Mark Cuban es una de las personalidades más polémicas del mundo del baloncesto. El propietario de los
Dallas Mavericks nunca ha tenido problemas en decir lo que piensa y en enzarzarse en acalorados debates con cualquier persona.
La última discusión de Cuban gira en torno a él y al autor conservador Dinesh D'Souza. Estos dos se metieron en un acalorado intercambio recientemente y parece que no se calmará pronto.
Todo empezó cuando D'Souza publicó un vídeo en el que un transexual compartía sus frustraciones por la forma en que era tratado por su empleador. D'Souza tuiteó a Cuban, diciendo que el copropietario de los Mavericks debería contratar al transexual para diversificar su plantilla.
Cuban contestó a D'Souza con una larga respuesta: "Así que esta persona quiere desahogarse porque a pesar de pensar que iba a conseguir horas en un trabajo, no lo ha conseguido. ¿Has estado alguna vez en esa situación? Yo sí", escribió Cuban.
"Luego se desahoga porque está viviendo en un coche y está enfadado porque el salario mínimo no le llega para pagar las facturas. ¿Crees que podrías desahogarte porque no ganas lo suficiente para pagar las facturas? Yo sí".
"Es evidente que intentan ser autosuficientes y eso no es nada. Y tú, en vez de respetar el esfuerzo y el machaque quieres juzgarlos en función de cómo se ven a sí mismos. A quién le importa cómo quiera identificarse la gente. Eso es cosa suya. Veo a una persona que intenta hacer lo correcto, trabajar y valerse por sí misma. Le respeto mucho más por lo que intenta hacer que por lo que te he visto hacer a ti", continuó.
D'Souza no se dio por vencido y replicó: "En pocas palabras, no le contratáis porque sabéis que sería un coñazo trabajar con él y probablemente demandaríais a vuestra empresa por haberle insultado". Esto es lo que yo quería decir: que tu postura sobre la diversidad es pura palabrería. Lo tuyo es la señalización de la virtud. Gracias por confirmarlo".
De hecho, ya se han enfrentado antes en Internet. Durante el auge del movimiento Black Lives Matter, D'Souza atacó a Cuban por su apoyo a BLM. Desde entonces, se han enfrentado en múltiples ocasiones y parece que su antipatía mutua no hace más que aumentar.
Cuban vendió recientemente la propiedad mayoritaria de los Mavericks, pero sigue siendo muy práctico en su posición y continuará impulsando al equipo. Al parecer, también seguirá discutiendo con aquellos con los que no esté de acuerdo.
