La amabilidad puede hacer una gran diferencia

Autor: Ana María Aparicio, psicóloga
Mientras escribía el artículo, caí en cuenta que muchas veces escuchamos la frase “Se amable con los demás” pero, ¿Qué significa ser amable?¿Cómo se ve la amabilidad?. Así pues me di la tarea de investigar y encontré información de Seligman un gran investigador sobre la psicología positiva. Este describe la persona amable como alguien que posee empatía, humildad, respeto y autocontrol emocional (muy importante). Según Seligman, este conjunto de características nos permite reaccionar con cuidado y protección frente a la respuesta común de huir o luchar.
Muchas veces confundimos ser amables con la falta de límites, “fulanito no se defiende porque es muy amable”, cuando acabamos de leer que ser amable implica reaccionar con cuidado y protección, eso nos incluye a nosotros, no sólo a los demás. Cuidarse y protegerse es poner límites también.
Hace unos días, fui a ver la obra “Malditos 16”, en esta narran la historia de uno grupo de adolescentes que trataron de quitarse la vida, son sobrevivientes. Mientras cuentan sus historias, pensaba, “si alguien hubiese tenido la amabilidad, de escuchar para cuidar y actuar para proteger, la historia habría sido diferente”.
Te pongo ejemplos de situaciones en las que ser amable puede hacer una gran diferencia.
?Acercarte al compañero del colegio o Universidad, que le cuesta socializar para
ayudarlo a integrarse, que tenga alguien con quien conectarse, claro respetando sus límites.
?Apoyar a ese compañero de trabajo nuevo, que está aprendiendo cómo se manejan los protocolos dentro de la compañía.
?Ese amigo que te preocupa, tomate el tiempo de escucharlo sin juicios y recuérdale que estás ahí, que no tiene que cargar todo solo, juntos pueden buscar ayuda.
?A las mamás con niños, que ves están pasando un poco de trabajo, pregúntale si
necesita ayuda con sus bolsas o cargando algo, para que pueda hacerse cargo de
consolar al niño.
?Si has tenido un día pesado y quieres estallar, usa tus palabras, camina, dibuja, los demás no tienen que convertirse en el punching bag de tus emociones. Claro que
hay formas de sacar tus emociones sin herir a los demás.
?Poniendo límites de forma asertiva, te cuidas a ti. Porque claro, ser amable no es
solo hacia los demás, sino también contigo.

Al niño que está aprendiendo a socializar, en lugar de regañarlo, enseñale como actuar la siguiente vez, modela con ejemplos claros, para que pueda replicar. ¿Cómo saber lo que hay en la mente de una persona?¿Cómo saber cuáles son sus batallas internas? Realmente, no tenemos idea. Lo que podemos hacer al respecto, es tratar con empatía y respeto a las personas, podemos ser amables. Nadie nace sabiendo ser amable, es una habilidad que se cultiva con autoconocimiento y práctica.

¿Te parece si la practicamos juntos? Anímate a dejar más ideas para inspirar a los demás a ser amables.