1.5.3.1: El Elipsoide

Isaac Newton, (una vez demostrada la redondez de la Tierra) afirmó que debido a la rotación de la Tierra alrededor del eje de los polos, las tierras cercanas al Ecuador experimentarían una fuerza centrífuga mayor que las de los polos, por que aquéllas tenderían a alejarse del centro de la Tierra más que las polares. Debido a estas fuerzas, la Tierra obligatoriamente debería de tener una forma elipsoidal, cuya sección sería una elipse de eje menos coincidente con la línea de los polos y de eje mayor coincidente con el diámetro ecuatorial.

   

La demostración de la anterior afirmación Newtoniana, se realizó en el primer tercio del siglo XVIII. La Academia de las Ciencias Francesa, patrocinó dos expediciones para medir un grado de meridiano terrestre. Una de las expediciones mediría el grado en las tierras septentrionales de Laponia y otra expedición lo mediría en el virreinato del Perú, donde actualmente se encuentre El Ecuador.

Con la ayuda de observaciones astronómicas y de instrumentos de gran precisión para la época, la comparación de los resultados puso en evidencia la sustancial diferencia entre el grado medido en ambas tierras. Puesto que la longitud sobre la Tierra de un grado de meridiano va íntimamente unida a la longitud del radio de la Tierra en ese lugar, las diferencias sólo podrían ser achacables a diferentes radios terrestres. La forma de elipsoide achatado por los polos fue aceptada.