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ENFEBRECIDOS

Muestra de poesa universitaria de la UACM


Compilador: Francisco Trejo
Los colepteros
enfebrecidos
Muestra de poesa universitaria de la UACM
Dr. Enrique Dussel Ambrosini
Rector interino de la UACM

Comisin de Apoyos Estudiantiles (CAE)

Mtro. Samuel Cielo Canales


Coordinador de Servicios Estudiantiles (CSE)

Mtra. Raquel Torres Marn


Representante de la Tesorera

Lic. Mara Dolores Lpez Ontiveros


rea de Apoyos al Estudiante de la CSE

Lic. Fernando Miranda Velzquez


Representante de la Coordinacin Acadmica

Lic. Guillermo de Jess Rodrguez Montes


Representante de la Coordinacin de Servicios Administrativos

D. R. Trejo, Francisco (compilador), Los colepteros enfebrecidos. Muestra de poesa


universitaria de poesa de estudiantes del plantel San Lorenzo Tezonco, UACM, Coordina-
cin de Servicios Estudiantiles, Primera edicin, 2013.

D. R. Universidad Autnoma de la Ciudad de Mxico.


Dr. Garca Diego 170,
Col. Doctores, Del. Cuauhtmoc
C.P. 06720, Mxico D.F.
www.uacm.edu.mx

La presente publicacin corresponde al proyecto estudiantil Poesa blanco y negro de la


5ta. Convocatoria de Proyectos Estudiantiles, publicada en el ao 2011 como parte del
Programa de Apoyos al Estudiante de la Coordinacin de Servicios Estudiantiles, con el
objetivo de contribuir al desarrollo acadmico de la comunidad estudiantil de la UACM.

Impreso y hecho en Mxico.

Diseo y formacin: Benito Lpez Martnez


Forros: Miguel ngel Esparza Corts

PUBLICACIN SIN FINES DE LUCRO


DISTRIBUCIN GRATUITA. PROHIBIDA SU VENTA
Los colepteros
enfebrecidos
Muestra de poesa universitaria de la UACM

Francisco Trejo
Compilador

Carlos Lpez
Presentacin
[] es el misterio
el delicioso capullo de los
colepteros enfebrecidos

Ral Parra
Agradecimientos

Agradezco a la Universidad Autnoma de la Ciudad de Mxico, a


Ma. Dolores Lpez Ontiveros (responsable del rea de Servicios y
Apoyos al Estudiante), a la Coordinacin de Servicios Estudiantiles
y, en general, a todos los mexicanos que hacen posible la existen-
cia y el funcionamiento de las instituciones pblicas educativas.
Agradezco especialmente a Hctor Carreto, Oscar Gonz-
lez, Carlos Lpez, Max Rojas y Gabriela Valenzuela, por sus co-
mentarios y sus aportaciones a este proyecto editorial.
Presentacin

C
ada recopilacin de poesa plantea un orden, una suerte
de jerarqua de quienes deben aparecer publicados, pero
este libro ms que clasificar propone un homenaje a Ral
Parra, poeta irreverente y maestro de literatura que dej en mu-
chos de sus alumnos una huella honda y dinmica que sigue ac-
tivando su motor creativo. Los poetas que escriben en este libro
tienen voces muy distintas entre s, su visin potica es diversa,
lo que le da aire y pulmones a ese intento perpetuo de definir qu
es poesa.
En un mundo desencantado, ruidoso y a la vez sordo, sr-
dido, la poesa es a veces como una pausa, un trago de silencio o
una cancin secreta que encuentra respuesta en alguna persona
solitaria; pero tambin es grito, espejo, desafo. Los poetas de-
fienden algo, esa gota perenne que poco a poco forma un vasto
ocano y que no es posible desecar. Tiene razn Andrs Neu-
man cuando dice que el terreno de la poesa es pequeo, pero
est muy bien defendido por su gente. Hay revistas de poesa,
ctedras de poesa, expertos en poesa, los poetas compran libros
de poesa. Que es un mundo pequeo? S, pero completamen-
te indestructible. Este tenaz universo aferra sus races en esta
publicacin que con una entrega entusiasta aporta el trabajo de
muchos aos de poetas que no se conforman con observar la rea-
lidad: se la apropian, la renombran, la quieren transformar.
Los autores aqu reunidos tienen en comn que estudian
en la Universidad Autnoma de la Ciudad de Mxico y que desean
rendir ofrenda potica a Ral Parra; resalta y anima que cada uno

[ 11 ]
es fiel a su voz; podemos rastrear en su quehacer literario que
Parra fue un buen maestro porque ninguno lo imita, cada uno
tiene sus preocupaciones, sus recursos, su lenguaje. Sin embar-
go, la estela que deja un maestro crece cuando se percibe en sus
discpulos una gran cuota de libertad y de cultura.
Puede avistarse que a estos poetas les preocupa la reali-
dad inmediata, en eso coinciden, y abordan su relacin con ella
con una mirada aguda, quisquillosa, a ratos expresada con colo-
quialismos, con un humor que re ante lo doloroso, pero nunca lo
enmascara; no se engaan, practican una escritura honesta, con-
tempornea, que aunque deja ver su acervo de lecturas, persigue
un lenguaje personal. El desaliento se exorciza con el ingenio, con
la hilaridad; sin embargo, los poetas van ms all de la primera
contemplacin y del primer sarcasmo.
Si la actualidad propaga violencia, los poetas la nombran,
pero tambin se aferran al erotismo, al placer prximo; encuen-
tran orbes gozosas y un fuerte impulso vital para cantar lo que
los inquieta. Qu entusiasma a los poetas? El descubrimiento,
la experiencia de los grandes temas como el amor o la muer-
te, pero aqu casi no hay un tono elegiaco sino un poetizar en el
tiempo presente, a veces de manera reflexiva, aunque sin hundir-
se en los conceptos; otras, a travs de la vivacidad de los sentidos.
En este libro hallamos impulso vital, pero no alegra; los embates
de la existencia golpean a los poetas en la soledad, el desamor,
la relacin con la tecnologa, el horror social, las preocupacio-
nes de gnero, la imposibilidad de escribir. El lenguaje potico
est por fortuna intoxicado del lenguaje vivo de la calle, del ha-
bla en transformacin, y tambin est colmado de preguntas.
El poeta vive en la eterna contradiccin de nombrar de manera
Antologa de poesa

categrica, pero en cuanto lo hace vuelve a sus dudas ontolgi-


cas, as trate un tema en apariencia simple.
El poeta sabe que todo en el Universo es trascendente y
que las cosas ms sencillas encierran en su esencia algo complejo.
Tambin sabe que todo est unido por un misterio indescifrable

12
Presentacin
no es posible tocar el ptalo de una flor sin que se estremezca
una estrella, afirma Rabindranath Tagore. Lo que nadie sabe
hasta ahora es de dnde viene la poesa. Aunque el creador sien-
te la divinidad en cada verso, el asombro de la revelacin le sigue
provocando incgnitas y renovados impulsos para seguir en la
bsqueda de nuevos caminos.

Carlos Lpez

13
Introduccin

Creacin Literaria en la UACM

L
a licenciatura en Creacin Literaria de la Universidad Au-
tnoma de la Ciudad de Mxico (UACM) es la nica ca-
rrera en su especie en una universidad pblica de Amrica
Latina. Esta licenciatura fue creada en el ao 2002 y recibi a su
primera generacin de estudiantes en el ao 2003.
Creacin Literaria es una carrera con un perfil artstico en-
focada a la formacin de escritores. Aunque ofrece numerosos
cursos de teora y de crtica literaria no pretende la formacin
de tericos ni de crticos, como otras licenciaturas en letras. Por
otro lado, se diferencia de instituciones privadas que ofrecen,
nicamente, onerosos diplomados. La Universidad del Claustro
de Sor Juana ofrece la licenciatura en creacin literaria, pero a
cambio de colegiaturas costosas. La maestra y el doctorado son
la oferta educativa en Casa Lamm.
Actualmente son escasas las publicaciones que se han rea-
lizado en beneficio de los estudiantes de Creacin Literaria, to-
mando en cuenta sus diez aos de existencia. Con la ausencia de
compilaciones que den a conocer el trabajo de los universitarios
difcilmente se tendr un referente conciso sobre esta carrera.
Es importante que una universidad con una carrera de in-
vencin artstica d a conocer los trabajos creativos de sus estu-
diantes; por ejemplo, la Escuela Nacional de Danza, la Escuela Na-
cional de Artes Plsticas y la Escuela Nacional de Msica, realizan
presentaciones cada cierto periodo con la finalidad de ofrecer

[ 15 ]
una muestra de la labor artstica que desempean sus alumnos.
Una carrera en creacin literaria, como toda disciplina artstica,
necesita compartir su produccin con el pblico.
Algunas instituciones editan revistas literarias que permi-
ten un acercamiento con la obra literaria de los universitarios; un
ejemplo es la revista Punto de partida, La revista de los estudiantes
universitarios, fundada en 1966 por la UNAM. Esta revista nos
facilita el dilogo con los escritores universitarios ms represen-
tativos a nivel nacional; sin embargo, no constituye una muestra
de la produccin de sus propios estudiantes, ya que su misma
visin no lo exige tanto como debiera exigirse en la UACM por
la licenciatura en Creacin Literaria. Un caso excepcional es el
de las antologas de Literatura Joven Universitaria que cada ao
edita la Universidad Autnoma de Nuevo Len.
Este libro que tiene en sus manos contiene una cuidadosa
seleccin de poemas que ameritan salir de las aulas de la UACM.
Es tambin una motivacin para que las futuras generaciones de
la licenciatura en Creacin Literaria exijan y establezcan un so-
porte oficial para la publicacin de su obra creativa.

Acerca del ttulo del libro

Al pensar en la elaboracin de esta muestra de poesa, y confor-


me el proyecto iba adquiriendo forma, se apoder de m la ima-
gen de la crislida, pensando a la UACM como una cmara de
metamorfosis humana.
La metfora me pareci acertada, slo necesitaba encon-
trar la enunciacin precisa de la idea. Releyendo el libro de Ral
Antologa de poesa

Parra, Para que un poeta lo escriba en la pared de un bao pblico,1


encontr el siguiente poema:

1
Parra, Ral, Para que un poeta lo escriba en la pared de un bao pblico, Mxico, Praxis,
1992, p. 24.

16
Introduccin
Qu tristemente hermoso es

Qu tristemente hermoso es
tiene la desgracia de ser el botn
que siempre
infinitamente
estar a punto de reventar
para escupirle al sol sus ptalos negados
Esta flor invertida
vecina de la orqudea de Venus
es el misterio
el delicioso capullo de los colepteros enfebrecidos
inconformes
que depositan con furia entre carne dulcsima
y anillos de seda
millones de hombres muertos

Leer la frase, los colepteros enfebrecidos, fue deslum-


brante y revelador. La relectura de la obra de Parra, generosa-
mente, me dio el ttulo para este libro: la analoga entre el capullo
y nuestra casa de estudios. La UACM es el misterio/ el delicioso
capullo de los colepteros enfebrecidos, nuestro punto de par-
tida, el lugar donde nos formamos como escritores y de donde
salimos metamorfoseados para emprender el vuelo por los aires
de la literatura.
Este libro, adems de ser una muestra de poesa universi-
taria, es tambin un homenaje a Ral Parra (1958-2008), poeta
y narrador, ganador del Premio Nacional de Poesa Al Chumace-
ro 1999. Su obra y su personalidad se resumen en los siguientes
libros: Para que un poeta lo escriba en la pared de un bao pbli-
co, La muerte sobre la muerte, Poemas de la carne, Hojas, Petra!
Poenotas y Narranadas y, pstumamente, Prrafos, parrafitos y
unas crnicas, todos ellos publicados por Editorial Praxis.

17
Las personas que conocieron a Ral Parra concuerdan que
era un hombre sumamente inteligente y dotado de un gran sen-
tido del humor. Parra usaba el cabello largo y haba perdido sus
dos piernas y un brazo; pero, a pesar de ello, tena la capacidad
de burlarse de s mismo diciendo que era afortunado por ser uno
dentro de un milln de personas con la enfermedad que lo iba
degradando.2 Comenta Jos P. Serrato, su alumno, por medio
de quien conoc la obra de este poeta guerrerense. Una muestra
del humor de Parra ante su enfermedad es el siguiente poema
autobiogrfico:

Smil3

Mi coche
como mi vida
se est cayendo a pedazos

Sin duda, la obra de Parra, escrita con pulso irreverente,


merece ser leda y discutida. Este poeta dej escuela y abri las
puertas de la creacin en las diversas generaciones de sus talle-
res.4 La principal razn por la que me atrajo la poesa de Parra es
su profunda madurez de pensamiento. Este tipo de poesa est li-
bre de adornos y se limita a plasmar el pensamiento a travs de la
brevedad. En su libro Hojas, Petra! Poenotas y Narranadas,5 Ral
Parra nos muestra su arte potica en una poenota: La vida es
breve, mi poesa ms. Su obra apuesta por las formas breves, lo
que hace del autor un sujeto inteligente que exige a sus lectores
complicidad y capacidad de entendimiento. El estilo de Parra nos
remite a los famosos versos de Len Felipe:
Antologa de poesa

2
Ral Parra padeci una enfermedad llamada Buerger (tromboangetis obliterante, que
obstruye la circulacin de la sangre), causada por su adiccin al tabaco.
3
Idem.
4
Durante 20 aos Parra coordin talleres literarios en varias cedes de la UNAM.
5
Parra, Ral, Hojas, Petra! Poenotas y Narranadas, Mxico, Praxis, 2004.

18
Introduccin
Deshaced este verso,
quitadle los caireles de la rima,
el metro, la cadencia
y hasta la idea misma...
Aventad las palabras...
y si despus queda algo todava
eso
ser la poesa.

La poesa desnuda es lo que busc Parra en la brevedad de


sus poemas que logran una enorme contundencia. No es necesa-
rio extenderse para proponer algo; un buen poema puede decir
muchas cosas en unos cuantos versos, puede sacudir al lector y
derrumbarlo en una alfombra de sentimientos.
Parra es un poeta cuasi desconocido, un poeta de culto
que ha dejado una estela y una visin de la poesa digna de re-
flexionarse. Este homenaje es una invitacin a su lectura.

Los colepteros enfebrecidos y otras


antologas de estudiantes de la UACM

Los colepteros enfebrecidos ofrece a sus lectores una seleccin de


poemas que los escritores noveles hemos desarrollado en las aulas
institucionales. La UACM esconde en sus salones de clases a bue-
nos escritores en formacin que necesitan un espacio, como este
libro, para que sus textos emprendan un dilogo con la literatura
actual: indispensable para la creacin de una identidad propia.
Con esta muestra de poesa se puede evaluar el funciona-
miento de la carrera en Creacin Literaria y revisar el desarrollo
creativo de sus estudiantes, quienes disponen, semestre tras se-
mestre, de una serie de cursos indispensables para su formacin
acadmica. La elaboracin de antologas que renan el trabajo

19
creativo del alumnado no es una actividad reciente. A partir de
los aos sesenta del siglo pasado proliferan en Mxico las antolo-
gas, muestras y recuentos de poesa,6 dice Carmina Estrada. En
la UACM existen antologas de estudiantes de Creacin Literaria
y fueron elaboradas por sus acadmicos. Dichos libros son: As
nacieron,7 antologa de poesa realizada por Xhevdet Bajraj; Cen-
zontle de papel,8 antologa de relatos realizada por Teresa Dey; y
Cada chango a su mecate. Antologa del taller de Hugo Hiriart,9
que rene textos de varios gneros literarios. Paralelamente
existe la antologa de cuento Funk,10 realizada por Jacobo Vene-
gas, estudiante de Creacin Literaria del Plantel Cuautepec.
El hecho de que un estudiante realice un trabajo editorial
puede brindar otra perspectiva muy diferente a la del acadmico;
es decir, siguiendo la tnica de Carmina Estrada, estoy hablan-
do del toro desde el ruedo.11 Los colepteros enfebrecidos es un
trabajo realizado desde la perspectiva de un estudiante que res-
ponde a la necesidad de publicar su obra y la de sus compaeros.
Realizar antologas que renan textos de alumnos de la
UACM merece fundamentos con mayor validez para el lector.
Con esta muestra de poesa se pretende dar a conocer la obra
de 14 estudiantes nacidos en la dcada de los 80, hacer una eva-
luacin de la licenciatura en Creacin Literaria a sus diez aos de
existencia y determinar su funcionamiento a travs del trabajo
creativo de sus estudiantes.
Dentro de la UACM han existido revistas literarias como
Intravenosa y Letras Universitarias, realizadas por estudiantes. Es-

6
Estrada, Carmina, Un orbe ms ancho. 40 poetas jvenes (1971-1983), Mxico, UNAM. Ed.
Punto de Partida, 2005.
Antologa de poesa

7
Bajraj, Xhevdet, As nacieron, Mxico, Giser y Toshka, 2005.
8
Dey, Teresa, Cenzontle de papel, Mxico, Coleccin Editorial El Zcalo, 2010.
9
Hiriart, Hugo, Cada chango a su mecate, Antologa del taller de Hugo Hiriart, Mxico, Co-
leccin Editorial El Zcalo, 2010.
10
Venegas, Jacobo, Funk, Mxico, UACM, 2009.
11
Idem.

20
Introduccin
tas revistas fueron elaboradas gracias a los apoyos que brinda la
universidad a travs de la Coordinacin de Servicios Estudiantiles
(CSE) y la Comisin de Apoyos Estudiantiles, aunque actualmen-
te ya no se editan.
Otra revista literaria publicada en la UACM es Palabrijes;
en ella hemos tenido la oportunidad de publicar varios de los es-
tudiantes de Creacin Literaria, e incluso otros que cursan otras
carreras. Bajo la direccin de Maya Lpez, Palabrijes fue lanzada
en el ao 2007 y poco a poco ha ido despertando el inters de
ms lectores.
Las revistas que han nacido en la UACM son soportes con
calidad; no obstante, su finalidad es la promocin interna. Estas
revistas no traspasan la frontera de la institucin y se distribuyen
entre los mismos miembros de la comunidad universitaria; por tal
motivo, pretendo difundir nuestra poesa fuera de la institucin
a travs de este libro. Una de las principales metas es que se dis-
tribuya en diferentes bibliotecas de la zona metropolitana y de
otros estados de la Repblica. La literatura hecha en las aulas de
la UACM necesita volar hacia otros parajes; Los colepteros enfe-
brecidos es un medio para conseguirlo. Esta muestra de poesa no
slo va dirigida a la comunidad estudiantil, sino a sectores ms
amplios, ya que se apuesta tambin por su promocin y su distri-
bucin gratuita en lnea.

Sobre la seleccin de los textos

En el mes de octubre del ao 2011 recib un correo electrnico que


me enviaron los miembros de la Comisin de Apoyos Estudianti-
les: me informaron que el proyecto de Los colepteros enfebrecidos
haba sido seleccionado para desarrollarse en el ao 2012. Acto
seguido a las asesoras con mis profesores, convoqu, primera-
mente, a los alumnos de Creacin Literaria del Plantel San Lorenzo
Tezonco, en el que estoy matriculado. Despus de lanzar la con-

21
vocatoria a travs de los medios virtuales, obtuve pronta respues-
ta de mis compaeros. Recib textos de estudiantes de Creacin
Literaria de diversas edades y de diversas generaciones. Durante
las siguientes semanas ampli la convocatoria a las sedes Del Va-
lle y Cuautepec, planteles de la UACM en los que tambin se im-
parte la carrera en Creacin Literaria, y obtuve, del mismo modo
que en San Lorenzo Tezonco, una respuesta satisfactoria.
Al cierre de la convocatoria obtuve 36 tentativas de estu-
diantes. La seleccin la realic junto con tres de mis compaeros
estudiantes; con ellos conformo el Gerin de Poesa, un colectivo
del que hablar ms adelante. La seleccin definitiva, despus de
un trabajo minucioso, fue de 14 autores. No pude incluir a los
36 compaeros porque que el objetivo de este libro no es abar-
car a un amplio grupo de autores. Algunas compilaciones, como
la Asamblea de poetas jvenes de Mxico,12 realizada por Gabriel
Zaid, hacen una reunin de muchos autores, con la finalidad de
que el tiempo determine a los verdaderamente imprescindibles.
Creo que la calidad de una muestra de poesa no se halla en el n-
mero de autores, sino en su propuesta. Con este trabajo editorial
no pretendo agotar el terreno de la compilacin de poesa en la
UACM; mi intencin es mostrar, nicamente, a un sector, y ceder
el paso a otros compaeros que, despus de este trabajo, idearn
otros proyectos en los que incluyan a los autores que no aparecen
aqu y que vale la pena leer.
Cuando un lector se acerca a diferentes antologas, aun-
que no todas ellas estn justificadas y se realicen por el simple
pretexto de la compilacin sin fundamento, ste adquiere una
visin ms completa sobre una generacin, alguna corriente lite-
raria o cierto tema. Su perspectiva ser semejante a la de la mos-
Antologa de poesa

ca: cada celda del ojo de este insecto se une con las otras para
efectuar una visin de conjunto. Un lector que ha consultado las

12
Zaid, Gabriel, Asamblea de poetas jvenes de Mxico, Mxico, Siglo XXI, 1980.

22
Introduccin
antologas, antes citadas, elaboradas por los acadmicos de la
UACM, podr tener un criterio ms completo sobre la carrera en
Creacin Literaria cuando lea tambin este libro.
Esta muestra de poesa rene textos de jvenes nacidos
en los aos 80. Podemos decir que est en dilogo directo con
otras de la misma ndole, como la muestra de Poetas nacidos en
la dcada de los 80,13 realizada por Ivn Cruz Osorio y Al Calde-
rn y publicada en la revista Alforja. En su conjunto, el trabajo de
ambas partes puede ampliar el panorama de los poetas nacidos
en esta dcada. Lo mismo ocurre con la antologa Moebius,14 ela-
borada por Estephani Granda Lamadrid y publicada por Sikore
Ediciones, en la que tambin encontramos las voces reunidas de
poetas mexicanos nacidos en la dcada de los 80. Estas muestras
de poesa conforman una triada de ediciones que se complemen-
tan entre s. Con estos trabajos, y con otros de la misma natura-
leza que circulan a lo largo del pas, se podra realizar una nueva
antologa que rena los mejores textos de esta panormica. Las
antologas y las muestras de poesa profundizan y amplan el ho-
rizonte de la sensibilidad artstica de un momento determinado.
Estos trabajos editoriales tienen sentido en funcin de otros de
la misma ndole. Vienen al caso unos versos del poeta Eduardo
Langagne: No son voces personales lo que construimos ahora,
es una sola voz, una palabra indeleble, indestructible. Un home-
naje al idioma. Un territorio vigente en el futuro.15 La reunin de
textos de diferentes autores no es ms que un homenaje a deter-
minada poca y al idioma, un soporte indestructible que puede
servir como referente en el futuro.
Si bien es difcil realizar una muestra de poesa, es an
ms laborioso cuando se hace con textos de autores que no han

13
En el verano del 2006, la revista de poesa Alforja public en su nmero 37 una muestra
de poetas mexicanos nacidos en la dcada de los 80.
14
Granda, Estephani, Moebius, Mxico, Sikore Ediciones, 2011.
15
Langagne, Eduardo, Lo que pas esto fue, Mxico, Ed. La Cabra, 2009, p. 34.

23
publicado su obra. Generalmente, los antologadores hacen el ras-
treo de los textos por medio de una bibliografa, como es el caso
de Ernesto Lumbreras y Hernn Bravo Varela, quienes explican,
en el prlogo de El Manantial Latente. Muestra de poesa mexica-
na desde el ahora 1986-2002,16 cmo fue que realizaron, a travs
de antologas y revistas, la reunin de sus autores. Otro caso si-
milar es el del Anuario de poesa mexicana, de Tedi Lpez Mills y
Luis Felipe Fabre, que ao con ao compilan textos publicados
en diferentes revistas literarias. En estos ejemplos el compilador
depende mucho de los soportes existentes y no publica a autores
que no aparezcan en ellos. Los colepteros enfebrecidos se aven-
tura a hacerlo. Los textos vrgenes que aqu se renen son una
muestra de los primeros trabajos de estos jvenes universitarios
nacidos en diferentes estados de la Repblica Mexicana, y con-
tribuyen a perfilar el paisaje potico de la generacin de los 80.
Tambin debo mencionar que existieron diversos fac-
tores que me impidieron realizar una antologa de estudiantes
de la UACM, considerando una antologa como la muestra de lo
ms representativo de un sector. El caso ms comn fue la res-
puesta inesperada de algunos compaeros que eran fundamen-
tales y que no se interesaron en participar en esta muestra. Un
caso sobresaliente, en el mbito de la poesa, es el del estudiante
Emiliano Rafael Arstegui Manzano, ganador del 6o. Premio In-
ternacional de Poesa Gilberto Owen Estrada, convocado por la
Universidad Autnoma del Estado de Mxico. Este tipo de reco-
nocimientos son muy importantes para la UACM y son tambin
un medio para valorar la licenciatura en Creacin Literaria.
Ante el problema de los compaeros de la generacin de
los 80 que se negaron a participar, no considero este libro una an-
Antologa de poesa

tologa, sino ms bien una muestra de poesa. Pienso que una vez
que este proyecto salga a la luz pblica, los estudiantes tendrn

16
Lumbreras, Ernesto y Hernn Bravo Varela, El Manantial Latente. Muestra de poesa mexi-
cana desde el ahora 1986-2002, Mxico, Conaculta, 2002.

24
Introduccin
ms confianza en los proyectos futuros. Es normal que muchos
compaeros duden de un proyecto serio, como ste, porque ca-
recemos de una tradicin de publicaciones en la UACM.

Sobre la generacin de los 80

Ivn Cruz Osorio y Al Caldern, en el prlogo de Poetas nacidos


en la dcada de los 80, sostienen que los autores jvenes de la ac-
tualidad, en su mayora, nacieron en esta dcada, por lo que existe
un gran nmero de escritores de la misma edad compitiendo en
el mbito de la poesa. Esta explosin demogrfica de escritores
jvenes, de la que tambin habl Gabriel Zaid en su Asamblea de
poetas jvenes de Mxico,17 nos impide tener una visin completa
de su generacin, porque da a da emergen nuevos escritores y
no todos tienen el medio para dar a conocer su obra. Un puente
que facilita la lectura de un sector amplio de autores, como el de
la dcada de los 80, son las antologas y las muestras.
En la actualidad existen dos formas muy notorias de pu-
blicar autores noveles. La primera se ubica en la idea del negocio:
algunos editores publican, despus de cobrar cierta cantidad de
dinero, las nuevas expresiones poticas llevando a segundo plano
la calidad literaria del trabajo. La segunda se halla en la modalidad
de los concursos de poesa, en los que los jvenes participamos,
muchas veces, con la finalidad de ganar la publicacin de nuestra
obra. Increblemente se publican libros malos por montones, y las
obras que realmente proponen lecturas interesantes se juegan el
premio en los certmenes donde slo una de ellas es publicada.
Estas formas de publicacin tienden a fortalecer las lites nacio-
nales y regionales de la literatura, las que no quedan fuera tampo-
co de las becas destinadas a la creacin literaria. Otras formas de
publicacin que empleamos mucho los aspirantes a poetas son

17
Idem.

25
blogs, revistas electrnicas e impresas, editoriales independien-
tes, ediciones cartoneras y artesanales, entre otras.
Pero ms all del tema de las publicaciones, existen ciertas
particularidades entre los autores nacidos en la dcada de los 80.
En septiembre del ao 2009 apareci en el peridico Milenio una
nota de Heriberto Ypez, en la que habla de La Generacin Yo-
yo,18 refirindose a la generacin de los 80 y 90. Retomo esta
crtica porque encuentro en ella mucha validez. Creo que una
buena parte de los escritores de los 80 tienen como bandera la
figura de Narciso. Ypez menciona que el internet es lo mximo
para los Yo-yo. Los medios electrnicos nos han hecho generar-
nos una idea aberrante sobre la magnificencia de lo inmediato:
un autor joven suele creer que un texto, escrito la noche ante-
rior, pasar a la eternidad; suele presumirlo en diferentes encuen-
tros y piensa que es una joya indestructible. Pocos en realidad
consiguen un texto valioso, pero esto no se logra con la visin
de lo inmediato, no ante lo fugaz, sino por medio del trabajo en
progreso. Otro punto que se toca en el artculo de Ypez es la
fama, el centro de la efervescencia humana que se apodera de
grandes sectores de la sociedad a travs del internet. Pareciera
que los jvenes de la actualidad, en su mayora, escriben por lo
significativo que resulta el ttulo de escritor. Escriben, o intentan
hacerlo, para erigirse como una figura que va esculpindose a s
misma en el muro de las redes sociales, colchn sobre el que des-
cansa el egocentrismo, la vanidad y la autopromocin a travs
de una constante campaa publicitaria. Ypez menciona que los
Yo-yo, en el mbito de la literatura, no innovan, adaptan. En este
punto no creo que la adaptacin sea negativa, sobre todo por-
que nos remite al pasado. En su lucha por innovar la literatura,
Antologa de poesa

las vanguardias literarias negaron la tradicin; pero eso no pudo


durar mucho tiempo porque la tradicin es fundamental. Ser

18
Ypez, Heriberto (12 de septiembre del 2009). La Generacin Yo-yo. Milenio.
Recuperado de http://www.milenio.com/cdb/doc/impreso/8639981

26
Introduccin
conscientes del pasado nos ubica en el presente. Esto no signi-
fica que Ypez apunte mal: nuestra generacin ya no adapta; se
apropia de la literatura que ya existe y declara, descaradamente,
que ha innovado. No se puede innovar si no es por medio de la
tradicin. Francis Bacon seala: Sera disparatada creencia, que
se destruira por s misma, esperar que lo que jams se ha hecho
puede hacerse, a no ser por medios nunca hasta aqu emplea-
dos. La vulnerabilidad de las vanguardias es evidente porque
los medios que utilizaron ya haban sido dispuestos. Uno de sus
errores fue negar, de manera rotunda, la tradicin para generar
el espejismo de lo novedoso. Podramos hablar de lo original y
no confundirlo con lo nuevo. Quizs no hay nada nuevo en los
hemisferios de la literatura. Si se escribe es porque hay una tradi-
cin y, siguiendo a Borges, la lengua misma es tradicin.
Es importante redimensionar las obras del pasado porque
nos permiten entender el presente y nuestras nuevas necesida-
des. El ser humano ha comprendido su existencia por medio de
la historia y del arte. Una buena obra es un canto prolongado
por los siglos. Negar el pasado es la muerte del espritu. Si los
jvenes vivimos en una laguna con intereses perecederos, una
actitud de individualismo y de negacin, la literatura no traer
grandes propuestas; incluso el pas no emerger de la cina-
ga. Desde que nacimos hemos sido una generacin reprimida,
anestesiada por el miedo a la rebelin. El asesinato de Colosio,
el terrorismo, la cada de las Torres Gemelas, el levantamiento
del Ejrcito Zapatista de Liberacin Nacional, el fraude electoral
de 1988 y los fraudes posteriores, la guerra contra el narco-
trfico, la crisis econmica y los desastres naturales de los lti-
mos aos y los ltimos das,19 son una muestra del temor y del
odio que no podemos negar en ningn mbito. Vivimos ante el
pnico. Los poemas contenidos en Los colepteros enfebrecidos

19
Escrib esta introduccin en el mes de marzo del 2012: coincidi con el temblor del da
21, que record el ocurrido en 1985 en la Ciudad de Mxico.

27
dejan ver el miedo, el deseo de enfrentarse al monstruo nietzs-
cheano, el monstruo ms fro de todos los monstruos fros.
En este libro, el pavor se convierte en llanto, en grito, en solilo-
quio, en irona, en humor. Todo lo que escribimos es resultado
de nuestra realidad actual, como dice George Steiner: Lo que
el hombre ha hecho al hombre, en una poca muy reciente, ha
afectado a la materia prima del escritor la suma y la potencia-
lidad del comportamiento humano y oprime su cerebro con
unas tinieblas nuevas.20 No se puede ocultar el sentimiento, no
se puede dejar en el olvido todo lo que se ha construido hasta
el presente. Necesitamos cuestionarnos Dnde estamos aho-
ra? Hacia dnde vamos? Es momento de replantearnos varios
conceptos: repensar el trmino literatura mexicana, como ex-
presa Vctor Barrera Enderle en su ensayo Lecturas cruzadas: la
crtica literaria reciente.21 En el Mxico de hoy no se lee mucha
poesa como en pocas precedentes, cuando sta era funda-
mental para la vida del hombre. Me gustara que la poesa en
Mxico se viera como la sovitica, segn dice Inna Rostovtseva:
Se considera parte inalienable de la patria: como los bosques,
los ros, los minerales tiles y las fuentes de aguas medicinales.
Se considera patrimonio nacional, algo valioso que uno puede
y quiere compartir con sus amigos.22 Nuestra generacin debe
ser el torbellino que proponga otra mirada. Necesitamos ir de
un Yo-yo a un Nosotros. La poesa y todos los gneros literarios
deben compartirse, porque no son joyas con un campo de fuer-
za impenetrable.
Los autores de poesa debemos dejar a un lado el peso del
trmino poeta que hincha de vanidad. Hace falta humildad, la
Antologa de poesa

20
Steiner, George, Lenguaje y silencio. Ensayos sobre la literatura, el lenguaje y lo inhumano,
Barcelona, Gedisa, 2000.
21
Tomado de Novosantanderino, Anuario de Letras del Departamento de Lenguas Moder-
nas de la Universidad de Texas en Brownsville y Texas Southmost College.
22
Rostovtseva, Inna, Antologa de Poesa Sovitica 1960-1980, Mosc, 1980, p. 4.

28
Introduccin
capacidad de entender el presente y la tica necesaria para tener
una visin multidimensional. Ser poeta implica tener aos de la-
bor potica.
Pensar en el proyecto de Los colepteros enfebrecidos tra-
jo a mi mente la problemtica de la apata y el egosmo, el des-
entendimiento social y la necesidad de cambiar el paradigma
de la decadencia. Este libro que tiene en sus manos es la pro-
yeccin de una literatura honesta que se libera de la pretensin
para penetrar en sus lectores. sta no es una obra individual, es
un trabajo en conjunto que se complementa con cada uno de
sus elementos, por muy distintos que sean. Si bien algunos de
los autores contenidos en este libro tienen una voz ms madura
que otros, no cabe duda de que los 14 tienen una propuesta y
no se quedan en la inmediatez, ni en el simple hecho de crear
una estructura potica sin contenido. Los poemas proponen
una reflexin, hacen pensar a los lectores; en ellos se fusionan
el lenguaje y el pensamiento para ofrecer un producto genero-
so. Los textos aqu reunidos tienen la fuerza para dialogar con
el lector. Estos autores de los 80 hallarn su hogar en la altura:
los colepteros cantan en el aire.

Los colectivos de literatura en la UACM

Un fenmeno interesante en la UACM son los colectivos que se


forman con la finalidad de establecer una propuesta esttica.
Qu importancia tienen estos grupos literarios de la UACM? Su
importancia se encuentra en el trabajo en equipo y su funcin
como promotores de la literatura que se realiza en la universidad.
De los grupos ms activos, puedo mencionar a Los intra-
venosos, del plantel Del Valle. Dicho grupo se ha encargado de
trabajos relacionados con la edicin; ellos fueron los que crearon
la revista antes mencionada, Intravenosa. Es importante resaltar
que entre sus miembros est Omar Delgado, ganador del VIII Pre-
mio Internacional de Narrativa 2010.

29
En el plantel Cuautepec, uno de los grupos ms activos en
la creacin literaria es el Colectivo Plectro. Dos de los antologa-
dos en esta muestra pertenecen a este grupo.
En el plantel San Lorenzo Tezonco existen varias orga-
nizaciones estudiantiles con intereses literarios; una de ellas es
Gerin de Poesa, el colectivo al que pertenezco y del que me
corresponde hablar.

Gerin de Poesa

En el ao 2010, la Academia de Creacin Literaria organiz un


certamen de literatura para sus estudiantes. El premio consisti
en un retiro para escritores: los ganadores del certamen realiza-
ron un viaje a la Ciudad de Oaxaca de Jurez, con la finalidad de
tener tiempo y espacio para trabajar en un proyecto de creacin.
Fuimos cuatro los ganadores: tres de San Lorenzo Tezonco: Ju-
ventino Gutirrez, Jos P. Serrato y yo; uno ms fue Daniel Quin-
tero Cravioto, de Cuautepec. Este encuentro de estudiantes en
Oaxaca abri muchas puertas para cada uno de nosotros. Tras-
cendieron las reflexiones que hicimos en aquel lugar. Empez una
convivencia ms cercana entre los tres estudiantes de San Lo-
renzo Tezonco y surgi la idea, vaga en ese entonces, de confor-
mar un grupo con el simple pretexto de la amistad y la creacin
literaria. Posteriormente, la idea antes incipiente fue hacindose
concreta: constantemente nos reunamos a dialogar sobre litera-
tura y la camaradera se acrecent. Estaba latente la conviccin
de no crear un grupo sin sentido, es decir, fraguado slo por ami-
guismo, sino un grupo que se fincara en ciertos principios. Inicial-
Antologa de poesa

mente ideamos varios nombres, pero ninguno satisfizo nuestra


inquietud. Ante la cuestin de por qu formar un grupo en un
momento histrico en el que pareciera que las agrupaciones en-
tre escritores tienen ms un carcter de mafia, y que reunirse
es casi un lugar comn, dudamos incluso de la pertinencia del

30
Introduccin
grupo. Pero hemos sacado en claro que la poesa es un ejercicio
de alteridad. Ningn escritor escribe para s mismo. Combatien-
do esa idea de que la poesa es un ejercicio para la intimidad y que
ha vuelto a los escritores introvertidos y hermticos, autopro-
pagandsticos y afectos al protagonismo, decidimos mantener el
proyecto y definir nuestra poesa como algo que se entrega, que
se comparte y se trabaja dialgicamente.
Con esta justificacin indagamos ms seriamente en un
nombre que nos definiera. Creamos entonces un grupo en una
red social con el fin de acortar distancias y hacer un dilogo cons-
tante. ramos tres y tenamos la conviccin de la importancia de
la tradicin. Recogiendo esas coincidencias propuse el nombre
de Gerin, que al mismo tiempo que recupera y redimensiona
el mito griego, nos vino muy bien por el nmero de integrantes y,
haciendo un juego metafrico, las armas de Gerin representan
la tcnica. Este monstruo mitolgico fue retomado por Dante,
quien lo representa como una bestia con cara de hombre hones-
to pero con cola de escorpin: alegora precisa para nuestra in-
tencin de mostrar una poesa honesta y poseedora de un tono
irnico representado por el aguijn del monstruo. Ms tarde, en
nuestro trajinar por los talleres de la universidad conocimos a un
nuevo elemento de nuestro grupo: Lzaro Tello Pedr, que, al
igual que Juventino, es originario de Oaxaca. Lo que nos atrajo
de Lzaro fue su manejo de lenguaje y las coincidencias literarias,
adems de su nfasis en mirar hacia la tradicin. Textualmente
nos dijo: Pareciera que hoy la rebelda consiste en voltear hacia
la tradicin. Nos identificamos con l instantneamente: Gerin
de Poesa tena un cuerpo ms. Podemos decir que, si existe una
especie de manifiesto dentro del grupo, ste se enfoca en re-
montarnos a la tradicin.
Gerin de Poesa se define por las siguientes caractersticas:

31
La marginalidad

Este grupo se form en una zona marginada de la Ciudad de M-


xico. Si nuestra universidad no existiera, hubiera sido imposible
nuestra conformacin. El plantel donde estudiamos se encuentra
ubicado en el pueblo de San Lorenzo Tezonco: es el ro que con-
voca a los venados para que se acerquen a beber. La UACM nos
permiti dialogar y relacionarnos con excelentes escritores que
se han dado a conocer por lo representativo de sus obras; de otra
forma, difcilmente habramos tomado cursos con ellos si no exis-
tiera la carrera en Creacin Literaria. La UACM es un bastin que
est configurando generaciones de escritores, en cuanto ofrece
un programa educativo que permite una perspectiva comn en-
tre sus alumnos.
Somos un grupo que naci en la marginacin, por consi-
guiente, tratamos de mantenernos activos en estas zonas. Ser
generosos implica democratizar la literatura y abolir la idea eli-
tista del ejercicio literario y, por extensin, de las artes. Se ha
pensado que la literatura es un producto de y para las lites, una
visin que se ha venido perpetrando a lo largo de la historia. Lo
que se pretende con este libro es la bsqueda de la proximidad
entre el escritor y sus lectores, es decir, romper la marginalidad
retroalimentando a los marginados. Como mencion antes, esta
muestra de poesa est destinada a varios sectores, entre ellos, y
principalmente, a los usuarios de las bibliotecas pblicas.
El centro de la ciudad ha sido un referente cultural durante
mucho tiempo; incluso se ha hablado del eje Condesa-Polanco-
La Roma, en el que se concentra la mayora de la actividad cul-
tural de la ciudad. En las zonas alejadas de este eje tambin se
Antologa de poesa

desarrollan actividades culturales de importancia. Nosotros tra-


tamos de explorar el arte escondido en los lares ms recnditos
de nuestra ciudad. Hemos realizado algunas actividades, como
recitales, tuit callejero, salas de lectura, entrevistas a escritores
y, sobre todo, talleres de poesa para trabajar nuestros textos.

32
Introduccin
La periferia nos ha alejado del negocio literario para conducirnos
a una produccin genuina.

La irona

La irona siempre nos atrajo desde el aula con uno de los poe-
tas contemporneos ms importantes de Mxico: Hctor Ca-
rreto. Esta admiracin se increment a medida que conocamos
su obra. Nos dimos cuenta de que la irona es un recurso que
usamos en nuestra vida cotidiana. Nuestra meta fue, desde un
principio, tratar de introducir esa irona en el terreno potico. Se
nota en cada uno de nosotros una diferencia de escritura, unas
veces llana, otras con el tono de la irona liberado en el poema. El
mismo personaje que dio nombre al grupo alude a la representa-
cin dantesca del monstruo con cara de hombre honesto y cola
de escorpin, excelente para ilustrar la irona. Ya lo dice Lorenz:
El humor y la sabidura son las grandes esperanzas de nuestra
cultura.23

La tradicin

Cada uno de nosotros busca remontarse a la tradicin. Tenemos


conciencia de lo significativo que es la temporalidad para el ser
humano. El conocimiento se construye histricamente. La poe-
sa es una forma de buscar el conocimiento y se construye de la
misma manera. El poeta deja su huella en el tiempo que le toca
vivir. Es muy sabido que se puede conocer a un pueblo a travs
de sus poetas, seal de que stos desempean un papel impor-
tante para la memoria. Un poeta es la voz de una comunidad, el
que guarda la historia, el que la recrea. El testimonio del poeta
funciona como una propuesta de verdad que sirve para elaborar

23
Mungua, Zatarain, Irma y Gilda Rocha Romero, Diccionario antolgico de aforismos. M-
xico, UAM, 2007, p. 197.

33
conceptos: el amor, el odio, la muerte, el dolor, la vida, etc., que
sern diferentes a travs del tiempo. Cada lengua y cada nacin
engendran la poesa que el momento y su genio particular les
dictan,24 dice Octavio Paz. No se puede cantar la poesa si no
se tienen presentes los cantos ancestrales. Partir de la nada es
imposible. El poeta sabe que es poeta porque antes que l existie-
ron otros poetas. El primer poeta cre la lengua. Nosotros escri-
bimos porque somos herederos de esa lengua. Lo que hacemos
es una Imitacin de los antiguos, copia de lo real, copia de una
copia de la Idea.25
Nos remontamos a la tradicin recuperando las formas
clsicas y los estilos o, simplemente, a travs de las adaptaciones.
Para nosotros negar la tradicin es un hecho absurdo; es como de-
cir que hemos nacido sin madre: un hecho imposible. La innova-
cin en la literatura importa poco. Lo que realmente vale la pena, y
lo han demostrado las grandes obras, es la propuesta del autor en
funcin del uso del lenguaje y el pensamiento, adems de la apro-
ximacin hacia los perfiles de nuestra condicin humana.

La alteridad, la generosidad y la honestidad

La generosidad en la poesa es de suma importancia. Tomando


en cuenta este punto realizamos el dictamen de los textos que
conforman este libro. La poesa, estamos convencidos, es un ejer-
cicio de alteridad: uno escribe porque tiene algo que decir y que
compartir con los otros. No se puede escribir para uno mismo,
porque ningn arte est completo si no llega a los receptores. Si
se desea compartir una obra de arte, el emisor debe ser genero-
so con su receptor y tiene el deber de ofrecerle una pieza lcida.
Antologa de poesa

En el caso de la poesa, el autor debe proponer poemas con los

24
Paz, Octavio, El arco y la lira, Mxico, FCE, 1956, p.16.
25
Idem, p. 13.

34
Introduccin
elementos necesarios para su entendimiento y su goce. Todo tex-
to literario tiene que funcionar por s solo; una de las formas de
conseguirlo es otorgndole, en el texto mismo, las claves al lector.
Entendemos el poema como un cuerpo constituido con
cabeza, brazos y piernas, un sistema perfectamente planeado
para que no se derrumbe. Creemos que muchos textos fracasan
porque carecen de generosidad. Cuando un texto egosta llega a
las manos de un lector, ste se siente inmerso en un torbellino de
frases oscuras. La poesa debe ofrecer una verdad y no tiene que
confundirse con las adivinanzas. Cuando el autor tiene presentes
la generosidad y la alteridad sabe que no puede actuar de una
manera deshonesta, no puede tratar temas que desconoce o que
no le conciernen. La escritura es resultado del alud vivencial que
necesitamos reelaborar a travs de un texto. La experiencia es
fundamental para ofrecer una obra sincera y con una propuesta
de verosimilitud.

La poesa progresiva

Tenemos presente la idea de que un poema nunca estar ter-


minado. Con esta premisa efectuamos un taller de poesa per-
manente para corregir nuestros textos. Muchos escritores tienen
conciencia del progreso de su obra; Jos Emilio Pacheco, es muy
sabido, constantemente corrige sus obras. Ya he mencionado
que concebimos el poema como un cuerpo, pero ste no quedar
listo de un solo golpe. Toda obra literaria debera ser concebida
como un ser vivo: se gesta, nace, crece, se transforma y est en
movimiento; pero es un ser vivo que no tiene como destino la
muerte. El progreso es cambio, es la cauta agitacin de un cuerpo
que busca la mejora, no la decadencia. La poesa est viva como
su autor; incluso, cuando el autor muere, junto con su poca, la
obra vuelve a renacer en las futuras generaciones. La obra, en
una poca diferente a la que fue elaborada, ofrecer nuevas lec-
turas: ser recreada y adaptada en los nuevos escenarios. Octavio

35
Paz habla de esta visin en el prlogo de Poesa en movimiento.26
El arte est en progreso, se recrea constantemente, se metamor-
fosea segn las necesidades de cada poca.
En Mxico han surgido grupos literarios durante todo el
siglo XX. El Ateneo de la juventud, los Contemporneos, los Estri-
dentistas, el Movimiento Infrarrealista, son algunos ejemplos de
estas organizaciones conformadas por escritores que han dejado
huella en nuestro pas. Habr quien se pregunte: para qu reali-
zar grupos literarios en la actualidad si ya lo hicieron en otras po-
cas alrededor de todo el mundo? La organizacin es una estrate-
gia para que los autores mejoren su literatura, abran espacios y
reflexionen sobre su propia obra. No hay nada tan humano como
la organizacin, la reflexin, el debate, el acuerdo, la propuesta y
la convivencia por medio de las letras. La poesa es un dilogo. La
palabra tiene un doble frente, al menos para el autor y su lector.
La creacin de un grupo literario responde a este dilogo.

El vuelo de los colepteros

El orden de los textos

Finalmente hablar de los poemas que constituyen este libro. En


primer lugar, el acomodo de los textos se pens con la intencin
de lograr un ritmo entre cada uno de los autores. Algunos hacen
uso de una retrica complicada, no tan digerible en una primera
lectura. La fanopea, siguiendo a Ezra Pound, en este caso implica
un trabajo ms reflexivo durante la lectura. Sin embargo, otros
autores expresan sus ideas de una forma ms elemental. Los esti-
los presentados en Los colepteros enfebrecidos son diversos y se
Antologa de poesa

han ordenado de tal modo que el lector tenga respiros mientras

26
Paz, Octavio, Al Chumacero y otros, Poesa en movimiento. Mxico 1915-1966, Mxico,
Siglo XXI, 1966.

36
Introduccin
pasa de una obra a otra. Despus de leer un poema denso, el lec-
tor descansar en la lectura de un poema ms ligero. Este tipo
de descansos suelen ser necesarios para una lectura equilibrada.
Todos los poemas reunidos aqu funcionan, en conjunto, como
un poema de largo aliento con varios momentos rtmicos.

El ritmo

Por naturaleza, el hombre alterna ritmos a la hora de hablar; en


una obra tambin el autor busca conseguir esas alternancias. Si
pensamos el poema como un cuerpo orgnico debemos tambin
pensar en su respiracin. Las palabras y las frases son el producto
del aliento. La palabra est entre la contencin y la liberacin del
aliento. Las palabras tiene un ritmo que les pertenece slo a ellas
y el ritmo nos hermanan de inmediato con la msica. A cada pala-
bra le pertenece un ritmo propio, como a cada nota musical le co-
rresponde un sonido. Podemos pensar en la actividad del msico
de la misma manera en la que pensamos en la actividad del poeta.
La combinacin de las notas y los silencios, como de las palabras
y las pausas, es la base para producir msica y poesa. La relacin
entre la msica y la poesa est patente en los griegos; Novalis lo
sentencia: Podra ser que la msica y la poesa fueran una misma
cosa, o tal vez dos cosas que se necesitan mutuamente como la
boca y el odo, pues la boca no es ms que un odo que se mueve
y que contesta.
El sentimiento se cifra en el ritmo, la palabra es su segun-
do momento. Antes de darle letra a sus canciones, Jos Alfredo
Jimnez iniciaba con un silbido el ritmo que expresaba su tono
emocional. Un criterio importante y primario en la seleccin de
los poemas de Los colepteros fue procurar que no existieran
atropellos en el ritmo sonoro y en el ritmo del pensamiento. Hay
autores que enfatizan ms uno que el otro; un ejemplo del pri-
mero, son los versos de Lzaro Tello Pedr: el temple solemne
de un himno,/ los cabellos sepultos de una mina, una combina-

37
cin de un eneaslabo con ritmo marcado por sus vocales y un
endecaslabo meldico para contener un verso solemne y uno
suspendido, respectivamente. Otro caso son los versos de Ma-
riana Orantes: La muerte es un recuerdo que no cesa, endeca-
slabo heroico que permite darle ese tono grave y sentencioso.
O la constancia en el ritmo que utiliza Cynthia Alvarado Gmez:
Cuerpo frgil, delicado, de apariencia cristalina como el agua
que sostiene su prosa potica: oo/o/oo/o/oo/o/oo/o
En el nfasis del ritmo de pensamiento, es decir, en la
constancia y densidad de las imgenes, un par de ejemplos son los
poemas Desde el asombro que ciega, de Dante Vladimir Ochoa,
y Camalen, de Daniel Quintero Cravioto, quienes utilizan de
manera acertada la disposicin de sus imgenes, sucedindose
una a otra como un vendaval de recuerdos en el primero y una
sucesin de sombras y colores en el segundo.

La reconceptualizacin

Un fenmeno interesante en esta compilacin es la existencia


de temas que coinciden entre los autores. Quiz hay un cuestio-
namiento general que originan los elementos ms simblicos de
nuestra vida cotidiana. No es extrao que una generacin como
la nuestra comience a preguntarse sobre las condiciones socia-
les del ser humano actual. Hace falta recrear la cosmovisin,
alterar el orden del pensamiento, dar un sentido diferente a los
conceptos, renacer a travs de la lengua. Cuando un sistema de
pensamiento se agota a s mismo y termina en ruinas, el hombre
necesita reconstruirlo. De las ruinas del viejo paradigma, el ser
humano comienza a edificar un nuevo pensamiento y, por consi-
Antologa de poesa

guiente, a refrescar sus propuestas literarias.


Uno de los temas recurrentes en este libro es el de la ma-
dre, tema muy tradicional en la poesa, por lo menos de Amrica
Latina, que nos permite acercarnos a la relacin entre el poeta y
este personaje dador de la vida. La maternidad en Latinoamrica

38
Introduccin
es muy diferente a la de otros espacios geogrficos y culturales, y
eso se ve reflejado en la poesa. Unas de las caractersticas gene-
rales de la madre latinoamericana son la calidez y el amor hacia el
hijo, pero no deja de lado la sumisin. Caso distinto ocurre con el
padre, la figura machista, el pedestal intocable. Octavio Paz, en
Pasado en claro,27 habla as de su padre:

Del vmito a la sed,


atado al potro del alcohol,
mi padre iba y vena entre las llamas.
Por los durmientes y los rieles
de una estacin de moscas y de polvo
una tarde juntamos sus pedazos.
Yo nunca pude hablar con l.

En el mismo poema, Paz se refiere as a su madre:

Mi madre, nia de mil aos,


madre del mundo, hurfana de m,
abnegada, feroz, obtusa, providente,
jilguera, perra, hormiga, jabalina,
carta de amor con faltas de lenguaje,
mi madre: pan que yo cortaba
con su propio cuchillo cada da.

La imagen de la madre como soporte de las quimeras de-


cadentes del hijo es frecuente en la tradicin latinoamericana.
Csar Vallejo, al igual que Paz, habla de sus padres en su poema
Los pasos lejanos:28

27
Paz, Octavio, Pasado en claro, 1975.
28
Vallejo, Csar, Los heraldos negros, 1918.

39
Mi padre duerme. Su semblante augusto
figura un apacible corazn;
est ahora tan dulce
si hay algo en l de amargo, ser yo.

Ms adelante, Vallejo presenta a su madre:

Y mi madre pasea all en los huertos,


saboreando un sabor ya sin sabor.
Est ahora tan suave,
tan ala, tan salida, tan amor.

En ambos poemas se retrata la distancia del padre y la cer-


cana de la madre inmersa en la abnegacin.
La madre mrtir comienza a tomar otra dimensin en la
poesa actual; se desprendi de la figura paterna y comienza a ex-
plorar nuevos parajes. Ya en la obra del poeta sonorense Abigael
Bohrquez hay un cambio en la manera de exhortar a las madres:
organiza motines,/ cierra el tero amargo con tus manos/ y le-
vntate en armas [] repudia la fusin del espermato,/ escribe a
grandes letras tu gemido,/ sal a las calles a gritar tu reto.29 Este
poeta parece ser la frontera a travs de la cual el concepto de
madre toma otra direccionalidad. En Los colepteros enfebrecidos,
Jos P. Serrato, dice:

me acuerdo de ti con tanta furia,


y grito:
mi madre comenz a estudiar a los cincuenta
y tena siete hijos
Antologa de poesa

y ningn marido
y dos perros
y una fuerza de tren contra la niebla!

29
Bohrquez, Abigael, Acta de confirmacin, 1966.

40
Introduccin
Se ve a otra madre, la madre que ha roto las cadenas de la
sumisin y se ha independizado del hombre. La madre, en la poe-
sa actual, ya no es mansa y abnegada; ahora es una mujer con
una fuerza tremenda que le permite abrirse paso por el mundo
con todas las dificultades de su oficio.
Tello Pedr hace titubear la voz potica para nombrar a la
madre. Su madre es otra cosa, menos la palabra madre; l nece-
sita hablar de ella, pero se enfrenta a lo inefable, busca, abre una
senda en un terreno inexplorado. La duda de cmo nombrar las
cosas es un motor para la creacin de la poesa. Iniciando con
unos versos de Octavio Paz, Tello Pedr se aventura y este poe-
ma queda ante la expectativa de un explorador del concepto:

Tengo que hablaros de ella


de este hbito intil de nombrarla
paraso, mansalva,
cinaga, catarina.
Ante el cristal de la maana callo
el nombre de mi madre.

Otro de los autores que trata el tema de la madre es Ral


Anbal Snchez Vargas. De este autor apreciamos una propuesta
interesante: rememora su estancia en el vientre materno. Vemos
a la madre solitaria, a la madre que puede ser, incluso, la poesa
misma: Yo era todo vueltas y agua/ una sensacin de ser vueltas
y agua/ con mi madre all afuera que saba cantar el ocaso.

El tema de la madre se generaliza en el tema de la mujer, que


tambin es abordado por las autoras de esta muestra; son ellas
las que proponen un punto de vista sobre la mujer actual. Alvara-
do Gmez hace, por medio del erotismo y del humor, una invita-
cin al hombre, o a ella misma, a descubrir el porcentaje que la

41
hace mujer. Cul es el porcentaje del ser mujer? Hay mujeres
ms mujeres que otras? La respuesta se explora poco a poco en
las creaciones literarias. Ftima Ins iguez Gmez es la auto-
ra inconforme con la creacin de estereotipos de gnero. Para
ella no hay diferencia entre un gnero y otro, por eso dice: Si yo
hubiera nacido hombre,/ tambin hubiera escrito poesa. Ms
adelante en el segundo poema que presenta, Mujer de oro, se
cuestiona: Qu elefante exhausto/ montarn las mujeres viu-
das de vida, de cltoris y de sombra propia?. iguez Gmez tie-
ne la inquietud de cuestionarse por la mujer africana, una mujer
vista como cualquier objeto material.
Los trabajos de Alvarado Gmez y de iguez Gmez nos
remiten a dos grandes de la literatura latinoamericana: Rosario
Castellanos y Gioconda Belli. En ambas poetas se ve el esfuerzo por
buscar la vindicacin de la mujer a travs de la palabra. Belli escribi
las Reglas de juego para los hombres que quieran amar a mujeres
mujeres,30 poema de desenfado que promueve una alianza:

El hombre que me ame


reconocer mi rostro en la trinchera
rodilla en tierra me amar
mientras los dos disparamos juntos
contra el enemigo.

La creacin potica de Belli se inclina hacia la reconcilia-


cin de los gneros. Ella apuesta por la armona entre el hombre y
la mujer: un hombre y una mujer/ sobre las rocas/ vemos cmo
se desprenden estrellas/ y cruzan silenciosos los meteoros.31
Existen ecos de esta reconciliacin de gneros en la potica de
Antologa de poesa

iguez Gmez.

30
Belli, Gioconda, De la costilla de Eva, 1986.
31
Belli, Gioconda, El ojo de la mujer (Antologa), 1991.

42
Introduccin
Para Castellanos la propuesta es diferente: ella sugiere una
bsqueda. En su poema Meditacin en el umbral,32 despus de
hacer un recorrido por la tragedia femenina a travs de la litera-
tura y de la historia, se dice que debe haber Otro modo de ser
humano y libre./ Otro modo de ser, otro modo de ver a la mujer,
como lo plantea Alvarado Gmez.
Varios de los autores que conformamos este libro inda-
gamos en los mismos temas e intentamos hacer una crtica de
nuestra realidad; tambin intentamos proponer esa otra realidad
subjetiva que habita nuestra mente y nuestras letras. Oscar Wil-
de dira: Uno habla de lo que necesita. El cambio se da paula-
tinamente; cada generacin humana va transformando poco a
poco sus estilos de vida y sus formas de pensamiento.
Otro autor de este conjunto que desarrolla el tema de la
mujer es Antonio Rueda Snchez. No slo la menciona, sino usa
una voz femenina para desarrollar sus poemas. A travs de la voz
femenina, este autor realiza una crtica social sobre la mujer en el
ambiente conservador y represivo: Uno nace con el sexo ms no
con la identidad. La mujer en los poemas de Rueda es salvaje y
reflexiva, se defiende a s misma, se valora y se libera. En otro mo-
mento expresa: Prohibido preguntar si eres el primer hombre en
mi vida. Una mujer es mujer siendo virgen o no sindolo, habien-
do yacido con un hombre o con una docena. La mujer es un huerto
fructfero en todos los sentidos: Bienvenido al jardn!, dice Rue-
da; ahora la mujer vive de los frutos alguna vez prohibidos.
Para Juventino Gutirrez Gmez la mujer es resultado de
La Perfeccin de Dios; l aborda el tema de la mujer de una ma-
nera ms tradicional: la mujer como objeto de deseo, la Pandora
que hace sucumbir a los hombres.
Vctor Lovera S. le canta a la mujer de una forma direc-
ta y sagaz: Tus senos son dos guilas [] pezones en gancho

32
Castellanos, Rosario, Meditacin en el umbral: antologa potica, FCE, Mxico, 1985.

43
pescando Rmulos. A travs de un uso de lenguaje impresionan-
te y de un ritmo preciso, Lovera S. consigue una descripcin ge-
nuina del cuerpo femenino.
Sobre la temtica de la mujer, un ejemplo de singularidad
es el de Luca Fernndez Izquierdo, quien decide cantarle a otra
mujer. Cmo nombrar a la amante del ser amado?, cmo con-
seguir borrarla del lecho donde an perdura su recuerdo? La idea
de amiguismo y complicidad nos la ofrece Fernndez Izquierdo.
Ya no hace falta insultar a la amante del ser amado ni explotar
contra el hombre que no olvida a la anterior pareja. Una forma de
emerger del dolor es por medio de la irona. Finalmente, aquella
contra la que se enfrenta la voz que utiliza Fernndez Izquierdo
tambin es una mujer; entonces, por qu no nombrarla colega,
socia o hermana y crear una amistad entre semejantes?

Dentro de los temas frecuentes tambin encontramos el de la


poesa. En el arte potica el autor realiza una reflexin sobre lo
que es la poesa y sobre su proceso de creacin. Aqu encontra-
remos este intento del autor por responderse a s mismo sobre
su propia obra y las dificultades que ocasiona el ejercicio de la
escritura. Autores como Daro, Reyes, Villaurrutia, Neruda, Bor-
ges, Huidobro, Benedetti, Chumacero, Dalton, Eliseo Diego, En-
rique Lihn, Maples Arce, Paz, Quirarte, Pacheco, Nicanor Parra,
entre muchos otros, escribieron su arte potica.33 En este libro,
Gutirrez Gmez escribe el poema Torrente de doble aguacero
y habla de su peculiar artificio potico. Este autor medita sobre
la lengua mixe y la lengua espaola, dos hemisferios que habitan
Antologa de poesa

su cerebro: tengo un par de lenguas abierto en abanico, dice.

33
En la siguiente pgina pueden leerse las artes poticas de varios autores en lengua espa-
ola, entre ellos estn los mencionados en este prlogo: http://artespoeticas.librodenotas.
com/autores/

44
Introduccin
Relaciona al ro y a la naturaleza con su lengua materna, el mixe, y
a la ciudad la descifra a travs del espaol. El poema de Gutirrez
Gmez es el testimonio de un extranjero, elemento recurrente
en la obra de otros poetas, como es el caso de Baudelaire.
Tello Pedr tambin escribe su arte potica en el poema
que titula Autorretrato. En este poema notamos sinceridad en
el autor cuando habla de su forma de ser y de su figura fsica.
Pero ms all de esta descripcin se refleja en el poema su an-
siedad por hallar las palabras correctas para expresar su poe-
sa. Ha encontrado muchas cosas, pero nunca la palabra que lo
lleve al poema. Su potica es un ejercicio de honestidad. Una
potica semejante a la de Tello Pedr es la de Lovera S., quien
nos hace ver, en su poema Susana de Babel, su estima por la
palabra y su valoracin por la lengua: Yo te busco, palabra he-
rencia,/ en los artificiales calabozos, expresa enfebrecido y ce-
loso de la palabra. Ms adelante dir: Que no te encuentre un
lobo porque querr comerte. Su conclusin es igual de honesta
y humilde que la de Tello Pedr; ambos buscan, pero no hallan
la palabra correcta, o mejor dicho, la palabra que los satisfaga
como creadores, lo cual resulta irnico, porque ambos poseen
un excelente manejo de lenguaje y hallan la forma lcida de ex-
presar la idea poticamente. Yo que no hallo, Susana,/ pero
busco, concluye Lovera S.
Jos P. Serrato en su poema Tren contra la niebla nos
comparte cmo fue su acercamiento con la poesa. En esta decla-
racin nos dice que su madre le ense que la poesa slo puede
ser ajena.
Una de las autoras de esta muestra que elabora su arte
potica es Beatriz Camacho. Ella se aparta de la temtica que
abordan las otras autoras. Dice en uno de sus versos, refirindose
al ejercicio de la escritura: Propongo hablar de la palabra,/ la que
nace/ desnuda y doliente. Este es el tema medular en la poesa
de Camacho, la irnica imposibilidad de la escritura que utiliza
como pretexto para escribir. Manifiesta todo el tiempo el dolor

45
que le causa el hecho de no poder expresarse: Cmo duelen las
palabras que no nacen!; sin embargo no se da por vencida: La
lluvia no se detiene/ y t, palabra, sigues siendo un intento.
stos son algunos de los temas sobresalientes que coinciden
en la obra de los autores; sin embargo, existen otros que podrn
encontrar cuando se adentren de lleno a la lectura de este libro.

La tradicin

Anteriormente hice un apunte sobre la tradicin y la importancia


que tiene en particular para el Gerin de Poesa. Muchos de los
poemas aqu reunidos tienen un dilogo con la literatura clsi-
ca. La mitologa es un tema que ha servido como referente en
distintas pocas. La Biblia, por ejemplo, es un libro que retoman
los escritores y otros artistas para realizar alguna obra. El poeta
nicaragense Ernesto Cardenal es uno de los poetas que han ree-
laborado los Salmos bblicos. Con este trabajo, Cardenal renueva
los textos de un libro sagrado y los convierte en una crtica social
correspondiente a su poca. En Los colepteros enfebrecidos, Ral
Anbal Snchez Vargas tambin retoma los Salmos. Su poema
Salmo 91 cuestiona y actualiza el salmo original. La Biblia es el
libro de las intertextualidades y la raz de un rbol literario con
ramificaciones infinitas.
Antonio Rueda Snchez es otro de los autores de este libro
que utiliza elementos bblicos: Eva y Jess. Este autor tambin
retoma a Jesucristo: en unas cuantas lneas, Rueda se identifica
con el dolor de la divinidad, el cordero sacrificado. En este breve
fragmento que nos enva el autor, nos da aviso de que el poema
ir extendindose, pero este principio expone ya una dimensin
Antologa de poesa

sobre el dolor. Quiz el dolor de todos los hombres sea el mismo.


Si Jess fue hombre, debi haber sentido el dolor de la humani-
dad. Cunto podemos decir de un texto de este tipo? Sin duda
mucho, pero debemos esperar a que siga creciendo la produc-
cin de este autor y que ample su concepto del dolor.

46
Introduccin
Hay otras formas de usar la mitologa bblica. Lovera S. crea
todo un captulo bblico en su poema Susana de Babel, del que ya
he hablado un poco. El mito de la Torre de Babel y su carga simb-
lica, parece ser un elemento adecuado para que Lovera S. realice
su arte potica. Producto del antiguo testamento/ que redact
en Babel Susana [] es la palabra. Este autor recrea un mito, lo
ambienta y apunta a un solo objetivo: la palabra, el arma del poeta.
Pero no slo los mitos bblicos salen a flote en este traba-
jo; tambin encontramos ecos de las mitologas griega y roma-
na. Incluyo en esta muestra un poema que titul El argumento
de un pretendiente, que hace referencia a La Odisea. Abunda
en mi trabajo creativo el gnero epigramtico: considero que no
hay otro estilo ms certero para desarrollar la irona. El epigra-
ma nos remonta a la tradicin de la poesa latina que llevaron
a la cspide Catulo y Marcial. El tono epigramtico es una lnea
que se puede seguir en mi creacin literaria y en la de varios de
mis compaeros que aparecen en este libro. Muerte anticipa-
da, de Gutirrez Gmez; Distracciones del profeta, de Jos
P. Serrato; Ecuaciones, de Alvarado Gmez y El ascenso y la
cada de, de Rueda, son algunos ejemplos de poemas con tono
epigramtico.
Juan Daniel Quintero Cravioto escribe Leche licntropa.
Se trata de un poema que ensalza una bebida cotidiana: el caf
con leche. El titulo nos remite al mito de Rmulo y Remo, los
hermanos amamantados por una loba. Adems del mito roma-
no, hace mencin de No, personaje bblico. Ambas mitologas se
mezclan para ofrecerle al lector una bebida agradable: Sabores
licntropos, caf con leche,/ fiesta dual de aromas.
El dilogo con la obra de otros autores es una forma de
intertextualidad que emplean algunos autores. Tello Pedr, al
respecto, realiza una glosa de El reloj de arena, poema de Jorge
Luis Borges. He mencionado que Tello Pedr est interesado en
las formas clsicas de la poesa, por eso elabora su poema respe-
tando la mtrica y la rima del soneto.

47
Lovera S. utiliza elementos representativos de la obra de
ciertos autores. En su poema en prosa El mismo tigre muestra
una construccin textual formada por elementos que son fun-
damentales en la obra de Borges, entre los que destacan el ti-
gre, la idea del Otro Borges, el ajedrez, el reloj de arena, Gustav
Meyrink, entre otros. Pero Lovera S. no slo tiene dilogo con
Borges, sino tambin con otro autor importante de la literatura
latinoamericana contempornea: Nicanor Parra. El poema Solo
de piano34 de este importante autor funciona como un molde
que se repite en el Poema III de Lovera S.
Jos P. Serrato es uno ms de los que se suman al dilogo
con la obra de otros autores; pero l lo hace por medio del epgra-
fe. Cita, por ejemplo, a Octavio Paz y a Eduardo Langagne. Sus
poemas Distracciones del profeta e Ineffabilis son el resulta-
do de la lectura y un eco fiel de estos dos personajes de la poesa
mexicana. Los poemas de Jos P. Serrato son una conversacin
con el epgrafe.

Conclusin

No debemos olvidar que este libro es el testimonio del inicio ar-


tstico de 14 jvenes; es la rampa donde inicia el despegue de una
carrera literaria. Por eso me parece interesante presentar estos
fragmentos de poemas que an no estn terminados y que anun-
cian su continuidad. Los textos publicados aqu no son un cuerpo
terminado, en absoluto, sino la exploracin apenas de algo que
puede crecer.
Espero que este libro pueda aportar algo que ayude a com-
prender mejor a la generacin de los 80, una generacin maravi-
Antologa de poesa

llosa que sabr deshacerse de su duermevela y dejar horadada la


ruta de la literatura mexicana. Tambin espero que los estudian-

34
Parra, Nicanor, Poemas y antipoemas, 1954.

48
Introduccin
tes de la UACM sigan trabajando, cada quien desde sus diferentes
reas, en proyectos de este tipo, en los que se demuestre la efec-
tividad acadmica y el inters de los estudiantes por desarrollar
su potencial creativo.
Los colepteros enfebrecidos ha sido un esfuerzo de varias
alas. Ante lo inevitable que es la muerte y lo efmero que surca la
vida de los colepteros, espero que el vuelo de esta obra se per-
pete, que alcance altura con cada aleteo y se remonte a su ruta
sin pedir permiso a las fronteras. Tambin espero que estos co-
lepteros dejen su simiente en las plantas matrices, para que se
renueve su obra con cada lectura. Este es un bosque que se ilumi-
na con lucirnagas febriles y se inunda de zumbidos armoniosos.
La vereda es amable, pase usted, lector, y vuele con nosotros.

Francisco Trejo

49
JUVENTINO
GUTIRREZ
GMEZ
Juventino Gutirrez Gmez
Oaxaca, 1985
Plantel San Lorenzo Tezonco
Generacin 2006

Naci en Oaxaca el 1 de julio de 1985. Ingres a la Universidad Autno-


ma de la Ciudad de Mxico en el ao 2006 y estudia la licenciatura en
Creacin Literaria.
Antologa de poesa

52
Juventino Gutirrez Gmez
Digresiones sobre la lluvia

Dicen que la lluvia


es el murmullo de los muertos,
otros le atribuyen
dones ms divinos
como las venas transparentes de Dios
o la pesadilla fra de algn ngel
muchos concuerdan
que la lluvia es el llanto
tristeza o dolor del cielo,
algunos estetas
dictaron:
la lluvia es hija de la cascada,
breve sentimiento del mar.
Y numerosos locos sostienen firmes:
la lluvia es una palabra
que escenifica su existencia.

53
La lagartija piensa

La lagartija piensa
que la mana griega
de apoyar la barbilla
en las manos para bordar ideas
es una lstima.
Que para dicho arte
son necesarias
una piedra y la sbana de sol.
Ahora a pensar:
piensa que las nubes
son recuerdos navegando;
el cielo, un acertijo;
el viento es lumbre y quema los ojos;
las sombras son malos retratos;
el tiempo, una condena;
la ignorancia, una piedra caliente indestructible.
Observa a los rboles viejos sin color
y se acuerda de su cuerpo,
entonces piensa que la sabidura
es una flacidez de la vida
y bceps y trceps
comienzan a calentarse
con una fuerza bruta.
Antologa de poesa

54
La perfeccin de Dios

En su perfeccin, Dios
nos dio la vida para despus
olvidarnos con la muerte.
Estableci mandamientos,
decor la noche de negro
y al da obsequi colores,
le dio llanto al ro
e hizo vidas paralelas
entre hombre y bestia.
Despus corri su cortinita de nubes
para que no lo molestaran.
Se ocup de inventarte,
envolvi tus ojos de un color secreto,
ondul tu cabellera con sus caricias;
en tu pecho guard un soplo,
a tus manos obsequi su amabilidad,
engalan tus labios con el arte del silencio.
Despus abri su cortinita de nubes
y qued expectante
observando a los hombres
cmo se retorcan por tu amor.

55
Muerte anticipada

Antes de derribar
murallas de carne y hueso
la bala
trae consigo
una advertencia.

A la velocidad de la vida
llega con un estandarte de sangre,
una fuerza relmpago,
un silencio muerto,
y cuando llega al blanco
imprime una noticia
en primera plana.
Antologa de poesa

56
Juventino Gutirrez Gmez
Torrente de doble aguacero

Mi cerebro es una crcel de ideas


donde dos lenguas entrechocan.

Nombr la luz en mixe shw


y se atravesaron intrusos estruendos
de otra lengua que golpearon mis odos.

El espaol comenz atropellando mis palabras


con camiones, metros, llantos de sirena.

Tengo un par de lenguas abierto en abanico


construido en diferentes hemisferios,
deletrea el viento y un ventilador,
unos rboles y un jardn minsculo,
curiosea los nombres de las cosas.

Mi cabeza, un cajn desordenado;


cuando pienso en mixe
el papel de mi memoria encuentra ros,
bramidos, zumbidos, bosques, cascadas
y estrellas que caminan en mis ojos.
Otro alfabeto nombra este mundo:
edificios, avenidas y ruido, muchos ruidos.

Estas lenguas son torrentes


de distintos aguaceros
que van arrastrando mis ideas
al almacn del tiempo.

57
FTIMA INS
IGUEZ GMEZ
Ftima Ins iguez Gmez
Estado de Mxico, 1986
Plantel San Lorenzo Tezonco
Generacin 2007

Profesora de ingls y poeta, naci el 2 de junio de 1986 en la Perla


Nezahualcoyotl; comenz a escribir poesa a los siete aos de edad. En
el 2007 ingres a la licenciatura en Creacin Literaria de la Universidad
Autnoma de la Ciudad de Mxico, donde conoci a sus profesores:
Iliana Rodrguez y Hctor Carreto. En el 2010 conoci al poeta Sal
Ibargoyen, quien actualmente es su profesor. Ha hecho pequeas
publicaciones para La crayola literaria e Infra Arte, y ha participado en
los recitales que se realizan en las instalaciones del metro de la ciudad
de Mxico.
Antologa de poesa

60
Parto cultural

Ftima Ins iguez Gmez


Ayer par una duda azul
azul?... porque detesto
que incluso mi parir
tenga que ser rosado
Cuestion aquella falda
que dej de usar a los 15
sobre sus pretensiones
entabladas en tela
de tonos pastel
Ancl esa misma duda
a mi primer brassier
diminuta regla de estereotipos,
sndrome cannico adolescente
en tamao doble a, MINSCULA
para ser exacta
Por qu y para qu rosa?
Si yo hubiera nacido hombre,
tambin habra escrito poesa,
poesa azul,
hablando de partos masculinos rosas.

61
Mujer de oro

Quin le dar la mano


al hambre, a la guerra, a la mujer
que nace africana y esclava?

Quin salvar la esperanza:


exiliada fantasa
que no deja huella?

Y qu cancin cantarn
sus ojos, sus manos,
y sus pies rados por la tierra?

Qu elefante exhausto montarn


las mujeres viudas de vida,
de cltoris y de sombra propia?

Qu historia nueva
comern en la cena
para disculpar la ambicin,
el despojo, la violacin al existir?

El oro musulmn pesa ms


en el cuello de la mujer de frica;
es costumbre que ella olvide
y fiel tradicin que en su cuerpo
Antologa de poesa

brille el poder masculino.

62
RAL
ANBAL
SNCHEZ
VARGAS
Ral Anbal Snchez Vargas
Chihuahua, 1984
Plantel Del Valle
Generacin 2011

nacin en Chihuahua, Chihuahua el 6 de abril de 1984. Ha ganado los


siguientes premios: primer lugar del concurso de cuentos infantiles de
divulgacin cientfica Ciencia y Tecnologa para los nios y nias de la
Ciudad de Mxico por el cuento Luna de da (ICYT-GDF). Mencin
honorfica en el Concurso Nacional Historias de Lectura por el tes-
timonio biogrfico Regalo (CONACULTA-SEP). Primer lugar Historias
que trascienden por la Universidad Autnoma Metropolitana. Primer
lugar Premio Nacional de cuentos infantiles y juveniles Cuenta conmi-
go (CONAFE). Ha colaborado en diversas revistas y es la primera vez
que publica poesa.
Antologa de poesa

64
Ral Anbal Snchez Vargas
VII

Primero era, as de simple,


pequeo,
un instante ms que nada.
Primero era el silencio de verdad y vine al mundo.
Nunca se vio mejor silencio,
nunca el silencio fue tan grande y tan pequeo.
Yo era todo vueltas y agua,
una sensacin de ser vueltas y agua
con mi madre all afuera que saba cantar el ocaso.
La estrella?
All estaba tambin
parecido a un mendrugo de pan
que Dios escurriera entre las barbas.

Luego supo inventar mi nombre


para que mi madre
lo viera retratado en el cielo.
Una idea, slo un atisbo,
y mi pobre madre
crea ella misma inventarlo en madrugada.

65
Sealar nos consume la mirada

Camino sobre el incendio de mi infancia,


recuerdo de tierra apisonada,
fresco en verano y templado en invierno,
como la casa de todos los abuelos del mundo.

Miren el trazo que ha marcado el acero


sobre el tapiz de la noche verde.
Miren que los huesos de los hombres venideros
asfaltan nuestra calle,
molidos como un trigo nuevo del que nos fabricarn la
eucarista.

Camino sobre la espalda de mi padre


que era ancha como una gran tela de manta,
y le acompaaba una madre pequea
como la ltima naranja del invierno.

Y sealar nos consume la mirada, empequeece el ojo


hasta volverlo punta de alfiler de sangre.
Sealar ya no basta para que los muertos
se alejen del camino donde siembro dientes de leche.
Antologa de poesa

66
Ral Anbal Snchez Vargas
Mi cuerpo caer sobre la hierba
de todos los poemas

crecern flores
por las cuencas de mis ojos.

(Versos de soldados con heridas como pauelos de seda,


de amantes abatidas en un campo de jazmines.)

Ser un crneo blanqueado por el rumor de las hormigas


y los curiosos nios de diciembre,
suspendidos como en sueos,
bailarn sobre la tierra de mi cuerpo transformado.

67
Suicida

Crees que de tu cuerpo


nacern lirios de sol,
promesa brillante del descanso.

Crees que la tierra


es un agua lenta y pesada
que lavar tu rostro entre los aos.

Que detrs del muro


hay un estanque y un remanso,
paraso sin emociones ni sentidos.

Mas lo primero en germinar es el gusano,


y la tierra aplasta y deforma
tanto en vida como en muerte,
un peso inamovible de siglos que nos ata
con lazos de metal en bruto.

Detrs del horizonte


no existe siquiera la penumbra,
y el negro sol es blanco
y la luz ya no es promesa.
Antologa de poesa

68
Ral Anbal Snchez Vargas
El mar no devuelve las almas engullidas
ni es un vientre primigenio
y las voces de la noche, de la piedra castigada,
no son cancin ni coro
ni esperanza adormecida.
La muerte es para siempre.

Sin imgenes,
promesas
o abstracciones.

69
Salmo 91

T que vives en la noche, sombra de ti mismo, sangre y metralla


repartida.
Di: mi refugio es mi mano, mi espada, el juicio poderoso de la
levedad
y el desconcierto.
Sers libre de la moral antigua y el premio ser el conocimiento
de la muerte.
Tendrs un pjaro negro por corazn, una corona brillante,
una tumba gloriosa construida con prpados de nios.
Eres inmortal, cazador oscuro, azote de venados, prodigio de la
estrella?
No hay langosta que siegue tu campo.
Caern mil hombres a tu izquierda, mil a tu derecha,
hombres que antao sostuvieron el mismo pacto,
caern porque la espada es veleidosa, como lo es la justicia de tu
mano,
y el anillo de sabidura que le adorna,
es slo un artilugio de plata.

Dice el Libro que caminars sobre leones y serpientes,


llevado de la mano por ngeles flamgeros.
Pero el Libro se equivoca: no gozars de larga vida,
porque hay un precio
por el futuro brillante de los hijos,
como un cordero asesinado por un adolescente cruel y
Antologa de poesa

poderoso.

70
LUCA
FERNNDEZ
IZQUIERDO
Luca Fernndez Izquierdo
Ciudad de Mxico, 1987
Plantel San Lorenzo Tezonco
Generacin 2008

(Ciudad de Mxico, 1987). Es dramaturga, actriz y poeta. Ha escrito


obras de teatro y realizado varias adaptaciones. Particip dos aos con-
secutivos como poeta en el evento Mujeres con M de Metro y Poesa
y movimiento. Public con la Editorial Zcalo su cuento El exilio de
Nuri Yik en la antologa Cenzontle de papel. En el Instituto de la Juven-
tud y en algunas instituciones privadas ha impartido diversos talleres,
entre los que destacan Hacer historia en el teatro e Iniciacin al arte
teatral. Actualmente realiza una puesta interdisciplinar con el colecti-
vo N.A.D.I.E., e imparte clases en el diplomado en Creacin Literaria de
Bellas Artes.
Antologa de poesa

72
Luca Fernndez Izquierdo
A la que estuvo antes que yo

Quiero decirle lo que vibro,


que an me cimbra su fantasma,
la soledad que a veces llena su ausencia en l.

A la que estuvo antes que Yo,


quisiera a veces preguntarle:
por qu no se acaba de ir?
por qu no cambia de objeto?

Y es que a veces
pesa mucho su sombra
y esa presencia que tiene
en los ojos de mi amante
cuando hacemos el amor.

73
Amante

El eco de unos pasos


que no terminan de alejarse
me retumban en lo srdido del medioda,
brotando al ritmo de un ring ring
de un telfono que no se atreve a contestar
mientras estoy a su lado.

El recuerdo de un lpiz labial sobre la mesa


y un peine con residuos de ADN
que nunca me han pertenecido.

A veces, slo quisiera saber


que has pasado a otra cosa,
que la crueldad no se vuelve necesaria
y que, aunque el hombre nunca est satisfecho,
ya no se satisface con tu cuerpo.

Amante, la otra, aquella mujer,


es que ya no s como nombrarte,
colega? socia? hermana?

Se vuelve cada vez ms difcil


Antologa de poesa

lidiar con el autoengao,


se vuelve ms pesada tu imagen
y ms dolorosa la ausencia de su pasin.

74
Luca Fernndez Izquierdo
II

Tengo miedo de tus dudas y secretos,


de aquellas ausencias repentinas,
de las cosas que callas pero tus ojos otorgan.

Tengo miedo
de preguntarte su nombre
porque lo recuerdo pronunciado en tus sueos;
es la reiteracin de otra sustancia
lo que ocupa un espacio vital
entre tu cuerpo y mi deseo.

Parsito agobiante
asfixia mi incertidumbre.

La cara de tu apetito
tiene carmn en los labios,
perfume achocolatado
y cabello oscuro;
el rostro de tu deseo
tiene el mismo nombre
que mi ms grande miedo.

75
DANTE
VLADIMIR
OCHOA
GONZLEZ
Dante Vladimir Ochoa Gonzlez
Veracruz, 1985
Plantel San Lorenzo Tezonco
Generacin 2007

(Veracruz, 1985). Naci bajo el signo de gminis. Estudi en la prepa-


ratoria Jos M. Morelos y Pavn del IEMS-DF, lugar donde se editaba el
folletn Filozoos, en el que escriba poemas y reseas de libros. Recien-
temente public un poema en la revista Agua sobre las lajas (No. 5). En
la actualidad estudia una suerte de Filosofa e Historia de las Ideas con
Creacin literaria. Antes de la preparatoria no exista.
Antologa de poesa

78
Arribo annimo

Dante Vladimir Ochoa Gonzlez


Era la hora de abrir los puos,
dar con la idea,
como llegar a un puente
en el resquicio entre las sombras que se abrazan.

Todo un mundo dormita,


grietas eternas sin puente.

Esperando estaban todos los ojos


de un espejo que no existe.

Vapores de tierra y sal


sobre los sueos de un perro que tiembla en mi alma.

Llenar de puentes la distancia entre el sol y la noche


y llegar, llegar a sembrar de puentes
la tarde que desaparece en ceniza.

79
Desde el asombro que ciega

Las manos ocultas en la sombra


todos los ojos, todos los rumores
que se ocultan en penumbra
desde las horas que se muerden la cola
cuando dormita la mitad del asco
que gira en la tierra
desde los rojos hmedos
las plazas viejas en que se juntan los gritos
todas las muescas de un muro que se levanta
todos los peones que sangran en las tripas
de un tablero infinito
desde la figura plida de quin cruza la falta a nado
desde la mueca, desde la ira con que navega mi rostro
desde el segundo con que germinan los abismos
que pueblan este momento que me sirve de jaula
es decir el silencio, la ruina
la bala fortuita que hace su nido en mis venas
el canto remoto de mi pulso
las flores que con la lluvia del miedo
entre las botas desnudas se guardan
quiero decir la guerra
quiero decir que mi alma respira
los vapores de una lucirnaga anciana
que la libertad se encuentra en un muro
al que le retoan puertas
Antologa de poesa

80
Dante Vladimir Ochoa Gonzlez
las palabras ausentes de los nios
que corrieron sobre la sangre
en el resumen de un grito
quiero decir algas
mordida de noche en el asfalto
que baila con todos los funerales

El olvido es un collage de vacos escogidos


este silencio sube a la boca con gusto a puta

81
BEATRIZ
CAMACHO
MORA
Fotografa: Ernesto Moralbaut

Beatriz Camacho
Estado de Mxico, 1980
Plantel San Lorenzo Tezonco
Generacin 2009

Naci en el Estado de Mxico, en 1980. Como actriz ha formado parte


de diversos talleres de teatro y colaborado en la adaptacin de obras
teatrales. Tambin ha impartido talleres literarios para nios. Actual-
mente estudia la carrera de Creacin Literaria en la Universidad Aut-
noma de la Ciudad de la Ciudad de Mxico.
Antologa de poesa

84
Palabra

Beatriz Camacho Mora


Propongo hablar de la palabra,
la que nace
desnuda y doliente

como aguijn custico


en el espanto de los deseos,

como germen de todo pensamiento


ancla, dardo, daga,

como duda o agona


de quien habla o escucha,

como un disparo mortal


en cada slaba,

como un parto de mar en la hurfana costa


de la metfora escondida.

Cmo duelen las palabras que no nacen!

85
El intento

Hace tiempo que te busco


en la indescifrable tempestad
de mi sorda cabeza.

Mientras t, liviana,
te recuestas y flotas como lirio
en la profundidad del ocano
de los poetas.

Yo slo tengo una pgina en blanco


en la que te escribo
con la terquedad de la tinta,
en la bsqueda de morfemas,
de ros pensamientos y cascadas voces.

La lluvia no se detiene
y t, palabra, sigues siendo un intento.
Antologa de poesa

86
La muerte del silencio

Beatriz Camacho Mora


En el huracn de mi elega
desplom el silencio
como pjaro herido sobre los riscos.

Solt las amarras


y mord el anzuelo
de la indita resonancia
que asoma por la trmula hendidura.

Mis labios son el refugio


de los demonios que llevo dentro.

87
Canto a la poesa

Adoro su inagotable misterio,


ese que me incita
cada vez que la quiero poseer

Mis dedos se aferran


a la espigada punta, cincel de las palabras.

Mi lengua palpitante, hmeda, ardiente y lasciva


recorre la desnudez de sus versos.

Retozo en su laberinto insaciable,


me hace suya
entre las plidas pginas
de mi alfabeto de temores.
Antologa de poesa

88
ANTONIO
RUEDA
SNCHEZ
Antonio Rueda Snchez
Estado de Mxico, 1982
Plantel San Lorenzo Tezonco
Generacin 2008

(a.k.a. Riot! XXXL), naci el 24 de enero de 1982 en el Estado de M-


xico. Actualmente publica parte de su obra en fanzines electrnicos y
en espacios transgresores. Para mayores informes, consulte su blog:
http://rey-riot.blogspot.mx/.
Antologa de poesa

90
Antonio Rueda Snchez
Piel

Bienvenido al jardn!
Espero que antes de entrar hayas ledo el aviso
s ese que deca

Prohibido preguntar si eres el primer hombre en mi vida

preguntas por qu,


es fcil,
conmigo tendrs la seguridad
de que soy la primera en tu vida

No me importa tu pasado ni las que han estado contigo


Es difcil decir las
porque es difcil ser mujer
Uno nace con el sexo ms no con la identidad
Por eso digo que antes de m nunca habas estado con una
mujer

Bienvenido y felicidades!
De hoy en adelante
nuestra piel ser El Jardn del Edn
y yo Eva
la primera mujer
que vive de los frutos
alguna vez prohibidos.

91
Despus del affeire
(fragmento)

Tu llegada es una demora convertida en excusa


por no mencionar los das de pretexto y vaco

Ya no sudas cuando hacemos el amor

La poesa desapareci de tus palabras


cuando a tu lengua le escald mi vagina
Antologa de poesa

92
Antonio Rueda Snchez
El sagrado
(fragmento)

A veces
siento el corazn rodeado de espinas
como el Sagrado de Jess

Y me arde igual que a l

93
El ascenso y la cada de

Nunca te gustaron las comparaciones


lo siento yo lo veo as
tan exquisito como una obra de arte
Paso a paso todo fue en aumento
cada sencillo era un hit y cada hit nos elevaba ms y ms

Comenzamos a visualizar todo un LP


El lado A: Otra vida
Amor romntico amor espiritual
Salvacin
Mentiras
Dificultades
El lado B: Tragedia
Deslumbramiento
Furor
Decadencia
Ruptura
Suicidio

Lo nuestro muri vctima de su propio xito


tan drstico y dramtico
como Ziggy Stardust.
Antologa de poesa

94
VCTOR
LOVERA
SALAZAR
Vctor Lovera Salazar
Ciudad de Mxico, 1981
Plantel Cuautepec
Generacin 2008

Naci en la Ciudad de Mxico en 1981. Tiene una formacin mayormen-


te autodidacta. Debido a que posee un ritmo de trabajo que funciona a
lapsos breves, rara vez ha concluido algn curso o taller literario y su
memoria, supeditada al corto plazo, no le permite puntualizar dichas
rarezas. En este sentido, licenciarse en Creacin Literaria representa su
ms grande reto. Actualmente funge como redactor en la revista elec-
trnica registromx.net
Antologa de poesa

96
Vctor Lovera Salazar
Poema III

Ya que la muerte del sueo es la vida misma,


como la voz de un piano que habita nuestro recuerdo;
ya que la sonrisa del piano te amenaza
silenciosa, blanco y negro (punto y coma)
ya que t eres slo mi voz cuando te nombro
y yo vuelvo a ser yo cada vez que me olvidas;
ya que no hablamos para ser escuchados
sino para que los dems callen

Ya que mis palabras son rgidas


como piedras que soportan el azote de tus aguas,
permite que mi boca lance la serpiente voz
que no se ahoga.

Yo quiero que mi lengua penetre por tu odo


y haga habitacin adentro de tu crneo.

97
El mismo tigre

Como pudo se ray la piel y visit a Borges. Frente a frente


(recostado en una dorada mesa de estilo renacentista el tigre, y
Borges equilibrando su propio peso sobre un monociclo blanco),
a oscuras recordaron a su hermano el sapo, aquel que se evapora
entre piedra y piedra que inaugura a brincos; tambin hablaron
de la noche que se oye en el llanto de las jirafas; tomaron caf;
comieron alfiles: les entr la nostalgia.
Como pudo, el mismo tigre le confes al otro Borges que
su decisin de vivir en una jaula, no fue sino por querer mirar al
mundo recprocamente: sin tener adnde ir y lleno de rayas.
Borges quem su ajedrez, mir la fecha en su reloj de
arena y se encerr en un libro de Gustav Meyrink; el tigre se fue
a su celda saltando como un sapo, con ganas de llegar antes que
el olvido.
Antologa de poesa

98
Vctor Lovera Salazar
Tus senos son dos guilas;
terreno montaoso
de caricias resecas lo dems.

Hogar de tu altura:
letra egipcia;
pezones en gancho
pescando Rmulos:
leche rapaz que me fermenta.

Erosin elica erosin tu trnsito cegesimal,


sobre m la garra y en el resto tus ojos.

Tus senos son dos guilas;


la serpiente descifra
tu grieta rococ.

99
Susana de Babel

Producto del antiguo testamento


que redact en Babel Susana,
la mujer que no tuvo desnudez
y que por tanto nadie conociera,
es la palabra;
no la voz que se pierde en el vaco
de un agujero negro que fue estrella
ntida, azul, dorada;
sino la forma fiel que nace pura
al tiempo exacto en que salta la gota
de la imagen y moja nuestra idea.

Esa forma simblica: un puado de labios,


un ramo de razones
que como tallos, inflan de frescura
al mundo redondo de las pupilas.

Palabra de piel, hija de Susana;


en el papel te persigue el poeta,
la guitarra en el rbol, desde las ramas ltimas
un pjaro te anuncia, presiente que en las plumas
de la nube descansas;
mas nadie ms te cuenta detenida.

Yo te busco, palabra herencia,


Antologa de poesa

en los artificiales calabozos,


entre caas de acero,
justo donde la gente se aglutina;
tambin te busco dentro de la taza:
de ripios culinarios receptculo,

100
Vctor Lovera Salazar
y en el olor punzante de la orina;
hay otras veces, pocas, que estoy muerto
y el fro de mis pies vive tu encanto;
pero muerto no puedo acariciarte;
asesino mi muerte,
me aprisiono en la bsqueda

Que no te encuentre un lobo porque querr comerte!


un jaguar grabara su tatuaje
de flores negras
en tu piel intachable
mintiendo su color,
y ya jams nosotros
seramos dueos del puede ser
que se vierte en la gramtica tinta.

Nosotros: yo ms ellos,
ellos menos yo que no hallo, Susana,
pero busco.

101
BRENDA
MARIANA
ORANTES
GARCA
Brenda Mariana Orantes Garca
Ciudad de Mxico, 1986
Plantel Del Valle
Generacin 2011

Naci en la Ciudad de Mxico en 1986. naci en la Ciudad de Mxico


en 1986. Es pasante de la carrera en Letras Hispnicas por la UAM-I
y estudiante de Creacin literaria en la UACM. Es becaria del FONCA
generacin 2011-2012 en la especialidad de poesa. Ha ganado algunos
premios y tiene pocas publicaciones. Forma parte del equipo editorial
de la revista electrnica Aguja.
Antologa de poesa

104
Brenda Mariana Orantes Garca
Sobre la muerte

La muerte es un recuerdo que no cesa.


Los muertos no suean en su noche verde,
tampoco hablan
ni consuelan,
pero siempre estn en movimiento
como el agua estancada.

105
Impresin del ausente

Hermano,
qu pas con tu vida?
Las viejas que dibujaron trenzas
en la orilla de tus ojos
ya no te guardan en su pecho

Tenemos estatuas
por cada corazn o zapato perdido

Y nuestros amigos se van


a un lugar donde la piedra
es llanto
almohada
torrente para lavar la ltima camisa
Antologa de poesa

106
FRANCISCO
TREJO
HERNNDEZ
Francisco Trejo Hernndez
Ciudad de Mxico, 1987
Plantel San Lorenzo Tezonco
Generacin 2008

(Ciudad de Mxico, 1987). Estudia la licenciatura en Creacin Literaria


en la Universidad Autnoma de la Ciudad de Mxico. Ha publicado en las
revistas Crculo de Poesa, Punto de Partida, Molino de Letras, Rojo Siena
y Palabrijes. En el ao 2011 obtuvo mencin honorfica en el Premio Na-
cional de Poesa Jos Emilio Pacheco y mencin honorfica en el Premio
de Literatura Joven Max Rojas. Tambin obtuvo mencin honorfica, en
la categora de ensayo, en el Concurso 43 de Punto de Partida 2012.
Actualmente es columnista de la revista Rojo Siena.
Antologa de poesa

108
Francisco Trejo Hernndez
Para que un poeta actual
conserve a su esposa

Dedcale tiempo a tu mujer, Juventino;


deja de pasarte las horas en Twitter
inventando aforismos y crudos versos
para sorprender a tus seguidores.
Mrala verter su miel sobre las sbanas
y peinar la cascada de su cabello.
Mrala ungir sus piernas con aceite de coco
y perfumar sus brazos de porcelana.
Vas a ignorar el canto de la sirena
y dejar correr el agua del ro?
No la ves arder en la pira del ansia?
No escuchas el crepitar de su carne?
Reflexiona, amigo, y no la descuides:
estoy harto de que sufra en la espera
y de tener que amarla
cuando no me corresponde.

109
El argumento de un pretendiente

Penlope, cbreme
con el mustio tejido de tus piernas.
Aprovecha mi ereccin
y murdeme
en los rincones suntuosos de la carne.
Olvida la caricia del hombre
que se fue a Troya
a empuar, de sus amigos,
el acero punzante y belicoso.
Tu marido conoce el mar y sus rutas,
pero no vuelve;
prefiere venirse
amando
a los ms fuertes del ejrcito griego,
a venirse, como yo,
en la taca surea
de tu pubis.
Antologa de poesa

110
Francisco Trejo Hernndez
Oracin del epigramista

Te pido, Dios,
que por primera vez escuches
al desvergonzado Francisco!
Que me falte la caricia de mi madre
y el consejo amoroso de mis hermanos;
la compaa luminosa de un amigo
y el vido sexo de una musa;
pero por favor, Seor,
que nunca me falten enemigos!

111
Jinete y cerdo

La Poesa, Julio,
es la yegua indomable
no tolera cerdos en su lomo
que te rebaza en la escritura.
No te des el ttulo de jinete
controla tus riendas
sin conocer el arte
de la cabalgata.
Antologa de poesa

112
Francisco Trejo Hernndez
A los hombres perfectsimos

a los hombres perfectsimos


canbales versados en poltica ranchera,
en trampas, en codeos, en albures
de este pueblo sin tregua
Abigael Bohrquez

Despus de la contienda electoral del ao en turno,


el pueblo mexicano sabe de cierto
que no existen culos tan grandes
como las bocas de los candidatos a la presidencia:
oradores imberbes que pronuncian, cnicamente,
alegatos de mierda.

113
Antologa de poesa

114
CYNTHIA
ALVARADO
GMEZ
Cynthia Alvarado Gmez
Ciudad de Mxico, 1987
Plantel San Lorenzo Tezonco
Generacin 2006

Naci en el Distrito Federal el 3 de septiembre de 1987. En el 2010 pu-


blic un cuento en la antologa QUENTUM. Viaje a travs de la fantasa,
en la Coleccin Editorial Zcalo. En el 2011 particip como tallerista en
el evento cultural Pasaporte del Arte, organizado por el INBA. A prin-
cipios del 2012 colabor como tallerista en Comisin Nacional para el
Desarrollo de los Pueblos Indgenas (CDI).

116
La copa

Cynthia Alvarado Gmez


Cuerpo frgil, delicado, de apariencia cristalina como el agua que
emana de su boca en contadas ocasiones. Estando vaca es por
todos ignorada. Fiel compaera de momentos buenos y malos.

Tiene la capacidad de transformarse en ngel o demonio que


puede seducir con su lquido.

As es la copa, con su engaosa inocencia embruja a cualquiera


llevndolo al ms dulce de los sueos.

117
Ecuaciones

Ven y sumemos
tu y con mi x
para restarle prendas a dos cuerpos
que esconden su esencia.

Multipliquemos las caricias


y dividamos el deseo
en partes siempre iguales
por el resto de la noche.

Haz que tu sexo encuentre


la raz cuadrada oculta en el mo
para elevarme a la quinta potencia
y descubrir el porcentaje que me hace mujer.
Antologa de poesa

118
JOS DE JESS
PALACIOS
SERRATO
Jos de Jess Palacios Serrato
Ciudad de Mxico, 1987
Plantel San Lorenzo Tezonco
Generacin 2009

(Ciudad de Mxico 1987). Actualmente estudia Creacin Literaria. Ha


publicado en revistas como Migala, Rojo Siena, La hoja de arena y Bonsi.
Ha publicado en la revista LOrdinaire, de la Universidad De Toulusse,
Francia; en la revista Gavia, de la Universidad Distrital Francisco Jos
de Caldas y Littaura, de la Universidad Autnoma de Bogot, ambas en
Colombia. En 2011 fue seleccionado para asistir al curso de creacin
literaria para jvenes en Monterrey por parte de la Universidad Metro-
politana de Monterrey y la Fundacin para las Letras Mexicanas.
Antologa de poesa

120
Jos de Jess Palacios Serrato
Ineffabilis

El amor es intensidad y por esto es una distensin del tiempo:


estira los minutos y los alarga como siglos
Octavio Paz

No se dice amor, se dice lluvia.

No hay un silencio,
sino una lluvia que se disuelve en los pulmones.

No hay prdida,
es la lluvia que se abre y no se vuelve a unir.

No existimos los que han amado,


eso ha sido una llovizna,
no existimos los que gozan,
sino los que pertenecemos a la tormenta.

No se dice amor, se dice pantano,


se dice enjambre, se dice nube negra.

Se dice lluvia helada, maratn de bisontes,


no se dice amor,
se llueve toda la noche,
se suicida el jueves en la garganta,
se le otorgan alas a las tortugas.

No se dice amor, se dice trigo,


se exhala en el pubis.

121
No se dice,
slo hay una lluvia familiar envenenada,
hirviendo en tejidos blandos,
tensos, miopes.

Se dice drama. Se dice plagio, se dice herida.


No se dice amor, simplemente no se puede.
Antologa de poesa

122
Jos de Jess Palacios Serrato
De la lgrima y su dificultad

Llorar es la prxima ceguera.


Lzaro Tello Pedr

Quin dijo que llorar es cosa fcil,


si la lluvia trae su rostro en nuestros dedos,
si el hombre lava, llora, muere, alegra el ro,
si de todos los hombres somos una terminal
el resultado de la tradicin de lgrimas,
un contagio heredado desde lejos?

Llorar es transmitir la decadencia,


es sufrir el paso de la humanidad
con su dolor inmenso por un espacio diminuto.

Llorar es parir a la humanidad entera,


es parir ocanos por los ojos,
y dejarse al cobijo del ahogo.

123
Distracciones del profeta

Entre la multitud puedes reconocerme, amor,


yo soy el que va cantando.
Eduardo Langagne

Llegars,
pasars cerca,
muy cerca,
demandando la vigilia de mis sentidos.

Sin embargo, debes saber,


que es posible que no lo advierta;
soy incrdulo y poco pretensioso,
permanezco avocado en el libro cuando viajo,
no saludo a mis vecinos, vivo solo,
vagabundeo mirando los adoquines
o los barrocos rboles,
raramente busco en los rostros algo que no sea mo,
no entablo conversaciones prolongadas
y cuando voy cantando,
entre la multitud,
ingenuo permanezco con los ojos cerrados.
Antologa de poesa

124
Jos de Jess Palacios Serrato
Tren contra la niebla

En las maanas,
cuando las ventanillas de los cuartos se abren
y llueven por dentro los departamentos
me acuerdo de ti, madre,
al salir de tu bao,
de tus bellos ojos,
de tu largo cabello que trenzabas en tardes
de besarnos la frente.

Pero me acuerdo ms de ti,


mam,
cuando escucho que mi voz no es la de un nio,
que mi mundo se derrumba a cada paso
y que si derramo mi sangre es tu sangre la que corre.

Me acuerdo de ti,
cuando s que te enfermas con frecuencia,
y que no tengo dinero en los bolsillos
para ir a visitarte o dejarte una flor en el tendero.

Me acuerdo de ti, madre,


que me enseaste a desprenderme,
y sin saberlo, me enseaste que la poesa,
slo puede ser ajena.

Si encuentro gente que dice:


no puedo, ya estoy vieja,
me acuerdo de ti con tanta furia:
y grito:

125
mi madre comenz a estudiar a los cincuenta
y tena siete hijos
y ningn marido
y dos perros
y una fuerza de tren contra la niebla!
Antologa de poesa

126
JUAN DANIEL
QUINTERO
CRAVIOTO
Juan Daniel Quintero Cravioto
Ciudad de Mxico, 1982
Plantel Cuautepec
Generacin 2007

Juan Daniel Quintero Cravioto. Naci en 1982 en el DF, Estudia la Licen-


ciatura en Creacin Literaria en la Universidad Autnoma de la Ciudad
de Mxico. Fue becario del ICYT DF-UACM con el proyecto expandir le-
tras que promocionan la lectura y escritura creativa. Cursa el diplomado
de profesionalizacin de mediadores de salas de lectura por parte de la
UAM y CONACULTA.
Antologa de poesa

128
Juan Daniel Quintero Cravioto
Camalen

Seducido en tu crislida,
metamorfosis de salamandra,
invades la quietud.

Tu cuerpo aglutina aves


del paraso.

Creas ocasos humedales.


Cpula, guardin en el pantano te recreas.
Te deleitas la piel erecta, palpitan las sombras
de lancha sin timonel.

Salitrosa esencia, lacustre ro de algas,


cocodrilos asechan, devoran la presa
diurna en los manglares de tu alcoba.

Sombras, lagartos que se arrastran


para devorar.

Tu ojo, ombligo girasol de recuerdos,


contrae en sensatez al tiempo.
La oruga germina plegarias y retoza
polvo csmico.

Mientras nado en un mar de grillos en ajenjo


la pasin de doce ases desfila al azar.

Cuntame las horas para robar el laberinto


por donde transitan tus sueos.

129
Quin eres para creerte hechicero,
vagabundo, caminante, campesino?

Tarntula, telaraa tejida para atrapar torrentes.


Aligtor, esconde la selva, follaje indeciso.
En cuatro vientos se fragmenta el sol.

Todo en uno, uno en todo, lianas encaraman


rboles de panteras.
Antologa de poesa

130
Juan Daniel Quintero Cravioto
Leche licntropa

En un sorbo seduce hermetismo.


Miel de crianza, extracto sobre la piel.
Amamanta, aflora el lquido.

Energa vital, suero en mi sangre,


lago en jcaras se disuelve en caf.

Aroma tostado, inhala desventura


en el comienzo del paladar.

Palpita el apetito expreso en un sabor.


Capuchino deleite de espesura.

Aroma gesticular crea ronroneos


en el reflejo de la ventana.

Escucho la cafetera donde la dualidad converge.

Los aromas se penetran y juegan ajedrez,


se corona la reina con el contrario.
Se mezcla la Va Lctea en la noche que contiene
el pocillo del caf.

Saboreen este cliz


que derrama la alianza entre pueblos.
Sangre comunitaria,
brebaje fantstico.

131
Se consume en ilusiones el albur de una taza.
Sostiene el mundo el vapor,
mientras mastico el cosmos
que juega con dragones en moca.

El tiempo del caf est cerca,


reno galletas de animalitos:
se sumergirn en el arca
donde las profecas se consumen
en el mar negro de espesura.

Sabores licntropos, caf con leche,


fiesta dual de aromas.

Hbrido acaso, florece el aroma de una era?


Saborea el mestizaje en la transfiguracin del caf.
Antologa de poesa

132
LZARO
TELLO
PEDR
Lzaro Tello Pedr
Oaxaca, 1986
Plantel San Lorenzo Tezonco
Generacin 2007

Naci en el estado de Oaxaca en 1986. Cursa la licenciatura en Crea-


cin Literaria en la Universidad Autnoma de la Ciudad de Mxico. Ha
publicado ensayo y poesa en la revista Palabrijes, el placer de la lengua
y forma parte de colectivo de poetas Gerin de Poesa. Textos de l
pronto aparecern en la revista Bonsi: literatura mnima y en la revista
universitaria El armadillo.
Antologa de poesa

134
Lzaro Tello Pedr
Tengo que hablaros de ella
femenina y fugaz,
como una tierna e incendiada lucirnaga
que escapa de mis manos;
infantil y terrible
su ndice dej de sealar los arcoris
y su mano en altura
es el sable blanco del medioda.

Tengo que hablaros de ella


de la luna colgada como arete
de la cadena de astros en su cuello
y del mineral oculto en su vientre.
Concentra el blanco ramo de la luna.
Sus grandes ojos dilatan la noche.
y se mide el mundo en las pulsaciones
de sus amargas venas.

Tengo que hablaros de ella


de este hbito intil de nombrarla
paraso, mansalva,
cinaga, catarina.
Ante el cristal de la maana callo
el nombre de mi madre.

135
Alto campanario

Por el pice abierto el cono inverso


deja caer la cautelosa arena,
oro gradual que se desprende y llena
el cncavo cristal de su universo.
Son veinticinco aos sin su verso
perpetuado en la memoria. Ajena
es ya la ceguera que fue su pena,
y propio el cenizo polvo disperso.
En qu edificios, calles o balcones
unos ojos de noctmbulo horario
reescriben el Poema de los dones?
Fue la luna, el espejo y los bastones;
con el bronce y el canto del canario
Borges es convocante campanario.

Junio de 2011
Antologa de poesa

136
Lzaro Tello Pedr
Magia en el Garage

Ensayaron los acordes, los ritmos truncados, la variacin de


velocidades, las notas. Empecinados en revelar otra geometra
de la msica, practicaron todos los gneros inventados, desde
el llameante jazz, hasta un blues que disfrazaba de nebulosa su
solfeo azul.
El sonido del bombo, golpeteo de pecho, retumbaba ms
all de la calle. Una meloda iba y vena, fina costura musical, zur-
ciendo los vidrios rotos del cuarto; cerraba el hocico del perro insis-
tente de ladridos y sostena el liviano vuelo de las mariposas, como
los algodones de azcar son sostenidos por los nios en las ferias.
La guitarra se volcaba y volcaneca. Una lava desprendida
se azotaba contra las paredes. Ahora, un silencio, despus de
tanta msica, el silencio se disfruta. Sus pulmones, an agitados
por el pulso, se expandan y contraan en falsos fallecimientos.
Enseguida, los instrumentos se volvan a erigir como estatuas
vivas, regresando de esa muerte que fue el descanso.
El arpa era un parpadeo rtmico, un guio controlado,
un ojo que se abra en los dedos, recorriendo las lneas paralelas
encerradas en tenso instrumento. Las cuerdas se extendan,
buscando un territorio que constituira una nueva patria de la
msica. Un bajo apoyaba la conquista y era complicadsimo y
trmulo. Cuatro tipos posesos en su quehacer matutino.
Su msica no era vibracin ni percepciones sensoriales,
no, su msica el sobresalto de las piedras, un enjambre de notas,
una colonia hormiguera de dorremifalosases.

137
Autorretrato

Yo, que tengo del talado rbol la cintura,


el temple solemne de un himno,
los cabellos sepultos de una mina
y la inteligencia de bolsillo secreto,
jams he podido
asir un relmpago en su viaje de sacudida sea
ni conversar con el venado amamantado del ro.

Yo, que soy pobre de lunares y misrrimo de amigos,


he buscado sin xito
la lnea que se fugue de mi mano,
el claro da pulsando por mis venas
o la dura y ronca guitarra de mi pecho.

Slo he encontrado y es lo triste


mentiras recurrentes de personas,
una que otra mecha encendida de algn sexo,
stanos escritos en los libros
y nunca la palabra que me lleve al poema.
Antologa de poesa

138
NDICE

Presentacin, Carlos Lpez 11

Introduccin, Francisco Trejo 15

I. Juventino Gutirrez Gmez 51


Digresiones sobre la lluvia 53
La lagartija piensa 54
La perfeccin de Dios 55
Muerte anticipada 56
Torrente de doble aguacero 57

II. Ftima Ins iguez Gmez 59


Parto cultural 61
Mujer de oro 62

III. Ral Anbal Snchez Vargas 63


VII 65
Sealar nos consume la mirada 66
Mi cuerpo caer sobre la hierba de todos los poemas 67
Suicida 68
Salmo 91 70

IV. Luca Fernndez Izquierdo 71


A la que estuvo antes que yo 73
Amante 74
V. Dante Vladimir Ochoa Gonzlez 77
Arribo annimo 79
Desde el asombro que ciega 80

VI. Beatriz Camacho 83


Palabra 85
El intento 86
La muerte del silencio 87
Canto a la poesa 88

VII. Antonio Rueda Snchez 89


Piel 91
Despus del affeire 92
El sagrado 93
El ascenso y la cada de 94

VIII. Vctor Lovera Salazar 95


Poema III 97
El mismo tigre 98
Susana de Babel 100

IX. Brenda Mariana Orantes Garca 103


Sobre la muerte 105
Impresin del ausente 106

X. Francisco Trejo 107


Para que un poeta actual conserve a su esposa 109
El argumento de un pretendiente 110
Oracin del epigramista 111
Jinete y cerdo 112
A los hombres perfectsimos 113
XI. Cynthia Alvarado Gmez 115
La copa 117
Ecuaciones 118

XII. Jos de Jess Palacios Serrato 119


Ineffabilis 121
De la lgrima y su dificultad 123
Distracciones del profeta 124
Tren contra la niebla 125

XIII. Juan Daniel Quintero Cravioto 127


Camalen 129
Leche licntropa 131

XIV. Lzaro Tello Pedr 133


Sin ttulo 135
Alto campanario 136
Magia en el Garage 137
Autorretrato 138
Los colepteros enfebrecidos se imprimi
en el Taller de impresin de la UACM
en mayo de 2013. Para su formacin se utiliz
la tipografa Gandhi Sans. Tiraje: 500 ejemplares.

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