​El 27% de huancaínos, en riesgo por tener el vientre abultado

Para muchos, que una persona tenga un abdomen grande, en especial en los varones, es sinónimo de “una buena vida”. En tanto que para las mujeres resulta antiestético. No obstante, los especialistas advierten de los peligros que significa el poseer una prominente barriga.

EN RIESGO. El director de la Unidad Básica de Atención Primaria (UBAP) Chilca de EsSalud, César Reyes, advirtió que las personas de abdomen grande, tienen que acudir de forma regular ha realizarse chequeos médicos. Esto por el riesgo que existe debido a que pueden contraer males crónicos, como diabetes e hipertensión. Además de la obesidad, los infartos, males renales, derrame cerebral y otros.

PERÍMETRO ABDOMINAL. La acumulación de grasa principalmente alrededor de la cintura. La forma más práctica para determinar si se tiene la grasa abdominal excesiva es mediante la medición de la circunferencia de la cintura. “El perímetro abdominal de una persona es un método muy sencillo para detectar la presencia de alguna enfermedad. Si los varones sobrepasan los 90 cm y las mujeres los 80 cm existe algún riesgo”, dijo César Reyes.

Pero, se advierte que de pasar la medida los 100 cm hay un fuerte factor de riesgo para la resistencia a la insulina. Esto provoca el síndrome metabólico y el precursor de la diabetes tipo 2. Además, la grasa abdominal se convierte en colesterol. “Es más importante para el paciente conocer cómo se distribuye la grasa en su organismo, que el exceso de peso en sí mismo”, agregó.

EsSalud de Huancayo informó que en sus campañas de salud realizadas en 2015, se tamizaron a 5390 de los cuales se tuvo 1445 que fueron diagnosticados con síndrome metabólico. Esto significa que el 27% es más propenso a tener colesterol alto, presión arterial alta y enfermedades cardiovasculares debido al exceso de grasa abdominal.

RECOMENDACIONES. Entre las principales recomendaciones que dio el especialista es hacer actividad física y no consumir comida chatarra. Mantener el peso adecuado, llevar una dieta libre de grasas saturadas, azúcares simples y calorías excesivas. Esto se pone en practica en los talleres de prevención de EsSalud