Andrés Herraiz | Psicología Valencia
Blog > Psicologia Sanitaria

¿Cómo nos afecta
la inmediatez?

  ¿Cómo nos afecta </br>la inmediatez?

El efecto de la cultura de la inmediatez

<<PROHIBIDO ESPERAR>> ¿tú también has caído en la trampa…?

No podemos hablar de la cultura de la inmediatez, sin relacionarlo con el desarrollo de las tecnologías, que, aunque ya no son tan nuevas, continúan avanzando a pasos agigantados.

La inmediatez ha cambiado la concepción del tiempo, nuestra forma de interpretar la realidad, e incluso el modo de relacionarnos.

Inmersos en nuestra burbuja, no nos damos cuenta de todos los cambios que suceden a nuestro alrededor, de cómo evoluciona la sociedad con el paso del tiempo, de las nuevas necesidades que se crean o de los nuevos modelos de negocio que surgen bajo el paradigma de la inmediatez.

Vivir tan deprisa, ha favorecido que cambiemos nuestros hábitos de vida. La cultura de la inmediatez, hace que nos resulte insoportable la idea de tener que esperar.

<<Los avances suponen mejoras, pero por cada uno de estas, también existe una contraprestación>>

Efecto de la inmediatez en la ciudad

Las ciudades, son espacios en continuo cambio y se convierten en el escenario perfecto para observar y ejemplificar este fenómeno.

La propia estructura de las ciudades, se ha ido modificando para reconvertirse en espacios dónde se facilita la movilidad y la inmediatez.

Pero, ¿estamos preparados para el cambio?,¿hemos medido las consecuencias?, ¿qué efectos tiene?

Lo cierto, es que todo esto, que a priori, podrían parecer ventajas, podrían no serlo.

La aparición de nuevos modelos de negocio; startup, riders o repartidores a domicilio, supermercados fantasmas, el «motosharing» (motos de alquiler en la vía pública) o el surgimiento de nuevos medios de transporte como los patinetes eléctricos, ya forman parte de la nueva estructura de las ciudades.

Pero como cualquier cambio, este también genera un impacto y tiene unas consecuencias para nuestra salud.

Aunque no lo percibamos de forma clara, todos estos estímulos, nos generan «ruido mental».

Al salir a la calle, cada vez disponemos de menos espacio para andar, coches, motocicletas, bicicletas y patines han tomado la ciudades, tenemos que estar atentos a un montón de estímulos y sortear nuevos obstáculos.

<<Todo esto, ha contribuido a acelerar de manera totalmente innecesaria nuestros ritmos de vida>>

Por esto, no es extraño que, si las posibilidades lo permiten, se produzca un éxodo de las ciudades, en busca de aumentar nuestra calidad de vida, dónde el ritmo de vida sea más pausado, menos estresante y más relajado.

Si a veces, resulta hasta complicado transitar por las grandes urbes, no digamos lo complejo que puede resultar encontrar un remanso de paz.

Parece incluso una imagen desconcertante, encontrar una parejita de ancianos de avanzada edad abriéndose paso y esquivando patinetes, riders y otros obstáculos.

Todos estos cambios, nos hacen creer que debemos vivir deprisa, pero, ¿para qué ir corriendo, si simplemente podemos caminando?

«Estamos construyendo una sociedad acelerada, desconsiderada, competitiva y hostil. Las ciudades, se están convirtiendo en espacios poco amables e iatrogénicos para nuestra salud mental»

A golpe de app

Si nos fijamos en nuestro entorno, todo esta cuidadosamente diseñado para que sea más accesible, más rápido, más inmediato. Si piensas en tu día a día, seguro que se te ocurren un montón de ejemplos…

Por esto, un área muy potente de negocio, es precisamente esta, «la inmediatez« o el desarrollo de apps para acercar, facilitar o potenciar el acceso a los servicios a los usuarios.

Comida, contenido, contactos, información… lo queremos todo y lo queremos ¡YA!

Hasta las mismas redes sociales, evolucionan y favorecen el acceso a un contenido cada vez más inmediato.

Por ejemplo: vídeos lo suficientemente cortos como para captar tu atención, transmitir un mensaje, sin que supongan ningún esfuerzo cognitivo aparentemente importante.

WhatsApp también facilita la opción de reproducir los mensajes de audio a mayor velocidad.

¿Pero en qué o dónde invertimos todo este «ahorro» del tiempo?, ¿en nuestra calidad de vida, tal vez?…

«Los «avances» nos hacen creer que estamos luchando una batalla permanente contra el tiempo»

Pero, todas estas «facilidades» también son un arma de doble filo, ya que parece que todo esté inventado y favorece que la gente busque soluciones en forma de truquitos o píldoras mágicas.

Otro efecto lógico y a la vez preocupante de la inmediatez, es que cada vez nos resulta más difícil comprometernos, ya sea con nuestras relaciones personales o con nuestro propio bienestar incluso.

«Pretendemos que unos TIPS de 30 segundos, solucionen un problema con el que llevamos conviviendo 30 años».

Efectos de la inmediatez en nuestro bienestar

¿Cómo nos afecta la inmediatez?, uno de los efectos de la cultura de la inmediatez, es que tenemos todo aparentemente más accesible, aunque paradójicamente, tenemos peor calidad de vida o somos más infelices.

ECUACIÓN→→ [INMEDIATEZ + BAJA TOLERANCIA A LA FRUSTRACIÓN = INSATISFACCIÓN]

El refranero popular ya da buena cuenta de que «las prisas, no son buenas consejeras», puesto que «quién mucho corre, pronto para

<<cada vez tenemos más prisa, menos paciencia y más miedo al compromiso>>

Los cambios sociales, las necesidades impuestas, la presión económica y laboral, unido a un altísimo nivel de hiperexigencias, hace francamente difícil, encontrar puntos de equilibrio entra la inmediatez y el bienestar.

Aunque cada vez estamos más hiperconectados, también nos sentimos más alejados de la realidad.

Muchas veces, soportamos unos ritmos frenéticos, muy por encima de nuestras posibilidades.

La búsqueda de la satisfacción inmediata, muchas veces, nos crea carencias en otros ámbitos.

La recompensa a corto plazo y la gratificación inmediata, correlaciona con una elevada insatisfacción.

Vamos muy deprisa, pero no sabemos a dónde queremos llegar. Pero, si no sabemos parar a tiempo, tampoco sabemos vivir.

La cultura de la inmediatez, favorece que nos resulte desagradable leer un libro, bajar a un parque y observar los pájaros, o simplemente nos sentamos incluso culpables por el hecho de pensarlo.

No es extraño el aumento de la prevalencia de enfermedades relacionadas con la salud mental como estrés, la ansiedad o la depresión.

Sígueme en las redes
Andrés Herraiz psicólogo en contacto con la naturaleza

Andrés Herráiz

¡Hola! Mi nombre es Andrés Herraiz, estudié psicología en Valencia y posteriormente seguí ampliando mi formación en la universidad Santiago de Compostela, con la que he colaborado en eventos de difusión científica.

Actualmente, trabajo en mi propio centro Andrés Herraiz – Psicología Valencia, dónde me ocupo personalmente de ofrecer un servicio cercano y de calidad, destinado por y para las personas.

Periódicamente suelo publicar artículos relacionados con temas de salud mental y bienestar emocional en mi blog, si te interesa el contenido, y quieres pasarte por aquí, serás bienvenido/a.

Si quieres conocer un poquito más sobre mí, puedes visitar el apartado sobre mí de la web.

¿Puedo ayudarte?
Andrés Herraiz psicólogo en Valencia fuera de la consulta

Si necesitas un psicólogo de confianza en Valencia, y aún no has dado el paso, en mi centro de psicología en Valencia, Andres Herraiz – Psicólogo Valencia, te atenderé personalmente desde el primer momento.

Estoy ubicado entre Benimaclet y Primado Reig, a 2 min de la parada de metro, el club de tenis y los Jardines de Viveros.

Ofrezco tratamiento psicológico de adultos y adolescentes, problemas de pareja, derivados del trabajo y asesoramiento a familias, desde una orientación en terapia cognitivo conductual.

Tras la evaluación, te ofreceré un punto de vista profesional, así como un plan de tratamiento individualizado.

¿Tienes dudas acerca de la terapia psicológica? Ponte en contacto y estaré encantado de ayudarte a resolverlas.

Contacta conmigo

Flotador asistencia psicológica en Valencia

Contacta:

    Si has llegado hasta aquí y necesitas ayuda profesional, no dudes en ponerte en contacto.
    Estaré encantado de escucharte, acompañarte y guiarte en este proceso.

    Nombre y apellidos*:

    e-mail*:

    Telefono:

    Modalidad:

    Preferencia día:

    Disponibilidad:

    Motivo Consulta:

    He leído y acepto la política de privacidad