicos esfuerzos conceder, como concedo, al Jefe
General, Comandantes, oficialidad y tropa de la citada Provincia,
una medalla de premio en la forma siguiente: el primero la usará
de oro figurando una estrella de seis brazos con esta inscripción
en la circunferencia de donde hacen aquéllos ':
"AL TvIERITO E N SALTA"
y en su centro: l

"ARO D E 1817"
"Los segundos la llevardn con los brazos de oro y el centro
de plata: los terceros toda de plata, pendiente de zwa cinta celeste
en el pecho y los Últimos un escudo de paño blanco sobre el brazo
"1 Usábase al pecho pendiente dc cinta celeste.
izquierdo, con la misma inscripción de letras celestes, exceptuando
los sargentos y cabos que la deberAn tener de I d o de oro los
primeros y de plata los segundos. E n consecuencia, mi secretario
do Estado y del Despacho de la Guerra expedirá las órdenes
convenientes para que tenga su debido efecto esta mi resolución
disponiendo la respectiva publicación de ella en la "Gaceb" de
esta Capital.
"Pzteurredón
! "Afatlas Zi*igoyett"
[Gaceta <?e Cuenos Aires, N9 4 8 , Diciembre G ' d e 18171.

Como se ve por la c a r t a q u e venimos anotando (la 197) y por


la 221 y la 227, el diseño de los premios fue concebido por Eel-
grano y propuesto n Güemes, quien se manifestó conforme.
Es de señalar que ni en el oficio de Eelgrano ni en el decreto
de Pueyrredón, se determina el número de beneficiarios. Esto
vino a subsanarse cuando Eelgrano, una vez recibidos de Güemes
los "estado" de las fuerzas salteñas, dio al Gobierno las can-
tidades que se transcriben en el siguiente documento:
"Señor Comisario General de Guerra:
"En virtud de que el General en Jefe don Manuel Eelgrano
dice en oficio de 10 de noviembre último que se necesita una
medalla para el gobierno de la Provincia de Salta, 17 para coro-
neles y tenientes coroneles y 267 para oficiales arregladas al
adjunto modelo y 6.325 escudos para la tropa proceder5 Vm. a
formalizar contrata que pasar6 al jefe de este Estado Mayor
General de cuya orden lo comunico a Vm. y a quien la dirigirli
para los efectos consiguientes.
"Dios guarde. a V. S. muchos años.
"Eucnos Aires, diciembre 8/818.
"ilfatias Zrigoueíz
"(M. S. Archivo General de la NaciGn - Estudio Histórico
Numismzítico por Alejandro Rosa)". '
[Tomado de IIistorin d e los Premios illilitares. Rep~íblicnArgentina, tomo 1.
pbzs. 277 n 2791.

Sin embargo, un año despu6s todavía no se habfa llevado a


cabo la confección de los premios, tal cual resulta del siguiente
documento:
"Señor Gobernador Intendente de Salta:
"Consecuente a lo que se dijo n V. S. en 26 de agosto Último
n que es referente su nota 18 del próximo pasado, se han expe-
GUEAIES DOCUBIENTADO 423

dido y remiten hoy al Estado Mayor.Genera1 para su constancia


y oportuna dirección a ésa los Despachos de Oficiales de los
Cuerpos Militares comprendidos en el estado general de la fuerza
de esa provincia. Sucesivamente se remitirán a V. S. por el mismo
conducto los Diplomas respectivos a los premios y condecora-
ciones que les están concedidos, igualmente que las medallas
y escudos correspondientes verificada que sea s u construcción a
que no han dado lugar las multiplicadas preferentes atenciones
del Erario. Lo comunico a V. S. de orden Superior para su inte-
ligencia en contestación.
"Dios guarde a V. S. muchos años. Buenos Aires, octubre
26 de 1819". Hay una rúbrica.
Miguel Solá, en '%1 Escudo de Salta" (Buenos Aires, 1924),
afirma que la estrella de seis puntas no está reproducida en
ningún estudio sobre numismática y que no la h a podido ver
cn ninguna colección pública o particular. Creemos nosotros que
esto se debe a que en el periodo comprendido entre octubre del
19 y la caída del Directorio y disolución del Congreso tampoco
se hicieron efectivos dichos premios, con lo que el decreto de
Pueyrredón del año 17 vino a quedar incumplido.
E n agosto de 1820, inexistente en ese entonces un Gobierno
Central, Güemes, ya en ejercicio de las prerrogativas y facultades
inherentes a su cargo de General en Jefe del Ejército de Obser-
vación sobre el Perú, cargo que le había sido confiado por un
"acto legitimo y espontáneo del Ejército Grande", que a la sazón
comandaba San Nartín, repara por s i mismo la irritante injus-
ticia cometida con sus tropas decretando ascensos para oficiales,
y, mediante el siguiente documento, premios especiales para los
sargentos, cabos y soldados: I

"Orden General del dáa


"No pudiendo la escasez de los fondos públicos proporcionar
en el grado que deseo como recompensar, la infatigable constan-
cia, el valor extraordinario, y el imponderable anhelo, de las
tropas y gauchos de la provincia de mi mando, en la defensa de la
libertad del país. Y siendo de necesidad y justicia, darles un
premio adecuado, a sus muchos y grandes servicios, para que
los respeten y veneren, no sólo sus conciudadanos. sino también
la posteridad, como a sus bienhechores y con privilegio a todos
los americanos. He venido en concederles, como testimonio autén-
tico de sus virtudes. A los sargentos un escudo de plata en el
brazo izquierdo con la inscripción siguiente. Salta. La Patrz'a
a sus defensores con desinterks u constancia. A los cabos un
cordón de seda celeste y blanca, pendiente de una palita de galón
en el hombro izquierdo; ri los soldados otra igual, pero de algo-
d6n, pendiente de una pala de cinta celeste, Salta y agosto 15
- -
de 1820. Martln Güemes Tm'bto Tedin, secretario.
Es copia.
Saravia"
[M. o. y fotocopia en N. A.]
Nota: E n nuestro tomo 6, capítulo 81, páginas 277 a 288, hemos
puesto l a documentacI6n que pudimos encontrar sobre el triunfo del sar-
gento mayor Juan Antonio Rojas en la Misión de Las Salinas y sobre el
premio que Belgrano pidi6 para los que intervinieron en ese hecho de armas;
pero, a l a postre, parece que el merecido galardbn no se hizo efectivo, y a
que no hemos conseguido dato a l y n o al respecto. A continuación agregamos
cuatro anexos referentes a premios para las tropas de Güemes.
[ANEXO PRIMEROJ !

IIEDALTAA Y CINTA DE IIUAIAIIUACA


(25 de abril de 1817)

El general espafiol La Serna se había fortificado en IIumahuaca


(Jujuy) con una guarnición de 133 soldados del célebre Regimiento
de Picoaga, cuando autorizado plenamente por GUemes para operar
con entera libertad, el comandante de sus gauchos, bfanuel Eduardo
Arias, al frente de 140 de ellos, lleva un asalto n aquella fortificación,
resuelto a tomarla a toda costa, en la madrugada del día 2 de marzo
de 1817.
Los heroicos gauchos, después de rudos y vigorosos ataques, con-
siguen penetrar en la población, y desde sus nuevas posiciones se
baten con los realistas, hasta rendirlos completamente, consiguiendo
tomar al enemigo, como trofeos de victoria, seis oficiales y ochenta
soldados prisioneros, siete piezas de artillería, cien fusiles, la bandera
de1 Regimiento de Picoaga y muchos bastimentos; ganados y ca-
balgaduras. I
Este hecho de armas, dados los elementos con que los patriotas
lo realizaron y la clase de ,enemigo con que se batieron, alcanzó el
grado de heroico y fue premiado por el jefe del ejercito auxiliar del
PerSi, general Belgrano, con ascensos y niedallas para los oficiales
y una einta para los soldados, premios aprobados por el Director Puey-
rredón, según decreto de fecha 25 d e abril de 1817.

Excelentfsimo sefior:
IIallo acreedor a don Manuel Eduardo Arias para el grado de
teniente coronel de ejercito; nl capitán don IIilario Rodrfguez de l a
propia clase. para el de sargento mayor; a don Manuel del Portal,
para teniente y a don N. Ontiveros. para alférez igualmente de ejército.
por la gloriosa acción de IIumahuaca. y de capitán de milicias a don
J u a n Pablo Mariscal, que ha hecho servicios particulares en la acción
antes y despues de ella, no siendo más que u n particular amante d e
s u patria; espero que V.E. se designará concederme y concederles
esta gracia, que ya les hecho saber.
Del mismo modo contando con la aprobación de V. E. he designado
cinco medallas de oro p a r a los expresados, con la inscripción y forma
que manifiesta el adjunto diseño para que lleven al ojal de I r casaca
e n el pccho, pendiente de fina cinta celeste y blanca. y de plata a los
demfis oficiales que concurrieron y no s e distinguieron tanto, conce-
diendo a los soldados que lleven mna. cinta celeste en l a chaqueta con
esta inscripción: ,
"IIUi\IAIIUACA"
d e letras blancas, ofreciéndoles recompensa para cuando haya con qué.
Espero que V. E. me dispensarh esta libertad, a que me ha con-
ducido el deseo dc que vean el premio pronto y sirva d e estimulo o los
demfis que hacen la guerra porque he creído y estoy persuadido d e las
intenciones de V. E. y de s u anhelo por manifestar a los buenos
servidores de la nación las consideraciones y distinguido aprecio que
ie merecen. S '

Dios guarde a V. E. muchos años.


TucumSn, 10 de abril de 1817 I
Excelcntisimo señor !
Jlaniiel Belgrano
~xcelentisimo señor don Juan Bfartfn de Pueyrrcdón, Director
Supremo de las Provincias Unidas de Sud América. .
Es copia: Irigoycn.

Consiguiente a la comunicación del Capitán General don Manuel


Relgrano, que de orden de S. E. el excelentisimo señor Director acom-
pañó en copia a V. S. tuvo a bien el gobierno expedir el decreto del
tenor siguiente por acuerdo de este día:
"Aprobntlo en todas sus partes: Aviscse por Secretaría al Capitán
General don IIanuel Celgrano para s u satisfacción y la de los intere-
sados; expídanse los despachos respectivos, diríjanse por conducto del
Estado Mayor General, a quien se pasar5 en copia, la recomendación
que los impulsa, con inclusión dcl d i s e ñ o de la ?nedalln roncedida y
publiquese en l a Gaceta de esta Capital".
E n su cumplimiento tengo el honor d e transcribir10 a V. S. con
inclusión del diseño que acompaña el expresado Capithn General y de
los despachos de s u referencia para s u ,conocimiento y fines con-
siguientes.
Dios guarde a V. S. muchos años. ,
Buenos Aires, abril 25 de 1817. 1
(Rúbrica de S. E.)
: Ilfatias de Irigoyen
Señor Brigadier Jefe del Estado Mayor General.

-
[Archivo General Legajo N9 991. I
Excelentísimo seiior:
IInbiéndose dignado V. E. conferir los grados militares que pro-
r u s e en mi oficio de 10 del pasado abril en honor de los oficizlcs que
concurrieron e n el glorioso asalto de IIumahuaca, aprobando al propio
tiempo las medallas de oro y de plnta con que s e les ha decorado: doy
a V.E. las debidas grzcias por haber accedido a t a n justo preetio.
No dudo que estos oficiales y cualquiera otros, considerando el grande
aprecio que hacen las superioridades de sus servicios, n o ahorrarán
RU S vidas en las ocurrencias y serán de un lustre universal para toda
la Nación; transcribiéndoles como lo hago e n esta fecha para s u
satisfacción, la suprema resolución de V. E.
Dios guarde a V. E. muchos años.
T u c u m h , mayo 10 de 1517
Excelentísimo señor
Ma?ruel Belgrano
Excelentísimo Seiíor don J u a n IIartín de Pueyrredón, Director
Supremo de las Provincias de Sud Ambrica.
BIayo, 27 de 1817
Archivese: Irigoyen

-
Además de los cinco condecorados con la ntedalla (le oro. indicados
en la propuesta de Celgrano, lo f u e también con la misma el Teniente
don Carlos Blalialister, de nacionalidad irlandbs, que ~ e r v í ae n nuestras
tropas y que asistió al asalto y toma de IIumnhuaca, a pedido del
citado general, en oficio de 18 de marzo de 1817 y 'cuyo uso le fue
concedido por resolución del Gobierno de 3 de junio de 1817.
Anverso: E n el ccmpo:
- - -
,-
-
"El 2 de marzo de 1817 en IIumahuaca". Inscripción en
cinco l i n e a ~ ,dentro de un óvalo.
Reverso: Carece de 61.
La medalla es una estrella de cinco picos, sosteniendo el superior
una corona de laurel con anillo para s c r colgada de cinta cclcste y
blanca.
E r a usada al pecho, e n un ojal de la casaca.
Oro y plata. Peso: 10 gramos. Modclo mayor: 29 mm.
Las cinco medallas de oro de preferencia de que habla el General
Delgrano e n el parte que insertamos, no fueron todas de ese metal.
El óvalo central e r a de plata y los picos de oro.
La cinta celeste acordada a la tropa. llevaba e n lctras blancas
"IIumahuaca". y también se usaba en el ojal de la chaquetilla, casaca
o chaqueta.
[tlistoria de los premios militares de la República Argentina, BIinisterio de
Guerra, Buenos Aires, 1908, tomo 19, pQgs. 273 a 2761.
1
[ANEXO SEGUNDO]

[OFICIO DE BELGRANO AL DIRECTOR]


(CARPETA)

Tucumán, marzo 24/817.


El Capitán General Don Manuel Belgrano.
Dice: Que los mEritos distinguidos que contraen los habitantes
de l a Provincia de Salta que estan sobre las armas, merecen premios
que así satisfagan el amor propio como sean un estímulo a los demás
individuos de la Nación.
Que hasta ahora se ha ocurrido comúnmente a escudos o medallas
con inscripciones y a los grados militares para premiar: que los pri-
meros han producido poco efecto, particularmente en el soldado y
aun entre los oficiales, los segundos resultan en grave perjuicio de l a
carrera por las razones que apunta.
Que por este motivo propone a V. E. un plan por el que no siendo
gravoso los premios resulten en beneficio de los agraciados, relativo
a concederles terrenos en las provincias de los muchos que hay baldíos y
otras clases de distinciones y gracias que expresa.
Dla 1.4
Informe el Jefe del Estado Mayor General.
[Hay un signo]
[A. G. N., X-4-1-6, EjErcito Auxiliar del Perú, 1817. Fotocopia en N. A.]
[ANEXO TERCERO]

[BORRADORES D E ACTUACIONES SOBRE GRADOS Y PREMIOS


PARA LAS TROPAS D E GOEMES]

Tucumárj, agosto 2 de 1817. I


E l General Belgrano.
Que consecuente a la Suprema orden de 10 de mayo 'último, en que s e
le pide una relación circunstanciada de los individuos que más se
hayan distinguido en la expulsión del enemigo de Salta y Jujuy, para
e n s u vista proveer lo conveniente. la remite al efecto, siendo excusado
volver a recomendar los individuos comprendidos en ella, por tener
V. E. u n conocimiento exacto de s u s servicios constantes en los partes
que ha remitido.

[Borrador de actuaciones1
Agosto 10
Reservado - Con presencia de la situación política de la Provincia
d e Salta. lo efectivo de los servicios hechos con sacrificios a la Nación:
situación del erario y necesidad de considerar los grados d e la milicia.
abra dictamen el Jefe del Estado Mayor, arbitrando u n medio eficaz
que deje bien puesto el deber y la justicia del Gobierno, en la recom-
pensa de estos individuos.
[Hay un signo1
Agosto 25.
E l Jefe del Estado BIayor dice: Que la relación que se adjunta
contiene 1 G O oficiales, 20 con la distinción de Veteranos, y los res-
tantes como pertenecientes a las milicias de Salta y s u Campaña. Que
n o se designa que ninguno tenga Regimiento o Cuerpo, deduciéndose
que tampoco los haya organizados. Que autorizar con despachos a t a n
crecido número de oficiales sueltos, no puede dejar de t r a e r desórdenes
muy graves, por las razones que apunta. Que los que estan distin-
guidos con la calidad de Veteranos se persuade que habrían sido des-
pachados por el General del Ejercito del Perú, pues que no comprende
cómo d e otra suerte tengan empleos vivos y efectivos. Que s i estos
dependen de los Regimientos del Ejercito o de los agregados al Estado
híayor, pueden volver a incorporarse encargando al General los consulte
pnra el premio a que los considere acreedores. Que s i no es arreglado
tlispensar grados militares con generalidad a los incluidos en la citada
relación, cree hay más inconvenientes para determinarles un premio
pecuniario. Que en estas circunstancias no le ocurre otro arbitrio que
poner al pie de la misma relación un decreto en que encareciendo los
méritos contrafdos por los comprendidos en ella, se recomiende la
gratitud en que la Patria debe estarles, declarfindolos por sus bene-
meritos hijos en grado heroico, librando a cada uno un título impreso
que le sirva de comprobante y previniendo a todos los Ayuntamientos
de todos los Pueblos, se registren sus nombres en los respectivos libris.
jigosto 65
Remítase al Generd 23elgrano cste expediente para que informe
$1 qué clase de Cuerpos pertenecen o por qué causa se llaman Ve-
teranos los que vienen con esta nota en la adjunta relación. Que
disponga sean examinados sus despachos y se haga una relación con
expresión de la comisión con que estos Veteranos se hallaban en la
Provincia de Salta y en virtud de qué orden. Igualmente vienen en la
misma lista un gran número de oficiales con graduaciones mi!itares
do las hIilicias Nacionales y que el Gobierno ignora si realmente son
oficiales y con las graduaciones que se les asignan. Que es del todo
preciso disponga el reconocimiento de los despachos de estos oficiales.
para que el Gobierno con bases m i s ciertas pueda distribuir acertada-
mente los premios que medita. Que igualmente de su dictamen o lo
que m i s convendra a la naturaleza de estos individuos e interbs pn,nerd
y si el Regimiento que se dice de Infernales, es veterano y si la Pro-
vincia de Salta se halla en situaci4n de asistir a s u entretenimiento,
liara con estos conocimientos disponer lo conveniente y justo.

Agosto 20
Pase al Estado Mayor General. a cuyo jefe se recomienda que
en consideración a la situación politica de la Provincia de Salta, a los
importantes servicios que hzn prestado a la Nación los individuos
comprendidos en la lista adjunta, al actual estado del erario público
y a la necesidad de dar a los grados de la Blilicia la importancia
que corresponde, informe resen7adamente. arbitrando un medio eficaz
que deje bien puesto el deber 3- la justicia del Gobierno en la recom-
pensa de 108 expresados individuos.
[Hay un signo1
Agoato 20
Con el oficio de V. E. 2 del que rige se ha recibido en este Ni-
nisterio de mi cargo y elevado a la consideración del Gobierno, la
relación circunstanciada de los individuos que se distinguieron en l a
cxpulsiór? dcl enemigo de Saltr: y Jujuy y oportunnmcnte se comunicar5
G~~AIE
DOCUMENTADO
S 431

la resolución de la Superioridad de cuya Suprema orden lo aviso a


V. E. en contestación.
Dios, agosto 20/817.
[Hay un signo]
Excelentlsimo Scñor Capitán General Don Manuel Belgrano.

Agosto 29
Devuélvase al Capitán General y en Jefe del Ejército Auxiliar
del Perú, a fin de que informe a qué cuerpos pertenecen los individuos
que en la nota de su referencia se distinguen con: la de Veteranos.
disponiendo el examen de sus despachos y las órdenes a cuya virtud
hubiesen sido comisionados en la Provincia de Salta, expresando asi-
mismo si los que en dicha rela-ión se titulan oficiales de las Milicias
Nacionales, lo son ciertamente y sus graduaciones por despachos de la
euperioridad que deberln reconocerse para que sobre estos datos pueda
cl Gobierno acordar sin aventurar el acierto, la distribución de premios
a que sus servicios los hagan acreedores, dictaminando sobre los que
dicho Capitán Generd crea m8s conformes 3 la naturaleza y merito
de estos individuos y explanando en su informe, s i el Regimiento
que se titula de Infernales, es considerado como de línea y si la Pro-
vincia de Salta se halla en situación de ocurrir a su entretenimiento.
para sobre estas bases proveer conforme a justicia;
[Hay un eigno]

A los fines que se expresa en el Superior Decreto de esta fecha,


tengo el honor de devolver a V.E. la relación de los oficiales que se
han distinguido en la Provincia de Salta, que dirigió V. E. con oficio
2 del corriente.
. Dios, etc. agosto 29/817.
[Hay un signo1
ExcelentIsimo Señor Capitán General don hlanuel Belgrano.
[A. C. N.. X-4-1-4, Ejército Auxilinr del Perú, 1816, y X-4-2-2, Ejército
Auxiliar dcl Perú, 1817/10. Fotocopia en N. A.]
[ANEXO CUARTO]

[OFICIO DE NICOLAS DE VEDIA AL COMISARIO DE GUERRA1

Escudos para los defensores de Salta.


El Señor hIinistro de la Guerra dijo con fecha 28 de noviembre
de 1817, lo que sigue, a este Estado Mayor General:
1

"Con esta fecha ha tenido a bien d Excelentisimo Señor Director


Supremo del Estado expedir el decreto del tenor siguiente: Sin em-
bargo de las demás gracias y condecoraciones con que esta superioridad
piensa perpetuar la memoria de los valientes defensores de la libertad
de la provincia de Salta. cuyos distinguidos sacrificios merecen la
gratitud de sus conciudadanos, he tenido a bien en prueba del aprecio
y consideraciones debidas a tan heroicos esfuerzos, conceder, como
concedo al Jefe Principal, comandantes, oficiales y tropa de la citada
provincia, una medalla de premio en la forma siguiente: el primero la
tendr5 de oro figurando una estrella de seis picos con esta inscripción
en la circunferencia donde nacen aquellas, Al mirito en Salta. y en su
centro, Aiio de 1817. Los segundos, la llevarán con los brazos de oro
y el centro de plata. Los terceros, toda de plata, pendiente de una cinta
celeste en el pecho; y los ú!timos un escudo de paño blanco sobre el
brazo izquierdo con la misma inscripción de letras celestes, exceptuando
los sargentos y cabos que le deberan tener de hilo de oro, los primeros
y de plata, los segundos. En consecuencia mi secretario de Estado y
del Despacho d~ Guerra, expedirá las órdenes correspondientes para
que tenga su debido efecto esta mi resolución, disponiendo la respec-
tiva publicación de ella en la Gaceta de esta Capital. En su cumplimiento
lo transcribo a Ud. para su inteligencia, noticia dc quién corresponda
y a fin de que con arreglo nl diseño adjunto disponga se proceda a la
construcción de aquéllos en esta Capital, previo el correspondiente
aviso que exigir5 del Estado Mayor General' en Jefe del Ejercito
Auxiliar, de las que se necesitan para en su vista ordenar el abono
de su importe con la posible preferencia:'.
Y en virtud de que el General en Jefe don Manuel Belgrano
dice en oficio de 10 de noviembre Último que se necesita una medalla
para gobernador de la provincia de Salta. 17 para coroneles y tenientes.
coroneles y 267 para oficiales, arreglados al adjunto modelo y m8s
6.325 escudos para tropa, proceder5 Ud. n formalizar contrato que
pasara al jefe de este Estado Mayor General de cuya orden lo co-
munico a Ud. y a quien lo dirigirá para los efectos consiguientes.
Dios guarde a Ud. muchos afios, Buenos Aires, diciembre 10
de 1818.
~ i c de k Vedia
'Señor Comisario General de Guerra. '

[A. G. N., X-4-1-4, Ejército Auxiliar del Perú, 1816. ~ o t o c o ~ ien


a N. A.]
.
FUERO GAUCHO
Como introducción al capítulo "Fuerza de Güemes" conside-
ramos apropiado iniciar este tema con la explicación previa de
lo que fue realmente "el fuero gaucho" hasta ahora no suficiente-
mente conocido y del que como "Fuero de las Milicias" gozaron
~iemprelas del Virreinato de Buenos Aires.
Cuando San Martin se hizo cargo en 1814 de la jefatura del
Ejército Auxiliar del Perú, comenzó en sus oficios a denominar
como "gauchos" a los "paisanos" que componían las milicias
que venían luchando contra los realistas conjuntamente con las
tropas de línea desde 1810.
El término "gaucho" nunca se había empleado en el Norte
y, como es de pensar, San ñlartín lo usó por similitud a la üeno-
minación que se les daba a los paisanos de las pampas y a los
de la Banda Oriental, ya que a éstos era a los únicos que había
conocido hasta ese momento puesto que por primera vez en su
vida llegaba el Libertador al escenario norteño.
Desde entonces el fuero de las milicias se dio en llamar
"fuero gaucho '.
J

El reglamento del 14 de enero de 1801, y que figura integro


en el "Cedulario de la Real Audiencia de Buenos Aires" que
publicó el Archivo Histórico de esa provincia en 1938, contiene
precisas disposiciones sobre el alcance del fuero militar de las
milicias, fuero éste, mutatis mzctandis, igual al de las tropas de
línea (Capitulo N, artículos 1, 6, 8, 13, 14, 16, 17, 18 y capítulo
IX, artículos 1y 2). Ver el tema 8 del primer tomo de esta obra,
donde se transcriben algunos artículos del "Reglamento" citado.
En realidad, este reglamento no hizo otra cosa que actualizar
los privilegios de que, según disposicioncs anteriores, ya venían
gozando las milicias a través de toda la época colonial en los
diferentes dominios de España en América, y no sin razón, como
se deduce de las siguientes palabras del historiador Juan N.
hlonferini: "Las fuerzas organizadas para la defensa de las
colonias del Río de la Plata las constituyeron desde el principio
las milicias formadas con los pobladores aptos para el servicio
militm, a los que se agregaron, en el siglo XVII, fracciones, y más
tarde, en el siglo XVIII, algunas unidades veteranas. Las tropas
de la metrópoli, retenidas casi siempre por continuas guerras en
Europa, no podían ser empleadas oportunamcntc en el Nuevo
Mundo, sobre todo cuando el enemigo dominaba el mar, por cuyo
motivo se constituveron en el último tercio del sirlo xnIr unidades
"fijas" afectadas- a la defensa del virreinat; ampliándosc y
perfeccionándose la or~anizaciónde las milicias". ("La historia
militar durante los siglos XVII y XVIII", incluida en el volumen
49, 2+ sección de la Historia de la Nacidn Argentina que dirigió
Ricardo Levene).
Güemes obligado por las circunstancias expuestas en el oficio
que envió el 27 de abril de 1818 al director Pueyrredón, dictó
el bando adjuntado sobre la perpetuidad del fuero militar co-
rrespondiente a sus escuadrones de gauchos, bando que f u e ple-
namente aprobado sin objeción alguna por el Director Supremo,
confirmando en toda su amplitud el fuero que hasta entonces
venían gozando las dichas milicias gauchas por imperio del Re-
glamento de 1801 antes citado, como se le comunica a Eelgrano
por oficio del 19 de junio.
Como anexo primero, se transcriben los documentos per-
tinentes.
E l reglamento provisorio de 1817 de que también se habla
en los citados documentos, se halla enteramente transcripto en
"Historia Constitucional de la República Argentina", de Luis V.
Varela, tomo IV, p5g. 266 y siguientes.
E n su contexto podrá observar el lector que el Soberano
Congreso que lo sancionó, "por ahora" (sección VI, cap. 19,
artículo 8) sólo admite la existencia de milicias nacionales y d e
milicias cívicas (capítulos 29 y 89 de la misma sección), sin
pronunciarse expresamente, no sabemos si por descuido o con
intención ( a nuestro sentir más por esto que por aquello), en lo
tocante a las milicias provinciales, con lo que los enemigos del
orden esparcieron la maliciosa especie de que ''ya quedaban los
muchos desnudos del fuero militar".
Entendemos que con lo expuesto el vigoroso "Bando" de
Güemes queda plenamente justificado ante la Historia. Había
que poner coto a la obstinada puja de la civilidad que desde
nntigua data venia minando la acción del paisanaje combatiente.
Cuentas hechas, la alternativa puede sintetizarsc así: o
avance para liberar a nuestros hermanos del Perú o mera defensa
sin ultrapasar las rezagadas fronteras de Jujuy; en resumen o la
puerra agresiva con fuero permanente para los gauchos o la paz,
fuere cual fuera y a cualquier precio con el condicente retaceo
de tal prerrogativa. '
Ya en un apartado anterior hemos señalado cómo, para Cas-
telli, las milicias gauchas eran "apolíticas" y que por entenderlo
61 así, en 1810 las disolvió. Como anexo segundo de este tema
ponemos dos piezas documentales: la primera el oficio que el
c ü o n r ~ sDOCUMENTADO 439

Cabildo de Salta pasó a Güemes, el 5 de agosto de 1815, el que,


tras lo expuesto hasta ahora por nosotros, se glosa por si mismo.
La segunda es un oficio de Rondeau, entonces general en
Jefe del Ejército Auxiliar del Perú, en el que dispone que "mien-
t r a s no se hace una declaración más formal sobre el fuero que
disfrutan los gauchos, vengo en resolver que para los asuntos
judiciales, se considere a los oficiales y soldados como si los
tuviesen". ..
P o r otra parte. a través de esta presentación documental,
hemos visto cómo Güemes en virtud del Reglamento de 1801
para las milicias, en septiembre de 1810, en Humahuaca, las
convoca y disciplina, según informa a don Diego José de Puey-
rredón; cúmo reúne las de Tarija y con ellas triunfa en Suipacha;
cómo en 1814. Jefe de la Avanzada del Pasaje, primero y luego
d e la Vanguardia del Ejército Auxiliar, las llena de gloria en esa
memorable campaña; cómo en 1815 las congrega y n su frente
cosecha los laureles del triunfo en el Pucsto del Marqués, etc.
E n vista de ello, el "Eando" que Güemes dictó el 11 de abril
de 1818 disponiendo el goce eterno del Fuero Militar para los
Gauchos, no fue una medida arbitraria, un acto extemporáneo
o de soberbia, sino dirigido a consolidar los privilegios que como
ya dijimos. venían gozando las milicias de largo tiempo atrás,
sin producir los trastornos que puntualiza en su oficio y en
momentos en que más necesitaba de esas fuerzas.
.
Este fue el dilema.. i O guerra por l a Patria Grande con
fuero gaucho o paz para los encumbrados sin heroísmo alguno
cuelesquiera llegaren a s e r las formas y las condiciones impuestas !
OFICIO E N QUE GOEMES COXIUNICA AL DIRECTOR
PUEYRREDON E L AUTO QUE SIGUE
PARA SU APROBACION

Gobierno Excelentísimo señor


Junio, 4/818 Debo poner en la Superior noticia de V. E. que
L~ acordado. habiendose publicado en esta Capital el Reglamento
l ~ ~ de b Provisorio,
~ i ~ sancionado
~ por el Soberano Congreso de la
Pueyrred6n, Nación, se tqalieron de é l los enemigos del orden, para
ejercitar en la Provincia s u maligna influencia, espar-
Irigoyen ciendo a 1a sombra de la ley, cuyo espíritu, está siem-
Fecho. pre muy distante de dañar los derechos públicos; .que
ya quedaban los Gauchos desnudos del fuero milttar,
con otras especies desastrosas, que agraviaban el mé-
,rito, y heroísmo de esta gentc recomendable.
E r a ftícil de calcular el resultado, y lo manifest6
el suceso. Reconocí el descontento, que había produ-
cido en ella el desprecio con que están mirados, por la
doctrina de los perturbadores. y advertí con seria ob-
serz*acidn, un rumor conminante que anunciaba una
erplosidn lamentable a la Patria en los periodos más
crflicos.
Un mal tan funesto, demandaba el más pronto y efi-
caz remedio, a precaber las consecuencias, que haría
irreparables cualquier morosidad. Corrí a aplicarlo con
oportunidad, y mandé publicar por bando el auto de
11 del corriente declarando a los soldados gauchos, el
goce del Fuero de la guerra, con sujeción a la Suprema
Autoridad, como lo acredita su tenor. Con esto pues
logró mi celo, tranquilizar, y sofocar felizmente el
germen de una disolución, que ciertamente desbarataba
en esta provincia los Tecursos de SU defensa.
Lo comunico a V. E. para su aprobación que es la que espero de la
Suprema dignación de V. E.
Dios guarde a V. E. muchos años. Salta, abril 27 de 1818.
Excelentísimo señor
Jfartln Güemes
Excelentisimo Señor Director Supremo
del Estado don Juan 3Iartin de Pueyrredón.
[A. G. N., X-6-7-4, Salta, 1814/18. Fotocopia en N. A.]
Nota: La bastardilla es nuestra.
AUTO D E GUEMES SOBRE LA PERPETUIDAD D E L FUERO
MILITAR CORRESPONDIENTE A SUS ESCUADRONES
D E GAUCHOS

Don AIartin GUemes, Coronel Mayor de los Ejércitos de l a Patria.


Gobernador Intendente, y Comandante General de esta Provincia de
Salta, etc.
P o r cuanto. s e h a propagado por todos los que se interesan en el
desorden, y desunión que los valientes Gauchos, que a costa de s u sangre,
han defendido con heroicidad l a g r a n m u s a de nuestra independencia,
ya no gozan del fuero militar, intentando con esta máxima no sólo
alterar l a pública tranquilidad. sino causar desaliento e n aquellos bra-
vos defensores, sin advertir. que por sus meritos se h a n hecho acreedo-
res a la distinción, y al premio justamente merecido por sus constantes
virtudes, y sobre cuyo particular se han elevado a la primera autoridad
los más eficaces informes, y de quien s e r h condecorados y remune-
rados al tamaño de su entusiasmo así Estos como la tropa, por sus
notorios servicios, y por el conocido valor con que s e han desempe-
ñado contra el enemigo común, sin otro interhs, n i mlis gloria que
tributar repetidos sacrificios a la Patria. P o r tanto, debía de mandar,
y mando, que todos los gauchos alistados e n los respectivos Escua-
drones, y la tropa no s6lo gozan y eternamente han de gozar del fuero
militar, sino de cuantos privilegios esten e n las facultades del Gobierno
Supremo, quien s e interesa en t a n justa agradecida recompensa. Pu-
blfquese, remitiendose copias al mismo fin, adonde corresponda. Salta,
once de abril de mil ochocientos dieciocho. IIartin Giiemes. P o r mando
de s u Señorfa Fhlix Ignacio Nolina, Escribano Público de Gobierno,
-
Hacienda y guerra. E s copia Molina.
[A. G. N., X-6-74, Saltn, 1814/18. Fotocopia en N. A.]
NOTA: La bastardilla es nuestra. E n el anexo segundo lo bastardi-
llado nos muestra c6mo yn en 1815 estaban actuando "Todos los que se
interesan en el desorden- y desunión", vale decir los que frustraron el
accionar conjunto de San BInrtin Y Güemes sobre Lima. en 1821.. naucllos
.
que se nutod&ominnron de la d'~at-riaNueva". F. 11. C:

E L GOBIERNO CENTRAL JUSTIFICA Y APRUEEA LO RESUELTO


POR GUEAIES, Y AS1 S E LO COAIUNICA

Se ha recibido el Oficio de V. S. 27 de abril último en que mani-


fiesta las razones que lo impulsaron a disponer la publicación en esa
Ciudad dcl Bando que e n Copia acompaña; y encontrándolas S. E. en
lodo conformes con las Leyes que rigen en el Estado, y e n conson?nci.a
con el articulo 2P capítulo ldem sección GP del Reglamento Provasono
Últimamente sancionado por el Soberano Congreso e n que se prcvicne
que las milicias Nacionales se arreglen al de 14 de enero de 1801, por
el qub s e declara Fuero Militar a las Provinciales, ha tenido a bien
aprobar dicha medida, y en su virtud mc ordena lo avise a V. S. como lo
hago e n contestación.
Junio 4/818.
[IIay un signo]
Señor Gobernador Intendente de Salta, etc.
[A. C. N., X-6-74,Salta, 1814/18. Fotocopia en'^. A.]
NOTA: La bastardilla es nuestra.

rOFICIO D E EELGRANO A L DIRECTOR PUEYRREDON]

Guerra, Excelentísimo Señor ,


Junio 19/818 El gobernador intendente comandante general d e
L o acordado. la Provincia de Salta don Martín GUemes, despues de
~ ~ ú bdel i ~ transcribirme
~ el oficio que dirige a V. E., haciendo
pueyrredón] ver el sensible resultado de la publicación e n la ca-
pital de dicha provincia del Reglamento sancionado por
Irigoyen el Soberano Congreso Nacional, el descontento que
Pecho. había producido, etc. me acompaña copia del Bando
que enseguida mandó publicar para aquietar los espí-
ritus tumultuados según avisa con la indicada publica-
ción. El me ha pedido aprobación del mencionado Bando,
y no consider4ndome facultndo para un semejante pro-
cedimiento, le he contestado continúe lo d i ~ p u c s t oe n
61, hasta que V. E. s e digne resolver lo conveniente. a
quien daba cuenta en el inmediato correo con copia fiel
de todo, como tengo el honor de hacerlo.
,
Dios guarde a V. E. muchos años. TucumBn, mayo
3 de 1818.
Excelentísimo señor
Manuel Belgrano
Excelentísimo Señor don Juan Mnrtin de Puegrredón, Director
Supremo de las Provincias Unidas de Sud America.
[A. C. N.. X-4-2-1, Ejercito Auxiliar del Perú, 1818. Fotocopia en N. A.]
NOTA: A continuación Belgrano acompaña copia del oficio que Güe-
mes envi6 al Director con fecha 27 de abril y del Bando, documentos-que
transcribimos anteriormente.
[CARPETA RESUMEN DEL OFICIO DE BELCRANO
AL DIRECTOR Y RESOLUCIONES POSTERIORES]

Tucumán, mayo 3/818.


El general don Manuel Belgrano
Que el gobernador Intendente de Salta [Cüemes], después de
haberle acom~añadocopia del oficio que dirige a V. E., haciendole ver
el sensible resultado de la publicación en la capital de dicha provincia
del Reglamento sancionado por el Soberano Congreso, y el descontento
que había producido; le acompaña el Bando que enseguida mandó
publicar para aquietar los espíritus tumultuarios según nvisa. Que él
iCUemes] le ha pedido nprobación del Bando. y no considerándose
facultado, le ha contestado continúe lo dispuesto e n 61 hasta 13 reso-
lución de V. E. I

n w o 27
Enterado, aprobándose el Bando promulgado por el Intendente de
Salta por no disconformar con las leyes del Estado y estar en armonía
con lo que ellas previenen pues en el articulo 29 del capitulo 29 de la
sección 69 del Reglamento se previene que las Milicias Nacionales s e
arreglen al Reglamento de 14 de enero de 1801 y como él afecta fuero
militar a las hlilicias Provinciales. I
[Hay un signo1
Antes de despacharse este asunto véase sus antecedentes en el
Despacho de Gobierno.
[A. G. N,, X-4-2-1, Ejército Auxiliar del Perú, 1818. Fotocopia en N. A.1

[EL GOBIERNO CENTRAL INFORnIA A DELCRANO SOBRE


LO RESUELTO EN EL DOCUJIEKTO ANTECEDENTE1

Consideradas por el Excelentísimo Director Supremo las razones


que impulsaron al Gobernador Intendente de Salta n la Publicación
del bando que en copia acompaña V.E. con oficio 3 de mayo próximo
anterior, ha tenido a bien aprobarlo respecto a no contrariarse [Tes-
tado: "Disconformar"] con las Leyes del Estado estar en armonfa
con lo [testado ''prevenido en"] el artlmilo 2Q capitulo fdem sección 6p
del Reglamento Provisorio en que ee previene que las Milicias Nncio-
nales se arreglen al de 14 de enero 1801, por el q u e s e declara fuero
militar a las provinciales. De orden Suprema tengo el honor de avisarlo
n V. E. en eontestnción para su inteligencia y fines consiguientes.
Dios, etc. [testado "mayo"] Junio 1Q/818.
Excelentísimo Señor Capitfm General don Manuel Belgrano.
[A. G. N., X-4-2-1, Ejercito Auxiliar del P&Ú, 1818. Fotocopia en N. A.]
A1ota: Ln bastardilln es nucstrn.

Guerra Excelentísimo Señor


Julio 13/818. He transcripto al gobernador intendente de l a
Archivese Provincia de Salta [Güemes] la suprema orden de V. E.
~ ~ f ideb ~ de i ~1Q ~del corriente aprobatoria del Bando que aquEI
Irigoyen] hizo publicar relativo al fuero militar de las IIillcias
Provinciales, por no resultar en contradicción con el
Reglamento Provisorio, y tengo el honor de avisarlo
a V. E. para su supremo conocimiento.
Dios guarde a V. E. muchos años. Tucumán, junio
26 de 1818. l
1 Excelentísimo señor
I Manuel Belgrano
Excelentísimo Señor don Juan lfartín de Pueyrredón
Director Supremo de las Provincias Unidas de Sud America.
(A. G. N., X-4-2-1, Ejercito Auxilinr del Perú, 1818. Fotocopia en N.A.]
[AKEXO SEGUNDO] I

(Primera)
[OFICIO DEI, CABILDO DE ' SALTA A GUEBIES
DEL 6 DE AGOSTO DE 18151

Sobre E s tan constante que a los heroicos servicios de la


que se les gente de la campaña de esta Capital, se debe la expul-
quite sión del enemigo, que la asolaba. y la restitución al
el fuero amoroso seno de nuestras familias, que dudarlo, seria
a los temeridad, cuanto m i s negarlo. Hechos por una mets-
paisanos morfosis, de paisanos. soldados, han sido guapos, ani-
de la mosos y valientes, logrando un terror imponente sobre -
campaña. el enemigo. Los repetidos triunfos que siempre han
conseguido testifican estos hechos, l habiendo sellado
su bravura con la completa derrota del tirano en el
Puesto Grande del lfarqués. Tan apreciables méritos,
no son de mirarse con indiferencia, pero ni tampoco de
premiarse con el trastorno de los pactos sociales, cuya
observancia es la felicidad de los pueblos. El fuero mi-
litar j a m h puede ser un premio debido a tan distin-
guidos servicios. E l no es otra cosa, canto todo otro
fuero, que el set. juzgado por sus respectiva.? depen-
dencias: es decir. los eclesiisticos regulares, Y secu-
lares por sus respectivos prelados, los paisanos por la
justicia ordinaria. los militares por sus jefes: los ad-
ministradores, y dependientes de la hacienda del Es-
tado por los intendentes, sin que el fuero correspon-
diente a cada una de estas clases sea preferente el uno
al otro, supuesto que el delincuente siempre debe ser
castigado en cualesquiera tribunal a quien pertenezca
corregir la infracción de la ley. Estas diferencias como
necesarias las ha introducido el buen orden de admi-
nistración de justicia. Sería una confusión que el eele-
siistico juzgase a1 secular, el militar al paisano, y vice-
versa. Esta es la que trató de evitar Cste ilustre Ca-
bildo, diputados atando sancionó que las milicias que
s e lewntarm en esta canzparia con motivo de la presente
gtterra, no gocen el fuero militar, sino en el caso de
estar en actual servicio. Por fortuna que esta resolu-
ción la han tomado en varias partes, y en ésta se dictó,
despues de una detenida reflexión. y un maduro examen,
No estb, pues en el orden que habiendo cesado ya la
guerra en esta Capital restituidose la gente, que la ha-
cía al antisuo estado dc labrcdor, y paisano, scan jztr-
gados por los niilitarea, 'como n o lo estaría, si a éstos
los jiirgase la justicia ordinaria. Esto es un caos, una
confusión. L a s nctualcs circunstancias exigen que todo
americano sea un soldado, y que desempeñe las funcio-
nes cuando sea preciso pero cuando no es llegado este
caso. es un paisano, cuya sujcciún inmediatamente de-
~ e n d cde la justicia ordinaria. S i no se observa t a n
interesante medida, quc'dicta la razón, y aconseja la
prudencia, quítense las justicias ordinarias, para que:
no sean unas fantasmas con jurisdicción, y sin sujetos
en quienes ejercitarla. La Ley sólo se puede reformar,
y quitar por quien tiene facultad de poseerla, illuiiua
est tóllerc, cuyus est pónere, y no habiendo sido puesto
por solo este Ilustre Cabildo n o puede tomar sobre,ella
una medida que sea derogativa de la citada resolución.
que rige ya en l a ciudad de Jujuy por disposición del
sefior General en Jefe [Rondeau] a consulta de aquel
Teniente Gobernador [Dr. Gordalizal. Mas. s i V. S.
encuentra muchas dificultades, para que se obserye, y
rija en esta Ciudad, sin que todo s u celo. eficacia, 3'
respeto pueda conseguirlo, queda satisfecho este Muy
Ilustre Cabildo haber cumplido con sus deberes; con
lo que ha contestado al oficio d e V. S. datado a veinte
y cuatro del próximo pasado julio. Dios guarde a V. S.
muchos años. Sala Capitular de Salta a cinco de agosto
de mil ochocientos quince. Aquí las firmas. Señor Co-
ronel y Gobernador Intendente de esta provincia don
Martín GUemes.
E s copia.
FdIiz Ignacio lllolina
!
Escribano
!
[Revista del Archivo Genernl de la Nación, NQ 3, p 6 p . 232/233].
Nota: La bastardilla es nuestra.
1
(Segunda)
E n las actuaciones sobre la conducta de los reos gauchos Vicente
Panana y Francisco Montenegro, se c i t a como antecedente del fuero
mucho. la decisión de Rondeau, que se transcribe:
Vista l a consulta que hace a Usía el J u e z Fiscal de esa comisión
don Pablo de los Santos Rubio, en la causa que sigue contra el Dragón
Mariano Alarc6n y mientras no se hace una declaración más formal
sobre el fuero que disfrutan los Gauchos: vengo e n resolver que para
los asuntos judiciales. se considere a 10s oficiales y soldados como s i lo
tuviesen. a fin que no se entorpezca el giro de nuestros negocios e n
que se interpone la rindicta pfiblica y el decoro del Ejército.
C ~ M E SDOCUMENTADO 447

Dios guarde a Usla muchos anos. Cuartel General en Jujuy,'mayo 4


de 1816. N

JosC Rondeau
Señor Presidente de la Comisión Militar permanente.
Es copia Arenales.
[A. G. N., X-4-14,Ejército Auxiliar del Perú, 1816. Fotocopia en N. A.]
Se terminó de imprimir
en la primera quincena de febrero de 1982
en los talleres de
R. J. PELLECRIN E HIJO, I~IPRESIONES,
San Elas 4027. Buenos Aires, Rep. Argentina
Tirada de esta edición: 2.00'0 ejemplares

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