Sobre todo el concepto aluminosis ha llenado muchas páginas e informativos, en estas líneas voy a comentar algunas características positivas que tiene el cemento aluminoso que tan demonizado está.
La aluminosis es el resultado de un proceso químico interno del cemento aluminoso. Para no entrar en muchos tecnicismos diré que lo que sucede es que hay una re-estructuración interna de sus partículas. Pasan de estar colocadas en forma de hexagonal a forma de cubos. Esta disposición hace que se generen partículas más densas (duras) pero a la vez crea huecos entre ellas, que en el cómputo general de la pieza, hace que baje su resistencia más del 50%. Además que a nivel de partículas se reduzca su volumen hace que la pieza fabricada con este cemento se haga más porosa. Al ser más poroso el material es más fácil que penetren en él sustancias que lo atacan químicamente. Si ahora pensamos en hormigón armado, que es con lo que habitualmente construimos, se pierde toda la protección que aporta el cemento alrededor de las armaduras.
Gran parte del problema que ha generado este cemento, es que este cambio químico se ha descubierto después de los años de utilizarse. En el boom de los años 60 y 70 se utilizó mucho pero aun no se tenía constancia clara de este problema. Años más tarde surgió de forma masiva.
Y el motivo de que este cemento en su época fuera tan revolucionario y se usara de forma masiva radica en su velocidad de resistencia. A diferencia de otros cementos, con el aluminoso podemos tenerlo endurecido en una hora, pero su característica estrella es que prácticamente en 24 horas ha conseguido el 100% de su resistencia mecánica. Este hecho lo convirtió en el cemento rey para construir muy rápido.
La aluminosis, el hacerse poroso el cemento, en si no es tan peligroso como parece, puesto que se puede estimar la caída de resistencia que va a tener. El problema es que al hacer piezas estructurales en hormigón armado, esta porosidad, es un potenciador que en presencia de humedad hace que esta llegue hasta las armaduras y las ataque.
Por ello el cemento aluminoso no está nada recomendado para usarlo con fines estructurales, sin embargo por sus características especiales si que puede ser muy útil en otro tipo de usos. Por ejemplo como material refractario, es capaz de soportar sin problemas temperaturas de unos 1600º. También es posible su utilización para “obras urgentes y temporales” ya que como he comentado en 24 horas está completamente operativo para entrar en carga al 100% de su capacidad.
Seguramente habrá gente leyendo la primera parte de esta entrada, habrá pensado, pues entonces lo que hay que hacer es conseguir que el cemento endurezca con las partículas colocadas en forma de cubo que es lo estable. Pues esa idea no es nada descabellada, de hecho en 1981 se hizo un estudió (tesis) en la cual se demostraba que calentando la mezcla y carbonatándola en caliente, se hacía estable el cemento incluso llegaba a mejorar su resistencia respecto a las probetas de control.
Al que le interese en este link puede ver el enlace a una parte de dicha tesis.
http://digital.csic.es/bitstream/10261/31772/1/Tesis_Informes%20de%20la%20Construcci%C3%B3n.pdf
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