Periodistas cruceños ven que actuación de los interculturales “es alentada por la falta de accionar del Gobierno”

La APSC se pronunció tras que el dirigente Tito Flores Condori acusara a los periodistas de “mentir, tergiversar y manipular discursos, para favorecer a élites de poder”. 

Una imagen de archivo muestra el momento en que periodistas son secuestrados por encapuchados. Foto: Captura de pantalla de ATB

eju.tv

La Asociación de Periodistas de Santa Cruz (APSC) considera que la actuación de los interculturales  “es alentada por la falta de accionar del Gobierno”. Esa entidad rechazó las sindicaciones contra los trabajadores de la prensa, que fueron expresadas por la Federación de Comunidades Interculturales San Julián Norte y comunidades afiliadas a la central Pailitas y Las Londras, según una nota de la Unidad de Monitoreo de la ANP.



La presidenta de esa entidad, Maggy Talavera, expresó que la acción de los interculturales “es alentada por la falta de accionar del gobierno para contrarrestar discursos y acciones que no corresponden a un estado de derecho, y también deja en evidencia que en nuestro país no están dadas las garantías para ejercer la labor de prensa ni la libertad de expresión”.

El dirigente Tito Flores Condori, portavoz de la Federación de Comunidades Interculturales -afín al partido de gobierno- criticó la labor de la prensa de Santa Cruz y acusó a los periodistas de “mentir, tergiversar y manipular discursos, para favorecer a élites de poder”.

En tanto, la Asociación Nacional de la Prensa (ANP) exigió una acción inmediata de la justicia contra el secuestrador de periodistas, Nicolás Ramírez Taboada, por las amenazas vertidas contra el trabajo periodístico y del diario El Deber.

Ramírez está procesado por homicidio en grado de tentativa y uso de armas de fuego durante el secuestro de seis periodistas, el 28 de octubre de 2021, en el municipio de Guarayos, departamento de Santa Cruz, y goza del beneficio de arresto domiciliario.

Este martes, el procesado nuevamente entró en escena y amenazó con violencia en una disputa por tierras agrícolas en el municipio de Guarayos, y advirtió con el uso de armas en una “segunda revolución agraria”.