ATAV 2 recreó la mítica guerra de vedettes en Almorzado con Mirtha Legrand, con la Chiqui como anfitriona

ATAV 2 recreó la mítica guerra de vedettes en Almorzado con Mirtha Legrand, con la Chiqui como anfitriona
ATAV 2 recreó la mítica guerra de vedettes en Almorzado con Mirtha Legrand, con la Chiqui como anfitriona - Créditos: @Captura de pantalla

Con la misma elegancia, pero con un estilo menos confrontativo, Mirtha Legrand conducía en 1980 sus emblemáticos almuerzos televisivos. Eran tiempos de dar “la vueltita” y describir los modelos que lucía cada mediodía, pero también la vajilla y la mantelería con la que agasajaba a las estrellas, que al contrario de lo que ocurriría décadas más tarde, poco tenían que ver con el mundo de la política.

Uno de los almuerzos de aquel año se convirtió en uno de los más comentados de todos los tiempos y sirvió, también, para instalar la idea de que las mujeres son mucho más complicadas y competitivas en el ámbito laboral; mucho más si se trata de actrices o vedettes. En aquella oportunidad, quienes se sentaron a la mesa más famosa del país fueron Zulma Faiad, Adriana Aguirre, Ethel Rojo y Violeta Montenegro. La elección de las invitadas no fue casual: en aquel tiempo uno de los titulares más leídos en las portadas de las revistas daba cuenta de una suerte de “guerra de las vedettes” y la producción decidió reunirlas para que ellas se sacaran chispas frente a las cámaras.

Faiad, que fue la primera en ingresar al estudio, intentó desmitificar aquel tema halagando a la compañera con la que compartía cartel en uno de los espectáculos revisteriles más importantes de la temporada: Nélida Lobato. Sin embargo, inmediatamente ingresó al estudio Ethel Rojo y se paró en la vereda opuesta, lista para dar por comenzada la guerra: “Sí, hay enfrentamientos entre nosotras. Y a veces no son agradables, porque no es un enfrentamiento profesional, es de palabra”.

Y a partir de ese momento, no hubo tregua. La edad de cada una, la taquilla, los éxitos y hasta la apariencia se convirtieron en temas de una acalorada discusión que quedó como retrato de una época en la que la revista convocaba a miles de espectadores cada noche en la Calle Corrientes.

Este martes, en ATAV 2 recrearon aquel emblemático almuerzo. En este caso, la Chiqui -inteligentemente incluida a través de inserts del tape original- recibió a las vedettes de la novela, Anita Moré (Justina Bustos), Mónica Villalobos (Andrea Rincón), Leticia Hayek (Jessica Abouchain) y Salma Gutiérrez (Agostina Cautericcio) y, al igual que ocurrió en el almuerzo “verdadero”, las muchachas se sacaron chispas.

“Ella no es vedette, es vendedora de ropa”, comenzó atacando Mónica a Anita, respondiendo al pedido de Ethel (Malena Solda) de dejarla mal parada ante el público. Sin dejar de sonreír, la rubia respondió: “Yo estoy supercontenta con la carrera que estoy construyendo”. Pero su compañera volvió a atacarla con mucha sorna: “Carrera de embolsados”.

Pero hubo revancha. Cuando Mirtha le preguntó a Mónica si le costaba su carrera, Anita tomó la palabra: “A nosotras nos cuesta la carrera. Sobre todo porque hay que aguantar a esta mujer a la mañana. Es un tanque de guerra, Mirtha”.

“Sí, me ha costado muchísimo. Sudor y lágrimas me ha costado. No tuve la suerte de algunas, de aparecer en una marquesina de la noche a la mañana como por arte de magia”, redobló la apuesta Mónica. Y allí fue cuando Salma y Anita hicieron hincapié en “los muchos años” de trayectoria de su colega, trayendo a la mesa el tema de la edad, el que más discusiones causó en el almuerzo verdadero.

Desde que comenzó, ATV 2 ha tomado muchos momentos históricos de la década del 80 para incluirlos a su trama, como un guiño a su público. Sin dudas, esta recreación de la histórica guerra de las vedettes en la mesa de Mirtha Legrand se convirtió en uno de los más celebrados por los espectadores.