Alevosía: Un Análisis de sus Implicaciones Legales【Con Ejemplos】

¿Qué es la alevosía en el ámbito legal? ¿Cómo afecta a la gravedad de un delito y qué condiciones deben cumplirse para que sea considerada? ¿Cuáles son sus tipos? Estas son preguntas cruciales que exploraremos detalladamente a lo largo de este artículo. Este concepto se categoriza como un agravante en el código penal, desempeña un papel fundamental en la calificación de la gravedad de un delito e incluso de su pena.

Su definición general en el artículo 22 del Código Penal deja espacio para diversas interpretaciones, y su aplicación en muchos casos.

A lo largo de este artículo, exploraremos ejemplos prácticos que ilustrarán las distintas facetas de este agravante, desde situaciones donde la vulnerabilidad física de la víctima es explotada hasta casos de ataques sorpresivos y estratégicos. Descubre la relevancia de esta figura en nuestro derecho penal.

¿Qué es la alevosía?

Como hemos adelantado, la alevosía es un agravante, es decir, una conducta que el código penal considera grave y que por tanto cuando se da en un delito puede implicar una pena más elevada. Se encuentra regulada en el artículo 22 del Código Penal y es aplicable a todos los delitos, pero además también se regula de manera particular en el asesinato.

El asesinato es igual al homicidio, pero se diferencia del segundo, en que se debe dar como requisitos alguno de los agravantes regulados en el artículo 132 del Código Penal, siendo uno de ellos el agravante que estamos analizando.

¿Pero en qué consiste? El Código penal nos da una definición muy general, ya que como sucede con otros conceptos en esta rama del derecho, dan cabida a un gran número de situaciones.

Se puede definir como aquella situación en la que el culpable utiliza medios, modos o formas, para asegurar que su delito tenga éxito, evitando que la víctima pueda defenderse. En concreto, por regulación del artículo solo se puede observar en los delitos contra las personas, ya que en otro caso sería muy complicado de apreciar este agravante.

Como hemos dicho se trata de una definición muy general ya que se puede aplicar a muchas situaciones, por ejemplo, se da este agravante cuando el medio empleado para matar es un veneno, ya que la víctima no puede defenderse de esto. También estaríamos ante un delito alevoso si la víctima a la que pretendemos hacer daño fuera un bebé, ya que este no puede defenderse.

Por último, antes de pasar a los tipos, debemos tener presente que el Código Penal establece que no se puede apreciar este agravante en los delitos leves o en los imprudentes, conforme al artículo 66.2.

Tipos de Alevosía

Existen distintos tipos de alevosía, para intentar categorizar las situaciones en las que nos la podemos encontrar:

• La alevosía por desvalimiento: es aquella en la que el culpable se aprovecha de alguna desventaja física o de las características físicas de la víctima. Por ejemplo, cuando se ataca a un bebé o a un anciano.
• La alevosía súbita: Supone aprovecharse del factor sorpresa, ya sea por la confianza de la víctima o la confianza de ésta en el entorno. Un ejemplo sería la de asaltar a alguien en su casa, o hacerlo tras forjar alguna relación de amistad.
• La alevosía insidiosa: Consiste en llevar a cabo el delito de forma que no queden evidencias del mismo. El ejemplo más usual es el de envenenar a la víctima, pero también podemos nombrar las estafas digitales.
• La alevosía proditoria: Se refiere a la premeditación del culpable, que estudia a su víctima para determinar el mejor momento para atacar a su víctima, aprovechándose se ese conocimiento que ha adquirido previamente.

La alevosía en la jurisprudencia

La STS 5046/2023 hace un resumen de la jurisprudencia más importante sobre este agravante y es que esta jurisprudencia considera que se deben de cumplir los siguientes requisitos para poder apreciarla:

• Como hemos adelantado, exigido en el Código Penal debe tratarse de un delito contra las personas.
• Que el autor utilice en la ejecución medios, modos o formas que han de ser adecuados para asegurar la eliminación de las posibilidades de defensa, no siendo suficiente que el autor crea que asegura dicha eliminación, debe ser objetivo.
• Que el autor tenga la voluntad, es decir el dolo, de la utilización de esos medios y de asegurar la ejecución. Esto quiere decir que la utilización de los medios debe ser consciente y con la intención de evitar la defensa de la víctima, no puede ser accidental.
• Que se aprecie en la conducta, por ser alevosa, un acto o hecho más contrario al ordenamiento jurídico, es decir, una mayor antijuridicidad. Si no conoces lo que es la antijuridicidad, te recomiendo nuestro artículo sobre la Teoría del Delito en el que te lo explicamos.

Diferencia entre alevosía y ensañamiento

Dentro del derecho penal, el ensañamiento y la alevosía tienen ciertas similitudes, y es habitual su confusión, dado que ambos son agravantes de un delito. Por ello es importante distinguirlos y conocer sus diferencias.

Mientras que la alevosía es utilizar medios para que la víctima no pueda defenderse, el ensañamiento se centra en aumentar el sufrimiento de la víctima.

Para comprender mejor las diferencias veamos algún ejemplo. Si un delincuente ataca a una persona por la espalda con un cuchillo estaríamos ante la alevosía, ya que utiliza esto para que la victima no pueda verlo acercarse ni defenderse.

Si en el mismo caso, le apuñala numerosas veces, sin causarle la muerte hasta la última, esto aumenta considerablemente el dolor de la víctima, y estaríamos ante ensañamiento.

Por último, si mezclamos ambas, y una persona ataca a otra por la espalda con un cuchillo y le propina varias puñaladas, estaríamos ante una conducta con alevosía y ensañamiento.

Ejemplos prácticos

Ejemplo 1- Robo Nocturno

Roberto, consciente de la fragilidad de su abuelo anciano, espera pacientemente a que este se durmiera para perpetrar un brutal ataque, con la intención de adueñarse posteriormente de herencia. La alevosía por desvalimiento en este caso es doble, ya que se aprovecha de su vulnerabilidad habitual, que sería la desventaja física de la víctima y por otro lado, temporal, ya que espera a que este se duerma, que es otra situación de vulnerabilidad añadida.

Ejemplo 2- Ataque Preparado

Enrique, dada su gran enemistad con un compañero de trabajo, estudió meticulosamente su rutina diaria para determinar el momento más propicio para agredirlo. Aprovecha su ruta de vuelta del trabajo en el que pasa por un callejón oscuro para propinarle una paliza. La alevosía proditoria se pone de manifiesto al aprovechar el conocimiento previo adquirido, ejecutando un ataque premeditado y sin posibilidad de defensa por parte de la víctima.

Ejemplo 3- Intrusión Amistosa

Marta, tras forjar una aparente amistad con su vecina, aprovechó la confianza establecida para ingresar sorpresivamente a su casa y robar con violencia objetos de valor. La alevosía súbita se manifestó en el ataque repentino, aprovechando la confianza de la víctima en su entorno y en la persona de la culpable, llevándola a ser asaltada de manera inesperada.

Ejemplo 4- Fraude Digital

Laura, experta en estafas digitales, orquestó un plan para engañar a sus clientes y obtener beneficios ilícitos sin dejar rastro. La alevosía insidiosa se reflejó en la ejecución del delito de forma que no quedaran evidencias, utilizando medios digitales para cometer la estafa y eludiendo la detección.

Conclusiones

Al llegar al cierre de este artículo sobre la alevosía, has adquirido una comprensión más profunda de este concepto legal crucial. Desde su función como agravante en el código penal hasta su particular aplicación en casos de asesinato, hemos explorado las aplicaciones de este agravante y cómo esta afecta la gravedad de un delito.

Has aprendido que esta agravante se manifiesta cuando el culpable utiliza medios, modos o formas para asegurar el éxito de su delito, evitando así que la víctima pueda defenderse. La vulnerabilidad física, los ataques sorpresivos, la estrategia premeditada y la ejecución sin evidencias son solo algunos de los aspectos que conforman los diferentes tipos de alevosía.

Al examinar la jurisprudencia, has descubierto que se requieren ciertos criterios para apreciar la alevosía, incluyendo que el delito sea contra las personas, el uso objetivo de medios adecuados para eliminar las posibilidades de defensa. Por último, a través de ejemplos prácticos se han ilustrado las diversas facetas de la alevosía y has conseguido dominar y comprender en profundidad esta agravante.

Si has llegado hasta aquí y necesitas una ayuda para estudiar Derecho Penal, no te pierdas nuestro artículo Cómo estudiar Derecho Penal sin morir en el intento.

¡Espero que te haya gustado este artículo y nos vemos en el siguiente!