¿Sufriste Lesiones por un Producto Defectuoso? ¿Ahora qué?

Los productos defectuosos son propensos a ocasionar graves lesiones y en algunos casos inclusive la muerte.  Aquellas empresas que produzcan, fabriquen, o vendan productos defectuosos deben de responsabilizarse legalmente en caso de que tales productos lesiones u ocasionen la muerte de alguna persona.  ¿Sufriste Lesiones por un Producto Defectuoso?  ¿Ahora qué?

La ley contempla tres vías por medio de las cuales una persona lesionada puede probar que un producto es defectuoso.  Desde el punto de vista legal, un producto es considerado defectuoso si, al momento en que se vende o distribuye, cuenta con defectos de fabricación, un defecto de diseño, o porque no cuenta con las debidas advertencias sobre su uso, peligrosidad, o riesgo.

En términos generales, un defecto de fabricación ocurre cuando el producto no se ajusta al diseño autorizado, aunque se haya empleado el debido cuidado en su fabricación y publicidad.  Un defecto de diseño ocurre cuando existe un riesgo previsible de que pueda lesionar a alguna persona y que dicho riesgo pudo haberse reducido o eliminado si se hubiera adoptado otro diseño.  Las advertencias o instrucciones inadecuadas implican, como su nombre lo indica, que los riesgos asociados al uso de este producto se pudieron haber mitigado o eliminado si se hubieran hecho de forma correcta.

Así pues, la primera forma para acreditar que un producto es defectuoso es demostrando que el producto tiene un defecto de fabricación.  Por lo regular, las cortes aplican un estándar conocido como el “grado de desviación de la norma,” en base al cual se compara el producto que causó la lesión con los planes originales del fabricante, así como con otros productos iguales o similares.  Si el defecto estaba en un componente del producto, es posible que el fabricante de dicho componente sea también sujeto a responsabilidad.

La segunda forma por la que se puede acreditar que un producto es defectuoso es por medio de su diseño.  Las cortes en Texas comparten el criterio de que aquella persona que haya sufrido lesiones deben de probar no solamente que existe una alternativa más segura con respecto al diseño del producto, sino también que el diseño alterno es económica y tecnológicamente viable, y que además el riesgo ocasionado por este diseño es mayor que su utilidad.  Con la finalidad de determinar si el riesgo es mayor que su utilidad, se toman en cuenta diversos factores como la peligrosidad del producto, las probabilidades de que ocasione lesiones, el nivel de consciencia del usuario en cuanto a los riesgos, y las expectativas de un consumidor común y corriente.  Si la parte lesionada demuestra que el fabricante simplemente no quiso emplear un diseño alterno, y que los riesgos asociados al diseño actual son mayores que la utilidad del producto, entonces el producto será considerado defectuoso desde el punto de vista de su diseño.

La tercera forma por la que se puede demostrar que un producto es defectuoso, es evidenciando que el fabricante o el vendedor del producto no colocó advertencias apropiadas sobre los posibles riesgos del producto.  Esta omisión puede acreditarse demostrando que existe un riesgo con el uso del producto, y que la fabricante sabia o debió de haber sabido de este riesgo al momento en que se puso en venta sin haber colocado las correspondientes advertencias, y que existe una relación causal entre esta omisión y la lesión ocasionada.

En caso de que tu o un ser querido haya sufrido lesiones con motivo de un producto defectuoso, el equipo legal de la Firma de Abogados Amaro puede ayudarte a responsabilizar al fabricante del producto.  Existen productos defectuosos en todos lados, sin embargo, necesitas a un abogado especializado en productos defectuosos para que pueda ayudarte a obtener la indemnización que te corresponde.  Nosotros trabajamos bajo un esquema de honorarios condicionados, lo que quiere decir que se nos paga únicamente si ganamos tu asunto.  Ponte en contacto con nosotros para una evaluación gratuita de tu asunto.